Mecánica de rocas aplicado a las hidroeléctricas

1. Introducción
La mecánica de rocas desempeña un papel fundamental en el diseño, construcción y operación
de presas. Las presas son estructuras que se utilizan para almacenar agua en embalses, con el
propósito de abastecer agua potable, generar energía hidroeléctrica, controlar inundaciones y
facilitar riego agrícola, entre otros usos. Para garantizar la seguridad y el rendimiento de estas
estructuras, es esencial comprender y aplicar los principios de la mecánica de rocas.

La mecánica de rocas en presas se enfoca en el estudio y análisis de las propiedades

geomecánicas de las formaciones rocosas que rodean y soportan la estructura de la presa. Esto
incluye la caracterización de la resistencia de las rocas, su deformación, fracturación, 1
permeabilidad y otros factores que pueden afectar la estabilidad de la presa. Además, la
mecánica de rocas también considera la interacción entre las estructuras de la presa y el macizo
rocoso circundante, lo que es esencial para evitar fallas catastróficas.

El crecimiento de la mecánica de rocas como una disciplina formal se debió a la necesidad de

enfrentar los desafíos técnicos asociados con la construcción de grandes obras de ingeniería,
incluidas las presas. A medida que se planearon y construyeron presas cada vez más grandes y
complejas, se hizo evidente la importancia de entender y predecir el comportamiento de las
formaciones rocosas subyacentes para garantizar la seguridad y la estabilidad de las estructuras.

2. Funcionalidad
1. Diseño y ubicación de la presa: Los ingenieros utilizan estudios geotécnicos para evaluar
la idoneidad de un sitio para la construcción de una presa. Esto implica analizar la calidad
de la roca subyacente para determinar su capacidad para soportar la carga de la presa
y resistir la filtración de agua.
2. Estabilidad de la presa: Durante la construcción y operación de una presa, es esencial
garantizar su estabilidad a largo plazo. La mecánica de rocas se utiliza para determinar
el tipo de cimentación adecuada y evaluar los riesgos de deslizamiento, socavación y
otros tipos de fallas.

La estabilidad de la presa es un aspecto crítico en el diseño, construcción y operación

de presas, y es una parte fundamental de la mecánica de rocas en este contexto. La
estabilidad de la presa se refiere a la capacidad de la estructura para resistir las
fuerzas y cargas que actúan sobre ella y mantenerse en condiciones seguras a lo largo
del tiempo. Aquí hay más información sobre la estabilidad de la presa y su relación
con la mecánica de rocas:
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Tipos de estabilidad de la presa: La estabilidad de la presa se puede dividir en varios
aspectos clave, que incluyen:

Estabilidad estructural: Refiere a la capacidad de la presa para resistir las fuerzas

físicas y mecánicas que actúan sobre ella, como la presión del agua almacenada, las
cargas sísmicas y las cargas del viento.

Estabilidad hidráulica: Se refiere a la capacidad de la presa para mantener el control

del flujo de agua y evitar la erosión y la filtración de agua a través de la estructura.
 Estabilidad geotécnica: Este aspecto es donde la mecánica de rocas juega un papel
importante. Se refiere a la capacidad de la presa para resistir deslizamientos,
socavación y deformaciones inducidas por el macizo rocoso circundante.

Análisis de estabilidad geotécnica: La mecánica de rocas se utiliza para evaluar la

estabilidad geotécnica de la presa y su cimentación. Esto implica considerar factores
como la resistencia de las rocas circundantes, la inclinación de las capas geológicas,
las fracturas, la permeabilidad y otros aspectos que pueden influir en la estabilidad
de la presa.

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Medidas de mitigación: Si se identifican posibles problemas de estabilidad durante
el análisis, se pueden tomar medidas de mitigación. Estas medidas pueden incluir la
construcción de estructuras de soporte, como anclajes, la modificación de la
cimentación, el diseño de sistemas de drenaje y otras soluciones geotécnicas para
garantizar la estabilidad a largo plazo.

