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LA HABILIDAD COMPRENDER
Y LAS TIPOLOGÍAS TEXTUALES EN LA EDUCACIÓN BÁSICA PRIMA-
RIA, TERCER GRADO
THE ABILITY TO UNDERSTAND AND THE TEXTUAL TYPOLOGIES IN THE
PRIMARY BASIC EDUCATION, THIRD GRADE
María Shirley Amú Casarán1
E-mail: mashirly2008@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0001-6065-4370
María Caridad Pérez Padrón2
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-0938-0578
E-mail: mcperez@ucf.edu.cu
1
Institución Educativa Simón Bolívar. Jamundí. Colombia.
2
Universidad de Cienfuegos “Carlos Rafael Rodríguez”. Cuba.
Cita sugerida (APA, sexta edición)
Amú Casarán, M. S., & Pérez Padrón, M. C. (2019). La habilidad comprender y las tipologías textuales en la Educación
Básica Primaria, tercer grado. Universidad y Sociedad, 11(4), 7-12. Recuperado de http://rus.ucf.edu.cu/index.php/
rus
RESUMEN
El presente artículo trata los elementos esenciales que intervienen en la habilidad de comprender y las tipologías textuales
en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la Lengua castellana, fundamentados desde la teoría, así como desde los do-
cumentos normativos colombianos. Los cuales en conjunto y teniendo como base la Constitución Política de 1991, deben
garantizar una educación incluyente, donde se debe tener en cuenta el entorno social y cultural de los individuos para poder
desarrollar una práctica pedagógica significativa y contextualizada. A lo largo del escrito se relaciona el proceso de ense-
ñanza-aprendizaje, con la formación de la habilidad comprender, desde las diversas tipologías textuales, como elemento
dinamizador de dicho proceso en los estudiantes de tercer grado de la Educación Básica Primaria.
Palabras clave: Proceso de enseñanza-aprendizaje, Lengua castellana, habilidad comprender, tipologías textuales.
ABSTRACT
This article deals with the essential elements that intervene with the ability to understand, from the different text typologies in
the teaching-learning process of the Castilian language, based on theory, as well as Colombian normative documents, which
as a whole and based on the Political Constitution of 1991, must guarantee an inclusive education, where the social and cul-
tural environment of the individuals must be taken into account in order to develop a meaningful and contextualized pedago-
gical practice. Throughout the writing, the teaching-learning process is related with the formation of the ability to understand,
from different text typologies, as a dynamic element of this process in the third grade students of Basic Primary Education.
UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD | Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos | ISSN: 2218-3620 Volumen 11| Número 4 | Julio - Septiembre, 2019
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que al desarrollarlas se logra el conocimiento, los valores particulares del estudiante y del proceso de enseñanza-
que expresan la significación que el hombre le asigna a aprendizaje de la Lengua castellana.
dichos objetos y halla en la contradicción entre lo objetivo
Se propone que los contenidos se estructuren sobre la
y lo subjetivo su propio aprendizaje.
base del enfoque sistémico, para posibilitar la integración
Asimismo, por otra parte argumenta que el objetivo es de los componentes del proceso de enseñanza-apren-
rector, porque expresa el modelo pedagógico del encar- dizaje: objetivo, contenido, método, medios, formas y
go social, y contiene las aspiraciones, los propósitos que evaluación.
la sociedad pretende formar en las nuevas generaciones,
En un análisis reciente, Álvarez de Zayas (1998), citado
tanto los que se vinculan directamente con el contenido
por Sánchez (2017), precisa que “los contenidos tienen
y con aquellos aspectos más esenciales en la formación
que ser asimilados de un modo sistémico por los estu-
del estudiante. Son los objetivos los que definen explíci-
diantes y que a su vez desempeñen un papel integrador
tamente los conceptos más generales que constituyen la
en el currículo… pues en su aplicación práctica, deben
esencia de todos los conocimientos, así como las habili-
crear las condiciones necesarias para la formación de
dades más importantes y a partir de él se determina la or-
convicciones en el estudiante”. (p.14)
ganización de los demás componentes. En un plano más
generalizado incluye la médula del contenido y de sus Las autoras del artículo afirman que las anteriores con-
métodos. Con estos criterios coinciden Silvestre (2002); cepciones son pertinentes, por cuanto valoran e integran
Addine (2004); y Ginoris, Addine & Turcaz (2006). rasgos necesarios y suficientes para la comprensión del
proceso de enseñanza-aprendizaje, más aún cuando re-
Asimismo, en torno a las potencialidades axiológicas
conocen su carácter dialéctico, dinámico y adaptativo a
del proceso de enseñanza-aprendizaje, Silvestre (2002),
las condiciones socio históricas. El estudiante participa
plantea que “la formación de acciones valorativas es una
en su aprendizaje de una manera activa, como protago-
exigencia básica, es un momento muy importante, en la
nista de este.
formación del pensamiento crítico en el hombre, que se
empieza a formar desde muy temprano en el niño. Esta El método de enseñanza-aprendizaje se lleva a la prácti-
necesidad de enjuiciamiento ha de ser tenida en cuenta ca a través de procedimientos o acciones didácticas ex-
respecto a todo lo que aprende”. (p.146) ternas del maestro que activan la atención del estudiante
y en particular la clase de Lengua castellana.
Lo anterior significa que el proceso de enseñanza-apren-
dizaje constituye un espacio para la adquisición de cono- Según Ginoris, et al. (2006), los métodos de enseñanza-
cimientos, pero también para la aprehensión de saberes aprendizaje pueden estar clasificados de acuerdo a la
que permiten que el estudiante de la Educación Básica fuente del contenido: verbales, visuales y prácticos; se-
Primaria adquiera modos de actuación acorde con las si- gún la relación docente-estudiante: expositivo, de elabo-
tuaciones sociales. ración conjunta y de trabajo independiente y de acuerdo
a los niveles de independencia de la actividad cognosci-
En este orden de ideas en la escuela se propicia una for-
tiva: explicativo-ilustrativo, reproductivo, exposición pro-
mación integral orientada por el docente, La autora des-
blémica, búsqueda parcial e investigativo.
taca el protagonismo del estudiante en la construcción
de su propio conocimiento, en el cual no es un simple Roméu (2013), puntualiza que los métodos, pueden apo-
receptáculo de información, sino un partícipe activo. De yarse en diferentes procedimientos, tales como la expli-
ahí que se adquieren nociones, conceptos, teorías, leyes, cación, la toma de notas, la ejemplificación, el sistema
pero también se enseña para la vida. Sobre esta lógica de preguntas y órdenes entre otros, destaca que los pro-
los anteriores autores plantean en esencia, que en este cedimientos pueden ser generales cuando se aplican en
proceso se dan todas las posibilidades para contribuir a todas las clases y los específicos los cuales se precisan
la formación de sentimientos, cualidades y valores. por el contenido de la asignatura.
Pla, et al. (2012), valoran que los contenidos al contextua- Se concibe la lectura, y leer, específicamente cómo una
lizarse se enriquecen sistemáticamente con las proble- actividad una actividad cognitiva compleja que involucra
máticas del contexto más inmediato, en el caso particular diversos recursos en la cual intervienen varios procesos,
de esta investigación son las tradiciones orales, las cua- los cuales hacen parte de la lectura.
les aportan al estudiante conocimientos, vivencias, moti-
En este orden de ideas Fragoso, et al. (2013), refieren que
vación, vinculadas con la formación y desarrollo de habi-
“leer es un proceso activo que relaciona de manera muy
lidades lectoras, a partir del contexto, las características
especial a un lector con un texto dado. Proceso activo,
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lector y texto”. Los autores ratifican que en la ejecución Nacional, 1998) se declaran siete competencias, sin em-
de este proceso activo intervienen un conjunto de activi- bargo se aclara que la investigación está enfocada en la
dades; el procesamiento de la información que ofrece el formación de habilidad comprender, debido a que se con-
texto, el cual se realiza mediante un sistema de acciones sidera que las habilidades están contenidas en las com-
y operaciones que se convertirán en habilidades. petencias y son un paso obligado para adquirirlas, como
se plantea en los Estándares Básicos de Competencias
Jurado (2008), refiere que: la lectura ha de asumirse
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2006),
como el acto de comprender e interpretar representacio-
“pues para el ejercicio de cada competencia se requieren
nes, sean de carácter lingüístico o de cualquier otra sus-
muchos conocimientos, habilidades, destrezas, compren-
tancia de expresión (se leen pinturas, fotografías, gestos,
siones, actitudes y disposiciones específicas del dominio
señales, fórmulas, ecuaciones, etc.).
de que se trata, sin los cuales no puede decirse que la
Se coincide con las valoraciones realizadas la cual con- persona es realmente competente en el ámbito seleccio-
lleva adquisición de la habilidad comprender. En con- nado”. (p. 12)
cordancia con lo citado anteriormente, Cassany (1999),
En los Estándares Básicos de Competencias (Colombia.
argumenta que “leer es comprender y crear habilidades
Ministerio de Educación Nacional, 2006), se explicitan los
superiores de lectura requiere de una labor didáctica en-
parámetros de lo que deben alcanzar los estudiantes, en
caminada a formar lectores competentes, capaces de in-
particular sobre la base de saber, saber hacer, saber ser,
tegrar, relacionar, comparar, determinar ideas esenciales y
para lograr el nivel de calidad esperado a su paso por el
aplicarlas en su contexto de actuación pedagógica”. (p.
sistema educativo, es así como un estándar se define en
201)
el documento como:” Un criterio claro y público que per-
Por lo anterior se pretende, ajustar los contenidos sin des- mite juzgar si un estudiante, una institución o el sistema
ligarse de los objetivos de aprendizaje que formulan los educativo en su conjunto cumplen con unas expectativas
Derechos Básicos de Aprendizaje, desde una perspec- comunes de calidad”.
tiva que permita formar la habilidad comprender desde
Dichos estándares están organizados por grupos de gra-
diversas tipologías textuales en los estudiantes de tercer
dos (de primero a tercero; de cuarto a quinto; de sexto
grado, de la Educación Básica Primaria.
a séptimo; de octavo a noveno y de décimo a undéci-
Sobre la base de este fundamento se pueden alcanzar mo), estructurados por cinco factores: producción textual,
mejoras en el rendimiento académico de los estudiantes, comprensión e interpretación textual, literatura, ética de la
puesto que la lectura transversaliza el currículo. comunicación, medios de comunicación y otros sistemas
simbólicos; por el estándar y los subprocesos que son
Las anteriores concepciones son pertinentes, por cuanto
los enunciados, donde radica la competencia que debe
valoran e integran rasgos necesarios y suficientes para
alcanzar en el factor que corresponda.
la comprensión del proceso de enseñanza-aprendizaje,
más aún cuando reconoce su carácter dialéctico, dinámi- La educación colombiana en general y el proceso de
co y adaptativo a las condiciones socio históricas. El estu- enseñanza-aprendizaje en particular, se rigen por un
diante participa en su aprendizaje de una manera activa, sistema de indicadores nacionales e internacionales
como protagonista de este. que marcan el rumbo de las proyecciones y fines de la
educación. En el documento titulado Metas Educativas.
Normatividad y tratamiento del proceso de enseñanza-
La Educación que queremos para la generación de los
aprendizaje de la Lengua castellana en Colombia
Bicentenarios publicado por la Organización de Estados
En Colombia los Lineamientos curriculares de la Lengua Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la
castellana (Colombia. Ministerio de Educación Nacional, Cultura (2010), documento que recoge un sistema de as-
1998), los Estándares Básicos de Competencias piraciones educativas a lograr hasta el año el 2021, entre
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2006) y los las cuales se encuentra: “ofrecer un currículo que incor-
Derechos básicos de aprendizaje (Colombia. Ministerio pore la lectura y el uso del computador en el proceso de
de Educación Nacional, 2017) constituyen los fundamen- enseñanza- aprendizaje”. (p.152)
tos para orientar el proceso de enseñanza-aprendizaje
El documento citado con anterioridad se refiere a las me-
en el área de Lengua castellana. En estos documentos
tas generales y específicas a lograr hasta el 2021 y da
se declara que las macrohabilidades comunicativas: ha-
cuenta del lugar que ocupa la lectura en el contexto edu-
blar, escuchar, leer y escribir cumplen una función en la
cativo colombiano, como uno de los pilares esenciales
construcción de significado. Es oportuno señalar que
para el desarrollo del aprendizaje y la formación de las
en los Lineamientos (Colombia. Ministerio de Educación
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habilidades lectoras, lo cual puede ser favorecido con el de contar historias mediante la creación de textos
aprovechamiento de las diversas tipologías textuales. literarios narrativos e identifica la voz que narra una
historia; comparte con sus compañeros los textos
Por otra parte, los Derechos Básicos de Aprendizaje con los que interactúa en clase, para ello retoma
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2017) abor- elementos como la entonación, la gesticulación y el
dan el componente lector dentro del proceso de enseñan- manejo escénico.
za-aprendizaje de la Lengua castellana, como uno de sus
elementos esenciales. Asimismo, desde los Estándares •• Identifica el papel del emisor y el receptor y sus propó-
Básicos de Competencias se contempla este aspecto, sitos comunicativos en una situación específica. En tal
sentido el estudiante:
expresándolo de la siguiente manera: “en tal sentido, se
requiere abordar la obra literaria en la escuela, de tal suer- •• Asocia la intención comunicativa con el contexto
te que se generen lectoras y lectores críticos de su pro- en el que se producen los enunciados y el rol que
pia cultura, creativos y sensibles ante el lenguaje poético, desempeñan los interlocutores; infiere el significa-
con un amplio conocimiento cultural y con la disposición do de palabras desconocidas, según el contexto
necesaria para disfrutar la ficción literaria y la libertad ex- donde se encuentren; organiza secuencialmente
las ideas que comprende de un texto oral, deduce
presa de poder leer cuándo y cómo se desee”. (Colombia.
información de un emisor (como la edad, el sexo o
Ministerio de Educación Nacional, 2006) la actitud) a partir de las características de su voz
Al realizar la valoración de este documento, las autoras
•• Interpreta el contenido y la estructura del texto, res-
de este artículo concuerdan con el mismo, ante todo por
pondiendo preguntas de orden inferencial y crítico.
el énfasis que se pone en la lectura. Para lo cual el estudiante:
Los DBA, en su conjunto, explicitan los aprendizajes es-
•• Ubica el contenido de un texto en relación con la
tructurantes para un grado y un área particular. Se en-
situación comunicativa en que se presenta y utiliza
tienden los aprendizajes como la conjunción de conoci- el contexto para inferir información; discrimina los
mientos, habilidades y actitudes que otorgan una cultura temas principales de un texto de los menos rele-
general a quien aprende. Son organizativos, en tanto ex- vantes y reconoce las diferencias en las estructuras
presan las unidades básicas y fundamentales sobre las de diferentes tipos de escrito.
cuales se puede edificar el desarrollo futuro del individuo.
•• Produce textos orales breves de diferente tipo,
En relación con los aprendizajes que debe lograr el estu- ajustando el volumen, el tono de la voz, los movi-
diante de tercer grado, en la asignatura de Lengua cas- mientos corporales y los gestos, al tema y a la si-
tellana, se expresan los siguientes DBA que a juicio de tuación comunicativa.
la autora son los que se relacionan directamente con la
formación de habilidades lectoras: •• Las evidencias de aprendizaje se expresan en la
medida en que los estudiantes: Participan en co-
•• Comprende que algunos escritos y manifestaciones municaciones orales atendiendo a diferentes pro-
artísticas pueden estar compuestos por texto, sonido pósitos comunicativos: narrar, argumentar, expo-
e imágenes. En este contexto el estudiante debe estar ner, describir e informar, así como la elección de
apto para: las expresiones más pertinentes para dar claridad
a sus intervenciones; reconocen los roles de quien
•• Identificar diversas manifestaciones artísticas como la produce y de quien interpreta un texto en una situa-
escultura, la pintura y la danza, y relaciona su conte- ción comunicativa específica y realiza cambios en
nido con el contexto en el que vive; interpretar la infor- la modulación de la voz para acompañar el sentido
mación difundida en textos no verbales: caricaturas, ti- de lo que comunica; elaboran juegos de palabras
ras cómicas, historietas, anuncios publicitarios y otros atendiendo a la pronunciación de la sílaba inicial o
medios de expresión gráfica y analiza los sonidos que final de las palabras.
se emplean en diferentes manifestaciones artísticas.
La investigadora particulariza que los Lineamientos cu-
•• Reconoce algunas características de los textos narra-
rriculares (Colombia. Ministerio de Educación Nacional,
tivos, tales como el concepto de narrador y estructura
narrativa, a partir de la recreación y disfrute de los mis- 1998), constituyen importantes herramientas didáctico-
mos. En este derecho básico las evidencias de apren- metodológicas para el trabajo del profesor, por cuanto les
dizajes deben ser las siguientes: ofrecen una guía coherente de cómo proyectar el trabajo
en el proceso de enseñanza-aprendizaje; incluso, se de-
•• Diferenciar entre textos ficcionales y no ficcionales, talla un sistema de indicadores que permiten determinar
verificar las hipótesis que plantea acerca del con-
el nivel de aprendizaje alcanzado por cada estudiante.
tenido de los textos que lee; afianzar su capacidad
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UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD | Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos | ISSN: 2218-3620
Sin embargo, a pesar de la pertinencia didáctica y pedagó- Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (1994). Ley
gica de estos, no rebasan los límites del proceso de ense- General de la Educación. Bogotá: Congreso de la
ñanza-aprendizaje, y son muy poco tratados aquellos ele- República de Colombia.
mentos que orienten el uso de la diversidad de textos en la
Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (1998).
formación de la habilidad comprender, y aunque en sus re-
Lineamientos Curriculares de Lengua castellana.
comendaciones uno de los propósitos es que los estudian-
Bogotá. MEN.
tes sean lectores competentes, no se explicita la habilidad
comprender que deben tener los estudiantes para tal fin. Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (2017).
Derechos Básicos de Aprendizaje. Bogotá:
CONCLUSIONES Panamericana Formas E Impresos S.A.
A partir de las valoraciones realizadas se puede arribar a Fragoso, et al. (2013). Didáctica de la lengua española I.
las siguientes conclusiones: La Habana: Pueblo y Educación.
En el artículo se sitúan los aspectos concernientes al pro- Ginoris, O., Addine, F., & Turcaz, J. (2006). Curso de
ceso de enseñanza- aprendizaje y la relación de este con Didáctica General. La Habana: IPLAC.
la asignatura Lengua Castellana, la lectura, la habilidad
Grau, R. (1997). La lectura en la educación primaria. Aula
comprender y las tipologías textuales como elementos
de Innovación Educativa, 59, 32-36. Recuperado de
que se relacionan estrechamente, orientando el proceso
http://www.educacionviva.com/.../lectura/AU05909%20
hacia el cumplimiento del objetivo de la investigación. Se
La%20lectura%20en%20primaria.pdf
toman como referente los documentos reglamentarios de
Colombia y las pruebas realizadas en otros contextos las Jurado, F. (2008). La formación de lectores críticos desde
cuales ha servido de referente para este artículo. Sin de- el aula. Revista Iberoamericana de Educación, 46,
jar de lado las necesidades, motivaciones e intereses de 89-105. Recuperado de https://rieoei.org/historico/
los estudiantes. documentos/rie46a05.pdf
Desde el punto de vista práctico, se hace necesario vin- López, J. M. (1996). Los estilos de aprendizaje y los
cular las diversas tipologías textuales en las prácticas de estilos de enseñanza: Un modelo de categorización de
aula que conlleven a la formación de la habilidad com- estilos de aprendizaje de los alumnos de enseñanza
prender en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la secundaria desde el punto de vista del profesor.
Lengua Castellana, estructurando la clase a partir de los Anales de psicología, 12(2), 179-184. Recuperado de
componentes del proceso de enseñanza-aprendizaje. https://www.redalyc.org/html/167/16712206/
Todo lo cual se debe visualizar en el objetivo propuesto,
Organización de Estados Iberoamericanos para la
partiendo que es la categoría rectora en el proceso de
Educación, la Ciencia y la Cultura. (2010). Metas
enseñanza-aprendizaje.
Educativas. La Educación que queremos para la
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pt.slideshare.net/hansmejia/hacia-un-curriculo- literatura (Tesis Doctoral). Cienfuegos: Universidad de
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Cassany, D. (1999). Enseñar lengua. Barcelona: Graó. Silvestre, M. (2002). El proceso de enseñanza aprendizaje
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Colombia. Corte Constitucional. (1991). Constitución Compendio de Pedagogía. La Habana: Ministerio de
política. Bogotá: Corte Constitucional. Educación.
Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (2006).
Estándares Básicos de Competencias- Guía-3.
Bogotá. MEN.
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01
Fecha de presentación: febrero, 2019
Fecha de aceptación: mayo, 2019
Fecha de publicación: julio, 2019
LA HABILIDAD COMPRENDER
Y LAS TIPOLOGÍAS TEXTUALES EN LA EDUCACIÓN BÁSICA PRIMA-
RIA, TERCER GRADO
THE ABILITY TO UNDERSTAND AND THE TEXTUAL TYPOLOGIES IN THE
PRIMARY BASIC EDUCATION, THIRD GRADE
María Shirley Amú Casarán1
E-mail: mashirly2008@gmail.com
ORCID: https://orcid.org/0000-0001-6065-4370
María Caridad Pérez Padrón2
ORCID: https://orcid.org/0000-0002-0938-0578
E-mail: mcperez@ucf.edu.cu
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Institución Educativa Simón Bolívar. Jamundí. Colombia.
2
Universidad de Cienfuegos “Carlos Rafael Rodríguez”. Cuba.
Cita sugerida (APA, sexta edición)
Amú Casarán, M. S., & Pérez Padrón, M. C. (2019). La habilidad comprender y las tipologías textuales en la Educación
Básica Primaria, tercer grado. Universidad y Sociedad, 11(4), 7-12. Recuperado de http://rus.ucf.edu.cu/index.php/
rus
RESUMEN
El presente artículo trata los elementos esenciales que intervienen en la habilidad de comprender y las tipologías textuales
en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la Lengua castellana, fundamentados desde la teoría, así como desde los do-
cumentos normativos colombianos. Los cuales en conjunto y teniendo como base la Constitución Política de 1991, deben
garantizar una educación incluyente, donde se debe tener en cuenta el entorno social y cultural de los individuos para poder
desarrollar una práctica pedagógica significativa y contextualizada. A lo largo del escrito se relaciona el proceso de ense-
ñanza-aprendizaje, con la formación de la habilidad comprender, desde las diversas tipologías textuales, como elemento
dinamizador de dicho proceso en los estudiantes de tercer grado de la Educación Básica Primaria.
