Laurann Dohner - Serie Nuevas Especies - 13 - Smiley

Laurann Dohner Smiley
Laurann Dohner
Serie Nuevas Especies 13
Smiley
Portada Original
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Argumento
Vanni está furiosa cuando los engaños de su prometido le hacen asistir a una
conferencia en la iglesia de su padre, que está protestando contra la
Organización de las Nuevas Especies. Ella odia todo lo que aquellos
repugnantes fanáticos representan. Vanni va al bar para tranquilizarse y
termina sentada al lado de un apuesto Nueva Especie. Las cosas se calientan
rápido cuando ambos son drogados.
Smiley no quiere creer que esa dulce humana sea quien le dio la dosis con la
droga de cría. Él está dispuesto a confiar en ella y decidido a salvar su vida.
Desea abrazarla. Protegerla. Le ofrece el consuelo de su cuerpo para distraerles
a los dos por el dolor.
Vanni es su mujer, incluso si ella no se ha dado cuenta todavía.
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Capítulo Uno
"Deja de avergonzarme."
Carl susurró éstas palabras enfadado, mirando a su alrededor para asegurarse

de que no le escuchaba nadie, excepto su objetivo.
"Mi padre me ha dicho que eres una maleducada Vanni, que no le tienes
respeto, acabo de llegar y ya me ha regañado. Sigue sonriendo y asiente con la
cabeza, también me ha dicho que eres desagradable con los periodistas."
"¿Has oído lo que están diciendo allí arriba?" Ella también estaba enfadada.
"He accedido a ponerme esta falda larga porque a tu padre no le gustan las
mujeres que usan pantalones. No he dicho nunca que hablaría con la prensa y
repetiría el odio que él escupe."
"Se supone que no tienes que hablar en absoluto. Ya sé que él es de la vieja

escuela, pero es mi padre y estamos aquí para apoyarle."
"¿De la vieja escuela? Yo usaría otras palabras más fuertes para definir lo que
es tu padre. No, he venido hasta aquí porque pensé que íbamos a tener un fin
de semana romántico en un bonito hotel. En lugar de eso, me encuentro con
que estás compartiendo una suite con tu padre y yo tengo que compartir una
habitación con la demente de su ayudante. Has esperado a que ya estuviera
aquí para decírmelo, porque los dos sabemos que de otro modo no habría
venido."
Él se acercó y la agarro del brazo, mirando otra vez a su alrededor.
"Esto es muy importante para él, solo son dos días, tu limítate a sonreír y a
mantenerla boca cerrada. Eso es todo."
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"Me has dicho muchas veces que no tienes nada que ver con la iglesia de tu
padre. Entonces ¿por qué estamos aún aquí, Carl? no lo entiendo."
"Jamás me ha pedido nada, pero una parte de la prensa han estado

cuestionando sus valores familiares. Nos necesita aquí para que le demos
nuestro apoyo, sólo son dos días. Por favor, Vanni. Ya sé que te estoy pidiendo
mucho, pero es mi padre, eso también lo convierte en parte de tu familia."
Vanni sintió la tentación de recordarle que aún no estaban casados. Repasó

mentalmente las opciones que tenía. Estaba a dos horas de su casa y sin coche,
su compañera de habitación podría venir a buscarla pero ella sólo quería
pedirle favores cuando fuera algo importante, una emergencia, y este tema no
había alcanzado ese punto, aunque se estaba acercando.
Carl suavizó el tono.
"Esto es muy importante para mi padre y realmente necesita que esté aquí, es
poco lo que pide, Vanni."
Ella le miró a los ojos y odió la manera en que su determinación cedió bajo esa
mirada suplicante.
"No me gustan los miembros de su iglesia, ni lo que defienden."
"A mí tampoco pero no podía decirle que no. Vas a ser mi esposa y quería que
estuvieras aquí a mi lado."
"Son fanáticos y ahí abajo ni le dije ni le pedí a ese periodista que me pusiera el
micrófono en la cara. Sólo dije dos palabras Carl, 'sin comentarios'. Agradece
que no le dijera las barbaridades que escuché en esa cena hace una hora, jamás
en mi vida le llamaré ni le contaré lo que me cabreé, al oír toda esa basura."
La expresión normalmente atractiva de Carl se torció y ya no era tan

agradable.
"Mi padre y sus seguidores simplemente tienen diferentes puntos de vista. No

estás siendo justa."
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"¿Justa?" Su genio estalló de nuevo. "No digas esa palabra delante de mí. Tú
me juraste que nunca tendríamos que participar en asuntos de la iglesia y
luego me has mentido para hacerme venir aquí. Eso es rastrero y bajo."
"Es solo un maldito fin de semana." siseó Carl entre dientes. "No seas egoísta."
"¿Quién demonios eres tú y dónde está el hombre que conozco? Tú odias las
cosas que tu padre defiende lo mismo que yo ¿no? o ¿simplemente era una
mentira para conseguir que me case contigo?"
Carl miró a su alrededor y luego la miró fijamente a los ojos.
"Mi padre me ha prometido darme cincuenta mil dólares si venía, tu familia no

es precisamente de las que pueden pagar una gran boda, soy yo el que tiene
que correr con los gastos adicionales."
Vanni apretó los dientes, resintiéndose a que la embargara el sentimiento de

culpa y sabiendo que era precisamente lo que Carl quería.
"Yo quería algo pequeño, familiar, así que no digas que haces esto por mí. Tú
eres el que quiere tener cuatrocientos invitados."
"Son clientes. No puedo casarme sin invitarles."
"Quiero irme."
Carl le apretó el brazo con fuerza y la zarandeó, al tiempo que miraba de un

lado a otro de la habitación.
"Para." le espetó. "Vete arriba si no puedes poner buena cara. No vuelvas a

avergonzar a mi padre. ¿Lo has entendido?"
"Estoy empezando hacerlo." A Vanni tampoco le gustaban las consecuencias.

"Entonces, después de que me has traído aquí, ¿quieres que me oculte solo
porque no quiero seguir con el programa?"
"No puedes avergonzarle."
"¿Y qué pasa conmigo? Me da vergüenza estar aquí con esta supuesta iglesia."
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Vanni dio un tirón del brazo, obligándole a soltarla, y retrocedió.
"No tienes por qué estar de acuerdo con sus ideas, pero debes de estar a mi
lado para apoyar a mi padre. Alguien tiene que pagar la boda."
"Sí, señor." Ella levantó la mano al estilo militar y saludó con elegancia. "Seré
buena y me esconderé en el piso de arriba, así no le diré a nadie lo asqueada
que estoy por el odio y la estupidez que predica tu padre."
"Estás haciendo un drama. No es halagador, Vanni."
Ella se tragó una respuesta desagradable.
"No te olvides de venir al desayuno de mañana, después tenemos que posar

para hacernos las fotos con mi padre. Ponte el vestido de color rosa que te
compró su asistente."
Vanni hizo una mueca.
"Es horrible, me recuerda un poco al vestido de dama de honor de una película

de pesadilla en la que alguien había vomitado en la parte delantera del
vestido."
Carl hizo un gesto de exasperación.
"Tu ponte el puto vestido, sonríe a las cámaras y compórtate como una adulta.
Estamos haciendo esto para asegurar nuestro futuro y para pagar nuestra
boda. ¿Eso es pedirte demasiado?"
Estuvo tentada de decir que sí.
"Hazlo por mí." Él se acercó y le cogió la mano y pasó el pulgar por el anillo de
compromiso. "Por nosotros. Esto me hará muy feliz y sólo son dos días, nada
más. Está intentando conseguir apoyo para su iglesia. Hay muchos periodistas
aquí y publicidad es justo lo que necesita. Tendremos una boda preciosa."
Vanni se estremeció por dentro. Claro que no se le iba a romper el corazón si la

iglesia de su padre desaparecía y caía en el olvido, tenía la esperanza de que
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nadie tomara en serio las barbaridades que había oído durante la cena. El
discurso que había dado el pastor Gregory Woods le había hecho perder el
apetito. Se habría marchado si no hubiera sido por Carl, había intentado evitar
una discusión, pero no había tenido éxito ya que un periodista había intentado
entrevistarla. Después su "sin comentarios", había cabreado a Carl y al parecer a
su padre también.
"Mierda." murmuró Carl. "Periodistas a las dos. Hay que salir pitando de aquí
antes de que nos detecten." Carl la miró entrecerrando los ojos. "Ve arriba y
quédate allí hasta el desayuno. Hablaremos de esto por la mañana."
Vanni se dio media vuelta, con ganas de salir corriendo del salón de
banquetes. El Carl que conocía había cambiado de forma radical una vez que
habían llegado al hotel y no le estaba gustando para nada esta nueva faceta
que estaba descubriendo de él, esto la estaba haciendo reconsiderar en serio su
futuro.
La asistente personal del Pastor Gregory Woods, Mable, era otra pesadilla para
Vanni. La mujer era una grosera y una snob, solo pensar en volver a la
habitación que compartían la hizo alejarse de los ascensores. El cartel del bar
llamó su atención. Vanni se dirigió hacia él y fue hacia la zona poco iluminada.
Las mesas estaban ocupadas pero vio que había un taburete libre. Vanni era
rara la vez que bebía y los bares no eran su sitio habitual. El camarero le llamó
la atención mientras se acercaba, tenía alrededor de treinta y tantos años y
esbozaba una sonrisa amistosa.
"¿Qué le pongo?"
Vanni se coloco la falda larga mientras se sentaba y metió la mano dentro del
bolsillo, lamentando el haber dejado el bolso en su habitación. Tenía un billete
de veinte dólares y la tarjeta de la habitación pero el carnet lo tenía en el
monedero así que no podía demostrar su edad si le pedía que le enseñara una
identificación.
¿Podría ir a peor mi suerte?
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"Sólo un té helado pero sin limón. Gracias."
Él camarero asintió con la cabeza y se dio la vuelta para traer su bebida.
Vanni mantuvo la cabeza baja hasta que alguien a su izquierda se aclaró la

garganta. Esperaba que no fuera un borracho que quisiera hablar con ella...
ese era el motivo por el que odiaba los bares.
Oyó una respiración profunda y giró la cabeza en esa dirección para mirar a su
compañero de bar. El jadeo que soltó fue automático cuando vio su rostro, fue
un shock darse cuenta de que no era un tipo cualquiera.
Su línea de la mandíbula era firme, los pómulos pronunciados y tenía los

labios generosos, por lo que dedujo que era un Nueva Especie. Miro su
chaqueta y los pantalones vaqueros, la chaqueta le quedaba estrecha en los
hombros y en la parte superior de los brazos. No llevaba el mismo uniforme
negro de la ONE que había visto puesto en algunos de ellos, los pocos que
había conseguido ver en el vestíbulo.
Vanni bajó la mirada para echar un vistazo a sus vaqueros. Estos se

amoldaban a las musculosas piernas. Su mirada volvió hacia arriba para
mirarle boquiabierta a la cara de nuevo.
No debería haber preguntado, mi suerte sí que podía empeorar.
El pánico se apodero de ella, a Carl le daría un ataque si alguien la veía

sentada junto a un Nueva Especie y se lo decía a él o a su padre. Esta Nueva
Especie tenía unos hermosos ojos marrones bordeados de largas pestañas
oscuras. Tenía el pelo negro y sedoso y le llegaba un poco más abajo de los
hombros.
Él parpadeó antes de hablar.
"¿Estás bien? Estás muy pálida y te tiemblan las manos."
Su voz tenía un tono profundo que envió escalofríos por su columna vertebral.
No estaba segura de si era por miedo o porque era el tipo de voz que siempre
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le había resultado atractiva. Era rudo, masculino y agradable al mismo tiempo.
Vanni intento responder, pero reconoció se le trababa la lengua
Él se inclinó un poco, acercándose más.
"No soy peligroso si eso es lo que has oído sobre los de mi clase, no voy a
atacarte. ¿Quieres que me vaya?"
Él hizo el intento de ir a levantarse del taburete.
"¡No!" consiguió decir.
Le hizo sentir un poco culpable, estaba dispuesto a irse a causa de su

lamentable reacción.
"Sólo estoy sorprendida, eso es todo. Estás bien dónde estás."
Él se echó hacia atrás en su taburete. El camarero la distrajo cuando trajo su té

helado y dejó una bebida de color oscuro al Nueva Especie. Vanni sacó el
billete de veinte dólares.
"Cóbrate lo de los dos y quédate con el cambio."
Era lo menos que podía hacer después de haberle hecho sentir incómodo.
"No tienes que hacer eso."
El camarero se fue y ella hizo frente al hombre con la voz de whisky. Tenía la
nariz un poco más ancha que la mayoría, pero tenía unos ojos sorprendentes
con pestañas largas y oscuras, incluso se le podía considerar guapo.
"Digamos que es mi forma de ofrecer una disculpa. Mi estado de ánimo no

tiene nada que ver contigo. He estado al límite todo el día."
Él levantó su copa y bebió un sorbo.
"Gracias."
"De nada."
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Él dejó su copa sobre la barra, se pasó la palma de la mano por el muslo y
luego se la ofreció a ella.
"Soy Smiley."
Su mente aun seguía aturdida tenía los pensamientos revueltos y no captó la

definición de la palabra. Los rumores decían que habían elegido sus nombres
para reflejar su personalidad. Era una persona agradable.
"Vanni."
Su mano era grande y cálida, cogió la de ella con mucha suavidad, se la

estrechó y la soltó.
"Vanni es un nombre bonito."
"Es diminutivo de Travanni, mi madre tenía debilidad por los nombres

extraños. Yo lo odio, toda mi vida he atendido por Vanni."
Tomó un sorbo de té, tratando de no balbucear, hacía eso cuando estaba

nerviosa y hablar con un Nueva Especie la ponía nerviosa… y mucho.
"Mi pobre hermana se quedó con Mortimia, por lo general ella se niega a
decirle a la gente su nombre completo y ese presenta como Mia. Estamos
seguras de que mi madre estaba obsesionada con los vampiros."
Él parecía un poco confundido.
"No lo entiendo."
Ella sonrió.
"Travanni recuerda a Transilvania, hogar de Drácula. Mortimia, bueno, Mort

se traduce en muertos, Mia se traduce en 'mí' y sería como verme muerto."
Él ahora se rió entre dientes. Fue un sonido agradable.
"Ya veo. ¿Hay otros hermanos con nombres extraños?"
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"Tengo un hermano mayor. Él se quedó con Count, de nuevo con el tema de
vampiros por el Conde Drácula. Ella dice que quiere decir noble, pero estamos
con esto."
¡Cállate! se ordenó a sí misma, pero entonces la Nueva Especie se echó a reír y

ella se relajó.
"Es extraña, pero nosotros la queremos."
"¿Qué pensaba tu padre de dichos nombres?"
Ella vaciló.
"Él era un adicto al trabajo, estaba mucho tiempo fuera del país por temas de
trabajo y estaba fuera cuando nacimos, así que no creo que tuviera mucho que
decir. Prácticamente la dejaba embarazada cuando venía y luego se iba
volando. Bromeábamos con que sabíamos cuando tenía vacaciones contando
nueve meses atrás a partir de nuestros cumpleaños. Ahora está jubilado."
"Debe ser agradable que ahora esté en casa."
"Bueno, mis padres no se han matado el uno al otro aún, así que supongo que
sí que lo es."
Vanni le dio otro trago a su té, quería terminarlo rápido. Tal vez así se callara
antes de que hablara demasiado sobre su familia, sólo para tener un tema de
conversación.
"¿Supongo que estás aquí para la cosa?"
Él parpadeó.
"¿Cosa?"
"Ya sabes. La conferencia."
La Organización de las Nuevas Especies está promoviendo la expansión de la

ONE para hacer una reserva natural y así disfrutar de los animales rescatados.
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Gregory alegaba que en realidad los estaban entrenando para atacar a la gente.
Él estaba loco.
Smiley asintió con la cabeza.
"Sí. ¿Tú también?"
No iba a admitirlo, ni a decirle que había venido con el Pastor Gregory que era
uno de los mayores detractores de las Nuevas Especies. Después de oír las
cosas tan crueles que el padre de Carl había dicho sobre la gente como Smiley
se avergonzaba de que la asociaran con la Iglesia. Él parecía agradable y sin
duda no estaba loco ni trastornado.
"Vacaciones." mintió.
Él asintió con la cabeza.
"Esto es muy bonito aquí en Los Ángeles, me encantan las luces de la ciudad
que se ven desde mi habitación. Es un mundo diferente de donde vengo."
"¿Vives en Homeland o en la Reserva?"
"Homeland." Se bebió casi todo su refresco de un trago. "Estoy aquí

ocupándome del tema de seguridad, acabo de terminar mi turno."
Ella asintió con la cabeza, decidida a cambiar de tema.
"¿Que bebes Red Bull y vodka?" dijo Vanni señalando el vaso que tenía en la
mano.
Él negó con la cabeza.
"La mayoría de mi especie no beben alcohol. Esto es sólo un refresco."
Vanni había oído muchas mentiras del padre de Carl sobre las Nuevas
Especies pero hablar con este Smiley le demostró que estaba equivocado, de
todos modos, no era una sorpresa… el Pastor era un charlat{n. Carraspeó,
tratando de pensar en un tema de que hablar.
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"Sigue mi consejo y disfruta de la ciudad desde tu habitación. Este barrio es
bonito pero yo no me aventuraría a ir unas cuadras más allá. La tasa de
delincuencia es horrible." él arqueo una oscura ceja mientras la miraba
fijamente con curiosidad. "El hermano mayor que he mencionado es policía y
me hizo jurar que no saldría del hotel hasta que no hubiese comprobado la
zona, antes de venir me dio una charla sobre los robos de vehículos, asaltos y
denuncias por violación que se habían presentado. Se comporta como si a mí
me gustara deambular por los callejones a la luz de la luna o algo así." Ella
sonrió. "Siempre seré una niña de cinco años para él, lo juro. Espero que un día
se dé cuenta de que ya soy una adulta pero no me hago ilusiones."
"Él se preocupa por ti."
Vanni estaba completamente relajada.
"Es lo que tienen los hermanos mayores. Se trasladó a Nueva York hace unos
cinco años, pero papá le mencionó mi viaje, así que recibí 'la llamada'. Sé que él
me quiere, a pesar de que me agobia."
"Gracias por la advertencia pero no nos está permitido salir del hotel."
Eso la sorprendió.
"¿Por qué no?"
"Hay un montón de seres humanos que quieren hacernos daño o incluso

matarnos sólo porque existimos."
Le pareció ver un destello de dolor en sus atractivos ojos marrones y esperaba

que él no se diera cuenta de su mirada culpable. El Pastor Gregory y su iglesia
eran parte del problema.
"Son unos idiotas."
"El hotel tiene una buena seguridad así que el lugar es seguro para nosotros,
siempre y cuando nos quedemos dentro. También tenemos nuestros propios
equipos de seguridad pero cada uno tiene órdenes que chocan entre sí."
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Ella miró a su alrededor y luego a él.
"No veo a ningún otro Nueva Especie."
Él vaciló un momento antes de contestar.
"Los dos hombres que están sentados en una mesa del rincón más alejado son
de nuestro equipo especial, están vigilando, siempre vamos en pareja, pero
ahora sólo quería tener un poco de tiempo a solas."
"Lo siento, aquí estoy yo estropeando el momento, me voy."
Empezó a bajarse del taburete para dejarle intimidad.
"No. No era mi intención decirlo en la forma en que ha sonado. Quería

alejarme de ellos, no de ti. Estoy disfrutando de nuestra charla."
Vanni se acomodó en su asiento y bebió un poco de té, pero no pudo resistir la

tentación de mirar hacia la esquina más alejada. Dos hombres altos y fornidos
la miraban desde una mesa. Parecían que la estaban midiendo y sin lugar a
dudas eran parte del equipo de seguridad de Smiley. Ella le miró.
"Espero que no me consideren una amenaza."
Smiley se rió entre dientes.
"Voy a merecer un buen golpe si atacas y me haces daño. No te ofendas."
"Nada, tomo nota." Ella se echó a reír. "Sé que intimido con mi metro y medio.
Esta falda de flores impresiona y va gritando que soy una macarra, ¿no es así?"
Se miró a la falda. "Dios, odio esta cosa."
"¿Por qué la llevas?"
"Porque me lo ordenaron y pensé que era más fácil ponérmela en lugar de

discutir con Carl. He tenido que asistir a una cena y esta era la ropa
apropiada."
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No le dio más de explicación, tomó un sorbo de té y tiró hacia abajo de su
camisa, estaba empezado a sudar.
"Guau. Hace mucho calor aquí".
"Yo estaba pensando lo mismo. Debe estar la calefacción a noventa grados."
"Como mínimo." dijo Vanni haciendo a un lado la pajita y bebiendo

directamente, esperando que el frescor del vaso la ayudara.
Smiley se removió en su asiento y se quitó la chaqueta, debajo llevaba una

camiseta negra sin mangas, dejando al aire los musculosos y bronceados
brazos. Intentó no mirar, pero era difícil.
Cuando dobló la chaqueta para ponerla en el respaldo de la silla se le

abultaron los bíceps al flexionarlos, se notaba que era alguien que se trabajaba
mucho en el gimnasio. No pudo menos que admirar sus anchos hombros, que
resaltaban con la camiseta que llevaba. Era igual que los culturistas que veía a
diario en su gimnasio, él sonrió.
"Eso debería ayudar." se detuvo sorprendida antes de que él se diera cuenta.
Se obligó a apartar la mirada de su cuerpo y mirarle a la cara.
"Estas en muy buena forma física."
Oh dios mío, acabo de decir eso en voz alta.
"Soy una Especie." Él se encogió de hombros. "Es por la genética y estoy en

Seguridad. ¿A qué te dedicas?"
"Soy un Jockey de silla."
Eso hizo que levantara una ceja de nuevo.
"¿Qué es eso?"
"Trabajo en una oficina sentada detrás de un escritorio la mayoría de los días,

mi versión de hacer ejercicio es volver atrás a coger el teléfono si me lo he
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dejado en mi escritorio cuando fui a enviar un fax o a la fotocopiadora, la
mayoría de las veces tengo que lidiar con un montón de papeleo. El término
técnico para definir mi trabajo es secretaria ejecutiva pero prefiero Jockey de
silla. Suena más interesante que lo que realmente es."
"Me gustaría que de vez en cuando fuera así mi versión del ejercicio. Corremos
un montón de millas al día y estamos entrenando todo el tiempo."
"¿Como entrenáis? ¿Con armas de fuego o es lucha?"
"Lucha cuerpo contra cuerpo y sí, sabemos cómo usar las armas, queremos
mantener nuestros reflejos físicos a punto. Pero el entrenamiento en el combate
es lo que principalmente hacemos."
Vanni miró los brazos musculosos y los anchos hombros de nuevo. Smiley era
exactamente lo contrario de su prometido. Carl era abogado y el único ejercicio
que hacía era mover los palos de golf en el club de campo.
Esta fofo y blando, sólo unos centímetros más alto que ella y tenían casi el
mismo peso. Smiley tenía que pesar cien kilos más que ella y parecía alto,
incluso así sentado. Era muy atractivo y ella se había dado cuenta.
Tengo que estar ciega para no hacerlo. No te olvides de que estás

comprometida.
Bebió un poco más de su té, pero ni siquiera la bebida helada la aliviaba ni la

refrescaba
"Hace cada vez más calor aquí."
Vanni podía sentir como el sudor corría por su espalda y entre sus pechos. Se
removió en el asiento, deseando no llevar una falda que le llegaba casi hasta
los tobillos, sentía los muslos húmedos, como si estuvieran sudando.
"Tal vez debería pasar más tiempo en este bar y con más frecuencia. Es como
una sauna. Así ¿quién necesita ejercicio?"
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Smiley levantó el brazo y agito la mano para llamar la atención del camarero.
El hombre se acercó pero parecía reticente hacerlo y se mantuvo a distancia
detrás del mostrador.
"¿Qué desea?"
"La señorita tiene calor y yo también ¿Por favor, podría subir el aire
acondicionado?"
"Claro." Se dio la vuelta y casi echo a correr hacia el lado opuesto de la barra.
"'Esto es dar un buen servicio, después de recibir un buena propina." murmuró

Vanni.
"Me ha parecido que estaba asustado." dijo Smiley mirándola.
"¿Eso crees?"
Él asintió con la cabeza, Vanni le miró los brazos.
"Te has quitado la chaqueta."
"¿Y?"
Ella se lamió los labios y se removió en el asiento. Estaba empezando a

marearse y se agarró al borde de la barra para mantener el equilibrio hasta que
se le pasara.
"Eres muy intimidante."
"¿Eso es tan terrible?"
"Es probable que se diera cuenta de que podrías patearle el culo."
"Oh. Nunca atacaría a nadie sin una buena razón. ¿Debería decírselo que para
que no se asuste? Yo no soy una amenaza para ese macho."
Vanni negó con la cabeza.
"Sólo ignóralo. Algunas personas son unos idiotas paranoicos."
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Smiley bebió otro sorbo de su refresco.
"Tú crees que le he aterrorizado sólo por ser una Especie."
"A mí no me aterrorizas. Eres una persona muy agradable."
"Gracias."
Él alzó la muñeca para echar un vistazo a su reloj.
"¿Tienes que irte?"
"No, pero no puedo creer que ya sean las diez de la noche, no me parecía que
fuera tan tarde. Creo que debería acabar mi bebida e ir a mi habitación.
Mañana por la mañana tengo que hacer el turno temprano."
"Sí, yo también debería irme a mi habitación pronto, pero creo que antes voy a
comer algo. Comí poco en la cena."
Él la estudió.
"¿No era buena la comida?"
"Tuve que cenar con algunas personas que dijeron cosas que me pusieron
enferma. En cierto modo me quitaron el apetito. Son unos idiotas. Parece que
esta noche va de eso la cosa."
"Entonces, ¿por qué comes con ellos?"
"No tuve más remedio. Fui allí por otra persona."
Él pareció entender eso.
"Aquí tienen buena comida. Cené aquí ayer, te recomiendo el filete."
Parecía que le gustaba la carne como a Vanni. Carl era vegetariano. La imagen
de una cebolla blanca con la cara de Carl sobre ella le vino de repente a la
cabeza y se echó a reír a carcajadas. Una mano firme la agarró por del brazo.
"¿Estás bien?"
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Miró a Smiley y la risa desapareció. Era muy guapo y notó que olía muy bien.
"¿Qué colonia que llevas?" dijo olfateando el aire, quería estar más cerca para
olerlo mejor, se inclinó hacia delante y casi se cayó del taburete.
"¿Vanni?" Smiley la agarró del otro brazo para sujetarla. "¿Que te ocurre?
Tienes las pupilas dilatadas y prácticamente estás jadeando."
¿Soy yo?
El mareo se le había pasado pero aún se sentía algo mareada. Se concentró en

la respiración y se dio cuenta de que Smiley tenía razón.
"Estoy ardiendo y…" Miró lo poco que quedaba de su té helado, "me siento
como si estuviera borracha. Creo que el camarero se ha equivocado de bebida,
le dije té helado, no un Long Island Iced Tea."
"No lo entiendo."
Vanni levantó la cabeza y le miró a los ojos de nuevo, eran preciosos.
"Uno tiene alcohol y el otro no. Yo, um, creo que me dio el que tiene alcohol.
Tienes unos ojos de ensueño." Se dio cuenta de que había dicho que la última
parte en voz alta. "Lo siento. No era mi intención decir eso."
Él se inclinó un poco acercándose más, hasta que sus rostros estuvieron a

pocos centímetros de distancia. No pudo evitar mirarle fijamente a los labios,
se veían tan besables y suaves, a pesar de que él era tan masculino.
"¿Vanni? ¿Qué puedo hacer? ¿Debería llamar a alguien? ¿Tienes alguna amiga
aquí en el hotel que te pueda acompañar hasta tu habitación? También puedo
llamar a la seguridad del hotel, te llevaría yo mismo, pero creo que sería
inapropiado."
Vanni se estremeció, al imaginar a su compañera de habitación ir corriendo a

contárselo a Carl si llegaba en ese estado.
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Él le había ordenado que se fuera arriba y no estaría muy contento cuando se
enterara que se había ido al bar en su lugar. Se volvería loco si se enteraba de
que Smiley la había acompañado hasta la puerta y seguro que se enteraría, si
Mable veía a Smiley.
"No voy a aprovecharme de ti. Estás a salvo."
"No es eso." dijo negando con la cabeza y se arrepintió cuando la habitación

empezó a dar vueltas. "Es por mi compañera de habitación. Mierda. Eso sería
horrible."
Él la ayudó a sentarse erguida en el taburete y le soltó los brazos.
"Debes comer algo. Voy a pedir comida."
Los músculos de su estómago se apretaron hasta que lo que sentía casi era
dolor.
"No." Dijo.
Se agarró al borde de la barra con más fuerza e intentó averiguar qué le estaba
pasando, estaba mareada, sudaba y el dolor de estómago se intensificó y le
llegaba a esa parte de entre sus piernas. Abrió los ojos como platos cuando su
clítoris empezó a palpitar como si tuviera ahí mismo el corazón.
"Oh, mierda."
"¿Vanni?" La voz de Smiley era suave. "¿Qué puedo hacer por ti? Quiero
ayudarte."
Vanni cerró los ojos e intentó ralentizar la respiración.
En su lugar, eso le hizo ser más consciente de sus pechos, que empezaron a
dolerle, y estaba segura de que tenía los pezones duros, definitivamente algo
andaba mal. Sintió otro sofoco y reprimió el impulso de arrancarse la ropa ya
que sentía como si su piel estuviera ardiendo. Pasó ese momento y el alivio se
extendió por todo su cuerpo durante unos segundos, hasta que empezó a
sentir escalofríos. Había pasado en un instante del calor al frío.
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"¿Vanni?" Smiley se inclinó y puso su boca casi en su oído. "¿Necesitas un
médico? Pudo ver si hay uno en el hotel."
Ella abrió los ojos y giró la cabeza. Empezaron a castañetearle los dientes y a
temblarle todo el cuerpo.
"Estoy helada." admitió.
Él frunció el ceño y llamó a su equipo.
"Necesito ayuda aquí." dijo en voz alta. "¡Ned!"
Al instante los dos hombres estaban junto a ellos.
"¿Qué pasa, Smiley?"
"Tienes conocimientos médicos, ¿verdad?" pregunto Smiley al moreno. "Échale

un vistazo."
El hombre se puso al otro lado se apoyó entre los dos taburetes y la agarró por
los hombros, obligándola a volverse hacia él y miró sus ojos azul claro. La
soltó de los hombros y le agarró la muñeca. Pasaron los segundos, frunció el
ceño y miró a alguien que estaba detrás de ella.
"Creo que está tomando drogas."
"Yo no tomo drogas."
Vanni estaba horrorizada ante esa implicación. Ned frunció el ceño y le

sostuvo la mirada.
"¿Qué has tomado?"
"No he tomado nada. Te lo juro. Yo jamás... "
Una ráfaga de dolor le atravesó el vientre y se extendió más bajo, hasta su

clítoris. Los escalofríos se fueron y empezó a sudar de nuevo.
"Mierda." La voz de Smiley se oía profunda, casi inhumana. "Desaloja el bar

ahora. Alerta de Seguridad tenemos una situación de urgencia."
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"Tenemos que llamar a una ambulancia." dijo Ned. "Ella está en lo más alto
como una cometa."
"Haz lo que te digo." gruñó Smiley. "Despeja el bar y avisa a nuestra gente.
Suéltala."
Ned maldijo y la soltó, mientras se alejaba sacó su teléfono móvil e hizo un

gesto con la cabeza al otro hombre.
"Despeja el bar mientras, haré la llamada."
Vanni volvió la cabeza para mirar a Smiley mientras se bajaba del taburete y
cogía la chaqueta y se la puso sobre los hombros, luego puso las manos a cada
lado de su asiento, girándola hacia él. Se inclinó hacia ella y sus fosas nasales
se dilataron cuando la olfateó. Vanni observó su rostro bronceado que ahora
estaba pálido ante de levantar la mirada para encontrarse con la suya.
"¿Qué has hecho?"
"Nada."
Smiley apretó los labios y un músculo de su mandíbula latió con fuerza. Hizo
un ruido sordo, parpadeó un par de veces y tragó saliva antes de hablar.
"Puedo olerlo. Se nota que hay droga, Vanni. ¿De dónde has sacado eso? ¿Y
por qué lo has tomado?"
Ella intentó no entrar en pánico pero fracasó.
"No sé de qué estás hablando. ¿Qué me está pasando?"
La dureza de sus rasgos y la manera en que sus ojos se entrecerraron le daban

miedo.
"Al menos, ¿te han advertido sobre lo peligroso que es tomar eso?"
Ella se distrajo cuando la gente comenzó a quejarse en voz alta. Giró la cabeza
y vio cómo una rubia era sacada a la fuerza por los guardias de seguridad y
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desalojaron el bar. Hombres vestidos con uniformes negros se apresuraron
para ayudarlos.
"¿Vanni?"
Ella miró a Smiley y le preguntó.
"¿Qué está pasando?"
"Eso es lo que me gustaría saber." dijo una voz profunda.
Se dio la vuelta y miró fijamente a la Nueva Especie que había llegado, llevaba
un traje negro, bien cortado. Era un diseño de calidad. Conocía esa cara y parte
de su miedo se alivió mientras miraba a Justice North. Él salía en la televisión a
menudo y había visto un montón de entrevistas que le habían hecho. Apenas
la miro antes de centrar su atención en Smiley.
"Inhala." le susurró Smiley.
Justice respiró profundamente y su atención se centró en ella. Sus ojos felinos

se entrecerraron.
"Mierda."
"Mi sentido del olfato no es tan bueno como el tuyo, pero estoy en lo cierto
¿no?" le preguntó Smiley.
"Sí."
Vanni se estremeció de frío, a pesar de tener la chaqueta de Smiley que la

cubría, la agarró de los bordes, apretándola con fuerza contra su cuerpo.
Quería acurrucarse y hacerse una bola sólo para tratar de entrar en calor.
"¿Para quién trabajas?" Justice North la fulminó con la mirada.
"No sé de qué me está hablando."
"Esto es aún peor." le susurró Smiley. "Creo que ella también ha echado algo
en mi bebida."
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Se oyó un gruñido aterrador proveniente de Justice North y dejó ver unos
afilados colmillos que daban miedo, sin apartar los ojos de ella habló con
Smiley.
"¿Lo crees o sabes a ciencia cierta que te han drogado?"
"Estoy casi seguro de que así es. Estoy sudando, mi ritmo cardíaco está
acelerado y voy a reventar mis pantalones vaqueros. Ella me resulta atractiva y
estoy empezando a estar dolorido. No he bebido lo suficiente como para
perder el control pero estoy ardiendo."
"¿Donde es la emergencia?"
Llegó otro Nueva Especie, con el uniforme de la NSO, llevaba el pelo negro
recogido en una cola de caballo y era enorme. Olfateó el aire y gruñó.
"Traficantes de drogas. Puedo olerlo. "
"Procede de ella." le informó Smiley. "Se lo ha bebido y también me lo echó a

mí en el vaso, Brass."
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Capítulo Dos
"Me quiero ir ahora."
Vanni estaba asustada y confundida. Estaban hablando de ella como si se

hubiera drogado a sí misma y a Smiley. Trató de deslizar del taburete y
escapar, pero Smiley le impidió salir cogiéndola por las caderas y empujándola
hacia atrás contra el asiento.
"Quieta."
Sus manos eran cálidas, donde la retuvo y se dio cuenta de nuevo de lo bien
que olía. No podía creer que se fijara en eso con todo lo que estaba sucediendo,
pero lo hizo.
"¿Qué me está pasando?"
Miró a los ojos a Smiley, esperando que se lo dijera. Alguna emoción brilló en
ellos pero no podía identificarlo. Volvió la cabeza hacia otro lado, pero
mantuvo el agarre mientras miraba a Justice North.
"No creo que le advirtieran de lo que pasaría. Está asustada. Nadie puede
actuar tan bien."
"Tenemos que conseguir sacaros a los dos de aquí." Justice sacó un móvil de su
bolsillo. "Voy a pedir que dos SUV den la vuelta al hotel y saldréis por una
puerta trasera, en lugar de pedir al hotel permiso para usar su helipuerto. Es la
forma menos sospechosa. Hay demasiados periodistas en escena. El Centro
Médico estará esperándoos cuando lleguéis a Homeland. Se os llevará en
vehículos separados."
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"No." Smiley negó con la cabeza. "El viaje durará alrededor de dos horas y va a
atacar a los hombres si los síntomas empeoran."
"Pueden contenerla."
Justice se dio la vuelta y caminó unos metros para hablar por teléfono.
Mantuvo la voz baja para que no pudiera oír lo que se dijo. Miró alrededor de
la habitación y se aterrorizó al ver la barra vacía, excepto por Nuevas Especies
y hombres vestidos con uniformes de la NSO. Contó más de una docena.
"¿Vanni?" miró a Smiley. "Se va a poner mucho peor. ¿Cuánto te duele?"
"Mucho." admitió.
Su estómago ardía y era muy consciente de la zona entre sus muslos.
"¿Qué hay de malo en mí? ¿Es veneno?"
"Algo peor." Se inclinó hasta que sus rostros estaban cerca. "Eso que pusiste en
nuestras bebidas es una droga de cría."
"No sé de qué estás hablando, pero yo no lo hice."
"Te sentaste a mi lado. Eres la única del alrededor con la que bajé la guardia."
"Yo no hice nada."
Su expresión se suavizó.
"Quiero creerte." Él miró a su alrededor y luego habló con el tipo con la cola de
caballo. "Brass, ella dice que no lo ha hecho. Tal vez fue otra persona."
El macho se adelantó y examinó a Vanni.
"¿Dónde está tu bolso?"
Le dio unas palmaditas, quitándole la tarjeta llave de hotel del bolsillo de la

falda y luego frunció el ceño, mirándola fijamente.
"¿Dónde está tu identificación?"
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Vanni luchó para formar palabras.
"No la llevo. La dejé en mi habitación. "
Brass frunció el ceño.
"Eso es sospechoso. Los humanos siempre llevan ciertas cosas y ella no lleva
nada. Ni bolso. Sin licencia de conducir. ¿Alguno de los otros huéspedes del
hotel se acercaron a ti, Smiley?"
"No. Sólo el camarero y ella."
"Ya le investigamos, por ahora. Todos los humanos que trabajan aquí tuvieron
exhaustivos controles de antecedentes. Ella parece ser culpable."
"¿Qué va a pasarme? ¿Van a llamar a una ambulancia?"
El malestar de Vanni fue una espiral por el miedo.
"Un hospital humano no puede ayudarnos. Tenemos que ir a Homeland. Esa

droga fue inventada para las Nuevas Especies. Nuestros médicos tienen más
conocimiento que los vuestros." Smiley se inclinó más cerca, sosteniéndole la
mirada.
Un fogonazo la golpeó y ella gimió cuando su piel comenzó a sentirse como si

estuviera en llamas. Soltó las solapas de la chaqueta y se aferró a los brazos de
Smiley. Una sensación punzante atravesó su estómago y sacudió la parte
inferior de su vagina. Gritó y se aferró a Smiley. Se sentía como si alguien la
estuviera destrozando con una espada.
"¿Alguien tiene un arma de aturdimiento? Tenemos que dormirla."
Vanni se alarmó cuando alguien dijo eso. ¿Iban a hacerle daño? Gimió y se
inclinó hacia adelante, presionando su cara contra el hombro de Smiley. Él la
acercó y se lo permitió.
"No." respondió una voz. "Uno de nosotros podría golpearla con fuerza
suficiente para noquearla."
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"No" Smiley fulminó con la mirada. "Nadie va a pegarle."
"Esto va a empeorar." respondió otro hombre con voz profunda. "Sería un acto
de bondad. Es humana. Darle un sedante con el fármaco de cría podría
enviarla a un paro cardíaco."
"Podría morir de todos modos." dijo otra persona.
"Los SUV estarán aquí pronto." Justice North estaba de vuelta. "Tienen que
inspeccionarlos primero para asegurarse de que no han sido manipulados en
el parking. ¿Cómo está ella?"
"No muy bien." Smiley le soltó las caderas y le frotó la espalda. "Le duele
mucho."
"Apuesto a que sí. Aléjate, Smiley. Puedo oler su necesidad a cuatro metros de
distancia. Brass, ¿crees que podrías golpearla y dejarla inconsciente sin causar
daños?"
"No lo sé. Son más frágiles que nuestras mujeres."
Ned, el médico, habló.
"Podría colocarla en un asimiento de estrangulación hasta que pierda el

conocimiento. Sé cómo hacerlo sin causar daño permanente, pero no duraría
mucho tiempo."
"Nadie va a hacerle daño." Smiley sonaba enfadado.
"La alternativa es contenerla y permitir que siga en agonía hasta que llegue a
Homeland." suspiró Justice. "¿Qué sería más cruel?"
Vanni se lanzó a los brazos de Smiley y se aferró a su camiseta.
"Ayúdame."
Él había sido agradable y había dicho que no iba a dejar que nadie le hiciera
daño. Estaba asustada, rodeada de extraños y le dolía más de lo que nunca
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podía recordar. El sudor la cubría y se encogió de hombros, tratando de
librarse de su chaqueta.
Smiley pareció entender y se lo quitó. No sirvió de nada. Estaba ardiendo y

aturdida.
"Tengo fiebre."
"Es la droga."
Smiley ajustó la postura y se enderezó. Pero no aumentó la distancia,

manteniéndose en el taburete, con el cuerpo bloqueando a los demás.
Ella presionó su rostro contra su pecho. Olía increíble. Levantó la barbilla y

cuando sus labios rozaron la piel caliente en la parte superior de su chaqueta,
el impulso de lamer la agarró. Se resistió pero apostó a que sabía tan bien
como olía.
¿Qué demonios estoy pensando? ¿Qué está mal conmigo?
Sintió pánico creciente.
"¡Smiley!"
Le necesitaba para ayudarla o llevarla a un hospital. Él se aclaró la garganta.
"Dejadnos en paz."
"No." Justice sonaba más cerca. "Tenéis que ir a Homeland."
"Los dos estamos sufriendo. No voy a perder el control. Despeja la habitación

y danos algo de privacidad."
"Eso no va a pasar. Eso sería hacer lo que deseaba el que planeó esto." declaró
Justice, con voz sombría. "Estoy seguro de que ellos creían que la matarías. Te
la administró el interior de un bar lleno de seres humanos. Habrías caído si no
te hubieras dado cuenta de lo que estaba pasando y llegamos a tiempo para
evitar una tragedia."
29
Smiley llegó entre ellos y curvó sus manos sobre las de ella.
"Vamos, Vanni."
No quería y se negó. Se apartó y suavemente quitó sus dedos de la fina tela.

