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El eucalipto y sus propiedades medicinales

5 noviembre 2010 Angela Consejos para cuidar tu salud, La botica de la abuela 0


El eucalipto es un impresionante árbol de hojas perennes que puede llegar hasta los 60
metros de altura. Las hojas de su variedad macho poseen propiedades medicinales. Con
ellas se preparan remedios naturales expectorantes, balsámicos, astringentes y
antirreumáticos.
Especialmente interesante es su capacidad para ayudar a curar el catarro y su poder
expectorante. Con tan sólo 20 gramos de hojas de eucalipto podemos preparar una
infusión que tomada caliente y con miel, tres o cuatro veces al día, nos suavizará
muchísimo nuestros problemas respiratorios, como resfriado, gripe y bronquitis.

Las inhalaciones de vapor de eucaliptus son un gran remedio para estos mismos
problemas respiratorios e incluso para un ataque de asma. Se hacen tan sencillamente
como poniendo a hervir 40 gramos de hojas de eucaliptus en un litro de agua y después
respirando profundamente su vapor cubiertos por una toalla.
El eucalipto medicinal tiene otras muchas propiedades curativas a nivel anti
infeccioso, antiinflamatorio, antiespasmódico y de control de la diabetes, así como
también está recomendado para el alivio de los síntomas del reuma (mediante baños de
inmersión), e incluso las infecciones urinarias, dado su poder antiséptico.
Finalmente, también puedes usar las ramas y hojas de eucalipto para purificar el
ambiente de alguna habitación donde han estado personas enfermas o donde haya
habido una gran cantidad de insectos, ante los cuales reacciona como repelente.
Imagen: La Herbloguistería
EUCALIPTO
DESCRIPCIÓN

El Eucalipto se caracteriza por presentar


hojas, blancuzcas, con el borde orientado
hacia el sol, la corteza rota en jirones y el
aroma peculiar; las flores son pequeñas y
presentan una tapadera cónica que se
desprende en el proceso de la floración,
en ese momento se despliegan los
estambres. Árbol siempre verde, de
rápido crecimiento en condiciones
favorables, puede alcanzar los 100 m de
altura. Es característico el crecimiento
helicoidal de la corteza, parece como si el
árbol fuera retorciéndose al crecer. Posee
dos tipos de hojas bien diferenciadas: en
las ramas jóvenes crecen hojas aovadas y
opuestas, mientras que las características
hojas alargadas, en forma de hoz, se
forman en las ramas adultas. Tanto las
hojas como los tallos y las cápsulas
florales huelen a esencia y poseen un
sabor amargo.

CLIMA

El Eucalipto prefiere climas húmedos, sin


heladas, con una precipitación anual
media superior a los 700 mm, y con una
distribución uniforme del régimen de
lluvias.
SIEMBRA

Se deben plantar en terrenos pobres que


no puedan ser aprovechados para otros
usos agrícolas. La planta con cepellón se
puede plantar durante todo el año
siempre que se evite el tiempo
extremadamente frío, o seco y caluroso,
que puede matar las plantas jóvenes.

COSECHA

Se utilizan exclusivamente las hojas


falciformes (en forma de hoz), que
pueden cortarse en cualquier época del
año a condición de que estén totalmente
formadas. Las cápsulas, si se requieren
por su fragancia, deben tomarse cuando
ya se han abierto.

USOS

Medicinal, el Eucalipto tiene propiedades


antisépticas particularmente de las vías
respiratorias. Se utiliza generalmente por
vía externa en inhalaciones para mejorar
la respiración en casos de gripas o
sinusitis. El aceite se obtiene a partir de
hojas frescas, ricas en aceites esenciales.
Se utiliza en esa forma desde hace
muchos años para friccionar el pecho en
ungüentos sobre el tórax y la espalda..
SINÓNIMOS

Alcanfor, Ocalipto.

NOMBRE CIENTÍFICO

Eucalyptus glo
EL EUCALIPTO Y LA CURA DE ENFERMEDADES
Glenny Ascanio [1º semana de diciembre 2009]

Durante años el eucalipto ha sido una planta que se ha utilizado como medicina para
curar diferentes afecciones en el humano. Comúnmente, se le conoce con el nombre de
Eucalipto. Su nombre científico es Eucalyptus globulus Labill. Siendo una especie de la
familia de las Mirtáceas. Es natural de Australia y de Tasmania, donde se pueden
encontrar más de 300 especies. Por la rapidez de crecimiento, se puede encontrar
cultivado en muchas regiones del mundo para la producción de madera, fabricación de
pulpa de papel y obtención de aceite esencial. Además, ha sido especialmente utilizado
para sanear zonas pantanosas al eliminar la humedad de las mismas con la consiguiente
erradicación de sus plagas de insectos, principalmente mosquitos, y de las enfermedades
que transmiten. Su uso ha supuesto una gran ayuda para el control del paludismo en
muchas zonas de Asia, América del sur y el sur de Europa.
Usos medicinales del Eucalipto
Dentro de las enfermedades respiratorias podemos destacar el uso del Eucalipto en las
siguientes afecciones del aparato respiratorio:

Bronquitis: Su uso puede rebajar la inflamación producida así como eliminar el exceso
de secreciones. Para ello, se procede a la decocción de 60 g. de hojas por litro de agua, y
se aspiran el vapor tapándose la cabeza con un paño. La infusión es de media cucharada
sopera de hojas secas en una taza de agua. Se deben tomar 3 tazas por día.

