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ARTÍCULO 20 CONSTITUCIO NAL

El proceso penal será acusatorio y oral. Se regirá por los principios de publicidad, contradicción,
concentración, continuidad e inmediación.
1) Acusatorio: Hay una parte que acusa (Ministerio Público) la cual tiene la carga de la prueba, y otra
que defiende
2) Oral: Existe un sistema de audiencias orales para resolver los conflictos que se susciten en materia
penal. No es un sistema totalmente oral, sino que es preponderantemente oral, ya que existen
algunas actuaciones por escrito
Principios Rectores del Proceso Penal
1. Publicidad – Abierto a toda la sociedad en general, es decir, todos pueden entrar a las audiencias.
Sirve para transparentar el sistema. (Artículo 5 CNPP). Hay excepciones por cuestiones de
seguridad, menores, víctimas de delitos sexuales.
2. Contradicción – Conocer lo que presenta mi contraparte y poder contradecir, refutar y que el juez
tome una decisión de mejor manera. Da igualdad procesal (Artículo 6 CNPP)
3. Concentración – Resolver el mayor número de peticiones y resolverlas en la misma audiencia.
(Artículo 8 CNPP)
4. Continuidad – Las audiencias serán continuas, sucesivas y secuenciales. (Artículo 7 CNPP)
5. Inmediación – El juez debe estar presente en todas las audiencias y no podrá delegar dicha tarea,
así como es necesaria la presencia de las partes. (Artículo 9 CNPP)
APARTADO A: DE LOS PRINCIPIOS GENERALES:
I. El proceso penal tendrá por objeto el esclarecimiento de los hechos, proteger al inocente, procurar
que el culpable no quede impune y que los daños causados por el delito se reparen;
A. Esclarecimiento de los hechos: Derecho de la víctima al acceso a la verdad de los hechos.
B. Proteger al Inocente: Podemos hablar del Principio de Presunción de Inocencia, ya que existe una
posibilidad de que la persona que esté siendo procesada no sea la culpable del delito; y por lotanto
se presumirá que todos los procesados son inocentes hasta que una sentencia condenatoria
dictamine lo contrario.
Para esto, es necesario que se cumplan con las 3 vertientes de dicho principio:
1) Trato Procesal
a) Intraprocesal: Trato en las audiencias de las partes hacia el imputado
b) Extraprocesal: No sobreexposición de la apariencias y datos del imputado vinculado con la
comisión de un delito por parte de los medios
2) Regla Probatoria - Condiciones de las pruebas para que lleven a que el juez condene
a) Aportadas por el Ministerio Público
b) Pruebas de cargo (directas o indirectas)
c) Pruebas Lícitas
3) Estándar Probatorio: Qué cantidad de prueba es suficiente para condenar. Más allá de toda
duda razonable
C. Procurar que el culpable no quede impune: En caso de que existan todos los elementos
necesarios para satisfacer el estándar probatorio, y que no existe duda razonable de que cierta
persona cometió el delito; el juez tendrá que condenarlo y que así no se dé lugar a la impunidad
D. Reparación del Daño: Derecho fundamental de la víctima, teniendo que ser una reparación
integral (fracción II, artículo 12 de la LGV), comprendiendo las medidas de restitución,
rehabilitación, compensación, satisfacción y no repetición.

II. Toda audiencia se desarrollará en presencia del juez, sin que pueda delegar en ninguna persona el
desahogo y la valoración de las pruebas, la cual deberá realizarse de manera libre y lógica;
En esta fracción podemos encontrar una de las dos vertientes del Debido Proceso; la de
INMEDIACIÓN.
La inmediación requiere la presencia del juez en todas las audiencias que se realicen y en
relación con el desahogo probatorio. No podrá delegar esta tarea a nadie, ya que este tiene que
poder observar/ver el desahogo de la prueba para posteriormente darle valor conforme a su
criterio pero siguiendo la lógica.
III. Para los efectos de la sentencia sólo se considerarán como prueba aquellas que hayan sido
desahogadas en la audiencia de juicio. La ley establecerá las excepciones y los requisitos para admitir
en juicio la prueba anticipada, que por su naturaleza requiera desahogo previo;
• Carpeta de Investigación: Es un registro donde el Ministerio Público, de manera obligatoria,
reúne todos los actos de investigación que se realicen.
• Acto de Investigación: Es todo registro incorporado a la Carpeta de Investigación que sirve
de sustento para aportar datos de prueba (peritajes, entrevistas, reportes
(Artículo 261 CNPP)
• Dato de Prueba: Referencia al contenido de un determinado medio de convicción no
desahogado ante el Órgano Jurisdicción, que se advierta idóneo y pertinente para establecer
la existencia de un delito y la probable participación del imputado. Referencia que hace el
litigante a un registro de actuación
• Medio de Prueba: Toda fuente de información que permita recrear los hechos (testigos)

