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La historia de España engloba el período comprendido desde la primera colonización humana en

la prehistoria en la península ibérica hasta la actualidad. La formación de España inicia a finales de


la Edad Media con la unión o invasión (caso de Navarra y Granada) de los reinos que acabarán
formando Castilla, León, Aragón, Navarra y Granada.

Introducción[editar]
Los primeros homínidos llegaron al territorio de la actual España hace 1,2 millones de años
aproximadamente. Se sucedieron varias especies, como Homo antecessor, los preneandertales de
la Sima de los Huesos (identificados en un principio como Homo heidelbergensis) y los neandertales
(Homo neanderthalensis), hasta que hace unos 35 000 años los humanos modernos (Homo sapiens)
entraron en la península ibérica y fueron desplazando a estos últimos, con los que aún coexistirían
durante cerca de 10 000 años. Hace unos 27 000 años se extinguieron las últimas poblaciones
neandertales en el sur. Durante los milenios siguientes el territorio fue lugar de asentamiento de
pueblos íberos, celtas, fenicios, cartagineses y griegos y hacia el 200 a. C. la península comenzó a
formar parte de la República romana, constituyendo la Hispania romana. Tras la caída de Roma, se
estableció el Reino visigodo. Dicha monarquía visigótica se inició en el siglo v y se mantuvo hasta
comienzos del siglo viii. En el año 711 se produjo la primera conquista musulmana desde el Norte de
África; en pocos años el islam dominaba gran parte de la península ibérica. Durante los 750 años
siguientes, el reino dominado por musulmanes sería conocido como al-Ándalus, y mientras gran parte
del resto de Europa permanecía en los años oscuros, Al-Ándalus experimentaba un esplendoroso
florecimiento multicultural, científico y artístico.1
De modo paulatino, se produjo la Reconquista, y los reinos cristianos arrebataron progresivamente el
territorio a los musulmanes. Comenzada aproximadamente en 722 con la rebelión de Don Pelayo y
partiendo desde el norte, avanzó durante los siglos viii a xv culminando con la conquista de
Granada en 1492. Durante este periodo los reinos cristianos se desarrollaron notablemente; la unión
de los dos más importantes, Castilla y Aragón, por el matrimonio en 1469 de los Reyes
Católicos, Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, posibilitaría la unificación de España y el fin de
la Reconquista.2345
En 1492 los Reyes Católicos financiaron el proyecto del navegante Cristóbal Colón en la búsqueda de
una nueva ruta comercial con Asia a través del océano Atlántico, y proclamarían la expulsión de los
judíos. La llegada al Nuevo Mundo y la posterior conquista de América forjaron la creación del Imperio
español. Durante los siguientes siglos España se alzaría como actor principal del mundo occidental y
primera potencia de la época. Durante los siglos xvi y xvii tendría lugar también la época de mayor
apogeo de la cultura y las artes hispanas conocida como Siglo de Oro.6789
El Imperio español en 1580, tras la unificación de la península ibérica bajo un único rey español, Felipe
II, comprendía América del Sur, América Central y el Caribe, grandes áreas de América del Norte en
diferentes grados de influencia o control, las islas Filipinas en Asia, así como enclaves de diversa
importancia en las costas de África y la India. Incluía además numerosas posesiones en Europa,
los Países Bajos Españoles, el Ducado de Milán o el Reino de Nápoles, la mayoría de ellas perdidas
tras la paz de Utrecht de 1713.1011121314
El tres de mayo de 1808 en Madrid, pintura de Goya, mostrando
los fusilamientos de la resistencia española a manos de las tropas de Napoleón.
La católica e imperial España se vio involucrada durante este período en numerosos conflictos
especialmente contra el Imperio otomano, los Países Bajos, los protestantes, Inglaterra y Francia. Con
la muerte de Carlos II en 1700, la casa de Austria se extinguió para dejar paso a la de
los Borbones tras la guerra de sucesión española. España fue perdiendo progresivamente su
preponderancia militar y tras sucesivas crisis el país redujo paulatinamente su poder; a principios del
siglo xix ya se había convertido en una potencia de segundo orden.151617
El Primer Imperio francés de Napoleón Bonaparte invade la península; meses después, el 2 de mayo
de 1808, se inició la sublevación popular que desembocaría en la guerra de la Independencia
Española. Como principal consecuencia de la guerra y tras la expulsión de los franceses en 1814,
España sufrió las guerras de independencia hispanoamericanas. El siglo continuó caracterizándose en
la metrópoli por la inestabilidad política y la puja entre liberales y partidarios del Antiguo Régimen.
Entre 1873 y 1874 tuvo lugar la I República. La llegada de la Revolución Industrial y el sistema
canovista a finales del siglo elevó el nivel de vida de una clase media que empezaba a consolidarse en
los núcleos urbanos principales; sin embargo la guerra hispano-estadounidense o «desastre del 98»
supuso la pérdida de la mayoría de las últimas colonias del antiguo imperio (como Filipinas, Cuba y
Puerto Rico), generando así una profunda conmoción en la sociedad española.10181920
Mientras el nivel de vida y la integración con el resto de Europa progresaban, la inestabilidad política
marcaba el primer tercio del siglo xx. Al conocerse en las elecciones municipales la victoria en las
principales ciudades de las candidaturas republicanas, el 14 de abril de 1931 se proclamó la Segunda
República, abandonando el rey Alfonso XIII el país, con el fin de evitar una guerra civil, que llegaría
cinco años más tarde, en 1936, con el Golpe de Estado de julio de 1936. La guerra civil española se
saldaría en 1939 con la victoria del bando franquista.212223 España fue oficialmente neutral durante
la Segunda Guerra Mundial; tras la posguerra, periodo marcado por la escasez y el aislamiento
internacional, siguió un periodo de fuerte desarrollo económico y de cierto aperturismo durante las
décadas de 1960 y 1970.
Tras la muerte del dictador Franco, se recuperó la monarquía española en la figura del jefe del Estado,
el rey Juan Carlos I, y se aprobó la Constitución de 1978 durante el transcurso del periodo conocido
como transición, que garantizó una gradual evolución de la nación hacia la consolidación de
la monarquía democrática parlamentaria.24252627 España ingresó en la Comunidad Económica
Europea, actual Unión Europea, en 1986, organizando importantes eventos internacionales como
la Copa Mundial de Fútbol de 1982 o los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, y en 2002 adoptaría
el euro como moneda oficial.2829

