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Cada vez más es mayor el número de personas en el mundo que están usando
Teléfonos móviles. En 1990, había 11 millones de teléfonos celulares en todo el
Mundo, mientras en 1999 este número había ascendido a algo más de 400
Millones, cuando el número de computadoras personales era aproximadamente
De 180 millones. Sólo durante el año de 1998 el número de usuarios móviles Que
se adicionaron al parque existente, fue de 100 millones y para fines del dos Mil
esta cifra se aproximaba a los 500 millones de celulares a nivel mundial. De Seguir
esta tendencia, según la Unidad de Inteligencia de la revista The Economist, para
el año 2004 se espera que el número de celulares se acerque A los 1.000
millones, excediendo el número de teléfonos fijos. Este incremento a estado
aparejado a una evolución de la tecnología de forma Escalonada o por etapas.
Para separar una etapa de la otra, a la telefonía Celular se ha categorizado por
generaciones, las cuales analizaremos a Continuación:
La primera generación (1G)
Como todas las adicciones, la adicción al móvil y a las redes sociales genera una
Serie de consecuencias que pueden ser psicológicas, pero también Físicas.
Algunas de las más habituales son las siguientes:
Dependencia del teléfono, estados de ansiedad o nerviosismo cuando No se
puede hacer uso del mismo y comportamiento compulsivo que Implica comprobar
a toda hora nuevas notificaciones o actualizaciones en Redes.
Estados
El uso excesivo del celular puede tener consecuencias negativas para la salud,
tanto física como mental. A continuación, se enumeran algunos de los riesgos más
comunes:
Problemas físicos
Fatiga visual: La luz azul emitida por las pantallas de los celulares puede causar
fatiga visual, dolor de cabeza, ojos secos e irritación.
Problemas de cuello y espalda: La postura forzada que se adopta al usar el celular
puede provocar dolor de cuello, hombros y espalda.
Trastorno del sueño: La luz azul también puede interferir con el sueño, lo que
puede provocar insomnio, somnolencia diurna y fatiga.
Aumento de peso: El uso del celular puede reducir la actividad física y aumentar el
riesgo de obesidad.
Problemas de audición: La exposición prolongada a los sonidos fuertes de las
alarmas y notificaciones del celular puede provocar problemas de audición.
Problemas mentales
Adicción: El uso excesivo del celular puede provocar adicción, lo que puede
afectar las relaciones personales, el trabajo y la escuela.
Ansiedad y depresión: El uso excesivo del celular puede aumentar el riesgo de
ansiedad y depresión.
Problemas de concentración: El uso constante del celular puede dificultar la
concentración en otras actividades.
Baja autoestima: El uso excesivo de las redes sociales puede provocar baja
autoestima, ya que las personas se comparan con los demás y creen que no son
lo suficientemente buenas.
Establece límites de tiempo: Decide cuánto tiempo quieres pasar al día usando el
celular y apégate a ese límite.
Apaga las notificaciones: Las notificaciones pueden distraerte y hacerte usar el
celular más de lo necesario.
Deja el celular en otra habitación: Cuando estés en casa, deja el celular en otra
habitación para que no lo tengas a la vista.
Encuentra otras actividades: Busca actividades que te gusten y que no requieran
el uso del celular.