Después del Auto de Apertura a Juicio Oral


• Prueba: Todo conocimiento cierto o probable sobre un hecho, que ingresa al proceso como
medio de prueba en una audiencia y desahogada ante el juez
• Excepciones: Prueba Anticipada (Artículo 304 CNPP): Una prueba anticipada es aquella que
se desahoga antes de juicio oral, la cual tiene que cumplir ciertos requisitos para proceder.
Además, es una de las excepciones del principio de inmediación, al no desahogarse frente al
Tribunal de Enjuiciamiento
a) Desahogada ante el Juez de Control
b) Solicitud de las partes indicando las razones por las que tiene que anticiparse la prueba; ya sea
porque algún testigo no podrá concurrir al juicio, vive en el extranjero, probabilidad de muerte, mal
estado de salud o incapacidad física o mental
c) Motivos fundados y de extrema necesidad y para evitar la pérdida o alteración del medio probatorio
d) En audiencia y atendiendo las reglas para la práctica de pruebas en el juicio
IV. El juicio se celebrará ante un juez que no haya conocido del caso previamente. La presentación de
los argumentos y los elementos probatorios se desarrollará de manera pública, contradictoria y oral;
Artículo 350 CNPP. Los jueces que hayan intervenido en alguna etapa del procedimiento anterior a
la audiencia de juicio no podrán fungir como Tribunal de Enjuiciamiento.
En este artículo se establece que las partes pueden refutar los argumentos y pruebas que su
contraparte esté formulando / ofreciendo, con ayuda de otros argumentos y en presencia de un juez
que no haya conocido el caso previamente; esto último con la finalidad de garantizar la imparcialidad
por parte del Órgano Jurisdiccional, ya que al no conocer nada del asunto, más que lo que está incluido
en el auto de apertura a juicio oral, no tiene prejuicio alguno con ninguna de las partes, y por lo tanto,
la resolución que dicte será más objetiva.
V. La carga de la prueba para demostrar la culpabilidad corresponde a la parte acusadora, conforme
lo establezca el tipo penal. Las partes tendrán igualdad procesal para sostener la acusación o la
defensa, respectivamente;
• Carga de la prueba (Artículo 130 CNPP) - La carga de la prueba para demostrar la culpabilidad
corresponde a la parte acusadora, conforme lo establezca el tipo penal.
• Igualdad de las Partes - Demanda una razonable igualdad de posibilidades en el ejercicio de
cada una de sus pretensiones, de modo que no se genere una posición sustancialmente
desventajosa para una de ellas frente a la otra
VI. Ningún juzgador podrá tratar asuntos que estén sujetos a proceso con cualquiera de las partes sin
que esté presente la otra, respetando en todo momento el principio de contradicción, salvo las
excepciones que establece esta Constitución;
El juez debe ser un árbitro imparcial que debe resolver la controversia con base en los alegatos y
pruebas que aporten cada una de las partes, atendiendo al:
• Principio de inmediación - Toda audiencia deberá desarrollarse en presencia del juez, sin que
pueda delegar en ninguna persona el desahogo y la valoración de las pruebas.
Debe respetarse en todo momento el:

• Principio de contradicción - Las partes podrán conocer, controvertir o confrontar los medios
de prueba, así como oponerse a las peticiones y alegatos de la otra parte. Es lo que les permite
a las partes debatir cualquier medio de prueba durante el proceso.

VII. Una vez iniciado el proceso penal, siempre y cuando no exista oposición del inculpado, se podrá
decretar su terminación anticipada en los supuestos y bajo las modalidades que determine la ley. Si el
imputado reconoce ante la autoridad judicial, voluntariamente y con conocimiento de las
consecuencias, su participación en el delito y existen medios de convicción suficientes para corroborar
la imputación, el juez citará a audiencia de sentencia. La ley establecerá los beneficios que se podrán
otorgar al inculpado cuando acepte su responsabilidad;

FORMAS DE TERMINACIÓN ANTICIPADA DEL PROCESO: El proceso abreviado: El Ministerio