Echaba de menos la seguridad de su proporcionado cuerpo y gimió,
mirándole fijamente a los ojos. La sorprendió agachándose para ponerlos al
mismo nivel.
"Vanni, ¿sabes lo que hace la droga de cría?"
"No suena bien."
"Basta." ordenó el alto Nueva Especie con cola de caballo. "La interrogaremos
en Homeland."
Smiley no le hizo caso.
"Es una droga que Industrias Mercile inventó para forzar a las Especies en un
deseo apremiante de tener relaciones sexuales. Hemos oído que estaban
tratando de crear una versión humana y huele como si tú la hubieras tomado.
Estás sudando el aroma a través de los poros."
Distraída por el dolor que sufría, Vanni tuvo que luchar para entender lo que
le estaba diciendo.
"¿Igual que el GHB?" Había oído hablar de drogas de violación. "Pensé que
hacía perder el conocimiento."
"Smiley," interrumpió Justice, "has dicho que ella es la que te ha dosificado."
"Ha dicho que no lo hizo."
"¿Y tú la crees?"
"No lo sé, pero estoy seguro, si lo hizo, de que quien le dio la droga no le dijo
lo que iba a pasar. De cualquier manera, debe tener opciones y saber a lo que
se enfrenta. Debe decidir."
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Justice North maldijo en voz baja.
"Hazlo."
Smiley respiró hondo y explicó:
"No te vas a desmayar. El dolor empeorará, es la mejor conjetura. Para las

Especies es insoportable y nos puede volver locos. El único alivio está en no
luchar contra la droga."
"Todavía no lo entiendo."
Ella gimió cuando el latido entre sus piernas se intensificó. Se sentía como si
estuviera siendo pellizcada en su clítoris. No era nada agradable.
"Puedes estar de acuerdo en tener relaciones sexuales conmigo para detener

dolor o puedes sufrir. Es así de simple."
Ella se horrorizó y debió haberlo demostrado en su expresión, porque él

frunció el ceño.
"Es tu elección. Vamos a contenerte, para que no ataques a nadie ni te hieras a

ti misma. Sólo tienes que aguantar, Vanni. Nos van a llevar a Homeland y a
nuestros médicos lo más rápido posible. Te ayudarán." Se puso de pie,
liberándola, y se dirigió a Justice North. "Vámonos. Querrás restringirme como
medida de precaución, pero estoy manejando el medicamento bien hasta
ahora."
"Los SUV ya están en la salida." declaró uno de los hombres de seguridad de la

ONE. "Están esperando. Larguémonos de aquí."
Smiley retrocedió y dos de los humanos uniformados de la ONE se

adelantaron y cogieron a Vanni por los brazos. No fueron rudos, pero la
pusieron de pie. Al segundo en que puso el peso sobre sus piernas ella gritó.
Sus rodillas cedieron y se habría derrumbado en el suelo si no la hubieran
estado sujetando. Un intenso dolor punzante le picó de pies a cabeza.
"¡Muévete! Suéltala."
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Smiley estaba allí de repente, empujando a los hombres a un lado y cogiéndola
en sus brazos. Vanni se aferró a él. Algo del dolor se alivió y aspiró su
maravilloso aroma. Hundió la cara en su garganta caliente. Se sentó, poniendo
su culo en su regazo, y le acarició la espalda.
"Céntrate en mi voz. Estoy aquí. Te tengo." dijo con voz áspera contra su oído.
"Smiley." Justice North instó. "Dásela a Brass. La llevará al SUV."
"Vanni, tenemos que irnos. Necesitas atención médica y no podemos hacerlo

aquí."
Ella levantó la cabeza y miró a Smiley.
"No me dejes."
Estaba aterrorizada de que unos extraños tomaran su lugar.
"No puedo ir contigo porque estoy demasiado drogado. Es mejor si nos

separan."
El tipo con la cola de caballo llamó su atención cuando se acercó y le tendió los
brazos.
"Dámela."
Soltó a Smiley y se la pasó al gran Nueva Especie. El dolor punzante en su

estómago volvió y ella gritó. Se volvió con ella, caminando hacia la parte de
atrás de la barra. Ella se retorcía en sus brazos, agarrándose el chaleco
protector. Pasaron a través de una puerta que mantenían abierta los agentes de
la ONE. El aire frío le tocó al pisar fuera.
"¡Alto!" Vanni no podía soportar el dolor. "Llévame de vuelta."
Se detuvo y la miró. El callejón estaba en penumbra, pero unas pocas luces le

ayudaron a ver. Era un hombre apuesto, aunque su apariencia daba miedo.
"Te llevaremos a Homeland lo más rápido posible. Habrá un helicóptero en

modo de espera, por si empeoráis por el camino. Podemos lograrlo y hacer que
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tome tierra cerca para cambiar de transporte. Pero primero tenemos que salir
de la ciudad."
"No puedo aceptar esto." Las lágrimas llenaron sus ojos. "¿Smiley decía la
verdad?"
"Apestas a medicamento de cría."
"¿Hay una manera de contrarrestarlo?"
"No. Vas a tener que dejarte montar o una vez que estás en el Centro Médico
pueden intentar ayudarte. No podemos correr el riesgo de darte otras drogas
hasta entonces. Algunos Especies han muerto de esa manera en el pasado. Sus
corazones dejaron de latir. Querrás estar con nuestros médicos para que
puedan salvarte."
La gravedad de la situación dio en el blanco.
"¿Voy a morir?"
Él frunció el ceño.
"No lo sé. Esto podría ser una versión diferente de la droga de la que hemos
oído. Huele igual, pero tus reacciones son más leves de las que nosotros
sentimos."
"¿Leve? Me siento como si estuviera siendo arrancado a jirones de adentro

hacia afuera." Ella jadeó. "Esto tiene que ser peor que el parto."
"No estás gritando y no tienes convulsiones. Eso es lo que ocurre cuando las
Especies luchan contra la droga, al negarse a tener sexo."
"¿El sexo realmente detiene el dolor? ¿Hablas en serio?"
"Sabemos que el fármaco está diseñado para crear impulsos sexuales

incontrolables, así que el sexo anula los sensores del dolor. La mayoría de
nosotros no recuerda lo que sucede después de ser dosificado cuando el dolor
se vuelve demasiado fuerte."
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"Moveros." ordenó alguien detrás de ellos. "Nos largamos."
Brass la llevó al SUV negro más cercano y uno de los guardias NSO abrió la
puerta. Brass se dirigió a él.
"Trae las restricciones blandas. Tiene que estar restringida para no hacerse
daño a sí misma. Uno de vosotros tendrá que sentarse en la parte de atrás con
ella, para evitar que se golpee la cabeza con el cristal, si quiere hacerlo."
Eso fue el colmo para Vanni. ¿Cuánto más dolor se creía que iba a sufrir si
intentar golpear su cabeza contra una ventana era una preocupación real?
"Sólo golpéame. Noquéame."
Brass frunció el ceño. Ella respiró hondo y gritó para obtener su punto. Lo
decía en serio.
"¡Golpéame!"
Se inclinó y la dejó en el suelo inestable.
"Tengo miedo de causarte daño permanente."
"Ya estoy en agonía, maldita sea. Sólo tienes que hacerlo."
Ella levantó la barbilla y cerró los ojos, esperando que no le hiciera demasiado
daño.
El golpe nunca llegó. Unos brazos fuertes envolvieron su cintura y su espalda

se apoyó contra el lado de la camioneta. Un cuerpo grande la inmovilizó allí.
Abrió los ojos y se sorprendió al darse cuenta de que Smiley la tenía.
"Nadie va a golpearte. Podrían romperte los huesos. Eres demasiado frágil.

Puedes aguantar el dolor. "
Las lágrimas rodaron por sus mejillas.
"No puedo."
"Smiley." instó Brass, "Tendré cuidado."
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"Ni hablar. No puedes garantizar que no le vas a romper la mandíbula."
La cara de Smiley tenía una expresión de enojo y de repente la levantó del

suelo, poniendo su cara a su nivel.
"Juré que nadie te haría daño y yo mantengo mi palabra. Voy a besarte. Eso te
distraerá del dolor."
Vanni olvidó cómo respirar cuando él se inclinó y bajó la mirada hacia su boca.
Podría haberle dado la espalda, pero no lo hizo. Le hubiera gustado culparle
por lo de la droga, por el dolor, pero tuvo que admitir que le deseaba. Parecía
más probable que hubiera muerto y había sido atraída por él desde que se
conocieron. Cerró los ojos y disfrutó de la primera caricia de sus suaves labios
tocando los suyos.
Se presionó más contra ella y alzó su cadera para enredar sus dedos en su pelo
cuando profundizó el beso. Él sabía a cerezas... probablemente el sabor de su
refresco. El dolor se desvaneció para ser sustituido por necesidad. Deseaba a
Smiley más de lo que nunca había deseado a cualquier hombre. Sus pechos le
dolían y el deseo de frotarse contra él, de sentirle dentro de ella, se hizo tan
intenso que se quejó de la necesidad.
"Suéltala." exigió una voz profunda. "¡Smiley!"
Smiley rompió el beso y se dio la vuelta para disparar una mirada feroz a
Brass.
"No vas a golpearla."
Smiley la enfrentó de nuevo. Estaba demasiado oscuro en aquel callejón para

ver sus ojos realmente.
"Déjame cuidar de ti. Puedo mantener alejado el dolor con el placer."
"Es una mala idea." Brass bajó la voz. "No hay que olvidar que ella podría ser
la persona que ha echado droga en tu bebida."
Smiley le sostuvo la mirada.
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"No importa. No puedo soportar verla sufrir, sabiendo el dolor que
enfrentará."
Liberó la mano de su cabello y la agarró por las caderas, frotándose contra ella.
La sensación de su polla dura atrapada dentro de sus pantalones vaqueros
rozándose contra su clítoris terriblemente hinchado era celestial. El placer la
hizo cerrar los ojos y gemir más fuerte. Una parte de ella se horrorizó por que
hubiera gente a su alrededor, unos desconocidos, pero le quitó el dolor. Se
aferró a Smiley como si fuera un salvavidas. Se había convertido en su
prioridad. Abrió las piernas y las envolvió alrededor de sus caderas,
encerrándose con él.
"Asegurad el perímetro." exigió Smiley. "Dadnos privacidad."
"Joder." murmuró Brass enojado. "Ya le habéis oído. Bloquead el área y dadles
espacio. Los ojos en otro lugar. "Él hizo una pausa. "Por lo menos entrad en el
edificio, Smiley."
Apenas escuchó las palabras cuando Smiley continuó rozando sus caderas,
empujando contra ella en un ritmo lento que hizo imposible pensar. Su clítoris
estaba tan sensible que no podía concentrarse en nada más que en el ritmo
firme de su sexo contra el de ella. Era la más poderosa conciencia de un
hombre que jamás había experimentado.
Sus manos dejaron sus caderas y se deslizaron a su culo, ahuecando ambas

mejillas y moliendo sus cuerpos juntos con mayor eficacia. Vanni hundió la
cara en su cuello y abrió la boca, desesperada por probar cualquier parte de él,
ya que había dejado de besarla. Ella le lamió un poco la oreja y luego se aferró
al lóbulo, chupándolo ligeramente. Se estremeció contra ella y soltó un
atractivo sonido. Su boca encontró su garganta y rozó besos allí.
"Vanni."
Su nombre en sus labios la hizo arder por dentro. Puede que fuera otro
fogonazo pero no le importaba. No podía acercarse lo suficiente a Smiley con
la ropa puesta. Necesitaba sentir su piel y le dolía por tenerle en su interior.
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Una imagen destelló en su mente... como se sentiría si estuvieran desnudos y
él la follaba... enviándola al orgasmo.
Vanni le soltó la oreja y presionó sus labios contra su garganta, gritando. Todo
su cuerpo se estremeció de la fuerza del mismo. El éxtasis rasgó lejos cualquier
sentido de la realidad, mientras cabalgaba la madre de todos los clímax.
Smiley calmó sus caderas, su respiración era áspera.
"Estoy aquí. Todavía te tengo."
Poco a poco, se dio cuenta de su entorno. El aire de la noche le heló la piel. Su

falda estaba subida y agrupada entre sus muslos y sus vaqueros. Su pene
estaba duro y presionaba firmemente contra su coño, a través de las capas de
ropa. No se había corrido en su ropa interior desde que era una adolescente
jugando con su primer novio, con demasiado miedo a tener relaciones
sexuales por miedo a que le doliera cuando perdiera su virginidad.
"Oh dios." susurró.
Sus grandes manos se suavizaron bajo su culo y él se separó un poco, dando

más espacio entre él y el SUV. Ella abrió los ojos y miró a su alrededor. Cuatro
hombres estaban a unos diez metros de distancia, en el oscuro callejón, en
frente del vehículo. Sus espaldas estaban vueltas y parecían estar vigilando la
entrada de la calle. Un coche pasó, pero no se detuvo.
Volvió la cabeza. La puerta del hotel estaba cerrada y un guardia vestido de

negro la bloqueaba. Miró hacia la parte trasera del vehículo y vio más guardias
apostados por el callejón. Estaban lejos también, pero parecían estar allí para
asegurarse de que nadie se tropezara con Smiley y ella.
"¿Vanni?"
La vergüenza era una cosa horrible pero tenía que mirarle a los ojos. La mirada
de preocupación en su hermoso rostro sólo lo hizo peor.
"Bájame."
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La dejó en el suelo. Sus rodillas temblaron, amenazando con ceder bajo su peso
cuando se puso de pie. Smiley la soltó y ella se retiró, dejándolo ir. Los
temblores empeoraron y se apoyó contra el costado de la camioneta para
mantenerse en pie por sí misma.
"¿Todavía sientes dolor?"
No podía hablar, pero negó con la cabeza. Había saltado sobre él en un callejón
detrás de un bar. Sus padres estarían horrorizados por su conducta lasciva y
también cualquier persona que la conociera. Smiley no tenía la culpa. Ella
prácticamente le había suplicado que la ayudara y él lo había hecho.
"Esto no ha terminado."
"¿Qué?" no podía haberle oído bien.
"Puede durar horas."
"No. Eso..."
"Es un corto respiro que algunos de nosotros sentimos después de encontrar la

liberación, pero en cuestión de minutos los síntomas regresan."
"No." no quería creerle.
Dio unos pasos hacia atrás.
"¿Brass?"
La Nueva Especie se dio la vuelta y corrió más cerca de su posición en la parte

delantera de la camioneta. Smiley se reunió con él a mitad de camino.
"He precintado la bolsa con nuestras bebidas. No me lo bebí todo. Tal vez
podamos encontrar huellas dactilares en el cristal para probar su inocencia.
Uno de los huéspedes del hotel podría haber puesto la droga en algunos de los
vasos vacíos y sólo esperó a que fueran utilizados."
"Ya está hecho." Brass mantuvo su voz baja. "Estamos llevando todo a
Homeland como prueba. Tenemos que salir de aquí. Los periodistas quieren
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saber que pasó que causara que bloqueáramos el bar y están entrevistando a
los seres humanos que se encontraban en el interior en ese momento. Justice se
niega a responder a sus preguntas hasta que nos hayamos ido, pero podrían
conseguir información de los de seguridad. Ellos no registran sonido pero
tienen vídeo. Es sólo cuestión de tiempo antes de que se den cuenta de que
está desaparecida."
Los ojos de Vanni se agrandaron cuando la humedad se filtró por sus muslos.
Tenía que ser debido a que acababa de correrse, pero era mucho. Sus pezones
se hicieron más pesados hasta que fue doloroso y una aguda sensación
punzante sacudió su vagina y se extendió hacia arriba a su caja torácica. Se
quedó sin aliento y se dobló.
"¡Vanni!"
Smiley estaba a su lado un instante después, una mano agarrando su hombro

y la otra en su cadera.
No podía respirar. Una terrible agonía rasgó a través de su centro y lo único

que la impedía caer al suelo era Smiley. El corazón le latía con tanta rapidez
que se preguntó si tendría un ataque al corazón. El dolor le apuñaló el pecho.
Levantó la cabeza y fue cegada por las lágrimas mientras trataba de mirarle a
los ojos. Tenía que ser consciente de su tortura.
"Deja que te ayude."
Ella asintió. Hubiera hecho cualquier cosa, probaría lo que fuera, para hacer
que se detuviera. Él cambió su agarre y la obligó a enderezarse. Ayudó que
ella aspirara una bocanada de aire, antes de que las lágrimas cayeran por sus
mejillas. Le soltó la cadera y las limpió con el pulgar.
"Estoy aquí. Haré lo que sea necesario."
Le necesitaba para hacer que el dolor desapareciera. Sus besos y su toque

convertían el dolor en placer. Fue casi instintivo que hiciera un puño con su
camisa y le obligara a acercarse. El sonido de la tela al rasgarse fue impactante.
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Era más alto, pero ella usó su otra mano para agarrar un puñado de su negro
pelo, tirando de él para conseguir su boca sobre la suya. Sus labios se
encontraron con los suyos cuando inclinó la cabeza y la besó frenéticamente.
La agonía se desvaneció en la necesidad sexual. No le importaba nada excepto

trepar su alta figura. La ayudó, enganchando un brazo alrededor de su cintura
y elevándola. Gemidos fuertes salieron de su garganta cuando envolvió sus
piernas alrededor de su cintura una vez más. Empezó a moverse, moliendo su
coño contra la parte delantera de sus pantalones. Él apartó la boca y volvió la
cabeza.
"Reduce la velocidad." jadeó.
"No."
Se centró en la garganta expuesta, lamiendo y mordiendo.
"Joder." Su voz se hizo más profunda.
Lo deseaba, demasiado. Eso significaba que tenía que liberar su pelo o su

camisa. Soltó su camisa y se agachó, intentando pasar sus dedos entre sus
cuerpos para buscar la hebilla de sus pantalones vaqueros. Él inclinó la
espalda lo suficiente para darle espacio y ella arañó la delantera de sus
pantalones. De repente se dio la vuelta y quedó atrapada entre su cuerpo y el
SUV otra vez. Él la inmovilizó allí y con su mano libre la apartó de su pelo.
"Más despacio." exigió.
Se apartó de su garganta y se rindió en sus manos. La soltó y se apoderó de su

mandíbula, volviendo la cara lo suficiente para besarla de nuevo. Su lengua se
adentró en su boca y ella gimió.
"¡Tenemos a alguien en la azotea del hotel!" Gritó un hombre. "Se trata de

Shane. ¡Enviad a alguien allí ahora!"
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Vanni ignoró la advertencia. Mantuvo las caderas de Smiley entre sus muslos
y se retorció contra el bulto en sus pantalones, moviéndose arriba y abajo en su
contra. Se sentía muy bien en su clítoris, pero quería más.
"Smiley" uno de los hombres gritó. "Ponte a cubierto."
Smiley la apartó del SUV, sosteniéndola con fuerza contra su cuerpo con los
brazos y las piernas envueltos a su alrededor. Dio unos pasos y se volvió, lo
que les permitió meterse en el SUV. Ella terminó a horcajadas sobre su regazo,
con su culo encaramado en el borde del asiento dándole espacio a sus piernas
para que no se aplastaran entre ellos. Alguien golpeó la puerta, dejándoles en
el interior.
Vanni fue a por la boca de Smiley. Estaban en el asiento trasero y espacioso del
SUV, y estaban solos. Las ventanas estaban tintadas y ella esperaba que nadie
pudiera verles. Él la besó con pasión suficiente para robarle el aliento. Se
movió en su regazo, frenética por venirse otra vez. Smiley apartó la boca de la
suya, dejando a ambos jadeando.
"Voy a girarte. Extiende las piernas."
No quería dejarle ir, pero él forzó la situación cuando la agarró por las caderas
y la levantó, girando al mismo tiempo. Ella cayó de plano sobre el asiento de
cuero y él les estiró hasta la puerta, todavía con ella. Una de sus piernas estaba
atrapada entre su cadera y la parte posterior del asiento. Él la atrajo más cerca,
hasta que su culo estaba en contra de su lado.
"Abre para mí."
Fue una lucha hacer lo que le pedía cuando lo único que quería era lanzarse y
subir de nuevo en su regazo. Soltó sus caderas y puño de su falda, empujando
hacia arriba su estómago, y usó su otra mano para acariciar la cara interna de
su muslo y empujarla hacia el compartimiento delantero. Se dio en el asiento
del lado del pasajero. Él la soltó y ella gritó, cuando sus dedos se engancharon
el centro de su ropa interior. Un tirón fuerte y se la arrancó. Su pulgar frotó
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sobre la raja de su coño mojado y subió hacia arriba, acariciando su clítoris.
Vanni echó hacia atrás la cabeza con el provocador toque y arqueó sus caderas.
"Sí."
"Estoy aquí. Confía en mí para cuidar de ti."
Se sentía demasiado bien y se retorció en el asiento, arañando el cuero por

encima de su cabeza. No quería clavar sus uñas en Smiley y herirle. Era el
único pensamiento coherente en su cabeza. Podría provocar que dejara de
jugar con su clítoris palpitante. Era el centro de su mundo en ese momento,
estaba tan dolorido que parecía que su corazón había viajado allí y estaba
segura de que podría tomarle el pulso.
Su mano volvió a su cadera, empujándola hacia abajo para mantenerla en el

asiento. Vanni cerró los ojos. Cada músculo de su cuerpo se tensó y entonces
lloró, corriéndose fuerte. Tomó aire y habría gritado, si Smiley no hubiera
soltado su cadera e inclinándose hacia delante, le tapó la boca.
Abrió los ojos, la mirada fija en la de él. Apenas eran discernibles en la

oscuridad del SUV. Su rostro era poco más que una sombra, pero podía
distinguir la forma de sus ojos. Su pulgar rodeó su clítoris, rozándolo mientras
el clímax seguía rodando a través de su cuerpo. Le cogió la muñeca, sólo por la
necesidad de tocarlo. Sacó los dedos de su clítoris y levantó la mano de su
boca.
"Lo siento. Hay alguien en el tejado del hotel y parecías a punto de gritar. No
era mi intención asustarte."
Yacía agotada, tratando de recuperar el aliento. Sus piernas abiertas y su falda

recogida alrededor de su cintura. Smiley estaba medio encima de ella,
mientras que el resto de su cuerpo ocupaba la mayor parte del asiento.
Esperaba que él no pudiera ver su cara mejor de lo que ella podía verle a él. El
calor subió por sus mejillas. El deseo de cerrar las piernas y empujar la falda
hacia abajo para cubrir su coño expuesto era fuerte pero no pudo reunir la
fuerza para hacerlo.
42
"Siento haber sido agresivo."
Ella hizo una mueca.
"Yo también."
"Es la droga. Lánzate y tírame del pelo, rasga mi camisa y muérdeme todo lo
que quieras."
Recordó que le había hecho todas esas cosas. Le soltó la muñeca y se estiró,
sintiendo la parte delantera de su camiseta. Estaba abierta y ella pudo sentir su
piel caliente.
"Lo siento mucho."
Intentó verle el cuello, donde le había besado, preguntándose si había hecho

más que un ligero pellizco, pero no podía ver nada.
"¿Te he mordido?"
"No puedes hacerme daño, Vanni. Se sentía bien."
Su mirada bajó entre ellos, pero el anillo brillante en su mano izquierda captó
su atención. Le dio una bofetada de puta realidad.
"Oh, Dios mío, estoy comprometida."
El sonido que Smiley hizo fue una combinación de rugido y gruñido.
"Vi el anillo, pero esperaba que fuera sólo joyería."
Cerró los ojos. Carl nunca la perdonaría por lo que había hecho con Smiley.
Estaría furioso y herido. No importaría qué había sucedido o que no había
tenido intención de perder el tiempo con alguien más.
43
Capítulo Tres
"¿Vanni?"
Miró a Smiley cuando se movió sobre ella. Él se levantó lo suficiente para que
algo de la luz en el callejón alcanzara su cara y ella pudo ver sus hermosos ojos
marrones de nuevo. Odiaba la mirada triste en ellos.
"Podemos remontar esto sin que yo entre en ti. Puedo manejarlo y cuidar de ti
mientras sufrimos los efectos de la droga. Simplemente no te ofendas. Estoy
con un grave dolor."
"¿Lo estás?" se sentía estúpida y egoísta, oyendo esto. "Me olvidé de que
también estás drogado."
"Sí. Necesito liberarme o podría romperme. Respeto tu estado con otro hombre
y no quiero que me odies. Es sólo que no te quiero darte miedo cuando libere
mi polla. No voy a obligarte a tomarme. No mires."
Va a masturbarse.
Ningún hombre jamás había hecho eso delante de ella antes. Desvió la mirada
cuando él se incorporó y se desabrochó los pantalones. Se levantó del asiento
para empujar sus pantalones lo suficiente para sacarlos del camino. La
curiosidad era fuerte, pero se resistió. Él se sentó de nuevo y su piel desnuda
reposó contra el lado de su pierna, que estaba entre él y el asiento. Se volvió un
poco y se aclaró la garganta.
"Estás a salvo conmigo."
Le desafió mirándole a la cara.
44
"Entiendo."
Fue probablemente el momento más difícil de su vida. Estaba medio desnuda

y él tenía su zona intima expuesta. Eran prácticamente desconocidos. Su
clítoris comenzó a calentarse y sus pezones eran como cuentas. Estaba
aprendiendo los signos.
"Está a punto de suceder de nuevo."
Su respiración se incrementó, los músculos de su estómago se estremecieron y

un dolor sordo comenzó a construirse entre sus muslos.
"¿Cuándo va a dejar nuestros sistemas esta droga?"
"Podrían ser horas."
"No voy a sobrevivir."
"Lo harás."
Su mano acarició su muslo y se mordió el labio.
"Eso se siente bien."
"¿Puedo entrar en ti con mis dedos? Me temo que te va a doler mañana si

continúo solo tocándote aquí."
Su pulgar rozó su sensible clítoris. Un placer instantáneo disparó a través de

ella sólo por ese ligero toque. Ella asintió con la cabeza. El daño estaba hecho.
Ya había engañado a Carl. Extendió la mano y se agarró al borde del asiento,
luchando contra la tentación de retorcerse bajo su pulgar para mantenerlo
acariciándola. El dolor volvió como una venganza.
"Smiley," jadeó "se está haciendo peor."
Dibujó círculos con la yema del pulgar sobre el nudo de su sexo y ella ajustó su
muslo para mantener las piernas abiertas. El asiento de debajo se movió un
poco cuando Smiley se volvió hacia ella.
45
"Mírame, Vanni."
Cerró miradas con él y gimió cuando volvió su mano lo suficiente para cepillar
los dedos contra los pliegues de su coño. Él la ahuecó allí y su dedo
suavemente penetró su coño. Se arqueó contra él, con ganas de más. Fue
increíble y gimió.
"Eres tan apretada." Su voz se hizo más profunda. "Mi polla está envidiosa."
Volvió la cabeza, incapaz de luchar más contra la tentación. Necesitó un poco

de torsión en el asiento, pero robó una mirada a su regazo. Estaba en la
sombra, pero pudo ver su polla. Era grande y su otra mano estaba envuelta
alrededor de la base. Eso la fascinaba y no podía apartar la mirada.
Él insertó un dedo dentro de ella y gritó. Increíble. Su movimiento cambió de

dibujar círculos ligeros a través de su clítoris a frotar arriba y abajo mientras la
follaba con su grueso dígito. Ella rodó sus caderas, tratando de reunirse con su
ritmo lento. La visión de él empuñando su polla y acariciándosela al mismo
ritmo que su dedo, la encendió más.
"Más rápido." le instó, con ganas de llegar rápido y duro.
"No quiero ser demasiado áspero."
Vanni soltó el asiento y se agachó y agarró su muñeca. Corcoveó sus caderas

salvajemente, montando su dedo. Su pulgar se deslizó de su clítoris, pero no
importaba. La sensación de tenerlo dentro de ella, cualquier parte de él, era
suficiente para tenerla sacudiéndose y gimiendo, perdida en el fervor.
Él respondió gimiendo profundamente y verlo bombear su polla más rápido

con su mano aumentó su excitación. Era más caliente que el infierno para ella
y deseaba que hubiera una mejor iluminación. Su polla parecía más gruesa y
más grande que la de cualquier hombre con quien nunca había dormido. Se
imaginó lo que se sentiría teniéndola estirando su coño y llegó a su clímax,
gritando su nombre.
46
Sus músculos vaginales se apretaron alrededor de su dedo, retorciéndose lo
suficientemente firme para que ella fuese consciente de cada detalle. Smiley
apartó su muñeca lejos, retirando su dedo abruptamente. Agarró su polla con
ambas manos. Ella lo vio envolver los dedos alrededor del eje. Echó la cabeza
hacia atrás, los ojos cerrados, la boca abierta. Él no hizo ni un sonido, pero
todo su cuerpo se sacudió y miró hacia abajo, observándole disparar su
liberación. Arroyos gruesos de esperma chorrearon fuera antes de que
envolviera la cabeza de su polla dentro de su palma y se diera media vuelta en
el asiento. Eso la dejó mirando a sus anchos hombros. Él se estremeció varias
veces y su respiración fue errática.
Smiley se recuperó más rápido que ella. Se enderezó en el asiento, con la

espalda aún girada y tiró de su camiseta rasgándola por encima de su cabeza.
Ella supuso que la utilizó para limpiarse. Finalmente la miró y sus ojos se
encontraron.
"¿Estás bien?"
Le sorprendió que se preocupara por ella.
"Sí."
"No tengas miedo."
No lo tenía. Ni siquiera cuando se movió en el asiento y cayó encima de ella. Él

apoyó los brazos a ambos lados de ella y su rostro flotó pocos centímetros por
encima del suyo. Estaba lo suficientemente cerca para besarle. Su visión debió
de ajustarse a la penumbra porque podía distinguir sus rasgos mucho mejor
que antes.
"No tengo loción."
"Bueno."
"Estás empapada, nena. Necesito frotarme contra ti para recubrirme o voy a

estar dolorido mañana."
47
Tardó unos segundos en comprender lo que quería decir. Ella sintió sus
mejillas calentarse y odió la forma en que se sonrojó tan fácilmente.
"Oh. Entiendo."
Se movió un poco más y ella se sorprendió cuando su polla se frotó contra su

coño. Acababa de correrse, pero todavía estaba duro como una roca. Ni
siquiera necesitó usar sus manos, sino que ajustó sus caderas para deslizar el
eje a lo largo de su raja. Su mirada se cruzó con la suya y de nuevo se dio
cuenta de lo sexy que era. El alumbrado público entrando por la parte
delantera de la camioneta iluminó su rostro con claridad.
El dolor no había regresado todavía, pero quería besarlo. Rodó sus caderas,
deslizando la punta de su pene contra su clítoris. Ella gimió y él se quedó
paralizado.
"No hagas eso." dijo con voz áspera. "No tienes idea de cuánto te deseo.
Moriría por poseerte sólo una vez. Eres tan hermosa, Vanni."
Ningún hombre le había dicho nunca eso antes. Tal vez sólo fuera una frase
que utilizaba, pero la mirada sincera en sus ojos la hizo creerle. No tenía
intención de tocarle el rostro, pero ocurrió de todos modos. Simplemente no
pudo resistir ahuecar sus mejillas.
"¿En serio?"
"Nunca he deseado a nadie más."
Se mordió el labio y respiró hondo. Su mirada se desplazó de sus ojos hacia el

anillo en su mano izquierda. Ella soltó su rostro y buscó detrás de él. Tiró del
anillo de compromiso, pero no quería ceder. Vanni fue persistente. Cuando la
banda se deslizó fuera, la dejó caer al suelo de la camioneta.
Smiley se movió a la derecha un poco y se quedó mirando el anillo descartado.

Él frunció el ceño y luego la miró.
"¿Por qué hiciste eso?"
48
"Soy demasiado sincera y tendré que contarle a mi novio sobre lo que pasó
entre nosotros. Nunca se casará conmigo. Se acabó."
"No puede culparte, si no tuviste parte en nuestra drogadicción."
"Tú no lo conoces. No creo que yo le conociera tan bien como yo pensaba

tampoco, hasta hace poco. Está bien. Creo que estoy haciendo a ambos un
favor al sacar esto fuera."
Un flash caliente la golpeó y ella cerró los ojos, respirando a través de él.
Smiley se levantó para poner más espacio entre sus cuerpos y se sentó.
Extendió una mano y él la agarró, aferrándose con fuerza.
"Esto pasará. Estoy aquí contigo."
Ella abrió los ojos y usó su férreo control para tirar de sí misma hasta una
posición sentada. Tuvo que deslizarse un poco lejos de él para hacerlo.
"Te necesito."
"Recuéstate hacia abajo."
Sus manos temblaban mientras ella agarró su camiseta, tratando de quitársela,

pero sintiéndose demasiado débil para desnudarse. El sudor corría sobre ella.
"Saca esta ropa fuera de mí."
Él dudó.
"¿Por favor?"
Él rozó sus manos a un lado y tiró de su camisa sobre su cabeza. Su mirada

bajó a su sostén y se lamió los labios.
"Toda ella. Por favor. Estoy tan caliente."
"Podría encender el motor y hacer funcionar el aire acondicionado."
"¿Por favor?" El pánico se apoderó de ella. "¡Estoy ardiendo!"
49
Se inclinó hacia adelante, llegó a su alrededor, desabrochó el sujetador y tiró
de él con una eficiencia a medida de la experiencia. La falda se desprendió lo
siguiente, el elástico de la cintura haciéndolo fácil para él en sacarla hacia abajo
por sus piernas. Sus bragas estaban destruidas y no tenía idea de dónde
estaban sus zapatos. No podía recordar la pérdida de ellos, pero ya se habían
ido.
"Joder." Smiley no trató de ocultar su examen a fondo de su cuerpo desnudo.

"Eres perfecta."
El flash caliente pasó y ella deseó haber mantenido algunas de sus ropas
puestas. Carl le había regalado con una inscripción en un gimnasio para
perder quince kilos antes de su próxima boda. A Smiley no parecían
importarle esas curvas adicionales mientras la admiraba abiertamente con una
expresión hambrienta. Él no señalaba sus defectos. Se acercó hacia él.
"Bésame."
Él dudó.
"Debemos cubrirte, al menos en parte."
El rechazo hirió sus sentimientos y ella se apartó.
"Lo siento."
Él estaba allí en un instante, pasando rápidamente a través del asiento.
"¿Por qué?"
Plegó sus rodillas en un triste intento de cubrir sus pechos y proteger su coño
desde su punto de vista.
"Soy muy mala tratando de ser atrevida."
Sus dedos rozaron el cabello lejos de su hombro y le acarició el brazo con el

dorso de sus nudillos. Ella ahogó un gemido. Su cuerpo estaba encendido y no
50
parecía tener un interruptor de apagado. Para sus sentidos, incluso los toques
más desnudos parecían amplificados.
"¿Vanni? Mírame."
Necesitó coraje, pero lo hizo. Sus miradas se encontraron.
"Háblame. ¿Cómo estás tratando de ser atrevida? No estoy seguro de lo que

quieres decir. Sé contundente. ¿Qué estás pensando?"
Siempre había sido un poco tímida y pasiva cuando se trataba de sexo. Por
supuesto que nunca había sido dosificada con una droga que hacía que sus
pechos se sintieran pesados y doloridos por ser tocados. Su coño palpitaba
tanto que se estaba convirtiendo en un dolor real.
"Me quité el anillo." Ella tragó. "Te necesito."
Resultaba difícil decirle que quería que la follara y no podía conseguir sacar las
palabras exactas fuera.
"Tú, um, no tienes que cuidar de ti mismo. Podríamos ayudarnos

mutuamente."
Ese suave gemido gruñón que pronunció fue sexy e hizo que le doliera.
"No quiero que me odies mañana, después de que la droga esté fuera de tu
sistema. Te arrepentirás."
"Tal vez." decidió ser sincera. "Pero mañana no es ahora. Y no te voy a odiar.
Voy a golpearme a mí misma, si tengo que culpar a alguien. Te deseo."
"¿Estás segura?" Se detuvo a acariciar su brazo.
"Sí."
"¿Estás tomando la píldora o cualquier forma de anticonceptivo?"
"Sí y tengo un certificado de buena salud. ¿Qué pasa contigo? "
"Las Especies no transmiten enfermedades."
51
Bajó la mirada a su pecho. Era musculoso y amplio torso.
"Eres demasiado perfecto." Un dolor punzante disparó por su espalda. Se

aferró a su brazo. "Está empezando de nuevo."
Se inclinó más cerca y llegó detrás de su asiento. Se preguntó lo que estaba

haciendo hasta que el respaldo del asiento se reclinó. Ella se derrumbó con él y
se quedó sin aliento. Smiley se bajó del asiento, rompiendo su dominio sobre él
y buscó a tientas algo cerca de sus piernas. El asiento del conductor delantero
hizo un clic y empujó hacia adelante. Se irguió sobre sus rodillas, en el espacio
ahora menos apretado entre los asientos, y se apoderó de sus muslos. Un tirón
y su culo se deslizó hasta el borde del cuero. Él acuñó sus caderas entre sus
muslos abiertos y se inclinó hasta que su rostro se cernió centímetros por
encima del suyo.
"Voy a ser suave."
Estaba a punto de tener sexo con un desconocido. Ella siempre pensó que eso
sería impersonal y frío. No se sentía de esa manera cuando el sonrió. Él la
colocó con facilidad. Smiley no acaba de entrar en ella, en vez de eso la besó.
Envolvió un brazo alrededor de su cintura y el otro sobre su hombro, con las
manos explorando la extensión de su espalda. Era cálido y tenía la piel suave
como la seda, teniendo en cuenta que parecía tan duro. Él alcanzó entre ellos y
masajeó su clítoris. Ella arrancó su boca de la de él y gimió.
"Me duele."
"Envuelve tus piernas alrededor de mí tan alto como sea posible."
Ella no discutió o le preguntó, pero retiró sus rodillas más altas y apretó los
muslos contra sus costillas. Eso atrapó uno de sus brazos debajo, pero él
presionó su peso hacia abajo para fijarla allí, cuando trató de moverse más
libre.
"Sólo permíteme dirigir esto, Vanni. Voy a hacer que te sientas muy bien."
52
La forma en que lo dijo, tan suave y sin embargo brusco, envió escalofríos de
un buen tipo por su espina dorsal. Él dejó de jugar con su clítoris y ella quiso
protestar, pero antes de que pudiera su polla rozó la hendidura de su coño.
"Relájate." instó.
Ella se meneó, queriendo tenerle dentro de ella demasiado como para

preocuparse por su tamaño.
"No puedo."
Él presionó más contra ella y supuso que usó su mano para guiar su eje al
lugar perfecto. Lo encontró y se lanzó hacia delante. Vanni se quedó sin
aliento, su polla estiró sus paredes vaginales mientras empujaba dentro de ella.
Estaba extremadamente húmeda y lista para tomarlo, pero se quedó
paralizada.
"¡Hijo de puta!"
"No te detengas." No estaba segura de lo que estaba mal, pero ella clavó los
talones en su región lumbar. "Por favor."
Hizo otro suave sonido con su garganta.
"No podría, incluso si la maldita camioneta se incendiara. Nos quemaremos.

Tengo miedo de que vaya a perderme y ser demasiado áspero. Te sientes muy
bien."
Ella corcoveó sus caderas.
"Me duele por ti."
Apretó más profundo dentro de ella y gritó. Él era realmente grande. Su

cuerpo parecía extenderse más allá de su capacidad. La preocupación por eso
la golpeó una fracción de segundo. Él fue más profundo y ella arañó su
espalda, queriendo desesperadamente que se moviera más rápido. Había
estado muy segura de que le haría daño, pero se sentía increíble.
53
"Demasiado lento." se quedó sin aliento.
"Estoy tratando de ser amable, cariño." murmuró, su voz ronca. "Joder. Los
medicamentos están haciendo que te hinches por dentro. Vamos a matarnos el
uno al otro. Estoy aterrorizado, voy a ser demasiado duro contigo."
Él era parte animal y no tenía idea de cuál era su versión de raza. No le

importó, sin embargo, cuando se retiró un poco y ajustó sus caderas para
conducirse en ella de nuevo con un empuje constante. El placer anuló
cualquier temor. Él encontró ese punto G del que había oído hablar tanto, pero
nunca tuvo un hombre encontrándoselo antes. Sus ojos se abrieron con
sorpresa y gritó su nombre.
Su tórax tocaba sus pechos y cada movimiento rozaba su piel caliente contra
sus duros pezones. Él la montó más rápido, golpeando ese mágico lugar que
envió chispas de éxtasis directamente a su cerebro. Ella gimió, perdida en la
sensación de sus cuerpos unidos. Era un ajuste perfecto y podía sentir cada
centímetro del espesor de él. Más del peso de Smiley descendió sobre ella,
pero la masa sólida de su cuerpo que se extendía por encima de ella estaba
consolando en lugar de aplastar. Quería llegar lo más cerca posible de él, hasta
que se fusionaran juntos. Su pelvis aterrizó contra su clítoris.
Vanni gritó cuando la golpeó el clímax. Fue diez veces más fuerte que los otros
que le había dado Smiley. Por fin sabía lo que significaba perder la mente,
como si una bomba detonara en el interior de su cráneo. Su coño parecía tener
la misma reacción mientras esos músculos convulsionaban, apretando su eje
rígido con tanta fuerza que le preocupaba que algo pudiera dañar a uno de
ellos.
"¡Oh, demonios!" gimió él.
Se obligó a abrir los ojos a pesar de su dificultad para concentrarse en otra cosa
que las oleadas de placer aún surgiendo a través de ella. Smiley levantó su
pecho lejos de ella. Una expresión de dolor contorsionó su rostro en algo casi
aterrador. Apretó los dientes, mostrando los colmillos, mientras sus labios se
54
retiraron en un casi-gruñido. Se había congelado sobre ella, cuando ella se
había corrido, pero comenzó a follarla de nuevo en cortas y violentas
sacudidas.
Los ojos de Vanni se abrieron y luchó por respirar. No podía introducir aire en
sus pulmones. El extremo placer corriendo a través suyo era demasiado.
Smiley gimió mientras conducía su polla más profundamente, luego
permaneció allí y comenzó a correrse. El calor latía dentro de ella mientras su
semen la llenaba. Otro clímax azotó a Vanni. Era demasiado fuerte.
Me estoy muriendo.
El terror casi anuló el placer, pero se estrelló a través de ella de nuevo. Sus ojos
se cerraron y la oscuridad llegó, tomando todo fuera.
Smiley apoyó los brazos para evitar colapsar sobre la parte superior de Vanni.
Su mandíbula dolía un poco de estar rechinando los dientes para evitar gritar
cuando se corrió. No quiso asustarla. Los temblores atormentaron su cuerpo
como consecuencia de lo que acababa de experimentar. Ninguno de sus
últimos encuentros sexuales con las mujeres había estado jamás cerca de lo que
acababan de compartir. Él entendió el término "vuelta del revés" después de la
volátil erupción de sus bolas. Estaría sorprendido si todavía contenían una
sola gota de semen. La miró fijamente. Tenía los ojos cerrados, su rostro se
volvió ligeramente lejos.
"¿Vanni?"
Ella no respondió o reaccionó de cualquier manera. Se aclaró la garganta,

esperando que su tono brusco no sonara demasiado duro.
"¿Estás bien?"
Ella no se movió. Su mirada bajó a sus adorables pechos. Se movían con el

ascenso y la caída de su pecho. Cambió de posición, utilizando un codo para
apuntalar su peso y ahuecó su mejilla, girándola suavemente para obtener una
55
mejor visión de ella. Parecía estar durmiendo pacíficamente pero asustó el
infierno fuera de él.
"¿Vanni?"
Su aliento abanicando su cara le aseguró que estaba viva, pero ella no

respondió ni abrió los ojos. El pánico no era una emoción que sentía a menudo,
pero entonces lo sintió. Le habían contado una historia de un Especie a quién
le habían dado una droga de cría. Había despertado para encontrarse todavía
sobre una hembra, pero ella había muerto. Él la había matado durante su
acoplamiento.
"No." gimió.
Lentamente retiró su polla de los estrechos confines de su coño.
"¿Vanni? Abre los ojos. Dime que estás bien. Dime que no te hice daño."
Él no estaba por encima de suplicar. Tenía que conseguir ayuda. Se levantó,

olvidando donde estaba, y la parte de atrás de su cabeza se estrelló contra el
techo de la camioneta. El dolor apenas se registró mientras miraba hacia abajo
entre ellos. Olfateó, sin ver u oler sangre. Había perdido el control cuando ella
llegó a su clímax. La sensación de su cuerpo, los sonidos que hacía, le habían
conducido a un frenesí. Su coño se había endurecido hasta el punto de que al
principio no podía moverse... casi una tortura, ya que había estado justo en el
borde. Al segundo sus músculos habían aliviado su control sobre su polla, esos
impulsos no podían ser negados. Se había corrido con tanta fuerza que había
estado ajeno a todo lo demás.
"¿Vanni?"
Ella todavía no se movió, pero estaba respirando. Agarró sus pantalones y

trató de tirar de ellos hasta sus muslos. El material estaba atrapado debajo de
sus rodillas. Se lanzó hacia adelante y hacia la izquierda, golpeando su
hombro en el asiento. Se puso los pantalones, pero no se molestó en sujetarlos.
Su falda se enredó con su bota cuando él se deslizó más cerca de la puerta.
56
Miró hacia abajo y la agarró. La tela quedó desgarrada. Pero él consiguió
liberar su pie.
Un vistazo a Vanni le hizo consciente de su desnudez y trató de cubrirla con la

endeble prenda. La cosa era lo suficientemente larga como para ir desde sus
pechos hasta las rodillas. Se tomó un segundo para cerrar sus flácidas piernas.
La protección de su modestia parecía importante en ese momento. Él extendió
la mano, agarró la manija y empujó la puerta abierta.
"¡Consigue un médico!"
Él no se iría de su lado. Ajustó la falda por encima de ella y pasó los dedos por
su pelo.
"¿Vanni? Vamos, abre los ojos."
Fuertes pisadas sonaron y Brass se apoyó en la camioneta por la puerta

abierta.
"¿Que está mal?"
"Está sin sentido. No sé si le duele o no."
La otra puerta se abrió de golpe y Ned estaba allí. Smiley quiso atacarle
cuando el tipo tocó a Vanni. Él la agarró por la muñeca y bateó la mano de
Smiley lejos de su pelo para presionar sus dedos contra su garganta.
"¿Qué estás haciendo?"
Ned le miró a los ojos.
"Comprobando su pulso. Es lento y constante. ¿Qué pasó?"
"No lo sé."
"Estaban compartiendo sexo y ahora ella está inconsciente." refunfuñó Brass.

