Está en la página 1de 28

RIT N°: O-1685-2023 (ACUMULADA O-1686-2023 y O-1687-2023)

RUC N°: 23-4-0466522-7


MATERIA: DESPIDO INJUSTIFICADO Y COBRO DE PRESTACIONES
DEMANDANTE: ARTURO ESPINA GODOY, FRANCISCA VALENZUELA ARMIJO,
DANIELA MARTINEZ VILLALON
DEMANDADO: FISCO DE CHILE
DEMANDADO: SEREMI DE SALUD REGIÓN METROPOLITANA –
SUBSECRETARÍA
***********************************************************************
Santiago, veinticuatro de junio de dos mil veintitrés.
VISTOS, OIDOS LOS INTERVINIENTES Y CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que comparecieron al proceso ARTURO ESPINA GODOY, domiciliado en
Puerto Natales Nº 6511, comuna de La Granja, FRANCISCA VALENZUELA ARMIJO,
domiciliada en Avenida Independencia #1951, comuna de Independencia y DANIELA
MARTINEZ VILLALON, domiciliado en Alto Jahuel 295, comuna de Maipú, quienes
interponen demanda por despido injustificado y cobro de prestaciones en contra del
representada por el FISCO DE CHILE, representada legalmente por Consejo De
Defensa Del Estado, a través de su procuradora fiscal doña Ruth Israel López, , con
domicilio en calle Agustinas N°1225, PISO 2, comuna y ciudad de Santiago y en contra
de SEREMI DE SALUD REGIÓN METROPOLITANA – SUBSECRETARÍA DE SALUD
PÚBLICA, representada legalmente por Benjamín Gonzalo Soto Brandt o quien la
represente de acuerdo al artículo 4 del Código del Trabajo, ambos domiciliados en calle
Padre Miguel De Olivares 1229, PISO 2, comuna de Santiago, a fin de que se declare
que su despido es injustificado y se condene a la demandada al pago de la
indemnización sustitutiva del aviso previo, indemnización por tiempo servido,
indemnización por lucro cesante y feriado legal y proporcional, todo con reajuste,
intereses y costas.
Fundando lo anterior expresan que con fecha 20 de julio de 2020, 9 de abril de 2020 y
25 de agosto de 2020, ingresaron a prestar servicios personales bajo vínculo de
subordinación y dependencia para la demandada, habiendo acuerdo de voluntades con
esa fecha respecto del contrato de trabajo y sus condiciones.
Señalan que fueron contratados para desempeñar funciones en aduanas sanitarias.
Agregando respecto de los últimos demandantes que sus actividades eran la recepción
de las Declaraciones Juradas que todo viajero internacional debe completar en vuelo.
Evaluación de riesgo mediante Declaración Jurada obligatoria al 100% viajeros
internacionales. Educación sanitaria sobre las medidas de prevención recomendadas
para nuevo coronavirus y otras enfermedades de transmisión respiratoria. Control de
temperatura del 100% de viajeros que arriban a Chile. Participar en actividades de
difusión respecto de los temas sobre nuevo coronavirus. Participar en actividades de
investigación epidemiológica que realice el equipo de epidemiología en el recinto del
Aeropuerto AMB. Desempeñar otras funciones encomendadas por la jefatura, dentro
del ámbito de su competencia, en los distintos puntos del aeropuerto definidos por
presencia de la Autoridad Sanitaria
Dicen que la jornada de trabajo era de turnos rotativos.
Sostiene que la remuneración imponible por un periodo trabajado durante 30 días, es
la suma de $896.000 el primero y $1.510.340 los restantes. Agrega que esta suma se
debe tener presente para los efectos del cálculo de las indemnizaciones demandadas
en virtud de los artículos 172 y 173 del Código del Trabajo y respecto de las demás
prestaciones demandadas.
Exponen que de acuerdo a lo dispuesto en el contrato de trabajo y sus anexos, el mismo
se encontraría vigente mientras dure la Alerta Sanitaria.
Indican que el 31 de diciembre de 2022, 3 días después de extenderse la alerta sanitaria
(lo que extendía la vigencia de su contrato de trabajo), dejo se prestar servicios en
definitiva para el ex empleador en virtud de despido en el que ponen término al contrato
de trabajo por aplicación de lo dispuesto en el artículo 159 N°5 del Código del Trabajo,
esto es “Conclusión del trabajo o servicio que dio origen al contrato de trabajo”.
Manifiestan que esté termino de los servicios sería a partir del 24 de diciembre del año
2022, según una carta de aviso que nunca recibieron, a pesar de que en los hechos y
conforme se acreditará, continuó prestando servicios por el mes completo.
Refieren que lo objetivo en este contexto es que las partes antedataron el término de la
relación laboral y la vincularon con el término de la Alerta Sanitaria, cuestión que el
demandado incumplió por cuanto la misma fue prorrogada hasta el 31 de marzo del año
2023.
En efecto alegan, el Decreto 81 del Ministerio de Salud de fecha 28 de diciembre de
2022 extendió el estado de Alerta Sanitaria por Covid-19 al menos hasta el 31 de marzo
de 2023. Añaden que existe un factor nuevo de preocupación respecto a la pandemia
del Covid- 19 y se debe a la incierta situación sanitaria asociada al Virus en China.
Agregan que la nueva variante BF.7, altamente contagiosa, ya está en Chile por lo que
no sería extraño que, llegado el 31 de marzo del año 2023, vigencia actual de la alerta
sanitaria, esta misma vuelva a ser renovada.
Hacen presente que la supuesta carta de despido señala lo siguiente:
“Los hechos en que se funda la citada causal corresponden a llevar a cabo lo
mandatado mediante Resolución Exenta N°1155 de fecha 20 de diciembre de 2022, de
esta Secretaría Regional Ministerial de Salud de la Región Metropolitana, la cual
dispone “el cierre de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias del Aeropuerto
Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras de pasos fronterizos y cordones sanitarios”, lo
anterior fundado además, en la adaptación de las estrategias asociadas al control de la
pandemia por SARS-Cov-2 para el escenario de apertura, instruido por el Ministerio de
Salud mediante Ordinario A15/N°4620 y Ordinario B51/N°5934 ambos del año 2022, y
de las últimas modificaciones de la Resolución Exenta N°495/2022 que, aprueba el plan
fronteras protegidas, mediante las Resoluciones Exentas N°s 1209/2022 y 1401/2022
del Ministerio de Salud, sumado al escenario epidemiológico actual de nuestro país,
con altas tasas de vacunación, disminución importante en el número de fallecidos y de
la ocupación de camas críticas, lo que hace posible adecuar las medidas de prevención,
disponiendo de un plan de desescalada fundado en la racionalización y reducción de
personal contratado bajo las disposiciones del Código del Trabajo, en lo que respecta
a profesionales, administrativos y técnicos que fueron incorporados para llevar a cabo
las diversas estrategias y para reforzar el funcionamiento de los diferentes
Departamentos y/o Unidades que componen la estructura de este Servicio”.
Está comunicación establecen, más que hacer referencia a la obra o servicio contratado
intenta realizar una justificación del despido al más puro estilo de la causal del artículo
161 inciso 1° del Código del Trabajo -llegando incluso a utilizar las expresiones
“racionalización” y “reducción de personal”, lo que es absolutamente incongruente
respecto a la causal invocada.
Mencionan que lo relevante para este caso es que la demandada no vincula la causal
de despido con el pacto contractual que le permita poner término al contrato de trabajo
por aplicación de lo dispuesto en el artículo 159 N°5.
Precisan que recordemos que las partes establecieron que la vigencia del contrato de
trabajo estaría vinculada con la vigencia de la alerta sanitaria. Agregan que en ninguna
parte de la carta de despido se menciona la alerta sanitaria ni se hace referencia a la
cláusula contractual de vigencia del contrato de trabajo, lo que ya vuelve este despido
en injustificado. Añaden que esta declaración de despido injustificado tiene el efecto de
atribuir a la demandada el incumplimiento del contrato de trabajo al invocar de forma
abusiva la causal de despido antes señalada.
Narran que así las cosas, tampoco se puso a disposición de mi persona un finiquito
para efectos de ser firmado y pagado.
Advierten que el Artículo 159 Nº5 del Código del Trabajo establece: “El contrato de
trabajo terminará en los siguientes casos:
.- Conclusión del trabajo o servicio que dio origen al contrato.
Razonan que de conformidad a lo establecido en el artículo 10 bis del Código del
Trabajo, introducido por la Ley 21.122, publicada en el Diario Oficial el 28 de noviembre
de 2018, contrato por obra o faena es aquella convención por la que el trabajador se
obliga con el respectivo empleador a ejecutar una obra material o intelectual específica
y determinada, en su inicio y en su término, cuya vigencia se encuentra circunscrita o
limitada a la duración de aquella. Agregan que en este tipo de contratos se conoce la
fecha en que inicia la relación laboral más no existe fecha cierta en la cual terminará,
pues no se tiene certeza del momento en que terminará la obra o faena que le dio inicio.
Advierten que esta duración tiene una vinculación con la naturaleza de los servicios, lo
cual debe relacionarse con el artículo 10 N°3 del Código del Trabajo, en orden a que
esta norma impone al empleador la obligación de consignar en el contrato de trabajo la
naturaleza de los servicios, lo que debe implicar que se consigne de forma precisa y
clara las funciones para las cuales fue contratado el trabajador. En todo contrato de
trabajo agregan, de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 10 del código del ramo se
debe indicar el plazo del contrato, el que puede ser de duración indefinida, de plazo fijo
o por obra o faena.
Señalan que las actividades descritas en su contrato, se desempeñaban dentro del
marco establecido por el Decreto Nº4, del Ministerio de Salud, que decreta “Alerta
Sanitaria” y otorga facultades extraordinarias.
Explican que entienden que no puede desconocerse la naturaleza de contrato por obra
o faena de la relación que unió a las partes por cuanto la carta de despido se funda en
la causal que pone término a este tipo de vinculación de conformidad con lo dispuesto
en el artículo 159 N°5 del Código del Trabajo, causal que se invocó para poner término
a su contrato. Agregan que en caso que la demandada quisiera argumentar que el
término de la faena no está circunscrito a la alerta sanitaria, desde ya solicitan, aplicar
la presunción del artículo 9 inciso 4° del Código del Trabajo puesto que la falta de
escrituración detallada y específica del contrato respecto a su vigencia importa su falta
de escrituración, tomándose por verídicas las afirmaciones que realiza el trabajador y
que formulamos en este acto en orden a establecer que la duración del contrato de
trabajo está circunscrito a la alerta sanitaria, siendo de carga de la contraria, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 1698 del Código Civil, acreditar lo contrario.
Dicen que por su parte el Art. 162 del código del trabajo señala: “Si el contrato de trabajo
termina de acuerdo con los números 4, 5 ó 6 del artículo 159, o si el empleador le
pusiere término por aplicación de una o más de las causales señaladas en el artículo
160, deberá comunicarlo por escrito al trabajador, personalmente o por carta certificada
enviada al domicilio señalado en el contrato, expresando la o las causales invocadas y
los hechos en que se funda.
Más allá del fondo sostienen, respecto a si la obra o faena concluyó o no, su despido
es injustificado por forma puesto que la carta de despido no contiene hechos que pueda
acreditar el demandado en juicio. En efecto añaden, de un estudio profundo de la carta
de despido no encontramos ninguna referencia a la cláusula contractual que indica la
vigencia del contrato -vigencia de la alerta sanitaria- y el hito producto del cual se dan
por finalizadas dichas faenas.
Expresan que en efecto, de la atenta lectura de la carta de despido, se establecen
hechos vagos e imprecisos, lo cual, redunda, por un lado, en el desconocimiento del
verdadero motivo para el despido, como, particularmente los hechos fundantes del
mismo, cuestión que guarda relevancia, al tenor de los hechos que deberán ser
acreditados y probados en juicio.
Indican que la vaguedad de la comunicación le pone en una situación desventajosa, por
cuanto no conozco los hechos en que se fundó el despido. Agrega que la carta de
despido sólo hace referencia a actos administrativos que no vincula de ninguna forma
con la vigencia de la alerta sanitaria, lo anterior es relevante por cuanto la carta no
contiene hechos, y por derivación, no se conocen los hechos de su despido, lo que por
supuesto le priva de procurarse la prueba necesaria a fin de contrarrestar los
antecedentes fácticos y desconocidos de su despido.
Manifiestan que lo anterior transforma su despido en injustificado por forma por cuanto
la carta de despido no podrá acreditar los hechos que dan cuenta del término de la
faena si ni siquiera explicó cuál sería la faena y como habría terminado.
Refieren que podrá notar que nuestro ordenamiento jurídico es claro en cuanto las
formalidades y causales para el término del contrato de trabajo, normas las cuales
fueron obviadas por su ex empleador, contraviniendo dicha normativa jurídica y los
principios establecidos en la regulación. Agrega que el despido efectuado por su ex
empleador no se encuentra ajustado a derecho.
En otro tema alegan, cabe agregar a vuestra señoría, que conforme al artículo 454 Nº
1, inciso segundo, del Código del Trabajo que señala: “No obstante lo anterior, en los
juicios sobre despido corresponderá en primer lugar al demandado la rendición de la
prueba, debiendo acreditar la veracidad de los hechos imputados en las
comunicaciones a que se refieren los incisos primero y cuarto del artículo 162, sin que
pueda alegar en el juicio hechos distintos como justificativos del despido”, ergo, será
carga probatoria de la demandada comprobar que su despido tuvo efectivamente como
fundamento la causal legal invocada, y por otra parte, se tendrá que tener en
consideración que los hechos descritos en la comunicación de despido son
formalidades ad probationem, por lo que su ex empleadora no podrá establecer, añadir,
o bien, argumentar hechos distintos a los que no se señalaron en la comunicación
anteriormente individualizada.
Además hacen presente, conforme al Art. 1546 del Código Civil, que prescribe que en
los contratos se presume la buena fe, el principio pro operario, el Art. 1698 del Código
Civil, que señala que incumbe probar las obligaciones o su extinción al que alega
aquellas o éstas.
Establecen que de acuerdo con lo dispuesto en sus contratos de trabajo, la vigencia del
mismo estaba supeditada a la prolongación de la alerta sanitaria. Es decir, la obra o
faena para la fueron contratados era en efecto la alerta sanitaria.
Mencionan que su despido es injustificado puesto que la obra o faena para la cual fui
contratado no ha terminado, estando vigente a lo menos hasta el 31 de marzo del año
2023. Agregan que en este mismo orden de ideas el ex empleador no ha pagado la
indemnización contemplada en el artículo 163 inciso 3° del Código del Trabajo de
indemnización por término de contrato de trabajo por la causal del artículo 159 N°5 del
mismo cuerpo normativo, equivalente a 2,5 días de remuneración por cada mes
trabajado y fracción superior a 15 días.
Precisan que todos los hechos relatados en la carta de despido no dan cuenta de la
finalización de las obras para las cuales fue contratada. Es más añaden, a ratos la carta
de despido parece más bien una carta que fundamenta un despido por necesidades de
la empresa cuando sostiene que (…) “disponiendo de un plan de desescalada fundado
en la racionalización y reducción de personal contratado bajo las disposiciones del
Código del Trabajo” cuestión que ya muestra al Tribunal, que en este caso no concurrió
la causal de conclusión de la obra o servicio para la cual fue contratado, sino que el
despido más bien se refirió a una decisión por parte del demandado. Agrega que el
demandado no podrá alegar que la conclusión de la obra o faena para la cual fue
contratado concluyó, puesto que existe un decreto oficial dictado 4 días después de
materializados los despidos que extiende la alerta sanitaria hasta a lo menos el 31 de
marzo del año en curso.
Narran que en razón de lo expuesto, la aplicación de la causal de despido en este caso
es injustificada, no existe una congruencia entre la causal invocada para el despido y
los hechos en que este se fundó, sin perjuicio que la carta de despido no menciona en
su texto la alerta sanitaria ni hace referencia a alguna cláusula del contrato de trabajo
que contenga la vigencia del mismo. Agrega que lo anterior transforma su despido en
injustificado.
Advierten que respecto a las indemnizaciones del artículo 163 inciso 3° del Código del
Trabajo introducidas por la Ley 21.122 y su compatibilidad con la acción de despido
injustificado.
Razonan establece la norma:
“Si el contrato celebrado para una obra o faena determinada hubiere estado vigente por
un mes o más, el empleador podrá ponerle término en forma justificada en tanto pague
al trabajador en el momento de su terminación, una indemnización equivalente a dos y
medio días de remuneración por cada mes trabajador y fracción superior a 15 días, en
la forma y modalidad señalada en el artículo 23 transitorio de este Código. Esta
indemnización será calculada en conformidad a lo establecido en el artículo 172, y le
será aplicable lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 13 de la Ley N°19.728. Sólo
corresponderá el pago de la prestación antes señalada, si se pusiere término al contrato
por la causal contemplada en el número 5 del artículo 159. El ejercicio del derecho
establecido en este inciso por parte del trabajador es incompatible con las acciones
derivadas de la aplicación del inciso primero del artículo 168, sin perjuicio de las
acciones señaladas en el artículo 485 de este Código”.
Por lo demás señalan, y como se señaló anteriormente, esta indemnización no ha sido
pagada.
Explican que interpretada de forma sistemática esta norma, a la luz de la legislación
laboral vigente y del principio protector, lo cierto es que esta disposición resulta
plenamente aplicable en la medida que en forma copulativa se haya aplicado
correctamente la causal de conclusión de obra o faena invocada para el despido del
trabajador y se paguen las prestaciones que la norma indica, lo que no sucede.
Dicen que no puede dejarse al arbitrio del empleador aplicar una causal determinada
sin que ello guarde la debida correspondencia con los hechos o la realidad de las cosas
y que esto le permita al empleador acogerse a beneficios establecidos por la ley para
aquellas situaciones en que la causal de término por conclusión de la obra o faena haya
sido correctamente aplicada tanto desde un punto de vista formal como de fondo, esto
es, cuando efectivamente haya finalizado la obra para la cual fue contratado el
trabajador al momento de su desvinculación.
Sostiene que razonar de otra forma conllevaría a privar al trabajador de la acción por
despido injustificado, aun en aquellas situaciones en que habiéndose invocado por el
empleador la causal de término de la relación laboral consagrada en el artículo 159 N°5
del Código del Trabajo, la obra o faena para la cual fue contratado no haya terminado
al momento del despido, lo que deja al trabajador en una absoluta indefensión,
inestabilidad laboral y desprotección de sus derechos, cuestión que además atenta en
forma directa contra la tutela judicial efectiva y el debido proceso, por lo que una
interpretación irrestricta y aislada de la disposición antes citada debe ser desechada,
ya que resulta desprovista y carente de armonía con el espíritu general de la legislación
vigente.

