Thelma Itzel Nuñez Rivera ID A00123011

La Dictura de Rafael Leonidas Trujillo

Tras asumir la presidencia, Rafael Trujillo emprendió una política de represión,

ilegalizando otros partidos políticos y sembrando el terror con las fuerzas armadas para
intimidar a sus opositores. Todos los ciudadanos adultos deben unirse al partido
dominicano si quieren vivir una vida normal y encontrar un trabajo.
En 1936, la capital Santo Domingo fue renombrada en honor a Trujillo, quien salvó la
ciudad después de una tormenta: el nuevo nombre fue Ciudad de Trujillo. Además, se dice
que Trujillo logró muchos honores para sí mismo, como erigir muchas estatuas en su
honor en todo el país y cambiar el nombre de las calles en su honor. También ha recibido
numerosos premios, de los cuales él es el único. Como otros dictadores, Trujillo se
consideraba una especie de santo, por lo que ordenó que en cada familia hubiera una
imagen del presidente junto a la de Jesús.

Trujillo creó una serie de monopolios públicos y privados dirigidos por sus familiares.
Nombró a su familia en varios puestos importantes: su esposa controlaba las
importaciones y exportaciones, sus hermanos controlaban la radio y la televisión, la
prostitución y la producción. El propio Trujillo sigue siendo el comandante de las fuerzas
armadas, pero se dice que también nombró a su hijo de 10 años como general del
ejército.
En 1937 tuvo lugar la famosa masacre de Perejila cuando Trujillo ordenó el asesinato de
todos los haitianos en la República Dominicana. Según una fuente, Trujillo había oído que
espías dominicanos habían sido asesinados en Haití, y enfurecido Trujillo ordenó el
asesinato de todos los haitianos en el país. Trujillo promovió políticas antihaitianas porque
los haitianos eran la causa de la pérdida de empleos de los agricultores dominicanos. Las
estimaciones exactas de víctimas tampoco están disponibles, pero se cree que entre 1.000
y 20.000 haitianos murieron en la masacre de Perejil.
Rafael Trujillo fue un dictador brutal que, junto con el ejército, oprimía y torturaba a sus
oponentes. El dictador mantuvo el control de la legión por miedo. Se dice que Trujillo usó
varios métodos brutales de tortura, incluidas sillas eléctricas y sanguijuelas (iilimato en
finlandés). También se dice que arrojaba los cuerpos de sus oponentes al mar para que
pudieran desaparecer fácilmente. Durante su dictadura, Trujillo fue responsable de la
muerte de más de 50.000 personas.

En la época de Trujillo no existían las libertades civiles y se violaban constantemente los

derechos humanos. Varias fuentes describen la situación en el país como "un estado de
pánico en el que la muerte puede parecer un accidente y cualquier persona acusada de
descontento puede ser encarcelada y torturada".