Estudio Pareja, Familia y Hijos

Licensed to JESSICA GEORGINA BARRIOS PUGA - jessica.barriosp@gmail.
com - HP1550495722
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Estudio sobre parejas,

Familia e Hijos
Muchas parejas cris anas de hoy viven fuera de lo que Dios quiso. Peleas
constantes, falta de respeto mutual y distancia entre as pareja, son vistas
en muchas casas y además da infelicidad qué este produce en sus
corazones, todavía la pregunta del malo un tes monio regalado y da vida
espiritual qué Está dañado.
Este es un asunto que merece nuestra atención, pues el principio de vivir

en la unidad es algo que no sólo producirá una mayor realización
emocional en la relación, como además liberará sobre la pareja a
bendiciones en Dios.
Comprensión de la unidad
Es importante que seamos capaces de visualizar lo que la unidad de la
pareja puede para producir en su vive, y después estaremos desafiado los
preservarlo También comprenderemos por qué el Diablo, el adversario de
nuestras almas, lucha tan duramente contra ¿Está por ahí? Jesús a
nosotros él enseñó qué los unidad y convenio permite Dios Acto en
nuestro vive:
"Todavía tú yo digo la mayoría: si dos en tú a Tierra aceptar sobre en

ningún todo lo que pidan, les será hecho por mi Padre que está en los
cielos. Después donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy
yo en medio sus". (Mateo 18.19.20)
Por otro lado, los falta en unidad previene Dios en Acto. LA palabra en Dios
a nosotros muestra claramente que cuando el esposo “pelea” con su
esposa, alguna cosa Sucede además a dimensión espiritual:
"Igualmente tú, maridos, vivió con ellos con comprensión, donación
honor la mujer, como a vaso más frágil, y como coherederas con vosotros
de la gracia da vida, por qué no ser impedido a tuyas oraciones". (1 pedro
3.7)
A abandonar en honor las mujeres como jarrón la mayoría frágil y
maltratarla (todavía qué sólo verbalmente), el esposo está trayendo un
serio problema a la vida espiritual de la pareja. LA Biblia dice qué a
oraciones estarán prevenido ES lógico qué este además Valle por las
mujeres, a pesar de que quién la mayoría fácilmente tropezón en este ser
tú hombres. O texto bíblico revela qué luego en deshonra las mujeres a
condición de vaso más frágil (con asperezas), el hombre, aunque
Señor, tendrá su oración impedida, después a principio él era violado
Dios no actúa en un ambiente de discordia y desacuerdo. Esto es un hecho.

Cuando intentaron construir la Torre de Babel, las Escrituras dicen que Dios
bajó para ver lo que hacían los hombres. Y Dios mismo, viéndolos trabajar
en armonía y acuerdo de propósito, declaró:
“He aquí, el pueblo es uno, y todos ellos enen un mismo lenguaje; y esto
es lo que empiezan a hacer; ahora no habrá restricción en lo que sea que
pretendan hacer. Venid, bajemos, y confundamos allí su idioma, para que
no en endan el idioma del otro.” (Génesis 11:6,7)
Lo que vemos aquí es que la unidad elimina los límites. Cuando la pareja se
vuelve una y hablan un idioma (sin desacuerdos), ¡eliminan los límites
frente a ellos! Dios puede actuar libremente en tal ambiente, pero si
pierdes la habilidad de hablar el mismo idioma, ¡todo está perdido! En el
reino de Dios, cuando dos se unen, el efecto no es de suma, sino de
mul plicación. Moisés cantó sobre el ejército de Israel: ¡uno de ellos haría
huir a mil de sus enemigos, pero dos de ellos harían huir a diez mil! (Dt
32:30).
La unidad todavía trae consigo otras virtudes. Esto lo podemos ver en una
de las figuras bíblicas del Tabernáculo. El propiciatorio del arca del pacto
representa este principio. El Señor dijo que allí vendría a hablar con Moisés.
El propiciatorio (o cubierta del arca) era el lugar donde se manifestaba la
gloria y la presencia de lo divino. Y en las instrucciones para hacer esta
pieza, vemos el simbolismo de la unidad. Dios dijo que los dos querubines
deberían ser una sola pieza de oro ba do; con esto habló simbólicamente
de la unidad entre sus adoradores (Ex 25, 17-19). Los querubines debían
tener sus alas extendidas uno hacia el otro (Ex 25:20), lo que habla de
cobertura recíproca. La falta de unidad nos lleva a actuar con el espíritu de
Caín que le dijo al Señor:
"¿Soy yo el guardián de mi hermano?" (Gén 4,9).
Pero cuando estamos en unidad con alguien, ¡cubrimos y protegemos a esa
persona! Esta es una virtud que acompaña a la unidad.
La otra es la transparencia. Los querubines deben estar uno frente al otro

