Barquisimeto, 21 de Marzo de 2022

URGENTE
Señores.-
JUEZ RECTOR, COORDINADOR DE LOS TRIBUNALES CIVILES DE LA
CIRCUNSCRIPCION JUDICIAL DEL ESTADO LARA.
Su Despacho.-

Reciba un cordial Saludo Patriótico y Revolucionario de todos los abajo firmantes

que en esta ocasión nos dirjimos a Usted con mucho respeto, a los fines de exponer: Es de
conocimiento que en este Estado Lara se ha venido ejecutando desalojos Arbitrarios y
contrarios a la Ley a varias familias por algunos Tribunales de la Jurisdicción Civil tal
como es el caso del tribunal que preside como Juez la Dra. Dioselis Barreto, tribunal de
Municipio 4to en Ordinario y Ejecutor de Medidas del Estado Lara, que pese a existir el
Decreto Nro. 8.190 de fecha 5 de Mayo de 2011, con Rango, Valor y Fuerza de Ley
Contra el Desalojo y la Desocupación Arbitraria de Viviendas, asimismo la Sentencia de la
Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia del 29 de Octubre de 2020 mediante
la cual suspende la Ejecución de desalojos de vivienda y Locales de uso comercial.
ignorando flagrantemente las normas establecidas en cuanto a la prohibición de desalojos
arbitrarios en Venezuela, en los cuales han dictaminado que el ámbito subjetivo de
aplicación de estas leyes, ampara no solo a los arrendatarios y arrendatarias, comodatarios o
usufructuarios, sino también a los ocupantes o tenedores de bienes inmuebles destinados a
la vivienda principal, inclusive a los adquirientes de nuevas viviendas o en el mercando
secundario, cuando sobre esos inmuebles destinados a vivienda familiar pudieran estar
constituidas garantías reales. Intentando realizar estos procedimientos de entrega material
del inmueble con desalojos forzoso arbitrarios, acompañados con una gran multitud de
funcionarios armados semejante a un motín de guerra, coaccionando de esta manera al
abandono del hogar, llegando incluso a generarse terror en la familia a desalojar,
afectándolos Psicológicamente y moral al grupo familiar integrados por hombre, mujeres,
mujeres embarazadas, niños. Todas estas situaciones implican muchas veces,
hostigamientos, amenazas y ejecuciones de desalojos arbitrarios, violatorios de derechos
humanos y que se encuentran expresamente prohibidos conforme a tratados, convenios
internacionales suscritos por nuestro país, y leyes nacionales.

En otras palabras, se debe establecer que cuando el legislador creó estos instrumento
legales, es porque consideró necesario producir un instrumento que protegiera a los
ocupantes de inmuebles; para que el Estado le garantice la obtención de un inmueble, ya
sea en condiciones temporal o fijo, en el caso de que se dicte una sentencia que disponga
que deben entregar dicho inmueble.

En razón de la vigencia del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley contra el
Desalojo y la Desocupación Arbitraria de Viviendas, publicado en la Gaceta Oficial de la
República Bolivariana de Venezuela N° 39.668 del viernes 6 de mayo de 2011 y a la
Sentencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia del 29 de Octubre de
2020 donde se persigue garantizar a todos los y las habitantes, el respeto y la protección
del hogar, la familia, la seguridad personal, la salud física y mental, que implican el
derecho a no ser desalojados arbitrariamente” y dada la importancia que desde el punto de
vista social representa el dicho cuerpo legal, por constituir nuestro País un Estado
democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de su
ordenamiento jurídico que a partir de la promulgación de la Constitución en 1999, la
República Bolivariana de Venezuela se constituye en un estado social de derecho y de
justicia, que protege como Derecho Fundamental a la familia, como centro embrionario del
progreso social, ya que resulta difícil concebir que pueda producirse un desarrollo
satisfactorio de la vida familiar sin un espacio físico elemental donde pueda desarrollarse y
crecer, es decir el derecho de acceder a una vivienda digna tal como lo propugna nuestra
constitución; así tenemos que por una parte el constituyente protegió a la familia tal como
se desprende del inicio del artículo 75 que a la letra dice: “El Estado protegerá a la familia
como asociación natural de la sociedad, y como el espacio fundamental para el desarrollo
integral de las personas...”. y por la otra, acorde con esa protección, el artículo 82 de
la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, prevé: “Toda persona tiene
derecho a una vivienda adecuada, segura, cómoda, higiénica, con servicios básicos
esenciales que incluyan un hábitat que humanice las relaciones familiares, vecinales y
comunitarias. La satisfacción progresiva de este derecho es obligación compartida entre
los ciudadanos y ciudadanas y el Estado en todos sus ámbitos.

El Estado es el garante del disfrute pleno de todos los derechos fundamentales

inherentes a la existencia humana. Entre ellos, junto al derecho a la vida, la alimentación, la
educación y la salud, coexiste el derecho a una vivienda digna, el cual implica un enorme
esfuerzo de todos los órganos y entes del Estado, en función de la complejidad social y
económica de la solución de los problemas habitacionales.

Es por ello que aquí los solicitantes como comunidad organizada, a través de
Consejos comunales, UBCH, AVV, C.T.U, LA COMUNA, le solicitamos imperiosamente
de sus buenos oficios como Rector (a) intervenga para que estos desalojos Arbitrarios no
sigan sucediendo en nuestro Estado ya que violentan el respeto y la protección del hogar,
la familia, la seguridad personal, la salud física y mental, que implican el derecho a no ser
desalojados arbitrariamente en fin de evitar que la lógica perversa del capitalismo siga
enviando a la calle, sin alternativas de vivienda digna ni refugio alguno, a personas,
familias y comunidades enteras. Es todo.