Exponen que sabemos que la defensa del demandado intentará confundir al Tribunal,
con la naturaleza de las acciones que se interponen, sostenido erradamente y en
contradicción de todo el ordenamiento jurídico laboral que, conforme dispone el artículo
163 inciso 3°, si al trabajador se le paga la indemnización de 2,5 días por mes trabajado
no puede impugnar el despido, lo anterior es mezclar dos cosas con el sólo objeto de
confundir al Tribunal puesto que esta interpretación le quita competencia a los
Tribunales Laborales para declarar la justificación de un despido, entregándosela al ex
empleador, lo que evidentemente es contrario a derecho además de privar al trabajador
de la tutela judicial efectiva.
Indican que esclarecedor para esto es la discusión parlamentaria respecto de la historia
de la ley 21.122 efectuada en sala con fecha 6 de noviembre de 2018, Diario de Sesión
en Sesión N°94, Legislatura 366, discusión única:
Torrealba. La modificación propuesta permite el reconocimiento de dos derechos
básicos y esenciales para el desarrollo de cualquier labor digna, remunerada y
respetuosa de nuestra legislación laboral: primero, la indemnización por años de
servicio, y segundo, las vacaciones proporcionales”
“Torrealba. (…) A través de esta iniciativa, estamos desenmascarando una nefasta y
fraudulenta práctica asociada a disfrazar relaciones de trabajo indefinida por medio de
la suscripción de numerosos y continuos contratos por obra o faena, lo cual permite
evadir el pago de la indemnización por años de servicio y negar la existencia de
vacaciones proporcionales.”
Manifiestan que la indemnización del artículo 163 inciso 3° del Código del Trabajo se
paga siempre que se contrate a una persona por contrato por obra o faena, y no es
condicionante para la justificación del despido, declaración que se encuentra reservada
exclusivamente para los Tribunales de la República con competencia en lo laboral. En
este sentido agregan, consultada la historia de la ley encontramos una intervención
coincidente con esta interpretación, la cual señala lo siguiente:
“Iván Flores. También se incorporó el requisito del aviso previo en el caso de la
comunicación de la terminación del contrato celebrado para una obra o faena
determinada, cuando corresponda el pago de indemnización por el tiempo servido.

