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sometidos a vibración) no son suficientemente grandes no ocurren con la
frecuencia adecuada para producir la falla. Se ha estimado que los esfuerzos
de los miembros de un puente ferroviario ordinario se repiten menos de dos
millones de veces en un período de 50 años.
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relativamente altos, ya que el motor es constantemente operado a casi su
máxima potencia y el tamaño del árbol se mantiene tan pequeño como sea
posible para reducir su peso. Los esfuerzos en el árbol de una turbina de
vapor, si es operada continuamente por 10 años, se invertirían 16,000 millones
de veces, mientras que los esfuerzos en aletas se invertirán aproximadamente
250,000 millones de veces. La fatiga debe considerarse en el diseño de muchas
partes sometidas a ciclos de esfuerzos tales como los cigüeñales de motores,
pernos resortes, dientes de engranes, alabes de turbinas, partes para
automóviles y aviones, partes para motores a vapor Y gas, rieles ferroviarios,
cables de alambre, ejes para automóviles, y muchas partes para máquinas
sometidas a cargado cíclico.
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ensayos de fatiga por compresión del hule vulcanizado (ASTM D 623) están
cubiertos por las normas de la ASTM.
6.2 NATURALEZA DE LA FATIGA DE LOS METALES.
El esfuerzo
localizado alto
también se
desarrolla en
cambios bruscos de
sección transversal
en la base de las
ralladuras
superficiales, en la
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raíz de una cuerda
de tornillo, en el
borde de pequeñas
inclusiones de
sustancias extrañas,
y en una sopladora
minúscula o un
defecto interno
similar. Existen
condiciones típicas
que acentúan la
susceptibilidad a la
falla por fatiga.
Debe también
consignarse que la
falla de las partes de
máquinas es
frecuentemente el
resultado una
combinación de
fatiga y desperfecto
por la deformación
excesiva ocasional.
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les vio bajo microscopio al iluminárseles con luz oblicua. Cuatro años después,
Ewing y Humphrey observaron que las líneas de deslizamiento desarrolladas en el
acero sometiéndolo a ciclos de esfuerzo repetidos podrían desarrollar en ellas
grietas microscópicas que a su vez se extienden y causan la falla de las piezas.
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se rompieron en muchos casos porque estos defectos las tornaron particularmente
débiles para resistir esfuerzos repetidos.
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resistencia de los metales bajo otros tipos de carga que los que dan una
completa inversión del esfuerzo. También existen datos disponibles que tornan
posible una estimación de las resistencias a la fatiga por cargas de torsión y
axiales. Para cada uno de un número de materiales, éstos muestran alguna
correlación con las resistencias últimas estáticas a la rotura.
Las máquinas para realizar ensayos a la fatiga con ciclos de esfuerzos repetidos o
invertidos pueden clasificarse de acuerdo con el tipo de esfuerzo producido:
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contador para registrar el número aplicado de ciclos y algún dispositivo que,
cuando la probeta se rompa, automáticamente desembrague el contador.
Frecuentemente el dispositivo desembragador también se diseña para detener la
máquina de ensaye misma.
Las máquinas para aplicar esfuerzos flexionantes son las más comunes, y se
les ha utilizado en la mayoría de las investigaciones. La popularidad de este tipo de
máquina se debe a su simplicidad de operación, la exactitud con que se le puede
calibrar, y el hecho de que produce una condición de esfuerzo común. Las
máquinas de ensaye flexionante son generalmente del tipo del tipo de viga rotatoria
un ejemplo de la cual se muestra en la figura 6.1. Para esta máquina, una probeta
(Figura 6.2) se sujeta por sus extremos con sujetadores especiales y carga a través
de dos rodamientos equidistantes del centro del claro. Se aplican cargas iguales a
estos dos rodamientos por medio de masas que producen un momento flexionante
uniforme en la probeta entre los dos rodamientos de carga. Para aplicar ciclos de
esfuerzos se hace girar la probeta por medio de un motor; como las fibras
superiores de la viga girada están siempre en compresión mientras las inferiores
están en tensión, resulta aparente que un ciclo completo de esfuerzo invertido en
todas las fibras se produce durante cada revolución.
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Varios tipos de máquinas de ensaye a la fatiga son de aplicación universal.
Llevan un cabezal estacionario o placa fija y placa o base vibratoria, con
dispositivos para conectar varios aparatos con probetas fijadas entre ellas. La base
vibratoria ejerce un movimiento o fuerza controlada sobre la probeta; si es ejercida
axialmente, se desarrollarán esfuerzos tensivos y compresivos. Mediante el uso de
varios aditamentos se pueden desarrollar esfuerzos torsionantes y flexionantes. Se
usan cuatro métodos básicos en las máquinas universales para generar y controlar
la fuerza.
Otro tipo de máquina usa una manivela de carrera variable según se muestra
en la figura 6.3 para generar y controlar la fuerza que actúa sobre la probeta. Para
cualquier ensayo solo, la carrera es constante y la carga sobre la probeta se mide
por medio de deflexión de la viga de transmisión. La carga previa estática se aplica
moviendo la base o placa fija con mecanismo ya sea hidráulico o de tornillo.
Algunas máquinas tienen controles especiales que sensibilizan la carga y
automáticamente mantienen constante las cargas previa y vibratoria para
contrarrestar el creep y resbalamiento. Un tercer tipo de máquina universal de
ensaye a la fatiga utiliza un sistema hidráulico de control y potencia para mover un
pistón por medio de golpe de amplitud fija. El pistón principal de carga se controla
por medio de un pequeño pistón accionador que es operado por una manivela de
carrera ajustable.