Palabras clave: Proceso de enseñanza-aprendizaje, Lengua castellana, habilidad comprender, tipologías textuales.
ABSTRACT
This article deals with the essential elements that intervene with the ability to understand, from the different text typologies in
the teaching-learning process of the Castilian language, based on theory, as well as Colombian normative documents, which
as a whole and based on the Political Constitution of 1991, must guarantee an inclusive education, where the social and cul-
tural environment of the individuals must be taken into account in order to develop a meaningful and contextualized pedago-
gical practice. Throughout the writing, the teaching-learning process is related with the formation of the ability to understand,
from different text typologies, as a dynamic element of this process in the third grade students of Basic Primary Education.
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que al desarrollarlas se logra el conocimiento, los valores particulares del estudiante y del proceso de enseñanza-
que expresan la significación que el hombre le asigna a aprendizaje de la Lengua castellana.
dichos objetos y halla en la contradicción entre lo objetivo
Se propone que los contenidos se estructuren sobre la
y lo subjetivo su propio aprendizaje.
base del enfoque sistémico, para posibilitar la integración
Asimismo, por otra parte argumenta que el objetivo es de los componentes del proceso de enseñanza-apren-
rector, porque expresa el modelo pedagógico del encar- dizaje: objetivo, contenido, método, medios, formas y
go social, y contiene las aspiraciones, los propósitos que evaluación.
la sociedad pretende formar en las nuevas generaciones,
En un análisis reciente, Álvarez de Zayas (1998), citado
tanto los que se vinculan directamente con el contenido
por Sánchez (2017), precisa que “los contenidos tienen
y con aquellos aspectos más esenciales en la formación
que ser asimilados de un modo sistémico por los estu-
del estudiante. Son los objetivos los que definen explíci-
diantes y que a su vez desempeñen un papel integrador
tamente los conceptos más generales que constituyen la
en el currículo… pues en su aplicación práctica, deben
esencia de todos los conocimientos, así como las habili-
crear las condiciones necesarias para la formación de
dades más importantes y a partir de él se determina la or-
convicciones en el estudiante”. (p.14)
ganización de los demás componentes. En un plano más
generalizado incluye la médula del contenido y de sus Las autoras del artículo afirman que las anteriores con-
métodos. Con estos criterios coinciden Silvestre (2002); cepciones son pertinentes, por cuanto valoran e integran
Addine (2004); y Ginoris, Addine & Turcaz (2006). rasgos necesarios y suficientes para la comprensión del
proceso de enseñanza-aprendizaje, más aún cuando re-
Asimismo, en torno a las potencialidades axiológicas
conocen su carácter dialéctico, dinámico y adaptativo a
del proceso de enseñanza-aprendizaje, Silvestre (2002),
las condiciones socio históricas. El estudiante participa
plantea que “la formación de acciones valorativas es una
en su aprendizaje de una manera activa, como protago-
exigencia básica, es un momento muy importante, en la
nista de este.
formación del pensamiento crítico en el hombre, que se
empieza a formar desde muy temprano en el niño. Esta El método de enseñanza-aprendizaje se lleva a la prácti-
necesidad de enjuiciamiento ha de ser tenida en cuenta ca a través de procedimientos o acciones didácticas ex-
respecto a todo lo que aprende”. (p.146) ternas del maestro que activan la atención del estudiante
y en particular la clase de Lengua castellana.
Lo anterior significa que el proceso de enseñanza-apren-
dizaje constituye un espacio para la adquisición de cono- Según Ginoris, et al. (2006), los métodos de enseñanza-
cimientos, pero también para la aprehensión de saberes aprendizaje pueden estar clasificados de acuerdo a la
que permiten que el estudiante de la Educación Básica fuente del contenido: verbales, visuales y prácticos; se-
Primaria adquiera modos de actuación acorde con las si- gún la relación docente-estudiante: expositivo, de elabo-
tuaciones sociales. ración conjunta y de trabajo independiente y de acuerdo
a los niveles de independencia de la actividad cognosci-
En este orden de ideas en la escuela se propicia una for-
tiva: explicativo-ilustrativo, reproductivo, exposición pro-
mación integral orientada por el docente, La autora des-
blémica, búsqueda parcial e investigativo.
taca el protagonismo del estudiante en la construcción
de su propio conocimiento, en el cual no es un simple Roméu (2013), puntualiza que los métodos, pueden apo-
receptáculo de información, sino un partícipe activo. De yarse en diferentes procedimientos, tales como la expli-
ahí que se adquieren nociones, conceptos, teorías, leyes, cación, la toma de notas, la ejemplificación, el sistema
pero también se enseña para la vida. Sobre esta lógica de preguntas y órdenes entre otros, destaca que los pro-
los anteriores autores plantean en esencia, que en este cedimientos pueden ser generales cuando se aplican en
proceso se dan todas las posibilidades para contribuir a todas las clases y los específicos los cuales se precisan
la formación de sentimientos, cualidades y valores. por el contenido de la asignatura.
Pla, et al. (2012), valoran que los contenidos al contextua- Se concibe la lectura, y leer, específicamente cómo una
lizarse se enriquecen sistemáticamente con las proble- actividad una actividad cognitiva compleja que involucra
máticas del contexto más inmediato, en el caso particular diversos recursos en la cual intervienen varios procesos,
de esta investigación son las tradiciones orales, las cua- los cuales hacen parte de la lectura.
les aportan al estudiante conocimientos, vivencias, moti-
En este orden de ideas Fragoso, et al. (2013), refieren que
vación, vinculadas con la formación y desarrollo de habi-
“leer es un proceso activo que relaciona de manera muy
lidades lectoras, a partir del contexto, las características
especial a un lector con un texto dado. Proceso activo,
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UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD | Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos | ISSN: 2218-3620
lector y texto”. Los autores ratifican que en la ejecución Nacional, 1998) se declaran siete competencias, sin em-
de este proceso activo intervienen un conjunto de activi- bargo se aclara que la investigación está enfocada en la
dades; el procesamiento de la información que ofrece el formación de habilidad comprender, debido a que se con-
texto, el cual se realiza mediante un sistema de acciones sidera que las habilidades están contenidas en las com-
y operaciones que se convertirán en habilidades. petencias y son un paso obligado para adquirirlas, como
se plantea en los Estándares Básicos de Competencias
Jurado (2008), refiere que: la lectura ha de asumirse
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2006),
como el acto de comprender e interpretar representacio-
“pues para el ejercicio de cada competencia se requieren
nes, sean de carácter lingüístico o de cualquier otra sus-
muchos conocimientos, habilidades, destrezas, compren-
tancia de expresión (se leen pinturas, fotografías, gestos,
siones, actitudes y disposiciones específicas del dominio
señales, fórmulas, ecuaciones, etc.).
de que se trata, sin los cuales no puede decirse que la
Se coincide con las valoraciones realizadas la cual con- persona es realmente competente en el ámbito seleccio-
lleva adquisición de la habilidad comprender. En con- nado”. (p. 12)
cordancia con lo citado anteriormente, Cassany (1999),
En los Estándares Básicos de Competencias (Colombia.
argumenta que “leer es comprender y crear habilidades
Ministerio de Educación Nacional, 2006), se explicitan los
superiores de lectura requiere de una labor didáctica en-
parámetros de lo que deben alcanzar los estudiantes, en
caminada a formar lectores competentes, capaces de in-
particular sobre la base de saber, saber hacer, saber ser,
tegrar, relacionar, comparar, determinar ideas esenciales y
para lograr el nivel de calidad esperado a su paso por el
aplicarlas en su contexto de actuación pedagógica”. (p.
sistema educativo, es así como un estándar se define en
201)
el documento como:” Un criterio claro y público que per-
Por lo anterior se pretende, ajustar los contenidos sin des- mite juzgar si un estudiante, una institución o el sistema
ligarse de los objetivos de aprendizaje que formulan los educativo en su conjunto cumplen con unas expectativas
Derechos Básicos de Aprendizaje, desde una perspec- comunes de calidad”.
tiva que permita formar la habilidad comprender desde
Dichos estándares están organizados por grupos de gra-
diversas tipologías textuales en los estudiantes de tercer
dos (de primero a tercero; de cuarto a quinto; de sexto
grado, de la Educación Básica Primaria.
a séptimo; de octavo a noveno y de décimo a undéci-
Sobre la base de este fundamento se pueden alcanzar mo), estructurados por cinco factores: producción textual,
mejoras en el rendimiento académico de los estudiantes, comprensión e interpretación textual, literatura, ética de la
puesto que la lectura transversaliza el currículo. comunicación, medios de comunicación y otros sistemas
simbólicos; por el estándar y los subprocesos que son
Las anteriores concepciones son pertinentes, por cuanto
los enunciados, donde radica la competencia que debe
valoran e integran rasgos necesarios y suficientes para
alcanzar en el factor que corresponda.
la comprensión del proceso de enseñanza-aprendizaje,
más aún cuando reconoce su carácter dialéctico, dinámi- La educación colombiana en general y el proceso de
co y adaptativo a las condiciones socio históricas. El estu- enseñanza-aprendizaje en particular, se rigen por un
diante participa en su aprendizaje de una manera activa, sistema de indicadores nacionales e internacionales
como protagonista de este. que marcan el rumbo de las proyecciones y fines de la
educación. En el documento titulado Metas Educativas.
Normatividad y tratamiento del proceso de enseñanza-
La Educación que queremos para la generación de los
aprendizaje de la Lengua castellana en Colombia
Bicentenarios publicado por la Organización de Estados
En Colombia los Lineamientos curriculares de la Lengua Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la
castellana (Colombia. Ministerio de Educación Nacional, Cultura (2010), documento que recoge un sistema de as-
1998), los Estándares Básicos de Competencias piraciones educativas a lograr hasta el año el 2021, entre
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2006) y los las cuales se encuentra: “ofrecer un currículo que incor-
Derechos básicos de aprendizaje (Colombia. Ministerio pore la lectura y el uso del computador en el proceso de
de Educación Nacional, 2017) constituyen los fundamen- enseñanza- aprendizaje”. (p.152)
tos para orientar el proceso de enseñanza-aprendizaje
El documento citado con anterioridad se refiere a las me-
en el área de Lengua castellana. En estos documentos
tas generales y específicas a lograr hasta el 2021 y da
se declara que las macrohabilidades comunicativas: ha-
cuenta del lugar que ocupa la lectura en el contexto edu-
blar, escuchar, leer y escribir cumplen una función en la
cativo colombiano, como uno de los pilares esenciales
construcción de significado. Es oportuno señalar que
para el desarrollo del aprendizaje y la formación de las
en los Lineamientos (Colombia. Ministerio de Educación
10
UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD | Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos | ISSN: 2218-3620
habilidades lectoras, lo cual puede ser favorecido con el de contar historias mediante la creación de textos
aprovechamiento de las diversas tipologías textuales. literarios narrativos e identifica la voz que narra una
historia; comparte con sus compañeros los textos
Por otra parte, los Derechos Básicos de Aprendizaje con los que interactúa en clase, para ello retoma
(Colombia. Ministerio de Educación Nacional, 2017) abor- elementos como la entonación, la gesticulación y el
dan el componente lector dentro del proceso de enseñan- manejo escénico.
za-aprendizaje de la Lengua castellana, como uno de sus
elementos esenciales. Asimismo, desde los Estándares •• Identifica el papel del emisor y el receptor y sus propó-
Básicos de Competencias se contempla este aspecto, sitos comunicativos en una situación específica. En tal
sentido el estudiante:
expresándolo de la siguiente manera: “en tal sentido, se
requiere abordar la obra literaria en la escuela, de tal suer- •• Asocia la intención comunicativa con el contexto
te que se generen lectoras y lectores críticos de su pro- en el que se producen los enunciados y el rol que
pia cultura, creativos y sensibles ante el lenguaje poético, desempeñan los interlocutores; infiere el significa-
con un amplio conocimiento cultural y con la disposición do de palabras desconocidas, según el contexto
necesaria para disfrutar la ficción literaria y la libertad ex- donde se encuentren; organiza secuencialmente
las ideas que comprende de un texto oral, deduce
presa de poder leer cuándo y cómo se desee”. (Colombia.
información de un emisor (como la edad, el sexo o
Ministerio de Educación Nacional, 2006) la actitud) a partir de las características de su voz
Al realizar la valoración de este documento, las autoras
•• Interpreta el contenido y la estructura del texto, res-
de este artículo concuerdan con el mismo, ante todo por
pondiendo preguntas de orden inferencial y crítico.
el énfasis que se pone en la lectura. Para lo cual el estudiante:
Los DBA, en su conjunto, explicitan los aprendizajes es-
•• Ubica el contenido de un texto en relación con la
tructurantes para un grado y un área particular. Se en-
situación comunicativa en que se presenta y utiliza
tienden los aprendizajes como la conjunción de conoci- el contexto para inferir información; discrimina los
mientos, habilidades y actitudes que otorgan una cultura temas principales de un texto de los menos rele-
general a quien aprende. Son organizativos, en tanto ex- vantes y reconoce las diferencias en las estructuras
presan las unidades básicas y fundamentales sobre las de diferentes tipos de escrito.
cuales se puede edificar el desarrollo futuro del individuo.
•• Produce textos orales breves de diferente tipo,
En relación con los aprendizajes que debe lograr el estu- ajustando el volumen, el tono de la voz, los movi-
diante de tercer grado, en la asignatura de Lengua cas- mientos corporales y los gestos, al tema y a la si-
tellana, se expresan los siguientes DBA que a juicio de tuación comunicativa.
la autora son los que se relacionan directamente con la
formación de habilidades lectoras: •• Las evidencias de aprendizaje se expresan en la
medida en que los estudiantes: Participan en co-
•• Comprende que algunos escritos y manifestaciones municaciones orales atendiendo a diferentes pro-
artísticas pueden estar compuestos por texto, sonido pósitos comunicativos: narrar, argumentar, expo-
e imágenes. En este contexto el estudiante debe estar ner, describir e informar, así como la elección de
apto para: las expresiones más pertinentes para dar claridad
a sus intervenciones; reconocen los roles de quien
•• Identificar diversas manifestaciones artísticas como la produce y de quien interpreta un texto en una situa-
escultura, la pintura y la danza, y relaciona su conte- ción comunicativa específica y realiza cambios en
nido con el contexto en el que vive; interpretar la infor- la modulación de la voz para acompañar el sentido
mación difundida en textos no verbales: caricaturas, ti- de lo que comunica; elaboran juegos de palabras
ras cómicas, historietas, anuncios publicitarios y otros atendiendo a la pronunciación de la sílaba inicial o
medios de expresión gráfica y analiza los sonidos que final de las palabras.
se emplean en diferentes manifestaciones artísticas.
La investigadora particulariza que los Lineamientos cu-
•• Reconoce algunas características de los textos narra-
rriculares (Colombia. Ministerio de Educación Nacional,
tivos, tales como el concepto de narrador y estructura
narrativa, a partir de la recreación y disfrute de los mis- 1998), constituyen importantes herramientas didáctico-
mos. En este derecho básico las evidencias de apren- metodológicas para el trabajo del profesor, por cuanto les
dizajes deben ser las siguientes: ofrecen una guía coherente de cómo proyectar el trabajo
en el proceso de enseñanza-aprendizaje; incluso, se de-
•• Diferenciar entre textos ficcionales y no ficcionales, talla un sistema de indicadores que permiten determinar
verificar las hipótesis que plantea acerca del con-
el nivel de aprendizaje alcanzado por cada estudiante.
tenido de los textos que lee; afianzar su capacidad
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UNIVERSIDAD Y SOCIEDAD | Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos | ISSN: 2218-3620
Sin embargo, a pesar de la pertinencia didáctica y pedagó- Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (1994). Ley
gica de estos, no rebasan los límites del proceso de ense- General de la Educación. Bogotá: Congreso de la
ñanza-aprendizaje, y son muy poco tratados aquellos ele- República de Colombia.
mentos que orienten el uso de la diversidad de textos en la
Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (1998).
formación de la habilidad comprender, y aunque en sus re-
Lineamientos Curriculares de Lengua castellana.
comendaciones uno de los propósitos es que los estudian-
Bogotá. MEN.
tes sean lectores competentes, no se explicita la habilidad
comprender que deben tener los estudiantes para tal fin. Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (2017).
Derechos Básicos de Aprendizaje. Bogotá:
CONCLUSIONES Panamericana Formas E Impresos S.A.
A partir de las valoraciones realizadas se puede arribar a Fragoso, et al. (2013). Didáctica de la lengua española I.
las siguientes conclusiones: La Habana: Pueblo y Educación.
En el artículo se sitúan los aspectos concernientes al pro- Ginoris, O., Addine, F., & Turcaz, J. (2006). Curso de
ceso de enseñanza- aprendizaje y la relación de este con Didáctica General. La Habana: IPLAC.
la asignatura Lengua Castellana, la lectura, la habilidad
Grau, R. (1997). La lectura en la educación primaria. Aula
comprender y las tipologías textuales como elementos
de Innovación Educativa, 59, 32-36. Recuperado de
que se relacionan estrechamente, orientando el proceso
http://www.educacionviva.com/.../lectura/AU05909%20
hacia el cumplimiento del objetivo de la investigación. Se
La%20lectura%20en%20primaria.pdf
toman como referente los documentos reglamentarios de
Colombia y las pruebas realizadas en otros contextos las Jurado, F. (2008). La formación de lectores críticos desde
cuales ha servido de referente para este artículo. Sin de- el aula. Revista Iberoamericana de Educación, 46,
jar de lado las necesidades, motivaciones e intereses de 89-105. Recuperado de https://rieoei.org/historico/
los estudiantes. documentos/rie46a05.pdf
Desde el punto de vista práctico, se hace necesario vin- López, J. M. (1996). Los estilos de aprendizaje y los
cular las diversas tipologías textuales en las prácticas de estilos de enseñanza: Un modelo de categorización de
aula que conlleven a la formación de la habilidad com- estilos de aprendizaje de los alumnos de enseñanza
prender en el proceso de enseñanza-aprendizaje de la secundaria desde el punto de vista del profesor.
Lengua Castellana, estructurando la clase a partir de los Anales de psicología, 12(2), 179-184. Recuperado de
componentes del proceso de enseñanza-aprendizaje. https://www.redalyc.org/html/167/16712206/
Todo lo cual se debe visualizar en el objetivo propuesto,
Organización de Estados Iberoamericanos para la
partiendo que es la categoría rectora en el proceso de
Educación, la Ciencia y la Cultura. (2010). Metas
enseñanza-aprendizaje.
Educativas. La Educación que queremos para la
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS generación de los Bicentenarios. Madrid: OEI.
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integral-ycontextualizado Cienfuegos.
Cassany, D. (1999). Enseñar lengua. Barcelona: Graó. Silvestre, M. (2002). El proceso de enseñanza aprendizaje
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Colombia. Corte Constitucional. (1991). Constitución Compendio de Pedagogía. La Habana: Ministerio de
política. Bogotá: Corte Constitucional. Educación.
Colombia. Ministerio de Educación Nacional. (2006).
Estándares Básicos de Competencias- Guía-3.
Bogotá. MEN.
12
La cultura, los medios de comunicación y el «efecto
ideológico»
Stuart Hall
Ahora bien, puesto que cada modo de organización social y material era
históricamente específico, las formas de vida social correspondientes tenían
que asumir una forma “concreta” e históricamente definida. “Este modo de
producción no debe ser considerado simplemente como la reproducción de la
existencia física de los individuos. Más bien es una forma concreta de la
actividad de estos individuos, una forma concreta de expresión de sus vidas, un
modo de vida concreto de éstos. Así como los individuos expresan sus vidas,
así son. Por tanto, lo que son coincide con su producción, tanto con lo que
producen como con cómo lo producen” (Marx, 1965). Las formas materiales y
sociales de la producción, él modo en que el trabajo es organizado v
combinado con las herramientas para producir, el nivel de desarrollo técnico,
las instituciones por las que circulan las mercancías y se realiza el valor, los
tipos de asociación civil, de vida familiar y del estado a todo ello apropiado
constituyen un conjunto de relaciones y estructuras que muestra una
configuración identificable, un esquema, un “modo de vivir” para los individuos
y grupos sociales. Esta esquematización era, por así decirlo, el resultado de las
interconexiones entre los diferentes niveles de práctica social. El esquema
expresaba también el modo en que el resultado combinados de esos niveles
interrelacionados era “vivido”, como una totalidad, por sus “portadores”. Este
parece ser el mejor medio de captar, dentro de una teoría materialista (en la
que el término mismo no juega un papel significativo), dónde, precisamente,
surge la cultura. Diciéndolo metafóricamente, la “cultura” nos refiere a la
disposición -las formas- asumida por la existencia social bajo determinadas
condiciones históricas. Siempre que la metáfora se entienda sólo en su valor
heurístico podríamos decir que si el término “social” se refiere sólo al contenido
de las relaciones en que entran involuntariamente los hombres de cualquier
formación social entonces la “cultura” se refiere a las formas que asumen tales
relaciones. (Sin embargo, la distinción entre forma y contenido no quede
llevarse demasiado lejos. Debería tenerse también en cuenta que Marx, que
concede una importancia considerable a las formas que asume el valor en el
modo de producción capitalista, utiliza el término de modo diferente a como ha
sido utilizado arriba.) Aun a riesgo de fundir dos discursos teóricos divergentes
hemos de traer aquí una cuestión que plantea Roger Poole en la introducción a
la obra de Lévi-Strauss Totemism (1969). “En lugar de preguntar por centésima
vez ‘Qué es el totemismo’ nos pregunta por vez primera… ‘¿Cómo se disponen
los fenómenos totémicos?’ El paso del ‘qué’ al ‘cómo’, de la actitud sustantiva a
la adjetiva, es el primer elemento radicalmente diferente, el primer elemento
‘estructural’, que hemos de observar en la obra que tenemos ante nosotros”. La
“cultura”, en este sentido, no se refiere a algo sustancialmente diferente de lo
“social”: se refiere esencialmente a un aspecto del mismo fenómeno.
