Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
É-;a EXFE-lC;aCá'Gi"l
*H H-A CIEI{ilEA
{-Iqi aecreairrientg C6gfloseitivo
RorueLD N. Gtex,P
en casteilano
Derechos para todas las ediciones
ISBN 96&823-?41-6
I
)
=
I
írrdiee
11
Lista de figuras
15
Prólogo
19
Reconocimientos
.t,
X..tr{acia una teoría cogi:osciti'¿a unificada de la ciencia LL
21
Qué debe ser la teo¡ía cognoscitiva de la ciencia
Raciona-lidad, relaiivisn-ro y cognición 22
Representación y j uicio 25
R eaiismo naturalista
2l
29
¿Se puede natura-lizar la filosofía de ia ciencia?
¿Debe el estudio naturalista de Ia ciencia constituii
un círculo vicioso? JI
Naturali smo evolucionista .))
31
Cómo debe ser la teona cognoscitiva de la ciencia
39
¿.Un papel para la histcria?
41
Panorama general de este libro
43
2. Las teoiías de ia ciencia
A1
El empirisrno lógico
50
La estructura socia.l de la ciencia
s3
Faracligma.s y revoluciones
Programas y tradiciones 60
El empirismo constructivo 69
73
Ei programa fuerte
78
Los estuciios de laboratorio o,)
OL
El análisis scciclógico del discurso de ios científicos
qe
3. Modelos y teoría.s
B5
Fl libro de texto de física
B-t
La organi zación de los textos de mecánica
El osciiai-lineal 90
OQ
Interpietación e identificación JJ
7. h,lodetros y experirne¡rtos
Los modelos del potencial nuclear 214
Antecedentes de la búsqueda de modelos relativistas de Dirac 219
La respuesta a los nuevos datos 225
Por qué son importantes Las buenas predicciones -/,) )
Otras pruebas 238
Diseño y realización de la prueba experimental ¿+)
Los recursos cognoscitivos y 1os intereses científicos 248
I
¡
a
I
I
a bo
El panoraii^ta evolucionista /)t
a gt i,trr.o de los modelos de Dirac ei-r la física nuclear
a
a E.Ls explrcacióE 'Je ia revol:-:cióxt ge*\Ógica ¿O)
a Los mcdeLcs contraccionistas 26s
Wegener Y la deriva continental
I Los críticos de Wegener
270
a O ceanc gr a-fía Y
Paleomagnetlsmo
2'17
a 286
f,t.nt"ñhamiento del lecho marino 294
a La hiPótesis de Vine-Matthews 294
a La dorsal de Juan de Fuca 1C.1
marino
a iu ¿.t.rrra del ensanchamiento del lecho
satisfactoria 309
El movilismo pasa a ser una opción
a ¿Revoiución o evolución?
313
a 317
a Epílogo : Reflexiones reflexivas 319
a Notas 331
a Bibliografía
Indice de autores nombres i'
3le
a Y
a
a
a
a
a
a
a
)
t
a
)
a
a
a
t
,
t
a
a
)
5
,
a
trigutres
Figural.lCuatrocombinacionesposiblesdeenfoquesgenerad:::.:j
la representacton
la do¡le áicotom;a en iás dimensiones de 28
' Y el juicio. ¿i'o
de una teoría científica.
Figura 2.1 Repre,.,,tu.io', empirista 1ógica 67
ii["tu 2.2Mod,elo reticular de Laudan' 91
it;;;; 3.1 Índice d'e un texto de mecánica típico'
pará iiustrar la ley de Hooke y
Figura 3.2 Sistema masa-resorte usado o')
el movimiento armónico simPle'
posici¿; y velocidad como funciones dei tiempo para el^1
Figr-rra 3.3 93
sistema masa-resorte de la figura 3 '2' AA
Figura 3.4 Pénduio simPle' . ,, ^ ^- pcstclon-
iil;;..i.5 Estadc.del oscitador armónico simple en un espacio 96
momenlo
F-igura ¡.s Esuáo de1 oscilador armónico
simple en un espacio posición-
9b
en iunción clel
Figura ,., #:fr:Th?Hilio, u.*ónico amortiguado
98
tiemPo y sistemas
Figura 3.8 Relación entre conjuntos de enunciados, modelos 108
reales.
Figura 3.9 Representación parcial de las familias de modelos asociados
108
con la mecánicá clásica'
Figura3,l0Representación,¿..,.'uteoríaenquesemuestranlafamilia 110
delosmodelosylossistemasrealesrelacionados.
¿e iaslnstataciones del ciclotrón
de 1a Universidad
Figura 5.1 Diagiama 145
de Indiana.
esquemátia del ciclotrón central visto
desde
Figura S.Z «epilse.rtaciOn r46
,., á:;:Sentación de ra.reacción nucr ear p-c,.4 ry': --\,, r49
Figura t49
Figuras.+arregro.*p.'i*entaldeiosexperimentos(p,rz)detrCUI.
de na-'''egación en
Figura 5.5 ArreEi; .;;.ti*entai de,los experimentos 164
ratas. t75
Figura 6.1 Estructura básica de una decisión'
decisión científica al elegir
Figura 6.2Representación de unproblema de 179
entre dos modelos
[1i]
12 LA ETiPLICACIÓFI DE LA CIENCIA I
t
E
.J
279
Figuia 8.3 Periil de la dorsal centraL del Atlántico' ^,^,^--^ del r-^l
a lo la-rgo ^^r lecho
F;;;;; E"li Mapacie anornaiías del campo rnagnético
781
marlnofrentealascostasoccidentalesdeNorteamérica.
temporales de las inver-
Figura 8.5 Refinamiento gradual de las escalas
si.ones geoma[néticas con base en técnicas
de fechamiento
a o.)
po, poi*io_áIgo" aplicadas a Las rccas de suelo firme.
LO/.
para varios
Figura 8.6 Fosiciá" up"ánte del polo norte magnético ')*/1
continentes en función del tiempo"
de convencción que
Figura 8.7 Modelo áe Holmes de 1as coriientes océano' 2B-/
separan los continentes y producen un nuevo
y el en-
F;gura B.B l¿fodelo de Hess par4 ias corrientes convectivas 289
sanchamiento del lechc marino'
(iínea continua) a 1o
^ ^o*- - 8.9
Figura - - Compaiación de ios datos magnéticos 292
largó áe la dorsal Arábigo-Índico, según Vine Matthews'
y
para varios modelos de
Figura 8.10 Periiles magnéticos cJmputados 294
dorsales oceánicas'
Andrés como
Figura 8.11 Reconstrucción de wilson de ia falla de San 296
una falla de transformación larga'
ios perfiies mag-
Figura 8.12 Con-rparación, segú1 vine y wilson, de y
néticoi de ia dorsál del Pacífico Oriental de Juan de
Fuca. 'a 298
según Heirtzler ' 301
Figura 8 " 13 Periil magnético de la dorsal de Reykj anes,
Figura Perfil mJgnétic o d.e Eltanin-19 correspondiente a la dorsal
- 8.14Pacífico-Antártica' 303
reveladas por
Figura 8.15 Comfaración de ias inversiones magnéticas sur'
sedimentos profunclos de varios lugares del Atlántico
307
de ensanchainiento de1
Figrira B. I ó Compu.u.ib.t de Vine de las raz ones 309
lecho marino en tres dorsales'
FRÓT-GGG
tlsl
15 I-A EXPLICACIÓ¡.i DE I-A CIENCIA
natut4l-e-YQ-1Plillo . r.-:^-^r^.
trad'icionales' la fiiosofía naturaiizada
Desde ciertas perspectivas filosóficas de
de la ciencia no es en absoluto
parte á. i^ filosofía. Si se considera 1a filosofía
lacienciaComopartedelaepistemología,porejemplo,laempresapredo.
del conocimiento científico
minante ha sido la de mostrar cómo lor.n'ntiados
pr.redenjustificarsedeunamaneranocircuiarysatisfactoria.Elobjetivo
filosófico,dichoSeaendospalabras,hasidoeldeproporcionarcierto|un-
proyecto me parece aliora
damento extracientífico alos asertos
científicos' Este
simpiemente una versión mocierna.
del proyecto medieval de proporcionar
pruebasfilosóficasdelaexistenciadeüos.Talproyectopodríanombrarse
' 'apologética científica' ' '
mej or ' 'teología de ia ciencia' ' o
Esta tradición considera
Existe otra traáición filosón.u ¿. ig.,aiantigüedad. generai del
de un entendimiento
a la filosolía simplemente como la blsqueda la que
inciuidas las actividades de 10s seres humanos' Es esta tradición
mundo,
las ciencias especiales que ahora
a lo largo de ios sigios dio nacirruento a
dorninan el mundo intelectuaf . Acaso la
filosofía naturali zadlcie la ciencit.t:'á
especial: }a cienciade ia ciencia o'
dicho
llamada a formar parte de una.l.".i"
ytecnológicos' Sin embargo'
en forma *u, ooíJ-, los estud.ios científi.9t
dichas d'iscipiinas no se establ'ezcan'
estos todavía no son disciplinas. Mientras
de ia ciencia en tanto que
Ia filosofía será el paraísá de los estudios teóricos
actividad. hu¡nana. Dada la import anciade
la ciencia en el mundo moderno'
de Inenos será cómo los iiame-
ia necesidacl de .ros .strrdios ei innega-bie. Lo
mos. Lo importante es que los filósoios cle
la cierrcia iesempeñan una útil
función cultural-
RECGIdOCThaiEi!TOS
Para escribir este libro-tu.¡e que quedar en deuda con muchas personas,
instituciones y editoriales. Só1o me resta esperar que aquellos que escaparon a
mi memoria sepan disculParme.
Tengo una deuda incalculable con lvia-x Black por el a-liento que proporclono
a la formación filosófica de un refugiado de la física. Wesley Salmon,
mi colega
senior durante seis años, fue pa-ra mí un modelo de integridad claridad y
filosóficas que mucho respeto. Otros que me han brindado orientación inva-
iuable y oporturLi.clades profesional;s son Adclf Grunbaum, Errlan ldclduliin,
Dldley Shape:. e, Nick E escher, Abner Shim.cny y Pat S'-rplres- La¡ientc profun-
d.amerrte 1a. prematura desaparición del estadístico Alan Birn'oaum, quien fue
mi anfitrión en el Instituto Courant durante el airo acaCémico 1971-1912.
Duranle años me he beneliciaclo grandemente cie las discusiones con Bas
van Fr¿.asseil, quien ocupó la oficina contigLia a la mía en i968. De Bas aprendi
e1 poder de un enfoque teórico modeio para la fiiosofía de la ciencia. Su
paciencia para refutar mis argumen'.os en favor del realismo nunca decayó,
ur.rq,,. tampoco se haya visto recompensada. Con Fred Suppe llegué a discutir
meilos debido a que siempre estuvimos mucho más de acuerdo en nuestras
apreciaciones filosóficas. Izlucho aprendí también de los años de desacuerdos
con Larry Laudan. A él y a Rachel Laudan les agradezco haberme conseguido
un año como profesor visitante en el Centro de Filosofía de la Ciencia en
Pittsburgh. Mis colegas Ceorge GaJe, Ron Laymon, Tom Nickies, Jim Wood-
ward y John Won'ell toleraron amablernente mis interminables disquisiciones
sobre las virtudes del enfoque naturaiista so[:re la filosofía de la ciencia. Hank
Frankel me enseñó a apreciar el valor de la geología como estudio de caso para
la filosofía de la ciencia y sigue prestándome muy necesaria asistencia en este
campo. Paul y Patricia Churchland despertaron mi interés en las ciencias
cognoscitivas y arreglaron mi primer encuentro con Don Campbell, quien ha
sido valiosa fuente de inspiración y aliento. David FIull y lr4ichael R.use han
tenido también la gentileza de apoyar mis intereses en los modeios evolutivos
de la ciencia. Por si fuera poco, han dadc su o¡:ientación y apoyo generoscs a
mis estudiantes John Beatty y Ken $/aters. Arthur Fine y Pa.ul Teller también
a me han brindado aliento cuando más lc he necesitado'
a
a [1 e]
a
20 LA EXPLICACIÓN DE LA CIENCIA
en ia
Debc también expresar rni agrad.ecimiento a muchas olras pelsonas
gentiles con
psicología y la sccioiogía de 1a ciencia por haberse mostrado tan
Lste intruso f,1losófico:lavid Blocr, \Yerner Cal'1ebaut, Harry
Collil;'s' Iioward
y
Gruber, Ka¡in Knorr-Cetina, Bruno Latcur, Trevor Pinch, Ryan Tvreney
Sieve Woolgar.
De mis antiguos cclegas cie laUniversidad de indiana, esicyprofundainente
agradecido a Chuck Foster y Ed Stephenson por haberme introiucidc
al
mundo de la física auclear contempo tártea. Sin su ayuda éste sería
un libro
mucho menos interesante. Tom Giáryn, David Smith y John Woodcock,
los
otros miembros de un seminario para 1a facultad sobre estuciios
científicos y
los últimos
tecnológicos, contribuyeron g.unt.rr'r.nte a alentar mi iabor de
,¡"r. f***ente, i,.n ugrua..iriento muy especia] a Sam Preus, coLega dedica-
de sr-¡ libro
do a los estudios reilgiásos que me alantó á inspirarme en el título
sobre la explicación áe la reúgión
de la
En cuanto a las instituciones, mi mayor d.euria es con el Programa
que apoyó
National Science Fundation de Historia y Filosofía de la Ciencia'
al director
éste y otros proyectos anteriores. Debo un especial agradecimiento
el-c-entro de
de ese programa, P.onald cvermann. Brindaron apoyo adiciona-l
Filosofía de la ciencia de Ia universidad de Pittsburgh, la office of
Research
de ia Univer-
and Graduate Development y el Instituto de Estudios Avanzados
'sidad de Indiana.
por per-
Finalmente, mi agradecimiento a las siguientes casas editoriales
mitirme usar materiales de varios de mis artículos recientes: a la
University
Theory of
of l.{otre Dame p..tt, por material tomado de "Toward a Unified
y Ciry
Sciettce", en,Science and Reality, eC J' T' Cushing' C' F' Delaney
Gutting (I'jotre Dame, Ind., 1984), pp' 5-31'
A la University of Chicago Press, por material tomado de "Constructlve
Realism," er Images of science, ed. P. M. Churchland c' A'
y Hooker
(Chicago, 1985), pP. 75-98.
A ia Phiicsophy of Science Association, por material tomado
de'' Philosophy
y de
of science Naturarized.,,, en philosophy of science 52 (1985): 331-56,1984'
,'Background Knowledge in Science. A b{aiuralistic Critique", en PS'A
pp' 654-71'
val.Z,ed. P. D. AsquitñV p. I{itcher (East Lansing, tvlich', 1986),
Study.of
A Martinus Nijhoff, por materiai tcmado de "The Cognitive
Science, , en The Process af Science: Contemporary
, Philosophical Approaches
pp' 139-59'
to (Jnd.erstanding science,ed. N. Flersessian loordrecht 1987),
A la University Press of America, por material tcmado de "Tov¡atd
a
Pespec-
Cognitive Theory of Science", in Scienlific Inqu-iry in Philosophical (
tivi,ed. N. Rescher (Lanham, Md', i987), pp' i17-50'
)
)
)
)
t
t
t
t
t i
)
, 1. I-{ACIA UI{A T'EOR.íE CCGtr{ÜSCIT'IVA
t {JI''I{FICADADELACXE'il\TCiA
)
)
t
t QuÉ DEBE sER LA TEonÍa
cÓGuoscITIvA
t DE LA CIE,T\iCIA
a
t
t
t L,E CICUCIA, JTNTO coN LA TECNoLOcÍa
basada en e1la' ha sido una fuerza
t ci e ciente en la cultur a occidental a 1o
largo de tres siglos' Su infl*encia se
t percibe ahora Práctica mente en todas las socieda-des
del mundo a
)
a Por qué unt teoríl de la ciencia
a que honorífico que aparece en
a Teoria es un término vago Y a m enudo no más
literaria", la "teoría de la
) contextos lingüísticos tan diversos como 1a "teoría
de los números" y "la teoría
) crítica" , "14 teoría de la justicia", "la teoría
de Ia ciencia, uso "teoría"
) aiómica de la matetia" . Cuando ha blo de la teoría para
en ei sentido teo Crc tco Así, la teoría de la ciencia servlra
) como las teorías
explicar los fenómenos de la propl a clenc ia aproximadamente
) Por 1o tanto, mi P unto Ce vista
científicas explican otros fenómenos n aturales.
) em r una
gtl":gl_es_ty_dig Ce la ciencia como
) -e.
LIY n at/1 Más re u clen ciahumanc,lo que
) cia humana puede parecerse a clenclas
-scbre el grado en
) coin
a asuntos tan generales -1
a
) t21)
a
a
22 LA FXiDLiCACiÓi.{ DE I-A CIEJqCIA
-
L 49i.e aci a-es-u ¡a ilriyi-, I o qil e
1g!^i:1i ii a..d,c o gn c §-qUI U I^^.^
I
s¡il 1 ó"
-4 ación del cc,.- ínte tc. En efecto, La cie¡di a es actu ainieiiie ei 4
)
^ ^-^^
d,uul a.J oy en día, uno de ios
iecursos Do sos para estudia¡ cualquier actividad
cognoscitiva es el coriglomerado de clisciplinas que laxarnente se agrupan bajo
el rubro de ciencia cogncsciii'¿.s. A) l-lama¡ a mi enfcque "teoría cognoscitiva
de la ciencia", mi objetivo es que sea u:ia explicación ciénríñca en su aspecto
r_- genei'al, en la cual se eche mano ,le lcs recursos que nos bt.indan ias ciencias
<-'-«i gnc-scitiv as-. 2
--P"r" propósitos, debernos tener cuidado de no ad.optar un,punto
"Ñros
cie '¿ista Cernasiado estrecho sobre io que constituye ia ciencia cognoscitiva.
Algrxos autores la equiparan con la psicolcgía cognoscitiva. Otros ia restrin-
gen a usos de i-noclelos com^puiacionales de la congnición ya sea humana o Ce
otra índole. Yo insistiría en una S iva amplia que incluya partes de la I
tt-i ''l i
:=': 'i^''"1' '
.cnrexto. se afirma q]¿9j!--c-qqo-ql4i'lgjg--qt-e-qdliqq --e-Ltq!4149n1e- ier-i1!1vc:'t')-'i' '-'
4,qqjLt¡-xt-o.. Es 'to*ti;tnt.".
I-á¡¡-rr-á .o*o ,.áñG*;álo ufi,-*¿ *" i' i'':
'''t
"gre¡iq.pptsl-eillqgt"-ot'ir¡qig9-9.9-q-¡41¡titttttt---:-':'::--:'
' t''
sc-ció!o-gq, -es
para
Ófáio que tanto los filóscfos como ios socióicgos tieneÉ aÍSuroei'ltcs
zpctlaf y tefender sus respectivos puntos de vista. ir4ás tarde
consid'eraré
jg,rro, de esos argumentos. Fcr ahora sclo indjca:é los punlos de vis'r-a y explica-
cierto
,ipo. qrié lcs .*oid.ro insatisfactorios. Estos comentarios picveerá;:' que el enfOque
íLlndainentc a nrjs afiirnaciones subsecuentes e¡ ei sentido
de
cognoscitivo es más promisorio. El resto de este llbro constituirá,
pa-ra- u-sar La
afirmaciones '
fa;nosa frase de Darwin, ' I rl4-largo alpgato-' ' en fq'vg-¡ d-e-es-t-as
Lq raciottslido.d de la ciencíq
1a filosoiía de
Este subtítulo, que repite el de una reciente investigación sobre
Ia ciencia (Newton-smlttr 1981), explesa.a.decuadamente 1a preocupación
del
filósofc con la racionalid ad. La rela-cióii eati-e la teoría y los datos,
por
ejemi;io, se ciice qlle eS "raciOnal" O j.nci''tso "iógica"' Paracuaiquier
teoría
o'racionalmente
que exisle una ccuclusién
;r:cuuiqui*r con¡un:o de datcs sp dice
la
Coirecta" sobre la medida en que iales datos "apoya;r racicnalil:¿nte"
teoría. La tarea Cit filósofo ha sidc coq¿i§-.¡+-4e--qqp-o- Ia -dp explicitai'los
principios que ios científicos suñ$tamgq'.é ernplean de manera intuiti'¿a ai
racional-
evaluar las teorías y luegc mostrar que tales principios en verdaC son
rnenr"e ccrrectos.
Ei principzJ problema: filosófico de este enfoqr:e ha sido siem¡-rre demostrar
q,-r" rr-* prlncipló en particuiar captura uila relación singularn-rsnf'e
racioriai' De
hechc, la mayor parle de 1a litsratura sóla trata de ese problema' El
carácter
Se aduce
inccnclu.so de Ia literatura, después de muchos años Ce esfuerzo,
generalmente cornc indicacior de la djficultaci clei problema' Sin embargo-,
que existe algo
puede inte¡pretarse tarnb;'- 1 coírlo un i¡dicio pafa Sospechar
iuadamentálmente erró¡^;r en la totalidad de Ia empresa.
que ei
Existe también un grave problema errrpírico con la imagen típica
filósofo tiene de ia-s rela-ciones entre la tecría y ios dato.s. Si e1juicio cientíiico
sería de
realmente cstrrviera guiaCo por principios intuidos de la racionalidad,
que existe en
esperafse un acuerdo mucho mayor entre ios científicos del
todo
,.uti¿ud. Es claro que si nuestra inragen de la cie,:.:ia está tcmada so}re
es un acueide
de lcs libros ,Le texio, pa:'ece que io que esiá a la orden del día
muy.gereraiizado. Y e§cierio que hay graildes zonas de acuerdo que cols-
tituyá el telón de fcndc de la investigación zct'¿al.Pero si n-rirarnos a cua-l.quier
áreá d, la invesiig aciórtactivo,casi invari¿biemente encontral'emos indiviCuos
y grui-.os-cor, opioioaes diaiire¡rali-nente dir;rgerites la¡ c'¿ales sueien defender
¿.- *i"t.a apa.sicnada. A mayor abuncla;iii:ntc, la gama de o1:irdc'iles
no Se
24 LA EXPLICACIÓN DE LA CIENCIA
ciistribuye aleatoriamente entre los científicos sino que, por 1o generai, cons-
tituye conglomerados en "esCuelas" perfectamente identiiicabies. Tal es el
estado normai de cosas en ei frente de la investigación.
Si existen los principics de la racionalidad científica, la amplia dispersión
de grupos cientíiicos eir desacuerd.o debe ser eJ resultado de fuerzas o de
intereses irracionales .
Así, acabamos teniendo un panorama de 1a investigación científica como
una actividad sumamente irracional. Sin embargo, Ia mayona de los filósofos
empiezan por suponer que la ciencia es ia racionalidad en su máxima expresión.
A toclas luces, algo está mal.
a
a insulina en el laboratorio, o de enviar cohetes eq
uipados a fotogiafiar Urano'
a Tales proezas requleren, por supuesto, de cons iderable
orga.nización social,
que fuera, podna haber Produ-
) pero ninguna organtzacLo n social, por grande
enta años. Tiene que haber
) cido tales resultados ni siq uiera apenas hace cincu
-más qqe las uras reiaciones sociales cambientes 5
) algo P
importante. Ese algo
Ciertamente, ala exPlica-ción so ciológi ca le falta algo o.
) no es laracionalidad, sino la usaL-entre 19s
)
,
) Cognición Y reo-lidad
)
sobre psicología
) Én este caso tomé también er subtíturc de un ribro reciente
t cognoscitiva §eiss er -197 6). E1 punto de partida
de la psicología cognoscitiva
en general es que el hombre tiene diversas
) 1. de las ciencias cognoscitivas
entre ellas 1a percepción,
) capacidacles cognoscitivas de fundamento biológico,
y e1 lenguaje' La ger:te usa esta§
e1 control'motol, la memoria, ia imaginación
) cognoscitiva de
capacidades en su relación cotidianu .o¡ e1 muncio 'Latearía
) estas capa-cidades para
la ciencia intenta-rá explicar cómo 1os científ.:os usa-n
) interactuar con el munc10 al construir la ciencia mocierna.
ios científicoS
) Hasta hace muy poco eran coniados los estudios sobre
el mcmento no existe enfoque
) mjsmos desde la peispectiva cognoscitiva. Hasta
cómo se reiacicna.n 1c1,q?lot
) congnoscitvo estándu, q,r. describa, por ejemplo,
) i, 1a teoría científica. Ériu, si
bien ., ,rt u desventaja, también es una bendición'
cle la ciencia se originan
) Los defectos tanto de la friosofía como de la sociología
tanto 1os filósoíos como
del hecho que, siendo fieles alámbito de sus disciplinas,
) a su ma'teria de estudio: E t-1-tlg-l .
1os sociólogo, ¿. iu.i.n"iu Ie han fallado
) sido guardianes del
Desde los tiempos de Aristóteles, los filósofos han
) la posibilid'ad de que
concepto de racionalidad. Ellos no consideran seriamente
) La racionalidad no Sea un concepto especia-lmente
útil para entender ia ciencia
) nio'Jerna' De igual modo, hastá hace poco los so-ci<i-1og-o§-&'la-cieLclase-ba+
genuln4m'e.¡r-tq qocial' De tal
) preocupa.dg-por qo-!s!ruir. una teoría de .la ciencia
d9-J-u
) s;eite, no han investigado factores no socia-les..L_q!-e:q{q-c-gglq§q!l-vafocali-
(o al menos no tan
) :,-._ci3, a_l tgner *..rol cgmproaúsos disóiph,anos
2
?
.uács) tle¡,r9 mayoi !!bqrt-a§ para serie fiel a-su
qbj-eio cie estudio'
?
2 P.ppn s,sENTAcIÓzu Y JUICio
? )i:ar¡e más ce cincuenta años, los filósofos de la ciencia se han
ocupa-do en
?
2 =-.:La::cei La
natural e:za d.eia-s teorÍas científicas y ios criterios para elegir
--:¡:ia eiire ctras. Mientras ta-nto han prcpuesto rnuy diversos tipos de respues-
una
,
F
26 LA EXPLICACIÓN DE LA CIFNCIA
ta a esas dos inteiioga-ntel, lin émbargo, 1cs teñlas nc han CejaCo de ser
importantes. !ql.:.:l:ió1ogos Ce Ia ciencia r-eciente§-sg han pqeccupa-Ccnencs
DOr la natura-leza de 1a.s teorías qomo ta19s., pero han dedicado mucho esfuerzo
al estudio de los procescs roedianie ios cuales ias te orías llegan a s€r aceptadas
por la maycría de la comunidad científjca
Las ciencias scitivas no proporcionan respuestas inrnediatas y diiectas
a esta cuestiones. Sin embargo, sugiere-n una orientación genert y _c_*o_-_t¡qplos
gspggi!gas que proporcionen un marco potencialmen-te.fn-ictífero*,Dtra.-c-qp-
siderar tales asuntos. En el c¡;etexto de las ciencias cognoscitivas, Ias teorías
sérián una suerte de representación en tanto que la elección de una cierta teoría
'_'- :'-;'--
'
como la mejor disponbie se¡ía asunto de criterio individual.
- .. (:-
:\
Representación
,r
É J¡ticio
a I-os filós o 5 üv esentan al cien
) s ven
a mano de ciertcs pllnclplcs v Ce eval Los sociólo
a
)
)
)
)
)
)
)
)
)
) "irracionai" q'Je tenga el filósofc-
t
)
) Rocioilalid«d categórica i racionaticad hi¡toiéiicr;.
) Cuando los filósofos hablan de racicnalidai, gene ialr,irente se refieren
a la
racicnaiidari categórica. se atribuye a Aristóteles h e.ber de¡'iniCc al
) hcn¡bie
) c,Jmo arur:tal racionai. E¡r este caso se considera ia racionaLiCad
como una
) proi) iedad del ser humano y, ciertaarente, como un a propieCa-c1 esenciaL
Adernás,
É ineq u1 vocarnente, clistingue a-l ser humatro del res-i"o de 1o s animales.
a la. propiedad no se da en grados. La entiCad, o
la pcsee, o no la posee
Eiste otro sentiCc de 1o "rácional" , eue refiere simplemertie al usc de un
) tiPo de
a nredio conccido y eficaz para a-lcanzat el objetivo deseado. Este
racionalidad es ei hi;uotético o instrumen tai y admite grados C-Uaqq.q- l9J
aa científicos g q g q.o--s q i-q y-qs. 1r-ri' e sjl g4,n !4¡. -estr aiegias -$ e
juicio. de la, gente, 1-o*-q ue
) hacen cuando mucho e-s evaiuar la raci onalidad ins tru¡ne-¡rr,1ij de- lqs -
suj etos .
1915 era aceptacio pcr nuchos r'iióscfcs de ia ciencia. Hacia 1985 estaba
nuevarnente ala defensiva. Sin embz-rgc, ha habido algunos piogresos, aunque
sólo sea Cebido a que la ga::na de posibilidades ciistintas se ha arnpiiado y
escla-r ecido (Leplin i984; Church-land yiiooker 1985). En capítulos postericres
rne ocupa¡e de algunas de estas posiciones,
Aho¡a sim lemente definiré el reai-ismo científic o comc la postura en llc
. :: .-. l
/-
cuando se acqg,¿i una teo cieíi , se ro_ns¡&Iesue ia mayoría de ics
, : v'-_.
,ri-'- '-- eiementos de Ia teoría son fepreseniativos (en ciertos aspectos y hasta cierto
grado) de as pectos del mundo. El antirrealisqqÉs Ia postura según la cuai ias <\
ar -r-
-c
p ara esolver " (Laudan 1977), o ¿lglqfgn4q_e -yi¡_tudes__r_epre-
§91!?gio-_qAle_s_:nuy_ limitadas, couo_la*d.e.:ieq.catar los fenómenos.-observables
(Van Fraassen 1980).
Usaré e1 término racionalismo para referirme a Ia postura según la cual
existen principios racionales paia e.,,aiuar ias teorías. fstoy consciente de que
esta te¡minclogía tiene Ia engañosa consecuencia de que muchos "empirista-s"
resultan ser "racionalistas", pero no se me ocurre mejor término. porgi.
coqtrario, el 44turalismo es la postr.lra según la cual las teorías Ilegar a
REPRtrSENTACIÓiq
J
U
REi\LISTA ANTIRREALISTA
I l
I
RACICNAL (__
U
I
i,ATURA!-
LI
Figr-rra i.1 Cuatro combinaciones posibles de enfoques generados por la doble dico-
tomía en las dimensiones de la reoreseniación y el juicio.
)
a
a
a
a
a
)
a
)
)
)
)
)
)
) .
) ¿.sB PIJEDE, I"J¿-IIJF'ALIZAR LA FII-CSCFíA
) ilE LA CiEldCia?
)
de un natur alisnic más geaerui'Egt"lI:g"l-
) El reaiisnio naiuraiis'ia es parte c ornc un fenómeno entera-
humana l-t a de enrertd-erse
) 1a cual toda actividad
ás o l¡s de s sustanci¡,s
) que AS AC Vi
mente natll
a la larga tra n que sup one el uso de la cielicta
) quíniicas Péit.n... también
ml sma. A.l igual que todos esos Pun
LU5
) de comP renCer la ciencia
e¡r el intento h.an sido
el n áiuralismo y el estudio científico de la ciencia
) de vista generales,
bargo, lo qr:e ahora
a .,refuiadoS" por tos filós ofos ciocenas de veces' Sin em
o no es que esos argumentos
fil osóficos haYan sido
) hace atráctivo al nar'uraiisrn
que las ciencias cognoscitivas c
adavezhan tenido
a "refutados"
má-s éxito
a
clesde
slt
el
vez, slno
Punto de vista emPírico Esta es la norrna que se ha vrs
LU
a triunfantes no
Iástica, sino Porque
Por
e1 éxito emPírico de su cle ncia volvió insustanciaies
los
)
a.rgumentgs de la escolástica'. enten-
) o'íu útil etiminar algo de la confi:sión y la falta de
Sin embargo, en
) ur*rrrros argumentos f.il.osóficos contemporáneos
dimiento .*rrri¿"rlrráo
) contra Cel nar,uraLismo. Tales ^rr,r*-.¡iá,
f'á siclo provoclao¡ principalmente
t por W. V. O. Q*i,tá, "H1m¡nt13!tt;g; $e
(Quine i96;;:ú"chos
la "ePistenrología naturalizada"
filóiofos ccinsideran filosofía
) de hace casi velnte años 'a
especial de la epistemología'
a de la ciencia más que nada ccil1o uáa aplicu:iol
la filosofía de la ciencia equival'e
a natura-
) Desde esta persp..,iru, natl¡ralizar
a iiza.r tambián cuando nrenos
pa-rte de ia epistemología'
a
3C LA EXPLiCACIÓN DE LA CiENCIA
instrumental?
¿?ueie ser strficiente ia racionalídad
que la racionalidad de
Una lorma Ce desaflar el enfcque nat'"rralista es alegar
cle metas pues,
los meclics no es suficiente. También d¡be ha-ber racionalidad
se afirma, no hay tal cosa coil1o la acr:ión
racional encaminada a una Ineta
irracional (Siegel i985).
Este tipo <ie argurnento obtiene su víabilidad sobre
todo de ia manera como '--
1os fiiósofo, '*runil vccabulario de la
''racionalidad". El problema desaparece
Es cialc q''ie pue'je
con que simplernente se presciil'ia cie es|e vCcab'':iaric' 1
de meta, como lo ilustra ei
haber a_cción eficazencarninada a cualquier tipc
enlre racionalidad
caso prove¡.bial de nazi eficienre. i-a pretencida conexión
instrumental y caiegórica simplemente no exisle'
N4ás aún, investfar las i,eidacleras rnetas cie
cr-ralquier grupo de científíccs
)
)
)
a
a HACIA UI']A TEORíE COC¡¡CSCITIVA 3I
a
) Ce sus medios' Que
un asunto empírico, como 1o es investigar 1a eficacia
t eS
exista cualquier forma de evaluar la "racional'iCad"
de estas metas' al margen
a de considerar otras para ias cuales sean un medio
eficiente las activica-des
t científicas, es algo pioblemático. El que debo ser
posible uila evaluación de
a este tipo es un artículo de fe filosófica no
comprobado.
Asimismo, restringi.rse a 1a racionaliciad instrumental
tampoco impide que
) norrna.tivas sobre cómo debe
e1 estudio de Ia ciencia prcduzca afiimaciones
) puede argüirse que el estucio
lie.zarse acabola empresa científica. Ciertarnente,
) legítimo p4la-qaa
naturalista c1e la ciencia proporciona el úiüco fundamento
) poliri.u científica ,.r,ruü (bampbell 1985) !:. que ei enfcque naturalista
sobre
) i.q,ri... es que la política científica se base en sóiidos haiJ'azgos empíricos
Si tal requisito significa
) estrategias eficaces en pos ,je cliversas metas ci.entíficas '
que la recomendación que legítimamente podemos ofrecer tiene
a-lcances
)
) modestos, nos damos por satisfechos'
)
)
1'Á- ESTLDIO I{ATí-lB-,ir"LISTA I)E
:.É-\nep
f)ti'L FT. L¡1, CiEI'JCL¿\
) L-\--r
a:
32 LA EXPLICACIÓN DE LA CIENCIA
El circulo cariesion-o
coniraposición con 1a iísica experimental. tv{e inclino a pensar que esa condi-
ción es más que suficiente.lo
mayor talla que los que viven en climas más cálid os.
iones universales, se cieri-ren
Si estas "leYes' ' han de considerarse generaiizac
la precisión sufuciente para
entre la falsedad Y la vacuidad. Si se enuncian con
ser informativas, siempre son susceptibles de
algunas excepclo nes, como, en
este caso, los ;namíferos que viven en madrigueras
Si se enuncian con la
dejan Ce ser
generalida d o calificación suficiente para e';itar 1as ex cepciones,
converuent emente informativas. E,n el mejor de
los caso s, tales "IeYes" ex-
que reflejan 1as fuerzas
presan tan sólo ge neralizaciones estaciísticas burdas
selectivas promedio de diferentes medios sobre
poblacio nes similares de or-
ganlsmos'
ls son como las l(leYes dei
Las leyes del desa.rrollo científico an-iba señaladas
clesarrollo evolutivo que se tenían en el siglo kIX-
Proporcionan, cuando
restringidas de casos'
mucho, generalizaciones burdas aplica-bles a clases muy
dernasiado variabie en
El problema reside en que el desa¡rollo de la ciencia es
e1 nivel de los tipos de factoies investigados.
De la misrna manera como 1a
un problema de evolución'
naturaleza puede resoLver de muy diversas íormas
formas'
;;i.iá.r*iotto científico puede ocurrir de rnuy <liversas estadísticas, las preten-
Incluso consideraclas como burdas generalizaciones
consideradas coroo una
didas leyes del desarrolio científico no pueden ser
explicaciones de la ciencia
teoríad.e 1a ciencia. I{o pr:eden proveer verdaderas
en tanto que actividad humana. En el mejor de
los casos, describen cierlos
fenómenos empíricos para los cuales cua.lquier
teoría auténtica de ia ciencia
debería dar una explicación adecuada'
a
a TTr¡nanrrr nÁY')A f A fffCfflOT,t.?
¿UN PAPEL PAR.A LA HiSTORIA?
a
t F{asta ahora no mc he ocupado de la historia de la ciencia. Esto puede parecer
a sorprendente porque, de todas las disciplinas que tienen que ver con la ciencia
t en tanto que activid.ad cultur al,lahistoria de la ciencia es pcr hoy la más activa,
a )r.r, *r.hos sentid.os la más er::.ccionante. Los historiadores, sin embargo, no
t nos brinCan ningunateoría explícita de la ciencia. Sin duda, los historiadores
tienen, implícitas en su quehacer, teorías de Ia ciencia que suelea tomar
)
a prestaCas de otros lugares. Pero tales teorías no son el foco de su investigación-
a,
,if LA ExPLICaciÓ¡¡ DE LA citr¡iciA
iación.Afirmoquelaúidcainter'irretaciónplausibiedeesainvestigaciÓnesque
ce entid'ades "teoréticas" o
los prctones y neutrones, casos pa-ra'Jigrnáticos
,,infeiidas,', son ¡ea-lmente inst¡umentás de la inl'estigación' En ningún sen-
que los a:4plificadores i'1os
rido prácti.o ,o.,; rrüái¿ir.ui,, ,lrro, ar igual
eiectroimanes, simplernente son parle de
la tecn'olcgía necesaria para hacer
investigación en física nuclear'
iiEl juicio científico,,, tiens cos parles, una negattv a y otra
E1 capítulo 6,
que ros científicos se Lrayan de entender
positiva. La negatiá*pr.gr,u la idea cie
como agentes bayesianos o procesadotes de
información 'orcbabilística' No se
a la investigación reciente sobre
elj:-ii'lio
recurre a 1a argumentación lógica, sinc que e1 hombre no es un
en e1 ser humarrá. fo, ciatoi, afirmo, demuestran positiva c1tl ci":ítuic se
procesado, d. i";;;.;i,r., prou"bilísiica.
E1la yarte
1: torna c1e d'ecisionás científicas' basada
expone una explicu.iOi diferente d:
proporciona un fundamento de teoría
en ia idea de satisfacencia.Este modelo
d'el juicio científico' Muestra
de la-s decisiones puru las teorías del "inteiés"
decisiones interpretadas realista-
también cómo los científicos pueden tomar
a la vida real'
mente sobre la adecuación de un rnodelo
i'N{odelos y experimentos", trata c1e mostral qrie los científicos
Ei capítuJo 7,
diseñar experimentos y al usar
a veces emplean estrategiás sátisfacientes.al
cliversos rncdelos cuál se ájusta mejor
datos experimentales para decidir entre
de la lísica nuclear' echando mano d'e
a la virla real. Examino un caso actual
tanto experimentalistas como
oatos de mis propias entrevistas con científic.os,
caso ilustra igualmente
teóricos, que interviei:en en esta investigación"tsste y juicio operan para produ-
cómo los prbcesos ccgnoscitivos a. ..p1-tltntación
cir el desarrollo evolucionista deL campo
científico'
,,Explicación ievolución geológica", iiustra có¡no el
E1 capíruio g, de la
anteriores puede usarse para
modelo de la ciencia expuesto en ios capítulos
La lección principal es que
iiuninar clertos episoriiás iústói-ic..::. de 1á ciencia- estar tan bien arf iculados
a veces ios d.a.tos ;;;;." ser tan
ruti'lcs, y los mcdelcs '
satisfaciente tienen muy poca
que Ios científicos que siguen una estrategia
aSí Sean muy
libedad en cuanto de elección' Sus otros "iniereses"'
"i*o¿.io interés episténrico al elegir e1 modelo
fueiles, p,-,.¿.n ,.rse eclipsa¿o, pt. su prOdU-
,,Ccirecto". IJna vez máS, Se d.muestla que 1'OS prCceSOS COgnOSCiti''¿OS
cenvariaciónyselecciónquedesembocanenlaevolucióndelaciencia.
EnelEpílogo,..Refiexio,,.,,.n.*ivas,,,seexamii.lanbrevementelaslec-
ciones de mi t.áriu de 1a ciencia
con vistas a su propio desarrolio futuro'
<
-
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
) 2" I-AS TEOH.ÍAS T}E L,¿I CItrT=TCTA
)
)
) y ia scciología de 1a ciencia
AUNQLE LOS PéNCRAI¿LA'S DE LA FiLOSorÍa
) presentados en el caPítulo Pasad o son irtiles
para trazr las líneas principales
) una comparación en forma'
del enfoque cognoscitivo, no se Pi estan pasahaceÍ
) de ias otras pos-
Así pues, requerimos un Planteami ento más f-.rorrrl€Eorrzado
todas las explicaciones en
) turas. Sin embargo, como sería irnpo sible examinar
de explicaciones
) un solo capítulo, seré muy selectivo tanto en el número
Me ocupo solamente de
) consideradas, ccrno en la garfia de temas estudiados.
y funclamentalmente los
+- las po sibilida,ies más activamente discuti das, enfoco
teme's relacionaCos conlanatura-1ezar\e1tas-r9-pfe-$t9:l1t-c::t
o.n e s -cierÉíficas .(cr e e n-
) IL L, (1ógica incluctiva, eleccién de
cias, modelos, ttorías) Y ccn e1j u!clo
) teoias) Estos scn los teira-s mas irnpoilantes para el enfoque c,.qg¡¡osc!-!ivo.
) ! ,f - li
a-iiie un exalnen relrospeciivo podern cs dividir la obra
del siglo XX
tv1cu1
) desa¡rollaCa tan¡o en la fiiosofía cornc en la sccioiogÍa de
ia ciencia, en dos
) Y erioclos separaiu4,os
por ia influencia- revel'a'd ora, en los a.fios sesenta, de Lg
con-
) *:stntctura de las revoluciones científicc's {1962) de i{uhr. EmPiezo Por
sociólogos de 1a
), siderar dos teorías de la ciencia desarrolladas por fi.iósofos Y
de la teoría de Kuhn,
) ciencia antes de 196C. Después de una breve pr eseniación
a-
t
procedo a examinar algunas de las princiPaJ.es teorías de la ciencia Postkuh-
nlanas
a
t_ Er pi"¿p o LÓ GICO
a I iq.I slvl
a:
a
Ce F1ilbert , ?3-ano,- F1q gq Y--Ru s s ell . Estas obras s
--------.' nt el
tos-de-las
a -metodologÍa-de-Ios
E stu,i io s q iqpiri§laq 1 ó gi-cg-s de ia ciencia.
En segundo, el emPirismo clásico de
a
t i/¡31
t
a
AA LA EXFLiCTICIÓN DE LA CIEI'{CIA
Friedman 1983).
teoias (p,eichenbach té28, ig5g; G¡unbaum 1963,
,
Elfundacicnismc
Y 1o fi-je el una
El empirismo iógico fue explícitamenie "íundacionista" '
cle resrectos' Antes que nada' fve
c.o;tce,otiislr'rc;tte fundacionista
miscelánea
eneisentido.rrq.,.lofueelprogramalcgicistadePrincipial"fatherflaticq
(Yrrhitehead y Russell 1910-i9i3), ó. se
propcnía "reducir" la aritmética a la
lógi,:a. Se empiez; po, no.iones 1ógicas como Las de conjunto y eleiaento
"t"l
<ie un conjunto y l.rego se construyen
iógicamentg entidades ccn las propie-
dades formales de los enteros- i{abiendo
construico Los entei:cs' se usa-n 'c3-Ia
El prcgralna supone que
construir 1os números racionales, y así sucesivamente '
las nociones lógicas originales son en cierto
rnodo más fundamentales y
que
nociones matemáticas rj'':rivan de
se
conceptualmente mas cla¡as que la-s
eilas.3
este método para des¿¡rollar
Russell rnismo vio claramente cómo aplicar
tradiciona-l. En su obra
una versióii fundacionista deta epístemoro-giaernpirista
comenzó con la existencia de
Orr Knowtedge if ,n, Exte*til t{ortd (iqf +)
ord-inarios como mesas y sillas
, ,datos
sensibles" y procedió a analtza¡ oü¡.tot
de datos sensibies' Logícal Cons-
como conjuntos (á .orrjrrntos cle conjuntoi)
inspirad'a d'irectamente por la
trwction of the vlortd {1928,196i) cle Ca¡nap,
con mayor detalle las sugerencias
obra de P.ussell, fue ei intentO de desarroilar
autor'a
cle este
fundainentos de la aritmética' lcs
siguiendo e1 programa de Russell pa-ra 1os
analogos para fundamentai 1a gec-
empiristas lógicos concibier"., progiumas
la sociología-- El optimismo y Ia
metría, lá física, la biología, la pslcobgíay
Parecía que no dudaban
audacia Ce sus pr"gru*ás fueron sorprendent-es'
de fundainentos filosóf,icos o de que eilos
nunca de que la cieicia necesitqra
tuvieranlosmétccosadecuadospara]'atarea.
en hacer la descripción de
Los empiristas lógicos mostralan poco interés
cómo funciona áiá"*o ru óier:cia. su
objerivc era darle a ra ciencia fundamen-
tos"lÓgicos"y"epistemológicos".sumetafundamentalerajustificaro
no se puede empren-
legitimar la cieícia, no sólo .rfli.u. cómo
funciona' Pero
der la tarea de legiiirnación sin tener
algttnaidea de 1o que se busca justificar'
)
)
)
)
t
t L.i',s rECRí¿s oe LA clE,NclA 45
a
t La imagen cie la ciencia construida por 1os empiristas lógicos paia la tarea de
a iegitimación es la imagen que dcraiaó ia fiicscfía angloa-inericana cie ia cienciá
) d-urante la generación pcsterior a la Segunria Guerra F.áunciiai. Uno nc debería
) extrañarse cle que ia ima-gen generacia con el fin de 1a justificación resuitara
) poco conveniente pa:a los fines dela descnpción o ia explicación.
a
)
) El psicologtsmo
a Frege, codescubridor de ia lógica rncderna, enseñó que se debe distinguir
a tajantemente entre la lógica y la psicologta. La lógica no es la ciencia dal
) pensamiento sino, como las matemáticas, el estudio de relaciones purarnente
) iógi.ur entre entidacies objetivas aunque abstractas. .A la supuesta confusión
) de la iógica y la psicclogta se le 1la-inó "psicolcgisrno". Para los empiristas
) 1ógicos, incurrir en psicologismos eraun pecaclo morta-l. Lo rnismo ocurría con
) .1f 'sc.,oiogismo" .
) La aplicación de ias errseñanzas de Fiege a la ciencia. es inrnediata. Ei estudio
) í;icsóf;co de ia ciencia nc es ei cle cí:mc piensan o actúan rea-knente los
) ci,=atíflicos. Este.-.ueda para ios ps:cólogcs y los sccióIcgcs. Por el contrario,
a es ei esruciic de las relacicnes lógicas e¡itre plcpcsicicnes científicas. En
a pa-la-!:ras de Carnap (1937, xiii):
La labor dei científico consiste en proponer y probar teorÍas. La etapa iniciai, el acio
de concebir o inventa¡ una teoría, no fi1e parsce que requiera de análisis lógico ni
c:*iii sea susceptible de é1. El pioblema de cómo es que se le ocurra una nueva idea a
una person a _yasea un tema rc,,lsical. un conflicto drarnático o una tecrÍa científi-
ca- puecie se¡ de gran interés para la psicologia empírica; pero paia el análisis lógico
dei conocirnierrto cientÍíico no tiene pertinencia alguna
POSTU LA DOS
CONCEPTOS PRiMIT¡VOS
I
I
I
I I
CCNICEPÍOS DEFINIDOS
xI +
I
I
I
I
I
I
I
CONCEPTOS EilIFíRICOS
..TEBRENO" DE LA
OBSERVACTÓN (EXPERT ENCTA)
Figura 2.1 Iiepresentación empirista lógica de una teorÍa científica. Tomada de Feigl
( r e7c).
i-As rFoRÍes »a LA ciENciA -41
entend'ersecomopar|ecielosenunciadosqueconfiguranlateoríadela
rr
"#:t::fiiir co fue ro n mi nan do g r adu al-
emp iri smo ó gi
r", ei-np irisras d e1 I
posguera'
la concepción de ias teoría-s científicas ' En los escritos de la
mente
en dos partes' una "teórica" y una
el vocabulario de la teoría se dividía
tto'osgryacicnal"' r !- r-^+.r.-*i-a¡r¡
que e1 significado de lcs términos teóricos
es
La doctrina más aceptada eIa
observaciona"ies aunado
1ás términos
por completo fuirción áel significaáo de de la teoría'
a las relaciones purarnente
fármales especificadas por los axiornas -
reierido a la par+'e teórica de las teorías'
El resultadO es el instrumentslismc
entidades reales; Son meros instr¡-rme:-rtos
Los términos teóricos no se refieren a
a las ccsas reieridas pcr los
para orga lizar t,. uri,*ucicnes .o,..,,'i.ntes
que de manera acrílica podría uno
tárrninos observaciona.les. Lu, .,,tidaces
suponer referidas por los térnrinos
teoréticos son, en e1 mejcr de los casos'
científicas s? repfesentaba típicanente
ficciones útiles. Esü visión de las teonas
.o*o se ve en la figura 2'1 §eigl 1970)'6 - nP'eichenbach'
^:.-L^-,. por
No rodos ios empiristas lógicos eran instrumentalistas'
diiícilmente se hallará a nadie
cierto, se r..lumaba,,..aiistu;'. slrr.*bargo, por sentado que ias teorías
aso;i.ado con el empirismo lógico
q,,. dé
',o a1gúrr-tip-o--
cienríficas de!-an g*o¡,c-e-bi¡¡g 9-gq1o-sisie'uas forn¿¡e§-F-íi9o.,al¡-'-o-s-Eoil
ciq_ipterpretación*áñirü. nité il;ip""to áe,partida de toclos los ai'rálisis
ulteriores de la ciencia
.Amediadosdeldeceniodelg30losempiristasiógicoshabíandesistidodel pariir
el cuerpo delateoría iísica a
r sueño russeiiiano d.e construtiágl.u*enti justificar las inferencias
desd-e
, de La observación y se enfrentarori
al problema de
ia observación hasta la teoría. En tei
virtud' expusieron el talón de Aquiles del
. planteadc por F{rrme. En contraste
empirismo: el problema de ia inducción
a\eza de las teorías científicas'
, con la casi .,rruii*idad concerniente a la natur
enestecasosusrespuestasdiferíanenrespetosfundamentales. el
. iás ideales del empirismo lóeico fue
El programa que r.or.rJi;;;;;j;r
una lógica inductiva que fuera estric-
,, inrento de Carnap (1950) por construir
de Russell' Por cierto que John
,u*ente la generalización de"Ll;;i;, deductiva tan sólo unos años
': ü^r"-rJt.vo., (1921) había tiectro un intento sirnilar
¿. piUiitu¿ot los Principia Mathematica'
'
d.espu¿, ..enunciado de ley,, , I, . .Todos los
: ¡a icea fundamental es *,"v si*pt., el
.cisnessonblancos,,implicadeductivamenteelenunciad.o..SiSa-muelescisne,
es un sistema 1ógico en que los enunciados
, Sa.muel es blanco". LO que se d.esea
biánco"
: de evidencia como, e, "samuel es un cisne
obsen,acionaies
"¡implique
43 LA E,X:PLICACIÓN DE LA CIE}{CIA
La explicación científica
piican las cosaS, sirro 1a explicación "lógica". Esta 1ógica resulla ser deducción
si*pie. La explicación cientíiica, según Hempei, es un argumento deductivo
en el que el enunciado que describe el aco¡iiecimiento por erpiicarse @ste
cue rvo es negro) se deduce de una ley general verdadera ff
odos los cuei-vos son
Muchos
negros) aunado a concliciones iniciales adecuadas (Esto eS un cuervo)'
también
anos después iraló de generalizar su rnétcrjo para que incluyera
,,estadísticas inductivas" (Hempel1962). :
explicaciones
Corro la predicción enciencia se aneJizaba también como un argurnento
a
Ho.v dia sólo hay unos cuanr,os fiiósofos de ia ciencia que estarían dispuestos
a CefenCer alguna de las principales doctrina-s del empirismo 1ógico en alguna
50 I-A EXPLIC¡\CIÓI\ DE LA CIENCiA
estas
uniformidades, ieyes), except,o por Cuanto
(hipótesis, i't"tiá Ia ciencia' Esta no
esenciales de ias ciencias r"il;;;ti"t¿"ti'áaái
1o, senrimiento,
son pertinerr,., u
¿tnito del saber enciciopédico'
es una avenrura
Laposicióncomplemenla.liaalasdurascnticasdelempirismológicoen
percatarse de ello' Merton
contradeisociologismodifícilmenlepodíahaberseexpresadomeJo¡.Aunque
y probabl.*;;; rl; siquiera
no de manera.*pri.iiu, y los "haliazgos
e1 anáiisis de la "metodología"
dejó a los empirir;;;l;ñ", qy: é1 hacía era proveti¿t un anáLisis de la
esenciales de la ciencia--
Lg
..estructuracultural,,dá.Iáciencia,elcuaJ,.o.*oseveríamástarde,comple.
de los empiristas lógicos'
mentó ei análisis de la,,estructur^ióri.u"
Las norrnas de lo
ciencia
certific.ado'
El cometido instirucional de la ciencia es la extensión del conocimiento.
fi1 proporcionan la definición
Los métodos técnicos que se usan para alcanzar este confir-
enunciados de regularidades empíricamente
;;;;;;.-;;i;;;;;;'ii"oo' predicciones)' Los
madas y lógicamente consislentes (ios cuales son; en éfecto,
y los métodos'
imperativo, irrrti*.ionales (costumüres)'se derivan de los objetivos
el objetivo final'
La estructura total de las ,or*u, técnicas y rnorales configura
PanapicMAs Y R.EvGLucICI'JES
-:-. :::r ura pelspectiva Ce un cuarto de sigio, está claro que la Est¡';:ctura de
.:: :¿'. o:ycic:¡.es cienttficas {1962) de Kuhn es, por todos conceptos, el libro que
la ciencia del siglo XX. Fue la obra que má-s
=.s :a l:i;luidc en Ia natu raJezade
54 LA EXPLICACIÓN DE LA CIENCI,{
EI naturalismo de Ktthn
)
Yrefiriéndoseaunsurtidodedistincionesfilosóficasestá'ndares'entreellas
,,descubrimiento" y la "justificación", replicó
)
las que se establece entre el
) (t962,9):
)
1ógicas o melodológicas' q'::l'ul virtud
) lvlás que constiluir distinciones elementales ahora parecen partes int;grales
cieltífico'
) serían'previu, ut onáiiris del conÓ.1,"i."iá a propósito
esenciales a Ias cuestioi-les mismas
dei conjunto tradicicnal de respuesia-S
) las in'alicla en absoluto' sino
de ias cuales se han desplegado. rui-.iit'raridad ^o escrutinio que norlnalmente
) que las vuelve parte de la tecría y'
por eilde, las soltlete a1
poseer más que
a se aplica en otros campos a las
teorías. si en su contenido han de
abstracciÓn pura, entonces t¿ .ont",-ti¿o
clebe ser descubierto observáncolas
en su
de la
) cie eluciclai" ¿cómo puede la hisrcria
aplicación a ios datosqu-e se.rupon. iran
a ciencia no Ser fuenté dá fenómenor-u
Lot cuales legítimamente puede
pedirse que Se
).
)' LoqueplopugnabaKuhnenestecasoelaunafiiosofíanaturalizadodela
palabras' Y aunque parece
r: truyu usado exactamente estas
ciencia, aunque ,io
haber evitado deliberadamente la frase,
la suya fue una excursión a lo
que desde
rli "la ciencia de la ciencia" ' Foco se habría
)' enlonces los escritores han llamado
de la mayoría de las críticas filosófrcas
adelantado a partir de las intenciones
), que la metafísica podía haberse con-
del en'rpirismo Iógico. Y nada menos
ai trapuestomásdirectamenteaiprogramaclelempirismológico'
)':
.i
- Lo teoria Kuhniano de la ciencia
li "estructura" ' el libro de Kuhn
;r; A pesar de que en Su título apaÍezcala palabra
científicas a la manera cornC' la
.i no versa Soble Ia estructura de ias re'oluciones
las teorías-científicas' o a Ia de
ai obra de Carnap se refiere alaestructura de
La de Kuhn es una teoría dei
a, Merton sobre 1a estructura social cle la ciencia'
desarrollocientífico a la manera Como 1a de
l"{arx era una teoría del desarrolio
)i económico, o Ia de Piaget una teoÍía de1 desarroilo
cognoscitivo' Y como lc
ai
IIi
55 LA EXPLiCACIÓN DE LA CIENCIA
hicieronl-.{arxyPiaget,Kuhnncsoireceunaseried'eestadios'Eneiecto'ios
estaCios faciiitán ia árganización por capítulcs
ie todo el libro de l{r:hn'
ii.9.eado a ia
Hoy en díá, lcs estu6antes tanio de Mar-x ccÍlo de,,'Eia-get,han
'orociesión de los
co;;iiii¿';-;á' ;"q-i;,t'";9rt"¡!e de sus teorias no es'f1
estarlios' i"t
i"=.;"t-;''rtlio '.;t*plos én eue.la o::-=Tilt^11: ut aiusta a ia
rnecanis':1os y tipos.de
pauta or.r;.i,".-i; i"¿. impcrta son Lcs siferentes
estadios no hacen sino
actividad que.operan en diferentes periodos. Los
estos temas'
proporcio¡* unu manera laxa d-e organizat la discusión de un relato
poün sirnplifjcando los estacios de i.':hn, clecir que ncs habrind-rado
demasiaáo general' La ciencia es una
del desarrollo de la cienciano deja de ser
enlon9es, la unidad de trabajo
-:- uniciad de análisis demasil$o. grát'de iCuáJ.es'
-
cuyo desarrnil, Uorq,eja Kühn? La respuesta
resultu'*ás clara a'partir de los t_
distintos. El otro
"t"
abarcadora que ;;;;*"dera técnicas instrumentales'
la teoría efne¡a1 :
Es en este sentido más global
incluso un punto ,i. uista metafísico del mundo'
newtoniano" de la
de,,para.digma,, como Kuhn se reiiere al "paradigrna
mecánica, o incluso a toda la física a
lo largo del siglo XVIII ' No cabe 1a menor
dudadequelosparadigmaSexistenenestesentido,yconvienedisponerr]eun
pienso que el término e¿: este sentido
,.
a la suscd.icha teoría.17
LAs rEoRies oe LA cIENCTA s7
según mod.eios estabiecidos. Uno de los principales asertos de Kuhn e s que 1as
anomalías existen en todos los campos y en todo momento. Si los paradigmas
fueran teoría, y las aplicacicnes deducciones de 1a teoría, todas las teorías
habrían de considerarse como refutadas (y supuestamente rechazadas). Pero,
al contrario de corno ocurre en Ia filoscfía rle Popper, obv:amente éste no es
el ca.so. Por ccnsiguiente, las anomafas solas no producen revoluciones cien-
tíficas.
