El arma de la educación

Expresiones Culturales Latinoamericanas

Grupo

Prepa Tec Campus

16 de noviembre de 2021
ACTIVIDAD EJE FINAL.

A lo largo de este semestre se han analizado varias expresiones culturales pertenecientes a la

narcocultura, además se ha profundizado en sus causas y en las consecuencias que tiene en
la sociedad latinoamericana. La narcocultura se ha convertido en un identificador de estos
territorios, en un movimiento que promueve las actividades ilegales y que las venera
idealizándolas falsamente atrayendo a cada vez más personas. Su producción se encuentra en
muchos tipos de arte: pintura, cine, fotografía..., pero este trabajo sólo se ha centrado en su
producción musical: los narcocorridos. Una propuesta para solucionar el gran problema de
la normalización y veneración del narcotráfico propiciado por los narcocorridos, es reforzar
la red educacional de Latinoamérica, cuidando que se promuevan valores alejados de
la violencia, delincuencia y narcotráfico y mejorando las oportunidades de los niños y
jóvenes para tener empleos que les permitan tener una vida digna fuera de las
actividades ilegales.

En primer lugar, una de las principales causas por las que los jóvenes entran al mundo
del narcotráfico, es la falta de educación que aqueja a la sociedad latinoamericana.
Según datos del Banco Mundial, los países de América Latina destinan aproximadamente un
5% del PIB a servicios educativos, en comparación con países de Europa como Alemania,
Inglaterra o Islandia, que destinan hasta un 12%. (Garza, 2021). Estas estadísticas se ven
reflejadas en la educación insuficiente, desigual y de dudosa calidad que hay en
Latinoamérica, hay insuficiencia de oferta educativa porque la educación varía según la
región, siendo las comunidades rurales las que menos reciben, hay insuficiencia en el
personal docente porque se les capacita muy poco y las herramientas para evaluarlos no son
las adecuadas, la actualización de programas y planes de estudio es muy poco frecuente y
no hay suficientes materiales, infraestructura y servicios en las escuelas.

Las consecuencias de la mala calidad educativa se ven reflejada en la búsqueda de trabajos,

los jóvenes no cuentan con las aptitudes necesarias y permanecen desempleados por mucho
tiempo aún teniendo carreras universitarias.

Los jóvenes, además expuestos a presiones sociales, para conseguir un estilo de vida
que les brinde seguridad emocional, económica, y por tanto aceptación social, se ven
atraídos por las ofertas que hacen grupos del crimen organizado, dejando de lado su
 formación escolar ya que esta implica lograr la estabilidad ansiada en un mayor
periodo de tiempo y con mayores incertidumbres, ya que en las condiciones
actuales…no es posible asegurar un futuro prometedor para los profesionistas.
(Rivera, 2018).

Por otro lado, la enorme brecha de oportunidades que hay entre sectores de la población
en Latinoamérica orilla a los jóvenes a trabajar en las actividades ilegales, porque la
narcocultura las hace ver como formas fáciles y rápidas de obtener dinero.

Hay una brecha entre la pobreza creciente y también la riqueza creciente. En muchos
países de América Latina una elite económica está concentrando hasta un 40% o 50%
de la riqueza. Es un desbalance económico y social muy fuerte que expresa la
desigualdad. (Burchardt, 2021).

Entonces, el aumento de la pobreza que ha habido en los últimos 10 años ha permitido a la

narcocultura cobrar fuerza, y ha pasado de ser sólo una tendencia artística, a ser un estilo de
vida con gran auge entre los jóvenes, “ha dado pie a la creación de un estilo de vida con la
adopción de Santos religiosos, música, ostentación de poder y de dinero, esto se ha
convertido en un ideal para muchos jóvenes y que se convierte en un atractivo más para
entrar en el mundo del narcotráfico.” (Rivera, 2018)

Los jóvenes son uno de los grupos más importantes en Latinoamérica, porque tienen gran
presencia demográfica, juegan papeles muy importantes en las transformaciones sociales y
son parte esencial del desarrollo económico de cada país. Tristemente, el número de jóvenes
que viven en condiciones de pobreza extrema sigue en aumento, y la tasa de desempleo que
hay aún para aquellos con escolaridades altas los obliga a buscar otras formas de buscar
dinero, y en conjunto con la idealización que crean los narcocorridos de la lujosa vida de los
criminales, entran en el narcotráfico.

