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OPERACIONES DE INFLUENCIA Y ACCION ENCUBIERTA EN RED DE LOS

SERVICIOS DE INTELIGENCIA DE CUBA, VENEZUELA Y BOLIVIA CONTRA EL


PERU E IMPLICANCIAS EN LAS ELECCIONES DE JUNIO DEL 2021

POR: VLADIMIRO MONTESINOS TORRES, PUBLICADO EN FACEBOOK EL 18 DE


ABRIL DEL 2021

Las operaciones de influencia también denominadas de propaganda u operaciones


psicológicas y las acciones encubiertas, son actividades que en función de objetivos
políticos y propósitos estratégicos definidos realizan los servicios de inteligencia cuya
planificación y ejecución se llevan a cabo clandestinamente en el objetivo o blanco de
las operaciones de una misión cuyo fin común es influir en la situación política interna
de un país.

Los motivos por los que se recurre a la clandestinidad y al encubrimiento por agentes
de inteligencia, con fines de manipulación, son conseguir objetivos que no se pueden
declarar, es decir, dando cobertura de seguridad a sus ejecutores que dificulten la
identificación de la naturaleza de sus acciones, manteniendo el anonimato del gobierno
responsable, y por último, negar la participación de los servicios de inteligencia
implicados en caso de ser descubiertos.

Estas operaciones de inteligencia de tipo político para intentar cambiar el equilibrio de


fuerzas políticas en un país, comprenden una amplia gama de acciones secretas con el
propósito de influenciar personas, grupos o incluso poblaciones enteras a conducirse de
determinada manera para lo cual utilizan líderes locales y simpatizantes reclutados por
expertos oficiales del caso que conducen y controlan en el terreno tales operaciones
con la finalidad que brinden apoyo al candidato que debe llegar al poder.

En la actual coyuntura política interna del país y habiéndose señalado el 6 de junio del
2021 como fecha para la segunda elección, entre los candidatos que han tenido la dos
más altas mayorías relativas (por Perú Libre, Pedro Castillo Terrones; por Fuerza
Popular, Keiko Fujimori Higuchi), se advierte el peligroso accionar de los aparatos de
inteligencia de Cuba, Venezuela y Bolivia que operan en red en el territorio peruano,
bajo la sombrilla de la Dirección de Inteligencia cubana conocida con el cogido de “G-
2”. Su misión es que gane el candidato de Perú Libre, lo que obliga a la Dirección
Nacional de Inteligencia – DINI encargada de la rectoría del sistema de Inteligencia
Nacional – SINA a realizar actividades de contrainteligencia en defensa de la seguridad
nacional peruana.

¿POR QUE MOTIVO?

Porque el objetivo de estos aparatos de inteligencia es expandir e incorporar al Perú en


la llamada “revolución bolivariana” para lo cual brindan el apoyo encubierto del candidato
de Perú Libre, Pedro Castillo Terrones, cuya propuesta radical esbozada en su plan de
gobierno y ratificada en diversas declaraciones públicas, es compatible con la línea
ideológica del “Socialismo del siglo XXI”, que patrocinan Cuba de Raúl Castro y el
Presidente Miguel Díaz-Canel; Venezuela de Nicolás Maduro y Bolivia con la
participación de Evo Morales, el poder detrás del poder en dicho país.

Ese esquema geopolítico con implicaciones regionales ha quedado evidenciado con las
declaraciones públicas efectuadas desde La Paz, Bolivia por Evo Morales quien al
conocer que el primer puesto en las elecciones peruanas lo ocupa Pedro Castillo,
saludó dicho triunfo indicando que Perú se une a la gran patria bolivariana.

Las propuestas radicales pro Foro de Sao Paulo del candidato presidencial Pedro
Castillo, forman parte del modelo que representa el “Socialismo del siglo XXI”, como: el
cambio de la Constitución, la estatización y nacionalización de los principales
yacimientos mineros, gasíferos, petroleros y centros energéticos como Yanacocha,
Antamina, Toromocho, Marcona, Cuajone, Quellaveco, Toquepala, y el yacimiento
gasífero de Camisea, los pozos petroleros, refinerías y centrales hidroeléctricas, la
renegociación de todos los contratos del estado y las empresas transnacionales, con la
elección popular de jueces, fiscales y procuradores, la desactivación del Tribunal
Constitucional, por sí y ante sí, además de una vinculación con el CONARE-MOVADEF,
un organismo generado de la red terrorista de Sendero Luminoso.