"No huelo sangre."
57
Smiley estaba contento de escuchar eso. Su sentido del olfato no era tan agudo
como el del canino. Eso significaba que no había causado una hemorragia
interna.
"¿Ella está bien?"
Ned soltó y frunció el ceño.
"Creo que sólo se desmayó. Su latido del corazón es estable. No tengo

exactamente un monitor de presión arterial conmigo, pero probablemente
debería examinarla." Cogió la falda que cubría su cuerpo.
"No lo hagas."
Smiley se abalanzó, golpeándose la cabeza en el techo de la camioneta de

nuevo, pero eso detuvo efectivamente al humano cuando se inclinó sobre su
todavía inerte forma y se agarró la parte posterior de los asientos para no caer
encima de ella. Puso su rostro a centímetros de Ned y le mostró sus colmillos
para hacer la amenaza clara. Ned casi tropezó, haciendo una rápida retirada.
"Bueno. No me muerdas. Mierda."
"Es la droga."
Snow llegó al otro lado de la camioneta. Empujó a Ned fuera del camino,
fijando su fría mirada en Smiley.
"Tranquilo, Smiley. ¿Dónde está tu normal actitud animada?"
"Que te jodan. Él no va a verla desnuda."
Snow parpadeó un par de veces y frunció el ceño.
"De acuerdo."
Shane llegó, un poco sin aliento. Miró fijamente a Vanni, y a Smiley no le

gustó. Él rugió con voz ronca. Las manos de Shane subieron.
"Tengo formación médica. Tu gritaste por un médico."
58
"No va a permitir que la examinemos." susurró Ned. "Está aterradoramente
cabreado y defensivo."
"Dadas las circunstancias, eso es normal." les recordó Brass. "¿Smiley? Mírame.
Siéntate."
Smiley alivió su culo hacia abajo y soltó los respaldos de los asientos de modo
que ya no estaba inclinado sobre Vanni, pero se mantuvo cerca. Se centró en
ella. Su expresión era tranquila. No parecía tener dolor.
"¿Smiley?" La voz de Brass se suavizó. "Probablemente sólo se desmayó. Es

una droga dolorosa y los seres humanos no son tan tolerantes con eso tanto
como nosotros. Es lo mejor."
Eso azotó su cabeza para mirar a Brass.
"¿Cómo puedes decir eso?"
"Así no está sufriendo. Tenemos que llevarla a Homeland antes de que se

despierte. Estoy escuchando su respiración. He pasado tiempo suficiente
alrededor de hembras humanas para saber cómo respiran cuando están
durmiendo. Eso es todo lo que es… a menos que pienses que rompiste algunos
de sus huesos. ¿Te pusiste demasiado agresivo?"
"No." Él estaba seguro de eso.
"Tenemos que llevarla a nuestros médicos."
Tenía sentido. Él asintió con la cabeza bruscamente.
"Conduce."
Brass vaciló.
"Shane y Ned, os quiero a ambos viajando con ellos en caso de que necesite
ayuda médica. Si se despierta con dolor, puedes llamar a un helicóptero, una
vez que llegue a una zona aislada donde se pueda aterrizar sin causar un gran
59
revuelo. Un equipo de respaldo seguirá en el otro SUV. Snow y yo tenemos
que permanecer aquí con Justice."
Shane subió al asiento del conductor y lo ajustó para que se adaptase a sus
largas piernas. El motor rugió a la vida. Smiley se relajó un poco, ahora que
algunos de los temores se habían aliviado. Tenía que creer que ella sólo estaba
exhausta o que la droga la había noqueado. Superó a la alternativa de que
estaba gravemente enferma.
La polla de Smiley se endureció dolorosamente y una aguda punzada de dolor

golpeó su estómago. Él gimió.
"¿Smiley?" Brass se apoyó en el SUV de nuevo. "¿Qué sucede?"
"El dolor." dijo con voz áspera, sosteniendo su estómago, su respiración

errática.
"Lo siento. No quiero que sufras." declaró Brass.
Brass agarró su hombro y Smiley lo miró cuando el macho le obligó a girar.

Smiley vio el puño un segundo antes de que aterrizara en su mandíbula.
60
Capítulo Cuatro
"Me hubiera gustado estar en el otro SUV." declaró un hombre.
"A mí también. Smiley va a estar cabreado porque Brass le derribara de un

golpe cuando se despierte. No están jodiendo alrededor, ¿verdad?"
La segunda voz pertenecía a un hombre también.
Vanni yacía sobre su costado en algún tipo de vehículo. Estaba oscuro cuando
abrió los ojos y tardó unos segundos para que su memoria regresara, el miedo
volviendo con ella. Estaba sola en el asiento trasero de uno de los SUV...
probablemente el mismo en que ella y Smiley habían estado.
Alguien le había puesto el cinturón de seguridad. Uno estaba alrededor de sus

muslos, el otro alrededor de su tórax. Su falda estaba envuelta sobre ella como
una manta, pero estaba desnuda debajo. El tacto del cuero contra su piel le
aseguró eso.
"No jodas." declaró el primero de ellos.
Se encontraba en el asiento del conductor.
"A veces me pregunto si estamos locos por trabajar con Nuevas Especies. ¿Y
tú, Shane? ¿Alguna vez piensas que deberías estar haciendo otra cosa?"
"Nop. Me encanta el ONE. Simplemente ha sido una mala noche, Ned. Nadie
se esperaba un ataque así al bajar del hotel."
Ned se quedó en silencio durante largos segundos.
61
"Yo estaba allí, a sólo veinte metros de distancia. Esperas esta mierda en los
países del tercer mundo, no en casa."
"¿Qué mierda?"
"Los terroristas siendo mujeres. La vi a sentarse junto a Smiley y no le di un

segundo pensamiento. Parecía bastante inocente."
"La escuché decir que ella no drogó las bebidas."
"¿Puedes creer eso?" resopló Ned. "¿Cómo eres tan ingenuo? Me olvidé. Eres
como un consumado Boy-Scout y piensas que todas las chicas son tan dulces
como tus hermanas. Despierta de una puta vez y vive en el mundo real.
Tenemos suerte de que no fuera una asesina. Me habría sentido como un
verdadero idiota si ella lo hubiera matado en ese bar. Supongo que es alguna
prostituta que contrataron."
"No parece una."
Ned se echó a reír.
"¿Cómo lo sabes? ¿Alguna vez has pagado por follarte alguna chica?"
"No."
"Exactamente. Yo si lo hice y no todas ellas están emperifolladas todo el

tiempo. Tuve una que me recordaba a mi maestra de tercer grado. Fue algo un
poco caliente, ya que estuve un poco loco por ella."
"Tú estás enfermo." maldijo Shane en voz baja. "La luz del motor acaba de
encenderse. Comunícalo por radio."
"Sólo detente en la próxima gasolinera. ¿Por qué molestarles? Es probable que

sea un cable suelto de la batería. Eso le ocurrió a uno que llevé la semana
pasada."
"La luz del aceite parpadea ahora."
62
"Entonces vamos a comprar un poco de aceite y lo voy a poner dentro. Tomará
unos minutos. De lo contrario vamos a tener que esperar a que el otro SUV
pueda alcanzarnos y van a trasladarla a ese mientras estamos atrapados
esperando por el servicio de carretera. Sólo quiero entregarla al Centro Médico
y volver a casa."
"Necesita ser llevada a Homeland lo más rápido posible. Están sólo unos
cincuenta kilómetros detrás de nosotros."
"Está inconsciente. No importará una mierda, probablemente estaremos en la

carretera antes de que nos alcancen. Sólo tienes que salir hacia la gasolinera."
"Está bien. Aunque estaré comunicándolo por radio eso en cuando nos
detengamos."
"Boy-Scout." se rió Ned entre dientes. "Probablemente aterrorizarás a Smiley y

te rasgará un nuevo culo, si piensa que podrías haber tenido unos minutos
para examinarla. ¿Has visto la condenada manera en que se acercó a mi cara?"
"Son protectores con las mujeres."
"Debería quererla encadenada por drogarle. No me importaría un carajo lo que

pase con una chica que mezcló mi bebida, por lo que tuve que follarla."
"Cállate, Ned. No sabemos si es culpable o no."
"Creo que lo es. Se sentó en la esquina de la barra. Era la única que tomó ese
asiento vacío a su lado y estaba lo suficientemente cerca para dopar su
bebida."
Vanni quiso protestar, pero se mantuvo en silencio. Pensaban que estaba

todavía inconsciente y no estaba muy segura de cómo reaccionarían si les
dejara saber que estaba despierta. ¿La ONE realmente pensaba que haría algo
tan horrible?
"Sólo espero que los dos vayan a estar bien."
63
"Ella probablemente terminará detenida y él va a tener un maldito dolor de
cabeza desde ese golpe bajo. Toma la siguiente salida."
"La veo." Shane suspiró. "Espero que estés equivocado. A Smiley parecía
gustarle realmente."
"Yo diría que sí. Ni siquiera tengo la súper-nariz que tienen ellos y deseo bajar
las ventanillas. Huele como en un burdel aquí."
"Mantén las ventanas cerradas. No quiero que se enfríe."
Ned se echó a reír.
"Sin comentarios sobre mi observación del burdel, ¿eh? ¿Por lo menos sabes a
que huele el sexo? No me digas que 'Boy-Scout' todavía es virgen."
"No lo soy. ¿Por qué estás siendo como un capullo esta noche?"
"Estoy cansado y sólo quiero irme a la cama. Ve a esa parada de camiones.

Tendrán aceite. Voy a correr dentro mientras haces la llamada al otro SUV.
Levanta el capó para mí."
El SUV se desaceleró y realizó unas cuantas vueltas. Vanni cerró los ojos
cuando condujeron bajo las luces brillantes, por si uno de ellos se daba la
vuelta para ver cómo estaba. No sabía qué otra cosa hacer, pero no quería
hablar con ninguno de ellos. El SUV se detuvo y apagó el motor.
"Ve dentro." ordenó Shane. "Me quedaré aquí con ella."
"Está muerta para el mundo. Basta con abrir el maldito capó y compraré el
dichoso aceite."
"Está bien. Supongo que eso es aceptable."
Las puertas se abrieron y se cerraron. Vanni vaciló y el vehículo se sacudió un

poco. Se levantó para mirar entre los asientos. El capó estaba alzado y pudo
ver a través del pequeño espacio entre éste y el motor. Un hombre estaba allí.
64
Volvió la cabeza y vio cómo el otro paseaba en el interior de una estación de
servicio. Estaban estacionados lejos de los otros coches que estaban recibiendo
combustible. Una mirada alrededor de la zona mostró un par de restaurantes
de comida y un montón de coches.
Buscó a tientas hasta liberarse de los cinturones de seguridad y luego se puso

frenéticamente la falda. Su sujetador estaba en el suelo con su camisa. No se
tomó el tiempo para ponerlo en su lugar, pero lo metió en el bolsillo de su
falda, después de pasar el top blanco sobre su cabeza y tirar de él hasta su
cintura.
Una búsqueda por el suelo no pudo localizar sus zapatos. Su anillo le llamó la
atención sin embargo. Lo miró con temor antes de recogerlo. Se lo puso en su
bolsillo y se agachó para mirar a través de la brecha entre el capó abierto y el
compartimento del motor. El hombre permanecía allí. El otro estaba todavía en
el interior, en una cola, sosteniendo algo contra su pecho.
Un gran semirremolque entró en el aparcamiento y se estacionó a unos tres

metros de distancia. El ruidoso motor permaneció encendido mientras que un
hombre abrió la puerta del pasajero, se deslizó fuera de la cabina y se dirigió a
la estación de servicio.
Vanni respiró hondo. Ya no sentía más dolor. La mayor parte de la droga

debió haber salido de su sistema. Tenía dos opciones. Permanecer en la
camioneta y ser llevada a Homeland con todo el mundo a su alrededor
pensando que había drogado a una Nueva Especie, o tratar de escapar.
Ninguna luz interior se encendió cuando abrió las puertas y no hubo ningún
sonido repicando. Recordó que no se habían encendido cuando Smiley y ella
habían entrado en el SUV. Probó la puerta del lado del conductor y la encontró
desbloqueada. El ruido del motor del semirremolque ahogó cualquier sonido
cuando la puerta se abrió. Su corazón latía con miedo de ser descubierta, pero
se deslizó hacia la ventosa noche y empujó la puerta sólo lo suficiente para que
pudiera cerrar, pero sin ajustarse completamente.
65
El pavimento estaba frío en sus pies descalzos, cuando se agachó y se acercó
de puntillas a la parte posterior del vehículo. Varios coches estaban
estacionados a unos diez metros de distancia, cerca de un restaurante. Vaciló,
comprobando para asegurarse de que el guardia seguía en la cola detrás de
unos pocos clientes que estaban delante de él. Él no estaba mirando su camino.
¡Simplemente hazlo!
Se mantuvo baja y corrió. Le dolían sus pies, pero estaba motivada para
escapar. Fue un alivio cuando ella llegó a los coches y se agachó,
escondiéndose detrás de uno. Nadie le gritó. Manteniéndose abajo, se acercó al
restaurante.
Tenía que salir de allí antes de que descubrieran su fuga. No tenía dinero, pero
podía llamar a su mejor amiga para recogerla.
Vanni llegó al lateral del edificio y se enderezó, cruzando los brazos sobre el
pecho, tratando de ocultar que no llevaba sujetador. Simplemente iría dentro y
pediría utilizar su teléfono. Debía mentir y decir que su coche se averió. El
hecho de que no tenía zapatos, dinero o incluso su bolso podría echar esa
mentira fuera.
Consideró decir que había sido asaltada, pero entonces la policía se

involucraría. Era la última cosa que quería. Harían contacto con la ONE y la
entregarían a ellos. Eso frustraría el propósito de escapar.
Una mujer salió del restaurante mientras se acercaba a las puertas delanteras.
Llevaba vaqueros desgastados, un suéter y parecía ser de unos cincuenta años.
Vanni echó un vistazo a su rostro, asintió con la cabeza y se dirigió a su
alrededor.
"¿Estás bien?" La mujer se detuvo. "Te ves como el infierno."
Vanni se detuvo y se volvió. La preocupación en el rostro de la otra mujer

estaba clara.
"Tuve una pelea con mi novio y sólo le dejé de lado." mintió.
66
"Aw. Es mala cosa. No van a dejarte entrar allí sin zapatos."
Vanni no había pensado en eso.
"Sólo voy a solicitar usar su teléfono y vendrá mi amiga a recogerme."
"¿Dónde vives?"
"Como a una hora de aquí." Ella le dio el nombre de la ciudad.
"Me dirijo a esa zona para ir a visitar a mi hermana. ¿Quieres un viaje? Tengo
una hija de tu edad. Siempre trato de devolver el favor. Puedes utilizar mi
teléfono móvil y que tu amiga se reúna con nosotras cuando nos acerquemos a
su casa."
"Gracias." Ella saltó sobre la oferta. "Te agradecería mucho esto."
"Esa es mi camioneta, justo ahí. Tengo una chaqueta que puedes tomar
prestada. Debes estar congelándote."
Le recordaba a Smiley. Su rostro brilló en su mente. Empujó esos recuerdos a

distancia.
"Estoy bien."
Era mentira. Había tenido relaciones sexuales con un desconocido y toda su

vida se había vuelto del revés en el espacio de unas pocas horas.
Siguió a la mujer a su camioneta y se metió dentro de la cabina. Salió de la

plaza de aparcamiento y Vanni volvió la cabeza, mirando hacia la gasolinera.
Todas las puertas de la camioneta estaban abiertas y uno de los guardias

estaba lanzando frenéticamente sus brazos alrededor, mientras que el otro
parecía hablar por teléfono. Habían descubierto que se había ido.
"¿Cuál es tu nombre, cariño?"
Vanni forzó una sonrisa, frente a su compañera.
"Vanni."
67
"Oh, es un nombre extraño, pero es bonito."
"Gracias."
"Soy Melinda. ¿Te gusta la música country? "
"Claro."
Ella no le importaba lo que tocaran en la radio. Era imposible relajarse hasta

que estuvieran en la autopista y estuviera lejos con seguridad. Sin grandes
todoterrenos negros apareciendo en el espejo retrovisor.
"Gracias por esto."
Vanni se abrazó a su pecho con más fuerza.
"De nada. Eres mi primer autoestopista. Bueno, supongo que técnicamente no

lo eres puesto que tu dedo pulgar no estaba en alto." rió Melinda.
Vanni trató de prestar atención a la amable charla y contestar cuando era

apropiado, pero su mente seguía vagando a Smiley y lo que habían hecho
juntos en la parte trasera del vehículo de la ONE.
Su cuerpo estaba dolorido, sobre todo entre sus piernas. Ningún dolor
punzante sacudía a través de ella, sin embargo, algo por lo que estaba
agradecida. Ningún sofoco o escalofrío la golpeaba. Iba a sobrevivir después
de todo. Ahora era todo acerca de hacer frente a las consecuencias.
"Los hombres son idiotas. Te ves muy deprimida. No lo estés." Melinda se

acercó y le acarició la pierna. "Eres joven y atractiva. Encontrarás uno mejor."
Vanni se limitó a asentir.
"¿Tu novio te engañó?"
Vanni vaciló.
"Él me jodió."
"¿No lo hacen todos los hombres?"
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La referencia al engaño le dolió. Smiley no era el engañador. Tendría que
enfrentarse a Carl. El anillo en el bolsillo tendría que ser devuelto. Casi
lamentaba haber huido de la ONE. Podrían haber sido más comprensivos
sobre lo que sucedió que su pronto-va-a-ser-exnovio.
www
Smiley salió de la cama en el Centro Médico.
"¿Simplemente permitieron que caminara lejos de ellos? ¿Por qué no estaban

vigilándola?"
Fury respiró hondo.
"Shane y Ned cometieron un error."
"¿Un error? Ella podría estar por ahí con dolor. ¡Vulnerable!" gritó Smiley, sin
cuidarse en bajar su tono. "Alguien podría aprovecharse de ella."
"Pon el paquete de hielo de vuelta en tu cara." instó Midnight. "¿Por favor?

Brass realmente te ha etiquetado."
"Voy a matarlo. No tenía derecho a pegarme."
"Estabas con dolor y presentando síntomas con las drogas de cría. Tenía miedo
de que te volvieras loco y dañaras a la humana." Fury se apartó de la pared.
"Sé razonable. Tú habrías hecho lo mismo. ¿Tengo que recordarte lo que
podría haber sucedido?"
"No le he hecho daño a Vanni."
69
Midnight frunció el ceño.
"Ella era la única mujer en la zona. Tú la habrías montado incluso si hubiera

estado inconsciente. Habrías dañado su alma. Eres un buen macho."
Smiley se encogió ante el pensamiento.
"Estaba controlado."
"Brass no estaba seguro de que duraría."
"Hemos contactado con todos los hospitales humanos y su policía estará al

acecho de una mujer en apuros. Díselo, Fury." Midnight le lanzó una mirada
asesina.
"Tenemos muchas agencias trabajando en esto. Nuestros equipos en el hotel

están tratando de identificar a la hembra. Nadie con el nombre de Vanni se
registró allí."
"Su nombre completo es Travanni."
Smiley lamentó no pedir su apellido. Los seres humanos tenían aquellos.

Rusty entró en la habitación y miró fijamente a Smiley.
"He oído que te dieron la droga de cría." Ella se acercó más. "¿Qué te pasó en la
mandíbula?"
"Brass lo dejó sin sentido." respondió Midnight. "Él parece estar haciéndolo
bien ahora."
"Dejadnos solos."
Rusty desabrochó las correas de sujeción del chaleco por encima de su

uniforme. Smiley estaba agradecido de tener tantos buenos amigos. Entendía y
apreciaba la oferta de Rusty, pero no estaba interesado.
"Estoy bien."
Sus dedos se congelaron y ella frunció el ceño.
70
"¿No quieres compartir sexo?" Su mirada bajó a la parte delantera de sus
pantalones. "Estás duro."
El rostro de Vanni brilló en sus pensamientos, una cristalina imagen. Quería

tener relaciones sexuales, pero no con Rusty. Le hacía sentirse un poco
culpable, ya que le gustaba y habían compartido sexo en el pasado. No podía
negar que algo de la droga estaba todavía en su sistema, lo suficiente como
para mantener su polla erecta.
"Tú me necesitas."
El tono ronco de Rusty y la forma en que ella se quedó mirando sus pantalones
dejaban su intención clara.
"Yo me ocuparé de ti."
"No puedo." No quería herir sus sentimientos.
"No tienes que hacer nada para mí con tu boca, si su mandíbula te duele."
Ella dejó caer el chaleco en una silla y cogió la cintura de su camisa.
"¡Alto!" interiormente Smiley hizo una mueca. "Aprecio que hayas venido,
pero tengo el olor de otra mujer por todo mi cuerpo."
Eso era verdad. Podía oler a Vanni en él. Se habían frotado juntos, piel con
piel, cubiertos de sudor y él la había tocado por todas partes. Su polla se
endureció aún más, un latido doloroso en sus pantalones vaqueros. Alguien se
los había abrochado mientras estuvo inconsciente, pero todavía llevaba los
mismos pantalones.
"No sería justo."
"Lo sé. Podría darte un baño de esponja o podemos ducharnos juntos. Pobre
Smiley. ¿Fue terrible tener que tocar una humana en contra de tu voluntad?
Voy a hacer que te olvides de ella."
¿Horrible? Diablos, no.
71
Smiley quería poner sus manos sobre Vanni de nuevo. Pero ella no era la
mujer que estaba de pie ante él, ofreciendo desnudarse, sin embargo. Ese era el
problema.
¿Olvidarme de Vanni? Nunca. Quiero que sea encontrada y traída a mí.
Midnight enganchó el descartado chaleco y se interpuso entre él y Rusty, de

espaldas a Smiley.
"Está con dolor y agitado. Tenemos que ejecutar radiografías en la mandíbula

para asegurarnos de que Brass no se la fracturase. Sabes lo duros que son
nuestros machos. Nunca se quejan. ¿Por qué no regresas a la residencia de
mujeres? Te llamaré si te necesitan."
"Él es mi amigo y no lo voy a dejar en esta condición." protestó Rusty.
Midnight gruñó.
"Déjame reformular eso. Vete a la residencia de mujeres, o dónde estabas

cuando escuchaste las noticias… pero fuera del Centro Médico. Estaré
ejecutando radiografías en su mandíbula. No se le permite compartir sexo
hasta que se haya aclarado todo."
"Él me necesita."
Rusty no estaba dispuesta a renunciar todavía.
"Te quedas y tendrás tu propia habitación."
Midnight dio un paso adelante, tropezó con la otra mujer y la empujó hacia
atrás.
"¿Quieres probar quién es más dominante? Te patearé el culo."
"¿Por qué estás siendo así?" Rusty sonaba confundida.
"Estamos en una crisis y necesitas salir. Te llamaré si las cosas cambian. Vete."
Le ordenó, entregándole su chaleco a Rusty.
72
Smiley relajó un poco cuando Rusty giró sobre sus talones y se precipitó fuera
de su habitación. Midnight se volvió y suspiró. Su expresión se suavizó
cuando dijo:
"Eres demasiado bueno."
"No entiendo."
"Tienes una cara expresiva, Smiley. Ella estaba demasiado ocupada mirando a
tu zona baja para ver tu reacción consternada cuando se ofreció a compartir
relaciones sexuales contigo. Estaba bastante caliente como para sacarte de esos
pantalones. Un primate Especie sobre una droga de cría probablemente es una
experiencia que cualquiera quería probar o tal vez perderse, desde los días de
Mercile. ¿Tu habrías aceptado eso si no la hubiera hecho marcharse, sólo para
evitar herir sus sentimientos?"
"No. Tal vez."
"Eso es lo que pensé. Ahora no es un problema." Se puso las manos en las

caderas. "Mi trabajo aquí ha terminado. Voy a dejar que los hombres discutan.
Tengo algunas llamadas para hacer por tanto estaré en mi oficina." Le dejó.
El teléfono de Fury sonó y él lo retiró, leyendo la pantalla.
"¿Se trata de Vanni? ¿Ha sido encontrada? ¿Está a salvo?" Smiley esperaba eso.
Los labios de Fury se comprimieron en una línea apretada y miró hacia arriba.
"Era Brass. La noticia no es buena."
Smiley se sentó duro en la cama, agarrando los bordes del colchón.
"¿Está muerta?"
Simplemente diciendo las palabras le dolía. No quería creerlo. Fury puso su

teléfono en el bolsillo y se le acercó.
"Su nombre es Travanni Abris. No estaba registrada en el hotel porque era una
invitada de un grupo que reservó un piso entero de habitaciones."
73
"¿Está muerta?" Repitió, no estando seguro de lo que haría si Fury dijera que
sí.
La cena que había comido temprano en la noche amenazaba con subir.
"No la hemos localizado todavía." Fury hizo una pausa. "Estaba con la Iglesia
Woods, Smiley."
Había oído ese nombre antes. Le llevó un momento para recordar dónde.
"¿La iglesia que vino a protestar por nuestra presencia en la conferencia?"
"Sí. Gregory Woods es un predicador, o algo así, que dirige esa iglesia. Él ha
sido muy vocal en las noticias acerca de su creencia de que nunca debimos
haber sido creados e insiste en que nuestra existencia es un insulto a su dios. Él
quiere Homeland y Reserva cerrados y todos nosotros devueltos a nuestras
celdas. Él se refiere a Homeland y Reserva como zoológicos."
Smiley dejó que la información se asentara en él.
"¿Por qué iba a decir eso?"
Fury se encogió de hombros.
"Es un idiota. Tuve que ver algunos de sus sermones televisados con fines de
investigación. Conoce a tus enemigos. Nos compara con animales que han sido
capacitados para hablar y vestirse como si fueran humanos. Afirma que los
animales salvajes no deben ser domesticados y es un desastre a punto de
ocurrir. Incluso hace referencia a un par de películas de terror de lo que podría
suceder si no somos puestos de nuevo en jaulas y mantenidos en nuestro
lugar. Sus tácticas son utilizar el miedo para asustar a los humanos en la
creencia de que vamos a conquistar el mundo y ponerlos a ellos en jaulas en
nuestro lugar."
"Suena como alguien al que quisiera encerrar."
Fury esbozó una sonrisa.
74
"Exactamente."
Smiley no pudo encontrar el humor en su intercambio. Vanni obviamente

pertenecía a una iglesia que odiaba a las Especies. Pasó revista a cada
momento que habían compartido.
"Ella no me trató de la manera en que lo hacen los humanos que piensan que
somos peligrosos. Ya sabes cómo actúan, como si quisiéramos morderlos o
hablándonos lentamente, como si no pudiéramos entender lo que dicen."
Fury asintió.
"Yo le gusté." admitió.
"Ella te drogó. Por lo menos ahora sabemos a quien vendió la fórmula

Drackwood Investigaciones. La Iglesia Woods obviamente compró la versión
humana de nuestra droga de cría."
El Doctor Harris entró.
"¿Cómo te sientes, Smiley?"
"Estoy bien. El dolor se ha ido."
"Veo que todavía estás sufriendo una erección. Voy a tener que drenar la
sangre, si ese efecto secundario no desaparece en unas pocas horas."
Smiley se agachó y protegió a su entrepierna con una mano.
"No. Ya te lo dije cuando mencionaste eso la primera vez."
"El priapismo puede hacer que sufras de disfunción eréctil en el futuro,

Smiley."
"¿Qué es eso?"
"El priapismo significa erecciones a largo plazo. ¿Puedes eyacular?"
El recuerdo de estar encima de Vanni, dentro de ella y corriéndose cruzó por la

mente de Smiley.
75
"Sí."
"No somos como vosotros." recordó Fury al más joven de los dos doctores
Harris que trabajaban para la ONE... padre e hijo. "Ninguno de los que han
tomado la droga de cría han tenido problemas para conseguir ponerse duros
después. Ese fue el punto en que Mercile creó esto. Querían asegurarse de que
teníamos sexo a menudo cuando estaban tratando de impregnar a nuestras
mujeres."
"¿Te sientes como siempre?" El Doctor Harris estudió a Smiley.
"Estoy un poco irritado, pero estoy bien."
Se sentiría mejor si ellos localizaran a Vanni y la llevaran a Homeland de

modo que sabría que estaba a salvo.
"Los dolores de estómago se han ido."
"¿Cómo están tus niveles de agresión?"
"Aún altos."
No mentiría. El impulso de golpear algo estaba allí, pero se resistía. Lo último

que quería era ser contenido, si les preocupaba que lastimara a alguien.
"Es manejable."
"Algunas de nuestras pruebas se han confirmado. Es una forma de la droga de

cría, aunque una versión más suave. Me gustaría poder enviarlo a un amigo
mío para mirarlo, pero Justice dijo que no."
"La última cosa que necesitamos es entregar otra arma contra nosotros a mas
desconocidos."
El teléfono de Fury sonó. Lo recuperó y miró a la pantalla.
"Estoy con Justice en esto. Es demasiado arriesgado. Aguanta. Tengo que coger
esto." salió corriendo de la habitación.
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"¿Qué podría hacer a un humano esa versión más suave?"
"No estoy seguro. Tendría que examinarla. Me dijeron que escapó de la

custodia."
"¿Va a morir?"
"No lo sé."
Eso enfureció a Smiley.
"¿Qué es lo que sabes?"
El Dr. Harris retrocedió.
"Cálmate."
"Sigo pensando que despertó con dolor y salió corriendo. Probablemente está
sufriendo y algunos machos podrían encontrarse con ella. Podrían hacer
cualquier cosa con ella." Su voz adquirió un sonido ronco y sus manos
formaron puños. "Está indefensa."
"Escúchame." instó el médico "He probado ambas bebidas. La cantidad de la

droga era mayor en tu bebida que en la de ella. Estás malhumorado, pero bien.
El dolor se ha ido. Sólo estás de mal humor como la mierda. Estoy seguro de
que ella está probablemente igual. He leído el informe. De acuerdo a su altura
y peso aproximado, no creo que fuera una cantidad tóxica."
Eso hizo que se sintiera mejor.
"A menos que ella tenga problemas de salud. Esas son cosas que no puedo
tomar en cuenta."
Quería golpear al médico.
"Vete."
"Smiley, realmente creo que debo realizar algunas pruebas de sangre en ti."
"¡Sal antes de que te golpee! Estoy a punto."
77
El doctor Harris abandonó la sala a toda prisa. Fury regresó.
"¿Quién llamaba? ¿Han encontrado a Vanni? "
Fury vaciló.
"Alguien respondió a la orden de búsqueda y captura que la policía lanzó. Un

testigo dijo que vio a una mujer que se ajusta a su descripción meterse en una
camioneta con otra mujer. Parecía estar bien, pero el testigo se acordó de ella
porque su falda estaba rasgada cerca del dobladillo y no llevaba zapatos. Él
pensó que podría ser una sin-techo."
"¿Fueron capaces de realizar un seguimiento de esa camioneta?"
"Él tipo no cogió la matrícula o donde se dirigía. Sacaron información de la

licencia de conducir y dos agentes de la policía están estacionados fuera de su
apartamento. Nadie respondió cuando llamaron. Están vigilando por si vuelve
a casa. La encontraremos, Smiley. La buena noticia es que ella está con una
mujer. Ningún hombre se la llevó."
"Muy bien." Él respiró hondo. "Necesito una salida para la rabia. No estoy con
dolor, pero estoy cabreado."
"Vamos a ir a la sala de entrenamiento. Estoy seguro de que alguien va a

entrenar contigo."
"Hagamos eso."
"Puede que desees ducharte primero."
Vanni.
Su olor estaba sobre él. Vaciló, no estaba dispuesto a perder esa conexión. No
era racional, sin embargo, se dio cuenta.
"De acuerdo."
78
Fury lo estudió, la preocupación era evidente.
"Estaré bien."
Su amigo asintió con la cabeza.
"Lo sé."
79
Capítulo Cinco
Vanni sabía que Beth se cernía en la puerta del baño de su piso compartido
porque estaba preocupada. Habían sido las mejores amigas desde primer
grado.
"Estoy bien."
"No veo cómo. Todavía no puedo creer lo que me has contado en el coche."
Miró a Beth.
"Me gustaría que fuera mentira, pero todo es cierto. Necesito una ducha."
Comenzó a desnudarse y empujó la falda hacia abajo. El anillo de compromiso

se cayó de su bolsillo y rebotó en el suelo de baldosas. Lo estudió, un
recordatorio de su nueva realidad.
"Casi puedo leerte la mente. Te ves tan triste, Vanni. No es tu culpa. Estabas
drogada." Beth se detuvo. "No tienes que contárselo a Carl. Puede que no me
guste, pero sé lo mucho que te importa. Podríamos decir que tienes un caso
grave de intoxicación alimenticia, que fui y te recogí del hotel."
Ella negó.
"No. Se acabó. Me mintió para que fuera al hotel en el primer lugar y se

convirtió en un idiota total. Tenías razón sobre él."
"¿Qué parte? ¿Que era un hijo de puta egoísta o que era un idiota?"
Vanni frunció el ceño.
80
"Venga. ¿Te pide que te cases con él y de inmediato deja de tocarte? No has
tenido relaciones sexuales con él en cuatro meses."
"Tenía miedo de que fuera una mala imagen para su reputación. Entendía eso.
Cuando nuestro compromiso fue anunciado en los periódicos, hablaron sobre
su padre también. Se habría visto fatal que el hijo de un predicador se quedara
en casa de una mujer hasta tarde. Los reporteros de pronto se interesaban en él
y de su vida."
"Eso es flojo. Dije eso y me atengo. Hay algo malo con Carl. Ya has dicho que
el sexo no era ni siquiera bueno y que rara vez te tocaba. Probablemente tiene
un novio escondido en alguna parte. A él le bastó que dijeras que sí y adiós al
cariño. Es un grito de que le gustan los chicos y te necesita para ocultarlo."
Vanni no estaba segura.
"De cualquier manera, ya no vamos a casarnos." Se inclinó, recogió el anillo y

lo puso en un cajón para que no se perdiera. "Se lo devolveré cuando regrese a
la ciudad."
"Quiero saber más sobre este Nueva Especie. Todo lo que has dicho es que los
dos estabais drogados y que tuvisteis relaciones sexuales. ¿Era bueno? Quiero
decir, te acuerdas, ¿verdad?"
"Nunca voy a olvidar eso. Lo recuerdo todo."
Se dio la vuelta en el agua y dejó que se calentara, cerró la tapa del inodoro
para sentarse y poder mirarse los pies. Esperaba no haberse cortado. Se quedó
sin aliento al sentarse, consciente de su propia piel.
"¿Estás bien?"
Vanni examinó su suela.
"Es sólo un moretón. No veo ningún corte o sangre."
"Eso no es lo que estoy hablando. ¿Te duele?"
81
Vanni miró hacia arriba.
"No, no me hizo daño." Se puso de pie. "Solo estoy un poco sensible."
"¿En una buena o mala manera?"
"¿Qué significa eso?"
Beth arqueó las cejas y sonrió.
"¿Era grande? Se ven grandes. ¿Es por eso que te has estremecido al sentarte?"
"¡Beth!" Vanni frunció el ceño. "No seas repugnante."
"Estoy siendo honesta. Deberías ver cómo estás andando. No era sólo la cojera,
pero estás un poco patizamba. ¿Era como Justice North con esos hermosos ojos
de gatito?"
"No."
"¿Es como Fury? Es canino y tan caliente. Envidio a Ellie. Era tan
condenadamente triste, pero fue como un sueño cuando le dispararon y él sólo
se lanzó hasta llegar a un lugar seguro. ¿Puedes imaginar a cualquier tipo
tomando balas para proteger a una mujer? Eso es lealtad al extremo."
El rostro de Smiley surgió en su memoria.
"No era como Fury o Justice."
"¿Era un primate?" Beth se apoyó contra la pared. "¿Cómo es? No he visto

ninguna foto que muestre sus características."
"Tenía unos ojos preciosos." Se dio la vuelta y se metió en la ducha.
"¡Mierda!" Beth se asustó y Vanni giró, casi resbalando en la bañera mojada.
"¿Qué?"
"Pensé que habías dicho que no te había hecho daño."
"No lo hizo."
82
Beth entró en el cuarto de baño y agarró su pequeño espejo de maquillaje. Se
acercó y se lo ofreció.
"Es una buena cosa que estés a punto de romper con Carl o él sabrá que algún
otro chico te la clavó. Echa un vistazo a los moretones de tu culo. Tiene manos
grandes."
Vanni cogió el espejo y se retorció, consiguiendo un vistazo a su trasero. Los

moratones se estaban formando en ambas nalgas en forma de huellas de
manos.
"No me duele."
Su amiga aceptó el espejo de nuevo.
"Déjame adivinar. Lo hicisteis de pie y él agarrándote el culo. Para eso se

necesita habilidad."
Un flashback la golpeó... Smiley inmovilizándola contra la camioneta y sus

manos ahuecando su culo mientras mecía la pelvis contra la de ella.
"Sólo quiero olvidar esta noche."
Beth le devolvió el espejo y se sentó en el mostrador.
"Esta ha sido tu primera aventura de una noche."
"Gracias por el recordatorio. ¿No me has oído? Quiero ducharme, ir a la cama

y fingir que nada de esto ha pasado."
"No lo harás. Te conozco demasiado bien. No le irás a contar a Carl que has
tenido relaciones sexuales con otra persona, ¿verdad?"
Vanni vaciló.
"Le debo mucho."
83
"Mala idea. Él es un cabrón, cariño. Te sentías atraída por Smiley, drogada o
no. Te he oído muy de cerca, ya que estaba en el modo paralizante y no podía
ni hablar en un primer momento. Deberías estar más enfadada."
"Lo estoy."
Beth permaneció tranquila mientras Vanni se duchaba. Apagó el agua, luego

agarró una toalla para envolver su pelo mojado y otra para secar su cuerpo.
"Te gusta Smiley."
Vanni hizo una pausa y se encontró con la mirada preocupada de su amiga.
"Fue muy bueno."
"El sexo fue genial, ¿no?"
"Fueron las drogas. No tienes ni idea de lo que nos hicieron."
"¿Quieres contármelo?"
"En realidad no."
"No eres del tipo de sexo casual. Algo más sucedió entre vosotros. Sientes algo
por él."
"Sentí un montón de cosas y la mayoría no eran buenas. Esa droga es horrible.

No creo que alguna vez quiera tener niños. Me lo puedo imaginar ahora. Fue
realmente malo."
"¿Era tan grande? ¿Estás segura de que no era un caballo en vez de un

primate?"
"Cállate."
Vanni envolvió la toalla alrededor de su cintura y salió cojeando del cuarto de

baño a la habitación que compartían.
"Estoy hablando del dolor que sentía cuando no estábamos... ya sabes."
"¿Haciéndolo?" siguió Beth.
84
"Sí, si quieres utilizar ese término crudo." Se puso un camisón y se metió en la
cama. "Estoy muy cansada y no me quiero enfrentar al mañana."
Beth se sentó en el borde del colchón.
"Podrías enviarle el anillo por correo y evitarlo. Ese es mi consejo."
"No estaba pensando en eso, pero gracias. Simplemente me he acordado de

que ya hemos enviado las invitaciones de boda. Voy a tener que ponerme en
contacto con todo el mundo para decir que se cancela."
"No es algo malo. Carl era un idiota, cariño. Estoy un poco contenta de que
esto haya sucedido." Vanni la miró boquiabierta. "No me refiero a las drogas y
tener relaciones sexuales con una Nueva Especie. Carl no era el adecuado para
ti. Solo cumplía con tu rol del marido ideal."
"No sabía que tenía uno."
"Tiene un trabajo estable y quería niños. Es tan malditamente aburrido que

sabes que no va a jugar a ocultar el escrito de su personal de la oficina. "Beth
sonrió. "Eso fue una broma de abogado. Estoy tratando de hacerte reír."
"No hay nada divertido sobre esto. Mi vida está arruinada."
Beth negó con la cabeza.
"No. Es sólo diferente ahora. Odiabas al padre de Carl y todo lo que su iglesia
representa. Ni siquiera pudimos aguantar cinco minutos de su show
televisivo. Era un fanfarrón. No vas a tener que fingir más que te gusta,
cuando aparezca de visita o preocuparte por Carl haciéndote asistir a
cualquiera de sus sermones cuando le visite."
"Llegué a ver uno antes en persona. Una vez fue más que suficiente."
"Bueno, eso es una buena cosa ya que has terminado con Carl." Vanni no podía
discutirlo. "Y finalmente llegaste al punto."
"Eso no es gracioso."
85
Beth suspiró.
"Lo siento. Sabes que manejo el estrés con el humor."
Vanni se arrastró sobre la cama y estrechó su mano.
"No te atrevas a llorar o voy a empezar."
"¿Estás bien? No me mientas. Odio cuando actúas toda dura y a la vez

intentando actuar tan difícil. No me puedo imaginar lo que debes haber
pasado. Las das estamos evitando la palabra con "J", pero eso es algo de lo que
era."
"Estaba demasiado drogado. Los dos somos víctimas."
"¿Estás segura? Quiero decir, ¿cómo sabes que no trucó tu copa?"
"La ONE piensa que yo lo hice."
Beth palideció.
"¿Qué?"
"Supongo que yo era la única que estaba sentada a su lado."
"Eso es una locura. No eres de las que necesitan drogas para tener relaciones
sexuales. ¿Qué está mal con ellos? Tú también fuiste drogada."
"Lo sé."
"Voy a llamarles mañana mismo y enderezar su rumbo."
"No lo hagas." Se asustó al instante. "Me estaban llevando a Homeland cuando

me escabullí."
"¿Qué?"
"Sí. No sé si era solo para buscarme un tratamiento médico o arrestarme.

Smiley parecía creerme cuando le dije que no lo había hecho, pero no estoy
segura acerca de los que iban con él. Oí a dos de ellos hablando cuando me
desperté en el asiento trasero. Me asusté."
86
"Vamos a contratar a un abogado."
"No saben quién soy. Quiero decir, me dejé el bolso en la habitación del hotel y
sólo les dije que mi nombre era Vanni. La habitación estaba a nombre de
Mable. Es la asistente de Gregory. Ni siquiera podía firmar para el café de esta
mañana. Sólo era una huésped en su habitación."
"Eso es bueno. Tal vez deberíamos ir a la policía y contarles lo que pasó."
"¡No!" Vanni se horrorizó ante la idea. "Sólo quiero olvidar."
"Tus cosas están todavía en el hotel. ¿Carl sabe que te has ido?"
"Mierda. No. Él podría levantar el infierno en la mañana, cuando no me

presente para el desayuno."
Beth la soltó y se puso de pie. Se acercó a la cómoda y sacó su teléfono móvil.
"Siempre te cubro."
Llamó a un número y puso el dedo sobre el labio para que Vanni guardara
silencio.
"Hola, Carl. Soy Beth. Sólo quería que supieras que recogí a Vanni y está mi
casa ahora." Hizo una pausa. "Comió algo y tiene un caso grave de
intoxicación alimenticia. No quería molestarte ya que sabe que esto era un fin
de semana importante para tu padre. "
Hizo una pausa de nuevo, escuchando, y se quedó mirando Vanni. Ella estaba
agradecida. Se preocupó cuando su mejor amiga apretó los dientes.
"Sólo prepara sus cosas y haz que alguien las deje en nuestro apartamento
mañana. Está durmiendo después de vomitar las tripas. Gracias por estar tan
preocupado por su salud y no obsesionado con algún estúpido desayuno que
no echará de menos."
Beth colgó.
"¿Se lo ha tomado tan mal?" Vanni había sospechado que lo haría.
87
"Ya es oficial. Es un idiota total. Ni siquiera ha preguntado cómo estabas, pero
despotricó sobre algunas fotos de prensa que se suponía que tomarían de él en
el desayuno. Dijo que vas a hacer que él y su padre se vean mal. Me acaba de
lanzar al final que se sentía como un culo, si eso es posible. Has esquivado una
bala con ese perdedor."
Vanni asintió.
"Va a salir bien."
Realmente quería creer eso.
"No estés tan triste. Carl no vale la pena. No creo que alguna vez le amaras.
Era sólo la idea de la valla blanca." Beth miró a su alrededor. "Lado brillante,
vamos a ahorrar un montón de dinero en este nuevo lugar, ya que se degradó
a una habitación, así que no estaría atrapada pagando dos dormitorios
después de mudarte. Tal vez podemos usar el dinero de repuesto y finalmente
hacer un viaje a Hawai. Eso sería genial."
"Lo siento mucho, Beth."
Su mejor amiga se sentó en la otra cama un par de metros de distancia.
"¿Por qué? Yo soy la que eligió este lugar. Me encanta. Es acogedor. Me gusta
compartir una habitación contigo. Será como un campamento de verano todas
las noches." Cruzó las piernas y se recostó contra una almohada mullida.
"¿Recuerdas? Nos volvimos a escapar toda la noche y conducimos a la locura a
los consejeros del campamento con nuestras risitas."
Eso aligeró el humor de Vanni. Esas fueron algunas de sus mejores recuerdos.
"No tenemos que compartir el baño con otras dieciocho niñas. Odiaba esas
caminatas en medio de la noche para hacer pis."
"O las picaduras de mosquito en el culo de esos cabrones escondidos en el

baño."
Se sonrieron. Beth habló primero.
88
"Dime tu más profundo, más oscuro secreto y yo te diré el mío."
Era un juego al que solían jugar. Vanni se lamió los labios y dijo lo primero
que le vino a la mente.
"Me gusta mucho Smiley."
"Oh, cariño."
"Fue tan dulce, Beth." Las lágrimas llenaron sus ojos. "Tendría que haber
estado enfadado, pensando que le había drogado, pero no lo estaba. Yo tenía
miedo y me dolía, pero él se hizo cargo de mí. No tenía que tener relaciones
sexuales con él, pero quería. Lo empecé yo. "
"Era caliente, ¿no?"
Vanni se secó las lágrimas.
"Muy caliente."
"Lo sabía. ¿Era bueno en la cama?"
"El mejor."
"¿Te has enamorado un poco de él?"
"Probablemente."
Beth se acostó y se acurrucó a su lado, sosteniendo su mirada.
"¿Quieres poder verle de nuevo?" Vanni no estaba segura de cómo responder.