La mayoría de los empleados son hombres jóvenes con poca educación formal y que
provenientes de esferas económicas no muy privilegiadas. Con una edad promedio de
18 años y habiendo dejado la escuela cuando estaban en secundaria… se han vuelto
un elemento fundamental para las organizaciones criminales actuando dentro de estas
 con tareas como venta de drogas, vigilantes, transportistas de mercancías y hasta
sicarios y asesinos. (Rivera, 2018)

En cambio, los sectores de la población más pobres que suelen ser apoyados por los
narcotraficantes, los han convertido en héroes y en un modelo aspiracional para los
jóvenes y niños. Las zonas más marginadas de cada país han encontrado en el narcotráfico
una opción real de supervivencia, porque el dinero que las actividades ilegales les da, activa
sus economías locales. Según el investigador de la Universidad Michoacana de San Nicolás
de Hidalgo, José María Carmona, solo en México se estima que hay unas 9000 localidades
rurales localizadas que sobreviven del dinero que dan los narcotraficantes a cambio de plantar
droga para ellos, los criminales financian las semillas, fertilizantes, agua y garantizan
compensaciones en caso de que el gobierno destruya las plantaciones. En general, les dan
fuentes de empleo que el gobierno no puede proveerles.

Derivado de esto, los niños que crecen en este contexto dejan de ver al narcotráfico como
una actividad ilegal y la empiezan a ver como un mundo completamente nuevo que ofrece
muchas oportunidades de crecimiento, por lo que la estancia en las aulas escolares ha
disminuido, y el ingreso de jóvenes a actividades criminales ha aumentado.

Los jóvenes son un grupo social que muestra interés en productos culturales cuyos
temas centrales son el tráfico de drogas como películas, series de televisión y música;
sin embargo, la relación que establecen con estos productos va más allá de ser una
moda, ya que los contenidos pueden incidir en sus expectativas y proyectos de vida.
(Romero, Tonantzin, 2020)

Según el investigador Gerardo Francisco Rivera (2018), para muchos jóvenes convertirse
en narcotraficante o sicario se ha convertido en un anhelo, son estos quienes están
conformando las bases operativas de los grupos delictivos del país se han convertido en la
mano de obra barata del narco, aunado con los problemas como el desempleo, la pobreza,
el sentido de aspiraciones de la narco cultura juega un papel fundamental en el
reclutamiento de nuevos jóvenes a las filas de los carteles a lo largo de todo el país.

Las escuelas de la Latinoamérica actual no están preparadas para responder a las exigencias
del narcotráfico y la violencia. Entonces, retomando la propuesta de solución,
Latinoamérica necesita un sistema educativo que haga frente al gran fanatismo que
tiene la narcocultura en la sociedad. Esto se puede hacer de muchas formas:

• En primer lugar, los sistemas educativos necesitan ser reconstruidos tomando en

cuenta que gran parte de su población vive en ambientes rodeados de violencia
causada por el narcotráfico, y se debe dejar de lado la invisibilización que se le da en
muchas escuelas.
• También, el gobierno necesita enseñar a los jóvenes que ser narcotraficante no es
igual a quedar impune cada que se comete un crimen, como lo enseñan las redes
sociales con la gran cantidad de delincuentes que son libreados después de cometer
decenas de actividades ilegales.
• Y finalmente, los niños y adolescentes latinoamericanos necesitan darse cuenta de
que hay muchas más opciones de crecimiento que en el narcotráfico, entonces los
gobiernos deben destinar más presupuesto a mejorar los servicios educativos, y por
lo tanto mejorando las oportunidades de los jóvenes de encontrar empleos fuera del
narcotráfico.

En conclusión, la narcocultura y los narcocorridos han influido mucho en la forma de pensar

de la sociedad latinoamericana, cambiando totalmente sus deseos y necesidades.
Particularmente las acciones del crimen organizado han afectado a los niños y jóvenes en su
bienestar y desarrollo educativo, porque es alarmante la cantidad de adolescentes que cada
vez más se suman al narcotráfico abandonando sus estudios. Pero en general, la principal
arma para terminar con esto es mejorar la calidad de la educación y dar a las escuelas las
herramientas necesarias para mantener a los niños y jóvenes dentro de las escuelas lejos de
las actividades criminales.
REFERENCIAS:

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(202), 45–58.

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Franco, G. (2018). IMPACTOS DEL NARCOTRÁFICO Y LA VIOLENCIA EN LA

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http://www.sudcalifornios.com/item/revista-tamma-dalama-impactos-del-narcotrafico-y-la-
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García, A. K. (2018). Educación en México: insuficiente, desigual y la calidad es difícil de

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Murillo, A. (2021). ¿Cuánto invierten en educación los países de América Latina. Ruiz Healy
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