Olra ';condición necesaria" paraia revoiución es 1¡. existencja de un seniicio
de cr¡s¿s. Esto ocurre cuando, aunque se consideie necesario resolver el acertijo
anómalo para prcgresar en el campo, muchos practicantes acaban por conven-
cerse cle que ninguna articulación de los modelos estándares obrará el efectc
deseado. Lo qu-e sé necesita son soluciones radicalmer ) nlrevas, lo que equi-
vale a nuevos modeios. La búsqueda de nuevos modelcs se presenta eir un
periodo de ''ciencia revolucionaria". Qué es lo que produce el serriid.o de crisis,
no qr-reda claro en la exposición de Kuhn.
Podría pensaÍse que 1o que lleva a su fin el periodo de la ciencia revolu-
cionaria, y a establecer por ende una nueva tradición científica normal, son las
soluciones adecuadas a los probiemas que provocaron la crisis. Con to,Jo, para
Kuhn, el proceio no puede ser tan simple, puesto que se dice que ias traciicioaes
de investigación son necesariamente "inconmensurables". Lo que Kuhn en-
tendía por "inconmensurabilidad" constituye uno de los principales debates
de la erudición kuhniana
En electo, existen varios tipos de inconmensurabilidad. Uno de ellos es la
inconmensurabilida d de significacJo. K¡-rhn ha dicho que en la transiciórt revo-
lucicnaria de una a otra traciición científica normai, ias paiabras cambian su
signiiicado. En ia lísica einstenia-rra, "masa", dice Kuhn, no significa lo mismo
que en la física newtoniana. Y cuando dice que los practicantes de tradiciones
científicas normales distintas tienden a hablar uno más que el otro, parece decir
qrie uno no entiende cabalmente 1o que los otros dicen.
Fue la inconmensurabilidad dei significado lingüístico lo que la mayoría
de los filósofos consideró fundamental en la exposición i<uhniana. Después de
todo, el significado ha sido durante mucho tiempo ei foco del interés filosófrco.
Filósofos como Kripke (1912) y Putnam (1915) inventaron una nueva teoría
de la referencia para hacer frente a este ciesafío. Pero, según ahora creo, Ia
inconmensurabiiidad del signifrcado no era el problema principal. La liave
para entender adecuadamente ia ciencia no ha de encontrarse en ia filosofía.
del lenguaje.
El verdadero pro'olema de comparar diferentes tradiciones científicas nor-
nrales es la inconmensurabilidad cle los estcíndares. En ei procesc de establecer
una tradjción de rnvestigación cientillca normal, ) rnidad cientilica desa-
rrolla ''normas", "reglas", o "estándares". EstL., iactores contribuyen a GI
il
determinar, entre otras cosas, lo que importa como problema pertinente y'io
r-,a^s rEoRí,rs oe LA ciENClA ss
) por .jerrpLo, no podría ser solución dentro de la tradición clásica que suponía.
continuiáad. Así pues,:a1 reconocer verdaderamente como tal a .aa nue\/a
)
solución, los cientíiicos crean una tradición nueva y, por ence, niievos
están-
) dares. pero su decisión previa de aceptar 1a nueva solución no está-
gobernada,
, por lo tanto, por ningún estánder. Se trata de una acción auténticamente
, revolucionaria en el senticio pclítico clásico'1e
) Naturalmenti que el problema desaparecería si existieran estándares de
) elección independientes de cua-lquier tradición de investigación de la ciencia
) noimal. pero l(uhn {Ig52,93) niega esta. pcsibiiidad: "Al igr,ra-l que en ias
re,.,clucicnes políticas, err la eleccióli de pala-diglria no hay estáir¿¿¡,ie iila)or
) jerarqtiía que el ccnseniiri-riento de Ia ccpunidad peitinente"-
) Só1o podemos estudiar los ciii,ersos procesos eil ','irtud dc los cuales ios
) científicos llegan finalmenie a pcnerss de acue rcio sobre un 1Ll'.3vo cc:l-iunlc de
) moclelos. Entre ellos están las técnicas cle persuasión y la lenta agonía de los
a partidários de la antigua traCición-
a
a
a Rel at iv is mo y co gnoscit iv is m o
a ljna acusación comirn entre los ii1ósofos la ciencia ha sido la de que ai hacer
cle
a todos los estándares científicos inte¡nos a la tradición de investigación de la
a ciencia normal, Kuhn hizo de su exposición de la ciencia a-1go fatalmente
a relativista. Para evitar ese relativismo, lo que suele hacerse de ordinario es
a suponer que C.ebe haber estándares cie contenido neutro aplicables a cualquier
a trádición científica normal.
¡ Sin embargo, existe una forma de evitar el rela.tivismo sin recurrir en lo
a absoluto a los l está-ndares". Consiste en ceiiirarse en'los procescs cognos'
citivos, como los que intervienen en la representación y el juicio, y los cuales
a comparten todos los científicos. Hasta cierto punto, I(uhn rcconoció esta
a posiÚifidad. Apeló a ia noción de "interruptor gestaltista" para explicar cómo
a los científicos cambian de una tradición a otra: cómo llegan a considerar
a ejemplar una solución dada. Es claro que la cai;acidad de hacer este cambio
a no depende de haberse adherido a ninguna tradición científica normal, sino
¡ que es paite de la dcta-ción cognoscitiva natural de tod-o científico.
a Por desgr acia,la-capa-cidad de experin:-rtar giros gestálticos cie la experien-
¡
60 LA E,={PLiCACIÓN DE LA CIFI']CIA
Lometodologiacelosprogramasdeinves;tigacióncientífica
de investigación ciel]1f]:^ eS una
La metodología de Lakatos de los plogramas
de Popper, Kr-ihn y Qr;ine y tal vez'
audaz mezc¿ade ingredientes tomados
como ha señalado Hacking (1979), ;on
una pi'izdel estilo húngaro de f{egel
yMarx.ElpropioLakatospresentósuteoríacomounamejoraa]rametodc- como
de Popplr, iacual había sido presentada por Poppei
1ogía refutacionista
y al " ccnvencicnalismo " (Lakatos 1 970'
i'91 1)'
una mej ora ai "inductivismo"
l-akatosempezóporConCordarconPopper:nqueel'prcblemafundanrental y la
proveer ,,roa clemarcación entre ia ciencia
de la tecría c1e la merodcl0gía es
como criterio de demarcaciÓn'
no ciencia. Popper propilso la refutabiiiclad
d'e que' según la.reforrnuló
pero Lakatos se tomó a pecho la opinión de Kuhn . .océano
, ( 1970,
,iu.,, en un de anomalía-s,
pintoresca*.,,,., .odas ]as teorías
una lalsa consecue*cia de ia teoría-'
135). A-1 interprátar la anom,iía como que todas las
popper, de acuerdo con Lakatos, habría tenido que concluir mostró
refutadas y, por tanto, deberían rechazárse' Pero' como lo
teorías está-n
luces nC eS lo que acontece ni siq'-riera
Kuhn én repeticias ocasicnes, esto atodas
en los ejemptos pri*u.ios d¡ la erun
.i.n.ia. Ei criterio de deraarcación
establecido pcr plop.r, concluyó
iakatos, es dernasia.do infledble'
la
tesis de Duhen-r-'Quine' según la cual
En consecuencia, Lal',atos abrazóla
LAs rFoRÍas »e LA cIENCIA 6t
recurriendo a "hipótesis
refutación de cuaiquier teoría puede siempre evitarse
aw.iliares" aCecuad.as. Sin embargo, este reculso
lc ponía en peligro de
el cual é1, igual
cclocarlo nuevamente en el terreno del "convencionalismo",
convencionalismc, Lakatos introdujo
á1. pop, er, rechu.aba. Para evitar ei normal interpretada'
irrr. r*iár.te a la idea kuhniana de la tradición científica (1970'
ahora, como una Sucesión de teorías aunada a regias metodológicas
eS una sucesión de
132):" Lo que se evalúa como ci.entífico o pseudocientífico
con reglas meto-
teorías y no una teorí a d.ada". ljna sucesión cie teorías
doiógicas constituye un "progÍama de investi gacg-\:l: . -
posee tres
f¿?t exactamente, el programa de investigación cle Lakatos
que cOnsiste en un "Éú-
Coaponentes. Primero está la cornponente teorética,
de "hipótesis auxiliares" '
cleo duro" de leyes y un "cinturón de protección",
individuales
co¡l].o los empiristas 1ógicos y Poppe r, Lakatos concibe las teorías
o rnodélicos de
como conjuntos de enunciados. Los "paradigrna-S concretos"
Kuhn no desempeñan papei alguno' La seg'-rnda- componente es la "heurística
pa"ra
nega-tiva", regla i-..-;etociológica qtle proscribe ei uso de contraejemplOs
de e''¡itai
refuiar1o: asei.tcs perlenecientes al núciec duro. I-a refulac!ón se ha
i¡iedienie ias aOecuadas acliciones o sustracciones al coujlinto de hipótesis
alu<iliares. La tercera Componente eS |a. "heurística pcsltiva",
la cua-l e stablece
qué
ias directrices para el deso.rroilo futuro y proporciona sugerencias sobre
tipc cle hipótesis au¡iiiares nue\¡as podrían ser Í'r''icríferas'
. lgit :1 que Kr-rhn, Lakatos encontró apoyo a su punto de vista en la historia
de ia gravi-
de la iriecánica newtoniana. Las tres leyes de }.Iewton más la ley
tación universai constit¡-ryen elnúcleo duro' Cuando se presenta la a-menazade
a-l núcieo- Mas
sncn-r&lías, como la- del movimiento de la luan, esto no impugna
bien, los recursos implícitos en el núcleo duro, como las fuerzas el momento
y
que
angular, puecien usarse para preparar hipótesis au-xiliares adicionales has+'a
la ábservación ilegue a concordar con e1 núcieo duro.
I-akatos evaluaba los programas, no 1as teonas ya Sea como "prOgreSivos"
O "degentraiivos'r. Pa¡a que Sea progresivo, el prograilla debe usar
cOn
p.ou.Áo su heurística positiv a paiapred.ecir fenómenos nuevos o novedosos '
bn este sentido, Lakatos siguió a Popper en cuento a suponer el valor científico
de un rnayor contenicio de verdad. Un programa que puede tener
éxito en io
del
tcca.nte a explicar ienómenos iirventando hipótesis auxiliares sólc después
a-ccntecimiento, se dice que eS degenerativo. A1 respecto, Lakatos compartía
e1 disgusto de Popp., pot las maniobras ad froc. Sin embargo,
no todas las
prediJciones necssitan ser afortunadar;. De hecho ni siquiera la mayoría de
L¡ur. En este respecto, Lakatos puso d-e ca'oeza ia rnetodoiogía refutacionista
de Popper. Fara-Fopper, las confir¡naciones tienen poca imporlancia; lo
que
i*pc.lá son las refutacicnes. Pa.ra Lakatos, las refutaciones tienen poca
imporrancia; son las conflrmacicnes lo que importa'
Según la teoría de Lakatos, la competencia se susl¡la entre los programas
de
62 LAEXPLICACIÓN DE LA CiENCIA
interna de dicho
episcdio como parte cle la historia de la ciencia es la historia
caso sería super-
episodio. Indagar;ntrelos hechos sociales o psicqlógiccs de1
f1uo.Sólosenecesitarámayorexp1icacióncuandoeiprogramahistóricamente
exitosoSealnenoSprogresistaquesusrivalessegúnlasnormasdeLakatos'Así,
por qué la
debemos volver u la-psi.ología y a la sociología par;i e;<plicar
comunidad cientifica no sigr-rió el camino del "progreso ragionai"'
Kuhir, quien no reconocía otras normas que las comprendidas en
una
tradicióndeinvestigaciónparticu1ar,bienpodríaponerente1adejuiciolos
clel progreso
fundamentos para que Lakatos afirmara que su explicación
por haber reco-
racional es la correcia. Se ha de conceder crédito a Lakatos ,
,
ia actual ciencia grande, (1911 , 1 17). Más adelante consideraré las perspectivas r
.
de la "metametodolcgía".
ElprogresoySuSproblemas(1g11)deLauc1anfueunintentode,eIaborar..un4)'
modelo potencialmente más adecuado de la racionalidad
científica" (1917.' ';
esdecirunmejormodelodelacienciaqueIospropueStoSpCrIosempiristasen
lógicos, Kuhn o l-ututot. Al igual que estcs dos autores,
Laudan se centró ,
y de Lakatos' reconoció
no generar.onr.rridos nuevos. A diferencia de Kuhn i
doicategcrías de problemas funCamentaimente distintas' '
LAs rEoRÍes oE LA ciENClA 63
La eficacia general en cuanto a resolver problemas que tiene una teoría se determina
evaluando el número e importancia de problemas empíricos que la teoría resuelve y
deduciendo de ahí el número e importancia de las anomalías y problemas concep-
tuales que la teoría genera.
Lo metdntetodologío
..metame|odología,,
Como se indicó arriba, Lakatos
introdujo el término
1a superioridad relativa
de cualquier
para describir su rrr¿to¿o para invetiigut (!977
¿.i*¿toáo científicc' En El progreso y sus problerrtos '
teoría propuesta
Cap'5)Laud.anadoptóunaestrategiasimilaraPnquediferenteensuspor-
mencies' r^r^!A-:^4 de Laudan
'stíaenbusc¿"rprimeroun
luestrategia metametoCoiógica ::nslacerca de ia racionalidad
preanalíticas prefericias
conjunto de "intuiciones en ia historia de la ciencia'
científica,, (lgl.t, 160). Es cecir,-^i";;rncio
encontramos (1977, 160):
y rechaz-o de.teorías respecto de la cuai la
una subclase de casos de aceptación científica tienen fuertes (y parecidas) in-
mayoría de las p.rrüuJ .o.,
á¿'".u.ión
tal vez todas) de las siguientes:
tuiciones, grtu.rrr. .o*prenderá.m"t'r'^t-ii"truso rechazar Ia aristotélica hacia'
(1) era racional mecánica-n.*1,l"iu"u v no tenía
digamos, i800;."Jp;;;l;
,1111*rár"á.^iqzó fue irracional creer que el átomo
partes;
Elsiguientepasoeraaplicarla.metodclogía(lateoríadeLaudan)aestos a resoiver
casos preferidos (cp) para
cleter*lrrur 1a efiácia relativa en cuanto
probiemasdeiastradicionesencuestión.Lacomparacióndelaeficacia
más prog'esiva y' así' cuái debió
eraen efecto
calculada nos dirá qué traclición
aceptarsedeacuerdoconlametodologíadeLaud'an...Eigradodeadecuación
proporcional alnúmero de cP
t.o¡o je ia evaiuación cientíñca es
de cr_ralqr-ii.,
LAs lEoRíp.s oe L¡. crENCrA 65
El modelo reticular
que ia racio-
En La ciencia y los.talores (198aa) Laucian empezó señalando
poseedora cie estructura
nalidad científica se ha considerado usualmente como
jeriírquica: ias teorías se justifican (en relación con las pruebas) refiriéndolas
justificarse recurriendo a ob-
a reglas metodológicas que, a Su vez, pueden
jetivos más gene.Il.r. La justificación sólc transita en un sentiCo'
de los
lógicos' incluido
objetivos generales a las teorías especÍficas' Los empiristas
popper, cánsideraban generalrnente la elección de objetivos como un asunto
de relativismo, porque
de,,convención,,. Nc les preocupaban las acusaciones
sus objetivos eran io
suponían que tanio sus reglas metodológicas como
CUaiquier cOntenidO
sufic.ientemente ab-stractos ComO para estar exentos de
en un 'solo
específico. Por contraste, ei paradigma global de Kuhn,comprendía
páqr.t. unificado teorías, mérodos y objeiivos. De tal suerte, cualquier
elec-
Teorías r ll lU§
Deben armonizar
(1984a, 63)
Figura 2.2 tvlodelo reticular de Laudan. Tomado de Laudan
teorías, al igual que no io hicieron en los análisis cie los empiristas iógico's.
Para Kuhn, según yo lo entiendo, es ei paradignia en tanto que modelt't la
que eS principal. Lo que cuenta son los juicios de aigunos cientíiicos, en el
pa¡a futu¡-as
sentiCo cle que una sciución particular proporcicna un modelo
investigacioies. La formulación abstracia de leyes y reglas metodológici'rs
desempeña un papel mucho menos importante. Los filósoios
postkuhniartcs
de la ciencia prácticamen're han sosiayado o rechazado estcs aspectos ciel
,planteamiento kuhniano. con todo, scn precisa¡nente estos aspectos 1o que me
p..... inás sugerenie y proraisorio para el desarrol'lo ulcerior de la teoría'
E i gr¿pIRisMC ccI'JSTRucrIvo
Los empiristas lógicos concebían las teorías científicas como sistemas formales
no interpreta.dos que contenían reglas empíiicas de interpretación. tr'n sí mis-
mo, Lln sistema forma-l es un conjunio Ce enunciaci.os ("axiomas") formuiado
en un lengi-raje fcrmal expiícitarn er\ip- caracteizacio. Los elernentos del lenguaje
forma-l se caracle rizabanúnicamente atendie r-;do a.su estructura siniáctica- F>:,
por ejemplc, es una función cle preciicadc de una. p1.aza; Rxl/, ui;ra fl-rnciÓn
reJ.acional de dos piazas; y Fo..LFb, una conjunción de dcs enunciados sin-
7O LA EXPLICACIÓN DE LA CIEI'ICIA
teorías libera
La concepción semántica de van Fraassen a propósito de las
de su predecesora
al estudio fiiosófico de la ciencia de ios grilleies lingüísticos
empirista iógica. r que ics
,
proptos
Lcs empirista.s 1ógicos estaba-n perfectamente conscientes de
inter;
científicos no presentan sus teorías en forma cle sistemas iormales
'pretad.os. Así pues, el ana-lisis filosófico de cualquier ciencia requería una
,,reconstrucción racional" previa del contenido de esa ciencia en un lenguaje
formal apropiado. Ei hecho de centrarse err los modelos permite evitar
ese
La udecuación emPírica
presentar una iecría consiste en especificar una farnilia de estructuras' sus modelos;
y, en Segundo i..rgar, especificar ciertas partes de eso: modelos (las suÓesf n¿cturas
bmpiricá$.o*oiut ¿idatos para la representaci.ón directa de los fenómenos obser-
vables.
Dicho breveiriente, Los modelos tienen dos partes, una subestructura empí-
rica y una Superestructu.ra teorética (en este úitimo caso, uso mi propia
terminoiogía, no Ia de Van Fraassen).
Van Fráassen no negaba que la superestructura teorética pueda representar
carac:terísticas d.e la vida real. En las categorías empiristas 1ógicas los
términos
i."rJti."r pueden referirse significativamenle al mundo, y los enunciados que
emi:lean dichos términos pueden ser iiteralmente verdaderos en relación con
ta viOa real. Sin embargo, negó que la ciencia necesjte preccuparse por la
coÍresponde¡rcia entre la superestructura teorética y el mundo. Para los
propó-
sitos de la ciencia es suficiente con que exista correspcndencia entre la subes-
12 I-A EXPLICACIÓN DE LA C]ENCIA
Tenienc]cenmenteestanuevalfllagendelasteorías,podemosdistinguirenlredos que
frente a la teoría' Podemos afirmar
aptiludes epistémicas que po.c1e*ári¿oprar fiel' hasta ei
es verdadera (es clecir, que tlene
un modelo que consiituye una réplica
u*..ltu t"t"n ella; o podemos afirmar
menor cletaile, de nuestro *,.r"áo>, V
pidienao su aceptación como tai' En cual';':ier
simplement. iu u¿..ración eropírica,
caso rlos arrresgamos; 1a aclecr-ra.iO"
L*pitica va i'aucho rnás allá de 1o que poriemos
ConCCerenunmomentociado...Sinembargo,existeunadiiel.encia:laaserciónde
que 1a a-serciÓn de verciad' y 1a restricción
adecuación empírica es mltcho *á
a¿Uit
libra de la metafísica'
en cuanto u utt'ftu'lu nos
Serempiristaesapartafsedelascreencias."-..:doloqueesténrásalládelos
fenÓmenosobservatllesrealesynoreconocerningunamodalidad,objetivaenla utra
naturaleza. Elaborar una explicáciá
ttpítica de la ciencia es presentarla corno
empírico'
áÉ verdad sola'mente en el mundo
explicación que envuel,e la_bisi-u;; un fenómeno
vez que ,a actividad científica es
en lo que es ieal y observabf.. lo¿u ir acorrrpa-
.11u .rpti.ación de la cienctl-1:Ot
culrr-rral sumamenre rico y .o,rpiJo, concepiual'
á*plicación científica' el cornpron-riso
ñada de teorías auxiliares ,o¡,.i" p"io un resueltc
en lodo riomento debe suponer
el lenguaje modal y mucho *ár. observable de la
rechazo a exigir una explicu.iá
;; l^t regularidacies en el cursoallá de lo factual y
ccncernientes a una realidad más
naturaleza, mediante verdades
;^"; no tiene lugar en la empresa cientÍfica'
observable, por ser .rnu.*rg.n.;;
| constructlvg' a
a]go así ccmo la parte "Constructiva" del ei'rpirismo
^d.opr-uré A1 resultacio le llamareinos
1& yazque recha zaré elernpirismo concomita-nte'
r eo I isrn o co nst ructiv o .
El PaoGEAMA FUFR-TE
mertoniana de ios
I-a obra- ,Je l{uhn tuvo poco efecto inmediatc en la escueia
Su influencia en }a socio-
scciólcgos estadounidenses de la ciencia. E11cambio,
Bretaña, y aun entonces
logía de la cienc ia apa.reció por prirnera vez en la Gran
la Urudad de Estudios
no tan dtrecta.raente en la sociología como alrededor de
finales de ios años
Científicos de la Universidad de Edimbirrgo. Formada a
sesenta por David Edge, c|enlílico convertiCo en
sociólogo de ia ciencia' ia
y sociólcgcs
rnencionada Unidad reunió a un buen número de histcria'dores
ent::e los cuales se encontraban Ba-rry Barnes, DavirJ
Bloor, stephen shapin y
cle esie
lr""lá ¡rlacf"erizie. A pi'incipios dt. ics años ocl:errta ios nielr.r-i"'¡:osa forr-ra¡
gi,Jpc, junio ccit otros aiiaccs britáiriccs y':uropeos, sr: ciedica'oan
sigtio iniudabie o¿
antoiogías ie ariícuios escritos a pa-rtir de su peispectiva,
q.:.e ei r--,Ovimiei,,io alcanznba Su i::arJui'ez (o de qtre al ii1eno-i
ls buscaba)'25
i{.,-rtin, natu¡:,iileiite, nc eraia unrc¿ i,rel,.rc te iuspiriiciÓirpa-ralcsrgie'rnbics
ce la escueia cir Edimburgc. Eri cierics ca:os ni siquicra t'ue ei principai
genere-l del cono-
inspirado r. Lairispiración provino ia¡rbién de ia socioiogía
cimiento según r. .*pon. en Durkl-reim (19i5) y lv{annheim (L952')'
en la-
(1958)' en
filosofía de Wittgenstein (1953) y sus seguidoies, como Peter Winch
1a antropolcgía de Mary Douglas (1970), eii la "teoría-
crítica" de Jurgen
i{abermas (1912) y en la etnometodología de Harcld carfjnkel
(i957)' Fue
Les liarnó
Davici Bloor {1g16,4-5) quien ba.utrzÓ ias corrientes relacionadas'
''el Prograrna Fuerte en la sociología dei conccimiento cientíñco" '
i-a sociología del conoci;niento científico deberá apegarse a los cuatro principios
siguientes:
suscitan la
/) Ha de ser causal, es decir, que Se ocupe de la-s condicicnes que tipos de causa
cree::cia o los est¡-dos del conocirniento. b]aturaimente, habrá otros
aparte de las sociales que contribuirán a suscita-t'el conocil::;¿nto'
' 2)Ha-de ser imparJial con respeclo alaverdad y la falsedad, ia racionaliciad o ia
irracionalidad, eléxito o ei fracaso. Ambcs térinincs de estas dicotomías necesitarán
explicación
^3)
Ha de ser siméirica en su esliio d.eexpl-icación. 19, mismos tipos de causa
explícarán, por ejempio, las creencias verdaderas y las-faisas'
4) ]Ela. de ser reflexiva. En principic, sus pautas de explicación habrán d; ser
a.plicabies a la prcpia sociciogía-
Estos cuzi¡o piilcipios, áe causeJiciad., irnparcialidaC, simetría y reflexividad
iefinen l¡r qr:e r.lla*u.á el progiarna. fue¡te de ia socioiogía del conociniento'
,74 L,¡T EXi:LICACIÓ}J DE LA CIENCJA
y
Shapin sacó conclusiones simiiares de1 estudio que Farley Geison
(1974)
hicieron del clel¡ate de mecia-dos del siglo XiX sobrq la -eeneración espcntánea,
sostenidoentrePcuchetyPasieur,ydr:'estuCicdeh'{ackenne(l978, 1981)Sobre
la disputa en torno a-l coeficiente de correlación entre G.U- Yule
yKarl Pearson'
I
Como casc intermedic, Shapin cita'¡a el estudio 'ie John l-ankfcrd (1981)
sobre ia controversia- susc itadz a íines del sigio XIX entre los a.slrónomos I
pla*-etaias cofilo ias d.e lcs "caÍia-ies" Ce F{arie. I-a pcslura estadounidense,
iostenía Lankfcrcl, estaba iguaLniente determinzdapor el iriterés piofesional
F
t
f-
vado. En este caso, 1o que más irnpcrlt-ba e¡an los intereses profesionales, no
¿
I
los intereses sociales más amplics'
f
En el otro extreino, Sirapin citó muchos esludi.cs de ciencia contemporánea
er que los intereses van aparejadcs a ia categorÍa profesioral o a la reputación
clel óientífico como ind.i',tidt¿o. Los cientíiicos; según se afirma-, tienCen a creer ir
lo que Creen debido, al menos en parte, a que están en juego sus reputaciones
r.
I
con-]c individuos. !
general hacen más que derivar conexiones ca.usales simples entre los intereses I
r
qr-te los científicos negocian en razón'de sus intereses, y que'el resuitado de sus I
por lo general de ser una nr.era apariencia. I.{o se ciice mucho scbre los procesos
ieales de negociación, d.e suerte que la conexión entre los intereses y las
a
i
:
t
El p rogrdrno relativista empirico ¡
Los defenscres Ce} programa fuei-le y sus aiiaCcs desde el principic han sido :
conscientes de esta imputación y han intentado hacerle frente prirnero en :
F.l reia.tivistito en este caso ria es vistc comc aigc que se Ceba e'¿it¿ir, sino
como algo que debe adoPtarse.
Ei,leienlor más declarado de ia perspl'tiiva rela-ti.,'isLaen la. sociolcgía-dela
ciencia ha sido F{arry Coliins, que propl-igna el "progralna eropírico del
relativismo" (Coliins y Cox 1976; Coilins y Pinch 1982; Collins i98ia, 198ib,
lgBZ¡ La pciición ofrcial de Collins ha sido 1a Ce que el relativisrno es una
i.h..rísti.á farorabie a la sociología Ce la ciencia" (Colliris y Cox 1916, 423)-
El apegzirse a esta heurística extenderá ias fronteras de la9 elqllca-ciones
so.iotoli.a-s de la ciencia ha-sta su máximc (coilins y cox t916,438-39):
ia
enrre fiiósofos y otros críticos (Laudan 1981b, 1984b; Ftroiiis y Lukes 1982).
Sin e¡abargo, grali parte del debate parece estar d.esorientado. Si, ccmo Coilins
suele reclainar, ei relativismo Se identifica con ei "irracionalismo", gqlgg,ces
está clalo que argumentar en favor del reLativismo resulta contraproducente.
pero esta línea de razoaamiento pierde cie vista su objetivo. El verdadero
asunto, se-{ún lo veo, es ia medida en que la naturaieza iimita ia teorización
cientíiica y los medios que enipiea para ello-
Sin embargo, no son sólamente los críticos del prograrna fuerte quienes han
enturbia*fo las aguas. Sus defensores no dejan de citar los estudios de Evans-
pritchard (1937) sobre la brujería entre los azande, arguyendo que la ciencia
mcderna no es más que nuestra propia versión de la brujerÍa. Ahora bien, una
cosa es rregar ias expiicaciones de las creencias científicas que apeian a la verdad
q'Je
o racior¡.alidad de tales creencias, y o[ra ntuy diferente negarse a reconocer
nuestras actuales creencias científicas scn, en cierto sentido importante, me-
jores que las del pasado. El que 1a manera como llegainos a abrazar nuestras
actuales creencias científicas no haya de explicarse apelando a su verdad o a
nuestra racionali/-iad, seguratnente no implica, por ejemplo, que de hecho no
sepamos ahora mucha más biolo giay química de las que se conocían en siglo
){ViiI" Una teoría egpírica c1e la ciencia llo necesita negar he.:hos tan evi-
dentes. Su tarea es exPlicarlos.
Quiel.estrabajanenelprogramafuertesue1enconsicierarque1aunidadde
urrátiri, es la especialidacl <ie investigación. to normal es que veamos las :
de sus
cirniento cientiiico" (lvlackenzie l9B1)' sin embargo para algunos
celegas socióiogos, la pretensión de ccnstrucción social
resulta débil o de poco
funJamento debido a que ia especialidaC de in'¿estigación es
una unidad cie
en virtud
análisis demasiaclo brirda para revelar los prccesos microsociológicos
cle los cuales puecle construirse el conccimiento. Por e}lo,
afirman, debe
atencierse a la inve.stigación cotidiana del laboratorio-
de ios teltias
Heinos inte¡taio evitar ei iiso de térrcinos que cambiarían 1a naiuraieza
en discuSiottes, Así, al deSlacar ios proc':sos inedianle ios cuales se cons'truyen\as
sustancias, hemos tratado cle evit¿,r descripciones de los bioensayos
en que se
consideren comí:.ec problerráticas las reiaóiones entre los signos y las cosas sig-
la creencia de que
nificadas. A pesar cel hechc d.e que nuestros cieniíficos sostengan
a-lguna entidad con
las inscripciones podría:r ser replesentaciones o ir'dicaclores de
que dichas entidades se
existencii. in¿epen¿Ant..n tra ráa1ida<l, hercos argurnenlado
;;;;;ii;t.;;n,inicamer:ie mediante el usr¡ de estas kiscripciones. No es simplementeia
que las áifer,:ncias entfe curvas indiquen la presencia de la susiancia; más bien'
susii:-ucia es idéntica a las diíerencias pez'cibidas entre las curvas.
ilara hacer hincapié
descubrió la
en este punLO, hernos evitado ti uso cle i'-:lpresicnes tales como "se
a consecuencia
sustancia mediante el uso de bioensayo" o "ál objeio fue descubierlo
Emplear expresiones así equivaldría
de i.Je.tiiicar diferencias entre cios má-ximcl".
objetos era algo dado y que
a dar la impresión confusa de que la presencia de ciertos
opcrtutlamente su
taies objetós simplemente espeiaban que los científicos revela¡an
por
existencia. por el contrario, no con.ébimos que el uso de riiversas estrategias
p"r1. á* ior científicos equivalga a quitar el velo a verdades preexistentes pero ocultas
más bien
hasta ese momento. Lostbjetós (en este caso las sust¡.¡cias), se constituyen
pcr virtud de la creatividad a¡tística de los científicos'
de la investiga-ción
La interpretación constructivista se ccntlapone a la concepción
cientíiica .o*o acti,¡idaci descriptiva, concepción que coloca el prcblema de ia
de la ciencia y la naturaleza
facticiciai en La relación que se d.a entre ios productos
los Droductcs
exteina. por el corrtrario, 1a interpretación construcii'¿ista ccnsidera
de ia ciencia primerar^.rente y ,obr. todO como el resultado
de un proceso de
científico se concibe
iabricación (reflexiva). Así pues, el estuciio del conocimiento
los objetos científicos se producen
principalmente comc la invéstigación de'cómc
los hechos conservan en
en el laboraiorio, más que corÍ1g un estudic de cómo
Se
'---uf i;acicrn.s cie ntífic as i obre la nat¡-r¡ale za - (1983, 1 i 8- 1 9)'
Laconcepcióncons|ruciivistaseciistinguepcrconcebirlarealidadcientífica
y de las operaciotles
corno algo que emerge progreslliamente de la- indeterminación
que corresponde a ningúrt orden
constructivas lauiÁ.i.ri..n'.iaies), sin suponer
preexistente de 1o real. (1983, i35)'
o en la interacción
Ya sea enfocándose en los intereses sociales más arnplios
recientes de |a cie ncia han
Sociai en el labolatorio, 1a mayoría de los sociólogos i
la perspectiva de los
Si deseamcs enterarnos de 1o que es una teoría desde
cienríficos que la usan, una manera de proceder es
exa¡rinar Los librcs de texto
que saben aceica de esa teoría'
de los cuales aprendieron la mayor paite Ce io
que las teorías SOn para
Claro que esta no eS ia única forma Ce en'"era¡se de lo
qlie es la mejor
los propios científicos. Ni siquiera me atrevería a afirmar
además de que es
manera de hacerio. sin embargo, es una buena fcrma,
ha sico fundamentalmente en
accesible para quiene§, como yo, su preparación
ios ámbitás de la ciencia y la filosofía'
a los iibros de
Los historiaclores de ia ciencia, como Kuhn, ha:r acusado
puntc de proporcionar
texto de distorsionu, la historia de 1a mar'eria hasta el
explicaciones históricarnente falsas respecto de
cómo las tecrías.l1egarcn a ser
tiene muchc d*verdad'
aceptadas. Si bien no hay dtida de quá tal acusación
tareano eS reconstruir
para nuestros propósitos no resulta piccedente. lduestra
describir en térmi-
el desarrollo histárico de ciencia alguna, sinc simplemente
Ia enlienden lcs científicos cle nuestro
noS generales el carácter de la teoríaiegirn
tiempo.
que los libros de texto
Muchos filósofos cie Ia ciencia oirjetarían también
vagos en cuanto
proporcionan unpunto de partida deficiente' Son notaria-mente
coherentes entre sí' Es preferible
a ios fundamentos y d.e ninguna manera son
examinar las contribuciones de los fiiósofos de
ia ciencia y Ce ios escascs
de la materia' Sin embargo'
científicos p..o.upudos por los "fundamentos"
que esle enfoque no eS regomedable'
de los capítulos pr'...¿.nles queda claro
fundacionales einpiezan
Los filósofos dedicados a 1o que el1os llaman estudios
a
.,
generaclon de fÍsicos proíesionales"2
)
probablemente el mejor plan, o cuando menos el más fiexible, sea tomar ia fuerza
como r-rn concepto primitivo de nuestra teoría, definiéndolo tal vez operacional-
rnente en función de mediciones realizadas con una balanza de resorte- Así pues, las
Ieyes de Newton son leyes, como Io son las leyes de teorías de fuerzas especiales como
la gravitación y el electromagnetismo.
F:F.'i&:mdZx/dtZ. (3 1)
(
MODELCS Y TECRÍAS 89
!
en vibración. Otras iécnicas matei^oáticas son las coorcienadas generaiizadas,
las transfornaciones canónicas y la teoría de Hamilton-Jacobi. La eiección de
otros ejemplos también es i',ii-ición Cel interés de los atitores en estableler I
i
relaciones con temas contemporáneos, p.articularmente ia rnecánica cuániica
y la mecánica relativisia. Ahora resuita basiante comúa teiminar un tefto de i
El csciLADCR LIhlEAi-
Todos los textos de mecánica que he visto se ocupan ciel caso de la fuerza de
restablecimiento lineal. En este caso 1a fuerza ejercida sobre una partícula es
propcrcional ai desplazamiento negativo de 1a partícula respecto cie su posición
de reposo. La seguncia ley de este caso es:
a :f-
ti
) ;
) MODL'LOS'Y TEOF.íAS 91
) li
CO}..ITEi'']TS
I
P,rCe
PRsrnce
CitaPter I
THE LINEAR MOTiO}'{ OF A PARTICLE !
I
Iniroduction 4
:1
\
X=0
Figura 3.2 Sistema rnasa-resorte usado para ilustrar ia ley cie Hooke y el movimiento
armónico simple.
x(t)
v(r)
t
Figura 3.3 Posición y velocidad corro funcio.nes del tiempo para el sístema masa-
resorte de la figura 3.2 con conciiciones iniciales x(t = 0) : A y r,(t : 0)
- 0.
El pénduto simple
En muchos textos se trata del péndulo simple como un ejemplo más del
mc''¡imienro armónico simple" En la figura 3.4 se muestra un péndulo de
longitud /sometido a una fuerza gravitacional uniforrr\e, -n1g. Un péedulo,
naturalmente, se mueve al menos en cios dimensiones: la horizontal y la vertical.
Sin em"bargo, el problema puede reducirse a una dimensión considerando tan
sóio la componente horizontal, x, del movimiento. La fueza grativacional de
arriba al,ajo, -rng, se equilibra parcialmente pcr la tensión de la cuerda, ,S, que
tiene rnagnitud mg cos(a). .!, a su vé2, puede resolverse en una componente
verticai yhorizontal, siendo la horizóntal -S sen(e).' Dario quesen(a) : x/l,la
ecuacíón de movimientc ::n Iá dirección hbrizontal es
I
\
I
I
\
!
:
,i
;l l"L\-]Ui
i
J
.,,in
J.-mo ¿. l
:
y mayo res de
Así, hacie ndo cos(a): 1 se desprecian la-s potencias segunda e una J)
? :'
ei papel de ia constante de resorte Celro
donde la constan ie mg/l iesempeña
Catt tú : g/1"
'o- Uia C.i
'wT-2,ÓT:21/g (3.8) a. F o§
j
ejemplos no son únicamente casos especiales ci.e una relación general. Uno se
las puede arreglar para reclucir el péndulo, eue es un sistema bidimensional, a
un caso unidimensionai sóic mediante una sensata aproxiir-iación que restringe
ei péndulo a ángulos pequeños de oscilación. En particuiar, eL paso de 1a
a.piicación criginai de las ieyes de Ne',./con al pénduio bidimensional (ecuación
3.5) a la versión uriiciimensional (ecuación 3.7) no es cuestión de deiucció;'i
pura.mente matemática o lógica. (La " aproxirnación" resulta ser Llna regla
válida de Ceducción sclamente en los chistes que hacen los físicos sobre los
matemáticos
En iextos algo más avanzadcs se ti ata también del osciiador armónico centran-
do ei intcrés enla eitergía.I a energía cinética de una parlícuia en u.n tiempo /
se de[irte comc
(3.11) significa que el estado del sisterna en este espacio se confina a. una elipse.
imponiendo nuestras primeras condiciones iniciales, vemos qr:e la elipse tiene
la fcrma dada en la figura 3.5. Otras condiciones iniciales producen eiipses con
olras formas y orieniaciones. li
I-a relación entre este espacio y nuestras soluciones anteriores puede verse
si imaginamos el tercer eje, el del tiempo, perpendicula.¡ al plano x-p.Entcnces,
el estado del sistema como función del tiempo se representa mediante una .lr
espiral eiíptica que se mueve a lo largo de1 eje /, como se muestra en la figura
'--_r:iil
3.5, Proyectando esta trayectoria sobre ios planos x-t y p-t se obtiene la función ,:,
nico ai:iortiguado. Cbviamente, los resortes i, pénclulcs ¡eales no son sistema.s .: .:tl
:tltl
cotlsert'adores pue-lto CLle tarde o teiiipiano alcanzan el estado de reposc.
I-tecirr-tos qr-ie la rzzór' cle esto es que la ei:ergía se pierde por fricciLirrl rpoi'
e.jemplo, la fricción interna del resorie, la resistencia del aire y la fricción en el
soporte del péndulo. Irlervton se ocupó en gran medida de estos problemas. Ei : 'l:
casc en que no hay fricción (el pándulo oscila más lentamente), y la amplitud
decrece exponencialmente en el tiempo.
La siguiente cornplicación sería supcner que el péndulo (o el resorte) es t1
ii.r,
in:pr-rlsado por algunafuerza que contrarresta o inciuso supera a la fuerza de '.t,,.
-: l'
fricción, como en el caso clel relo.j cie péndulo. La .solución naiuralmente, ':i:!
a.
98 LA EXPLICACiÓN DE LA CIENCIA i
x(t) t.
i
É
1,
f
;
I
€.
Ir.¡renpRE,TACIÓr.lpiDENTiFiCACIoNi
el cálculo
I a co¡cepción empirista iógica de las teorías tenía dos componentes:
qtte asocian los términos del
puramenie f,or-aiy "reglas de correspondencia"
en el antecedente' En el caso de la
cálculo formal con los términos entendidos
mecánica, la regla cie correspondencia
podría establecer, por ejemplo' que x
representa la posición de unapartícula.
Er rnu de sus versiones más empíricas'
como definiciones opera-
esta explicaciÓn trata a las reglas de correspondencia
como 1a "posición mecida
cionales.Así, x puede definirse operacionalmente
con un metro".
Sinuestroobjetivonoesiareconstruccióny;ustilicaciónracional'sino
simplemente entender pol qué las teorías
funcionan realmenle en las ciencias'
formulaciones explícitas de
es importante que dev'ezencuando se encuentren
en los libros de textc normaies' Sin
algo como las reglas de correspondencia
respecto a la determinación
embargo, noo .nJontramos referencias informales
de 1a masa, ]a fuerza, la posición V el
momento' Estas referencias pueden
a las reglas de correspondencia' saivo
interpretarse como apelaciones imptícitas
porelhechoquelosautoresnoestablecendistinciónentreloquees..obser-
vable,,yloquenoloes.Lasreferenciasinformatresaiamed-icióndefuerzas,
que ios filósofos consideran generalmente como
"teóricas"' flo difieren en
carácter de aquellaS tocantes a Ias
posiciones, las cuales Se Supone que Son
,,observables". Así pues, las anotaclones informales no clesempeñan el papei
requeridc pci' 1os empiristas 1ógicos'
a
,
MODELOS Y TEORíAS 99
Sin embargo, sería un error pensar que se debe tener'a la mano una buena
explicación de los fenómenos de interpretación e identificación antes de proce-
der a construir una teoría naturalistii de la- ciencia. La-s activiCa-des científicas
tienen mucho en común con otras a.ctividades humanas, especialmente con las
que dependen en gran parte del uso del lenguaje. Sin embargo, ex-isten tanrbién
7.
el irionento, me
muchas cosas relativamente caiacierísticas de lá ¿iañcia. For
centraré en estas peculiarida-d-es'
Entonces, ¿qué ocurre con Ia ecuación 3.5 que no hace esta aproximación?
Tampocc es ccrrecla. Esa ecuación supone una fuerza gr avitacional unifo¡me.
Ahora bien, si la tierra fuera una esfera perfeciamente homogénea. la fuerza
sena uniforrne. Pero los coniinentes y 1os océanos hacen que esto sea imposible.
Es más, las heterogeneidades de Ia tierra se coilocen únicaniente con un grado
muy burdo de aproximación. Aciemás, edsten heterogeneidades más locales
como las colinas y los edificios grarrdes. Por si fuera poco, esiá también, por
supuesto, el influjo gravitacional de otios cuerpos, como el Sol, la Luna y los
planelas. Así, aun considerando tan sólo las lue¡zas de gravedad, la ecuación
3.5 no deja de ser una aproximación. Podríamos pensar en añadidos a la
ecuación que la,hicieran una mejor aproximación pero nadie pretenciería ser
capaz de complelar el proceso a modo de que 1a ecuación representara correc-
tamente todas las fuerzas gravitacionales exislentes.
Sin embargo, las fuerzas de gravedad no son las únicas que operan sobre la
péndola- de ese reloj. Existe una fuerza de fricción en la articulación donde se
,-ine i: pénd.ula al cuerpo del reloj. Asi¡¡risrno, eriste la resistencia del aire sob¡e
l.:- pesa Ce la pén.joia. Err los libros de texio se lepresentan las fiie¡zas de
fricción, ccmc la resistencia oel aire, cono iunciones line¿ics cie la. velocrCa'-i
Cel obj:to. Sin ernbargo, los físi'::s saben que la fricción ciei aire ilo cs un2
función lineal simple de la velocidacl, sino una función no lineal ¡nás coinplcja.
l'.si¡:-rismo, cn 1a liicratura especializaCa pueCen haliarse furtciones nrás " realis-
tas" que rupreserrtan 1a resistencia oei aire. Con todo, nadie pretende que
al-euna función en pa.rticular sea exacta-mente correcta -
Procederé a colsiciera¡ el hecho de que Ia péndola no osciia libremente, sino
que tiene un imp:.ilsor que a cada oscilación. le proporciona un pequeño
impulso. La razón de demcrarme en todos estos pormenores es que si pensamos
que las leyes del n-rovimiento proporcionan una descripción literalmente ver-
daCera y exacta de ha-sta los lenómenos físicos más simples, las leyes del
rnoviniento tend¡ían que ser increíblemente más complejas que cuaJquiera de
las hasta hoy fo¡rnuladas o, Cadas las limitaciones del conocimiento y la energía
del hombre, de las q,,-re realmente podrían fcrmularse. Por lo tanto, nos'/emos
constreñidos a afirma.r que en principio es ( ¿1ógicam eitte?) posible formr-rlar
leyes verdaderas d¡.i movimiento. ¿Pero qué papel puede pretenderse que
desempeñen si en en realidad nadie escribe jaraás una verdadera ley del
movimiento? Paia la manera ccmc lcs científicos practican la mecánica,
parece que la verdaC exacta y literal de las leyes del movimiento es lo cie menos-
La actitud de1 físico, representada adecuadamente en los libros de texto, es
que los factores mencionados (no uniformidad de la gravedad cerca de la su-
perficie terrestie, la luerza gra,.,,itaciona1 de 1a Luna, la no linealida.d de la
¡esistencia ciel aire) scn todos muy pequeños en comparación con ia fue¡za de
grav:Cad unifclme de 1a tie¡ra consiCeraCa comc una esfeia uniforme. En
aigunos tex,tos se proporcionan incliisc ccmparacicnes de tales fue¡zas en
102 LA EXPLICA"cIÓx oe i-¡ cIENCIA
Mon¡los E HiPorESis
¡eferencia a cosas conro
En los textos cle mecánica se hace continuamente
cuerpo rígido simétric3"".
"el oscilacior lineal" "el movimiento libre de un y
a la luerza central de gravedad" '
movimiento de un .u.,po '=uieto tan sólo
otras por el estilc. Sin.nl¡utgo, en
"tl
los propios textos s.e aclara Oit l"::]:T:l::
las ecuactones
nc satisfacen completamenle
Or*Ar,"a,la"s de tales siste"mas No eKlsle ningún pénduio sin lricción' ni
mediante las cuales ,. I"t;;;;;1;-
fuerzas externas' ¿Qué sentido podemos
tampoco cuerpo que no esté sujeto a
hallár en esta aparente conlradÍcción?
lulode los
de lísicos.
que ias q ue les confiere la comunl cad
NIODELOS Y TEORIAS IO3
oscilador iineai es u¡1 siste,-rra con una fue¡za restablecedora iineal, rnás un
núme¡o ind.eter¡linado de otras fu¿rzas secundanas' El oscilador arrnónico
lineal.
simple es un osciladoi iineal con una y sólo una fuerza resiableceCcra
E1 oscilador a]noltigu?.d'o tiene uira fuerza. restab]'ececora
con ia iigidez de un
¡esorte idea-lizado. En el osciiadcl de péndulo 1a fuerza restablecedcia
es
Hipótesis
: l:j3 ser realmenie isomóriico para cierto rnodelc. sin embargo, para nin-
que se citan en los textos normales de mecánica' por
-::::c de los ejemplos
:,:,rplc, edste pietensión alguna de isonorfismo. En efecto, en los textos se
isomórficos
--:ei:n señalar explicitamente aspectos en que lcs modelos no son
::sp.cto del sistema real. En otras pa.iabra's, en los textos sueien descar-tarse
:r\;iiciiamente las prelenciones de isomoifismo' Si hemos de hacer justicia a
-:s presentaciones de la teoría que hacen los propios cientÍficos, debemos
de
.-:la¡ una interpretación más débil de 1a relación entre el modelo y el sistema
::ai. Tengo para mí que la relación adecuada es de semejanza Así pues' las
::pótesis suponen una.s emejanza entre 1os mocielos y Ios sistemas reales' Pero
y
:-.n-io cualquiei cosa eS semejante a cualquier otla en cieltos aspectos hasta
¡::¡io grado, las prelenciones de semejanza scn vacuas si carecen de al menos
::a especificación implícita de los aspectos y grados pertinentes' La fo¡ma
;:neral de una hipótesis teórica- es, pues: Tal y cual sistema real identificable
=s semejante
al modelo designadc en tal3s y cuales aspectos y gra-dos' Para
:.1::1a. un ejenr',,ic diferente:
-i-una
Las 1-,osiciones y velcciciades ci:la Ticrra )'la etr el sislerna Ticira-Lunl soi.;
nuy-semejantes a las de ur't modelo noltoniano de dos partícuias con rtna fuerza
;ert¡al del inve¡so Cel cuaciradc.
La mayoría de las teorías de l.a ciencia, '¡iejas o nuevas, suponen que cuaiquier
relación represenlacional entre la teoría y ia realidad ha de enienderse como
una " correspondencia" entre los enunciados científicos yel rnundo. El destino
cle cualquier concepción de las teorías como algo .iue representa la realidad ha
sido asociaclo, de esta forma, con los Cestinos de 1a ieoría de la correspondencia
de la verdad. Es en esie punto donde se entabia generalmente la bataila. La
interpretación que he ofrecido párraios arriba sccava estos argumentos me-
cliante la impugnación de esa suposición común. En nuestra explicación no
e;-iisie relaciÓn directa en¡re los con untos d e enunclaclos y la vrda rea I. La
re ación es ind rrect a p or intermcdiación de un modelo::órico comó el que se
representa en la figura 3.8.
Naturalmente, Ias a firmacio nes sobre 1a existencia de relacio
za entre los modelos y los sisiemas reales req ili eren de hip ótesis teóricas aue I
son, en efecto, entidades linsüísticas. Pero para éstas lodo lo que se necesita es
' una " teoría de la redundanc ia" de la verdad (véáse nola 6), y existe una relación
de verclad del tipo de correspondencia entre 1os anunciados que caracterizan a1
modelo abstracto y al propio modelo. Pero esla correspondencia, la cual se
reduce a 1a delinición, no constituye ningún problema. La relación enSggeqa
de la dura tarea represent acicnal no es de verdad entre la entidad lingtiistica
el objeto real, s ino de la se enza entre ios dos o t , uno ab str ct u
real. Desde ese punto de vista su¡ en las dilicultades con la c once ción estándar
puesi c ue es ta trata de est lecer un vínculo semántico directo entre los
enunciados ue caracterizan al e[ mu ndo. eiiminando así por com-
pleto el pap el de 1os modelos.
J
) en lcs Iibros de texlo normal ued e describ omo
Loq ue encontramos
) dem odelos o, ral vez
un cong omer ado (de c onglomeracios de conglomerados) \--
a aírn mejor, como una p oblación de modelos ue consisL
e en tamlllas relaclo-
las leYes
) nadas model:cs. L as dive¡sas familias se construyen combinando
) newtonlanas ovimiento, p articulalaente 1a segunda, con 1as diversas
inversas, etc. Los
) funciones de fuerza: funciones 1inea1es, funciones cuadráticas
a Ia definición otras
) modelos así ciefinidos se multiP lican entonces añadiendo
i1S deÍlnen a o tras familias de mod Y asi
) funciones de fuerza. L
de la estructura total
sucesivamente. En la figura 3 -9 s e da una imagen Parcial
) resultante de las familias de modelos
J Debe hacerse hincaPié en que la figura 3.9 muestra tan
sólo parte de ia
muchas caracte-
) estructura de 1a teoría a grandes rasgos. Falta por representar
son verstones
) rísticas. La ligura no indica, por ejempio, que algunos modeios
esp ecíficas de otros modelos más generales, como cuando
un modelo genera-
) cie un sistema
) liza do con una luerza restablecedora lineal se reduce al modelo
son sim le-
idealizado masa-resorte Tam poc o muestra cue eslos mo delos no
)
nlente estrucli] ias ma.tematlcas, S ino modelos " lnie rel
' . Lo que es rnás
) sl ru ficati', o, en ia ligura 3.9 só1 o sá ,nuestran
Ics mode Ics y no ninguno de ios
) siste mas reales para cuya repres entación
pueden emplearse. Lzs hipótesis, en
) comc tampoco
cl sentido técnico que aquí les damos, Ilo a-parecen en el esquema'
) lc hact'n los recursos haguÍsticos usados pilra deiinir ios modelos'
Las ideas correlativas cle modtlt, teórico e hipótesis teórica
proporcionan
)
losingredientesprincipalesparaunaleoríac]eldsteorías(Brombergeri963).
)
l.t Sin eÁbargo, hasta aquí no hemos dicho expresamente
qué es una teoría' Pero
t ---ét*distintas.
ciones
pur.cería que las teorías son cosas que uno encuentra escritas en los
t iibros de texto, ertre otros lugares, uno se siente inclinacio a ver algo
"lingüís-
,. tico,, como la teoría misma. sir, embargo, no podemos identificar ia
teoría de
a la mecánicacon ningún conjunto particular cl e oraciones. Eilo
sería tanto como
F
F
afirmar que la traducción dá un fibro de texto del inglés al francés se.a
una teoría
Jii.r.nt., 1o que parece absurdo. Tan sólo pa.ra enfrentar este problema, hace
llamada's
¡ tiernpo que lós filósofos introdujeron 1as enticiaces más abstractas
".nunciudos", o " proposiciones' ' ' Se sllpcne que una- proposiciónes' más o
F rnenos, 1o que afirma una oración' Así pues, podemos afirmar la mism¿
n
L,. E;iPi-ICACiON DE LA CiEI.ICiA
¡TlCDELO
Figura 3.9 Representación parcialde l:s ianilias de mcdelos asociados con la mccánica
c1ásica.
Lcs enlaces enrre lcs inodeios y 1a reaiidac abajó iepres:ntada na.ia ri:n:n qu:
ver con reglas de ccirespondencia que enlacen los términos con los cbjeics c
los téirninos con otios términos. l/¡ás bieil son, ce nueva cuenta, relaciorres de
semejanza enire un modelc giobal y algún sisten-ra reai. un sisiema ¡eal se
identifica por ser semejante a r'lnc de 1os moCelos. La interpretatid¿ de los
té¡minos usadcs para defini¡ los rnodelos no aparece
".a el diagrama; comc
tampoco apareien las entidace; lingüísticas defirito¡ias, conio las ecuaciones.T
sulicientes que determinen qué modelos o qué hipótesis son paite de la teoria.
Esto ¡esulta más evidente en el casc de las hipótesis. Sospecho que la
mayoría de Ics cientílicos concordarían en que ias hipótesis generales que
afirman semejanzas entre los planetas y los modelos net',.tcnianos con fuerzas
centrales que corresponden al cuadrado inverso son partes cle la teoría. Muchos
concordarían también en que se designara como la Tierra a uno de ios planetas.
Pero, ¿qué sucederá con la afirmación de que la pénCola de mi reioj antiguo
serneja un modelo de oscilador lineal armónicamente impulsado? ¿Es tal
afirmación parte de la "teoría" de la mecánica clásica? En este caso parece que
podría argumentarse en cualquiera de los sentidos. Mi punto de vista es que lo
importante nc es cómo respondamos a tales pregunta.s, ni siquiera si respcn-
demos o rio a ellas.
ivtoDEr_os Y TEORIAS 1l I
DE
l,i v UÉ CON LAS PiiESEI.JTACiONES A}:^IOI,iÁTiCAS
LA t"iECÁ1'IICA?
Otros tesi¡mon¡os
TODCAQ1IELAQUIENLEHAYAINTRIGADolanaturalezadelasteoríascien.
iíficashab¡ábata.lladopa-raentendercóilioéstasserelacionanconelmundo.
Esto val¿ lantc para los filósofos corno para los scciólogos
En este capituio
se hace hincapié en los a-spectcs fllosóficos' En el siguiente'
la aiención se
rlesplaza un tánto hacia cuestiones de tipo sociológico'
Las objeciones filosóficas al relismc, e n su mayor
parte' pr-ieden clasificarse
en dos caiegorías generaies: ias conceptuales y las epistemológicas.
Las ob-
jeciones ,oirrpt*r!r, ponen en tela de juicio si el realisino puede forrn'-iiarse
ccrirc ul'ia tesis coh.rente cjue no sea ni v¡-cua y ob"'iamente ia'lsa A
muchas de
esas objcciones ¡:o'iría liarrrárseles ranbién strnánticas '
pussto qi-Ie apuntan ai
signiiicac c de '
,i-c,-,t
ari, ' en ias afirrnacicnes teóricas . Ea pal,,icuiar, ¿una teoría
.i.J la ccrresro nciericia de 1a veida, tiene seniido er
cuanto a las añrmaciones
t¿ói.cas?
Lzs cbjecioil: s ep¡stemológiccs, por ei cor''trario, cie o¡dinario dan
por
porieil en
sentado que las afin::acines rea-lisias tienen sentido. Sin enlbargo,
pretensiones
duda si, en general, pueden ser una justilic ación adecuada
para las
en cuanto a
r3a1is[as. En palticular, ¿pociría justiiicarse cualqurer inferencia
1a verclad rle una hipó tesil teorica a partir de
los logros experimentales?l
En cste capÍtulo nos ocuparer¡.os principalmente de los tipos conceptuales
deobjeción.rt,Iiob¡.ti,oseráforrrrularunaversióndelrealismo,lacualsea
.onceptralmerteccherenteyquenoseatriviahnetiteve¡Caderaniobviamente
de diversos puntos
ialsa. E1 misrco proceso píomue,/'e tarnbién la foimulaciÓn
devistaquecaenenelcampoantilrea]ista.Enlasecciónfinatdelcapítulo
.objeciones
ofreceré iespuestas a algunás conceptuales especíitcas. Los tipos
cie obieción se enfrenta1-án en el pr'óximc canítulo
y en los
.firt.*ologi.os
subsecuentes .
AsPEcros DE SEMEJANZA
que ai menos
Los científiccs coÍlstroyen modelos teóricos con ia inte ción de
constiluya,n representaciones parciales d:1os sistemas de !a rea-lidad'
Como se
líi7)
i iB LA Ev-?LIC¿.clÓt{ pg i¿ ci¡i'{ciA.
son y ser.án
"f..toyuhansidoobservadcs;2)elempirisnroquelimitalaspietensionesde
semejarza a los aspectos de ios sistemas ieales que han sicio'
oUr.*u¿"r; 3) el emptisrno que lirnita las pretensicnes de semejanza a
los
de que
aspectcs de los §istemas reales clue son cáserva'bles, independientemente
posiblas pa,ra
hia_a sido et electo observados. ?cdemcs enco]1lrar candidatos
y presente' Va:i
cada una de estas posturas entre los filósofos ciel pasa-do dei
120 LA E)GLICé,CIÓN DE LA CiE\CI¡.
del tipo
,,confiabiernente detectable medianie 1a instrumentación existente" -
Confornre a cualesquiera nornas empiristas, los neutrinos de alta energía son
tan inobservables como sus parientes de baja energía'3
por
En esta ocasión no me ocuparé más de tales argumentos. I'{i objgtivo,
a,hora no es tarlto e1 cle refuiar el empiiismo como el de sacar
sentido del
realisno.