Asimismo, se agregó una indemnización para los trabajadores por obra o faena
equivalente a dos y medio días de remuneración por cada mes trabajado y fracción
superior a quince días, cuando el contrato termine por la finalización de la obra o faena
que le dio origen.
Refieren que pagada la indemnización del artículo 163 inciso 3° transforma el despido
en justificado por ese sólo hecho, y que por esto el trabajador no podría impugnar el
despido, cuando la realidad de las cosas señala lo contrario, importaría:
(1) quitarle la competencia a los tribunales de justicia con competencia en lo laboral
para conocer y declarar el despido como justificado o injustificado;
(2) instrumentalizar el despido a un precio determinado sin posibilidad de impugnar,
entregándole la “justificación” a la mera voluntad del ex empleador; (3) privar el debido
proceso en cuanto a la posibilidad de reclamar en sede judicial un conflicto jurídico entre
individuos.

En este caso alegan, el contrato por obra o faena estuvo vigente desde el 20 de julio
2020 hasta el 31 de diciembre de 2022, dando un total de 29 meses, equivalentes a
72,5 días de remuneración.
Hacen presente que conforme lo anterior solicito al Tribunal, se condene a la
demandada al pago de la indemnización especial contemplada en el citado artículo,
correspondiente a $2.165.333.-
Establecen que conforme dispone el artículo 163 inciso 4 dispone que “La
indemnización a que se refiere este artículo será compatible con la sustitutiva del aviso
previo que corresponda al trabajador, según lo establecido en el inciso segundo del
artículo 161 y en el inciso cuarto del artículo 162 de este Código”. En razón de lo anterior
solicito al Tribunal añaden, se condene a la demandada al pago de la indemnización
sustitutiva del aviso previo, que en este caso corresponde a $896.000.-
Mencionan que desde el 20 de julio de 2020 hasta el 20 de julio de 2022, por un total
de 30 días hábiles y 12 días inhábiles, dando un total de 42 días corridos, por un total
de $1.254.400.-
Refieren que desde el día 20 de julio de 2022 hasta el día 31 de diciembre de 2022, por
un total de 6,74 días corridos, por un total de $201.301.-
Alegan que la duración de este contrato de trabajo según el contrato de trabajo era
“hasta que se encuentre en implementación, la estrategia de alerta sanitaria”.
Hacen presente que más allá de la redacción que haya utilizado su ex empleador, la
vigencia del contrato de trabajo estaba circunscrita a la vigencia de la alerta sanitaria,
hecho objetivo e indiscutible.
Establecen que esta decisión unilateral del ex empleador constituye un incumplimiento
al contrato pactado entre las partes puesto que la “Alerta Sanitaria”, conforme se
explicó, se encuentra vigente a lo menos hasta el 31 de marzo de 2023.
Menciona que el artículo 1545 del Código Civil señala que todo contrato legalmente
celebrado es ley para los contratantes. En este sentido agregan, las partes pactaron
que la duración del contrato de trabajo sería mientras estuviera vigente la Alerta
Sanitaria, cuestión que el ex empleador no cumplió al poner término al contrato de
trabajo de forma anticipada a la faena mutuamente pactada. Añaden que en este
sentido corresponde compensar las remuneraciones y demás prestaciones
consignadas en el contrato de trabajo que dejé de percibir por el término anticipado.

Precisan que de acuerdo con el relato expuesto a lo largo de esta presentación el


contrato de trabajo que vinculaba a las partes era un contrato por obra o faena, y la
faena se encontraba vigente mientras dure “la Alerta Sanitaria”
Narran que como bien sabe su señoría los contratos de trabajo por obra o faena en que
se pone término al mismo de modo injustificado, el empleador debe compensar el lucro
cesante generado al trabajador por el incumplimiento que el primero realizó de los
términos contractuales pactados, con lo que quebrantó el consentimiento forjado por
las partes, y con ello mermó injustificadamente la legitima expectativa de ganancia que
el trabajador tenía, por un contracto que en estricto rigor tenía un plazo de duración que
debía ser respecto.
Advierten que nuestra Excelentísima Corte suprema, en causa Rol 1406-20202 en fallo
pronunciado con fecha 16 de septiembre de 2021 estableció:
“En consecuencia, y como al suscribir el contrato las partes convinieron recíprocamente
la prestación de un servicio personal bajo subordinación y dependencia, por un tiempo
específico que está dado por la conclusión de una determinada obra, y el pago de una
remuneración por dichos servicios, el empleador queda obligado a pagar al trabajador
las remuneraciones que habría percibido de no haber mediado dicho incumplimiento;
vale decir, el efecto dañoso que esta conducta generó es que el trabajador dejó de
percibir un ingreso al cual el empleador se había obligado, por lo que procede que se
le indemnice con la suma correspondiente a dicha pérdida patrimonial.”.

Razonan que en otro interesante fallo la Excelentísima Corte Suprema, en sentencia


recaída en Rol 3201-2019 dispone:
“Duodécimo: Que, para dichos efectos, se debe recordar que, como esta Corte viene
afirmando de un tiempo importante a esta parte, el lucro cesante corresponde a un
instituto que por su particular contenido, en cuanto se trata de un daño que se proyecta
hacia el futuro, no puede exigir el nivel de certeza que se pretende en el fallo
impugnado; en efecto, la noción de lucro cesante surge a propósito de la clasificación
del daño que hace el artículo 1556 del Código Civil, atendiendo a la forma en que el
incumplimiento contractual afecta el patrimonio del acreedor, a cuyo efecto distingue
entre el daño emergente y el lucro cesante. Mientras el primero consiste en una
disminución patrimonial, el segundo alude al hecho de haberse impedido un efecto
patrimonial favorable.”
Señalan que en el contrato y diversos anexos acorde con mi ex empleador que el
término de la faena sería al término de la “Alerta Sanitaria”, lo que se subsume a la
norma anterior y que el ex empleador incumplió al poner término anticipado al contrato
de forma unilateral.
Explican que en la especie el ex empleador no dio cumplimiento a la ley del contrato al
ponerle término unilateralmente y de forma anticipada al contrato de trabajo, sin
respetar la faena para la cual fueron contratados, resultando aplicable lo dispuesto en
el artículo 1556 del Código Civil, en cuya virtud “la indemnización de perjuicios
comprende el daño emergente y lucro cesante, ya provenga de no haberse cumplido la
obligación, o de haberse cumplido imperfectamente, o de haberse retardado el
cumplimiento”.

En la especie dicen, el ex empleador debe ser condenado al pago de la remuneración


del mes de enero, febrero y marzo de 2023 equivalente a la suma de $2.688.000.- por
concepto de lucro cesante, o el monto mayor o menor que el Tribunal, determine
conforme al mérito del proceso, toda vez que se puso término a la relación laboral de
manera anticipada considerando que el contrato era por obra o faena, vinculado a la
vigencia de la Alerta Sanitaria, cuya duración de la misma, es a lo menos, hasta el 31
de marzo del año 2023.
SEGUNDO: Que la parte demandada evacuando el traslado que le fuera conferido,
solicitó rechazo de la demanda de autos, con costas.
Argumentando lo anterior, señala que tratándose de un contrato de trabajo por
prestación de obra o servicio, terminado de conformidad al artículo 159 N° 5 del Código
del Trabajo, la única indemnización procedente es la contemplada en el artículo 163
inciso 3 del código en comento.
Explica que en efecto, señala la norma en comento, "Si el contrato celebrado para una
obra o faena determinada hubiere estado vigente por un mes o más, el empleador podrá
ponerle término en forma justificada en tanto pague al trabajador, en el momento de su
terminación, una indemnización equivalente a dos y medio días de remuneración por
cada mes trabajado y fracción superior a quince días, en la forma y modalidad señalada
en el artículo 23 transitorio de este Código. Esta indemnización será calculada en
conformidad a lo establecido en el artículo 172, y le será aplicable lo dispuesto en el
inciso segundo del artículo 13 de la ley N° 19.728. Sólo corresponderá el pago de la
prestación antes señalada, si se pusiere término al contrato por la causal contemplada
en el número 5 del artículo 159.
El ejercicio del derecho establecido en este inciso por parte del trabajador es
incompatible con las acciones derivadas de la aplicación del inciso primero del artículo
168, sin perjuicio de las acciones señaladas en el artículo 485 de este Código.".

De este modo dice, la indemnización por lucro cesante resulta absolutamente


improcedente.

Sostiene que:
Respecto de Arturo Espina:
Expone que las partes suscribieron Contrato de Trabajo por Alerta Sanitaria con fecha
01 de julio de 2020, sin perjuicio de que se dio inicio a la relación laboral el 20 de julio
de 2020. Agrega que su vigencia fue pactada Mientras se encuentre en implementación
la estrategia de aduana, durante la “Alerta Sanitaria”.