Público debe solicitar el procedimiento después de que se dicte el auto de vinculación a proceso y
hasta antes de la emisión del auto de apertura a juicio oral; se deberá formular la acusación y exponer
los datos de prueba que la sustentan. La víctima no debe presentar ninguna oposición (solo será
procedente cuando se acredite ante el Juez de Control que no se encuentra debidamente garantizada
la reparación del daño.
Esta acusación debe contener:
1. La enunciación de los hechos que se atribuyen al acusado;
2. Su clasificación jurídica;
3. El grado de intervención; y,
4. Las penas y el monto de reparación del daño.
El imputado debe:
1. Reconocer que está informado de su derecho a un juicio oral y de los alcances del procedimiento
abreviado;
2. Renunciar al juicio oral y consentir la aplicación del procedimiento abreviado;
3. Admitir su responsabilidad por el delito que se le imputa; y,
4. Debe aceptar ser sentenciado con base en los medios de convicción que exponga el Ministerio
Público al formular la acusación.
Cuando el delito por el cual se lleva a cabo el procedimiento abreviado es sancionado con pena de
prisión que no exceda de los 5 años, el Ministerio Público podrá solicitar la reducción de:
a) Hasta una mitad de la pena mínima si es delito doloso y,
b) Hasta dos terceras partes de la pena mínima si es delito culposo, de la pena de prisión que le
correspondiere al delito por el cual se le acusa.
c) En cualquier caso el Ministerio Público podrá solicitar la reducción de hasta un tercio de la
mínima en los casos de delitos dolosos y hasta en una mitad de la mínima en delitos culposos,
de la pena de prisión.
Medios de convicción - Son los datos de prueba que se desprendan de los registros contenidos en
la carpeta de investigación.
VII. El juez sólo condenará cuando exista convicción de la culpabilidad del procesado;
El juez sólo condenará porque su decisión va más allá de toda duda razonable y se conste que el
procesado ha sido sujeto a proceso conforme a los principios de presunción de inocencia y debido
proceso. Toda persona imputada tiene derecho a que se presuma su inocencia, mientras no se declare
su responsabilidad mediante sentencia condenatoria ejecutoriada en definitiva emitida por el juez de
la causa en los términos y plazos que dicten las leyes. Si las pruebas presentadas con él se consideran
insuficientes, entonces se dictará sentencia absolutoria.
Existe convicción de la culpabilidad del procesado cuando las pruebas y evidencias que demuestran
su responsabilidad no dejan lugar a duda y son definitivas.
IX. Cualquier prueba obtenida con violación de derechos fundamentales será nula, y
Los datos y las pruebas deben ser obtenidas por medios lícitos y no tendrá valor alguno la prueba
obtenida mediante torturas, amenazas o violación a derechos fundamentales, pues son pruebas ilícitas
que están viciadas y la exclusión de esta prueba ilícita supone la imposibilidad de admitirla y valorarla.
La licitud de la prueba es un requisito esencial de la actividad probatoria, pues sólo son admisibles
como medios de prueba aquellos cuya obtención se haya producido conforme a las reglas de la
legislación constitucional, procesal y de los convenios internacionales en materia de derechos
humanos.
La posición preferente que ocupan los derechos fundamentales en el ordenamiento exige rechazar
toda prueba obtenida con la lesión de los mismos, garantizando así el debido proceso.
Alusiones en el derecho internacional a la regla de exclusión:
• Convención Americana sobre Derechos Humanos: La confesión del inculpado solamente es
válida si es hecha sin coacción de ninguna naturaleza.
• Convención Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura: Ninguna declaración que
se compruebe haber sido obtenida mediante tortura podrá ser admitida como medio de prueba
en un proceso (Art. 10)
• Convención contra la Tortura y otros Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes: Todo
Estado parte se asegurará de que ninguna declaración que se demuestre que ha sido hecha
como resultado de tortura pueda ser invocada como prueba en ningún procedimiento (Art. 15)

X. Los principios previstos en este artículo, se observarán también en las audiencias preliminares al
juicio.
• Los principios no solo se llevarán a cabo en la etapa de juicio, aplican para todo el proceso
penal.
• Audiencia preliminar - Son aquellas en las que resuelven las actuaciones, peticiones y
decisiones que no deben ordenarse, resolverse o adoptarse en audiencia de formulación de
acusación, preparatoria o juicio oral.
APARTADO B: DE LOS DERECHOS DE LA PERSONA IMPUTADA

• ¿QUÉ ES UNA PERSONA IMPUTADA? Según la definición del Gobierno de México es


imputado es la persona que presuntamente participó en un delito y en contra de quien el
Ministerio Público realiza una acusación ante el juez, por lo que tiene derecho a no ser acusada
por un delito, hasta que la justicia así lo determine.
• ¿POR QUÉ SURGIERON ESTOS DERECHOS? El trato inhumano al que durante mucho
tiempo fueron sometidos quienes eran acusados de la comisión de un delito, especialmente los
que eran privados de su libertad, ha ocasionado la quizá exagerada protección legal de la cual
actualmente gozan. En contraposición, las víctimas del delito han sido legalmente olvidadas, el
sufrimiento que es padecido por ellas se suma a la falta de atención y trato arbitrario al que son
expuestas por los servidores públicos encargados de la persecución de quienes cometen dichas
conductas delictivas, lo cual además a provocado que dichas víctimas hayan perdido la
confianza en instituciones tales como el Ministerio Público ocasionando temor a denunciar los
delitos.
• Para Acción Nacional la dignidad de la persona humana es parte fundamental para el
establecimiento de un auténtico estado de derecho, enarbolado en el reconocimiento de los
derechos fundamentales de la persona humana y gestor del bien común.

I. A que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia


emitida por el juez de la causa

Esta fracción hace referencia al principio de presunción de inocencia, que como se establece
en la tesis aislada de la Primera sala con número de registro 2018687:
El principio de presunción de inocencia supone que no es posible formar una convicción sobre
la culpabilidad de una persona antes de que se hayan desahogado todas las pruebas
presentadas por ambas partes y de que exista posibilidad para refutarlas en igualdad de
condiciones.

II. A declarar o a guardar silencio. Desde el momento de su detención se le harán saber los motivos
de la misma y su derecho a guardar silencio, el cual no podrá ser utilizado en su perjuicio. Queda
prohibida y será sancionada por la ley penal, toda incomunicación, intimidación o tortura. La
confesión rendida sin la asistencia del defensor carecerá de todo valor probatorio;

Se refiere a los derechos del imputado cuando es detenido, como su derecho a guardar silencio,
por lo que, si decide no declarar, no se puede usar en su perjuicio, porque como mencionamos
anteriormente, este sistema se basa en el principio de presunción de inocencia.
En la jurisprudencia de la Primera Sala de la Suprema corte de Justicia de la Nación, con número
de registro: 2021975, respecto a este derecho del inculpado establece:

III. A que se le informe, tanto en el momento de su detención como en su comparecencia ante el


Ministerio Público o el juez, los hechos que se le imputan y los derechos que le asisten.
Tratándose de delincuencia organizada, la autoridad judicial podrá autorizar que se mantenga
en reserva el nombre y datos del acusador; La ley establecerá beneficios a favor del inculpado,
procesado o sentenciado que preste ayuda eficaz para la investigación y persecución de delitos
en materia de delincuencia organizada;
La ley establecerá beneficios a favor del inculpado, procesado o sentenciado que preste ayuda
eficaz para la investigación y persecución de delitos en materia de delincuencia organizada.
Por lo que el inculpado tiene derecho a saber el motivo por el que está privado de la libertad y
la autoridad que lo ordenó, los hechos que se le imputan y los derechos con los que cuenta.