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El cuarto tipo de máquina universal, que se muestra esquemáticamente
en la figura 6.4, utiliza una fuerza constante en vez de un movimiento de
amplitud constante. La carga sobre la probeta se produce mediante un
oscilador mecánico que es, esencialmente, una masa excéntricamente montada
que se hace girar por medio de un motor sincrónico. El desequilibrio de esta
masa puede cambiarse desde cero hasta un máximo, y su posición es calibrada
para indicar la carga dinámica en libras. Ajustando los resortes de carga
previa, cualquier relación deseada entre los esfuerzos máximo y mínimo puede
producirse.
Figura 6.4 Arreglo de una máquina Sonntag universal de ensaye a la fatiga del tipo de inercia y
fuerza constante para un ensayo de flexión.
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6.5 PROCEDIMIENTO GENERAL.
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resistencias estáticas de unos cuantos metales representativos se muestran en la
tabla 6.2.
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TABLA 6.2 LIMITE DE DURACIÓN Y RELACIÓN DE DURACIÓN DE VARIOS METALES*
* Adaptada de H.F.Moorey J.B.Kommers, fatige of metals (fatiga de los metales) McGraw HiII, Nueva
York, 1927.
Las probetas refrigeradas antes del templado poseen una mayor resistencia a
la fatiga que las no refrigeradas, por que la refrigeración tiende a reducir la cantidad
de austenita retenida [934]. Algunos tratamientos térmicos pueden aumentar la
resistencia al sedimento estático, pero disminuyen la resistencia a la fatiga debido a
las diminutas fisuras causadas por el temple o la descarburización de la superficie.
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esfuerzos repetidos de probetas bajo ciclos de tensión y compresión directas y
alternas, debido a la posibilidad de que cualquier ligera excentricidad de carga
puede causar esfuerzos flexionantes serios, y los esfuerzos intensamente
localizados son susceptibles de ocurrir en las orillas de las probetas axialmente
cargadas. Estas concentraciones de esfuerzos en objetos sometidos a esfuerzos
repetidos son de importancia considerable aun para los materiales dúctiles,
aunque tienen muy poco efecto sobre la resistencia estática a al tensión. En
general, los ensayos cuidadosamente conducidos han demostrado que el límite
de duración para ciclos de tensión y compresión directas y alternas es
prácticamente el mismo que el límite de duración para ciclos de esfuerzos
flexionantes invertidos.
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Johnson en el cual el esfuerzo mínimo se traza para arrojar una línea recta (la escala
horizontal carece de significación), y el límite de duración correspondiente a
cualquier esfuerzo se traza verticalmente arriba, arrojando la línea curva superior.
El rango de esfuerzos se representa por medio de la línea curva rayada. Así, para
cualquier esfuerzo mínimo AC, el límite de duración es BC, el esfuerzo medio es
OC y el rango de esfuerzos es AB.
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ENSAYE E INSPECCIÓN DE LOS MATERIALES DE INGENIERÍA
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límite de duración; mientras más alto sea el esfuerzo y el número de ciclos de
esfuerzo preliminares, mayor será el daño causado y más bajo será el límite de
duración resultante modificado. Así mismo, la capacidad de carga estática
decrecerá debido al alto esfuerzo desarrollado en la raíz de la grieta microscópica
por fatiga. Algunos materiales parecen resultar más dañados que otros por el
sobreesforzado preliminar. Como muchas máquinas o estructuras son susceptibles
de ser sometidas a sobrecargas temporales, el posible efecto de tales sobrecargas
sobre el límite de duración debe ser considerado [909].
Sin embargo, una parte pulida a máquina puede fallar más rápidamente que
otra con un buen acabado con herramientas, debido a la tensión superficial
producida por calentamiento debido al pulido.
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El bombardeo con perdigones de la superficie de probetas maquinadas no
pulidas de algunas clases de acero produce un efecto benéfico sobre el límite de
duración en comparación con el resultado para probetas pulidas pero no
bombardeadas con munición, aunque la resistencia a la tensión no resulte
correspondientemente beneficiada [930]. Para probetas de alambre de 0.162 de
diámetro que no hayan sido maquinadas o pulidas, los límites de duración serán los
siguientes:
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esfuerzos no es tan serio como pareciera por los resultados de los cómputos
realizados con base en la teoría de la elasticidad o el análisis foto elástico.
Algunas de las aleaciones del acero, tales como el níquel al cromo, parecen
ser más sensitivas a los efectos de la concentración de esfuerzos, una propiedad que
ha sido llamada delicadeza de un material. El hierro fundido es considerablemente
menos sensitivo a las concentraciones de esfuerzos impuestas en los ensayos de
fatiga que los aceros, y la razón aparente es que las irregularidades inherentes a la
microestructura del hierro fundido producen una considerable concentración del
esfuerzo, de modo que el efecto de una discontinuidad impuesta resulta un tanto
enmascarada.
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La prueba de dureza de Brinell parece proveer un buen índice del límite de
duración para acero laminado y forjado. Para esos materiales el límite de duración a
la flexión invertida es aproximadamente de 250 veces el número de dureza de
Brinell. Esta relación no prevalece cuando el número de Brinell excede 400.
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