"Está bien si lo haces. No voy a juzgar. Lo sabes. Suena increíble, además de
cómo os conocisteis, quiero decir. "
"No creo que quiera volver a verme."
"No puedes estar segura si no tratamos de contactar con él."
"No. Tengo que olvidar esta noche y seguir adelante con mi vida. Es tu turno.
Dime tu más profundo, más oscuro secreto."
89
Tomó largos segundos para que respondiera.
"Realmente odiaba a Carl."
Vanni sonrió.
"Lo sabía."
"Escucha a tu mejor amiga la próxima vez. Eso es todo lo que pido."
"Trato."
"Duérmete. Estoy aquí. Estás en casa. Vas a estar bien."
Vanni cerró los ojos, pero lo único en lo que podía pensar era Smiley. Esperaba
que estuviera bien.
www
Smiley entró en su apartamento de la residencia de hombres y cerró la puerta.

La droga había pasado a través de su sistema. Su polla ya no le dolía por una
erección constante y había liberado su agresión en un saco de boxeo. El
silencio dentro de su apartamento era absoluto. El varón que vivía junto a él
había ido a la Reserva y al otro lado del pasillo había una pareja. Ahora vivían
juntos en otra sección del Homeland.
Cogió una lata fría de la nevera, pero se quedó mirando el refresco de cereza.
Le recordaba a Vanni. La devolvió a la nevera y sacó una botella de agua en su
lugar. Se bebió la mitad y caminó hacia el balcón. No abrió la puerta o salió, se
quedó allí mirando fijamente a la oscuridad.
90
Vanni estaba en algún lugar ahí fuera. A su juicio, la preocupación constante
por ella era una forma de tortura.
El teléfono móvil que había tomado de Seguridad en su camino a casa le

pesaba en el bolsillo. Habían prometido que le llamarían si la encontraban.
Seguía estando tan tranquilo como sus alrededores. Puso su mano abierta en el
cristal.
"¿Dónde estás, nena?"
Se apartó, caminando por la alfombra delante del sofá. No se conocían mucho,

pero lo único en lo que podía pensar era en Vanni. Su imagen parecía impresa
para siempre en sus pensamientos. Se había duchado y cambiado de ropa,
pero aún podía olerla.
Un suave golpe fue bienvenido y se abalanzó hacia la puerta, retorció la

cerradura y la abrió. Era posible que no hubieran querido llamar si la noticia
era mala. Querrían decírselo en persona, pero no era un oficial de guardia el
que estaba de pie allí.
"Hola, Jericho."
"Escuché lo que sucedió. ¿Puedo entrar?"
Superó el estar solo.
"Claro." Se hizo a un lado. "Estoy bien."
El macho cerró la puerta y se apoyó en ella.
"¿Diría eso de otra manera?"
Ese comentario le sorprendió.
"La droga está fuera de mi sistema."
"Debe haberte dejado con un montón de recuerdos difíciles."
91
"No fue tan malo. Quiero decir, me acuerdo de todo y el dolor no se acerca a lo
que podría haber sido."
Jericho suspiró profundamente en su pecho.
"Tú y yo somos diferentes del resto."
"No te entiendo."
"Sí, lo haces." Él inclinó la cabeza. "Mantenemos nuestras emociones más cerca

de la superficie. Yo soy mejor en ocultarlo que tú. Tus sentimientos se
muestran en tus ojos. Pareces triste. Eso es inusual para ti. Esto te afecta.
Háblame."
Smiley vaciló.
"Estoy preocupado por ella."
"¿La mujer que te drogó?"
"Dijo que no lo hizo."
"El equipo indica lo contrario en su informe. ¿Estás seguro de que no era

responsable?"
"No, pero estoy seguro de que no sabía lo que iba a suceder."
"¿Cómo?"
"Vi el miedo en sus ojos. El shock."
Smiley pasó los dedos por el pelo y comenzó a caminar de nuevo. Ayudó.
"No tenía idea de lo que iba a pasarnos."
"Tal vez no hasta qué punto."
Eso le detuvo en seco.
"¿Qué quieres decir con eso?"
92
"El equipo está seguro de que ella dosificó ambas bebidas. No tenía ninguna
identificación. Sólo una llave de habitación del hotel. ¿No te parece
sospechoso? Los humanos siempre llevan identificación, especialmente a un
bar humano. Tampoco tenía una habitación a su nombre, pero su tarjeta se
registró a una habitación que estaba pagada por la Iglesia Woods. Hemos
estado tratando con ellos por un tiempo. No son nuestros amigos."
No podía negar que la evidencia parecía irrefutable.
"Tal vez fue empujada de alguna manera. Forzada."
"Has compartido sexo con ella y recuerdas los detalles así que me imagino que
fue intenso."
A Smiley no le gustaba hacia dónde se dirigía la conversación.
"¿Crees que podría sentir un vínculo de protección hacia ella debido a las
respuestas físicas extremas?"
"Amenazaste con hacer daño a los miembros del equipo cuando intentaron
examinarla. Tampoco seguiste las órdenes directas de Brass, cuando estaba
dispuesto a dejarla inconsciente para traerla aquí. Realmente querías a esa
hembra."
"Porque estaba drogado."
"Dijiste que estabas en control en ese momento. ¿Qué es?"
La ira se agitó en él.
"¿Has venido aquí para discutir conmigo?"
"No. Vine a hablar contigo porque estoy preocupado."
Smiley se calmó y se dejó caer en el sofá. Colocó la botella de agua sobre la

mesa lateral.
"Siéntate si vas a quedarte."
93
Jericó optó por sentarse en la silla frente a él.
"No quiero herir tus sentimientos, porque esto no estaba dirigido hacia ti. Tú
eras la única Especie en ese bar y por eso fuiste el blanco. Dime que lo
entiendes."
"Lo hago."
Jericho le miró fijamente con sus ojos de color rojo-marrones.
"Lo hago." repitió Smiley. "Le podría haber pasado a cualquiera."
"Los caninos habrían olido la droga en la bebida." Apretó las manos en su

regazo. "Eso no es tu culpa. Su sentido del olfato es mejor. Es por la genética."
"¿Por qué sacas el tema?"
"Pensaba que en parte te culpas a ti mismo por ser un blanco fácil. Estoy
tratando de ponerme en tus zapatos. No somos los más débiles de las Especies
aquí. También lo pienso a veces."
"Tienes el ADN de los gorilas. Probablemente el mío sea el de un chimpancé."
"Pueden ser criaturas feroces."
Smiley resopló.
"Lo son. Leí la investigación. Son muy territoriales y son buenos luchadores."
"No tengo problemas de insuficiencia, ni la cabeza pequeña."
"Bien. Me alegra oír eso. Tenemos nuestras ventajas sobre los caninos y
felinos."
"Somos mejores escaladores, aunque envidio a los felinos por su habilidad

para saltar."
"No me digas." se quejó Jericho.
Smiley suspiró.
94
"Todos somos Especies. Somos una familia. Nunca me tomo el tiempo para
reflexionar sobre nuestras diferencias."
"Deberías hacerlo, ahora mismo. Tendemos a ser más emocionales, como son
los seres humanos. Nuestros sentimientos crecen más rápido. Voy a ser
franco."
"Me gustaría lo fueras."
"Las únicas mujeres con las que tú y yo compartimos el sexo son caninas o
felinas. Me han dicho que soy diferente y apostaría que hacen lo mismo
contigo. Necesitamos algo más que sexo. Se trata de tocar y sentir el vínculo
que compartimos con ellas durante los momentos íntimos. He evitado a los
seres humanos por esa misma razón. Es probable que hagas lo mismo."
"Solo porque no he conocido a ninguna que me atrajera y que sintiera lo

mismo por mí o lo habría intentado."
Jericó se removió en la silla y apoyó los brazos.
"Nuestras mujeres saben cuándo empujarnos, lejos pero las humanas no lo

hacen. He leído el informe, Smiley. Estabas cuidando a esta mujer y ella lo
permitió. Sólo puedo imaginar cómo te ha afectado, pero probablemente fue
bastante potente. Eso, mezclado con los efectos de la droga de reproducción,
podría plantear un problema."
"Me he perdido."
"Estás demasiado preocupado de la manera incorrecta sobre la búsqueda de

esta mujer. Has dejado claro que no se trata de asegurarte de que será
castigada por lo que te ha hecho, sino más bien temor por su seguridad. Me
preocupa que creas que hay un vínculo que en realidad no existe. ¿Lo
entiendes? No quiero que te duele más."
Smiley no estaba seguro de cómo responder.
95
"Esta mujer entró en ese bar con la intención de hacernos daño." Jericho
mantuvo la voz baja y estable. "Había periodistas de todo el mundo cubriendo
los discursos de Justice revelando nuestros planes de expansión de la Reserva
para dar cabida a la vida silvestre y a los que hemos dado la bienvenida a
partir de las operaciones de rescate. Eso es importante para todos nosotros,
porque sabemos lo que se siente al ser vistos como animales peligrosos.
Hubiera hecho daño a nuestra imagen pública si la hubieras atacado frente a
todos esos testigos. Esto no es sobre ti. Ese ataque fue dirigido a la ONE."
"Sé que yo no era el objetivo."
"Una agradable humana decente no habría hecho eso. Es obvio que la Iglesia
de Woods compró esa droga a Drackwood. Sabíamos que estaban trabajando
en una versión que no mataría a los seres humanos. Es la única forma en que
podrían haberla conseguido. La prueba confirma que es una versión alterada
de la original. Eso significa que han gastado mucho tiempo y dinero en este
ataque. No quiero que te sientas confuso por una mujer que no es digna de
eso. Podría no haber sido advertida del dolor que la droga causa, pero es
innegable que su intención era hacer daño a las Especies."
"Tal vez no entendía el impacto que tendría."
"Entonces ¿por qué se escapó? La estaban llevando a buscar asistencia médica.

Estoy intentando ser lógico."
La forma en que su pecho se apretó y le dolió fue una desagradable sensación

inesperada para Smiley.
"Tienes razón."
Jericho se puso de pie.
"Voy a tomar un trago y dormir en tu sofá. No debes estar solo en un momento

como este, amigo. Siento que esto haya sucedido."
"No voy a tirarme por la ventana."
96
Jericho giró, una mirada horrorizada plasmada en su rostro.
"Era una broma." Smiley forzó una sonrisa. "Estoy decepcionado. Lo superaré.
No tienes que quedarte en mi apartamento."
"¿Preferirías estar con una mujer? Estoy seguro de que Rusty te permitiría
dormir en su cama esta vez. Está preocupada por ti también."
"No estoy listo para eso."
"Deberías. Olvídate de la humana y disfruta de un poco de mimo de una de

nuestras hembras. Esto hará que las cosas parezcan mejores."
Smiley se puso de pie.
"Me siento solo. Una noche con una de nuestras hembras no va a curar eso.
Sólo lo haría peor. Soy fuerte. Superaré esto. Siempre lo hago. Solo ha sido un
día difícil."
"Dormiré en el sofá. Vas a tener que recogerme y echarme si quieres que me

vaya."
No tenía sentido discutir con el macho.
"Aprecio tu amistad."
"Somos familia." Jericho abrió una lata de refresco de cereza y bebió. "Harías lo
mismo por mí. No me gustaría estar solo después de algo como esto tampoco.
Te despertaré si tienes pesadillas."
"Estoy agotado. Me voy a dormir."
"Estaré aquí." Jericho cabeceó hacia la televisión. "¿Te importa si la pongo?"
"Eres mi invitado."
Smiley se dirigió a su habitación y cerró la puerta. Se detuvo allí, recordando

la cara de Vanni. Tenía que dejarlo ir. Tenía que dejarla ir. Jericho había hecho
puntos válidos. Por otra parte, no había estado allí.
97
Vanni se había ruborizado cuando la desnudó. Había habido una inocencia en
ella que encontraba entrañable. Eso no era un rasgo que un ser humano
malicioso poseería. Nada de eso tenía sentido. Se acercó a la ventana y miró
hacia la oscuridad.
¿Dónde estás, Vanni?
98
Capítulo Seis
"¡Vanni! Despierta, maldita sea. ¡Ven aquí!"
Vanni se disparó en posición vertical en su cama cuando Beth empezó a gritar

desde la sala de estar. Se quitó las mantas y se lanzó hacia la puerta.
"¿Qué pasa? ¿Estás herida?" Su mirada frenéticamente buscó y encontró a su

amiga.
Beth estaba de rodillas en el centro de la habitación entre la mesa de café y la

televisión. Su amiga estaba pálida mientras señalaba la televisión con el
mando a distancia. Vanni le echó un vistazo, viendo un anuncio.
"¿Qué ocurre?"
"Lo van a sacar. Acabo de ver la promo por ello. "
"¿De qué hablas? ¿Beth? ¿Qué demonios?"
Su boca se abrió, cerró y abrió de nuevo.
"Era mi programa de chismes de la mañana."
"¿Cuál?" Vanni salió de la habitación, apartándose el pelo desordenado de la

cara.
"Es sobre ti y las Nuevas Especies."
"¿Qué?"
"Han sacado un vídeo de vosotros de la noche anterior."
Vanni tenía que haber oído mal.
99
"¿Qué quieres decir?"
"Nadie más tiene esa horrible falda con la que llegaste a casa la noche anterior
y, créeme, eras tú. Han mostrado un clip de una próxima historia y es acerca
de la ONE. Mostró unos segundos de ti envuelta alrededor de un tipo
enorme."
"Esto no es gracioso."
"No estoy bromeando. Estoy teniendo un ataque al corazón. Viene después de

los anuncios. "
"Te equivocas. ¿Qué han dicho?"
"Escuché ONE en el televisor mientras me preparaba la avena y miré. Te

sacaban con las piernas envueltas en torno a un tipo de deportista, haciéndolo
caliente y duro. No hay duda de que es tu falda."
Los anuncios terminaron y el programa de televisión por cable comenzó. Beth

subió el volumen, cuando la pareja de presentadores se enfrentó a las cámaras.
El hombre tomó la delantera.
"Sé que habéis oído un montón de historias sobre la ONE últimamente, pero
aquí hay algo nuevo. Un video presentado de forma anónima llegó a nuestra
emisora y muchas otras esta mañana."
"Por lo general, las historias que nos dan sobre a la ONE implican crímenes de
odio. No hoy." La sonrisa se propagó en el rostro de la mujer. "Parece que
algunas personas son muy amables con las nuevas especies."
Las rodillas de Vanni se derrumbaron bajo ella y golpeó la alfombra cuando

un video granulado comenzó a visionarse en la pantalla. Salían Smiley y ella.
El ángulo era desde arriba y el operador de la cámara de vídeo hizo zoom.
Estaban de pie juntos con la mano de Smiley en el hombro, la otra sosteniendo

su cadera mientras ella se enderezaba. Las palabras no podían ser escuchadas,
pero Smiley dijo algo. Ella asintió con la cabeza. Sus labios se movieron de
100
nuevo. Su mano salió disparada y agarró un puñado de su camisa. La rasgó
para revelar la piel desnuda de la parte superior del pecho y casi hasta el
ombligo. También le cogió del pelo, agarrando un puñado detrás de su cuello
y utilizó la fuerza para bajarle la cabeza.
"¡Oh, mierda!" Beth se quedó sin aliento.
Vanni se vio con horror besando a Smiley. Se veía desesperada y cachonda. Se

puso peor cuando levantó una pierna lo suficientemente alto como para
engancharla en la parte posterior de su muslo, en un obvio intento de
conseguir recogerla. Él lo hizo. Fue entonces cuando envolvió sus piernas
alrededor de su cintura, la falda subió hasta los muslos en el proceso.
"No." susurró Vanni.
La memoria regresó y no se sorprendió cuando empezó a moler su cuerpo

contra el de él. Fue horrible verlo. Le recordaba a un perro que había tenido
una vez, que montaba cualquier pierna que encontraba quieta.
"No, no, no." cantó ella.
Smiley se apartó de ella y trató de evitar su boca. No se detuvo. Hundió la cara

en su cuello con los ojos cerrados. Él se quedó allí permitiéndoselo, excepto
que sus labios se movieron ligeramente, como si le estuviera diciendo que
parara. No podía recordar esa parte pero, al verlo, lo creyó.
Algo pasó en el otro lado que la cámara no podía ver, pero inclinó la espalda y
luego se giró, sujetándola contra un SUV negro. Parecía tratar de detenerla y
estar tirando de su pelo. Se apretó contra ella, inmovilizándola, pero entonces
ella le agarró la cara y puso sus labios sobre los de él. Fue un disparo de la
mayor parte de su rostro. Sus ojos estaban cerrados y ella iba a por todas,
besando el infierno fuera de él.
"¡Tenemos a alguien en el techo!" Gritó un guardia de la ONE situado en la

parte delantera de la camioneta.
101
Él sacó su arma y apuntó a la cámara. La persona que operaba se apartó y el
videoclip terminó. El espectáculo volvió a los anfitriones. La mujer se abanicó
y sonrió.
"Yo diría que fue muy amable."
El hombre se echó a reír.
"Ninguno de mis fans ha hecho eso por mí. Sólo me piden autógrafos." Guiñó
un ojo. "Estoy soltero."
"No te ves exactamente como él y ella, obviamente, quería más que su

autógrafo. Creo que será mejor que empieces a levantar pesas, si quieres ese
tipo de respuesta por parte de tus fans. ¿Has visto los músculos de las Nuevas
Especies?"
La mujer movió las cejas hacia la cámara.
"Quítalo." susurró Vanni.
Beth parecía tan atónita y consternada como Vanni se sentía.
"¿Oíste lo que dijeron? Cada emisora. Oh Vanni. Tus padres ven las noticias y
los programas de chismes. No hay manera de que no lo vean. Incluso sin esa
falda, sabrían que eres tú. Tu rostro se mostraba un par de veces."
El teléfono sonó. Ambas mujeres saltaron. Vanni negó frenéticamente con la

cabeza.
"No lo cojas."
Beth no se movió. El teléfono sonó cuatro veces antes de saltar el contestador

automático. Vanni supo que todo el mundo iba a ver ese video en algún
momento. Eso incluía a sus amigos, familiares y compañeros de trabajo. Se
sintió mal del estómago.
"¿Vanni?" La voz de su madre salió de la máquina. "¿Vanni? Vimos las

noticias. ¿Eras tú? Parecías tú. Tú…"
102
"¡Maldita sea!" Le gritó su padre en el fondo. "¿Has podido hablar con ella? No
contesta al móvil. En las noticias dijeron que sucedió en el mismo hotel donde
se alojaba este fin de semana."
"Salta el contestador." le dijo su madre.
"¡Llama a Beth! Asegúrate de que Vanni está bien." gritó su padre. "Nuestra
chica no iba a actuar de esa manera en público a menos que estuviera
borracha. ¿Crees que está bien? ¿Y si se fue a casa con él y no deja que se vaya?
¿Deberíamos llamar a las Nuevas Especies para ver si todavía está con él?"
"Voy a llamar a Beth ahora."
El teléfono se cortó. Segundos más tarde el móvil de Beth sonaba con música
rap. Vanni se quedó mirando a su amiga. Beth se movió.
"Les diré que estás a salvo. Están preocupados."
"No puedo hablar con ellos."
Beth metió la mano en su bolso.
"Cállate." Ella respondió. "Hola. Vanni está bien."
Vanni iba a hiperventilar. El teléfono de la casa empezó a sonar de nuevo. Beth

lo ignoró mientras sostenía el móvil. Ella encontró la mirada de Beth.
"Está aquí. Fui a buscarla anoche. Está durmiendo. Está bien. Déjame que te
llame más tarde. El otro teléfono está sonando. Te juro que está a salvo." Beth
colgó.
El contestador automático.
"¿Vanni?"
Ella gimió.
"Carl."
103
"¡Maldita sea, Vanni!" Gritó en la máquina. "¿Qué demonios has hecho? Mi
padre me advirtió que no eras nada más que basura. ¿Cómo diablos has
podido?" Su voz bajó un poco, pero su enojo era evidente. "¿Sabes qué tipo de
mala prensa va a causar esto a mi padre? ¿A mí? ¿Estamos comprometidos y
has jodido con una de esas criaturas en un callejón fuera del hotel?" Bajó la voz
a un susurro. "Podría matarte. Alguien identificó a los periodistas. Mierda.
Otro equipo de noticias está en la puerta. ¡Todo esto es tu culpa!" Colgó.
El teléfono de la casa sonó inmediatamente. Vanni se dio cuenta de las

lágrimas que corrían por su rostro. Beth apagó el teléfono. El móvil sonó de
nuevo la música rap. Beth maldijo y lo apagó.
"¿Vanni? Mírame."
Se secó las lágrimas.
"Esto es una pesadilla, ¿no? ¿Todavía estoy en la cama?"
Beth se sentó en el suelo y la abrazó.
"Va a estar bien. En unos pocos días lo olvidarán. Alguien más va a hacer algo
para llamar su atención."
"¿Crees que tienen más material que no han mostrado todavía?"
"No lo sé, pero vas a estar bien."
Vanni se apartó.
"¿Cómo? ¿Cómo puede ser?"
Beth había lágrimas en sus ojos también.
"Vamos a salir de esto."
"Todo el mundo va a ver eso. ¿Cómo voy a salir de casa? ¿Ir a trabajar?"
"No sé. "Beth olfateó. "Mira el lado bueno."
104
"Tengo miedo de preguntar lo que acaba de hacer estallar en su cabeza, pero
¿qué? Estoy desesperada."
"No tienes que hacer ninguna llamada telefónica para decirle a la gente que no
te vas a casar con Carl. Creo que es un hecho."
Vanni se inclinó hacia delante y la abrazó de nuevo.
"No es divertido. Inténtalo de nuevo."
"Está bien." susurró Beth. "Los periodistas están molestando como la mierda a
Carl. Amenazó con matarte, así que espero que le den el infierno."
"No ayuda."
"No sé qué más decir."
"Yo tampoco."
Un minuto pasó. Beth habló de nuevo.
"¿Has tenido relaciones sexuales en ese callejón?"
"Dentro de la camioneta."
Beth desenrolló sus brazos y se echó hacia atrás. Ella levantó una mano en el
aire.
"Choca esos cinco."
Vanni se limitó a mirarla fijamente.
"La lista, ¿recuerdas? Sexo en un coche." Beth mantuvo su mano. "Lado

positivo. Eso es una cosa que pusiste en la tuya."
"Oh Beth." Vanni negó con la cabeza. "Eso es tan malo."
Beth bajó el brazo.
"Trabaja conmigo aquí. Lo estoy intentando. De lo contrario, vamos a llorar y

quedarnos acurrucadas."
105
"¿Eso es malo?"
Alguien llamó a la puerta. Beth se levantó, se acercó y se asomó por la mirilla.

Maldijo y retrocedió cuando la persona golpeó de nuevo.
"¿Señorita Abris? ¿Travanni? ¿Podríamos por favor hablar con usted un

momento?"
La voz fue ahogada por la puerta. Beth se volvió.
"Es una señora con un cámara."
Vanni arañó su camino a sus pies y corrió al cuarto de baño. Vomitó

violentamente. Su vida nunca sería la misma.
www
Smiley fue llamado a la oficina de Fury. No tenía idea de por qué, pero sabía
que era urgente. La puerta estaba abierta y Fury le esperaba dentro.
"Será mejor que te sientes."
"Estoy bien de pie." Smiley endureció su columna vertebral. "¿Habéis

encontrado a Vanni?"
Más especies entraron en la habitación, incluyendo a Jericho. La mirada

sombría en los ojos del macho hizo a Smiley replantearse la oferta de tomar un
asiento. Se acercó unos pocos metros más y se dejó caer en una silla. Realmente
no había esperado que le dijeran que Vanni estaba muerta. Era su peor temor.
Parecía tan bueno como lo confirmaran. La bilis se levantó pero la tragó.
106
"¿Está muerta?"
Se las arregló para conseguir sacar la pregunta fuera. Jericho negó con la
cabeza.
"No."
Smiley pudo respirar de nuevo.
"Ayer por la noche había un humano en la azotea del hotel."
Fury rodeó el escritorio y se sentó. Levantó un mando a distancia y encendió la

televisión.
"¿Eras consciente de ello?"
Smiley asintió.
"Sí. Oí a Shane gritar y me metí con Vanni en la parte de atrás de la camioneta

para cubrirnos en caso de que fuera un francotirador."
Fury pulsó un par de botones.
"Esto está en todos los canales. Prepárate. El macho tenía una cámara de video
y al parecer la envió a cualquier persona con interés. Aquí está uno que grabé
de la televisión. Me perdí el principio, pero es suficiente."
El vídeo no era de la mejor calidad, pero era lo suficientemente claro, incluso

en la penumbra del callejón, para distinguir los detalles. Smiley se retorció en
su asiento. Era incómodo tener una repetición de un momento personal, en
frente de tantos hombres. También le enfureció.
El clip terminó y un presentador de noticias de pelo blanco apareció.
"La mujer en el callejón ha sido identificada como Travanni Abris, de

veintisiete años."
Una imagen de Vanni y un varón rubio brilló en la pantalla. Estaban

sonriendo. Regresó al presentador.
107
"Es posible reconocer al hombre en la foto con ella como el abogado Carl
Woods, hijo del Pastor Gregory Woods, de la Iglesia Woods. La Iglesia Woods
ha sido una de las favoritas en la campaña para cerrar la ONE. Hemos sido
incapaces de llegar a la señorita Abris para un comentario. Se recluido en su
casa."
La cámara se centró en una mujer de pie en frente de la Iglesia Woods. Ella se

presentó.
"Nadie va a hablar con nosotros, pero ha habido un frenesí de actividad

durante la última hora." La cámara enfocó el aparcamiento lleno de coches y
luego de vuelta a la reportera. "Una persona que desea permanecer en el
anonimato nos ha dicho que el Pastor Woods y su hijo están dentro de la
iglesia y esto ha llegado como un shock total para la familia. Como todo el
mundo sabe, el pastor de Woods se opone a que las Nuevas Especies tengan
derechos civiles. Comenzó la iglesia…"
Fury apagó la televisión y suspiró.
"Estaba comprometida con el hijo. Iban a casarse en siete semanas."
Smiley no olvidaría el rostro del varón rubio en mucho tiempo. Parecía mucho
más bajo y más menudo que él mismo. Su coloración era muy diferente
también. Ese era el hombre que había reclamado a Vanni hasta ayer por la
noche, cuando se había quitado el anillo. Apretó la mandíbula.
"Lo siento."
Smiley no estaba seguro de qué más decir.
"¿Por qué?" Fury arqueó una ceja.
"Tenemos que evitar la cobertura de noticias y la mala publicidad."
Jericho gruñó.
"No has hecho nada malo, Smiley. No es malo para nosotros. La Iglesia Woods
está siempre diciendo que pertenecemos en un zoológico y sin embargo, su
108
hembra ha estado contigo. Esto significa que no todo el mundo come su
mierda."
Fury asintió.
"Nada acerca de la droga de cría ha salido todavía."
Bestial se aclaró la garganta.
"En el peor de los casos, incluso si lo hace, ella parecía ser el agresor sexual.
Esa mujer te atacó, no al revés. No pueden voltear esta en nosotros."
Tiger habló.
"No entiendo por qué la usan para lanzar este ataque con los medios de
comunicación. No era halagador para ellos. La última mujer que tendría
jodiendo con mi enemigo sería la que estaba a punto de casarse con alguien
tan alto de su organización."
"Puedo pensar en algunas buenas razones para que la escogieran." Tim se puso
de pie.
"Dilas." exigió Fury.
Tim no dudó.
"Probablemente pensaron que una Nueva Especie acabaría matándola. Ella es

fr{gil… mirando, a juzgar por el video, se ve como la chica de al lado que cae
bien a todo el mundo. ¿Qué mejor manera de ganar la simpatía del público
para su causa que perder a alguien tan importante para la familia? También
podrían haber demandado a la ONE por su muerte por una suma de millones
de personas. Conseguirían forrarse y drenar nuestros bolsillos al mismo
tiempo. Mantendrían su nombre en los periódicos y harían que las Nuevas
Especies se vieran como los malos por matar a esa chica."
La rabia se retorció dentro de Smiley.
109
"¿Quieres decir que el hijo le hizo creer a Vanni que la amaba cuando él sólo la
quiso para ser asesinada?"
Tim se encogió de hombros.
"No sé mucho acerca de él, pero he hecho mi investigación sobre Gregory

Woods. Es una pieza de cuidado. No estaría por encima de él hacer algo así.
No estaba contento cuando se anunció su compromiso. Podría haber sido una
manera de detener la boda y conseguir un tiro sobre nosotros al mismo
tiempo. De cualquier forma, apuesto a que está emocionado de que la boda se
cancele."
"A menos que el hijo todavía quiera casarse con ella." Tiger frunció el ceño.
Tim resopló.
"Ningún hombre va a casarse con ella después de que el video se haga viral.
Sería el hazmerreír de todos."
"¿Por qué?" Smiley pensó que era un insulto hacia Vanni.
Tim encontró su mirada.
"Orgullo. Se lanzó sobre ti. Nadie podría dejarle olvidarlo."
Flame sonrió.
"Por no hablar de que, ¿aún sigue queriendo casarse después de Smiley? Ese
era un patético macho humano."
"Flame." negó Fury. "Este no es momento para bromas."
"Sólo estoy diciendo que el hijo parece insignificante."
"¿Y si se quedó embarazada?" Jericho frunció el ceño.
"No lo está. Usa control de natalidad." Smiley apretó los puños. "Lo tuve en
cuenta. Pregunté."
"¿Qué tipo?" Bestial lo miró.
110
"No estoy seguro." Smiley se encogió de hombros.
"La droga de cría puede anular ciertos anticonceptivos."
Smiley sintió el pecho perforado.
"¿Estás seguro?"
El miembro del consejo asintió.
"Bastante cierto. Los condones funcionan, pero sólo si no se rompen. ¿No

usaste uno?"
"No."
"¿Te corriste dentro de ella?"
"Sí."
Bestial hizo una mueca.
"Entonces es una posibilidad que tenemos que tener en cuenta y hacer un plan
de contingencia."
Vanni embarazada de mi hijo.
Smiley se puso en pie, incapaz de permanecer sentado por más tiempo.
"Necesitamos traerla al Homeland. ¿Dónde está?"
"Cálmate." ordenó Jericho.
"¿Qué pasa si está llevando a mi hijo? Está ahí fuera sola." Smiley se negó a dar
marcha atrás. "Nuestros enemigos podrían ir tras ella para robar a mi hijo o
matarla para evitar su nacimiento. Tim dijo que está en peligro en esa iglesia.
Alguien de allí la metió. Tenemos que recuperarla ahora para garantizar su
seguridad."
"¿Smiley?" Fury llamó su atención. "Vamos a mantener vigilancia sobre ella,

pero no podemos enviar a un equipo a recogerla. Parecería como si la
estuviéramos secuestrando. Eso daría una mala publicidad."
111
"Dijeron que estaba recluida en su casa. ¿Sabemos si eso es verdad?"
Smiley ni siquiera estaba seguro de si estaba bien o no.
"Sí." asintió Tim. "Tengo un equipo de dos hombres fuera de su apartamento

disfrazados de paparazzi. Fuimos a la dirección equivocada anoche. La que
aparece en su licencia de conducir era antigua. Se mudó el mes pasado.
Tenemos confirmación visual de que ella y su compañera de cuarto, Elisabeth
Goss, siguen en el interior. Se niegan a coger las llamadas telefónicas o abrir la
puerta. La única razón por la que sabemos con certeza que ella está ahí es
porque alguien llamó a la policía informando de un posible suicidio."
"¿Qué?" gruñó Smiley.
"Ella está bien. Es una artimaña de mierda de algunos de los paparazzi para
sacar fotografías. Es el procedimiento estándar de la policía hacer un chequeo
de bienestar y entrevistar a los residentes para asegurarse de que no es un
problema real. Mis hombres verificaron que la llamada vino desde el interior
de la residencia. En este caso, la policía habló con Travanni y Elisabeth en la
puerta después de que el encargado del edificio les abriera. No han abierto a
nadie más."
"¿Tu equipo realmente la vio? ¿Están seguros?"
Smiley necesitaba la confirmación.
"Sí." asintió Tim.
Eso calmó un poco a Smiley.
"¿Estaba bien?"
"No lo sé." Tim frunció el ceño. "Estuvo hablando con los policías y se
marcharon sin llamar a una ambulancia, así que supongo que sí."
Fury habló.
112
"Sólo puedo imaginar el estrés que estás sintiendo, pero este no es el momento
para tráela a Homeland para ser interrogada. Es un frenesí de los medios y
todos se centran en ella. Tenemos que esperar a que las cosas se calmen un
poco antes de tomar una decisión."
"Va a pagar por lo que hizo." prometió Bestial. "Está bien si esperamos
pacientemente."
"¿Pagar?" Smiley le fulminó con la mirada. "Ni siquiera estoy seguro de sí lo

hizo. Dijo que no lo había hecho."
Bestial dejó escapar un suspiro.
"Está asociada con un grupo que nos odia. También escapó en lugar de venir
aquí." Hizo una pausa. "¿Cuántas especies comieron y bebieron en ese bar,
cuando ella no estaba allí, pero no pasó nada? Ella entra y estás drogado.
¿Tengo que seguir? Todo apunta a ella."
Smiley odiaba admitir que sonaba mal. Se mantuvo en silencio.
"No estamos seguros de si era consciente del peligro, pero nada bueno viene
de una persona que echa una droga en la bebida de alguien. Esa mujer tenía
que saber que era potencialmente perjudicial." Bestial inhaló y dejó escapar un
profundo suspiro. "Va a ser procesada bajo la ley Nueva Especie."
Jericho intervino antes de que Smiley pudiera hablar.
"De cualquier manera, tenemos que traerla para interrogarla a la primera

oportunidad." Lanzó una mirada de advertencia Smiley para mantenerle en
silencio. "Puede vincular este delito con la Iglesia Woods. Tenemos que
localizar ese medicamento y asegurarnos de destruirlo, de lo contrario
ninguno de nosotros estará a salvo. Podrían lanzar más ataques."
"De acuerdo." afirmó Fury. "Vamos a esperar hasta que el bombo de los
medios muera y entonces el equipo de Tim la recogerá."
113
Smiley ardió con ira. La reunión se disolvió y él salió furioso, necesitando
tiempo para pensar. Jericho se encontró con él y agarró su brazo.
"Te drogó. No olvides eso. "
"Vanni se asustó y sufrió. No quiero que vaya a Fuller. Ella pagó lo suficiente,
incluso si fue quien lo hizo."
"Hablé con Ned. Él dijo que los tres entrasteis en el bar y que estabas solo en la
barra. Nadie se acercó salvo ella. Esa mujer era la única que estaba cerca. Se
dio cuenta de que te levantaste un par de veces y que le habrías dado la
oportunidad de dopar tu refresco."
No podía negar eso.
"No puede haber delito si no hay víctima. Voy a negarlo todo."
"No se puede negar lo que pasó, Smiley. No sufriste daño pero, ¿qué va a ser
de la próxima víctima si no detenemos esto ahora? Esto concierne a todas las
Especies."
"Tal vez fue forzada. Basta con contemplar esa posibilidad."
"Terco." se quejó Jericó en voz baja. "Vas a imitar a True, ¿no es así? ¿Debería
prepararme para eso? ¿Vas a secuestrarla mientras está bajo custodia cuando
sea traída aquí y hacer de tu hogar su santuario?"
Era una buena idea.
"¿Vas a tratar de detenerme si lo hago?"
"¡Maldita sea!" La expresión de Jericho se suavizó. "No quiero que te hieran.

Haré un trato contigo."
"¿De qué clase?"
"No firmes los papeles compañero si te lo piden."
Smiley frunció el ceño.
114
"Pidieron a True que firmara los papeles de compañero cuando mantuvo a
Jeanie en su casa. Voy a argumentar su caso, si te la llevas. Sólo prométeme no
hacer nada precipitado. No confío en esa mujer y creo que no estás siendo
completamente racional. Quiero asegurarme de que la conozcas antes de que,
posiblemente, cometas un error."
"Estoy de acuerdo."
Jericho asintió.
"Ella también tiene que ayudar a descubrir algo más de esa droga. Dudo que la
Iglesia Woods sólo tuviera dos dosis para las bebidas."
"Es amable, Jericho. Sé que ella va a ayudar. No querría que esto le pasara a
otros."
"Quieres que ella sea amable. Apenas la conoces, Smiley. "
Él no podía discutir pero su instinto gritaba que lo era.
115
Capítulo Siete
"Iré contigo. Es un imbécil. ¿Quién sabe cómo reaccionará después de ver ese
video?"
"Él no me va a golpear, Beth."
"Yo no confiaría en ese gilipollas."
"A ti nunca te gustó."
"Con una buena causa. Es egoísta y nunca piensa en ti. Esa cosa que ha pasado
con su padre es espeluznante como la mierda, también. Es un hombre adulto,
pero es como si estuviera tan dentro del culo de su padre que no puede pensar
por sí mismo. Dijo que no era parte de esa iglesia, pero nunca se opuso
públicamente a ellos tampoco. Lo revisé online. Él se fotografió mucho con su
padre antes de que salieras con él. Creo que te ocultó esa asociación porque
sabía que de otro modo no saldrías con él. Seguro que no querría casarse con
una de esas locas groupies que se cuelgan con esa iglesia."
Beth suspiró, pareciendo frustrada.
"Son un montón de idiotas paranoicas. Tú eras perfecta, Vanni. Tu hermano es

policía, tu hermana es el emblema de las amas de casa y tus padres han estado
casados desde siempre. Tú eres clara, bonita y no tienes antecedentes penales.
La esposa perfecta, imagen racional. "
Vanni se encogió de hombros.
"Me pidió que se casara con él en contra de los deseos de su padre."
116
"Apuesto a que el viejo hijo de puta está jodidamente feliz de que sucediera
esto."
"Tal vez."
"¿Va a estar allí? Es tan desagradable." Beth frunció el ceño.
"No, Gregory no estará allí. Carl dijo que su padre está demasiado ocupado en
la iglesia para alejarse. Esto es una pesadilla para ellos también, con todos los
periodistas. Sólo voy para dejar el anillo, coger mis cosas y salir. Dijo que tenía
que esconderse allí de los periodistas."
Beth levantó una mano, empuñándola por el hombro y juntó el dedo pulgar y
el dedo índice de la otra mano juntos, balanceándola hacia atrás y adelante en
gesto obsceno.
"Esta soy yo tocando el violín."
Ella dejó caer sus manos a su lado. Vanni rio.
"Eres tan malvada."
"Está reteniendo tus cosas para un rescate."
"Le debo la cortesía de hacer esto en persona."
"Voy contigo."
"Se supone que cenas con tus padres y sales con tu hermana esta noche. No
voy a arruinar tus planes."
"¿Crees que va a estar menos cabreado de que lo engañaras porque fuiste

drogada? Es posible que necesites un poco de respaldo."
"No voy a contarle eso."
"¿Por qué no? ¿Estás loca? De lo contrario, sólo va a pensar que eres una zorra
total."
117
"Se lo diría a su padre y él lo torcerá de alguna manera contra la ONE. Él es ese
tipo de imbécil así."
"Eso es cierto."
"Prefiero simplemente aguantar el bochorno y salir lo más rápido posible. El la

cagó lo antes de que yo lo hiciera, con ese truco de la escapada de fin de
semana. Eso tuvo mis ojos abiertos, de que él es una especie de imbécil."
"Yo usaría palabras más fuertes que imbécil, pero estoy de acuerdo. Me llamas
si la mierda golpea el ventilador y necesitas que vuelva a casa para comer
helado contigo."
"Trato. Justo después de que consiga mi teléfono móvil de vuelta."
Agarró sus llaves de repuesto y esperó que no la pinchara más sobre que su
cartera estaba en su bolso. Su coche estaba en el garaje subterráneo, que salía
detrás del edificio. Beth debería ser capaz de distraer a la prensa mientras ella
se escabullía.
Los veinte minutos de trayecto transcurrieron sin incidentes, pero las últimas
palabras de Beth seguían repitiéndose en la mente de Vanni mientras conducía
hasta las puertas de la finca Woods.
No hagas esto. Es estúpido.
Ella sólo había estado allí una vez con Carl la primera vez que habían
empezado a salir. Fue cuando había conocido Gregory, que era dueño de la
solitaria casa rural en las colinas. No había ido bien. Se habían tenido aversión
el uno al otro a primera vista.
Un hombre de uniforme salió de la pequeña caseta de seguridad y levantó la

mano. Ella desaceleró hasta pararse y apretó el botón de la ventanilla.
"Soy Vanni. Carl me está esperando."
118
"Me llamó y me dijo que viniera aquí a recoger mis cosas."
El guardia utilizó una radio bidireccional para ponerse en contacto con alguien
dentro de la casa.
"Una tal Vanni está aquí para ver a Carl."
"Envíala aquí." ordenó otra voz.
El guardia pulsó un botón en el interior de la caseta. Las puertas rodaron

lentamente abiertas y Vanni empujó hacia abajo sobre el pedal del acelerador.
El estrecho camino pavimentado giraba hacia arriba alrededor de unas vueltas
y se abría a un gran camino circular. Aparcó delante de la casa.
Sus nervios eran un desastre. El plan había sido devolver el anillo de

compromiso a Carl por correo, pero eso fue antes de que él hubiera retenido
sus pertenencias como rehenes. El mensaje que había dejado había sido claro.
Podía venir a reunirse con él o no conseguir sus cosas de vuelta. Posiblemente
tenía miedo de que se guardara el costoso anillo que había pertenecido a su
abuela. Era insultante que pensara tan poco de ella.
Salió de su coche y se apoderó de la caja del joyero en su puño mientras subía

las escaleras y tocaba el timbre. La espera de que la puerta se abriera para que
finalmente pudiera enfrentarse a Carl estaba torturando su revuelto estómago.
La puerta se abrió y un hombre la miró. Era un hombre alto con un corte de

pelo romo y características duras. Era difícil de determinar porque toda la
gente de Gregory llevaba trajes. Pero probablemente era uno de sus muchos
guardaespaldas.
"Por aquí."
Dejó escapar un suspiro y lo siguió por el pasillo hasta una oficina. Carl estaba
sentado detrás del escritorio. Colgó el teléfono y se puso de pie.
"Gracias, Bruce."
119
"Ningún problema, señor." Le disparó a Vanni una mirada sucia. "Estaré
cerca."
Se las arregló para no poner los ojos en blanco. Era ridículo que pensara que
era peligrosa. La sombría situación humedeció su actitud, sin embargo,
cuando vio lo cansado que parecía su ex. Los círculos oscuros bordeaban sus
ojos y su cabello normalmente perfecto estaba un poco revuelto, pensó.
"Aquí está el anillo de tu abuela." lo puso en el borde de la mesa. "Quería

disculparme. Nunca quise que nada de esto sucediera."
Él extendió la mano, abrió de golpe la tapa y lo examinó.
"Es el correcto."
Su acción la irritó. Cerró la tapa, abrió un cajón y lo dejó caer en el interior.
"No sé de qué más eres capaz."
Sus labios permanecieron sellados.
Me merecía eso. Ouch.
Carl mantuvo la mesa entre ellos.
"¿Por qué no fuiste simplemente a la habitación tal como te dije? Nada de esto
habría sucedido si lo hicieras."
Sabía que se merecía algunas respuestas.
"Estaba enfadada contigo por engañarme para ir a ese hotel el fin de semana.
La última cosa que quería hacer era pasar por la habitación después de nuestra
discusión o obtener más sermones de Mable acerca de cómo no soy lo
suficientemente buena para ti. Te dije que ella es mezquina. Tan sólo pensé
tomarme una copa, relajarme un poco y luego irme a la cama."
Él la miró fijamente, su boca una línea apretada por la ira. Conocía esa
expresión también. La desaprobación era algo que a menudo consiguió de él.
Su relación había terminado, pero no sentía dolor por la pérdida. Beth podría
120
haber estado en lo cierto. Le habría desgarrado su separación si ella realmente
hubiera estado enamorada de Carl, pero en lugar de eso sólo quería alejarse de
él.
"Lo siento. No deberíamos habernos comprometido para empezar. Llegué a la

conclusión de eso el fin de semana. Siempre me estás diciendo cosas
desagradables y me molestaba más de lo que creía. Es mejor para ambos que
nuestra relación termine. Nunca voy a ser el tipo de mujer que estabas
tratando de moldear. Te deseo una vida feliz, Carl. Voy a coger mis cosas y me
voy. Nunca oirás de mí otra vez."
Él avanzó lentamente alrededor de la mesa.
"¿Eso es todo? ¿Eso es todo lo que tienes que decir?"
"Nunca quise hacerte daño."
Se acercó un poco demasiado cerca para su comodidad.
"¿Sin excusas?"
"Sucedió. Te lo he dicho, incluso si no hubiera estado por toda la televisión.