IV. Se le recibirán los testigos y demás pruebas pertinentes que ofrezca, concediéndosele el tiempo
que la ley estime necesario al efecto y auxiliándosele para obtener la comparecencia de las
personas cuyo testimonio solicite, en los términos que señale la ley;

En esta fracción se nos señala que otro derecho de la persona imputada es que se le reciban
las pruebas que ofrezca, pero a esta oración se le acompaña la palabra “pertinente”, por lo que
podemos preguntarnos ¿a qué se refiere la prueba pertinente?

En materia probatoria rige el principio de idoneidad de la prueba, conforme al cual no basta que
el oferente cumpla con los requisitos legales para su ofrecimiento, sino que, además, la prueba
ofrecida debe ser congruente con la materia del debate e idónea para los fines pretendidos.

La prueba pertinente es idónea, y con esta idoneidad nos referimos a la prueba que tiene una
relación lógica o jurídica entre el hecho y el medio de prueba, en este orden de ideas, es
entendible que entonces la prueba que no guarda relación alguna con los hechos materia de la
acusación.
APARTADO C: DE LOS DERECHOS DE LA VÍCTIMA O DEL OFENDIDO
Recordemos que, en su rubro, este artículo se refiere a la constitución, de manera general, del sistema
penal acusatorio y oral. Como previamente se plantearon los principios generales de éste, para
después pasar con los derechos que se enuncian para las partes más importantes en el proceso: el
inculpado y la víctima, sin hacer una distinción jerárquica.
Por lo que respecta al apartado C, se abordan las garantías rectoras de las víctimas dentro de un
proceso puramente penal. Como se comentaba anteriormente, hablamos entonces de un parteaguas
en el tema de víctimas que contrasta de manera importante del sistema anterior inquisitivo, ello porque
se le da un lugar como parte dentro del proceso, cosa que antes se veía mermado entre la pugna del
ministerio público y el imputado, dejando la participación de la víctima como el pleno allanamiento para
con el órgano acusador, siendo incluso éste el asesor jurídico de la víctima y/o ofendido en cuestión.
Esta nueva forma de intervención de la víctima tiene matices importantes, pues con la reforma al
sistema penal en 2008 cambia tanto en la esfera de lo constitucional como de lo legal, añadiendo a
ésta última en el Código adjetivo de reciente creación en la época previsiones sobre las víctimas, así
como una Ley especial en la materia que a continuación se profundizará con las fracciones en cuestión.
Primero se requiere saber qué se entiende por víctima, y la Ley General de Víctimas en su artículo
sexto, fracción XIX nos dice qué es una víctima:
Víctima: Persona física que directa o indirectamente ha sufrido daño o el menoscabo de sus derechos
producto de una violación de derechos humanos o de la comisión de un delito;
Siendo también, a palabras del Código penal adjetivo, el pasivo que resiente la acción delictuosa,
siendo entonces el ofendido el afectado materialmente en el perjuicio de sus bienes.
Así bien, en su artículo cuarto, nos hace el distingo de cuatro posibles víctimas de la comisión de un
delito:
• Directas: Quienes hayan sufrido un daño o puesta en peligro de sus bienes o integridad por la
comisión de un delito;
• Indirectas; Las personas relacionadas a la víctima directa que se pueden ver afectadas por el
daño o puesta en peligro de la víctima directa;
• Potenciales o; Personas físicas que se ven afectadas por frustrar un delito o brindar ayuda a la
víctima directa;
• Colectivas: Comunidades que se han visto afectadas en un bien colectivo en común.
Recordemos que la aplicación de estas consideraciones, tanto constitucionales como legales, resultan
de observancia general para todas las autoridades que puedan llegar a tener un trato con la víctima,
pues lo que se busca es reconocer la dignidad que como persona tiene, a pesar de la situación ya de
por sí de vulnerabilidad en la que la pone la calidad de víctima.
Las fracciones de las que nos tocará conocer serán:
I. Recibir asesoría jurídica; ser informado de los derechos que en su favor establece la Constitución y,
cuando lo solicite, ser informado del desarrollo del procedimiento penal;
En este tenor, las personas que se encuentren en los supuestos anteriores tendrán siempre un
acompañamiento de un asesor jurídico perito en derecho acreditable, esto durante el proceso en el que
se vean involucrados, debiendo proveer el Estado de uno público, o bien, accediendo a uno particular
que después podrá ser exigido el cobro de sus honorarios al sentenciado como concepto de
la reparación del daño. Este asesor debe realizar una labor técnica y correcta con la víctima pues es
derecho de esta, pudiendo la autoridad jurisdiccional conocer de oficio sobre la deficiencia de este
ejercicio. Asimismo, en su calidad de legitimación en su esfera procesal, el asesor debe acudir a los
recursos que sean necesarios para procurar los demás derechos de la víctima y que le sean
convenientes, mismos que prevé la ley en los casos respectivos.
Remitiéndose a la legislación, el Código Nacional de Procedimientos Penales enfatiza esta cuestión
de manera realmente breve:
“Artículo 17. Derecho a una defensa y asesoría jurídica adecuada e inmediata:
La defensa es un derecho fundamental e irrenunciable que asiste a todo imputado, no obstante,
deberá ejercerlo siempre con la asistencia de su Defensor o a través de éste. El Defensor
deberá ser licenciado en derecho o abogado titulado, con cédula profesional.
Se entenderá por una defensa técnica, la que debe realizar el Defensor particular que el
imputado elija libremente o el Defensor público que le corresponda, para que le asista desde su
detención y a lo largo de todo el procedimiento, sin perjuicio de los actos de defensa material
que el propio imputado pueda llevar a cabo.
La víctima u ofendido tendrá derecho a contar con un Asesor jurídico gratuito en cualquier etapa
del procedimiento, en los términos de la legislación aplicable.
Corresponde al Órgano jurisdiccional velar sin preferencias ni desigualdades por la defensa
adecuada y técnica del imputado.”
Como podemos percatarnos, a priori es una mención enunciativa, a la que se deberán ajustar a las
consideraciones que el ejercicio y la interpretación nos dan.
Por ejemplo, hablamos de una “igualdad de condiciones –defensor y asesor–, esto es, que al existir
igualdad de armas entre la defensa del imputado y la asesoría jurídica de la víctima”, en el tenor de la
tesis aislada “DERECHO HUMANO DE LA VÍCTIMA U OFENDIDO DEL DELITO A UNA ASESORÍA
JURÍDICA ADECUADA EN EL SISTEMA PENAL ACUSATORIO. FORMA EN QUE EL JUEZ DE
CONTROL GARANTIZA SU VIGENCIA CONFORME A LAS DIRECTRICES ESTABLECIDAS POR
