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MAÑANA
10:50 Canción 67 y anuncios
Así es, “a toda clase de personas”. Esto se cumplió en el siglo primero. Y hoy
también se está cumpliendo como nunca antes. Pertenecemos a una hermandad
mundial compuesta por toda clase de personas. Aprendimos la verdad de la Biblia.
Y tomamos una decisión: servir a Jehová. En esta serie de discursos, hablaremos de
tres clases de personas. Primero, los que están casados con personas que, de
momento, no sirven a Jehová. Segundo, los que se han criado en hogares en los
que solo uno de los padres era Testigo. Y, tercero, los que no están casados.
Por supuesto, las circunstancias varían. No todos los que están casados con
personas no creyentes o que no sirven a Jehová tienen la misma situación. Algunos
están casados con alguien que se opone a la verdad. A veces, el cónyuge no está
interesado. En otros casos, puede que sean tolerantes e incluso apoyen a su esposo
o esposa, pero que no estén dando los pasos necesarios para poder bautizarse.
También puede que algunos de ellos sí estén bautizados, pero se hayan alejado de
Jehová. Quizás ya no asistan a todas las reuniones, ni salgan a predicar ni
participen en la adoración en familia. Y, por último, aunque es triste decirlo,
algunos de ellos están expulsados. Pero nosotros nunca los damos por perdidos.
Siempre hay esperanza. Deseamos que quienes han sido expulsados recapaciten y
se arrepientan, y regresen a Jehová. ¿Creen que hay algo que los publicadores de la
congregación podamos hacer para demostrar que valoramos a los hermanos que
están casados con alguien que por el momento no sirve a Jehová? ¡Sí, por
supuesto! Y no solo eso, sino que en Filipenses 3:17 el apóstol Pablo nos anima a
aprender de su buen ejemplo y a imitarlos. Filipenses 3:17 dice:
¿Vieron? El apóstol Pablo nos dice que nos fijemos en su ejemplo, pero también en
el buen ejemplo de otros de la congregación. Entre esos buenos ejemplos están los
hermanos que están casados con personas que no sirven a Jehová. Se esfuerzan
mucho por mantener una amistad estrecha con Jehová. Han aprendido a ser
disciplinados para seguir un buen horario de actividades espirituales. Y muchos se
han vuelto expertos en compaginar las responsabilidades familiares con las
espirituales. No es nada fácil, pero lo están logrando. Entonces, ¿CÓMO DEBEMOS
VER Y TRATAR A ESTOS HERMANOS? Hacemos lo que nos dice Filipenses 2:4:
no buscamos solo nuestros propios intereses, “sino también los de los demás”. Eso
significa que nos preocupamos por ellos, por saber cómo están. Siempre los
tratamos con respeto y nunca los pasamos por alto. Reconocemos que estos
hermanos tienen mucho que ofrecer, porque también adoran a Jehová. ¿No es una
maravilla? Somos una gran familia y nos pertenecemos unos a otros. Todos
tomamos en cuenta a los hermanos que están casados con alguien que no sirve a
Jehová y, tal como nos animaba el texto, estamos pendientes de sus necesidades.
Lo hacemos porque los queremos y porque vemos sus buenas cualidades. Así pues,
¿qué podemos hacer? Cuando sea posible, tratemos de hacer cosas con estos
hermanos. Pero ¿hay algo más que podamos hacer? Podemos mostrar interés por
sus cónyuges y tratar de ayudarlos en sentido espiritual. Por ejemplo, si las
circunstancias lo permiten, invitémoslos a los dos a una comida o a pasar un rato
con nosotros. Sabemos que ser amigables y tener conversaciones animadoras
puede tener un efecto muy positivo en alguien. Mientras ve el siguiente VIDEO,
piense en casos específicos de HERMANOS DE SU CONGREGACIÓN QUE TENGAN
ESTAS CIRCUNSTANCIAS Y EN LO QUE PUEDE HACER PARA DEMOSTRARLES QUE LOS
VALORA.