De Hispania a España[editar]

Artículo principal: De Hispania a España


Mapa histórico y geográfico de los reinos de España y Portugal,
en el Atlas historique de Henri Abraham Chatelain (1705 a 1739). Biblioteca Nacional de España.
El momento histórico exacto en que se hace referencia a España por primera vez no está claramente
definido, existiendo escritos del siglo vi en los que ya aparece la palabra España, como el «Laus
Spaniae» de la Historia de los reyes godos, vándalos y suevos de San Isidoro de Sevilla.3031 En otros
países de Europa comenzó a conocerse al conjunto de reinos cristianos de la península como España,
en singular, desde tiempos muy tempranos. El propio término español aparece documentado a
comienzos del siglo xv en el Concilio de Constanza, cuando los reinos de Portugal, Aragón, Castilla y
Navarra aparecen formando una sola entidad, «la nación española»32 y compartiendo el mismo voto.
En la península ibérica se hablaría de los reinos de León, Navarra, Castilla, Aragón y de Portugal como
reinos hispanos, de Hispania (España en latín) por tanto;33 y cuando por razones dinásticas o de
conquista uno de ellos conseguía tener bajo su cetro la mayor parte de la España cristiana, se
autotitulaba emperador de España, como Alfonso VI y Alfonso VII de León.33 Los Reyes
Católicos eran conocidos como reyes de España (o de las Españas). El historiador Hernando del
Pulgar comenta cómo en 1479 se planteó en el Consejo Real si designar a los Reyes Católicos como
Reyes de España;34 finalmente se acordó no usar dicha titulación. En 1493 el gobierno municipal de
Barcelona se refirió a don Fernando como el «rey de Spanya, nostre senyor».35 Nicolás
Maquiavelo en su obra más reconocida El Príncipe (1513) hace referencia al rey de España,36 así
como Lope de Vega cita a Carlos I como rey de España.37
A partir de Carlos I, todos los reyes son llamados rey de España (o de las Españas), aunque utilizan
todos sus títulos, desde rey de Castilla hasta Señor de Vizcaya y de Molina. Hasta el siglo xix, las
monedas españolas solían llevar junto al nombre del rey la leyenda «Hispaniarum (et
Indiarum) Rex».38 Igualmente, monarcas como Fernando VII de España e Isabel II de España usaron
el título de rey o reina de las Españas en las menciones constitucionales.3940

Prehistoria[editar]

Homo heidelbergensis: cráneo n.º 5 de la Sima de los huesos de


la Sierra de Atapuerca, de unos 500 000 a 350 000 años de antigüedad, el llamado «Miguelón».
Artículo principal: Prehistoria en la península ibérica