El ideario y programa del precitado plan de gobierno tiene como autor a un personaje
clave: Vladimir Cerrón Rojas, un médico neurocirujano que estudió su carrera
profesional en Cuba durante la época de Fidel Castro, cuando Nicolás Maduro también
vivía en la Habana. Por eso se conocen y comparten la misma línea ideo política
formando parte de la “revolución bolivariana”.

Ello implica su apoyo a Maduro a quien dice admirar porque lucha porque su país sea
soberano contra el yugo de las potencias, liberado de la explotación. Esto demuestra el
por qué aparece en diversas fotos con el mencionado dictador tomadas en Caracas
dándose la mano sonriente. Y también fotografiado al costado del ataúd de Hugo
Chavez en el Palacio de Miraflores en Caracas, con el brazo derecho levantado y el
puño cerrado.

Hoy el médico Cerrón Rojas es el Secretario General de Perú Libre y líder fundador de
dicho partido político al cual se incorporó al profesor marxista, leninista, mariateguista,
Pedro Castillo Terrones a quien ha convertido en el nuevo “peon de ajedrez” de la
estrategia cubano, venezolana y boliviana en Perú para que nuestro país forme parte
del eje La Habana-Caracas y La Paz.

A manera de ilustración sobre el mundo arcano de la inteligencia, tenemos que la


Dirección General de la inteligencia cubana dentro de su estructura organizacional
interna tiene al departamento M-VIII conformado por oficiales de experiencia
capacitados por el aparato de espionaje de la ex Unión soviética, la temible KGB. Su
misión son las operaciones de reclutamiento de todos los extranjeros que residen en
Cuba, principalmente los que estudian medicina y educación para convertirlos en
colaboradores e informantes al servicio de la inteligencia cubana. Al retornar a su país,
son manejados por un oficial del caso perteneciente a la red de inteligencia de los tres
mencionados países que operan clandestinamente en el Perú, como expertos en
propaganda y desinformación.

Por tanto Vladimir Cerrón es una persona adiestraba como colaborador que actúa en
forma secreta proporcionando información y recibiendo instrucciones como apoyo de
diversa índole para fines de inteligencia y contrainteligencia del oficial de control o
handler, encargado de servir de nexo de unión y comunicación entre su persona y el
órgano ejecutivo que controla en el Perú las diversas redes de inteligencia. La misión
es que con todo este apoyo el candidato presidencial Pedro Castillo Terrones gane las
elecciones el 6 de junio del 2021 y convertirlo en una pieza en el tablero de ajedrez
regional.

Ello explica las declaraciones de Diosdado Cabello dadas en Caracas el 20 de octubre


del 2019. “Lo que esta pasando en Perú es apenas la brisita, y viene un huracán
bolivariano…” por su parte, Nicolás Maduro hablando en la clausura del Primer
Congreso Internacional de Comunas, refiriéndose a la reunión del Foro de Sao Paulo
en Venezuela manifestó:

“Al Foro de Sao Paulo le puedo decir desde Venezuela, que estamos cumpliendo el
plan, Foro de Sao Paulo, el plan va como lo hicimos, va perfecto. Ustedes me entienden,
el plan va en pleno desarrollo, victoriosos. Todas las metas que nos hemos propuesto,
las estamos cumpliendo una por una. Debemos seguir articulando los particos
progresistas revolucionados de izquierda avanzados de toda América Latina con la
movilizaciones sociales. Esa fue la estrategia que trazamos y vamos bien, vamos mejor
de lo que pensábamos”.

Más tarde cuando se llevo a cabo en La Habana el foto antiimperialista, con la asistencia
de Raúl Castro y el presidente Miguel Díaz-Canel, así como Nicolás Maduro; este último
recordó el legado de Hugo Chavez y Fidel Castro para la resistencia de la izquierda
latinoamericana: “buenos y mejores aires hay en América Latina. Tengamos fe y
optimismo que ha llegado el turno histórico de las ideas antiliberales”.

Ante dicho escenario no hay mejor capacidad preventiva frente a riesgos, peligros y
amenazas que un completo y eficiente sistema de inteligencia. No hay que olvidar que
la inteligencia es un factor determinante y clave en toda política de seguridad y defensa.
Esa responsabilidad le compete en defensa del estado peruano a la DINI.

Para neutralizar las operaciones de influencia y las acciones encubiertas que


clandestinamente desarrolla la mencionada red de inteligencia en el Perú, la DINI debe
orientar la contrainteligencia a la identificación y contención de las acciones que otros
servicios de inteligencia desempeñan en perjuicio de los intereses nacionales.
.

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