HIDEKO SASAKI: Me siento muy feliz y agradecida por poder servir a Jehová
con mi familia, incluido mi esposo.
¿Qué aprendimos en este video? Aprendimos que los hermanos que están casados
con personas que no sirven a Jehová pueden tener un efecto muy positivo en ellas
si demuestran cualidades cristianas. Pero ¿qué puede ayudarlos a seguir luchando
por la fe? La sabiduría y las fuerzas que solo Jehová puede darles. Recuerden, su
poder es infinito. Y está claro que a Dios le hace feliz actuar a favor de quienes
confían en él. Además, Jehová los ama, no lo olviden. Y él escucha las oraciones
sinceras de los que quieren hacer las cosas como él manda. Así que el amor de
Dios, la oración y el espíritu santo les darán las fuerzas y la sabiduría que necesitan
para mantener una buena rutina espiritual que sea equilibrada y cumplir con la
responsabilidad de atender las necesidades de su familia. Las hermanas que
aparecían en el video aprovecharon todo el alimento espiritual que tenían
disponible para fortalecer su fe. Y Jehová las ayudó a demostrar cualidades
cristianas, como el tacto y la paciencia. Todos sabemos muy bien que a veces
no mostramos tanto tacto como deberíamos. Tener tacto y ser paciente no es nada
fácil, especialmente cuando estás cansado y tu pareja dice o hace algo que te
duele o te hace sentir mal. Ahora bien, no importa cuál sea su situación. ¡Jehová le
dará las fuerzas que necesita para seguir poniendo un buen ejemplo! Pero recuerde
pedirle que ayude a su esposo o esposa a aceptar la verdad. En 1 Pedro 3:1, 2,
encontramos este consejo tan sabio y tan práctico. 1 Pedro 3:1, 2 dice:
1 Pedro 3:1, 2 — “Del mismo modo, esposas, estén en sujeción a sus esposos
para que, si algunos no son obedientes a la palabra, sean ganados sin una
palabra gracias a la conducta de sus esposas, por haber sido ellos testigos
oculares de su conducta casta y su profundo respeto”.
¿No es maravilloso? ¡Los hechos demuestran que este consejo de Pedro funciona!
Muchos hermanos que lo han puesto en práctica han ayudado a su esposo o su
esposa a aceptar la verdad. Si lo piensa bien, es impresionante: el profundo respeto
y la buena conducta pueden lograr que alguien acepte la verdad. Sin que hagan
falta palabras. Claro, al hacer cosas buenas por su pareja, seguro que surgirán
oportunidades para hablar de la verdad y ayudarla en sentido espiritual, eso si las
circunstancias lo permiten y lo ve apropiado. Así que siga poniéndole un buen
ejemplo y orando para que algún día desee servir a Jehová. Hermanos, confíen en
las palabras que Pablo escribió en 1 Corintios 7:16, y recuerden tener siempre una
actitud amable y positiva en su matrimonio. 1 Corintios 7:16 plantea dos
preguntas, pero en un tono positivo. El capítulo 7, versículo 16, dice:
Así es, este texto nos ayuda a seguir siendo positivos y a no perder la esperanza de
que nuestro cónyuge acepte la verdad. Hay muchos ejemplos de personas que con
el tiempo aceptaron la verdad porque vieron que su esposo o su esposa ponían en
práctica lo que Dios dice. Por eso, deseamos de todo corazón que, tarde o
temprano, los que todavía no sirven a Jehová acepten la verdad y sirvan felices a
Dios. Hermanos, sigan los consejos de la Biblia, es la Palabra de Dios. ¡No duden
de que Jehová los ayudará! De esta manera, podrán seguir luchando con éxito por
la fe y honrar el nombre de Jehová.