EL Rgei-tsivlo IR.RESTR.ICTo
a varias
Una vez boscluéjadas algunas versicnés del empirisrno, examinaré ahcia
ve rsior¿s posibies del realis¡no. En el ilrco conceptuai
planteado hasta aquí,
la inierpretación más fra-ncamente reaiista de cuaiquier hipótesis teórica será
cono una aflrmación cle semejanza. entre el sisterra re aJy cualquier aspecio clel
rnoceio. A esle enfoque lo llamaremos "realismc irrestricio". No o'Dstanie,
resuita fácil advertir que ei realismo irrestricio es una coiiceilción denra'siado.
frr e r [e.
volviendo a 1a, mecá.nica, consicérese 1a representación de una manzana que
ca-e del árbcl media.nie un moclelo simple de caída libre en ui1
carnpo graVita-
cicnal uniiorme. .!-epresentern os ccn 1a variable y la ahuia medida desde el
s,,ieio. I-a relación eittre la altura, rz desde la que cae la ma,nzana con
velcciCad
inicial cero y el iiempo que le toma llegar al suelo está dada por la conocida
fórm,,rla c : 1/2 gl'. Si se conoce.¿, poCerncs Ceducir el tiempc en
que la
rnanz3:r3 llega ai sueio' a sa'¡cr: ¡ = + 2h'8'
Porsupuesto,notenemosencuentalasoluciónenqueeltiempotieneva-lor
nega.livo. si consideramos los va-lores negativcs del tiernpc como aJpecios del
rrrccielo, no estaiemos practicand-o el reaiismo irrestricto. Restringimos las
airrnraciones sobre la rnanzana a.¡a-loies posibles de1 tiempo. Perc razonable-
mente podría afirmarse que, pcr principio de cuentas, las solucicnes negativas
,,perlenecigntes al modeio"- Después de todo,
no deben considerarse como
tenemos un modelo interpretado, y I se interpreta como "tiempo", el cua-1,
decimos rormalmente, tiene sólo valores positivos. No obstante, no puede
decirse 1o misno para va]ores positi.zos de t mayor que 2h,/g. Estos valores
ccrresponcien a valores negati.ros de y la posic;ó¡ d.e 1a manzana. En genera.l,
nc hay laca lIlalc en ics valores negativcs d-e la posición en lcs rnodelos de
caí,la iibie. Constituyen sirnplemente un resultado sec,-indario de1 sitio que se
t?-z LA Ex.pi-icAcióN o¡ L¿ c¡¡Nct¿
elija cornc orgien ciei siste¡ia de coordenadas. ¡\sí, la ilterpre:a-ción generai C-'
1a variableT cc:nc posición no r:ecesita aCoptar ta¡ sóio valores positivcs. Peio
en esta aplicación pariicular e1 origen ccrresponde al sitlc en que ia manzana
cae al suelo. l'io puede ir más al1á. Ei tiernpo pueCe seguii tianscuriiendo, nc
así la n:a.nza¡a. Usa¡:rcs este ccnociiniento aCicionai paia limitar ia apiicación
del modelo en este problema paiticuiar.
Cualquieia que esté íarailiarrzado con ot¡as rai'nas Ce 1a íísica puede pei:sa-r-
en muchos ejemplos similares en que no se ccnsideia que las caracterísiicas
.iei
mod.elo tengan coirespondencia alguna en la reaiidaC. Dudo que e;csta a esie
respecto ninguna regla genera-I, y casi telgo la ceateza de que lo erjsle ninguila
regla pura:nente fcrmal. Es de cii, que naCa en laestructura malemática nor¡raI
de los modelos permiie d.istnguir ent¡e las características que suponemos ti;:'::n
una correspondencia real y las que no Ia tienen. Y aun si agregamos "inter-
Dretacicnes" nori'irales de 1as variables, a menudo t3neaos todavÍa que p35ar
por alto algunas características de cualquier mcdslo pala cii;. ias aplicacicres
específicas.
Por otro 1ado, en ocasiones, tomando en serio asp jctos foimales de un
modelo que por 1o general n,: piensa no tiene corresponCenc ias reales, podemcs
llegar a descubrimientos importantes. Esto iue a1 parecer 1o que ocurrió con el
descubrirniento del positrón por Dirac, que apareció primero como 1a presenta-
ción de un electrón con carga negativa anr-üada.
La concepción a la que 11amo realismo constructivo, entonces, pretende ser
una forma resl ringida de rea.lismo en el sentidc en que las hipótesis tcóricas se É{
inlerpretan como aquelias que afirman una semejanza eütre un sistema real y :{
algunos, aunque no necesa¡iamente todos, de ios aspecios de r:'; modelo El
problema de cuáes aspectos, así como e1 de por qué no otros, se deja a la
5
solución, caso por caso, de 1os principios científicos.
)
En primer lugar, debe señaiarse que e1 iealismo rnetafísico no es una
tesrs
t sobie ninguna teo¡ía conocida, sino sobre aig'rna teoría posible' A
dife¡encia
a de 1a mecii¡ica cliásica, esta posibie téoría no podria consistir en ul1a
famiiia de
a
j modelos relacionacios. 1-endía que se¡ tan sólo un grart modelo' Cada
aspectc
y rrc paCiz
Ce este rnodelo corresponde ía a- una caracierís:ica. del mur:.do
haber ninguna característica que se quedara fuera' Además' ia rel::ción
de
)
a serne.lan a ten.i¡ía que reducirse a un perfecto iscmo¡flsno'
Fina-1:¡eilte' el
a
l
!
Ei RB'A'LtsMo MoD'\L
a la
más recietrtes entre empiristas Y realistas se han circunscritc-'
Los ciebates
y los leóricos de la realidad' Sin embar-
disntición entr. lo, u,ptttoi t*pi'ito' de posibili-
parece q" l"' p"ittti"" es moda.tes '.Ias pretensiores
5o, a mí me
Crad y necesidaa, p,opo"tJ"ul' 'nu
lintu divisoria aún más imporiante ' VLn
de estos cics
Fraassen dejó ul Ul't"t' ináitt¿or de 1a importancia relaiiva
que los sistemas reales
asuntos. El estaba lu *t-io' disposición- d.e concecler
.'
teórica de los rnodelcs científicos El
pueden, en efecto, t"ot' lul'*'átura
p"t¿e j ustificadainente añÍ-mar tal semejan-
simpleme nte insistía en qttJ"u¿it
a la mcdalidad' no simplemente era
za. Sil emba¡go, pcr 1o que se rehere
insistíaVanFraassen(1980'
agnóstico, sino ateo' "IJ.i"i:itá"t"posibriidad"'
202), "ese1 modelo, f"t'fi¿"á que está deirás de los fenómenos''-.E¡t
"o y so.n tan sólo ficciones de nuestros
resumen, las posibilidadet 1as "tctsidaCes
candidatos a ia reaiidad'
modelos; útiies ta-l u", p"oni siquiera cau-
.. impottutttt en vinud de su estrecha conexión con 1a
La modalldad de la causa-
Una forma Ot tnttnJt' cuando menos algunos aspectos
sa-lidad. repÍe-
la estructu¡a modal de 1os modelos científicos comc
lidad es considerar rnodal es
de una estructi"u ta'lsal en 1cs sisternas reates' El realismo
sentativos en Ia
en algunos casos' puede existir
la concepción d-e que, cuando menos cien-
de la estructura modal del rncdelo
naturaleza una contrapartida causal
tíiico
EL II.EALISVlO CONSTRUCTI\.O 125
Lcs aigur:::ntcs empiristas en conira del reaiismc mcdal son al paiecer más
fuertes que las qi:e se hacea en col¿ra dei ¡ealisi'¡o teóricc. No .'.,-jste posibilidac
i26 LA E7i?LICACION D9 LA CiEi']CIA
ua c";':iio uni¿oco
#il
se expresan.o*o
oar:. ircli'¡iclua, fu' f i"'-]ii"i'"tlüitt-a='-tlllt;: Istas hisrorias son las
#il
iáy..,o ri", .n .t. t' p-"io [J' iot"'
pottd:l
3-t:ili1 ::;t:; ::i il:.?ft:
ccnjunto
il¿;.t. Lrt ambig'Jei:des en eiexplícitain:nie
dc pos
este conjunto en la ce[ir'iciÓ;t Er
ourden elin'jiierse
ier moceto trórico.
tt"'l"itJo
*.1,á;;i;;;.; se rimira a ros rrrcc.elcs
dtii¡idcs en Jn
t=t
=r,.
;';ru:::*xill'i.'J:'i::?,1iio""n"ui:r'r::i::'^.= dn
'
#3Tr','1"^'i:]
Naturdtnen*"e' inclusc la física
clásica nos ,L¡
sistema o las conCiciontt'iJtiti"' es arn-
Dresenta casos en o'"
iu
I; ;;;i;kación.dr
u*llgtita'¿
las co.ndiciones iimirrofes
no llega a ser' ni con mucho'
tan gia¡de I ÉJ
'{
tigua. Sin emba¡go'
.i"*o-ro ,r.."t"deiÍan Quine o
Es claro que podría
Yan Fraassen'
;;ie"Jtt;t una versiÓn actualizada riel
realismo co¡'s' flJ
truciivo. Esta sería ;;;;;;; áii" cientíiiccs representerl
empíricos y leóricos de los EI
#
'^ uttriuf 'o11*"'o'
de ios aspectos
tan sólo el comportamrtttio interpreiación realisia
sistemas reaies' Sin t*;;;;;' aoui.ldogaiel:1 "t'u rne parece que ésta es
c
contra
mcdal. A pesar de 1"' ;;;;t";;s-iilcsóÍicosen de Ias hip'iies:s
upoilJ"''Jt'¿t el punto de vista empírico
Ia expticación *t.lo'
teóricas
j.f
Siargoesunsisrerna-cauü*iJ.',,:f X':i:[X?.j:':::'.'i:.',:i üHj
i i A des ce er
pu nio
';::,'.".::',T:;;'f, ?)i:; ;;;;; end ie nte de a.a rn
I p ti u
solamente enire lcs
ce vista funcional' si i" lt;ió;i;;i;;; t"
áiritit"btieire
quá más pociía habe r en
valoresactucles cie estas t*t;;;;t";;;utt' "t' cor".lo h?"ce
;t esta pura relación fu"'cior'al'
cuanto a |-a catsalldad;;;;'
ñ;; io senaro Russeil (1912-i-1)'
EL REALiS}IO COI'.ISTFI.UCTI VO 121
Éieintroducidclave¡siónmoclaideiieaiismoCcrstructivoenelcontextode
sistemas dererministas cel tipo que desciibt ia r¡¡iáIica ciásica.
Esia icn:ra
de ninguna
de enrencier cómo se emplean las hipótesis teÓricas, sin embargc'
manera está asociada con 1a rnecánica ciá.sica, ni siquiera con las tec¡ías
determinisias. Si se desea admitir 1a posi'uiliciaC de que e;tisia-n sisiernas auténti-
cuán-
camenie estocásiicos, como ccmúnrnente s¿ ciee qu¿ sori ios si-iemas
ticos,exisieunaextensiónnaturai<ielaesrricranecesidadeausaj,generainrerrte
conocida por el nombre de "piopensión''^a
clesCe la física
Los rnocelos de probabilidac se usa¡ en casi todas las cienci:s,
cuánticahastalaantropologia.SinduCasua:npliagamaCeaplicacionesse
representan los
debe en part¿ a rr.rt.u.turá sumamente sencilla' Pero' ¿qué
modelos de probabiii ii'i?
'n
iitosciia,, :r,piristás cie i.; ciencia. Está ciaro que su objetivo ha sido el
cie ser
Los conceoios relacionados de ''ie,v" y ' 'g ".n eraiización universa.l" deseu-ipe-
ñan un papel preponCerante en las explicaciones eilpirista lógica y otras de Ia
ciencia. En la explicación em^oi¡ista lógica de las leorías, pcr ejemplo, los
axiomas de una teoría cientílica se consideraban lei'es que se entendían como
gen.'raii zaciones universales. EsloS conceptcs han dec¡ecido nucho en impor-
taoci¿i en ia tec¡ia cie la ciencia presentada en estas páginas. En el :,;.pítulo
anterior se ha puesto en teia de juicio la concepción según ia cual las leyes
dinámicas de la mecánica clásica funcionan como enunciados empíiicos ver-
daderos o siquiera bien confirmados, Ahora rne propongo poner en tela de
juicic la idea cle" que la ciencia necesita leyes en fo¡¡na de geireralizaciones
universales.
La idea de que los enunciados de forma universal (Toda Fes C) desempeñan
urr papel primordial en Ia ciencia se remonta a Arisróteles. Tales enunciados se
prestan a modilicación en el sistema silogístico. La cla.sificación biológica
.(espcci::, géner-o, etc.) refleja ¡r.¡davía su deuda con la concepción aiistotélica
del mundo.
Aur cuando ia revolución cienlíiica del siglc XVII participó en 1a inpi.1,-ra-
ción de Ia visión aistotélica, sobrevivió el objetivo de descub¡ir verdades
universales. En efecto, tal objetivo se vio fortalecido por e1 éxito de la ley de
Newton de la" gravitación universal. Hume basaba su aniáiisis de la causalidad
en leyes universales de 1a asociación. Kan¡ consideraba la uaiversalidad como
el sello de 1a necesidad. Y toda la filosofia de la ciencia descansa, para Popper,
en la relutabilidad deductiva, de 1os enunciadcs universales mediante enun-
ciadcs singulares (Esta F no es G). No obstante, si se exa¡nina la práctica -?
científica contemporánea vemos que no apoya la importancia de las generali-
zaciones udversaies.
Vearnos cómo traian en ios libros de textos normales a ia tan venerada l:;
EL REALISI'IO CO¡ISTRUCTiVC 129
a4
ViopBi-os cAusALES Y ÉxPLICACIoNES cAUSALES
E
de Hempei (Hempel y Cppenheiin á
Cuarenta años después del lamoso arlículo
en la filosofía de la
is,t8), i" explicación sigue siendo un ten-ra destacado libros irnportantes JJ
;i.r;;;;;;; 1o evidencia la reciente apari':ión de
dos E
(Achinstein1983;Salmon1934)ydeotrasobras,sobresalientesapropósitodel
embargo' lo que ha
#l
"d
;;;; CV^, F.aas"n 19s0, cap' 5; Kitcher 198i)'.Sin el caso de Salmon' que se
cambiado es la imporlancia, particular*lltt :1
atribuye al papel ¿. fu t"tu'fi¿ud en la
explicación' En este contexto uno bien
Ff
teoría {
causal conslructivo' colrio parte de una
podría preguntarse si eL
'ea'lismo
tiene alguna importancia para ias teorías
recienres ffi
:;;;;;i;;;;Ju-.1.,,.iu,
deia explicación. La respuesta es que sí la
iiene' pero iLJ Ce la manera que uno I
podría pensar.
Si bien se apartan de lien'rpel en aspectos
imporlantes' 1a mayoría de los
con aquel autor en
=t
iir"*i"l qr. escriben sob'e ia explicacióndeconcuerdan
cosas llamadas con propiedad
suponer que existe ,nu cuttgotÍu áistinta
it'*prl.u.io*, científicasi', | qttt estudiando.las caracteríslicas distin¡ivas
"n cosas importantes sobre la ciencia'
de esas explicaciones se putáttt aprender
Según lo exPresó Salmon (19E4'
ix):
expiicación con que uno se encuenlra más a menudo en la vida riiaria' ¿Por qué
iaitó .t reactor;uclear de Chernobyl? ¿Qué hizo que explotara e1 cohete
pañe de
Challenger? Y así sucesivamente. Por Io tanto, resulta que la mayor
realmenie
ios escriios filosóñcos sobre la "explicación científica" no se refiere
a las explicacio nes dentro de la ciencia, sino al uso del cor,ccimiento
cientíiico
p5¡¿ ¡¿flsxijr nc3
en las explicaciones de los acontecimientos de la vida diaria.
dr. i: cieircia y
sugiere urra imagen muy diferente de la relación ent¡e e1 estudio
el Jstrdio cte la explicación, de la que hasta ahora se ha sosteniCo
por 1o general.
La expiicación es una actividad humana cuya práctica antecede
por mucho
justo el tipo de
al surgiÁiento de la ciencia moderna. En electo, parecería ser
para-em-
actividad cuyo estudio las ciencias cognoscitivas eslán preparadas
de la
f..nde.. Ya es claro que buena parte de cualquier teoría cognoscitiva tipos de
erplicación ha de versar sobre cómo las personas reculren a diversos
esquemas al dar explicaciones -v al entenderias' Y mucho de esra
explícación
poárÍa ser relativamenle independicnte del contenido de ios esquemas em-
pLc-aldOS.-
Des,Ce este punto cle visla. toclo 1o c-ilt es Cislintivo en cuanto a ias ex-
piicaciones "cientílicas", ya s¿a en la ciencia o en Ia "'ida diaia' es
que echan
manodemodeiosdesariolladosenl:lsciellciasAsípues,estudiariasex-
plicaciones científicas es, en el rnejor de 1os casos, Ll¡-ra foima rnuy indirecta de
estudiar ciencia. De esta manera es poco lc que puede aprenderse sobre cielicia
que nO pneda aprenderse máS directarneitce exarnitr¡ndo la naturaleza de los
nrodelos cicntíficos y la manera como estos se desarrollan''-
Lo quc la ciencia prypq¡-c¡q14 q la-s-l'p¡pllcaqiqnqs cie-l1qí-f!9-lsll e9 .yt
in,Liúáiniát .onriii.iti. á" ót"ju"to, Ce mo!9!9q b!9n aulorizados' Q-gmq los
manejeiá ge¡te 4l gq¡¡1ru!¡ q io.19qQ!¡ las -q¡p1ic4,ci-o¡g¡ depqBIJe¡4-Qel co!!9I!9
é*friir"l,firo. párá ton.ra. un ejen.rplo conocido, no es parte de la cienciaque de
ta ,rr"cá.rica áecir si la lorgitud dei péndulo explica su periodo o es esle
el
explica su longitud. Lo que la ciencia de 1a mecánica proporciona es un modelo
q'.re exhibe la esiructura causal de la que son parte ta'nto Ia longitud como el
periodo. Lo que es más, gl mc reig p-yg{-e-Slb¡qi"f jnslu-§o-asimetrías.§,Il!-I9.1os
C]-.!r-r"tqq {9,i4 g¡trpc¡uiá ó-ái.tsil, el é1
ejemplo dei péndulo, la longitud
.ónriitrv. piriinetro Iibre en 1as ecuaciones cinéticas originales; en cambio,
""
el perioáo no 1o es. El periodo se deriva en el proceso de obtener !a solución
para Ias ecuaciones de movimiento. Pero este hecho no nos dice nada en generai
iobre la prioridad de la explicación. Como 1o demost¡ó elocuentemente Van
Fraassen con 1a histoiia de ia tcrre y la sombra (1980, i32-34), bien puede
explicarse por qué cierto péndulo tiene ]a longitud que tiene, por referencia a
los Ceseos de alguien de tener un péndulo con un periodo preestablecido'
Entonces, ¿podría decirse que, al igual que Van Fraassen, me pronuncio
po¡ una teoría "pragmática" cie la e;ll,iicirción científica? No precisamente'
)=ii posición es aun más radical. Para mí, una tecría de la explicaeión no ha de
¡
-
a
131 LA E;-'PLICACIÓN »¡ i-a ciENicIA
a
ít
jtngarseatendie ndo a considsracic ¡res iliosóficas, siilo coiliol¡'le a las ncJmas E
expiicación.se
áe ús .i.ncias cognoscitivas. Es decir, una teorÍa empírica de la ¡
actividades
ha de juzgar por iós tipos de testimoruo pertinentss a teorías de otias ¡
.ogrror.itirui de nivel supeiioi corirc ia ccmprensión del lenguaje y la solución
ce-problemas. cómo 1e irá a la expiicación de van Fiaassen al aplicar
esias ta
ncrmas, queda coilio un asuntc pendiente'
T
i
Las aesPUESTAS DE LCS P.EALISTAS E
.i
Finalizaremos este c3-pitulo respondiendc a cualro tipos de aigumento
en tr
contra de la interpretación reaiista de 1as hipótesis científicas- A
tono ccn la
É
dado fol'ma tal que
estrategia general del capítuio, a estos argumentos se les ha -
per*itán u., qu. la interpretación realista es en general incoherente u obvia-
mente falsa. iVlás tarde nos ocuparemos de loS argumentos
epistemológicos en t-
contra del realismo. .t
-
€-¿
I
El acertijo de la aProxinaciÓn
I
iE/
La ma.voría de los cientíñcos, a poco que se ios apure' admitirán
que' estricta- ,'l
si no es que ra
merlte hablando, muchas hipóiesis realistamente interpretadas,
se apresurarán a :ti
inciuso todas, no son literalÁente verdaderas' Sin embargo' il
de esas hipótes is scn oproxirnadamente verdaderas En
"p",,io, la mayoría
agregar que
.J* los antirrea.listas como Laudan (1981), replicarán que de ningún =
,,aproimadamente vercladero". Y, hasla
mocit quecla claro lo que significa
cieruo punto, tie ne n razón.
La verdad aproximacia no es un tipo de verd-ad. Es, en
verdad, ¡una- forrna
defalsedad!Aproximaiamenteverdaderoimplica..noexactamenteverc]ade.
ro", es decir falso. Además, los intentos recientes de explicar el ccncepto
de
(1972,
,prá¡-uau*.nte verdadeio, ccmo 1a idea de veiosimilitud de Popper que
+i-60; tiewton_smith 1gg1 52_5g), han tenido poco éxito. sin
embargo,
ios filósofos no hayan podido explicai un concepto
viable de verdaci ';roxi-
que 1a aproxiinación
mada no debe tomarse como funclarnento para concluir
de la dificultad sea
no es esencial a la práctica de la ciencia' Tal vez la fuente
a un concepio
que los fi1ósofos insisten en concebir 1a aproximación apelando
de verdad aProximada-
(1980' 9) que para que
Van Fraassen estuvo más cerca de la meta' El sugería
una familia de
una hipótesis sea aproximadamente correcta debe abarcar
r'odeios,unodeloscualesesexactamentecorrecto,esdecirisomór|icorespectc
delsistemarealquesepretenrle'Peroinciusoestadeiiniciónesder,asiado
la
-''
)
)
)
) CCNSTRUCTIVO 1il
a EL REA LISivrO
)
a lin]ira.rte. independienr.emenle de 1o que la aproxima-ción signific^ue en ciencia,
a debe ser cierto que los rno,celos dinámicos de la mecínica clásica son
aproxi-
a toniano dinániico será exaciamente correcto para sistema verdadero alguno '
a Mi planteamiento, naturah'nente, es que la idea de semejanza erilre modelos
a y sistemas reaies provee una muy necesaria herramienta paia entender Ia
) áproximación en ia ciencia. Primero, elimina 1a necesidad de una relación
a sJmánlica espuria: Ia ve¡dad apro,¡mada. En seguida, revela de inmediato -1o
qre se ocrltá al habla¡ de veráad aproxirnada- que la aproximación posee a1
) por
rnenos dcs dimensiones: la aproximaci ón por aspectos y la apro:dmación
).
groclos. A¡mados tan sólo de estas distinciones, podemos empezar nuestro
) ataque contra otras obj eciones recientes al realismo '
,
)
, E! argunte;ito histórico e)1. ccnlra ciel rer¡iist¡to
)
) Ei argumer-rto histórico 3r1 ccnii a ciel rea-iisrrlo' scg'iri: lc pcpuializó' por
): ejemplo, Laudan (1981a, i984a), es básica-mente el siguiente: La historia de la
ciencia nos da r¡uchCS casos de teOríaS desc:-rtad-as cityos téinincs central;S
)
no se referÍan a nada teoria dei flogisto y la del éter serían los principales
), -la
ejempios. Es¿-s teorías no pcdrían, por jl tanto, considerarse coÍr'ro ni siquiera
,, aprcximadai.r'rente verdaderas. Aden'iás, 1os restimonics que Oiigii-iaimente
a hicierou que se aceplarar-i esas teorías no eran ie un tipo diferenre a los que han
a' llevado a aceptar las teorías actuales. Así, nc hay razón pala pensar que
+
a'
nuestras teorías actuales no correrán con la misrna for-tuna- En verdad, los
tesiimoniOS históricos llevan a creer que muchas de nueslras teorías actuaies
)z aca_barán de semejante roaf\eta. La histoúa tiene fuertes pruebas en el sentido
de que las hipótesis interpretacias realistamente suelen resultar falsas aún
-'
,r cuando sóio se hayan pretendiCo "aproximad-amente" verdaderas '
Esie argumento se apoya en 1a tácita intuición de que la aprcximación es
a sieinpre cuestión de grcclo. Si e1 éter no erisle las pretensiones que lo presupo-
fi i.ren no puecen estar solarnente un pccc erradas. Deben esiarlo en un sentido
t: r:ás radicai. Sin embargc, el argumento se d-errumba si abanconamos el
ta, recurso cie la ve¡dad aproximada en iavor ie la semejanza enire el mcdelo y la
realidad, lo que permite que la aproximzciÓn cor-isicere tanto a.spectos como
f,-, grados de s:mejarua.
Indeperr,lienteinente de que el éter exisra o no exista, en muchcs aspecios la
,.rl radiaciól eiect::oiila-gnética. es cot¡to ula perturba-ción en el éier. En esia
a sentido, las teorías ,- rl áiei son aproxirnacicnes ' Ei hechc cie que el étei' no exj:ta
4., es un a,spr:L io muy inportanie eii aije nc puede ha-ber una fuerie szmejz'nz'a
a'. entie ics nccl:los dei éter y ei uaiv'ereo. Ta-l iaiia- es u;a bi:ena base pa-ra
é,
I34 LA E)(PLIC.\CÍÓN DE LA CIEi'¡CiA
iechazartalesmodelos,aunquencparanegar/o'raslasaiirmacicnesreaiisla-
del éter y el
entre los modelos
menie enienriirias a propÓsito oe iai semejanzas
universo.
descubrimiento de nuevos
Una loima en que la ciencia avanza es pcr el
*p..tá, ce la reaúdacl, ., á"it nuevos aspectott":tt lltt:::,,:::t::.:
ia'mDlen en vlrluu rrtri
pueden pareceise a la reaiiriad' La ciencia avanza
y la
en que las ser-neja-nzas entie ei modelo
descubrimiento ¿. ulgrno,-
realidad no son coirlo ,. io*ti*eite' Con todo' ninguno de 1os dos tipos
"'iectos
"tin ei ¡eaiisino constructlvo'
c1e avance es icompatible con
El arguntento de la semejanza
constructivo modesto iuera
A primera vista, parecería que inclusc el-realismo
Barnes (19E2' cap' 2) y B.loor
incompatible con el relatir'-ismo ' Sin tnrbu'go'
presentaron hace p;t;;" que' de ser ccrrecto' inslalaria
(1982) "gu*tná
cómoclamerrteensuhogarrelaii--.istaalrealisrnoConStruCtivo.Eseargrtmenlo
y se le atii'oLrye
cie ningún claro sociológicc)
es puramente ieórico (no echa ma¡o
(19ó1' 1974)' Aplicado a mi explicaciórr
a NIary He sse (197'1, .^p 3t, a Kuhn
procede.de ia siguiente manera:
A. ioi iipO,.tis teóricas, el argumento
y ha siCo presentada como
La relaciÓn entre un *o¿tio teórico la realidad
unarelaciónder.*..;u-u'Ahorabien'desdeelpunrodevistalógicocualquier
y-hasta cierto grado' Para evitar
cosa es semejante a otra t''ulguno' a:specios
clue las hipótesis teóricas *i'tit"yun tan sólo una verdad vacía' se cie'uen
entonces' 1a'¡erdad o la ialsedad de
.G.rfi*, f"t aspe.tos y los grados' Pero'especilicación Y el acuerdo sobre su
ia hipótesis dependerá enterJmente de
la
previo concerniente a las especifi-
verciad o falsedad a.ptn¿t'e ¿t u" att'e'dá
caciones de aspectos V ¿t gtu¿o'' Sin
embargo' estas especiti caciones ¡o están
modelos teóricos ni pcr ia natura-
determinadas ni por e1 calácter de nuestros
acuerdo' entonces sólo puede ser debido
leza de sistema real alguno Si existe
aouehubounacuerdopreviosobrelosaspectosygrados,eictta]escbjetode
:*:rv;J;;;;ñi;" parte de la sociedad. Así, o¡é hipÓ :sis son
^oor
depe-nderá.oor cornpleto de 1os acuer-
consideradas verdaderas y t'-tált' ialsas
dos sociales' 1os cuales tá ,"t t"*,feto
independientes de nuestros rnodelos
y cle cÓm o sea realmente el univeiso '
argumentc ' Una hipótesis teórica' es
Concuerdo con las premisas de este
libres' Hasta que no llcnan lcs
óomo una lórmula.on uu,li* parámetroi
permanece irdeterminada Es
parámetros, la verr.lad o foi"¿ui¿t 1a hipótesis
'r"ir, * i" ni 1a realid ad deterrninan los aspectos
oi"pia hipótesis indeterminada pretensión de semejanza' Sin
o los grados que deban considerarse en la
una ccnpleta delerminación social'
ernbargo, no se sigue ta' concL'si¿n de
de los aspectos y grados pertine il-
El argumetllc supc"t qut l"'pecificación
r'**
)
Churchland 19E5, 454-55). Por 10 tanio, al rnenos para ciertos juicios perc:p-
tuales, el hecho <1e_que exista acuerdo arnplio nc requieie de explicación sccial.
Basta con las explicaciones de la biolcgía y la fisiciogía evoiucioaistas.
-Naturdmente, la aciquisición del conotimiento cientíiico, aJ igual que todas
las actividades del ho¡nbre, tiene lugar en el ar¿biente social. Eso no se discuie-
Sin embargo, Ios hornb¡es son taÍ1bién c¡iatr-rras bioiógicas con compiejos
capacidaCes cognoscitivas evoluciona.das para interactuai con su medio. La
ta¡ea de la teoría ce Ia ciencia es clescubrir ernpíiicament'e cómo se ensambla¡
todos estos elementos. Para esta tarea, lós argumentos sociológicos según los
cuales el conocimiento científico depende por completo de los acuerdos sc- _,.--
ciaies no son de mayor utiliCad que los argumentos filosóficos en el sentidc de
que el conocimienlo científlco requiere necesaria¡nente 1a a ¡-.licación de ciertas
reglas a pricri de racionaiidaC.
Los intenlos de describi¡ la poslura realista dentro de 1os confines del empiris-
mo tradicional se han topado siempre con el problema del acceso inde-
pendiente. Supongarnos, con FIune, Mili o Russell, que todo lo que ex-
perimertamos "directamente" son nuestras propias sensaciones. Entonces,
¿cómo .-'odnamos comparar nuestras sensacioi:es con la ¡ealidad para deter-
minar si en efecto corresponden a ella? Si todo 1o que podemos experimentar
es otra sensación, en el mejor de los casos podríamos comparar dos sensaciones
diferentes. Dichc breven-rente, no exisie "acceso independiente" a la rea.lidad.
Como el empirismo radical ya no está de moda, tampoco encontramos ya
ese argumento enunciado de manera tan desnuda. Con todo, sigue teniendo
influencia. La lectura paciente de obras recientes de Putnam (198 1 , 1 98 3), por
ej emplo, nos revela una versión más kantiana de1 argumento.
Si nos acerca¡nos al problerna desde la perspectiva de 1as ciencias cognos-
cit.i''ras y el naturalismo evolucionista, podremos eludir varios siglos de eslériles
debates filosóiiccs. Las ratas (Tohnan 1948; O'Keefe y Nadel 1978) e incluso
las avispas (Gallistel 1980 345-49) tienen la c:'i:acidad de construir "mapas"
internos de su ambiente. Elaboran esos mapas media¡rte la interacción causal
con el mundo en una forma que les brinda útiles senej anzas con la realidaci.
Naturalmente, fue 1a evolución 1o que produjo 1a capacidad neurológica de
generar tales mapas, también a consecuencia de i;rleracciones causaies prolon- -a:
gadas con el mundo. En ei cerebro hurnano existen también versiones de los
m.ismos mecanismos (P.S. Churchland 1986).
Resuitaría extraño pensar que a consecuencia de haber adquirido capacida-
des cognoscilivas sumainente aumentadas, entre ellas las del lenguaje y la
r:ilexión autoccnsciente, Ios seres huinancs perdimos Ia capacidad de inte¡ac-
F,I, P.FAi-iSI"IC CONSTRUCTIVO I ]]
tuar cognoscitivarnenie con e1 ¡rultdo en las íolnlas r¿áS.senciiias que les son
dadas a los aniflraies inferiores' La posibiiidad de que esro halra ocurridc es
inuy reiliota. El probieara resicie n,ás bien en 1a rnanera comc el hoi¡rbre ha
representado, en sus múltipies traCiciones inieiectuales, sus pi.:"^ias ca.pa.cida-
ces para representar Ia realid,ad e interaciua¡ con ellz.
\Jlevez reconocicas 1e.s
incapaci,Cades de ta.les tÍadicicnes, nos queria el cainino despejado para iniciar-
1a tarea cieniífica inás fructífera de explicar cómo, empezanCc con los
Iecuisos
biológicos y culturales de nuestros antepasa.dcs, el hcmbie se las ha arreglacio
para construir la ciencia mode¡na.
a
i*-
de la ciencia es crear
EL FNIPTRISTA- CONSTRUCTIvO CO¡.lSIDE?.A que el objetivo
que
modeios que sean empíricamente adecuados, lo que equivale a modelos
arrojen hipótesis ve¡áaCeras concernientes a los aspecios observables del
*r.rdo. Lás aspectos teó¡icos de los modelos científicos pueden tene¡ en efecto
j esta creencia '
su contrapartida en la realidad, pero la ciencia no puede us*'ificar
Por otra parte, los aspectos modales de los modelos no tienen ninguna con-
trapartida en la rs¿liciad. Sin enrbargo, \'arl Fraassen sabe que los científicos
sü:1.r.rp..sarse conlo r'ea1isir.:, i¡,cluso l¡¡lio tealisi;ls lncilales. EiloS hablan
cle ccsas tales corno lo que haría un pioiór que se :Li:cleiara en uo
cz)ropc
magnárico. Esio, según éi sóIc nos mrieslra el ca.rácier aba¡cador de un n-rodeio
enpíricamenteadecuaco.Nuestrosmocelcscontigr-tranlamaneraConopen-
,^Áo, )'no, exirresamos. Cort todo, este hecho concierne únicarnente a1 aspecto
"pr¿ginático" del 1';rguaje ci¿ntilico, no a s'i "1ó3ica" Iri a su "semántica"
(\'an Fraassen 19 80, 199-201)
Aunq'.re no se haya realizado con esie fin, hay estrrdios etnográficos
re-
cientes sobie la invesiigación dei laborarorio que proporcionan un fundamento
microsociológico a la explicación general empirista constructiYa de 1a ciencia.
qlte
Estos estuclios trata-n de mcstrar en deta.lle córno las actividades cotidianas
se realizan en el labcratorio generan la realidad aparente de los objetos
teóricos. Estos estudios eslán guiados por una ' 'interpretaci ón conslructiva
de
,,concibe e1 orden generacio por la ciencia como un ploceso
1a ciencia" que
y
(mater.ial) cle asimilación e incorporación ie los objetos a nuestro lenguaje
nuestra práctica" Q{norr-Cetina 1983, 136)'
Los jartidarios de los estudios de Laboratcrio consideran s:-ts observaciones
hechas en t:¡l medio como un a-pc],o einpírico a 1a interpretación constructivista
cie la ciencia. 1.,{e propongo contradecir sus afirmaciones l¡ediante un
estudio
que
cle laborato¡io hecho pcr rní mismo. Mis suj etos son fÍsicos nucleares
trabajan en las instalaciones de un ciclotrón nacional. Estos cientÍficos se
consideran a sÍ mismos como investigadores de la estructu¡a del núcleo median-
te ei bombardeo de núcleos con otros núc1eos iigeros, principalmente protones.
por ahora no me ocupa,ré de sus afiirnaciones sobre ei núcleo, sino acerca de
los protcnes y los neutrones. Cualquier filósofo enpirista o sociólogo cons-
i13el
r40 LA EXpLicACtóN o¡ I-a clEi'lclA
)
) resultados para su
) A1 fin conclu.te el experimento de X y se redacten los
las com-piejas
publicación. El ártículo publicado no hace referencla alguna a
) según se afirma'
contigencia-s y negociaciones que en reaiidad ocurrieton' Esta'
) es una de ias fori¡-ras en que ios cienlÍficos conseÍ-/a-n
ia apariencia de estar
) "descubriendo"hechosdeunarealidadpieexistente'Dehecho'seconcluye'
) la..realidad,,alaqueserefiereelartículopubli:adohasido..socialmente
) consiruiiia" en ei laboratorio.
y ia negociación no
) Nóiese que lo que se afirma ser objeto de la contigencia
es merarnente el proceso de realizar un expetimento '
La aitrmación se apiica
) en que 1os científicos '
igua.lmenie alasionciusiones alcartzadas ' Se citan cas os
) con otros
)
,] ,.rni. algunos datos, invierten mucho tiempo comunicándose se intelpretan
cientíiicos a propóslto de su significado. Tales intercambios
) .o*á pua. del pioceso de negocia'r la conc-iusión que se ha de publicar'
descrilos por otros'
) En lugar cle ocupaime con mayor detalle de 1os casos
Jnstalaciones del
) describiré ahora algunas de mis piopi:ts obsen'aciones en las
pios' conñrniaré
;r.i;;;;; J. iu u.,ñ'..riaac d¿ Indiana.. Con i¡ris propics ejerT que
) niego es que
) los hailazgos en c'.lanto a coltigencias 1; n"-gociaciones' Lo
taies hailazgos apoyen el programa const ructiv ista ' La
contigencia y la- nego-
)
ciación son compartibles con ei realis¡-no'1
)
)
) Las ins!sla.ci,tnes del Ciclof rón cle la {Jni'iersiCaci de
Indianu
a (ICUi) con-
) Las Instalacrones del Ciclotrón de la Universidad de Indiana
física nuclear' finan-
) ,ti,.i." un laboratorio nacional para la investigación enpara
a ciadá primotdialmente por 1a Fundación Nacional la Ciencia y' en
,.gundolugar,porlaUniversidaddelndiana'Lasinslalacionesempezaiona
) de profesores' otra docena
) fu"ncionar á ISZ). Hoy día emplea a una docena
docenas de inves-
de doctores asociados o cientíñcos del personai, a va¡ias
) así comc a unas sesenta per-
tigaCores asociados y estudiantes de posgrado,
) sonas enire ingenieros, técnicos de investigación'
técnicos en electrónica'
) encargadcsdemáquinas,técnicosdelciclotrón,operadoresysecretarias'E1
) millones de dóla'res al año'
pr.r.,!r.,*"o p*, op",u. 1a unidad es de unos siete,'crupo
) b,., rsaz la_s instalaciones adquirieion su propic Teórico Nuclear",
aa coinpuesto de media docena cie físicos nucleares teóricos '
por el personal
,1. La mayor parte de la investigación clel ICUi es realizada no
) p.r*^.,"ot. sino por fÍsicos nuJeares de todo el rnundo, aunque sobre todo de
bsta-dos Unidos. El ciclotrón de ICUI ocupa un
puesto singular en Ia investi-
,a' q¡ción nuclear. Prcd¡"icE un haz de prctones (o iones más pesados) de alia
,¡ i.*i.,.;¿= con ura cnergía clue.ra de 12 a 2c0 h4ev (rnillones de eiectronvol-
II tics). Los cientÍiicos que qxi:;ea inveslQar con iaies ins:ali.cicnes pfes.nlan
ta se ¡:i:¡it
su sclicitud ante ei "óorni¡é Asesor del Frcgrama" (CAP), el cuai
rai
I
-
T42 LA E;i.PLICACICN DE Lé, CiENCIA t
i
Ínás o nenos ca.ia seis ireses. Las p¡optiestas se juzgan oficialirente ccn base I
en "méritos ciertiiiccs, viabilidad para las instalaciones y perspectivas de
buenos resul¡aCos". Además dei fina¡cialniento, las instalaciones y elpersonal a
=
?
de apoyo, la principal restricción sobie cuáles y cuántos experirnentos pueden -
ser aprobados es e\ liempo. Lo que el CAP asigna es tiempo en turnos de ocho ¡
horas, lcs cuaies hacen un total Je 21 por semana. I
a
)
Negociaciórt Y ex7eri¡nent ació n
)
que se ajusta a
Una tarde a mitad de 1a semana de cinco días' ocur¡ió un caso
..negociación,,. Encontró a] asociado de
las descripciones norirLalss rie ia
investigación a cargo del experimento en la cornputadora de
adquisición
de la fa.cultad. A1
de datJs, sostenierdo aca_l0rada ciscusión con un miembro
y
pu....r, ,. había descubierto que el haz se desviaba ligeramenle arriba abajo
áe1 objetivo. Se discutía sobre si esto afecta a en alguna
medida a los datos
que no; el
que se estaban recabando" El asociaclo de in'¿estigación creÍa
de esa variación
miembro de la facultad no estaba seguro' Las consecuencias
podrían ser graves. Si la variación importaba, la rnayor parte de los
datos
se desconocía la causa
reunidos hasta entonces resultaría inutil. Además, como
deladesviación,podríatomarl'a¡iosturnosencontÍarlafuentedelproblema
de haberse
y corregirlo, lo que dej a;ía muy poco tirl-1po para reunir Catos antes
l
.omplelado el cic1o. La discusión, acompairada de diagrar'ras ecuaciones'
co¡riil]uóculanteunaho¡a.AJfina]eInie¡r.brocielafacultadseciopor
veucido y el experimenlo siguió su u''lrso'
persuadido
Francamente yo no sabrá decir si ei rr-iierrb¡o de Ia facukad l'ue
lo
por los argumenlos del asociadc de investigación, o simplemente no estaba
la in-
suficientemente seguro de su prcpia postura como para recomendar
t.r*p.ion del expe-rimento para intentar la estabiliza-ción dei haz. El principal
de
factor puede haber sido que el ascciado cie investigaciÓn' no el miembro
y arrostra a IaS
la facuitad, era a iin de c,]entas responsable dei experimento
consecuenciassialapostrelosdalosresultabaninútiles.Elasociadode
de corregir
investigación, a su vez, puede haber pensado que las oportunidades
que perder si seguía
el problema a tiempo eran tan reducidas que no tenia nada
de importancia' Er'
adelante esperando tener Ia razón y que la variación no era
desviación
todc caso, no había formaviable de verificar experimentalmenle si la
que se llevaran a
era imporiante. Pa¡a saberio se habría tenido que esperar
cabomásexperimentosdeíndolesemejanle.Esohabríatomadomesesentelos.
l\{ientrastunto,lurconclusionesquesesacarondeestecasoparticulardepen-
de que el haz se
ciieron en aquella decisión sobre las posibies consecuencias
haya estado desvianCo.
La contingencia y la negociación son, sin duda, inherentes a la investigación
de ciclotrón. Pero 1o mismo ocurre con el realismo, cOmO
procedo a demOstrar'
I
I-a Pn¿tsiÓl.l DE PRoTONES
Aparte de las oficinas, Ios salcles pala seminarios y los ta1le¡es' ias ins-
talaciones del ciciotrón tienes ties áreis principales ' Uira (1 y 2 de la figura
5' 1)
1..;" LA EXPLiCé^CiÓi.-¡ CE TA CI'NCIá
Los haces de protones empiezan ccmc hidióger. -:. Cada molécula de gas
hidrógeno se disocia en dos paiejas pictón-electró¡r, las cuales subsecuente-
mente son ionizadas al separa¡se los electrones. Los protones son Iuego aceie-
rados en un generador electrostático. El mayor de 1os Cós geneiadcies de iCUI
(3 de la figura 5.1) emite protones de aproximadanrente 5CO Kev (miles de
el ectrov oltios). Los protones salen del geleraCor hacia una tubena ai vacío
r--oncluctora clel haz, la cual ccnduce a lo largo de un corredor y a través dc un
nuro hacia ot ro crrarto.
Pasa-qCo pcr debajo de la lub¿ría, unos cuanios melros a lo la.go del
corredor y dando'r'uelia a la deiecha, se li:ga al ciclorrón inyector (5 de la figura
5.1), que es una ve¡sión más pequeña del ciclotrón principal -cie hecho,
originalmente iue el prototipo de la máquina rná: grande. Los protones, que
entran en el ciclotrón inyector con energías cie alr:Cedo¡ de 50C Kev, saleir de
é1 con energÍas de aproximadamente 15 Mev aumento de 30 veces. Lcs
-un
prcrones de salida son conduci.los por 1a tubería del haz, viran merced a un
poderoso eleclroimán y pa-san a través del muro hacia el ciclotrón principa-l
Incluso para el ojo inexperto, el ciclotrón grande (8 de Ia íigura 5.1) es una
pieza impresionante de maquinaria. Sus cuatro electroimaües principales, cada
uno con un peso aproimado de 5G0 toneladas, rniden 6 metros de altura, en
operación normal conslt:ne 1C0 kilovatios de electricidad y Iequiere 13 6C0 litros
de agua por rninuto para maritener los electroimanes a una temperatura
constante de aproximadamente 85 grados. Esta máquina comunmente fun-
ciona 24 horas al día durante varias semanas hasta que algo se descornpone o
es puesta fuera de servicio para su mantenimiento.
La manera como funciona ei ciclotrón puede entenCerse con la ayucia cie la
figuia 5.2, la cual constituye una vista esquemática desde arriba'. El á¡ea
opeiativa, a.l vacío, tienc taÍ1sóio una puigacia deprofunciidad, por lo qu¿ ij¿sta
con u a representación bidirneruional de eila. Sólo hay que tenel en cueiita dos
principios físicos funda-mentales. El primero es que una partícula cargaCa en
un ca-mpo e!éctricc experirnentará una fuerza en la dirección de1 campo y, de
esta forma, será acelerada en esa misrna dirección. El segundo principio es que
una partícula cargada que se raueve en un campo magnético ex-peiim.nlará
una lterza per.pendiculer al cam,Do, y así se desviará en una tra-yecioiia c'd.va.
a
a
)
a
a
a
a I +J
a
a )O
a co 13
a
a
, i
t o
+
o
a ? c-
) i
'ú
=
a t-r
o
o.
) ot -/ (\
t 3
§
a
)
)
-g
)
I
t I
É
'rtr
a 1
(t
) I
)
) § ;)
a
a LO -o
tr
a o
a O
a (\ 'o
a Ct)
u)
a ¿ o
a § ü
a co
E
C! D
a =
a 'c
a E
a co
a
a t-- /_ ]_ _ _ I
/l
4 (c LO -]-
a I
l!
oo
a fL I
a L
ll-llllli
I
a
a 2
]
el sigio Xi''{'
Ambos principios quedaron bien establecidos en
del ciclotrón inyectcr
Como podemos ver en 1a figura 5'2, los protcnes
y des'¿iados por una ccmbinación
eiitran en Lln pequeño ángulo de sde aba'jc s¡-'n
próxima a1 cen-
;; ;;;", *ugn:ti.o, y eléctricos hacia una pequeña órbita
El
.¡4n
... lN
..t\
Electi'oinrán de extracciÓn 42o
Comp. exfracción
E Ie ctroimán
deÍlector 6
Ranura vertical de =
?t
ahorro {I
Bobinas armónlcas
g
axiales sur r.- -
lVisor de sonde
I y reién sur -
)rX" ¡
-
V
I
I
f
I Zá electrostátlco
a
EscanO ldol oe I
"ru.ro,
l
llegada - Monito¡' de TV
(1'.1'l jJ
rro de j a m áq¡ i n a
J :' :;i§:ffi' [1?.1' i;';'.U; :: :$!1.=5i
el inflectcr elecrrosta'rico') :" -"::"::;.', ir.".ritursOgradosalosprorcnes
cuidacc'"*:lj::i::11'.T,lX'..,,^0, que bási;z'mcnt.e
:,;i;;;; " "rcuran
.n mouin.,iento, de man'era ;.;:;;;;á.r. La dirección,d.i T:^"'-
lll"l,,í";
cuadraCo,c",",ür;;;;.;ias arrtDa'
ciescribe un clel reloj si se observa desCe
*i-tnto tt contraria u'u cainpos elée trico's t":': l::
o'un
tn ti-tl:-:,1-;--".-
ia figura 5 '2' eisren para
Aunqu¿ no se representan
electroimanes
o c. Esros campos sirven
t''-..t';,o
b lcs " inicial' A'sí' un proton
.t.íir.'|"*t' o , n.,.,'
::'.':;;' i; ; ;, o, Á 'entre I,\ft ::' ; ; ; ;;;' ; o.:,
..i
que enrra en er campo.
li¡:i : : I : ¿ T." L*' " ; ^1"
oet.c,;;.;;;;; B como::";:;,;;;;, I[[i:;flii."JJ.ii]";I.
abandor,ó el carnpo ,r^ror ei: e lo;
en una órbrta *,rn-.,o o;urre enirc D y A.
rerri-ina "i:r';i.:;;;anes A I L*cras
cadavez ma).orss hrsra
-ts
"ts: : ,,.ofi ff '"i ;;;cv
li;l'".;;
ien d o .
". ?:b., ar r ededo r d : 600 s i rci e r
i:fu1i::,*:L::: :l::ir;lvi:ijar
iiiii::::*HT
'r una \ero
ii;; ;:':i n;*.
sr prorón pueJ:
lr;,:';''J;...'.,.
la vglocidac de la luz
tt E s imp r e s i o n al,. :l
reristicr quc más:*d:1t':';i;i.]re"a.r
f:*is;,
ajustes a i:
i
::i:iiltljiliil#
proceso de t :fuu :";i:
,oi"¡madam'nLe dc 20
a
.n,iiaot.'Uu'icndo :::i:,:::i; .r. '"
ta ;,;.; ;;,."., r. ._:^.:,rii
:::ilH#?r-"1'.]il la ,,polari_
L. 2c0 h iev' con una 'utl1t]t de que pu: conrrolaise
5
t t ,rIT1:X,"ff,*$;X1;'r';;,'
nr. es er hecho
"*' *.:';as otras partículas' tiensn
una
l'-
r43 LA EXPLICACIÓN DE i-A CIENCIA
Ei uso DE PRorcr\ES
Antes de tratar de sacar conciusion¿s geneiales, describi¡é algunos aspectos de
un experimento típico.
GE oo eo oo
o *-> oo oo
oo oo ó8 oo o
oo a o
BLANCO
TUBERIA DEL HAZ
/ /. 0 o
Visto pues que lcs neutrones pueden viajar grandes distancias a tra'¡és Cel aire
hasta los detectores, ¿qué sentido tiene poner éstos a tanta distancia? En la
mayoria de 1cs otros experirnentos realizados en este laboratorio, los detectores
a
-
)
)
)
) EL REALISN1O ET{ EL LABORATORIO L5I
a
)
t se colocan muy cerca de los blancos u objetivos'
como vimos 1íneas arriba, una de las cantidades meditlas en los experimentos
t del neutrón ernitido. Como los neutrones no tienen carga
y'
t (p, n)
ior,unro,
es Ia energía
inteiactúan poco con otras partículas, es difÍcil medir su energía
a cuando están en movimiento. Puece medi¡se su energía de manera
indi-
r -
recta, haciéndolos interaciuar con oiras partícüas, como lcs proto es '
) y
) diendo iuego la energía de las partícu1as secundarias' No obstante' tales
en
) métodos indirectos introducen un factor considerable de incertidumbre
) la rneorclon.
Mediante este experimento se mide ia energía del neutrón de manera
más
)
directa, clererminaldo su tiempo de desplazamiento desc\e el bianco hasta
el
t deiector. A partir de esre tiempo, 1os in.vestigadores pueden calcular fácilmente
) la velocidad promedio del neutrón y, por tanto, su energía promedio' El
) detector de tales mediciones só1o necesita indicar la presencia de un neutrón;
) no es necesa¡io que micla su energía. Todo 1o que se necesita, además' es alguna
) manera de saber cu:1-ndo el neutrón saiió Cel blanco. Fsto se consigus registran-
) clo el monei-:to en qiie los brotes de prolo¡zes chccan ccn el blanco. Fiitrando
electrónicamenra tres d3 cada cuatro broles de neutrones, podemos estar
)
basiante seguros sobre qué brore de prolones ernitió un neutrón dado de los
) que se han deiectz.io y, en tai virtud, cieterminar el tiempo entre el instante
) e;, qr,e los protones hieren el blanco y e1 momento en que el neutrón er'¡itido
) llegó al deiector.
t Ahora bien, en cualquier calculo de la velocidad prornedio basado en
) mediciones clel tiempo y la distancia recorrida, a mayor distancia, mayor será
* 1a, precisión. Entonces, la razóo de que los detectores estén tan
lejos es obte-
a: nei la precisión suficiente en 1as mediciones de 1a energía neutrónica'
a. Es inte¡esante notar que las mediciones del tiempo de recorrido revelan
exactamenle lo que cualquiera podría espelar. Para una energia protónica fija
rai
y una dirección fija del neutrón emitidc, mientras más lejos esté el detector de
rl: neutrones, mayor será e1 tiempo de recorrido ' De la misma forma, en igualdad
¡i de ci¡cunstancias, mientras mayor see la velociCad del protón ingresante,
ra: meno¡ será el tiempo de recorrido dei neutrón. Nuevamente, en igualdad de
al circunsiancias, el tiempo de recorrido aumenla si se incremenian los ángulos
a, entre el proión ingresante y e1 neutrón expulsado, En este sentido, los protones
a: y los neutrones se asemejan a las bolas de1 billar.
,a:
a: _a Pdi qué son tan grandes los detectores de neutrones
r¡i
ai En mayoiía de los experimentos de ciciolrón, 1os detectores scn tan pequeños
1a
a. como se pueda para conseguir determinacicnes precisas de los ángulos de 1as
al-.. partícu1as expulsa-das. En este experimeeto, los delectores de neutrones son
ti a
152 1-A FXPLIC,{CiÓi'i ¡I I.'' CiEi'ICIA
neutfonessonCasCsparadigrnáticosdeentida'des..teó¡icas,,o..ccnsiruicas,,.
pa-ra 1os empiristas o los cánstructivistas, admitir _incluso una interpretación
a renunciar a que su
realista (constructiva) mínima, en este caso, equivaldría
explicación fuera aplicable alárea central de Ia ciencia
moderna' Por otro lado'
exjste todo
los realistas colstructivos no necesitan insistir en que de hecho
aq'.rello cuya existencia es sostenida por a1gún
grupo de científicos ' Ellos
empirista
[arnpcco niegan qut hay aiguncs casos en qu3 se apiica la expiica'ción
no se a-plican
o const-rucii,iista. Lo que ocurre es tan só1o q':: tales explica'ciones
a este c aso central.
154 LA EXPLiCACIÓT'.I »¡ LE CIEI'ICIA
lviiargumenioessimple.Laúnicaer'pücacióncie¡tílicaiei-ilotamenteplausible
;;; q;;;..,..".., 1u, instalacionei detclear ciclci¡ón es 1a que ya he expuesto, o
{
;i.;;iñ; ;rv similar' Esos fisicosy nu es emiten protones con las
caracte-
4
rísticas deseadas, como st' tnt'gíu'
;;j;;;;ñ;,'iu,
luego los u'san'igu:J que otras ¡artículas'
p'opi'á^ái-it ¿iuef'os núcieos' Decir que "emiten" v e
.t
, ,usan" piotones supone que los protollss exis,te n,],
cieniíJicas
Por qtté no contento-rse con las creencius
en cuanto a
puede ciar por seniado que los iisicos nucleares son realistas
Uno
y que lo capacidad de manejar y controlar
proiones,
1os
haces de protones en su lnvestigación
"uu Pero poCríamos preguntarnos por
'",,;;;;;-; 'udiaria'
clué tenemos, .o*o obstü¿''l*'
t"t"tnos que inientaíL cornprencer la ac-
ciencia moderna, que invocar ra realidad ¡.e ios protones en
tivida,l de 1a
ieolde 1ii^i]'
de e::plicart'rate"'
io q"t 1os cientíñcos 1os aclos Jiménez
nuestras propias t'plitutiot"''¿l creencras y
de que los cieatíficos tienen estas
contentarnos con ra ailrmación
en iu investigación cotidiana?
actúan Ce conlormidad con ellas
rnenoscaba seriamente las explicaciones
La respuesia.. q'ot tui;;s;ticción Tal restricción limira los
que pueden ofrecerse at'ü-uoiul¿ud científica' Pcr
r¿cursos que se usan pa'u ¿u'
oplitnticnes a los recursos de la'¡id'a diaria' a
de neutrones se coloquen
.;;i;,l;*;i .r^nttü¿t áue los detectores
C.e la necesidad de hacer mediciones
gran distancia dei btancol t" i,.rnti¿n La explica-
Ce Ios neuirones expuisados'
precisas de1 tiempo de desplazamienio el compor-
Ias cr:e.ncias de ios fisicos sobre
ción que sóLame;rte tt "J;;;;;
estorbaría' -sinc orre sería sustancialmente
tamiento de los neutron;;; '¿r'"
niás rlébil. ¿Y por q'é ;;;;;"s
a dar explicaciones r¿ás débiles cuando
f ácilinente podríar' ser
más fuertes? de
lr"'iitntn escrúpulos en cuanlo a suponer ia realidad
Los constructiui't"
otro.s personas.
g'ian tnlu'*t3ot áitpotiti¿n
)
)
)
)
)
) FL REALIS).iO E]'{ EI- LABORATOR.IO 157
)
) pcr referencia a una conveisación que Jir¡énez tu./o con Ferná.nCez. ¿Es eso
2 suponer demasiado? ¿Nc deberíamos deci¡ más bien que jin'iénez creyó que
i.2 iuvo una conversación con Fernández? Es claro que eso sería tonto. Restringir
Ias explicaciones Ce las actividades de los físicos a invocar únicamente sris creen-
¡ cias sobre los protones, rnás que a los protones mismos, es iguaJmente tonto.
2
l.P I-es rt¡¿rrACIor.{ES DFI- EMpip.isMo
)
t Linita¡é aquí mis comentarios a Iafo¡ma de errrpirismo liberal de Yan F¡aas-
2: sen, toda vez que cualesquiera criiicas de esIa forma se aplican con mayor
tri fuerza a formas más extremas. Mi ccnclusión general es que, considerada como
r¡ nuclear. Los datos se usan como fundamento para 1as decisiones a-cerca Ce los
modeios. Esta es más o menos 1a forma en que 1os físicos describen 1a situación,
l.i tanto de manera informa.l como en sus publicaciones.
li Los empiristas no pueden acéptai esta descripción como una expllcación
-l correcta de la situación. Pa¡a e1los los daios deben sei cosas obse¡vat-.les como
¡' las lecturas de un contadcr. La energía de 1cs neutrorres expulsaCos es para
ji eilos tan teórica como ios detalles de la estruciu¡a nnclea¡. No impcrta que las
a' lecturas de contadcr n-.Jnca aparezcail conio "descripciones de 1os datos" en
ningu-na explicación cie,=riífica,.