(Ex 25:20). Esto habla alegóricamente de poder mirar a otro adorador “ojo
a ojo”. Habla de no tener nada escondido, de no tener asuntos pendientes.
Nadie puede (espontáneamente) mirar a otra persona a los ojos cuando las
cosas no van bien. Cuando Jacob le dice a su familia que las cosas ya no
andaban bien entre él y Labán, su suegro, la expresión que usa es:
“Veo que el semblante de tu padre ya no es el mismo para conmigo” (Gn

31, 5).
Jesús dijo que los ojos son la lámpara del cuerpo. Reflejan lo que hay dentro
de nosotros. Y el impulso es la capacidad de mirarse a los ojos y estar bien.
Personalmente, no puedo estar de acuerdo con las parejas que se ocultan
cosas, ya sea con respecto a su vida pasada (errores y pecados) o presente
(como en asuntos financieros, por ejemplo).
Creo que la verdadera unidad requiere la eliminación o el arreglo de las

"dudas" (Prov. 28:13). A veces fingimos un comportamiento solo para
complacer (o no disgustar) al otro, lo cual se aparta de la enseñanza bíblica.
Este teatro no producirá una verdadera unidad. Tenemos que aprender a
ser francos, como está escrito:
“Mejor es la reprensión abierta que el amor escondido”. (Proverbios 27.5)
Pablo reprendió este po de conducta dudosa cuando escribió a los

Gálatas. Habló de cómo el apóstol Pedro en una ocasión actuó así para ser
“diplomá co” y que esta ac tud logró atraer hasta al mismo Bernabé,
compañero de Pablo, y los reprendió públicamente (Gálatas 2:11-14).
Sin embargo, quiero señalar que ser franco no significa ser grosero, pues la
Biblia nos enseña a decir la verdad en amor.
El principio del despertar

La Biblia también nos enseña que el acuerdo es indispensable en una
relación:
"¿Cómo pueden dos caminar juntos si no están de acuerdo?" (Amós 3.3)
La ausencia de acuerdo es una puerta abierta al diablo. Cuando Pablo

escribió a los Efesios y habló de no dar paso al diablo, lo hizo dentro de un
contexto, que es el de los pecados que suceden en las relaciones:
“Airaos, y no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al

diablo.” (Efesios 4.26,27)
Mencionamos anteriormente que el acuerdo es una puerta abierta para

que Dios actúe (Mt 18:19). Pero cuando llegamos al punto de disiparla de
nuestra relación, estamos comprome endo no solo la calidad de la
sa sfacción en el ámbito emocional, sino también el ámbito espiritual de
nuestro hogar. No es fácil adaptarse sa sfactoriamente a la relación
marital. Las diferencias son muchas; en la formación de cada uno, en la
personalidad, el temperamento, y añádase a eso las diferencias entre el
hombre y la mujer. Sin embargo, cuando aprendemos a tener el carácter y
las enseñanzas de Cristo como denominador común, entonces logramos
ajustarnos al ceder, perdonar, comenzar de nuevo, etc. Incluso una pareja
que parecía perfectamente ajustada durante su período de noviazgo y
compromiso encontrará la necesidad de ajustarse más a medida que
pasan los años de matrimonio. No es una tarea tan fácil, ¡pero no es
imposible! Si no estuviera a nuestro alcance, Dios sería injusto al
exigírnoslo… pero el hecho es que no solo es posible, ¡es también una clave
poderosa en la vida cris ana!
La pareja decidí juntos