¿Se dieron cuenta de lo que hizo Pablo? En pocas palabras, felicitó a Timoteo y
expresó su confianza en él. Pero también elogió a su madre, Eunice, y a su abuela
Loida por tener una “fe sin hipocresía”. Estas cristianas no servían a Jehová de
manera hipócrita. Su fe era genuina. ¿No les parece que fueron una bendición para
Timoteo? Y, nosotros, ¿podemos hacer lo mismo? Por supuesto. Podemos felicitar de
corazón a estos jóvenes que solo cuentan con uno de sus padres. Claro, no solo a
ellos, sino también a sus padres. Elogiemos todo el trabajo que están haciendo.
Invitémoslos a estar con nosotros en actividades espirituales y en nuestro tiempo
libre. Cuando era pequeño, mi abuela venía a buscarme todos los sábados por la
mañana y salíamos a predicar. Nunca me preguntaba si ella vendría o no, ni con
quién saldría a predicar aquel día. El hermano que dirigía el estudio del libro
siempre hacía lo mismo: siempre nos incluía a mi abuela y a mí en su grupo, con
él y con su esposa. ¡Qué recuerdos tan bonitos! Presten atención al siguiente
VIDEO. Algunos HERMANOS QUE CRECIERON EN UN HOGAR DONDE SOLO UNO DE
LOS PADRES ERA TESTIGO NOS EXPLICAN QUÉ LOS ANIMÓ A LUCHAR CON ÉXITO POR
LA FE.
Ahora, Joel Dellinger, ayudante del Comité de Servicio, presentará la última parte
de esta serie de discursos: “Luchan con éxito por la fe. Los solteros”.
Los Solteros
3 Luchan con Éxito por la Fe
(1 Corintios 12:25)
En esta serie, se nos ha recordado que Jehová ama y les da poder a los que le
sirven con lealtad. En este último discurso nos centraremos en los hermanos y
hermanas que no están casados. Y responderemos tres preguntas. Primera, ¿por
qué decimos que todos los cristianos, casados y solteros, tienen un papel
importante en la congregación? Segunda, ¿cómo podemos demostrar que
valoramos y apoyamos a los hermanos que no están casados? Y tercera, si usted es
soltero, ¿qué puede ayudarlo a seguir luchando con éxito por la fe?
Para empezar, analicemos QUÉ PIENSA JEHOVÁ TANTO DE LOS QUE ESTÁN CASADOS
COMO DE LOS QUE ESTÁN SOLTEROS. Algo que nos encanta de Jehová es que es un
Dios imparcial. Él acepta a todas las personas que desean servirle, sin importar su
nacionalidad o su color de piel. La imparcialidad que muestra Jehová también
implica que él trata de la misma manera tanto a los solteros como a los casados,
no favorece a ningún grupo. Casarse o quedarse soltero es una decisión personal.
De hecho, la Biblia no dice en ningún lugar que Jehová nos valore más si estamos
casados o si estamos solteros. Por ejemplo, en Mateo 19:12, Jesús dijo que algunos
de sus seguidores decidirían quedarse solteros “por el Reino de los cielos”. Y luego
añadió: “Quien pueda cumplir con esto, que lo haga”. Pensemos en estas palabras
un momento. Si un cristiano —sea joven o mayor— decide quedarse soltero por el
Reino, Jehová y Jesús respetan esa decisión y valoran las razones que motivaron al
hermano a tomarla. Otros cristianos no están casados por las circunstancias de la
vida. Por ejemplo, algunos de ellos son demasiado jóvenes para casarse. Otros
hermanos son viudos o están divorciados. Igual que Jehová, el apóstol Pablo tenía
un punto de vista imparcial sobre los solteros y los casados. Y, como Jesús,
tampoco les dijo a los cristianos si tenían que casarse o quedarse solteros.
Una revista La Atalaya del 2012, que hablaba de la primera carta de Pablo a los
corintios, decía lo siguiente: “Ambos estados [el matrimonio y la soltería] pueden
considerarse un regalo de Dios [...]. Jehová no ve [...] [la soltería] como una fuente
de dolor y vergüenza”. La verdad es que estar soltero tiene ciertas ventajas.
