Manuel Belgrano fue un destacado abogado, economista y político argentino que desempeñó

un papel importante en el Consulado de Buenos Aires. El Consulado de Comercio fue una

institución encargada de regular y promover el comercio en la región, y Belgrano se
desempeñó como su secretario. Durante su tiempo en el Consulado, Belgrano tuvo varias
iniciativas relacionadas con la reunión y transmisión de información económica, así como la
difusión de conocimientos de economía política y ciencias exactas

Se puede decir que era un defensor de la industrialización y el desarrollo económico de

Argentina. Durante su tiempo en el Consulado, Belgrano abogó por la promoción de la
industria nacional y la protección de los productos locales frente a la competencia extranjera.
Esta postura se alinea con las ideas de la época, que buscaban fomentar el crecimiento
económico a través de la industrialización y la protección de la producción nacional.

Agricultura

Según Belgrano, la agricultura es el verdadero destino del hombre y es la fuente absoluta e

independiente de las riquezas. Todo depende y resulta del cultivo de las tierras; sin él no hay
materias primeras para las artes, por consiguiente, la industria no tiene cómo ejercitarse, no
pueden proporcionar materias para que el comercio se ejecute.

Manuel Belgrano propone varias medidas para fomentar la agricultura y hacer que prospere,
entre ellas destacan:

Atender primeramente a la agricultura como fuente absoluta e independiente de las riquezas,

estudiar la agricultura y aplicar reglas para mejorar la producción, proporcionar los medios
necesarios para el cultivo de la tierra, unir la práctica con la teoría para mejorar el cultivo de las
tierras, y difundir los conocimientos y experiencias de los antiguos y modernos en la agricultura
a través de libros y otros medios.

La institución de premios fue otro de los medios propuestos por Belgrano para impulsar los
adelantos científicos y técnicos realizables y útiles. A partir de 1798 se destina una fuerte suma
a ser repartida entre quienes introdujeran nuevos cultivos, forestaran, solucionaran la escasez
de aguadas en la campaña bonaerense, combatieran los perros cimarrones o la polilla de los
cueros, o levantasen censo de alguna provincia. Ninguno de estos problemas encontró
iniciativas dignas de premiarse

Por lo tanto, Belgrano considera que la agricultura es el manantial de los verdaderos bienes y
que es forzoso atender primeramente a la agricultura como que es el manantial de los
verdaderos bienes, de las riquezas que tienen un precio real, y que sea susceptible y hacerlo
que prospere en todas las provincias que sean capaces de alguno de sus ramos, pues toda
prosperidad que no esté fundada en la agricultura es precaria.

Industria

Sobre la industria, consideraba que es fundamental para el desarrollo y la prosperidad de un

país. La industria no solo genera empleo y riqueza, sino que también impulsa la innovación, la
tecnología y el progreso en general.

La industria permite la transformación de materias primas en productos elaborados, lo que

agrega valor y aumenta la competitividad de un país en el mercado global. Además, fomenta la
diversificación económica y reduce la dependencia de un solo sector, lo que hace a una nación
más resiliente ante crisis y cambios económicos.
Es importante promover y apoyar la industria local, ya que esto contribuye a fortalecer la
economía interna, generar empleo y reducir la dependencia de importaciones. Además, la
industria puede ser un motor para el desarrollo de sectores relacionados, como la investigación
y el desarrollo, la educación y la infraestructura.

Comercio

El comercio es también relevante para el desarrollo de un país. El comercio no solo impulsa el

intercambio de bienes y servicios, sino que también fomenta la creación de empleo, la
generación de riqueza y el crecimiento económico.

El comercio internacional permite a los países aprovechar sus ventajas comparativas y

especializarse en la producción de aquellos bienes y servicios en los que son más eficientes.
Esto no solo beneficia a los países exportadores, sino que también brinda acceso a una mayor
variedad de productos y tecnologías a los países importadores.

Además, el comercio promueve la competencia, lo que estimula la innovación y la mejora

continua de los productos y servicios. También contribuye a la difusión de conocimientos y
tecnologías entre países, lo que puede impulsar el desarrollo y el progreso en diversas áreas.

Es necesario promover un comercio justo y equitativo, que respete los derechos laborales, el
medio ambiente y la diversidad cultural. Además, establecer regulaciones y acuerdos
comerciales que promuevan la transparencia, la igualdad de condiciones y la protección de los
consumidores.

Estadística

Belgrano consideraba que tener un conocimiento exacto de la riqueza y fuerza de los Estados
era fundamental para proceder con acierto en todas las disposiciones que se dirijan al orden
económico a efecto de fomentar la agricultura, animar la industria y proteger el comercio,
como que son los arcos torales de la felicidad pública. Creía que la ciencia estadística era
importante para conseguir que los resultados sean ciertos.

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