Hay un orden de gobierno y autoridad establecido por Dios en el hogar. Al
marido se le llama cabeza (Ef 5,22-24), y entendemos que como tal ene
derecho a la úl ma palabra. Sin embargo, esto no significa que un hombre
siempre tenga la razón o que no deba escuchar a su esposa. Encontramos
en el An guo Testamento una ocasión en que el mismo Señor le dice a
Abraham, su siervo:
“Oye lo que te dice Sara tu mujer” (Gn 21,12).
En el Nuevo Testamento vemos a Poncio Pilato despreciando el consejo de

su mujer y haciéndolo mal (Mt 27,19).
También debemos considerar que ser líder no significa ser autoritario.
Cuando el apóstol Pedro escribió a los ancianos (que forman el gobierno
de la Iglesia Local), dijo en su epístola que no debían ser “príncipes del
pueblo” (1 Pedro 5:3). Esto demuestra que autoridad y autoritarismo son
dos cosas diferentes. ¡Veo a muchos esposos decir que sus esposas DEBEN
obedecerlos! Pero al decir que las esposas deben ser sumisas, Dios no
estaba ins tuyendo el autoritarismo en el hogar. También vale la pena
recordar que Jesús declaró que
“A quien se le ha dado mucho, mucho se le demandará” (Lucas 12:48).
Los hombres deben recordar que en cues ones de responsabilidad en el

hogar, tendrán que responder ante Dios en mayor medida que las
mujeres. Pero no es necesario que el hombre lleve solo el peso de esta
responsabilidad solo.
Es importante que la pareja hable y tome decisiones juntos. Desde que nos
casamos, mi esposa y yo sabemos quién es el cabeza de familia, pero ha
habido muy pocas ocasiones en las que he tomado una decisión por mí
mismo. Siempre hablamos y discu mos sobre nuestras decisiones. A veces
ya estamos de acuerdo al principio de la conversación, y a veces
necesitamos mucha conversación para madurar completamente lo que
estamos discu endo. Pero conocemos la bendición de caminar de acuerdo
y la cul vamos entre nosotros. En endo que si a la mujer se le llama
“ayuda” en la Biblia es porque el hombre necesita su ayuda. Y la ayuda de la
mujer no se limita a las ac vidades domés cas. La Biblia habla de esta
figura, que debe haber una relación de compañerismo. Yo creo que como
ayudante, la mujer debe ayudar a tomar decisiones.
Este es un proceso que requiere ajuste. Al discu r una decisión, o incluso la
forma de ser y comportarse de cada cónyuge, vemos lo di cil que es
escuchar al otro. Pero debemos prestar atención a la enseñanza bíblica
sobre esto:
“La respuesta antes de oír es necedad y vergüenza” (Proverbios 18:13).
San ago nos advierte lo siguiente:
“Ustedes saben estas cosas, mis amados hermanos. Por tanto, todo
hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para enojarse”.
(San ago 1.19)
La verdad es que solemos ser rápidos para hablar y enojarnos unos con
otros, pero lentos para escuchar lo que el otro ene que decir. ¡Y esto
necesita ser cambiado en nosotros! Para que haya acuerdo, debemos
aprender a escuchar.
Tratando tú desacuerdos
Los desacuerdos ocurren, incluso entre los creyentes más dedicados, pero
deben resolverse pronto. Leemos que uno puede estar enojado y no pecar,
ya que es una reacción emocional espontánea. Pero lo que cada uno hace
con el sen miento que tenía puede conver rse en pecado. Pablo aconsejó
a los hermanos de Éfeso que no se pusiera el sol sobre su ira (Efesios 4:26,
27).
Es decir, que haya arreglo, perdón, y que no queden asuntos pendientes.