LA PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN EN EL AMPARO
DIRECTO EN REVISIÓN 1183/2018.”, de registro digital 2024697, donde podemos ver la
materialización de una igualdad de condiciones entre las partes en litigio.
A pesar de esta representación procesal, puede la víctima pronunciarse procesalmente en la causa
sin la compañía de un asesor que sea el promovente, como una cuestión de adhesión a los recursos
de apelación o demandas de amparo, en su calidad de víctimas indirectas, por ejemplo.
Asimismo, es obligación del asesor atender y prever a los plazos y términos que legal y
jurisdiccionalmente se dispongan, esto en tanto se debe evitar perjudicar a la víctima por una mala
práctica litigiosa.
Que la víctima u ofendido conozca sobre sus derechos refiere a las potestades que el Estado brinda
a las que se puede acceder durante y después del proceso penal. De ello se encargan los operadores
jurídicos como su asesor o el mismo juez que en cualquier momento conozca de la causa. Estos
derechos son enunciados en las fracciones posteriores, en el CNPP en su artículo 109 y en el cuerpo
de la LGV, de manera específica. Hay que recordar que se deben aplicar los propios para el proceso
penal pues la LGV también refiere a violaciones de derechos humanos materia de distintas ramas del
derecho.
Conocer la situación jurídica de su procedimiento penal refiere también una obligación de los tribunales
y juzgados, así como del asesor y fiscal, en tanto que la víctima lo requiera. En este tenor, se
desarrollan sus derechos a la verdad, también. Pude materializarse en la solicitud de constancias,
expedientes o carpetas donde se precisen las actuaciones que en su favor o perjuicio se estén
realizando. De igual manera, en caso de sufrir una intromisión en su esfera jurídica a manera de
diligencias o peritajes, se le deberá mencionar por qué se llevan a cabo y para qué se requerirán en el
proceso. Esto es un derecho subjetivo de la víctima pues está latente esperando a que se quiera
solicitar y cuando se solicite, resulta imperativo para los sujetos obligados (también a las autoridades
en lo general) lo que se solicite. Esto se hará con el debido cuidado que cada caso requiera pues se
debe cuidar la debida secrecía para no entorpecer una investigación que puede estarse llevando a
cabo, pudiendo la víctima estar incurriendo de manera imprudencial en actos que concluyan en lo
anteriormente mencionado.
II. Coadyuvar con el Ministerio Público; a que se le reciban todos los datos o elementos de prueba con
los que cuente, tanto en la investigación como en el proceso, a que se desahoguen las diligencias
correspondientes, y a intervenir en el juicio e interponer los recursos en los términos que prevea la ley.
Cuando el Ministerio Público considere que no es necesario el desahogo de la diligencia, deberá fundar
y motivar su negativa;
Lo que respecta al primer enunciado, permite la intervención de la víctima en la interposición de los
recursos que a intereses del MP y su investigación puedan convenir, pues el asesor jurídico versará
por los elementos particulares de la atención propia para con la víctima, procurando los derechos que
sean distintos a los que el MP pueda facilitar. Recordemos que ya no se trata de una dependencia al
órgano que acusa pues la víctima toma protagonismo por las cuestiones que interesen en el caso.
Aunque lo anterior no es limitativo pues pude entonces adherirse a las pretensiones del MP, y esta
autoridad deberá concedérselos, pudiendo la víctima coadyuvar con el MP para lograr efectos que a
ambos convengan, aunque esta coadyuvancia no es obligada para la víctima, pero si quiere hacerlo,
no se le tiene que ver limitada. Asimismo, la víctima en carácter de promovente debe mantener su
postura en la pretensión que así quiera motivar. Así bien, pueden hacer aquello que esté previsto en
el artículo 338 del CNPP, como persona involucrada en las pretensiones de coadyuvar. También,
pudiendo impugnar las decisiones que versen en la perjudicarían de las pretensiones propias de la
víctima en su carácter de coadyuvante.
Como anteriormente se mencionaba, deben hacerse todas las diligencias, peritajes o cuestiones
necesarias para la obtención de pruebas, datos o lo necesario para el desarrollo del proceso, con las
previsiones legales. Así bien, de no optar por realizar diligencias que se estimen necesarias para
recabar pruebas, al ser una autoridad, debe motivar su negativa para incumplir con una obligación que
naturalmente debe cumplir, siendo el obligado a ejercitar acción penal.
III. Recibir, desde la comisión del delito, atención médica y psicológica de urgencia;
Ello refiere a una primicia en la atención para con los requerimientos de la víctima respecto de su salud
en cualquier sentido, activando un mecanismo de máxima protección a la víctima en el entendido del
grado de vulneración en el que se puede estar. Precisiones así determina la Ley General de Víctimas,
atendiendo a la dignificación de la persona. También, los tratamientos que deriven de la canalización
de los procedimientos que pueden llevarse a cabo posterior al proceso. Propiamente, en la LGV, se
prevé un capítulo para los temas de atención para la víctima: el Capítulo II, DE LOS DERECHOS DE
AYUDA, ASISTENCIA Y ATENCIÓN. Hay que recordar la consideración del análisis casuístico de la
situación de la víctima, para poder determinar qué es lo más conveniente para la preservación de las
cuestiones anteriormente mencionadas. Así bien, el Estado se apoyará en las delegaciones que dé
para la atención a víctimas, como la Comisión Ejecutiva para la federación y lo propio en las entidades
federativas.
La atención que se entienda pues de urgencia, deberá tener una continuidad atendiendo a los
requerimientos de la persona en calidad de víctima que así necesite. Asimismo, deberán considerarse
las cuestiones de modo oneroso a cuenta de la víctima para motivos de la reparación integral del daño,
como posteriormente se mencionará.
IV. “Que se le repare el daño. En los casos en que sea procedente, el Ministerio Público estará obligado
a solicitar la reparación del daño, sin menoscabo de que la víctima u ofendido lo pueda solicitar
directamente, y el juzgador no podrá absolver al sentenciado de dicha reparación si ha emitido una
sentencia condenatoria. La ley fijará procedimientos ágiles para ejecutar las sentencias en materia de
reparación del daño”.
La reparación del daño es una obligación impuesta al individuo a resarcir los daños a favor de la víctima
u ofendido, toda víctima de violación a derechos humanos o por la comisión del delito se tiene derecho