La presencia de homininos en la península ibérica se remonta al menos a 1,3 o 1,2 millones de años,
datación de la mandíbula encontrada en la Sima del elefante, uno de los yacimientos de la Sierra de
Atapuerca (provincia de Burgos). Corresponde a un Homo aún por determinar, próximo a los más
primitivos Homo africanos y al hombre de Dmanisi pero con algunas características derivadas
propias.4142 De esta edad sería también el yacimiento con industria lítica propia del Paleolítico inferior
arcaico (Pre-Achelense) de Fuente Nueva 3, en la cuenca de Guadix-Baza (provincia de Granada).43
De hace unos 900 000 años son los restos del yacimiento de la Gran Dolina, también en Atapuerca,
que definen una especie clave para entender la evolución humana, bautizada como Homo
antecessor.4445 El siguiente hallazgo, datado en unos 430 000 años,46 es la ingente cantidad de
restos de Homo heidelbergensis (especie precursora del Homo neanderthalensis) hallados en la sima
de los Huesos de Atapuerca,47 yacimiento que ha proporcionado, entre una variedad ósea
excepcional, numerosos cráneos muy bien conservados.48 Son numerosos los yacimientos con
industria lítica Achelense de esta época en la península, como los de Torralba y Ambrona (provincia de
Soria) o los de las terrazas del Manzanares (provincia de Madrid).[cita requerida]
En el Paleolítico medio se sitúa la presencia del hombre de Neanderthal, asociado a la
cultura Musteriense, datando en unos 60 000 años sus primeros restos en Gibraltar. En la Cueva de
Nerja (Málaga), se han datado en 42 000 años de antigüedad algunos restos orgánicos asociados a
unas pinturas de focas que podrían ser la primera obra de arte conocida de la historia de la
humanidad.49
En el Paleolítico superior se sitúa la llegada a la península del Homo sapiens, el hombre «moderno»,
hace unos 35 000 años, manifestada por los restos de la cultura Gravetiense hallados en Cantabria.50
Cohabitan la península durante varios millares de años con los neandertales, hasta la extinción de las
últimas poblaciones de neandertales en el sur hace unos 27 000 años.51 Hace unos 16 000 años, la
cultura Magdaleniense estaba presente en Asturias, Cantabria y parte del País Vasco, cuya aportación
más notable lo representan las pinturas rupestres de las Cuevas de Altamira.52
El arte rupestre se desarrolló en dos zonas estilística y cronológicamente bien diferenciadas: el arte
franco-cantábrico y el arte levantino.53
Artículo principal: Neolítico en la península ibérica

La revolución neolítica, que la teoría difusionista entiende como una difusión cultural a partir de su
inicio en el Creciente Fértil de Oriente Próximo, apoyándose en la difusión simultánea de la cerámica
cardial, alcanza la costa mediterránea en torno al 6000 a. C., provocando el abandono del tradicional
modo de vida cazador-recolector por un estilo de vida sedentario, enfocado en la agricultura y la
ganadería, extendido al resto de la península durante los siguientes dos milenios. En torno al
5000 a. C. aparece la cultura megalítica en el tercio occidental de la península.
Las culturas que usaron los metales (Edad de los Metales) aparecieron en la península ibérica en torno
a los años 3000 a 2500 a. C. Su distribución geográfica es mayor y se considera que la búsqueda de
los metales trajo flujos migratorios importantes, destacando Los Millares en Almería, con una gran
fortificación, y en el curso del río Tajo en la zona portuguesa actual.54
Véanse también: Calcolítico en la península ibérica, Cultura argárica, Bronce Manchego y Vaso
campaniforme.
Véase también: Protohistoria de la península ibérica

Edad Antigua[editar]
Véase también: Historia antigua de la península ibérica
Pueblos indígenas y colonizaciones históricas[editar]

Dama de Elche, escultura ibera. Museo Arqueológico Nacional


de España (Madrid).
La Edad del Hierro se inicia en la península ibérica con la penetración de población e influencia
cultural indoeuropea desde el comienzo del I milenio a. C.; determinando la identidad étnica y
lingüística celta de la mayor parte de los pueblos indígenas de las zonas norte, oeste y centro, con
alguna excepción: lusitanos y vetones, también indoeuropeos, se califican de «precélticos», mientras
que los vascones se califican de «preindoeuropeos». A pesar de la similitud de su forma de vida a la de
otros pueblos de la zona norte (galaicos, astures y cántabros), su lengua (el «protoeuskera») se
supone similar a las habladas en la zona oriental peninsular; las del grupo de pueblos
denominados iberos, de mayor desarrollo económico. Las fuentes clásicas denominaron celtíberos al
grupo de pueblos situados en una posición intermedia (geográficamente).
La costa peninsular meridional y el área tartésica (con centro en el valle del Guadalquivir -
la Turdetania- y con proyección hasta zonas muy lejanas, de la desembocadura del Tajo a la
del Segura), la más rica en metales y de mayor desarrollo económico y social (una
verdadera civilización), fue profundamente influenciada por la colonización fenicia. La fundación mítica
de Gadir (Cádiz) se data en el 1104 a. C.,555657 aunque no hay base arqueológica para sustentar
semejante cronología hasta varios siglos más tarde. En el siglo viii a. C. ya hay pruebas de la
presencia de un abundante grupo de factorías y colonias fenicias,
como Malaka (Málaga), Sexi (Almuñécar) y Abdera (Adra).
Las colonias griegas se instalaron más al norte, en Akra
Leuké (Alicante), Hemeroskopion (Denia), Emporion (Ampurias) y Rhodes (Rosas). Su contacto con
los iberos les hizo dar las primeras referencias escritas de estos pueblos. Las mismas fuentes griegas
señalan que los navegantes griegos habían establecido contactos con el «reino» de Tartessos y con su
«rey» Argantonio, que les habría dado suficiente plata como para construir murallas contra los ataques
persas. Tales contactos no fructificaron, precisamente por el dominio fenicio de esta ruta, y no ha
podido constatarse arqueológicamente la presencia griega en la costa mediterránea malacitana, en
una colonia que habría llevado el nombre de Mainake.

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