El problema es cómo dar cuenta del hecho de que, en la esfera de las ideas, el
significado, el valor, los conceptos y la conciencia, los hombres pueden
“experimentarse” a sí mismos de modos que no se corresponden plenamente
con su situación real. ¿Cómo puede decirse de los hombres que tienen “falsa”
conciencia de cómo se atienen a, o se relacionan con, las condiciones reales
de su vida y producción? ¿Puede el lenguaje, el medio por el que se transmite
la cultura humana en el “sentido antropológico”, convertirse también en
instrumento por el que es “distorsionado”? (cf. Thompson, 1960); el instrumento
con el que los hombres elaboran relatos y explicaciones, con el que dan
sentido a su “mundo” y toman conciencia de él, ¿también les ata y traba en
lugar de liberarles? ¿Cómo puede el pensamiento ocultar aspectos de sus
condiciones reales en lugar de clarificarlas? En suma, ¿cómo podemos dar
cuenta del hecho de que “en toda ideología” los hombres (que son los
“productores de sus conciencias, ideas, etc.”) y sus circunstancias estén
mistificados, “aparezcan boca abajo como en una cámara oscura”?
Fundamentalmente, la razón se ofrece en la segunda mitad de la misma frase
de La Ideología Alemana: esencialmente porque estos hombres están
“condicionados por un desarrollo concreto de sus fuerzas productivas y de la
relación correspondiente a éstas”. Porque los hombres son descentrados, por
así decirlo, por las condiciones concretas en que viven y producen y dependen
de condiciones y circunstancias que no han he ellos y en las que entran
involuntariamente; porque los hombres no pueden, en un sentido pleno y no
contradictorio, ser los autores colectivos de sus acciones. Sus prácticas no
pueden realizar inmediatamente sus metas e intenciones. Por tanto, los
términos mediante los que los hombres “descifran el sentido” de su mundo
experimentan su situación objetiva como experiencia subjetiva y “toman
conciencia” de lo que son no les pertenecen a ellos y, en consecuencia, no
reflejarán con transparencia su situación. De ahí la determinancia fundamental
de lo que Marx llamaba las “superestructuras”; el hecho de que las prácticas de
estos dominios sean condicionadadas en otro lugar y sólo se experimenten y
realicen en la ideología.
Podemos dar este nuevo pase. Pues el trabajo social interdependiente no sólo
aparece en la esfera mercado como una serie de relaciones mutuamente
indiferentes e independientes, sino que este segundo nivel de relaciones
ideológicas da lugar a toda una serie de teorías, imágenes, representaciones y
discursos que lo llenan. Los diversos discursos sobre salarios, precios, sobre
“el individuo vendedor y el comprador”, sobre el “consumidor”, sobre el
“contrato de trabajo”; o las teorías elaboradas sobre contratos de propiedad
encerradas en el sistema legal; o bien las teorías del individualismo posesivo,
de los “derechos y deberes” individuales, de los “agentes libres”, de los
“derechos del hombre” y de la “democracia”… en suma, la esfera enormemente
compleja de los discursos legales, políticos, económicos y filosóficos que
componen el denso complejo ideológico de una sociedad capitalista moderna
está enraizada o deriva de las mismas premisas sobre las que se cimenta el
mercado y las ideas de una “sociedad de mercado” y de la “racionalidad de
mercado”. Marx aclara esta conexión en un párrafo enérgico en donde
abandona “esta ruidosa esfera en donde todo tiene lugar en la superficie y a la
vista de todos los hombres” y sigue el proceso capitalista en “la oculta morad:
de la producción”. Con respecto a la última esfera, la del intercambio, comenta
que “de hecho es un verdadero Edén de los derechos innatos de hombre. Ahí
sólo gobierna la Libertad, la Igualdad, la Propiedad y Bentham. La libertad pues
tanto los vendedores como los compradores de mercancía… son (es decir,
parecen ser) constreñidos por su propia y libre voluntad… La igualdad, , pues
cada uno entra (parece entrar) en relación con los otros como simple poseedor
de bienes… La propiedad, pues cada uno dispone (parece disponer) sólo de lo
que es suyo… Y Bentham, pues cada uno mira (parece mirar) sólo por sí
mismo… Cada uno se preocupa de sí mismo y nadie se preocupa por el resto,
y precisamente porque lo hacen así, de acuerdo con la armonía prestablecida
de las cosas o bajo los auspicios de una providencia absolutamente sagaz,
trabajan juntos para el bien de todos, la riqueza común y el interés global”
(Capital I, p. 167). (Cf. Grundrisse, p 245, para nuestras clarificaciones.) Es
crucial para la fuerza global de este pasaje irónico el que los discursos tanto de
la vida cotidiana como de la alta teoría política, económica o legal surgen no
sólo de la relación ideológica del intercambio del mercado, sino también (por
ponerlo de una manera necesaria aunque desgarbada) del modo en que a las
relaciones reales se les hace aparecer en la forma de relaciones ideológicas o
“imaginarias” del intercambio del mercado. También es crucial el que la
ideología sea ahora entendida no como lo que está escondido y oculto, sino
precisamente como lo que es más abierto, aparente y manifiesto: lo que “tiene
lugar en la superficie y a la vista de todos”. Lo que está escondido, reprimido o
fuera de la vista son sus cimientos reales. Esta es la fuente o sede de su
inconsciencia.
Puesto que toda la vida social, toda faceta de la práctica social, es mediada por
el lenguaje (concebido como un sistema de signos y representaciones,
dispuesto por códigos y articulado mediante diversos discursos), éste entra
plenamente en la práctica material y social. Su distribución y usos estarán
fundamentalmente estructurados por todas las otras relaciones de la formación
social que lo emplea. Volosinov (1973) observa que “las formas de los signos
vienen condicionadas, sobre todo, por la organización social de los
participantes implicados y también por la condición inmediata de su interación”.
Vygotsky insiste en que el lenguaje, como todos los otros fenómenos sociales,
está “sometido a todas las premisas del materialismo histórico”. Su uso
reflejará, por tanto, la estructuración clasista de las relaciones sociales
capitalistas. Será dependiente de la naturaleza de las relaciones sociales en
que se encuentra, del modo en que están socialmente organizados los que lo
usan, así como de los contextos materiales y sociales en que es empleado. Al
mismo tiempo, este “mundo de signos” y discursos tiene sus propias leyes
internas, normas, códigos y convenciones, sus propios modos y mecanismos.
El principal elemento para la articulación del lenguaje es el signo. Los signos
son el registro material del significado. Los signos comunican no sólo porque
son fenómenos sociales y forman parte de la realidad material, sino por la
función específica que tienen de refractar esa realidad de la que forman parte.
Como los lingüistas estructurales han demostrado, un signo no lleva significado
refiriéndose unilateralmente a un objeto o acontecimiento del “mundo real”. No
existe tal relación transparente y unilateral entre el signo, la cosa a que se
refiere y lo que esa cosa “significa”. Los signos comunican significado porque el
modo en que están internamente organizados dentro de un sistema lingüístico
o serie de códigos específicos articula el modo en que las cosas se relacionan
dentro del mundo social objetivo. Según Barthes (1967), “los signos están al
mismo tiempo en uno y en dos reinos flotantes”. Así, los acontecimientos y
relaciones del mundo “real” no tienen un significado natural, necesario y no
ambiguo que sea proyectado simplemente, por medio de signos, lenguaje. La
misma serie de relaciones sociales puede ser organizada de modo diferente
para tener un significado dentro de sistemas lingüísticos y culturales diferentes.
(Incluso en el nivel más simple sabemos que los esquimales tienen diferentes
términos para lo que nosotros llamamos “nieve”.) Y esta disyunción entre los
diferentes modos de clasificar un dominio de a vida social en diferentes culturas
es aún más sorprendente cuando pasamos de la denotación de objetos
naturales a la significación de relaciones sociales complejas. Determinados
dominios ideológicos estarán plenamente inscritos ideológicamente en una
formación social, completamente articulada en un campo complejo de signos
ideológicos, mientras que otros permanecerán relativamente “vacíos” y sin
desarrollar. Más que decir con respecto a tales relaciones que “tienen un
significado” debemos pensar en lenguaje como que permite que las cosas
signifiquen. Esta es la práctica social de la significación: la práctica a través de
la cual se cumplen el “trabajo” de la representación cultural e ideológica. De
ello se deduce que los modos en que los hombres llegan a entender su relación
con sus condiciones reales de existencia bajo el capitalismo están sometidos al
relé del lenguaje: y esto es lo que posibilita el desplazamiento o inflexión
ideológicos, por lo que las relaciones “reales” pueden ser culturalmente
significadas e ideológicamente inflexionadas como una serie de “relaciones
vividas imaginarias”. Como dice Volosinov, “un signo no existe simplemente
como una parte de la realidad, refleja y refracta otra realidad. Por tanto, puede
distorsionar esa realidad, o ser cierto para ella, o puede percibirla desde un
punto de vista especial, etc. Todo signo está sometido a los criterios de
evaluación ideológica… El dominio de la ideología coincide con el dominio de
los signos. Se igualan el uno al otro. La ideología está presente siempre que
hay un signo. Todo lo ideológico posee un valor semiótico” (1973). Volosinov
reconoce que en cualquier formación social esta esfera será organizada en un
complejo campo ideológico de discursos, cuyo propósito es dotar a las
relaciones sociales, que son tomadas como “inteligibles” dentro de ese campo
particular, de un tipo “definido” y cierto de inteligibilidad: “el dominio de la
imagen artística, el símbolo religioso, la fórmula científica, la norma judicial, etc.
Cada campo de creatividad ideológica tiene su propio tipo de orientación hacia
la realidad, y la refracta según sus propios modos. Cada campo ordena su
propia función especial dentro de la unidad de la vida social. Pero es su
carácter semiótico el que coloca a todos los fenómenos ideológicos bajo la
misma condición general” (Volosinov, 1973, pp. 10-11). Poulantzas ha tratado
recientemente de describir las diversas regiones en las que se organizan bajo
el capitalismo las ideologías dominantes. Argumenta que en el capitalismo, la
región jurídico-política de la ideología jugará un papel dominante; siendo su
función, en parte, esconder o “enmascarar” el papel determinante que juega el
nivel económico en este modo de producción; y, por tanto, “todo sucede como
si el centro de la ideología dominante no estuviera nunca en el lugar en donde
debe ser buscado el conocimiento real”; y añade que las otras regiones
ideológicas -las ideologías filosóficas, religiosas y morales- tenderán a “tomar
prestadas las nociones” de esa instancia (la jurídico-política), que es la que
juega el papel dominante (Poulantzas, 1965, pp. 211-12). Aceptemos o no este
resumen particular, tiene una importancia decisiva para el entendimiento de
que las ideologías no son simplemente “comprensiones falsas” de los
individuos, y que tampoco puede ser conceptualizado el individuo como 1a
fuente o autor de la ideología. (Insistimos en este punto, puesto que uno de los
recientes desarrollos de la teoría materialista, que trata de combinar el
marxismo con el psicoanálisis freudiano, considera que el momento
fundamental en que el individuo “toma posición” en la ideología se produce en
un proceso inconsciente, individual y transcultural en el momento en que,
mediante el complejo de Edipo, los hombres “entran en la cultura”.) Tan
importante como esta teorización que da cuenta del momento subjetivo de la
entrada en la ideología, es el hecho de que pone de relieve que la ideología en
cuanto práctica social forma parte del “sujeto” situándose en el complejo
específico, es decir, el campo objetivado de discursos y códigos de los que
dispone en la cultura y el lenguaje de una coyuntura histórica y particular: es lo
que C. Wright Mills llama “acciones situadas” y “vocabularios de motivos” (Mills,
1963).
Sin embargo, Marx insisitió no sólo en que los hombres viven “en la ideología”
sus relaciones con sus condiciones reales de la existencia, sino también en
que, en el modo capitalista de producción, “pensarán” esas condiciones, en
general, dentro de los límites de una ideología dominante, y que, generalmente,
ésta tenderá a ser la ideología de las clases dominantes. El hecho de que en el
capitalismo el proletariado “viva” la socialización colectiva del trabajo a través
de la forma fragmentaria del mercado y piense esta condición de su vida
material dentro de los discursos que organizan ideológicamente las prácticas
del mercado (o que en el capitalismo el proletariado “viva” la explotación del
sobrevalor en la “forma ideológica” de salarios; forma que da lugar a sus
propios discursos ideológicos: luchas por salarios, economicismo, lo que Lenin
llamaba “conciencia sindical”, “el salario de unos días por el trabajo de un día”,
etc.) no es para Marx simplemente un rasgo descriptivo del capitalismo. Estas
inflexiones ideológicas actuad como pivote del mantenimiento de las relaciones
capitalistas y su dominio continuado dentro de la formación social. Por tanto,
antes de considerar el papel que puedan tener los medios de comunicación de
masas en relación con estos procesos habremos de examinar brevemente
cómo es entendida esta noción de ideología dominante. ¿Qué relación tiene
una ideología dominante con la clase “dominante” y con la “dominada”? ¿Qué
funciones realiza para el capital y para la continuación de las relaciones
capitalistas? ¿Cuáles son los mecanismo por los que funciona esta “obra”?
Finalmente, ¿cuáles son los mecanismos reales que permiten a los medios de
comunicación de masas realizar este “trabajo ideológico”? En general, en las
democracias los medios de comunicación no son dirigidos directamente por el
estado (aunque, como en el caso de las emisoras británicas, los vínculos
pueden ser muy estrechos): no son utilizados directamente por una sección de
la “clase dominante” que hable con su propia voz; no pueden ser colonizados
directamente por uno de los partidos de la clase dominante; ningún interés
principal del capital puede acceder a los canales de comunicación sin que se
alce alguna voz en “contrario”; en su práctica y administración cotidiana, los
medios de comunicación trabajan dentro del marco de referencia de una serle
imparcial, técnico-profesional, de ideologías en funcionamiento (por ejemplo la
estructura “neutral” de los nuevos valores se aplica, como el dominio de la ley,
“igualmente” a todas las partes), si bien las configuraciones que ofrecen son
notablemente selectivas, se extraen de un repertorio extremadamente limitado
y el funcionamiento abierto de la desviación es más la excepción que la regla.
¿Cómo, entonces, son sistemáticamente penetrados e inflexionados por las
ideologías dominantes los discursos de los medios de comunicación?
Podemos referirnos aquí a algunos de los mecanismos, tomando televisión
como caso paradigmático, mediante los cuales los medios de comunicación
logran sus efectos ideológicos. Como ya hemos sugerido, los medios de
comunicación son aparatos social, económica y técnicamente organizados para
la producción de mensajes y signos ordenados en discursos complejos:
“mercancías” simbólicas. La producción de los mensajes simbólicos no puede
conseguirse sin pasar por el “relé” del lenguaje, ampliamente entendido como
los sistemas de signos portadores de significado. Como ya tratamos de
demostrar, los acontecimientos por sí mismos no pueden significar: hay que
hacerlos inteligibles; y el proceso de inteligibilidad social se compone
precisamente de las prácticas que traducen los acontecimientos “reales” (tanto
si han sido extraídos de la realidad como si son construcciones ficticias) a una
forma simbólica. Se trata del proceso al que llamamos codificación. Pero la
codificación (Hall, 1974) significa precisamente la selección de códigos que
asignan significado a los acontecimientos al colocarlos en un contexto
referencial que les atribuye significado (también los códigos ficticios realizan
este trabajo; no está limitado a los códigos de la “realidad” y el naturalismo).
Son significativamente diversos los modos en que los acontecimientos -
especialmente los acontecimientos problemáticos o perturbadores que violan
nuestras expectativas normales y de sentido común, o van contra la tendencia
dada de las cosas o amenazan de algún modo el statu quo- pueden ser
codificados. La selección de los códigos, de los que son promovidos en los
diferentes dominios y parecen encerrar las explicaciones “naturales” que
aceptaría la mayor parte de los miembros de la sociedad (es decir, los que
parecen encarnar naturalmente la “racionalidad” de nuestra sociedad
particular), arroja consensualmente estos acontecimientos problemáticos a
algún lugar interno al repertorio de las ideologías dominantes. Debemos
recordar que hay una pluralidad de discursos dominantes, no uno solo: que no
son deliberadamente seleccionados por los codificadores con el fin de
“reproducir los acontecimientos dentro del horizonte de la ideología dominante”,
sino que constituyen el campo de significados dentro del cual deben elegir.
Precisamente porque estos significados han llegado a ser “universalizados y
naturalizados”, parecen las únicas formas disponibles de inteligibilidad; han
llegado a sedimentarse como “los únicos razonamientos universalmente
válidos” (Marx, 1965). Las premisas y precondiciones que sostienen sus
racionalidades han llegado a ser invisibles mediante el proceso de
enmascaramiento ideológico y de “dar-por-supuesto” que describimos antes.
Parecen ser, incluso para los que los emplean y manipulan con propósitos de
codificación, simplemente la “suma de lo que ya sabemos”. El que contienen
premisas, que estas premisas encierran las definiciones dominantes de la
situación y representan o refractan las estructuras existentes de poder, riqueza
y dominación, y que, por tanto, estructuran todo acontecimiento significante,
acentuándolo de un modo que reproduce las estructuras ideológicas dadas,
constituye un proceso que ha llegado a ser inconsciente incluso para los
codificadores. Frecuentemente es enmascarado por la intervención de las
ideologías profesionales: las rutinas prácticas y técnicas (valores nuevos,
sensaciones nuevas, presentación vívida, “cuadros excitantes”, buenas
historias, noticias calientes, etc.), que, en el nivel fenoménico, estructuran las
prácticas cotidianas de la codificación y sitúan al codificador dentro de la
categoría de una neutralidad profesional y técnica que lo distancia
efectivamente del contenido ideológico del material que está manejando y de
las inflexiones ideológicas de los códigos que está empleando. Por tanto,
aunque los acontecimientos no sean sistemáticamente codificados en una sola
dirección, se extraerán, por sistema, de un limitadísimo repertorio ideológico o
representativo; y ese repertorio (aunque requiera en cada caso un “trabajo”
ideológico que lleve a los acontecimientos nuevos dentro de su horizonte)
poseerá la tendencia global a que las cosas “signifiquen” dentro de la esfera de
la ideología dominante. Además, puesto que el codificador quiere reforzar el
alcance explicatorio, la credibilidad y efectividad del “sentido” que está tratando
de dar a los acontecimientos, empleará todo el repertorio de codificaciones
(visual, verbal, presentaciones, ejecución), con el fin de “ganar el
consentimiento” del público; y no por su propio modo “desviado” de interpretar
los acontecimientos, sino por la legitimidad de la gama o límites dentro de los
cuales están funcionando sus codificaciones. Estos “puntos de identificación”
dan credibilidad y fuerza a la lectura promovida de los acontecimientos:
sostienen sus preferencias con la acentuación del campo ideológico (Volosinov
diría que explotan el flujo ideológico del signo); apuntan a “obtener el
consentimiento” del público, y, por tanto, estructuran la manera en que el
receptor de esos signos decodificará el mensaje. Hemos tratado de demostrar
en otro lugar (Hall, 1974; Morley, 1974) que los públicos, cuyas
decodificaciones reflejarán inevitablemente sus propias condiciones sociales y
materiales, no decodificarán necesariamente los acontecimientos dentro de las
mismas estructuras ideológicas en que han sido codificados. Pero la intención
global de la “comunicación efectiva” debe ser la de “obtener el consentimiento”
del público para la lectura promocionada, y, por tanto, llevarle a que la
decodifique dentro del marco de referencia hegemónico. Incluso aunque no se
hagan las decodificaciones, mediante una “transmisión perfecta”, en el marco
de referencia hegemónico, de entre la gran gama de decodificaciones tenderán
a producir “negociaciones” que caigan dentro de los códigos dominantes -
dándoles una inflexión más situacional- en lugar de decodificarse
sistemáticamente de un modo contra-hegemónico. Las decodificaciones
“negociadas” -que permiten que se hagan amplias “excepciones” en los
términos del modo en que el público se sitúa dentro del campo hegemónico de
las ideologías, pero que legitiman también el alcance más amplio, la referencia
completa, la mayor coherencia global de las codificaciones dominantes- reflejan
y toman como base a lo que llamamos antes la complementariedad
estructurada de las clases. Es decir, las áreas negociables dentro de los
códigos hegemónicos suministran precisamente los espacios necesarios del
discurso en donde se insertan las clases subordinadas. Dado que los medios
de comunicación no sólo están amplia y difusamente distribuidos a través de
las clases, sino que las llevan dentro de la parrilla de la comunicación social y
deben reproducir continuamente su propia legitimidad popular para dirigir ese
espacio ideológico, esas inflexiones y espacios negociados, que les permite a
las lecturas subordinadas ser contenidas dentro de los sintagmas ideológicos
más amplios de los códigos dominantes, son absolutamente fundamentales
para la legitimidad de los medios de comunicación y dan a esa legitimidad una
base popular. La construcción de una base de “consenso” para la obra de los
medios de comunicación es, en parte, el modo en que se realiza ese trabajo de
legitimación.
La legitimación de este proceso de construcción y deconstrucción ideológica
que estructura los procesos de codificación y decodificación es apuntalada por
la posición de los de los medios de comunicación, como aparato ideológico del
estado. Como ya sugerimos, por regla general éstos no son poseídos y
organizados directamente por el estado en nuestros tipos de sociedad. Pero
hay un sentido crucial (que debe ser el que le permitió a Althusser llamarlos
“aparatos ideológicos del estado”) en el que puede decirse que, si bien
indirectamente, los medios de comunicación están relacionados con las
alianzas de la clase dominante; de ahí que tengan algunas de las
características -la “relativa autonomía”- de los aparatos de estado. La
radiodifusión, por ejemplo, al igual que la ley y las burocracias
gubernamentales, funciona bajo el epígrafe de la “separación de poderes”. No
sólo no puede ser dirigido directamente por una sola clase o partido de clase,
sino que ese mando directo y explícito (como su inverso, una inclinación
deliberada, o “desviación”, hacia ellos por parte de los comunicadores)
destruiría inmediatamente la base de la legitimidad, pues revelaría una
complicidad abierta con el poder de la clase dominante. Por tanto, los medios
de comunicación, al igual que otros complejos estatales del actual estadio del
desarrollo capitalista, dependen absolutamente, en un sentido estrecho, de su
“relativa autonomía” frente al poder de la clase dominante. Estas son las
prácticas encerradas en los principios operacionales de la radiodifusión:
“objetividad”, “neutralidad”, “imparcialidad” y “equilibrio”; o más bien esas son
las prácticas por las que se realiza la “relativa neutralidad” de la radiodifusión
(Hall, 1972). El equilibrio, por ejemplo, asegura que haya siempre un diálogo
bilateral, y, por tanto, que haya siempre más de una definición de la situación.
