Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Por ende, el objeto del acto jurídico, corresponde al fin que persiguen el autor o las
partes que otorgan o celebran un acto o contrato. Se trata de los derechos y
obligaciones por él creados.[2]
En la doctrina existen tres concepciones típicas sobre la noción del "objeto del
derecho".
1.- La primera considera que es el objeto todo lo que se representa como estando
fuera del sujeto, sean cosas materiales, acciones humanas o fenómenos
inmateriales.
Para que una cosa sea jurídicamente susceptible requiere tres condiciones:
Que sea útil, es decir, que pueda servir al sujeto de derecho como medio para
satisfacer sus necesidades, enriquecer su personalidad humana y cumplir sus
fines.
Que tenga una existencia separada y autónoma, es decir, que no sea una parte
constitutiva de un todo de manera que resulte absorbida como un elemento más
de su composición.
Que ser rea y jurídicamente apropiable, porque si una cosa no es capaz de ser
apropiada por el sujeto de derecho, no podría éste obtener la utilidad que la cosa
encierra y que él necesita.
Por lo tanto, es preciso distinguir cosa natural y cosa jurídica. Ambos conceptos se
hallan en una
relación semejante a la expuesta anteriormente entre "relaciones de vida o
sociales" y "relaciones
jurídicas". Hay cosas naturales que no son jurídicas, Ej. Una constelación cósmica;
y cosas jurídicas que no son naturales, Ej. El honor, la fama, etc.; finalmente hay
cosas naturales que son
también jurídicas porque están reconocidas y protegidas o reguladas por el
Derecho. Sin embargo, no debemos olvidar que a Derecho, como forma
reguladora de la vida social en orden al bien común, no le interesan sino aquellos
aspectos de la misma que no tienen relevancia jurídica y deja sin regular otros
aspectos de la misma que no tienen importancia para la comunidad; por
eso, es cierta la expresión que dice: "Las cosas naturales-jurídicas, no son
jurídicas en su
totalidad, sino solamente en aquellos aspectos accesibles a la dominación del
hombre e importantes en la vida social".
COSAS Y BIENES
Cosa
Las cosas pueden ser corporales (se perciben por los sentidos y tienen existencia
en la naturaleza) o incorporales (se perciben con el entendimiento y no se pueden
tocar).
Según su utilidad:
Pueden ser consumibles (se extinguen con su primer uso) o no consumibles (no
se extinguen con su primer uso).
Según su divisibilidad:
Pueden ser cosas divisibles (aun separándose en partes no pierda valor) o cosas
indivisibles (cosa que pierde valor al ser dividida en partes).
Según su existencia:
Pueden ser cosas futuras (cosas que no existen en el momento, pero según un
proceso normal se pueden obtener a futuro, como por ejemplo, una cosecha) y
cosas presentes (las que existen en el momento de ser declaradas).
En síntesis, se puede ser que, en su sentido más general todo lo que existe en la
naturaleza es cosa a excepción del ser humano.
Bien
Los bienes se pueden definir como todos los componentes del patrimonio de una
persona, es decir, sus posesiones. Es por ello que, se distinguen dos clases de
bienes: los bienes muebles y los bienes inmuebles. Los bienes muebles son
aquellos que posee la persona y le sirven para la satisfacción de sus necesidades,
los bienes muebles se pueden mover y no están excluidas del comercio. Por otro
lado, los bienes inmuebles se refieren a las posesiones patrimoniales que están
fijas en el suelo y no se pueden mover como las construcciones, edificios,
viviendas, entre otros.
Asimismo, según su naturaleza, los bienes pueden ser bienes libres que son los
que existen porque sí y son de uso común como el aire que respiramos, los bienes
de capital que se utilizan para la producción de otros bienes, los bienes de
consumo que son los productos de consumo humano y los bienes económicos
que se obtienen producto del trabajo.
Según su movilidad
Corporales: las que pueden percibirse por los sentidos y tienen una existencia
concreta en la naturaleza, como una casa o un libro.
Según su independencia
Principales: que existen y subsisten por sí mismas, por ejemplo una hacienda.
Accesorias: que solo cobran sentido acompañadas de una cosa principal,
como el control remoto de un televisor, las cuerdas de una guitarra o un tractor
en la hacienda antes citada.
Según su utilización
Según su divisibilidad
Fungibles: son aquellas cosas que pueden ser sustituidas entre sí, pues están
definidas solo en función del género al cual pertenecen. Para los romanos las
cosas fungibles eran determinadas por su peso, número, o medida, y de allí
proviene su denominación in genere, como por ejemplo el trigo, el vino o el
dinero.
No fungibles: se caracterizan por la imposibilidad de ser sustituidas, ya que se
determinan por sus cualidades intrínsecas a su esencia misma que los hacen
únicos. Por ejemplo, el caballo Filibustero de Juan Pérez, no puede ser
sustituido por otro similar, o el cuadro La Gioconda de da Vinci, que es único,
por lo que tampoco puede ser sustituido por otro.
Según su apropiabilidad
Según su existencia