Indica que la labor que ejerció se enmarcó dentro de la estrategia de aduanas y barreras
sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras de pasos fronterizos
y cordones sanitarios y consistían principalmente, en la fiscalización de cumplimiento
de cuarentena de los viajeros que ingresan al país, de acuerdo a la asignación diaria
de carga laboral, cumplir con las rutas de fiscalización asignadas diarias, trasladarse
dentro del cuadrante o comuna asignado en sus rutas de fiscalización diarias. Agrega
que el trabajador se comprometió a usar su teléfono personal para las labores
encomendadas por su jefatura en relación a sus funciones de fiscalizar cuando sea
necesario, entre otras.

Manifiesta que se acordó una jornada laboral de turnos rotativos 12 horas diarias, en
horario diurno de 9:00 a 21:00 y nocturnos de 21:00 a 9:00 con 48 horas de descansos
continuas.
Refiere que se estableció una remuneración bruta de $ 896.000. pesos.b. Respecto de
María Valenzuela
Alega que las partes suscribieron Contrato de Trabajo por Alerta Sanitaria con fecha 23
de abril de 2020, sin perjuicio de que se dio inicio a la relación laboral el 09 de abril de
2020. Agrega que su vigencia fue pactada originalmente hasta el 30 de junio de 2020.

Posteriormente hace presente, la demandante y la Autoridad Sanitaria Regional


suscribieron el siguiente anexo de contrato, por medio de los cuales las partes
manifiestan su decisión de prorrogar el contrato celebrado mediante anexo de fecha 05
de julio de 2020, que extiende la relación laboral mientras se encuentre en
implementación (la estrategia de aduana Sanitaria) durante la Alerta Sanitaria.

Establece que la labor que ejerció según anexo de contrato de 06 de noviembre de


2020 se enmarcó dentro de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias del
Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras de pasos fronterizos y cordones
sanitarios y consistían principalmente, en la Recepción de las declaraciones juradas
que todo viajero internacional debe completar en vuelo, valuación de riesgo mediante
declaración jurada obligatoria al 100% de los viajeros internacionales, educación
sanitaria sobre las medidas de prevención recomendadas para nuevo coronavirus y
otras enfermedades de transmisión respiratoria, control de temperatura del 100% de los
viajeros que arriban a Chile, participar en actividades de difusión respecto de los temas
sobre nuevo Coronavirus, participar en actividades de investigación epidemiológica que
realice el equipo de epidemiología en el recinto del Aeropuerto AMB, desempeñar otras
funciones encomendadas por la jefatura, dentro del ámbito de su competencia, en los
distintos puntos del aeropuerto definidos con presencia de la Autoridad Sanitaria.
Menciona que se acordó una jornada laboral de turnos rotativos 12 horas diarias, en
horario diurno de 9:00 a 21:00 y nocturnos de 21:00 a 9:00 con 48 horas de descansos
continuas.

Precisa que se estableció una remuneración bruta de $ $1.510.340 pesos.


c. Respecto de Daniela Martínez Villalón Narra que las partes suscribieron Contrato de
Trabajo por Alerta Sanitaria con fecha 25 de agosto de 2020, sin perjuicio de que se dio
inicio a la relación laboral el 26 de agosto de 2020. Agrega que su vigencia fue pactada
mientras hasta que se mantenga la estrategia de aeropuerto, mientras dure la “Alerta
Sanitaria”.

Advierte que la labor que ejerció se enmarcó dentro de la estrategia de aduanas y


barreras sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras de pasos
fronterizos y cordones sanitarios y consistían principalmente, Recepción de las
declaraciones juradas que todo viajero internacional debe completar en vuelo, valuación
de riesgo mediante declaración jurada obligatoria al 100% de los viajeros
internacionales, educación sanitaria sobre las medidas de prevención recomendadas
para nuevo coronavirus y otras enfermedades de transmisión respiratoria, control de
temperatura del 100% de los viajeros que arriban a Chile, participar en actividades de
difusión respecto de los temas sobre nuevo Coronavirus, participar en actividades de
investigación epidemiológica que realice el equipo de epidemiología en el recinto del
Aeropuerto AMB, desempeñar otras funciones encomendadas por la jefatura, dentro
del ámbito de su competencia, en los distintos puntos del aeropuerto definidos con
presencia de la Autoridad Sanitaria.

Razona que se acordó por anexo de contrato de 17 de agosto de 2020 una jornada
laboral de turnos rotativos 12 horas diarias, en horario diurno de 9:00 a 21:00 y
nocturnos de 21:00 a 9:00 con 48 horas de descansos continuas.

Señala que se estableció una remuneración bruta de $ $1.510.340 pesos.

Explica que se puso término a la relación laboral entre los actores y la autoridad
sanitaria a través de Carta de Aviso de Término de Contrato de Trabajo, enviada por
medio de carta certificada al domicilio registrado en el convenio laboral, con fecha 23
de diciembre de 2022, entendiéndose por finalizado el vínculo laboral a partir del 24 de
diciembre del mismo año. Dicha desvinculación agrega, fue fundamentada en virtud de
la causal del artículo 159 N°5 del Código del Trabajo, esto es, conclusión del trabajo o
servicio que dio origen al contrato.

Dice que respecto a la causal de desvinculación invocada en el alejamiento de la


demandante, según consta en la Carta de Aviso de Término de Contrato de Trabajo, es
efectivo que se invocó aquella consagrada en el artículo 159 N°5 del Código del
Trabajo, esto es, conclusión del trabajo o servicio que dio origen al contrato. En la
misma epístola, se señala que el vínculo se tendrá por finalizado el 24 de diciembre de
2022.
Sostiene que los hechos en que se funda la citada causal corresponden a llevar a cabo
lo mandatado mediante Resolución Exenta N° 1155 de fecha 20 de diciembre de 2022,
de la Secretaria Regional Ministerial de Salud de la Región Metropolitana, la cual
dispone a partir del día 24 de diciembre del año 2022, “el cierre de la estrategia de
aduanas y barreras sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras
de pasos fronterizos y cordones sanitarios”. Lo anterior agrega, además se debe a la
reestructuración y cierre en algunos casos de las estrategias asociadas al control de la
pandemia por SARS-Cov-2 para el escenario de apertura, instruido por el Ministerio de
Salud mediante Ordinario A15/N°4620 y Ordinario B51/N°4934 ambos del año 2022, y
de las últimas modificaciones de la Resolución Exenta N°495/2022 que, aprueba el plan
fronteras protegidas, mediante las Resoluciones Exentas N°s 1209/2022 y 1401/2022
del Ministerio de Salud, sumado al escenario epidemiológico actual de nuestro país,
con altas tasas de vacunación, disminución importante en el número de fallecidos y de
ocupación de camas críticas, lo que hace posible el cierre de esta estrategia junto con
adecuar las medidas de prevención, lo que se plasma en un plan de desescalada
fundado en la racionalización y reducción de personal contratado bajo las disposiciones
del Código del Trabajo, en lo que respecta a profesionales, administrativos y técnicos
que fueron incorporados para llevar a cabo las diversas estrategias y para reforzar el
funcionamiento de los diferentes Departamentos y/o Unidades que componen la
estructura orgánica de este Servicio.
Expone que dicho lo anterior, es sumamente importante aclarar que los/as
demandantes fueron contratados por esta Autoridad Sanitaria para desempeñar una
función específica, siempre dentro de la estrategia sanitaria de Aeropuerto, denominada
formalmente “estrategia de Aduanas y Barreras Sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino
Benítez (AAMB), Barrera de Pasos Fronterizos y Cordones Sanitarios”. Así las cosas
añade, y en consideración a los antecedentes expuestos precedentemente, pero
principalmente con el fin de dar cumplimiento a lo instruido por Resolución Exenta N°
1155 de fecha 20 de diciembre de 2022 de la Secretaria Regional Ministerial de Salud,
con fecha 30 de diciembre del año 2022, mediante sendas Resoluciones Exentas (una
por cada trabajador desvinculado) esta Autoridad Sanitaria dictó los correspondientes
actos administrativos, debidamente fundados en virtud de los cuales se dispuso el
termino de los contratos de trabajo de las demandantes.

Indica que en lo que respecta a la cláusula de vigencia de los contratos en comento, la


cual estipula que los respectivos vínculos laborales “tendrá vigencia, solo mientras se
encuentre en implementación la estrategia de alerta sanitaria”, es sumamente
importante aclarar que, una Alerta Sanitaria en ningún caso es una estrategia sanitaria,
sino más bien, es una medida legal de carácter excepcional que se decreta por orden
del presidente de la República, por medio de un Decreto Supremo emitido por parte del
Ministro(a) de Salud, en virtud de cual se otorgan facultades extraordinarias a las
autoridades sanitarias regionales, para hacer frente a una emergencia de salud pública.
Precisamente añade, en el caso de la pandemia por COVID-19, se decretó Alerta
Sanitaria por medio del DS N° 4 /2020, del Ministerio de Salud, entregando atribuciones
a dichas autoridades para efecto de llevar adelante una serie de estrategias, campañas
y programas sanitarios con el fin de mitigar la propagación de dicha enfermedad.

Manifiesta que para el asunto materia del presente oficio, conviene destacar que,
acorde con el criterio contenido entre otros, en dictamen N°45.001, de 2006, de la
Contraloría General de la República, se determinó que la causal de término de contrato
de trabajo, establecida en el artículo 159 N°5 del Código del Trabajo, es procedente
para aquellos convenios cuya vigencia se encuentra circunscrita o limitada a la
realización de un trabajo o servicio específico y determinado que el trabajador se obligó
a ejecutar, tal como se dio en caso expuesto respecto de la relación laboral de los/as
demandantes.

Ahora bien refiere, respecto al hecho que reclaman las demandantes en relación a que
las funciones en el Aeropuerto Arturo Merino Benítez seguirían vigentes y con algunos
funcionarios, es dable señalar que, tal como se mencionó precedentemente, mediante
Resolución Exenta N° 1155 de fecha 20 de diciembre de 2022, de la Secretaria
Regional Ministerial de Salud de la Región Metropolitana, se dispuso a partir del día 24
de diciembre del año 2022, ”el cierre de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias
del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), barreras de pasos fronterizos y cordones
sanitarios”.