En la esfera política, la radiodifusión reproduce con notable exactitud las
formas de la democracia parlamentaria y del “debate democrático” sobre las
que se constituyen otras partes del sistema, como por ejemplo los aparatos
políticos. En estas condiciones, el “trabajo” ideológico de los medios de
comunicación no depende, por tanto, de un modo regular y rutinario, de la
subversión del discurso para el apoyo directo de una u otra de las posiciones
principales dentro de las ideologías dominantes: depende del trazado Y
apuntalamiento del campo ideológico estructurado en el que actúan las
posiciones y sobre el que, por así decirlo, “se sostienen”. Pues aunque los
partidos políticos más importantes se encuentran en grave desacuerdo con
respecto a uno u otro aspecto de la política, hay acuerdos fundamentales que
engloban a las posiciones opuestas en una unidad compleja: todas las
presuposiciones, límites de las disputas, términos de referencia, etc., que los
elementos de dentro del sistema deben compartir para poder “estar en
desacuerdo”. Es en esta “unidad” subyacente donde los medios se aseguran y
reproducen; y en este sentido es como ha de ser entendida la inflexión
ideológica de los discursos de los medios de comunicación; no como
“partidaria”, sino como fundamentalmente orientada “dentro del modo de
realidad del estado”. Para ello es crítico el papel de formación y organización
del consenso, que es necesariamente una entidad compleja. Lo que constituye
esto no simplemente como un campo, como un campo que es “estructurado en
dominancia”, es el modo en que operan sus límites para dominar ciertos tipos
de interpretación “internas” y “externas” y efectuar sus sistemáticas inclusiones
(por ejemplo, aquellas “definiciones de la situación” que regularmente, por
necesidad y legítimamente, “tienen acceso” a la estructuración de cualquier
tema controvertido) y exclusiones (por ejemplo, aquellos grupos,
interpretaciones, posiciones y aspectos de la realidad del sistema que
regularmente “no son admitidos” por “extremistas”, “irracionales”, “sin
significado”, “utópicos”, “imprácticos”, etc.) (cf. a Hall sobre la estructuración de
los temas, 1975. Cf. también a Connell, Curti y Hall, 1976).
Referencias
ALTHUSSER, L., 1965: For Marx. New Left Books.
- 1971: “Ideology and the State”. En Lenin & Philosophy and Other Essays.
New Left Books.
CONNELL, L; CURTI, L., y HALL, S., 1976: “The ‘Unity’ of Current Affairs TV”,
WPCS 9, Centre for Contemporary Cultural Studies. Birmingham.
ENGELS, F., 1950a: “Labour in the Transition From Ape to Man”. En Marx y
Engels, Selected Works, vol. 2, Lawrence & Wishart.
- 1974b: “Encoding and Decoding in the TV, Discourse”. Culture and Education,
Consejo de Europa, Estrasburgo. [hay trad. en español en
http://www.nombrefalso.com.ar ]
LENIN, V. I., 1933: The State and Revolution. Little Lenin Library, Lawrence &
Wishart.
MILLS, C. WRIGHT, 1963: Power, Politics & People. Oxford University Press.
POULANTZAS, N., 1965: Political Power and Social Classes. New Left Books y
Sheed & Ward.
THOMPSON, E. P., 1960: “Review of The Long Revolution”, New Left Review,
9 (10).
- 1973: “Base and Superstructure”. New Left Review, 85. [hay trad. en español
en Williams, R. Marxismo y literatura, Península, Barcelona, 1980].
Nota biográfica
Jane M. Russell
Introducción
Este tipo de fenómenos están influyendo en la estructura general del sistema de comunicación
científica, transformando las funciones y los papeles de diferentes actores. Por esto, los modelos
tradicionales de edición y comunicación académica están sujetos permanentemente a nuevos
análisis en el contexto del panorama actual definido por las tecnologías de la información. La
dirección que tomarán estos cambios durante los primeros decenios del nuevo siglo son materia
de tentadoras especulaciones.
Las publicaciones son fundamentales para el campo de la comunicación formal de la ciencia. Las
publicaciones científicas nacieron a comienzos del siglo XVII, cuando dejó de ser práctico para
los miembros de las sociedades científicas eruditas comunicar sus trabajos mediante cartas
privadas. La calidad del trabajo impreso estaba garantizada por el proceso de revisión de los
pares. Las publicaciones formales también eran una manera de conservar un archivo de los
resultados y observaciones. A lo largo de los próximos tres siglos se construyó una enorme
industria internacional de publicaciones académicas para facilitar la comunicación entre
investigadores, estudiosos y académicos (Oppenheim, Greenhalgh y Rowland 2000).
Muchos expertos creen que las publicaciones académicas, de las cuales las dedicadas a la
investigación son el principal vehículo, se encuentran actualmente en crisis ante la aparición de
nuevas estructuras de comunicación. Si bien la industria de publicaciones académicas recibe su
impulso de la necesidad de los científicos y académicos de "publicar o perecer", el control del
sistema está cada vez más en manos de las empresas editoriales. En los últimos años, las
bibliotecas académicas se han visto obligadas a disminuir sus suscripciones a publicaciones aún
cuando la producción de información académica crece exponencialmente. Por un lado, esto se
debe a la disminución de los presupuestos de biblioteca y, por otro, al aumento del número de
publicaciones especializadas y al alza de los precios. Por consiguiente, hay menos publicaciones
disponibles a través de los servicios de las bibliotecas a la comunidad académica en todo el
mundo. Muchos bibliotecarios y especialistas de la información ven en el aumento de la
comercialización de las publicaciones académicas una amenaza al libre flujo de información
académica, esencia misma de la investigación y la creatividad académicas, que ha regido el
sistema de comunicación académica durante tanto tiempo (Create Change 2000).
El hecho de que los editores tengan los derechos exclusivos de los artículos que aparecen en sus
publicaciones provoca a menudo descontento en la comunidad académica. Los términos y
condiciones restrictivas impuestas por ciertos editores a los autores que desean volver a publicar
su propio material o a utilizarlo con fines didácticos irrita a los autores y a las universidades por
igual. Los altos costos de readquisición que exigen las grandes editoriales por materiales
generados como resultado de una costosa investigación, financiada a menudo por las propias
universidades, ha inclinado a autores y administradores hacia la idea de la autopublicación
(Anon 2000). La publicación electrónica está siendo adoptada como una alternativa de los
autores que no pueden o no desean satisfacer sus demandas de producción mediante
publicaciones tradicionales.
Numerosos académicos no ven razón alguna para que su comunicación siga dependiendo casi
totalmente de la industria editorial. Sin embargo, se comprende que es probable que los sistemas
alternativos de publicación no tengan éxito si no existen competencias profesionales editoriales.
El hecho de que la tecnología de la información haya dotado de competencias informáticas a los
académicos ha disminuido la brecha entre las habilidades del autor y el editor (Openheim,
Greenhalgh y Rowland 2000). Los programas cada vez más potentes y de fácil empleo, además
del apoyo institucional especializado en publicaciones y en competencias informáticas, ha
brindado a muchos científicos las condiciones necesarias para pensar en publicar sus propios
trabajos.
Otros autores han sostenido que los académicos de todas las disciplinas podrían "publicar" sus
artículos en los ficheros abiertos de un "Sistema de Comunicación Académica", una red
electrónica donde las universidades volverían a tomar el control sobre quién y qué se "publica".
Los comités editoriales con miembros nominados y elegidos por las instituciones participantes
calificarían cada artículo, según su contribución al campo especializado, antes de que entrara en
el sistema. Los lectores tendrían la posibilidad de dejar comentarios personales sobre diferentes
aspectos del contenido del artículo, como sugerencias para incluir referencias bibliográficas
adicionales, refutación de los argumentos, errores en los datos, y otros. Después de que el
artículo haya permanecido en el sistema durante un determinado período (se ha hablado de seis
meses) se podría preparar una versión modificada cuya aprobación final dependería de los
comités editoriales. Entre las ventajas que esto implica está el dinero ahorrado en costosas
suscripciones a las publicaciones, dinero que se puede destinar a otros fines. Cuando la
biblioteca ya no tiene que procesar y guardar cada vez más publicaciones, también se ahorrará el
tiempo y el espacio de estanterías (Rogers y Hurt 1990).
Se entiende que los derechos de autor y la garantía de calidad sean dos de los principales
aspectos que preocupan a la comunidad académica en relación a la proliferación de
publicaciones electrónicas. La mayoría de las publicaciones electrónicas actuales son las
contrapartes electrónicas de sus versiones impresas, se cobra por acceder a ellas y se controlan
mediante contraseñas electrónicas. Los derechos de autor siguen en manos de las editoriales
comerciales y la aceptación o rechazo de los manuscritos depende de los árbitros elegidos por los
editores. Puede que el medio haya cambiado, pero las fuerzas del mercado no dejan de ejercer un
control importante sobre el sistema formal de comunicación académica.
Sin embargo, esto no es más que un aspecto de la historia. Los científicos en ciertos dominios
sumamente dinámicos, donde las revistas de este tipo han dejado de ser relevantes para las
investigaciones actuales, se han beneficiado de las facilidades ofrecidas por las nuevas
tecnologías para convertirse en pioneros de novedosas prácticas de comunicación. Éstas suelen
combinar elementos formales e informales, con lo cual no sólo se modifica la "faz" de las
prácticas actuales de las comunicaciones científicas, sino también la manera en que se lleva a
cabo la investigación científica. Sin embargo, estos cambios fundamentales no se han producido
de la noche a la mañana. Son más bien el resultado progresivo de varios decenios de innovación
y desarrollo de la comunicación mediatizada por medio del ordenador, que al principio facilitó
las estructuras de información existentes y luego llevó a cabo la reforma del sistema de
comunicación académica.
El cambio de patrones de las comunicaciones científicas
A lo largo de los últimos cuatro decenios, las innovaciones tecnológicas han transformado la
manera en que se procesa, se guarda, se accede, se comparte y se analiza la información. Hacia
1975, ya existía la producción electrónica de publicaciones y los servicios en línea de acceso a
información. Sin embargo, el flujo de información científica y técnica había cambiado poco con
los centros de información y de datos formando parte integral del sistema de comunicación
científica. El final del siglo pasado fue testigo del crecimiento de los ordenadores y las
telecomunicaciones en la transferencia de información científica en coexistendo con los medios
más tradicionales de comunicación, como los revistas y libros. La investigación científica era
cada vez más de colaboración y trascendía las fronteras institucionales, geográficas y políticas.
Esta situación condujo a los científicos a exigir modos más frecuentes, dinámicos y flexibles de
intercambio de información con sus colegas. Proliferó la comunicación informal en las
conferencias, los congresos y otras reuniones científicas y técnicas, lo cual testimonia de la
permanente necesidad del contacto personal. La aparición de redes especializadas de
telecomunicación a partir de los años setenta, de Internet a comienzos de los años ochenta, y de
la World Wide Web (www) a comienzos de los años noventa, proporcionó a los científicos la
potenciación en la información que habían estado buscando.
Se podría argumentar que sólo se puede definir una pequeña parte de la información en Internet
como académica, y que es más probable que ésta sea más fácil de obtener que la información no
académica. Los científicos, al igual que todos los profesionales, requieren diferentes tipos de
información para llevar a cabo sus tareas diarias, tales como detalles de vuelos y hoteles para
planificar conferencias, información sobre los programas de las conferencias e información sobre
los productos, como equipos de laboratorio, mobiliario de oficina o agentes reactivos. También
tienen que identificar y contactar con especialistas en sus propios campos y otros relacionados
para obtener información, consejos y para buscar participación en conferencias. Este último tipo
de información solía estar disponible sólo a través del boca a boca entre los profesionales.
Actualmente, se puede encontrar fácilmente en páginas web personales, institucionales o de
sociedades científicas.
El desarrollo técnico, que ha penetrado una amplia gama de campos de investigación suele ser
dirigido por científicos en campos sumamente activos y bien financiados. Las innovaciones se
suelen producir cuando los sistemas tradicionales de impresión no pueden mantenerse al día con
las demandas de comunicación de campos en rápido desarrollo. Uno de estos casos es la fusión
fría, donde los medios de comunicación tradicionales no tardaron en revelarse inadecuados para
divulgar los rápidos cambios que se producían en este tema de investigación "caliente" a finales
de los años ochenta. Un boletín electrónico creado especialmente, junto con mensajes
individuales de correo electrónico se convirtieron en los principales métodos para intercambiar
información durante los escasos meses en que el tema fue el centro del debate científico. Cuando
los artículos fueron publicados en las revistas académicas, la mayoría de los miembros de la
comunidad científica ya había decidido que no merecía la pena seguir indagando en el tema
(Meadows, 1991).
Los preprints ya se han convertido en el principal método para informar sobre nuevos hallazgos
para los investigadores en campos como las matemáticas, la física, la informática y la lingüística.
Al cabo de un año de haberse iniciado el servicio de preprints en la física teórica de alta energía
a comienzos de los años noventa, se convirtió en el procedimiento estándar para divulgar
información en este campo. Estos ficheros de impresión electrónica están completamente
automatizados, incluyendo el proceso de envío de los manuscritos. Se puede acceder a ellos vía
correo electrónico, los ftp. anónimos y la World Wide Web. Se ha acelerado la comunicación de
las investigaciones a la vez que se evita el despilfarro que produce la distribución impresa.
Además, el sistema sirve como un terreno virtual de reunión para los científicos que de otra
manera no habrían podido tomar contacto unos con otros. A pesar de que la física de alta energía
ya acostumbraba a intercambiar impresiones preliminares en soporte papel que ya habían
reemplazado a las revistas como principal fuente de comunicación, esto no se considera un
requisito para que otras disciplinas adopten un archivo electrónico de preprints (Ginsparg 1996).
Como hemos visto, el empleo de la tecnología interactiva ha variado enormemente entre una
disciplina y otra y entre diferentes campos e instituciones (North Carolina Board of Science y
Technology/National Research Council 1999). Estas diferencias se pueden explicar en parte por
las diferencias en el empleo de la tecnología de la información y por la voluntad de colaborar y
las formas de colaboración escogidas. Las bases de datos, las bibliotecas y el acceso a ellas son
esenciales para disciplinas dependientes de los datos, mientras que la capacidad para desplegar o
visualizar subconjuntos de datos suele tener una importancia primordial para otros. Los
algoritmos y los programas también son recursos clave para disciplinas que dependen de
modelos (National Research Council. Committee towards a National Collaboratory: Establishing
the User-Developer Partnership 1993). En algunos campos, la utilización de tecnologías ha
insuflado nueva vida a viejos temas de investigación. Este es el caso de la geometría
bidimensional, que actualmente desempeña un importante papel como base para la visualización
en relación con el modelaje y la informática científica. Asimismo (⇐ add) se ha puesto un
creciente énfasis en las matemáticas para algoritmos en sistemas y programas de cómputo
(Fenstad 1999).
Sin embargo, tal vez los cambios más importantes que produce la enorme flexibilidad y las
amplias capacidades de la comunicación electrónica son aquellos que influyen en las prácticas
establecidas en la investigación. Nuevas maneras de llevar a cabo actividades fundamentales para
el trabajo científico, como la colaboración en la ciencia, están experimentando cambios
paradigmáticos. Se empiezan a constituir nuevos campos en la intersección de disciplinas
establecidas como resultado de la rápida penetración de la tecnología de la información en todos
los campos del trabajo científico.
Sin embargo, los colaboratorios no deberían ser la prerrogativa exclusiva de los países
científicamente avanzados. Su potencial para permitir a los países periféricos colaborar en
investigaciones de punta es un tema vital para aumentar la participación de las pequeñas
comunidades científicas en la investigación a nivel mundial. Una de las principales preguntas en
relación a la rápida difusión de la tecnología de la información es hasta qué punto esto desdibuja
la diferenciación de la ciencia entre centro y periferia, especialmente con respecto a la presencia
internacional de científicos y de investigaciones científicas del mundo menos desarrollado.
La reciente publicación por parte de científicos del estado de Sao Paulo de la primera secuencia
de un patógeno vegetal demuestra que los países periféricos pueden competir en proyectos
científicos de punta (Collins 2000). Hay dos iniciativas complementarias que contribuyeron a
situar a Brasil sólidamente en el mapa de la ciencia mundial. Una política iniciada en los años
sesenta que garantizaba por ley una participación fija de todos los impuestos estatales para
FAPESP, el organismo estatal para la ciencia y la tecnología, proporcionó la financiación que
requería un proyecto tan ambicioso. Más tarde, la creación de un instituto de investigación
"virtual" que vinculaba los 35 laboratorios que trabajaban en la secuenciación en todo el estado
de Sao Paulo proporcionó la compleja infraestructura física, técnica y humana necesaria para
realizar el trabajo. Idealmente, otros países "pequeños", en el plano científico, podrían seguir el
ejemplo. Sin embargo, en la práctica, las condiciones suelen distar mucho de ser las adecuadas
para adoptar estrategias similares de potenciación de las empresas científicas nacionales o
estatales.
En principio, el cambio a la publicación electrónica trae consigo importantes beneficios para los
científicos en los países menos desarrollados debido al hecho de que, por primera vez, pueden
relacionarse informalmente con investigadores en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, la
imagen idealizada de un cambio paradigmático en la comunicación científica internacional,
donde los científicos de los países menos desarrollados desempeñan un papel cada vez más
importante en la ciencia internacional, ha sido seriamente impugnado por especialistas del mundo
en desarrollo que sostienen que la sola tecnología no modificará su posición periférica. Muchos
creen que la mayoría de los países menos desarrollados no participan en la revolución de las
comunicaciones y que se está agregando una "pobreza de información" a las numerosas brechas
que separan a los países menos desarrollados de los países industrializados. Los países menos
desarrollados sufren un gran retraso con respecto los países industrializados en todos los aspectos
de la producción de conocimientos (Arunachalam 1999).
Nadie negaría que el acceso a los ordenadores está aumentando en casi todos los países. A pesar
de que la política general de la mayoría de las instituciones de investigación consiste en
proporcionar ordenadores en red a todos los investigadores, su uso varía con las características
sociales económicas y normativas de cada país (Meadows 1991). En estas circunstancias, los
países menos desarrollados parecen sufrir una clara desventaja.
Los costes de la tecnología por sí solos podrían ser un obstáculo para las instituciones que
precisamente más podrían beneficiarse de la investigación facilitada por la informática. Se corre
el riesgo de que los instrumentos de alta tecnología aumenten el retraso de los países en
desarrollo en relación a los países más industrializados en la mayoría de las investigaciones
llevadas a cabo en la actualidad. Sin una infraestructura de telecomunicaciones y de conectividad
equitativa, no se pueden explotar los recursos intelectuales de los especialistas del mundo menos
desarrollado mediante colaboratorios de investigación potenciados por la informática. Una
posible solución a este problema es una asociación entre el sector comercial y el gobierno para
proporcionar la infraestructura de comunicación tan necesaria a los países en desarrollo. El fondo
del asunto es definir el costo de la conectividad y un ancho de banda adecuado (North Carolina
Board of Science and Technology/National Research Council 1999).
La ausencia de una infraestructura física de comunicaciones adecuada para apoyar los datos de
los trabajos en la red que limitan el acceso a las redes mundiales (Sadowsky 1993) podría ser el
principal obstáculo a la ampliación de las comunicaciones mediatizadas por la informática en los
países en desarrollo, pero no es el único. Otras limitaciones se deben a una carencia de personal
técnico especializado y a una falta de conciencia pública y de los gobiernos acerca de los
beneficios de las tecnologías de la información y de la conectividad. Esto último es
especialmente verdad en los países más pobres, donde las preocupaciones básicas se centran en
la salud y en asuntos relacionados con la alimentación, y donde la tecnología de la información
es vista como un artículo de lujo de escasa relevancia o uso práctico. También se menciona con
frecuencia un entorno normativo y organizativo inadecuado tanto en el sector gubernamental
como institucional para fomentar la implementación rápida, eficaz y sin fisuras de un entorno
para la comunicación de la información (Russell 2000).
No todos los obstáculos para el uso óptimo de las nuevas tecnologías electrónicas de la
comunicación están relacionadas con los equipos. Los aspectos y temas sociales, culturales y
políticos de los países menos desarrollados también influyen en la introducción exitosa de nuevas
tecnologías de la comunicación. El hecho de que la mayoría de los programas informáticos y
fuentes de información a los que se puede acceder mediante los ordenadores se transmiten no
sólo en una lengua extranjera sino también dentro de un ambiente cultural poco familiar, es una
limitación importante para los usuarios en la mayoría de sociedades en desarrollo. La mayor parte
de la información actualmente disponible en Internet está en inglés, y proviene de las
universidades del Norte, a menudo de Estados Unidos. Se ha manifestado la inquietud de que,
como resultado de esta transferencia de información, podrían surgir un posible imperialismo del
conocimiento y una dominación cultural.
Sin embargo, debido a las grandes diferencias en recursos y capacidades existentes entre los
países menos desarrollados, no conviene generalizar demasiado acerca de la actividad científica
en estos países como conjunto. También se observan diferentes grados de condición periférica
entre diferentes sectores en el interior de los propios países en desarrollo. La concentración de los
principales establecimientos de educación superior y de investigación en las principales ciudades
señala que la comunicación y las instalaciones telemáticas también están centralizadas. Esto crea
una brecha de la información en el interior de los propios países en desarrollo, entre los
científicos que trabajan en las grandes zonas urbanas y quienes trabajan en las regiones rurales,
prácticamente aislados del entorno electrónico.