--.
ia
i53 LA EXJLICACIÓN I)E LA C1ENC¡A
Cie¡ta¡:nent'e, en 1a inves"igación
aciual' io que 1cs empiristas 1lamaríal datos
r'i:arecen en las terninaJcs de cc;nputadcra
q"
lesultan ser núrrreros o g'eiiá'
o enlas hojas impi'esas ¿t i't*' Vu no hay contadoies qLle leer' Las señales de
a 1a cornputa'Cora' Si tomá¡:r*cs
e'r serio el
los <ieiectores pasaa direcia-iaenie
ounto de vista er.pirisia ei único contenido ernpírico de la ciencia'
;;;" puede observar'
X.:;.;;;;i;;;;i;;t'n'iu i' trata" ' es 1o que-el hombre
,."*¡;;;;;.io"ttui' qut á"ti''o de 1o que 1a ciencia mode;na se traia
es io
fl
ftoj*t Ce coinpuraciora' Eso debería ser ten-ra
de
¿
que está impreso
re
"rr'*
ñexión para cualquier empirista' H
t7a
y los instriL¡¡ientos de la int'esiigeción
Los modelos
que la efstencia- real de entidades
'a
*.1
Yan Fraassen, naturalment'e' afirma
teóricas no afecta a 1a práciica áe la ciencia y que' en cualquier caso'
no hay
Así' éi no
Fa
justificar ias c¡eencias concernientes a t¿les entidad;s'
manera de
establcce clisrinción fundamental
enlre la conclición de 1os modeios de
protcnes
que actualmeate están bajo investi-
E
de ios fisicos :,' tcs '"o¿ttos á:i núcleo -A
es acumulacias en falor ie
gación. Simplen-,ente, rut !*Jut ob serriacional
la arlec,-ración ernpírica Ae ñs mo¿eios
que alguna vez ine.
de proión es mucho ma1'or ahora de 1o
.a
-
,U
E-
de contrci del ciclotrón' Los er-
Considerer.,'ls a1 operador Cel Lablero
ia energía dei haz a 180 Mev para ia
perimentados liegan y f t püt" aumentar
il;;;;;; ,;;; ¿."*táitiónt'' El;tibe operador de las señales adecuadas a Ia
coi-n- a
ü,
a p ue.Je ser en eiecto la descripc ión co¡recta de la ' 'fenc menología cle i a activid ad
científica" (Van Fraassen 1980, 80-83). Los aspecios teóricos, e incluso los
a mcdales, de los morielos que usan 1os científicos se vuelven parte de su "visión
rl del mundo". Acaso no puedan evitaÍ tratai de esta forma a sus modelos.
ra Sin embargo, debemos entender que k:s científicos operan bajo 1a "suposi-
a ción" de que a.sí en el mundo. Como ejemplos de suposiciones, Van Fraas-
r) sen cita¿á la práctica usual de ias pruebas por reducción que se hacen en lógica
y en matemáticas, donde se comienza por suponer que una proposición es
ra verdadera y se procede a demost¡ar que lleva a contradicción. Otro ejemplc
t es ei de Llna trama policiaca. En e1 corrtexto de la obra podemos distinguir
,¡ lo cierio de lo falso. Es cierto, en la obra, que el mayordomo es el culpable y
a ialso que lo sea la esposa. Pero esto opera solamente dentro de la suposición
,¡ de la ob¡a.a
Esta réplica sufre Ia preocupación de 1os filósofos con eI lenguaje, hacienCo
-
a exclusión de ia inte¡acción causal con ei mundo. Pero supongamos que puede
a extenderse también a las actividades. Entonces, parecería sensato tratar de
a preservar la adecuación empírica de la expiicación empirista de la ciencia. Ncs
b¡incla una descripción empirista de 1o que vemos y escuchamos en el labora-
- torio.
,a Lo malo es que esta respuesta es pcr compleio ad hoc y, a fin de cuenlas,
a vacía. Excepto pcr el deseo de rescatar 1a explicación empirista de la ciencia,
a no hay razóe en e1 mundo para creer que 1as actividades que se llevan a cabo
a
,
i gC)
L,qs t-tuirAcioNEs DEi- coNSTRUCTivISMo I
4
EÉ
Los constructivistas examinan lcs
procesos mi crcsociológicos que resultan
; -;.,blt;;;ii;de los hal1azlos de 1a investigación' En su quehacer se topan
en
con
¡
!
.rf
U
qr., á lu 1-g', se resuelven por viriud de
mucha incerti/.rumbre y "o,r-t.ár..ri*
un prcceso .o*pt.jo y amot-ntt
según se afirma, ti."t *j' á"
tántitlg"ntt ae interacción sccial' El resultado
constru-cción social que de ciestrucción
de la
#ü
naturaleza. Pero la intft-'et"i'" ''ie1
proceso Ce interacción social no se menciona
resultados' Po-r lo tanto' parecería
que el
F
en 1a presentación flnat d;^;;;;;;"t il
cientíiico describe t' "ot"uit*
pura y simple cut-ndo' en realidad' la voz
de ia
Er
natul.llezaesapenaSperceptibLe,sies.qu.-puedepercibirseenabsoluto. il
actual' las investigaciones
Cehtrándose.n el ptcteso de ia invesligación a nuestra comprensión de t=r
constructivis ta, ¡"" f-'ttf-'o 'uliosas
la ciencia según se p'u-tit"u 'iptt"*t'
contribuciones
?ero ia excesiva preocupación por 1as
á'-t1'^::-
¡ts
Er
especialmente ias pertenecien"t u
actuaie:r;onclusiones titntliiJut' parezca melor
¡
les hable, o Dara que ies habien sus Cioses. por ejernplo' a través de algún orácuio
como la aruspicina en lugar cle registrar y tomar en Serio stts propias opit-iiories o las
de sus vecinos. Y algunos cie esos o¡áculos, pcr ejerrplo, están muy elaboraCos y
articulaclos. Uno p:áría prcgunra¡se si la ciencia no es rr,ás qu e nutst ra p rop;: m agia
en ia mano y
protones, 1os perdigones pueden verse a siinpie vista' sostenerse
descripciones
.oCors. entre 1as yemas de 1os Cedos Supongamos ahoraque inis
son anáicgas a
de los cientíiicos que emiten y usan perdigones cie aita energía
mis descripciones áe ias actividades que se ileva.n a cabc en
las instalaciones del
N{uchoslilósoiosysociólogosdeiacienciasehanc]enrostradcrecelososdeias:
pretensionesapropÓsitoá.1osaspe.tosteóricosdeIarealidac.Desdei¿l
EL REALISI,lO EN EL LABORATORIO 163
Lo geontefrío en el ldboratoríc
iv{uchosfilósolosysociólogosdelacienciasehanclernoslradorecelososdelas
Desde la
pr.t.nrion., a propósito áe 1os asptctos teóricos de la realidaC
EL REALIS!fO EN EL LABORATORlO t63
La geontetrío en el loborstoric
I
E
Figura 5.5 Aricglo experimental de los
experirnentcs de navegación en ratas'
tla
Así, se'.,e rorzada a
laboratorio corocada cienuo de é1 no puei_e tocar e1 fcndo.
pn.u carr. opacidad y disr:rrula¡ los olores.
F
n¿,lar. Er agua se .oror." .o'nl..t-,., 'T
a 25 lrados ceirtÍgrados' para da"rle
hEinrismo, está fresca, .r;-i;r;;;enre
para escaparse' Ei rectángu1o dis'-:ntinuo
repre- E
a la rara bast¿rnte inotivaciJn
lransparente que descansa sobre e1'fonric' I
senta una plataiorma de pláslicc E'
situada in..ieciiatament' ¿ii'1" ¿t
f' t'perficie dei agua' Las señales colccadas
alrededor del tan'1ue,
ti"u"nte disiinguibles paia las ratas' J
E-=-¡
" 'utt'q"t'onprccece de 1a siguiente *""t:i.^t::::::
La forma típica clel t-;;;;;;;
I
poslclon
una rata iiigenua en el agua viendo hacia la orilla del ta-nque en una I
I
Según una teoría en boga, cuanc.ic locaiiza por priinera t'ez la plalaforrna,
la ia_ta construye ult mapa cogncscitivo, es Cecir, Lina representación interna
cie las caracter ist ica.s espa.cia-les cie su enlcrno. Cu¡.ndo se Ia
..'uelve a coloca¡
en el tanque err ur a posición dife ¡ente, se loca-liza a sí misma en su mapa
cogncscitivo y luegc enfiia en la di¡ección de ia plataforma confornre a lo que
su rna.pa le inciica. AsÍ, el cerebro dü ia rala no realiz.a iite¡almente cálcuios
geornétdccs más cle lo que hace una persona cuanCo lee un mapa. Ei sistema
representacional, el rnapa, contiene ya toda la información necesa-ria' Una
\¿entaja adicicnai ie esia teoría es que poslula una conEñón directa entre ei
iisten'ra_ represeniacional y eI sistenra senso¡io¡notor, es deci¡ enire el pen-
sa.'riento y la acción.
Experimentos recientes s. han intefpretado cono demostraiivos de qrie a1
menos parte dei mecanismo de elabora_ción del mapa se localiza en ei hipocarn-
po (O'i(eefe -v lJirdel 1978; O'I(eeie 19E-l). Los registros cie la irecuencia de
disparos c1e cé1ulas partic,,riares del hipccarpo de raias que se mue'ien libre
¡n¡lile. clri¡il,:sl-an ti'-l e l¡S celr:las es t¡eci:riiz¿i cl as (ilall:CaS ahora célLlias cie
ubic:r¡:iól) ii:"-r-,ii:r'r cj jft rencialn.icn !': cir funciÓl ci: ia 1'--, c¡i i;lac ióll del s'-rjeto
en s¡ ¡leii¡. i',-.= lrccho, e:tas céll¡1¿',s son ccI]|r--i luces en Lli-r f.¡rDa q':e in'iicair
"usieel esiá a11iri". En ?r-nbi.ntes ciii':rertte s pue iier :'.signars: Cilerentes locali-
z:¡:cicr.it'; a la iLri:r¡l: céiul:, sirr c1',-i: c:.i3i al fili.;r-iciii! 3pa,i.leili1-3 rrt re Ic-c ¡¡rall-f:
it ani,itirres riii:rentes. Siit e:lbaig':. l:-s ¡ar-:s siln c jl p,rcc:i de ril3llal- criand'o
meros media docena de niapas diiere;,.ies al mismo tiinlpo.
A.-1e:rás, ia.s rata,s que han llrgadc tr.i1--r,iil2r 1a iai.'a cie i tanque vueiven a
su pallta_ original de búsqueda en ci rc ul cs desp',rés ce habérse1e s pl aciicado uira
operación en la que se les destruye ei hipocampc. Las ratas testigo, scmetiCes
a cperacioles fa.isas, conservan su ca.pacidad para enconriar la plataforma. Ai
palecer, destruir el hipocan-rpo ha-ce imposible para ia ra-ta usar el mapa
previamente ccnstruiCc (Mor¡is 193 3).
Finabnente, tecrÍas recientes CLel control sensoriomotcÍ illdica-n que e1 cere-
bro funciona conforrne a prir-icipics más ciue aige'oraicos, geométriccs (P' S.
Churchiand 1985, cap. 10) Esludios del ce¡ebelo (Pellionisz 5' LInas 1982) in-
rlican que ulá de sus luncicnes es transformar los vectores sensoriales de entra-
t da eir vectores de sa-lida que controlan el movimienio. For e-iemplo, la- infor-
t niació¡r del oído inlarno regula el control rlriscular para conservar la posición
eiecia al caminar. LIna tecría reciente (P. lrf. Churchland i986) sugiere que
t modalidaCes senso¡iales como la vista y e1 oído peuCen rellreseniarse en una
t dispcsición neurcnal emparedad.a entre otras disposiciones que represenian 1oS
t controles del espacio real (el ''map;-L'') y el conirol muscula-r. Ei ''en-iparedaCo''
b neurona-l resuiialie piovee una mariera directa de coneciar localizaciones en
E ei espacio.zisua-l y auCiti,,'o, pcr e.jenplo, con posiciones en el espacio de acción,
n
t
coirro cuan.dc vr o d\czrzz ei a.u¡icula.i: dei teiéfono ,ara contestarlc.
165 I-A E,-*DLICACIÓX PE TA CIENCI.A
¿Qué tiene que r.er este tipo de investigación con la física nuclear? Tan sólo nos
ilustra que 1os hombres, merced a su evolución biológica, pos'ien una ca. a-
cidad sumarnente desarrollada para represenlar reiacicnes espaciaies. Tal
capacidad se localiza en las regiones preverbales dei cerebro, reiacionadas
estrechamente con ei sistema de conlrol motor. La nolable tendencia que existe
entre los físicos nucieares experimentales a pesar y comunicarse en iunción
de diagramas nos perriite suponer que 1o que hacen es explotar estos tipos dr
capacidades cognoscitivas y se ns o riomotrices. La actividad que interl'iene en
el dibujo de un diagrama, por ejemplo, es justamente de1 tipo que supondría
ta.les capacidaCes. Así pues, existen suficientes pruebas de que los seres huma-
nos están naturaimente dotaCos de los tipos de capacida<les necesarias para
concebir y ilevar a cabo experimentos de ciclotrón. Esto explicaría al menos en
parte por qr,ré son tan eficientes para realizarlos.
Una vez que se empieza a pensar en estos térnlinos, inrnediatanente se Ie
ocurren a uno aplicaciones a otras c.iencias. Acaso pane de la razón de que 1a
biologia molecular avanzera tai.L rápicianente después. de1 desctlbrinie nir¡ ci¡
1a estructura del ADN sea simpiemente que ei hcinbre esiá tall bi:n ada¡-,tado
a pensar en función ce estructuras gecmétricas. En viitud de esta hipóiesis, 1o
que explica parte clel éxito de 1a biología molecular no es que la genética se haya
reducido a la química, sino a ia química estntctural.E
que húce
así conlc una visita' más ¡eciente
auicinóviles que visité en ini niñez' ptttu Lo-que evocó esos recu-erdos
a la planta hicioelécrr;ra áe lu '''{ccver' de gianCes rnáquinas juetc
La visión
fueron visiones, sorridos ,-nuutuio'tt'
sus creador¿s v áptt'¿"ttt resultan insi grrificantes ' Eaterías de
a las c,-:ales
de grarrdes tra'rsíorn acoies ' el tran-
ainplificadores, e1 continuá ''"áii¿" del ozc'ro'
;ombas de '¡a'cío v el oior cel petió1eo v
;;J;;.1;; t,lTlLlt*"t debe sei una'ie las
La presencia ,p^t"ir:rnit'áJi."?1tl*
clel laboratcrio cientifico ;'l.r"1::::-Yl:::
características más signilica-'"ivas
de 1a ciencia contelxporanecs
;;;;;:l;;;lt-iacioás, fl1ósoiospoto scció1ogcsahora r-esistiré a la tentación
rJe especular
rara vez mencicnan t"u"']'u't'
,"*. o':::"
;;; . J.;es cle su a's"i¿o',I- el-poslclon' ::,::t :
i-ogan cle la ciencia que resuiia cle su ;i'::::.":XiTJ;f:ffiii
iCeas'9
riráo^uinas nlrevas que de las nuevas
CeoenCe en igual meoicia cie las denr'ro ce la ciencia es
Fi olvirlo crel papel o;t ;tt;ñ;;a la tecnología dE la ciencia está la de
C'urareias
baslante reciente' sni" iut irnagtr'ts 'ás
que se l-''Isieniaba comlLnment:' "l'"-1t1'
Galileo ccn su telescopio ' Úna opinión
ta cie que Iosinstrurnentos son extenslones
.1-r"r" tr.f. pasarsc por alio' ha iido ver a
c1e los seniidos creaclas
pot'ti no*¡" i-o quq las nersonas nc oodían
la ai"uáa tit ttit""pic' Lii p'r¡to de
sinrple vista, Galiieo p"ái; ':;;b;;n "t lo qut
que esla t,a¿iti¿n tepió una iciea impo.riarte Es la tecnclogía
vista es cle 1a
la conexión t;;;;;";^; capacid-ade s sensoriales )'ei mtLnclc
constituyc
clencla
a
)
en unc de ios iunCamentos de 1a idea
) t.aiai;iienac de QLrine se convirtió
cientÍfico' Para é1 como para ia inayo-
a "ho1ística" de Quins tltl to'''oci'iento
.lu ¡riotiiietofis rnoderncs' el problema
de ia ciencia
de Duhem es consecuen-
) Pongamos que 'Firepresenta 1a hipótesis
cia de u¡ ssquema Iógicc n-luy sinple' y que
) Ia's hipótesis auxiliares iecesaria-s'
qi-re se está probanCo, q"t¿ áptt"nt-a
) Entcr:ces la lógica elemental nos
O representa las observaciones pieciichas'
) proporciona el sig:-riente esquema:
)
GíSLA) inrplica O' No-O'
Entonces' FIo--Ii o I'trc'-'4 '
)
) negativa, lic-O, es que rt c A
En resuri:n, el significadc oe la ob señ,zción
) cuál es falsa, ni Por cierio si arnbas
son iaisas '
es falsa; Pero es lrnp osible saber
) evid¿ntem enie a É1 Y -zi en Pie de
Esta formttla'ción del P robieina coloca Si
) ' que 1g ualrn ente 1;ueden ser fa-lsas'
igri:,lcad lógica. tr''nbas son "hip ó¡esis'
'¡i¿n ha constituido materia prlma de los filósofos, el probierna i:
Duhem-
)
lJ! sJ. r.-iia,:t,.\i f cn: ítlJii'. i'11'
ij L]1DE i.ciailierr-lenLrl ha sii'o esgt-i ;lt,..i.J prl i piopla
.
)
) t,f norr-Ceti¡ra 1' I*Lrl!:a,v i 983) en lrp oyc de s-.r Posicicn
a1 ci'tlpirismo era
D ¿iie (le mi crii,ica an-r-erior t:"nlo a' I co;rs¡ructivisr;-io comc
) sobre la reaiiia'C de los prctones
y
) q r,re confier¿n cat.:goiía sirnilai a ics a suntos l.-. '1-ra1- n i(:
nu clcl¡. Fe¡c rr¡r
a los asrintcs sobre la r¿alidad d¿ ia es"¡ticl"il¿
P¡ uLv.¡?-l
)
) neu!'os asoectos dei rnr-rndo De
nás detalla,lcs conforrne varnos riescubriendo pcr nuestros
sisiemas ce la realicla'd cubiertc
;;;;ii".-r, crece ei campc de lcstecnología empleacia' e1 labcratc¡io' en tanio
rrodelos. Fero si pensaiios en 1a
ceracLer\zat tina dinelsiÓn tcte !-
conocimienio incorporado, nos permite
mente dilerente del piogreso cientíiicc '
teóri'cas de las partícuias' l'os
Alguna vez el protón t"t"'o t-'tt" las más
reaji<ia'c1 de un objero asi' Ahi-'ra
ei
cientíiicos tenían serias d;;Jt";;t la oiras
tt;" Jomesticado v'uncido al equipo que se usa para invesligar
;;;;;;;;. de ctiscare del núc1eo'
paitículas y estructuras: q"ítt, tf"<lrr es,v 11 1t-o-d^eto a los instrumentos Ce
queda incorporaclo
AsÍ, parte de lo que "p"tllf t*o''f'-oy
un progreso in¡egable de una índole
investiga.ción cie maÍiana' Esc constituye
rnr-ry diie renie e imPor:anie'
a
..-'
)
)
)
)
t
)
t
)
)
a ó. E:- cRiT ¿r,RlG CiE I'iTítrícc
)
)
) FcRi'?iA reestringiCa de reaiisrio' el
EN pÁciNAS ANTERIORES DESCRIBí LII'{A y no
es conóeptualmente cohelente
) realismo constructivo que, según afi¡mé, que esi:e mcCeio
) .r..1" ..tbvialnenle f^ftil- ¡" ttg*io ttté de cj-e;i-tostrar
"i de pÍotones y neutroíles
)
",
realista encaja en ull caso cientííico central' ei uso
Esta d'iiiosiración soslayó todos
) cornc calas en 1a iísica,,,a1* experinenial'
de probar que las hipóresis
los aigu,,nerrtos filosó¡cos áeé1, gr. tiatan
) tengan sentiCo no tien¿n iustilicación
realistamente inierpreiadas, ""t *u"áo
) p"ri¡i.. ioi¿i-s a-celiltg en ¡tte capítuo' exa¡rinaré va¡ios de esos 3'r-
'ttismo
) gurnellics' :: dii::ente' i'lo iccios io:;
) il ,¡t'ii:lii-,ai piobieni qii:r aicra lcs ccli-¡ill'tr €
) mocieiosteóricosqueloscje¡..lilcc¡acep!aIaci.i¡aitr¿nieCrjrllr]ai)ioxi.¡.ad:r.
experi'rel-,1a1 existeiite '
) *anr" .o.r.aros esia¡¿in inccrpot aios a ia tecnoicgía teóricc: licgan a gczu
rlol:e i¡:
) Esio suscita el problena Ct có"]c 'slcs c¡rl-tt
nal¡'rra'iisia en consci:ari-
aa a,,rapru.iOn ielera.' Lo desea-bl* es uiia' =:<pliaciÓn
)
ciac.onelpensamientoaclualcielascisrrci¡-scognosciii.ias.prcblema quedaiá ba'j; c1
) Dentro cj.e 1as ciencias cognoscitivas' nuesiio
- encabezado general ¿.r.'itt'i"o átl hombre'
Y' ciertarnente' parte de 1a invesri-
gr.i¿. ." t"áo al c.iterio c;ii-'o*¡" será' peitinente a
É nuestros
"b]:lil:l::,'^"
enloque a- un caso especiai
ra, embargo, descle el prin.ipio *t gusiaiía limita¡.el
!¡ P'sí pues' nuestro tema no es e1
de crit;rio; a saber: t,. táÁ'- i"'¿'cisiones'
) criterio cientiiico ." g""tta, lt to*u de decisiones cientíiica-s'l
'i"o
L.
-, QUE TCMADECISIo¡IES
I-cs cier.liíl'tcos covío GENTE
a
-
La principal razón que terrgc para restrilgir ei
enfoque d-ei criteiio a" Ia tcma
aa: desarrollado cie conceptos
á. á..irion., es que existe Jn ion.!,-,.nto suÉarnen¡e
), Pa¡atratar ciel crite¡io
y principics paiu prrrru, uttou átiu to*u ¿t Cecisiones-
!: en geaeral no existen .";;;* comparablerne:rte bien desa¡roilados' Sin
a. emba::go, aunque fu -"vot1o de los estudiantes
cle ciencia' y aun Ios his-
l.: toriadcresysocióicgosLu¡tu,tto'latura-iiCaddequeloscieniificos"eligen"
, ,deciden,, que cieito rnodelc es constituyen
coirecic, ios f,riósofos
É: una teoría á
I.'
ti73l
-l
Fó.
iJ.l LA E)(PI iC}.CIÓN I¡ I-¿ CIENCIA
í
a
a,
)',
):
)',,
), EL CRiTERiO CIEIiTIFICO 175
a¡
tfi
ai },I1oopi-os DE DECISIo}'I BASiCoS
.l La may.lría Ce las explicaciones de ia tcma de decisiones, ya sÉan descripiivas
)',
o normaiivas, comparien un núcleo común: un modelo de ia estructura de las
)', decisiones. Si bien es extrao¡dinarianienie sirnple, el modelo es rie gran utiii-
)i )^s
); El modelo básico costa de :urt agente y urt u-niverso . Se supone que el agente
): es capaz de diversas accícnes, incluida la de elegir entre posi'oies curscs de
a, acción llamado s opcion es. P ara que s e dé una decisi ón no trivial, el agente deb e
), iener a su disposición cuando menos dos opciones riiferentes. No habiendo
a, opciones, nc habrá decisiones que tomar.
Conforme a este modelo de toma de decisiones, ei universc es como 1o
)
conocemos. Y 1o que ocurre al ageirte depende de cómc es ei universo. Para
a, que la dccisión tenga alguna importancis. se suponi que 1o que ocurre a1 agente
) depende también de qué opción elija éste. Si el resultaCo de la eiección es el
a l-,-LisrrLo ind:p:rr ciiente rnente de 1o qua haga el agertr, el p;:cbieina de clecisión
a nui\ i :i.inLe rc)ulia tlivi¡-1.
hdemás, el incdelo presupone que el a-genle no es omnisciente. En r.,a-rlicuiar,
)
a el ageriie no coiioce la ccndición actual del niundo. Sin el-rbargc, ei modeio
supoiie que el:rgente puede especificar cuanlo menos dos ccrrdicicnes posibles
)
dcl rnunrio. Así, aunque el agente desconozca e;r ciué i,:onCición se encuerLira
) actuai¡nente el uni.,,erso, sí sabe de varios esiados en que éste puecie esrar.
) Es¡e modelo sinple de torna- de decisicnes impcne imp.lriantis restriccicnes
) ta-nto al conjunto de opciones disponibles para el agente como a los posibles
a
)
estados del universo. ¡\mbos conjuntos deben forn,.rlarse C.e suerte que sean a
nn tiempo exclt.tsivos y exhattsíitos. Fs decir, el modelo supone que el agente
aa está encargado de elegir una y sólo una de 1as opciones. l¿iás aún, cualquiera
) que sea la opción elegida, el agent.-, termina en uno y sólo uno de los esiados
) asignados ciel universo.
a La estructura del tipo más simple cle ciecisicnes no triviales permitido por
este mocielo puede verse en 1a matriz de la figura 6. i. Esla estructura aciara la
aa
a
a {J EST,ADC.J PCSiBLES
) C
a o
I
s1 s2
a ¡,t \ t
a E
q
il
1
)
a RE§ULT.¿"ECS
es una ciiaria
noción del resultado .je elegir una cpciÓn par-ticu1ar. un res¡-rltaclo
opció:r específica en un
cpción-estado. Es decir, ccnsiste en haber eie-qidc una
la
uiiu:rso ca¡acterizaCo po.jrro de ics estacics posibles. D¿ esia. rnant¡a,
cr,ecisión representada en una Í,aLrtz &e cos
pcr ios tiene cuatro po:ibi:s
posibles estados t¡nd¡á
resultados. En general, ltna decisión con zzl opclones ;r 'a
¡n x n resuite.clos Pcsibles '
E'imoceiodetomadedecisioneshastaaquípresenladoestárelativanente
exentOciecontroversia,aunqueiesuliagre'retn"nieinccmpiet'C'Porejemplo'
?
a
.
a
) EL cRtrERio ciENTiFlco rlT
),
a
; no piovee ninguna estructura para incorporar infor¡nación nueva del tipo
que
f.
-
a
(Iiacking 1975).
-
a
ii| LA E.;i,--LiCACIÓ'"i DE i A CiEl'iCiA á
que e1
paia. poner de naiiiiestc el sigdficadc ie esie ax-ioma, supongsmas É
resuiiados son {1) ulla
ag.lte es una perscna ¡orinai corio usted y que ics t'es A
ernpañada tan sóio por
y
uiou iu.gu y ril*C"bir; (2) r:na viCa larga saiud'ab1e
úlce¡as; (3) una vida H
c.ad
t1;;;;.; pádeciniento crónico co¡ cie¡ia rendencia a lasdirecta ciel a-rion', a que
iorc;.orl ur, ¿olo¡ coniinuc i,niserabie. conse-cueacia
;;;;;;;.;t que e;<iste cierta prcbabiiidad iníerior a la unidad de que tsted
p..f"r"-i, mezcla picbabiiístiia de 1 y 3 a Ia ceriidurnbie dea 2' ¿Será éste su
;;;;t ¿,'j" preferirL usted la seguridad del padecimiento leve la prcbabiliclad
vida proiongada V mi-se;
a
7
finita, sin ii-nportar que tan pt-óxi-o a cero de una
rable? ¿Por c1ué arriesgarse á sul¡ir algo terribie
irá
tan sólo pcr la probabiiidad
i-po", cuán próxima a la unidad) de oblener una ligera mejoria de
ia a
7
propiá-óndición? /
'-- p". postulai'r una est'uctura tan
i"¿, entcnces, los teóricos bayesianos
.onlpi.ñ.n cierto sentido tan contraria a la intuición' pa¡a las
pieferencias a
deiagenie?Porquelacompiejida.desnecesariaparaalcanzallasol'.-rció¡.rde
deseacla cle lo que gener.l*tntt tt tonsidera
como el problerna fundament¡l a
-
)
) El papel de la inforincición nueva
)
) tsIasta aho¡a nc hay naCa en el mcdelo fundamental de la tcna de decisioires,
ni en su variante ba,vesiana, o,.: : r:qui:ra que el a gcr te sea cie ¡.itíiicc, ni siquiera
)
a {l,t: !--. l¡i SOIi-, i;:.lividt,:. irOi:¡. Sei i¡.uil..icnle uil.qrl-liiJ, a,CaSO tOCC un
c.-.iijp.J .1e ra ci:ncia. Pe ro s;aiitos algo r:tás espe cíficos e irrie i!f itcncs il egri,.ie
) rlclr-ro :-l:i 1;:arl-,¡e Ce ciencia, cigr.inos u¡l iísico nuciear exp;dirental.
) Sup,.:nga-mos, acie¡:rás, que nuestro hoilibre cie cierrcie l3la consirlerandc dcs
) mcCe1os.1;ieieltrs y bien oeíir:idos de cierio proceso nuclear. IJiro de ellos es
) i:;i niodrlo "itorriai", S, ;, ci ctlc ut-: iradilo "nuev,c,,, D. Las cpcicre:; que
a se Llresentan a- nilesiro hcmbie de cierrcia. prie oen entoirc¿s iar-¡pieiarse comc:
a (A) e.ccaLar ei r-r'cCelc normal como l¿ mejoi representación clel proceso, o (g)
acepta-. el r:cdelo nllevo cotno la n.jr,¡ iel re j,.tr i ación clei proceso. Los cios
- e:tados posibies del universo, entonces, scn que o bien ei moclelo nci¡¡al
- iepres.nta n-rejor el proceso actual, o que es el modelc nuevo el que rnej or ic
) reirreseilta. El probl:na cie decisión resultanie se iepresenta_ en la figura 5.2.
)
- N SE AJUSTA. D SE AJUS-IA
- ilIEJOR fu,]EJOR
- ELEGIN N
)
!-l Elali) -'
-
)
a Figura 6.2 Representación de un problema de decisión cieniÍfica al elegir entre dcs
a modelos.
a Pueds ve¡se fácil¡:iente que Ia niatriz sirnple de dos pcr dos ce ia fi¡arc.6.2
- bien podrÍa ser ins;-iiiciente paia ¡e.cr3seiiia. ia- ve¡dacera situación de decisió1.
)
) El rcod,:ic de cecisión bayesialo re:ulta-lrte supcne que nues,io hcnib¡e de
cieaci: esta¡á precispr-r:sto a eiegir urro r: ct¡o ce ios dos ¡¡rodelos aua siri ccnt¿¿
)
-
E
!t..r*'r"tious
ii
del
d.d
universo
en gardo
^"
A Ia lirga'
suficienre
i
"'-11
las uttlt i:dt":::;:?Hl
para que e1 científico ba-t'esiano
sea §r
ciones porirán cambiar v a elegir comc
correcto alguno
lievado a abanao"u' iu'ulil;il',;t;;;;j;rio
t
de los modeios Propueslos '
a *--
)="
NluchosdelensoleSiiloSóficosdelosmétodosbayesianos,comoJeffrey(1956,
1965,1985)prefierennoconsiceralaloscienrílicoscomomodeiosdeelección
al universo
en cuanto a decidir que un modelo en particular se ajusta mejor
que alguien ha decidido que
que cualquier otro. La razón de ello es que una vez
un cierto modelo es el colrecto, parecería que esa persona se víera obligada
a
considerar e1 modelo como colreclo en cualquier olra situación' Sin embargo,
esa persona sabe muy biéh que el modelo elegido
puede no ser correcto y'
ciertamente, con anterioridad le asignó una probabilidad positiva a la
even-
tualidad de qrie no Io fuera. Así, sería posible que el agente se encontrara
en
proba-
una siluación nueva en que maümizar su utilidad esperaCa usando las
bilidades originales lo llevara a una elección, mientras que aceplar simplemenle
la hipótesis como verdadeir: (asignándole en efecto la probabilidad de uno) Io
ti: Pcke r
Et paroclignta tJe ta balso cle Jichcts
95/05
'rJ
pa: €0/10
_o
(ó
-c
o e5/ t5
o-
o
-o
E0/20
C
,c
N 7-¡l30
rf 65/35
60/40
55/45
? 1 2 3 4 5 6 7 I I 10 11 12
40/60
35/65
3AnA
que ios
siano ideal, el ser humano no revisa sus juicios en Ia rnedida en
justilicarÍaniosdaros.sinembargo,investigadoresnrásrecienteshansaca.io
una conclusión más radica-l: " ln su evaiuación de lcs datos ' el hcmbre ai
parecer no es un conservador bayesiano: nc es bayesianc en lo absoiuto"
1Kuhn.*un, SIovic 1'Tversky 1932, 4ó)'
obtuvo
Linda tiene 3 I años de edad, es soitera, extrovertida y muy briilante'
su licenciatura en filosofía. Cuando era estudiante estaba
muy preocupada
por la discriminación y la justicia social y participaba en las manifestaciones
antinucleares.
probabilidad'
Jerarquice los siguientes enunciados de acuerdo con su
asignando 1 ai más probable y E al menos probable '
a) Linda es maestra de primaria' (5 '2)
á) Linda trabaja en una librería y toma clases de
yoga' (3 '3)
.j Lit a, es activista de1 movimiento feminista' (2' 1)
(3' 1)
d) Linda es trabajadora social psiquiátrica'
.j Linau es miembro de 1a Liga Ce Mujeres Sufragistas' (5'4)
/) Linda es empleada de banco' (5'2)
g) Linda es vendedora de seguros' (6'4)
feminista. (,1.1)
7i lin¿o., empleada de banio y acrivista del movirniento
jerarquía media asignada a las
Los números entre paréntesis represenlan 1a
3
-
i
!
I
naturales ciel juicio, cualesquiera que estos pueC'an ser'
1Eó L¿\ EXPLICACIÓ¡i C¡ I-¿ C1ENCTA :
E! diag;tósilco médlco
que cperan en su propic
Pod¡ía ssperarse que ios científicos expeiimeniaclcs inexperlos o
sean i;:'ej cre s bayesianos que 1cs sujeics
"ar¡ro iees¡ecialidadpr.putuAát a quienes. se les presentan ejempios Ce todos
¡
decuarioaño,2cresidentesy2)asistentesmécicos,selespiciórespcnderalo t
i! =, 1000
I
PRUEBA DE
DiAGi']ÓSTiCO
50
¿\ q
I
POSiTIVO NEGATIVO
por
prueba diagnóstica con falsos positivos de cinco
Figura 6.4 F'epresentación de una
cre nt o.
a
á
a) 8590 de Ios ta-xis de la cinda-d son verdes y i59o azules-
b) Lin testigo identificó el taxi como azui. El t¡ibuna.l puso a prueba 1a
confiabilidad de1 testigo bajo las mismas circunsta¡rcias que imperaban 1a
F ncche Cel accidente y concluyó que el testigo identiñcaba correctarnente
¡. uno de ios dos coiores el 80% de 1as veces y fallaba el20Vo.
a
É
ca,cia
¿Cuál es la probabilidad de que e1 taxi involucrado en el accidente ha,va
sicio azul y r:o .rercie?
a
a En la rna-yor paiie de los experiroeltcs con va¡i;-cicnes scb¡e esie tema, la
t
I88 LA EXPLICACIÓ}.I DE L-{ CIENCIA
ie un agente ba;'esiano'
Ei típico hornbre de ciencia rnoderno no es abienairle
estimaciones de Ias proba-
Los lísicos nucieares por ejemplo, nunca pr-rblican con ot¡as'
¡iii¿o¿., de que una hipóteiis sea verdadera en comparación
obligado de las revistas
ir*po." es áste tan sólo el resultado del estilo como bayesianos' ni siquiera
científicas. Los científlcos nucleares no hablan
ensusmomentosinlormales.Quienesrrsandescriplivamentelosmodelos
de hecho "bayesianos
Ulv*iuno, habrán ¿" ^tir*at qitt los cientílicos son y de la metodoloSía
intuitivos" independiente-t"t"'tf t 1os que puedan
decir
pretensión de que los científicos
á. q* r.un partidarios. Es precisamenie Ia arriba
t"" U.yesianos int-t-titiuot lo que refuian los estudios empíricos
"pli"t
descritos.
Unama.neradenegalestalefutaciónesinsistirenquelossujetosestudiacos
de- ia totalidad de los científicos '
en estos experimenios .ro ,o,'
"pttttntaiivos
ccnducta muy difícil de mantener' En muchos
li*"*t*áo, .r, ., u.," lít"a de Con una prepaiación científic'a
ce estos experimentos r'u,l i.,re.,.ni¿o sujetos
considerable en el uso de
muy completa, incluso mucttos con expeiencia
qué Ios,físicos, geó1ogos y.b.ió1ogos
métodcs d-e probabilidad y estadística. ¿Por
habríandeserdiferentes?Ciertamente,laeducaciónenlascienciasfísicaspor
muestreo estadís-
i" g....¡ n o iomprende."r.o, ¿" estadística, inferencia niparezca haber sido
ticos. Así pues, aunque ningunc cie estos experimentos
como suj?tos, no hay r'.:ón
realizacic ccrt cientílicos pialticantes de la física
manera muy d'ifererrte'
para sospecha, q'u. ..tor l. habrían desempeñado de
i9C LA E;<PLiCACIO¡.I DE LA CIENCiA
Adviértase q'"ie esto no equivaie a negaÍ que los físicos entienCan la teoija ¡
F
-
U
Los iv;opplos sATisFACCioNISThs
-
Rechaza¡ la e;<plicación bai'esiana cle Ia tecría de la elección no signitica Y
-
abandona¡ toda explicación .eórica de ia decisión acerca de córno Ics científicos I
eligen uno u otro modelo. Significa simplemenle que tendremos que emplear
El
aiguna forma descriptivamente más adecuada de llenar el modelo de decisión
J
básico desan"ollado con antericridad. Un buen candidato de empleo mejor fue
U
desarrollado hace cua¡enta arlos por Herbert A. Simon en el contexto de la
administ¡ación de empresas (Simon 1945, 1957, 1979, 1983; March y Simol JÉJ
1ri 8).
ri
La racion alidad Iimitada
rr
.J
Simon comenzó por ccnsiderar itn moCelo Ce agente idealmente ¡acicnai ccmc
?
U
el usado en la economía clásica. Tal ágente es idealmente racioíIal en dos
senticlos. Primero, conoce todas las opciones que fÍsicamente (o incluso lógica-
menle) se le presenian, y conoce todos los estados físicamente (o inciuso
lógicamente) posibles del universc que pueden ser pertinentes a su decisión.
Segundc, como el agenle bayesiano tiene una estructura de preierencias cohe-
EL CRITERIO CIENTIFICO I91
El satisfo.ccionísmo
P zrz eopezar por e1 casc más iácil, ¿qué ccr:rre si existe más de una opción
satisfactoria? Pues'bien. si toCa,s y cada uria de las opciones son satisiac-
i92 LA EXPLICACIÓN DE LA CIENCI.{
"-";;;;;;t;,
satisfactoria.
de satisfac-
podría decirse muclio más acerca de ias estrategias
apreciarse mejor en el contexto
ción, p-ero 1as elaboraciones ulteriores podrán
icos '
más concreto de la elección de modelos científ
a
)
)
)
a
)
a EL CRITERIC CIENTÍFICO )9J
)
a los seres hunanos?
a ¿Somos sat isiaccio nistas
a
- .o*putadora. Este úitimo método consiste enelaborar programas-de compu-
programa
a
j
tadora usando principios satisfaccionistas y poniendo en marcha el
para r/er si puede simular el corrportamiento ajedresístico de un
jugador' En
a
-v
distinguen muy pcbremente enire .los diversos iac¡o¡es que influyen en su -
juicio. como los cientificos tienen obviamente tanto intereses profesicnales
.l
cor¡o sociales, cualquier modelo de tcma de decisiones científicas que restrin-
t
giera la consideración a algún conjunto supuesto cle "valores cientificos,,
tendría poca oportunidad de ajustarse a los actos de los vercladeros cien- taf
tificos. Y no es que se deban pasar por alto las supuestas virtudes "cientíli-
cas". Simplemente deben ocupar su l.;gar junto a otros tipos de valc¡es o in_ J-f
tereses.
lmpugnar los intentos de segregar supuestcs valores científicos respecto cie t
otros tipos de intereses está en gran consonancia con ál espÍritu de ios modelos
-
ce satisfacción en la toma de decisiones. Así como nuestro r-nodelo de toma cle
-
decisiones científicas no puede hacer exigencias descabeliadas a la capaciclarj q
de los cienlÍñcos para reunir y asimilar información, tampoco puede hacer a
exigencias ciescabelladas a la capacidaci de los cisntíficos para disringuir 1as
ri
infl,encias de todos los iistinros valores e intereses que ind,ciablemenre
influyen incluso en Ias clecisiones cienrífrcas,,más puras,,.
I
iT
-
¡ l
I
a
Fr
t
)
a FL C R.ITEiT.IO CIENTii:1CO I97
{
a
) Ei cienttfico cle nten te ntínimamente abierttt
a, considera al cien-
ü. .Liasta aquÍ, nuestlo rnodelo de toma decisicnes científicas
por io demás
ü tífi.o qr. ru1ora más los resultados correctos que 10s errcies' pero
a .¡ ii¡r. a. asignar cualquier jerarquía o medida a los resultados de
decisión. Sin
la matriz de
embargo, esta libertad no es congruente con las estrategias
) de satisfacción. Aplicai una estra,tegia da satislacción impone
ia restricción
adicional de que los ¡esultados que representan decisiones correctas
ü sean
* isfectorios
consideiados iotr,,o satisfactorios, erttanto que se consideran insot
ai ios que iepresentan declsiones incorrectas '
.i,i Esta no es una restricción tril'ial. Podemos imaginar a un científico -cuya
carrera y habilidades esté tan ligadas a un cierto mcdelo
que rechazarlo haría
)i
,i)i
imposibie que continuaia ejerciendo su proiesión' Un científico
pcáría consiCerar que,tingrin resultado relacionado con la aceplación
así bien
del
es aceptar
modelo rival puede ssr sarisiacrorio. Ei único resulta¿o satisfaciorio
ei modelo favorito. Esto podría retratar el caso de famosos
"reacios" ccmo
): riespr'rés Ce que la
Piiestllr, qtiienes sig'-iier-on acepianclc s"l ailliguo nucilo
)l r,ra¡.'oría ie sus cciegas io h:Lbian abanj'o;l:.'do'
)'
)i S SE AJUSTA D SE AJUSTA
)i ¡/1Ei O¡l l'. iI:.J !-r r I
i
evidrinteriente,nceslascitición'Cciltcdo'Duedenbt'scarsecir¡'asopcioles'
introi'r-rciendo
Y, .ir.tu*.nt., 1a sit,.ración pcdría remediarse-superiiciai¡nente
Ia opción adicional de sust'ender e1
julcio' El modeio resui¡ante Ce tc¡na' de I
l
U
- opciones esenciales.
enire para el que
¡
d
iu.rtrr,.gia que quecla para enirentar un problema cie decisión
no existe opciÓn saiislactoria es la de buscar información
nueva' Ésta es eviden- L¡
fJ
ternente una estrategia pertinente en el contexto
científico ' EI problema es deter-
qué tipo de datos se req'rieren y de qué manera modilican
e1 problema cie U
minar
ciecisión haclendo de Ia eleccón de un rnodelo
una opción saiisfactoria' ri
!f
Fr
Co gi; ició rt e in t ereses I
¡f!
Las anteriores consideraciones nos mueslran
que no necesita existir conflicto
asoci¿rdas con
olt,. lo teoría cognoscitlva cie la ciencia ,v las teorías del inierésde decisiones al
!r
e
la escue 1a de Edimbr.irgo. En realidad, el
enloque de la teoría
.,tu,lio clel juicio científico nos brinda una manera de conferir
esrructura y g
d
precisiónalasexplicacionesdelosacontecimientoscientÍficosqueseapoyan
e los "intereses". De estamanera, 1o h asta aquí planteado puede consider
ars e tJ
como una forma de{eoria del interés'
han asociado con teorías
Elconflicto surge por virtud de doctrinas que se
Ia teoría'rel interés en cuanto tal'
del interés, pero que no son esencio les para
Estas doctrinas son el antirrealismo
y el relativismo' Sin embargo' no es
.*".ia para ia leo¡ía del interás que nc exista nacla como una clecisión
rep resentacio nalmente correcta,
ni que 1os cientiiicos no tengan inlerés en
al Lo esencial es que los hcmbres
acerter desde el punto de vista representacion '
y que estos desempeñen un papel
de ciencia tengan también otlos intereses
teoría cognosciti'ra de 1a
;p;;;;";. en"sus decisiones' Según entiendo' una inlereses' Si lo hiciera'
ciencia no necesita negar 1a impoitancia de estcs ctrcs
no podría ser una teoría adecuada'
- este arreglo.
a SlSTElvlA DE INTERES
ta
a
r¡
ra
i
a
a ,/R
a ESULTADO
¡ RS RD
a
a INTERVALO DE RESULTADOS POSIBLES
a
a Figura 6.6 Rep¡esentación esquemática de una prueba experimental con intervalos
sistema
a espacia-dcs de resuliados posibles para dos modelos diferentes del
a de intereses.
a
2CO I-.I. EXPLICAC1ÓN DE LA CiENCiA
En este caso varnos rnás aiiá de1 mcdelc originai ce simon sÓlo en Ia ¡ned.ia
en que ahora enfrentarnos ün probabilidad alla de alcanzar un resultacio
sati;lacloric, no con el resuitaic en sí. Por 1o tanto, 1os valores cle ia na-lriz
a
"r
son valores esperados, produclo de la utilidad 1' la probabilidad. Esto signilica
d
que tanto los niveles de saiislacción originaies coino las probabilidades basadas
Et
en el rnodelo para obtener resultados en la gana predicha tenclrán que ser d
I
suficientemente altos. Ds otra forma el valor esperaCo de un resultado original-
mente satisfactorio puede de.jar de ser s3-tisiactorio' u
-É
Haciénclcle j usiicia a lv{urPhY rEr
.T
Los hsicos r¡e han dicho qUe la iey de Murphy para ios experiment al isras d.ice
clue los clatos que se obtienen son sientpre lo ¡nenos infoi-¡nativos
que se pucde. 4
d
d
CJ
ü¡
.{
EL CRITEI" IO CIENT]IJiCO 20I
ri
De ser esto cieÍic, esperaríamos que los datos Ce nuestra prueba experimental
ima-ginaria resuita¡án dentro de alguna región de resuitarlos posibles diferentes
de R.S o RD, digamos justa-'nenle entre esias dcs regiones. La regl"z- de decisión
supiementaiia a¡riba anunciada no aba¡ca esie caso. A rni juicio, si uno obtiene
en efecto el ¡esultad o de l,4urphy, el prcblema de decisión, según sea formulado,
se vueive i:rcper-ante. Por decirlc Ce aiguna- rnaiera, "vuelve el borraCor". I
Laexplicación s atis faccionista de cómo los cientílicos eligen un modelo cumP19 cioni.
. .naturali'lt ..realista,,. Apela única-.¡ i..n
con 1a condición de ser tanto a,, Como
u estrategias natura,les de decisión
y permite que las hipólesis se eniien- ur1'r'
-.nr. I I'
dan de manera realista.
En este punto vaie la pena detenerse a considerar
varias objeciones iilcsó- 1"tr.
entre el enfoque de satisfa'cción 4 t G¿ r.
ficas puestc qr"le ponen de relier,e diferencias
más comunes' 'los er
la elección de teorías y los enfoques filosóficos
)
de , ,existir,,) un tercer modelo que lo haga. La conclusión es
- que cualquier
)
l.La decisión de aceptar D como el modelo que propcrciona el me.ior ajuste'
base en e1 resultado experimental CRD, nc esf tÍ justificada '
con
a
- nuevamente a insistir en una norma de justilicación que exije descartar todos
los otros casos lógicamenie posibles.
Los satisfaccio nistas simpiernente no se preocupan de tales posibilidades
a
-
r¡
abstraclas de error. Si alguien tuviera que desarrclla¡ un modelo como T, en-
tonces uno podría tratar de idear un experimenic diferente que ayudara a decidir
entre D y T. No habiendo ningún otro mo,leio erplÍcito, se acepta la posibilidac
de que unc se ha equivocado gravemente a pesal de sus mejcres esfuerzos.
r¡ ¿
a
r¡
Ent¡e los argur=nentos recientes en contra del rea-lismo hay uno riru;v semejante
al famosc argunento de Hurne contra. la j ustifica'oiiidad de la inducción
É
1C r : i',', r i
j;i:
l¿ ;j;Í :.i :
j"
i.t,Í;t ; ;. ?r;:i; !I "-': ;:';: ;l ttr
tr-D
q ;t'*r,:'s:t',x':'""':F; d
c,rii.rcipio de inieiencta
ffi * c'':1
''
:::;, H l:i::
r''-.i'ii
vttli'"='.i ';-:^--;;
bastante iazón) que es
I;';ii,á
v
o;. á.;
un tonc
.''
"';:
1'.
nres*nia en
.,ta1
., á;
uiro corr.luye
^,'-'
Ce voz
(con
tu
¿
a pr¡ir cle Ia me;c: e:' ¡iicac
-',1'
ión'' ' Ptto i:''-,p::9. iniere¡.cia? La respues:; **
r*h: eir':rs.citttvo"¿t tl '111[::ilJt'.:;'rtJ:T.if .-;i ff i::; :3 i;1 I ; ; ;r ;; ;
#;' ;'
ie i ien ci¿
F
uht{iprin'ipio ' Sin
; : :: : rú
al,-ts'"tr ese
inferencia cuva i't::"i;:;,".tpiJ.
I
principio
r¡ar'o del mismo
de
una peircto i
tt ¿ri p"t',
ccns iituve alD
ij",:;,;i. ;;;;*'itu "utitt' es dar. alg'una oiraiesDuesLa'
desaiíc que enlienta "1 "'J'tn
La r:spucsta realista t;;t;';;
e; decíinar el^i^ts:fio
re':iista
s¡brt la b:se ce q''i: r'c
cl¿ ia ciencir no requlerc
c?
tr
-
l-
f-o"in]tto"tttión
-La
cs rrsible en[retrt;rlo'
erplicación sa'lisiaccicnista muestra-
coino
.EE
ta-ies iustiiicaciont' tttti*u'' :' i'r:^iitsis re¿lis:¿ri':ri¡ iirt'':-
p :. 1:a ioiáí¡-: ttt
]jil]'
"":;;:;';ltt"
J-
Asiini¡¡¡,,1;Ij:j*;**ruxl,;'."'".;I;:::i
".. ie
lɡ--
p,c:,,as
;;: ;;
i:;: p-
xxlill'xii.,i:'::;:l;,; i,lr.r.n.iu"
i itl, l,::,1;.:.
que valict
,prin.ii-,io ¿.
Y
1L: §'5i,:'¿iil;;'i'i'
el paso /'cl i' l:o a i'r
j
ic
aoerarse a nin3ún
i;:;.;. Ñ;^;;?eja nada o¡:' n^ecesire ser
justiiicatio
p roporciore
FÉ
:sia
:;"i ¡;;;;';''i l*:i"'.
sin emb ar gc,
"'"':
tna respllesta uf tt-tufio nu"ta"o'
lu t"tf no ccnsliiu]-a petición de prlllciplc'
:"t"tuccioiiisia fl
L o s j u ic i c s ¿ e p r c ¡ a
saiisfaccionistar el sI
¡l i ¿'i¿ l: ; : : : l;:, 1:t ::,,:,,:, ;: 1,' :: ;' :i :,:.:' l ;' ::ij; : ;1
IllLiSll-'¡c¡ !ur¡iL¡L¿"!" ---'
.co qu3 +.ales juicios
puerlen tr¡ -¡
J
- estos modelos se ajustan mejor a Ics tipos de casos que nos ocupan.
Pcder echar rnarc de modelos probabilísticcs no siernpre es algo fácil; por
J
-
1o que inciuso los estadísticos avezadcs a veces cometen errores similares a 1cs
208 LÁ EXPI-ICr\C]Óiq P¡ L¡. CIE¡.¡CIA
Elfisico itttYi¡ivo
a c.abo recientemente experimen-
Uir buen número de investigadores ha llevado
para determinai su concepción cie fenórne-
tcis con estudian-ies cle prep-aratoria
nosmecánicossinplescomoiosqueseesiud'ianencursosdefísicae]ementa].la
investigadores no riieron ei menor inriicic de
estar il"'estigando
Estos
"*pá.iJr¿ el
á. ta.zonarniento de ios estudianies ' Conciben su objetivo corno
con sisteraas
á"i.r¡¡rrri.n,o de 1os modelos que la genre emplea al habérselas
inecánicos simples' Sin.*üttgo, en"el fonciá existe un modelo "normati-
podría esperarse'
r.-.i . ccrrecio": el de la n'..tát'ito new-ionia:ra Y' comodivergencias consi-
de;nostrarse
medianie experirientos ,nuy ienciltos puaden
derables respeclo del ¡noi¿lo de Ner"'tcn'
Unodelosmétcdosfavoritosdeeslainvestigaciónconsisteenpresei-]tarle
en un Ílomento dado y
ai sujeto ei dibujo de un sistema dinár'-ico Cetenielo
d¿i sistema En ia figura 6 7 se
;.;;1. ;r. dibuje e1 rr'rovimie:rto subsecuenie
n'iueii¡anclcsdee:iosCib'.r;os'Lasi¡ts''ruccicnesrespecli!'asfueron(ivfc-
Cioske¡' i933,3C0):-
cr-lrvo de l-1 tubo está visio
r;leial
En el diagraa'ra s. ve un tubc oelgaiicr -v
¡e uil.i,-iaflo. uria c3f3Íit
¿.ra. ur¡ool En c.rras pala',bras, ei i,-r-ü o esrá teld:cio sob
pcr ia flecha y se rii'rpara
!,e metal se ccioca en ei extreáo del tubo iniiicado
harii ei oiio exti eri,o dei tubo a grai-r velcciCa'J'
de la esfera al sai-ir
Las instrucciones generales eán di1_.ujar la trayectoria
del cLro e:ítremc <iei tubo.
f
.t
riiagramas
En un experi;nento, a 50 estudiantes se les presentaion cuatro
qr. ,.pr.r""i"ban sit-uaciones sii-aiLares ' De lc: 47 que cornpletaron el ejercicio'
cor'¡'
i5 no^habían tomado ningún curso de fÍsica de secundaria' 22 había¡t un cursc
pi.,uao un curso cie física de secundaria y 10 completaron al inenos
de fís ica en preParaioria.
recta al
La respuesta correcta, por suF'resto, es que 1a esfera sigue una iínea
salii del tubo. Sin enlcargo, i+ po. cieato de los examinados dibuja-ron
de estudiantes
tr ayectorias cu-n,as de la esleia al silir dei tiibc- De ios dibujcs
q]r. Ir" llevaron físicz, 49 poi cienio rrlcsliejcn trayectoíia§ cuivas ' Lc's
2i0 L.\ :IPLIC.,-ciÓ:; oE l q ciElrcl \
i4 pcr cier'to
porcentajes de 1os ctrcs dos
giupos í1e-rcL'l::Fectivañente' 34 -v
(I{cCioskey, Catamazzay Creen 1930' 1139)'
particular *"lr¿r-...r,, investigaciÓa qur:los "errores" scn
Resulta de
dibujaron t'rayectorias cuÍ'i'as ti:li'-Y::1
sisteroáticos. De los 25 ,,-,.i.ro, áu. r'razaton u¡'a cllivatu¡a i-lla'vor para ei
de la fig u-'-i 6'1 19
Ce los dos esquemas ' forn:'a de C' La hipótesis coosicierada es
tubc espiial que para a q'Jpt*tttl scr'¡-
cue escs estucianiestt'ü;;;; ;trrte un rnoclelo de ''i¡'ercia circir'ar"
en la Edad
mocelos r*;;;;-;;"
d.l postrt"uart 1os escolásticos
iante a los la esiera'
'-i;:^: üir;.";;;;tt'" í* tr-,,,"ui,,'itt"o que ha er'perimeniado
mayor será su írnPetu circula¡'
aquí.estas especulaciones' Lo
imporlante H
No es necesa¡io qt'tt p'o"g"*os
considerar esJ os errores como fallas
il
de
es oue nadle se sienta tt*^¿" a
Más bien, parecen
;:l;mffi á.Uü*l,,heu¡ísticas" delecruosas. hasia ciertc
"."*á
cierivados de apiicarun *o¿tto
inadecuado cuyas caract'e 'isiicas '
Dunto, son relevadas por los
expenmentos' EÉ¡
Una aciituc
pcsibiiidad de
similar
un
rt'""i"I l'itroi ae prou.abilidad pcdna con;iderar
,,modeio"¿. ,.0'r.r.^t"t,ividad'.' en que 1as probabilidac:s son
'Ltttgo
[a
fir
podrían invesrrsarse los porm:nores oe
iunción de 1a r.p""t'tut''iáud
este mcdelo v cómo tliiit;;;;i;t;delcs recibidos ie piobabilidad' Así nc Ér
-
iu
habría ia tentación dt h;;;;
át errores de "razonamientos" o "raciona-
I;J;' it;"tocimientc ciei mocleio apropiado' o el
lidad". H¿rbría tan sólo
-
hecho c1e no aPlicarlo '
U
-
El lógico ir;luirivo
La idea de que el
de ia racionalidad
razonamiento
'"
matemático o lógico ion 'li-Lui e ei
tt*onla cuando menos hasra PIatón '
ló;;;;;;-;;;forcionó la
pareii3nra
y fue por supueslo '
principal
'
inspiración a1
il
t.¡
I
ce selección" de P C' 'ujtLoi'
l" ii'itu y mátemática'. se les presentaron larjetas
ciatura con especialidad donde las á¡eas
tn tu figura 6 8'
como los reclángulos o;';;';;;tt'un oculla Las inslrucciones eran
de 1a tarjeta que esrá
so;nbreaCas indican la parle
119'20):
ias siguientes (Wason 1911 '
U
a-
I1
pa:-res o:uirat Jc c'ta' rarjclai
ncc¿\iia uste"1 para r:spor''Cer
¿Cuál clt las
EL CRITERIO CiE,).iTiFICO 2I I
a b
C d
-f
2"2 LA E,<PLICACIÓN DE LA CIENCIA
g,
¡
iY
I-a ana!ogíe de la contPutcción lEr
Aldiseñaryopetaicomputadorassehaceladistinciórrentreelsistenaopera.
tivo y lcs programas de trabajo' Naturaimente' ambos
pueden consislir en
F
iU
progru*u.i¿,i (software), peá tl sistema opetativo es más prcgramas' si
¡;Hi;;; el nexo entre e1 áquipo {lnrdutere) v tocos i'-; ctros
funCamental'
F'
I
ie
lr*¡i.r" ér. diseñar un ,obot-ci.ntíiico iCeal según 1os linearnientos filosóiicos
tracicionaies,lalÓgicaylaprobabilidadseharíanpa.r.tedelSistllnaoperai"ir'o.
F
itr
que diseñar un rob.oi más
La iísica seria un progru*l cie trabajo' Si hubiera Er
más pri;:niii'''o La'
pareciclo al ser hurnano, se uiiiizaría un sisterrLa operativc
iOeica, i" p.otabiiirlad y ia iísica constituirían
posterioraente I
progranas que se añadi::ían F
'-
En ¡, -aso del ser hurnano,
{soft "tore). Al menos
e1
pl-
sistena op3ratl\'o ncI es tan sólo los ' 3iaiii:'s
pr,',. át éste <iebe estar "integrado a los circuilos"'.ser
FF
ser qre r'ro'Smenios de la lógica''
pña..io á. la evolución. Ahcra bieIr, po'-l.ria '''
la geometría y la fÍsica ituyun intelra-" -de iguai
modo por vii*.'uC de ia f-
"
ávolución. Si esto es así, tenáríá qu. ,.ñn hallazgo
ernpírico y no e[ resuhaCo H
ie un análisis fllosóiico a priori'
'
E!