Había planeado verte mañana cuando llegaras a casa desde el hotel.
Obviamente tenías que salir temprano. Lo siento. No sé qué más decir."
Parecía un poco sorprendido y furioso a la vez, mientras estudiaba de cerca

sus ojos. Vanni no estaba segura de lo que esperaba ver, pero él dio un paso
atrás y la ira se impuso cuando maldijo.
"No puedes ser tan estúpida."
"¿Perdón?" Esa no era la respuesta que esperaba.
"Fuiste drogada. ¿Por qué no me estás diciendo eso? ¿No te has dado cuenta?
¿No te sentiste rara? Deberías lanzarte a mis pies y suplicarme que todavía me
case contigo. Papá dijo que harías cualquier cosa para ganar mi perdón."
El mundo se inclinó un poco mientras ella retrocedió un paso.
121
¿Cómo sabía que yo estaba drogada? ¿Se ha filtrado a la prensa?
No se lo había dicho a nadie, excepto a Beth. Su mejor amiga no traicionaría

ese secreto. Era posible la ONE hubiera dado a conocer los detalles. Se aferró al
mostrador para mantener el equilibrio.
"¡Di algo!" Gritó Carl, haciéndola saltar. "Suplícame que te perdone y dime
cómo no fue por tu culpa."
Tardó unos minutos para recomponerse. Él parecía estar teniendo un colapso.

Era un poco sorprendente, ya que no creía que se tomaría su ruptura tan
difícilmente. Había sido algo distante emocionalmente todo el tiempo que
habían salido.
"Nunca haría eso. Me acosté con otro hombre. Sé que hemos roto. No espero
que todavía te cases conmigo. No podría seguir adelante con esta boda,
incluso si de alguna manera lograses deshacerte de lo que pasó. No puedo."
Su tez enrojeció y empezó a respirar más rápido, casi jadeando de rabia. Eso la
asustó un poco.
"¿Dónde están mis cosas? Me iré."
"¿Sólo así?"
"¿Qué más quieres que te diga? Ninguno de nosotros puede pretender no pasó
nada. Todo el mundo está hablando de ello. Lo siento si esto te ha hecho daño,
Carl. Creo que sólo debería salir de aquí y nunca tendrás que volver a verme.
Sinceramente, creo que esto es lo mejor. No habríamos tenido un matrimonio
feliz."
"¿Sabías que estabas drogada?"
Parecía estar cogiendo una rabieta.
"Me di cuenta. Eso no cambia el resultado, sin embargo."
"¿Qué va a hacer la policía al respecto?"
122
"No fui a ellos."
"¿Por qué no?" Avanzó, acercándose demasiado de nuevo y seguía gritando.

"¡Deberías querer a ese violador en la cárcel!"
"Él no fue quien me drogó y no fue una violación."
Carl la agarró del brazo.
"¿Qué?"
Vanni realmente quería salir de allí.
"Ya me has oído. Sólo dime dónde están mis cosas. Quiero irme." tiró de su
muñeca, tratando de romper su agarre. "Suéltame. Me estás haciendo daño."
Él la soltó y dio un paso atrás. Su expresión cambió. La ira se fue, para ser
sustituida por algo frío y calculador.
"Te gustó ser follada por esa criatura, ¿no?"
"Mis cosas." salió fuera. "Me voy."
"Te dije que era una puta." habló Gregory desde detrás de Vanni. "Intenté
advertirte de que no era digna de ser incluida en esta familia. Ahora ves la
verdad de mi evaluación."
Giró la cabeza, horrorizada de encontrárselo en la habitación. No le había oído

entrar y Carl le había dicho que su padre no iba a estar allí. El hombre más
viejo la miró con desdén.
"Esto no va de la manera que dijiste que lo haría." suspiró Carl. "¿Y ahora
qué?"
Vanni miró entre ellos, un mal presentimiento creciente. No estaba segura de

lo que estaba pasando, pero quería irse.
"¿Dónde están mis cosas? Me voy."
123
Gregory chasqueó los dedos y el guardaespaldas que la dejó en el interior de la
casa entró en la habitación. Él mantuvo su mirada fija en Vanni.
"Ya has conocido a Bruce. Yo no trataría de salir por el momento, si fuera tú."
Era una amenaza.
"¿Sabes qué? Conserva mis cosas. Me voy de aquí."
Ella trató de caminar alrededor de Bruce pero él bloqueó su camino. Se detuvo

y dio un paso a un lado para pasar más allá de él, pero se movió con ella.
"¡Fuera del camino! No me puedes mantener aquí en contra de mi voluntad."

Estaba asustada.
"Sí que puedo." Gregory sonaba demasiado confiado. "Tú y yo necesitamos

llegar a un entendimiento."
Se dio la vuelta y miró a Carl.
"Diles que me dejen salir de aquí."
Carl rodeó el escritorio y se sentó detrás de él.
"No estamos comprometidos por más tiempo." Él la miró. "No hables conmigo
o esperes que te ayude. Te follaste a esa criatura. Nunca te perdonaré por
humillarme de esta manera. He perdido clientes desde la noticia. La revancha
es una perra y así estás tú por hacerme esto. Te mereces todo lo que te pase
después."
¡Tío Gilipollas!
Vanni se enfrentó a su padre.
"Dígale a su guardaespaldas que salga de mi camino."
"Toma asiento." Gregory señaló una silla junto a la chimenea. "Tenemos que
hablar de lo que nos debes."
124
"No." Ella retrocedió. "Le devolví el anillo de su madre a su hijo. No tengo
ninguna otra cosa que sea de tu familia."
"Nos has costado un montón de tiempo y dinero." señaló Gregory de nuevo.

"¡Siéntate!"
"Puede recuperar los depósitos reembolsados por el banquete de bodas.

Dijeron que un preaviso de cuatro semanas era el punto de corte. Presté
atención a eso. Envíame una factura si no devuelven todo. Lo pondré en mi
tarjeta de crédito."
"No estoy hablando de la boda." la voz de Gregory se levantó, su expresión

enfadada. "Sienta tu culo en esa silla."
Ella se negó.
"Sé que todo el mundo está molesto por lo que ha sucedido, pero creo que
deberíamos tomarnos unos días para calmarnos. Usted especialmente. No sé
por qué está tan molesto. Siempre me odió. Debería montar una fiesta para
celebrar que el compromiso está roto."
"Bruce".
Gregory hizo un gesto con la cabeza en su dirección. El hombre grande

avanzó. Vanni trató de escapar, pero se encontró atrapada en la esquina. Ella
se tensó cuando sus manos agarraron sus fornidos brazos y tiró con fuerza
suficiente para llevarla casi hasta las rodillas. Él la arrastró hasta la silla y la
dejó caer en ella.
"Quédate ahí."
Él retrocedió unos metros y abrió su chaqueta, asegurándose de que ella

pudiera ver la sobaquera y la pistola. Ella estaba muda y aterrorizada.
¿Van a matarme? ¿A dispararme? No tiene sentido.
Se acurrucó en la silla, demasiado asustada para hacer cualquier otra cosa.

Gregory se meneó a otra silla y se sentó junto a ella, con una mirada de
125
suficiencia en su rostro. Cruzó las piernas y su expresión se despojó de toda
emoción.
"Esto es lo que va a suceder. Vamos a celebrar una conferencia de prensa

mañana. Leerás la declaración que escribiremos diciéndole al mundo que
fuiste drogada y violada por esa criatura que sale en el video contigo."
Ella abrió la boca para negarlo, pero no se le dio la oportunidad de hablar.
"Te quedarás aquí esta noche como nuestra huésped. Mable está fuera,
comprándote un bonito conjunto que te hará parecer trágica y yo esperaría que
arrojes un montón de lágrimas. Díselo, Bruce."
El matón se aclaró la garganta.
"Sollozando desempeñaría mejor papel. Tendremos a Mable maquillándola

para que parezca realmente pálida y agregaremos algunas sombras oscuras
debajo de los ojos para dar la impresión de que no está durmiendo."
Gregory sonrió. Estaba frío como el hielo.
"Hermoso. Me gusta esa idea. Por supuesto Carl se mantendrá a tu lado,

Travanni. También usarás el anillo de mi madre como si el compromiso
siguiera adelante. No queremos que nadie piense que te abandonaríamos
después de que se cometió en tu contra un crimen tan atroz. Todo mi rebaño
de feligreses va a ser un gran apoyo. Vamos a llevarte al redil y ayudarte a
sanar."
"Yo no fui violada."
Habían perdido sus mentes. Tal vez era la forma en que estaban tratando con
el estrés. Ella trató de alzarse del asiento lentamente.
"Me voy ahora."
Bruce puso la mano en la culata de la pistola.
126
"El suicidio funcionaría también. No podía soportar el trauma de un asalto
sexual, altamente publicitado. Puedo organizarlo con calma y la prensa se lo
tragará todo."
Ella se hundió en el asiento. Estaba amenazando con matarla. No eran

estúpidos. Eran unos cabrones. Giró la cabeza y miró a Carl, con la esperanza
de que al menos él se mantuviera cuerdo. Su mirada sostuvo la de ella.
"Todavía no lo ha puesto junto." Él negó con la cabeza. "Tan linda pero tan
tonta. Era uno de sus mejores rasgos. Ahora veo lo molesta que puede ser,
papá. La tenías identificada."
"Poner junto, ¿qué?" Ella miró entre padre e hijo.
"Papá, trata con ella. Estoy asqueado por este lío."
Carl se puso de pie y salió de la habitación. Vanni lo vio alejarse y se resistió a

saltar de la silla. Bruce todavía tocaba el arma cuando se atrevió a dar un
vistazo hacia él. Jamás alcanzaría la puerta, si realmente tenía la intención de
dispararle. Se dirigió a Gregory. Él parecía estar a cargo.
Él parpadeó.
"Sabemos que la criatura no te dio esa droga. Bruce pagó al camarero para
hacerlo."
Todos sus músculos parecían ir laxos. Ella sólo lo miró boquiabierta.
"¿Sabes cuántos cientos de miles de dólares tuve que pagar para tener en mis
manos esa droga B-47?"
"¿Qué es eso?" Ella tenía una horrible sospecha sin embargo.
"Es lo que estaba en tu bebida. Tienen un largo y aburrido nombre para ello,
pero así es como la llamaba el hombre a quien se la compré. Lote cuarenta y
127
siete. Hace que las putas muestren su verdadera naturaleza." miró a Bruce.
"¿Cuál fue el total que nosotros pagamos por esto?"
"Casi setecientos mil." murmuró aquel hombre.
"Repugnante negocio tratar con ese hombre, pero esto es una guerra." Gregory
se encogió de hombros. "Tu jodiste nuestro plan por entrar en ese bar. Se
suponía que iba a ser una mujer que contratamos y sin ningún vínculo con
nosotros, pero ella llegó tarde. Te sentaste junto a esa criatura en su lugar. Nos
causaste un día infernal ayer mientras nos dimos cuenta de cómo hacer este
trabajo para nuestro beneficio."
"Lo será." confirmó Bruce.
"Ya veremos." Gregory estudió a Vanni. "Necesitamos una víctima. De lo

contrario hubiéramos drogado sólo a la criatura y dejado testimonios viéndole
matarla. Por muy tentador que era, tenía miedo de que la ONE pudiera girar
eso, como si hubiera tenido una crisis nerviosa por las atrocidades hechas a él
en el pasado. Realmente disfrutan jugando esa carta de sentir-pena-por-nosotros.
De esta manera te estaremos enfrentando contra uno de ellos. Padres,
hermanos, madres y hermanas van a tomar partido por ti después de que les
digas cómo fuiste drogada y violada por esa criatura. Te pondremos ahí fuera
cada pocos días con los medios de comunicación y realmente trabajaremos el
ángulo de como tu vida fue destruida por el suceso. Creo que sería un buen
toque si dices que lo sorprendiste deslizándose un frasco en el bolsillo, pero
que no pensaste nada sobre ello hasta después de que te diste cuenta de lo que
te había hecho."
"Ella podría decir que él lo explicó como que tomaba algo de vitamina líquido
y que se jactó de ponerlo en su bebida después de que ella comenzó a sentirse
mal. Eso debería eliminar cualquier chorrada que inventen cuando nieguen
que él la drogó. Implica previsión." Bruce sonrió. "Podemos hacer girar esto de
cualquier manera que queramos, ahora que tenemos el control sobre ella. Los
sangrantes corazones se lo tragarán todo."
128
"Estoy de acuerdo." Gregory la miró. "Vamos a escribir tu discurso y lo
practicaremos antes de que seas puesta delante de las cámaras. Uno de mis
feligreses es un profesor de interpretación. Ella trabajará contigo para
conseguir tus gestos y expresiones faciales a la perfección mientras lees desde
las tarjetas."
No era una pesadilla. Estaba completamente despierta.
"No voy a hacerlo."
La compostura de Gregory se evaporó y agarró los brazos de la silla, su cara

retorciéndose en una máscara de furia.
"Vas a hacer cada maldita cosa que te diga o vas a ser encontrada trágicamente
muerta con una nota de suicidio culpando a la ONE. Eso no es lo que quiero.
Necesito una víctima viva para desfilar delante alrededor de las cámaras y eso
es lo que vas a ser si quieres seguir con vida. Tengo mucho invertido en esto."
Bruce rebuscó dentro de su bolsillo los guantes, poniéndoselos. La vista

aterrorizó a Vanni. Implicaba que estaba a punto de hacer algo criminal y no
quería dejar huellas dactilares. Estaban realmente planeando matarla. Ella
miró hacia la puerta.
Piensa.
"Los agujeros de bala en la espalda no son suicidio."
Se lanzó fuera de la silla, golpeando sobre ellos y corrió hacia la puerta. La

expectativa de recibir un disparo, de sentir ese abrasador dolor, la llevó en un
saludable sprint. Sus palabras de despedida eran la única protección que tenía,
esperanzada de que lo pensaran mejor antes de dispararle por la espalda.
La puerta principal se cernía ante ella. Se las arregló para desbloquearla y abrir
la puerta de un tirón. Metió la mano en el bolsillo, empuñando sus llaves,
cuando algo golpeó su omóplato. Eso dolió. Habría gritado, pero no pudo. La
electricidad sacudió a través de su cuerpo y se convulsionó, golpeando el suelo
duro. Se detuvo y se quedó allí jadeando. Gregory se agachó y se echó a reír.
129
"Las armas Taser se ven realmente dolorosas. ¿Eso dolió tanto como parecía?
Podrías tener algunos moretones ahora."
"Culparemos de ellos a esa criatura que se la folló. Se verá mejor ante las
cámaras, de todos modos. Podría golpearla un poco más si sigue tratando de
escapar."
"Tratemos de evitar eso, dado que ha sido fotografiada por la prensa varias
veces en su apartamento."
Bruce se agachó junto a ella. Ella flexionó los dedos pero estaban lentos en
responder. Su cuerpo se sentía débil y todo le dolía. Más dolor la hizo
estremecerse mientras el guardia eliminó los dardos incrustados en su piel.
Estaba bastante segura de que estaba sangrando. Eso dolió bastante mal.
"Está bien."
"Lo digo en serio, Bruce. No lo estropees. ¿Qué pasa si es necesario un examen

médico? ¿Cómo vamos a explicar lo que acabas de hacer con ella? "
"La seguridad de la ONE lleva la misma marca de Taser. Me aseguré de eso

antes de comprar este. Podemos echarle la culpa a ellos."
Bruce la hizo rodar. Dejó caer el arma Taser y metió la mano en el bolsillo
interior de su chaqueta. Sacó un vial de vidrio, le sonrió y agarró su mano.
Vanni intentó zafarse, pero no tenía la fuerza suficiente. Observó como él

presionó sus dedos a los lados y en la tapa de la pequeña botella de vidrio.
"Un seguro."
Cuando terminó, Bruce sacó una bolsa de plástico de su otro bolsillo y dejó
caer el vial en su interior. Hizo un gesto hacia ella.
"¿Ves esa pequeña cantidad de líquido en el interior? Es B-47."
130
"¿Me estás marcando como quien puso la droga?" se estaba recuperando y
trató de deslizarse sobre el suelo para escapar. "Sois unos cabrones y unos
estúpidos. No me puedes culpar también. Estás intentando culpar a la ONE.
Por lo menos trata de tener sentido."
Gregory puso de pie y le tendió la mano.
"Dámelo".
Bruce pasó sobre la bolsa de plástico con su supuesta evidencia. Gregory le

sonrió.
"¿Alguna vez has oído hablar de las leyes de los Nueva Especie, Travanni?"
Se esforzó por ir más cerca de la puerta.
"Hice mi tarea con esas bestias. Son crueles." Agitó la bolsa. "¿Quieres saber lo
que pasaría si fueras a ir en contra de mis deseos haciendo algo realmente
estúpido en esa conferencia de prensa mañana? Tendría esta bolsa entregada a
los guardias de las puertas de la ONE."
Bruce se enderezó y se agachó, agarrándola por la parte delantera de su

camisa. El empuñó y la arrastró sin piedad a sus pies. Ella prácticamente se
derrumbó, pero él tiró de ella hacia adelante y la hizo girar para enfrentarse a
Gregory, su brazo libre enganchando dolorosamente alrededor de su cintura
para mantenerla en su contra.
"Ellos son mucho peores que nosotros." Gregory colocó la bolsa dentro de su
bolsillo. "Si no puedo usarte a mi favor, te expondré a su misericordia. No
tienen ninguna. Hemos gastado dinero en investigadores privados en busca de
los empleados de Mercile con la esperanza de conseguir que hablen delante de
las cámaras acerca de cómo de brutales son realmente los Nuevas Especies y
las muertes que causaron cuando todavía estaban encadenados y enjaulados.
¿Quieres saber lo que encontramos? Nada. Simplemente desaparecieron de la
faz de la Tierra para nunca ser vistos otra vez. Creo que la razón de que la
131
ONE no permite a los helicópteros sobrevolar su Homeland o Reserva es
porque veríamos los cementerios donde entierran a sus víctimas."
Vanni luchó contra Bruce pero sólo dolió cuando él apretó mas. Ella se detuvo.
Era inútil. Él era un bruto y era demasiado fuerte.
"No son amables y simpáticos. Sólo son buenos actores."
Gregory golpeó su bolsillo, como si necesitara un recordatorio de lo que había

dentro.
"La única manera en que vas a sobrevivir es siendo más útil para mí viva que
muerta. ¿Lo entiendes? Ellos te matarán si les envío el vial."
Gregory hizo una pausa, aparentemente distraído mientras miraba a Bruce

someterla. Era evidente que disfrutaba de su angustia. La infame criatura
volvió a centrarse y continuó su amenaza
"Bruce también tendrá al camarero jurando que te vio volcar algo en la bebida
de esa bestia. Van a tener todas las pruebas que necesitan para creer que eres
culpable. Voy a ser el héroe que descubrió que nos usaste para estar cerca de
ellos en esa conferencia. No van a creen que yo estaba detrás de esto, ya que
voy a decir que me di cuenta de que estabas utilizando mi iglesia. ¿Ves a
dónde voy con esto? Yo gano, no importa cómo. Jódeme una vez y tendrás que
pagar por ello. Necesito una víctima, Travanni." Él sonrió. "¿Te sientes como
una víctima?"
Ella se negó a responder. Miró a Bruce.
"Escolta nuestra invitada a una de las habitaciones. Nunca la hubiera acusado

de ser demasiado brillante así que tal vez necesita tiempo para darse cuenta de
todo esto por sí misma."
Bruce la levantó y se volvió hacia las escaleras. Le arañó los brazos y maldijo.
Una mano agarró su garganta y se inclinó lo suficiente para poner sus labios
contra su oído.
132
"No quieras cabrearme, niña. Mi plan era encontrarte después de que te
follaste a esa criatura, golpearte a palos y dejar tu cuerpo destruido en ese
callejón. Habrían recibido la culpa, una vez que el video fuera enviado. Pero
Gregory piensa que eres más útil como nuestra puta de prensa. Empújame.
Por favor. Tenía mi corazón puesto en hacerte mi saco de boxeo." Él se rio
entre dientes. "Me encanta oír gritos."
Ella se quedó inmóvil en sus brazos. Él se rio y continuó por las escaleras.
Estaba incómoda, pero no se atrevía a quejarse. Bruce era un sádico bastardo
que la aterrorizaba y probablemente era un asesino en serie.
La llevó hasta el tercer piso. No era un lugar que hubiera explorado en su

única visita. Un guardia esperaba hasta allí y asintió con la cabeza a Bruce
mientras abría la puerta. El tipo ni siquiera le echó un vistazo a su camino o se
encontró con su frenética mirada. No había esperanza de que él la ayudara.
Bruce entró en la habitación y la dejó caer con fuerza sobre sus pies. La presión
fue sólo por pura mezquindad.
Tropezó y se volvió. Bruce sonrió.
"Las paredes han sido insonorizadas. Gregory trae prostitutas aquí y no quiere
que nadie escuche esto, él disfruta con un cierto retorcimiento en el sexo."
No estaba sorprendida por nada, Gregory Woods era capaz de mucho más.
Había pensado que él era una especie de mojigato, pero simplemente era
maligno.
"Él estaba temeroso de que los periodistas pudieran saltar los jardines, por lo
que las ventanas se han sellado. No hay escape. Estaré en la puerta. Intenta
algo y te colgaré de esa fea lámpara."
Él apretó los puños y gestualizó alrededor suyo como si estuviera boxeando.

Se detuvo y se alisó la chaqueta.
"¿Comprendes? Nadie va a importarle lo mucho que te lastime, siempre y

cuando el atuendo que Mable escoja para ti esconda los moratones."
133
Él se retiró y dejó a Vanni mirándolo. Por último se sacudió de su horrorizado
estupor y tomó un buen vistazo a la habitación. Aparte de una cama enorme,
estaba vacía. Las ventanas estaban cerradas. No había mentido sobre eso.
Tablas gruesas habían sido clavadas sobre ellas. Las inspeccionó y supo que
ninguna cantidad de palanca iba a quitarles aquel sello.
Echó un vistazo a la cama y se estremeció. De ninguna manera estaría cerca

del lugar donde Gregory tuvo relaciones sexuales con sus mujeres pagadas,
sobre todo si la violencia estaba involucrada. Se sentó en el suelo en su lugar y
esperó que Beth llamara a la policía cuando llegara a casa después de su salida
con su hermana.
Beth va a saber que algo está mal. Ella tenía que tener fe en eso. Llamará a la
policía y ellos vendrán aquí a buscarme. Sólo tengo que no perder la cabeza
hasta entonces.
134
Capítulo Ocho
Smiley nunca había tenido problemas porque le llamaran a la oficina de Justice

North, pero una sensación de intranquilidad se apodero de él. Entró y sin ser
invitado tomó asiento. Justice, Fury y Bestial ya estaban allí.
"¿Qué ha pasado ahora?" dijo mirando a los tres hombres. "Sé que no es nada
bueno."
"No" Justice se aclaró la garganta. "No lo es."
"Es sobre Vanni, ¿verdad?"
Smiley no podía dejar de sentir miedo de que la droga pudiera haberla

perjudicado. Fury se inclinó hacia adelante y apoyó los codos sobre las
rodillas.
"La Iglesia Woods está dando una rueda de prensa esta mañana. Él pastor
Woods te ha acusado de drogar y violar a la novia de su hijo, dice que eso ha
pasado en el mundo de los humanos por lo que debes ser juzgado por las leyes
humanas, quiere que seas detenido y juzgado en los tribunales humanos."
Smiley no había previsto que eso pudiera suceder.
"No lo hice."
"Lo sabemos," gruñó Bestial.
"Tenemos que encontrar a Vanni y que declare que los dos estábamos
drogados." Smiley se puso de pie. "Ella sabe muy bien que no lo hice."
Justice se puso de pie.
135
"Ahora está en la rueda de prensa con ellos, entiendo que deseabas creer que
era inocente, pero ha quedado claro que fue ella la que puso la droga en tu
vaso. Lo tenían todo preparado y ella era parte del plan."
Jericho entró y se detuvo junto a la puerta.
"Lo siento."
Smiley se dio la vuelta y le miró.
"Tienes que reconocer que estabas equivocado respecto a la mujer."
La tristeza brilló en sus ojos de color rojo, Jericho respiró profundamente.
"Tenía la esperanza de estar equivocado respecto a ella, pero te está acusando

de forzarla para tener relaciones sexuales. Se va a poner delante de las cámaras
y va a decir que la has drogado y violado."
"No son buenas noticias." señaló. "Pero en el vídeo no se ve eso, lo que se ve

muy claro es que es ella la que te agrede sexualmente."
"Ellos utilizaran la droga para justificar su comportamiento." Fury suspiró y

negó con la cabeza. "Esto es un desastre. Tim quiere mandar un equipo para
raptarla antes de la rueda de prensa."
"Le dije que no, eso sólo nos hará parecer culpables como si de verdad
tuviéramos algo que ocultar." Justice rodeó el escritorio y se detuvo frente a
Smiley. "Sin importar cómo funcione este sistema, estás a salvo. Ellos no tienen
derecho a venir aquí y exigir que te entreguemos a sus autoridades. Vamos a
luchar contra esto y a demostrar que son ellos los culpables. Sólo que eso
podría llevar un tiempo."
"¿Quién va a creer que necesito drogar a una mujer para tener sexo?" el
temperamento de Smiley estalló.
"La Iglesia Woods siempre ha afirmado que tomamos drogas y que pagamos a
las mujeres para que acepten tener relaciones sexuales con nosotros." gruñó
Jericho.
136
"Dile a las cámaras de televisión que se pongan delante de nuestras puertas y
saquen fotos de las hembras que vienen aquí pidiendo que las aceptemos
como parejas."
"Esa no es la mejor estrategia." dijo Justice sonriendo. "Algunas acaban de salir

de la cárcel y creen que aquí encontraran refugio y se escaparan de pagar por
los crímenes de los que están a punto de ser juzgadas. He leído los informes y
los antecedentes, tenemos a nuestra gente de relaciones públicas sobre este
caso."
"Sería mucho mejor si en la investigación que hicimos sobre la señorita Abris

se hubiera encontrado algo que nos fuera útil." dijo Fury. "Ella estaba limpia."
"¿Has investigado la vida de Vanni?" pregunto Smiley mientras se sentaba.

"¿Qué has descubierto?"
"Tiene dos hermanos. Una está casada con dos hijos y el otro es un oficial de
policía de Nueva York tiene pareja y un niño. Su madre era una ama de casa a
tiempo completo, mientras que su padre viajaba casi todo el tiempo hasta que
se retiró. Ninguno de ellos tiene antecedentes penales. Travanni era una buena
estudiante, nunca se ha metido en problemas y todos a los que se les ha
preguntado solo han dicho cosas positivas sobre ella. Trabaja como secretaria
ejecutiva en el mismo edificio que su prometido, se conocieron el año pasado y
se comprometieron." Justice hizo una pausa. "Ella paga sus impuestos
puntualmente, sólo debe unos pocos miles de dólares de las tarjetas de crédito
y la mayor parte de sus gastos han sido para su próxima boda. No hemos
encontrado nada en las declaraciones que indicara alguna actividad ilegal."
"Parte de esas cosas me las contó ella, no miente." Smiley frunció el ceño. "¿No
se habría inventado cosas si hubiera querido engañarme?"
"¿Te dijo que vino con la Iglesia Woods?" preguntó Bestial arqueando una ceja.
"No. Me dijo que estaba de vacaciones." El silencio en la sala puso nervioso a

Smiley. "¿Estás seguro de que va a decir que yo la he drogado y que soy el
culpable?"
137
"Es el procedimiento normal con las agencias de noticias, se comunican con
nosotros cuando alguien está dando una rueda de prensa y tiene relación o
algo que ver con la ONE. Quieren que nos adelantemos y demos un
comunicado. Nos han contactado por lo menos seis emisoras distintas hace
media hora." Justice le miro de frente. "Lo siento, Smiley. Piensa que ha sido
mala suerte que entre todas las Especies te eligió a ti, podríamos haber sido
cualquiera de los que estábamos en el hotel."
"Quizás ha sufrido pérdida de memoria por la droga."
Jericho se acercó a él. Smiley sabía que su amigo solo estaba intentando que no
se sintiera mal.
"Planificaron esto. Los detalles concretos después de administrarme la droga

puedo recordarlos borrosos, pero no a los acontecimientos que condujeron a
ello."
Smiley notó un dolor sordo en el pecho, pero no le hizo caso. Por mucho que
había querido creer en Vanni, tenía que enfrentarse a los hechos. La ira vino a
continuación.
"¿Qué hacemos?"
"Demostrar que estaban de algún modo detrás de esto." La actitud relajada de

Justice desapareció. "En eso tengo trabajando a Tim. Le envié a la prisión de
Fuller para preguntar a todos los que tenemos de Drackwood, de ahí es de
donde tienen que haber conseguido la droga. Sólo tenemos que demostrarlo."
"De lo contrario," gruñó Fury, "dirán que era una droga a la que sólo las
Nuevas Especies tienen acceso."
"¿Hay alguna manera de que pueda hablar con Vanni?"
Era una posibilidad remota, pero Smiley creía que si alguien podía hacerla
cambiar de opinión, era él, le había parecido que tenía buen corazón.
"Podría llamarla y tal vez volviera a reconsiderarlo."
138
"No sabemos por dónde estará hasta que salga con la Iglesia de Woods para
hacer su declaración." Fury le sostuvo la mirada. "Y para entonces será
demasiado tarde."
"Creí que teníamos hombres vigilando. ¿No podría alguno llamarla por
teléfono y pedirle que hable conmigo?"
"La han perdido de vista, burló a la prensa que estaba delante de su casa y
logró salir delante de sus narices cuando su compañera de piso sacó la basura,
se centraron en ella. La única razón por la que sabemos que ya no está en su
casa es porque su compañera de piso intentó presentar una denuncia por
persona desaparecida ante la policía ayer por la noche y después salió a la calle
con frustración para decirles a los periodistas que Travanni se había ido a
visitar a su novio, pero que no había regresado a casa."
Smiley se puso tenso.
"¿Qué?"
"Debió decir que se quedaría con él esa noche, ella no ha vuelto, y su

compañera de piso habló con los periodistas de nuevo hace dos horas para
pedirles que la ayudaran a localizar a Travanni."
Justice se encogió de hombros. El mal presentimiento volvió.
"¿Su compañera de piso está pidiendo ayuda para encontrarla? Algo está mal."
"Eso es lo que su compañera de piso dijo a los periodistas, está preocupada por
si Carl Woods le haya hecho algo a Travanni." dijo Bestial. "Pero
evidentemente que tiene que estar bien como para dar una rueda de prensa.
No tenemos ni idea de qué está pasando con ella."
Smiley tomó una decisión.
"Quiero ver al equipo que está vigilando el exterior del apartamento de Vanni.
Necesito hablar con ellos."
139
"No es una buena idea." negó Justice con la cabeza. "Es mejor que dejemos que
los de relaciones públicas y los abogados se ocupen de esto. Voy a oír la rueda
de prensa de la Iglesia Woods y la abordaré, después tengo una reunión con
nuestra gente. Es muy posible que necesite que estés allí".
"Ponte en contacto conmigo si lo haces."
Smiley salió del despacho, no tuvo necesidad de mirar hacia atrás para saber
que Jericho le seguía. Se detuvo cuando salieron del edificio, se dio la vuelta y
le miró.
"¿Por qué me sigues?"
"¿Qué vas a hacer?" dijo Jericho, su voz sonaba sospechosa.
"Esperar a que Justice me llame."
"Una mierda. Te conozco de sobra. ¿Cuál es tu plan?"
"Quiero hablar con su compañera de piso."
"Eso es una mala idea."
A Smiley no le importaba. Su determinación debió de reflejarse en su cara,

Jericho metió la mano en el bolsillo de atrás y sacó una hoja de papel doblada,
después sacó un teléfono móvil.
"Su nombre es Elisabeth y este es su número. Este es un teléfono bloqueado,

sabía que serías un insensato, pero a mí me gustaría hacer lo mismo si
estuviera en tu lugar. Cógelo antes de que cambie de opinión. Sólo recuerda
que todo lo que digas podría ser utilizado en nuestra contra. Es posible que
ella esté involucrada."
"¿Por qué iba a preocuparse de que Carl Woods le pudiera haber hecho algo a
Vanni? Eso implica que cree que él es un peligro para ella, no nosotros."
"Me hice la misma pregunta. Por eso copié el número de su expediente y cogí
uno de nuestros móviles imposibles de rastrear. Los miembros del grupo de
140
trabajo los utilizan. Este número es del apartamento. Uno de los miembros del
equipo me va avisar si ella se va, así que todavía está en casa."
Smiley fue detrás del edificio, fuera de la vista de cualquiera y miró a su

alrededor para asegurarse de que estaba solo. Jericho esperaba en la esquina,
listo para interceptar a cualquiera que viniera a molestar. Smiley abrió el papel
y marcó el número, sonó cuatro veces antes de que un contestador automático
saltara.
"Elisabeth mi nombre es Smiley. Soy..." descolgaron el teléfono

inmediatamente.
"Sé quién eres." Ella tenía una voz agradable, pero parecía nerviosa.
"He oído que estas preocupada por Vanni. ¿Qué ha pasado?"
"¿Puedes ayudarme?"
"Es posible. ¿Por qué crees que está en peligro?"
"Ella se fue ayer para recuperar las cosas que dejó en el hotel. Carl dijo que no
se las devolvería a menos que ella le devolviera el anillo de compromiso en
persona. Vanni no ha vuelto a casa, pero estoy segura de que habría vuelto si
él no le hubiera hecho algo. La policía dijo que no podían buscar a una persona
hasta que hayan pasado setenta y dos horas. Sé que hay algo que anda muy
mal, la policía me ha dicho que ella hablara con los periodistas y con Carl hoy,
lo que significa que está bien y que deje de andar molestando."
"Estoy al tanto."
"¡Eso es mentira! No quería hablar con la prensa. Demonios, hemos estado

escondidas en nuestro apartamento para evitarlos. Incluso le ofrecieron dinero
para que hablara y ella se negó. Nadie me escucha cuando les digo que creo
que Carl le ha hecho algo." Ahora parecía como si estuviera llorando. "La
policía no hará una mierda."
"¿Sabes dónde iba?"
141
"A la casita de vacaciones de su padre, pero llamé allí y el personal me dijo que
había ido, pero que se fue con Carl en una limusina, la he llamado a su móvil
pero no contesta. Incluso me puse en contacto a su secretaria, pero ella me dijo
que no había hablado con él directamente, aunque sabía que él había pasado
sus próximos casos a un asociado. Él le ha dicho que era porque necesitaba
tiempo para apoyar a su prometida en estos momentos." Elisabeth respiraba
jadeando. "Sólo sé que ella no quería casarse con él."
Smiley se apoyó contra el edificio.
"¿Estás segura? Quizás él aún quiere casarse con ella."
"¡Una mierda! Vanni no le amaba, conozco a mi amiga, él se portaba bien con

ella y ella había salido con un capullo antes que él, pero Carl es tan aburrido
que casi se sintió aliviada que todo hubiera terminado. Claro, se sentía
culpable por lo que había pasado contigo, pero no tanto como para volver con
él o hablar con los periodistas. Tienes que confiar en mí. La conozco."
"¿Qué quieres que haga?"
"Que la encuentres. Vanni es un poco ingenua no sabe mucho sobre los

hombres. Carl era demasiado tranquilo y reservado. Eso nunca me dio buena
espina, hay algo en ese cretino que no está bien. Me apuesto hasta mi último
dólar a que la está obligando a hablar con los periodistas. Ella no me ha
llamado, solo eso ya de por sí me tiene muy asustada. Somos muy buenas
amigas. Nos lo contamos todo la una a la otra, todo."
Smiley cerró los ojos, tratando de asimilar toda la información.
"La conclusión es que realmente le gustas." añadió.
Eso hizo que abriera los ojos de par en par.
"¿Qué?"
"La única razón por la que Carl querría que hablara con los periodistas es para
que acuse de algo malo a las Nuevas Especies. Creo que está harto de ir detrás
142
de su padre, no le hace gracia, sin importar lo que él le haya dicho a Vanni,
asegurando que no era parte de esa iglesia, pero siempre hace lo que le pide su
padre. Quiero decir, él no dormía con Vanni porque su padre creía que el tener
relaciones sexuales antes de la boda sería mala imagen para su hijo, Vanni me
dijo que era por su carrera, pero yo le dije que eso era una chorrada. Él es un
simple abogado, no se presenta a la alcaldía, a nadie le importa si se acuesta
con una mujer o no, es un hombre hecho y derecho, por el amor de dios, si su
padre dice salta Carl le pregunta desde que altura, es como si fuera el muñeco
de un ventrílocuo movido por su padre."
"¿Qué es eso?"
"Es un muñeco espeluznante que algunos cómicos ponen en su regazo y

pretenden que te creas que habla el muñeco. Cosas de frikis, pero ese es el tipo
de relación que sospecho que tiene Carl con su padre. ¿Está lo suficientemente
claro? cualquier persona con un poco de cerebro pondría distancia entre su
carrera y la iglesia si no querían ofender algunos clientes, pero creo que Carl
está completamente integrado con ellos."
Él lo entendió.
"Voy a hacer todo lo que pueda para encontrarla, Elisabeth."
"Llámame Beth y gracias. Tu número no aparece en el identificador de

llamadas. ¿Cómo puedo ponerme en contacto contigo? Tuve miedo de llamar
a la ONE porque Vanni me dijo que vosotros pensabais que ella podía haberte
drogado. Esa es la cosa más estúpida que he oído nunca, por cierto, se
despertó en una camioneta y oyó como los guardias hablaban que la iban a
detener. Que chorrada."
La ira hizo que levantara la voz.
"¿Estaban discutiendo por haberla detenido?" Él sintió a la vez que le

embargaba la rabia. "¿Por eso se escapó?"
143
"¡Eso! Estaba durmiendo y tenía miedo de que la arrestaran por algo que no
había hecho."
"Te llamaré." Colgó y se dirigió hacia Jericó. "Tenemos que encontrar a Vanni.
Su amiga cree que la están obligando a que hable con los periodistas."
"Mierda." Jericho lo estudió detenidamente. "¿Estás seguro de que no es lo que

querías escuchar?"
"Su mejor amiga está muy segura. Tú me conoces. ¿No te preocuparías si de

repente empiezo a actuar de una forma muy distinta a como soy?"
Jericho dejó escapar un profundo suspiro.
"Tú ya has cambiado, Smiley. Solo que sé el por qué. Es la hembra."
"Está en apuros. Le dije a Beth que buscaría a Vanni. ¿Vas a ayudarme o no?"
"Primero debemos ir a hablar con Justice."
"Vamos a hacerlo."
www
Vanni apretó los puños y miró a Mable, la mujer le devolvió la mirada hostil,
esa mujer debió de haber sido un sargento de instrucción, daba las órdenes con
el mismo tono despiadado que había visto en las películas.
"Hombros caídos, Travanni. Quiero verte abatida y deprimida, te han violado."
144
"No es así." Vanni se revolvió contra Gilda. "¿Cuántas veces tengo que decirlo?
Que esto no es ningún juego. Esto es una estupidez. ¿Has visto el guardia que
estaba en la puerta? Me tienen aquí en contra de mi voluntad. ¿Quieres hacer
algo útil? Ayúdame a escapar."
Gilda frunció el ceño.
"No, creo que hemos utilizado poco maquillaje para poner sombras bajo tus
ojos."
Vanni quería gritar.
"Voy a por mí neceser de maquillaje." dijo Mable y se dirigió hacia el baño que
estaba en la esquina de la habitación.
"¿No tienes ninguna moral en absoluto?"
Gilda negó con la cabeza.
"Esto es una guerra."
"He escuchado eso antes. ¿Con quién, con la ONE?"
"Estamos luchando por nuestro futuro, esas cosas van a dominar el mundo y
cuando lo hagan seremos sus mascotas."
"¿Quién quiere tomar drogas hoy en día?" dijo Vanni dudosa.
"Yo no tomo drogas."
"Tienes que ir a ver a un médico, lo necesitas, ¡estás delirando y paranoica!"
"Cállate." dijo Mable bruscamente, volviendo del baño.
"Yo nunca te he gustado."
"Eso es mutuo."
Vanni se apartó bruscamente cuando la mujer mayor intentó poner más

maquillaje oscuro bajo los ojos.
145
"Deja de hacer eso."
"¿Tengo que llamar a Bruce para que te quedes quieta?" Mable ya había hecho
esa amenaza un par de veces. "Él dijo que te sostendrá si nos das algún
problema."
"Es un demente también."
"¿Alguna vez has pensado que la que tiene problemas mentales puedes ser
tú?"
Mable intentó de nuevo poner el maquillaje en la cara de Vanni, pero ella

retrocedió.
"¿Yo? Tú eres la que se ha unido a una secta."
"La culpa es tuya." dijo Mable entre dientes. "Él pastor Woods es un profeta,
sabe lo que nos deparara el futuro, esas criaturas van a encontrar la manera de
multiplicarse y crearan a más seres como ellos, atraerán a las idiotas como tú
para que deis a luz a sus engendros. Ha dicho el Pastor Woods, que ese día ya
está aquí, que pronto habrá más de ellos que de nosotros. Deja que cuente la
historia y que así te sirva de lección, mira lo que el hombre blanco le hizo a los
indios. Ellos se extenderán y los que sobrevivan serán confinados en las
reservas."
"Guau." Vanni no había oído eso antes. "Simplemente guau."
Gilda asintió con la cabeza.
"Estamos salvando a nuestra raza de la extinción."
"¿Que van hacer, convertirnos en mascotas o asesinarnos? Estoy un poco de

confundida." murmuró Vanni con sarcasmo.
"¿Qué es qué?"
"Lo que va a suceder." Gilda asintió con la cabeza enérgicamente.
146
"En primer lugar nos vamos a convertir en ganado para reproducir sus
malvados engendros y luego nos mataran cuando hayan formado un ejército."
"No me gusta señalar esto, pero eh, ¿no serían sus hijos más humanos que las
Nuevas Especies? Quiero decir, trato de ser racional, ya parecen más
humanos."
"El pastor Woods ha dicho lo contrario." Mable miró a Vanni de nuevo. "Es
probablemente el hombre más inteligente que he conocido, acuérdate de sus
palabras, ellos van a ser la causa de la destrucción de la humanidad si no los
enviamos de vuelta a donde vinieron."
"Industrias Mercile no existe, la empresa cerró."
Vanni no estaba segura de por qué estaba tratando de hablar con lógica con
dos idiotas, pero venció a las ganas de llorar de nuevo.
"Entonces, que hagan un nuevo laboratorio para confinarlos." espetó Gilda. "O
se podrían sacrificar si los zoos no los quieren."
"No son criaturas. Son personas."
Mable resopló y le lanzo una mirada de disgusto a Gilda.
"Deja de perder el tiempo en intentar convencerla, no te está escuchando. Le

dije a Carl que ella no era lo suficientemente buena para él. La señorita Bofetada
tenía que ir y perseguir a una de esas criaturas."
Gilda se estremeció.
"Eso es tan triste. Me compadezco de ella. ¿Y tú? Debe haber sido horrible."
Vanni apretó los dientes, pero no pudo contener su ira.
"Empezad a sentir compasión por vosotras mismas. Vosotras sois las que
tenéis la moral relajada y además sois estúpidas, deberíais pensar en las leyes
que estáis rompiendo al ayudar a Gregory a mantenerme prisionera. Yo
147
dejaría de preocuparme por lo que las Nuevas Especies planean hacer y en su
lugar empezaría a averiguar a cuánto tiempo de cárcel te enfrentas."
Gilda frunció el ceño.
"¿De qué estás hablando?"
"No vas a llegar lejos con esto." prometió Vanni.
"No le hagas caso, ya dijo el pastor Woods que nos costaría cuidar de ella, no
se atreverá a hacer nada, sino que hará exactamente lo que él quiere." Su
mirada se cruzó con la de Vanni. "Voy a llamar a Bruce. ¿Necesitas un
recordatorio?"
"Que te jodan, Mable."
"¡Bruce!" Gritó la perra.
La puerta se abrió y el guardia se hizo a un lado, cediéndole el paso a Bruce

para que entrara en la habitación. Llevaba un traje oscuro y tenía el aspecto de
estar cabreado.
"¿Esta te está dando problemas?"
"Nos está amenazando con la cárcel."
Él se abrió la chaqueta y mostró la pistola.
"Sera lo último que haga."
"¿Qué vas a hacer? ¿Me vas a disparar en la rueda de prensa?" Vanni ya había
tenido suficiente. "No puedes hacer que este allí de pie y joderme. No voy a
hacerlo."
"Lo harás."
Él dejo que su chaqueta se cerrara y cogió su teléfono móvil y dio un par de

toques en la pantalla y se volvió hacia ella. Incluso desde cinco metros de
distancia podía distinguir la foto. Era Beth sacando la basura. Bruce sonrió.
148
"¿No te preocupas por su vida? Esto me lo envió uno de mis hombres, el irá
allí otra vez cuando dé comienzo la rueda de prensa, si dices algo distinto de
lo que está en el papel puesto frente a ti o no haces que parezca convincente, él
va a disparar a la perra de tu amiga."
A Vanni se le doblaron las rodillas pero intento mantenerse en pie.
"Además voy a tener que entregar un paquete a la ONE de lo que hemos

hablado. ¿Quieres saber lo que eso significa? Nosotros vamos a querer que
estés muerta y ellos querrán verte muerta, no tendrás ningún sitio donde
puedas ocultarte y uno de nosotros lo llevará a cabo."
"Te odio." dijo Vanni en voz baja, pero en serio sintiendo cada una de sus
palabras.
Él salió de la habitación y el guardia cerró la puerta con llave. Mable sonrió.
"Ya sabía que él te cerraría esa boca con la que insultas a los tuyos. Ahora
quédate quieta y deja que te arregle el maquillaje."
Vanni se quedó inmóvil, permitiendo que hiciera el trabajo, Beth estaba en

peligro, estaban amenazando con matarla y eso era suficiente para que
obedeciera. Era un riesgo que Vanni estaba dispuesta a correr, pero no con la
vida de Beth. Tenía que escapar antes de que comenzara esa rueda de prensa y
avisarla para que se fuera del apartamento. Si pero, ¿cómo?
149
Capítulo Nueve
"Es hora de irnos." anunció Mable.
"Me siento enferma."
Vanni corrió al cuarto de baño y cerró la puerta. Pero en vez de usarlo, agarró
la bolsa de cosméticos de Mable. No había mucho en ella que pudiera usar,
pero vio un pequeño spray para el cabello, tamaño viaje. Se lo escondió en el
escote, asegurándose de que no se notara.
Tiró de la cadena, con la esperanza de enmascarar el ruido mientras hurgaba

en la bolsa, buscando frenéticamente el lápiz de ojos. Estaba en la parte
inferior. Lo podía llevar en su ropa interior sin que se cayera, y devolvió la
pequeña bolsa al mostrador. Corrió el agua en el fregadero y abrió la puerta.
Tanto Mable como Gilda se quedaron allí mirándola.
"Falsa alarma. Gas."
"Asqueroso." Mable silbó.
"No he comido. Nadie se molestó en alimentarme anoche o esta mañana. Es

probablemente una buena cosa o estaría lanzando mis entrañas. Me
enfermáis."
Se alejó de la puerta y cruzó la habitación, abrazándose la cintura, con la

esperanza de que ayudaría a mantener el lápiz en su sitio. Presionó sus dedos
sobre él. La puerta se abrió. Bruce y el otro guardia entraron.
"Vamos. No queremos llegar tarde."
150
Vanni les siguió mansamente. No quería dar a ningún hombre una razón para
tocarla. Podrían descubrir sus dos artículos robados. Bruce se puso delante con
una estrecha vigilancia sobre sus talones mientras bajaban dos tramos de
escaleras y pasaban por la puerta de entrada hasta una limusina esperando.
Bruce abrió la puerta del pasajero.
"Entra."
Vanni no tenía un plan, pero esperaba poder hacerse con el arma de Bruce y
tal vez mantener a Gregory como rehén. Todo lo que tenía que hacer era tomar
el teléfono y llamar a Beth. Su siguiente llamada sería al 911. Los policías
podrían tomar el arma cuando llegaran y les explicara por qué había apuntado
a su estúpida cabeza.
Gregory no estaba dentro de la limusina. Estaba vacía y su desesperado plan

de escape destruido. Subió y se acercó a la barra, con ganas de estar lejos del
gran hombre que subió detrás de ella. Bruce se sentó en el centro, entre las dos
puertas. Ella miró por la ventana, observando al otro guardia entrar por el
lado del conductor. El vidrio de privacidad bloqueaba el compartimiento
delantero de la parte posterior. Era posible que Gregory estuviera en el asiento
del pasajero.
"Estaremos allí en veinte minutos."
"Fantástico."
Esperaba que Bruce reconociera el sarcasmo.
"¿Quieres leer las tarjetas una vez más? Tengo una copia en el bolsillo."
"No. Gilda lo cubrió bien. Puedo leerlas."
Él gruñó, pero no se puso el cinturón de seguridad cuando el motor arrancó.