a la reparación del daño de manera oportuna, plena, integral y efectiva. El daño causado a la víctima
puede ser material o moral, el daño material se refiere a la pérdida o menoscabo sufrido en el
patrimonio de un tercero y el daño moral es la afectación que una persona sufre en sus sentimientos,
creencias, decoro, honor, reputación, vida privada, configuración y aspectos físicos, o bien, en la
consideración que de sí misma tienen los demás. En el texto constitucional se establece la facultad
que se otorgó a la víctima para solicitar directamente la reparación del daño, sin perjuicio de que el
Ministerio Público lo solicite de oficio.
De acuerdo a los procedimientos ágiles para ejecutar la sentencia en materia de reparación del daño:
El 18 de junio de 2008 se reformó el artículo 17 constitucional y en su tercer párrafo se estableció que
en materia penal se establecieron los mecanismos alternativos para la solución de controversias,
siendo prioridad para su aplicación la reparación del daño, por lo tanto, la víctima no tendrá que tramitar
todo un proceso penal para poder solucionar la situación penal que tenga, entonces se aplica la justicia
alternativa, la cual tiene como objetivo alcanzar la paz social, cuando se cometa un delito, mediante la
pronta reparación del daño ocasionado a la víctima, además de procurar que la o el imputado se
concilie con su contraparte, teniendo ello como consecuencia que la sociedad pueda vivir con
tranquilidad. Los acuerdos reparatorios son el acuerdo o pacto que celebra la víctima con la persona
imputada para solucionar el conflicto existente, y así concluir el proceso penal, su celebración puede
llevarse a cabo ante el Ministerio Público o ante la o el juez de control, como requisito de procedencia
debe encontrarse la reparación el daño de la víctima, la aplicación de este mecanismo alternativo
permite a la víctima que obtenga de manera rápida el pago de la reparación del daño, sin necesidad
de llevar todo el trámite del proceso penal. La suspensión condicional del proceso a prueba es una
salida alterna, que propone el mismo sistema, a fin de que la persona inculpada o imputada pueda
terminar su proceso penal, cumpliendo con un plan de reparación del daño y una serie de condiciones.
Una vez cumplido esto, concluirá la causa penal. El embargo precautorio consiste en que pueda
embargar bienes a la persona imputada, mediante un procedimiento sencillo, con el fin de garantizar
los posibles daños que pudiera provocar la comisión del delito, la víctima y el Ministerio Público
deberán acreditar el daño y los bienes sobre los cuales se pretende el embargo para que la o el juez
de control ordene su ejecución, teniendo así la víctima el beneficio de poder iniciar el proceso penal
con la certeza de que se le cubrirá el monto de la reparación del daño.
De acuerdo al artículo 30 del Código Penal Federal la reparación del daño debe ser integral, adecuada,
eficaz, efectiva, proporcional a la gravedad del daño causado y a la afectación sufrida, comprenderá
cuando menos:
1. La restitución de la cosa obtenida por el delito y si no fuere posible, el pago del precio de la
misma, a su valor actualizado;
2. La indemnización del daño material y moral causado, incluyendo la atención médica y
psicológica, de los servicios sociales y de rehabilitación o tratamientos curativos necesarios
para la recuperación de la salud, que hubiere requerido o requiera la víctima, como
consecuencia del delito. En los casos de delitos contra el libre desarrollo de la personalidad, la
libertad y el normal desarrollo psicosexual y en su salud mental, así como de violencia familiar,
además comprenderá el pago de los tratamientos psicoterapéuticos que sean necesarios para
la víctima;
3. El resarcimiento de los perjuicios ocasionados;
4. El pago de la pérdida de ingreso económico y lucro cesante, para ello se tomará como base el
salario que en el momento de sufrir el delito tenía la víctima y en caso de no contar con esa
información, será conforme al salario mínimo vigente en el lugar en que ocurra el hecho;
5. El costo de la pérdida de oportunidades, en particular el empleo, educación y prestaciones
sociales, acorde a sus circunstancias;
6. La declaración que restablezca la dignidad y reputación de la víctima, a través de medios
electrónicos o escritos;
7. La disculpa pública, la aceptación de responsabilidad, así como la garantía de no repetición,
cuando el delito se cometa por servidores públicos.
Los medios para la rehabilitación deben ser lo más completos posible, y deberán permitir a la víctima
participar de forma plena en la vida pública, privada y social.
V. “Al resguardo de su identidad y otros datos personales en los siguientes casos: cuando sean
menores de edad; cuando se trate de delitos de violación, trata de personas, secuestro o delincuencia
organizada; y cuando a juicio del juzgador sea necesario para su protección, salvaguardando en todo
caso los derechos de la defensa. El Ministerio Público deberá garantizar la protección de víctimas,
ofendidos, testigos y en general todos los sujetos que intervengan en el proceso. Los jueces deberán
vigilar el buen cumplimiento de esta obligación”.
La Identidad nos identifica como personas y nos diferencia de los otros. Cada uno de nosotros tiene
su propia identidad, que es única e irrepetible. De acuerdo con el artículo 16 constitucional, párrafo
segundo se reconoce como derecho fundamental la protección de datos personales, los cuales son
medios directos e indirectos para identificar a una persona. Estos se encuentran en la clasificación de
datos personales como lo son: el nombre, domicilio, número telefónico, además de los considerados
como datos sensibles como lo son muestras biológicas, emisiones propias fisiológicas, condiciones
médicas o datos sensibles que afecten nuestra dignidad e imagen que poseen las personas de
nosotros. Por lo tanto, en esta fracción se establece una protección más amplia al resguardar la
información de los sectores vulnerables como lo son menores de edad, víctimas de violación, trata de
personas, secuestro o delincuencia organizada. El Estado tiene la obligación de cuidar que el proceso
de la víctima para obtener justicia y las posibles reparaciones no sean aún más difíciles de lo que ya
han vivido estas personas. De igual forma el Ministerio Público tiene la obligación constitucional de
garantizar la protección de los derechos humanos de las víctimas, ofendidos, testigos y en general
todos los sujetos que intervengan en el proceso., debiendo tener un enfoque multidisciplinario para
brindar a las partes involucradas del proceso el mejor entendimiento posible, de acuerdo a sus
necesidades.