-r
Er
J
U
J
ü
tü
ü
ü
U
ú
ü
rf
e
e
f
J
s'
)
)
,
-
-
-
J
)
) 7. h,{CDELÜS Y EXPE,R.íh{E,}JTCS
)
)
)
) UNAvEZDESARROLLADOELiyloDEloSatisfaccionistadelcriieriocientÍ|rco,
Según mi propia
) d¿bemos considerar aho¡a si tiene aplicaciones interesantes '
) teoríadelaciencia,noesnecesariodemostrarquetodadecisióncientífica
a tomacia por cuaiquier cieniiÍlco, iliciuiC:s las decisiones
que suponen la elec-
ción de modelos, sea un ejemplo cle s atis faccionismo ' Basta
ccn que los
) modelos satisfaccionisias se ajuslen a alguncs cascs importantes,
que a veces
I? los científicos C¿ ca;:ne y hueso sean s atis iaccio nistas '
hacer
Eriste un as:tnto pre'rio e inciuso más dilícil que considerar' ¿Cómo
a
? para cieierinina¡ de ia ri:tjcr ma.r,era si un rnoC¡io sati: iacc ioljsta
se aiusia e
lor."ro. a,-tiéaticos cie to¡ia de d¿ci;iones cieillíiicas? Tai l'ez pciiría-n idearse
er,perimento: ccnfor¡,le a los lineanricitcs C:lcs rlalizaCos
pcr Iiahneman'
- en plena iabor'
É Slávic, lversky (1982) y iuego prot;arics corr los cielitíficcs
lr E,.prri..ntos ii,,,ilor., basaáos en Ia iarea de selección de lVascn
(i966) se
(Tweney y Yachanin
han rea.lizado con científicos en ejercicio de su profesión
- de Simcn
) i985; Griggs y Ransdeil 1936). 1-arnbién podría'mos seguir ei ejemplo
y ,r, .oláLo.a<1ores §erveit y S,*or' 1972; Ericsson y Simcn 1984) que
E presenta.ron escenarios fabricaclos a cienlíñcos y luego llevaron
a cabo el
trfi análisis de sus respuestas. Naturalm erte, rrto podría hacer todo
eso 1' más ' Y
yo no cuento con los
los resulta,dos po.Jrían ser inforillaiivcs. Sin embargo,
con el
- recurscs paia realizar taies investigacio rres ' Por 1o tanlo' empezaré
el ar-ráiisis Ce los
método tiadicicnal del histcriaCor o clel filósoIo de la ciencia:
-l escritos de los científicos. 1:demás, habiendo tenido accesc
prolcngado a
cientíiicos ciedicadcs a sus invest.igacicnes, p¡edo proporcionar
además el
"\12l BLANCO
fr
I'
,4 i-s
, DETEOTOR
,a
ü
I É
rL cl lE i\lTF
i-
ila
Figura 7. 1 Representación esquemática del
experimenio de Rutherfoid' fri
los fÍsicos han tendido a representar las
fuerzas rneCian- 7
Desde el siglc
,. .rño,
XIX
de potencial V a ttu¡tat de potenciales más
que de íuerzas' L¿s
matemáticasrelacionadas.onlo,.u*po,depotencialsonmuchomásfáci1es
rscuperables' Para nuestros fines' Lo
t
tJ
de manejar y las fuerzas sán lácilmenie
único que importa .. qu. io' fotenciales
positivcs corresponden a fuerzas cie J'-
esta snerte'
;.;;ir¿., y los potencialas negativcs' a fuerzas de atracción De
J
-
=
.{
)
)
)
)
a
)
¡/lODELCS Y EXPERIMENTOS 2r5
i-
?
,
Ei potencid óPlico nu-clear
por cuanio tiene
Ei caso que a-hora nos c..,'.ipa es parecido ai de Rutherlord'
,
) el proyectil interactúa con el
",*.r.rconlacolisiónelástica.l.rrruparticuiaposilivamentecargada(un
ir"r¿.> ccn un núcleo. En una colisión eiástica' de la inleracción se detecta
É ftun.o, peio no se emilen otras :-2'rtículas Despr-rés
(y no alguna otra partÍcula) Por el contrario' las reacciones
.iprov.iril
- ^isrno
(p, n) que se vie¡on en e1 capítulo 5, son inelásticas'
- Ce 1os potenciaies nuclea¡es de
r¡
j
E\ potetcial Óprico nucleores la ccnjunción
el potencial de coulomb, 1o que
toda_s'las partícuias dei núcieo. si descartamos
de
.*p.ii"r"",^ un protón que pasa por el núcleo es el potencial óptico nuciear
- dicho núcleo'
* determinar e1 poten-
Podría pensarse que es posible, ai menos en pnn(:ipio,
cornbinar los po-
-, cial óp-rico de cierto tipo áe núcleo simplemente mediante
-i
.i ieaciales de todos los nucleones' Sin erabargo' esto
no es posible' ni siquiera
en principio, puesto que todo los nucleones interactúan
entre sÍ' creando por
en 1a física ni 'v-
): consiguiente un problema de muchos cuerpos ' Ni siquiera
* tonia"naesposiblederivar,demane¡acerrada,unasolucióndinámicacornpieta
grav itacionales '
i
al problema de tres cuerpos someliCos únicamenle a fuerzas
)
I-omá:ques:puedehaceresescribirlaforir-radelostér¡ninosdeunaserie
) partir ce
infinita. Por lc tanto, cualquier derivación del potencial ópticc a
)
á
216 LA E:JLICACION DE i-A CIEiJCi:\
poiiriciales indi,,'iduales clebe ser ulz c.Draxí;'n ccl¿j.z obienida a pa¡tir de tr,tn- F:
t
ca¡ Ce una u otra for¡na la sede inii¡uta. En cotseluencia, toCcs lcs ncCeios
i,rndanentales Ce ia física nucles ii:coiporar aprcxirnacicnes explícitas. I'jc
exi s ; : ll m o C e i o s t o: al m e ¡l i e. e ; ¡ ; : i.,"ica C c s.
tr
',¿
En genera-l, los problemas de cueipos rnriitiples se "¡esuelven'' pasan,Jo por F-t
alto clases enreias de interaccicnes pcsibles. Así pues, la.ra cualquier tipc Ce
núclec existe tcda una familia de incdelos de sr-r pctencial óptico indicada po¡
cuáles interaccicnes pcsibies se incluyen (o excluyen) en su cá1cuio. El ¡nás
e
;-¡
s
simple de estcs r:rcdelcs, naluraiinente, es el que pasa por alto todas las 1-
inieiaccicnes entre los nuclecnes del núciec. A esa a.proxii-nación, conlorrne a
ia cuai se traia básir:amente al nr'tcleo como a un con.|unto de i-rucieones "cr-it-.si
libres", se Ie llana aproxiil1.ación de impuiso.
F
.Y
rf
r-
Modelcs ;,zo relativistas de Schroeclinger
=
Diiranre varios clece¡iics,llasia aired¿cior de 193C, el n-'odeio óptico estáaiar
era una iproximación de i¡-npr-riso basad:, en la ecnación Ce Schorceii¡g?r- paia
dos nuclecnes lib¡es. La ecuación cie Schrcedinger ccnstiru,ve una ai:ilogla en
g
'-¡
ia mecáncia cuániica de la segunCa iey cinética de Ne.,,. to n: lo que describe son
in¡eracc ion,'s dinár'rLicas eniie p artícu las atómicas. t:U
La ecuación de Sch¡oenCilg:r es fundamentalmente no relativista. I'Jo
saiisface las condiciones de inva¡ianza espacial y ternporal impuestas pcr la L¡
ieoría especial de la relati,¡iC¿d. Lo qre es i,.rás, no admite ia creación ni ia :-
aliquilación ie partícuias de corrfo¡rnidad ccn ia fa;nosa relación einsteliana t¡
entre masayenergía, E: nié. i
Pero sin duda los físicos cieben creer que los protones y lcs núcleos obedecerr
7
las leyes de ia teoría de la ¡elalii'idad. Además, podernos recordar, inciuso lcs
piolones cie 2C0 lvleV se mueven a la roitad Ce la veiocidad de ia luz, lc que es i.J
bastante rápido como ,Dara que resulten importanios las reiacicnes relativistas.
¿Cómc pcdría no ser relativista ei modeio estánd.a,r ? La respuesta colsta de
q
,(rrr.
dos partes.
En primer 1ugar, interviene un elerqenio i'n ás de aproxiracción, de pasal por
'?-
alic algc que se consí,Jera CemasiaCo pequeño paia rnedirlo. E1 tipo da efecios J
relativistas que importaiían serian aquelios relacionados con la- creación de
paitículas en el núcleo. Ahora bien, la cartiCad de energia irecesaria p¿ia cr3ar 1
J
un nucleón es aproximadamente cle i OCC l,4eV. Sin en-rbargo, lcs nucie cnes sólc
v
pueden crearse por paies, por 1o que se necesita un mínimo de 20C0 N{eV. i c
peorjel caso es que cuando una partícula choca contra un blanco estacicna¡io
la m.itad de su energía se invierte en ernpuj ar a l¿ partícula hacia aCeiante,
I
dejand,t tan sólo la otra mitad cle la energía para la creación r-le partÍculas. De
esta forma, un pr:otón Ce 4CC MeV teld¡á solanrenie I0 iror c;snio de la en:igÍa
J-
-
d
d
.¿
.{
-
-
a
a
)
t ]\íODELCS Y EXPES.INIENTCS 2i1
)
a mínima necesaria para las intera-ccicnes
reiaiivistas' Para que se dieran efectos
a c,ri.*,á¡r.r r. mucho más del mínimc ' Esios cálcuios'
poi supuesio'
a "ece"itana
;;;;;; potenciales nucleares de sch;oedinge¡ normales'
de laecuación Ce Schroe-
) En seguncic lugar, aunq':e la forma fundamental
por aito 1as consicera-
) di;;;;;, no relátivista no " pu'un compleiamente
Le ci'¡enttítica de la teo¡ía de la
) ciones relaiivistas. De ordinarü se emplea se rÍrueven a
a r"frtiri¿"d, inclusive el hecho de que 1os piotones incidentes
velocidades relati'¡i stas '
) en los modelos de Schice-
Pero la inclusión de componentes "relativistas''
a 1930 Dirac íonnuló una
air-lg.ril.rr. r"p"..urio.r., """ *¿' profundas' !íacia que hoy' p"t
) relati'"ista Ce Ia ecuación áe Schrcedinger ,t-'1'^":::'
a ".niO"
.. .ono.. cor¡ro la ecuación de D¡lra'c' Esta ecuación asocia un monento magne-
r¡
r¡
a o
4
it r (Ím)
a -tu VC ENT
ia
a -20
4 B
ra
a l.4eV 0
a -0.4 Vso
a
a
a -0.E
J
a
-
Fftira.7.2 Ecuación de Schroeclinger y poienciaies para la dispersión
eláslica ce
a
á
I
lelras inayúscutr., u ú
Asi, ic:ier:-os rao"r"'tjl'-''a
r¿'liup'*i*"'¿^ o','T?uj;:-1t-"-"11'ii:".l']:::1"r:'
i-:::u) -' "'
" KE\f T" (inicial:s de sus aulcres A 'i"' i(er'ira ' i-i' 'Yiu11
-li.i"
'vil etc'
irrd., iss qj; tu tto'iu''BHF " (Brueckner-Hartree-Fock)'
unñlósofo-lógicodela"s.reta'¿.Stegmueller(1979)sostencría.que'ea ¿
de Sihroedinger qui coÍnprenda a tod: a
principio, debe exisiir.u.n *p* *o¿tf o
poiencial de iirs racct on";lti";t co;rccico' Asi
i-amiria ce modercs de scLr,-oecinger
pue;' loco miembro d¿ la
s-ría un caso especia[ del súpe.r modeLo'
i¡¡
de 1a ciencia tratandc de defi¡.ii
este
incluso pociríarnos i-uginu, ^ .s.ii1ósoio
de axiomas adecuadamente constluido ' J
súper modelo mediante un t"t'j unto
Tal reconstruccióa no ,oio i..iu incapaz
de describir ia teo:ía nuclear que i
oodria llevarse a e[(ctc'
en principio ú
emplean los físicos srno que ni siquiera
La razón *¿, iut"tl"t tti"'i*pátrúiiiáa¡ ei la que va vimos.' Cualqui:r E,
debe resorver el probrema de los cuerpos IÜ
intento de moderar.r por.n.rJ óptico
múltiples efectuando
'lgú";i;"
át;froxirnación Dilerentes maneras de reaii-
algo diferentes' muchos de los cuales
d
zar la aproximu.i¿n *ttt]un-i""nti¡tt
no scn experimentalmeiáJiítinguibles'
preferido d. unu *^nt'u "J
Uno no puede distinguir a un moCelo
Exjsre' sin embargo' un tipo de unidad r-
en el caso de Ia teoría nr.l."i,
"Iiláti"
p..o esa unicad es más orgánica que decuctii'a' -¡
-r
d
f¡
.l
ra
-
)
a
)
) ñf ODELOS Y EXPERI¡/lEiiTOS 219
t
) DE ¡aoDELos
) ANrpceolNTES DE LA BÚsQUEDA
) RELATIVISTAS DE DI«EC
) principio' e1 modeio correcto del núc1eo
a No hay físico nuciear que dude que, en
sería uno relalivista y basado en ia ecuación
de Dirac- El problema consiste en
- a energías típicas de Ia investigación en
saber si la-s interacciones que ocurren
a físicanuclearenvuelvenp,o..,o,relativistasfundan-renta]esenunamedidalo
pueda detectaise experimentalmente '
) suiicientemente grande como para que
a n..ro r., así, Ia investigación puede proseguir lelizmente sin echai
mano de
) '^^"¿;;; no rel ativistasactituc
modelos '
ya se vio, la prevaleciente enire 1os fÍsicos nucleares antes de
- no eran necesarios' lvluy
) 1980 era q,-,e los modelos ,elaiiuistas fundamenta-les
en : ''"s mode-
po.u i"t.rtigrción, ya fuera teórica o expeiirnenial' se centraba
) considerabie por los
ios. Sln embirgo, cinco años ciespués nJía ya un interés
)l mod¿lc¡s relal¡/ista.s. Se crganizaba'n gra:rdes-
congresos para disculir ios úl-
)' tirnos descuL,rimientos teóriccs y expeli ',r.ntaies a
piopósito de1 dl:;arrollo de
) estcs moclelos (Shepard, Cheung )¡ Ecudrie
1935)' ¿Q''ié ocasionó este nuevo
a in',¿rés eiL 1a búsqueda de modelos relaiivis¡as?
'Desdeetpuntodevistaccgnosciii"'oelproblenasería:¿cómcuncientífico
)
mcdelos relativistas
) decid: deciicar sus energías aiclesarrollo o "'eriflcación de
a de Dirac cie las interacciones nucleares? La iespuesta
no es la ¡nlsma en el caso
as En ambos casos sin embargo'
de 1os teóricos que en el de los expei-imen t alist ' '
-
a poCemos dcteciar elemenlos de rrna estrategia satis faccionist a'
DETECTOR
HA7 DE PROÍONES
0
I
cL_11I\t \,./
DETECTOR
HAZ DE PROTONES
oa I
0
BLANCO
protones poiariz:dos'
Una vez que se dispone de una íuente coniiable de
P' o
pred. r"eairse un paiámetro nrás compie;c clue se llarna po1-aiizaciÓn'
É
)-
)
)
)
) iVIODELOS Y EXPERIMENTOS 221
-
a
- Doderdeanáiisis,Ay.EnlafiguraT.4serepresentalaconfiguraciónex.
p.ti*.rt"l para medir la polarización' E1 blanco y 1os contadores se colocan
) está en
igud q". pára medir noimalmente la sección transversal. La diferencia
) .i nuri.;rotcnes de llegada. El giro de los protones está regulado de mane¡a
por ei haz' el
) á". J .:J de rotación ,.u p..p.,ditu1ar a1 planc .dete¡minado
grados spin
) üi-.; ; el contaCor. La direccrói.r de rotación se altema 180 de laet'-lreflecha).y
) ,,p (repiesentudo por un puntc denirc de un círculo -punio
-ríi
) io*rn (representado poi una c¡uz dentro de un círculo -la cola de la
a
a
fíecha). La poiarización es función de la dife¡encia entre la sección
medida .on lo, protoÍies de entrada en la posición spín ttp
posición
y
spln
transversai
la sección
down'
t.ansr.rsal medida por ics prctones de entrada en la
) El priner dato de polaúiaeión, para protones de 8C0 N:IeV scbre un blanco
) rie cakio +0, se publicaron en 1979 (Rey)' Co;ro se ve en la figura
7'5' tales
) datosnoccncCrdaronconningúnmocleloestándardeSchroedinger.Lacurva
de ,,mejor ajusle" fpunio-ra1a), calcuiada clirectamente a
partir de ios d:.tcs
)
) 1.0
')
0.9 ¿,0
) o1- Ca, 0.8 Gev
I
) 0.8 SCLUCiÓi.I 1
,Ü SOLUCION 2 l t i.t
c|) 4.7
): a -.-._.-M=JOR AJUSTE I
i .,.1
J,/
t .-
Z
0.5 t
t I.)
i
i +
\;
t,
,' .{J
r I
Éi t!
o
0.5 I
'. { {
(\
I
i
I
1
é¡
I
É,
I
\l ¡
É. 0.4 ¡ I
\t li
I
I
LU I
-t o ¡ ¡
¡
o
o-
0.3 I I
{
I
I
-. I I
rl 0.2 .¡l t{
{+ I
I f I
I
I
I
I
ra, !
I
I
I
I I
I
0.1 ¡
- 0
I I
-
i, o246810 12 14 16 182A2224
B c nt. (deg)
- Fig. 5. Po,leres cje análisls elástico para p *a0Ca a 0-8 Get/ comparadcs con
- los cjatc: proporcionadcs en la Ref.4. L¿: soluciÓn ce supue§ta gredicción 1 (2)
pafa les ampl¡tudes p + p y p + n está incjicada por la curva continua (de rayas).
- La c"rua de puntos y rayas representa el mejor a.iuste obtenido al peímiti¡'una
- variación libie erl lcs parárrreti'os in Y á, según ss coi-nenta en el tex-tc'
-
- Figura 7.5 Prime¡os ,latcs de polarización (poder analítico) meciida a 800 N'íev pai'a
un bianco C,e calcio 4C. Tomado de Ray (1979, 1860)'
-j
--E
Ct
.rl
227 LA Fx?LICAclÓx »s t-'c ci:¡iciA
e
¡
eü que se enplearon técnicas
esiánciares cie cuadrados r¡ínimcs '
c'l¡viamenie
pa'u dos mcdelos Ciferenles Ce Schrcedinger
?
nc se ajustó a 1os cáicutos Je P *
(cuwas continuas Y de rayas) '
ca-tos similares' 1a investigación de
i AMPF I
A con:ecuenci,. a" t'ro§'á"os
de densidad de neutl¡nes a Ia investigación de los E
cambió de los estuclios
rl¡clelos de Schroedingtt át ü;;t
;tpendían 1os.esiudios sobre densidad de
de tal reorientación fueron' por un
lado' tlEt
neutiones. Dos de las tonitt]l'ilu'
akededorde 500 ivíeV' v' pcr e1 olro
I
l
)
a 0.4
1 \
a (
i
a 0
0 a2 0.0,i O.O6 O.Cg 0.1 0 0.14
) { i ,[
a -a.1, ( [Gev/c12 )
a -0.8
- a
)
0.8 \,
,I
-
r¡ I
1
¿ \
0.4 4
- fr
f.t
í, I _Ll I
- É.
!¡ 0
0.02 o.06 o.08 0.1 0
\/
*
-0.4 -t ( [Ger//c]2 ¡
-
-
É:
É
a, F¡g.2. P y Q de la dispersión elástica de protones de Ca.¡ a 497 MeV' La
ir líi-iea continua corrosponde at cálculo total realizado
confo¡-me al enÍoque de Ref .
-i
;¡i
llCcnlasampliiudesN-Ndelanálisisdecarnbiodefase(Ref,12).Lacurvacje
rayasseobtuvopasandcpc!.e-]iclainieraccióndglmomentomagnéijco.Lalínea
ji depuntosyrayascoírespondeaICáIcUlocorlaamplitucidelespínorbital
Eausian:, Véase la ecuación (7) Cel texto'
-:
A, Figura7.7 Primeros datos ci¿ roiación de espín medida a 5cc ivlev
para un blanco de
i', calcic 40. To.-nado de Rahbar y Cols, (i981, 1813)'
J'
zz1 LA ExPLICAciÓN oE i¿ ciÉNCiA
tntto¿
de lós nioceios de Di¡ac en la
otrc invesrigaao' q" a'lül:ii ru tu"!u lit;tu clrrianie rnuchc tiempo en 1a
p"uUtO lc que ahora conccsmos como
iísica
el
It
';t
Ualversicad
de
de sianfor¿]Eilii¿
Waiecka p"tolu-"'u*tiu (i¡"'aie.cka 197¿!)' Sin emba¡go' su E
to'lttl""¡:l -" ''utltut
moclelc
f"t pi'cpiecia'jes de la ¡''ateria nuclear en
interés origina.io
1as ¿sl-el/¡s, de suerte
" q" ;;;; f,-.tiuiro otrtorisica comÓ c'e física n^uc1'-ar' 3
=
esludiantes se cuentan hoy ellre
qulenes
l'1o obsrant-e, ét y Je sus
'arios ;t1;' nioCelos de Dirac en la física nuclear (Serot
apiicacio;tt
rF
't
lrabaj an sobre
' '#;;|:i::il.tpto'.
a desatar el inte;és por 1os
1a obra que má. contribuvó
fne la ce Bunnv Clark y sus col..bo-' H
-
mccelos de Dirac para la f'rili-l-l.it1e;t ciitttt"iu de G¡een o de Walecka'
radores (Clark, Iianna y t,{t;;t '
l
grupo de Clark p'opoJa 'B'l
iesa¡rollar un^modeio n:-¡ciear en
términos EI
fl
e1 procedie!;on /eno-
'-tll " más f undamentaies ' Eiios
de 1as interacciones de entiáaáes
nenológicai"nente '
-
, ñ:--^
r;
I -a
Para
fercrnenotog:o
quienes se dedican
c? lrt¡ Lt''
a lz*s humanidades o a
las ciencias scciaies ' la escueia
cie la
e
-
á
I
t
-
a I
)
a t{CDELOS Y EXPERITllENTOS
221
)
)
para obtener e1
) pueden ajustarse los parámetros y valores
t dicha cantidad,
1"' d"'J;' t';J;
E; t;;p1e'a alquaa medida estadística
a "rnejor" ajuste
estándar de ajuste,
de
t"*" i;:é;;;;;tc"' et oujetiv-o no es
juzgar el ajuste
) ánt,. tu p r.ai.ción v Io s
'"'il'.Jrr.ion
d;"'''i;;;j-;á 11* i"i.t::tÍ,:':::¿i'i:lJ::
1 cLn¡1^1
a cle Dirac más general t1lnt
ios que eila y- sus coiaborad'¡res
consideraron "'
a modelo de Clark
'oto
t-"u'Oo't
) rHüT3H.i;:i:;';:::;l['ii5i;#;"1,'.'.xT,]*
111"0".,á"-,;,1"-1,ffi
) á; ;"r" i't i'or' upu" ce natur almente como
)
H;: :Hl'.lT 3":ioJoo,:::1;1'
dos
consec'.l :ncias de estos '
)
)
{ü'É o B (m +Us) - (E - Uv -Uc)
) -o
) -tp I UT ) v
)
)
)
)
) UV
) 200
)
)
) 0 a
) 4
a r (f m)
- -200
ra
ra US
!a -400
r¡
ra
más
) de Dirac con la gráfica de los dos potenciales relativistas
Figura 7.8 Ecuación
- importaltes.
-
r¡ . El resultacio cie sus progiamas CLe cuivas fue que ambos Poten;ial'es
ajuste de.
cie riio.s de MeV ' Pero
Uv es posit'tvo
resullarcn muy grandes, ¿ti?¿t" át "u¡-os atra'irvo'
- es neS1l'1¡ y' por 1o ta'nto'
y, por lo tanto, repele nte, t""t'uoá q* f'n ¿u
- ., ,,,, po'"tttiJ ligera:i-re;ite negativo' cie aproxiinadarr''3nie
,J La dife¡encia esiáod2'ies de Schroecinger'
l, l.{eV, muy pa.recidc *l pot"*i"j á" los m¡d:los
1
1']! i : F)iPLiC.\CiÓ}- DE LA CiENCI.\
i
como
ecuación que cescribe este moCeic' así i
En ia figura ? '8 se rnr:estra una ';iot dt-corr'oararse ccn el n'oce1o
dos o"t;:i;Lt: i^¡'¿' 1
I
una gráf;:a d¿ los T '2' Lo fe::inante es que aunque
los
de Scirrceriingei inostrado e;iu"¡" ''u i
bastaníe
l.e adecucción entpíríca no es
fenomenoiógicos'tan sólo del potencial óptico de *
Ciark no co nstruyó n-rodelos modelos de Schrcedinger
Dirac. Era rambién .o"r,iüllr^.o.r.rionci.ntes se tienen datos cle sección
trans-
que servirían at to*pu'"ti"ó'nl
i] t'¡tutntn* conside"'abie'
Para obse'rvai una diielencia
versal, la dilerencia "tu oti"ou' d:l espín' como h polariza"ión
de
tt'"ttiit:ltt
s: n:r:sira un iato "0"'"^iit loj años los úni:os i:'¡' de er:e
h rotación de espín A''i;:'"
Ct :tlt"l'"
,io o o u. e ri s r í a n .:
:::' i'',:íl; l; JLf
g:': :: : iJ:'
t; :;: ;'; ::'-i:
:;
q'lre ros modeios de
ll[-,xfi:'#::'f.,,,l.ii:;;";; ^;;'T::l: r'j"' ra semejanie Estos resul¡:ios se picsen'
Schr;edinger ton""iAo''át'rílane
,;;;;;;;;;,.,,"':::".,5i""#;;:*lt;:i";T;1i'¿'fi1l"::"líil:;
atenclo"'
les prestó ma)/oi ''n¡ [ue .;.,^
:":"Y,:"^";,^:. visto ..,n t""'rL simpatía"
co¡ mucha '
erebaca coninigo¡. esir r:abajo u'rrr."r^uoralores
=' ";", .;;;J r, auía n,m'j o'10: ::::: ilL]l?,'"',1;:í,., á. i"*. o'
:;;:';;i- vi ;po zac o n p c n' d : :oi s
EL MODELO DE EL íUODELO DF
SCHROEDINGER SE DIRAC SE AJUSTA
AJUSTA ¡/EJOR N4EJOR
ELEGIR EL
MODELO DE Correcto lncorrecto
SCHROEDINGER
ELEGIR EL
lncorrecto Correcto
MODELO DE
DiRAC
Figura 7.9 |vIa¡riz de decisión para 1a eiección entre los modelos de Schroedinger -l
L,irac
usa apro;(jnll-
C)tra razón es sencillarnenie que el enfoque fenomenológico
Se cree que en virtud de esos
clamente una docena de parámetros ajustables'
numerosos parámetros iibres, uno podría obtener
un ajuste bastanle buenc
casi con cualquier *oa.to.
purando por alto el hechr de que Ia lenomenología
esta objeción
de Di¡ac proporciona un mejor u¡uste q'e 1a d.e Schroedinger'
,*.furrn-furraairLentotípicamentesatisfaccionista'EnlaliguraT9serepro-
ducelama'irizdedecisionesparaesteproblema.Enestecasoelque..;iseajuste
el potencial nuclear
*.¡or" significa que el *odelc de Schroedinger representaajuste a 1os datos -es
u.áuC.ro mejor que el modelo de Dirac' Si un buen
mejor e1 potencial
bastante probable ,i. ;*po.iut qué modelo rep-resente
en si alguno
verdadero, no .isie regla Áe decisión satisfactoria basada
"uclea¡ garantía de finalizar con un
de los rnodelos se ajusta a 1oi datos' No hay
que algún tipo de modelo se
resuitado correcto. De esta rnanera, el hecho de
ajuste a 1cs datos no proporciona fundamento
para decidir de una u otra forrrra'
de ia rotación
Jor supuesio, es que anies cie
igii nc e:<isiía-n datcs ccnt-iabiesiban reun-ienCc
Le espin. Lcs daios dt ¡ñ
l'itV-"iuti'ot al calcio 40 se ant'es
pero cuancio C*op*¿o disponer Ce ellos' unos sois meses
lentaminte,
de su pubiicaciOn, "l ajustJ
t'I áuv b*tt"--' E¡icnces ella 'v s''is cclaboiadcres
sep usieron a trabajar en seilo '
.;ne¡aCc de q ue la ecuacióe de Dirac Piopor-
llos lograrol e1 resuliado ;s ex-perimeniales (secciór trals-
1 as tres cantiCad'
cionara un rnejcr ajr-rsie Para Pe¡c
ror"ación d: espin) c.::e la ecuación de Schroedlager '
veisal, olaiización
p Y
investig adores fue que cuancri
que f ue realmente e;{citanie P ara esi'os
1c 1a sección
a¡on lcs Paránetros libres Cel modelo usand o únicanente
cleteir¡'.1n ar',cjó una PreCic-
la polarización, el rr'cde lo de Dkac resul iantei-i
transversal Y io fenomeno-
ularrrente buena de la r oia-ción de esPín'
ción esPeciac
-al
1.0
(c)
Á
7
_fl
?
,l
0.5 ,-
91
-
+
E
L-/ 0
-
r¡f
.-
Eí
iE
¿
pt
¡
L
-1.0
o.0 10 20 30 40 ,r
0cm -
TE
I
l. I0 ConParaión d¿ Ia curva nredicha por Clark para Q
(19S3' 271)'
con los d::cs c
¡l
Fi¿ura . Hr*, Y Nlercer
ex:sten[es Tomaclo de Cla;L tq
-5J
.l
t
-
)
) 8
-
)
) de ajuste más bien pobre
Iógico de Schroeclinger proporcionó prediccioncs
por primera
) ,.ir.*o a las rotaciones de espín. Las curvas de Dirac, publicadas
en copias desde fines de 19B l '
) vez en 198 3, aunque disponibies para los colegas
) se muestran en la figura 7 . 10 '
parámetros del modelo
) Los resultados eran sirnilares si se establecía'n los
) ajrrstandclaseccióntrans.¿ersalylarotacióndeespínylrregose..predecía,'la
muy buenos ajustes
) polarización. La lenomenología de Dirac proporcionaba
las predicciones basadas en el
I irr" fát datos observables pr.dithos, mientra's En este caso CIark y sus
iorr.nponai.nte modelo de Schicedinger eran ¡'obres'
? colaboradores tenían a su lavor tt'-'u pitto de sabiciuría
recibida' Todo mundo
F ,"...i" creer que los espines obsewabits (.P :' A) debían estar relacionaclos y
- Torloslosfísicosconlosqueheconversado}l'iganentealrespecto,concuerdan
l) ,in ningu,r, duda en que unl de las luenles rnás importantes
que han avivado
-a elinterésenlosmodeloscleDiracfueel.éxiiopredictivodelafenomenología
de Dirac d,esarroilacia por Clark' Vale la pena citar
al respecto lo que a
- por ciué el irrterés en los
I¡ principios de 19E6 clecia rin joverr teóiico' Le pregttnlé
*ot", a. Dirac aurnentó tan espectacu]armente :l principios de 1983.
-
- refiere a los experimentos de
r¡ Bien, yo cieo que lo rirlls, al meuos en lo.que se porque ella empezó en
diipersión,lo más inportaiii" fut tt ti:"rajo de' Bulir¡'Clark'
t los viejos tiempos. ari":;';;;;;; ella invesril;aba eso en el 76' el 77' no sé
r¡ exactamente, pero desae'nac" rrrutio y 'mmrrr :iia
había quién se lo i,npidie i¿, ¿¡t
lo hacía' ¿córno decirle? No
V en real:'iad. no lo hacía
de la manera más
¡ ""¿í
convince rte, pero t,u.iu uigá L ltn cieliniilo
y que era útil Y en IUCF 'enel 82' esto
r¡ fue despuós de qu. upu.".i-",o,' tsllos datos, ' se p;esentó
Ia misma discusión por los
clue hacer esto"'
cálculos de tipo no,"f"tirirtu "Esto no furrciona", "tenenos
- "Tenemos que pararnos cie cabeza pa¡a tratar Ce.irnaginar las maneras
rnás extrañas
I de poner en práctica los ¿¡tás scbii la rotación cle spírr" . Y entonces Bunny mostró
- suscálculos,iiCrcicletomólosotros'iosiragrxer'lcsd'Catosdispcnibies'losp"s6
en práctica y la fu".i¿n,l. rot..;órr de spín salió pciitcta rlsí' le digc'
ia geute estaba
¡
b m'uy i,r.,pr.sionacla... Flso fue, ciéarne, algo lariiástico'
h
t
i
DE L"\ CIENCTA
232 LA EXPLiCACIÓ§-
t;::* .1
La mavoría de rnis otro"s :i::]::::0";,
"=;
1ffi1:i::::' ":Í:
contenidc de su rcspue:t".''-,'^'l:':: prescntado en e" nttsn"'o
;ffi ;'§ H:
,1,
¿l$ ffi?tr'TT,.:.1;, ;;
i ;'clark--coi:':::;li::'.'
; ",ti.rlo
I ffi
Tr : : ;", .i?.l i;lñ?i,?Jl
había sostenico cor,'e,po"d;n'ia.con -¡r
,iitiLt't" ir"v
,"r'r" a.*lr, ccir un aiarreltl !::]:,::ott '"'
ceL orLBLtLa'/'
iss¡, t+0, el subrayaco es
|i'L:",til,'.X:.::§'"ili1"""iJ;ir'' iti:i{{";':d}#"''1ffi
nt L;itac r'-sa.j:':?'::'l:,-:"1il";;i n'o¿'to óp'i'o i"''o'
h fenomenrttosn
,.iuiiuit,u que vimcs. antel rcr nl'-IrL'J ' -..,3li¡gr "' ::' ':-' r'
i '1 i:r e'uaclon oe )( iir
L
basados
,i'.""ii*"" ttt¿ndar
,tü:
Nó rc se e sp ec i a,
i 1 I J l, i'J';.
-:
i:i,
Tü l;,,.,^:
i:. il l.,,"ff.ilfl o.,]. i
seprerlicc,dadalasecctoLtiJ".'¿.Jái"i..:tu1:r,1n:,,.ru,uraexperimentar, orro
f
oi
"'$:'::"Jii,ll,'."^"1;1;';;'.;i.**""'i¿n
de Ttxas'
*,Jtii," íJ ,tlpo t"i' iá' ti
ref-triéndosc a !¿'',1.",
es dcl oriei,al):
y
uo <1c Crark sus
asociados,
fta
escribió (ilotiman "ore1:rcio
4
yJl":::'J'i1,".$lJ''JJ:';"lr;'"i:J:fl
i:i;;;;;,;i, .i ,"S::j.,ill|i::i|l:TÍ:i"'.:,,.:¡^.,i¿"¿,,
de la que se encontro
i
}ii!'til jru,:ll.}j:i':jj-¡t+:
cle schroedinscr
e
-a|
importante 1a capacidad de
ob"'iamente consideran al-
Estos experimentalisias
"'i:*::: :l ; na no t a p u'; Ii ca c a c n el
:i:'::' i: Í; ililál',.:l Lx1"J ;; t:líl
l''
u
I
)
5-
-
)
) OS 233
NlO Dtll-OS Y EXPERILlENl
-
)
y no para los
)
que esto se escribió pa-ra 1os físicos en general
Adviértase
- a1 éxito
) "'Ti.i:ii13ill':: n:,:*?:cioróBicas están11:',11"'u"'raramente
) ;
0,.,r .;i; o. 3 ".1"
i
i'l
: *: *:
: n :,Í:;':
J :1''H;
)
É
ulteriores
*
e1'rellcton-1o;1;rd;;;;;;e "'X;*:;:';:
los enloclues diraquianos
a 1a física
cita Ia contribución cle clark v
sus
) *:,:::.;'ll;'tli,1l#.iX;a",ár"1se
D rffi..;:;,'1..............¡:':['":^r]:::J.H:::JI[:,
coraborariores. Las ciLas ]i:ffi:
id o p e r s o na t m e nt e
$l i" ; iil.iil§,::'* ff l,!::'::J
- i:
F ü:i:i;= :'"'"
ól^¿t' Lo que signilica
que consideraron
sí es
motiva-dos por ios resulta¡rot-Jt cjrerro^eorno apoyo a la
importancra
) arrícuro r;;;;;;; r"ra
P orre ésreerr
de trabajnr
rrn
sobre modeloíá"'»i'ut' Es nrás'' esta forma de
cite relleja elJurcro
apropiada'
) propósito de Io que o'rürit" tá"sicierará como una molivación han
? a
Desde el punto de
"t
't"" '"ti"iitUo'
tos estuaios cle Clark ciertamente
de las invesligaciones ulteriores
) tenido que ver mucho t;;i;';;;i;;aciQn
) basrJls en modclos dirrquianos '
P
) BUENAS
D Pon qun soNI iluPoRTAllrES I-As
) PFIEDlCCIONES
7 LIasta aquí he demostrado que el éxito preclic.tl::9:]: lenomenología de Dirac
) tt interes en los morlelos diraquianos
T fue un factor
de la física
primorclia
nuclear
pa"'a qu"
o*0"'o'l-t'i<l?t "'git'nrsal' Sin cmbiirgo' aún no trato de
É
7 explicar Por qlá ocurre esio'
La idea de que las p"ailtio"t' cie rnocielos cienlíficos puecie remonta¡se a
'i""'á"i'*ioág r"-r3-1i.1ti"o' Formaba parte de los
¡ griegos t" Mil1 y
los astrónomos
metodorogi" .'i'.Jrl.r'i.i ,igto XvII, fue r.re,aticla por
- tratados de t'¿r¡icamente por C'S' Peirce
¡ mediados t*'
$/hev¿ell a
clel siglo' A
';i;'iiñi"rtr'i"r"
ttrtt*'',sofJtrtu' át'ió convertirle en criterio principál
de1
I ''¡u"t"ti(}
i
LA CiENCiA
1234 LA EXPL1CACIÓN DE
;n::ffiii"',Tl3r;';j^ "i"'" 1
"lü""'*il:?::::ffi':.t;;;:.H;,',".*:';:
cicrtos casos' Sencillamcnte i:
t:::"':*":",,."" rie los cientílicos'
I
ffl",:::':,:: ;::.iil"'f o
1
CIBNCIA' i
:236 LA EXPLICACIÓN DE L¿\ i
I
estos experimentos I
telor si3uiente: "conciuyase '-1ue
eian, en mi opinión, rlel
I
I
I
l'";;';;4,,¡.i¡:;::.,:l::.','"TT;:T.;?";",".1^?,:,',#?:;1";i;':i{ii I
I
tos prob.abletntn: detecta-n
l^:" 1i"i^";áio"o sería: "Estos experimentos
est.acas.,ür.:':^':1':.::.;;.;,..i I
rrespondientes poi:ncia'les reia-
y "Esrcs eioerim:nios no <¡.,..,un
I
"tutiol't"'l
ptn* lt"t"iut-'uoittn' rclaLir ist¿s' asi como los I
Los it alores
en
que er-tste siempre ttn valo-r epistémico generalizado
He argumentado p"t¿t ¡u¡t' interacciones relativistas
si
acertar, por ejemplo, t#'"it'olt otros
y ' Sin tmbargo' la mavoría tendrá
en realidad las ha-v, que de otra'
quc los
"" ';;;J;t;av'
lleven Ñt'i' acertar de ulla maneia más
compromisos
mismos
'
cLato s pueaen llevar
a que personas diferentes
tomen
Por ló tantc,los general
dilerentes' po' i"*frtt''to 1i1e concenlraré en la estructura epts-
decisiones
problema c1" decisiOn"seltil t" ¿""t'ina t1n^1ólo por los valores
del efecto de' otros valores' Esta
separacton
cl
témicos' Más adelante """'ií"á* Mi explicación
oberlece Írnicamente " t:";::;;i^;;;rr;i;;' 1: Y.,'.^'"""un' en su propta
que los propioi científicos hagan niirguna distinción
no s-üpone
r,oma de decisiones:
Sinembargo,.:staíormuja-cióasiiripleia'nsóicrepi.ir.elcsj,riciosdeproba.
biiida'd,noloselinina.PuesauleI-I'siece5csurgcla-pl'eguntadesisimcdelo
p.opor.ionninfciraaciónre:lioci-=nlaneiasin¡:ieraeniecas-aiarrojalos'ra-
se requier':n los juicios
lcres medi..los ariicionaies. Paia redtlcir esta posibiiiCad
de probabiliclaC ccn base en el mcdeio '3
üre.+s FR'JEBAS
los físicos nuclea-res al
Hasta aquí he aigrrmentado que 1a reacción gcneral de
si supcnemos
éxito predictivo áe la fenomenoiogía cie Dirac puece expiicarse
qr. .rto, iísiccs siguen una esirategia satisfaccicnista' Sin embargo'. podría á:
insistirse en preguntar si estcs cientíiicos respcnden
realmcnte al problema de
apcSo a algr-¡¡¿
Itecisión i*pU.ito según 1o he expiicaCo, o simplemeirte con
"u,oque han aPrcndido.
regla ..
usted satisfaccionis.
no p,.d. simplementc pregunrar al cientíiico ¿es
ta?", puesto que muy pocos entenrierían la piegunta' Tan
poco se ganaría
al científico ies estrategias satis faccio nistas antes de íor-
I
n:ucho
"xplicándcle
mi¡larlelapregunta.Larespuestamásprobableseríaunambiguo..sí,podría
4,F
,., ¡go p-..iao". I-l investigación ordinaria sobre cl juicio del ser humano
son algunos extractos
no procede de esta r:, .rera. L'o lnejor que pueCo ofrecer
,
P l:áilt';;';;oi.,-'
para el calcio a sco trt'-¿ | Y"o
de ellos se reunió con
t-
- para Q.
ts ¡cciden¡el' perosu.acttcrCc lLre
tao notablc' que
ir Por supuesto que ptLrio ilrlber 'iCc
I r;;t;;; ;.';;J,,e hat¿r 'irlo
u n aiuste' no u na p;edlccron '
F lo
t'
primero que se me octi'
de oi¡a ajLrste' lo que
F 'i.Tl,i:'::1'":1::
'1T:;",'.
qr:: 'I:li:i:inipreraent:
Esta lue la prirnera predicción
que hizo ella' y
l¡ clurante años"
rT
Br.inny había hecho
fue esPectacular.
I-os eremenro s c1e ra es t r ate g li. :::] :: TJ :: il:': Jfi ;'r}1'.:'.f H"',x
lugar. Lo más impcrlenLe, poi 5tlpuestc' cs rr J¡-1: ''u Hl
-ñ r-ie espin irab¡Ía sicio sumainente
a predecir las meclicionet i" L'' ioiación r-.ie Diiac También está claro qu-e
!? improbable sin le interventl''Jti *cr¿ti
p"'t¡"Q' 1l;ro tro cuanco se ajusia e1 ncldelo
É este juicio s. sa-tisfec3 cr'r'a
'-.''!Á "
a todos los clatcs
-
-
¡
-LA CiE}ICi¡\
Z4A LA E,'{PLICACiÓII DE
i!
a de 1932? ' 'Esic hue le
rrVallace )' lvf cNeii en 1a- pnmaver I
¿Y qué conciuyerol
verdad:; rro 1o- enlild-í:¡nos' '
' 1
l"{ci''lei1 pronto cescubrió' " !'::j'^:: ::: :ffi ;i;: ::l::::::};: ;XÍl:l;1:
::T:;"#i:,!ff H;*:;J;;.i:;;;;;t::*:::i::"illj;"lsil; jffIl
Ilitjii; :::::,1?:lX, :::"1i"";,::'á'.:r:
?";';": ;;' ;;;;i;ü, u,, w
"t'¡""
ü.ii.lL t" habían.''converiicio"
v
"
-
,,Nos haremos ricos v femcsos."'. ,
-^^io a Cclorado y empezado a
r,i i e;t ;;s t eni o' I t',T:::
i i o
: I?L :1i,';:1".::: r",,, r,.1 u.,
ro iac i ón
rrabajar a quien inrncdietamcntlto
'',i1"-,i::,"[,il'.ii::;:j;:;ii,ir,...
Cei esPÍn usanoc e t r''
;;;;;t;"' oiicial' le lue clc graLr utiiidao'
I"lCDELOS Y EXPERIIVIENTOS 2'1i
NuestrocáIculorelativistapasabaexactamenteportocioslosdatos.Además,Ios
ccngruentes con los que
potenciales, n.,*éri.unr.ntJ'irJi'nao ' eran totalmente
'nrnni fr"¡i, encontrarlo i"nnlntnol¿gicamente Así que' en rni opinión' el parecer
cie muchas otras perscnas i"ttiiit¿stfttno*tnología [la cle Clark]' la colocó sobre
una base firrne
I.arlecisióndeaceptarelenfoqueclelimpulsorel¿tivistaestodavíamejorque
elaborar un RIA
r'o.leio ái."quio"o itnomenol¿gico de Clark' Para
"l.pi"..r
nosenecesitanajustsrningr.tnosdatosdeespín,nilapolarización'nila
completamente diferentes
."1*iO, clel espín. Antes biJn, se incorporan datos
El hecho de que
,áürái. ¿i.p.riión cle nucleo"es y las interacciones nttcleares'
para ombos dato s observables del espín
.otittt"t
fropo r.lon. ' 'pred icciones'l
que un modelo fenomenológico pueda
es, por tanto, aún más noiable que el
erróneo es más
p..á..lr r"o o el otro. Si ,.i'oU'¡u ton r-rn modelo-básicamente
d4tos obsei-vables que el que
improbable que uno obtenga correctanente.dos para una decisión
obtenga uno correctam."t!' Áti, el grado cie satisfacción
mayor que para una
satisfactoria concerqiente ¿il RIA poclría ser incluso
clecisión concernlente a la fenomenología de L)irac '
en los siguientes
Este análisis Ae la situación queda. muy bien ieflejaclc
con esta línea de inves-
comentarios de otro teórico íntima¡nente relacion¿"clo
(ic ciilLrsión detectaban
ti.r.acirl.lt. Le pregunté si creía qLre cstcs exp!-rii entos
realmente electos relativir;"fr', ár'ser así, tuíü era la' razón'
Él se refirió a los
trabajos rfe Ciarl< así co;ro.C etifociue Ci:i int;:Lilso rL:letivista'
,¡¡
!
I
h*f
!
--=t)
I'T CiiNCiA
?
i
O¿
l, t, I,A. EXPI-1CAC1ÓU
I
I
a
I
tr 1
I
o I
c.
-c
=z c1
Lll ; (_, c
o .rE
o -]
-o $o
c
2
q
2Á "F
F-i,!
,\ ..
#
CD
;in
#
6i Ér1
6g
eZG =o)
q.r9
q ]f ó
Y rJ .9 É>-
V o¡
-.1
5co, -96
a o
O ; o-1 ..
.\:
a ü-:
-oy
tr 3: X,
\z
Lll
a
0r \.: ¿ l-
L].j
cr
-o
14g
o93
':6
Edr
#
Lrl
o
a
G
E 3ái
l-al¡
9o
:!
aJ)
?
.l 5
F 9á -c
cr 9 .ol-
(_)
iÁa2
a! ?- )^ uc
-I]ü
'2a
*?'" ¿,c
¡E;
oéa
! o)
c)
- d6
E .o c)
I
o 97,9
'ó2
E 1
o9,a
z
o O-
()-
=
E
a (_-
Tn
1,1
ii:
:":
j
;
t;
l
I
I
í
244 LA. E,''PLlCACIÓN Dil LA CIT,I\ICIIT
QO
o3060
9t*
dei espÍn paia un modelo de Schroe-
FigLlra 7,12 Gráficas clel parámetro cie rotacjón
(línea continua) Se reproduce por
dinger (línea punteada) y olro cie Dirac
cortesía de lcul.
1.0
6 o
r
E I
4
?i
,il
o
{
4
-1.O
o 20 4A 60
0ru¡
espin a Z0aO Mel.gon
Figura 7.13 Com¡ara.ción de los datos iniciales 'le rolación C'el
Dirac (línea
un ncclelo clc Schroeclinger (1ínea purtte:icil) y un rnodelo de
continJ¡-) Se reproduce pcr corte;íl dc lcLil'
C!FNCIA
246 LA. EXPi-lCirCIOll DE I-A
ia figuia 7 13 pucden
la sala faciliia esi'r; conlpeial:oir'\'^!-'n
uiraesquina de
clÉ las cu.'les
() relativista' así como los
verse dos de las curvas
p untos de los datos '
"'ttti''X"""^ eciicc q're e s-re grupo de
inves-
o de e;<P erime ntal Pr.
Nii proPio n',ode1 Prueba i'alores d e O en ár',gulos de
en ia ¡n eclición de
tigación se interesar á más e s donde 1as
diferencias entre las predlc-
graios. r.lilí
clispersión eutre 5 Y 2C ;o(l inl'Io g-'l'et''rl las nú;
g r-andes. Sin
no elarii'istas
ciones relativistas Y ias una me dición a 10
I
ilX,T;li:,o,:"i;l:¡"',::i:i;.:';;;;'sobreratravectorii,l?Il"$"Tili;
pe cltr:iios' Ios detectorti
rl';"*;;;;;i.cidencia's
;; i;;;;,", a ángulos
Hi :r,i
v
#
.a
ilt i*::t,'; I : l' : i',Il:: I ri i: i 1il:i : : :ti i *l i : :* n
d
elásticamente dispersos
dcma*iadas otras cosas
tttpt:::,.1
,::L,,'. ", detectores, estos art'efactos
f Yrr
elecrrórticos de " elccció
tleseados.
rt :::J;fi,;;Il ,.ai.', rrn .r rl los acor)Lecimientos
tiT"lT:I: ::
ftl
il
enfrentar este probleina'
H
:-s fornas cle
,
"
" "' "'' :::,i :l'['."': i"$,:?li ::: ti::
iJ ?;§ ; :;'; T,H'J; I :. "'
u
*nl;lxx'Íll':::l::íJ::':::':I;:':;T":':::;J;jiEip''r'r'*" .d
;;; ;',; sor
uc n, ó
"' I : I "'§iX':;::,::*lÍ H.¡'I;
l,:":i i, :: ;J '¿rt
las reuccioncs ,-leseaclas t': .,.
i' ^':':-:;,;";,r.. nira rnr.nrener el rnargen "it:p.
ctr'
rjm*:: *;:x j:
ll i:,i"::' l"J : :::: #i' il
,' u u' " n' u * u e ie
fl
NlODELOS Y LXP E RI i\,1EN'TOS 241
más
de ccntenia un eÍioÍ Los valores "correclcs" scn mucho
los va.lores Q en la iigura
preclicciont' ¿ti"**tL cle Scirroed.inger que se ven
cercanos a las
arálisis de ia decisión implícita
7.13. I'lo obstants,
""t ";;;';;";rt-" "'l
mientrassellevabaaeiectoesLepariicular.ciclcexpeiin?ntal.
ios lisicos que hz'a intcrvenido en
esta
Eir icda.s *,is "on""uli<;"tt'to" remolamente interpre-
n:do
investigación, casi no he tntourtoao i-stos científicos no usan
'q:t-.lutla
ejemplc de pen:;aniento bayesianc'
tarse como al hablar sobre ..iodelos o
oalabras como "piobabiJl,";";:;;slb1tÁt"tt''
de investigación' U"o'"untu t"utha que se comparen modelos
enfoques
,,op ortuniduá"rl i- I'lo es que yo haya o rrit ado lales comentarrcs'
hablando de propia expli-
Simplemente no se hicieron
Naturalmente' no se 'i=" out rni
correct¿l Con todc ' creo haber
cación satis faccionista 'á'nttt"tlo*ente
explicación mucho mejor de los
aspectos
demostrado out ,'orott'l;;J;"
á;idir del cientíiico' en comparación con
cruciales de la vercladera;;;"
el enfoque baYesiano '
de
parte de la exposición anterior se cenir¡' cn el vali'¡ epistémicoque
La mayor á; otros intereses Sin embargo' ei
romar clecision.,
en este caso nos 1o sugiere el
"orr..ru.'r'li*;;; simple
otros intereses podrían ser'importantes que algo del
1"' fi;i:;-;;"leares están convenci<ios de
hecho de que no todos de energía media' En
enfoque cle Dirac tt opiiq" I* ttuttio"t' "'clea¡es
^itrf rrt""*t ¿" oirac calculan que cuando mucho
efecto, incluso lo' atrtn'oitl
tt t;;;;j;;d;res- en todo,este campo de la "^''ividad
será de 50
científica.
el
Una
porcentaie
fuente rn'; ti;;;;sta
Iát áo"
cliferencia'de aprcciación es
la diferen-
corrcctos ile la matriz de
FI
\?
cia en los valores que ""ttt¿osde acuerclo respecto de las
A" " "i*i'i toclos cstuvierln
decisión estándar' "J;;; que.diiícilmente podría suceder'
una
J;;;;i"' lo
orobabilidacles basadas hacer que
valores r"suho-dcs^correctos podría
iiferencia en los ^t;;;J;t;i"s para un'?: e insatisfactoria para
otros '
tes'ttara lalis facloria
la misma decisión e s muy
¿. Jo'"'p"i¿'lltot nosi-tl¡1ente pertinentes
El inlervalo 'uiott] c1e manera sistemática
Sin embargo' es
tralarlo aquÍ
grande, demasiaCo pa.ra quc talcs r;-rlute; desctnpcñen
ett
*,-
ti;:;t' pii*o'aiol
imooriante ejemplitrcar un valor
t.,' i;;;i"' Jcdiearc cste 'ccciórr n cramjnrr
cl quchucer cicntiiieo rni investigación: cl valor de
los recur-
cuya importantio *^.iitltJtL"'nt" gcneran natu-
"
Je cada ciclltlfi'o Los re'''lrso\ cognoseitiros
soscognoscitivos
U: r;' ciene il rc( onoüiris eomo
inicreses
que curlqultl. .,lti"i"="
ralmenre lo
cicntíficos Potenciales
¡r
.1,9
MODhLOS Y irl{P ERIVIENI OS
-l
l. Clark
usando
¡-
Clark consiituye el caso más inleresante' prlts eila empezó
Bunny t:'-::1-::
la cliiusión (1e los protolcs en una
modelos de Dirac p"^ trtut'i¡i' colsideraba o'ue tuvteran
que casi ninguna ott^ p"t*"a cit la especialiclaci cuando'
¡- tr proú1t*a ftnc'renclógicamen*'e
;mportancia. Además, "lro "i-'iot¿ teóricos
r.,r..ln'**tiit cle las citas anteriores' tnuchos
como puecle
"i"ttit fenornenolórlico qué hacía ella
le claban poca iml"'rtant;;'';;¡;;" ''Por
e'toban en.lo primero q.e respondió
a
esas cosas? Las cla'¡es tl" i;;';;u;t lcs
mis preguntas. Advertí ;;'t;; ;;t había,r dichi¡ que eila mllneja'ba
moclelos de Dirac "yu dtl;: :ll'f*'''
t"to"'tts"' "'E'ütonces" clije' "cuénterne
f-
algo a propósito dc 'aquel enlonces''
"
Bien,enrealicladllegamosalprolL':r'raaparlirJc-lr'''iiiLtsióncleelectrc;-''es'Ilnestc
Dir¡c v nc eri"tc ninguno clc los
tipo dc dilusión ti"'np"''l '1'*" "' t ''*io^ '.l:.
1, piobtcmcsconirr,,'rt".'q,i.,i'ii''i""'"'l""'r'::1,':;illl,?J,I.::i:f iil:',:X1:
cle prctones, nolque ni'13 lo' el('
lrñrlci ILI ']i-t ' L'rl
nclo ia ecuación de Dir:tc
- Es táb arncs re solvic
años trabaié col ro gt"t"i" §t'niorri posgrado'
para el caso(:t" io, i" r*'fJí" c:'siicio antes c¡e tcrnii¡''at-el
>-
"tttt'Jti'-li' "*
'iern:irLa'-l'¡ srr cl'¡cLr¡lall'l r'i e:t¿rCo cl: Washiogioll'
...y íui cor.. rni espostl tfttt it"1't
=
250 I-A EXPI-ICIICIÓiq DE I-,'\ CI'N:CIA
que se cied.icar¿a,
Consegui ira_ba.jo en la Cer,¿¡ai Eleci,'ic en un 3ii-lpc t-iluy iDequeio
en esencia, a hacer cálcuios :itpue,laixenie ls Lr,-ltba ci¿ iísica
i,eóIica- y aiii fue
donCe aprenclí a i)rogiamar.
Así, mucho antes ie colnpietar su cioctoracic, Cla¡k se i-rizo cle dos ins-
trumentos cognosciiivos ese nciales para ma-neja-r 1a ie nomenoiogía de Dirac.
Aprenciió córno traba,jar con ia ecuación de Dirac e el coniexto de la, Ciiusión
de elcctrones. Y apren.jró a prcgramar computacoias. Esta irltima habiliciad
es esencial poiqt-te casi no hay iorma de dete¡ilinar una docena de parámetrcs
ajustando una cuir/a, e1lo merl.ia,nte un largc pioceso iterati.¡c que requiere de
muchos cálculos y compicbec icncs
I
Clark terminó ia inaestría en íisica y luego, hacia 1961, se rnucló con su
esposo a Detroit, donde "caminancio se topó el1 la calie con los Labcr¿torios
rle Investigación de la Ceneral lvlotors" ciondc consiguió un empleo q'"re le
permitió pasar aigún tierrpo analizairdo datos scLre diiusión de electrones.
Ta¡:.,bién realizó algunos ",iajes a la Universidad de illinois para trabajar con
quienes se declicaban a esta ¿rciivirlacl. Después Ce algiln ticmpo decidió reanu
clar su edttcación cle posgraclo en Wayne State Univcr-sity'
Así empecé mi irabajc de posgrarclo, pero todo el ticmpo llabía hecho investigación,
cle rnanefa que, sltpongo, era bastantc claro que no tcnía que tomar clemasiados
cursos, sit,o sintplemente era como empezar de un¿l vez Así, tralábamos de enlocar
,n protlanro qu. se relaciorteÚa en cierta forma con 1o qr're yo había estado haciendo
antes.
de D irac? "
obviamente, cl enfoque cle clarll a este nuevo problema estaba dete¡minado
tanto por sus recursos crJglloscitivos como por cl problcma mismo'
Alredeclor de 1970 la pareja volvió a cambiar de residencia, pasando esta
yez a l,a Universidad Esia,tal c1e ohio, donde Clirrk consiguió trabajo como
dcl
investigaciora asociaca en cl deparLamento de física. una vez más dispuso
tiempo de computaclora necesario p:rra continua,r investigancio en su tesis. Po¡
entonces salreron a 1a luz al!lu1'1os clatos scbrc la pola.rización dc protones
\ioDill.( )5 Í E)(PEitlN,iilNTOS 251
OÍro teórico
ConsiclerlmosahoraelCaSc.ieunjCVenieóricoqueiina'.Iizósucloclotadoen
pnbllcaciones clonde explora los
1979 y que ahcra tierie en su irabei muchas
a trabajar
i.¿rl.os clel enioque cle Dirac' L-e pregunté cónLo eilpezó era cle
^íp.rio, general cie su respttesta
con modelos reiativistas ocl núcleo' EI sentidc
espellarse:
en las
El papel que los recursL)s ccgnoscitivos aclqr-riricios ciescrnpeñaron
cari'e ra ftie, obl,iarr.ente, muy
dccisioncs cle cstc jo.rcir terlrico ai pr incipio de stt
irnr-,orlante. I'{¿ituialrte ntc tlLlc csie caso el recurso l-ue su iamiiiarid¿rd con
'jn
ivÍ(liI)Si-OSYITXPERii\,1EN-IOS 253
Un experimentitiista
tantempiala,esteex,Dsrii'n3íii¡.iistacstabalosLliicieni:l¿CnleintrigadoComo
para queier sabeÍ más.
