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PRÁCTICA SOBRE POBLACIÓN

Australia y Burundi / Austria y Egipto

GABRIEL CASTRO CARREÑO ; IRENE ESCOBAR MADURGA ;LUCÍA GARCÍA GUILLORME ;


ÁGUEDA GARCÍA ROMERO ; SOFIA NAVARRO GUZMÁN ; CRISTINA PALACIOS RINCÓN ;
ZAINEB ZARKIK

1.- Elija dos países para su análisis con grandes diferencias en renta per cápita de esta web.
Para comprobar la renta per cápita de los países elegidos, visite esta web.

Los países inicialmente escogidos para esta práctica son Australia y Burundi. No obstante, en la
pregunta 5, debido a que no hay datos a cerca de Burundi y Australia no daba pie a un análisis
tan interesante, hemos decidido cambiar de países, escogiendo únicamente en esa pregunta
Austria y Egipto. Así mismo, en la pregunta 4 hemos escogido Australia y Francia debido a que
eran unos de los únicos países que contaban con todos los datos en las tablas de Maddison
requeridos en dicha pregunta.

2.- Analice el crecimiento de población por países (1800-2019) (incluya el gráfico). ¿Cuáles
son las diferencias más significativas entre ambos? ¿Cómo las explicaría?

Al tratarse de países con una historia más reciente, adentrándonos más, países con una
importancia de estudio histórico muy reciente, es muy difícil conseguir datos del crecimiento
de su población a principios del siglo XIX.

En el caso de Australia, en esa época aún era disputa de colonización, donde varios países
entre ellos Inglaterra y Francia usaban para reubicar a sus presos. Los primeros datos de
crecimiento de la población en Australia que nos ofrece el Banco Mundial comienzan en 1961.

En el caso de Burundi los datos también parten de 1961, ya que este país africano fue una
colonia alemana y belga hasta su independencia en 1962.
A primera vista podemos ver que en el caso de Australia este crecimiento de la población
presenta más oscilaciones que en el caso de Burundi. Una de las grandes diferencias la
podemos ver explicada a través de las ideas de Madison, que reflejaba que no todas las
sociedades crecían a la vez, sino que esta desigualdad guardaba una estrecha relación con el
PIB.

Así, en el caso de Australia podemos ver que a mediados del siglo XX en Australia su renta per
cápita no se encontraba entre la de los países más desarrollados, por lo que mantenía una tasa
de Crecimiento superior a 2, como en el caso de Burundi. Podemos ver reflejado en Australia la
teoría del despegue económico, alrededor de 1970, donde el PIB comenzó a crecer más rápido
y así lo hizo la población, pero toda fase alcista tiene un fin si esta es muy rápida el fin también
suele llegar rápido, a finales del siglo XX Australia comenzó a ser un país desarrollado y
competitivo con el resto de grandes naciones, por lo que después de que la mortalidad
hubiese descendido en su fase alcista, también lo comenzó a hacer la natalidad, ya que cada
vez más mujeres se introducían en el mundo laboral, y así la tasa de crecimiento se ha
mantenido estable a un nivel medio en los países desarrollados que se encuentra entre el 1% y
el 1,5%.

En cambio, la renta per cápita de Burundi es muy baja, se trata de uno de los países más
pobres del mundo, como vas a ver es tan pobre, que la diferencia de riqueza entre unos y
otros no se ve casi reflejada en el índice de Gini, ya que apenas reúnen riqueza ni la población
con más renta. En este caso durante el siglo XX, la tasa de crecimiento de la población rondaba
en el 2%, lo cual no era muy alta para ser un país subdesarrollado, pero esto se refleja en el
hecho de que siempre esta tasa tiende a crecer, pero podemos observar dos grandes crisis a
finales del siglo XX y principios del siglo XXI, seguramente provocadas por crisis sanitarias o
alimenticias, pero lo que destaca es que a partir del siglo XXI la tasa de crecimiento de Burundi
está aumentando mucho, rozando el 3,5%, dando lugar a una congestión de la población en
zonas determinadas que suelen ser las zonas pobres, y esto se debe mayoritariamente a que la
incidencia sobre la mortalidad en los países más pobres ha aumentado en los últimos años,
realizando cuidados para conseguir agua potable y además grandes campañas de vacunación,
pero incidir en la natalidad es más complicado, ya que interfieren elementos culturales los
cuales no se pueden cambiar directa ni rápidamente.
En definitiva, la tasa de Crecimiento de la población de Australia muestra los cambios de
población de un país desarrollado, donde se mantiene una media fija, mientras que en
Burundi, un país subdesarrollado, se muestra una tasas de crecimiento marcada por una
población con tasas de natalidad muy altas, y graves crisis momentáneas de alta mortalidad,
por razones de pobreza y guerras.