3. Diseño de estructuras de soporte: Las estructuras auxiliares, como túneles y galerías

de desvío de agua, también requieren un análisis detallado de la mecánica de rocas.
Esto asegura que estas estructuras resistan las presiones y deformaciones inducidas
por el flujo de agua y la presión del macizo rocoso.
4. Control de filtraciones: La permeabilidad de las rocas circundantes es un factor crítico
en la construcción de presas. La mecánica de rocas ayuda a diseñar sistemas de sellado
y drenaje para controlar la filtración de agua a través del macizo rocoso.

EJEMPLOS DE REPRESAS

Central Hidroeléctrica de Hoover (Represa Hoover)

La Represa Hoover, ubicada en el río Colorado en la frontera entre los estados de Nevada y
Arizona, es un ejemplo emblemático de una obra hidroeléctrica construida sobre roca. La
construcción de esta presa comenzó en la década de 1930 y se completó en 1936 como parte
del Plan de Obras Públicas de Hoover durante la Gran Depresión.

La Represa Hoover se construyó sobre una base de roca sólida. Las formaciones geológicas de la
zona, incluidas las paredes del Cañón del Colorado, proporcionaron una base natural robusta
para la presa. La roca sólida y estable permitió la construcción de una presa de hormigón masivo
que se eleva a una altura de 726 pies (221 metros) sobre el lecho del río y tiene una longitud de
aproximadamente 1,244 pies (379 metros). 3
La presa se compone principalmente de hormigón, que se vertió sobre la roca base para crear
una estructura resistente que contiene el agua del río Colorado, creando un gran embalse
conocido como el Lago Mead. La energía generada por la Central Hidroeléctrica de Hoover ha
sido vital para el suministro de electricidad en la región y ha contribuido al desarrollo económico.

La construcción de la Represa Hoover sobre la roca implicó varios pasos y técnicas para asegurar
una base sólida y estable. Aquí tienes un resumen de cómo se construyó la represa sobre la roca:
Estudio geológico: Antes de comenzar la construcción, se llevó a cabo un estudio geológico
detallado de la zona para comprender la composición y la estabilidad de la roca subyacente. Esto
fue esencial para determinar la ubicación y el diseño de la represa.

Excavación y preparación del lecho: Se realizaron excavaciones para eliminar cualquier material
no deseado, como sedimentos sueltos o rocas inestables, del lecho del río. El objetivo era
exponer la roca sólida subyacente y crear una superficie plana y uniforme.

Fundación de hormigón: Una vez que se preparó el lecho de roca, se creó una base de hormigón
para la represa. Esto implicó verter una capa de hormigón en la roca sólida para proporcionar
una superficie de apoyo uniforme y resistente. Esta capa de hormigón sirve como base para la
estructura principal de la represa.

Construcción de la represa: La represa en sí se construyó utilizando grandes cantidades de

hormigón vertido en capas sucesivas. La estructura de la represa se elevó sobre la base de 3
hormigón y la roca sólida. El hormigón se colocó utilizando encofrados y maquinaria pesada.

Anclaje a la roca: Para garantizar la estabilidad de la represa, se utilizaron anclajes y pernos de

alta resistencia para fijar la estructura de la represa a la roca subyacente. Estos anclajes ayudan
a distribuir la carga y resistir las fuerzas del agua y la presión del embalse.

Pruebas y monitoreo: Durante y después de la construcción, se realizaron pruebas y monitoreo

continuo para asegurarse de que la represa estuviera asentada de manera adecuada y que no
hubiera problemas de estabilidad. Esto incluyó la medición de asentamientos, la evaluación de
la integridad estructural y la detección de cualquier movimiento inusual.

La Represa Hoover es un ejemplo clásico de una obra hidroeléctrica que se construyó

aprovechando la roca sólida en el lecho del río para proporcionar la base necesaria para la presa
y sus instalaciones asociadas. Esta es solo una de muchas obras hidroeléctricas en todo el mundo
que se han construido sobre roca para garantizar la estabilidad y la seguridad de la
infraestructura.