Un cristiano soltero quizás no tenga tantas responsabilidades familiares como uno
que está casado y tenga más tiempo y energías para servir a Jehová. Claro, los
hermanos solteros no creen que por esa razón sean mejores que los hermanos
casados. Así que lo que opina Jehová, su punto de vista, está claro. Tanto solteros
como casados, todos, tenemos un papel importante en la congregación.
¿No creen que esas palabras animaron a Timoteo e hicieron que se sintiera
valorado? ¡Sin duda! En la misma carta, Pablo expresó que estaba preocupado
porque Timoteo se enfermaba con frecuencia. No hay duda de que la
preocupación de Pablo, tanto por su salud física como espiritual, le llegó al
corazón a Timoteo y lo animó a progresar en su servicio a Jehová. Y el ejemplo de
Pablo también nos llega al corazón a nosotros. Quizás eso haga que nos
preguntemos: “¿Puedo hacer más por los solteros? ¿Puedo estar más pendiente de
sus necesidades ya que se están esforzando tanto por servir a Jehová? ¿Tengo una
opinión equivocada de los solteros? ¿Pienso que son inferiores, incompletos o que
les falta algo? ¿O demuestro que los valoro?”. Timoteo fue un superintendente
viajante excelente. Pablo no lo vio como alguien inferior. Al contrario, aunque
Timoteo era soltero, Pablo lo escogió para que tuviera responsabilidades
importantes y lo capacitó para que pudiera cumplirlas bien. Seguro que hoy en día
a nosotros también se nos ocurren muchas maneras prácticas de demostrarles a
nuestros hermanos de la congregación que no están casados que de verdad nos
preocupamos por ellos. Un artículo de estudio de La Atalaya de agosto de 2020
nos recordaba lo siguiente —lo leo—: “Debemos recordar que algunos cristianos
son solteros por decisión personal. A otros les gustaría casarse, pero no han
encontrado a la persona adecuada. Otros tal vez han enviudado. Sea cual sea el
caso, no debemos preguntarles por qué no están casados ni ofrecerles ayuda para
encontrar pareja”. ¡Qué interesante! Si meditamos en lo que dice la Biblia sobre lo
que opina Jehová de la soltería, no haremos ninguna de estas cosas. No les
preguntaremos a los solteros cuándo se van a casar y, claro, tampoco se nos
ocurrirá buscarles pareja si ellos no nos han pedido ayuda. En vez de eso, los
felicitaremos por el buen ejemplo que le ponen a toda la congregación y les
haremos saber que los queremos y los valoramos. En el VIDEO que verán a
continuación, noten LO QUE APRENDE UN ANCIANO SOBRE LAS DIFICULTADES QUE
AFRONTAN LOS SOLTEROS.
RICK: Hermanos, parece mentira. Esta es nuestra última
reunión. ¡Guau! Tenemos muchos puntos en la agenda.
¿Empezamos? El primer punto de la reunión es...
JEFF: Yo daba por sentado que al estar soltero Rick tendría mucho tiempo libre.
Lo que no sabía es todo lo que tiene que hacer él solo. Pero había más cosas
que no sabía.
(Despedida entre Jeff y otra hermana) —Hasta luego. —Adiós.
TOM: [hablando con Jeff sobre Rick y otra hermana] ¡Eh, mira! Entre esos dos
hay algo. Hacen muy buena pareja.
RICK: Bueno...
Como Jesús, Pablo y Timoteo, hablen de las promesas de Jehová con otras
personas. Prediquen con entusiasmo las buenas noticias. Y, por favor, no piensen
que ustedes no tienen mucho que ofrecer, porque eso los podría llevar a aislarse de
los demás hermanos de la congregación. Al contrario, ustedes aportan muchísimo,
porque son hermanos y hermanas que nos ponen un excelente ejemplo de fe. Los
animamos a esforzarse por buscar la compañía de hermanos espiritualmente
maduros en la congregación, sean solteros o casados. Como Timoteo, reflexionen
sobre estas cosas, dedíquense de lleno a alcanzar metas espirituales. ¿Para qué?
