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La solidaridad desde el punto de vista

ético
CONCEPTO:

La solidaridad es un valor que nos ayuda a ser conscientes de las necesidades de otros y nos
genera el deseo de sumar en su satisfacción. Como todos los valores, se deben fomentar en el
Colegio, en casa y en la escuela a la vez esta es un concepto que se asienta en el respeto a la
dignidad de las personas. El contacto con la empatía y el cuidado de los otros se establece en los
primeros años a través de los padres en el seno de unas relaciones afectivas saludables. A
medida que crecen, los niños desarrollan esa sensibilidad hacia el otro al relacionarse entre
iguales.

Según el concepto de el filosofo Aristóteles quien expuso la solidaridad presente en un conjunto


de personas con características y deberes comunes. Para él la virtud es un hábito selectivo que
consiste en un término medio relativo a 'nosotros', determinado por la razón y por aquella por
la cual decidiría el hombre prudente.

IMPORTANCIA:

Es una virtud importante que fomenta la cohesión social y promueve una sociedad más justa y
equitativa.

En la salud: Ser solidarios puede tener un impacto positivo en la salud, estudios han demostrado
que las personas que son solidarias tienen niveles más bajos de estrés, ansiedad, depresión,
soledad y aislamiento.

En la vida: La solidaridad también genera una mayor sensación de felicidad general y satisfacción
con la vida, debido a que el cerebro entiende la acción como un premio y hace querer repetir
esa sensación una y otra vez. La ejecución de este valor promueve la cooperación y el trabajo en
equipo, lo que puede llevar a la resolución de problemas y la consecución de objetivos comunes.

En las relaciones sociales: La solidaridad también permite conectar con otras personas y
construir relaciones significativas basadas en el respeto y la confianza mutua. Se han realizado
estudios donde se asevera que los actos de solidaridad tienen una incidencia positiva en la
autoestima de la persona que lo ofrece, pudiendo incrementarse de manera considerable. Vale
resaltar que ser solidarios también refuerza la confianza en las capacidades y contribuye a ver
el mundo desde una perspectiva de felicidad.

Por estas razones, ser solidarios es una actitud que vale la pena cultivar. Hay muchas formas de
ser generosos, sin importar que sean pequeñas o grandes acciones, cualquier beneficio que
puedas brindar para mejorar la vida de los demás es importante.

SOLIDARIDAD COMO ÉTICA

«¿Qué significa ser solidarios? Significa compartir el peso de los demás. Ningún hombre es una
isla. Estamos unidos, incluso cuando no somos conscientes de esta unidad. Cuando nace la
solidaridad se despierta la conciencia… La solidaridad habla, llama, grita, afronta el sacrificio.
Entonces la carga del prójimo se hace a menudo más grande que la nuestra.»
«Cada uno quiere ser llamado por su propio nombre. Se refiere a la dignidad de las personas,
que se fundamenta en la conciencia. La solidaridad más profunda es la solidaridad de las
conciencias.» Solidaridad es compartir hasta lo necesario para vivir…

«El fundamento de la solidaridad es la conciencia, y lo que estimula su nacimiento es el grito del


hombre y la mujer maltratado por otros hombres y mujeres. La solidaridad establece vínculos
singulares entre los hombres: nos unimos para auxiliar a quien necesita ayuda. Yo estoy contigo,
tú estás conmigo, estamos juntos por él. ¿Qué está antes? ¿El nosotros o el por él? Una
comunidad de solidaridad se diferencia de las otras por el hecho de que en ella está antes el por
él y después el nosotros. Ante todo está el herido y su grito…Sólo en este momento nace la
comunidad.» «La solidaridad es acercamiento, es fraternidad con los heridos». «De hecho, ¿no
es acaso deber de la política organizar el ámbito de la vida humana de manera que una persona
no haga padecer a otra? «La conciencia es la voz que grita dentro del hombre. ¿Qué es lo que
reclama hoy la conciencia? Sobre todo que el hombre quiera tener conciencia.

¿Como practicamos la solidaridad?

La solidaridad implica afecto: el apoyo al amigo, la proacción hacia los más desposeídos, a los
que no ven reconocida su categoría de ciudadano o de persona, la empatía hacia las personas
que sufren situaciones injustas... De este modo entendemos que la solidaridad es un deber de
justicia. La solidaridad debe extenderse tanto al nivel privado como al público. Por eso conviene
practicar y predicar la solidaridad, porque la falta de solidaridad revierte en una deficiente vida
pública , podemos practicarla :

• Ayudando a las personas cuando se caen.


• No burlarse de las personas.
• Ayudando con el corazón sin esperar algo a cambio.
• Ayudar a las personas en los tiempos fáciles como en los difíciles.
• No burlarse del dolor ajeno.
• Enseñando a personas que no saben el valor de la solidaridad.
• Tratar de no tener problemas con nadie.
• Aprender a vivir en comunidad.

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