Alega que asimismo, en los numerales 15° y 16° de dicha resolución, se explica
claramente que actualmente en el Aeropuerto solo se mantiene la medida de testeo
aleatorio de un 5% de los viajeros residentes, dispuesto por Ordinario B51 N°4934/2022
de la Subsecretaria de Salud Pública, donde el proceso de selección se encuentra
totalmente automatizado por medio de tótems computacionales que derivan a los
pasajeros al testeo, el cual finalmente es realizado por una empresa externa contratada
para dichos fines específicos desde diciembre del año 2020, suprimiendo y eliminando
las actividades de fiscalización y vigilancia epidemiológica de ingreso de personas al
país asociadas directamente al COVID- 19 y a las funciones que según sus respectivos
contratos de trabajo cumplían los/as demandantes, no haciéndose necesario en la
actualidad la continuidad de dicha estrategia de “refuerzo” implementada en razón de
la pandemia por COVID-19 ni de los/as demandantes, toda vez que, esta función
volverá a ser desarrollada tal como lo instruye la Resolución Exenta N°646/2008 del
Ministerio de Salud, por la Oficina Sanitaria del Aeropuerto Internacional Arturo Merino
Benítez, dependiente de la Unidad de Epidemiologia del Departamento de Salud
Pública y Planificación Sanitaria de la Secretaría Regional Ministerial de Salud de la
Región Metropolitana, la cual tiene como objetivo principal dar cumplimiento al RSI
(Reglamento Sanitario Internacional), previniendo la propagación internacional de
enfermedades, proteger contra esa propagación, controlarlas y darle una respuesta de
salud pública proporcionada, coordinada y restringida a los riesgos para la salud pública
y evitando al mismo tiempo la interferencia innecesaria con el tráfico y comercio
internacional, no solo del COVID-19, sino que también de cualquier otra enfermedad de
propagación internacional, según lo establecido mediante el DS N°263/85 que, aprueba
el reglamento de sanidad marítima, aérea y de las fronteras.
Finalmente hace presente, es importante que el Tribunal tenga presente que tal como
se señaló en el párrafo precedente, muchas de las funciones que se contemplaban en
la “estrategia de Aduanas y Barreras Sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez
(AAMB), Barrera de Pasos Fronterizos y Cordones Sanitarios”, se referían a funciones
propias y permanentes de las autoridades sanitarias regionales, tal como lo establece
el libro segundo del Código Sanitario “De la profilaxis internacional” y el DS N°263/85
que aprueba el reglamento de sanidad marítima, aérea y de las fronteras. Sin embargo,
dada la situación epidemiológica enfrentada por la presencia del COVID-19, el
Ministerio de Salud consideró necesario reforzar la ejecución de esas tareas y labores
sanitarias e instruyó a la SEREMI de Salud RM que, por medio de la instauración de
una estrategia y en virtud de las facultades concedidas por el DS 4/2020, que decretó
Alerta Sanitaria por COVID-19, contratara de forma excepcional y transitoriamente por
las reglas del Código del Trabajo, tanto a funcionarios profesionales, como técnicos y
administrativos para que realizaran tareas y labores en el ámbito fronterizo y de
aeropuerto, complementando de esta manera las tareas y funciones habituales que
esta Autoridad Sanitaria ejecuta en dichos lugares, con aquellas actividades y trabajos
que llevaron a cabo aquellos funcionarios contratados en virtud de la estrategia
implementada en el contexto de la Alerta Sanitaria por COVID-19.

Establece que resulta improcedente el pago de la indemnización sustitutiva de aviso


previo, años de servicio y recargo legal resultan improcedentes ya que el contrato de
trabajo de la demandante terminó sin derecho a indemnización alguna, en virtud de la
causal contemplada en el artículo 159 Nº 5 del Código del Trabajo.

Por su parte menciona, que los demandantes hicieron uso de todos sus feriados
legales.

Precisa que los demandantes, piden se condene al pago de una indemnización por el
lucro cesante provocado. Agrega que la solicitud del pago del lucro cesante debe ser
rechazado, en primer término, ya que el contrato de trabajo terminó por una causal que
no da derecho a indemnización alguna, salvo la indemnización del art. 163 inciso 3 del
Código del Trabajo.
En subsidio narra, la solicitud de lucro cesante se funda en antecedentes que no se
ajustan a la realidad del contrato y a lo señalado para su vigencia. En este sentido
añade, se ajustó al término de la “estrategia de Aduanas y Barreras Sanitarias del
Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), Barrera de Pasos Fronterizos y Cordones
Sanitarios”, lo que de ningún modo se vincula con la declaración de Alerta Sanitaria.

Advierte que una cuestión se refiere a las facultades que la autoridad sanitaria tiene
respecto de la contratación transitoria de personal, para campañas sanitarias, y otra
cuestión totalmente distinta se refiere a la Alerta Sanitaria decretada por el Ministerio
de Salud.
Razona que la duración de la “estrategia de Aduanas y Barreras Sanitarias del
Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), Barrera de Pasos Fronterizos y Cordones
Sanitarios” está sujeta a la discrecionalidad administrativa de la autoridad sanitaria, de
acuerdo con el mérito, conveniencia y motivos que tenga el Servicio para disponer
fiscalizadores, dentro de las campañas sanitarias. Sin embargo agrega, de modo alguno
el plazo de estas residencias se sujeta al periodo de vigencia del estado de Alerta
Sanitaria, sino que se limita a lo establecido en el art. 10 del Código Sanitario, el cual
expresamente habla de que: “el Servicio Nacional de Salud podrá contratar, por
períodos transitorios, personal de acuerdo a las normas del Código del Trabajo, con
cargo a campañas sanitarias o imprevistos, según corresponda (…)”
Señala que por lo tanto, es improcedente extender el plazo de vigencia del contrato de
la demandante al periodo indicado en la demanda. Agrega que el contrato de trabajo
de la demandante estaba sujeto únicamente al término de la “estrategia de Aduanas y
Barreras Sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez (AAMB), Barrera de Pasos
Fronterizos y Cordones Sanitarios” y no al plazo del periodo de vigencia de estado alerta
sanitaria. Agrega que el término de la estrategia ya referida corresponde a una facultad
discrecional de la autoridad sanitaria, la cual conforme a criterios de conveniencia,
utilidad y mérito pueden extenderse de forma transitoria.

Explica que esta es la interpretación de la jurisprudencia administrativa, mediante


Dictamen Nº E127446N21, de fecha 06/08/2021 que señala: “Puntualizado lo anterior,
cabe referirse a la situación del personal cuyos contratos se suscribieron bajo el
régimen en análisis, pero en los cuales no se fijó un plazo fijo para su término, sino que
se supeditó su vigencia “mientras se encuentra en implementación la estrategia de
residencia sanitaria durante la alerta sanitaria” o “mientras se encuentra en
implementación la estrategia de call center durante la alerta sanitaria”.(..)
En este contexto, es dable manifestar que los contratos por los que se consulta no
comparten la naturaleza de contratos a plazo fijo, sino más bien constituyen
convenciones por obra o faena, lo que armoniza con la causal de cese invocada por la
Secretaría Regional Ministerial de Salud Metropolitana.
Por ende, dado que los acuerdos de voluntades por los que se consulta, en su calidad
de contratos de trabajo de obra o faena, establecen una duración sujeta a un plazo
indeterminado, cabe concluir que no cumplen con el precitado requisito, para tratarse
de contratos de trabajo regidos por el Código Sanitario, cuestión que la mencionada
Secretaría Regional Ministerial deberá tener en consideración en lo sucesivo. No
obstante lo anterior, y en atención a que en los hechos los contratos de trabajo se
suscribieron “por obra o faena”, resulta procedente que la autoridad ponga término a
esas contrataciones cuando efectivamente concluyan las mismas.”
Dice que misma postura que comparte la ICA de Arica y Parinacota en fallo sobre
recurso de nulidad, causa Rol Nº 34-2021 de fecha 14 de abril de 2021, que señala:
“SEXTO: Que en consecuencia, efectuando el proceso lógico de interpretación y
aplicación de ley de acuerdo a los hechos probados en juicio, los que, como se señaló,
no pueden ser modificados, no cabe sino concluir que el contrato que unió a las partes
fue de carácter transitorio, pues, tal como indicó el Juez a quo, en el motivo undécimo
del fallo en estudio, al momento de la suscripción del contrato el actor tenía claro que
la relación laboral que iniciaba con el Estado de Chile, tenía como origen la situación
excepcional derivada de la pandemia causada por la enfermedad Covid -19 que vive el
país, y que el único objeto del contrato de trabajo fue atender a personas afectadas con
dicha enfermedad en las Residencias Sanitarias; de suerte tal, que al reducirse
considerablemente el número de dichas residencias, sus servicios ya no eran
necesarios, compartiendo en consecuencia la conclusión del juez a quo, en orden a que
el despido de que fue objeto el trabajador, en virtud de la causal establecida en el
artículo 159 N° 5 del Código del Trabajo, se encuentra ajustado a derecho.”
Sostiene que de esta manera queda claro que de cualquier manera el otorgamiento de
esta prestación importa un enriquecimiento sin causa para la actora, especialmente
atendido el hecho que la demandante fue despedida por una causal legal que no da
derecho a indemnización alguna.
Finalmente expone, es relevante destacar que la demandante señala una cifra similar
a las indemnizaciones demandadas sin hacer referencia alguna a la extensión del daño
y al tiempo que supuestamente se debió extender su contrato. Este punto es relevante
pues, en el evento improbable que el Tribunal considere que es procedente una
indemnización por lucro cesante, la demandante no ha señalado cual es la extensión
del daño alegado, antecedente suficiente para rechazar esta prestación demandada.

