Lesiones más
comunes en el
trabajo o vida
cotidiana.
Las lesiones más comunes en el
trabajo o la vida cotidiana pueden
variar dependiendo de la
industria, las actividades y las
circunstancias individuales. Sin
embargo, algunas de las lesiones
más comunes incluyen:
Lesiones en la espalda:
Estas pueden ocurrir debido a levantar
objetos pesados de manera incorrecta,
mantener una mala postura o realizar
movimientos repetitivos.
Esguinces y distensiones
musculares:
Estas lesiones pueden ocurrir en
diversas partes del cuerpo debido a
movimientos bruscos, sobreesfuerzo o
caídas.
Lesiones en las manos y
Lesiones por objetos
muñecas:
cortantes o punzantes:
Esto puede incluir desde cortes y
Cortaduras o pinchazos con
objetos afilados pueden ocurrir en
quemaduras hasta lesiones por
una variedad de situaciones.
esfuerzo repetitivo (como el síndrome
del túnel carpiano).
Lesiones oculares:
Daños en los ojos debido a
Lesiones en las extremidades
partículas extrañas, químicos u
inferiores: otros factores son comunes en
Fracturas, esguinces y torceduras en ciertos trabajos o actividades.
las piernas, rodillas y pies son
comunes, especialmente en entornos
laborales que requieren mucho Lesiones por esfuerzo
movimiento.
repetitivo (LER):
Este tipo de lesión está
relacionado con la realización
repetitiva de tareas específicas,
como escribir en una computadora
Lesiones en la cabeza y cuello:
durante largos periodos de tiempo.
Las caídas, golpes o accidentes pueden
provocar lesiones en la cabeza, la cara
y el cuello.
Lesiones por accidentes de
tráfico:
Los accidentes automovilísticos
Lesiones por caídas: son una causa común de lesiones
en la vida cotidiana.
Ya sea en el trabajo o en casa, las
caídas son una causa común de
lesiones, que pueden variar desde
raspones leves hasta fracturas graves.

Importancia de
las pausas
activas:
Las pausas activas son breves
descansos que se toman durante la
jornada laboral o en cualquier
actividad que implique periodos
prolongados de estar sentado o
realizando tareas repetitivas. Estas
pausas están diseñadas para
involucrar al cuerpo en movimientos
suaves y estiramientos con el
propósito de aliviar la tensión física
y mental. La importancia de las
pausas activas radica en varios
beneficios significativos:
Reducción del estrés y la fatiga:
Las pausas activas ayudan a reducir
el estrés acumulado y la fatiga que
pueden surgir durante el trabajo o
las actividades diarias. Estos
descansos proporcionan una
oportunidad para relajar la mente y
el cuerpo.
Prevención de lesiones por
esfuerzo repetitivo:
Si realizas tareas repetitivas, como
escribir en una computadora durante
largos periodos de tiempo, tomar
pausas activas puede ayudar a
prevenir lesiones por esfuerzo
repetitivo, como el síndrome del
túnel carpiano o la tensión en el
cuello y los hombros.
Mejora de la circulación
sanguínea:
Los movimientos suaves y los
estiramientos de las pausas activas
aumentan la circulación sanguínea,
lo que puede ayudar a reducir la
sensación de entumecimiento y la
hinchazón en las extremidades.
Mejora de la concentración y la
productividad:
Al dar a tu mente un breve descanso y
movilizar tu cuerpo, es más probable
que mantengas un alto nivel de
concentración y productividad en tu
trabajo o actividad. Las pausas activas
pueden ayudar a recargar tu energía y
enfoque.
Prevención de problemas
posturales:
Tomar pausas activas te brinda la
oportunidad de corregir tu postura y
evitar la tensión muscular y el dolor de
espalda, cuello y hombros que pueden
surgir debido a una mala ergonomía.
Mejora de la salud general:
Las pausas activas promueven un
estilo de vida más saludable al
fomentar la actividad física regular a lo
largo del día. Esto puede contribuir a
mantener un peso saludable y reducir
el riesgo de enfermedades
relacionadas con el sedentarismo.