Represa de la Hidroeléctrica de Grand Coulee

Una obra hidroeléctrica que haya aprovechado la roca in situ es la Represa de la Hidroeléctrica
de Grand Coulee, ubicada en el río Columbia en el estado de Washington, Estados Unidos. Esta
represa es conocida por ser una de las mayores obras de ingeniería de su tipo en el mundo.

La característica distintiva de la Represa de Grand Coulee es que se construyó utilizando

principalmente roca basáltica in situ. El proyecto involucró la construcción de una presa de tierra
gigante que se compone de millones de toneladas de basalto, un tipo de roca volcánica. El
basalto fue excavado y utilizado para construir la presa, lo que permitió ahorrar costos y recursos
al utilizar los materiales disponibles en el sitio. 4
La represa de Grand Coulee se completó en la década de 1940 y ha sido fundamental para la
generación de energía hidroeléctrica en la región, proporcionando electricidad a millones de
hogares y contribuyendo al desarrollo económico de la zona. Esta es un ejemplo destacado de
cómo se puede aprovechar la roca in situ en la construcción de obras hidroeléctricas y otros
proyectos de ingeniería.

La construcción de la Represa de Grand Coulee involucró el uso extensivo de basalto in situ para
construir la presa y otras estructuras relacionadas. Aquí tienes información detallada sobre
cómo se utilizó el basalto en la construcción de la presa:
Excavación: Se realizaron excavaciones masivas en las áreas cercanas a la construcción de la
presa para extraer grandes cantidades de basalto. El basalto se encuentra en forma de capas o
estratos en la región, lo que facilitó su extracción. Se utilizaron equipos de minería y maquinaria
pesada para llevar a cabo esta tarea.

Trituración: Una vez extraído, el basalto se trituró en tamaños más pequeños mediante
trituradoras y maquinaria de procesamiento. Esto convirtió el basalto en grava y piedra triturada
que sería utilizada en la construcción.

Relleno y construcción de la presa: La grava y la piedra triturada de basalto se utilizaron para

rellenar la estructura de la presa. La presa se construyó como una presa de tierra compactada,
y el basalto triturado se utilizó para construir las capas internas de la presa. Este material se
compactó cuidadosamente para crear una estructura sólida y resistente.

Revestimiento de la presa: Para evitar la erosión y el desgaste de la superficie de la presa, se

aplicaron capas de concreto y otros materiales en la parte exterior de la estructura. Sin embargo,
el uso principal del basalto fue en las capas internas de la presa que proporcionaban la
resistencia estructural.

Torres de control de agua y otras estructuras: Además de la presa principal, se utilizaron

bloques de basalto y otros materiales de construcción locales en la construcción de torres de
control de agua, estructuras auxiliares y edificios relacionados con el funcionamiento de la 4
presa.

El uso de basalto in situ en la construcción de la Represa de Grand Coulee fue una estrategia
eficiente, ya que permitió aprovechar los recursos locales disponibles y reducir los costos
asociados con la importación de materiales de construcción desde otras ubicaciones. El basalto,
una roca dura y duradera, proporcionó una base sólida para la presa y otras estructuras
relacionadas, asegurando su estabilidad y resistencia a lo largo de los años.

Conclusiones

• La mecánica de rocas en presas es esencial para garantizar la seguridad y eficiencia de

estas estructuras. Permite a los ingenieros comprender y abordar los desafíos
geotécnicos asociados con la construcción y operación de presas, asegurando que
cumplan con su propósito de manera confiable y duradera.
• La comprensión detallada de las propiedades geomecánicas del macizo rocoso y su
influencia en la estabilidad de la presa es crucial para el diseño y la construcción exitosos
de estas estructuras críticas.
• El conocimiento de la mecánica de rocas ayuda a seleccionar ubicaciones adecuadas
para la construcción de presas, considerando la calidad del macizo rocoso
• Facilita el diseño de cimentaciones seguras y estructuras de soporte, teniendo en cuenta
la resistencia del macizo rocoso y la necesidad de medidas geotécnicas específicas.