La r azón cle que la época Ccl zilo sea ¡ne¡¡ora'ble cs qiie pasé las
vacacionts cle
-,le viejos te;itcs si.lbre lc
|,laviclacl leyenáo que l'':bía hecho Drrac De ini tra''oajo como
posgracio irabí.r olvi':iado inuche's cosas necánicas que uno debe
esiuljiante
y
.áná.., ¿. esü eiuación para encontiarle sentiCo a 1:rs piezas fraglnentos
y
Una nueva forma proiiucir un haz polarizacio pttede ser' rnás que utr
r1e
rccurso cognoscitivo, uno n]¿lte iial, pero para e I
experimcrttalista ' los recursos
materiales son Jc primol Jirrl ir n¡''.rt't encia'
/¿o se había impresionadcr
Sucede que este experiment al ista en particuiar
,,preciicLivo,, de la fenornenologia diraquiana de
con el ¿xito
"rp..iJ*.n,.
y
Ciark. no cs que é1 no curn,la mis requisitos clc Lrn
satis faccio nista. simplc-
parámetro libre es que se relacionan t¿rn só1o cle una n¡:rnera muy laxa con la fisica
nuclear imPlícita.
mantenga un
Sin embargo, admitió que este escepticisrno "hace qtte me
poqui,o alejaáo clel resto". fylluchas personas, concedió' "querían establecer
a l¿r ecuación de Dirac'
claiamente que, si el acuerclo es asi de bueno, e.n cuilnlo
renuente a dar ese
entonces tocl,c el enfoque Cebe ser correcto" ' É1 se mostraba
relaiivista
,ulro. To*po.o le impresionaba mucho e1 enfoque del impulso
única-
á¡ginufnl.nt. desarroilacit con el grupo de Wallace' Elios trabajaron"Si esto
50C MeV'
*.it..on un blanco, el caicio 40, y con un nivel de energía'lugar"
es correcto" insistía é1, "clebería- funcionar en
más de un '
trabajo cle Clark como parte
A pesar de tor1o, su cautela nc le impidió usar el
de la iustificación de sus propios experimentos con
calcio 40 a 200 MeV' como
,imos en la sección anterioi. Esto quiere decir que el factor principal
en su
que él contaba con los
decisión c1e realizar esos experimentás fue simplernente
que a la.sazón
recursos cognoscitivos (y materiales) para realizar experimentos.
parecíandegra.'interésparaunacomunirladrnásarnpliadefisicosnucleares'
cle ciclos' con-
h,n la figura 7.14 se mnestran algunos resuitaclos de esa serie
de los da-
cluida aiedi¿rcios cle 198i. Esta f'ígura repres,Jnta una comfiaración
tosConunmodelocleDiracyclosdiferentesn:lodclosdeSchroedinger.EStoS
r'rn moclelo en lugar de los
datos no proporcionan base firme algrLna par" elcgir
otros-
O I
0
(, o\
)
DlRAC )
SCHBOEDINGER f
SCHROEDIN GER (DWS CENTRAL)
1
I I _L- I -L
-l-L
20 40 60
0
con dos
Figura 7.14 Comparoción fin:il cle los d¡Llcs cic rotxción.l.l espín a 2CC lviev
nlodelos cle Schioetiingcr y utlo rie .['rir:rc ijc tr'proriuce poi cortesí¡r
Ce
ICl.1i.
!
!
I
ie relinamienio para
se ha ¡'lcanzado el i-¡is¡i'o "r¡do
Obsérvese que para cuandc
todas estas cosas, Ias dir;:'";'i":;;'';ii..:i;j,:ij T.:,;1":';l;:1ii:::ir'::
Hs.1:::',J;:il:',';; ll;'ilf i"". :." i,l ::;;il ;; á ;;i; ;;;' ni ienteinfluirá
i
A
EL i'¿N onr\vt'A EvoLucIo N IST
más
evoluciorustas' Donald Cainpeil ha siclo de los
Enire los epistemÓiogos
:#; ;; J un t o Ji n' i' i ii';;
; ;; ;
I;
cieg^
::'l:ilil ;i
::: f
""ttt:":l:,1:: :
i¿:"-T Ji i, ¿'rT
es por "variación 1 actividades
"i."*.lt"i.*o ia lmproc¿dencia de es''atesis si se aplic:t a las
La crítica ha senalado Sus
produce nrievos o planea ttuevos experimentos'
clei científico que
'itoitio' y driícilmentc aleaiorias Coü --,
¡.--
'- rr
son, con toda seg"u"ná^¿' J"liutt"irs
actividades Carnpell puede ser -
todc, en un nivel d' "i*'¿oli1l:t]:i:
"'g^ni"'i;lltrlt
r,rno poclna qtit^t o":.nt'o'o
*a, opil."tl. de lo que :l ::
d" 1a ciencia' según ia elelnplifica
Popper
La concepción t'tpt""a clásica
muy deliberado'
atti"i-¿ cle la clenciacono algo
( 19 5 9a), representa la atrevidas v hacer
=t"t'^lt" fornuia^rrcnjeturas
La ciencia, ,.gi'n Po,'pt'l:;;::;; recursos
para ref r.rtarias. La api.eciación ciel papel de los
intentos cleliberados nos c1a una it'nage tl muy difet
e nte '
y ot'os i"te rJt'"t
cogitcscitivos ""'tnitt¿*it"s
)
,\'iODiL'JS'¡l:\l'ERli1[NTOS )51
Lcsmodelos,efectivarnente,sonprofluestosYlosc:;pcrirlentosseplanean poca
.v se llevan a cabo. Todo
esto estJl claro' Sin embargo' parece haber
intencionalidaclenelniveldela"cienciaengenerrtl"'N'I¿isbien'cadateórico
una medicl¿ considerable' debido
desarrolla tipos particulares de modelos en
para hacerlo y tal vez
a que posce de antemano los recrtrsos cognoscitivos y
como receptivo lrdecuado para esos
;"ñ;. percibe el merlio crentífico -
que ponen a prueba
modelos. Los experimentalistas realizan erperimenlos
norma cientílica gene-
iol., rnoa.to, principaimente no porque sigan ninguna
bien' cLlentan con
,.f t.t¡" Ia cül los,,',oc.lelos deban ponerse a prtteba l¿lás
que reconocen pertinentes para tales
los recursos cognoscitivos y materiales
rle que ies produzcan las
;;;;;;, y trat;n de emplear ttt"'Á' a mo'do
""
mayores ve rlt ajas prolesionales posibles
Al ojo no
La analogía con los 1r.o..,"' cvolucionistas es sorprendente'
he.chrts para adaptarse a su
experimentado le parece que las especies eslit¡t que
*.aio, o que una especie en pañictllar "trata" de adaptarse ,Por supuesto
nte vela por SLIS proplos
ia verclad es muy cJilerenle. cada organismo sinlplene
intereses procreati\/os lo rrrejor qttc luedt' En
collsecuencia' la especie evoltt-
cle r'itt plan de nivel sttperior
ciona tracia una nrejor oclapt"cii" i-a apariencia
Al parecer' ocurre 1o
o de inte nc io nalidacl es tai sóio ''tn efecto secutr¡i:rrio
r¡rismo con la c ie Irc ia.
f;iacielos Y enfcques i
si las "igcrías" son t
los ii1óscfos h*:ltil'.i;11scbie l
I)urante mucho tieinpc i
!
",s¡1;lables"'Latiistin'c'c'nc'itttln':ir;iielc;'::".';iil;us'¡lo::nicqtl:snt3's
iáL]it''';;'t ;t;t nt"'': :^t'''.]u'i;;'i;:l;:'I"l;*11
qeneraies perrniLc
"t"i"'
l#*l;*:,1i:", ; :"'::li :: : ll' ffi ii iir i ;i* : ; ; ; : l' :; : l;:;
l;, :;. .r : ; :; 13" l' ?'1"" : ::
** i:::fi :lIu ::
quc hi' n'ia' h''c¿rla:
n¡ r-ei l*'* ; n,;;':;;:;, !
§;;;.n "'ón
I
todo estas
or''o:
desPués de '
a,, r r 0.,." -l
F rcn c a i,c
ilff J J :1.f,1;[
:' ;;;"J con!iT::lliii[[:il:
r
1,., ;,:,j
l:-J .:?":i: lcr'1c;'iocrrcs mi. r, co rccc'¡on
::.1::i:":':
:i.;;;;,; o. Schrocii¡;,; ':l' :':i::11,-J.'"."-lY',1*,,,i'., t". rgda: r¿)^
ior.",r.'.orrirrz. 1,1 .l'.,,
(l .i'll,),1" o"l .i,,,,t".-, '.i.*
a csic rdlr;i','o)'i't':
c:.'.litiüade s t'bsen'a'Ülts
I.\,IODFLOS Y EXPERI¡IENTOS 259
El recurso a la scncillez
controversia en torno al errpleo
En mis pláticas con los físicos a propósito cle la
cle moclelos diraquianos .t. lu ií'itu nuclear'
mis e¡rtrevista'rlos apelaron fre-
cle Occam" ' Sin embargo' el
cuentemente a la "sencillezl' y a- Ia "nava.ia
enfoqr:e de Schroe-
u.gr*..rto surgió de ar'bos bzr"dot' Los siinpatizanr'es del
con'rplejos no necesitan
dinger alegaban qu-e los mod"lcs ciiraquia'rros más
aducirsesiba'staconiosmoceicsdeschroeclinger'Lospartida:iosdelenfoque
Ce Dirac alegaban qire los moieios de éste
son íntrinsecamenie más simples o
rnás elegantes, donde todc sale ' 'na-tr-rral¡neii
ie" '
a ia seiicillez de 1os
Los filósofos que harL tomado en serio e1 recttrso
que lr' senciilez es una propic-
cientílicos, generaimente harr d a'dc pcr sentado
aceptables' Por lo ta'nto' la
dad intrínseca ¿. t* t.ori,,, ia tual 1as hace más
que coníiere senciliez a una teoría
ta¡:,'li hasta áhora la sido descubrir qué es lo
aceptables que otras
y por qué las teoias con esta característica han <1¿ ser má:
sobre e1 análisis
(Popper 1959a) . Otrcs han consid erario que 1zi lalia d: actterdo
delaser¡ciilezindicaciu-eloscriierics¡lesencillezqrie¡!s?-nlcscieniíficosson el
inlieren'"ernenie subjttivc: y pcr lanto, ciu: 1a seirciliez
nc tiene valor et
entendini¡tf o de ia i¡iierencia ci¡liLífica-'
260 LA EXPLICACIÓN DE LTI' CiENCIA
abstracta ilanlada
Me siento inclinadc a aceptar que no e:iiste propredac
,,senciliez" que exl-riban aigtinos nodeios cienLílicos en mayoi graCo que
cle la física nuclear sean
otros. Simplemenie nc o.""t qut ciertos mocieics
rnis¡no serrtido abstiacto en que
intrínsccamente iilás simpies que oiios en el
más simples que otros' Es inútil
ciertos modelos de 1a biología evciuc;cnista son
Por otrc ladc' no me
irltentar un análisis g.n.,oi cle ia sencillez en abstracto'
ca'rezca rle fundamento' Creo que desempsita
f o..a. qr. al recurso a la ser,cillez en funció¡' cle un modeio
un papci en la ciencia, y ese papei pi'reCe. e>lplicarsc
sati:; i':.:cionista simple clel criterio científico '
Lc:; físicos ttucieares que at-ti'r-nan quc los modelos
qr.'";iert-or-;,"celos equivaleiites de Schroedinger
de.Dirac son lnás sirrpies
pueCen señala.r ca'racte- fr
risticas clefirüdas de clichos rnoCclcs en apoyo
es que estas caracierísticas p"do'-t
de su afirmación' Lo de menos
rIo gen;ralizarse a otras ciencias' ni siquiera
que otros concuerden. con la
FI
a otras áreas de la física. Ni siquier':i importa Á
¿.r.rip.iOn ¿. f os modelos cle Dirác en tanto
que modelos "más simples''' Basta i-
Fta
t
en que las características designadas
con que algunas p"..o,-,o' -"én cie acuerclc
sean cleseables, llámeirse conlo se llamen'
A fin cle cuentas' Io que impo'ila es
ia familia de los moCelos de
que otras personas estén áe atuer c1o en r:stringi¡
lf'*:']1 '-:1 FI
dchrocdinger a aquellos que pos'an las características.señaladas' una estrategra
pcsibie aplicar -
;;;;;;;t;; una restricctán áclccuacla' se haceresuliaclos experimentales posi-
los
satislaccionista, pcrque tt.riontt' no todos
bles serán igualrnente probables daclo
un cierto modelo en cualquiera de las
la se ncillez- es redttcir el número de
farnilias. En suma, .t ,.nii¿o ¿"t recurso a
rivales' para sca al menos posiblc
nroclelos cn uno u otro at-fo' erifoclues 'ille
tomur la decisióll ;al i:lact or i¡''
ri'-'eLi no están obligados a aceptar
Naturalrrenle, los particla;ios clel enfoque
son nenos simples' ni que seait
el juicio según el cual los nroclelos excluidos
como inclicadoras cle mayor sencillez '
clcseables las ca¡actcrístitas citsignuclas y dé la
se r"ciilez rar¿rnlente sea dccisivo
Esa es la razón de q'" ti ':ttu"J a la
impresión de ser meramenie subjetivo'
l.
i
i
I
I
:l
l
I
8" LA EXtrí-,{CACiÓN DE LA
H.EVOI-,UCl{3 }"I GE,OI,ÜGICA
ACONTINUACIÓFIMEGUSTARÍ/\iLUSTR{Rlautilir]acidelosmodelosex-
a la reciente revolución
aminaclos en 1os capitulos anteriores, aplicán"l-olcs jerá r'rás de corte histórico
g..1"gt.". Por lc tanto .l .a¡ácte. de está capítulc
hacer propiamenti una
ñr" .í ¿. los predecentes.. Con todo, no pretendo será un bosquejo
historia de este episotiio de ia ciencia reciente' Cuanclo más'
q,-ra..i.*pfifiqrte cómo pueclen aplicarse los dilerentes modelos cognoscitivos
I
á f o .iuUptu.iért de una historia propiamente.dicha '
Lo q,.ie ahora lla.rtamos la.e,ti'-tción geológicll ¡riicrJe sit"tarse
aproxiirrlcir-
cincuenie y
mente en el iigcc¡ilr c o rirpierl ciiclc entre nleciiacios cl¡ los airos
acerca de este
¡nediar]os de lcs sesenia. Ú¡l hecho particulannente iilt.Jresailic
al modelo
.pltÁii" es que lcs mo<ieics cie la n''ieva geología son similares
¿n los círculos cieniíficos a 1o
d'esarrcllar.lo intre 1911 i, 1915 y que se ciiscuiió
r".g"¿.lo.sañosveinte.Ijsto,,os.perr,,iiel.laceiunafrLrctiier¡-corriilaración.
;ó;; ir. diferente en el decenio ae tqOo que. pu.e.r"i,e erplicar por quéocurrió
entonces una rel'olución, y r,o los años t"einie'i Cu"rlquir:r teoría adecuada
""
de la ciencia clel¡ería ser capaz cie explicar esta cliie¡cneir'
al azer' Lo que me
Obviamente, el ejernplo cie I:r geología no sc h¡t elegido
ha ilevado a explorarlo con cierta piofundiclad es
Io que me parece un caso
moderna a la
.rp.aiu.,..nta ia.o cle una importa't'te, revolución en la ciencia constructivo)
lí. * ,:.", Inuv Uien ta p..tftctiva del realismo (evolucionista'
posibie' por lo menos
,att,.alista. En perticular, .ri.."'o <1emu;stra que es
y las relaciones entre los datos y
ácasionalmente, que los.lu'to' statt tan fuertes'
valores no epistémicos se
io, áoá.f o, ,iroi.i trr, .uiJ.,,tes, que la mayoría de Ic¡s
vea sencillamente eclipsacia. cualquiera
que sea su complejo de inlereses per-
que 1a g: an rnayoría de los miernbros
sonales, prciesicra.les o sccii'.le s, es posible
á. pi"i.rión ,. ,1u.d*'iin'rnas opción satislactoria q\t:]-"9t,:t-?llj]:'
"*
modeloi nuevos coillo las mejores representaciones dtspontDles
Ge Ia re¿riLtru
t263l
264 L:\ EI{PLiCACION DE LA CIENCL\
265
I-A EXPI,IC.'\CIÓN DE LA P.EVOLL]CION GEOLOGICA
C-reológica Estadouni-
Stanford, quien fue elegidc preside nte de la Sociedaci
á.nrr.n 1929 . ' 'Lasgrancies cuencas oceánicas" ' escribió' "son características
existiclo en el lr-rgar donde hoy se
f..*^.,.rrr., rie Ia superficic terrcstre han desde que hs agr-rls se rertnieron
y
!"auan,.u.,, con cambios ligeros en su trazo
por primera vez" (Wiliis 1910, 2'i3)'
Lairleadequeloscontinentespueclcnhabersufricloti¡rconsiderableciesplaza-
en gran medida el
miento lateial tiene una larga l-,istoria, y a ella contribuyó
Americano' Las fo¡mas
c.lesarrollo cartográñco cle los Iitorales clel Continente
invitan a especu-
complementariai de África y América clel Sur, en parl.icular'
se com-
lot que alguna vez estuvieron rtniclas' Sin embargo' tal especulación
binabaamenur-loconlatrac]iciónbÍblicadelcatastrofismo,asociándoseel
oríge[clel'oceánoAtlánticoconelDilu'¡ioL]nivcrsal.corni:tal,estaidease
,pirtrbo *l,.ho cle la creciente rraciición cientítlc: en geología' la cual' después
c|elosPrinciplesofGectogy(1830)deI-yell'fueprinlordii,'Imenteuni,for.
a los
n,tilariq' Hacia 1900 c.ralquiera que intentara cIa¡ ca¡ ácter científico
grancles splazamientos laterales rie los continentes encontraba segurarnellle
cle
F
Afred Wegener
clebaie científico la
)-
La persona que más contribuyó a incor:porar al verclaclero
ictea clel desplaza,niento contitrent¡l lue Allrecl
wcgener' wegener es ei para-
dei campo'
r rligma clel científico inrovaclor qtte comienza r-lescle Ias m/rrgenes
obinvo su gr?.'io de cloctor en aslronomía en 1905, pero su investigación
cle
r
rie Ios rnovimientos pian'eta-
r tesis consistió en transcribir las Tablas Alfonsinas
que científico'
r rios a la notación decinal, ic que era un telna históricc, más
primer cargo acadé-
a- También estudió meteorologÍa y física atmosléric:t' 1'su
mico fu¿ en metecrología, a-stronomía práctica y físice' cósmica
Su ¡rrimer
a-
libro (1911) trataba cle la iermociinámica de la- atmósfcra' Por entonies'
en
J.
influencia
a 19i 1, no habría po<j-iclo preverse que llegaría a ejercer consiclerable
a'
en la ciencia cle la geología.
la deriva continen-
Poco sabernos sobre Ias iclt:ls prirreras de Wegener sobre
¡ que el propto
tal. En Ia meyor perte cle ios L¡r¡i:Ccs se repite simplemeilte lo
cle su libro
Wegener rlecía err h " ii-rtrocl tlccirin hisióiica" a la c:it¡-rta edición
I
i i,;;;;, ; ;,,"
y o i ro adoLi c I ).
r
El problenta de decisión
si Vy'egener algunav ez decidió
En este momento no existe iorma cle cle terrninar
explícita y conscientemsnte que Ia de¡iva
co¡t1n3lfal era una realidad' No
ta-l decisión cuando menos de mane-
obstante, resulta úli1 imaginarjo tomando
1911' Esio nos ay'rid a tanto a
ra implícita, en algún mcmento del otoño de
rnejor su proceder.
;;;;r* .,,, .r..n.iu, e intereses como a eniencerpanicular' Lo que él eligió fue más
Wegener no empezó .o.-"t *odtlo en
Fue un enfoque para
par..iáo a lo que anteriormente he llamacio t:t enJoqtie'
que incluía los grandes
iepresentar la historia y la estructura de la Tierra
a este enloqlre del proble-
movimientos lateiales cle los continentes' Llamemos
tno'-'ilisr¡tc '
ma "enfoqtte movilista" o, más sencillpme¡1-e.'
il.onttuccicnis i:¡' ' pero est¿ tóiminc ¡ lude rrás a
El errloque normal ..o .i '
1:. dinárúca rie la Ti¿rra q"l'- ai rieveirir
de su s'lp':: ficie ' En esr¡echo paralelo
Conlosmoclelosmovilista'sesiáiareconcciciacon:;ecltenciaCelosrnol-r¿lcslos
posicioires lai":r:Jirieate est:"bles de
contraccionis ias normales; a saber: las
r''io'¡ilisi¿ eslá cl enloque
continentes' Asi pues, .n á{)''t'apcsitiór' aj enfoque ..teórías,, es-
gian varieclaci de
estabilista, o esfabilismo.En efe.to, hubo Lrna
tabilistas enirc lrs cttrl:s cceoger'
A las correspon¿lentes op"cir'¡nes las iianiaré simplemente "elección del
arnbiguo ei que la eleccióir
movilismo'' y''elecciónde1 estabilismo'', ciejancfi
sea- en cuanto a "practicar" o "aceptar"'
Si bien esta úitima distinción es
suele ser diiícil aplicarla en
bastante clá¡a desde ei punlc cle vista concepiual,
V'/egener pa:ece haber
la práctiea. ,4. juzgar por lo que él misr'-io ncs ciice'
nies¿s' tal vez unas cuanias
pasado Ce ta práciica a la aceptación en cosa de ttnos
,.-u.,ur. En cualquier caso, la' r¡ratriz de decisión filal es la
qLIe se muestra en
lafigura8.1.
ELEGi,q
MOBiLISMO
id
Figura 8. i Estructura del problcma Ce decisión a que se enlret.itaron Wegcner y nrás
tarde otros que consirleraron seriamcnie la posi'oiliclad Cc clegir el enloque tr
moviiista.
MientrasmásexactayComp]elamenteentendamoslatotalidadclelosdatosconcer-
nientes a los clinlas de aquelios tiempos, más evidenre se nos hará el
quc' con Ias
dichos climas nc puden adaptarse en absoluto
actuales posiciones de los iontinentes,
y
a ninguna posición posible cle los polos Ias franjas climáticas'
El enignia clel perioCo glacial Permo-carboníiero ellcuentra ahora una solución cie
1o rr,ái impresionorr,. la teoria Cel desplazamiento: direclalne te zrquellas partes
"n
de la Tieri.:. con estls hueilas cle la ¿icción cl.-l hiel0 se reúnen concéntricamente
alrededor cle SLrciáf¡ic¿, lrtego tcci:i el llrea antes (i'rbiei L:l por hielo llegil a tenir un:i
extensión no mly.or qLre la cle 1a glac iaclór clel Pleistcctno :, ; brt el h.-n ri: :rio nc¡tt.
'
210 L/! EX?LiCirciÓN DE L.\,
'li!¡icii'-
Yancsetratasiinpl':menteieq-ü'i¡tecríadelciespl¡¿:Lr-nieltoi'lospro'veaCer-rla
.i f imttn p"ii'oilidta de alguna explicación'
si¡nplil'icación, nás bien noit'"*tt
f
una elecciÓn
gu'o''tti'oC'a por los datos? ¿Fue su elección
i
¿Estaba Ia con.luriO" I
de la deriva' Otros
ba Wegener, fueron p:rrtidarios cn lo generltl ciel enicrltre
que el enloclue de la cleriva
cuatro, si bien se mostraron críticos, opina-roe
Los otros cinco
podría ser fructífero y que, al mencs, valía ia pena cliscutirsc'
y de ellos írailcamente hCS-
,a rnoaraaron más uniforn-remente negativos, tres
tiles.
der Gra-cht'
El presidente del simposio, V/.A'J'M' van Waterschoot van
pi'i.rralo (1928 l9'1):
hizo el resumen, el cual empezaba ccn el siguiente '
la concepción
La crítica formulacla en este sirLpcsio se dirige sobre toclo contra
*"g.n..iunurleladeri.¿acontinental.Losarglrmentosp'leclendivicirseprincipal-
., l¡ ex¡licación de la deriva,
--.-* .n argumentos geoiisi.o, ,ob." trs positiüdad:s
y en argumentos g.or¿gi.o. v i,i;;iá;;itt' contra loi h':chós citaclos en apovo de
í.:, de¡iJa *.g"n.iiu,nu y Ios áo.t,"cu""ciai
que poclría tcner una deriva conio Ia que
propugnan Ios exponentes de esta teoría'
Losfilósolosclelacienciaerrgenere]hantonaeiolitnocióncle..¡r'gutnento',
clc r:tiulciacios diviciidos en
en dl sentido 1ógico, es decir, corno uil conjurito
hetr tratar'io de e rtte ncle r y ev ajuar 1o s a'rgdlnerl-
¡rremisas y conciusicnes. i,uegc
tos en funcióI de relaciorres " evicicrrcia L-s " espt:ciaie:
enire las piemisa's y las
conclusiones. Ei enfoque q'-ie seguircraos aqirí es in"ry
diferente'
Cada uno de los participanies, así coülo slls colegas oe la
comunidaC
prcblema de decisión
cienrííica en general, implícitmerte se veía frenie a un
de Wegener que se representa en
Con una estructura general como Ia decisión
lafiguraB.l.Enlosañosveinte,..eiegirelmovilisl.c',ecluivaiíatípicamente
,aladecisióndébildeconsideraralmovilismocorni-.ciignodepracticarse'La
cono algo que rLo
áp.ió., .ont.oria sigrrifica-ba rechazar el enfoq'.re movilista
Los "ar-
,riío lu pena practicar y sellr-lir practicando el erfoq'le estabilista'
gu*rntor"ofrecidos¡¡ihr-'i-tcieentenderseeneiseüiitiodeloslógicos'sino
I fon-ro hipótesis o datos que se relieren de diversas
nla era-s al problema de
' hecha por Van der
decisión. Eir eiecto, la caiegorización de 1os ' 'argr-trnerrlos'
y datos de
cracht, alal¡z cie ese a,n¿Llisis, no simplemente reÍ-icj a hipótesis problema
al
diierenies clisciplinas. ijsi:s dos clases de argumentos atañen
cle ciecisión de mu;' cliler¿ntes m6'neras'
Es má-s' ei arrálisis teórico cle decisión
ar;í cono el de los comeu-
explica el jLricio casi uni'¿ersa1 d'c ios particip:-ntes'
eran los de
taristas ulteriores, en el Sentido ci: clue 1os argtlmentos Eeofísicos
mayor peso.
El arguil,'::'iio geciisico i tn:7lr siLs i:-rrci-r' c1I '-'i)!ll'i:l ci¡ 1o:; r'roC'eics
cl.
Cg
Wegáer ii'Le ei ile qli' el taite' )r:i illii:r iil¡"io cJe 1a'lierra c sob¡e
'rlilgrlii:'
212 L¡\ E.{PLiCACiÓ}i DE I-.'\ CiEi']CiA
eiia, parecíer iiaber ii-rc¡zas que pudicl'a expiicar el n-,oviirlie lio l¿ite.ai de los
continentes. Cliest er R. I-r¡ i'tg''-, ell , geóiogo cle ia Univers irl ad rie Ya-le, resumió
este argumenlo cie ia siguienie maneia (Van cier: Gracht 1923, 151):
En su deriva se supone q,.re Ios conLirlerries encuentran iesistencia en sus bot des, con
el resultaCo cie que las ro.as se deío¡man prciuctendo eslruciuras nloniañosa:i.
como los A.ndes y las Ilocalics:is. Si esta suposición es cóir:ct"a, las iuerzas imprrl-
soras no sólo realizan el trabajc dc trailsporii las inmensas üasas Conlinelltales;
reaiizair el enc;ine trabajo aCiconel dc enrpujar y clcbiegar ils l'uel tes t oc¿is continen-
tales... La cliscrepancia enirc el traDajo inve¡:ticio cn prociucir mc iañas y las fuerza
que la taiea supone es muy grande. Jefírelvs Ila caicul¿do que las fuerzas necesari:is
prr, rnor", ias Américas hir:ia el pcnieiite eonivalen a 1,zlCC CCO dinas por cerlti-
metro cuad¡aCo; Ia fuerza neccsria pala prociucir las niontairas Rocallosa.s es de
1 00C Cü0 000 dinas por cent ímelro r:uad¡ a'J o. - . La inte nsidacl y la gran n.ragnitud cle
la delormación rflontanosa enlraila poderosas fuerzas. í-os ir,signilicar,'reS e inofen-
sivos esfuerzos cle que he1nos hablado parecen absolutamente inaCecuados para una
tarea de tal envergadura.
Oiros argurnentos geofísicos apillean a felli)mcnos como ei clue ies rocas que
se encuentran por debajo cle ios continentes son má-s suaves que las que están
por debajo de los oceános. {-,rcne, almente se creÍa que no se puede hacei pasar
una roca más suave a tlavé:i cle ulta ¡nás dttra'.
La co¡tclusión que sc cleriv;rrá dc estos argLlillentos es que ia deriva a gran
escala es físícainente itnposible. Y las bases de esta conclusión consisten en
hechos ampii:rmerrte re.oirctciclos y en principios fu Ircliiment aie s de la nl¿is
segura de las ciencias, la lís ica. Su clccto el problcma de decisión es devastado r.
Si se aceptan, estas conclusiones siitlplemente elin-rinan el lado derecho de la
inairiz de la figura 8.1. Es ciecir, eiiminan todo el posi'ole estado de ia realida'l
en que el entbque móvilistr.s cortccto, de.jrndo ian sólo el estado posible en
que el enfoque estabilista cs corrc.to. Ello iiacc inr:r,iiable la elección del
estabilismo pa-ra quienquiera que tenga el objetivo episiémico general de estar
eil lo cierto. Por ailí es por donde comenzaron toCos los criticos de Wegener,
y cionde la mayoría, natur¿rlnente, prefirió qucdarse'
(
)-
-
Pongoencludaporcompletolavaliclezdelargurnetrtob:rsacloenlaformageográ-
se muevan sobre arcos tan
fica. Es inconcebible que masas de tamaño continental
intactos'
amplios y conservan sus per[iles costaneros conlinenta]'s
l
I
i
I r l'rl'i íA
i-¿. E. .?l.lc¡.clÓ:{ ¡F '','
I
214
ml arallll',.1"-qu-t:'in:"^l9l?:i.::
El meollo de esia objeción, segrin I
ccntinenies 1
i
ic; riatcs bioiógiccs tencían a I
#
¿i il;.;; pcü á ;;''
"ch - "'s
e el en rc qu e
i rltl -
ar go,
co no cid as. s in emb ::::U:3: ij}i: i*'ii:: .',?.fla ;:
i j
Fq
J;fi ['# :i ;'; o e a rr an hg e r c I j de
::1",m:x#';B:::i:l"i#*:i:i1!Fl=:::.;;;;i*',,,'r"'i'n"r.'
H:il:;;;;;;;;tná:'-,:",k1":tX1:ll'.:,m:'*;JIJ*T:ii+ll::
un estrrdio
ejenplo v una rcferencia a
:Hlii::T":'ilJI'J*.";;;¿i;;I1
de apoyo' rás \ sr er.lrr ¿e| ¡¡1s'lelo c1e s/egener
estaba Rollin
delracto res mas r
Entre los 'eirernente,] pá'ginrs n,,*eró dieciccho ob.icciones
-, .,. " crtuttt''
En citre o e onrpcndiosas -l " ';:;;;;;;:. Se relcria
T. Chamberlin'
En general, la hipótesis de Wegener peca cle iigereza, poi cuanto se toma considera-
bleJlibertaiies con nuestro globo, y está menos Iimitada por restricciones o atada
por hechos clesa-gradables y rnoiestos que la mayoria cle sus teorías rivales Su
átractiro parece istar en el hccho cle que juega cotr pocas regla's restrictivas y sin un
cótligo de conducta claramente estableci'lo. Así se facilitan muchas cosas' Pero si
.orrld..u*o, la situación en su estaclo actual, debemos o bien moditicar radical-
m€nte las más Ce las presenles regias del juego geológico, o bien pasar por alto la
hipótesis. EI mejor comenta.io clue he escuchado sol¡re eiia fue uno que se hizo en
la reunión <.le la sociedad ceológica Estacloun irie rise en 1r.nn Arbor, en 1922: "si
.ntos olvidar todo 1o que se ha
hemos de creer en Ia hipótesis de wegener díii
aprendiclo en los úitimos 70 años y erípezar todo otra vez"'
patizaba con la hipótesis planetesimal, según la. cuai la 'f ierra se forrnó en'¡irtud
de la atracción gravitaciona.l de pequeñ.r,s trczcs de rnateria. La consecuente
t- compactación y ei calentainiento de ese cuerpo cilo lugar a' Lln movimiento
superficial mucho rr,ayor y merros uniforme que el de los modelos ccnlrac-
-t cionistas clásicos. Con toclo, la hipótesis nc oeja de sriponer continentes y
océar)os relltiva mcnre Ii j,: s.
Ahora bien, la hipótesis pla_netesiraai fi-ie cre¿lción ce T'homa.s c. Cha-mber-
iir-r (paclre de Rollin chamberlin) ),d,e su colega de la Universidad de chicago,
el astrónomo }ro¡est fu{oulton. Pcr supuestc, el proiescr cic geología en chica-
go, R.ollin cllamberlin, tenclría Llna prefsrenci¿ muy fuefíe por el iesult.l.lo en
,1ue el esiabiiis¡nc es coIT.cto y, siguieniio los pasos de sLr padre, eligió
¡. :abismente cl-eienderlo. El que una persor^t¿l así corsirieiara la elección del
¡ enloqlle fñoviiisia como algo si.iiliera cerca-ito lt lo s5,iisiacioiic, le suijcndna
una gran confianza- en los alrntnacicres juirios cie probabiiidad'3
Aunque yo elegí el caso extienc, r.,rchos'¡lrcs crílicos, pai: ejemplo, Bailey
] willis plantean algo siniilar. E1 que los inierests profesionaies ciesempeñaron
un importante papel en la reacción frer: -:: a,1cs raocielos cie la deri.¿a continenlal
se confirrna también por un reci:i'rtfl eSluii,J cuantitativO de Bn cer:tena.r de
geóiogos que ¡,ubiictLrcrt err'ii¡ .1?iÜ y i95ii {3t:':,'art 198í}. Er esie e-qtlidio, el
predrctor rnás ¡rr',.j:;cr:;c cl -' ¡rliir,-t:lcs ii,-lci: ci ;r Lr--"¡i li:'-¡o fu¡ ¡i núi-nelo cie
a)
LA r'xPl-lC¡lciÓr¡ ¡¡', i¿ ciEficiA'
216 l1)
: i'"'"']:1:]::;:;'fi
7e
-
cr -r i
oLrblicacic nes : qr ri rneshib ía n
:1lX'l:iti.:J;- -t)
d. ras public:rcicr
I;';;.i;;,';",'p",t. ttirr?i'r,a,; :,1 :::: ;:
;,brica;ioncs rcsurta una -d
ban denrro cel ira.rco
_, :.::;;
meclida razonable de la.inverstcrt^.::',^:::;":*"."r"I.r,*"f.sydectrotipo
;.
tat enfoque. En seneral,.,11 íi
.,d
tlt tottn 'Ji.,pui:"i' '-':.rc losi"':)^'l't-t-;ii'i;;i;;;;";;. dt ios
;;;:. ,;;i;
I;.;;;;;;;; un imporiante 1r L"-i :
i 1e aprect:ctc
vtgtnt'' Lo único quc queda pendienic
es #d
años veinte hdcían del *";;;",,J
mbjor ro""o ál ttl^i.,tu o"meriir
ese papel'a U
u
r:rrál será la
-¡
La exPeriencia cle Gondv¡ ;tna
ár,
*ts
racionaiista o''^"::1,1,,r';i3:itiT;ilil,il"Ji;
No clebemos caer en la trampa
t;;"i;, ; de olro lipo operarin úrric¡mente
en aqrrc FF
I ar ga resu -
It a,.,.. ";;:ilil,'i:i:.t;:' l;?:l:l':j'l :ffi :lJ ::
t t o'1 u J ?q -¡
trF
i;[1Í:i:i'i;:i'i:;:i:i'";:i,'';,il;"*:^".g:':,I;J*[J;;'::'."T:::: ar¡
jil l,I ::;' : : il i : :'; :: ::J :,: li ; ;: u ;'T;:; :I ^'para
i i á'¿ h
i* po'
otios aún milyclcs
lir'l''ct tcnírn aTonL'( obvias
lo"t'"'ct'
"'pretertr".et I
ar¡
L¡
;;;i::': l.'il'.'ll;', u,: ^r" crach L v N{orcngraa rr ,.-E
oertenecía
:::il'J:l;:i[?
c"utt' t.roi'''ñ'"it *táto'o':"-:::i"
a 1a "ü
amplias conexiones co¡'t t-
¡l
su,lá rn ca y r is i c i
i as qiH],:'
üc :Lrt'r ru :''t" ::i:."::[" X,,:t"_::'JJ; i:::' :i
*- --utin,to "d
timonios geológicos en .lxvor quc
il.'r*i.',J"',rl.n 1" árcr' 'o¡t1tiigl,.il",,,.l.',;r,rl;,;áiuvaiu.""'
de
sup:rcontinente
r=
¡i
il],itiÍ)li:,L"1,','"1,'^"
r€
ras
¿:;;;;;;,Á*óricadersur"irric¿' i-l ptopLu
¿"rasis
'n Ér¡
islos dcl Archipiélago Mal:tv"
""'"'" r..J',re Ia expcricncia d-e
áreas La import
semeianzas geológicas
cle estas
c ondwana se c" "n'*""'i"""!1'"ái:::: :
publtcaoaertttc'1Y.'' i:: *;:,1 ;l:l;::l i#,: :!::"?:il:?
' "lobr..i.n.irs
-q
-fÉ
sobrc,.lcriva continental de IaTicrra
r .i""lj:t::'3r ros ,nare-
iióroiü.",'r'có¿
De 6gcicnritico'
:y: i.::]fil:|,':;;";;l;.1; conderiva.
q-u'^l::::;: De
entre'esos años.
(9i por cref Itu'] irP!'ra"*';;i.^ioor. de la
-
riales de condwana, 63 ., r r o (4g por ciento) apoya-u
)+i.i..,ñit"' ninguna re
sinlación con condu
iitl"Ji'ttulueiS
oXii*
ana;',i:l;1;i;ün
a una conclusión á*itu'
srmlrar' E
q
-
publicero;t el:tr:iJ':l:::"?::l::
ban elenfoqut ot
partir de su mue)lra'^¿t"it^"'it"t uuc
I.i'.0,".," Jc p''rblicrcionc " 1 prcoicrot cxpc'icrrtia cun i;
"lt' ]::L'"i:.I;',:';;J;
e
los m
'"
!=
e
r'nút'
cicnti[icos haci¿ cl *""lil
teriales de Condrvana'
't"'"; ' " 'i¿o "lgun'
o 1 ó g i c o s cl t":":
:
E
q
I
i:'i
:.ij
'iil
t.i
C]EOLÓCICA 211
LA EXPI-iCACIO]'] DE LA RTVOLU']1ÓN
1.|
ii
manera en ias
que gene¡a'n'13¡sstlS científicos e intlu-r'e de esta íi
,::l
ccgnoscitivo li,'i
decisiones científicas' l¡
::¡
y p6l'Fro"{P'GNETISMo
Oce¿t'{ocP'AF ÍA
l:'s teorí¡: ci¿i dtsa¡roLlo cicntii-ico han presup'restc una
A pa-rtir i1e I{'.rhn,
Siit cllii;¡i ro l"''' aigumentlüo
en
cornu'nicl¡cl citniíiicii O""""tt t.'"t"og¿"ttt' de
lt t.i;'":;t;ttltñi ;; s': rlrt r'i 1tii'' ^ ''n el sLtbc¡rnl¡o
capiiuios ¡,.'Lsaclos l1..tt "i'
I
;1
Jf
I
i
I
I
Di-l L"r'' cli-',llci¿\
2ii LA EXPLtCAciÓi'i
d1
J
la fisica nuclear' Ildique'
ffi §',l'#,ffi !
ff
adt''iás'
xii
I
il
,;
]:|; :; *
't" "u'-o-',¡Í:!"!r;:rr{rtiX;:t:;};lf;
rux ¡rii;
w
-1
ir :
quealgop*:.ii?..,:'^1:::;:.,1.".r.,:i.". ce lcs añr;s veiirii y lr,:]l::^:: -d
n'"T/e'''o' *rJr p::;cido:r
40 ai: de "cierrcta
" 7J
'd
,.*il::.i^.rii*;jJ:;:;;'*'
;;' t;" ''::rlilrna" eltr'ri'..tX;;:'ü.\?1?]
normal": la elaboiació n " 'Ii;
;:;;*;; ;:: l:;':i'''J;;;'.;;;ilEn ni"t
f
'iJ*"'"rio
,_rk*,o, 1970) o dc
'o'rsIr¡ie
"tradtcl'¡tits
enconiiamo di.vcrsos
r",ii)iál*r
oiazamienio de hsupcrilcie
j
cc
tcric5:'\
rriv ":f
')' r5u\' '.'
=1":::t
't ties-
nriro con r¡c,-lclos
:"T,ioj,',,r.*.n,.,
r'i::rJrÓ'"''-
r-le
tlcsde [a Segun-
linas eriteras de Ia geologÍa
H ,)
i- ¿-";;;;;;;r'liel vc'¡'o' cI t]"r'ri'¡lio
"".:::":]::.:';r",::;;;;;;p'i't'
quceniosañosvcinieerr.nr('laiir;irriciricsrgnt"tt-'".]o;'., ;;;i ;; Ia .eriva
tn'i" Y
no tdrurn n:Ja rluc v;r ü
l:;J";"r;t 1;'i¡ir¡''"t' ;
d:spués
ccntinental
'"'oori i';'"aró -..^ ^^!--, iññ .iciiette inpod-an'cia
ires 'iiscipill,'-,?::'::t"il':1.'l;,11.
mrln(il'tr' t--l(,J "" ' - t",'J,op""lo"oi ro' FT
t.lc la Scgunda Cuerra nLc cl :istinto di la dcrtva
fi11",^'::: E-
1
contincntal' La tcrcc¡a
puJo hel"-'r I
F
Pero to<1o.tto 'ol"*tt-'lü;;i;;*"
..
vistc ya en-retrospectiva'
Con res¡'ccto
co nti'l'lenter'
jj,m;':ll,i:;x''
I
I
I tu
F
I
:
crlcnt¡lcerca
ffi
*i :.l:l; :l * il dc'o i'J r:*r.5ir :: :'ü'tr
iH: il n il rffi ii Paciñe. '''],;: r".)..,.,*"tt p"t r-
t:;;.;il;;;eldclcont:,núe lrrcia el ilorte' int:rrum"J,'"*b;il;;;i;,
p*iri* óri.rra1 ,o*i¡.u-
9C" r50"
90"
a
'Osf
o
\
60
1
§
) \
tr' $
3o'
N d
0
0'
$ .\c
3o'
t
l)
6o c 6o'
o
l8o'
9o'
I cinturon sÍs¡¡ico I
tFl..r
A lo largo 3
iliguia8.3Pe¡filcei:.clol.slt.ice¡ri¡liitleiAtlániicr¡'Tr¡n:lrjc¡cleÍleezen(1962,262)
-l
L^L./,PLl,'A', IC.: iL : \r'llj''
r'
230
de ccrsales'no es conii'iuo
siÉc que se
Como se ve en ia figura' ci sis-Lcrfla
vio
ti""tot de kilómetros Aciemás' se
clesvía una y ot-ra lez,ti-l
"t*t""tt'Oot
;;"i;;;;;,;;i^:f :1:",.1:*lr:;::1,:ru;T.*,T::".',ll;J.i:Tii!ü
¿""atp"iir"o oriental no tiene det
:H¿u;:t:ili::r;1T:'i"'ü"r=i"li^
ol'¡" ¿ottoits irresentaü une mayor razón de
flujo de
deoresión. Sin embargo, el i3n$o marinc de caca lado'
En
.aior a 1o laigc cle1"i" 'r' l;';;;;1;;;;;;" !
"l;;ill"J;
años:0"üt'..*'' ioiles dei campo magnético alc largo I
rnosirar un patrón'otrt'rt"alnit I
i';"; -v débil'
C'uando las zcnas alteinas se
alternadas de magnetism""t; como 'le picl dc zebra'
craficaron en blanco v ""; "":i '*'¡t'1"-1"t-'1 1::'t"
Err 1960 no sc contaba con irna
crpiicaciÚir
iegún puccle verse en t* fi;'';l.."S 4
I
satisfact oria de est"a Pailta'
rI
El paleo mo-gnet tsmo, f¡
partir cle su estaclo magrrrático
original' como las que
formatr a
Las rocas que se
flujos clc l'u"' p"'"ntun Yn
canle: rn:?T:f.['J]i'"1;ii:ll
;;;;;;;;1",
i';;1;;;; ii,.ttion dil t i;-npo n'rgnético rcrrcsrre cle materiales magnóticos
ccnto
át:1:t
formación. En el estaclo '"a"l"tt"'i"t. t""f::,-1:,.:.'
et hierro esrán libres ,^r,
;1:;,;;;* iegún la dirección del caiapo su postclcir'
átomos van fr'rndo
e n fría y solitlif,tu
tl *"ttt'oiti' t*n¿uitt' estos este siglo en-
,t. 1o, pri,n.ros <iece¡.ics de
,:a;;;;; ;.
un buen número apuntar en
volcánic""ív"' carnpos ntagn:ticos ''lrecían
contraron rocas
i.... i¿, nv r s o der' d" ; ; ; i;''.,"ü ;;i: liXl 3i*:":
á i e
r".:i'
" ":Hil]it":;
propuso
lu"i :".Tp.r1Ti-;::'l;:-';;;;;' É; ros uños vein'|c er gcórogo
o ncru-
¿ ;' ;. ;; ; mues tr as rl
pol ar i'J ad nveiti cla v e i c
) I
i
)
)
) L.\ Il\PI l, \r lr '\' Uu IA RL lOl t r''\ CLOI OÚlL A 281
)
-
) 130'
125'
- O!EEN
) CHAALOTIE
ISL-AND S
) fr B
) \
f \+,,
) j
t
) jr
t 4
) I
í) 50'
)
50' ,:!
) t
)
)
) {
e.
) I
)
)
)
)
)
'aa 45'
')
¡r
)
-
-
I.
¡
I¡
¡t
- 40'
I) 40" 130"
El área positiva oe
125"
a,"rlpo má gnéiico lotal.
- i:igura lttro, de anomalias ciei c
rt
1
Dc
a s,,ls pof menoie s y pi cc1s1(]ll.
Partl
rn3'güetls Ino itveitido.
El r-,¡ilner o dc esios I
breves de
peiiodos relaiivarneaie garila u e Olduv á-1' I
poiasiclargÓn
Escalas iempcrales
1-463
1964
1S64 b
f:--'
1 956 a ín-
1966 b
2 3
0 1
a
)
)
) LA J-,,\PLICACiON DE LA' R.EVCLUCI()i\I
iIEOI'ÓGICA 283
)
7a ya oiros ¿Lconlecimientos análo-
stos investigaclore s habían id¿atilicado
) 1;r'56 e
::j-u*'if
(Doel y lalrvmple 196ó)' cie hace
) ¿os. El accntecimiento ¿t ""
se verá., resuftó ser especialrnente
alroximadamente un miirón de años, como
) importanie.
)
)
) G e o ma gnet is nto d irecc i ona I
)
Biackelt propuso que'todo'el
) §redeclor de 1950 el lísico bntánico P'M'S'
rlébil' Luego trató de mecir
) cuerpo en rotación p.oa,t.Jü t"tpo -ue"¿tlto
de sus e;rpeliraentos no fueron
) el efecto esperado. a,nqut 1ot tesultaCás
pt-i'Jo ctea'¡ un magnetómetro
concluyentes, .n .i p.oat'á ie los mismos
)
sumamente sensible '
Kerth Runcorn' estaba
) Uno de l'cs ay.rclantcs que a la sazÓn tenía Elacllett'
) rnteresado en investigar la posibilidacl'le una
vanaclol duradera en la clirección
lnilgrre tóme trc'prcbó ser ar-1cc:'ladc
) del campo magnético t.,,;;;t, y '1 t'ut'o
na'gréticc rsrl'al'nIe en rocas ci¿ rlivcrsas
) l,ara rneiir la ciirección ¿titápt tt. p"'i:1ó:'^1i^lll3
) La direccióir a*f n'ug"t'tiu'-"t'"t" lu rcca sÚpcnt
eclacles.
qne s' icrrnó la roca -*supcrrie rclo '
) magnético de la Tierra en ei Áo:'lertto en
teilto ieslrecio de su
? por siipLisstc, ,1., tn totti''*-"t t"t ntoui¿c lnienir¡'s
? entorno
--^ inmeCiatc.
R,,r,.orn empezó rnidiendo la cii¡ección
-ir, del r¡agl:tismc en aienlsca ro]a
, británica. Pronto ¿"r..,'rr".iJ"qu. ¿irr.tl¿n ce i:rriipo ,ragnél'ico-de la-s
cjiierclie Ya en 1954 con-
; rocas de diferentes edacles era conside rablemen¡c
iiaba en que el polo *';;;t;;;la Tierra se h¿bía esta'clo moviendo' en
- lo' irlti¡nos cientos cie millones cle años '
, relación con'las Islas Britá-Jcas áttt¿-t'-ttt
s Evjsten tre s tipos po'll* 'V-'tl
islas Británicas esiá'n til "t
-p"i"
cle explicación pa.ra esil ciescu'Drimiento: -1) Las
'"gnétito
sc li¡- r¡rovidc ' 2) E'l poio
la
- se h¿n mcviclo cn rela.ción ócn
magnéiico está fijo v I"''i'iu' Britártica-s
- p c I:' cor-e za completa- de laTierl:r
F superficie de ia il.r,o.;l ai eof c está f,ijo' - ' d.. csrrs explica-
se hl tlesola¿aAo' ft*uilr?l o,:tiLi=t irtt c -'n:hi''r' i^nc;
F tto[T;.orn, ining,v i/'-ennet Cree¡er
- s,s coraboradores en particLrlar Ecrrvard
) rerianc'lte de 1:': ¡ocas Ce varics
se pusieron a medir el car-npo negaático
F
É
continentes. r¡acia rS.o t;iJ" 'gLg"ao
Sudaméii.:a (Creer), ," l"ijlilt"-i"tg;
datc.s de |Joriearnérica (R'r-rncorn)'
y Australia.(lrving)' En la iigura 8'ó se
F muestraeitrazoquehizoRur..cci,cielaposición<1elpo1oina-gnéticopara
(ias fleci'ras seira-1an h¿cia acLeia:iÍe en
?
É
varios contioerrt., ..r trrr,áJr, á-1 ti.,rpo
el tiercpc). Nóie.. .r, pa.ti.,tf t" f "t c''ilas
paia hlorleanJric:r' y Euiopa' Tocias
pcir¡ cclle raagnéiicc Pero las
a
t¡
las i-oc¡.s r-iás reci:ltts ti;:t',., lt¡i:i:' ¿l aiiult-i
-:
roc;.:s n-iás viejas inclicar' r-ir Cii';rg;r'cia e'-'id¿¡lt
j;
cit:l pclc p:Lra' Europa y
i:':tt:' i:' ii;erg:tcia- e: :rprozi-
i.lcrte: réric:... iltla 1:: rcr:: Ziliiiriiicnes ":t.
r¡
2,34 L..\ EXPLICACIONi D¡ LA
'.]iF]i{CIA
rica
1
Eu ropa
N. América
l:
S. América
(Se
Fig. Curvti; del desplazamiento polai' desdo todos.los conlinentes
20.
,"É,"0r"" con autorizaclón da Resoarch ) La curva de S Amárica eslá tomada
OJt<.M. Craer, J. Gecmagn. Gceloct, Kyoto, 13, nÚms' 3 y 4' 154-165
(1962)' -
-
Irigura 8.6 Posición aparentc del polo norte inagnético para varios contlnentes 8n
C
funcióndeltiempo.I-asflechasindicaneltienrpomoviéndosehaciacl
Drcsente. Tomacio de Runcorn (1962,2'i).
#
'(U
E i s i-t s e¡¡ c ii Al,,i iF t irc il E i- l-E c H o i,{ A Ri N c
FI
I
ComO vimcs anteric¡::lentc, el iun¡laÍleltc rnás coirvinceüie paJ¿} rechazer el
ro
.l
¡rovilismo, fue el aigu,'rienlo g;:ofísico de quc cualquiar movi¡nienio lateral a Ft{
gran escala de los coatin¡ilic-s L-s fis;cafient.' iinposible . I)¡rda la resisiencia
c,:mprobacla cie los lechos roarinos, siinplemelic no exislen fucrzas conocidas
que pueiian llevar a cabo ta-l hazafa. Pa-l a cr-ralquiera qlle , por lc demás, se
d,
sinriera predispueslo efl contra rlel rnovilismo, inciepenii':nteil .lte de las ü
'¡
r az ones que tuviera para e11c, esie argumento gtofísico i-racía evicientemente
)
u
)
En la figura. 8.7 se reprorJucel los <liagra:,nas que lccmpañan ssia secció:r.
COIITINENfAL
) BLO,QUE
)
)
¡O .-l+-
7. uo
)
) o
)
,. (
a_
) (,
.l*=-o"o [;agrn¿ b3sá,lilx)
qu. s¡Jb. en clrnenl-rs
"r"ror]\
))
t asc¿nde¡i:s (Etapa a
)
)
)
)
D
r:'res pair;- iiria,;,;í ufl ina{-'árisÍno pui':moiltÉ l)lpotélicc: Ce !a Co¡'!:ra
D i.l..q rz
?
?
continenlal. En A las ccr,'if,ntsg subircpicales se encuontran en ia pii¡-irera Íese
cjel cicio conveci;vo (Elaps. 1 cie la Fig.215). En B las corrientos han llegado a
ser lc s.uficie nterne nte fu.:-ies (Eiapa. 2 de la Fig. 2i5) para apar¡3¡' las dos
F
-
I m¡tades del cont¡nenie, cc,r la ar.nsecuenie ccnsii'r-icció¡ de mcnlañ¿::-, Í¡ente al
punto o'cnCe de sr:.rendsn Iá'.: aoi!-ionf6s y íci-rii:r-,rón cial iecho ocal:r,i':o scbrü el
7 siiio do la brecha doncie aicicndan las corri-.n'{a-.
?
? Figura 8.7 tlorlelo de Hcl¡tes de las corrienie: cle conyección que sepalan los con-
- tincntes y piociucen un nilevo océano. To¡na''lo de Holmes (1944, 505)'
;
F tr{asta Jefiieys admitió cit.ie ei irodelc de i{oln.as d¿ las corrien'les ccnvec-
É
7 tiva,s era físicamen te pcs ibi.. ' 'Hasta doncl3 pue.lo ve j:' ' escribió, ' 'no hay na-ja
en é1 intínsecameÍte ;inp.,3ible" (-ie iircys ',931, 453). Con iodo, incluso este
reconocimienlo tLirzo pcco eiecto iannediatc en ei d,ebate. V/egener, erL la edición
F d.e 1929 de su libro, st e,':-Diesó zptabat-oriarrLiiri? sobre la-s corrientes cclvec-
, tirlas, aunque s¡n citar a Llolni.:,s ¡'ri adherirse él ¡rrismo a la- iciea ftVegens¡ 1965,
F 178). Y aunqr.r3 Du Toii, principal defensc,r dei inovilismo tras la muerte de
-V7eg;::er, acii-rjo e! mcd:lc cle iiclin:s en su ca.píiuio iin¡L ece¡ca d-i 1as posibles
É
c:.us¿s de ia cieriva- r:oiilineriilti, t-;lri!?caiJ Él sl ai-it:ii1ó corlpie '.an:rlia ¿i i:'l ioea
É
(Dir',-oit 19'J'1 , ?,2\-25). lria n¡ j'L¡¿ ii¡c::¡ri:i i:¡:l¡,i:lio llas¡a 3C iLñcs dcspués.
É
ó
CJL:¡'Ci¡\
i
I
1
#
*
2E3 L,'\ EXPLICAC1ÓN DII L;\ arr)
r-
I
t'ncr valor
Sirtcmbargo'd:b'mo'len:rlrirlltl'Lro1u^las'i''e'r'Durlincnl^ccP:'trlativlsdecst¿
ripo, especial:ncn't tl'f'o'ii n:l'.',:¡t
t;";'
i'[¡cc'-
.icnrílico h:cta qur 'tt';t; "' \r\''nrr1''io'""i"nt.'
J"
.e
l ¡ ' r's ' '.'1.''ies ltc pucJeiL
l]i:Hil i:;:?ttJ:;:[tj]t::
#
'7
i'r:ll' ' corr\'crrvu' 'l'.;;,'r;
.o*oitiia'J dc
,ur'.,t"itto"oplta:
l"
inlct''L;'
l.q l"t''lt'l''Ul""1uc bierr
i'-rrr " \ tr'rrr 'lor:rdcl'']t''.'iii"]."il.,'i'l'lt'tll'','^"'
ji:::;lxl:ui:;'ll::i "''¡r
¿ r v n¡'c Fl¡
;";,;." n"..,i' "'", ":ü:¿:l;
ntático anles dc qrLe Put
:,,1* :
l'
t¡trtrtrto
El modelo cle tless del enstnchatttie o del Lecho
de Princeton'
LIéss' pro.fcsor de geología cie ia Universida'J
Eu 1960 Harry N" p¿ra seguLt
de fu"o"'tni"o"-t'tttiuut ' :,:::'preparaüo
revivió la
iclea
a
I,A tlxPI,ICAC'IÓ'\ DE L,A RL-VOLUCIÓ]\¡ GEOLÓGICA 289
baio las ciorsales, nc ba]o una masa de tierra como el e1 modelo de Flolmes
Con todo, las consecuencias de ambos modelos movliistas son pareciclas
Según Hess (1962, 608-9):
La Dorsal del Atlántico l¿iedio es central debido a que lar zon ls c on ) ictivrs que tiene
a ambos lados se han apartado a la misma velocidad: Lrn centímetro por ario. Esto
no equivale exactamente a la deriva continental. Los cóntinentes no van arando la
corteza oceánica empujados por fuerzas ignotas; más bien viajar pasivamente sobre
el materia.l del manto según éste llega- a la superiicie en la cresta de la dorsal y luego
se aleja de ella lateralmente.
Figura 8.8 lr,fodelo de I{ess para las corricntes convcctivas y el ensiinchamiento del
lecho marino. Tomado clc i{ess (1962, 607).
Esto suena muy parecido a la ruetáfora de la "banda sin fin" cie Holmes.
FIess (1962, 107) admitió que "la convecció¡r del rnanto se considera una
hipótesis radical no a-ceptada arnpli¿.mente por geólogos y geolísicos". En su
defensa argumentó que "de a.ceplarsr, ...todo un rnundo de hechos hasta
ahora no relacionados sc aj,.istarían a Lina pauta regulai..." E,sto se aserneja
mucho a una apelación a la "unilicación" o inclusc a la "eiicacia para resolver
problerna.s". Sin embaigo, poi supuesto que Hess Eo coirsideió estos "ar-
gumentos" como bases suficientes para deciciir que e1 modelo era coriecto.
Tornando prestada la expresión de Umbgrove (19+7), enpezó su pianteamien-
to llamándolo "un ensayo de geopcesia". Y linalizó (p. 618) en una vena muy
semejante a como lo hizo Holnres:
LA HIPÓTESIS DE YIi'IE.i./iATTiiE\¿ S
e n:i,:on**::
a
*¿
....ptlrri.n cuanto al rnocleio de Hess y' colllo resultó se¡' pocas estaban cn
a É1'
u,ra situación ian favorable pera adtierirse
Yine, ccmo Wegene r y inLichos otrds ¿intes de él' aÍirina que lo había
intrigaciolasentejanzadel:rslí¡rcasCostanerasdelAtlánticodesdelaprirnc.3
las observó en la cscuela' Y nos cuenta
(Frankel 1932' l2):
".r-,i;.
