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El sistema de recompensa cerebral se activa mediante estímulos gratificantes y aumenta la liberación de dopamina, causando una sensación de placer. Esta sensación puede conducir a adicciones, que son enfermedades crónicas caracterizadas por la búsqueda patológica de recompensa a través del uso de sustancias u otras actividades. Tanto los reforzadores naturales como los artificiales influyen en el sistema de recompensa cerebral y desempeñan un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento de las adicciones
El sistema de recompensa cerebral se activa mediante estímulos gratificantes y aumenta la liberación de dopamina, causando una sensación de placer. Esta sensación puede conducir a adicciones, que son enfermedades crónicas caracterizadas por la búsqueda patológica de recompensa a través del uso de sustancias u otras actividades. Tanto los reforzadores naturales como los artificiales influyen en el sistema de recompensa cerebral y desempeñan un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento de las adicciones
El sistema de recompensa cerebral se activa mediante estímulos gratificantes y aumenta la liberación de dopamina, causando una sensación de placer. Esta sensación puede conducir a adicciones, que son enfermedades crónicas caracterizadas por la búsqueda patológica de recompensa a través del uso de sustancias u otras actividades. Tanto los reforzadores naturales como los artificiales influyen en el sistema de recompensa cerebral y desempeñan un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento de las adicciones
adicciones? ¿Cómo funciona el sistema de recompensa cerebral en las adicciones?
Cuando se habla de sistema de recompensa se refiere a un grupo de
estructuras que se activan mediante estímulos de recompensa o refuerzo: cuando se ve expuesto a un estímulo gratificante, el cerebro responde aumentando la liberación del neurotransmisor dopamina. El sistema de recompensa del cerebro o sistema de recompensa cerebral es el encargado de mediar la sensación de placer en el organismo. Este sistema se activa frente a estímulos o acciones que generan placer en el individuo. Es un área que nos causa una sensación de bienestar y como consecuencia produce que repitamos una conducta. Se le llama adicción a una enfermedad crónica y recurrente del cerebro que se caracteriza por una búsqueda patológica de la recompensa o alivio a través del uso de una sustancia u otras acciones. Es decir, se considera adicción cuando se siente cierta dependencia hacia una sustancia o actividad. Existen distintos tipos de adicciones dentro de cada grupo, de mayor o menor gravedad. Considerada una enfermedad, la adicción ofrece placer o estímulos a la persona que la padece, incluso llega a modificar su conducta. Existen elementos que pueden reforzar las adicciones: • Reforzadores naturales: aquellos que tienen beneficios a nuestra especie. • Reforzadores artificiales: aquellos que no tiene un fin evolutivo especifico. Ambos tipos de reforzadores influyen en las estructuras neuronales que tenemos y que conforman el sistema de recompensa cerebral. Dicho sistema cumple una función elementar en el desarrollo y mantenimiento de adicciones. El circuito de recompensa desempeña un papel fundamental en el desarrollo y mantenimiento de una adicción, ya que dicho circuito se encarga de regular aquellas sensaciones placenteras, facilitar el aprendizaje y memorizar aquellos estímulos contextuales, que pueden servir como desencadenantes en la repetición de una conducta.