Para que todos vean claramente su progreso. Recuerden: los necesitamos y los
queremos. Seguro que esta serie de discursos nos ha fortalecido la fe.
¿QUÉ HEMOS APRENDIDO? Por favor, abran sus biblias en Hebreos, capítulo 11.
Desde el versículo 4, si se fijan y echan un vistazo, verán que aparecen muchos
nombres conocidos de hombres y mujeres de fe. Está Abel, Enoc, Noé, Abrahán y
Sara, Rahab, Gedeón, David y muchos más. Todos estos hombres y mujeres
tuvieron vidas muy diferentes, es cierto. Pero todos tuvieron algo en común.
Fíjense en lo que dice Hebreos 11:34. En la mitad del versículo dice que “pasaron
de estar débiles a ser fuertes”. ¡Sí! Se hicieron poderosos gracias a su fe. Y lo
mismo sigue pasando hoy. Ocurre en todas las congregaciones del pueblo de
Jehová en el mundo. Seamos jóvenes o mayores, hombres o mujeres, y tengamos
las circunstancias que tengamos, todos podemos hacernos poderosos gracias a la
fe. Por eso, queridos hermanos, no tengan ninguna duda de que los amamos y los
valoramos, y deseamos que Jehová bendiga los esfuerzos que hacen por seguir
luchando con éxito por la fe.
11:45
DISCURSO DE BAUTISMO:
Todos estamos muy contentos por ustedes, candidatos al bautismo. Este es un día
muy especial para ustedes. A partir de hoy, al igual que millones de sus hermanos,
tendrán una relación muy especial con Jehová. Por favor, imaginen que están en un
estadio gigantesco y que allí están ocho millones y medio de hermanos, todos
juntos, aplaudiendo porque están muy felices de que ustedes se hayan puesto de
parte de Jehová. Algunos de ustedes son jóvenes que se han criado en la verdad, y
ahora están sentados con su familia. Otros quizás conocieron la verdad años atrás
y hace poco que volvieron a Jehová. Otros tal vez aprendieron la verdad
recientemente y, aun en estas circunstancias, con la pandemia y las reuniones por
Zoom, han llegado al punto de dedicar su vida a Jehová. Sea cual sea su caso,
estamos muy felices de que tomara la decisión de bautizarse. El título de este
discurso para ustedes, candidatos, es !Los que demuestren tener fe recibirán vida
eterna”. Dos palabras clave: !demuestren” y !fe”.
Jesús les estaba diciendo que tenían que fortalecer su fe. Una vez que encendemos
un fuego, las llamas pueden ser muy intensas. Pero, si no lo alimentamos con leña,
¿qué sucede? Que se irá apagando, y pronto se convertirá en cenizas. Así que, para
mantener el fuego de nuestra fe encendido, hay que alimentarlo. El fuego de
nuestra fe necesita constante atención para que siga ardiendo. Vamos a contestar
tres preguntas. 1) ¿Qué pueden hacer para alimentar el fuego de su fe? 2) ¿Cómo
pueden demostrar fe? 3) ¿Cómo los recompensará Jehová por su fe? Pero, antes de
contestar esas preguntas, hablemos con dos Testigos bautizados que han dado
pasos para fortalecer su fe. Vamos a empezar con Jouni Palmu.
Hermano Palmu, ¿recuerdas algún momento en el que tuvieras poca fe? Sí,
recuerdo uno.
Así que eras joven, estabas en un lugar aislado y con muchas dudas. ¿Qué
hiciste para fortalecer tu fe?