ñ,fe nareció algo más bien t'lisico, rnás bien funCalncntal A partir de ese momento
rl" J"""""af o.su verci'ic1;r:¡a iail -se ncillo yelc3ante Así que siempre estuvc muy
(Jreo que sienlpie' a1 cstudi¿ir geología' blrsquó ics
iouo.nbl"r.,"nt" dispuesto
ii*onio, que confirmatarr rni prejLticio'
q,.re él
..creía ett ei enllinchatniCn[o, O c-lescaba
En otra- ocasión Vine clestacó
apuntamientos semej an
.r... * é1" (Glen I .oAZ, 21g). Fr'n cl ccntexto estospropiamente "científtco"
;;,;;;r;, "n ét r.ntiao á. .ir. ¿r no se mosrraba
::;:":;t;;, l,,1i interptetación es precisamente la contraria La existencia cie
:;r.;;;;;ll ccmo lo; ce vjne es 1o norma.l en ciencia v contribuve a su
progicso general'
F.t otoño siguiente al congreso de
enero Ce 1962' Vine volvió a Cainbridge
.";;";;ilii. a. norr,¡lc rlel Deparramcnro de Gecdesia y Geolísica.
del lectro
ii.*¿, de sus prejuicios 1r dci modclo hessia.c ciel e¡sanchamieffto
rnarino,ContabaCOnotropoderosorecursocognOSciti"'o:unabuenabaseen
que original ente sc había especiaiizado' iil
maternáticas y lísica, .rn,po, err
licenciaiura'
poro u f u g.oiogía lo riio ya a'"anz-a.ia su
de investigación' a
vrne fue rri á.s o mengs asignacio, como esiudiante
su licenciat'¡ra en Cambriclge cn
»ru,r,ilon¿ i,4althews. ir.'iaithews ternlinó
I is
j. l,,.ro :i incolpo; ó a rr na e ;t'ledic jón ¡'ara reaiiza:- cartoeral-ía geológ\r:a
,,
a
LA {:)<pLlCA(.i(.,¡i Ci, L,l Ri' VOLLJT-l¡i)i'r ChCL.ÓUiCA 291
,,vaya, ...si ho crees en la deriva continental nada más coge una cinta
lAdie] clijo
m¿t.ióa y miae lás sccciones devónicas en ias islas F¿lkl¿nd" Lo hice, y muy para
mi sorpiesa, eran iguales que la clescripción [dada por Du'loii respecto de SuCá-
'Coincidían
frical. pulgada a pulgada. Ásí que volví con gr:tn entusiasmo'
;;;l;;;", plbiicado't.:ii;'l;J,;';ii;J;,-:.,'#
con aur.:
l'i.;J..i,l'" r", arLicuro
nire Vine realiió
i9¡3' 9-r'E) r¿za:
ivin. v Matthews
os u:; I
i:;i.l"'-.;",1 ;[+
pe r ril es co mp' a c -,s P--'1
os l,i;.:" 1 ü:i:ilil, I:XTH I
c
r-
brcqucs cireros
',.",:1,?;:U1Hi:i",:,ñi:;;;. "^';1..o-ou,uda pra un dtvrdt
L¿-:t:::,1'i:,t"i:":'.XiX^'..
nro.d'Jo
o
300
-0
0 ,300
,300 300
300 0
0
- 300
,300
GAÑ1¡,44
, ' l OKM
la dorsal
y compufacios a lo larg:de la cresla de
Firr. 3. Perírles ob'crvados
o i, ü * i
"á,.
L as r n "- a
el "
:'c.;;I :
í
nzrgletizados:
J
I
\
f
L
) LA Expt-icA,cllÓu »t- L¡ nrl'oi-uctÓN cEoLoGICA 293
'1
geologis. El que pucliera ser correclo no fue eviclente para casi nadie'7
(Vine y
El irtículo concluye hacicnrlc una- bÍeve relere¡-rcia a otros mcd"los
I.latthews 1963, 949):
E
0
0
N -300
-3C0
¡l
z oo¡ls¡'- ¡rlÁNltc'q
3CÜ
300
E
0
0
i N
tl N
-300
-300
N N
N
,300
-300
10Kiv] GA[/Ñ14
'_;10Kivi
s ccrn¡ur¿lc!¡s para
ciii:rentes rnoCelos de la co¡1eza'
Fiq.4. Peííiles rta3nliicc i\r nG.r],jalr]c nie magneiizacics; blcques
Btfoues codicarjs tl"t-ltl.il"r,''.-jol é"'-¿pitbilida'J eíectiva cje los
'
som'breados, ii-"";r::;r'e 'it- hri^ Al válle intermaclio en los perÍilas
broou?s, o aozr, ",..p1o 113i,,?""
de,t^ici" ái.ti1i¡i:ll ;,i,.Tl!.:ii.;
i;T:i;j
2 y 3, 0.0053 (1 ) Brazo. án"ni'., del parÍ:I, i"l
r
rncl;nac;¿n.l^=.?"::';i"t;,.;;;;l-6s.;r)-120"
" (3)Dcrsal Arábigc-indico'
del Atlántico '.=."r=-
""-u^'.",,1,",'.,,'',r" h¡J
t-0.3/6 : J-04'l-"'
oersied:
' )\ lntrdclos rlc ciorsai:s occátri'
;; ;*iii*l *",,'
-e
TJ
::jl :j.''i;:,' ll:'.ll' :: i
gu r a s, ?:r nii,
+;#:l ; l;
0 n¿
Fi
.É
lan ournals L'imitecl
tJ
s--d
J
l
DE FUCI'
LT\ DCS.SAI- D3 ']U,']'}'{
La gente simplenlente
globo con lastre; en cierto senticic no hubo respllesia
juicioesccnñrmaclop'-'rlcstestimonios
pasabade largo" (Gien 1932,281) Est:
de 196;t hubc dos simposios
,"uf iü.or. En ro pti'uít'" tl "tuno
"or. * y
internacionales dedicados al tema de
la denva cortinental' uno en Canadá
Bullard y Runcorn 1965)' El
(Carland 1966) v otro.en Ingiaterra (Biackeit'
aurnenta'ba Sin embargo ' en las
interés en la deriva conllnental deflnitivamente
a'oa! ece tan sólo una referencia a
versiones que se pubhcaron dc los simposios
naturaleza crír'ica'
i;;;; ;. Vine-Matthervs (Vacquier 1965) v esia es demejor la naturaleza
El siguiente acontecrniiento intiot'ntttt ejempiiiica
evolucionista " ol.utorio" át l¿rcie ncia
Harry i{ess y 'I ' Tuzo V/ilson' principal
reórico geológico de la i'l r'ive isir-la¡l de
Toronlc '. vr:;iió Cambridge duranic 1a
pcco
acababa de iermi¡i¿ir su tesis' puclo tener
;;;;;";" ¿e"tsss. vine, quien puclc h;rbe I previsto su repercusión
[r.'r., .on A inicio de ,,,, ' i'it''' ' Tt*poco
para Viue a¡rarte de sus ccnsiderables
en su propio trabajo. Lo que contó
consislente en hallarse en
l...r.ro, cognoscitiuos, flt" el rtt''tt'o material extra
y lVilson'
un Iugar qtte a'traía a gente coiro IIess
con su familia' en uná
Wilson ilegÓ .n .nt'o V-poco tlcstt'és se elr'lbarcó
t,rave sía cie yaie a 1o largo áela c'¡st'r Ce Turqiiía
Yclvió e n ie brero' rel¡osante
cie ideas nuevas. Una de eil¿s era
que la hipótesrs rlc Vine-Matthews suponja
debía ser 'sirrt::!ricct a arnbos iados de Ia
Or.l. Or,,t" de inversiones 'nagnáricas
r]orsal'Errelr.'roclelode}{ess,elleclrclllri¡l¡secxpandeaarnbcslados
de la dorsal. Attnque cso era obi'io
en rettospecrt'ra' Vine y lr4aithev¡s no habian'
adverticlo este aspecto cie su propia hipótesis
Cor-ro'/ine Io expresó más tarcie'
i-'ri-p}.,r.n,. ,,o ct"íamos en 1a hipótesis 1o sr'rficiente como Dara darnos
.u.riu"
"-;;;, (Clen 1982, 305)'
de las nue,as iieas c1e Wilson e ra¡r l¿r.s ;fallas de
r ran'sformación
'
desarrollo lo que llegaría a conocerse como
.on..pro crucial ¡rara el ulterior cie
de límite entrc l":
i..t¿ni.o de placas. El nrorielo clc Hes: tenía dos tipos f::ltt
de la superiicic terreslre: Ias dorsalcs clonde se agrega rnateriai
en movimiento
,.,p".ficlaf, y Ias quiebras
-el cicnde a Ia larga vuell,'c a sumergirse en e1 manto'
i.,iirr"" i.rráau.jo tercer tipo de límiie, el q.e cxiste entre las secciones
rlas de 1i doisal Ést¡'s sou las lallas
adya,centes, aunque t:LttJ*t¡tt de splaza '
C¡ iranslormación.
o e iiizo. Wiison (1965) de la Falla
En Ia- figura B. 1 1 se re prociuce el bcsquej 'll
¡
I
I
I
I
2C 00,¡
n(,
Z
H
#
'a,!
al
¡t
o
;r
t
¡I ar
il
',F
Yal-
v
ffi
c+
Íso M
p '-l'
aa ,,.2
o tll"c
j
D
¡() z
que él y Vine
Como se vio en la frgura 8.4, 1a nueva clorsal cie Wilson'
aparece como una
nombraron Juan de Fuca (por el est¡echo cercano a ella),
inciinación noreste-
cinta negra y anchli an al aan,i:o que ccrÍ' coil i'l?' ligera
r'l
500 i
I
I
0 GA¡¡rv'iA I
500 l
500
,-
O GAIVIfvlA
F-
taql
r-
500 #
:-
(c ) DOBSAL DE iUAi"l r)E FUCA' MODELO 1
500
fl
FA
"-
0 GA¡/1MA -
tra
500
{.
,-
100
1OO KM
. S.L. ilI
- 11 l(fvi
F.r
-
Pacífico Oriental alos59oS'
ha
iiq.2. (a) PerÍil cbse¡'vado a ii'avés de la dorsal del
.'Ir'óñ iiá1. (b) periil obse¡-vado "b" a rravés de la rlorsal de Juan de Fuca ---
iig.'.1.1.; i"l*l"lo. c¿:iculada paia' la cjo¡'sai de ''!uan de Fuca'
tri^=" "''nornalía (cornpár-ese con la Fig l c)' ¡
suponie n.jo bloqúes ccí!:cales geneializacios --
.l
L
a
)
2
)
t.
r)
)
i-A F)iirt-la'¡,allOi'l I)E LA RE \'()1-Ll(lilifl CiiOLOCIC'/i )t)t)
)
a Yo proverría.le un D.partamerrto cie Ceología cie 1¡'
LiniversiCad de Columbia
Iiey' Walter Bucher' Joe
l. absolutamente contrailo a Ia deriva continenral i"Ía¡shali
W;;."i y los mrtchachos no querían saber nada de ell:;.era anatema
Erving era un
¿..fuoáo anti deriva y el iíáer en ccntra cle 1a moviliil:rcl' talto
) intelectual como
F emÁcionalmente habiando. Jim tsIelrtler y Javier Le
parecida.
Pictlon pensaban de manera
)
¡ años' lo resume: "ia
Como Ellen l{erron, estucliante c1t posgraclo r1': cso:;
) lilosofía de Doc Ewing cle que los ccéanos eran algo
ptrr)anente era 1a línea
) rdeológica de Lamont" (Clen 1982, 313)'
y l¡'. fuerza impulsora de
É MaLrrice Erving fue el funclador, en 1945 , l'"rego
munco en
) r-r,".^i. gr r" h¿Áía llevado a ser uno'1. de los centros pioneros del
u ¡r..tig".i¿n sobre geofísica m¡-rirta arlbiér era' tn ci dece¡rio ile
cle las-personas más resp'lnsebies ciel clescub i ünicrll o
1950' Lrna
cle clue las dorsales
) Es i¿lcil conjeturar quc él
l. oceánicas Consf-iiuían,,r, ri,i.,.,.,, glcbal conectaclc.
a tal siste ma conlo s. propieciaci ior¿leciurJ. Si alguicn habia
cie
) "..:iá..",r,
tec¡izar a propósiio Cre su sigrriiicaric verCaCerc' seria éi' o cuanric
menos
¡. Pero
áigui.".o,i qri.n él pucliera esta¡ incondicional mtnte cl¡ acuerdo.
eso es
perio'Jo 1965-55'
) .rie.utociOn. Exisren dccumentos publicadcs, artÍculos del
I provenientescleLarnont,ccnf,.tertcscrítica-s¡i]ensencha'rnierrt"oc.leliecho
- il".inu'V a las hipótesis cle Vine ldatthervs' L¿Lno¡tL era ttn centro importante
1l'ina y a Matthei'vs'
¡ donde no se pasaban por allo a
a ljn ar,,ícuio (Heirtzler )r Lc pichon 1955) se ¡:r-, ierc:¡b ¡i en
períiles magnéticos a través cl<l 1a clo:, sal clel Atiántico. Ei
el an:ilisis de 58
párraio cedicado a
"es claro' por este estu'lio'
- ia tripótesis ae Vine-Matthev¡s concl'¡ía (p 4028):
h +," iu *oyo. parte de los pcriiles no se ajusta
a l:1 pli ta que sr'rponen Vine y
¡. '-p;ot.roartícuio(Talwani,Lri,ichonyLieirtz_l:rigó5)seanaiizabannuevos
datos cle les ilorsales c,el iacíiico orientai y cie ir-ryi:j:r.es
al suroeste cle
)
s¿ccicin a señaiar cinco prcbl:-
isla;rciia- En esié ariícuic se clediciba lina ,breve
f. *.¡ Jrir;¡¡.lpóresis dei Jesplaza.r.i.,iento, . se deciica b.la'ties veces rnás espacio
) ccn cual "ei mc'¡imiento
a e'iabora¡ ilna "hipótesis aiieinativa'' cie acuerdo
F
;¡ importanie sobre las zcnas
rde fraciura, Cebicio a' la icrnración Ce la do¡sal'
sería'entonces vertic¿il, rrc ]roiizoiriai" (p' 11f
i) i]os páriaios ciespués ponían
¡. de relieve,la irnpoi-rancia I :ie, er su ccncepto, tellia
¿i sists¡ia de dorsales
¡. cc.'i.nicrs ccillrales rle E'' :::l:
l¡
F
r¡
En nu:.:;t¡o coj:::j?to, cs r.h:-isr':o :i i¡LltltS lie visia:lcglirr ':Lcu¡-i
ei principal i'elór-tenc
q* ara o,,'.,¡.,u, a: cl si.st¡,rl, cil d:l 'r"i:s ¡cei"ilic::'s c:l¡:ir'lltl' ''llra el{i:teilcia se cii'iva
t
I
I
I
I
p'r:exlsieníss en las.propie-
c1ecambios en el manto subyacente V¡-iaciones iccales
ia localización exacta de la cresta
dacles de la corte., y ei munio superior deter¡rinan
cie f'actuia no son
Jorra, V pcr ta-nio ios clesplazamienlos veiticales sobre las zcna: siste¡na ie dorsalcs
topográ iica dal
nada más que detalies impoiátes cn Ia expresión
oceánicas centrales.
er una
Otro artícuio (Heirtzler, l'e Piclicn y Ba-rcn 1966)
se enfcce,ba
inves'"igaciónrnagnáticadeladcrsal'JeReykjanes'realizadatnl963yrepiocc-
figura B'13 se muestiauna
,u,lu pá, Heiitzlei rnediante la cotnputaclora En 1a
la recienie-
,".rián de1 perfil de l{eirtzler' Es sorprendcnte 1a semcjanza con
dei úitimo trabajo
n1.1* ¿.r."frlerta clorsal de Jua de Fuca, pero la noticia
de La¡¡ont echó dc
l. rlt" fwifron aún no ilcgaba Lamont' Si bien elnogrupc dcl ens¿rnci-t;r miento del
ver la simetría en ei perfil, la tcnró como prucba
cle la pai-rta nagnética por
lecho marino, sino simplen-reiitc de cieito contiol
materialsituadoenlat]orsalccniralobajoella'D:dicaronunascccióndel
,,iiipótesls gcolósicas" quc pcclía.n e:ipiicar la pauta irLagnética
artícu1o a las
cle Ia siguiente manera (P. 44C) :
o
2'N il 62'N
B
(-
,l o
ts 61"
o@
)'
E4
Si§ ,$
60
e0'
€S
c I
B/ TP 5S"
590 E3 O:!a
A ',i I l:
C
E, B/ C,/- 58" N
58'N ,.\ 23" W
33'W 31'
da anornalfas
Fig. 7. PatrÓn magnético dol árse invoStigada' Las ároas rap16sentan
politira. dn la Fig. 5a y b ostán eombreadas' Las rayas cortas
itólr"" o" ..""ánu" is relracción síernicas do la Fig S Los círculos
reprossnlan epicantros do tgrromoios'
FisuraB.l3PerfilmagnéticodelaciorsalcleReykianes's9gúnlIeirtzler''lomadode
Heirtzlcr, Le Pichon 1 tsaron 11966' 415) '
de que apareciera
En este caso la relnbución no se dejó esfierar' Antes
de I mismo
impreso el artículo cle 1966, uno cie 1os grupos cle invcstigación
a 1'/ine y
laboratorio cle Lamcnt volvió coa dlttos que ilircyrb.In ciecisivamente
:!i3ii-hews.Yotrogiltpo,qLlee!][onie:]Lrab:lj:Lbr-titi-liiloni'eslal¡aa-¡unto
de co::roborar con ..i¿tos ,i5'rn .'t'tl asp''lrr' ¿ f '¡¡lir de este n-rc)lnenlo
ia
I
1
I
eciivi.lac se y.,_ielve tan a.gita,ca, ccn iineas de inv'esiigación tan diveisas que de
pi.crlto ccricuiren, qu3 es l-iiiíri1 pÉseatai ula relació¡ iiaeal de los hechcs.
Fuedesprrésdelal''laviciadanterioiaqi-ie,'ritinaryilerronreglesarara
analiza¡ los datos del Tramo i9 de la investigr'ción de Eltanin' Ese resultó
ser
proyectadas de
Ilecueido que rlna noche entera nre la pasé'¡i':ndo ampliaciones
p",¡f.t, toÁu.¿o simpleni:nle los datos rle anomalías magnética's y haciendo ligeros
perpendictriar
l¡urta, pum q,,. se vieran ':Orno si se hubiera recorriclo una trayectoria
,i .j.A"toaort¿.PeguéenlapuerladeOpdyketodoslosperfilesde-E/1a'rin19'20 en si'
y zi y o,"fui a casa u C.r..rl.,i, un rato' Cuando regrcsó' ei hombie no cabía
!,tuúo conutnti<lc que habianros prcbado l¿l e'tl'ansión del lecho ¡narino Era
la
entrc los perfiJes: Ia co¡rc-
orinla.u u", que pocila ,".preciarse la absoluta setnejanza
iación, anomalía por anonl:rLi:l El aconte ciniento absol''ti;t mente crucial
eia la
srr¡,etría bilareral *, L!tt¡ni¡t,'9. Lf na vcz que la 'rió Cpdyke
exclamó: " ¡Eso es' io
Iograstc I''
303
RE\/O L, UI] IOI'] CECLÓClCA
I-¡\ E}iPLLCAC]IÓN] DE L¡'
GANIMAS
fl l^ tr I ,¡r!o
r cro
¡/r\n¡'r" l^"
i *,r,.^r,^,J',U/r¡/"¿{u\¡JL
10q0
-"I 0
A,t"I\,t/^Av ] Kl!{
0
L XM
,1
or
) ! llr l*i:Ii-1-:,ÍiIr--IJE3 l 5
.L
r *Y4 2
s lOMY
a 6
l
.,Í¡ Hil ",i;' iS' "'# 'ji': "'ti
I
ol períil Eltan¡n-|g ano alías nlagnétlcas;
Fiq.3. La.:urve ri:eciia 'it'á'punn
rcprescni¿l -da Ói í¡cCelo de la do¡-sal
iní3í:or etiti
el Doni3nie e'lá a la o"¡."t"^
-r
i..ip"*''.ülu""es rjr año: aliás) ec relacione con
Pacíiico-Á'nt:'r' iic'' Le cscal:
ilo '"r'5 cm/año' Pued:n
la oscala ds clilanc!a p"' J"ul¡:-' l'n=a"l't'n.iitnio
verss ras épccas
'J
masnát'""';';;;;t" *-'^o"T["J: ':f: ::::::t3r?il'
'
ii:i;:l::ll'-";'*J#;l:;:Il', [.,.'' o:' ;:"'%1":; ;:'""="' :
"! "' .''" o
t-
.lo cie rnoma'líar'
cor'l]DUt.
n srno en ese rroroento aio teiia rJn inteiós pioiasiclai csircciaiiaenie íuerie c¡r
el estabilisrnc. Su inte¡és plciesi.;i-,a1 ir,rnedl¿itr; era el de glaiiua'rse.
El cie |Ieirtzl;; os ur caso d;.ii1ri ). S.-3uit 1: n¡'-l r'; Dldykr (Gien i 932, -:35):
Heirtzier decía q''re el períiléffa¡:i¡¡ ,i 9 era cieirasiacic perfecto, pror-iuctc rje cor¡ic¡r-
tes eléctricas del rnar,lo sriperior, ccn tal de evadi¡ Ia hipótesis Yine-l"iatthe *'s.
Lograr que Heirlzler canibi¿¡a d: cpinión ai ies2ecio luc un prcceso que cir.rró
alrec1edr-¡r cle un ¡nes. La r'¿zó¡ d: e:to fue que el verano antcrior habíamos teniclcr
una acalorada discusió¡ sobre los lrcs artículos publicados pcr Heirtzler y Le Pichon
scbie la dorsal central dcl Atláritrco... Dijimcs a Heirtzler y a Le Pichon que
probablemente estaban ec.uivocadcs, que nc pcrlían pasai por aito las inversicnes
magnéticas como una posibiiiCad en el ordenamiento Ce las anomaiías magnéiicas.
No poriían aceptaÍio. Y lo q'le drjinios no les afectó en ic más iníIrimo.
Este no es tan sólo un casc c1e "cxpliczLción del error" dei científico de parte
de sus colegas cientítlcos, como lo citscribieron Cilbcrt y i/i:rlkay (1984). NIos
habla de ios poCr:rsos intere-ses profesionales cic Fleirtzler rcspccto del cstabilis-
mo. Sin er.rbargo, tanlbién irricn,initron los ¡ecr¡rsos cognosciiivos más ge.re
¡ales de Heirtzler. Como señala Fitman, "i'leirtzler no era geólogo y no lo
apreció" (Cien 1982, 335).,8n eiecto, Heirlzler ni siqr;iera sc entrenó como
geofísico. Obtuvc su tílulo en t'ísica,r, llegó a Lainont proce de te de 1a Ceneral
Dynarnics Corporation, donde }i¿rbia trabaj a<lo desmagneLizandc submarinos
nucleares. No conocía naia a propósito de la.Jeri'¡a contincltal aittcs dc
confrontarse con 1a hipóiesis Vine ldattl,.e *'s (Frankei 1932,31).
Casi desde sus principios, los rnvcstigaciores clc Larnont habíarl recoiecta.io
rnuestras de núcleos ciel le cho rn¿lritro pror'uiicic. lnspiracic Doi estudios a te
riores de pa-lecmagne'r-isnto e.r nlue:jtras sinLilares, Ewing habia intentacic sirl
é;<ito d'.rrante muchos años ier .stra-r la viabilida,l de iaies esluclios en Lamoilt.
Ante el crecierte interés por cl paieomagnetismo que sc dcsp'i.tó en la comu
nidad de geólogos a principios c1e los ¿rños se:jentá, Ewing volvió a impulsai ia
idea. En i 964 Lamont ccnira.ió a lleil Opclyile con fc ndos pi. opoicionados por
la Oficina de Invesiigación lrlaval.
Opciyke, o¡iundo de l'{uei'a Jcrsey, había estudiado su lir:cnciatura eIr
Colu¡nbia, como se dijo antes . ToCavía en Coiumbia, sirvió de ayudante de
campo a Keith Runcorn, cluien estaba en Estadc's Uniclos recolectando mues-
tr as para cl programa de gec:inagne tismo .lireccional de Carnbricige. Runcorn
inv jtó a Op¡yke a ira'üajar en urt posgrado cle Carnbri'Jg. a partir de 1955. Éste
sigLiió a !-uncorn a, l'Ie',vc¡st1e tlD.Il-'i'yrle c ardo fl-uncorn ciejó Canrbri'lge '
opdyke esia'oa eilionces c¡r :ti cr:iri ¡o dc lLs rirscr.sicl-les so'iie los r¿óriios
Li, L\i',i-1r.'.i(- la)N i,rE L,'\ PF-t'(1i.1-:allof'l clEoLÓCiCA 105
En parte por
piezas importarLtes Cel rompecabezas'
Sólo ialta una más cie las clei
irLvirado a fo¡nar parle de la Facultad
su alnistacl con FIess, Vine fuc
:lon' a partir del otoño de 1965' En noviernbre
clepartarnento de I{ess tn Ptint
Ia Socieclad Ccológica Estadounidense'
\/ine asistió a 1a reunión on*"f O" liuca'
y Wilson p""n'o'on' artículol; sob¡t la ciorsal de Ju¡rn dc
doncie él "sconoció a Ilrerlt Dalrymple Recuerda Vi¡re
Lo clue es rnás imporlantt'' Ul"t
(Cicn 1982,310):
GECLÓCtCA 30i
L-;\ }:.'(]:'LI CAC JOi'] DE i-A,REVOI-UCIÓN
F
-l
:¡
Z!
c? 1
,l
1t
§
si
¿9
{
I
I
I
I
resultarlos.lel esluclio ú'n ¿rl eslratillraio n'agné.llco de sieta
i Fio 1. correlación cle r¡ueslras
;;;;i,;;;;;;;;ü-. á;j Á;iá,i .o Lot slrrrros"mL-rro!' rnd '"rn que las
i ;;i;;';;ñ;i.;.lai'Áoimalme¡te, los s gnós 'rnr;"q rE-i'srae se encuenlran
manera in,ert'ti", ios-le-t'¡t grLd!¡' teir'1 a. las zonas
con f auna
;;;;¿ii;;;;;;" r¡arca (1'2) lnserción
iiii. Ei átrr"tlqt"fo magnéiico, ."1,Ánut izquiercli
I cJesde
I
I
o riqe n de las muestras.
I
I
¡
il*
por sedimentos
Figura 8.15 Comparación tle Ias in'¡ersior)es megnélic?"s reveladas
profrrndosdel,ariosl,.rgareSdelAtlániiCosur.TonadodeopdykeyCols.
(1966, 350), clerechos resetvados 19óó ¡'';r ll 1i AAS-
i-omasimpoitante.i:1i.'reutriói.,illehaberco:til¡lilila,.IirenlDalrynple.Enuna
convers¿rciói-r pri'racLil qrie rla:iitlvir-llos cnile rln? \'olril
sesión' fr'e dijo: "Creeinos
3C3 Lr\ EX.OLiC.¿',CiÓij DL I-A.IEJ'ICIA
h-abe¡afiitadounpccolaescaiar-ieirversiónCe¡cia'ricilC,pe¡oenpa¡ticularherlos
cleiinidounacontecimieniCiluC},o,clacontecin".leiltoJa¡arnilio',.inmecliaial'ncntc
dc iruca pcCÍa
me cli cucnta que coil esa nucla escz1a ternpcral' la dcrsal Juan
era fantástico'
iilterpieiaise en función de u¡a razó11 constante Ce expansión Y eso
de lo que
pcrque nos dimos cr,ie ia Ce quc e1 rcgisttc estzba nás cla¡¡';nenie iI'presc
habíamos previsto.
üormal que
El aconiecimienic iar ainlLlo es e1 b¡eve ptl;o:ic dc nia¿il:ils;ito
se ve en 1¿ts escalas
se dio h¿1ce airecedcr rie 0.9 niiloires de años, como
y Si ilsoil hai:an co¡liuit-
corres ponciie tes a 1ló5 ¿1e 1a fleura 3 5' Comc Vine
que la r':zón
Cido eiaccntecimiento J:-.ramiilo con e I Ol'iuvai, habian conciuido
deexpansióndellechomarino.ramáSbienirregular.I'iechalaiclentiiicación
nd entement e consta'nte'
a.Jecuacla, la razón de expansión reslrlta sel sc rpre
Diiiere, sin embargo, stgiin l:r región del Inunclo cic que sc trata'
Una cie i¿ls
cosas que ha-ce que el peifil i:'!lt¡¡¡n - /9 sea i infc¡¡i-rativo es la razórl de
expansiónielativa,menteaLtadeladolsalcicli'acíÍlcoAntáriico:45centí-
incluso inversjoncs
metros por año. Bsta ra-zón tiace que puedan observarsc
relativamente codas.
de 1955' Eso
Vine visitó a Opdyke en las instalaciones dc Lamont en febrcrc
jón de los grupos dc Lamoilt en toino a los pcr filcs
ocurría en meclio cle Ia exciia.c
Lcs cientiflcos de
magnéiicos de Pitrna¡r y a los esiiirlios nucle¿res cic Opdyke
0'9 milloncs
Laáor,t crcí;.n haber clescublertc un nuevo acontecimicnto en
de años. Hasta había.n piopuesto un nombre para él
\¡ine dio Ia noticia de ciue
el mismo
el grupo de Co;< y había cicscublerto el aconteci¡nicnto dándole
vez' pudo ver por primera
nombre rle iaiantillo Creck cn i'{uevo México A su
qucdó sorprendido por
vez cl perfil <le ElÍanin 19. É1, como todos lcs demás
imaginaCo quc el registro
su claridad y deiinición. Ni siciuiera Vrne se hzrbía
puclier a ser tan claro.9
vcz en público a la
Todos estos resuliados fueron presentaclos por irnera
pi
Geofísica Es-
comunidad geológica clurantc la reunión c.1e abril cle la Unión
ta.Jounidense'AllanCoxpresidiólasesión'Hr:irtzlel(¡noPitnlan!)presentÓ
en cliciemb.re
un anáiisis de los perÍiles de EltctnLn, el c''tal apareció imprcso
de la dorsal dcl
(Pitnran y Ileirtzler 195ó). Vine comparó el perf rl del E!tanin
cle I'uca y de Re¡ x janes y
PacÍñco Orienta.l con los clc las dorsaies rlc Iuan
las repercusiones p:ira la expansión dei lccho
rnerjno Err le f,igura B l6
derivó
(Vine 1 96ó) '
iciemb
stran las comparacio ILis cumo aparec icion
eilLrei cl i¿
se mue
prelirninar de ios tcstimonio:
Finalmente, Opdyke prescntó un panora'na
recogidos con los núcleos de1 iecho manno
prolunrio' Allan Ccx resumió unos
a-ños mád iarde sus sentirrlientos respecto
iie to'1os estos hallazgos: "ese fue
1966 no hubc¡ ia inenor duCa
el año más .tlo.ion^nt. .lc mi uicla, porque cn
clc lii e x¡ransión 'lcl lccho rnarinc
cra correcla" (Clen l9E2'
rie clue la hipÓicsis
3'.te).
--a
)
)
)
- LA Exi,Ltc,irtioN DE LA n¡vttt.uctóx c¡o¡-óctc¡. lc9
)
- EI i¿O'¡iiISLiC .i'ASIr I\, SER I.JNA OPCiON
)
É SATlSFACTORIA
)
He argumentado con anterioricia.C que en el decenio de 1920 no hubo revolu-
- ción alguna simplemente porque eran rnuy pocos los científicos para quienes
)
el enfoque movilista era una opción satisfa-ctoria. Mi explicación del éxito de
- la revolución de los años sesenta se ciñe al mismo mocielo. Ocurrió porque
7 pala la mayoría de los geólogos, aun para aquellos con fuertes intereses en
) contra, elegir el mo.¡ilismo en lugar del estabilismo se había vuelto una opción
ts obviamente satisfacto¡ia. ¿Por qué ocurría asÍl' ¿,Cuai era el íactor deter-
) minante?lo
) Resulta útil ahoia considerar 1os tipcs de arglrme to qLrr- se esgrimen cn
) contra de la e;lpa-nsión del lecho ma¡ino, coin,¡ los publicados por inves-
)
? KMS
)
t 160 a
7.¡¡.,
)
¡. 4"4ciríyl
'11r0
) J L DOR 3,.4.1 D=L PACIFICO
OR IENTA L
¡. Cf 120
) o
o
¡ 5 100
- Lll // 2"9cnlyr
o ,//
É LU
BO
JUirN DE FUCA.
[.
a
LLI
J
l. (_)
z
6C)
)
l. (Í,
40
a a-l
2A
i cn'tl
DOÉIJAL DE II EYlUAi.,] ES
yt
-
!
I
a 0
0 12
ESCÁLA TFI¡PC3AL E¡] ¡\4ILLC \,=l: n= .1ir1q
3 4
¡
É , Figura B. ió Complración rii irine rj¡ l:¡s razc¡nes ri¡ ¡¡r::r¡riharllentc dei lecno rn3-rrno
¡ en tres tl.isf le:1. Tc¡r¡ricl: cle Vicc (19íí,, 1-l i0), derecho: reservarlcs ltcr
É I ¡. 1'= 1!.'. Ii .
¡
CIF]NCIA
3i0 LA EXPT,ICI.'CIÓ]''] DE LT\
Le Pichol e n 1965. Un
tiPo de argumen-
co¡no i lcir tzier Y
I
u e no io iuera
Matthews no era adecuado 'Vine Maithew s no tenían ernPacho en a dmitir. 1
simPle, co mo Y
co mplejo
I
;"::1,;:,i;.".,i,,i,:"ry':l';:i:f:+ilf
lL ptrutr dr'.invcr 'r'rl
::::ll'l;.'^':::l:::l:':'."Ilf''li
imag:nlr modclo
.on ¡c,lir
,,"r..-á"' n' 'lol"::
ct-i :\,:',j::l:::1"i:',jif-i?i:.,í;":
c1tlc.
no ruc,, f a.tás'ti'
'i..r^.,r,r.o
estabilist a algunc sr la naturaie za
:l r L¡o iis ica menle I Inpo:ir
111'
::,".;;; ;,' ;;"b .ible e i rr
l.
F-
I¡lente al movili.slnrJ
l',2 LA EX!'LlC.rrClCN ili-l i.i (-la¡rCf ,¡.
l/Ii parccer, natural¡en*,c, es r-iue se carnbiarcn pci que ios nuevos datos eran
de io rnás rmprobable t.leirtro cie c..rajquie r rao.Jelc cst:-¡.biiista ima,einable, pero
probables dcntro del rrcCelo ino,¡ilisia. Esc har:ia ciel rno'.'ilisino una opción
s:¡.i isíactoiia. Las ob.lecicles rlue sc habian hecho a 1a hioóiesis rie Vi¡re-|,4a¡-
thevrs muy piorto se echaron por ia bcrCa. Esto punto de vista sc a-poya en la
lectura cie los t,:abajcs ulLeii.:¡es de esos misrnos científlcos. I-a siguiente
introrlucción a ¡-ln ariícuic I:rui' cilado de i lci¡ tzlei-, Le Ptchon y sus colabo-
ra.dores (1.965, 2129), poL cjerl-.oio, no se rei'iere en absolulo a problcmas
antcriores;-esueltOS, sino a Ias Co-irs que son improbaclcs en cualquter mOr..ielo,
e ,cepio en ei movilista:
I_a pauta de :rnomalías r,-ir,gnéLic:ls paralela y bilal:r:rlme n[e sintét¡ica del sistcr¡a r]e
do¡ia1es oceáiricas centra.les cxiste eIl e]itensas regiones de los océanos Pacilico Nor tc,
pacífico Sur, Atlántico Sur e Índico. Se ha dcmoslraclo adenrás que la pauta es ia
nrisma e¡r carla una cie esias regicnes cccánicas y quc en cacia regiór la pauta puede
ser sintulacla pcr la misma sucesión cic bloqucs (le nl lles t ra. . . !.a na.luraleza simétrica
y paralela dc ia p au ra dc anorn aLías y la con iig¡ rir r irln ge n e .a I ,J el modelo cortical se
conforr],ran a la predicción cic vine N,lattheurs(19Ú3)ypuecicnconsi,JeraÍse comoun
fuerre apoyo a i:r h ipó tes is cje ll erprnsión dc ltch c marino (Diciz, 1961: Llcss l9ó2).
se oirllsieron tajailteiilenie y
c1e relativamente pcccs ¿1ios. sibie n ros gcóiog.s
mlLestias hay aigo
a menuclc se rnosii ¡-ion ace¡bos eir sus crílic¿is' ilccas
q'-re se entieiiCa en cuanio aI
pa;eciclo a la " inconinensurabilidad' ', ya sea
Ciertanente' gente
iigr.ili.u¿o de las palabias o a los criterios Ce apreciación'
haber sido críLiccs acérri-
coittc Fieirtzier y Le Pichon, iiasaron fácilrnente.cle
espacio dc un ¿'.ño.
nio, u r., deieniores fervrcntcs y entusiastas en cl encoiltrar ull
Al oponer "revoiución" contra "evclució1" me piopongoe
Kuhn '-'plicitamentc
,ig*ti.i¿o más proiurrdo' r\l h'ab1ar de re'¡olución'
política- es un cainbio clc regírnenes
recurre a una analogía polírica; 1a revolución
to.iidad ninolnlas Íeconociias '
.on * p"rlo¿o cie traniición en que no erjste:'r¡
(i972)' quiero c.stableccr
Á op.lu., uf .orrceptc de evolucián, igual que Toulmin de cambio gradual' sino
arr-rplio
urra analogía bialógicay no sóic en ei sentiCc
que operan con
.n.f ,.nti¿o más específrcc cie los rnecanis¡'tos seiectivos
basc en variaciones fi¡rtui tas '
esfueizos de ca-da científico qtte
En el capítulo anteiior arguirenté que los
un nue.vo
p.rrigu. sus propios inttrtits proicsionales producian "rrf:ltl:
cieitos problernas cle la iísica nLrclear --y esto sin aclucir normas nl
t.óriJo de
pucden
c,le estc capítulo propuSe que
intenciones cle nive l supe rior. ¡1,.1 principic
,,.rr"oparurlosmisinosnttt"ni'n''o'enrLivcles'tnáscomplejcsdeorgani-
y el
campos cle la'rceanograiía
zación. Aconteciir-iieirtos i! cl cpei'rrlienie s eir los
'
paleotnagnettsmo, Por cJ cfliplo, contLibuylrcn
al ó:iito clci cofcq"re rnovilista
a la tristoria de nuestro Plancta'
clentro de una soia
Dc paso, hemos visto operar lrecanismos siinilares
organización ciedica.da a la investigación:
LanLont' I-os intlividuos que en ella
laboran,empozancloporLt,iving,Sudirector,.pasando¡rorclpersonai.dc
p-ásonal nhs rccicnte coino opdvke' hasta los
;;;ñ;.; a;no iie;,izter, aelplt*o"' He"ron y Foste r' todos ellos perseguían
estucliantes de posgrado -rno
sus ¡.,ropios in[e¡eses prolesionales'
Con toclo' su interacción dio lugar a las
lar expansión o
;;;í;;;r" esto¡i"tie'Á" la validez clel moclelo cle Hess de
taL rcsultaclo so h¿r'" tt^:1:
ensanchamiento clel lech'J ni arino, trunquc 'l-In:,f-:']
clelasintencionesdelailai'oriaciesusmie¡rbros'.oinclusohayasiciocontrarlo
en su aclhesióIt al enioque esiabilista
a ellas. Erving puede naberrc excetlido
adaptable al cam-
n.r" .r.¿ r,tá o.goni'"tiórl quc prcbó scr notablemerltc
biante meciio cientí[ico '
I!a norrnales.¿Quétiposclenroceloconsideraráu¡.rindivir],.roconron¿isprome-
reclores o aclecuados se verá fuertemente afeciado, n:rtrraitnenie,
pcr qué tipoS
Esto no supone
cle modelo se hayan aprendido y usado más frecuentenenie'
b irracionaliclatl ni nada por el estilo. i.lo es más que corrtpoltamiento humano
r¡ normal, y los hombres de ciencia son seres hu¡n:'nos como cualquiera de
h ncsotros. Tarrrpoco supone una ccricepción ¡eiatir.'ista de 1a ciencia. El tipo
rl aclecuado de inieracción entrc cieniíiicos particl3-rios rie erfoques ciifererries,
L aunado a una relación inteiLs¡L )' f t,::''tente con 1:' naiu¡ileza (con a-yuclzl de 1z
tecnología adecuada), pLlL-!it rllo'!rl,'ii rtn ¡c'ie;cj''' mlr¡i e:<rend.ido a- prcpósiio
a
L
Lr\' E,-iPi-iCACiÓr..'r D3 LA
Ci';'l'lCi ¡\'
1l¡
gtciógica
Esia es la iecciór ':ie ia ''¡evcluciór"
ciel rnejor':ofcq'.le ciispcnible.
para qliienes tiaien ie e tcilc ¿:
có¡lc oi-'¡ra 1a cieicla
'-
-
iji
't i --r -
-_i.a jr.-:_
{i-i--/1
Cu¡.LQU IERA QUE p ROpo NcA uN Nf oDItLo em trír'ico cli: la cielcia no oucde si no
considera¡ cóiao le irá a slL nocleio al apiicarse refll,'ti,¿ament.e a sí mismo.r lln
cuanto al modelo aqLrí presertado, 1a gra-n inlerrcgntc sería: daCos los tes-
timonios de que se clispone, ¿nr,:chcs esiuilianll:-; r-le ciencias sc senlirían
inclinados a elegir un enioque cognoscitivo? La rcspuesta nc puede ser más
obvia. I-a gama de intereses, ya sqan r'ognosciiir os o de otro tipo, que rnueslr¿1n
los historiadores, lcs filósofos y ics sociólogcs de l:i cicrcia es muy ar,r.rli:. Los
modelos rivales no estár'r 1o bas'tariie artioulaí,las ii{irro p¿i.a per;:'ritii lueries
juicios de probabiiiciari bns¡,ir1os cn ¡nodelt-.s. ./rciti¡t¿i.s, las pi-uebas quc he
presentaclo no soll en si misnias tan claras. E,n bri:ve , lo hr-ry razón paira prever
una revolución en el esturlio cle las ciencias r-lel tipo que se clio recicritenente
en la geolcgía. Cierianente, sos¡¡echamos qLr3 ir.) es posibie ula r.''¡ciucirin
asi cn ningutrr dc l.:s ii¡;r.i:rs iri rm l rtls.
Por otro laclc, una caracteiística cle mi moclelc ¿1e la ciencia. es qLie, como
en la evclución biclógica o s(rlo existe un c es arrcilc
cieniÍfico. Lo que procluzcan los mecanis¡nos iarpiícilr,'s cie rcp resc ntació n de
J-Y tclo depüae ran me iL e m eclio circu nci erit e.
¡Iéspecular acerca del futuro Ce los rro os rel alr!,ls ,las de la iísic¿r nliciear,
propuse que los modelos relativislas saldrltn proba-blcmenie triunia¡ttes en
parte pcr concordar con los iipcs de mcdelos que sl hrn vuelto ¡rorrnales etr
olras árcas más funclamenieJes de Ia física. T:,.i tipo cie accntecimiento se¡:ía
posible en ei caso de un enioclue cogircsciti.ro rl e:;luCio de ia cier-rcia- En 1os
úitimcs cliez o veinte años las cienci¿rs cogncscilivas han ¡:laborado podercsos
rnodelos de la cc I] ict oü (.lLre toy por h oy tienaít ) CCOS COfn eridaies. EsIe
cleserrcilc coirstii,.lye u¡i iue; ie i¡rcerLiivo paI-a pon.r ei estudio cie ias ci¡ncias
en la rn.isma línea qLre estos mocie los. La ciencia, despriés cle iodo, sigtie siendo
uno de nuestros rcc C ÍES C lcs cle ¡,ctivida-ci cogil o:r ciil','a, or coLnplej a quE,-
puecla ser. En cualquie¡ caso, tal csce¡rario mc iriiríici ei arás promeie of para
los par t-iclarios del enfoque cognosciti.,,o.
t:l r 7l
t".[ote s
(c^,brryr/¡¡cc,rrer,rr:r irmb"icnn,,t..1i;iiii'¡1.:,'.i:,.,J]:,,,1;);-:ll'J;::,Lil':';,ill
bibriog.fí:.corrrr:
:i:::I uLiJ;;:::lii;iJ',lil ' ";; .,';:;i",,. i , ,,,",,,,., dr rr rr:diiió¡r
oIe se enloc¿D.l en (l lrlru "0..
]ri'"rr,"" irlirr.fl ,lqr l)v Mrlr' y llqr6)
las de l'"n 't clro 'u ¡t'nción haci¡ l¿s
üuchcs iilósol'o' y rilo'oro"-'e 'r 'icr:'-ir rr'ienl'ttt'trt:
a la investi-
aplicar conc.pros.)"nr;rtocos lilosóficos
n.ooiri,o c1e
ciencias cog.oscirivas con el n':i 'lu( cl J hl't ivo de unr teo: i¡ ' '¡g-
o l l il n l r t e c l 'r' -Ú(
g:ciónd"estrsciencr't'' L'''l' l"m 1' l l l' T'ti"f'''
r
r
L1l 1 9l
320 I-A ¡XiDl-lCliCIÓi'l tlÉ l':'' ciiiiiliA
losccniiasiesfi:¡:.lcnast¡liclll(-:'ni'lo!'colncir-¡'¿ii;i''r:r/:.t;'ttr'':P;:lrtlivi:ritiicliollisyLt-tllr:s
iirii,l"".,i,.;.;;.":::,:1",:li;ili:i;:;.,";;l':;l;;,;.,;",;:;."'Ii,:."""*Ii^i:;§:ll:
vcrdaiicros
t*t 1;;";j,';i.ii;l!,ii1:; ;;" ,.i.lioi,oe",,oi-s,,, peio ruegc rc¡s ¡1ccre.,a
''""'^J,^;""t pul.ito ce !'isia en iz iiler¡iu¡a ccntiiLtpoiái"ca'
ri",. ula cl;Lia expresióa 'i' tsie (19ó7)'
.or,tft.," á parte inlrodücto;ia 'l:: Slalnon )tl purro ii: viita !io y nás :trecho '1e
e
9 Stroud (193 i) hace uLra ¿ttt¡,a itilt" '!i:l'tLr¿ii'iia
i'rc" ft¡ '-le fe¡ciirl o ittt cii loquc n1ás nat u' arlisia '
le e¡;iste rnología. Oct¿;¡an ( f I ¡ ¡ lito" ""rup' (l!)35) 'in trai¿..Ñie nto "-:'t ::']:l-':-.: :-:
Ambos ensayos '.n""ttn "n""]"1tiitt :'l l:L"'r!cr'e ri1'r' H¿<ia (i,.'lu 2L;'io
"'-i "t',nol'i.[ 'rr
l'-rs opinicn.': d; Cclrlr:'¿n ol ' 'r o r' : r río;'cto e 'lJ:' ¡ p'i¡¡ 1'r
¡ioiec:o Jc filoso,r¡ de lr ''"1': ' -' "tl"'-"t
.r,t,;l:';.:ii,;i;"i'iil,"," la ciercia s: ejcii.rplirica en la
r¡r.rticio,.,at tl,cia la. Drá.rl.a rear cc par Si-'lcl
oi3
n"''""'oi"i'."*- iiél) ' isz¡' 'r'i:'11¿ a¡ito'iiatoiiaine
siguicnlc observación ¿t
('93J1.l.nriii.o .,t*"'os co:rrpiejos' la z.''Jivi-
puede usar cc,.structiores c!aiórjca; :::-tl::-t' pueda serle úiil prtra
o cuaiquier ti:r'ilc!a quc consiiitre
nación por el c¡a¡len tte las e"i¡añas
prcduce p¡:a¡'il'lmateriaprirnadcllilósoío'cuya
obiener ios resuliados o,r-te clesea l'ercLcque sir¡il'iiicar' er:illi'¡'r' illterfir'tar en térrni¡tos
iaiiea es cilcontrar Sentido en tC)¿l]
ttt.)'
""f"itcer'
n"t"j"t p"'o el iilóscio es quic¡ se eucarga clu la
coinprensibies. Ei cientílico O""i'" ""gctio''
cc n l, Lb ili,-lad.
Ccoclman e: t,'ltiln:lio sólo c¡r srt
arÍLlilincla
el:'i:iologi:r'lo" cle i'lant' vi¡':c L'orentz (1941' i>^62) v
llPara uir tratxiio,i,¿,
""t'-'"'¡t"
'"'ilTJ^';.::'it;:xili:1:1!" ),('|1:irnv(1e7i.ttür) fo'rrrnin(1e72)'ilun(1e78'1e82'dc
(1982) Braciie(L9I6)apoiLa
tt"
y a'tguno' ¿" queaparcccrr en Plotkin
orórim a aparicion), "r'sa\jos evoluci':rt''istas'
í*.".i*1.. it,t'átd" tt"sl¿n de las cPistemolagí;ispii'racla cor D¿rvid []1oor'
Ll Este argumenLo lo apltt"ui dt t"rn co""tsac"otr
Lioa ieo¡ía clc la evoiLr':ión
! porieinos inaginar ,,t'o^r*-.,, hilotético dispüesro ¡. crer.i conocida y luego tratando (le
^ t;po 1a lireratu¡a
recor-':lanclo tc'las las "ti" "n
"¡i'""tio"""i" colno lo cs Ecrginan'
vcriiicarlas cor e1 trnOiii'tt' Et" O"t'¡n '"ti^ ltoy lirn desconocido
"rittr.o csas"reslas" De'oo csia re fe rcirci¡
ErtRcrsch(i9ii,13ll9)putit";;t;t;l"t"'nt'"ttt'''rle
ic rr,'c l"estó su eien-rr;ia;-
a David Hull, q-¡iEn gcnerosatrl' e¡lrr-- l¡r
l5 Llace alguros a"os cie una conle¡':¡t:i¿r soblc ia; relacjones
'"t"¡tj'tj 'or'rntn
(iierc ig73a). iJr esa.cport!ridad conclLrí qu': Ios par''icip¡ntes
historia y la iiloso liu a" lu.i",,.i^ a la
¿t *nto La lristo¡i¡ tles<:ripf iva podia contriLruir
no lrabían liegatlc a o'"tn' "i nlt*lttt'n tilcsóiica de
t'tutió'r-se ' i:t,ai'au'lonar La búsc¡riecla
ítlosofía norttc:i'"c Ahora oii";;;;;it Cot' ello se dcspejaria el canrito hacia un
principios nortn¿ii"'os ot "t"; ';;tt;;,;tgó'itu
:iiipt-'s'
iructÍierc matrimonic enIic a"itrilos
¡
b menos útil pot ser exccsivamenie arltccoinpl3cienie'
liyei (1959) coatiene un¿ buen:l selección
t de artículos criginales liiralllle i.l le, esiá
I¿' coiección de cios volú¡.renes editela
por I'{euraih'
Encyclop:dia
t é"r""r, Vr".r,t (195), 1970), que tontitnc toeosJoergen
of (Jnified Sciencey corr'prenGe la h-istoria cleque
ios a¡tículos '7.-1?' In!ernationql
Joergeirseir clei movimiento hasta la
la est¡-ucÍ!tr:i rit !t:t t-evoluciones cientí'ficos
) ;1,-;;;;;;;;; Mun¿ial Ño ¿eja de ser irónico
t de I{uhn aparectera por prri.¡rcti
acontecirnientos
i*""""
posteriores"t"
titl Voiu¡¡en 2 ci'^ esa serie En cuanto e las
a Ia Segunda Guerr ;¡ i,lundial, véase
Nagel (19ól)
t ;;;;;;;.iá"., v
v HenPel ( 1965) '
del ernpiri;mc iógico en su definición en
) 2Reinchenbach señaló claramente estes tres fue;rtes
una lrase del "empirismc lógic";l'i;i;i;;
t" ti o'óttgo-' t" iibro rie i 9l8: "Es Ia intención de
con la concepcióil formal de la lÓgica
¡ lo
P 5
c¡cí¡lif¡co (1959a) es l1 i"ry'
Con'iene reco¡dar aqui q,il"-i?-*'tt del descubri¡niento pre se nt¿rción cle la distinción
a tra.lucción cle Popper , ," o¡'J'g¡t a)r F'trschtng'
de 1934 Le
:'r p:'t:' rir ir-e i'l I !rcrli-'¡'ch (1938) lJra
T eütre c(scuilÍii¿i.oto y jusiitic¿,,-'"'1 dli'r!'ic c:L
corrccpción conieni;5ráne1 ¿t in ¿'ti. "io'a
ir qr''rr
pu"ie vL')"r: I'! intlo¡irrcciól y lc:r ensayos Ce
) l.tj:::i...r ( l9'1).
lr 6 La ¿utcrizidi! para concep,:;rlrr i,iiingL!e rle 1:r: i.ori:s,ls ''i,.!i1iJ
fueni_e
estudio de los intentos de critici. i" ."pii.^ iónirr,pirisia
( 19jó) ' uli
')'cirlcíti'
l.i3ice de lrs tdcrias pue{ie verse crt la
)
l. i$iróCucciÓn ¿¡ SirPPe (1974).
TUnarevisióllcleiasaportaciotresi]]il'Sr..iellcs:obleló¡il:tiilJ'l..lii.lascpllecl'-vercr'Cieil.lt
, t'",'É];,,o.un,"cianentalprevalccccnioscsc¡ilosdePoppeid'rIl)14¿l:¡fech¿
i. más Iecienle se encuentre en el tl'ñii<:ottj-tt-rral
uir irat:ln.jiento
Iinor' iecig':: iiil" soluriorr the 'Drobleiu of
io
a Inductiorr", re¡ro.lttcido en lo¡¡re¡ llql-:' i
ll\'
a 9 La lueiie atLtorizada at
'u'''opin"J'"t
funclainentalmentales quecia'i e':presar]:rs ntucho
e' el propio il'ri¡lcltcooall¡ (19'19)' pero las ideas
(
n-rás sirr''plementc en Salnion 196?) '
" de la ciencia
,r",, pnri. a. t" jrtr iiicacii:¡ " a largo
pi¡zo
¡, r0 El otro filós ri-c qr. ,. .n#liá.
l.
-
i
1
I
pui,,an'(ie52),Sc"::ll?:j::',,Í]iIl;::
1( r".' '' i:',:iii":;T:r::;,Xl'l;ii::;]::fffi:*l':il:':l
i't¡n 2':¡ot'';¡t
rigoll l'ii rCar:a
lilliji:¡.tili;::l;;il ri,:;1,;\,,,r,,,ü,i,r,m, ¡ l-i\crp:rf,'7rr:'rir rr¡"¡
u,,.,ri ,..,,,",."n i.,s .,. i.", ,ll :;-,,.i".'..:; IiJ l.;.'.," ;".ilil?Tl1l r''',"" ra ¡:arcionr'
,,.:,1:l;:l?;i:.,:i::i:.ii:,:; :rio ,o ,¿ ,.1 .,",": j r
l1 Dollpel: (lq?q) prr'"1.4' u.i.,.:.'i, n"i.,, d< l¡ .renci;I,l"o.::,:,:1,;iliIl;"J'JT:,X; r
en le eLP l
i,rcon tnensu rabiliC aJ
,,o.1ÍoJn,,s".o,,¿rn":.-l:,^.i:r.lllJ,;;.;,lJ:.Il,l:"::"i:lLI;:il::11'Ji,:::::,::il ."
¿' l-l icctor en::rlio \c PCi(- '
dc'I'op¡c d'r:cu¡rhr
Íl,l:::lll"illi;rl1r",li':"::,;;';::l::lli:"::ll;T,:;
, ,¡,,;']¡:,.:':';'u";#:.1 l:;,';'lll
";i,; j;;";,1 ,,"li]tii;:';l[;l;:l
:iJ
ir¿¿.'.r' prbli''doc,-ir
l" ,f
y
,lc Iacicnci¡ es,ún I¿s tie ljarncs
;i;;..".'.'ilililli"ii,l,l:l',l,i','.,.,,,.,o.li.?i'?'..i,,,"l.ci,i",liiuu,v.1resrb-)j.:1,,,,,,,,,,,,,,,,s?
,-u*.i'ül),."0^,,,".;::,Iill;:l
'" -:l:'l:,:':i),'""':'u',';:;;:'uucacsLu'rioscmpirico''
'iül''' rrqr-rr \is'aJ(o"i'ne<\co'ur'^r tni'hicrt
::;:i:?],li]Tl""J"i "
.: i ii it*:]1i:* Í* .l : i :'1, ;'; ;i ::: ii rJlLY r" " i
"v
t rs s2)
f. ¡/ic!iq1os Y iecÍítls
:i
,.,l,l::'::;l:::':;:'.:l:*r'',;'[::lil:S*lilj::if[:njl;:
# ii$¡i*li-: ..'i;:'; ui*,,i"in,i'*¡¡iri,,'",,,
il rrii; i '
:i:i;r*r::":.ii::;riri:n*lii-"*l*r.,
ilr:ii,ff x+,*r
r,ii*:il*:f ;i :r;' ,",.rr,**:;li*'iii;;;.:
:;;:il;'::,1';.:l):::"":::l:';:ii;:J"
,', ¡ritiir
¡¡,,a"'o'''.":".::::,. es,á c,enLro ¡ie,
cn,,uena.,:dida
;;,1¿lll,il,t:::;'il1^,,^ri,,, Lqut rceiizo t,r ei pre scnrc c'r.itrL1c
NC'f ;,'.S )2)
Existen grenrlcs seirtejanz¿s etrtre cl argume¡to c]e :sta s¿cción e1 del último
2 y capítulo del
antes de ver
reciente lib¡o cie Ian ilacking (1981) de hechc, desarrolié origirllnente estas ideas
pro
:i libro de flacking. Lls piesenié por prlmera vez en público en la ¡eunión Ce ia Sociedad
de 1984. En las
Estudios Sociales cle la Ciencia que tLrvo lugar en Gani., Délgice, en noviembre
"E1 realismo en el labora-
memorias de la ¡eu¡ión (Ci:re 193'1b) apareció un resurnen titLrla¡1o
con mucha anticipr':ión' y su
to¡io". Obviamente , Hacking lle gó a, ionclusiones similares r
e xplicación me ha sido muy útii.
p ¡imor¡ialmente, lo que cornpartirncs es la inspiración cie habe
gr':.becióirpariilaradicbelgaennovie¡ll-¡¡cclelgiil'Qrrie;oagrail:ccra\!/ernerCallebauttanto
i'¡¡ado urr copi:'
f,oi habcr ieali'r:.¿o la grabzciór origir'a1 cu:rlto pcr hlbet irl': stir:ir
6 Acientás c! . que se ri¡:-q:rjl,e en el i.):tc ie Ev¡ns i-'¡llclll;¿l (1937), 1a arttspicina azande se
-farnbién h.., sico
tlxte, pcr ejenplc, en l]¡rl:s (197,i), P]oor (i97ó), y Coliir.s 1'Pjlrch (1932).
por la "iacionaliriad"
tema ie consj.Jcrable d.batc cntre lili .,ios y antroprilogos ¡reocttpa'cos
dc los pu:blos prirniiivos. si se d esea u ¡r¿r selecció!l de ¡rlÍcu los pilt io.ü t.s, véarsc \)/i!son ( 1970),
y Hollis y Lukcs (1982).
7 No puerlo resistirme a consigntr la sugerenr:ia cie r¡ue un campo qrte supuestameüte
ejen]plilicaelnotleloConstlugiivistaeslapropiasociologiaco¡siruC.iViSt:]de]aciencia.Esla
,,,g"i",,cia.oru1lLecerá el netlcs a ios const I uctiv!st;s p:tftiC3rios de la ironia la autorreferencia
y
(por eje mplo, Woclgar 19113 ).