Necesitamos aprender a lidiar con los desacuerdos en el hogar.
Preservar la unidad no significa nunca tener un desacuerdo, sino saber

mantener adecuadamente la relación cuando esto ocurre.
El empo no borra las ofensas. Debe haber reconciliación. Jesús enseñó

esto:
“Por tanto, si cuando traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu

hermano ene algo contra , deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda,
reconcíliate primero con tu hermano; y luego, volviendo, haz tu ofrenda.”
(Mateo 5.23,24)
Algunas personas piensan que después de un desacuerdo, solo es cues ón

de dejarlo ir. Pero la Biblia nos enseña el principio de la reconciliación de
una manera muy formal. Debe haber disculpa, perdón. Deben hablar
sobre lo que pasó (lo que les dolió a cada uno y por qué les dolió). Y no
podemos perder de vista que debemos esforzarnos por vivir sin rencillas, y
no sólo reconciliarnos cuando se produzcan (Ef 4,31).
Los esposos deben tener mucho cuidado, ya que por naturaleza son más
racionales que emocionales y sus palabras enden a ser cada vez más
duras. Por eso la Biblia nos advierte:
"Maridos, amad a vuestras mujeres y no las tratéis con dureza".

(Colosenses 3.19)
“Los maridos, igualmente, vivid con ellos con inteligencia, dando honor a
la mujer, como a vaso más frágil, y como a coherederas con vosotros de la
gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo”. (1 Pedro
3:7)
Si bien el dicho "más vale prevenir que curar" es cierto y aplicable aquí,
debemos reconocer que a menudo no permi mos los desacuerdos que
podrían evitarse fácilmente. En este caso, debemos aprender a arreglar y
hacer frente a estas situaciones. Pero no podemos olvidar que aunque
haya perdón y reconciliación después del error, cuando se repite mucho
genera desgaste y descrédito, y esto requiere una mayor dimensión de
restauración más adelante.
Hay parejas que han logrado todo lo que querían económicamente pero
no pueden vivir bien juntos. Ellos, mejor que nadie, pueden decir cuán
verdaderas son estas declaraciones bíblicas. De nada sirve tener otros
logros y dejar que la relación marital se pierda. Necesitamos aprender a
cul var la unidad en nuestra relación. Y esto ocurre cuando aprendemos a
afrontar de forma sencilla y prác ca los asuntos del día a día.
La familia es esencial
“Ningún éxito en la vida puede compensar el fracaso en el hogar”. – David
O. McKay
No es exagerado decir que una persona tendrá más ventajas en la vida si

proviene de un hogar amoroso y solidario. Muchas personas enen éxito a
pesar de provenir de situaciones familiares menos que ideales, pero tener
sa sfechas nuestras necesidades básicas, saber que nuestros padres nos
aman y aprender las lecciones de la vida en el hogar hacen que los desa os
de la vida diaria sean mucho más fáciles de enfrentar. Como adulto,
probablemente desee un hogar feliz para su familia.
Esto no es una coincidencia. Dios nos organizó en familias para que

pudiéramos crecer en gozo y seguridad y para que pudiéramos aprender a
amar a los demás desinteresadamente, la clave del verdadero gozo. La
familia es el mejor lugar para que aprendamos a amarnos unos a otros de la
manera en que el Padre Celes al nos ama a cada uno de nosotros.
Es probable que la felicidad en nuestra familia se logre mejor si se basa en

las enseñanzas de Jesús. Esto significa ser desinteresado, honesto, leal,
amable y tener muchas otras virtudes, sin mencionar el esfuerzo constante.
Una familia amorosa y feliz no sucede por accidente.
Una familia bendecida

