Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Control Social y Derecho Penal
Control Social y Derecho Penal
D El artículo presenta una síntesis de las corrientes teóricas sobre el control social,
el conflicto y la desviación social, a partir de las cuales se profundiza en la revisión
teórica del derecho penal y sus instituciones.
E The article presents a synthesis of the points of view and theoretical currents for
analyzing social control, conflict and social deviance, to then address in greater
depth a theoretical revision of criminal law and its institutions.
* Conferencia pronunciada en la reunión anual de la Sociedad Cubana de Ciencias Penales, año 2000
** Doctor en derecho de la Universidad de La Habana, abogado del Bufete de Servicios Legales Especia-
lizados, profesor de la Facultad de Derecho de La Universidad de la Habana, miembro del Consejo
Directivo de ILSA, miembro del Consejo de Dirección del Instituto Latinoamericano para la Prevención
del Delito y Tratamiento al Delincuente (Ilanud) de las Naciones Unidas.
Correo electrónico: cruzochoa@hotmail.com
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
44 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
El profesor Bergalli (1998) nos dice: “empero el orden social ha de ser man-
tenido y para ello las sociedades de cualquier género han dispuesto de
mecanismos para tal fin”. Esta actuación de la sociedad y el Estado sólo
será legítima siempre que se realice en un marco legal y de respeto a la
dignidad del hombre.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 45
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
46 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 47
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
48 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
REACCIÓN SOCIAL
La reacción social debe ser entendida como la respuesta de la so-
ciedad y del Estado a la conducta desviada. La reacción social puede ser
formal e institucional (cuando la realizan las instituciones del Estado) o
informal. Esta última puede considerarse como la suma de respuestas del
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 49
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
50 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
DERECHO PENAL
El control social penal es un subsistema en el sistema total de
control social. Su especificidad deriva del objeto a que se refiere, no a toda
la conducta desviada sino sólo al delito así como a sus fines, prevención y
represión, y a los medios que utiliza para ello, las penas y medidas de segu-
ridad, con una rigurosa formalización en su forma de operar acorde al prin-
cipio de legalidad.
Pero el control penal como modalidad del llamado control social
formal entra en funcionamiento sólo cuando han fracasado los mecanis-
mos primarios del control social informal e incluso las formas más blandas
del control social formal que intervienen previamente. Cuando el conflicto
social reviste particular gravedad, su solución no puede quedar a merced
de las instancias del control social informal. Entonces interviene el Estado,
a través de la justicia penal, y lo hace sometiéndose a normas de actuación
escrupulosamente diseñadas para asegurar la objetividad de su interven-
ción y el debido respeto a las garantías de las personas involucradas en el
conflicto. Sin embargo, el control social penal tiene unas limitaciones es-
tructurales, inherentes a su naturaleza y función, de modo que no es posi-
ble exacerbar indefinidamente su efectividad para mejorar de forma
progresiva su rendimiento. El control penal en las sociedades que poseen
una organización jurídica-constitucional y un Estado de derecho, nace a
través de la institucionalización normativa. No cabe duda que la
positivización del derecho penal tiene su origen en una necesidad valorativa
del comportamiento humano.
El derecho penal objetivo está constituido por aquel conjunto de
normas a partir de las cuales la conducta de las personas puede ser valo-
rada como no deseable por los grupos hegemónicos de poder que conside-
ran que debe ser punible.
De la citada estructura de control social –y de las relaciones entre
el control social informal y el formal– se desprenden dos consecuencias
que afectan al control penal: en primer lugar, la naturaleza subsidiaria de
éste; en segundo lugar, la necesidad de una correcta coordinación e inte-
gración de los dos tipos de control como base para una eficaz prevención
del delito, el cual no debe llevarse sólo a través del control penal formal. En
efecto, si todo orden social cuenta con mecanismos primarios de auto-
protección, que deberían ser eficaces, la intervención del control social for-
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 51
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
52 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
BIEN JURÍDICO
Uno de los temas más polémicos dentro del derecho penal es la
respuesta a la pregunta de qué hechos convierte en delito, o sea el proceso
de selección de lo que debe y puede proteger, de acuerdo con la naturaleza
instrumental del derecho penal el cual está dedicado a la protección de los
valores fundamentales del orden social, esto es lo que se ha dado en llamar
la salvaguarda de los bienes jurídicos. Es opinión muy extendida que éstos
no reciban, ni deban recibir, una protección absoluta y uniforme del dere-
cho, sino selectiva, fragmentaria. Sólo se protege los bienes más valiosos
para la convivencia; lo hace, además, exclusivamente frente a los ataques
más intolerables de que pueden ser objeto, esto es lo que caracteriza la
naturaleza de la intervención penal por lo cual sólo debe sancionar algu-
nas modalidades de conducta que lesionen o pongan en peligro bienes ju-
rídicos, es decir, los comportamientos más peligrosos y repudiados por la
sociedad.