TERCERO: Que con fecha 13 de abril de 2022 tuvo lugar la audiencia preparatoria,
proponiendo el tribunal los siguientes hechos no controvertidos los que fue aceptado
por las partes, a saber:
a) La existencia de una relación laboral entre las partes desde la fecha de ingreso y
última remuneración indicada en la demanda de autos, con excepción de la fecha de
inicio de la relación laboral de doña Daniela Martínez.

b) Que la demandada puso fin a la relación laboral en virtud del N°5 del artículo 159 del
Código del Trabajo.
A continuación el tribunal llamó a los litigantes a conciliación, proponiendo al efecto el
Tribunal bases concretar de un posible acuerdo, el cual no prosperó.

Atendido lo precedentemente relatado y existiendo al juicio del tribunal hechos


sustanciales, pertinentes y controvertidos, fijo el siguiente hecho a probar:
a) Fecha de inicio de la relación laboral de doña Daniela Martínez.
b) Fecha de término de los servicios.
c) Contenido de la carta de aviso de despido.
d) Concurrencia de los hechos invocados en ella.
e) Duración de los contratos de trabajo suscritos entre las partes.
f) Si los demandantes hicieron uso de su feriado legal, o bien le fue compensado.
g) Si la demandada pagó el feriado proporcional.
h) Fecha de término de los servicios para los cuales fueron contratados los actores.
CUARTO: Que para acreditar sus alegaciones la demandada incorporo mediante
lectura los siguientes documentos no objetados de contrario, consistes en:
a) Respecto del Sr. Espina:
1. Contratos de trabajo y anexos de contrato de trabajo suscritos entre el actor y el
servicio.

2. Planilla Previred del periodo 2021-2022.


3. Certificado de relación de servicios del actor.
4. Carta de término de trabajo de fecha 23 de diciembre de 2022.
5. Comprobante de envío de carta de despido de la Dirección del Trabajo.
6. Resolución Exenta N° 1270, de fecha 23 de diciembre de 2022, que dispone termino
de contrato de trabajo que indica.
b) Respecto de la Sra. Valenzuela:1. Contratos de trabajo y anexos de contrato de
trabajo suscritos entre la actora y el servicio.
2. Planilla Previred del periodo 2020-2022.3. Certificado de relación de servicios de la
actora.
4. Carta de término de trabajo de fecha 23 de diciembre de 2022.5. Comprobante de
envío de carta de despido de la Dirección del Trabajo.6. Resolución Exenta N° 1392,
de fecha 23 de diciembre de 2022, que dispone termino de contrato de trabajo que
indica.
c) Respecto de la Sra. Martínez:
1. Contratos de trabajo y anexos de contrato de trabajo suscritos entre la actora y el
servicio.

2. Planilla Previred del periodo 2021-2022.


3. Certificado de relación de servicios de la actora.
4. Carta de término de trabajo de fecha 23 de diciembre de 2022.
5. Comprobante de envío de carta de despido de la Dirección del Trabajo
6. Resolución Exenta N° 1251, de fecha 23 de diciembre de 2022, que dispone el
término de contrato de trabajo que indica.
d) Respecto de todos los actores1. Dictamen de la Contraloría General de La República
de fecha 6 de septiembre de 2022, folio E253946/2022, que establece que el personal
contratado en virtud del artículo 10 del Código Sanitario, cesa en sus funciones por el
solo ministerio de la ley al llegar el plazo previsto en el respectivo contrato de trabajo.

2. Informe epidemiológico de fecha 22 de diciembre de 2022, emitido por el MINSAL


(link:https://s3.amazonaws.com/gobclprod/public_files/Campa
%C3%B1as/CoronaVirus/Reportes/22.12.2022_Reporte_Covid19. pdf)
3. Decreto 4 de 5 de febrero de 2020, del Ministerio de Salud, Subsecretaría de
Seguridad Pública que establece estado de emergencia sanitaria.
4. Decreto N°52 de 16 de diciembre de 2021, del Ministerio de Salud, que prorroga el
Decreto N°4 recién nombrado.
5. Decreto N°31 de 18 de marzo de 2022, que prorroga el Decreto N°4 recién nombrado.

6. Decreto N° 6 del Ministerio de Salud, publicado el 7 de marzo de 2020.

QUINTO: Que la parte demandante incorporó en la audiencia de juicio los siguientes


medios de prueba:
.- Documental:
Incorporó en la audiencia de juicio los siguientes documentos:
a ) Respecto de Arturo Espina:
1. Contrato de trabajo de fecha 01 de julio de 2020, junto con anexo de contrato de
fecha 05 de julio de 2020, 08 de octubre de 2021, 16 de noviembre de 2021 y 17 de
agosto de 2022.
b) Respecto de Francisca Valenzuela:
1. Anexos de contrato de trabajo de julio y noviembre de 2020.
2. Certificado de cotizaciones previsionales FONASA de fecha 10/03/2023.
3. Certificado laboral de fecha 28 de marzo de 2022.
4. Certificado de cotizaciones AFP MODELO de fecha 10 de marzo de 2023.
5. Liquidaciones de sueldo de noviembre, octubre y agosto de 2022.
c) Respecto de Daniela Martínez:
. Contrato de trabajo de fecha 25 de agosto de 2020.
2. Resolución exenta de término de contrato de trabajo de fecha 23/12/2022.
3. Carta aviso de término de contrato de trabajo de fecha 23 de diciembre de 2022.
4. Certificado de cotizaciones AFP MODELO, de fecha 09 de marzo de 2023.
5. Liquidaciones de sueldo de julio a noviembre de 2022.
d) Respecto de todos los demandantes:
. Set fotográfico (4 imágenes) de Humanet en cual se ofrece empleo de Anfitrión de fila
(TENS)- Aeropuerto.
2. Set captura de pantalla aplicación Instagram del perfil SEREMISALUDRM,
consistente en 8 capturas.
3. Prorroga vigencia del decreto N°5 de 2020, de fecha 15 de marzo de 2023.
4. Decreto 91, que prorroga vigencia del decreto n°4 de 2020, de fecha 28 de diciembre
de 2022.
II.- Confesional:
La parte demandante pidió la absolución de posiciones del representante legal de la
Seremi De Salud Región Metropolitana – Subsecretaría, compareciendo Edgardo
Armando Moya Vera, quien legalmente juramentado expuso el termino de los contratos
es por el cumplimiento de obra o faena, que era la estrategia sanitaria del aeropuerto y
existe una resolución 1155 que le pone fin el 14 de diciembre de 2022, no se implementó
otra estrategia, añade que se siguieron realizando funciones en virtud del reglamento
sanitario. Añade que no sabe si sus labores que se siguieron realizando eran
efectuadas por los trabajadores demandante. Indica que no sabe la razón de la prórroga
de las alertas. Interrogado por el Tribunal señala que la estrategia que finalizó eran
funciones para prevención que ya se estaban ejecutando por el aeropuerto, que era la
profilaxis de salud, ellos apoyaron lo que estaba haciendo. Añade que se mantuvo un
poco de personal para realizar esa labor. Agrega que no se podía poner fin en el 100%.
II.- Exhibición de documentos:
a parte demandante pidió se exhibieran los siguientes documentos:
omprobantes de toma de feriado legal y/o vacaciones de los demandantes en los
periodos 2020, 2021 y 2022.
La parte demandada aparejó las hojas de vida de los demandantes, por lo que la parte
demandante pidió no se diera por cumplida la exhibición y se aplicara el apercibimiento
legal.

SEXTO: Que atendido los escritos de demanda y contestación y de los hechos que se
tuvieron por no controvertidos, la discusión de autos, radica en determinar el contenido
de la carta aviso de despido, la concurrencia de los hechos invocados en ella y la obra
o faena para la cual fueron contratado los actores, como su fecha de término.

Que además de lo anterior, debe establecerse si los demandantes hicieron uso de su


feriado legal o bien les fue compensado y si la demandada pago el feriado proporcional.

SEPTIMO: Que así la primera discusión de la cual debe hacerse cargo el Tribunal,
corresponde a si la carta aviso de despido contiene o no hechos.