3.- Analice el grado de desigualdad en la distribución de la renta de ambos países (incluya el


gráfico).

La distribución de la renta es la forma en que se reparten los ingresos y rentas generados por
los distintos factores de la producción de una economía. Para este ejercicio, es conveniente
usar el Coeficiente de Gini ya que se utiliza para medir la desigualdad en los ingresos dentro de
un país. Dicho coeficiente es un número entre 0 y 1, en donde 0 se corresponde con la perfecta
igualdad (todos tienen los mismos ingresos) y donde el valor 1 se corresponde con la perfecta
desigualdad (una persona tiene todos los ingresos y los demás ninguno). El índice de Gini es el
coeficiente de Gini expresado en referencia a 100 como máximo, en vez de 1, y es igual al
coeficiente de Gini multiplicado por 100.

En este gráfico podemos ver que la renta en Australia está bien distribuida pues todos los
valores se acercan más al 0 que al 100, alcanzando su punto máximo en la crisis financiera
mundial de 2008 con 35,4. Aunque es posible mejorar la situación, vemos que en este país no
hay una desigualdad tan elevada como la puede haber en otros. Según los últimos datos de la
OCDE (2016) el índice de Gini para Australia es 33, mejorando ligeramente respecto a 2014,
con un 34,4.

Sin embargo, en 2018 se advertía sobre lo mal distribuida que estaba la riqueza en este país.
Seguía siendo un problema sin resolver pues, según un informe del consejo de Servicios
Sociales de Australia, el uno por ciento de los trabajadores se llevan a su casa en una quincena
lo que otro cinco por ciento de la población logra ganar en un año. A pesar de esta disparidad
en los ingresos, el informe “Desigualdad en Australia 2018,” que contiene un nuevo análisis de
datos de la Oficina Australiana de Estadísticas, dice que la desigualdad de ingresos se ha
estancado desde que aumentó entre 2000 y 2008, cuando alcanzó su punto máximo.

En Australia existen numerosos programas gubernamentales para el apoyo a los más


necesitados: pensionistas, discapacitados, cuidadores, desempleados, estudiantes y familias
con hijos. Existen, además, otros programas que favorecen las condiciones de vida de los
veteranos de guerra y las viudas. En los últimos años, los sueldos fueron la principal fuente de
ingresos de los hogares de nivel medio-alto, mientras que las pensiones y subvenciones lo
fueron para los hogares con menos recursos.
Con respecto a Burundi, uno de los países más pobres del mundo, observamos que los valores
del índice de Gini se acercan más al 0 que al 100, alcanzando su valor más alto durante la
guerra civil de Burundi en 1998 con un 42,3. Aunque los valores no pasen de 50, sabemos que
en este país hay bastante desigualdad en la distribución de la renta, la cual es una de las causas
por las que está hundido en la pobreza y en el subdesarrollo.

Observando y comparando ambos países, podemos concluir que a pesar de que Australia es un
país muy rico y de que Burundi es un país muy pobre, no es tan grande la diferencia que hay
entre ellos con respecto a la desigualdad en la distribución de la renta pues se alcanzan valores
muy próximos.

4.- Con los países elegidos (si sus países no aparecen en las tablas de Maddison, utilice los de
la zona geográfica en que están englobados sus países) y a partir de los datos de Maddison
(el archivo que necesita es: “Statistics on World Population, GDP and Per Capita GDP, 1-2008
AD (Horizontal file, copyright Angus Maddison, university of Groningen):

a. Elabore una tabla con los datos de población y PIB per cápita de los países
que ha elegido entre el año 1000 y el 2001
b. Calcule la tasa de crecimiento acumulativa anual de la población y del PIB en
términos per cápita entre 1000-1500; 1500-1820; 1820-1870; 1913-1950;
1950-1973; 1973-2001.

PERÍODO / PAÍS AUSTRALIA FRANCIA


POBLACIÓN PIB PER CÁPITA POBLACIÓN PIB PER CÁPITA
1000-1500 0.02% 0% 0.17% 0.11%
1500-1820 -0.09% 0.09% 0.23% 0.14%
1820-1870 3.4% 3.76% 0.42% 1.01%
1913-1950 1.47% 0.99% 0.07% 1.08%
1950-1973 2.12% 2.43% 0.99% 4.02%
1973-2001 1.32% 1.98% 0.51% 1.72%

c. ¿Observa alguna relación entre el crecimiento de la población y las


variaciones de PIB per cápita en cada uno de sus dos países/zonas?
Por lo general, la tabla sugiere una relación directa entre el nivel de crecimiento de la
población y la evolución del PIB per cápita.