El intervencionismo estatal en el ámbito punitivo no debe signifi-
car que el derecho a castigar del Estado se ejercite con una extensión máxima
respecto a cualquier bien jurídico y cualquiera que sea la entidad del ata-
que a los mismos, sino que debe limitarse a una intervención mínima in-
dispensable. En consecuencia, el derecho penal realiza una función
insustituible, porque la vida en común de los seres humanos sólo es viable
si se garantizan eficazmente estos bienes jurídicos. Si no existiera una
instancia superior que asegurase la inviolabilidad de la vida, la salud, la
libertad, etc., no habría convivencia posible al menos en el estadio actual
del desarrollo social.
Según el criterio del bien jurídico, la dañosidad social de un hecho
depende de que lesione o ponga en peligro intereses fundamentales que
afectan las condiciones de vida del hombre que constituyen los presupues-
tos indispensables para la vida en sociedad.
La teoría del bien jurídico es producto del liberalismo del siglo XIX,
donde el agudo pensamiento político y jurídico de Montesquieu apuntó con
precisión la necesidad de una fundamentación de la pena, sobre la base de
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 53
1
Von Lizt establece, según Polaino en la obra citada, el postulado de que el fin de todo derecho penal se
halla exclusivamente considerado por intereses humanos, a lo que con mayor exactitud denomina
bienes jurídicos. Para Lizt el origen del bien jurídico es independiente del derecho positivo, y se
encuentra por ello en situación idónea para señalar límites al legislador penal.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
54 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
2
A la escuela de Kiel pertenecieron penalistas alemanes caracterizados por su irracionalismo metodológico,
quienes no vacilaron en justificar las leyes antisemitas y discriminatorias en nombre del sano espíritu del
pueblo alemán y los supremos intereses de la raza aria.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 55
sis del bien jurídico viene referido a un criterio de selección del mismo, es
decir, cuáles deben ser los criterios en la determinación del bien jurídico,
para ello parte de la doctrina recurre a la constitución como ente seleccio-
nador de los bienes jurídicos (Carbonell, 1997).
Los criterios de limitación del legislador en la tarea de configurar
bienes jurídicos sólo se pueden encontrar en una fuente jerárquica supe-
rior que se imponga por su propia naturaleza; así, la norma constitucional
aparece como el instrumento más idóneo para orientar la selección de los
bienes jurídicos que deben ser protegidos.
Se ha aducido la existencia de bienes jurídicos de tutela penal
que se deben obtener a partir de los bienes que la constitución reconoce, o
sea a partir de los valores e intereses reconocidos por ella, bienes llamados
constitucionales y que llegan a establecer una jerarquía en cuanto al valor
que se les da. Otros autores han preferido establecer en lugar de valores
constitucionales criterios inspiradores provenientes de la constitución para
tratar de encontrar en sus normas el contenido material respecto de los
bienes jurídicos y con base en ellos intentar determinar las reglas y los
elementos esenciales de convivencia. Se sostiene conforme a esto que la
constitución ofrece un marco jurídico-político general, una llamada orien-
tación básica del ius puniendi, ésta es la opinión con la cual simpatizamos
en lo relativo a las relaciones entre bien jurídico y constitución.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
56 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 57
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
58 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
FUNCIÓN DE LA PENA
La pena es, en efecto, uno de los instrumentos más característi-
cos con que cuenta el Estado para imponer sus normas jurídicas, y su
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 59
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
60 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
DOGMÁTICA PENAL3
La dogmática penal cumple una de las más importantes funcio-
nes que tiene encomendada la actividad jurídica en general en un Estado
de derecho: la de garantizar los derechos fundamentales del individuo frente
al uso del poder por el Estado que, aunque se encauce dentro de unos
límites, necesita del control y la seguridad de esos límites. La dogmática
jurídico-penal se presenta así como una consecuencia del principio de in-
tervención legalizada del poder punitivo estatal, y como una conquista irre-
versible del pensamiento democrático. La dogmática jurídico penal, hace
posible sustraer al derecho penal de la irracionalidad, la arbitrariedad y la
improvisación. Cuando menos desarrollada esté la dogmática, más impre-
visible será la decisión de los tribunales, y la condena o la absolución de-
penderán más del azar y de factores incontrolables. La aspiración de la
dogmática no ha sido cultivar su disciplina –l’art pour l’art–, sino la de
obtener seguridad jurídica, levantar un edificio frente a intervenciones per-
versas.
La dogmática, al posibilitar una adecuación diferenciada de los
casos realmente existentes, sienta las bases de una aplicación más pro-
porcionada y justa del derecho penal a las diversas situaciones delictivas.