OCTAVO: Que de acuerdo a lo dispuesto en los incisos primero y cuarto del artículo
162 del Código del Trabajo si el contrato de trabajo termina de acuerdo con los números
4, 5 o 6 del artículo 159, o si el empleador le pusiere término por aplicación de una o
más de las causales señaladas en el artículo 160, deberá comunicarlo por escrito al
trabajador, personalmente o por carta certificada enviada al domicilio señalado en el
contrato, expresando la o las causales invocadas y los hechos en que se funda y
cuando el empleador invoque la causal señalada en el inciso primero del artículo 161,
el aviso deberá darse al trabajador, con copia a la Inspección del Trabajo respectiva, a
lo menos con treinta días de anticipación.
NOVENO: Que luego el inciso segundo del número 1) del artículo 454 del Código del
Trabajo, refiere que en los juicios de despido corresponderá al demandado acreditar la
veracidad de los hechos imputados en la carta aviso de despido, sin que pueda alegar
en juicio hechos distintos como justificativo de la desvinculación.
DECIMO: Que de las normas señaladas es posible establecer que la comunicación de
despido debe contener todos los hechos específicos y no genéricos que fundan el
término de la relación laboral, toda vez que de acuerdo a la norma referida en el motivo
anterior, son aquellos los que deberá probar el demandado en juicio, sin que le esté
permitido alegar hechos diferentes en el proceso.
Que así la carta de despido, al expresar las circunstancias fácticas que rodearon el
término de los servicios de la demandante y que hacen necesaria su separación, deber
ser clara, precisa, detallada y completa, estableciendo por una parte los hechos que
deben ser probados por el empleador y por otra aquellos que impugnará el trabajador,
lo que no podría darse, afectando su derecho a defensa, si la misiva por medio de la
cual se pone fin a la relación laboral se limita a señalar las razones que se señalan en
la propia ley o bien omite antecedentes que permiten apreciar la las razones que
llevaron a la conclusión de los servicios.Que lo antes dicho, ya ha sido resuelto por la
Excelentísima Corte Suprema en Recurso de Unificación de Jurisprudencia, autos Rol
Ingreso Corte 4884-2015, el que señala “3° Que, en lo que concierne a la otra materia
de derecho, de lo que se consigna en el motivo 1° referido a lo que esta Corte decidió
en la sentencia dictada en los autos número de rol 483-2010, de fecha 13 de mayo de
2010, se advierte que la postura jurisprudencial difiere de aquella adoptada por la
sentencia que se examina, señalada también en el raciocinio indicado; por lo que
corresponde decidir cuál es la correcta. Para ello, se debe tener presente que las
normas que reglamentan el asunto son aquellas que están establecidas en el inciso 1
del artículo 161 e incisos 1 y 4 del artículo 162 en relación con lo que señala el inciso 2
del número 1) del artículo 454 del Código del Trabajo; disposiciones de las que se
puede colegir que si el empleador pretende desvincular a un trabajador invocando la
causal de necesidades de la empresa, establecimiento o servicio, debe avisar al
trabajador, con copia a la Inspección del Trabajo respectiva, a lo menos con treinta días
de anticipación, indicando en la misiva tanto la causal legal como los hechos en que se
funda, los que deben ser específicos y no genéricos, pues la última norma citada, que
regula cómo debe rendirse la prueba en los juicios sobre despido, señala que debe
ofrecerla, en primer lugar, el demandado, quien debe acreditar la veracidad de los
hechos imputados en las comunicaciones a que se refieren los incisos 1 y 4 del artículo
162, sin que pueda alegar hechos distintos como justificativos del despido; lo que
confirma que es lo expresado en la carta de despido aquello determina qué hechos
deben probarse en la audiencia de juicio, por lo que debe ser suficientemente explícita
para dar lugar a la etapa probatoria. Y tratándose de la causal de término de la relación
laboral que se invocó en el caso de autos, se debe indicar en qué consiste el motivo
que hace que sea ineludible disponer la separación del trabajador y, además, de la
descripción o relación de los hechos debe surgir la necesidad de adoptarla;
4° Que, así, el trabajador estará en condiciones de impugnar ante el juzgado
competente la decisión adoptada por el empleador solicitando que se lo condene al
pago de los recargos legales que sean procedentes, lo que se vería entorpecido si
desconoce las circunstancias fácticas reales y precisas que aquél tuvo en consideración
para poner término a su fuente laboral; dificultad que experimentaría si se concluye que
es suficiente que se mencione alguna o algunas de las razones que, a modo de ejemplo
y de manera abstracta, se señalan en el inciso 1° del artículo 161 del Código del
Trabajo. Sin perjuicio de lo anterior, se debe tener presente que una manifestación del
derecho a un real y justo procedimiento se traduce, en el caso concreto –trabajador
desvinculado por la decisión unilateral del empleador y no por su desempeño o
conducta personal-, en que se proporcione de manera eficaz todos los antecedentes
que motivaron el despido para poder preparar la defensa y convencer al juzgador que
la causal esgrimida es injustificada; oportunidad que es aquella en que se le comunica
el despido por la carta o aviso a que se ha hecho referencia;
5° Que, en ese contexto, en el juicio el empleador deberá demostrar la efectividad de
los hechos de que da cuenta la misiva por la que desvincula a un trabajador,
correspondiéndole a éste desvirtuarlos con los medios de prueba recabados, lo que
podrá hacer en la medida que los hechos que sirvieron de fundamento a la decisión que
impugna los haya conocido de manera íntegra y oportuna a través de dicha carta. La
información que el demandado puede proporcionar en el escrito por el cual contesta la
demanda no puede ser calificada como eficaz, dado que es un trámite que debe
evacuarse con una antelación de cinco días a la celebración de la audiencia
preparatoria que está destinada para que las partes ofrezcan los medios probatorios
que estimen pertinentes, lo que se traduciría en una reducción injustificada del término
que tiene para recabarlos”.
UNDECIMO: Que de acuerdo a la carta aviso de despido incorporada por ambas partes
al proceso, los actores fueron despedidos en base a la siguiente misiva:
“ESTIMADO(A): xxxxxxxx
DOMICILIO: xxxxxxxxxxxx
PRESENTE
Por medio del presente, comunico a usted que su contrato pactado con la secretaria
regional Ministerial de Salud de la Región Metropolitana, Subsecretaría de Salud
Pública, Rol Único Tributario 61.601.0-k, representada por don Benjamín Gonzalo Soto
Brandt, RUN: 13.496.038-8, entiéndase por finalizado el día 24 de diciembre de 2022.

La causal legal invocada es la contenida en el artículo 159 numeral 5o del Código del
Trabajo, esto es, "Conclusión del trabajo o servicio que dio origen al contrato",
haciéndose necesaria la separación y/o término del contrato de trabajo.
Los hechos en que se funda la citada causal corresponden a llevar a cabo lo mandatado
mediante Resolución Exenta N° 1155 de fecha 20 de diciembre de 2022, de esta
Secretaria Regional Ministerial de Salud de la Región Metropolitana, la cual dispone "el
cierre de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino
Benítez ( AAMB), barreras de pasos fronterizos y cordones sanitarios", lo anterior
fundado además, en la adaptación de las estrategias asociadas al control de la
pandemia por SARS-Cov-2 para el escenario de apertura, instruido por el Ministerio de
Salud mediante Ordinario A15/N°4620 y Ordinario B51/N°4934 ambos del año 2022, y
de las últimas modificaciones de la Resolución Exenta N°495/2022 que, aprueba el plan
fronteras protegidas, mediante las Resoluciones Exentas N°s 1209/2022 y 1401/2022
del Ministerio de Salud, sumado al escenario epidemiológico actual de nuestro país,
con altas tasas de vacunación, disminución importante en el número de fallecidos y de
la ocupación de camas críticas, lo que hace posible adecuar las medidas de prevención,
disponiendo de un plan de desescalada fundado en la racionalización y reducción de
personal contratado bajo las disposiciones del Código del Trabajo, en lo que respecta
a profesionales, administrativos y técnicos que fueron incorporados para llevar a cabo
las diversas estrategias y para reforzar el funcionamiento de los diferentes
Departamentos y/o Unidades que componen la estructura orgánica de este Servicio.

De acuerdo con la causal le corresponde pagar lo siguiente:


Indemnización por término de contrato por causal art.159 N°5, equivalente a dos y
medios días de remuneración por cada mes trabajado y fracción superior a 15 días.

Feriado Legal pendiente.


Feriado Proporcional. ”DUODECIMO: Que de acuerdo a la carta aviso de despido antes
detallada, el despido de los actores se fundó en síntesis en el cierre de la estrategia de
aduanas y barreras sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez ( AAMB), barreras
de pasos fronterizos y cordones sanitarios de acuerdo a la Resolución Exenta N° 1155
de fecha 20 de diciembre de 2022, a lo que se debe sumar la adaptación de las
estrategias asociadas al control de la pandemia por SARS-Cov-2 para el escenario de
apertura, instruido por el Ministerio de Salud mediante Ordinario A15/N°4620 y
Ordinario B51/N°4934 ambos del año 2022, las últimas modificaciones de la Resolución
Exenta N°495/2022 que, aprueba el plan fronteras protegidas, mediante las
Resoluciones Exentas N°s 1209/2022 y 1401/2022 del Ministerio de Salud y el
escenario epidemiológico actual de nuestro país, disponiéndose un plan de
desescalada fundado en la racionalización y reducción de personal contratado bajo las
disposiciones del Código del Trabajo, en lo que respecta a profesionales,
administrativos y técnicos que fueron incorporados para llevar a cabo las diversas
estrategias y para reforzar el funcionamiento de los diferentes Departamentos y/o
Unidades que componen la estructura orgánica de este Servicio.

DECIMO TERCERO: Que de esta forma, al indicar la carta aviso de despido, las
razones por las cuales se puso fin a la relación laboral existente con los demandantes,
a saber una racionalización y reducción de personal, al haberse implementado un plan
de desescalada atendido el término de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias
del Aeropuerto Arturo Merino Benítez, barreras de pasos fronterizos y cordones
sanitarios, la adaptación de las estrategias asociadas al control de la pandemia y el
escenario epidemiológico actual, no es posible sino indicar que la carta de autos
contiene hechos.
DECIMO CUARTO: Que habiéndose establecido como suficiente la carta aviso de
despido, corresponde determinar la concurrencia de los hechos fundantes de aquella y
si los mismos corresponden a la causal de despido invocada en autos.

DECIMO QUINTO: Que habiéndose establecido como suficiente la carta aviso de


despido, corresponde determinar la concurrencia de los hechos invocados en ella y si
corresponden a la causal de caducidad alegada.