Esta creciente demarcación de los científicos de los países menos desarrollados, básicamente
entre dos grupos (aquellos que tienen acceso eficaz a las tecnologías de la información, la
llamada élite de la información, y aquellos con escaso o nulo acceso), tiene evidentes
consecuencias para sus perspectivas de integración en la comunidad científica mundial. Hay
estudios que demuestran que los científicos más prestigiosos y favorecidos en los países menos
desarrollados normalmente son aquellos que trabajan en las ciencias básicas, sobre todo en los
grandes laboratorios centralizados de las grandes ciudades. Estos científicos probablemente
tendrán algo en común y mantendrán un contacto más estrecho con el centro que los
investigadores que estudian problemas sólo de interés local. Un estudio reciente sobre el uso de
la tecnología de la información entre los científicos mexicanos arrojó como resultado que más
del 80% de los físicos y biólogos encuestados que trabajaban en la capital del país tenían buen
acceso a correo electrónico y a los servicios de Internet (Ford y Rosas Gutiérrez 1999). Resulta
interesante que a este acceso correspondía un mayor índice de publicaciones de este sector en las
revistas internacionales. Por otro lado, los científicos aplicados, muchos de los cuales trabajan en
el campo, lejos de los principales centros de investigación, normalmente disfrutan de un menor
acceso a los recursos, entre ellos, las tecnologías de la información. En los países menos
desarrollados coexisten lado a lado usuarios del "Primer mundo" y el "Tercer mundo".
Es indudable que los científicos y las instituciones de los países menos desarrollados con acceso
a complejas tecnologías de la información y telecomunicaciones se encuentran en mejor posición
que sus colegas menos privilegiados para desempeñar un papel importante en la comunidad
científica mundial. Es menos probable que la información en el entorno electrónico permanezca
dentro de un pequeño grupo de investigadores, lo cual elimina el elemento de "acceso cerrado"
propio de los medios de transferencia de información más convencionales. Mientras que en el
modelo tradicional de la comunicación científica la pertenencia a los centros colegios invisibles
se limitaba a un pequeño grupo de investigadores, en el entorno electrónico actual es habitual
enviar correos electrónicos o mensajes del servidor de la lista a otros colegas, ampliando así el
círculo de receptores potenciales (Weller 1996).
Aún así, la tecnología de la información por sí sola no es capaz de romper las barreras sociales y
culturales que, según muchos, impiden a los científicos en los países menos desarrollados asumir
su justo lugar en la comunidad internacional de académicos. Sólo se puede eliminar la
subjetividad en las evaluaciones científicas cuando aquellas personas responsables de la toma de
decisiones entiendan que el origen geográfico de los trabajos científicos tiene escasa incidencia
en su calidad.
Las comunidades científicas de los países menos desarrollados son muy conscientes de la
urgente necesidad de mejorar su uso y sus capacidades informáticas y telemáticas. Al ejercer
presión sobre sus gobiernos y al buscar la ayuda de las organizaciones internacionales para
mejorar su infraestructura de tecnología de la información, se espera detener la tendencia al
aumento de la "brecha digital". Hasta que esto no suceda, muchos científicos de países en
desarrollo seguirán dependiendo de colaboradores y colegas altruistas que disponen de un mejor
acceso a todo tipo de recursos de información esenciales para seguir siendo competitivos en el
entorno de la investigación científica rápidamente cambiante de nuestros días.
Inquietudes actuales y esperanzas futuras
Los tres decenios que han transcurrido desde que Diana Crane escribiera su artículo sobre la
naturaleza de la comunicación y la influencia científica (Crane 1970) han sido testigos de una
reestructuración radical de la comunicación académica. Se han actualizado los modelos para
reflejar los cambios que han traído consigo las emergentes tecnologías de la información, sobre
todo en campos como la ciencia espacial, la física de alta energía y la investigación del genoma
humano. Quizá el resultado más importante de la incursión de la tecnología de la información en
el trabajo científico no ha sido la velocidad, la flexibilidad y el alcance de la comunicación
mediatizada por medio de los ordenadores, sino las consecuencias que estos atributos han tenido
para la práctica de la ciencia. Actualmente surgen nuevas y fundamentales preguntas acerca de la
producción, transferencia y acceso a la información académica que no se formulaban antes de la
revolución electrónica. Los derechos de autor y la conservación de los documentos científicos
son temas discutidos con frecuencia. Los ficheros de la ciencia deben ser preservados de forma
indefinida y, sin embargo, a diferencia de sus contrapartes impresas, los documentos electrónicos
no son textos estáticos ni perennes. ¿Quién será el propietario de estos "frágiles" documentos y
asumirá la responsabilidad de conservar la herencia científica del mundo en formato digital?
Además, a medida que las publicaciones se desplazan desde un paradigma basado en la imprenta
a un formato electrónico, es necesario seguir investigando sobre la naturaleza fundamental de la
comunicación y la colaboración científica. La mayor flexibilidad y la penetración mundial y del
discurso mediatizado por los ordenadores está teniendo profundas consecuencias para las
asociaciones extrainstitucionales, especialmente más alla de las fronteras políticas, culturales y
geográficas. Con el fin de comprender el proceso de compartir información de todo tipo sin
fisuras, independientemente de la situación geográfica, es necesario tener un conocimiento más
profundo del propio proceso de colaboración. Por consiguiente, existe una inquietud por los
aspectos sociológicos de la comunicación de la investigación interdisciplinaria, sobre todo
cuando ésta se ve restringida a remotas interacciones. La colaboración, al igual que la
comunicación, es intrínsecamente un proceso social que indica que participarán numerosos
factores (Katz y Martin 1997).
Los cambios en la estructura de los sistemas de comunicación científica, al menos por ahora,
serán probablemente más evolucionarios que revolucionarios, y los nuevos sistemas de
comunicación coexistirán con el más tradicional. Lo que ahora anticipamos como la dirección
que seguirá la comunicación académica tal vez sea una tendencia pasajera, y puede que seamos
incapaces de predecir el verdadero futuro (Hurd 1996). Sin embargo, hay dos cosas
medianamente claras. En primer lugar, nos encontramos en un período crítico de transición para
la comunicación académica cuando se están sentando las bases para el futuro, aunque sea difícil
predecir exactamente qué nos depara ese futuro. Y, en segundo lugar, el destino universal de la
comunicación académica siempre estará vinculado al progreso y a la difusión de las tecnologías
de la información.
Traducido del inglés
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UCE Ciencia. Revista de postgrado. Vol. 9(2), 2021
RESUMEN ABSTRACT
La publicación de un resultado científico es esencial, importe Scientific article structure. Writing and publishing a scientific
y necesaria porque la investigación culmina cuando su result is essential, important and necessary because an
resultado se pone al servicio de la ciencia y la comunidad investigation ends when its result is at the disposal of the
científica. En ocasiones los revisores de los artículos science and the scientific community. Sometimes, referees
científicos identifican algunas insuficiencias relacionadas con of scientific articles identify some insufficiencies in structure
su estructura y los elementos que componen sus acápites. of articles and the elements of their sections. This is a
Esto justifica la necesidad de presentar un documento que powerful reason for presenting this document to improve
permita potenciar la redacción y publicación de los hallazgos the writing of scientific-teaching findings to be published. As
en las investigaciones docente-investigativas. Como a result of a deep bibliographical review, the essential
resultado de una revisión bibliográfica exhaustiva se logró elements of the structure of the scientific articles and their
analizar y sintetizar los elementos esenciales que conforman sections were analyzed and synthesized, concluding that a
la estructura del artículo científico y sus acápites y se careful study of this document can promote writing skill
concluye que el estudio cuidadoso de este documento development to publish scientific-teaching findings of new
puede potenciar el desarrollo de las habilidades y destrezas professors and investigators, without underestimating that
para redactar y publicar los resultados docente- it can be equally useful to those who has already defended
investigativos de investigadores y profesores principiantes, the results of their scientific research works.
sin desestimar que puede resultar igualmente útil para
KEYWORDS: Accuracy; Briefness; Clarity; Skills
docentes e investigadores con resultados científicos ya
defendidos.
PALABRAS CLAVE: Brevedad; Claridad; Destrezas;
Habilidades; Precisión
INTRODUCCIÓN
Publicar un resultado científico resulta más complicado de lo imaginado, sobre todo por los investigadores noveles.
La publicación del resultado científico se logra cuando se domina una serie de principios, normas y regulaciones
según el tipo de publicación y las normas establecidas por la editorial, (Balmaseda-Neyra, 2011, 2013a, 2013b);
(Cabrera-Campos, 2013) y (Pérez-Pino, 2018).
En el arbitraje realizado a los trabajos que se envían a editoriales y eventos (revistas, congresos, simposios, talleres,
etc.), se observan algunas insuficiencias en la redacción que limitan la publicación tan deseada por los investigadores
y la comunidad científica. Estas dificultades son producto, principalmente, a la falta de conocimiento de cómo
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redactar el documento en cuanto a: pautas, procedimientos, estructuras, características, principios, normas, uso del
lenguaje científico, entre otros aspectos.
El éxito de la publicación se logra cuando se posee conocimiento de las estructuras convencionales de los
documentos científicos, según los estándares previstos para la divulgación científica a nivel mundial. Solo así se logra
que el documento tenga la uniformidad requerida para que los receptores comprendan a plenitud los objetivos, las
hipótesis, los diseños de experimentación y los resultados de los estudios realizados.
El autor de este documento, como revisor, ha observado algunas insuficiencias que limitan la aceptación y
publicación exitosa del artículo científico, tales como:
Con el análisis que se presenta en este documento, se pretende que los investigadores que se inician en la actividad
científica:
Se analizan los elementos fundamentales de la estructura del artículo científico para que los docentes y especialistas
investigadores logren una redacción correcta, según el estilo del lenguaje científico, las características de la
especialidad y las normas tanto de las revistas como del idioma. El objetivo es potenciar el desarrollo de las
habilidades y destrezas necesarias para publicar los resultados docente-investigativos. Por sus características, la
información abordada puede ser igualmente útil para investigadores con resultados científicos defendidos, porque
siempre se pueden perfeccionar las destrezas, las habilidades y los conocimientos.
METODOLOGÍA
La investigación bibliográfica sobre la redacción científica se realiza durante el período marzo-diciembre de 2020. Se
consultaron más de cien fuentes bibliográficas. Uno de los temas estudiado fue la estructura del artículo científico
original y sus acápites. Lo esencial de este trabajo fue caracterizar cada uno de los acápites o secciones y abordar el
como redactarlo. El estudio permitió presentar un documento que potencia el desarrollo de las habilidades y las
destrezas para lograr una redacción adecuada del artículo científico. El desarrollo de las habilidades y destrezas en la
redacción científica es una necesidad esencial para que los resultados de las investigaciones lleguen a la ciencia y la
comunidad científica, y se apliquen en la solución de los problemas de la producción y los servicios.
La investigación se apoya en métodos teóricos para abordar el tema que se investiga y su resultado final es un
documento que ayuda a los investigadores noveles con la publicación de sus resultados científico -investigativos.
Documento que puede ser igualmente útil para profesionales con resultados científicos ya defendidos.
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RESULTADOS
Durante la revisión bibliográfica, se estudiaron los acápites o secciones de la estructura del artículo científico original.
El núcleo del artículo está compuesto por la Introducción, Materiales y métodos, Resultados y Discusión (IMRyD).
Este formato es el reflejo directo del proceso de investigación científica. Al describir el proceso investigativo se
argumenta y plantea el problema a resolver. Luego se describen los materiales y métodos empleados en la solución
y se presentan los resultados obtenidos. Resultados que se discuten a profundidad. Toda esta información se redacta
con brevedad, precisión y claridad, (Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, 2007); (Arribalzaga, 2005); (Lam, 2016); (Murillo
et al., 2017); (Cabrera-Campos, 2013).
Durante el proceso de redacción, primero se redacta el núcleo, luego las conclusiones y las recomendaciones, y
después las demás secciones. Cuando todo está redactado, las secciones se organizan de la siguiente forma: título,
autor(es), resumen (en español e inglés), palabras clave, agradecimientos (opcional), el núcleo del artículo (IMRyD),
conclusiones, recomendaciones, referencias y anexos (de ser necesario), (Ferriols & Ferriols, 2005) y (Alonso-Soler
& Piñeiro-Suárez, 2007). Se recomienda redactar el resumen y seleccionar las palabras clave al final.
Título
El título es la primera impresión que el lector recibe del trabajo. Es una indicación clara, precisa, breve y concisa del
contenido del trabajo. Al redactar el título hay que estudiar bien y hacerlo con términos que expresen correctamente
el contenido significativo de todo el trabajo para que sea comprensible y localizable.
El título es el acápite, relativamente breve, que describe el contenido del artículo en el menor número de palabras
posible. Muchas revistas exigen un número limitado de palabras (alrededor de 15). El título incluye los términos más
relevantes que hagan referencia al objeto del trabajo, para su recuperación fácil cuando alguien se interesa y busca
el tema en bases de datos. No puede contener abreviaturas y debe ser atractivo y llamativo, (Cabrera-Campos, 2013);
(Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, 2007).
El título puede ser descriptivo o informativo. El primero refiere el contenido del trabajo y no incluye los resultados.
El segundo expresa el resultado principal de la investigación, (Ferriols & Ferriols, 2005).
El título es el apartado más leído y de vital importancia para que los lectores se interesen por trabajo. Es el elemento
esencial para la búsqueda bibliográfica porque está en bases de datos, páginas de Internet y en la literaturas citadas
en otros artículos, (Rojas, 2002); (Cevallos-Uve, 2015) y (Lam, 2016).
1. no debe tener más de 15 palabras, cuanto más breve mejor, aunque no hay reglas. Algunas normas de
editoriales exigen 80 caracteres;
2. no debe contener siglas ni abreviaturas, excepto aquellas que sean ampliamente conocidas;
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3. no debe contener expresiones superfluas como: estudio sobre, aspectos de, a propósito de, investigaciones
de, estudios preliminares sobre, etc.
La exactitud, claridad y especificidad del título son las claves para su indización, consulta y uso por otros
investigadores. Si el título no es preciso, el artículo puede no ser leído y el prestigio del autor no se favorece y decae,
(Cevallos-Uve, 2015).
Autores
Los autores son aquellas personas que han realizado contribuciones significativas, o tareas como, (Cabrera-Campos,
2013):
Según Cabrera-Campos, (2013), en la autoría debe aparecer las instituciones a las que están afiliadas los autores
(universidades, centros de investigación, etc.) y sus direcciones postales o correos electrónicos.
El autor es el responsable del resultado original de la investigación y el proceso de redacción y publicación del
artículo. Cuando el artículo tiene más de un autor, el primero es el principal y asume la responsabilidad intelectual
del trabajo porque es el investigador que más contribuyó con el desarrollo de la investigación y es el que redactó el
primer borrador del manuscrito. El primer autor también se encarga de la correspondencia con el editor, de
adaptar el texto a los comentarios de los revisores y de revisar las pruebas de imprenta 1. El resto de autores
aparecerán por orden de responsabilidad en el trabajo, aunque esta decisión suele ser adoptada de forma conjunta
por todos los coautores, (Ferriols & Ferriols, 2005) y (CREA-CUJAE, 2013).
Los coautores deben participar lo suficiente para asumir la responsabilidad pública del contenido del trabajo y
como requisitos deben contribuir con, (Ferriols & Ferriols, 2005):
➢ la concepción y diseño del estudio; la recogida de los datos; y el análisis e interpretación de los resultados
(datos recogidos).
➢ la redacción del artículo o la revisión crítica de una parte sustancial de su contenido intelectual, sino del
todo.
➢ la aprobación final de la versión que será publicada, para sentirse responsable del todo.
Cuando una investigación exige de la participación de varios autores, todos deben aparecer como tal. Si son
muchos se aconseja una autoría corporativa. En ese caso los autores se convierten en colaboradores y se citan en
los agradecimientos.
Para facilitar la localización en bases de datos los autores deben escribir sus nombres de la misma forma. Los
autores con nombre en español deben emplear un apellido bibliográfico (unir los apellidos con un guión por
ejemplo, Bartolo Ricardo-Zaldívar) para evitar las confusiones en las bases de datos internacionales que indexan a
los autores por el último apellido, (Ferriols & Ferriols, 2005).
El Resumen (Abstract en inglés) es una versión en miniatura o abreviada del artículo científico que suele condensar
cada una de sus secciones principales. Difiere del sumario, que normalmente es una sinopsis de las conclusiones,
glosario (Day & Gastel, 2008) y (Silva-Hernández, 2010).
1 Actualmente, se envía el documento digital a los autores para su revisión antes de su publicación.
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El resumen es la información breve, clara y precisa que describe el problema, el objetivo, el alcance de la investigación
y los métodos. Además, resume los resultados y generaliza las conclusiones. Después del título, es el acápite más
leído del artículo, (Rojas, 2002); (Ferriols & Ferriols, 2005); (Lam, 2016).
Algunas revistas, en sus normas, optan por un resumen estructurado que incluya introducción, objetivo, métodos y
métodos, resultado y discusión. El resumen tiene objetivos, características, requisitos y formas de elaborar o
redactar.
El artículo tiene dos objetivos básicos, (Rojas, 2002); (Ferriols & Ferriols, 2005); (CREA-CUJAE, 2013); (Cevallos-Uve,
2015); (Lam, 2016):
El resumen es una breve síntesis del contenido del artículo. Se redacta en pretérito, en un párrafo de entre 100 y 250
palabras. Contiene, de forma clara y precisa, las secciones principales del artículo: Tema, Introducción (importancia
de la investigación, lugar y objetivos), Materiales y Métodos, Resultados, Discusión y Conclusiones. En el resumen no
se incluyen citas bibliográficas, siglas o acrónimos, ni referencias a cuadros o figuras, (Cabrera-Campos, 2013);
(Corrales-Reyes et al., 2015).
1. con términos concretos y frases cortas para abordar los puntos esenciales del artículo y
2. de forma impersonal o en tercera persona y en pasado menos la parte donde se abordan las conclusiones.
El resumen no debe
Cuando se cumplen con estas características, el resumen puede actuar como sustituto del texto.
Según los autores ya citados el resumen debe cumplir con los requisitos siguientes:
1. Tener una extensión concisa, breve, clara, precisa y exacta, redactada en un párrafo
2. Redactarse después de concluido el núcleo del articulo (IMRyD).
3. Describir sin detallar la metodología empleada.
4. Resumir los resultados y generalizar las conclusiones.
5. No debe exceder las 250 palabras (de 100 a 250).
El resumen, con no más de 250 palabras, debe permitir la identificación rápida y precisa del contenido básico del
artículo: problema, objetivo, método, resultado (redactados en pasado) y conclusión (redactada en presente).
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Se logra un buen resumen si responde (de forma sencilla, clara, breve y con mucha precisión) las siguientes
preguntas:
El acápite o sección “Palabras clave” se ubicada después del resumen. Está compuesto por palabras directamente
relacionadas con el contenido. Este acápite sirve para catalogar el trabajo dentro de un área específica. La selección
cuidadosa de las palabras clave permite que el trabajo sea indexado y consultado por otros investigadores. Hay
revistas que en sus normas exigen un número determinado de palabras clave (de 3 a 10), aunque algunos autores
señalan que deben ser ocho, (Cevallos-Uve, 2015).
Las palabras clave no deben coincidir con el título. Es un conjunto de términos (evaluación profesoral, aplicación web,
gestión universitaria, etc.) que sirven para indexar el artículo en bases de datos o sistemas de recuperación de
información. Estos términos describen de manera general o específica el contenido del artículo y permiten su
recuperación en los sistemas a través de los servicios de búsqueda, (Cabrera-Campos, 2013) y (Corrales-Reyes et al.,
2015).
Agradecimientos (opcional)
Los agradecimientos es un breve apartado en el que se reconoce la deuda contraída con las personas o instituciones
que colaboraron con la investigación, que dio lugar al artículo que se publica, (Cabrera-Campos, 2013).
Al referirse a los agradecimientos, Day & Gastel, (2008) refiere que “la vida no es tan corta que no haya siempre
tiempo para la cortesía2”; y considera que en esta sección se reconoce el apoyo o ayuda administrativa y técnica
recibida de personas o instituciones durante la investigación. Este apoyo puede ser con equipo, cultivos, materiales,
organización, revisión, participación durante la realización del experimento, entre otras acciones.
También se expresa el agradecimiento a la ayuda financiera interna y externa, contratos, becas, subvenciones. En
ocasiones se menciona sarcásticamente la ausencia de subvenciones, contratos o becas y a los que de una manera u
otra obstaculizaron de algún modo el buen desempeño del trabajo.
Si un colega le ofreció ayuda de cualquier forma, es lógico que se le dé las gracias de forma impresa, es costumbre
en el mundo científico. El agradecimiento es muestra de respecto a la persona que ofrece el apoyo.
Introducción
La introducción es el acápite o sección del artículo que captura la atención del lector porque ofrece una información
clara y objetiva sobre: 1- qué problema se investigó; 2- por qué se investigó; 3- cuáles son sus antecedentes (estudios
realizados anteriormente); y 4- cuál es el propósito del artículo, (Cevallos-Uve, 2015) y (Castro-Rodríguez & Aliaga-
Del-Castillo, 2018).
Según Cevallos-Uve (2015), la introducción tiene como objetivo ofrecer la información suficiente para que los
resultados se comprendan y evalúen con facilidad y precisión. Esto permite que el lector decida si considera útil
analizar todo el contenido para introducirlo o replicarlo en su contexto profesional de trabajo.
La introducción presenta el contenido del artículo en al menos tres párrafos: uno con situación act ual del problema,
otro con la fundamentación o justificación de la investigación, y el otro con el o los objetivos (los dos últimos pueden
unirse). La redacción se hace en presente y con palabras significativas para lograr exactitud y claridad, (Cevallos-Uve,
2015).
La introducción permite hacerse una idea más detallada del contenido del artículo porque en ella se expresa con
claridad: por qué se hace el trabajo; cuál es su importancia científica; qué se conoce del tema (incluye lo hecho y lo
que falta por hacer); y cuál es el objetivo del estudio o investigación, (Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, 2007) y (Cabrera-
Campos, 2013).
Cabrera-Campos, (2013) considera que al redactar la introducción deben seguirse algunas reglas:
La mayoría de los autores consideran que los objetivos deben aparecer en el último párrafo de la introducción. No
obstante, en las normas de algunas revistas se exige un apartado (después de la introducción) para precisar el o los
objetivos del estudio realizado, (Ferriols & Ferriols, 2005).