También la víctima u ofendido cuenta con el derecho de:

VI. Solicitar las medidas cautelares y providencias necesarias para la protección y restitución de sus
derechos, y

Principalmente es importante definir las medidas cautelares. Son aquellos actos de molestia que se
dictan en contra de una persona para asegurar el proceso.

Con base al Código Nacional de Procedimientos Penales:

Artículo 155. Tipos de medidas cautelares

A solicitud del Ministerio Público o de la víctima u ofendido, el juez podrá imponer al imputado
una o varias de las siguientes medidas cautelares:

i. La presentación periódica ante el juez o ante autoridad distinta que aquél designe;
ii. La exhibición de una garantía económica;
iii. El embargo de bienes;
iv. La inmovilización de cuentas y demás valores que se encuentren dentro del sistema
financiero;
v. La prohibición de salir sin autorización del país, de la localidad en la cual reside o del ámbito
territorial que fije el juez;
vi. El sometimiento al cuidado o vigilancia de una persona o institución determinada o
internamiento a institución determinada;
vii. La prohibición de concurrir a determinadas reuniones o acercarse o ciertos lugares;
viii. La prohibición de convivir, acercarse o comunicarse con determinadas personas, con las
víctimas u ofendidos o testigos, siempre que no se afecte el derecho de defensa;
ix. La separación inmediata del domicilio;
x. La suspensión temporal en el ejercicio del cargo cuando se le atribuye un delito cometido
por servidores públicos;
xi. La suspensión temporal en el ejercicio de una determinada actividad profesional o laboral;
xii. La colocación de localizadores electrónicos;
xiii. El resguardo en su propio domicilio con las modalidades que el juez disponga, o
xiv. La prisión preventiva.

Las medidas cautelares no podrán ser usadas como medio para obtener un reconocimiento de
culpabilidad o como sanción penal anticipada.