• Para que una familia sea bendecida, es indispensable que Dios esté
presente, y para que eso suceda, es necesario invitarlo a ser parte de la
familia. Palabras de Josué: Pero yo y mi casa serviremos al Señor” (Josué
24:15).
• La oración es importante porque alimenta la fe y la esperanza en Dios;

por eso los padres deben enseñar a sus hijos a orar y dar gracias por las
bendiciones recibidas. Alfred Lord Tennyson dijo que “la familia que ora
unida, permanece unida”.
• Tanto el padre como la madre deben mantener un diálogo armónico y

responsable con sus hijos, dando ejemplos de buenas ac tudes,
educación y ánimo.
• Este es mi mandamiento: amaos los unos a los otros, como yo os he

amado (Juan 15:12). Debemos mostrar calidez y aprecio a cada
miembro de nuestra familia.
• Todos los miembros de la familia deben respetar la autoridad de Dios

sobre ellos, los padres sobre sus hijos, y los hijos deben respetar la
autoridad de sus padres.
• Es importante que haya educación y disciplina en el hogar. Los padres

enen la tarea indispensable de educar a sus hijos y, sobre todo, vigilar
las amistades y el acceso a las redes sociales. La Biblia dice: “Instruye al
niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él”
(Proverbios 22:6).
• Reserve empo para que la familia tenga momentos de ocio y diversión,

donde todos puedan socializar y disfrutar de la presencia de los demás.
Estos momentos son muy importantes, especialmente para quienes
enen niños pequeños y adolescentes.
• No cometas adulterio. El adulterio es responsable de la destrucción de

muchos matrimonios y de la disolución de muchas familias, siendo un
pecado contra Dios y contra el cónyuge.
• Cada miembro de la familia trabajará para el beneficio mutuo de la

familia en su conjunto. Los niños deben tener tareas que cumplir y se les
debe decir que el trabajo ennoblece y brinda realización personal y
profesional.
• Una familia que reza junta, se queda junta. Cree una ru na en la que
todos puedan orar y leer la Biblia juntos. Nada puede unir más a tu
familia que este hábito, además de ser la mejor defensa disponible
contra los embates del mal.
• Es importante mencionar que siempre que haya diferencias, lo cual es

normal en las relaciones humanas, debemos tratar de resolverlas a
través del diálogo y la comprensión.
Hijos, bendiciones de Dios

“Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de
él”. Proverbios 22:6
La familia juega un papel fundamental en el desarrollo personal, social,

sico, afec vo, intelectual y espiritual, así como en el despertar de la
vocación de los niños que necesitan ser guiados para integrar la verdad en
el tejido de nuestra vida co diana.
Los niños, en su erna edad, se encuentran en la fase de la imitación, de

los porqués, de ampliar los descubrimientos y de establecer valores y
límites importantes, teniendo grandes es mulos para el desarrollo de sus
habilidades.
La educación religiosa aporta valores y principios que se reflejan a lo largo

de la vida del individuo, a par r de su relación con el mundo. Al ser
guiados, los niños llegan a comprender que hay un plan mayor en la Tierra
y a conectarse de manera diferente con todas las formas de vida.
Mira algunos consejos para que puedas enseñar las buenas maneras a los
más pequeños
1- Educación por el amor, enseñando a amar a Dios y al prójimo
Como mentores, los padres deben ser una muestra de guía y dirección,
nunca de temor o cas go.
Enseñar a amar a Dios, escuchar y comprender su Palabra es la mayor

enseñanza que puedes dejar a tus hijos. El amor es el mejor camino a la
educación.
2- Enseñar con el ejemplo
Cada momento es una oportunidad para transmi r valores posi vos, el

ejemplo, en esta fase inicial, servirá como un espejo para el desarrollo del
niño - desde pequeños, observan y se reproducen - este espejo es
fundamental para que puedan tener referentes importantes en sus vidas.
Inspirar al niño a desarrollar mecanismos para acercarse, orar y hablar con
Dios. Sé modelo de convivencia con Dios y con los demás, pregúntate si tu
espejo refleja:
¿Eres de apoyo?
¿Cómo actúas con respecto al perdón?
¿Cómo hablas con Dios?
¿Enseñas a tu hijo a orar?
¿Le enseñas a tu hijo a ir a la iglesia?
¿Le enseñas a tu hijo a amar a los demás?
Nuestra reflexión revela nuestras ac tudes hacia lo que hablamos de