Esta dependencia se puede apreciar especialmente en el caso de Australia. La tabla anterior


muestra que, hasta el siglo XIX, el país no sufrió grandes cambios poblacionales ni económicos.
A diferencia de Europa, que sufrió grandes revoluciones agrícolas, permanecían estancados en
una economía medieval que les condicionaba a la hora de aumentar la población. La llegada
del Imperio británico a Australia trajo consigo un gran aumento de la población, además del
mayor crecimiento económico experimentado por el país hasta la fecha. Siguiendo esta línea,
se puede observar que a raíz del proceso de independencia de Australia entre 1901 y 1931, el
PIB per cápita y su población caen, porque como nos muestra la historia, para muchos países,
la independencia de sus colonias supuso una pérdida de bienestar y de calidad de vida.
Asimismo, después de la Segunda Guerra Mundial, la economía australiana no se degradó, a
diferencia de la europea que había sido devastada. Además, introdujeron grandes planes para
atraer la inmigración de europeos bajo el lema de “poblarse o perecer”. Por último, en un
periodo de estabilidad económica, sigue aumentando la población y el PIB, aunque en menor
medida debido a la crisis del petróleo.

En la tabla se observa que el crecimiento de la población de Francia no es muy significativo a


lo largo de todos los siglos. Por lo general, las tasas de crecimiento de población son bajas, y la
población crece a un ritmo constante durante toda la historia siendo el periodo de mayor
estancamiento los años de las Guerras Mundiales y el mayor crecimiento los años de
posguerra después de la Segunda Guerra Mundial. En la primera fila se observa crecimiento de
población estrechamente relacionado con un leve crecimiento del PIB por las revoluciones
agrícolas que estaban teniendo lugar en Europa después de la Edad Media y que permitieron
conseguir excedentes para alimentar a una mayor población. Durante los siglos posteriores se
mantiene tanto crecimiento de la población como del PIB sin cambios significativos. A partir
del siglo XIX, los avances tecnológicos de la Revolución Industrial y la liberalización económica
permitieron un crecimiento económico y poblacional en Francia. No obstante, el mayor
periodo de crecimiento económico se da en la segunda mitad del siglo XX (los Treinta
Gloriosos), interviniendo factores como la actualización tecnológica respecto a Estados Unidos
que supuso un aumento de la productividad, grandes niveles de empleo, demanda e inversión.
Todo esto generó un ambiente de bienestar económico que favoreció la natalidad (el conocido
baby boom). Finalmente, los franceses siguieron con un alto nivel de vida, aunque más bajo
que el periodo anterior debido a la globalización, la integración europea, los periodos de crisis
mundiales, etc.

d. Realice un breve comentario comparando los resultados de la evolución del


PIB per cápita en los dos países/zonas.

De 1000 a 1820, se observa un crecimiento mayor en Francia que en Australia, debido a los
avances tecnológicos de Europa que desembocaron en una revolución agrícola, comercial y
financiera al final de la Edad Media. Estos avances situaron a Europa como el “líder”
económico del momento con un crecimiento del PIB muy superior al de otras zonas del mundo
como Australia, que permanecía estancado.

Sin embargo, los avances más significativos se dan a partir de 1820 a raíz del despegue de
Europa durante la revolución industrial, abarcando todo tipo de áreas (transportes, agricultura,
industria, comercio, energías, etc). De igual manera, todos estos avances permitieron las
expediciones y la conquista de colonias durante la época imperialista, lo que favoreció el
despegue de la economía de Australia tras la llegada del Imperio británico. Así, podemos
adivinar que el colonialismo trajo grandes beneficios tanto para las polis, como para las
colonias.

El periodo de guerras mundiales y el proceso de independencia australiana tuvieron un efecto


perjudicial en ambos países, pero después de la Segunda Guerra Mundial, surge el Estado de
Bienestar en Francia, con planes de modernización que abarcaban energía, acero, transportes,
agricultura, vivienda, investigación científica, industria, etc y que se tradujeron en el mayor
periodo de crecimiento económico del país. Asimismo, las trágicas consecuencias de la guerra
fueron más leves en Australia, lo que le permitió mantener su nivel de crecimiento económico.

Finalmente, desde 1973 a 2001 se produjo un periodo de crisis, inflación e inestabilidad


económica que causaron un descenso en el ritmo de crecimiento económico a nivel mundial,
incluidos por tanto los dos países analizados en este trabajo.
5.- Transición demográfica: Elija dos países de fuerte contraste (si pueden ser los anteriores,
mejor pero es difícil por la escasez de datos) y analice la transición demográfica de ambos y
exponga en qué fase se encuentra cada uno. Utilice los datos de esta web (buscar los datos
de “The Demographic Transition: Decline of the death rate followed by a decline of the birth
rate”):

a. Elabore el gráfico de la Transición Demográfica para cada uno de sus dos


países.
b. ¿Qué fases se aprecian y cuándo comienza cada una de ellas? ¿Ha culminado
la Transición Demográfica en ambos? Explique las diferencias más
significativas entre ambos

Austria:

En el gráfico de la demografía de Austria, podemos observar claramente 4 fases, e incluso una


quinta fase, bien delimitadas y claras.

