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¿Te has dado cuenta cómo ha aumentado la violencia en nuestro país? Hay ciudades como Santiago donde
se hace difícil caminar aun de día. Hay mucho temor en las personas y cada vez están vendiéndose más alarmas.
Pero en Temuco está pasando lo mismo.
Cuando pensamos en la palabra “violencia” pensamos en cosas grandes como asaltos, robos, pero hoy
quiero que pensemos en esas acciones pequeñas que muchas veces hacemos sin pensar y que pueden hacer daño a
otras personas. Por ejemplo: ¿Cómo reaccionas tú cuando alguien te pasa a llevar? ¿qué haces cuando alguien te
da un empujón? ¿le contestas con otro empujón?
Jesús dijo: “Son felices los que buscan la paz. Con estas palabras, él nos dice que cada uno debe ser una
persona pacífica, que ame la paz y que no haga mal a otros.
¿Puedes recordar una acción cuando tú buscaste la paz con alguien? ¿Cómo te sentiste? ¿En que te ayuda
a ser pacificador?
Miles de años atrás, cada vez que el sol se ocultaba y llegaba la noche, los hombres se encerraban
en sus cavernas y se preguntaban: ¿Qué haremos para alumbrarnos?
Primero, usaron el fuego para alumbrarse y calentarse. Después se inventó la vela. Más tarde se
usó la luz del gas de cañería.
Pero todo cambió cuando llegó la luz eléctrica y hoy es muy fácil encender la luz y alumbrar
nuestras casas.
Sin luz no podemos vivir bien, ni caminar, ni movernos con seguridad. Tampoco podríamos hacer
bien nuestras tareas. Como ven, la luz es muy importante. Pero hay una luz mucho más importante aún,
que guía la vida de las personas. Jesús dijo: “Yo soy la luz del mundo… ustedes son la luz del mundo”.
El quiere que tú seas una luz por tu manera de comportarte y por tu manera de ser con los demás. El
quiere que seas un rayito de luz en tu casa, en tu barrio y también aquí en el colegio.
Una de las aves más lindas es la paloma ¿verdad? Hay gente que se entretiene mucho con ellas dándole de
comer. En muchas plazas podemos encontrarnos con estas aves que alegran el ambiente.
La paloma se nombra muchas veces en la Biblia ¿saben por qué?. Porque es sencilla y muy mansa. Es un
ave tranquila, que no hace daño. Jesús dijo que tú y yo debíamos ser “inofensivos y sencillos” como palomas.
Por eso, recuerda no despreciar a nadie. Todos somos valiosos ante los ojos del Dios que nos creó. No nos
creamos mejores que otros, ni los miremos en menos. Seamos amables y buenos con todos como Dios es con
nosotros. ¿Les parece?