Ahora bien, existen unidades de vigilancia de las medias cautelares, las “UMECAS” (Unidades
Estatales de Supervisión a Medidas Cautelares y Suspensión Condicional del Proceso), las cuales
analizan previamente el entorno social del imputado, dicen cuál es el riesgo del imputado y de tal forma
el juez podrá imponer la medida cautelar. Pueden estar adscritas a fiscalía o a secretarias de
administración pública. (Guanajuato adscritas en la fiscalía)

Deben de contar con dos requisitos:


a) Apariencia del buen derecho: la medida debe tener un sustento de que tengo la razón al solicitar
esa medida cautelar.
b) Peligro de retardo:
1. Peligro de sustracción del imputado
2. Peligro de obstaculización del desarrollo de la investigación
3. Riesgo para la víctima u ofendido, testigos o para la comunidad

Cuentan con principios, los cuales son:

1. Jurisdiccionalidad (juez es el único facultado, porque es el que pondera los derechos


fundamentales
2. A instancia de parte (solicitadas por el fiscal o por la victima)
3. Provisionalidad: son temporales, no duran más que el tiempo de duración del proceso.
4. Carácter instrumental: no es un castigo, sino como un instrumento, o bien, mecanismo para
satisfacer los peligros procesales.

Por otro lado, se cuenta con providencias necesarias para la protección y restitución de sus derechos,
establecidas en el Artículo 137 del Código Nacional de Procedimientos Penales.

Artículo 137. Medidas de protección

El Ministerio Público, bajo su más estricta responsabilidad, ordenará fundada y motivadamente


la aplicación de las medidas de protección idóneas cuando estime que el imputado representa
un riesgo inminente en contra de la seguridad de la víctima u ofendido. Son medidas de
protección las siguientes:

i. Prohibición de acercarse o comunicarse con la víctima u ofendido;


ii. Limitación para asistir o acercarse al domicilio de la víctima u ofendido o al lugar
donde se encuentre;
iii. Separación inmediata del domicilio;
iv. La entrega inmediata de objetos de uso personal y documentos de identidad de la
víctima que tuviera en su posesión el probable responsable;
v. La prohibición de realizar conductas de intimidación o molestia a la víctima u
ofendido o a personas relacionados con ellos;
vi. Vigilancia en el domicilio de la víctima u ofendido;
vii. Protección policial de la víctima u ofendido;
viii. Auxilio inmediato por integrantes de instituciones policiales, al domicilio en donde
se localice o se encuentre la víctima u ofendido en el momento de solicitarlo;
ix. Traslado de la víctima u ofendido a refugios o albergues temporales, así como de
sus descendientes, y
x. El reingreso de la víctima u ofendido a su domicilio, una vez que se salvaguarde
su seguridad.

Dentro de los cinco días siguientes a la imposición de las medidas de protección previstas en las
fracciones I, II y III deberá celebrarse audiencia en la que el juez podrá cancelarlas, o bien, ratificarlas
o modificarlas mediante la imposición de las medidas cautelares correspondientes.
En caso de incumplimiento de las medidas de protección, el Ministerio Público
podrá imponer alguna de las medidas de apremio previstas en este Código.

En la aplicación de estas medidas tratándose de delitos por razón de género, se


aplicarán de manera supletoria la Ley General de Acceso de las Mujeres a una
Vida Libre de Violencia.

Finalmente, su duración se sustenta en el artículo 139 del Código Nacional de


Procedimientos Penales.

De acuerdo con el artículo 139 del Código Nacional de Procedimientos Penales,


la imposición de las medidas de protección y de las providencias precautorias
tendrá una duración máxima de sesenta días naturales, prorrogables hasta por
treinta días. Cuando hubiere desaparecido la causa que dio origen a la medida
decretada, el imputado, su Defensor o en su caso el Ministerio Público, podrán
solicitar al Juez de control que la deje sin efectos.

Y finalmente, la CPEUM establece que la víctima u ofendido tiene derecho a:

VII. Impugnar ante autoridad judicial las omisiones del Ministerio Público en la
investigación de los delitos, así como las resoluciones de reserva, no ejercicio,
desistimiento de la acción penal osuspensión del procedimiento cuando no
esté satisfecha la reparación del daño.
Las omisiones pueden recaer en la recolección de los datos de prueba que
sustentan el ejercicio de la acción penal, la reparación del daño y acusación penal.
Pero también puede haber omisiones en actos que no requieren autorización
previa del Juez de control, como la inspección del lugar en el que ocurrieron los
hechos; la revisión corporal; la inspección de vehículos; el levantamiento e
identificación de cadáver; la aportación de comunicaciones entre particulares; el
reconocimiento de personas; entrevista de testigos y las demás en las que no se
necesita autorización previa del juez.
Ahora bien, el Ministerio Público podrá solicitar el desistimiento de la acción penal
en cualquier etapa del procedimiento, hasta antes de dictada la resolución de
segunda instancia. Pero dicha solicitud de desistimiento debe contar con la
autorización del Titular de la Procuraduría o del funcionario que en él delegue esa
facultad. Y la víctima u ofendido podrán impugnar la resolución emitida por el Juez
de control, Tribunal de enjuiciamiento o Tribunal de alzada. Con base al artículo
144 del Código Nacional de Procedimientos Penales. El Ministerio Público podrá
solicitar el desistimiento de la acción penal en cualquier etapa del procedimiento,
hasta antes de dictada la resolución de segunda instancia.

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