“EL AYUNO”

Cuando sienta que se está resecando espiritualmente, cuando no sienta esa unció n nueva o cuando
necesite un encuentro fresco con Dios, el ayuno es la clave secreta que abre la puerta del cielo y cierra de
un portazo las puertas del infierno.

NO ES PASAR HAMBRE
El ayuno no es simplemente pasarse sin alimentos durante un periodo de tiempo. La prá ctica del
ayuno no está limitada a ministros o a ocasiones especiales. El ayuno bíblico es privarse de alimentos con
un propó sito espiritual.
Cuando uno elimina los alimentos de su dieta durante cierto nú mero de días, su espíritu queda
desbloqueado de las cosas de este mundo y se vuelve increíblemente sensible a las cosas de Dios. David
estaba en ayuno; su hambre y sed de Dios eran má s grandes que su deseo natural de alimento. Como
resultado, llegó a un lugar donde podía clamar desde las profundidades de Dios, aun en medio de su
prueba. Una vez que haya experimentado aunque sea una vislumbre de ese tipo de intimidad con nuestro
Dios y las incontables recompensas y bendiciones que siguen, su perspectiva completa cambiará . Pronto,
comprenderá que el ayuno es una fuente secreta de poder que muchos pasan por alto.
Si Jesú s pudiera haber logrado sin ayunar todo lo que el vino hacer, ¿por qué entonces ayunó ? El Hijo
de Dios ayunaba porque É l sabía que había cosas sobrenaturales que solamente podían ser liberadas de
ese modo. ¿Cuá nto má s debería ser el ayuno una prá ctica comú n en nuestra vida? ¿Desea conocer la
voluntad de Dios para su vida? ¿Con quién debería casarse o qué debería hacer en una situació n crítica?
Usted verá có mo el ayuno le lleva a un lugar en el que es capaz de oír con claridad la voluntad de Dios.
El ayuno también da salud y sanidad a su cuerpo, al igual que prosperidad econó mica y las
bendiciones de Dios. Si es su deseo estar má s cerca de Dios, o tiene una gran necesidad de grandes
victorias en su vida, recuerde que nada será imposible para usted. ¡El ayuno es verdaderamente una
fuente secreta de poder!

SATANÁS ODIA QUE USTED AYUNE

¿Alguna vez se ha preguntado por qué, de entre todas las cosas, Sataná s tentó a Jesú s y lo provocó
para que convirtiera las piedras en pan? Jesú s sabía que algunos de los beneficios del ayuno no pueden
ser liberados de otro modo, ¡y también lo sabía el diablo! Cuando Jesú s regresó de ese ayuno de 40 días,
de inmediato, comenzó a hacer poderosos milagros. Sataná s necesitaba hacer que Jesú s se enfocara en su
propio apetito porque, si no, ¡Jesú s recibiría poder de Dios que cambiaría el mundo! Y así fue ¡ALELUYA!
Recuerde: el plan del enemigo es robar, matar y destruirlo a usted. ¿Cree que el enemigo quiere que
usted crea que nada es imposible para usted? É l sabe que está derrotado, pero no quiere que usted lo
sepa o que camine en esa esfera del poder de Dios. Por eso es tan crucial que él lo distraiga. No permita
que los enemigos que haya en su vida, hagan que usted se enfoque má s en su apetito o circunstancias que
en las promesas de Dios que son liberadas cuando usted emplea la poderosa arma del ayuno.

DESTRONAR AL REY ESTOMAGO

Ayunar significa crucificar aquello a lo cual llamaremos “rey estómago”. Probablemente ya le ha oído
rugir en desacuerdo una o dos veces desde que comenzó ayunar. Una vez que usted toma la decisió n de
ayunar, Dios ve el deseo de su corazó n. É l le dará la gracia de aguantar y ver las victorias que usted
necesita que se produzcan. Sin embargo, tendrá usted que escoger destronar a “ese dictador interior”.
Se ha dicho que el camino hacia el corazó n del hombre es por medio de su estomago. Las mujeres han
llegado a saberlo, ¡pero el diablo también lo sabe! Considere por un momento lo que le ha sucedido a la
raza humana mientras ha estado bajo el gobierno del rey Estó mago.
Podemos comenzar en el principio, el huerto del Edén. Génesis 2:8-9, 16-17. Y con esa sola comida,
Adá n y Eva, de inmediato, pasaron de disfrutar de la presencia de Dios a ocultarse con temor de su
presencia. Ellos literalmente salieron comiendo de la casa. Sus estó magos quedaron temporalmente
satisfechos, pero nosotros aú n sufrimos las consecuencias de sus apetitos.