manera constante y clara.
3- Instruir lecciones de bondad
Enseñar respeto y humildad hacia todas las personas, a obedecer las leyes
de Dios, a amar y respetar a los padres. Los impactos futuros sobre ellos
mismos y sobre los demás son un reflejo de las elecciones que han hecho.
Enseñé lecciones de bondad, corrección y límites.
4- Valores Cris anos
Enseña a tus hijos los valores de Dios -que Jesús nos dejó y podemos
encontrar a lo largo de la Biblia- tales como: Fe, Amor, Respeto, Gra tud,
Humildad, Compasión, Hones dad, Lealtad y Paciencia, para que sus
buenos frutos beneficien la vida. en la sociedad
La educación de los niños está guiada por la presencia de los padres,

caminar juntos.
5- “No” es crecimiento
Enseñar que el no es parte del aprendizaje como seres humanos, siervos

de Dios
“No” es siempre una posibilidad.
6- Actúa con equilibrio
Los niños necesitan ser amados, enseñados y corregidos. Establecer una

lista de tareas a realizar, enseñándoles a respetar las reglas establecidas y
mostrando la realidad de las elecciones y sus consecuencias.
Corregir y tratar con amor.
7- Cumple tus promesas
No hagas promesas que no puedas cumplir. Muéstrele a su hijo que usted

es una persona confiable.
9- Enseñar celo, amabilidad, actuar con cortesía y respeto
Comprometerse con sus ac vidades diarias estableciendo una sana ru na

de tareas donde sea posible descubrir las áreas en las que el niño mejor
desarrolla sus dones y talentos naturales con dedicación y buena
voluntad. Enséñele a su hijo a pensar en el bienestar de los demás y a
actuar con amabilidad siempre que sea posible.
10- Enseñar al niño a conocer a Dios
Presente al niño al verdadero Jesús y lo que Él ha hecho por nosotros a

través de la Biblia. Enséñales a orar y leer la Biblia diariamente.
Sea el espejo que su hijo debe reflejar. Si desea que su hijo sea un hijo de
Dios y camine por los caminos del Señor, primero establezca las ac tudes
que espera que él también tenga. Así el niño podrá caminar con sabiduría
siguiendo los mismos pasos.
Amar es ponerse en el lugar del otro, es actuar en nombre del otro.
¡Muestra amor!
Desarrollar ac vidades recrea vas que promuevan los valores cris anos
de manera prác ca desde edades tempranas. Explora todas las técnicas
que combinan la religión con el juego, las artes y la cultura.
Echa un vistazo a algunas de estas técnicas, ¿de acuerdo?

Oración
Como enseñar
Crea una ru na de oración diaria. Puede ser antes de las comidas, por la
mañana o antes de acostarse, elige el mejor momento para y tu hijo.
Lecturas de la biblia
Realizar lecturas, desde temprana edad, para el desarrollo del hábito y

gusto por la palabra de Dios.
Diseños
Ilustre o cuente una historia que represente un concepto para el niño, por
ejemplo: pídale que dibuje algo que represente - Fe.
Cuentos
Esta es una de las formas más eficientes de llamar la atención y permi r

que el niño reflexione. ¡Cuenta historias!
Teatro
Separa un pasaje bíblico, crea un escenario y deja fluir la crea vidad. A los
niños les encanta ser parte del proceso de aprendizaje crea vo y prác co.
Par cipación social
Anímelos a contribuir con acciones en la comunidad, ya sea en la Iglesia,

en la escuela, en el ámbito familiar… Las acciones solidarias ayudan a
desarrollar valores como – Amor, Respeto, Humildad, Compasión –
plantar una flor, un árbol , escribir cartas, ayudar a familias necesitadas –
vivir en comunidad.
Generalmente, aprender los valores de la vida es visto por los niños como
aburrido y agotador. Por eso es tan importante que encuentre formas de
hacer que este aprendizaje sea agradable. Consulta cuáles son tus regalos
y facilidades.
Los niños son como una planta, que tenemos que regar y cuidar a diario,
para que crezca sana.
Antes de enseñar los caminos de Dios, debemos andar en los caminos de

Dios. Para que los niños crezcan en la dirección correcta.

