1.

Poner fin a la pobreza en todas sus formas en el mundo:

Si una persona recibe menos de 1,25 USD al día, se considera en pobreza extrema.
Para el 2015 el porcentaje era del 10%, más de 700 millones de personas.
2. Poner fin al hambre:
El hambre se mide por la prevalencia de nutrición. Según los cálculos, el 8.9% por
ciento de la población sufre hambre; pero las estadísticas no son esperanzadoras.

3. Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades:
Se espera que, a través del financiamiento eficiente de los sistemas sanitarios, se
logre una universalidad en el tratamiento de enfermedades.

4. Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover

oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos:
Casi la quinta parte de los niños y niñas del mundo no tienen acceso a una educación
básica: aproximadamente 260 millones, para el 2018.

5. Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas:
La igualdad es un derecho fundamental y es la base para construir un mundo
pacífico, próspero y sostenible.

6. Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para

todos:
Ahora, con la pandemia de COVID-19, en donde la principal recomendación es
“lavarse las manos”, resulta grave encontrarse con esta realidad.

7. Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna:

Uno de los objetivos más esperanzadores es este, debido a que el acceso a energías
limpias y la electricidad ha aumentado satisfactoriamente. Ahora los retos están
destinados a cambiar los combustibles en las cocinas, que es donde más
vulnerabilidad existe en este momento.
8. Promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible, el empleo y el trabajo
decente para todos:
Lastimosamente la pandemia de COVID-19 ha obstaculizado este propósito,
resultando, en la mayoría de los casos, en una tasa de desempleo alta, estimándose
que, por lo menos, cerca de la mitad de todos los trabajadores del mundo, están en
riesgo de perder sus medios de subsistencia.

9. Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y

fomentar la innovación:
La industrialización inclusiva y sostenible, junto con innovación e infraestructura, es
uno de los canales de progreso que más oportunidades brinda para las regiones,
debido a que aumenta la confianza, el bienestar humano y garantiza un acceso
asequible y equitativo.

10. Reducir la desigualdad en y entre los países:

La sostenibilidad sólo se puede garantizar, si los países tienen las mismas
oportunidades económicas y comerciales en el globo. Es por esto que reducir la
desigualdad en y entre los países, resulta indispensable, si se quiere hablar
de sostenibilidad.

11. Lograr que las ciudades sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles:
Aunque las ciudades están creciendo y esto supone un aumento en la proyección
económica de las regiones, el crecimiento de los centros urbanos también supone
una tasa alta de contaminación, como también el crecimiento desproporcionado y sin
control en las clases más bajas.

12. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles:

Con el estilo de vida de consumo actual, en el 2050 se necesitarán tres planetas para
poder proporcionar los recursos naturales necesarios. El progreso económico
y social está suponiendo una degradación medioambiental que debe detenerse,
cambiando patrones de consumo y producción.

13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos:
La década del 2010 al 2019 fue la más calurosa de la que se tenga registro. Los
niveles de CO2 y los gases de efecto invernadero alcanzaron niveles récord en el
2019.

14. Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos
marinos:
El océano impulsa los sistemas mundiales que permiten que la Tierra sea habitable.
Cuidarlo no es una recomendación, sino una necesidad.

15. Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e

invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad:
En el 2016, la ONU alertó que degradar la salud de los ecosistemas, estaba
exponiendo al hombre a epidemias zoonóticas cada vez más peligrosas. En concreto,
se estima que el 75% de las enfermedades nuevas infecciosas, tienen este origen.

16. Promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas:

Los conflictos, la inseguridad y la falta de instituciones eficientes que promuevan la
justicia social, es un tema preocupante. Los refugiados de guerra han aumentado a
una cifra de 70 millones, para el 2018: la más alta registrada en 70 años.

17. Revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible:

Los ODS son un compromiso de todos. Sólo se puede esperar un desarrollo
sostenible, si cada una de las naciones se compromete a alcanzar las metas.