Músicos para Dios

Si vamos al servicio desde el antiguo testamento podemos ver como Dios

escogía a sus servidores y como pedía que fueran purificados, entre ellos los
músicos.

La Tribu de Leví, cuyos integrantes son los llamados levitas, es una de las
Doce Tribus de Israel. Se trata de los descendientes de Leví, el tercer hijo de
Jacob, a quien Dios le cambió el nombre a Israel.

Los levitas fueron consagrados por Dios, por medio de Moisés, para el
servicio del Tabernáculo y luego del Templo de Jerusalén. Eran los únicos
designados para el servicio del Tabérnaculo donde ejercían ministerios.

Fueron tomados para el servicio de Dios en lugar de los primogénitos, y

fueron dados a los sacerdotes para ayuda.

"He aquí, yo he tomado a los levitas de entre los hijos de Israel en lugar de
todos los primogénitos, los primeros nacidos entre los hijos de Israel; serán,
pues, míos los levitas." (Números 3:12).

"Porque enteramente me son dedicados a mí los levitas de entre los hijos de

Israel, en lugar de todo primer nacido, los he tomado para mí en lugar de los
primogénitos de todos los hijos de Israel." (Números 8:16).

1 Crónicas, 15

2. Entonces dijo David: «Solamente los levitas llevarán el Arca, pues a ellos
los escogió Yavé para llevarla y servirle a él para siempre.»

En el libro de Números en el capítulo 8 se puede leer como Dios pedía que

fueran purificados y luego de ser purificados era que servían a Dios entre
ellos los músicos

Números, 8

5. Habló Yahveh a Moisés y le dijo:

6. «Aparta a los levitas del resto de los israelitas y purifícalos.

Músicos para Dios

Y luego de ser purificados era que servían a Dios

Números, 8

14. Así separarás a los levitas del resto de los israelitas para que me
pertenezcan.

15. Después comenzarán los levitas a servir en la Tienda del Encuentro.

Entre ellos los músicos…

Números, 8

16. David dijo a los jefes de los levitas que dispusieran a sus hermanos, los
cantores, con instrumentos musicales, salterios y címbalos para que los
hicieran resonar, con voz de júbilo.

Luego en el libro de Crónicas podemos leer que tampoco eran cualquiera

pues aparte de estar purificados deberían tener conocimiento sobre música

1 Crónicas, 15

22. Quenanias, jefe de los levitas músicos, dirigía el canto porque era un
experto

Otro detalle de los músicos bajo el mando del Rey David (Los levitas) era que
se vestían de cierta manera; como nos dice 1ra. de Crónicas 15, 27.

“David iba revestido de una manta de lino fino, lo mismo que todos los
levitas que portaban el Arca, los cantores y Kenonías, el jefe que dirigía el
traslado”.

También lo vemos en 2 de Crónicas 5, 12. (Tiempo del Rey Salomón).

“Mientras que todos los levitas cantores, Asaf, Hernán, Jedutún con sus hijos,
vestidos de lino fino, estaban de pie al oriente del altar tocando címbalos,
salterios cítaras y con ellos ciento veinte sacerdotes que tocaban las
trompetas”.
Músicos para Dios

Esta demás decir que si es importante la presencia exterior cuanto más

importante será la interior para el servicio de la música a Dios.

Y si queremos un ejemplo mayor quien mejor que el músico más conocido de

la Biblia. El rey David es el único hombre que lleva la distinción de haber sido
de quien el Señor dijo que era un hombre “conforme a mi corazón”. Hechos,
13-22

David amaba a Dios y aunque le fallo varias veces siempre se volvió a Dios
con arrepentimiento y sinceridad... "Crea en mi un corazón limpio y renueva
un espíritu recto dentro de mi" Salmo 51,10

Así podemos seguir viendo como la música durante toda la escritura forma
parte importante en la alabanza a Dios y el servicio en el templo y como
quienes la entonaban eran hombres de Dios y la iglesia lo continua, como
esta expresado en el Catecismo de la Iglesia Católica