El objetivo determina los resultados y las conclusiones y por eso es vital redactarlo con claridad y precisión para
garantizar una relación exacta entre estos tres elementos. El valor del artículo depende de la correspondencia
objetivo-resultados-conclusiones y si existiese alguna discrepancia hay que esclarecerla bien en la sección
“Discusión”.
Al redactar el objetivo se debe incluir la población a estudiar, la intervención evaluada y el resultado de interés.
Materiales y métodos
La sección “Materiales y Métodos” es el acápite del artículo donde se explica cómo se estudió el problema. Los
materiales y los métodos empleados se describen para que el lector se identifique con la confiabilidad y validez de
los resultados, (Cevallos-Uve, 2015) y (Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, 2007).
Estos autores consideran que el objetivo de esta sección es describir el diseño experimental de la investigación con
precisión porque los resultados, de una investigación confiable, deben ser reproducibles. Esta sección hay que
redactarla bien porque si los revisores y editores consideran que no está bien detallada y que limita la
reproducibilidad del método, el artículo es rechazado.
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En esta sección se explica cómo se hizo el estudio y se organiza en cinto áreas: diseño, población, entorno,
intervenciones y análisis estadístico o cualitativo.
Para que los experimentos puedan ser reproducidos, es importante ofrecer información suficiente y precisa respecto
a:
Especificaciones técnicas
➢ Cantidades exactas
➢ Procedencia o métodos de preparación
➢ Nombres genéricos (y no comerciales)
➢ Sujetos, animales, plantas, microorganismos identificados exactamente
➢ Características especiales—edad, sexo.
➢ Criterios de selección
Esta sección se escribe en pretérito y, aunque se considere que el trabajo no tiene muchas posibilidades de ser
reproducido, hay que hacerlo minuciosamente.
En este acápite se exponen, (Cabrera-Campos, 2013): los enfoques metodológicos seguidos; instrumentos utilizados,
cuestionarios, entrevistas, diseño experimental (muestras, características, etc.), análisis estadísticos, sustancias o
reactivos que se han utilizado, técnicas para recoger y registrar los datos obtenidos (ordenador, papel, grabación,
vídeo, etc.), metodología computacional, software utilizado, la plataforma de desarrollo del software,
requerimientos técnicos, etc.
Según Cabrera-Campos (2013), la sección de materiales y métodos se redacta en pasado y se pueden usar subtítulos
“casados” con los de la sección de Resultados. Se deben describir detalladamente los métodos y procedimientos
utilizados para garantizar la reproducibilidad. Señala además que los métodos están determinados por los objetivos
de la investigación.
Resultados
Según Cervallos-Uve (2015) y Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez (2007), después de la sección de “Materiales y Métodos”,
se describen los resultados obtenidos. Se aconseja resumir, con precisión, el resultado principal de la investigación
en el primer párrafo.
Este acápite se redacta en pasado. Los resultados se exponen con claridad y precisión para potenciar la seriedad y
credibilidad del trabajo, y no se comentan. Los comentarios corresponden a la sección “Discusión”, (Ferriols &
Ferriols, 2005).
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Según Cabrera-Campos (2013), los resultados son los nuevos conocimientos que se aportan a la comunidad científica
o al mundo. Se redactan en pasado y de forma clara, precisa y sencilla. En este acápite se incluyen los datos
resultantes de los análisis y los experimentos, se expone la medición de forma descriptiva en el texto y las mediciones
reiteradas se presentan en tablas o gráficos.
Cada revista, por lo general, tiene un formato propio para las tablas y figuras, se recomienda evitar la reiteración de
información en ambos formatos, (Cabrera-Campos, 2013). Es decir, el resultado que se expone en una tabla no debe
repetirse en un gráfico o figura.
Discusión
La discusión es un acápite para la reflexión de los autores del artículo. Es la sección donde se comentan los resultados
más relevantes del estudio y se resaltan los aspectos nuevos e importantes sin repetir los datos u otro material ya
presentado, (Ferriols & Ferriols, 2005).
1. exponen con argumentos sólidos, sus propias opiniones sobre el tema y las inferencias derivadas de la
investigación;
2. explican las limitaciones del estudio sin comentar los datos no relevantes;
3. relacionan las observaciones que se describen, con las aportadas por otros estudios;
4. discuten el significado y la aplicación práctica de los resultados; y
5. explican si las indicaciones y directrices proceden y pueden ser igualmente útiles en investigaciones
posteriores.
Según Day & Gastel (2008) y Cevallos-Uve (2015), la discusión se caracteriza por:
En la discusión deben quedar bien claro: 1- las relaciones existentes entre los hechos observados; 2- el significado de
los resultados, las consecuencias teóricas y las aplicaciones prácticas; y 3- las excepciones, las faltas de correlación y
los aspectos o resueltos aun no encontrados, (Day & Gastel, 2008) y (Cevallos-Uve, 2015).
Algunos autores (Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, (2007); Day & Gastel, (2008) y Cevallos-Uve, (2015)) ofrecen
sugerencias muy específicas para lograr una buena discusión:
La discusión debe terminar con un párrafo donde se aborden las conclusiones que correspondan al o los objetivos
que motivaron la investigación o estudio realizado. En esta parte, se deben evitar las afirmaciones gratui tas e
innecesarias y las aseveraciones que no estén fundamentadas en los datos del trabajo, (Ferriols & Ferriols, 2005) y
(Day & Gastel, 2008).
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La sección de discusión es la más difícil de redactar porque se brinda significado de los resultados y determina la
coherencia o contradicción entre ellos. Se debe redactar en presente al referirse a los resultados de otros estudios y
en pasado para los hallazgos de la investigación que se terminó, (Cabrera-Campos, 2013).
1- Sintetizar los resultados, relacionando las interpretaciones de los diferentes hallazgos realizados.
2- Vincular su trabajo con la bibliografía.
1. Presentar los principios, relaciones y generalizaciones que los resultados indican y tener en cuenta que, en
una buena discusión, los resultados se exponen, no se recapitulan.
2. Señalar las excepciones o las faltas de correlación y delimitar los aspectos no resueltos. No arriesgarse a
elegir la opción de ocultar o alterar los datos que no encajen bien.
3. Mostrar cómo concuerdan o no los resultados e interpretaciones con trabajos anteriormente publicados.
4. Exponer las consecuencias teóricas del trabajo y sus posibles aplicaciones prácticas.
5. Resumir las pruebas que respaldan cada conclusión y formular las conclusiones de la forma más clara
posible.
Conclusiones
La sección “conclusiones” es donde se exponen, con claridad y precisión, las ideas concluyentes derivadas del
resultado de una investigación, (Cabrera-Campos, 2013). Estas ideas deben:
Recomendaciones
Según Day & Gastel (2008); Cabrera-Campos (2013) y Cevallos-Uve (2015), este ecápite permite ofrecer
recomendaciones sobre aspectos relacionado con el tema investigado. Ideas que otros investigadores pueden tomar
como temas para sus investigaciones. Esta sección también sirve para sugerir determinada acción investigativa o
determinado procedimiento para aplicar el contenido del artículo.
Referencias
El asentamiento bibliográfico (bibliografía) es la sección del artículo donde se relacionan las fuentes bibliográficas
que fundamentaron el trabajo realizado. Muchos autores consideran que no es un ejercicio de redacción sino de
paciencia para poder cumplir con las normas de la revista. Es responsabilidad de los autores garantizar la autenticidad
de las citas hecha durante la redacción.
El formato y el estilo dependen de la norma asumida por la revista o el evento científico, y es necesario ajustarse a
esa norma para que el trabajo sea aceptado. El error más frecuente es no escribir con precisión y exactitud algún
dato que luego afecta la localización del documento citado, (Ferriols & Ferriols, 2005).
Antes de redactar el artículo hay que analizar la norma escogida por la revista, aunque existen diferentes normas
reconocidas internacionalmente, (Alonso-Soler & Piñeiro-Suárez, 2007): VANCOUVER, APA, HARVARD, Normas
Cubanas, Editorial Academia, etc.
UCE Ciencia. Revista de postgrado. Vol. 9(2), 2021
Según Balmaseda-Neyra (2013b), todo autor u obra citada en un documento científico debe aparecer en la
bibliografía (referencias), indicando: 1- autor(es); 2- año de publicación de la obra; 3- título de la obra (en cursiva); 4-
lugar de edición y editorial; y 5- número de edición o reimpresión, si aparece en la obra. Por ejemplo: BRUNNER, J.
(1994). Educación superior en América Latina: una agenda para el año 2000. Santiago de Chile: Flacso.
Existe una gran variedad de estilos para el asentamiento bibliográfico. Un análisis realizado en 52 revistas científicas
arrojó que había 33 estilos diferentes de enumerar las referencias 3
1. Existen diversos formatos (estilos bibliográficos). Generalmente cada revista sigue sus propias directrices
según su política editorial. Los más usados son: sistema de nombre y año, numérico-alfabético, por orden
de mención.
2. Todas las referencias citadas en el texto deben estar en la relación de obras citadas y viceversa.
3. Se citan solo las obras importantes y publicadas o algún trabajo aceptado para su publicación, citando el
nombre de la revista seguido de la frase “en prensa”.
4. Sirven para localizar las fuentes necesarias para entender la teoría que orienta y da sentido a la investigación,
o para interpretar los métodos utilizados.
5. Otorgan autoridad a las afirmaciones y puntos de vista del documento al que se hace la referencia.
6. Permiten calcular el factor de impacto de las revistas académicas y el prestigio de los autores.
7. Se conforman dos estructuras, citas o acotado de la citas, y la referencia bibliográfica.
DISCUSIÓN
1- considera que la brevedad, claridad, precisión, exactitud y concisión son los cinco elementos claves para el título
cumpla su objetivo. Solo así puede causar una buena impresión y cautivar el interés del lector.
2- sugiere ser consecuente y asumir con seriedad los requisitos de la autoría de la publicación, por la responsabilidad
que se asume con el contenido. Es decir, responsabilidad con el resultado científico o la experiencia docente.
3- coincide con los autores consultados que, antes de redactar el resumen, hay que platearse estas preguntas con
claridad, precisión y exactitud, y al responderlas no excederse con detalles innecesarios para lograr un resumen
claro, preciso, exacto y corto. Finalmente, el resumen se traduce al inglés (traducción denominada “Abstract”)
para facilitar su recuperación mediante la búsqueda bibliográfica.
4- coincide con los autores consultados y sugiere tener en cuenta el concepto de resumen, sus características
principales, sus requisitos y plantearse las cinco preguntas claves (sobre los elementos que componen el
resumen) con claridad, precisión y exactitud, y al responderlas no excederse con detalles innecesarios para lograr
un resumen claro, preciso, exacto y corto.
5- sugiera seleccionar las palabras clave cuando se haya redactado el resumen, para valorar con exactitud que
palabras describen el contenido del artículo y puedan ser las más exactas para la búsqueda y recuperación de la
información publicada.
6- considera que en la introducción deben exponerse con exactitud, precisión y claridad, en al menos tres párrafos:
el problema o motivo de la investigación, los estudios realizados anteriormente sobre el tema, el objetivo e
importancia del trabajo investigativo, los resultados obtenidos y la conclusión principal.
7- considera que la redacción precisa y clara del o los objetivos garantiza el logro de los resultados y la exposición
clara y precisa de la o las conclusiones.
8- considera que al redactar la sección “Materiales y métodos” hay que identificar que métodos y materiales se
corresponden con la rama del saber en la que se investiga. La descripción debe ser cuidadosa para que se entienda
el trabajo y se pueda replicar según el interés del lector que, por lo general, investiga en la misma área del
conocimiento del autor del artículo.
9- coincide con los autores consultados en que el objetivo de la sección “Resultados” es exponer los hallazgos de la
investigación, y por tanto se deben presentar las pruebas (en figuras, cuadros, imágenes, diagramas, tablas, etc.)
que expresen y apoyen de forma clara y precisa esos resultados, sin reiterar la información. En ocasiones se
describen los resultados y las evidencias aparecen en los anexos del artículo.
10- coincide con los autores consultados en que la sección “Discusión” es para la reflexión sobre los hallazgos durante
el trabajo investigativo a partir de las interpretaciones e inferencias que se deriven de los resultados.
11- asume que las conclusiones están en correspondencia con: los objetivos y su cumplimiento; los resultados más
relevantes y las opiniones propias de los autores sin, incluir ideas que correspondan a otras fuentes.
12- considera conveniente hacer recomendaciones pueden ser útiles para el trabajo investigativo de los lectores.
13- considera que la bibliografía consultada debe estar correctamente asentada con la mayor cantidad de datos
posible para que el lector pueda, si es de tu interés, localizar y consultar las fuentes que le han servido de
fundamento al trabajo que ha consultado.
14- coincide con los autores consultados que el resultado científico se logra con el apoyo de muchas personas e
instituciones a las que se les debe reconocer y agradecer. Por su experiencia personal, coindice en que también
merecen mención sarcástica aquellas instituciones o personas que obstaculizaron el buen desempeño del trabajo
o negaron apoyo y ayuda con ideas o materiales que tenían a su disposición. Estas acciones limitantes ponen reto
al avance del trabajo y cuando se logra, florece la satisfacción de que sí se pudo a pesar de la negativa de los que
podían ayudar.
El estudio cuidadoso de las ideas expuestas en esta sección puede contribuir con el desarrollo de las habilidades y las
destrezas para redactar y publicar los resultados científico-investigativos y las experiencias pedagógicas. Ideas que
pueden ser igualmente útiles para investigadores con resultados científicos defendidos, porque siempre se pueden
perfeccionar las destrezas, las habilidades y los conocimientos.
CONCLUSIÓN
➢ Publicar un resultado científico resulta más complicado de lo imaginado, sobre todo por los investigadores
noveles que se centran en el hallazgo y no en cómo publicarlo.
➢ La claridad, brevedad, precisión, exactitud y concisión en la redacción son los cinco elementos claves para
el éxito de la publicación.
➢ El éxito en la redacción de un artículo científico también depende de la relación exacta que se logre entre
los acápites de su estructura.
➢ El estudio cuidadoso de este documento puede potenciar el desarrollo de las habilidades y destrezas para
publicar los resultados científico-investigativos y las experiencias pedagógicas de los investigadores y los
profesores noveles, sin desestimar que puede resultar igualmente útil para docentes e investigadores con
resultados científicos ya defendidos.
RECOMENDACIONES
UCE Ciencia. Revista de postgrado. Vol. 9(2), 2021
El orden de los acápites en la estructura de un artículo ya publicado es el siguiente: título, autor(es), resumen (en
español e inglés), palabras clave, agradecimientos (opcional), introducción, materiales y métodos, resultados,
discusión, conclusiones, recomendaciones, bibliografía y anexos (de ser necesario). Sin embargo en el proceso de
redacción el orden es diferente.
Debido a la relación que tienen los acápites y su interdependencia, el autor del presente trabajo sugiere seguir el
siguiente orden durante el proceso de redacción:
1- Caracterizar el problema de la investigación (el alcance, los antecedentes o estudios realizados sobre el tema), el
objetivo, la importancia del trabajo realizado y los resultados obtenidos, y con estos elementos se escribe la
primera versión del acápite “Introducción”. La introducción se culmina con la conclusión principal cuando redacte
la sección “Conclusiones”.
2- Describir los materiales y los métodos empleados en la solución del problema investigativo en el acápite
“Materiales y Métodos”.
3- Analizar los datos y redactar con claridad y precisión la interpretación de los resultados obtenidos en el acápite
“Resultados”.
4- Analizar las pruebas que expresan y apoyan de forma clara y precisa los resultados obtenidos y de ser n ecesario
presentarlas como anexos del trabajo.
5- Comentar los resultados más relevantes, reflexionar y resaltar los aspectos novedosos e importantes en el acápite
“Discusión”.
6- Analizar la relación entre los resultados, el cumplimiento de los objetivos y los criterios del investigador para
redactar las ideas concluyentes del trabajo en sentencias afirmativas, claras y precisas en el acápite
“Conclusiones”.
8- Sintetizar el problema, los objetivos, la metodología empleada, los resultados obtenidos y generalizar las
conclusiones y entonces redactar el acápite “Resumen”. Tener presente que el resuenen es la versión en
miniatura o abreviada del artículo.
9- Analizar las ideas que pueden ser punto de partida para desarrollar nuevas investigaciones o acciones importantes
para lograr un resultado en específico y redactar el acápite “Recomendaciones”
10- Analizar el resumen a profundidad y redactar o perfeccionar la redacción del título, conocido como el resumen
del resumen.
11- Seleccionar las palabras clave, directamente relacionadas con el contenido del artículo sin coincidir con el título.
Una vez terminado el proceso de redacción, se organizan los acápites y se estructura el artículo para enviarlo a la
revista o el evento. Si se siguen estas recomendaciones, se logra una redacción de calidad y se garantiza el éxito ante
los revisores y los editores de la revista o el evento.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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ARTÍCULO DE REVISIÓN
RESUMEN
ABSTRACT
Scientific research and publication of the scientific paper are two activities closely
related. Scientific Research ends with the publication of the scientific paper; only then
it will become part of the scientific knowledge. This paper addresses issues such as
the definition of a scientific paper, general principles for writing as well as the
different parts that make up the structure of an original scientific paper.