Ella no lo hizo tampoco. Tenía veinte minutos para escapar de la limusina y
encontrar un teléfono. Vanni trató de parecer relajada, echando miradas de
reojo a cualquier cosa que pudiera servirle como un arma. La pequeña botella
de plástico encajada entre sus pechos parecía la mejor opción. Le podría cegar
151
si apuntaba a sus ojos, pero era un hombre grande. Cubría las dos únicas
salidas. Tendría que pasar más allá de él para salir por una de esas puertas.
"¿Nerviosa? Basta con leer las malditas tarjetas y actuar como se te dijo."
Ella le sostuvo la mirada.
"Vamos a entrar por el lateral de la iglesia e ir directamente a la parte

delantera, donde estará reunida la prensa. Gregory y Carl están ya allí. Carl te
tomará del brazo y te sostendrá la mano. Lo permitirás o te voy a romper los
malditos dedos uno a la vez. Seguís siendo una pareja y fingirás estar
agradecida de que él esté de pie a tu lado en estos momentos difíciles."
Vanni apretó los dientes.
"Quita esa maldita mirada de tu cara."
Bajó los ojos y volvió la cabeza. El pequeño bar contenía unas cuantas botellas
de vidrio, vasos y botellas de agua. Su atención se detuvo en la oscura botella
de alcohol.
"¿Puedo beber algo?"
"Joder no. Lo último que necesitamos es que te emborraches."
"Quise decir agua." Señaló.
"No."
"Está bien. Mi garganta está seca. Estoy segura de que va a sonar muy bien
cuando intente leer esas tarjetas y despejar la garganta dos docenas de veces."
"Bebe la maldita agua. Eso sí, no la derrames sobre el vestido."
Echó un vistazo a la blanca parte superior abotonada. El escote le llegaba a la

garganta y tenía mangas largas hasta las muñecas. La falda sin forma negra
caía casi hasta los tobillos. Le recordaba a algo que una maestra de escuela de
principios del siglo XX hubiera llevado.
152
"Dios no lo quiera. ¿Quieres que se lo devuelva a tu abuela?"
"Cierra la boca."
Ella fingió una tos, se removió en el asiento y sigilosamente sacó la laca para el
cabello. Retorció la tapa para aflojarla y acuñó la pequeña botella entre los
asientos para asegurarse de que no se viera. La hebilla del cinturón le servía y
esperaba que bloqueara la vista cuando se inclinó hacia la barra.
"El agua." le recordó.
"Ya lo sé." murmuró.
Tomó una botella de agua y quitó la tapa. No era mentira que su garganta
estaba seca. Dio un par de sorbos, mirando por las ventanas. Habían dejado la
propiedad de Gregory y estaban conduciendo por un barrio de casas de lujo.
En menos de una manzana había un montón de tiendas y restaurantes. La
autopista después. Era ahora o nunca. Tomó otro sorbo, se echó hacia atrás y
buscó por el lado de la falda. Se quitó el delineador de ojos y usó el pulgar
para voltear la tapa de plástico.
La limusina hizo un giro y vio las primeras tiendas. Conducían por calles muy
estrechas y continuarían así dos manzanas más, hasta la vía de acceso a la
autopista. El tráfico aminoró la marcha a paso de tortuga. Observó a Bruce por
el rabillo del ojo. Parecía relajado. Echó un vistazo al agua y lo dejó pasar. La
botella de plástico cayó al suelo y el agua se derramó.
"¡Vaya!"
"¡Hija de puta!" Gritó. "Cógela."
Ella se negó.
"Hazlo tú."
Él se inclinó hacia delante y casi se cayó del asiento. Abrió la tapa de la laca
para el cabello. La parte de atrás de su cuello quedó expuesta mientras cogía la
botella de plástico, maldiciendo sobre el agua por toda la alfombra en la
153
costosa limusina. Ella empuñó el lápiz delineador de ojos con la mano derecha
y agarró la laca para el cabello en su izquierda.
El miedo y la rabia la llevaron a apuñalarle con el lápiz. Parte se clavó en su

piel antes de romperse. Él rugió de dolor y se agarró el cuello herido, cayendo
hasta el final de su asiento. Volvió la cabeza, la pura rabia retorciendo sus
rasgos. Ella pulsó la laca para el cabello y le roció en el rostro. El líquido acertó
sobre sus ojos y él intentó apartarse, gritando con fuerza.
"¡Jodida perra! Voy a matarte."
Buscó ciegamente en su traje con una mano, mientras se limpiaba los ojos con
la otra. Vanni se levantó, se agachó y cogió una de las botellas de alcohol. El
hecho de que Bruce casi había sacado su arma de la funda la motivó para
balancear el cristal lo más fuerte que pudo. Se la estrelló en la cabeza. Él gruñó
y el fuerte sonido de la pistola al dispararse a quemarropa casi la ensordeció.
Cayó y el conductor pisó el freno. Ella se quedó mirando al hombre inmóvil,

conmocionada. La sangre bajaba por su muslo, donde la bala le había dado. Se
había pegado un tiro. Sonó un claxon y miró por la ventana. Estaban atrapados
en el tráfico. El conductor de la limusina de repente aceleró, casi tirando a
Vanni sobre Bruce, que estaba tendido a sus pies.
Se las arregló para usar el techo y la barra delante de ella, para mantenerse en
posición vertical. El conductor parecía estar buscando un lugar para aparcar
mientras la limusina desaceleraba. Vanni se dejó caer de rodillas, aterrizando
en la mano de Bruce. Ella metió la mano en su chaqueta, evitando la pistola.
Encontró el móvil que había usado para atormentarla sobre Beth. En el último
momento, se inclinó un poco más hacia él y buscó la cartera de su bolsillo. Se
arrastró hacia la puerta.
La segunda la limusina se detuvo, ella abrió la puerta, feliz de que no estuviera

cerrada con llave. Tropezó y casi fue atropellada por un coche. El conductor
tocó el claxon mientras frenaba de golpe, gritando obscenidades.
154
Corrió hacia la acera en dirección opuesta a la limusina para que el conductor
no pudiera correr tras ella. Hubiera podido ir marcha atrás para darle caza,
pero había golpeado al hombre que acababa de cabrear ya que su coche estaba
en medio.
La gente la miraba mientras corría. Volvió la cabeza cuando más claxon

sonaron. El conductor de la limusina estaba fuera del coche y le oyó gritar.
Miró hacia delante, apenas logrando evitar estrellarse contra un peatón, y se
metió en uno de los callejones entre los edificios. Siguió su corriendo hasta que
vio un contenedor de basura.
Era un buen lugar para esconderse por lo que se puso detrás. Estaba sin aliento
por su loca carrera y se apoyó contra la pared de ladrillo mientras estudiaba el
móvil.
Por favor, ¡que no esté protegido con contraseña!
Tocó el botón y la pantalla se iluminó. Marcó el icono de teléfono y apareció el

número de la Iglesia Woods. Golpeó de nuevo el teclado y se abrió. Su dedo
temblaba mientras llamaba a su casa.
Sonó cuatro veces hasta que saltó el contestador.
Dios, por favor, ¡que esté en casa!
Se reprodujo el mensaje automatizado y sonó.
"¡Beth! Coge el teléfono. Ahora, maldita sea."
"¿Vanni?"
Nunca había estado tan aliviada de oír la voz de su amiga.
"Escúchame. Estás en peligro. Gregory ha enviado un hombre a nuestro

apartamento. Va a matarte. Llama al 911 y espera a la policía. ¡Sal cuando
lleguen allí!"
"¿Qué?"
155
"No tenemos tiempo para esta mierda. Coge tu móvil y llama al 911. ¡Hazlo!"
"Okay. ¿Qué está pasando?"
"Me han secuestrado. Van a matarte. Me escapé y ahora ese hombre va a ir a

por ti. Cuando los policías lleguen allí, ve con Elvis. No digas su nombre. Ya
sabes a quién me refiero."
"¿Estás bien? Espera mientras llamo." Mientras esperaba escuchó la llamada de

Beth al 911. "Sí. Tengo una emergencia. Creo que alguien intenta entrar en mi
apartamento." Beth dio la dirección. "Estoy aquí sola. Enviad a alguien rápido.
Podría tener un arma."
Vanni alejó el móvil de la oreja, atenta a cualquier sonido del conductor o

Bruce. El callejón estaba tranquilo, el único ruido el tráfico por la calle.
"¿Vanni? ¿Vanni?"
"Estoy aquí. ¿La policía está de camino?"
"Sí. ¿Qué ha pasado? ¿Estás bien? ¿Estás herida?"
"No tengo tiempo para hablar. Me tengo que ir. Probablemente me están
buscando. Estoy bien por ahora. Cuelga el teléfono y ve con Elvis. Recuerdo su
dirección. No confíes en nadie y dile a mis padres que se tomen unas
vacaciones. Tienen que salir de la ciudad. Nunca fui con Carl al campo. Odia al
aire libre. No sé si Gregory planea ir tras ellos después."
"¿Hablas en serio?"
"Son unos capullos. No tienes ni idea."
"Puedo adivinarlo. Te dije que algo estaba mal con esa familia. Nos
encontraremos en la casa de Elvis. ¿Cuánto crees que vas a tardar?"
"No puedo. Estoy demasiado lejos."
Vanni se asomó desde detrás del contenedor de basura. No vio a nadie. Aún.
156
"Dime dónde estás e iré a por ti."
"Es demasiado peligroso."
"Tonterías." escupió Beth. "¿Dónde estás?"
"Tengo un asesino cazándome, si esa bala en el muslo no le paraliza."
"¿Has disparado a alguien?"
"No tengo tiempo para explicaciones. Coge tu mierda y no abras la puerta

hasta que la policía llegue. Sal de allí y deja el móvil para que no puedan
encontrarte. Deshazte de tu coche un par de manzanas más allá y que te recoja
Elvis. Probablemente estoy siendo paranoica, pero tienen dinero. No utilices
las tarjetas. Ningún rastro, ¿de acuerdo?"
"¿Qué vas a hacer?"
"No lo sé. No he pensado más allá. Puedo llamar a la policía y contárselo

todo."
"Ve con Smiley. La policía ni siquiera hizo un informe cuando les dije que algo
andaba mal. Necesitas protección y Homeland es un sitio en donde nadie
puede alcanzarte."
"Él piensa que le he drogado."
"No lo hace. He hablado con él."
"¿Qué?"
"No me dijiste que tiene una voz tan sexy. Él..."
"¡Maldita perra!" Gritó Bruce. "¿La ves?"
"¡No!" Gritó otro hombre. "Pero creo que debe estar escondida por aquí cerca."
"Me tengo que ir. Te llamaré cuando sea seguro."
Vanni colgó y se aseguró de que estuviera en vibración mientras se agachaba

detrás del contenedor de basura. Sería malo que Beth la llamara de vuelta si el
157
número de Bruce aparecía en el identificador de llamadas. Lo metió entre sus
muslos y el estómago para amortiguarlo si vibraba. El sonido de una
respiración forzosa se acercó más.
"Voy a matar a esa perra."
Bruce estaba cerca.
"Estás sangrando."
"Mi torniquete se ha aflojado."
"Irá a la policía, si no encontramos a esa zorra."
"Gregory lo tiene cubierto. El doctor Barns va a decir que sufrió una ruptura
emocional después de su violación. Irá a por ella y se hará cargo. Pero no va a
ir a un hospital, sin embargo. Voy a dejarla en la morgue yo mismo. ¿Sabes lo
que nos va a costar si tenemos que hacerlo así?"
Parecía estar respirando con dificultad y sonaba como si estuviera justo al otro
lado del contenedor de basura. Vanni cerró los ojos y ralentizó la respiración
esperando que no la encontraran.
"Tal vez fue por ese otro callejón. Yo lo hubiera hecho de ser ella."
"Ve por la izquierda. Yo iré la derecha. La muy perra me robó el teléfono y la

cartera."
"¿Puedes seguirlo?"
"Sí. Sólo necesito un ordenador portátil para acceder a mi cuenta de teléfono."
"Hay un ordenador portátil en la limusina bajo el asiento del pasajero. Suelo

jugar a juegos online mientras estoy esperando a Gregory."
"Voy a usarlo. Tú comprueba el callejón. Dale cuatro minutos y luego lleva tu

culo de nuevo a la limusina. La seguiremos así."
158
Se separaron. Oyó al conductor alejarse por el callejón y los pasos de Bruce se
desvanecieron mientras se dirigía de nuevo hacia la limusina. Vanni abrió los
ojos y miró el teléfono. Tenía que deshacerse de él. Pensó que tenía unos tres
minutos antes de que Bruce usara el portátil. Necesitaría tiempo para cargarlo
e iniciar sesión en el sistema de seguimiento. Tenía cinco minutos como
máximo.
Se asomó y se levantó una vez que estuvo segura de que no estaban a la vista.
Fue a la calle, se asomó a la esquina y vio a Bruce a unos sesenta metros de
distancia. Un grupo de turistas pasó y se movió por delante de ellos para
esconderse en caso de que mirara atrás. Se metió en un café, dos tiendas abajo.
La cola de clientes esperando era larga para entrar en el cuarto de baño unisex
y cerró la puerta. Sus manos temblaban mientras miraba el teléfono. Gregory
tenía un médico en su nómina. ¿Podrían realmente enviarle a una comisaría de
policía para decir que estaba loca y llevársela? No era un riesgo que estaba
dispuesta a correr. Marcó y consiguió información.
"Homeland de las Nuevas Especies."
Apretó el botón para conectar el número directamente. Sonó dos veces y una
voz masculina contestó agradablemente.
"Homeland. ¿En qué puedo ayudarle?"
"No tengo mucho tiempo. Estoy siendo rastreada. Mi nombre es Travanni

Abris. Soy la que está en el video en la televisión. Estoy en problemas. Tengo
que hablar con Smiley. Gregory Woods está tratando de hacer que dé una
entrevista en la prensa para decir mentiras sobre él y las Nuevas Especies."
"Sí, claro. Seguro que lo eres. Mire, usted no puede hablar con él y es la
quincuagésima Travanni que ha llamado en la última media hora."
Ella se apoyó contra la puerta cerrada con llave.
"Brass estaba con Smiley. Brass es un tipo grande, da miedo, y lleva el pelo
recogido en una coleta. Los médicos eran Shane y Ned. Me escapé de ellos en
159
una parada de camiones. Soy la verdadera Travanni Abris y estoy en
problemas. Gregory Woods me mantuvo prisionera en su casa de vacaciones.
Acabo de escapar de dos de sus guardias y están buscándome. Robé un móvil
que están rastreando ahora mismo. Tengo que tirarlo o van a encontrarme."
La voz del hombre se profundizó.
"¿Dónde estás?"
Citó la dirección y el nombre del café.
"Me estoy escondiendo en el cuarto de baño. No puedo quedarme aquí." Se

mordió el labio. "¿Me puedes ayudar?"
"Enviaremos un equipo. Permanezca en el baño."
"Ellos podrían venir aquí y atraparme."
"¿Conoces a un lugar cercano y seguro?"
No conocía el pueblo muy bien pero había visto un parque al otro lado del
centro comercial al cruzarlo. Lo recordaba gracias a las grandes estatuas.
"Hay un parque. Puedo esconderme allí, tal vez."
"Enviaremos un equipo. Pueden estar allí en veinticinco minutos."
"Okay. Tengo que deshacerme de este teléfono."
Colgó y le dio la vuelta, pero no pudo encontrar por donde extraer la batería.
Entró en una cabina y lo dejó caer en el inodoro. Se hundió en el agua.
Bruce tenía cincuenta y siete dólares en su billetera. Memorizó su nombre

completo y donde vivía. El dinero fue a su bolsillo y dejó caer la billetera en el
cubo de basura. Se tomó un momento para volcar las toallas de papel encima
para esconderla.
Fue aterrador abrir la puerta y salir del baño, pero tenía más miedo de
quedarse allí por si la señal del teléfono siguiera activa. Les llevaría directos a
160
ella. La línea de atención al cliente era aún más larga y miró a través de las
grandes ventanas a la calle. Bruce y el conductor no estaban a la vista por lo
que se acercó a la puerta, atenta. Sólo entraron extraños cuando salió.
Se dio la vuelta y caminó rápidamente, tratando de mantenerse con los grupos.

Deseó poder cambiarse de ropa, pero todas las tiendas eran caras. Con
cincuenta y siete dólares no iba a conseguir un cambio de imagen.
Pasó una tienda de camisetas, hizo una pausa, miró una etiqueta de venta y
entró. Una amistosa adolescente le sonrió.
"¡Hola! ¿Hay algo que te pueda ayudar?"
"Simplemente navegar."
Rápidamente estudió los bastidores y cogió una camiseta holgada negra. Fue a
la caja y ni siquiera se tomó el tiempo para mirar lo que estaba impreso en el
frente.
Se trasladó a la parte trasera de la tienda donde tenían pantalones cortos de

algodón para hombres. Agarró uno mediano que costaba diez dólares y se
dirigió al mostrador.
Tenían chanclas y zapatillas baratas. Cogió unas negras, dejando caer todo
sobre el mostrador.
La chica hablaba por teléfono. Vanni hizo una mueca al renunciar a la mayor
parte del dinero en efectivo.
"¿Te importa si me cambio aquí? Se me está haciendo tarde para una sesión de
entrenamiento con mi entrenador personal. No puedo cambiarme allí."
"¿Vienes de un funeral?"
La muchacha le dio una comprensiva mirada. Vanni miró la horrible camisa y

la falda.
"Sí."
161
"Lo siento. Perdí a mi tío el año pasado. ¿A quién has perdido?"
Recogió sus compras.
"Alguien a quien apenas conocía."
Eso era parcialmente cierto. Se había equivocado con Carl y bien podría estar
muerto para ella.
"Hay un cuarto de baño justo ahí."
La falda y la camisa fueron al cubo de basura y se puso las ropas sueltas, mal
ajustadas. Ocultó su pelo con la capucha, con la esperanza de que ayudaría con
el conjunto. Los tacones fueron también a la basura. Se calzó las zapatillas y
salió del cuarto de baño.
"¡Gracias!"
No esperó por la respuesta de la chica o para que se diera cuenta de que Vanni
no se llevaba sus cosas con ella. Comprobó la acera, no vio la limusina, ni a
Bruce o al conductor.
Bajó la barbilla, mantuvo la cabeza agachada y se mezcló con las multitudes

que viajan en dirección al parque.
www
Smiley estaba en la oficina de Justice argumentando su caso para buscar a

Vanni cuando Flirt se precipitó dentro.
162
"Travanni Abris acaba de llamar a nuestra línea principal." Sostuvo un
teléfono. "He descargado la grabación."
La puso en marcha. Todo el mundo escuchó el intercambio.
"Tenemos que llegar a ella."
Smiley quería salir corriendo e ir a la pista de aterrizaje de inmediato. Esa era

la forma más rápida de llegar a ella.
"Llama al piloto para preparar el helicóptero."
Flirt le miró.
"Ya está hecho."
Justice frunció el ceño.
"Podría ser una trampa."
"Ya has oído el miedo en su voz." gruñó Smiley. "Iremos a por ella. Se la
llevaron en contra de su voluntad. Era justo lo que su amiga dijo. Está en
problemas."
Fury se puso de pie.
"Voy a ir."
"No, yo lo haré." Justice se levantó y abrió el cajón superior, retirar una funda y
la pistola. "Me conoció brevemente en el hotel. Quiero que vea una cara
familiar. Ya oíste lo que Smiley tenía que decir acerca de lo que ella pudo
haber escuchado en la camioneta viniendo a Homeland. Podría creer que
hemos enviado un equipo a arrestarla, si sólo les enviamos a su ubicación. No
quiero que huya si realmente está en problemas."
"Es demasiado peligroso." protestó Fury. "Iré con el equipo. Podría calmarla
sólo ver una cara Especies."
"Voy yo."
163
Smiley se lanzó hacia delante. Fury le detuvo con una mirada fría.
"No. Podría ser una trampa para atraerte allí. Si vas tras ella te hará parecer
culpable de sus cargos. Dirán que fuiste a impedirle hablar con la prensa."
"Esa es otra razón por la que voy. Yo me encargo de la prensa si están al

acecho para ver si aparecemos."
Justice se puso de pie y tiró de la chaqueta del respaldo de la silla. Se quedó

mirando a Flirt.
"¿Supongo que pediste un equipo para montar en el helicóptero?"
"Sí. Les puse en estado de alerta, en caso de que decidieras recoger a la

hembra."
"Por lo menos déjame viajar en el helicóptero. No saldré."
Smiley tenía que estar allí. Fury y Justice estaban preocupados porque fuera
una trampa, pero no pensaba así. Había sonado muy asustada en la grabación.
"No." Justice se acercó y le agarró el hombro. "Estás demasiado emocionado y

eso es lo último que necesitamos. Vamos a traerla aquí con seguridad, si su
historia es cierta. Podrás verla entonces."
Quería protestar, pero Justice volvió a hablar antes de que él pudiera.
"Podemos discutir o podría ir a ese helicóptero y conseguir estar en el aire más

rápido para llegar a ella. ¿Qué va a ser?"
"Ve." dijo Smiley entre dientes.
Justice y Flirt salieron de la oficina y Fury suspiró.
"Espero que no sea una trampa."
"Está en problemas."
Smiley estaba convencido de ello. La mirada de Fury le contuvo.
164
"Eso espero por el bien de todos. No conozco a la hembra pero realmente
detesto a la Iglesia Woods. ¿Quieres ir a Seguridad conmigo? Vamos a
monitorear la situación desde allí. El equipo se mantendrá en contacto
permanente con nosotros."
"Sí."
Smiley al menos tendría una actualización minuto a minuto si no podía estar

allí.
165
Capítulo Diez
Vanni estiró el cuello, mirando alrededor de la gran estatua de oso detrás de la

que se escondía. La calle no estaba demasiado lejos y la limusina había pasado
dos veces. Bruce y el conductor estaban cazándola y tenía miedo de que la
encontrasen antes de que llegara la ONE. Deseaba un reloj, pero tuvo que
adivinar cuánto tiempo había transcurrido desde su desesperada llamada a
Homeland.
¿Qué pasa si no vienen? Era un pensamiento aterrador. ¿Qué pasa si vienen a

detenerme?
Esa era una posibilidad real, si Gregory cumplía su amenaza de entregar ese
vial con sus huellas dactilares. Se apoyó en la pata delantera de la gran estatua
blanca y abrazó su cintura.
Todo se reducía a tener más miedo de llamar a la policía. Bruce no habría

soltado un farol sobre Gregory teniendo un médico en su nómina, ya que él no
sabía que estaba lo suficientemente cerca como para oír su plan. Iba a terminar
sonando como una demente, tal como ese médico alegaría si despotricaba
acerca de una iglesia entera buscándola ahí fuera.
Su bolso estaba todavía en la casa de vacaciones de Gregory. Aunque estaba

sin dinero, sin identificación y sin coche se negaba a correr el riesgo de poner
en peligro a Beth, pidiéndole que viniera a recogerla. Bruce conocía la
apariencia de su mejor amiga. Se estremeció, imaginando lo terrible que sería
si él descubría a Beth. Podría dispararle en el acto.
Beth dijo que había hablado con Smiley. Sabía que Beth no la habría instado a
ponerse en contacto con Homeland a menos que pensara que estaría bien.
166
¿Qué le dijo?
Se asomó a la calle de nuevo. No había ninguna limusina pero ningún todo

terreno estaba a la vista tampoco.
"¿Dónde estáis?"
Tenían que haber pasado los veinticinco minutos. Parecía como si hubieran
sido horas. Era el miedo y la adrenalina. Se echó hacia atrás y miró hacia el
cielo. Se estaba haciendo más cálido por segundos. La sombra de la enorme
estatua la mantenía fuera de la luz solar directa, pero este sería un largo día si
el ONE no se presentaba. Tendría demasiado miedo de hacerse camino a
través del parque hasta que oscureciera. Bruce no parecía del tipo que
renunciara fácilmente.
Tal vez se desangrará hasta morir.
Era algo que deseaba esperar. En algún momento iba a necesitar buscar
atención médica. Dudaba que fuera a un hospital, sin embargo, a menos que él
la culpara de ser disparado y quisiera causarle dolor por informar de ello. Eso
era un concepto sombrío. La policía estaría buscándola también a ella. Se
imaginó los titulares en su cabeza. 'Mujer desquiciada dispara a pobre
guardaespaldas que estaba tratando de conseguir ayudarla'. Ella bufó.
Un sonido lejano le llamó la atención y miró hacia el cielo de nuevo. Su ritmo

cardíaco aumentó cuando se dio cuenta de lo que era. El helicóptero se acercó
y lo divisó sobre una línea de árboles. Era negro con letras blancas en la parte
lateral. Entrecerró los ojos contra el sol que estaba detrás de él, pero estaba
bastante segura de que fuera deletreó tres letras... ONE.
"Vinieron." murmuró y se apartó de la estatua.
El helicóptero voló más cerca y ella levantó los brazos, agitándolos para llamar
la atención del piloto. Parecía haberla detectado, ya que cambió de dirección.
Sin embargo, su exuberancia de gestos se atenuó un montón cuando el viento
de las aspas le arrancó el sombrero y los motores ruidosos casi la
167
ensordecieron al descender en la hierba a un centenar de metros de distancia,
entre la línea de árboles y el gran oso. Levantó su mano para proteger sus ojos
y esperó hasta que tocó el suelo.
La puerta lateral se abrió y cuatro hombres uniformados, vestidos totalmente

de negro saltaron fuera. Los rifles de asalto acunados en sus brazos no eran un
buen augurio para una cálida bienvenida. Se extendieron rápidamente,
hincaron una rodilla en tierra y apuntaron las armas hacia el exterior como si
estuvieran esperando un ataque. Ninguna de las máscaras se dirigió a ella, sin
embargo.
Una figura de traje salió el último y mantuvo la cabeza agachada hasta que
pasó las cuchillas en movimiento. Vanni le reconoció y se tambaleó hacia
delante, sin saber si debía acercarse a Justice North o huir en la dirección
opuesta. Su oscura mirada estaba bloqueada en ella y no podía faltar el
conjunto sombrío de su boca.
Ella hizo una pausa y esperó hasta que se detuviera frente a ella.
"¡Habéis venido!" tuvo que gritar.
Miró a su alrededor, hablando lo suficientemente alto para que ella lo oyera.
"Ven conmigo. Estarás a salvo."
Se movió un poco para mirar alrededor de él, en el helicóptero. Tenía la

esperanza de que Smiley viniera a buscarla, pero él no estaba allí.
"No podemos quedarnos en el suelo mucho tiempo. No nos dieron permiso.

La policía llegará pronto y probablemente los equipos de noticias."
Ella tragó saliva. Habían venido a petición suya y no era como si tuviera
cualquier otra opción. Un aterrizaje de helicópteros en un parque atraería
mucha atención. Giró la cabeza y miró a la calle. Los coches paraban y la gente
salía corriendo de las tiendas para mirar. Se enfrentó a Justice North y asintió
con la cabeza.
168
Él extendió su mano y ella la tomó. Tenía la piel caliente, eso le recordaba a
Smiley. Le siguió cuando él tiró suavemente. Sus piernas temblaban y el
sonido del helicóptero no era exactamente calmante. Nunca había volado en
uno, pero Bruce podría aparecer en cualquier momento, si aún estaba en la
zona.
Justice agachó la cabeza y la llevó hasta la puerta abierta del helicóptero. Le

soltó la mano y se agarró al suelo del área de carga, sin saber cómo subir. Era
más alto de lo que se imaginaba que sería. Ese dilema se resolvió cuando
Justice agarró sus caderas y simplemente la levantó. Ella se agarró a uno de los
asientos y trepó dentro. No fue elegante, pero estaba dentro. Su entrada hizo
que pareciera fácil cuando ella cayó en un asiento y le miró. Él sólo puso la
mano en el suelo y dio una especie de salto. Le hizo una seña para moverse a
un lado y ella lo hizo.
Los cuatro hombres uniformados se levantaron y volvieron al helicóptero.

Ellos estuvieron dentro en cuestión de segundos y la puerta se cerró. Eso no
silenció los motores o las aspas por mucho. Justice se sentó junto a ella y le
pasó un cinturón. Señaló sobre su regazo hacia el otro lado y miró hacia abajo.
Ella se ató y le vió hacer lo mismo. Uno de los hombres uniformados se sentó
junto a él, en su otro lado, mientras que tres mas se sentaron enfrente.
Ella se quedó mirando sus armas, ya que sus rostros estaban cubiertos con
escudos de cara completa y viseras polarizadas conectadas a los cascos. Todos
llevaban parches de la ONE en sus chalecos de Kevlar. El helicóptero despegó
y ella gimió en respuesta a las náuseas, sintiendo el movimiento causado. La
cosa entera pareció balancearse adelante y atrás durante unos segundos. Se
asomó, pero lamentó eso ya que se levantaron más altos que las copas de los
árboles.
Justice le tocó el brazo y se sobresaltó. Se volvió hacia él y le alargó unos

auriculares gruesos, haciendo un gesto para que se los pusiera. Ella los aceptó
y vio cómo se puso un conjunto a juego. Incluso le enseñó a empujar el
micrófono junto a su boca. Ella siguió su ejemplo.
169
"¿Puedes oírme?"
Su voz se manifestó claramente en los auriculares contra las orejas.
"Sí."
"Pareces mareada. Este modo de transporte es seguro. No mires por las

ventanas si te molestan las alturas o los movimientos rápidos. Céntrate sólo en
mí."
"Está bien."
Mantuvo su mirada fija en la de él. Tenía unos ojos bonitos y la expresión

sombría en ellos se había desvanecido.
"Soy Justice. ¿Te acuerdas de mí del hotel?"
"Lo hago."
"No pareces estar bien, Travanni. ¿Necesitas atención médica? Podemos tener
nuestros médicos esperándote cuando aterricemos."
"Es probable que sólo sea el maquillaje. Estoy bien. Asustada pero bien."
Selló sus labios. Estaba nerviosa y no quería a balbucear. Él era Justice North.
Su destino estaba en sus manos.
"No hay necesidad de tener miedo. ¿Me puedes decir por qué nos has
llamado?"
"Me retuvieron contra mi voluntad en la casa de vacaciones de Gregory

Woods anoche. Estaban planeando obligarme a decir que Smiley me drogó."
Dejó que la historia se fuera derramando. Balbuceó, después de todo, pero eso
la mantuvo distraída de la manera horrible en que el helicóptero rebotaba
alrededor. Sus dedos se clavaron en el asiento lo suficientemente fuerte para
que le preocupase que pudiera hacer daños al material de cuero.
170
"Yo no puse las drogas a Smiley." juró ella. "Dijeron que pagaron el camarero
para hacerlo. Ese tipo, Bruce, se puso los guantes, sacó un vial de vidrio y
forzó las yemas de mis dedos en su contra. Lo pusieron en una bolsa de
plástico para que Gregory me pudiera inculpar si yo no decía lo que él quería."
Las lágrimas llenaron sus ojos. Realmente quería que la creyera. Él frunció el
ceño.
"Hicimos verificaciones de antecedentes de todos los empleados. El camarero

trabajó varios turnos con otros Especies en su bar sin incidentes. Es por eso
que asumí que fuiste tú. El equipo dijo que fuiste directamente hacia Smiley
cuando entraste al bar, como si lo apuntaras."
"No me di percaté que fuera un Nueva Especie hasta después de que me senté.
Gregory dijo que tienes cementerios llenos de cadáveres en Homeland y
Reserva. Por favor, no me mates."
"Nosotros no matamos a las mujeres."
Él extendió la mano y vaciló antes de darle palmaditas en la rodilla. Fue un

gesto reconfortante. Se detuvo después de un par de golpecitos.
"Ese macho dice un montón de cosas acerca de nosotros que no son verdad."
"Gregory dijo también que pagaron a alguna mujer para sentarse con Smiley
pero ella estaba llegando tarde o algo así. En lugar de ello, me presenté yo para
interferir con su plan. Fue sólo por casualidad que elegí sentarme allí. Nunca
le daría drogas a alguien. Necesito que me creas. Odio a la Iglesia Woods y
todo lo que representa."
"¿Por qué estabas en el hotel con ellos, entonces?"
"Carl me dijo que quería hacer las paces conmigo por no pasar tiempo juntos.
Trabaja mucho. Yo pensé que sólo íbamos a estar nosotros dos, para un fin de
semana romántico. En su lugar, después de que llegamos allí, me soltó que su
padre estaba pagándonos por asistir. Quería irme pero no tenía mi coche. Carl
me engañó y luego me sentí atrapada."
171
"¿Por qué su padre os pagaba?"
"Los medios de comunicación estaban dando problemas a su padre porque

Carl y yo nunca asistíamos a su iglesia o íbamos a eventos sociales con él. Fue
una buena cosa en mi mente, ya que Gregory y yo nunca nos llevamos bien.
Supongo que Gregory imaginó que podría hacerlos callar, si fuéramos sus
invitados. Carl estaba obsesionado con el dinero y me decía que podíamos
tener una boda mejor si tan solo mantenía mi boca cerrada y sonreía para las
fotos. Ha sido un argumento constante con nosotros desde que empezamos a
planear nuestra boda. Es tradicional para la novia y su familia pagar por la
boda y los familiares del novio por la recepción. Quería cuatrocientos
invitados, pero la capilla que me podía permitir sólo tiene capacidad para un
centenar. Me negué absolutamente a casarnos en la iglesia de su padre. Nos
ofreció eso, pero fue un factor decisivo para mí."
Justice abrió la boca como si pretendiera hablar, pero luego la cerró.
"Carl dijo que su padre nos iba a pagar cincuenta mil dólares por estar en el
hotel para tomarnos fotos con él. Carl comenzó disparar culpabilidad contra
mí, simplemente por quedarnos unos pocos días. Debería haberle dejado
entonces. Digamos que llegué a ver un nuevo lado de mi ex y no me gustó ni
siquiera un poco. Me alegro de que el compromiso esté roto."
Él la miró con gravedad.
"¿Sabes por qué también te drogaron? Habría sido más eficaz si simplemente
hubieran dosificado fuertemente a uno de nuestros hombres. Habría atacado a
cualquier mujer cerca de él. Eso habría sido horrible. Experimentaron una
versión más suave de la dosis del fármaco, pero incluso Smiley habría sido
mortífero lleno de esa droga suave."
"Gregory dijo que quería una víctima para desfilar alrededor en los medios de
comunicación y mantener la historia activa. Tenía miedo de que la ONE podría
barrer debajo de la alfombra de otro modo, culpando a Mercile Industrias."
"Ese macho está trastornado."
172
"Cuéntamelo a mí. Acabo de recibir una experiencia personal y cercana con el
tipo de cabrón que realmente es. Los miembros de su iglesia piensan que es
una especie de mesías que puede predecir el futuro. Todavía estoy confusa si
sólo piensan que los Nueva Especie van a conquistar el mundo o creen que
planean matar a todo el mundo. Ni siquiera creo que ellos puedan decidirse."
"¿Por qué habríamos de matar a otros? Nos encerramos detrás de puertas

seguras para proteger a nuestra gente del mundo exterior. Vienen a por
nosotros, no al revés."
"Lo sé. Sigo las noticias."
Él se quedó en silencio y bajó la mirada hacia su regazo. El señor North parecía

muy agradable y ella odiaba repetir cualquiera de las basuras que Gregory o
sus miembros habían compartido.
"¿Planean enviar un vial con tus huellas digitales, entonces?"
Ella levantó la vista.
"Sí. Te juro que yo no lo hice, eso de drogar a Smiley y a mí misma. Fue el

camarero."
"Tiene sentido. Fuiste la única mujer acercándose a nuestro macho, pero el

camarero fue el que mezcló las bebidas. Él no tenía antecedentes penales y no
mostró odio hacia nosotros durante sus interacciones con nuestro grupo."
"Siempre hay una primera vez, ¿verdad?"
Él arqueó una ceja.
"Ya sabes, cada tipo malo fue una vez bueno, hasta que cruzó una línea. No
creo que salgan del vientre de sus madres siendo gilipollas."
Su expresión se aclaró y él sonrió.
"Me gustas, Vanni. Ya veo por qué Smiley fue tan inflexible en defender tu
inocencia."
173
Esa noticia la sorprendió.
"¿Lo fue?"
"Sí. Ha protestado nuestra suposición de que le dosificaste, pero hay que

admitir que las circunstancias hicieron que parecieras culpable. No tenías
ninguna identificación sobre ti esa noche y no estabas registrada en el hotel.
Entonces te escapaste del SUV que estaba llevándote para recibir tratamiento
médico en Homeland."
"Tenía miedo de que iba a ser arrestada por algo que no hice. Por eso me
escapé."
"Entiendo. Estaremos pronto en Homeland. Tengo que contactar con ellos, así
que estoy cambiando señales de radiodifusión a una línea segura con la ONE.
Sólo tienes que tocarme si necesitas hablar y cambiaré a la de corto alcance que
usamos para comunicar en el helicóptero para que nuestras señales no viajen."
"Gracias."
Ella cometió el error de girar en su asiento y mirar por la ventanilla. El

helicóptero voló alto y rápido, con el suelo lo suficientemente lejos para
asegurarle que morirían si se estrellaban. Hizo peor la sensación de balanceo.
Espero que lleguemos pronto o voy a vomitar. Buena cosa que no haya comido
nada hoy.
www
Smiley paseaba por el suelo. El piloto había comunicado por radio que habían
recogido a Vanni y parecía ilesa. Sin embargo, Justice no había contactado con
Seguridad, y eso lo volvió loco.
174
"Relájate." ordenó Fury. "Sabíamos que planeaba hablar con ella."
"Tendría que haberlo transmitido."
Jericho negó con la cabeza.
"¿Qué pasa si violan nuestros canales? Podría suceder. Es más seguro si alguno
de los detalles que Justice se entere de ella son seguros."
Por el momento, Smiley odiaba la lógica. No querían que nadie supiera que
Vanni se dirigía a Homeland o los sabuesos de noticias podrían pulular por las
puertas. La rueda de prensa de la Iglesia Woods debería haber comenzado ya,
pero no tenían más a Vanni. Miró el reloj.
"Se ha retrasado."
Fury pareció adivinar donde se habían dirigido sus pensamientos. Levantó su

teléfono móvil y le mostró la pantalla para enseñarle los mensajes de texto.
"Tenemos a alguien del equipo de grupo de trabajo allí, trabajando como

operador de cámara. El Predicador Woods dijo que su testigo estrella está
atascada en el tráfico." Él sonrió. "Probablemente todavía la están buscando."
"Como si pudieran encontrarla." se rió Flame entre dientes.
"No es divertido." espetó Smiley, su temperamento aleteando. "Ella podría

haber sido dañada."
"Tienes razón." Flame suavizó su expresión. "Pero está bien. El piloto no

solicitó que la asistencia médica esté esperando en el helipuerto. Me disculpo.
Todos hemos estado estresados acerca de esta situación. Es sólo un alivio que
esté en camino hacia aquí en vez de hablando con los periodistas."
Smiley asintió. Estaba aliviado al respecto también. Escuchar a Vanni decir

cosas malas sobre él en televisión habría sido un calvario que no quería sufrir.
La mujer se había metido debajo de su piel y se preocupaba por su bienestar.
Le importaba mucho cómo le viera ella.
175
"Mensaje entrante." gritó Bluebird. "Desde el helicóptero."
Todo el mundo dejó de hablar cuando los altavoces emitieron la voz de Justice.
"¿Hola?" Sonaba un poco sordo.
"No es una transmisión clara." le informó Fury.
"Entendido. Voy a poner un mensaje de texto con la información."
"Finalizó la comunicación." murmuró Bluebird.
"Me está enviando mensajes de texto." anunció Fury mientras miraba fijamente
a su teléfono.
Durante largos minutos leyó la pantalla y escribió las respuestas. Finalmente

alzó la vista y se encontró con la mirada ansiosa de Smiley.
"La tiene y están a diez minutos de aquí. Está bien. Él quiere una reunión en su
oficina."
"Me gustaría estar allí cuando aterricen."
Smiley quería ser una de las primeras caras que Vanni viera. Fury frunció el
ceño.
"Justice solicitó que te mantengas alejado por ahora."
Eso enfureció a Smiley.
"¿Por qué?"
"No la quiere en una situación más estresante. Justice solicitó que te mantengas
a distancia. No estás invitado a la reunión."
"No. Yo voy. Esto me implica."
"Ella no está en problemas, Smiley." Fury empujó su teléfono en el bolsillo.