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Este es un asunto que merece nuestra atención, pues el principio de vivir

"Todavía tú yo digo la mayoría: si dos en tú a Tierra aceptar sobre en

Dios no actúa en un ambiente de discordia y desacuerdo. Esto es un hecho.

La otra es la transparencia. Los querubines deben estar uno frente al otro

“Veo que el semblante de tu padre ya no es el mismo para conmigo” (Gn

Creo que la verdadera unidad requiere la eliminación o el arreglo de las

“Mejor es la reprensión abierta que el amor escondido”. (Proverbios 27.5)

Pablo reprendió este po de conducta dudosa cuando escribió a los

El principio del despertar

"¿Cómo pueden dos caminar juntos si no están de acuerdo?" (Amós 3.3)

La ausencia de acuerdo es una puerta abierta al diablo. Cuando Pablo

“Airaos, y no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al

Mencionamos anteriormente que el acuerdo es una puerta abierta para

La pareja decidí juntos

“Oye lo que te dice Sara tu mujer” (Gn 21,12).

En el Nuevo Testamento vemos a Poncio Pilato despreciando el consejo de

“A quien se le ha dado mucho, mucho se le demandará” (Lucas 12:48).

Los hombres deben recordar que en cues ones de responsabilidad en el

“La respuesta antes de oír es necedad y vergüenza” (Proverbios 18:13).

San ago nos advierte lo siguiente:

Es decir, que haya arreglo, perdón, y que no queden asuntos pendientes.

Preservar la unidad no signiﬁca nunca tener un desacuerdo, sino saber

El empo no borra las ofensas. Debe haber reconciliación. Jesús enseñó

“Por tanto, si cuando traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu

Algunas personas piensan que después de un desacuerdo, solo es cues ón

"Maridos, amad a vuestras mujeres y no las tratéis con dureza".

No es exagerado decir que una persona tendrá más ventajas en la vida si

Esto no es una coincidencia. Dios nos organizó en familias para que

Es probable que la felicidad en nuestra familia se logre mejor si se basa en

Una familia bendecida

• La oración es importante porque alimenta la fe y la esperanza en Dios;

• Tanto el padre como la madre deben mantener un diálogo armónico y

• Este es mi mandamiento: amaos los unos a los otros, como yo os he

• Todos los miembros de la familia deben respetar la autoridad de Dios

• Es importante que haya educación y disciplina en el hogar. Los padres

• Reserve empo para que la familia tenga momentos de ocio y diversión,

• No cometas adulterio. El adulterio es responsable de la destrucción de

• Cada miembro de la familia trabajará para el beneﬁcio mutuo de la

• Es importante mencionar que siempre que haya diferencias, lo cual es

Hijos, bendiciones de Dios

La familia juega un papel fundamental en el desarrollo personal, social,

Los niños, en su erna edad, se encuentran en la fase de la imitación, de

La educación religiosa aporta valores y principios que se reﬂejan a lo largo

1- Educación por el amor, enseñando a amar a Dios y al prójimo

Enseñar a amar a Dios, escuchar y comprender su Palabra es la mayor

2- Enseñar con el ejemplo

Cada momento es una oportunidad para transmi r valores posi vos, el

¿Cómo actúas con respecto al perdón?

¿Cómo hablas con Dios?

¿Enseñas a tu hijo a orar?

¿Le enseñas a tu hijo a ir a la iglesia?

¿Le enseñas a tu hijo a amar a los demás?

Nuestra reﬂexión revela nuestras ac tudes hacia lo que hablamos de

3- Instruir lecciones de bondad

4- Valores Cris anos

La educación de los niños está guiada por la presencia de los padres,

Enseñar que el no es parte del aprendizaje como seres humanos, siervos

“No” es siempre una posibilidad.

6- Actúa con equilibrio

Los niños necesitan ser amados, enseñados y corregidos. Establecer una

Corregir y tratar con amor.