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INTRODUCCIÓN
Existen diferentes tipos de artículos científicos, como son las críticas y reflexiones
sobre opiniones de otros autores, la revisión de literatura, los artículos teóricos, los
artículos metodológicos y el estudio de caso, entre otros. En este trabajo nos
referiremos solamente al artículo científico original o publicación primaria.14-16
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Para redactar un buen artículo científico se deben aplicar los tres principios
fundamentales de la redacción científica: precisión, claridad y brevedad del
lenguaje.2,5,16
El formato IMRYD
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Título
Es la primera parte del artículo que encontrarán los lectores y árbitros 14 y constituye
el apartado más leído y de vital importancia para conseguir que un lector interesado
acceda al contenido completo del trabajo.5,11 Es esencial para la búsqueda
bibliográfica porque aparece en bases de datos, en la página de Internet de la revista
y en la literatura citada de otros artículos, haciendo posible que las personas decidan
únicamente basados en su contenido, si quieren obtener el artículo completo.2,19
El título debe sintetizar de manera breve la idea o el contenido principal del trabajo,
debe ser creativo, objetivo, inequívoco y atractivo, capaz de inspirar en el lector el
suficiente interés como para que llegue a leer el resumen y por consiguiente la
totalidad del trabajo. 5,11,14 Además, debe ser compresible para especialistas en otros
campos.20 No debe tener siglas ni abreviaturas, excepto aquellas que toda la
audiencia conoce.1-3,11,14,19,21
Algunas revistas solicitan que la información sobre el diseño del estudio sea una parte
del título sobre todo en los ensayos clínicos aleatorios, las revisiones sistemáticas y
los metanálisis.15,20
Deben elegirse con mucho cuidado todas las palabras del título y cuidar la forma de
asociarlas pues con frecuencia se comete el error de una mala sintaxis, es decir, un
orden equivocado de las palabras.1,19
El título no debe ser tan breve que no diga nada, ni tan extenso que resulte un
compendio del artículo.19 La mayoría de los títulos largos contienen palabras
superfluas que generalmente aparecen al comienzo, por ejemplo: "Estudios sobre",
"Investigaciones sobre", "Observaciones acerca de", "Aspectos de", "Comentarios
sobre", "Investigaciones de", "Estudios preliminares sobre", "Notas sobre"; y que casi
siempre pueden eliminarse, sin afectar la precisión, con lo que se logra que este sea
más específico y relevante.1-3,5,7,11,14,21
El título debe ser conciso y claro y se aconseja definir uno provisional previo a
redactar el manuscrito y elaborar el título final después de terminar el
artículo.2,3,14,16,19
No hay reglas sobre la longitud mínima, máxima u óptima del título.2,11 Algunas
revistas recomiendan que no exceda de 15 palabras, o hasta 90 letras.19 No obstante,
a veces determinados temas demandan que este sea más largo que lo habitual; en
estos casos, es preferible dividirlo en un enunciado inicial y a continuación un
subtítulo. También suelen utilizarse los dos puntos para interrelacionar partes del
título.21
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Autores
Todas las personas que participaron en el trabajo deben quedar reflejadas como
autores, pero no es suficiente con que figuren, también deben estar en el orden justo
y adecuado, de acuerdo con su participación real.5,21 El primero de los autores se
designa como el autor principal, el de mayor aporte y progenitor primario del trabajo
comunicado, el que ha desempeñado el papel principal en la realización, el que lo
concibió, lo planificó y lideró su ejecución en las diferentes fases.5,19 Los coautores
generalmente se sitúan en el orden que el autor principal prefiera o haya discutido
previamente con estos; con frecuencia, según la importancia de su participación real
en la investigación que dio origen al artículo. No obstante, a veces, estos se pueden
ordenar alfabéticamente por el primer apellido o al azar.1,2,14,21,22
Afiliaciones
Definición de autoría
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Resumen
Más conocido como abstract, en inglés, aparece inmediatamente después del título
del artículo. Tiene como objetivo permitir al lector identificar en forma rápida y
precisa el contenido básico del artículo.19,20,25,26
Es una parte muy importante porque es lo que aparece en las bases de datos
bibliográficas. Después del título, es el acápite del artículo más leído. En su versión
electrónica, los interesados acceden a este muchas más veces que al trabajo en sí, y
mediante su lectura pueden determinar la relevancia del tema tratado en el artículo
para posteriormente decidir si le interesa consultar su contenido o no.2,5,11,25,26
Al elaborar un resumen se debe tener una idea clara del lector al que va dirigido,
utilizar un estilo y redacción sencillos, evitar excesivos tecnicismos, ser conciso y
breve.19,25
El resumen no debe tener más de 250 palabras y debe redactarse en tercera persona,
tiempo pasado, exceptuando el último párrafo o frase concluyente.14,17,19,25 No debe
aportar información o conclusión que no está presente en el texto, así como tampoco
debe citar referencias bibliográficas.14,19,20 Debe dejar claro el problema que se
investiga, los principales objetivos y el alcance de la investigación, describir la
metodología empleada, resumir los resultados y generalizar con las principales
conclusiones.1,5,11,15,16,19,21
Al igual que el título, se debe crear el hábito de redactarlo después de haber escrito el
resto del artículo.5,19,21
Palabras clave
Es una sección que se escribe a continuación del resumen y que consta de una lista
de términos específicos e importantes que aparecen en el artículo, los cuales se
escriben separados por comas y son utilizados por los servicios bibliográficos para
catalogar el trabajo dentro de un área específica. Cuanto más cuidadoso sea el autor
para elegir las palabras clave, más posibilidades tendrá el artículo de llegar a ser leído
por muchos investigadores.2,14,19
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Introducción
Esta sección es una forma de atraer al lector y darle la mayor información posible.14,19
No obstante debe ser breve y concisa porque con la abundancia de trabajos de
revisión existentes, puede beneficiarse de lo expuesto en la revisión más reciente
sobre el tema. Deben elegirse cuidadosamente las referencias que van a suministrar
los antecedentes más importantes y citar a autores que hayan hecho trabajos previos
relacionados con el artículo y que se consideren necesarios.1,3,14
Debido a que con alguna frecuencia los artículos son leídos por personas que no
pertenecen a la especialidad del autor, la Introducción es el lugar apropiado para
situar y definir los términos o abreviaturas especializados que se vayan a utilizar.1
El texto debe ser claro y objetivo evitando la redundancia natural del idioma español y
las figuras literarias.14
Materiales y método
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En este apartado se trata con elementos exactos y específicos, por lo que se debe
cuidar la precisión del lenguaje y evitar el uso de palabras que puedan producir
ambigüedad en la interpretación como: frecuentemente y periódicamente, que deben
sustituirse por términos que expliquen exacta y claramente qué se hizo, cuándo se
hizo y cómo se hizo. Tampoco se deben mezclar en esta sección algunos de los
resultados.1,14
RESULTADOS
Esta sección es la parte más importante del artículo y a menudo es también la más
corta, especialmente si el acápite de Materiales y métodos que la precede y el de
Discusión que le sigue, están bien redactados. El primer párrafo de este texto debe
ser utilizado para resumir en una frase concisa, clara y directa, el hallazgo principal
del estudio.2,14,16
Este acápite se debe limitar a los datos que se vinculan con los objetivos del artículo,
pues la inclusión de datos excesivos e innecesarios a la luz de los objetivos o de las
hipótesis, solo demuestra que el autor carece de capacidad para discernir entre lo
importante y lo irrelevante en el contexto de la finalidad del artículo.11 Se sugiere
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El uso de tablas y gráficos es una buena opción, siempre que se evite la redundancia,
es decir la repetición con palabras de lo que resulta ya evidente al examinar estas
formas de presentación de los resultados.1,3,11,16,18,19
Las tablas y gráficos deben ser autoexplicativas, o sea, deben poder entenderse sin
necesidad de leer el texto que les hace referencia.11 No se deben utilizar cuando los
datos que se quieran presentar se puedan resumir en dos o tres párrafos dentro del
texto.14
Todas las tablas y los gráficos se citarán en el cuerpo principal de esta sección y se
enumerarán en el orden en que aparecen en el texto.3,20 Su número debe ser el
estrictamente necesario para ilustrar los resultados del estudio. Se recomienda usar
gráficos como alternativa a las tablas con muchas entradas y no duplicar datos en los
gráficos y tablas.15,18
Esta sección debe ser escrita utilizando los verbos en pasado (se encontró, se
observó, etc.).2,14,16,17
DISCUSIÓN
Los dos elementos centrales de la Discusión de un artículo son indicar, a juicio del
autor, qué significan los hallazgos identificados en la sección de resultados y cómo
estos se relacionan con el conocimiento actual.11,27
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Esta sección se redacta en presente: "estos datos indican que", porque los hallazgos
del trabajo se consideran ya evidencia científica . 1,3,16,27
CONCLUSIONES
Agradecimiento
Esta sección no incluye ningún elemento científico. Sólo se trata de ser cortés con
quienes colaboraron para mejorar el estudio participando en algún aspecto muy
parcial de este.11
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Lista de referencias
En esta sección se detallarán los trabajos a los que se hizo referencia en el artículo y
que deben ser numerados consecutivamente en el orden en que se mencionan por
primera vez en el texto.15
Debe existir siempre una correspondencia entre las citas que haya hecho en su
trabajo y las que anexe en la literatura citada, ya que normalmente los lectores
estarán interesados en verificar los datos que efectivamente se utilizaron para la
investigación.14
Las referencias cumplen dos funciones esenciales: testificar y autentificar los datos no
originales del trabajo y proveer al lector de bibliografía referente al tema en cuestión.3
Sólo se deben incluir como citas válidas artículos ya publicados en revistas científicas,
artículos aceptados para publicación especificando que dicho trabajo se encuentra en
prensa o en proceso de publicación; libros, capítulos de libros, tesis que formen parte
de catálogos de bibliotecas y documentación disponible en internet.18,19,28
Los autores son responsables de verificar que en ninguna de las referencias se citen
artículos retractados, excepto en el contexto de referirse a la retractación.15
Las revistas biomédicas informan en las “Normas de publicación para los autores” las
reglas para citar las referencias bibliográficas, en los manuscritos que se envíen para
ser considerados como posibles publicaciones, y simplemente hay que regirse
estrictamente por ellas.11,28 También se puede acudir al uso de programas
computarizados, como el Endnote©, que facilita el proceso de organizar las
referencias, y tiene la ventaja de que permite cambiar su formato en el caso de que el
trabajo sea rechazado y se tenga que enviar a otra revista.9
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69
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Onomázein
ISSN: 0717-1285
onomazein@uc.cl
Pontificia Universidad Católica de Chile
Chile
EPÍLOGO
1. Análisis de un ensayo
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Traver,
M.T.
(2017).
La
habilidad
de
hablar
en
público.
Una
experiencia
formativa
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estudiantes
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Revista
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de
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del
Profesorado,
20
(3),
117-‐129.
DOI:
http://dx.doi.org/10.6018/reifop.20.3.270631
Resumen
La
consolidación
del
Espacio
Europeo
de
Educación
Superior
(EEES)
en
el
ámbito
universitario
ha
supuesto
notables
cambios
en
la
formación
del
alumnado.
En
esta
experiencia
formativa
se
ha
intentado
dotar
al
alumnado
universitario
del
Grado
de
Educación
Primaria
de
la
Facultad
de
Educación
de
la
Universidad
de
Extremadura
de
los
recursos
necesarios
que
le
permitan
desarrollar
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público.
Los
resultados
extraídos
nos
llevan
a
considerar
la
posibilidad
de
ofertar
un
taller
a
los
estudiantes
con
objeto
de
contribuir
al
desarrollo
de
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público,
y
por
tanto,
a
enriquecer
sus
potenciales
como
docentes.
Palabras
clave
Interacción;
hablar
en
público;
competencia
transversal;
universidad.
Abstract
The
consolidation
of
the
European
Higher
Education
Area
(EHEA)
in
universities
has
led
to
significant
changes
in
student
training.
In
this
teaching
experience
we
intend
to
provide
resources
that
enable
university
students
from
Teacher
Degree
in
Education
Faculty
of
University
of
Extremadura
to
develop
the
cross
curricular
competence
of
public
speaking.
The
results
lead
us
to
discuss
the
possibility
of
offering
a
workshop
to
students
in
order
to
contribute
to
the
development
of
cross
curricular
competence
of
public
speaking,
and
to
enrich
their
potentialities
as
teachers.
Key
words
Interaction;
public
Speaking;
cross
curricular
competence;
university.
Contacto:
María
Teresa
Becerra
Traver,
mbectra@unex.es,
Universidad
de
Extremadura.
Maria
Teresa
Becerra
Traver
Introducción
En
España,
la
consolidación
del
Espacio
Europeo
de
Educación
Superior
(EEES)
en
el
ámbito
universitario
ha
supuesto
notables
cambios
en
la
formación
del
alumnado.
Estos
cambios
promueven
la
autonomía,
el
desarrollo
de
competencias
y
una
formación
general
que
parte
del
desarrollo
académico,
personal
y
profesional
del
estudiante
(Castaño,
Blanco
&
Asensio,
2012).
En
concreto,
hay
que
destacar
la
implantación
de
nuevos
sistemas
de
evaluación,
como
por
ejemplo
el
Trabajo
Fin
de
Grado.
Se
trata
de
una
asignatura
que
conlleva
la
elaboración
de
un
trabajo
escrito,
dirigido
por
un
profesor/a
y
presentado
ante
un
Tribunal
con
el
objeto
de
que
el
estudiante
demuestre
la
puesta
en
práctica
de
las
competencias
asociadas
a
la
Titulación
y
sirva
para
desarrollar
una
actividad
autónoma,
responsable
y
comprehensiva.
La
realización
de
este
Trabajo
Fin
de
Grado
(en
adelante
TFG)
engloba
una
serie
de
competencias
generales,
específicas
y
transversales
que
el
alumnado
contribuirá
a
desarrollar
y
superar.
Quizás,
la
mayor
dificultad
o,
se
podría
decir,
miedo
que
encuentra
el
alumnado
en
el
desarrollo
del
TFG
es
la
competencia
transversal
descrita
en
los
correspondientes
programas
de
esta
asignatura
referida
a
Presentar
públicamente
ideas,
problemas
y
soluciones,
de
una
manera
lógica,
estructurada,
tanto
oralmente
como
por
escrito.
Esta
competencia
transversal
de
hablar
en
público
no
sólo
se
desarrolla
en
este
momento
clave
de
los
estudios
universitarios
del
alumnado
sino
que
se
puede
presentar
en
algún
momento
de
su
vida.
Ya
sea
para
presentar
un
trabajo
en
clase
ante
el
profesor
y
los
compañeros,
dar
una
opinión
en
una
reunión
de
empresa,
realizar
una
ponencia
en
un
congreso
científico…
No
obstante,
aunque
a
muchas
personas
les
gustaría
dar
su
opinión
o
expresarse
en
público,
su
falta
de
habilidades
o
su
miedo
les
cohíbe
a
la
hora
de
hacerlo
(Bados,
2005).
El
filósofo
José
Antonio
Marina
(2006)
en
su
libro
Anatomía
del
miedo
considera
el
miedo
como
una
ansiedad
provocada
ante
la
anticipación
de
un
peligro.
Por
su
parte,
ya
en
1977
Wallace,
Wallechinsky
y
Wallace
en
su
primer
libro
publicado
The
Book
of
Lists
recopila
una
estadística
sobre
los
miedos
de
las
personas.
Esta
estadística
identifica
en
primer
lugar
el
miedo
a
hablar
en
público,
dejando
por
debajo
de
este,
por
ejemplo,
el
miedo
a
la
enfermedad
o
el
miedo
a
la
muerte.
Diversos
estudios
corroboran
que
un
20-‐30%
de
los
estudiantes
universitarios
(Bados,
1992;
D’El
Rey
&
Pacini,
2005;
Lane
&
Borkovec,
1984;
Lang,
Levin,
Miller
&
Kozak,
1983)
informan
tener
un
gran
miedo
a
hablar
en
público.
Intervenir
o
hablar
en
público
es
considerado
por
adultos
y
adolescentes
como
una
de
las
situaciones
más
difíciles
(Argyle,
1981;
Harris
&
Brown,
1982;
Stein,
Walker
&
Forde,
1994).
Bang-‐Rouhet
(2009)
parte
de
la
idea
de
que
escuchando
a
un
orador
se
puede
descubrir
su
historia
personal
a
través
de
los
gestos,
la
mirada,
el
volumen
de
voz
y
las
entonaciones.
La
experiencia
como
docente
y
miembro
de
tribunales
de
los
TFG,
me
han
permitido,
al
igual
que
a
otros
compañeros,
evidenciar
las
diversas
reacciones
que
presenta
el
alumnado
cuando
se
enfrenta
a
la
exposición
pública
de
un
trabajo
que
tiene
la
finalidad
de
recibir
una
calificación.
Se
pueden
presenciar
reacciones
como
evitar
el
contacto
visual,
temblores
en
manos
y
piernas,
sudoración
de
las
palmas
de
las
manos,
falta
de
aire,
rostro
sonrojado,
pérdida
de
la
concentración,
voz
temblorosa
o
sequedad
en
la
boca.
Estos
síntomas
suelen
ser
consecuencia
del
miedo
que
les
puede
causar
ser
evaluados
negativamente,
no
ser
escuchados
o
valorados,
quedarse
en
blanco
y/o
a
la
vergüenza
que
se
pueda
pasar
frente
a
un
posible
fracaso.
Por
esto,
el
miedo
a
hablar
en
público
se
entiende
como
un
déficit
de
habilidades
para
hablar
en
público
(Marshall,
1981).
Puchol
(2008)
señala
que
el
éxito
o
fracaso
para
hablar
en
público
depende
fundamentalmente
de
la
autoconfianza
que
tenga
uno
mismo,
de
la
habilidad
para
comunicarse
oral
y
gestualmente
y
de
la
confianza
y
simpatía
que
se
transmita
a
la
audiencia.
Como
se
ha
visto,
hoy
en
día
los
estudiantes
universitarios
se
ven
a
menudo
en
la
necesidad
de
exponer
trabajos
en
público,
ante
sus
profesores
y
compañeros.
Se
trata
de
una
situación,
relativamente
nueva
para
algunos
universitarios,
en
la
que
se
ven
expuestos
a
una
valoración
que
generalmente
recibe
una
calificación.
Es
esperable,
por
tanto,
que
aparezca
un
cierto
nivel
de
miedo
en
cualquier
alumno
que
se
expone
a
esta
situación.
En
algunos
casos
dicho
nivel
puede
resultar
excesivo
para
la
persona,
perjudicando
notablemente
su
capacidad
para
hablar
en
público.
Ante
esto,
la
Universidad
debe
brindar
a
los
jóvenes
las
herramientas
que
les
permitan
interactuar
positivamente
con
su
entorno
e
insertarse
de
manera
activa
en
la
vida
social,
laboral
y
cultural.
Hay
que
introducir
nuevas
metodologías
que
ayuden
a
contribuir
al
desarrollo
de
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público.
La
habilidad
de
hablar
en
público
es
algo
que
se
puede
aprender
y
mejorar
con
una
formación
y
no
sólo
con
la
experiencia
(Fernández,
González,
López
&
Manso,
2010).
En
un
estudio
desarrollado
por
Olivares
y
García-‐López
(2002)
mostraron
cómo
los
sujetos
(estudiantes
universitarias)
que
participaron
en
un
tratamiento
que
integraba
un
entrenamiento
en
hablar
en
público,
exposición,
entrenamiento
en
autoinstrucciones
y
en
respiración
redujeron
sus
respuestas
de
ansiedad
social.
Por
ello,
es
necesario
dar
respuesta
a
esta
necesidad
a
partir
del
desarrollo
en
las
aulas
universitarias
de
experiencias
educativas
en
las
que
el
alumnado
obtenga
prácticas
exitosas.
El
estudio
descriptivo
que
se
expone
a
continuación
presenta
la
experiencia
formativa
llevada
a
cabo
con
estudiantes
universitarios
en
relación
con
la
habilidad
de
hablar
en
público.
El
objetivo
principal
de
esta
experiencia
era
dotar
al
alumnado
de
la
Facultad
de
Educación
de
la
Universidad
de
Extremadura
de
los
recursos
necesarios
que
le
permitiesen
desarrollar
la
habilidad
de
hablar
en
público,
y
por
consiguiente,
que
su
nivel
de
miedo
descendiese
cuando
tuviesen
que
hablar
en
público.
Para
ello,
se
impartió
un
taller
compuesto
de
varias
sesiones
donde
se
trabajaron
todos
los
aspectos
de
una
presentación,
desde
la
planificación
teniendo
en
cuenta
el
propósito
y
la
audiencia,
pasando
por
el
diseño
visual
de
las
diapositivas
con
Software
de
presentaciones
(Software
libre
o
Software
de
autor),
hasta
cómo
prepararse,
la
presentación
en
sí,
y
cómo
obtener
retroalimentación
de
cómo
se
ha
hecho.
Más
específicamente,
se
pretendía
identificar
los
puntos
fuertes
y
débiles
del
taller
impartido,
así
como
la
valoración
y
repercusión
de
dicha
experiencia
formativa
en
los
estudiantes
universitarios.
Metodología
La
experiencia
formativa,
realizada
con
alumnos
de
primero
de
Grado
de
Educación
Primaria
de
la
Facultad
de
Educación
de
la
Universidad
de
Extremadura,
se
fundamentó
en
un
diseño
metodológico
de
tipo
descriptivo
en
el
que
se
establecen
tres
fases.
En
la
primera
fase
se
impartió
un
taller,
denominado
Hablar
en
público,
compuesto
de
varias
sesiones
donde
se
trabajaron
todos
los
aspectos
de
una
presentación,
desde
la
planificación
teniendo
en
cuenta
el
propósito
y
la
audiencia,
pasando
por
el
diseño
visual
de
las
diapositivas
con
Software
de
presentaciones
(Software
libre
o
Software
de
autor),
hasta
cómo
prepararse,
la
presentación
en
sí,
y
cómo
obtener
retroalimentación
de
cómo
se
ha
hecho.
En
este
taller
participaron
141
estudiantes
que
asistían
a
la
asignatura
Recursos
Tecnológicos
Didácticos
y
de
Investigación.
En
la
segunda
fase,
una
vez
finalizado
el
taller,
los
alumnos
asistentes
expusieron
un
trabajo
donde
se
evaluaban
todos
los
aspectos
desarrollados
durante
el
taller.
La
evaluación
de
este
trabajo
se
tendría
en
cuenta
para
la
asignatura
con
la
cual
estaba
relacionado
el
taller,
Recursos
Tecnológicos
Didácticos
y
de
Investigación.
Los
alumnos
participantes
hicieron
una
exposición,
en
grupos
de
cuatro
a
seis
miembros,
apoyándose
en
un
software
de
presentaciones,
donde
presentaban
un
trabajo
en
el
que
se
evaluaban
los
aspectos
desarrollados
en
el
taller,
tales
como:
•
Discurso
•
Estructura
•
Exposición
•
Diseño
visual
•
Control
del
tiempo
•
Adecuación
a
la
audiencia
•
Comunicación
verbal,
no
verbal…
Después
de
la
exposición,
cada
alumno,
a
través
de
un
cuestionario
de
satisfacción
(véase
anexo),
valoró
la
formación
recibida
en
dicho
taller.
Dicho
cuestionario
fue
sometido
a
la
valoración
de
expertos,
mediante
grupos
de
discusión.
Se
trata
de
un
cuestionario
autocumplimentado
formado
por
14
ítems
que
estaban
agrupados
en
torno
a
tres
secciones:
(1)
objetivos
y
contenidos
trabajados
en
las
sesiones;
(2)
metodología
empleada
y;
(3)
utilidad,
valoración
global
del
taller.
Cada
uno
de
los
ítems
del
cuestionario
tenía
opciones
de
respuesta
de
una
escala
tipo
Likert
(1932)
con
cinco
niveles
de
acuerdo
o
desacuerdo,
siendo
1
=
Totalmente
en
desacuerdo,
2
=
En
desacuerdo,
3
=
Ni
de
acuerdo
ni
en
desacuerdo,
4
=
De
acuerdo
y
5
=
Totalmente
de
acuerdo.
Junto
a
estos
ítems
se
añadieron
una
serie
de
preguntas
de
las
cuales
obtuvimos
información
sociodemográfica
sobre
los
participantes
(edad,
sexo,
curso…).
Estos
ítems
genéricos
se
encuadran
en
una
sección
denominada
Información
personal.
La
sección
Objetivos
y
contenidos
nos
permite
obtener
información
sobre
si
el
taller
impartido
ha
logrado
las
expectativas
fijadas.
Consta
de
los
siguientes
cuatro
ítems:
1)
En
las
sesiones
realizadas
se
ha
alcanzado
el
objetivo
previsto:
Mejorar
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público;
2)
Los
contenidos
se
han
tratado
de
acuerdo
al
objetivo
propuesto;
3)
La
duración
del
taller
ha
sido
adecuada
al
objetivo
propuesto;
4)
La
duración
del
taller
ha
sido
adecuada
a
los
contenidos
desarrollados.
La
sección
Metodología
ofrece
información
para
comprobar
si
las
estrategias
didácticas
y
la
metodología
empleada
son
las
adecuadas
o,
por
el
contrario,
hay
que
introducir
mejoras
en
próximos
talleres.
También
está
formada
por
cuatro
ítems:
1)
La
metodología
desarrollada
se
ha
adecuado
al
objetivo
propuesto;
2)
La
metodología
desarrollada
se
ha
adecuado
a
los
contenidos
expuestos;
3)
El
material
didáctico
utilizado
ha
sido
adecuado
para
alcanzar
el
objetivo
del
taller;
4)
La
metodología
ha
permitido
la
participación
activa
de
los
asistentes.
La
sección,
Utilidad
y
valoración
global,
nos
facilita
información
sobre
la
calidad
del
taller
y
de
la
repercusión
en
los
participantes
en
la
experiencia.
Esta
sección
está
compuesta
por
los
siguientes
seis
ítems:
1)
El
taller
recibido
es
importante
para
mi
trabajo
como
docente;
2)
Como
alumno,
me
ha
venido
bien
recibir
este
taller;
3)
Recomendaría
este
taller
a
mis
amigos;
4)
Recomendaría
este
taller
a
mis
compañeros
de
clase;
5)
Creo
que
la
exposición
de
mi
trabajo
ha
resultado
mejor
al
haber
recibido
el
taller
de
hablar
en
público;
6)
El
taller
merece
una
valoración
global
positiva.
En
la
tercera
fase,
la
información
recogida
de
los
cuestionarios
fue
analizada
con
el
objetivo
de
identificar
los
puntos
fuertes
y
débiles
del
taller
impartido,
así
como
la
necesidad
de
hacer
extensivo
este
tipo
de
taller
al
resto
de
estudiantes,
en
general,
y
a
personas
interesadas
en
desarrollar
la
habilidad
de
hablar
en
público,
en
particular.
Para
proceder
con
el
análisis
de
los
datos
de
este
cuestionario
se
consideró
en
primer
lugar
cada
uno
de
los
apartados
en
los
cuales
se
enmarcaban
las
preguntas:
(1)
objetivos
y
contenidos;
(2)
metodología
y;
(3)
utilidad,
valoración
global.
En
segundo
lugar,
se
analizaron
cada
uno
de
los
ítems
de
la
encuesta.