No tenía ni los volúmenes de las revistas ni la Watchtower Library ni ninguna
otra herramienta de investigación. Así que escribí una carta a mis hermanos
carnales, que para ese entonces estaban en la cárcel por negarse a realizar el
servicio militar. Sabía que ellos tenían todas nuestras publicaciones y que
estudiaban la Biblia todos los días, como si fueran eruditos. Ellos vieron que
necesitaba ayuda, así que me escribieron una carta con las respuestas a todas
mis preguntas. Me sentí muy feliz y le di las gracias a Jehová. Aquello de
verdad fortaleció mi fe.
No debió ser fácil tomar esa decisión a esa edad. ¿Qué hiciste para
fortalecer tu fe?
Está muy claro que estudiar la Biblia y el apoyo de los hermanos te ayudó
mucho. ¿Y cómo crees que te ha beneficiado fortalecer tu fe?
Queremos ser como el hombre de este salmo, que !disfruta con la ley de Jehová”.
Cuando disfrutamos, cuando nos gusta leer la Palabra de Dios, ya no nos sentimos
obligados a leerla, sino que estamos deseando leerla. !Día y noche lee su ley”.
Jehová quiere que leamos su Palabra a menudo. Cuando oramos, nosotros le
hablamos a Jehová, pero, cuando leemos la Biblia, es él quien nos habla a
nosotros. Me gustaría que se fijaran en la forma tan bonita en la que Isaías describe
cómo nos habla nuestro Dios, Jehová, en Isaías 30:21.
Pero no basta con solo leer la Biblia, también tenemos que meditar en lo que
leemos. ¿Por qué es importante que meditemos en lo que leemos en la Biblia?
Porque saber lo que hay que hacer es una cosa, y hacerlo es otra. La meditación es
el proceso de convertir el conocimiento, o sea, lo que sabemos, en decisiones
sabias y en acciones. La Biblia a menudo relaciona la meditación con el corazón.
¿Y por qué? Porque la meditación convierte el conocimiento, o sea, lo que
sabemos, en sentimientos. Y son esos sentimientos los que motivan nuestras
acciones y decisiones. Podríamos comparar la meditación a un puente. A este lado
del río está saber lo que debemos hacer y a este otro lado está hacerlo.
La meditación es el puente que une el lado del conocimiento con el de la acción.
Si nos damos cuenta de que muchas veces sabemos lo que tenemos que hacer pero
no lo hacemos, la meditación es el puente que nos ayudará a pasar de un lado al
otro, a pasar del conocimiento a la acción.
¿Cómo pueden meditar en la Palabra de Dios? Bueno, después de leer una parte de
la Biblia o de una de nuestras publicaciones, dediquen un rato a pensar
profundamente en lo que leyeron. Pregúntense: “¿Qué puedo aprender sobre
Jehová en este relato? ¿Qué es lo que me hace sentir por Jehová? ¿Cómo puedo
poner esto en práctica? ¿O cómo puedo usarlo para ayudar a otros?”. Bueno,
repasemos la primera pregunta. ¿Qué pueden hacer para alimentar el fuego de su
fe? Leer y meditar en la Palabra de Dios todos los días.
Veamos la segunda pregunta: ¿CÓMO PUEDEN DEMOSTRAR FE? Jesús nos enseñó
que no bastaba solo con creer en él. Vamos a leer Juan 3:16 para ver la importancia
que le dio Jesús a demostrar que tenemos fe.
Juan 3:16 - “Porque Dios amó tanto al mundo que entregó a su Hijo
unigénito para que nadie que demuestre tener fe en él sea destruido, sino que
tenga vida eterna”.
Entonces, ¿cómo podemos demostrar que tenemos fe? Una nota de la Biblia de
estudio en inglés dice que demostrar tener fe incluye la idea de !demostrar lo que
se cree firmemente, o la fe, obedeciendo a Dios”. Abrahán nos dejó un gran
ejemplo de lo que es demostrar fe, obedeciendo. Veamos la descripción tan bonita
que se hace de la fe de Abrahán en Santiago 2:21-23.