8 Tal vez u¡a cie la.s r;l;'-o¡ie: cle que el progreso de las ciencias sociales haya siclo Ian lento sea
grandes organi-
que los hornbres no han iCLeado n]ecartisrnos adeca'¡dos p:"r'a habérselas con
para eni;:cntarnos a los
zaciones socialcs. Lo qLre la evolttción nos proporcio 'ó irre l:r capacidad
ir rr lividrros (r ! ru 0os p.- lrr'ño.
I ¡1 p3r:idiario.i, lirrn. 11c la irnporrancia cie los instrurnentos en Ia ciencia fue el desa'.',a-
reciC¡ Derei: Price (19ó5, 1984) i''-clenrás cle Hac'1ring (1933) otros que se han ocupado reciente-
mr:::esonAckei¡,ann(.1985),Franhlin(19S6),yCalison(1935,i9871'1987b)-
I Ent¡e l;is ¡eie¡ercias ii: rigoi están l{isb;it y Ross (19110) slovic y T'rersl<y
¡. i!a.hnr.rtann,
y
(i982). QLrien se irltere:. en revisitlres recientes scbre cr' L¡m¡- puecle consuitar a Eilircrn
I'Icsarth (1981) y Piiz y Sacirs ( 1984)
2 El trztz.r,rierrto clásico cs el cle Vor Neuma¡n y ¡''íofgenste rn (191i-l) U texto muy conotido
JJ
qttt: (), st o
p-mezclas (dii'eretttes ¡:::) Ce O¡y ' "les
C ¡:re.fiere
!'L segtti; ' '.
A;<lOivlA 4 (,4dt;isir t!: 'ied) Si O¡se prejiere o Oj' e;1ta¡i''
j.po:.a cuq!(lu¡er otro rcsLtllado' Ok' Y,¿t
la p'nrczt' ,le O,y t¡ri: pr:"'':ritlo á lo p-netcta
.\XlON'ÍA5. (SusfitL!lbitiddd) Siet )ge'ite es intlifer¿¡tle ¡i lq
(rrtisma pt) cle O¡l Or
elecció
elttances eltos pLlec!:¡t interccr'1biÜse en cuctlquier
proltlema tle d¿císión
-
eatre los restltqdos Oi y Ok' #
'taJ
P'¡tezclo de O¡ l O j se prefiere
¡\XIClvtA 5. ( íonotonícict':d)SiO¡seprej'iereqOi,eiilo
o su q-rnezcla si y sóio si p es rnayor que q.
cas la
7. lrloCelos Y exi:.ii!¡rentos
EstaesmrrysimilaramiideadclL'5..icclirsosco¿tloscirir,os,,ciclildividLro.DeMeyusóla
los indiviciuos ( 198 2 ' 201) pcro no h¡r desarrollado la
iclea '
expresión " recu rso cognoscitivo" par a
8 Existen seinejatrzas.o.t ei n,l:tjti, qu': hace i"ic!rcring (i9!li' l9:l"l) cle l¡ rcvoluciór
de los
323
l
I
tu
¡
i i{e consuri¡,cio aisirnas ruÉ¡:.. !lll::'.:; lil.;;;.i'",!ll.l'iil;",'.";#11:ir:Jiii;i
I
I F-
:,rr;e'¡i .i¡do [orrr.,i;n"nLc ^ '
,::,.,.,;:,'rJr.r'. '
,,i,,".;.' ,".,., y .ii. .".-,..1.: l.: . ;ir '.1u;
I
e".,if El!artírtlcl¡-e|:irLál::r::deln'jrcl:¡'r¡:alizailorcri)¡"ii'ire'
l0 Eil !:ctr:¡ ¿aitcriiri q,," rr,,(ia,inl,rl,'ri ic "r¿vol'-rclll¡r cl:iliíii':1" 's i-rtrdarr'li-llalntllie
"io "i
ayorii ri' i'l i ii")s i¡; i:illll unitiirie s pti iinen-
soci,ii. l.-a ra,.,oir-rcióu'".1,trin" a,r,,n,io ia 5r: ii ri 'i'l 'le vi:hie ¿í]Lré seniido
les ir,:luir'.l:j .l 11u¿vo pttnto tlt tlistt' Iilri i)¡iect iii tilica de:rcripciÓr
's]t" (l¡ ic! cjiBtíiicos de l:rs disciplinas
ter,diin ¿riil.;r al8úil otro t'itt'i'-ti ¿t f'=tilo la
ma1'ciir
pertit errtes rrc estllrr dc actttrilo con l'r cc':l':lusión?
A juzS:rr por mis escriios ar.,,.¡u,1., (oi... 1931,
1tl'-:, 1()i:i5o)asícollrcporlcsca¡rÍtulos
qt't to"t"tfo aqití especi:'l signifii:rtlo al hecho de que Vine y
anteriores, podría pcnsarse
cotlto los rcgistraclos el 1a expedición dtl
Matlhe$'s pr¿-'re.r, .,,,¿ttt' tiJf'"tiiftt n'ng"¿titos
"l inrpcrianie ''l (1lte esto heya sid-o un:r predicciór
.E//a;¡i¡r. lncluso pu.,t.,,,po"""Ji'l't n-'" n^"á
en el seiriido literal de r,.]¡.,,"."p,..u.io alLtes
ie.n.oui.o. Ils pruebas. Ett elccto, piensc qrte
juicio cle
hay casos tr que 1:t l""t'no p'JittiOn en el senlido llttr al es pertinenie al
",,i,ttntio la hipót':sis Froprlesta iue¡a en l'nea El este
quó tan probablc ,a,ín tl tt't'*..-llo ubttt'adc si una
sicl': imp¡¡t:'n"e el ii:cho de clue haya existiclo
caso parLicul¿r, sin embargo, pt-""t no }i¿i'oe¡ juicio basaclo en
pre,Jiccióa iiteral.I-o,,'l' i''po'ionrt f're el pornlenor
!r los dat's aunacio al
n.'e: i'rrpic¡a'ot".¿e ntro cie cr'rllqüier modelo
eslabilista En
mode lo rle clue lal"r ,t,-'o' de I{css y es
"tun"J"lo quc Vilr sc picrrle Ia coai:ercnci;r
efeclo, poCernos it-ili:.gin:rros i:t situ:'-ción en profescr' mai' ;a que no
otro de
;ti;;;;; .;-" estucli-ante cle posgrndo ro a r4aiihirvs siro a
el periil n/tcnin i9' Opciyke
habría, hipótesis Virc li'iattirelrs l{o cbiiante'
PilrDar encucrita
rie rrúcleo y o¡re peiscñ., úcaso ei propio opdyke s-a1e
analiz¡. 1os datos ,.lc las muestr3j pr.ciu adr,s '
'r'evolrrción
y t¡"ttti"ws ' i'ln e st xs circun:lalcias la '
con el moclelo que ¿. ¡.tito p'J,'u'i"tC'¡'int '
hov' veinle años
;;;;;;;;;";.. clei¡ro¡arlo cie scis n;r'ses 3 un ¿ño' pero ics.acontecimi'nlos
después, Poco hab¡íair cambia'io' aconiecimienios en
l2 Lc más cerca quc Cie1I ¿a da. ula :;iplicacÍóa i¡:órica de estcs
"riuro ó1 adu jo 1a distinciór
»¿gilra (Clsn 1932 ' I i'i) en
las ciencias de Ie. Ti.rro t,t t" r" n-"ii cJpi- ¿t ;'c!it'erg""tes
que
"' a las obras :ie
se reiirió
(ie LIudso (19ó6) entre """;;";;";tJ';' v
er que s: ariilizaba 1a psicología
"1¡n¡hién
lr4:Cleilanci (t970) v i'tit'otr (isiari' iotittt t ,L:rt ""nirib
uciortes
'
ai reconociinierLo de las cierlcias
d.l ci...iífico en cü¡-nio ,, ,ipoí ¿J p t'* t'al ici;tri ' precedierc:'r
cognoscilivas en ef r-nti¿o loy se h:rbil:ri:l iie ¡e:ui:os co¡noscitivos' o tal vez
"onlt-iioriraeogsto ilrc:elva- i¡ ir'lpo!:i¡'a'i3 Ios lipcs cie persolaliiaci'
del esLilo cogicsciliYo, :-, ¿er jt'icio 'l' c¡r:e pt':i'oilittn las bue¡as
cer::,r,r.io il a'!a!l.ji('rli itl i:s cl¡:r¡ dl lr'':u''¡'isir'-s
cc¡:Lr:ciiii'cs
l'
e-v.irlicac:ij :s cieatiii':¿s <-i< l.r Ill:!iltl¿1 ciilrlo i: ci:cci;i evt:lücl-l¡ll
tr]
3i0 i-¡". E l?LlCACiÓii D:1 LA
'lil¡l':i'\
rr
t-
I
'.1
d
-1
I
.r¡
!r
I
I
T
I
I
-
(¡
-
¡
¡
a
Eibliografía.
t33-tl
3)2 LA, ]];i.LiCACiÓ. i Di i,A CI'i.ICI'{
(ieoree
. The I'ogical cortsírttciiLt¡1 aí fl¡e world' rrarl il' A
Berkeisy
1961
UniversitY of Califcrnia Press '
Cartv,right, N. tql3:. If ow the lctts cJ ¡tity'sics
/i¿ O;iiorti: illirerrdcn P¡ess'
''ssults' ' '
physiciarrs c' l cliri jc¿l hboi:tory
Casscells, W. , y cols. 197 8. ' '1nterÍir'iaiion by
Net't England Jcttrnal oJ ivtetlicin¿ 29-1:99):LC'tJ'
rvori<irrg hypc;r'l':sis"' Scienc¿ 15:
Chamberlin, T.C. 189C "The |¡iethctl-of i:'ultlple
92-95.
churchland,P.M.lgTg.Scientifcrectlisr¡ta¡¡'ltheptaslicityofinintlcambridgs:
Ca mbridge UniversitY Press.
198ó. "Cognitíve neuicbiciogy: A cccputatiorlal 1-rypothesis for laminar
correx". friclogy and Philasoph¡t 1 : 25-5 i '
oj stie;tcr. Chicago: University
Churchlanci, P.ll , y C.é'. Hcokei, eCs 1935 I;rcg':s
of Chicago Press.
: tuiIT Press'
Churchland, P.S. 1 985. ll eu rop h i I os o p !ry' Can-rbricige
Fhelorrlenology and the lrluciear
Cia-¡k,8.C., S. Harnrna y R.L. t''itttti 19S3' "Di¡ac
nL:cleons in nttclei-
cptical l.,4odel" .Et Tke i-iter,¡ctic beív/el;1 ¡¡.teiiit:t enzrg¡t
tgAZ, .4. ii. O. tvfeyer Nue'ra york: Arnerican
Institttte oi Physics'
Collins, Fi.l;í. 1931:r. "stages in ii; '':]1riiirical Picé1t'1]i
oi reiliivisrn"' Socit¡! Sttrjies
c.f Scie;'tce i !:3-iA.
1931b'"Theroieofii¡':coit-stiinin';'l:¡itsc".¡¡:¡:Sc:ialcc¡'ti::lril':ywiiir
proprie ty in scitrilc l"" ' ilislar;' oi S:l:r'tl' 19: 5-19 '
B¿th: Betll
.á. rE]2' Scc¡oir'y' oJ;:ient)''ic K:tnt''!prize ='1 '' '¡tte boo!¡'
-r.,.th.du1ogical
-.Unii,c¡siiY Press.
Collins.ti.lvi.,yc.Co;<.l975."P.cccveringrelatir"iry:l"rioropirecyfai\"r"sccit!
of iicienc:: 6: 423 '.A '
stu-dies
jrranes of m:aning l crriires: Routlerlge 8< Kegan
Collins, H.L4., y T.J. Pinch. 7 -aE2
Pa"i.
1i¡3: ?-17 45 Reproduciclo en Cox
Cox. A. 1959 "Ceorn:.gneiic rcv¡r;s¡-ls"' Scietce
(1973).
rever';¡tl'; San Frai;cisc": Freeman'
Cox, A., ect. 1973 . Ploie lecia¡lics cnri georiiagncíic polarily €irochs-and
Cox, A., R' R. Doell, y C'A' n^fty-ple' tl6:' "C'-crn:gnetic
pleistocene g"o"hro,tcn.'"tq ' í"''') 198: 1C49 5i Reprociucido en Cox ( 1973) '
"' ''''"
d ucido er, Co:: 1le? i).
Del'¿ey, i,f\. D32. The cogniiiv'e porti" ir' Dorüecht:
P'ri(i:l'
Ulliversiiy Fress'
Devitt, tvi. 1924. P-eotisnt o¡¡ri 1ruth' ili lllccton: f'rincetcn
,,Con ¿inenland ocern basin evcluticn by spreacii:rg o i the sea fioo¡ " '
Dietz, R.S. 1g6l .
flctlure 19ü: 85¿.-57 .
!:'e.setrr:h '13: 656 : '
1953. Resp':esta . Jottrnol o¡' Geophysicot
pol: iity epochs: A ne"v polarity
Doell, P..R., y G.B. Dalryi:rple l!]66 "Geomagnetic
evl::¡i and the a'ge of tt.'"-Attt"tts i''{ atu)¡¡:r¿t 'aounclary"
' Science 152: 1060-61'
F-eproducido in Cox (i 973)
Dcppeit,C.1978."i(uhn'sepisicnoicgieaireilli'¡islt:linini¿ip¡eiaiionanC<leie¡se"'
liiquirY 2il.33 fi'6 .
198ó."1':tl¡rti'ricnandli'l¡ciic¡l:rlio¡aii:r¡:i:1¡oisci:nriiicr':¡'ticnality"'
SYn t liese 69: 1't 5'52.
314 LA E)(i',i-IC¡"CiÓIi Da i.¡'- CiENCi¡\
Doilii-lg,J.\912...Ba-lesi:inisll'raocihe¡aticn:illtyciscicntiiici¡rieieirce,,.-B¡'il¡sll
Jitirnoi .t'or tite Phílosopitl' cf Íjcrenct 23: 1[)1'90 '
3t- Jcnl':ins'
Douglas, M. i970 )'ictttrc!s)'r¡tbcls L-ondres: ';3arrte
Duhe¡n, P. i9i.l. Lt théorie ¡,t,\1s u¡lia. 1)arís. F.riiciÓr
ll.;l:sa Tii: cint tnrl strucít:re ol
Press' i95'1'
plt)sicat itrcory,traci. ?.P ./vic¡te¡' Prillc:ill;'i: Prilccioii Uni"'ei-siiy
Dirkir.ii,r, E. 19i5. Tlte ele¡neniar-y forrrts of /!rc reli¿icn:: iife, tra'7' J'r'Y' S'¡ain'
Lo r: L; ¡¡: ,\ {len & Ur i ";ir '
r
Oiive¡ and l'¡i'C'
Du Toit, A]u.'¡93'/ . L)ur t'¡ct¡¡Ce rlng r:ontin'ents ' i]ciimb'irgo:
Ecige , D., y i',i. ii'lulkay, \916.;t'stroncmy
trortsformed. |Ju¡va York: Viii:y'
jttíormat;'cn processing"' F'n Fortnol
Edwards, \'v. 1963. "'Conservatism in human
l'lueva Ycrk: W;l:y'
repr:esen ta i io tt of hurnan -itrcinenl, ed B f'leinmrrntz
Id.J., v R.lvI. i-logaith, 1931' "Behalio¡al cl':cision thcciy: P¡ocesscs ol
llinhorn.
" -t2:51i'L
j;á;;"i ;"d choice". Ánnitui iieview of Psvcholcgv '
E¡icsson, K,A., Simon. \9t!\. Pioto'c! cnal-¡'srs Cambndge : iViIT Fress'
íhe tlzctntle. cx'
llva ns-I, ri fcharcl, E.E. 1937. lYilchcra¡i, orocles, ,:tnd rnugic rit'itottg
[1,; d : CIare'tdort Pres'.
anci s!)ontaneous generatlcn 1n nlnc-
FarLey, J., y G. Cieson. 1974" "Science, politics
teer-rth-celrtury France: Tirc Pa-s,Leu r'Pouchc L rjcb¿rtc,,.
Bulletin cf tlla I-Iisiory oJ
lvÍ e d i ci n e'18 : \5 l'98.
in n eap cl is: U nivcrsi|y o f [4 inncsota
Faust, D. 1934. |-he lintíts of scicrt t i1"ic reasoir lng. il,I
Press.
..ortho¡lc:i,, l,ierv ol thsories: Iienrarils ili rjeiense as rvcll as
Fcigl, !1. 1970,.. The
critiqLre".EnAnctlysiso.fthec¡¡iesuntl¡neliit;tisofp-hy:;ic's' ldpsycliolcSj'cC'Ni'
RactneL y S. WinokLrr. l\li,,nt'oto Stuciies in tire Piiiioscphy
oí Scieilce ' vol 'l'
Ilinneapolis : Universiiy o I i'/iiilnesota Press'
I
Fcigl, H, , y G. lvlaxwel], ecls ' 195 i . Cu rrent iss ¿¡¿s ln tlLe ¡lll,t!osopity
o/sciencc . I'Jrre va I
York: llo1t, Rinehai i & \\¡inston '
Ijcyerabend, P.K. 1952. ..E,xplanalion, redtlCLion,;rtrcl clnpiricisil''. Th ScicntiJic
sC
' Ü:plonaíici1, s:pace ofid ti¡ne' e'1 1í' Felll )¡ Ci l"'laxrve
Il fulinncsota Studies in the
philosophy of science, vo1 3 ¡1.iilrrlea'i'';lis: Univeisity oi lliitncscta P¡css' il
. \9'15. AEainsí neth.ocl Lc¡L'Jres: New Leit Books' a
. 1981. Piilosophical Papers,2 r'ols Cambridge: Cambridge Univcrsity
1'resq' ir
and Ch:rnge " llous 9:17 -3?''
tsine, A. i gT5. " r]olv to colnpaie theo¡ies: Reierence C
,,The natural ontologicai attitucle" .Et,5cientiJic realísm. ed. J. Leplen-
_. i gg4a. e
University oi jaliiornia Fress reproducido en Fine
(1986)'
,'AnC nol a¡lti-realism cither". l,b ls 13:51-65. P.eproducido en Fine ¡
-B..k.l"y,
(19s6).
'
1984b.
lgBl."TtrenonKuhni:tnnatur¿oltherecentrcvollLiionintheearthaciences"'
En PS;l 1978,,or 2,.a.
p'». ¡'S.luithyi. Elacking, |()1.211,.E'astLansing,}Y{iCh.:
Philosophy of Science Association
acccprance ol the Vire-N4atthews-
1982. "The development, recep[ion' and
Morley hypothe s¡". uÁir¡ial S¡L;d¡es i
th: Phl'sicttl Scicnces 13 1-39'
1o Jarainillo llOS ó4:394 9á'
1981. "Revierv oi W' Clen", Tite road
-. ,,The continent"t arit, a"¡r,.,, . En scientific c.¡ttroversí.es, ed. ii. T.
_. 1gg7.
ge : C¡rnbridge University Pre ss '
Engelharclt,Jr.,yA. l- Coptnn,203-4S Carnbricl University Press'
Franklin, A. 1986.7'he neglect of erperí'ite nl 'Cambriclgc:.Carnbriclg¡ Univer-
t heolk'r'; P¡inceton:Princeton
Frieclman, M. 1983. ¡'ou'¿''t¡ois iJ sI:)Gce-t¡¡tte
sity i'¡ess.
II2:491-95'
C"f", ó. 1984. "science an(l thl pirilosoirher" ' ?'lrtiure
Galison,P.l985."Btrbblet¡ontit'ancitheexptriril¿nl¡'l1'rorkplace"EnCbserva-
pi'ysittri ';cieitte' ed ir' Achinslein y
tion, experirnen,' o'¿ iyio'1"'i' iu "o')e"i
O. Hannaway,309-73. Canbridge: MIT Press'
uses of experir::nl' ed'D'
l987a "Arrificiat cloucis' '"'I1 pu'titl"t"' Rn T'\rc
goocling. Cambriclge : Cambridge University Press'
, ,i:u¡¡t.r,
,p".k, -nJ ,h. ,.r,*,,, labor::tory' '. Iin Physics in '
_. 1937b. -the.1950s
Camb¡idge Uni'e¡sitv
ect.'L. Hodcieso,.r, L. é;;; .i;i¡. it.".,i"n. Canrbritigt:
Prcss.
'!'ji! (')''!ti¡t i:''t licn cj ttcrioit' 'i ¡¡¿rrr s-r'¡:llssls Hillsci¿rle' l¡' J :
.,-. 1979a. " Fou::iaaii,trts oi probabilitv :.ui stailsiica-l i¡fe¡e¡ice ". Í)''- Curre:tl
reseercli itL phlloscph;, of s,:ie;t:e . .,i. P.D. A.sq'-:,llh y FI. Kyl-:'-.:rg, hijo. 5C3-33.
East Lansing, ivlici-r.: l-hiil;opiiy oi Scierc: Asscci:-iion.
191 )b. " Prcper'sii y ar :1 ii':cessity". S :.' ¡i i it¿ s :'|c:tii9 - 5 i .
r¡
q
E ¡li_ i OC ]r.,¡,tjié, )31
ci Caliicrnia P¡ess'
i934a. scienc¿ tt¡tcl valLt'cs 'izti:eley: Uiiiversiry
lievcnd enisier'ric a't.rd relarivism"'
_-. 193'ib "E;<pl;'ning t;;;;t;'; of science:
C F Del:rney y C lvl Gutiing' E3-i05'
I:tt Science aild reoiit),t¿ 'i:t'á*ilirlg'
-. Ñloi" o-u., in'C : Ullivri'iii' oi Ncire Da¡ne
P¡e-qs '
me ta-irLetho'f clo gies" ' Syntlrcse
1936. "Some probieins iacing iniuitioni':t
o'1:115-?-9.
--. 1g3'¡ . "i'rcgress orratior'aiii)"'? Ti''e -oicsp:cis ior norma'ti¿e
naiulalisin"'
A!r1?¡ ¡."an Fit:ios 'phic'.1;'); ';" '
1: ' l':jv'J r '
historical
change: Phik''sophical trloclcis ancl
i,auclan, L., y cols' i935' "licniiüc
-. ¡esearcl.t". Sy tt t iLes e 69 : i 41'?'23'
and ¡he de1'elopmelit
LauCan, P'l i9S0. "f¡e n'ett'o¿::"" 'i:;¡;;';'rt'';;oiking hypotheses
oi'mrrltiple
ol plate tectonic tit"utv]:
,'"o'1"':t" Ccse stuclíes' 'rl T Nicl<les'
3J I -43. Dcrclrecht: F'eidel'
'zl''i rto a¡d I{uhn's t}reory o[ scieniriic
i981. "'1'h" .t t"n' ituolution in Ceclcgy I v Fiackins' 2-27-3e' LesL
change". En .,DSr1 rzs',""i jci'nce ,!'¡; 11'
As'o!i^'1:' il
í u,rslng, )'i il : Pllilo'otir; '-rr of ¡rethod:
-.
i-auc1an, R., y Laudan, L íotit"onling'
"Dominaitce.and the disunity
ton"n' us" ' Pliilosopity of Science'
Solving tire problt*' "i;';;;;ion"utttl
l-aymott, R. 19EO "iA""fi:l"ti"tt'
t'tflt''.t'tiot an'cl- confirmation" En PS'4 1%A'vol' of
R;' ¿i;;;' 3i6-50 East Lansing' lvlich :Philoscphv
l, cd. P D. Asquilh,
Science Association '
1932. "Scientilic rc¡'lis¡r and
the counlcríaclual Palh-f ronr cl-¡!' llln;Yi]'.' '
DnPSAl982''oll,t;'i;ó-Asquiihv-fi'iickics'107'2lEastLanslns'r'rrctr':
---. ?hiloso2lri ol S ir-ne ,' A' 'u 'iati¡tt' Press'
Be rk e ley:-Un iversity ol Califo¡nia
Leplin, J., ecl i984 Sc'cut¡ic ''ealisrir '
Iinopl'
t."i, i. ,éor. ca¡nb!in with tnttlt l'lueva Yorh: C:lmbridge : i4iT Press'
trUO. 7'he enter¡trise oJ'l:no"'ttedge'
--. E.A. 193'1. "A
-Lloyd, to lhe st¡ucluie of populzrtion geneiic:;"'
' '""""'.ttit 'pptouth
initosoPnY of Sciertce 50:ll2'29 ' Bioiogie '''
l{ 191i1 ''Kant's t";';;;r Apriorischcn i¡r ]-ichte gegenvrartiger
Lorenz,
""'' 15:94'125 '
B-triit", ¡¡' Detttst:le Phitosophie biology" '
a priori ín ihe.light oi contemporaty
1952."Kant''s a"ttti"t "t tftt
- Cr,rrrrt Systents't '23-35 ileprcclucido en Plorkin (1982)
C'o lt" clecisions' Nrreva Ycrk: Wiley'
1-uce, P'.D., y li. "aiifa' 1é5'/ ' 'nd clisagreemcnt and
-. "An't""^U"t t" traditional r¡ode1? L'aud"l on
Lugg, A. 1986.
".Ie of Scieitce 53 419-24'
consensus in science" Philosotthy'Ge"nes'
tirt¡! cttlítLre' Cambndgc: ilarvard
l.u::nsclcn, C.' v E'o wilt;t;. i;;1 'ni'a
U niv ersitY Prcss '
Lv.rf , ó. rS:O' 7'he principies tf geotrtv'v' t-onf res. Llf n l"'lurrav' En
-Il¿¿
lon i"t clynamics of creativc physic::l scientistis"
ivicClelland, D.C 1970 Penguttr'
Harm oncls r"o¡th ' Inglaterra:
ecology oJ'hunan in'''ítiq""" ed D Certl:ner
lvI 19E3 "^'" ti"t"t""'itt ol motion" Ett íenlal ¡ncdels'
ivicCloskey,
"'-", ¿.í.'s'"' etts,299'3)4 l-lillsclale' N 'I': Erl'oaum'
the abserlce of
A Caranlz" U C'ttn lgS0 "Curvrirncar Ino[ion il
NlcCloskey,Nl 2lO:!13)-41
ihe rtolit¡n ol ob je crs" science
exlc¡nal f o"tt' i'tu'"'l,.iiL -ottt
BIBLIOCP.AFIA 341
I,/, acl(enz-ie, D.A. 197t. "siaiistrcal theor;- and sociai irrlcresis: A case study". Soclcl
Sti;.dies of Sc ietce 8:3 j-8 3.
l98 1. Statisfics¡i1 Briioin;1365-l930.Iidimburgo: lldinburgo Uaiversity Press.
Mcl'iilsey, J.C.C.,l',.C. Sugar y P. Su;./pes. 19-s 3 . ' 'l'r-io¡, r;; lic iounciations o i classical
-. particle machan ics' . Jc¡trttt! o.i ilLlt¡a¡!al ¡¡!¿cltt"ti:s rtn¡l ti nolysis 2"253 -72 '
Mahoney, lvl.J. 1976. Scienli:i os ó^L!i.)ject: The ps,t'cinlc.e, icri I irnperuÍive. ca[rbridge:
hlass.: Rallinger.
Mannheinr, K. 19i2. Es.sc.ys on tle sociclogy ()i !;¡toi','lltlge i-onclres: Roiitleige &
I{egan Paul.
llarclr, J.C., y Ii.A. Simon. 19i3. Crga n izot¡ozr.s. i'li¿r'a York: Wiley.
l¿Iarion, J.B. 1970. Clossical dynamic'.s, 2a. ed. |lueva Yórli: lica-denic Piess.
Marvin, U.B- 1973. Coniinentcl drit; Thz evolufiott of a cc;tcepi. Washingtcn, D.C.:
Sinthsonian Institution Press.
Merton, R -I{. 193 8. ' 'Science, tecl-rnoicgy anci socie ly in sevcntce nth-centu ry iingland' ' .
En Cslris.'S/!,?i ?s (;n lhe it¡-\t.)ry cnct philosophy of science. Bruges:Saint Catherine
Press (2a. ed., i.h.rlva York: Iiarper Jt F-ov:, 1970).
1949. Scci:tl tire ory anci soci¡11 siruciLil... |{ e','a ';f oI }<: Frce Pre ss (rev. eds.,
llt51 , i)63).
l)1:.Tttc:t¡ciolc¿yoJs.i¿.iac. eal. l'i. Slor.. lJ'.:t'¡ Yorl: Iir':¿ Pi::s.
-.
r.,{i1Ler, L.D. lgT2."Possiblevaiidirl,oitherelatii,isiiclla|Iiee.iccliap'-jro],imaiicrlirl
nuclcar physics " . P itysic0l Rev ie',v ,!'etlers l3: l l3 i -E'i .
l"4iller, L.D., y A.E.S. Green. 197-tl. "F-eiativisric s.ii ccnsis'-srlt i",'iesoir fi¡l.l theory of
. spherical ltuciei", Phystcal [iet'iev'C 5:2'ri-52.
Minsky, n4. 1975. "A [r amst,'oi:]l loi. Íepiesenting knoivle'Jge". Dn The p-sycitoiogy of
coiillLrl?r v¡lon, cii. P.ii. \i/iilslon. I'ltleva Yo¡k: lvlcC¡av¡-FIill
lr,litroff, I. l)1,t,. Th¿ svit.icctivt s.itie oJ'sc¡ence i'Jrtev¡i York: iilsevler'
Montagrte, R. 1974. "Deteimjnistic theories". Frt ]'t¡r¡tta! It ltilr.t.so¡:hy: selecled papers
ctj itichortl lionlague, ed. IL. 'ihonlason, loi 59. I'lei'r Ii;rven: Yale University
Press.
ii4crris, R.G.M. 1983. "1-'n attempi to dissociate "spati3l-rnappiltg" and "wcrking
mernory" theorjes ol hippocarripaJ lunctioir". Fn l'leurobilogy oj the ltippccon-
pas, ed. W. Seiic.¡i, 1i05-32. Londres: Acadernic Press.
ivÍoulines, C.U. 1976. "llpprorimete applicaticn ol erni¡iiic¿rl theor;'' '': A general
explication" . Erkennt¡¡is 10:201-21 .
l,'ioulines, C.U., -v J.D. S¡recd. 1979. "Srtpoes'philcsophy of physics". D'n Patr¡ck
S uppes, ecl. R. J. Bogcian, 5g-91 . Dordr¿cht: P-eiCel.
4lscoursc is
MulhaY, l"{., j . PoLlcr, y S l';:iri:v' i!r31 "\'"'hy al-L alii;sis oíscier':iilic
Nt' i¡iulhav' t'tt-?'43'
needeo". E;;:;;;rrt ¡v3¿, '( D Knori-Ctiina v
':d
i{ollY','rood, Calil : Sa-re' Biace ¿lilC lVorkl'
bTagel, E. slructttrt tt'f sci':ti'':e l'lueva-'lork:.ilarcouit'
196\. The
iir:ci¡iart'
N;r;., U. 1916. Cogniiictr ttui re Liiitl i'iueva Yt¡¡i:: rne aiti;L g iit sc ien t';f ic theor ies
Coitst rttclin 2' '
ItTersr:::sian, N. J . 1984. /--c¡arl o'i
Dorci¡echt : I'lij iroll'
""ti'"t,,¡¡'
s ol ihe Lri"iiy oj
Neurath, O., R. Carnap,:¡ C' lr{crris' ecls 1955' i}1i) Itctt¡¡cltttio
"--- Ch'icago i'iess'
sr¡r*e zVols Chicago: Universily oi problem solvrng Englewocd Ciiíts' N J
fJe,,.,,ell, A., y II A Simon
ñ;- :
PLenticc ll¡rll
';;;
., a'f ,,r,¡¡¡¡1t,,'-;ics. washington, D.C.:
t?c!¡nolagy ,.n
^.1^-t..-^tñi1) on 3ac¡ '
N"ur"lt, ft.E., y cols. 19?9 1ñpuct
N¡tiona.l Acrdenry or Sci( Ir"rs
W il 19Sl ii'' o'f scie;tce Lo¡¡clres' Ror'rtleCge & Ktgait
Newrorr-Smith, "t¡o'ot¡ty
use ol irislorv ¡s evidcnct" sf
tithese e9:251-55'
Nt.L'1.-1:1. i935 "Remarks on thc
Rertlel'
lo'¿ic artrl rutiui.,i ¿lv Dordrecirt:
Nickles, T., ed. 19s0. sr¡r, tií¡,,'i,t-tr"rlrrt,
tnío""n' Str(tteg¡es attcl sltcrtcc¡;tíngs of sacítrl
Nisbett, R., y I-. Ross 11)Sa''i;t;;a-tt
"'"' : Preniice -ii¿ill'
i,ii'i"'' lngl.'.""ood cliIis' I'1 J''ititi" ¿rrrcl wilhout Lllc lrtp])'rc:ntpal
system" En
o'Kcele , J. 1983. "Spr"Liar
Neurobllogl o¡
""'""t"
tl" ¡t¡iio'"''"'t' J' J Seiiert' 375- r0l Lonclrts: Acadetnic
P res s"
tt co1nit ive ;rtcrp Oxfoid: Clarendon
J.,yL.ilaciel. l91il ' 1 11!hrypacontpLts
[i s
O'Keele ,
Reidel.
19E4. coil.tt ructLng ¡lrze;-/is
Ctricago: Ui'iversity ci chicago Press'
o ittitiv iiic a ntl no¡r
clativis lic approaches to prcio n-
Picklesimer, /i i9E5 " r't^tt'ii on Diruc ap-
nucleus scareri"r,,. u";;;;;r,i¡rit j'ir' x ttc !,AMPF vtorkshop R L' BoudLie'
-. nroaches tc iiLtcle or p¿;';- ' st't"p''ta ' C- Y Cireung v
"i
I-cs rllan.ros i'l¡ iicnrl Laboiaro'v'
1;:;;:t;' ¡i''""' ' ttre Pacific Art-
W.C. IIi y J l'} fieirtzler' 1966' "trrlaguctic ¿rtro¡ralies over
Pitinan,
"'--ior.,i. "¡''Hl
!-iclge" sci¿ttcc 154 l \6'1'''71 ' -iheorv and appiicalion'"
'
Pitz, C.lr., ¡r i'l J Sachs l;;; ':i't'Cg'tnt ancl Cecision:
The I'og,ic o,f scientt-fic tl i.s cr-r v erT l.oncit es: r irrrclrinson'
lg5gb. "The propensiry interp!'etation ol probabrlity" tsritish Jot''rnalfor the
PlilosophY of Science 10:2i ¡ll.
--.1959a.
|gT2.objectiveknavletlge.Oxford:C)xIoi-riUnivt¡sityPress(2a.ed.,1979).
-. 1g14. "Intelle ctual autobiography' ' . Et T'he philoso¡thy of Kdrl Popper' 2
vc,ls., ed. P.A. Schilpp. La Salie, I1i.: Open Court'
1983. R¿¿riis¡¡r u¡11 the ai¡n oi'science. Lorrclres: Rr¡rvrti3n and i-ittlefield.
-.
I'rince, D.J. 1965. ,,ls technolog-v hrstorically indepenritnt of science? A study in
sratistrcal his toriography' ' . 'l-rhnology ancl Cttllure 6:5i3 ó8'
_. I 984. , ,Notes towarcls a philosopiry of rhe science-iechllology interaction' ' . En
ThentttLrreof techrtologiruIkrtttt'ttetlge,ecl. R. Lauclan, 105-l'1' Do¡drechr: Reidel'
putnam, H. 19í)-. "Vy'hat rlieorics 3re írclt". F-n Logit:, rneilLotlology and Pltilctsophy
of science, ecl. fi. Nag"i. P. Suppes y A Tlirsky. Palo alto: Stanfcrc" University
I'ress.
1975. "The rrteaning of neaning". En iv[in¡tt]'sttitt stu'r]ies in tle philosophy oÍ
science,vol.7, etl. I{. Crlnclersolt. \'linneapolis: University oi Nlinnesota Press'
paul.
-.--..-. 1g7E. Meaning o cl tite ntotr¡l scienc¿s. I_onclres: lloutleclge & Iiegan
--. 1981- Retson, lrttth ¡t¡ttl histr¡¡y. Carltlrriilgc: C'lurbridge University Press'
1$2. " !Vliy rr:nson c:iItt' trc ilaiLli ¿iize.l". S-vit!he'"t: 5Z:3-23 -
- -. . i983. i¿.ealisnt unrl rtti:'oii, r,ol. I oi,'-hilo.opiiicai !lipei.s (l'ri¡blidge: Cam
bridge LI n ivers iry l'ress.
Pylyshyn, 7,. 1984. Contpuialion ont! cognitiott- Cambridge: MIT Prcss.
Qnirre, w.v.o. 1953. Front a lo¡lical poinl of vietv. Carnbrirlgc: Harvard
University
Press.
1969. "Epistcrrolog-v naturalized'' . En ()it iolo g,;crtl i'¿lolivil)' and otlrcr essays '
Nueva York: Columbia Universily Press. Reprociur:iclo en Kornblith (1985)'
Raif, a.D., y R.G. Ivf ason. i961. "ivlagnetic survey oli rhe Wes¡ Coast of North
-. America, 40o N Latitud,: to 52" i.\l latitude". ]JLtlletin of f he Geolc¡lical sociely of
A¡nerica 12:1261 -1t).
Rahba.r, A., y cols. l9-: i. "First me-:urel ent ol thc spin rotation parameter Q for
ploCa elastic scatter.ilS at 5CC NIeV". Phy-sical Revievt Letters ¿11 :l8ll-14 '
Ray, L. 1979. ,,Neutron isotopic (lensity diff'ercnces cier.luced from 0.8 ceV polarized
proton elastic scattering"' Ph¡'sicol Review C 19:1E55-72'
...- - . l9Bl. ,,First orcicr interprct¡1tion oí optical p.i:ttriais". F.n 7'he interrtction
belween tner!iLtrn energq nucleorts in nuclei i982, cr'l iI O ivleyer, 121-42 }'lueva
York: Americarl Institule ol Physics.
Reiche¡rbach, FI. 1928. Philosophie titr i?ount-Zeil -i¿l¡ ¿ ' Berlin: W de Cruyter'
io'38. Experience oncl pie(lictton. Chicago: Univcrsily of Chic:rgo Press'
1949 . The theory oJ probcrb ility . Berkele-v: unive rsity ol California Press '
1958. The ¡*ilosoptty ttJ space and lime, tr¿¡cl l"'[ Reichenl¡ach y J Freund'
-. Nueva York: Dover.
-.
---.
R.ensch, B. 1971. B iophitosoplr-v. 1''iueva York: Coluinbja Universiiy Press'
Roe, A. 1952. The nnking, ttJ tt scienris. Nueva York: Dodd & itdead'
1951. "The phychoiogy oi the scientis".,Sc¡s¡rr'¿' I14:456-59
--.
P=crty, ?. 191). Pltitr;.soptt,y lntl ti, ;nirror o¡'itotttrd. I)rinccton: Priuceton University
Press.
-1.1,. ! L,E E,{?LiCACiOi'l Di- L.h CiEiiCi'"'
iogic,ed.L.J.CoirenyNiB.Hesse,6EEgCirford:Oxfo¡dUni"'ersityPress'
i:'rrbinstein, Ii.A., C.D, Lar-iSiriln, hijo, y
j. I,icl;ianus. 193.i' -§rle¡¡cr: 05 Ccgniii,e
process. Philad.ei-ohia: Unrversitl' ol Fenrslii'rania Press
its geophysical
Runccrn, S.K. i962. "Paleonagreiic eviCerce lor continenta.l cirift and
..uncorn,
cause". En Cc f ¡Í1.eniúl ,Jrirri, erl. S K 1-55 llueva Ycrk: Academic
Press.
gcology? " Ftt "5A 1973, v o1. 2,
Ruse, lrl. 193i.,'$/hatkindof rc.¡clutic n cccuti:ecr in
eci. P.D. Asquilh, y l{acl':ing, 2t:A13 |-;'''st Lansing' NÍiciL : Philosophy ol
I
Science Associaticn.
i9E6. Tokíng Dcrwi;t seriou-sly. Dordiectlt: ¡'eidel
Russell,B. 1912-13. "Onthenc-tionof cause"- ,¡rcceedings oJ' it1'r A r !5 to tel¡an sccie '
ry
en F.usseli (191 3)
-. ReproduciCo 1914. ottr knot''tledge cí the e):1e'na!workl Lcndres: Allen & Unwin'
..--.'...-...-. . 19i 3. l,4lsticisin uni logic. NLre"'a
York: Longtran'
-. 1919. Introilttctiott io ¡rtt¡ll¡e¡nut icet phltosophy' Lonr;: is: ¿\llen 'i¿ Unwin'
Salrnon , \y.C. 1961 . Titz iot:nd'Lltons of scieatifíc infe
rence' PittsbtLrgh:
--.
oi Irittsburgh i're ss.
-. University lg15. "Theoretical c;<planation". En Erplanation, ecl. s. I{ó¡ner, 118-¡i5'
_.
Ox[or,l: 3¡ sil Bl¡cLr'cll.
ed. 1919e. Hans Reichenbaclt.: Logicolen'piricl'tl Dordrecht: Rcidel'
Propensiíies: A clisatssion r¿vrer!'' Erkentinis 14; 133-21ó'
--- lg'19b. worl l' Prince lon:
....'...-.'-. 1984. Scienti.fic explondlion snd Íh'e ccttsol slruclLtre oi the
-.
P¡inceton iJniversity Piess.
Savage, L.J. 1954. Foundolions of stoi¡st¡cs Nueva York: Y/ilcy'
Schefflcr,I.196l.Scienceanc}subjeclivity.NuevaYork:r]ohbs-it¡Ie¡rill.
of Pe troleum
schlosser, R. P. i 984. The i 92ó. Sympos ium by the Arnerican Association
displacernent titeci y*A
ceologists ancl ils impacL on the history of the continenlal
Reappraisal, master's clisse¡tation Blcoming"on: Inriiana llrliversity'
scriven, ¡¡. I ss a .
, ,De
linirioni;, ex pla.nations anci t'neories' ' . l:n Concepts, f h-eoríes 'tnd
therrtinc!-bcclyproble1,cci.L1.Feigl,yC'i'liaxwell-},,iinnesctaStuciiesinthe
philosophy of siience, vol. 2 iviinneapolis: University of l¿iinnesota Press.
Shepa,rd, J.Ii., C.Y. Chcung, y i:I.L. i3o,-rdrie, er1s. i',1ii:1. aiiot!?lLtings óf the LA¡4PF
tvorl<sltop on Dirac op¡u otr:it,:,; !o ¡tucie::r ph,v:ic.r. Los .,1.lamos, l'J.M.: I-os
Alamos lrlatio n¡rl Laborator.y.
Shepard, J.li., J.A. N4ci'leil, y S.-l- Wzillace. l9Sl. "Fieiririvisticimpulseapproxintatioir
fol p-l'.luclerrs elastic scaLtering". Ph)5;-ol Q?\,¡e,,r !-i:!!ers 5A:'.4.,:¡3-46.
Shirnony, A. 1970. "Scic,itilic infcre¡lce". E¡ Tl:¿ ¡itLturc onci .l'unclion o_f ,scie¡¡lifrc
llteories, ed. R.G. Colodn1,, 79-i72- Pittsburgh, 1':1.: Unive:sit¡, oi Piitsburgh
Press.
l. "Perception frorn an evolLttionary poiitt r¡f ,,,ierv". JcLtrntl ofPhilosophy
--.l9T
67:51 l-El .
1981. "Integral episremology". En Scienir¡'ic lntluir), t:td !ltn socio! sciznces,
ed. hl.tl. Bre.rver y R.E. Collins, 98-123. Sar Francislo: Jo,r5sy-§¡55.
Siegel, H. 1980. "Justification, ciiscovery arrd the na.tuializing oí cpistemologj-".
Phit...:scphy of Science 47 : 297 -321.
I985. ' '\1'hat is ihe quest;on co ncerniirg tlLe raticnal it_v o f scie nce'! " Philosophy
a of Science 57:511-31 .
Silnon, iI.A. 1945. Adminisiraiive bei:'rvio::. Nueva York: Free Press.
1947 . ''The axioms of lrle r.¡ton ian mecir amcs" . P)tilcsop li tcol Mogazine36:888-
9C5.
"The ariomatrzation of classical ¡nech¡¡nics". Ilhiloscplty of Scier;ce
-- 21'.34,-| 43.
Sneerl,J.D'!9"t1.1.i¡e!og|cc!sit-t'l.ctttreclfnaílterrtttticr':lpltysics.Do.iiecht:Reidel.
l'hreva York: Wiley'
Sposito, G.ltal5.,4n iniro':j,cl;ait io <:iassica! cl;';'ta¡¡zics'
SLegmueller,'t'/.i976.Thesf¡.':cti:relndii¡ll;nicsojtiilories.NuevaYo¡k:Spiirrger.
. i919 . The stt':ctuLrclist v ¡e'» of th'ea¡-ies Be-'ii¡: Springe'' q
A uantitative appiica-
Si.*.r, J.A. 1986 - ' 'Driítin1; contrnenis anii ':cllicilng oiirltercsts:
tionof theinterestsperspective"' Socittl Slu'¡jit's Science
15l.261-'19 '
Stiouc],B.1!Sl...Thesignificanceoinaturajizedepisten.roiogy,,.|itiiidlve.;ísiud.ies
"'- - irress- Ilepiociucido
,r'Oniilisolhy, vol. i.lriin,reapclis: Li ivfl.sity oi lv{innescta
en fiornblith ( i9E 5).
vierv on thc structr-lre of scientiñc
Suppe, F. 1972. "What's "vrong »'ith the receivecl
theories?" Phitosophy oJ Science 39:1-19'
imperativc" ' syttliese
1913."Thecries, their fc¡m'ilaticns and the opeiatiorral
25:129-54.
ed. 1974. The:;tntclureof sciertlific lheo;i¿s'
U¡bana: Ulive;:sity of illioisP¡ess
-.
-.(Za. ed., 197 7) -
-juppes,P. 1957.";i¡lrntis¡'seientlficLileciy'1"'L'. í'liriost;pti¡'rtiscie;icelocla;"ctt' S'
lu4árgenbesser, 5 5 -67 1'{r:eva'lork : Basic
Boo}:s'
§'hiteheaC,
-,. A.l'J., y Il. P,Lrssell. 1910 Il. Prii.tci¡:iu ntutit¿:ntufictt,3 vols. Cambridge:
Carrbridge Univeisity Press. (2a. ed. \925-21).
1."'illis, E. 1910. "Principies of p:ileoueography ". ,!clar:ce'-3 l:2.1i,úC.
'i ilson, E.P,., ed. 1970. Rotiontli!y. f.lueva Yoik: illrp:i & ito.,v.
\i'ilson, D. 1983. Rutlter¡rord. Cambrirlge: l.4lT Press.
*'i1rcn, J.T. 1955. ".,\ nery class ol iaults and the;i bearing on conLtnental clríft',.
No/ure 201 :34i 47
l963."Staticorrnobilee¡.¡th-'IheciL,-t:¡tsci¿ntilicrevolution,,.,D¡oceedings
o f I* A m
t er ico P i tiIos o p h ic I S) a,-' i e l.' 1I2 I A,o -).0.
--.
u
',\'inisatt, \Y.C. 1980. "Reciuctionisii- ruiÉ. j,-h sir-- ic-rc: :ncl rireir bases i¡ the Lrnits of
s.lection contrc,,,ersy". Eit iicl:;tiiji,-. Ciscc,.,et.1': Ctst .rlLrJies, ecl. T. I.lickles,
I13 -59. Dorclrecht: F,ei¡l¿ i.
', .:¡h, P. 19i8. The itieli oi a :i.ci:il :c;,ltce. Loi.lr-i¡¿:: iiüLrtleclcc & iii:san Faril.
j43 i',1\ :llr-'i'l''1'\
l-l'. E;{-i'LICACiÓi{ DF'
i..r-, I ri ,'ii r'l¡ lt' ,t' r,':1 ' :, ':r: .n ": Cc i ir, .1.,',., 120 n.
oi;Lr;nóstico r¡édico, 1 85 Cc¡.rrici,.ta ,: intg rtses, i98
Bayc5i..t., modelos de decisió1, J7?-31;rl pr- ir.il,r.r.:. rogl.;:r:i'Livos, 2ó, 1ió, 162-61,' 155
pel de la inlormación nueva eil los, 1 I 1 ; I' ios i1..úisc! ro3ir,',sciti'.'i,s, 2'ti 49, 29A'91, e
F¡icd¡r'.r, I1.,'i'1
Desc:.: ites, R., 37-
Cale, G., i9, l.!
Diagnóstico méiico, 1 8ó-37
Cdile,¡,39
Dierz, R.S., 32E n.7 c..-,Isor. P., ?-19,'l2i n 9
Di¡ac, ecuacrón d., 211 , 725'?'1
gía'Je, 2)' í-?''1 ; é:: :l'-¡ ¡ r ¡' i i¡- C¿illislri, P.., l3ó
Don", í.n o Ganoi'¡, G.,35
"t.not"
tivo de la, 229-3C
{lard ntr, li.,119 n 'i
r3\ouisi I a, 2iq, I j j-S
; C¿uiinlrel, i i., ll
Di¡cccional, ge'i nlag¡elisno, 281-s i.,319 n.l5
Gason,
Doheriy, t¡.E., ii9 n 2 (ieiso¡r. G., 75
Dof.pe it, G., 6'l , )22 it.it)
Cle¡,'o, T., lC, 171 n 7
Dorling, -r., 19C C i]be.i, G.i'1., Ez-lil
Dousi¡;, I\1.,73 'r "-i C1en, W.,315,123 r'.n 1,3; 329, nn'9'
12
' rc
ó"'.'1,,.óri,,., i.s,",lc, ,r¡: ;¡,r''
o
Cold.llxii, ¡r., 320 n 9
pr.ra ia, 163-69
Gold;le in, i-I., EE
T)urliitilnl, :;., /J u\.'
Coodm¿rr, i'].' 10i, 320 n 10
Du Toit, A.L.,237,291 ( irce¡ . 11 ., .r,1 r
Ed¿e, D.,3-l ,'13
G reen, R., 2tj9
I-dwarcls,W,132Sl Gri:qs, R.¡\..,211
El ta nircl9, 30244, lC6, 303 -'' Ll ll' ai r¡,ocr. H., 2C, 319ttZ;127 n'6
a.rlrl.no,
.- bJ; LJ¡'t¡u'li!,''
Crunbr.trm,,'\.' 19, 44
:rij C"' y - ons', ru':,ui',r'r,, i ' l l:" ': '"riie Habe;llas,.1.,l-1,74
uq' iiiii¿l"i""* ilcl, i--s3 ó0; r'rr i:ci¡clcs '
ilacking, i., 6C, l?7, 193, 325 n 2
1i9-20
Lia¡riltoniano, 95-91 , 125
iiisia, iePcdorio ] 3 3-E'1
En.rp
}i¿l:¡i', N.R.,54, 121 n i6
E,pi3cnéticas, reglas, 34
iiaufLirg, O., l2C rt 1
HariSclanci, J.,'ii9 n l
cu l a-
E.sl til,smo, 267; argu¡rcntos ScolÓ¡iicOs Heezen. B.,3Có' 313
tor - 212 14
I-ieirir.lcr, J.P..,300 01,104-05' 3 I0' 3l2'll
,rarfn.n,ot gt'tí ;co\ cn I r!' r' - 1-'-
Hernpel, C.C.,49, ll0, 195
E,¡.ns-Pritcha¡cl, E ''9 ,73
Herr'¡n, ii.,299,3C2
Evolucionista, cPrstemolcgía ' i6
de lo:' He¡lz, il , lCJ
',;,..'l,itio¡" mcdelos: compoacnte:
guolu.i""irtn-t,
' i'r' I r¡ j' |'l '' iless, ll., 23¡-9C, 295, 29T,323 rt 1
¡ l; ti ¡ 'tio
I1esse, ivi.B., I14, 319 n'2
cientifico, i3-39, 25ó' I I'1 15
I iilb.rt, D., 4l
Elring, M., 299. 3Cl', 3 13 1-{ipórcsis, 104'05
i*rl¡*"",*iOrl' y reaiismc' 153 lev dt irlur- llciland, 1.H., 119 n 2
phY Para 11, lCÚ q1
r.-l,l,ii.:;;", carr.Ll, llu rl Ir ':'!i "r' 'q: llollis, lYl., 78
lloii¡res, ,^' , 2t6-87, I Ii
cieritÍilca,49
l{oi;oal, i(.J , 3i9 n'2
!-arlty, J ,7i FIcokc r, C..A.,28,29
Faust, D.,27 l-eY de iiook, 39, )1'94
llcigl, FL, 47 i icrvson. C., 190
Fensicr, S.l(.,92 I{ulL, D., i9, 390 nr'12, 1'1
l¡.r"r"ú.t", P X , iOf ' 12l ¡i' 16: l2l n'2i Flune, L)., lf,41 , )C4
Fin:,/i.., 19,20'1' i25 it'3 i cicir tiiic¿:-ciLl n 9li-99
'
Iri.,:iei, C.,20 i*p,,f.", apro:iirraciór del' 225; relativisia'
Iosle¡, J., 305-05 216,327 n'4
u¡rlacionistno, 4'1'15
llil n l'-rlll .3 .'
If
ÍIIccrr¡leiisLrrabiliCaC,5S'll'l
i"r"ü,t, , i9, 186,111'3i5' dc
i.., iri".r,l.. ael Ci:lotró n dc 1a Llnivcrsiciaci '
^
129n9 i+l-i"ii""" trcuI)' -121' n l; disposición' I4'r
I'ranklin, A , i9C' 125 n'9 1r¡cL'.rcciiirr, problenia de Il 47-1E
Irrc3c, C , 43
ii\i tlrcrE l EN,,{Ti(lo 351
tl a 2i1
Luckmar-rr', 1 ., 80
TustificaciórL, contexlo di la, 4J'1'6, 5l i'!
81
1-Lrgg, .t ., 6'i
I(ahn¿rna¡r, D., 16, l3l, 199' 2Cí t=13 y 1r
Lrrkc:, S.,76
falaci:r d: la ii ccr¡cncia de ba:,c, 156 i!; y 1os
l-u ntsden, C., 35
esquenl:1:i causales, 188-9 y la vioiación de la
regl:r de ,:onjuirción, 184 36
I-ytll, C..2-65
lrl:cl-r, E.,11, tl3, l{)0
Kay, P., ilj
iriah on:1, :,,'i.j., 3l!r n.2
I{epler, L:yes dc, 129
M:rtlhe\'.'j, i)., 2910 91
I{eynes, -l.N'I., 47
i'daltLyania, |Yl., 280 82
Kire, L.. 291
,Kitcher, Ir., 130 N{annhcirtr, I{., 13, 80
lvIarch,.l.C]., 19C
Knorr Cetina, K.D.,20,80 l,l15 n.i, sol¡re los
i\,íarrtl:n, -i.i., 1 12
azanrlc, 140-11
K., 55, 80
¡.,1.1rr:,
I(ripk e, S.,58
llaci{en¿i¡. D., 24, 1 3, 1 5, 1')
Kuhn, T.S., 15, 37, 39, '1-1, 86, 135, ?'75,3"4'
319 n.2, 320 n.1, 322 n¡rn.3, 17, 20; 321 n E
y \lc Closkel', tr,i., 209 10
N'icl,{ulLin, E., 1i
el moC:tlamienlo directo ' 9'1, y Ios ej emPllr e s,
55 6, 68, 89, 99; y 1a incon¡¡iersurabiLidacl, 5il; ivicNeil, i., llS
y el naturalismo, 5'1 i; metáfora políiice, 58, N¡iecánic¡ clJrsica, 85 98
3l4y !os valores c;cntíficos, 195-96 yl':socio- l,íerlon, Il.l(., 50 52, 53, 17,213'321 t'13
logÍa de la ciencia, 75, teorÍa cle la ciencia, Nielanetodolo:lia: y Lal<atos, 64 y l'audan, 65-
65
N4ill, J.-q., ,11, ;113
I{yburg, I{.8., 18i, 205
Laborator io, estuclios cie, 7E-80, 140 i"1illcr, l)., 22ír
Lakatos, K., 60'62,22a,2i0' 211 Miosty, 1.4., 319 n.6
Ié.¡4P: lii .l ,l r..l: rl':12
Inslalaciones dc lisica dcl l¡itsrin en !os A!i¡- lvIouilisnro,267
mos, ?19 20 f.4oileiirllr!; u ceusalid:id, 12? y realismo, 123-
Strphefl:or, E. j. , 20
i¡rrlucción,'13
St.wari, j., 2T5,21'¿,l2ij n ¡r; ilO n i
iieLati'/ismo, 22, 59-60; prograri'a einpirico del'
Sto rer, N.,52
16,11
ReprescntaciÓn, 26
Sir oud, B.,320 9
S,:ppe, F., 19,85, 120, i57,121 ó; -123 n'i
Rcpreseiriatividad heLrrístLca, I 35-35
N., l9 Suppes, P., 19,35
Rescher,
S,r'iron, K.R , 8E
Ilcccttpensas, estl L¡ctura de , cie !a ciencia'
52
1'a-xis, pro'olena cle Ios, iE7 tti' 201,20ó-207
i.L!i iy, R., 2Ú, 319 n.1 'frcnología: y el problcirta Duhem-Quine'
cLc
Rosel]ctani¿, R, I77' 190 inco'pcraclo, 170;
167-13; cor¡o colocirniento
Ross, L., 26, 18 8, 2C7 nuclear, 166-67; cu lu¡ción
en la investigación
Runcor¡r, S.i<., 2Sl-65, 301
c1c l:r gcologia, 235-3ó r' cl picgreso cieniíñco'
R u.c, i\ l. . 19, Ji..llS ¡r'l
170
llusscll, il., 43,44, 321 n'l
Teller, ir. , 19
Ruthcr[or.i, Ir', 156, 203, 214 i5 7--5 I ; como sisterilas iorrna-
l'eorÍas : ref utables'
i"t llon,r,V.C., 1,o.121,2A6,320 8; 321 n'1i i:s, .!6-7, 69, 1111i2; ciescripción generai,
y Ia cxplicación calrsal, 130 31,324n 7 j'l15; Ia cie¡cia, 2l '
I92-93 1C6-i0 y mocielos, l-l
Satisfaccionismo, 190-94 y sus agcotcs' rista
'ic
sentánIico, 69 70; bicn
y los cientillcos' 19'1'95 41, 34i Durlto cle
l.lr.atir.o, 205-07 il0 ll
rictinicias,
Savage, L.J., 132 'fo(to, iibros dc, 85, 33; organización cle los
Sche ltler, 1., 122 n.1li
E7-91 ; Índice de ¡rticslra, 90
! hlos.cr. R.' )7o, 128 n 2
'l hr,gard, i) lt., l l9 n 2
Schrocdirrger, ccrración dc' 115, 217 su
eclLtt-
-I
hrrntpson, P , 123 n. 10
vaie¡tcia con ia dc Dirac, 259 -foir.,:ir, i].C , 116, l19 rr'6
Scirutz, A., E0
louLi¡io, S., 49, 3i4, 320 n.12; 321 rt 16'322
Sc¡iven, ivI.,12l 22 n'1ó, 321 n'l
n 21
Scdimentos clcl lecho rnarino, 30'1-06
T¡ ans iormación, lal!rs dc,295
[nsachanicnto del ]echo mariro' 236-88 mo
Tversky, A., 27, 199, -i5-08; y la f¡lacia de 213:
clclo <le I-iess, ?-35 87; modelo dc Flolmes'
la frecue¡cia de base, 187-83; y los equcmas
287-83 ; clciensa de1, 299-lCO
tlc,2l0-l I causales, 188 E9; y 1¿r viol¡ción de la regia de
Selccción, tarea
conjrLncrón, 184 35
Sclr ,' , \" .. 12.'ir'lÚ -lrvei,cy, P'.8., 20, 2i 3, I19 n 2
Scnreiittza;
'- y el ¡íSumenio en conira clel reali:
,,,o. f -t+-¡á;""rte e Imodelc 'v l¡
rerlidad l0í' U ni ioin-,itarisr¡ro, ?-65
,i;