Numeral 1156

“La tradición musical de la Iglesia universal constituye un tesoro de valor

inestimable que sobresale entre las demás expresiones artísticas,
principalmente porque el canto sagrado, unido a las palabras, constituye una
parte necesaria o integral de la liturgia solemne” (SC 112). La composición y
el canto de salmos inspirados, con frecuencia acompañados de instrumentos
musicales, estaban ya estrechamente ligados a las celebraciones litúrgicas de
la Antigua Alianza. La Iglesia continúa y desarrolla esta tradición: “Recitad
entre vosotros salmos, himnos y cánticos inspirados; cantad y salmodiad en
vuestro corazón al Señor” (Ef 5,19; cf Col 3,16-17). “El que canta ora dos
veces” (San Agustín, Enarratio in Psalmum 72,1).

La iglesia nos dice lo siguiente: La palabra ministerio es la traducción de la

palabra griega DIAKONÍA, que quiere decir servicio así podemos ver que un
ministerio de música (Como es comúnmente llamado en la Renovación
Carismática Católica) no es más que un servicio de música eso también
incluye a coros parroquiales, bandas católicas, grupos de música católica, etc.
Músicos para Dios

En Efe. 6, 12 , dice que nuestra lucha no es con armas carnales sino

espirituales, el arma del músico católico es por su puesto la música a través
de ella se santifica a los fieles como lo expresa el Catecismo de la Iglesia
Católica Numeral 1157

El canto y la música cumplen su función de signos de una manera tanto más

significativa cuanto “más estrechamente estén vinculadas a la acción
litúrgica” (SC 112), según tres criterios principales: la belleza expresiva de la
oración, la participación unánime de la asamblea en los momentos previstos
y el carácter solemne de la celebración. Participan así de la finalidad de las
palabras y de las acciones litúrgicas: la gloria de Dios y la santificación de los
fieles (cf SC 112):

«¡Cuánto lloré al oír vuestros himnos y cánticos, fuertemente conmovido por

las voces de vuestra Iglesia, que suavemente cantaba! Entraban aquellas
voces en mis oídos, y vuestra verdad se derretía en mi corazón, y con esto se
inflamaba el afecto de piedad, y corrían las lágrimas, y me iba bien con ellas
(San Agustín, Confessiones 9, 6, 14).

¿Pero si nosotros no estamos unidos a Dios podremos dar esos frutos en

verdad lo que la gente siente cuando cantamos viene de Dios?

Juan, 15

1. «Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador.

2. Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta, y todo el que da fruto, lo

limpia, para que dé más fruto.

3. Vosotros estáis ya limpios gracias a la Palabra que os he anunciado.

4. Permaneced en mí, como yo en vosotros. Lo mismo que el sarmiento no

puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así tampoco
vosotros si no permanecéis en mí.

5. Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él,

ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada.
Músicos para Dios

6. Si alguno no permanece en mí, es arrojado fuera, como el sarmiento, y se

seca; luego los recogen, los echan al fuego y arden

Como todos sabemos nuestra perfecta unión con Cristo aquí en la tierra se da
de forma absoluta en la eucaristía “y si Dios está con nosotros quien en
contra”. Una persona que sirve a Dios sin frecuentar los sacramentos es más
vulnerable a los ataques del demonio y podría ser instrumento de
perturbación

Eclesiástico 32, 3- 5.-“Habla, anciano, porque te corresponde, pero con

discreción; no estorbes la música.

Mientras tocan, no alargues tus discursos, ni sermonees a destiempo. Como

una piedra preciosa en anillo de oro, así es un concierto de música durante
un banquete”.

Debemos ser esa piedra preciosa en el banquete de señor y dar un buen

testimonio de vida para no escandalizar a aquellos que aun no están maduros
en la fe a los que Jesús llama pequeños…

Lucas, 17

1. Dijo Jesús a sus discípulos: «Es imposible que no haya escándalos y caídas,
pero hay de aquel que los provoca

2. Al que escandaliza a uno de estos pequeños, más le valdría que le ataren al

cuello una piedra de molino y lo arrojasen al mar, tened cuidado