EL REINADO DEL REY ESTOMAGO

Al hablar de los pecados de Sodoma y Gomorra, la gente normalmente se enfoca en la desenfrenada
homosexualidad que había en aquellas ciudades, pero eso no es todo lo que la Biblia enseñ a. Ezequiel
16:49-50 (Leer).
Es interesante observar que no só lo eran culpables de homosexualidad, sino que también, eran
culpables de glotonería (saciedad de pan). Junto con sus otros pecados, su excesiva lealtad al rey
Estó mago ¡los llevo directamente a la condenación!
Otro ejemplo de quien el rey Estó mago estaba enaltecido es Esaú . Esaú vendió su codiciada
primogenitura debido a su lealtad al rey Estó mago. Dios tenía un plan, un destino, una voluntad para la
vida de Esaú , pero su codicia por la comida y la gratificació n instantá nea eran má s importante. En el libro
de hebreos se utilizan términos fuertes para advertirnos de llegar a ser como Esaú . Hebreos 12:15-17.
Cuando Dios liberó a los israelitas después de 400 añ os de opresiva esclavitud, Dios suplió cada una
de sus necesidades, El maná que venía del cielo proporcionaba una dieta perfectamente equilibrada, no
hubo ninguna persona enferma, ni débil entre ellos por 40 añ os, no había necesidad de médico, medicinas
ni hospitales. Sin embargo (Números 11:4-7) Dios oyó sus murmuraciones/quejas y les envió codornices
en abundancia, comieron y comieron, y mientras la carne estaba aú n en sus bocas, miles de ellos
murieron y fueron enterrados allí (ese lugar fue llamado Kibrot-hataava “los sepulcros de los codiciosos”.
Como memoria de aquellos que comieron y no entraron en la tierra prometida).
Algunos cayeron por no destronar al rey Estomago. Pero la Biblia está llena de testimonios de
aquellos que tuvieron éxito: durante un ayuno de 40 días Moisés recibió los 10 Mandamientos (Éxodo
34:27-28); Ester llamó a todos los judíos a unirse a ella en ayuno de 3 días sin comer nada ni beber agua
(Ester 4-7); Ana afligida por no poder tener un hijo, “lloró y no comió” (1 Samuel 1:7); Judá , Esdras, el
pueblo de Nínive, Nehemías y David está n también entre aquellos cuyos ayunos se destacan en la Palabra.
Los Doctores afirman que: “Si se hace correctamente, el ayuno tiene increíbles beneficios sanadores;
desde resfriados hasta enfermedades cardiacas”. El Dr. Oda, quien supervisó 70.000 ayunos, dijo: “El ayuno
es un camino hacia la sanidad, para la recuperació n y la regeneració n del cuerpo, la mente y el espíritu”
“El ayuno puede sanar y ayudar al reumatismo en articulaciones y músculos, enfermedades del corazón, la
circulación, los vasos sanguíneos, el agotamiento relacionado con el estrés, las enfermedades cutáneas
(incluyendo espinillas y problemas del cutis) los ciclos menstruales irregulares y sofocos, las enfermedades
respiratorias, y otras enfermedades”.
No caminaremos en la perfecta voluntad de Dios hasta que lo busquemos mediante el ayuno.
Cuando usted presenta su cuerpo de esta manera, se abre para oír de Dios. Descubrirá la buena y perfecta
voluntad de É l para su vida. Pablo estaba ayunando cuando Dios le compartió cuá l era la misió n que tenia
para su vida. (Hechos 9:7-9). El ayuno prepara el camino para que Dios le dé una revelació n y visió n
nueva.

CONSEJOS PRÁCTICOS:
1. Siempre que comience un ayuno, recuerde: si no significa nada para usted, no significará nada
para Dios.
2. Sin estar combinado con oració n y la Palabra. El ayuno es poco má s que hacer dieta
3. El ayuno mismo es una oració n continua delante de Dios. Cuando está usted ayunando, no es
momento de sentarse delante del tv.
4. Cuando comience ayunos má s prolongados, no es buena idea atiborrarse de comida los días
anteriores.
5. Si experimenta dolor de cabeza cuando ayuna, es una señ al de que necesitaba usted ayunar. Los
dolores de cabeza son el resultado de las impurezas y los venenos que se han acumulado durante
 un periodo de tiempo y que el cuerpo está quemando para obtener energía. ¡El ayuno es como una
limpieza general para su cuerpo!
6. Algunas personas se sienten lentas, tienen dolores de cabeza y no pueden dormir, y seamos
sinceros, ¡tendrá hambre! Pero puede estar seguro que una vez que pasen esos primeros días, esas
toxinas que envenenan su cuerpo será n eliminadas, y descubrirá como las cosas se aclaran, y usted
encuentra un lugar má s profundo en Dios donde el resto sencillamente no importa.