Santiago 2:21-23 - “¿No fue declarado justo por sus obras nuestro padre
Abrahán después de ofrecer a su hijo Isaac en el altar? Ya ves que su fe actuó
junto con sus obras y que su fe fue perfeccionada por sus obras. Así se
cumplió el pasaje de las Escrituras que dice: ‘Abrahán puso su fe en Jehová
y fue considerado justo’. Y él fue llamado amigo de Jehová”.
Cuando leemos la historia de Abrahán y meditamos en ella, podemos sentir las
mismas emociones que él sintió cuando Jehová le pidió que sacrificara a Isaac, el
único hijo que él y Sara tenían. ¿Cómo pudo Abrahán tomar una decisión tan
difícil? Mucho antes de eso, Abrahán ya había tomado la decisión de servir a
Jehová y obedecerlo en todo. Aquella decisión que había tomado de obedecer a
Jehová siempre ayudó a Abrahán a saber lo que debía hacer en otras situaciones en
el futuro. No estaba todo el tiempo pensando: “¿Debería hacer lo que Jehová me
pide o no?”. Hasta en algo tan difícil como tener que sacrificar a su hijo, Abrahán
no dudó, sino que actuó de inmediato para hacer lo que Jehová le había pedido.
1. Hebreos 10:25 - “Sin dejar de reunirnos, como algunos tienen por costumbre.
Más bien, animémonos unos a otros, sobre todo al ver que el día se acerca”.
3. Marcos 11:24 - “Por eso les digo: todas las cosas que pidan en sus oraciones,
pídanlas con fe y denlas por recibidas, y las tendrán”.
¿Qué prometieron al dedicarse? !Siempre oraré para pedirle a Jehová su
guía”. ¿Cómo demuestran su fe? Cuando se sienten tentados a jugar un
videojuego violento, no caen en la tentación, y juegan con otro diferente.
Cuando se enfrentan a una enfermedad seria, le piden a Jehová que les dé
calma y sabiduría. Cuando sienten que se están enojando con alguien, le
piden a Jehová autocontrol.
Ahora bien, podríamos leer otros textos y hablar de muchos otros ejemplos de
cómo se puede demostrar la fe con acciones. El punto es... ustedes, candidatos al
bautismo, le dedicaron su vida a Jehová para hacer su voluntad. Esa decisión única
de dedicarse a Jehová y vivir de acuerdo con sus normas influirá en todas las
decisiones que tomen en su vida a partir de ahora. Recordemos la segunda
pregunta: ¿cómo pueden demostrar que tienen fe? Demuestran que tienen fe
obedeciendo a Dios.
1) ¿Qué pueden hacer para alimentar el fuego de su fe? Leer la Biblia y meditar
en ella todos los días.
Por favor, no olviden este día, recuérdenlo, anótenlo. Cada vez que escuchen un
discurso de bautismo, aprovechen para reflexionar en su propio bautismo y en las
muchas bendiciones que han recibido por haber tomado la decisión de dedicar su
vida a Jehová. Jehová quiere que sean felices y que disfruten de la vida. Ustedes
están en la mente y el corazón de los más de ocho millones y medio de hermanos
que están viendo este programa y que quieren que sean felices. Pero tengan claro
que la felicidad no es algo que puedan comprar u obtener por ustedes mismos, ni
conseguir amándose a ustedes mismos. Al igual que una fogata produce luz y
calor, la felicidad es el resultado de la fe y del amor a los demás y a Jehová.
Podríamos decir que la felicidad es el calor y la luz del fuego del amor. El mundo
les dirá: !Persigue tus sueños. Puedes ser lo que tú desees”. Pero es mucho mejor
dejar que Jehová sueñe por ustedes. Su vida sirviendo a Jehová puede ser
muchísimo mejor que cualquier otra que hayan podido soñar. Por favor, de ahora
en adelante, no dejen nunca de alimentar y demostrar su fe.