Así pues, el régimen demográfico antiguo de Austria se prolonga hasta 1873.

Esta fase viene caracterizada por altas tasas de natalidad, que alcanzan su máximo en 1820,
con una tasa del 43% y unas altas tasas de mortalidad, cuyo pico máximo se alcanza en 1847.
Esto se debe en principio a la guerra de los tres años, conflicto entre germanos y daneses, en el
cual Austria participó con voluntarios. Hasta el año 1873, vemos como se siguen alternando
etapas de alta mortalidad que sobrepasan a las tasas de natalidad (1831-1847-1866-1873). A
partir de este último año, observamos como Austria comienza con una transición demográfica,
manteniendo una alta tasa de natalidad (con una leve disminución), y una reducción drástica
de la tasa de mortalidad favoreciendo así el crecimiento demográfico.

La transición demográfica austriaca se ve interrumpida entre la segunda década del siglo XX y


mitad de este, debido al comienzo de la Primera Guerra Mundial, periodo en el cual, la tasa de
natalidad llega a mínimos históricos, y la tasa de mortalidad duplica la de natalidad, así como
las crisis económicas que se suceden en este intervalo de tiempo. Finalizado este periodo de
crisis, llegamos a la Segunda Guerra Mundial, donde vemos que la natalidad retoma su curso
natural antes de la Primera Guerra Mundial, con un pequeño repunte de la tasa de mortalidad,
pero nada comparado con las tasas anteriormente mencionadas. En 1973 entramos en el final
de la transición demográfica con la equiparación de tasas de natalidad y mortalidad, ambos
con niveles bajos, y por lo tanto, un régimen demográfico moderno.

Egipto:

A diferencia de los datos que tenemos de Austria, el gráfico de la evolución de la demografía


egipcia comienza en el año 1917, por lo que se trata de unos datos relativamente recientes.

Así pues, comenzamos con un repunte de la tasa de mortalidad en el periodo de la Primera


Guerra mundial, aunque ciertamente, la natalidad no sufre una disminución tan notable.
Desde 1919, vemos que la tasa de mortalidad sigue disminuyendo sin cesar, con breves
repuntes compensados a su vez por aumentos similares y contemporáneos de la tasa de
natalidad. A partir de 1960, la tasa de crecimiento anual se incrementa, dado que, como se
puede ver en el gráfico, la tasa de mortalidad continúa bajando, mientras que la tasa de
natalidad realmente se mantiene constante o disminuye, especialmente entre 1971-1973 con
la guerra con Israel. Tras ese periodo, la tasa de natalidad se vuelve a recuperar, hasta llegar al
año 1986, donde disminuirá de forma significativa. La tasa de mortalidad no para de
descender. Con todos estos datos, podemos decir que Egipto todavía no ha culminado su
transición demográfica con la que lleva desde 1917, provocando que la población de siga
creciendo.
La principal diferencia que se puede señalar entre ambos países es que Austria no solo ha
culminado su transición demográfica, sino que se ve claramente el paso por los diferentes
regímenes demográficos anteriormente mencionados, y además, por los últimos datos,
podemos intuir que puede incluso entrar en un régimen demográfico posmoderno.

De Egipto sin embargo, solo podemos señalar que ha pasado de un régimen demográfico
antiguo a sumergirse en una transición demográfica que parece interminable.

Podemos achacar este continuo crecimiento de la población a unas mejoras higiénicas y


sanitarias de las que actualmente goza Egipto. No obstante, los valores y cultura están
profundamente arraigados en esta civilización milenaria, donde, los hijos siguen siendo una
seguridad para las familias, y la poligamia no está abolida.

De lo contrario, Austria es un país que forma parte de la órbita occidental, en la que, la mujer
ha pasado a formar parte del mundo laboral y de influencia, y en la que los hijos no son un
bien de producción, asumiendo unos valores post-modernos, en los que las prioridades varían
de forma significativa, colocándose lejos de la mera subsistencia.

A todas estas diferencias culturales de Austria con respecto a Egipto se suman al del desarrollo
histórico-político de ambos países, que les han forzado a tomar derivas distintas, cuyas
consecuencias han acabado incidiendo en la población de manera diferente, tanto en el nivel
educativo, como económico-social, tecnológico, entre otros.

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