Esto
nos
llevó
a
observar
la
frecuencia
con
que
aparecía
cada
respuesta
en
cada
pregunta
y,
por
lo
tanto,
a
codificar
la
información
y
a
agrupar
los
datos
cuantitativos
en
frecuencias
y
porcentajes.
No
sólo
se
llevó
a
cabo
el
análisis
teniendo
en
cuenta
el
conjunto
de
participantes
sino
que
también
se
analizaron
los
datos
por
grupo
de
sexo
(hombre
y
mujer).
Finalmente,
se
realizaron
tablas
para
sintetizar
la
información,
así
como
representaciones
gráficas
de
los
datos.
A
partir
de
aquí
se
pudo
realizar
una
interpretación
descriptiva
de
la
información
dentro
del
contexto
en
el
que
fue
recogida
y
por
tanto,
extraer
unas
conclusiones.
Resultados
El
procedimiento
anteriormente
descrito
dio
lugar
a
una
amplia
base
de
datos
cuantitativos,
cuyos
resultados
se
muestran
y
explican
detalladamente
de
acuerdo
con
las
secciones
que
componen
el
cuestionario
de
satisfacción.
Información
personal
En
esta
sección,
como
se
ha
comentado,
se
contemplan
aquellas
preguntas
referidas
a
edad,
sexo,
curso…
En
concreto,
en
esta
experiencia
participaron
un
total
de
141
alumnos
(52
hombres
y
89
mujeres)
procedentes
de
la
Facultad
de
Educación
de
la
Universidad
de
Extremadura
del
Grado
de
Educación
Primaria,
con
edades
comprendidas
entre
los
18
y
38
años
(véase
tabla
1),
siendo
de
los
18
a
los
20
años
el
rango
de
edad
más
numeroso.
Tabla
1.
Edad
de
los
alumnos
participantes.
Edad
Número
de
alumnos
18
36
19
52
20
30
21
12
22
2
23
4
24
3
29
1
38
1
Fuente:
Elaboración
propia.
Objetivos
y
contenidos
Como
se
puede
apreciar
en
la
tabla
2
y
gráfico
1,
el
62,41%
está
de
acuerdo
en
que
el
taller
ofertado
les
ha
permitido
mejorar
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público.
El
51,77%
considera
que
los
contenidos
se
han
tratado
de
acuerdo
al
objetivo
propuesto.
El
38,30%
está
totalmente
de
acuerdo
con
la
duración
del
taller
para
mejorar
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público.
Un
45,39%
si
están
de
acuerdo
y
coinciden
en
que
la
duración
del
taller
ha
sido
adecuada
a
los
contenidos
que
se
han
desarrollado.
Tabla
2.
Sección
Objetivos
y
contenidos.
Nivel
de
acuerdo
o
desacuerdo
Ítem
1
2
3
4
5
2.1.
En
las
sesiones
realizadas
se
ha
alcanzado
el
objetivo
previsto:
Mejorar
0,71%
1,42%
15,60%
62,41%
19,86%
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público.
2.2.
Los
contenidos
se
han
tratado
de
0,00%
1,42%
7,09%
51,77%
39,72%
acuerdo
al
objetivo
propuesto.
2.3.
La
duración
del
taller
ha
sido
1,42%
2,13%
21,99%
36,17%
38,30%
adecuada
al
objetivo
propuesto.
2.4.
La
duración
del
taller
ha
sido
adecuada
a
los
contenidos
0,00%
1,42%
15,60%
45,39%
37,59%
desarrollados.
Fuente:
Elaboración
propia.
70
62,41
60
51,77
50
45,39
Porcentaje
38,30
40
1
30 2
20 3
10 4
0
5
2.1.
Mejorar
2.2.
Contenidos
2.3.
Duración
2.4.
Duración
competencia
adecuados
adecuada
al
adecuada
a
objetivo
contenidos
Ítem
Gráfico
1.
Sección
Objetivos
y
contenidos.
Fuente:
Elaboración
propia.
Como
mencionábamos
anteriormente,
el
análisis
hecho
de
los
datos
extraídos
de
la
encuesta
nos
ha
permitido
obtener
información
con
respecto
a
la
opinión
de
hombres
y
mujeres.
En
el
gráfico
2
se
pude
ver
que
es
mayor
el
porcentaje
en
el
grupo
de
mujeres
quienes
están
totalmente
de
acuerdo
con
los
cuatro
ítems
correspondientes
al
apartado
Objetivos
y
contenidos.
80
70
60
44,94
Porcentaje
50
42,70
39,33
40
30
23,60
20
Hombre
10
Mujer
0
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
2.1.
Mejorar
2.2.
Contenidos
2.3.
Duración
2.4.
Duración
competencia
adecuados
adecuada
al
adecuada
a
objetivo
contenidos
Ítem
Gráfico
2.
Sección
Objetivos
y
contenidos
según
el
sexo.
Fuente:
Elaboración
propia.
Metodología
Un
46,81%
está
de
acuerdo
en
que
la
metodología
empelada
se
ha
adecuado
al
objetivo
propuesto.
El
53,90%
están
de
acuerdo
con
la
metodología
seguida
en
relación
a
los
contenidos
trabajados.
Están
totalmente
de
acuerdo
con
el
material
didáctico
utilizado
un
43,97%.
En
cuanto
al
último
ítem
de
esta
sección
el
39,01%
están
de
acuerdo
con
que
la
metodología
ha
permitido
una
participación
activa
por
parte
de
los
asistentes.
Véase
tabla
3
y
gráfico
3.
Tabla
3.
Sección
Metodología.
Nivel
de
acuerdo
o
desacuerdo
Ítem
1
2
3
4
5
3.1.
La
metodología
desarrollada
se
ha
0,00%
2,13%
11,35%
46,81%
39,72%
adecuado
al
objetivo
propuesto.
3.2.
La
metodología
desarrollada
se
ha
1,42%
0,00%
8,51%
53,90%
36,17%
adecuado
a
los
contenidos
expuestos.
3.3.
El
material
didáctico
utilizado
ha
sido
adecuado
para
alcanzar
el
objetivo
0,71%
2,84%
9,93%
42,55%
43,97%
del
taller.
3.4.
La
metodología
ha
permitido
la
2,13%
7,80%
12,77%
39,01%
38,30%
participación
activa
de
los
asistentes.
Fuente:
Elaboración
propia.
60 53,90
50
46,81
43,97
39,01
40
Porcentaje
1
30
2
20
3
10 4
0
5
3.1.
Metodología
3.2.
Metodología
3.3.
Material
3.4.
Participación
adecuada
al
adecuada
a
los
didáctico
activa
objetivo
contenidos
adecuado
Ítem
Gráfico
3.
Sección
Metodología.
Fuente:
Elaboración
propia.
Al
igual
que
ocurría
con
el
apartado
Objetivos
y
contenidos,
en
el
gráfico
4
vemos
que
es
mayor
el
porcentaje
en
el
grupo
de
mujeres
quienes
están
totalmente
de
acuerdo
con
los
cuatro
ítems
del
apartado
Metodología.
60
48,31
50
42,70
40,45
37,08
40
Porcentaje
30
20
Hombre
10
0
Mujer
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
3.1.
3.2.
3.3.
Material
3.4.
Metodología
Metodología
didáctico
Participación
adecuada
al
adecuada
a
los
adecuado
activa
objetivo
contenidos
Ítem
Gráfico
4.
Metodología
según
el
sexo.
Fuente:
Elaboración
propia
70
64,54
63,83
60,99
59,57
60
50
46,10
43,97
1
Porcentaje
40
2
30
3
4
20
5
10
0
4.1.
Importante
4.2.
Importante
4.3.
Recomendaría
4.4.
Recomendaría
4.5.
Exposición
4.6.
Valoración
trabajo
docente
como
alumno
amigos
compañeros
clase
mejor
positiva
Ítem
Gráfico
5.
Utilidad
y
valoración
global.
Fuente:
Elaboración
propia.
Si
apreciamos
el
gráfico
6,
se
vuelve
a
repetir
el
dato
de
que
es
mayor
el
porcentaje
en
el
grupo
de
mujeres
quienes
están
totalmente
de
acuerdo
con
los
seis
ítems
del
apartado
Utilidad
y
valoración
global.
80
73,03
71,91
68,54
70
64,04
60
51,69
47,19
50
Porcentaje
40
Hombre
30
Mujer
20
10
0
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
1
2
3
4
5
4.1.
Importante
4.2.
Importante
4.3.
Recomendaría
4.4.
Recomendaría
4.5.
Exposición
4.6.
Valoración
trabajo
docente
como
alumno
amigos
compañeros
clase
mejor
positiva
Ítem
Gráfico
6.
Utilidad
y
valoración
global
según
el
sexo.
Fuente:
Elaboración
propia.
Conclusiones
En
esta
experiencia
formativa
se
pretendía
dotar
al
alumnado
universitario
del
Grado
de
Educación
Primaria
de
la
Facultad
de
Educación
de
la
Universidad
de
Extremadura
de
los
recursos
necesarios
que
le
permitan
desarrollar
la
habilidad
de
hablar
en
público.
Los
resultados
extraídos
de
la
encuesta
de
satisfacción
muestran
la
generalización
del
éxito
del
taller
Hablar
en
público
impartido
a
los
estudiantes
universitarios
del
Grado
de
Educación
Primaria.
Por
ello,
se
debe
considerar
la
posibilidad
de
ofertar
este
tipo
de
taller
a
los
alumnos
del
Grado
de
Maestro,
en
general,
con
objeto
de
contribuir
al
desarrollo
de
la
competencia
transversal
de
hablar
en
público,
y
por
tanto,
a
enriquecer
sus
potenciales
como
docentes
y
al
resto
de
personas
que
tengan
que
hacer
exposiciones
ante
una
audiencia
y
no
dispongan
de
la
habilidad
de
hablar
en
público,
en
particular.
Además,
como
hemos
indicado,
los
destinatarios
de
esta
experiencia
son
alumnos
de
la
Facultad
de
Educación,
y
por
tanto,
al
finalizar
sus
estudios
se
convertirán
en
docentes.
Esta
es
otra
de
las
razones,
dado
el
carácter
de
“leader”
que
todo
docente
debe
ejercer,
por
la
que
es
necesaria
esta
habilidad
para
trabajar
con
grupos
de
personas
con
objeto
de
introducir
mejoras,
transformaciones,
y
cambios
en
la
práctica
educativa.
De
hecho,
si
no
se
convence,
no
es
posible
iniciar
ningún
cambio.
No
obstante,
hay
que
señalar
como
puntos
débiles
del
taller
impartido
que
los
asistentes
al
taller
demandan
una
mayor
duración
del
mismo
para
poder
alcanzar
la
habilidad
de
hablar
en
público
así
como
una
participación
más
activa
con
respecto
a
la
metodología
desarrollada,
ya
que
son
menos
de
la
mitad
quiénes
están
totalmente
de
acuerdo
con
el
tipo
de
participación
dada
a
los
alumnos
y
con
la
duración
del
taller
(38,30%
y
38,30%
respectivamente).
Por
lo
tanto,
debemos
contemplar
para
mejorar
futuras
ediciones
del
taller
la
posibilidad
de
ampliar
la
duración
del
mismo
y
proporcionar
mayor
participación
a
los
asistentes
en
las
actividades
desarrolladas.
También
sería
interesante
indagar
a
través
de
entrevistas
o
grupos
de
discusión
porqué
los
hombres
parecen
darle
menos
utilidad
que
las
mujeres
al
taller
recibido
sobre
hablar
en
público.
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ANEXO
ENCUESTA DE SATISFACCIÓN
Taller: Hablar en público
Este cuestionario forma parte del Proyecto Desarrollo de competencias transversales en el aula universitaria. Hablar en público (código:
B_2014_05), financiado en convocatoria pública competitiva por el Servicio de Orientación y Formación Docente de la Universidad de
Extremadura dentro de la Convocatoria de Acciones para la Consolidación del Espacio Europeo de Educación Superior en la UEx (2013-
2014). Está destinado a recoger información sobre las sesiones recibidas en el Taller: Hablar en público. Su opinión es importante. Por
favor, responda con la máxima sinceridad.
Garantizamos la confidencialidad de los datos recogidos y agradecemos el interés y el tiempo disponible (cerca de cinco minutos) para
responder a este cuestionario.
Fecha: ______________________
1. Información personal
Centro: ______________________________________________________________________________________
Titulación: ____________________________________________________________________________________
Especialidad: __________________________________________________________________________________
Marca con una cruz en la casilla correspondiente, siendo 1=Totalmente en desacuerdo, 2=En
desacuerdo, 3=Ni de acuerdo ni en desacuerdo, 4=De acuerdo y 5=Totalmente de acuerdo.
1 2 3 4 5
2. Objetivos y contenidos
2.1. En las sesiones realizadas se ha alcanzado el objetivo previsto: Mejorar la
competencia transversal de hablar en público.
2.2. Los contenidos se han tratado de acuerdo al objetivo propuesto.
2.3. La duración del taller ha sido adecuada al objetivo propuesto.
2.4. La duración del taller ha sido adecuada a los contenidos desarrollados.
3. Metodología
3.1. La metodología desarrollada se ha adecuado al objetivo propuesto.
3.2. La metodología desarrollada se ha adecuado a los contenidos expuestos.
3.3. El material didáctico utilizado ha sido adecuado para alcanzar el objetivo del taller.
3.4. La metodología ha permitido la participación activa de los asistentes.
4. Utilidad y valoración global
4.1. El taller recibido es importante para mi trabajo como docente.
4.2. Como alumno, me ha venido bien recibir este taller.
4.3. Recomendaría este taller a mis amigos.
4.4. Recomendaría este taller a mis compañeros de clase.
4.5. Creo que la exposición de mi trabajo ha resultado mejor al haber recibido el taller
de hablar en público.
UNIDAD N°3
LA EXPRESIÓN ORAL
TEMA:
LA EXPRESIÓN ORAL
OBJETIVO
INTRODUCCIÓN
ELEMENTOS Y CARACTERÍSTICAS
ACEPTACIÓN
CLASIFICACIÓN E INTERPRETACIÓN
RETROALIMENTACIÓN
ESCUCHA ACTIVA
ACEPTACIÓN
Es el momento en el que se recibe el mensaje, se perciben los gestos
corporales y se procesa la información, evitando elaborar juicios.
CLASIFICACIÓN E INTERPRETACIÓN
Este paso implica separar el contenido de la información emocional
para poder analizarla.
ESCUCHA ACTIVA
ACEPTACIÓN
Es el momento en el que se recibe el mensaje, se perciben los gestos
corporales y se procesa la información, evitando elaborar juicios.
CLASIFICACIÓN E INTERPRETACIÓN
Este paso implica separar el contenido de la información emocional
para poder analizarla.
RETROALIMENTACIÓN
En esta instancia, demostramos al emisor del mensaje que estamos
prestando atención. Por esta razón, en ocasiones, se parafrasea una
oración o se enuncian palabras afirmativas como “entiendo”, “claro”,
“sí”.
ESCUCHA ACTIVA
CARACTERÍSTICAS ESCUCHA ACTIVA
Fuera los prejuicios. Para realizar una escucha activa deben evitarse los
juicios de valor prematuros sobre el mensaje del orador
Aprovecha las oportunidades. Una persona que realiza una escucha activa
trata de aprovechar las oportunidades que se le presentan, como la de
aprendizaje.
CARACTERÍSTICAS ESCUCHA ACTIVA
UNIDAD N°3
LA EXPRESIÓN ORAL
TEMA:
COMUNICACIÓN ORAL
OBJETIVO
INTRODUCCIÓN
EL DISCURSO
LA ORATORIA
ORATORIA SOCIAL
También llamada ceremonial, augural o sentimental, son las que se
desarrollan en un determinado ámbito donde el ser humano
participa de una ceremonia.
ORATORIA PEDAGÓGICA
Busca transmitir la cultura mediante la palabra hablada, es decir
transmite conocimientos. Es una oratoria didáctica o académica que
busca enseñar.
.
TIPOS DE ORATORIA
ORATORIA FORENSE
Se usa dentro de la ciencia jurídica y busca exponer con claridad los
informes de jueces, abogados y fiscales.
ORATORIA PERSUASIVA
Cuando los políticos exponen y debaten ideas políticas y utilizada
principalmente en época de sufragio
CARACTERÍSTICAS DE LA ORATORIA
CLARIDAD
El orador debe hablar con claridad, pero además con entusiasmo, eficacia y
persuasión. El lenguaje es su herramienta principal. Un orador debe saber
hacerse escuchar. debe lograr que el público muestre interés y sea reflexivo.
PERSUASIÓN
POSITIVISMO
CONGRUENCIA
Un orador debe ser sincero y congruente, es decir, que haya relación entre
lo que un orador dice y hace. Además, debe ser leal a quien ha confiado
en él o ella.
EL DISCURSO
DISCURSO DIRECTO
DISCURSO INDIRECTO
PRECISO
Debe exponer un tema y sus argumentos de manera que pueda ser
comprendido por la audiencia.
VERIFICABLE
Debe basarse en hechos comprobables que justifiquen y den validez al
discurso
ORDENADO
Debe organizar la información de manera clara y ordenada para ser
interpretado por los oyentes o lectores.
PARTES DEL DISCURSO
INTRODUCCIÓN
Se presenta el tema a tratar
DESAROLLO
CONCLUSIÓN
Se sintetizan las ideas más relevantes y se destaca el
aporte del análisis de la argumentación expuesto.
BIBLIOGRAFÍA
TIPOLOGÍAS
TEXTUALES
SUBTEMAS
WWW.UNEMI.EDU.EC
OBJETIVO
WWW.UNEMI.EDU.EC
CARACTERÍSTICAS
SENCILLEZ COHERENCIA
CLARIDAD CONCORDANCIA
COHESIÓN VERIFICABILIDAD
ADECUACIÓN
CONCISIÓN
UNIVERSALIDAD
OBJETIVIDAD
ESTILO
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
DESCRIPTIVO
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
NARRATIVO
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
EXPOSITIVO
ESTRUCTURA
CONTRASTE ENUMERACIÓN
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
ARGUMENTATIVO
Aquel que expone las razones que sirven para defender una
idea o una opinión.
ESTRUCTURA
EL CUERPO DE ARGUMENTACIÓN
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
PLANTEAMIENTO
El progresivo calentamiento de la Tierra desencadenará una serie de
consecuencias no sólo a la humanidad, sino también para el resto de
los seres vivos.
CUERPO
Si continúa la vertiginosa emisión de gases a la atmósfera como el
dióxido de carbono, el gas más peligroso en la generación del efecto
invernadero, podrá producirse cambios climáticos importantes
CONCLUSIÓN
Por eso, muchos expertos creen necesario que cada país controle la
emisión de gases nocivos para la atmósfera.
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTO SEGÚN LA FORMA
DEL DISCURSO
INSTRUCTIVO
DIÁLOGO
WWW.UNEMI.EDU.EC
TEXTO SEGÚN SU ÁMBITO DE USO
PERIODÍSTICOS
Los textos periodísticos son textos publicados en medios de
comunicación escritos (como periódicos, revistas o páginas web
informativas) que tienen como función principal informar al lector
acerca de un tema de interés general.
HUMANÍSTICOS
son aquellos que hacen referencia al pensamiento, las relaciones
sociales o la lengua de los seres humanos. En ellos, se acostumbra a
combinar la exposición con la argumentación.
WWW.UNEMI.EDU.EC
TEXTO SEGÚN SU ÁMBITO DE USO
CIENTÍFICOS
Un texto científico es una producción escrita que aborda teorías,
conceptos o cualquier otro tema con base en el conocimiento científico
a través de un lenguaje técnico especializado.
JURÍDICOS
Los textos jurídicos son aquellos emitidos por el Estado para la
regulación de las relaciones sociales.
WWW.UNEMI.EDU.EC
TEXTO SEGÚN SU ÁMBITO DE USO
LITERARIOS
Se trata de la creación de mundos a través del lenguaje, en los que
prima la subjetividad, ya sea la expresión de sentimientos, compartir un
punto de vista, hacer un retrato social, aludir a la memoria, a la
identidad de los pueblos o a una cultura.
VIDA COTIDIANA
Es toda expresión comunicativa que nos sirve para intercambiar
información dentro del mundo cotidiano.
WWW.UNEMI.EDU.EC
PÁRRAFOS
WWW.UNEMI.EDU.EC
UNIDAD 4 - ESCRITURA Y REDACCIÓN
TIPOLOGÍAS
TEXTUALES
SUBTEMAS
WWW.UNEMI.EDU.EC
OBJETIVO
WWW.UNEMI.EDU.EC
CARACTERÍSTICAS
En general, los párrafos se caracterizan por lo siguiente:
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE PÁRRAFOS
ORDINARIOS O NORMALES
Los más frecuentemente usados, cuyo rasgo distintivo es la
sangría en su primera línea, con el resto encuadradas al mismo
ancho y sin separarse de los párrafos siguientes con espacios en
blanco.
MODERNOS O ALEMANES
Son la contrapartida de los españoles, pues sangran todas sus
líneas menos la primera. Son usualmente empleados en
diccionarios, bibliografías o índices.
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOLOGÍA TEXTUAL
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TIPOLOGÍAS TEXTUALES
NARRATIVO
EXPOSITIVO
LITERARIO
DESCRPTIVO
ARGUMENTATIVO
WWW.UNEMI.EDU.EC
CONECTORES TEXTUALES
WWW.UNEMI.EDU.EC
BIBLIOGRAFÍA
WWW.UNEMI.EDU.EC
UNIDAD 4- REDACCIÓN CIENTÍFICA
TEXTO
CIENTÍFICO
SUBTEMAS
WWW.UNEMI.EDU.EC
TIPOS DE TEXTOS CIENTÍFICOS
DOCUMENTOS CIENTÍFICOS
WWW.UNEMI.EDU.EC
ESTRUCTURA DEL TEXTO CIENTÍFICO
TEMA REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
RESUMEN
ABSTRAC
INTRODUCCIÓN
MARCO TEÓRICO
METODOLOGÍA
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UNIDAD 4- REDACCIÓN CIENTÍFICA
ENSAYO
SUBTEMAS
DEFINICIÓN Y ESTRUCTURA
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ESANYO - ESTRUCTURA
INTRODUCCIÓN DESARROLLO
CONCLUSIÓN
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