Hay momentos en que se ha pretendido marginar a la perspectiva dogmáti-
ca atribuyendo el papel central en el seno de las ciencias penales a las
consideraciones criminológicas o político-criminales; ello ha ocurrido en la
segunda mitad del siglo XIX y en buena parte del siglo XX motivado por el
predominio del pensamiento positivista.
3
Para Carbonell Mateau en la obra citada, la dogmática es la obtención de características genéricas de las
normas, y en la categorización de los diferentes componentes de ella es donde se realiza la auténtica
ciencia del derecho penal, se elaboran las teorías jurídicas del delito y la pena, y se obtienen los
conceptos generales que permiten hablar de una ciencia más allá de la simple acumulación de las
normas penales.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 61
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
62 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
Control social y derecho penal 63
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. GARCÍA-PABLOS DE MOLINA, Antonio (1996), Criminología. Una introduc-
ción a sus fundamentos teóricos para juristas, 3ra. edición, corregida y
aumentada, Valencia, Tirant lo blanch.
2. Sociology of Penal Control within the framework of the Sociology of Law (1991),
Oñati Proceedings, Tomo 10, España.
3. BERGALLI, Roberto, María José AÑON, Manuel CALVO y Pompeau CASANOVAS
(1998), “Derecho y control social”, en Derecho y sociedad, Valencia, Edi-
torial Tirant lo Blanch.
4. PAVARINI (1994), “Como resistir. Control social y saber crítico”, en Capítulo
Criminológico Nº 22, Maracaibo.
5. SÁNCHEZ SANDOVAL, Augusto (1998), Revista Iter Criminis, México, Inecip.
6. SPITZER Steven (1980), “Hacia una teoría marxista de la desviación”, en Crimi-
nal behavoir. Readings in Criminology, Delos H. Kelley, New York, St Martins
Press.
7. BALAN, Bregar y SCHMIDT (1970), Crime and deviance in America: A Critical
Approach, Belemont. California, Wadswworth Publishing Company.
8. POLAINO NAVARRETE (1974), El bien jurídico en el derecho penal, Sevilla, Publi-
caciones de la Universidad de Sevilla.
9. BUSTOS RAMÍREZ, Juan (1994), Manual de derecho penal, 4ta. edición, Barce-
lona, PPU.
10. WELZEL, Hans (1976), Derecho penal alemán, 2da. edición, Santiago de Chile,
Editorial Jurídica de Chile.
11. CARBONELL, Mateau (1995), Derecho penal. Concepto y principios constituciona-
les, Valencia, Editorial Tirant lo Blanch.
12. GONZÁLEZ-SALAS, Campo (1995) La teoría del bien jurídico en el derecho
penal, México, Pérez Nieto Editores.
13. HASSEMER, Winfried (1989), “Teoría personal del bien jurídico”, en revista
Doctrina penal, Año 12, Nos. 46-47, abril-septiembre, Buenos Aires.
14. SILVA SÁNCHEZ, Jesús María (1998), Perspectivas sobre la política criminal
moderna, Buenos Aires, Editorial Abaco de Rodolfo de Palma.
15. MIR PUIG, Santiago (1994), El derecho penal en el estado social y democrático del
derecho, Barcelona, Editorial Ariel S.A.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia
64 Visiones sobre el crimen y el castigo en América Latina
BIBLIOGRAFÍA
ANIYAR DE CASTRO, Lola (1977), Criminología de la reacción social, Maracaibo,
Instituto de Criminología, Facultad de Derecho, Universidad del Zulia.
BERGALLI, Roberto (1996), Control social punitivo, Barcelona, Editorial Bosch.
BUSTOS RAMÍREZ, Juan (1997), Control social y sistema penal, Barcelona, PPU.
DÍAZ, Elías (1997), Sociología y filosofía del derecho, Madrid, Taurus Ediciones S.A.
FERRAJOLI, Luigi (1995), Derecho y razón, Editorial Trotta.
HASSEMER, Winfried y MUÑOZ CONDE (1989), Introducción a la criminología y al
derecho penal, Valencia, Tirant lo Blanch.
LA PIERRE, Richard, Theory of Social Control, Mac Graw Hill Book Company.
MIR PUIG, Santiago (1995), Derecho penal. Parte general, Barcelona, PPU.
MUÑOZ CONDE (1985), Derecho penal y control social, Jerez, España.
ROSCOUE POUND (1942), Social control through law, New Haven, Yale University
Press.
ROUCEK S., Joseph (1978), El concepto del control social en la sociología americana.
Social control for the 80, Greenwoord U.S.A. Press.
ROSS, E. A. (1901), Social Control a Survey of the foundartion of Order, New York,
American Book USA Press.
EL OTRO DERECHO, número 29. Marzo de 2003. ILSA, Bogotá D.C., Colombia