Introducción

El empuje hidrostático es la fuerza que un fluido ejerce sobre un objeto sumergido en él o en contacto
con él. Este principio se rige por la ley de Arquímedes, que establece que un cuerpo sumergido en un
fluido experimenta una fuerza hacia arriba igual al peso del fluido desplazado por el cuerpo.

Fundamentalmente, el empuje hidrostático se calcula considerando el volumen del fluido desplazado

por el objeto sumergido. Esto significa que cuanto mayor sea el volumen del objeto sumergido, mayor
será el empuje hidrostático que experimentará.

La visualización del flujo en relación con el empuje hidrostático implica comprender cómo los fluidos se
comportan alrededor de objetos sumergidos. Se consideran las líneas de corriente, la presión y la
distribución de velocidades para entender cómo los fluidos interactúan con diferentes formas y
estructuras sumergidas.

La aplicación de estos conceptos es clave en diversos campos como la ingeniería naval, la arquitectura,
la hidrostática y otras disciplinas que involucran el diseño y la construcción de estructuras sumergidas o
en contacto con fluidos.

En resumen, el empuje hidrostático es la fuerza que un fluido ejerce sobre un objeto sumergido,
determinada por el volumen de fluido desplazado, mientras que la visualización del flujo comprende la
comprensión de cómo los fluidos se mueven y se comportan alrededor de objetos sumergidos, aspecto
clave en varias áreas de la ingeniería y la construcción.
Realizar resumen de empuje hidrostático, Fundamentos de visualización del flujo,

según bibliografía alcanzado.

Empuje Hidrostático

El empuje hidrostático es la fuerza que un fluido ejerce sobre un objeto sumergido en él o en contacto
con él. Según el principio de Arquímedes, este empuje es igual al peso del volumen de fluido desplazado
por el objeto. Es por eso que los objetos parecen más ligeros cuando están sumergidos en un líquido: el
fluido ejerce una fuerza hacia arriba, contrarrestando parte del peso del objeto. Este principio es
fundamental en áreas como la hidrostática, la ingeniería naval y la arquitectura, ya que ayuda a
entender cómo los cuerpos flotan o se sumergen en diferentes fluidos.

1. Existen tres casos

1. si el peso es mayor que el empuje ( P > E ), el cuerpo se hunde. Es decir, el peso específico del cuerpo
es mayor al del líquido.

2. si el peso es igual que el empuje( P = E ), el cuerpo no se hunde ni emerge. El peso específico del

cuerpo es igual al del líquido.

3. Si el peso es menor que el empuje ( P < E ), el cuerpo flota. El peso específico del cuerpo es menor al
del líquido.

2. Demostración practica

Se cuelga un cilindro (I) y un cubo (II) de igual volumen del brazo izquierdo de una balanza. Ambos se
equilibran con la carga o contrapeso III. Supongamos que ahora sumergimos el cilindro (I) dentro de un
líquido. Debido a esto, el brazo izquierdo de la balanza se elevará a causa de la fuerza de empuje que
actúa sobre el cilindro (I) sumergido. El equilibrio vuelve lograrse si llenamos el cubo (II) con un volumen
de agua igual al volumen del cilindro (I). Como el volumen de agua es igual al volumen del cilindro
sumergido(I), entonces quiere decir que el empuje ascendente es igual al peso del líquido que llevaría el
espacio ocupado por el cilindro.

3. Ejemplo

Los barcos no se hunden porque su peso específico es menor al peso específico del agua, por lo que se
produce un empuje mayor que mantiene el barco a flote.

Esto a pesar de que el hierro o acero con que están hechos generalmente los barcos es de peso
específico mayor al del agua y se hunde (un pedazo de hierro en el agua se va al fondo), pero si
consideramos todas las partes del barco incluyendo los compartimientos vacíos, el peso específico
general del barco disminuye y es menor al del agua, lo que hace que éste se mantenga a flote.

Fundamentos de visualización de flujo

La visualización del flujo es fundamental para comprender cómo se mueven los fluidos alrededor de
objetos, superficies o dentro de conductos. Aquí hay algunos fundamentos esenciales para la
visualización del flujo:

Patrones de flujo: Observar y comprender los patrones de flujo, como flujo laminar (capas ordenadas
de fluido) y flujo turbulento (movimiento caótico y aleatorio). Esto se puede lograr mediante técnicas de
visualización que permiten ver cómo se comporta el fluido en diferentes condiciones.

Líneas de corriente: Estas líneas representan la trayectoria instantánea de partículas individuales en el

flujo. Ayudan a visualizar la dirección y el movimiento del fluido.

Modelado y simulaciones: Utilizar modelos físicos o simulaciones computacionales para visualizar

cómo interactúa un fluido con objetos o estructuras. Las simulaciones pueden mostrar distribuciones de
velocidad, presión y otras propiedades del fluido.

Técnicas de visualización: Se emplean diversas técnicas, como el uso de tintes, partículas trazadoras,
velocímetros láser (LDA) o sistemas de imágenes por resonancia magnética (MRI) para visualizar y
entender el comportamiento del flujo.

Principios de conservación: La visualización del flujo está conectada con principios fundamentales
como la conservación de la masa, la conservación del momentum y la conservación de la energía, que
ayudan a explicar cómo se comportan los fluidos en diferentes situaciones.

Flujos bidimensionales y tridimensionales: Comprender cómo varían los patrones de flujo en diferentes
dimensiones, ya sea en un plano o en el espacio tridimensional.

Aplicaciones prácticas: La visualización del flujo tiene aplicaciones prácticas en ingeniería, aerodinámica,
oceanografía, diseño de vehículos, sistemas de tuberías, entre otros campos, ayudando a mejorar el
diseño y la eficiencia de estructuras y dispositivos.

La visualización del flujo es crucial para entender el comportamiento de los fluidos en situaciones reales
o simuladas, permitiendo a ingenieros y científicos tomar decisiones informadas sobre el diseño y la
optimización de sistemas que involucran el movimiento de fluidos.