DECIMO SEXTO: Que conforme la carta aviso de despido, los actores fueron
despedidos en virtud del N° 5 del artículo 159 del Código del Trabajo, esto es conclusión
de la obra o faena, con fecha 24 de diciembre de 2023, de acuerdo a los siguientes
hechos:
“Llevar a cabo lo mandatado mediante Resolución Exenta N° 1155 de fecha 20 de
diciembre de 2022, de esta Secretaria Regional Ministerial de Salud de la Región
Metropolitana, la cual dispone "el cierre de la estrategia de aduanas y barreras
sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez ( AAMB), barreras de pasos fronterizos
y cordones sanitarios", lo anterior fundado además, en la adaptación de las estrategias
asociadas al control de la pandemia por SARS-Cov-2 para el escenario de apertura,
instruido por el Ministerio de Salud mediante Ordinario A15/N°4620 y Ordinario
B51/N°4934 ambos del año 2022, y de las últimas modificaciones de la Resolución
Exenta N°495/2022 que, aprueba el plan fronteras protegidas, mediante las
Resoluciones Exentas N°s 1209/2022 y 1401/2022 del Ministerio de Salud, sumado al
escenario epidemiológico actual de nuestro país, con altas tasas de vacunación,
disminución importante en el número de fallecidos y de la ocupación de camas críticas,
lo que hace posible adecuar las medidas de prevención, disponiendo de un plan de
desescalada fundado en la racionalización y reducción de personal contratado bajo las
disposiciones del Código del Trabajo, en lo que respecta a profesionales,
administrativos y técnicos que fueron incorporados para llevar a cabo las diversas
estrategias y para reforzar el funcionamiento de los diferentes Departamentos y/o
Unidades que componen la estructura orgánica de este Servicio.”
DECIMO SEPTIMO: Que para acreditar lo anterior, la parte demandada incorporó al
proceso, los siguientes documentos:
a) Contrato de trabajo de los demandantes en el cual se indica, en relación a su duración
respecto a Arturo Espina y Daniela Martínez lo siguiente:
“El presente contrato tendrá como vigencia mientras se encuentre en implementación
la estrategia de Aduana, durante la alerta sanitaria.”.

b) Anexo de contrato de trabajo de Francisca Valenzuela Armijo, de fecha 5 de julio de


2020, en el cual se indica que se prorroga el contrato de la demandante antes referida,
indicándose lo siguiente: “Tendrá vigencia mientras se encuentre en implementación la
estrategia (Estrategia de Aduana Sanitaria) durante la alerta sanitaria”.

c) Informe epidemiológico de fecha 22 de diciembre de 2022, en el cual se indica entre


el 8 de noviembre y 22 de diciembre, ambos de 2022, las variaciones diarias de casos
nuevos, variando entre 7.000 y 3.000 casos aproximadamente, además de una baja
desde febrero de 2022.
d) Decreto N° 4, de fecha de febrero de 2020, en el cual se declara Alerta Sanitaria en
todo el territorio de la República, para enfrentar la amenaza a la salud pública producida
por la propagación a nivel mundial del "Nuevo Coronavirus 2019 (2019-nCoV)".

e) Decreto N° 52, de fecha 24 de diciembre de 2021, por medio del cual se prorroga la
alerta sanitaria hasta marzo de 2022.
f) Decreto N° 31, de fecha 28 de marzo de 2022, por medio del cual se prorroga la alerta
sanitaria hasta el 30 de septiembre de 2022.

DECIMO OCTAVO: Que por su parte los demandantes aparejaron los siguientes
documentos:
a) Set fotográfico de imagines que darían cuenta de requerimiento de Anfitrión de Fila,
hacia 2 meses.
alla de página de instagram @seremisaludrm, en donde aparece la ministra Ximena
Aguilera inspeccionando el plan frontera protegida.
c) Decreto N° 10, de fecha 15 de marzo de 2023, en la cual se prorroga la alerta sanitaria
hasta el 31 de agosto de 2023.
d) Decreto N° 91, de fecha 31 de diciembre de 2022, en el cual se prorrogo la alerta
sanitaria hasta el 31 de marzo de 2023.
Que además rindió la confesional de autos.
DECIMO NOVENO: Que conforme los medios de prueba antes referidos, los
demandantes fueron contratados mientras estuviera implementada la estrategia de
Aduana, durante la alerta sanitaria.

Que luego, se determina que los actores fueron despedidos fundado en el término de
la estrategia de aduanas y barreras sanitarias del Aeropuerto Arturo Merino Benítez,
barreras de pasos fronterizos y cordones sanitarios, la adaptación de las estrategias
asociadas al control de la pandemia y el escenario epidemiológico actual.

Que atendido los documentos incorporados por la parte demandada, sólo es posible
determinar que existen fluctuaciones a la baja de los contagios covid desde febrero de
2022.
Que además de lo anterior, de los print pantalla y confesional rendida por la
demandada, aparece que la demandada aun realiza actividades en el Aeropuerto de
Santiago en el marco de la estrategia de salud por Covid 19.
VIGESIMO: Que atendido lo antes referido, a juicio de esta juez, no existen
antecedentes suficientes para establecer los hechos invocados en la carta aviso de
despido, a saber el término de la estrategia de aduanas y barreras sanitarias del
Aeropuerto Arturo Merino Benítez, barreras de pasos fronterizos y cordones sanitarios,
la adaptación de las estrategias asociadas al control de la pandemia y el escenario
epidemiológico actual, motivo por el cual necesariamente se acogerá la demanda de
autos, declarando el despido injustificado.

Que así no se acompañó al proceso la Resolución Exenta N° 1155 de fecha 20 de


diciembre de 2022, de esta Secretaria Regional Ministerial de Salud de la Región
Metropolitana, que establece el cierre de la estratega en la cual se desempeñaban los
actores.

Que tampoco se probó, la adaptación de estrategias asociadas al control de la


pandemia, y si bien se acredito una baja en los casos, lo que además es un hecho
público y notorio, aquello es insuficiente para determinar un escenario epidemiológico
que permitiera poner fin al contrato de los demandantes, máxime si la estrategia no ha
concluido, de acuerdo a lo antes indicado.

VIGESIMO PRIMERO: Que habiéndose establecido que el despido de autos es


injustificado, corresponde determinar las indemnizaciones a las cuales tendrían
derecho los demandantes.

VIGESIMO SEGUNDO: Que conforme lo dispone el artículo 163 inciso segundo del
Código del Trabajo, “Si el contrato celebrado para una obra o faena determinada
hubiere estado vigente por un mes o más, el empleador podrá ponerle término en forma
justificada en tanto pague al trabajador, en el momento de su terminación, una
indemnización equivalente a dos y medio días de remuneración por cada mes trabajado
y fracción superior a quince días, en la forma y modalidad señalada en el artículo 23
transitorio de este Código. Esta indemnización será calculada en conformidad a lo
establecido en el artículo 172, y le será aplicable lo dispuesto en el inciso segundo del
artículo 13 de la ley N° 19.728. Sólo corresponderá el pago de la prestación antes
señalada, si se pusiere término al contrato por la causal contemplada en el número 5
del artículo 159. El ejercicio del derecho establecido en este inciso por parte del
trabajador es incompatible con las acciones derivadas de la aplicación del inciso
primero del artículo 168, sin perjuicio de las acciones señaladas en el artículo 485 de
este Código”.
VIGESIMO TERCERO: Que atendido lo antes referido y habiéndose establecido una
indemnización especial, para el caso del término de los servicios anticipadamente
cuando el contrato es por obra o faena, aquella indemnización que corresponde es la
antes referida y no la indemnización por lucro cesante e indemnización sustitutiva del
aviso previo solicitada, motivo por el cual sólo se acogerá la demanda en relación al
tiempo servido, correspondiéndole a los demandantes 2,5 días de remuneración, de
conformidad al artículo 172 del Código del Trabajo por mes trabajado.
VIGESIMO CUARTO: Que en cuanto al valor de la remuneración para efectos
indemnizatorios se estará a aquella indicada por los actores, atendido el hecho no
controvertido al que arribaron las partes.

VIGESIMO QUINTO: Que en cuanto a la fecha de inicio de la relación laboral respecto


de doña Daniela Martínez, atendido el contrato de trabajo incorporado al proceso, esto
habría ocurrido el 26 de agosto de 2020.

VIGESIMO SEXTO: Que respecto de la fecha de término de los servicios, atendida la


circunstancia de que en los certificados de previred aparece que se enteró a los
demandantes, la remuneración correspondiente al mes completo, se determinará que
el término de servicios ocurrió el 31 de diciembre de 2022.

VIGESIMO SEPTIMO: Que de esta forma habiendo prestado servicios 17 meses Arturo
Espina, entre el 20 de julio de 2020 y 31 de diciembre de 20222, los días a compensar
son 72.5, que equivale a $2.165.333.
Que en el caso de Francisca Valenzuela, habiendo prestado servicios 21 meses,
equivalente a 82,5 a compensar, la suma a pagar por concepto de indemnización por
tiempo servido será de $4.153.435
ue en cuanto a Daniela Martínez, correspondiendo la prestación de servicios a 16 días,
los días a indemnizar corresponden a 70, por lo que la suma de dinero por dicho
concepto es la cantidad de $3.524.126.
VIGESIMO OCTAVO: Que en el caso del feriado legal y proporcional, habiéndose
requerido por la parte demandada la exhibición de los comprobantes de feriado, no
habiéndose acompañado aquel sino solo la hoja de vida de los trabajadores, que
corresponden a documentos emitidos por la demandada, se hará efectivo el
apercibimiento requerido, estableciendo que la demanda adeuda el feriado por los
periodos reclamados.
VIGESIMO NOVENO: Que las demás pruebas incorporadas al proceso por los
litigantes, en nada alteran lo precedentemente resuelto, por lo que se omitirá
pronunciamiento a su respecto.

Visto además, lo dispuesto en los artículos 1, 161, 168, 172, 203 y 446 a 462 del Código
del Trabajo, SE DECLARA:
Que SE ACOGE la demanda de autos interpuesta por ARTURO ESPINA GODOY,
FRANCISCA VALENZUELA ARMIJO y DANIELA MARTINEZ VILLALON en contra del
FISCO DE CHILE y SEREMI DE SALUD REGIÓN METROPOLITANA –
SUBSECRETARÍA, sólo en cuanto:
a) Se declara injustificado el despido.
b) La demandada deberá pagar:
i.- ARTURO ESPINA GODOY:
- $2.165.333 por concepto de indemnización por tiempo servido.
- $1.534.788 por concepto de feriado legal y proporcional.
ii.- FRANCISCA VALENZUELA ARMIJO
· $4.153.435 por concepto de indemnización por tiempo servido.
· $2.664.760 por concepto de feriado legal y proporcional.
iii.- DANIELA MARTINEZ VILLALON
· $3.524.126 por concepto de indemnización por tiempo servido.
· $2.379.304 por concepto de feriado legal y proporcional.
c) Que no se condena en costas a la demandada por no haber sido totalmente vencida.
Una vez ejecutoriada la presente sentencia definitiva, devuélvanse los documentos
guardados en custodia.

Regístrese y archívese en su oportunidad.

RIT: O-1685-2023
RUC: 23-4-0466522-7
Dictada por doña ANGELICA PEREZ CASTRO, Juez Titular del Primer Juzgado de
Letras del Trabajo de Santiago.

También podría gustarte