"Justice cree que ella no fue quien te drogó. Tenemos que tener más respuestas,
y tú serás una distracción."
176
"Estará asustada."
"No la estamos lanzando en una sala de interrogatorios. Va a ser llevada por

Justice a su oficina. Estaré allí también. Él quiere limitar su interacción con
Especies en estos momentos. Dijo que está un poco estresada por toda la
situación."
"Realmente tengo que estar allí."
"La última vez que la viste fue cuando ella estaba drogada y compartisteis
sexo." Fury bajó la voz. "Puede que no sea un recuerdo agradable para ella. La
necesitamos tan libre de estrés como sea posible. ¿No quieres asegurarte de
que le gustaría verte? No podemos estar seguros de que quiera. Le hemos
ofrecido a ella santuario ante la Iglesia Woods y contra todo daño."
"Yo nunca le haría daño a Vanni." estalló Smiley. Era insultante ser excluido.
"Soy el único que sabía que no era una amenaza para la ONE."
"Parece que estabas en lo cierto. Sólo estamos pidiendo tiempo para tener las
respuestas y luego vamos a preguntarle si le gustaría verte. ¿Es eso mucho
pedir? Pareces preocuparte por esta mujer. ¿No son sus deseos más relevantes
que los tuyos?"
"Por supuesto."
"También nos gustaría llevarla al Centro Médico para examinarla. Podría estar
más cómoda sin ti flotando cerca. Te prometo que te llamaré yo mismo si ella
pide que estés presente."
Smiley todavía quiso protestar, pero ¿qué pasaba si Vanni no quería verlo? Eso
le encolerizó y, lo que era peor, eso hizo que doliera su pecho.
"Está bien. Quiero actualizaciones, sin embargo."
"Las tendrás. ¿Por qué no vas a trabajar? Eso hará pasar el tiempo."
Smiley giró lejos, antes de decir algo de lo que se arrepentiría después, y salió
de Security. Era tentador hacer caso omiso de las órdenes y simplemente
177
aparecer en el helipuerto para recibir a Vanni. Se abstuvo, sin embargo, porque
Fury había hecho un buen punto. Podría ser el último macho que ella deseaba
ver, después lo que había pasado entre ellos.
Pasó por alto los vehículos y echó a correr hacia el muro norte. Sabía las zonas
de vuelo del helicóptero y al menos quería ver eso, para asegurarse de que
llegaba sana y salva a Homeland. A pocos kilómetros después estaba sin
aliento cuando se detuvo en el muro. El macho de encima cambió su agarre en
su arma y se quitó el casco.
"¿Es algo malo?" Slash miró hacia él desde arriba.
"Te estoy relevando."
El macho arqueó las cejas.
"Nadie me lo dijo."
"Simplemente hazlo."
"¿Se trata de la mujer?"
Smiley apretó los dientes en señal de frustración.
"Sí."
"Tenemos noticias de que están volando dentro. ¿No vas a encontrarte con la
hembra cuando aterricen? Estás lejos de ella, aquí."
"Me dijeron que me mantenga alejado."
El macho puso su arma y casco hacia abajo. Luego saltó, aterrizando en

cuclillas a unos metros de distancia. El felino se enderezó y lo miró con los ojos
entrecerrados.
"Estás enfadado."
"¿No lo estarías tú?"
"¿Ella pidió que no vayas a su lado?"
178
"Justice y Fury lo hicieron."
"¿Por qué?"
"Quieren interrogarla."
"¿Vas a permitirles eso? Podrías hacer lo que hizo True, simplemente negarte a
permitirles el acceso a ella. Tuvieron a True haciendo las preguntas a Jeanie y
entrevistándola él mismo."
"¿Por qué todo el mundo sigue con eso?"
Slash vaciló y luego sonrió lentamente.
"Fue valiente y funcionó para él. True consiguió mantener a la hembra. Tal vez
por eso te pidieron que te mantengas alejado. Sospechan que podrías hacer eso
también."
No era como si él no hubiera considerado simplemente acaparar a Vanni y

mantenerla lejos de otros Especies. No se habían llevado a Jeanie lejos de True.
Darkness se había enfrentado por el macho y amenazó al equipo de grupo de
trabajo con violencia, si trataban de interferir. Él también había tenido el apoyo
de otro Especie que la había conocido de su cautiverio. Vanni era una
desconocida para todos, excepto para él.
"No quiero traumatizarla si ella no quiere verme. Puede ser que no quiera."
"Pero tú quieres verla."
"Lo hago, pero no voy a forzar la situación."
"Inteligente." asintió Slash. "¿Necesitas ayuda para subir a la pared? Dejaré que
ellos sepan dónde estás y que has tomado mi lugar." Se tocó la radio.
Smiley señaló el árbol.
"Ya la tengo."
"Ha estado tranquilo."
179
"Bien."
Slash se dio la vuelta y se alejó, desapareciendo detrás de unos grandes

arbustos. Smiley se acercó al árbol al lado de la pared y empezó a subir. Tuvo
que saltar de una rama a la parte superior de la muralla que rodeaba el
perímetro de Homeland. Los cuatro metros de ancho pasillo terminaban en
una barrera hasta la cintura. Cogió el arma de asalto descartada y el casco,
colocándose este último encima. Fijó su atención en el mundo exterior. Nada
se movía por lo que él podía ver.
Su mirada se levantó hacia el cielo. Vanni estaría volando por encima pronto,
con Justice. Pareció como si el tiempo pasara eternamente, antes de que el
sonido del helicóptero se acercara, llamando su atención. Voló por encima
suyo y él se dio la vuelta, observándolo aterrizar cerca del centro de
Homeland.
Vanni había llegado. Le dio la espalda y mantuvo una estrecha vigilancia

sobre el terreno para buscar movimientos. Lo último que quería era un ataque
llegando mientras Vanni visitaba la ONE. Estaba lo bastante enfadado en ese
momento como para matar a cualquiera que se atreviera a intentar romper el
muro en su sección.
180
Capítulo Once
Vanni odiaba la forma en que su estómago aumentó las náuseas, cuando

finalmente llegaron a Homeland. Podría haber sido causado por no haber
comido en todo el día, pero el nerviosismo mezclado con el viaje en
helicóptero parecía más lógico. Justice North sonrió alentador cuando le miró.
El helicóptero aterrizó y los guardias uniformados abrieron la puerta. Él le
hizo un gesto para que lo siguiera.
Justice salió, pero luego extendió la mano para ayudarla a bajar. Su ansiedad
aumentó cuando echó un vistazo alrededor de la zona. Al menos una docena
de Nuevas Especies uniformados la miraban fijamente, menos aquellos con
cascos y protectores faciales polarizados. Sus expresiones sombrías no eran
acogedoras y amables. Ella siguió a Justice hasta un jeep esperando.
"Toma el asiento del pasajero."
Se subió, pero se tensó cuando dos grandes Nueva Especie entraron en la parte
de atrás. Justice se deslizó en el asiento del conductor.
"Voy a llevarte primero a mi oficina. Dará a mi gente tiempo de preparar los

cuartos de huéspedes para ti y todavía tenemos unas cuantas preguntas."
"Está bien."
No era como si ella pudiera protestar. El paseo fue breve pero pasaron muchas
Nuevas Especies por la calle. Se volvieron para mirarla a medida que pasaba el
Jeep. Eso la hizo estar cohibida y replantearse por segunda vez su decisión de
llamar a la ONE. Nunca antes se había sentido tan fuera de lugar en su vida.
Justice estacionó frente a un edificio de oficinas y ella salió.
181
"Por aquí."
Él le hizo un gesto hacia la puerta principal, donde dos intimidantes Nuevas

Especies protegían la entrada. Los dos guardias de la parte trasera del Jeep
tomaron posiciones detrás de ella. La hacía sentir como si estuviera bajo
arresto. El miedo avanzó por su espalda y se esforzó por mantener la calma.
"¿Dónde está Smiley? ¿Está aquí?"
No estaba segura de si quería verle o no, pero una cara familiar podría ayudar.
"No estábamos seguros de si querías verle. Está actualmente en servicio."
"Oh."
"Podemos organizarlo para que él te visite más tarde, si lo deseas."
Vanni solo asintió, manteniendo el ritmo de Justice. Entraron en una zona de

recepción y obtuvo su primer vistazo a una mujer Nueva Especie. La alta
mujer de cabello oscuro se levantó de detrás de su escritorio.
"Jessie está en su oficina, si quieres presente una mujer para hacer esto más
cómodo."
"Dile que dije gracias, pero todo está bien. Vanni, por favor sígueme."
Vanni sonrió a la mujer, pero recibió un ceño en respuesta. Su oscura mirada

no era agradable tampoco. Se apresuró a seguir a Justice. Dos hombres
esperaban en el interior, ambos sentados en un sofá. Se pusieron de pie cuando
ella entró.
"Estos son Fury y Slade."
No podía dejar de mirar boquiabierta hacia Fury. Le reconocería en cualquier

lugar, después de toda la cobertura de noticias de la conferencia de prensa que
se había vuelto violenta. Durante semanas habían mostrado imágenes suyas
salvando a la mujer que amaba, recogiéndola en sus brazos y corriendo por la
seguridad después de que un hombre armado había abierto fuego. Le habían
182
disparado protegiendo a Ellie. La pareja se había convertido en un icono del
verdadero romance para un montón de mujeres.
"Es un honor conocerle." se las arregló para decir.
Sus ojos se ampliaron, pero él se adelantó y le tendió la mano.
"Gracias. Creo."
"Lo siento. Es sólo que… eres Fury." Se las arregló para ofrecer su temblorosa
mano.
Él tenía un agarre firme y un enérgico apretón de manos.
"Lo soy."
Vanni selló sus labios para evitar avergonzarse adicionalmente por tener un
momento 'fan-girl'. Volvió su atención sobre el segundo tipo. Parecía ser
canino, con el pelo negro azabache y sorprendentes ojos azules. Él inclinó la
cabeza, pero no ofreció su mano.
"¿Por qué no te sientas, Vanni?"
Justice rodeó su gran escritorio y señaló que debía tomar asiento en una de las
sillas de cuero. Agradecida se derrumbó en la más cercana. Justice tomó la
delantera.
"Vanni no se ofreció voluntariamente a participar en la conferencia de prensa

de la Iglesia Woods. Ellos la retuvieron en contra de su voluntad y le hicieron
amenazas. ¿Has oído algo acerca de su estado actual?"
"Lo hicimos." Fury volvió a sentarse. "Han retrasado las declaraciones a la

prensa. Hemos recibido muchas llamadas pidiendo comentarios. La Iglesia
Woods tiene mal aspecto después de no cumplir lo que prometieron."
"Bien."
Justice levantó la mano y se aflojó la corbata.
183
"Diles quien os drogó a ti y a Smiley, Vanni."
Tragó saliva y sostuvo la mirada oscura de Fury. Tenía bonitos ojos y no

fulmino con la mirada la.
"El camarero. Gregory dijo que le pagaron para hacerlo e incluso me dijeron el
nombre de la droga."
Justice gruñó suavemente y Vanni lo miró, alarmada. Parecía furioso.
"No me dijiste esta parte."
"Lo siento. Gregory dijo que pagaron a alguien casi setecientos mil dólares por
el B-47. No me dijo el nombre real de la droga, pero así fue como él la llamaba.
Dijo algo acerca de un lote y dejó muy claro que no pensaba muy bien del tipo
al que se la compró. Nunca dijo su nombre."
"El camarero trabajó allí durante tres años sin tener jamás ninguna queja
contra él. Yo mismo comprobé doblemente todos los registros de empleados
de cualquiera que trabajase en la sala en el momento del incidente." Slade sacó
el teléfono móvil del bolsillo de su camisa. "Voy a mandar a Tim un SMS para
recogerlo."
"Haz eso." estuvo de acuerdo Justice. "Tranquilamente."
"Por supuesto."
Slade se centró en su teléfono. Justice se aclaró la garganta.
"¿Estás bien, Vanni? Estás pálida."
"Estoy fuera de mi elemento." admitió. "¿Estoy bajo arresto? Juro que no sabía
nada acerca de lo que planeaban hacer en el hotel. Sólo me enteré de lo del
camarero y todo eso ayer por la noche, después de que Carl y su padre se
negaron a dejar que me fuera."
"No eres nuestra enemiga. Estamos dispuestos a creerte. Actualmente eres

nuestra invitada en Homeland. "
184
Las palabras de Justice fueron reconfortantes, hasta que él habló de nuevo.
"A menos que descubramos que estás mintiéndonos."
"No miento. Todo lo que he dicho es la verdad."
"Vamos a llegar al fondo de esto." prometió.
"Tal vez no debería haber venido aquí. Vi la forma en que algunos de tu gente
me miraban."
"La Iglesia Woods ha sido poco amable con la ONE y no estaban seguros de si
eras miembro o no. Word difundirá por qué estás aquí y van a calmarse
contigo." Justice hizo una pausa. "Tengo curiosidad por algo. ¿Por qué no han
utilizado el nombre de Smiley todavía? No se ha mencionado en absoluto
durante cualquiera de las coberturas televisivas."
"Bruce me preguntó su nombre esta mañana, pero yo le mentí. Le dije que no

me acuerdo. Él no me creyó, pero luego esas horribles mujeres se presentaron,
por lo que no tuvo tiempo para obligarme a hablar." entró en más detalles
acerca de su terrible experiencia antes de su rescate. "Le dije a mi mejor amiga
que se escondiera y le pedí que les dijera a mis padres que hagan lo mismo. No
crees que Gregory tendrá a alguien yendo detrás de mi hermana o hermano,
¿verdad? Se encuentran en otros estados."
"Podemos enviar equipos para asegurarlos si lo deseas. Estarán reubicados en

un buen hotel y puestos en custodia para su protección."
Ella vaciló. Una semana antes se hubiera reído si alguien hubiera deducido
que Gregory era un peligro para su vida y para la gente que más amaba.
Nunca había imaginado que él era capaz de todo lo que había hecho hasta
ahora.
"Por favor. Estoy preocupada por ellos. Mi hermana estará sola en casa con sus
dos hijos mientras su marido está en el trabajo. No me preocupo mucho por mi
hermano, ya que él es policía y sé que viven en un edificio muy seguro. Beth
185
está muy bien dónde está y también mis padres. Gregory no será capaz de
encontrarlos."
Justice retiró una libreta de un cajón y la empujó encima de la mesa con un

lápiz.
"Anota las direcciones para que podamos alcanzar a tus hermanos. Te doy mi
palabra de que estarán cómodos y seguros."
Anotó las direcciones de su hermano y su hermana. Sus padres habrían huido

a la cabaña del mejor amigo de su padre. Ambos veraneaban allí cada verano.
Empujó la libreta con la información a través de la mesa para Justice y le
devolvió el bolígrafo.
"Gracias."
Slade se acercó y levantó la libreta.
"Estoy con esto." Se fue.
"Necesitamos parar los rumores que la Iglesia Woods ha creado." declaró Fury.
Justice asintió y miró a Vanni.
"Ellos informaron a todos los medios de prensa que ibas a anunciar que habías
sido drogada y violada por un hombre Especie. Quieren a Smiley procesado
en sus tribunales humanos."
"¿Eso está en las noticias?" se horrorizó. "¡No es verdad!"
"Estamos al tanto."
"Gregory está loco. Anticuado-retrogrado, pervertido-pajillero cabrón."

suspiró. "Nunca me gustó, pero Carl parecía muy diferente de su padre. Ahora
tengo los ojos abiertos. Carl hace todo lo que su padre le dice que haga. Él sólo
se fue y me dejó allí con su padre y Bruce. Nunca debió preocuparse por mí en
absoluto, para ser capaz de hacer eso. Parecen obsesionados con la destrucción
de los Nueva Especie a cualquier precio."
186
Los rasgos de Justice se suavizaron.
"Gregory Woods y sus seguidores realmente odian a la ONE. Tratamos de no

tomarlo como algo personal. Tal vez deberías hacer lo mismo. No eras la mujer
que ellos pretendían drogar."
Vanni no pudo seguir su consejo. Era personal, al menos después de que había
estado prisionera y amenazada. Carl había jurado que la amaba, pero no había
pestañeado cuando ella estuvo en peligro. Quería vengarse de ellos y hacerles
pagar por lo que habían hecho.
"¿Me necesitas para hablar con los periodistas?" Se abrazó a su cintura. "Los he
evitado, ya que el video fue difundido por toda la televisión, pero lo haré si
eso limpia el nombre de Smiley."
Sus padres enloquecerían si se enteraban de esto en las noticias. Se

preguntarían si les había mentido sobre los limitados detalles que había
compartido con ellos acerca de esa noche. Había sido más fácil permitirles
asumir que simplemente bebió demasiado y se enganchó con alguien en un
bar.
Fury habló.
"He estado hablando por teléfono con nuestro equipo de relaciones públicas
durante toda la mañana. Les informé de que Vanni estaba de camino y ellos
recomiendan que no tenga ningún contacto directo con los medios de
comunicación donde puedan hacerle preguntas."
"Sabio consejo." asintió Justice. "Pueden ser brutales."
"Miles sugirió una salida con los dos, pero manteniendo a la prensa a una
distancia saludable. Pueden fotografiar a Smiley y ella juntos. Eso
desacreditará a Gregory Woods, cuando sean vistos en una relación amistosa."
"Estoy de acuerdo."
Justice la estudió durante un largo rato.
187
"Necesitará ropa. Podríamos enviar dos equipos de apoyo con ellos para
llevarla de compras mañana. Eso nos dará tiempo suficiente para instalarla y
no tendrá que filtrarse a la prensa. Los humanos siempre informan nuestros
avistamientos, de modo que eso nos permitirá unos quince minutos antes de
que los equipos de paparazzi y noticias lleguen a la escena."
"Buena idea." Fury se removió en su asiento. "No olvidarse los sitios de redes
sociales. Los humanos podrán sacar fotos de ellos y subirlas desde sus
teléfonos. Van a suponer que están saliendo, sin embargo, si se les ve a ambos
juntos de nuevo."
Vanni les escuchaba conversar, un poco sorprendida por la declaración de

Fury.
"Pero no lo estamos."
"Es mejor que les permitamos asumir que estás en una relación romántica con
Smiley, dado lo que se les ha dicho hasta ahora."
Ella no pudo disputar el sentido de eso.
"Claro."
"Vamos a programar esa excursión." Justice se puso de pie.
"¿Qué va a tener que decir Smiley acerca de este plan? Quiero decir, es
probable que no quiera pasar tiempo conmigo después de lo que pasó."
Se ponía nerviosa sólo de pensar en volver a verlo. Al parecer, Justice no

necesitaba tiempo para pensar en su respuesta.
"Smiley estará muy conforme en llevarte de compras. Ha estado preocupado

por tu bienestar."
188
Vanni no estaba segura de cómo iba a reaccionar al ver a Smiley, pero limpiar
su nombre era lo suficientemente importante para estar de acuerdo con
cualquier cosa que la ONE propusiera.
"Está bien."
"Estás a salvo aquí con nosotros, Vanni." Le sonrió Justice. "Relájate. Pareces
nerviosa y no hay necesidad. Vamos a garantizar tu seguridad y mantener a la
prensa lejos de ti mañana. Nos ocupamos de ellos a menudo."
"Estoy segura de que lo hacéis. Siempre están diciendo algo acerca de vosotros
en la televisión."
"Estamos contentos de que permanezcas con nosotros. Nos gustaría que

nuestro personal médico a te echara un vistazo. Te dieron una versión de la
droga de cría y me dijiste que fuiste disparada con un Taser."
"Estoy bien. Realmente preferiría evitar los médicos en este momento. Sólo
quiero una ducha, comer y dormir."
"Tal vez más tarde estarás de acuerdo." Justice no parecía contento con su
negativa, pero no discutió. "Tendré a uno de nuestros hombres
acompañándote a la vivienda de invitados."
Estaba siendo despedida.
"¿Vas a hablarme de mi familia cuando los lleves a un hotel? Me gustaría

saberlo cuándo estén a salvo."
"Por supuesto." Justice inclinó la cabeza. "Estoy seguro de que estarán

preocupados por ti, también. Les aseguraremos que estás a salvo."
"Gracias."
"Agradeceríamos si les das la impresión de que estás aquí para visitar a

Smiley. La última cosa que necesitamos es tener a tu familia asumiendo que te
estamos manteniendo aquí en contra de tu voluntad y pidiendo a la policía
que intervenga."
189
Ella asintió con la cabeza.
"Por supuesto. No van a estar contentos con esto, pero no quiero que se
preocupen."
"¿No les gustan las Especies?"
Los ojos de Justice se entornaron sospechosamente.
"No es eso. Estarán felices si creen que estoy saliendo con alguien, pero les
preocupará que salté en una nueva relación demasiado rápido. Me
comprometí hace unos días. Les gustaba Carl. Nos tenía a todos nosotros
engañados."
"Entiendo".
"Puedo vender esto, sin embargo." estaba segura de ello. "Voy a decirles lo mal
que Carl me trató en el hotel y que no voy a ser más 'fan' suya. No quiero que
sepan acerca de lo demás, ya que les trastornaría demasiado. Les contaré que
Carl y su padre inventaron esas mentiras, si escucharon algo sobre lo que filtró
la Iglesia Woods."
"Gracias. Te transmitiremos sus llamadas una vez que los hayamos asegurado
en un lugar seguro." prometió Justice. "Agradeceríamos que no hagas ninguna
llamada saliente. Deberías saber que estarán monitoreadas. Todas las llamadas
lo están. No es personal."
No tenía ni idea de por qué harían eso, pero no tenía nada que ocultar.
"Necesito llamar a Beth. Hemos sido mejores amigas desde que éramos niñas y
quisiera asegurarme de que está a salvo con Elvis."
Las cejas de Justice se dispararon.
"No el real. Está muerto. Es un tipo con el que sale a veces. Él se hace pasar por
Elvis para eventos de caridad. Nosotras sólo bromeamos llamándolo así. Su
verdadero nombre es Mickey."
190
"Está bien."
Alguien entró en la oficina y Vanni se volvió. Su boca se descolgó cuando miró

boquiabierta al Nueva Especie construido tan masivamente. Tenía un inmenso
pecho y voluminosos brazos musculosos, pero fueron sus ojos de los que no
podía apartar la mirada. Eran de color marrón con reflejos rojos en ellos.
"Este es Jericho." dijo Justice mientras fijó al hombre con una mirada atenta.
"No estoy seguro de por qué está en mi oficina, pero me gustaría saber la
respuesta a eso ya que se trataba de una reunión a puerta cerrada."
El tipo no apartó la mirada de Vanni. Su mirada fija redujo sin embargo, y

parecía estudiar cada centímetro de ella de pies a cabeza.
"Soy amigo de Smiley. ¿Hay algún problema? "
"No. Estaba a punto de tenerla escoltada a la vivienda de invitados. ¿Tal vez

quieras hacer ese trabajo? "
"Sólo quería asegurarme de que todo estaba bien." Él cruzó los brazos sobre el
pecho y dirigió su mirada Justice. "¿Está bien?"
"No está acusando a Smiley de nada y está dispuesta a ayudarnos a resolver

este lío." suspiró Justice. "Dile a Smiley que tenía razón. Tengo llamadas
telefónicas para hacer. ¿Puedes organizar el transporte?"
La postura tensa de Jericho se relajó.
"Por aquí, señorita Abris."
"Sólo Vanni."
Mantuvo un par de metros entre ellos cuando le siguió fuera de la oficina, por
el pasillo y salió por la puerta principal. Los dos guardias seguían apostados
allí. Jericho detuvo a uno de ellos.
191
"Escóltala a la vivienda humana y asegúrate de que tiene todo lo que necesita."
Se volvió hacia ella. "Tengo algo que necesito hacer. Disfruta de tu estancia
aquí. Este es Wager. Te tratará bien."
"Gracias."
Jericho era amigo de Smiley y quería preguntarle un montón de cuestiones,

pero se resistió. Era una persona que daba miedo con esos inusuales ojos. Su
curiosidad por el bienestar de Smiley podía esperar.
Observó a Jericho andar a grandes pasos hacia un jeep y conducir alejándose.

Wager se aclaró la garganta y ella se dio la vuelta, mirando hacia él. Era rubio,
alto y tenía unos bonitos ojos de gato.
"Bienvenida a Homeland, señorita Abris. Tengo un coche estacionado un poco

más allá y te llevaré a la vivienda humana. Tu cabaña ha sido abastecida."
"¿Cabaña?"
"Es como llamamos a las viviendas de las áreas de residencia para Especies y
Humanos."
Él era lindo cuando sonreía.
"¿Vivienda humana? ¿No eres también humano?" lamentó preguntar eso pero
ya estaba fuera. "Lo siento. Espero que eso no sea un insulto."
"No lo es. Animamos a las preguntas. Somos humanos, pero también somos
más. Soy un Especie felino." Él le ofreció el brazo. "Vamos, señorita Abris.
¿Puedo llamarte Travanni?"
"Sí, pero sólo Vanni. Nadie me llama Travanni, excepto cuando estoy en
problemas." Estaba realmente fuera de su elemento. "No estoy en problemas,
¿verdad?"
"No que yo sepa."
192
Puso la mano sobre su antebrazo y él la condujo a un notable carrito de golf.
Notó varios de ellos en las inmediaciones mientras tomaba asiento.
"¿Tenéis un campo de golf?"
"No." Él la soltó, se subió en el asiento del conductor y encendió el motor.

"Tenemos tres tipos de vehículos en Homeland y Reserva. Usamos los SUV
cuando salimos de las tierras de las ONE, pero los jeeps y carros de golf son
para viajar en el interior de las puertas. Solemos usar más carritos de golf aquí
en Homeland que en Reserva. El terreno allí es más duro en algunas áreas."
Se relajó en el asiento.
"Gracias por ser amable conmigo."
Volvió la cabeza y esbozó una sonrisa.
"Me siento como si te conociera en parte."
Apretó el acelerador y despegó, conduciendo el coche alrededor de la calle.
"No entiendo."
"Te vi en la televisión con Smiley." Él apartó la mirada de la carretera para

dirigir su mirada por su cuerpo. "Pareces más pequeña en persona que en mi
televisión."
Ella se encogió.
"¿Viste eso?"
"Todo el mundo lo vió."
Ella apartó la vista para mirar a los edificios que pasaban, pero eso sólo la hizo
consciente de cuanto llamaron la atención de los Nuevas Especies. Dos
hombres de pie delante de un edificio la estudiaron de manera abierta y luego
otro detuvo su Jeep para obtener una mejor visión de ella. Comenzaba a
arrepentirse de haber llamado a la ONE.
193
Era tentador preguntar si Wager la llevaría a la salida, pero no tenía donde ir y
sin dinero no podría llegar a sus padres. Simplemente le harían un montón de
preguntas que no quería responder.
Para bien o para mal, estaba atrapada en Homeland.
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Smiley merodeaba la pared, alerta a cualquier movimiento en el otro lado.

Vanni estaba a salvo en Homeland. Fury hizo argumentos válidos, pero no se
sintió bien con el hecho de que él no estaría allí cuando fuera interrogada en
detalle acerca de la Iglesia Woods. Podría estar asustada.
El gemido que escapó de sus labios le aseguró que probablemente era mejor
que no estuviera presente. Vanni le afectaba demasiado fuerte. No podía ser
lógico cuando el instinto le instaba a proteger a esa mujer.
El sonido de un Jeep acercándose lo sacó de sus pensamientos y se volvió.

Jericho aparcó cerca de la base de un árbol, junto al muro. Esperó hasta que el
macho subió y saltó los cinco metros, aterrizando con gracia en la pasarela
junto a él.
"¿Está ella bien? Justice y Fury no la están intimidando, ¿verdad? Fury

prometió que haría lo posible por bajar el tono."
Jericho frunció el ceño.
"¿Qué?"
Smiley se arrancó el casco y se apoderó de su arma más potente.
194
"¿Ha pasado algo? ¿Los médicos encontraron algo malo en ella?"
"Ella no aceptó ir al Centro Médico, pero está bien. Wager está llevándola a la
vivienda humana en este momento. Le asigné ese deber yo mismo."
"¿Wager?" Smiley sintió que su rabia se construía. "Va a coquetear con ella. Ese
macho siempre está hablando de cómo quiere encontrar una humana para
darle hijos."
"No es idiota. Todo el mundo ha visto ese video. Va a suponer que lucharías
con él si intenta tocarla."
Smiley frunció el ceño, debatiendo si Wager sería tan tonto como para
ofrecerse para compartir sexo con Vanni. Sería un error.
"Voy a ir a verla ahora." Él tomó su radio. "Estoy llamando a alguien para

tomar mi lugar en este puesto."
"¿Por qué crees que vine? Me ocuparé el resto de la jornada."
Smiley empujó su arma y su casco a Jericho.
"Gracias. Eres un buen amigo."
"Vete a casa, dúchate y no uses tu uniforme cuando veas a la mujer."
"¿Por qué?" Él miró hacia abajo. "¿Huelo mal? ¿Tengo mal aspecto?"
"No estás sudoroso, pero creo que ya ha visto lo suficiente de nuestros oficiales
hoy. Debes vestirte informal, tan sólo eres un hombre para ella. Parecía un
poco abrumada. Dale un poco de tiempo a solas primero."
"¿Está asustada?" Su intestino se retorció. "Me necesita."
"No me estás escuchando." Jericho sonaba molesto.
"Ella está aquí sola. Soy el primer Especie que nunca conoció. Fue retenida
contra su voluntad y tuvo un día traumático entre escapar de ellos y venir a
Homeland. Tengo que hacerle saber que está a salvo."
195
"Estás siendo irracional." La voz de Jericho se profundizó cuando continuó:
"Soy tu amigo y necesitas confiar en mi juicio."
Smiley no disfrutó de escuchar el consejo.
"La última cosa que necesita esa mujer es tenerte llegando con tus emociones a
flor de piel. Dúchate, relájate y luego vete a verla, cuando no estés en modo
protector."
"No la asusté antes."
"Escuché todo lo que ocurrió en la oficina de Justice. Parecía nerviosa por

volver a verte."
"¿Escuchaste?"
Jericho se encogió de hombros, sosteniendo el rifle.
"Mi audición es buena y quería saber si era realmente tan intachable como
creías. Ella no esconde bien sus emociones cuando habla. Disimula incluso
menos eficazmente con sus expresiones. Ya veo por qué estabas convencido de
que no te drogó."
"¿Hablaste con ella?"
"No mucho. Pude detectar sus emociones mientras respondió a las preguntas y
luego vi su expresión cuando entré en el despacho de Justice. No fue capaz de
ocultar su miedo de mí. Se lee fácilmente."
"¿La asustaste?" Smiley se tensó.
"Fue por mi tamaño y parecía confusa acerca de mis ojos. Me pasa mucho,
pero los humanos tratan de ocultar sus reacciones después de un segundo. Ella
no fue capaz de hacerlo. Sigue mi consejo y mantén la tranquilidad cuando la
veas. Toma las cosas con calma, Smiley. No es una de nuestras hembras. No te
olvides de eso. Me recordó a un gatito asustado. No pasé tiempo con ella
porque era consciente de su miedo hacia mí. Wager pone los humanos a gusto
196
con su personalidad amable, por eso la pasé a su cuidado. Tiendo a asustar a
los humanos cuando hago esto."
Jericho le sonrió, mostrando los dientes.
"Te ves amenazador."
"Lo sé."
Smiley respiró hondo.
"Me iré a casa y me ducharé. ¿Debo llevar vaqueros y una camiseta? ¿O

pantalones y una buena camisa de vestir?"
"Lleva ropa de deporte. Ella apreciará el espectáculo de los músculos de tus

brazos. A las humanas parece que les gusta eso."
Él recordó su reacción en el bar cuando se había quitado la chaqueta y sonrió.
"Tienes razón."
"Toma las cosas con calma, Smiley. Sé que quieres a la hembra, pero es
asustadiza."
"Entendido."
Rodeó a Jericho y saltó, aterrizando en una gruesa rama de árbol y bajó

rápidamente. Levantó la vista y señaló el Jeep.
"Cógelo." gritó Jericho. "Dejé las llaves en el encendido. Tu reemplazo contará

con un vehículo, así que no tendré que correr hasta casa."
Smiley se deslizó en el asiento del conductor y encendió el motor. Su primer

instinto fue dirigir el coche hacia la vivienda humana, pero empujó esas ganas.
Tendría que seguir el consejo de Jericho. Admitió ser un poco irracional,
cuando Vanni estaba implicada. No podía esperar a verla de nuevo, pero una
ducha y cambiarse de ropa realmente parecía una buena idea.
197
Capítulo Doce
Vanni reflexionó sobre su conversación con Wager. Le había jurado que no era
una prisionera en Homeland. Le había dado un paseo por la casa de dos
dormitorios, diciéndole que estaba provista de alimentos y había ropa en el
armario, antes de dejarla por sus propios medios. Unos minutos más tarde,
llamó a su puerta, entregándole el almuerzo. Se había comido el bocadillo y las
patatas fritas con gusto.
El teléfono en el mostrador tenía tono de llamada cuando lo probó. Marcó el

número de Elvis, después de conseguirlo en información, y se sintió aliviada
cuando Beth respondió al primer timbrazo.
"Soy yo." Vanni se alegró al oír su voz. "Estás a salvo. Estaba muy
preocupada."
"Bueno, yo todavía estoy preocupada. ¿Dónde estás?"
"En Homeland. Seguí tu consejo."
"¿Debo ir allí? Mickey podría llevarme."
"No. Estoy bien." echó un vistazo alrededor de la espaciosa casa. "Me están
tratando realmente bien y me han alojado en una casa. Es mejor que un hotel."
"¿No te culpan por drogar a ese tipo, Smiley?"
"No."
"¿Está contigo?"
198
"No le he visto todavía, pero lo haré mañana. No tengo nada de ropa, así que
me va a llevar de compras."
La voz de Beth bajó.
"¿Estás bien? ¿En serio?"
"Estoy bien. En serio. Fueron muy amables y me recogieron en un helicóptero."
"Guau. ¿Conseguiste montar en uno de esos?"
"No fue tan divertido. Confía en mí. Me sentí un poco enferma por el
movimiento. Vuelan más rápido de lo que pensé que lo harían. Tuve la
oportunidad de conocer a Fury North."
"¿En serio? ¿Es tan genial como parece? ¿Estaba Ellie con él?"
"No llegué a conocerla, pero él fue muy agradable."
"Debería ir contigo." afirmó Beth. "Estás sola. Yo estaría aterrorizada en tu

lugar."
"Todo el mundo está siendo muy agradable. Incluso me trajeron el almuerzo.

Estoy muy bien. Sólo llamé para asegurarme de que llegaste bien hasta Elvis y
que ese matón de Gregory no llegó a ti."
"Los policías vinieron y registraron el apartamento. Culparon a esos

asquerosos paparazzi, pensando que uno de ellos podría haber intentado
entrar dentro para tomar fotografías. Me escoltaron hasta mi coche, después de
que les dije que no quería quedarme allí. Hice exactamente lo que me dijiste.
Tuve a Mickey reuniéndose conmigo en un estacionamiento y él me trajo aquí.
Dejé mi móvil bloqueado en mi guantera, en lugar de dejarlo en casa. Quería
asegurarme de que mi familia no se asustase, si no podían ponerse en contacto
conmigo. Los llamé mientras esperaba."
"No pensé en eso."
199
"Tenías otras cosas en tu mente, como el tipo de malditos cabrones que son
Carl y su padre. ¿Lograron esos bastardos hacerte daño?"
Vanni se debatió en entrar en detalles, pero lo desestimó. Beth enloquecería si

oía que le habían disparado con un Taser o si le repitiese las amenazas de
Bruce.
"Estoy bien. Realmente. Sólo planeo dormir. Estoy agotada."
"Suenas así."
"Sólo tuve unas pocas horas de sueño la noche anterior y el suelo era
incómodo."
"¿Te hicieron dormir en el suelo? Esos hijos de puta."
"Había una cama, pero es una larga historia. No iba a tocarla."
"Está bien." vaciló Beth. "Puedo ir contigo si quieres que vaya. No me

molestaría. De hecho, me sentiría mejor."
"Quédate ahí. Estoy muy bien. Sólo voy a dormir. No hay ningún punto en
que conduzcas hasta aquí solo para verme dar cabezadas."
"Dame el número de teléfono. El identificador de llamadas no ha revelado

ninguno."
Vanni estudió el teléfono. No estaba identificado.
"No lo conozco."
"Supongo que podría llamar a Homeland y me podrían conectar con contigo,

¿verdad?"
"Supongo que sí." Vanni no estaba segura. "Tengo que cortar aquí, porque aun
no sé si tienen llamada en espera. Justice North prometió enviar a alguien a las
casas de Mia y Count para asegurarse de que sus familias están a salvo. No
quería que Gregory enviara matones tras ellos. Alguien me va a llamar para
hacérmelo saber."
200
"Verdaderamente odio a esa rata bastarda."
"Yo también. ¿Has sabido de mamá y papá? "
"Despegaron en su caravana. Tu padre estaba preparado para engancharla,

después de que le dije lo que estaba pasando. Estarán de camino a la cabaña,
pero ya sabíamos que ahí es donde irían. Estarán ya sea en casa o allá arriba.
Es la época."
"Lo supuse."
"Me hicieron darles el número de Mickey y tu madre sigue llamando cada vez
que se detienen para repostar. Se deshicieron de sus móviles. Les diré que
estás en Homeland."
"Por favor, no lo hagas. Pueden aparecer por aquí."
"Eso es cierto."
"Sólo diles que estoy a salvo. Pueden comprar uno de esos teléfonos móviles
de bajo costo, con esas tarjetas por minutos. Habla a mi padre sobre eso y
tendrá que darte el número. Diles que los llamaré mañana. Es sólo que no
quiero tratar con ellos en este momento. Ya sabes cómo pueden ser."
"Chico, yo también Tu madre me preguntó si vas a los bares a menudo y

recoges a los extraños."
Vanni se encogió.
"Genial. Ellos piensan que soy una puta."
"Les dije que era tu primera vez." se rió Beth entre dientes. "Y la última. Le
aseguré que no necesitas rehabilitación. Le preocupaba que pudieras tener un
pequeño problema con la bebida del que no estuvieran al tanto."
"¿Es una broma?"
Beth se echó a reír.
201
"Nop. También les dije que era tu primera y última noche en vela, también.
Nosotras, chicas locas, tenemos que probar algunas cosas al menos una vez.
Eso pareció conformarles y calmarles un poco."
"No estás ayudando, Beth."
Estuvo en silencio durante unos segundos.
"Estoy ya sea riendo o llorando. Mickey entra en pánico y comienza a empujar

el chocolate hacia mí si ve asomar las lágrimas. Le dije que esa es la mejor
manera de lidiar conmigo si tengo el síndrome premenstrual y ahora piensa
que es una panacea cuando estoy molesta. El tío es adorable total, pero no
quiero acabar ganando diez kilos esta semana."
"¿No le importa que te quedes allí?"
"¿Estás bromeando? Ha llamado a su trabajo para tomarse tiempo libre y

poder jugar al guardaespaldas personal, después de que le conté lo que estaba
pasando. Incluso sacó el bate de béisbol para golpear algunas cabezas si
alguien se presenta aquí a buscarme. Está pasando una abundante sobrecarga
de testosterona. Es algo mono. No sabía que estaba tan defensivo por mí."
"Te dije que estaba enamorado de ti."
"No estoy lista para sentar cabeza, pero me está haciendo reconsiderarlo."
Vanni estaba feliz de que Beth estuviera bien.
"Sólo procura estar a salvo."
"Lo estoy. Tengo al 'hombre del bate'. Suenas agotada. Vete a dormir y llámame
cuando te despiertes. Quiero saber de ti a menudo."
"Lo prometo. Te quiero."
"Yo también te quiero."
Vanni colgó el teléfono. En ese momento sólo quería estar limpia y echar una
siesta. Se dio una ducha rápida y salió del cubículo, utilizando dos toallas para
202
secarse. La casa estaba muy bien, totalmente amueblada e incluso habían
equipado el baño con todos los elementos personales que una persona podría
necesitar. Tenía champú y acondicionador para el cabello, gel de baño y hasta
un nuevo cepillo de dientes con pasta de dientes para cepillar sus dientes. Lo
hizo a continuación.
Salió del baño y se acercó a la cómoda, sin saber qué tipo de ropa se iba a
encontrar. Debía ser mejor que la áspera camiseta y pantalones cortos que
había comprado en la tienda de descuento. El cajón superior contenía unas
cuantas camisetas con el logotipo ONE, cuidadosamente dobladas. Sacó una y
le gustó la sensación del suave material. Era un tamaño triple grande. Una
investigación de los demás cajones reveló algunas camisetas, pantalones y
shorts. Ninguno de ellos era ni siquiera cercano a su pequeño tamaño. Suspiró
y se puso la enorme camiseta. Cayó hasta sus muslos como si se tratara de un
camisón.
Había un guardia apostado fuera de su puerta por si necesitaba algo, pero

decidió esperar un poco antes de preguntar si tenían algo que le encajara
mejor. No podía ir de compras con Smiley apenas vestida con una camiseta
holgada.
La cama era grande y estaba ansiosa por trepar debajo de las sábanas y dormir.
Un vistazo a la mesita de noche le aseguró que no se perdería la llamada de su
familia cuando llegara.
La aprensión golpeó cuando oyó un ruido en la sala de estar. Se giró y se

deslizó hacia el pasillo. Un rápido vistazo por algo para utilizar como un arma
no produjo ningún resultado.
"¿Hola?" Esperaba que su miedo no sonara en su voz.
Vanni se quedó sin aliento cuando un hombre entró en su línea de visión. Ella
saltó y chocó contra la pared. Un par de atractivos ojos marrones le
devolvieron la mirada y se calmó, una vez que reconoció a Smiley. Fue una
sorpresa para ella verle dentro de la casa, pero su miedo se evaporó.
203
"Llamé, pero no contestaste."
Ella dio un vacilante paso hacia adelante, su corazón haciendo todavía un alto
número en su pecho.
"Estaba en la ducha."
Permaneció inmóvil. Ella lo estudió de pies a cabeza. Su pelo estaba mojado y

se veía como si también se hubiera duchado recientemente. La camiseta sin
mangas de color rojo oscuro acentuaba su bronceado, sus musculosos brazos y
su ancho pecho. Se había metido en un par de jeans denim desteñidos que
abrazaban sus caderas y sus muslos. No llevaba zapatos y la vista de sus pies
descalzos la sorprendió. Su mirada se levantó a su rostro. Era tan guapo como
lo recordaba. Sus labios se separaron.
"No tengas miedo, Vanni. Por favor, no te encierres en uno de los dormitorios
y bloquees la puerta. Estaba preocupado y quería comprobar sobre ti."
Ella asintió con la cabeza. Él la hizo ser consciente de su propio cuerpo y del
hecho de que sólo llevaba una camiseta holgada. Ni siquiera tenía ropa interior
limpia, por lo que no llevaba ninguna en absoluto.
Smiley levantó una mano y le hizo una señal de acercarse.
"¿Quieres venir a la sala y hablar conmigo? Has pasado por un calvario. ¿Estás
bien?"
Eso fue dulce de su parte. Dio otro paso más y luego otro. Mantuvo el gesto
todavía, acababa de dejar caer el brazo a su lado. Se detuvo a unos metros de
distancia. Él sonrió, su expresión se suavizó. Se animó a responderle.
"Estoy un poco cansada. No dormí mucho anoche."
"Debes dejar a nuestros médicos revisarte. Son excelentes en lo que hacen."
"No necesito un médico. De verdad. Sólo tengo algunos moratones de los

dardos Taser y de la caída."
204
La sonrisa desapareció y un gruñido bajo salió de él. Parecía furioso de
repente.
"¿Quién te disparó con un Taser? ¿Qué caída?"
"Gregory Woods. Hizo que su guardia me aturdiera y me golpeé contra el