Gripe: El uso de esta planta permite respirar mejor y reducir el malestar que provoca.
El cocimiento de 3 g. de hojas secas por taza de agua, se ingiere 2 veces al día
endulzadas con miel.

Dolor de garganta: Los gargarismos realizados con el líquido resultante de la


decocción de un puñado de hojas en un litro de agua, ayudan a disminuir la hinchazón
de las amígdalas, reducen el escozor y eliminan la infección.

Asma: Reduce la inflamación y permite respirar mejor al asmático. De la decocción de


un puñado de hojas por litro de agua, se aspira el vapor tapándose la cabeza con un
paño.
Faringitis: Suaviza la faringe y ayuda a eliminar los gérmenes que provocan la
inflamación. De la decocción de un puñado de hojas por litro de agua, se aspira el vapor
tapándose la cabeza con un paño. La infusión, de media cucharada sopera de hojas secas
por taza de agua, se toma 3 veces al día. El mismo tratamiento puede aplicarse en caso
de laringitis o inflamación de la laringe.

Catarro: Ayuda a combatir el catarro disminuyendo los síntomas propios de esta


enfermedad, rebajando la inflamación, disminuyendo la tos, ayudando a eliminar el
exceso de mucus, y suavizando la garganta.

Tos: Su uso resulta muy conveniente en aquellos casos de tos que necesitan de
expectoración. El eucalipto, disminuye la necesidad de toser, un síntoma que acompaña
a muchas de las enfermedades del aparato respiratorio, suaviza la garganta, calma la
irritación bronquial y la tos en las enfermedades respiratorias de origen bacteriano,
incluida la tosferina. Para ellos, se inhala el vapor del cocimiento de un par de
cucharadas de hojas secas de Eucalipto por litro de agua.

Fiebre: El aceite de Eucalipto posee propiedades febrífugas muy útiles para disminuir
la fiebre. Para ello, se moja un paño con unas gotas de aceite y se aplica sobre la piel.

Sinusitis: Apropiado para favorecer la salida del exceso de mucosidad. Del cocimiento
de un puñado de hojas se aspira el vapor cubriéndose la cabeza con un paño.

Rinitis: Su uso puede ayudar a desinflamar las fosas nasales. (Cocimiento de 60 gr. por
litro de agua . Aspirar los vapores cubriéndose la cabeza con un paño.)

El eucalipto disminuye los niveles de azúcar en la sangre. Puede ser útil para el
tratamiento de la diabetes ayudando a la persona diabética a controlar el nivel de azúcar
o a prevenir la aparición de la enfermedad. La decocción de una cucharada de hojas
secas por taza de agua durante un par de minutos, se cuela y se toman dos veces al día.

Las propiedades antisépticas del Eucalipto pueden ser aprovechadas en uso externo para
el tratamiento de las afecciones de la piel. No debemos olvidar que, por su riqueza en
ácido gálico, posee propiedades astringentes muy destacadas que resultan útiles en la
curación de los problemas de la piel. Entre sus muchos usos podríamos mencionar por
ejemplo: Heridas, cortes, arañazos, pinchazos, etc., ayudando a desinfectar y
favoreciendo la cicatrización. Para ello, se disuelven de 20 a 30 cc de aceite esencial en
un litro de agua, y se aplica esta mezcla con una gasa limpia sobre la herida.

Aftas bucales: En las llagas de la boca, el Eucalipto consigue evitar las infecciones y
ayuda a cicatrizar las llagas bucales. Se realiza gargarismos con el preparado anterior
sin tragar el líquido. Para las llagas externas se deben mojar con una gasa.

Herpes: Para el tratamiento del herpes simple, tanto labial como genital, se puede
utilizar el aceite esencial diluido en agua según la forma anterior.

Acné: Este mismo tratamiento puede ser muy útil en el tratamiento del acné al ser capaz
de reducir los tintamos del mismo como espinillas, granos o barros.

Gingivitis: para el tratamiento de las inflamaciones de las encías, el aceite esencial de


Eucalipto puede resultar bastante eficaz. Se moja el dedo con unas gotas de aceite
esencial y se efectúan masajes en las encías. No tragar el líquido.

Mal aliento: Los gargarismos realizados con el líquido resultante de la decocción de un


puñado de hojas por litro de agua, ayudan a combatir la halitosis. Es rico en
componentes bactericidas y puede utilizarse para eliminar los microorganismos
causantes del mal aliento.

Blibliografia
1. AA.VV. 1995. Las plantas. Mi primera enciclopedia. Larousse. Barcelona, España.
2. Arroyo, J. 1965. La Botánica en experimentos. Ediciones Santillana. Madrid, España.

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