suelo. Pensé que te enteraste de eso. Quiero decir, se lo dije a Justice."
"No he hablado con él." Su mirada viajó por su cuerpo. "¿Dónde estás herida?"
"Mi espalda. Estaba tratando de escapar por la puerta principal cuando fui
alcanzada con una de esas pistolas que disparan dardos eléctricos. Realmente
no es tan malo."
Smiley dio un paso más cerca, casi tocándola.
"Déjame ver."
Olía a jabón y a hombre. Eso agitó instantáneos recuerdos de la última vez que
había estado tan cerca. Levantó la barbilla para mantener su mirada fija con la
de él. Tenía unos ojos realmente hermosos y se sentía perdida en ellos. La luz
del sol, que entraba por las ventanas, mostró pequeños remolinos de color
marrón más oscuro en ellos. Eran verdaderamente impresionantes.
"Déjame ver." Su voz era casi un susurro.
Vanni tuvo que forzar su mente a trabajar, recordándose a sí misma lo que

quería ver. La atracción que sentía por él la tenía un poco aturdida. Imágenes
de los besos y lo que habían hecho en el SUV se mantenían parpadeando a
través de su mente, lo que hacía difícil concentrarse en sus palabras.
"Estoy bien. Es sólo cosa de menor importancia. De veras."
"Vanni." dijo con voz áspera "Déjame ver."
Obligó a sus piernas a moverse y retrocedió un paso.
"Um, es mi omóplato." Sus manos se abrieron contra sus muslos, el tacto de la

tela allí era reconfortante. "No puedo."
205
"¿Por qué no?"
"No tengo nada debajo de esto. No quería ponerme el único par de bragas que
tengo hasta que pueda lavarlas."
Echó un vistazo a sus muslos y luego volvió arriba.
"Todavía quiero ver."
Ella tragó saliva.
"Estaría desnuda."
"No tengo un problema con ello. Me gustaría disfrutar eso. "
Whoa. Él realmente dijo eso.
No estaba acostumbrada a que los hombres fueran tan francos.
"Te he visto antes."
Como si necesito un recordatorio.
Más destellos de esa noche le vinieron a la cabeza. Smiley sin su camisa

después de que ella se la había roto él. Él inclinándose sobre ella, sus labios
rozando besos a lo largo de su cuello. Sus pezones se erizaron cuando le
recordó mordiendo su hombro con los dientes. Rápidamente cruzó los brazos
sobre su pecho para cubrirlos con la esperanza de que él no se diera cuenta.
"Um..."
Su mente se quedó en blanco. Él avanzó hacia adelante.
"Estás sonrojada."
Podía sentir el calor en sus mejillas.
"Um..."
Ella retrocedió un paso. Él avanzó uno, al mismo ritmo de ella.
"Eres tímida."
206
"Sí." soltó.
"No hay ninguna razón para serlo. Soy yo. Quítate la camiseta y gira para mí."
Sus labios se separaron, pero no estaba segura de cómo responder a eso y no

quería sonar como una idiota de nuevo. Tragó saliva y respiró hondo.
"No."
Una mirada de dolor brilló en sus ojos.
"Quiero decir, no puedo quitarme la camisa. Esto es, eh, yo apenas te conozco."
Las cejas de Smiley subieron.
"Sabes lo que quiero decir. Apenas nos conocemos el uno al otro. Quiero decir,
nos conocimos el uno al otro, pero estábamos drogados. No lo estamos ahora.
Simplemente no puedo desnudarme."
Le ofreció una mano.
"Vamos a entrar en la sala de estar. No era mi intención hacerte sentir

incómoda, Vanni. Nos sentaremos y hablaremos. No voy a pedirte otra vez
poder ver tus lesiones."
Se tímidamente se acercó y le puso una temblorosa mano en la suya. Era tan

cálido y grande como lo recordaba. Cerró suavemente sus dedos alrededor de
los de ella y se volvió, esperando que le siguiera. Agradeció cuando se movió
lentamente, consciente de sus vacilantes pasos, hasta que terminaron al lado
del sofá. Él la soltó.
"Siéntate. Por favor."
Se sentó, tirando del dobladillo de la camiseta hacia abajo para cubrir sus
rodillas. Smiley no tomó asiento al lado de ella, pero la sorprendió poniéndose
en cuclillas y empujando la mesita de café hacia un extremo del sofá. Él la
miró, se puso de rodillas y se sentó sobre los talones. Su sonrisa parecía un
poco forzada.
207
"Relájate." La instó. "Nosotros sólo hablaremos."
"¿Por qué estás ahí? Puedes sentarte en el sofá conmigo."
"Estoy mejor aquí."
"¿Por qué?"
Se lamió los labios. El deslizamiento de su lengua sobre ellos llamó su atención

y se concentró en su boca.
"En primer lugar, gracias por no gritar cuando descubriste que me colé en tu
casa. Estaba preocupado por ti, cuando no respondiste a la puerta. Entré por
una ventana trasera. Arreglaré la cerradura más tarde."
Ella lo miró a los ojos, sin preocuparse de que simplemente admitiera haber
irrumpido en la casa.
"Está bien."
Realmente lo estaba. Era una cosa muy dulce que él hiciera algo tan drástico
para asegurarse de que estaba bien.
"Tengo una pregunta importante, pero no quiero hacerte sentir incómoda de

nuevo. Me ha preocupado cada minuto del día desde la otra noche. Tengo que
preguntártelo."
Ella se preparó para ello.
"De acuerdo."
"¿Te he hecho daño, Vanni?" Su mirada bajó a su regazo y luego la levantó

para mirar directamente a los ojos. "¿Fue el sexo demasiado duro?"
"Estoy bien."
No se había esperado esto y se alegró de estar sentada.
"¿En serio?" Él frunció el ceño, estudiándola.
208
Este era un tema incómodo. Había dicho que era importante para él saberlo,
pero no estaba dispuesta a admitir que había sentido un poco de dolor al día
siguiente.
"Tú no me has hecho daño. Tengo algunas contusiones, pero es nada del otro
mundo. Eres fuerte."
"Lo siento."
"Está bien. No duelen."
"Te desmayaste después y temí haberte dañado."
"Creo que fue por haber sido drogada. Te dije que soy un 'jinete de silla'. Eso
fue..."
No estaba segura de cómo explicarlo sin humillarse a sí misma.
"¿Eso fue qué?" Se inclinó un poco más cerca y aplanó la mano en el sofá junto
a su rodilla. "Por favor, habla conmigo. No permitas que tu timidez te impida
ser contundente. No hay necesidad conmigo. Puedes decirme cualquier cosa."
"No hablo de sexo con hombres." admitió Vanni vacilante. "No he salido con
muchos tipos y siempre tienden a no apreciar una discusión al respecto."
"Yo no soy ellos." Su voz se profundizó mientras continuaba "Doy la

bienvenida a esta conversación."
Se humedeció los labios y se empujó para estar más adelante y más próxima
de lo normal.
"Estoy fuera de forma. Te dije que no funciono de la misma manera que tu lo

haces. Esa droga que me pusieron me lo hizo pasar mal, ¿de acuerdo? Estaba
sudando, a continuación, congelada y después nos tocamos." La vergüenza
forzó su mirada hacia su barbilla en ese punto. "Creo que estaba agotada. Es
por eso que me hizo caer dormida como una piedra."
No dijo nada, así que ella levantó la vista de nuevo.
209
No vio cualquier emoción negativa en su expresión. De hecho parecía feliz
cuando sonreía. Le llegaba a sus ojos, en ese momento. Eso la animó a seguir
adelante.
"Además aquello fue realmente extremo, ¿sabes? Nunca me había sentido así
antes."
"¿Estás hablando sobre el sexo?" Él bajó su tono a uno que le dio escalofríos.
Eran la buena clase, de nuevo, y también recordó eso de él. Podía hablar de
una cierta manera que la encendía.
"Sí."
"Compartir sexo mientras que estás drogado es muy poderoso."
"Eso es un eufemismo si alguna vez escuché a uno. Pensé que iba a morir."
Había sobrevivido a la incómoda charla y respiró más fácil, con los músculos
tensos relajándose.
"¿Estás bien? Me preocupé por ti, también."
"Estoy bien. Los Especies somos resistentes. Tuve unas cuantas horas
incómodas después de que me desperté, pero mi mandíbula sólo estaba
magullada."
"¿Te dolió la mandíbula?"
Se inclinó hacia delante, mirando a la zona inferior de su cara. No vio ningún

rasguño o moratón. Tenía una piel perfecta.
"No. Brass me golpeó para noquearme. Tuve algunas marcas pero se

desvanecieron rápidamente."
"¿Por qué iba a hacer eso? No me acuerdo de esa parte. Pensaba que recordaba
todo."
210
"Fue después de que perdiste el conocimiento. Estábamos a punto de ser
conducidos a Homeland y estaba muy preocupado por ti."
Vanni se dio cuenta de sus rostros estaban a pocos centímetros de distancia y

su mirada se bloqueó con la suya.
"¿Por qué te golpeó?"
"Tenía miedo de que no fuera capaz de resistirme a tocarte de nuevo, a pesar

de que estabas inconsciente."
Se tomó un momento para asimilarlo.
"Él pensó que me habrías..." No pudo terminar la frase.
"Montado mientras estabas sin sentido." Él no tuvo ningún problema en decir

las palabras. "Fue una preocupación real. Yo estaba muy excitado y quería
seguir tocándote. Creo que habría podido resistir la tentación, pero era mejor
hacer eso, no estaba comprobado."
"Oh." Ella se inclinó un poco hacia atrás. "¿Tu mandíbula duele todavía?"
"No." Él puso su otra mano en el sofá, uno a cada lado de sus rodillas. "No
tengas miedo de mí, Vanni."
"No lo tengo. Estoy sentada aquí contigo. No lo haría si pensara que harías
algo malo contra mí. Estaría gritando. Sé que hay un guardia fuera de mi
puerta."
"Envié a Wager lejos."
Esa noticia la aturdió.
"¿Por qué?"
"Quería tener un poco de intimidad."
211
No estaba segura de cómo tomarse eso. Smiley se puso de rodillas y se dio
cuenta de que la había fijado donde estaba sentada. Su ritmo cardíaco
aumentó, pero no estaba causado por el miedo.
"¿Por qué?"
"Los Especies tienen excelentes sentidos y no quería que él escuchara nada de

lo que se dijera entre nosotros."
Ella quería sacarse un peso de su pecho.
"Fue el camarero quien nos drogó. Gregory Woods reconoció eso ante mí
anoche. No mentí. Yo no fui quien drogó nuestras bebidas."
"Te creo."
"Pero pensaste que lo hice, al principio."
"Tienes una cara muy expresiva, Vanni. Creo que cuentas mal las mentiras. Me
gusta que seas fácil de leer. Ahora mismo estás nerviosa. No hay necesidad de
estarlo."
"¿Puedes saber eso?"
Echó un vistazo a su pecho.
"Has acelerado la respiración y tus ojos están más abiertos. No veo miedo, sin
embargo. Estoy agradecido por ello. La última cosa que quiero hacer es
asustarte."
"¿Quieres que te diga todo lo que he sabido? Fui a ver a Carl anoche para
devolverle el anillo y... "
"Dime que ya no perteneces a ese macho."
Ella se quedó sin aliento ante su tono áspero.
"Lo siento." Él suavizó su voz. "Ya no llevas su anillo. Lo miré. Tu dedo está
desnudo. Escuché lo que dijiste por teléfono cuando llamaste a Homeland.
212
Fuiste retenida contra tu voluntad y ese macho no te merece. Debería ser
golpeado por permitir a nadie que te haga daño de cualquier manera. Le haré
sangrar, si alguna vez tengo la oportunidad de encontrármelo."
Guau.
Ella podía decir que sentía fuertemente atraída por él y que estaba un poco
caliente oyéndole hacer amenazas contra su ex. Se le veía cabreado, pero sabía
que no iba dirigido a ella.
"Eso está de más."
"¿Estás enamorada de ese varón?"
"No." Ella sentía la necesidad de excusarse por haber estado alguna vez con
Carl. "Creo que quería ver cosas en él que no estaban realmente allí."
"¿Saliste con un mal macho una vez y éste parecía mejor que el anterior?"
Smiley era bueno en adivinar.
"Sí."
"¿Deseabas casarte y formar una familia?"
"Ese era el plan, pero ya no. Carl es un gilipollas. Siento lástima por cualquiera
con quien salga, ahora que sé cómo es en realidad."
"Bien." Smiley sonrió, su ira se había ido. "Eso significa que ningún macho
tiene un reclamo sobre ti."
Reclamo sobre mí.
Ella parpadeó, repitiendo sus palabras en su cabeza.
"Supongo."
El silencio se extendió entre ellos y la hizo consciente de que sabía muy poco
sobre el hombre con quien había tenido relaciones sexuales. Habían tenido
intimidad, pero no tenía idea de qué podía decirle a él. Los nervios le hicieron
213
retorcer el dobladillo de su camiseta. Smiley miró el movimiento e hizo un
sonido suave en la parte posterior de la garganta.
"¿Estás bien?"
Miró hacia arriba.
"Sí. Lo siento. No era mi intención a retumbar hacia ti."
"¿Por qué lo hiciste?"
"Estoy frustrado, pero ese es mi problema."
"¿Por qué?"
Se lamió los labios de nuevo y flexionó sus manos contra los cojines del sofá.
"Eres asustadiza y me temo que voy a hacer que desees escapar de mí. Esa es
la última cosa que quiero. Tengo mucho sobre lo que hablar contigo y tantas
preguntas que quiero formular. Es sólo que no sé cómo hacerlo sin la
preocupación de que voy a ofenderte o molestarte."
Vanni podría entenderlo. Se sentía igual, excepto por el miedo de que él saliera
huyendo de ella.
"Somos desconocidos, pero no lo somos. ¿Estás nervioso también?"
"Sí." Él sonrió. "¿Qué haría que estés más cómoda conmigo? Dímelo y lo haré."
Ella le devolvió la sonrisa.
"No lo sé, pero no voy a huir. De alguna manera me has bloqueado aquí."
Él no se movió.
"¿Te molesta que esté tan cerca?"
Ella se debatió.
"No."
214
"Bien. Nos limitaremos a hablar. ¿Te acuerdas de todo lo que pasó en el hotel
esa noche? Vamos a empezar por ahí. Al principio yo pensé que me drogaste,
pero te creí cuando me dijiste que no lo hiciste. En realidad nos salvaste,
Vanni."
"¿Nos salvé?" negó con la cabeza. "¿Cómo pude hacer eso? Los dos estábamos
drogados y tuvimos sexo. Yo no llamaría a eso una mano salvadora."
Smiley lamentó sus palabras. Podía ver la angustia de Vanni. Esta no era la
reacción que había esperado. Su pecho se apretó lo suficiente como para
hacerle difícil tomar aire. Se sentía muy protector con esta mujer, pero era el
único que estaba causando su angustia.
"Fácil." le canturreó.
Quería acariciarla pero se resistió. Era difícil no tocarla, pero no estaba seguro
de si le permitiría hacerlo todavía. Luchó contra sus deseos, teniendo en
cuenta sus necesidades en primer ligar.
"Simplemente toma unas cuantas respiraciones profundas."
Ella siguió sus órdenes y eso le hizo darse cuenta de lo diferente que era de las
hembras Especies.
Una de ellas ya le habría golpeado por invadir su espacio personal y por

decirle cómo respirar. Ellas tampoco estarían poniéndose nerviosas cada vez
que se acercara demasiado. Sabía que debía retroceder y tomar asiento al otro
lado de la sala. Simplemente no podía hacerlo.
El aroma de Vanni era diferente del anterior, pero era por los productos que
había usado cuando se había duchado. Se hizo una nota mental para
preguntarle después qué tipo de artículos solía comprar y obtenerlos para ella.
Esto era de baja prioridad, sin embargo.
Tenía que encontrar la manera de conseguir que bajara la guardia y le dejara

entrar.
215
Su mirada cayó a su regazo y él ahogó un gemido. Deseaba entrar, de acuerdo.
Quería empujar hacia arriba su camisa y separar sus muslos. Su polla se
endureció sólo de pensar en lo increíble que se sentiría al reclamarla de nuevo.
Una mirada a sus ojos, sin embargo, le aseguró que no estaba lista para
compartir relaciones sexuales. Tendría que ir muy poco a poco y encontrar la
manera de lidiar con Vanni. Simplemente ofrecerle compartir sexo no era una
opción. Tenía que estar a la altura.
Era importante que Vanni confiara en él. De lo poco que sabía de las hembras
humanas, le aseguraba que era la única manera en que le estaría permitido
quedarse con ella. Él no quería irse. Eso le conduciría a la locura, si tenía que
acechar alrededor de su apartamento mientras ella estaba en Homeland.
Wager y los otros machos no van a tomar mi mujer.
Él hizo una mueca interiormente al pensar en ella de esa manera, pero era la
verdad.
Ella era suya.
De repente sintió aún más simpatía por los hombres que habían caído por
humanas. Le había parecido sencillo, en la teoría, persuadir a una de ellas para
permitir a un hombre entrar en su cama y en su corazón. La realidad de esto es
que era cualquier cosa menos fácil.
Todo lo que sabía acerca de los rituales de citas humanos no sería aplicable en
Homeland. Se negaba a llevarla a cenar en el bar. Tendría que golpear a otros
machos, cuando intentaran ganar su atención. El espectáculo de la violencia
podría dejarla con la impresión de que él era un hombre cruel.
Vanni finalmente habló y sólo entonces se dio cuenta de que el silencio se

había extendido entre ellos de nuevo.
"¿Cómo puedes decir eso?"
Se esforzó por recordar lo que había dicho. Ella se lo recordó.
216
"¿Cómo fue que nos salvé?"
"La droga que me dieron, si se hubiera tratado de una dosis completa es..." No
quería horrorizarla, pero no le mentiría. "Hubiera estado demasiado
enloquecido, impulsado por la necesidad de sexo, como para tener cuidado
por si te hacía daño o algo malo. La dosis completa de la droga de cría que
Mercile creó para usar en nosotros, causa conducta sexual brutal y la pérdida
total de la memoria. Tú me alertaste sobre tus síntomas, en lugar de ocultarlos.
Por suerte yo no terminé mi bebida. Eso podría haber sido trágico."
"Me dieron una gran cantidad de la droga y lo recuerdo todo."
"La droga que te dieron fue una versión más suave. Habíamos escuchado, de
una empleada que trabajaba allí, que un centro de investigación asociado con
Mercile Industrias había probado la nueva versión. Ella declaró que estaban
creando esa variante para usarla en las hembras humanas. Creemos que la
Iglesia Woods debe haberla obtenido de ellos. "
"Gregory dijo que se la compró a alguien, pero no mencionó un nombre.

Llamó a esa droga B-47."
"Nuestro equipo de trabajo está entrevistando a todo el mundo de esa

instalación para ver quién se lo vendió a la Iglesia."
"Entonces, ¿fuimos los conejillos de indias para alguna droga no probada?"
"Usábamos el término 'rata de laboratorio', cuando éramos los sujetos de

prueba para Mercile. La dosis total del medicamento de cría que utilizaban en
nosotros mataría a un ser humano. Me pone furioso saber lo que podría
haberte pasado a ti. Hablé con el médico después de que regresé a Homeland.
Podrías haber sufrido insuficiencia cardíaca o convulsiones que podrían haber
dado lugar a tu muerte."
Eso le hizo sentir un frío glacial dentro, solo de imaginar su cuerpo sin vida.
Quería ir a la prisión de Fuller e interrogar él solo a todos los que vinieron
desde Drackwood.
217
Necesitaban pruebas, sin embargo, antes de ir sobre la Iglesia Woods. De lo
contrario, el pastor Gregory Woods acusaría a la ONE de hacerle su objetivo
debido a sus opiniones abiertamente en contra de las Nuevas Especies. Era una
pesadilla de publicidad que no necesitaban.
Él la miró a los ojos y odió ver el dolor allí. Había sido arrastrada a su mundo,
pero no lamentaba que estuviera aquí. No se hubiera encontrado con ella si no
hubieran sido atacados. Podría lamentar las circunstancias, pero nunca el
resultado.
Vanni estaba a unos centímetros de distancia, justo donde él quería que

estuviera.
218
Capítulo Trece
Vanni dejó que todo se hundiera en su interior. Smiley había vivido una vida
infernal. Ella sólo había sido drogada una vez, pero él había sobrevivido a
innumerables episodios que eran mucho peores que lo que ella había
experimentado. La había ayudado a través de lo peor de todo, pero él había
estado solo en Mercile Industrias. De repente sintió por los Nuevas Especies
una solidaridad como nunca antes.
"¿Seguro que no te hice daño durante el sexo, Vanni?" Su voz se suavizó.

"Podrías decírmelo si lo hice."
Ella apartó la mirada, incapaz de soportar ver el dolor en sus ojos.
"Realmente no quiero hablar de esto."
Él maldijo en voz baja.
"Te hice daño. Lo siento mucho."
Smiley sonaba atormentado y eso la hizo sentir culpable. Se merecía ser

totalmente franca, incluso si eso la hacía retorcerse. Le miró y se acercó a
colocar su mano en su brazo. El contacto piel a piel ayudó a sentirse conectada
con él.
"Me da vergüenza. Es por eso que no quiero hablar de esto. La única persona a
la que le di detalles de esa noche fue mi mejor amiga. Es la única con quien me
siento cómoda al hablar de sexo. Estaba un poco sensible a la mañana
siguiente, pero no fue porque hiciste nada malo. Estoy bien ahora."
219
"Fui demasiado áspero." Él hizo una mueca. "Entiendo. Gracias por compartir
la verdad conmigo. Estabas tan apretada que temí haberte roto un poco.
Deberías dejar que uno de nuestros médicos te mire, Vanni."
Su brusquedad la sobresaltó, pero se recuperó rápidamente.
"Eres muy abierto acerca de las cosas, ¿no es así?"
Él asintió.
"Mi gente cree en la honestidad total."
Ella tragó saliva y respiró hondo. Sus mejillas probablemente estaban ardiendo
pero estaba dispuesta a arriesgar un poco de incomodidad para Smiley.
"No creo que me rompieras. Quiero decir, no estoy con ningún tipo de dolor.
Simplemente no había tenido relaciones sexuales en mucho tiempo. Se me
hace difícil ser tan directa sobre el sexo. No hablábamos de ello en mi casa
mientras crecía. Era una especie de tabú."
"¿Por qué?"
"No lo sé. Mamá nunca lo mencionó, a menos que contemos el decir que una
cigüeña nos dejó cuando éramos bebés. Mi padre apenas estaba en casa. Mi
hermana y hermano eran mayores, por lo que no me dijeron mucho. Fue más
de una advertencia del tipo, 'No-dejes-a-los-hombres-llegar-a-tenerte-desnuda-o-
acabarás-embarazada' y esas cosas. Beth fue quien me dio la charla de sexo
cuando estaba en mi adolescencia."
Sus cejas se alzaron.
"¿Una cigüeña?"
"¿Nunca has oído contar eso? Los padres representan una historia para los
niños para evitar decirles la verdad sobre el sexo. Dicen que un gran pájaro
vuela a casa y es así como llegan los bebés."
Él se echó a reír.
220
"Nosotros hablamos abiertamente sobre el sexo. ¿Tienes alguna pregunta sobre
mí desde que compartimos relaciones sexuales? Somos un poco diferentes
físicamente que tus machos, totalmente humanos."
"Eres más grande." sintió que sus mejillas se calentaban.
"Sí. Nuestra densidad muscular suele ser mayor y fuimos diseñados para ser
más altos y más grandes de estructura ósea que la mayoría de todos los
hombres."
"Quiero decir..."
No pudo terminar la frase. Él sonrió.
"¿Nuestras pollas?"
Ella asintió con la cabeza bruscamente.
"Fuimos diseñados genéticamente para ser más grandes en todo. Tampoco

tenemos una gran cantidad de vello corporal. Eso es extraño, ya que nos
dieron el ADN de animales con pelaje. Me alegro de no tener pelaje."
Vanni sonrió.
"Sí. Eso sería algo jodido en verano, cuando hace calor."
Smiley se rio entre dientes.
"Me gusta cuando bajas la guardia conmigo. Tienes una sonrisa maravillosa."
"Tú también."
Su sonrisa se desvaneció.
"Me sentí atraído sexualmente por ti antes de las drogas. ¿Estabas sexualmente
atraída por mí aunque sea un poco?"
Su estado de ánimo se puso serio.
"No creo que debamos hablar de esto."
221
"Entonces, ¿no te sientes atraída sexualmente hacia mí en lo más mínimo?"
Le miró a los ojos.
"¿Por qué quieres saberlo?"
"Estoy excitado por estar cerca de ti. No hay drogas ahora."
Ella abrió un poco la boca, sorprendida de que él admitiera eso. Tomó un

montón de restricción no mirar hacia abajo, hacia su regazo, para ver si quería
decir aquello en un sentido literal. Smiley vaciló, estudiando su rostro.
"Deseo tocarte y ver lo que hay entre nosotros, sin la ayuda de drogas."
"Eso es una mala idea."
"¿Por qué? Te deseo, Vanni. No he pensado en otra cosa desde esa noche."
"No puedo tener sexo contigo, si eso es lo que quieres."
Los hombros de Smiley hundieron.
"No estás atraída por mí."
La mirada triste en su rostro casi le rompió el corazón. No podía soportar verle

de esa manera.
"Lo estoy. Es sólo que creo en el amor antes del sexo. Nos saltamos eso y no sé
cómo sentirme al respecto. Hemos sido íntimos, pero sabemos muy poco el
uno del otro. Es incómodo para mí."
"¿Por qué? ¿Crees que eres incapaz de amarme? ¿Es porque no soy totalmente
humano?"
"Ni siquiera te conozco."
Se inclinó más cerca.
"Podemos remediar eso llegando a conocernos. Te llevaré fuera mañana y

estamos aquí juntos ahora. Sólo necesitamos seguir hablando."
222
Ella no podía negar la lógica.
"Podríamos probar eso."
"¿Crees todo lo que tu iglesia dice acerca de nosotros?"
"No soy miembro de la Iglesia Woods y las cosas que Gregory vomitó eran
horribles."
"Eso es un buen comienzo. Sé que nos odian, pero no sé por qué."
"Me niego a repetir esa mierda de nuevo. Fue lo suficientemente triste decirle a
Justice el tipo de cosas que dijeron, mientras estuve encerrada en aquella
habitación escuchando su basura."
Él se limitó a mirarla. Se derrumbó bajo su firme mirada.
"Es un poco confuso, ya que son unos cabrones, pero parece que piensan que
vais a encontrar una manera de hacer un ejército de Nuevas Especies y
esclavizar al mundo. O matarnos a todos. Tal vez en ese orden. ¿Alguna vez
viste...?" Se calló. "No importa."
"¿Alguna vez vi qué? Habla, Vanni. No debemos tener secretos. Puedes

decirme cualquier cosa."
"Está bien. ¿Sabes esas películas de terror donde los simios dominan el
mundo? Creo que ellos las vieron demasiadas veces o algo así." se encogió. "Lo
siento. Realmente no deseo ofenderte, porque no lo creo de esa manera. Eres
una persona increíble. No comparto sus creencias. Es una estupidez. Son sólo
unos idiotas. Todos saben que los Nuevas Especies no pueden tener hijos."
Apartó la vista y su mirada se desvió por la habitación. Finalmente la miró de

nuevo, miró a su estómago y luego cerró los ojos.
"¿Smiley? Cuanto lo siento." Se sintió mal. "No debería haber dicho eso. Es sólo
que se trataba de la única referencia que se me ocurrió. De verdad. Por favor,
no te enfades conmigo."
223
Abrió los ojos y la miró fijamente.
"No estoy enfadado. Te lo prometo. Nunca podría estar enfadado contigo."
"Estás disgustado." No le creyó. "Eres primate, ¿verdad? Esa referencia a los

simios fue simplemente imperdonable. Lo siento mucho."
"No estoy disgustado."
"Yo lo estaría. Simplemente debería callarme. Tú me pones nerviosa. Me estoy

haciendo un lío de... "
"Quiero besarte."
Eso la hizo callar. Estaba pasmada. Su mirada fija en su boca. Él se acercó más,
su cuerpo casi tocando el suyo.
"Deja que te bese, Vanni."
"Yo..."
No estaba segura de qué hacer o decir. En realidad no le dio la oportunidad de

encontrar una respuesta. Su boca descendió sobre la de ella. Cerró los ojos y se
sorprendió de lo suaves que eran sus labios. Su lengua limpió la suya por la
zona inferior y se quedó sin aliento. Utilizó esa apertura para profundizar el
beso.
Smiley se encargó de su boca de tal manera que la dejó agarrando su camisa

sólo para aferrarse a algo. Presionó más contra ella, hasta que estuvieron
pecho a pecho y fue empujada contra los blandos cojines del sofá. La pasión
con que él la golpeó la dejó tambaleándose, cuando se detuvo repentinamente.
Se apartó unos centímetros. Ella abrió los ojos para mirar a los suyos. El
corazón le martilleaba y jadeaba como si acabara de estar trotando. Se quedó
sin habla, pero él no.
"Tenemos química. Me conoces, Vanni. Deja de pensar y simplemente siente."
224
Se dirigió a su boca de nuevo, ahuecando su rostro con una de sus manos para
mantenerla en su lugar. Ella no luchó, en su lugar cerró los ojos de nuevo y dio
la bienvenida a su caliente boca reuniéndose con la suya. Se abrió a él sin
ninguna urgencia la segunda vez. No había dulzura en el segundo beso, era
más un hambre cruda. Le conocía. Su cuerpo le hizo recordarle y anhelaba ser
tocado.
Pareció notar eso, ya que su mano libre agarró firmemente su muslo y se

deslizó más alto. La camiseta de algodón cabalgó a lo largo de la parte
posterior de su mano mientras él utilizó su pulgar para acariciar su muslo,
avanzando lentamente hacia arriba. Ella gimió contra su lengua y él rugió en
respuesta. Rompió el beso y se quedaron mirándose el uno al otro de nuevo.
"Extiende tus muslos más separados y desliza tu culo hasta el borde del sofá."
Miró hacia abajo y se dio cuenta de lo alto que su camiseta se había levantado.
Ella le soltó y agarró del dobladillo, tratando de empujarla hacia abajo para
ocultar su coño expuesto. Smiley se movió más rápido, liberando su muslo y
su rostro. Capturó sus muñecas antes de que pudiera recuperar su modestia.
Él negó con la cabeza.
"No te escondas de mí."
"Suéltame."
"Hemos compartido sexo, pero nunca te he visto ahí. Estaba demasiado oscuro
para disfrutar de la vista antes. Sepárate abierta y muéstrame."
"Lo estás viendo. Todo lo que tienes que hacer es mirar hacia abajo."
Él negó lentamente con la cabeza.
"No es suficiente. Quiero ver todo de ti."
"No me voy a quitar la camiseta."
"Pon las manos en alto y mantenlas en lo alto del sofá."
225
"¿Por qué?"
Su sonrió.
"Sabes lo que quiero hacer."
Ella negó con la cabeza.
"No lo sé."
Sus ojos se estrecharon y su expresión se volvió sombría.
"¿Cuántos hombres has conocido, Vanni?"
"Dos."
"¿Nunca les mostraste tu sexo? ¿Ninguna vez quisieron extenderte abierta y

apreciarte?"
Tragó saliva.
"No."
Él emitió un profundo y atractivo sonido retumbante.
"¿Por qué estás haciendo ese ruido?"
"Estoy cachondo. Ronroneé. Es buena cosa. Hemos compartido sexo.

Comparte esto conmigo. Déjame verte, Vanni. Sé lo que sientes ahí, porque he
estado dentro de ti. Fue la mejor sensación que he experimentado jamás.
Agarra y mantén tus manos en la parte superior del sofá. Vas a disfrutar
conmigo mirándote."
"No lo creo."
"Eres hermosa y no hay necesidad de ser tímida. Mi desnudez no me

avergüenza. Tu desnudez me hace daño por las ganas de tocarte."
"Bueno, haces ejercicio y estás en perfecta forma. Yo no."
226
"Me gusta tu forma. Me excita." Smiley movió sus muñecas, levantándolas
bien alto, y entonces las inclinó hasta que sus manos tocaron el respaldo del
sofá. "Agárrate aquí y no lo sueltes. Cierra los ojos si ayuda a relajarte, Vanni.
Disfrutarás de lo que haga para ti." Él bajó la voz y murmuró: "¿Por favor?"
"No deberíamos estar haciendo esto. Es demasiado rápido."
"Voy a ir más lento. ¿Vas a mantenerte en el sofá?"
Ella hundió los dedos en el cojín. Él disminuyó su agarre en sus muñecas y la

sorprendió, agarrando sus caderas y tirando de ella hacia él. Separó sus
muslos y giró sus caderas, presionado entre sus rodillas y ampliándolas. Ella
bajó la mirada y se tragó una maldición. La camiseta se había agrupado en su
vientre, dejándola completamente expuesta de cintura para abajo. Estaba
iluminado en la sala de estar y todo estaba en una total claridad.
Bajó la barbilla para mirar a la V de sus muslos.
"Hermosa. No puedo esperar a probarte."
Ella se puso tensa.
"Sé que la gente hace eso, pero yo no lo hago."
Su cabeza se levantó y abrió los ojos.
"¿Qué?"
"El sexo oral, ¿no?" Ella imaginó sus mejillas eran probablemente de neón rojo
en este punto. "Yo no. Nunca lo he hecho."
Simplemente siguió mirando boquiabierto hacia ella. La hacía sentirse como

una especie de bicho raro, como si algo estuviera mal en ella. Sintió la
necesidad de explicárselo.
"Lo he dado. Nunca lo he recibido."
Soltó el cojín del sofá y trató de agarrar su camiseta para empujarla hacia
abajo, pero él capturó sus muñecas de nuevo, sosteniéndolas en su lugar.
227
"Estúpidos machos humanos. ¿Qué estaba mal con ellos?"
"Es sólo que nunca sucedió."
Trató de menearse lejos, pero era difícil de hacer con sus muñecas retenidas y
las caderas de Smiley entre sus rodillas. Él negó con la cabeza.
"No voy a dejar pasar esto. Cógete al sofá de nuevo y mantente ahí todavía."
"No me siento cómoda con esto."
"Lo estarás, cuando termine."
"Déjame ir."
"Ni hablar."
Se miraron el uno al otro hasta que él levantó los brazos de nuevo.
"Agárrate." Él apretó sus manos contra la parte superior del sofá. "Cierra los
ojos si eso ayuda. Vamos a hacer esto."
"Sólo querías ver y ahora quieres hacer más que eso."
"Eres tímida. ¿No te gustan que los machos te vean desnuda o tener expuesto
tu coño?"
"Así es."
Los bonitos ojos de Smiley se iluminaron con diversión.
"Envié a Wager lejos de la puerta principal, pero hay otro guardia apostado en
el patio trasero. No hice que se marchara."
"¿Por qué me dices eso?"
"Él va a precipitarse a entrar aquí si gritas. Tendríamos compañía en menos de

treinta segundos." Él inclinó la cabeza hacia la corredera. "Entonces tendría
228
que aplastarme, pensando que te estaba haciendo daño, aunque yo lo nunca
haría. No quieres que él te vea desnuda, ¿verdad?"
"¡No!"
"Ten eso presente. Sé muy tranquila, mi pequeña Vanni. Te voy a demostrar lo

que te has perdido. De lo contrario, se apresurarán a entrar aquí para salvarte
de mí."
Ella se quedó sin aliento cuando él lanzó de pronto sus muñecas y se apoderó
de su tórax. La levantó, tirando de ella justo fuera del sofá. Fue lo bastante
fuerte como para ponerla en la alfombra antes de que se diera cuenta de lo que
pretendía. Se alzó, la soltó y luego la agarró detrás de sus rodillas. Él se las
inclinó y las extendió mientras se deslizaba más abajo. No podía faltar la
sonrisa en su rostro, justo antes de que bajara peligrosamente cerca de su sexo.
Abrió la boca, pero se acordó de su advertencia. Smiley se lo recordó, por si

acaso se había olvidado sin embargo.
"Relájate para mí, pequeña Vanni. Disfrutarás de esto. Trata de guardar

silencio. Yo no soy tímido sobre el sexo, pero tú si lo eres."
"Smiley, lo que sea que vas a hacer, no lo hagas. Yo... "
Jadeó de nuevo cuando él no le hizo caso y todo lo que pudo ver fue la parte
superior de su cabeza. La sensación de su lengua deslizando a través de su
clítoris era algo para lo que no estaba preparada. Era caliente y húmeda, la
textura ligeramente rugosa fue un choque a su sistema. Se sentía bien, sin
embargo, cuando una sensación de placer extremo sacudió hacia arriba. Cada
músculo de su cuerpo parecía ponerse rígido.
Él retumbó otra vez, creando vibraciones. Ella arañó la alfombra, olvidando

cómo respirar. Cerró su boca alrededor de esa pequeña área y aplicó más
presión con la lengua, frotándolo de ida y vuelta.
Vanni gimió.
229
"Oh Dios."
Eso pareció animarle porque aumentó el ritmo, siendo más agresivo. Su boca
se apretó con firmeza y chupó su clítoris. Su lengua empujó sin piedad contra
el haz de sensibles nervios. Vanni sacudió la cabeza y tuvo que utilizar su
mano para cubrir su boca y ahogar los sonidos que hacía. Se sentía como si él
la hubiera enganchado a un cable eléctrico con corriente.
Comenzó a sudar y todo su cuerpo se estremeció. Sus pezones eran como

cuentas y la camiseta se frotaba contra ellos mientras se retorcía en la
alfombra. Estaban súper sensibles. Era demasiado, demasiado intenso. El
impulso de cerrar de golpe sus piernas la golpeó y lo intentó, pero Smiley las
mantuvo abiertas. Siguió jugando con ella hasta que su espalda se arqueó y se
preguntó si se habría roto la columna vertebral.
Le daba igual en ese momento. Perdió la capacidad de pensamiento y luego

estuvo siendo aplastada desde su centro hacia fuera, cuando llegó a su clímax.
Su cuerpo se sacudió violentamente con cada espasmo y su mano no pudo
amortiguar los ruidos que salían de ella.
Smiley liberó sus muslos y se subió sobre ella. Empujó su mano fuera del
camino y su boca cubrió la de ella, sofocando sus gritos. Mantuvo su peso,
para no aplastarla bajo él. Ella continuó temblando hasta que dejó de correrse.
Vanni mantuvo los ojos cerrados, tratando de recuperar algo parecido a la

realidad. Smiley continuó besándola. Su beso era más agresivo, mientras su
respuesta era más lenta. Aún se tambaleaba por lo que esta experiencia le
había hecho sentir. Sus piernas y brazos se sentían pesados. Se dio cuenta de
que sus piernas aún estaban apartadas y sus jeans estaban presionados
firmemente contra interior de sus muslos. Se las arregló para alcanzarle, sin
embargo, y envolver sus brazos alrededor de sus hombros.
Smiley rompió el beso y gruñó. Eso abrió sus ojos y le miró fijamente. Su
expresión parecía un poco dura. Ella lo estudió y supo que no era por ira.
230
Parecía hambriento y un poco salvaje. Su respiración era casi tan errática como
la de ella.
"Te necesito. Di que sí."
Se movió un poco y alcanzó entre ellos. Tuvo que levantar sus caderas
alejándose, para conseguir bajar la cremallera de sus pantalones. Fue un
sonido inconfundible en la habitación. Él se movió un poco y luego descendió.
"Envuelve tus piernas alrededor de mí."
Ella las dobló y sus pantorrillas descansaron sobre su culo. Smiley se acercó
más y no pudo apartar la mirada de él, cuando su polla empujó contra su sexo.
Estaba mojada, pero se sentía muy grande cuando empujó contra ella. La
sensación de él entrando, la hizo gemir.
"Tan condenadamente apretada." dijo con voz áspera. "Tan mojada. Tu coño se
sujeta alrededor de mí casi dolorosamente."
Ningún hombre había hablado jamás con ella de esa manera antes, pero le
gustaba. La hacía sentir sexy y le encantó ver la forma en que sus hermosos
ojos se estrecharon y sus labios se abrieron, mostrando sus colmillos. Las
puntas de ellos le recordaron cuando mordisqueó su hombro. Giró un poco la
cabeza para darle mejor acceso a su cuello, por si lo deseaba.
"Relájate, nena. Tus músculos todavía están apretados. No quiero tener que
forzar mi camino dentro de ti. Temo que voy a rasgarte."
Tuvo que obligar su cuerpo, para hacer lo que le pedía. Se deslizó más
profundo, llenándola más. Se sentía al límite, pero no lo estaba. Smiley rodó
sus caderas y hundió más del grueso contorno de su pene dentro de su cuerpo.
Cerró los ojos, disfrutando de la forma en que encajaban entre sí. Se retiró un
poco y empujó de nuevo, montándola con lentitud.
"Oh Dios."
231
Se aferró a su espalda, buscando la piel desnuda alrededor de su camiseta sin
mangas. Sus uñas se le clavaron un poco, pero trató de no sacarle sangre. Se
sentía demasiado bien.
"Tengo el control." Él tomó una respiración profunda. "Tengo el control. Tengo

el control."
"Te creo."
Enterró la cara contra su cuello.
"Me estoy convenciendo a mí mismo. Lento y constante."
Así fue como él se movió sobre ella. Ella gimió y levantó las piernas más altas,
clavando sus talones en su firme culo. Los músculos se flexionaron con cada
empuje y él ajustó sus caderas, golpeando un nuevo lugar. Ella gimió fuerte,
aferrándose a él.
"Joder." gimió él.
Rozó besos a lo largo de la columna de su garganta y entonces mordió su

hombro. No dolía, pero el leve mordisco tuvo un efecto maravilloso en su
cuerpo. El placer se construyó, hasta que otro clímax la azotó. No fue tan
intenso como el primero, pero la dejó temblando y gimiendo su nombre.
Smiley soltó sus dientes de su cuello y contuvo el aliento. Él gruñó algo que no
pudo entender, luego se condujo dentro de ella con mayor rapidez. Le sintió
correrse, su eje pulsando como un latido cardíaco contra sus paredes
vaginales. Él frenó sus caderas y jadeó con ella.
La mano de Smiley rozó su mejilla y ella abrió los ojos para encontrarlo
mirándola.
"¿Te he hecho daño?" Siguió acariciándola.
"No."
Él sonrió.
232
"Trabajaremos esto fuera."
"¿Trabajar qué fuera?"
"En romper tu timidez." Él se rió. "Te gustó mostrarme tu sexo, ¿verdad? ¿Ves
lo que te has perdido?"
Trató de apartar la mirada, pero él movió su cara con ella. No tuvo más
remedio que encontrarse con su mirada de nuevo. Esperaba una respuesta, así
que le dio una.
"Me gustó mucho."
"¿Te gustó? Tendré que esforzarme más. Dijiste que sólo quieres un hombre
tocándote cuando sientas amor. Te conseguiré eso."
Cerró los ojos. Él quería que ella amara el sexo, pero temía que iba a caer
enamorada de él. Su corazón y su cuerpo estaban conectados. Era un acuerdo
global con ella.
"¿Vanni? Mírame."
Él mantuvo el asimiento de su rostro, pero se detuvo rozando su pulgar por su

mejilla. No pudo resistirse. Su sonrisa había desaparecido y la seriedad de su
mirada sostuvo toda su atención.
"Al parecer fue una broma de mal gusto. Me refería a sentirte cómoda. Como
dije, vamos a resolver esto. Yo también lo quiero. Hay algo poderoso entre
nosotros."
"¿Tus músculos?" Ella podría intentar el humor también. Sus labios temblaron.
"Pareces cansada."
"No dormí mucho anoche."
"Tampoco yo. Necesitamos una siesta."
233
Poco a poco se retiró de su cuerpo. Odiaba esa separación. Al segundo en que
estuvo fuera de ella, sin embargo, empujó frenéticamente su camisa hacia
abajo para cubrir su mitad inferior. Vanni se sentó y alcanzó el borde del sofá
pero Smiley agarró su mano en su lugar. Ella lo miró. Había tirado de sus
pantalones pero no se subió la cremallera. La V de piel mostrada era un
captador de su atención.
Él la puso de pie y luego la sorprendió al dejar ir su mano mientras se

inclinaba. Uno de sus brazos se envolvió alrededor su espalda y el otro la
enganchó detrás de las rodillas, simplemente recogiéndola en brazos mientras
se enderezaba.
"Duermo contigo." Se volvió con ella en sus brazos. "Sólo compartimos sexo y
lo único que quiero hacer ahora es quedarnos ambos desnudos y tenerte
cerca."
Ella puso su brazo alrededor de su cuello y no protestó. La llevó por el pasillo

hasta el dormitorio.
"¿Cómo sabías que elegí éste?"
"Perfume. Conozco el tuyo en cualquier lugar."
Vanni se mordió el labio y no dijo nada. Eso era una cosa extraña, pero él era
Nueva Especie. La puso suavemente en la cama y se puso de pie. Arrancó su
camiseta fuera y luego empujó sus pantalones abajo. Ella miró a su cuerpo, un
poco maravillada. Cada ondulación de los músculos mostrada en sus brazos,
su pecho y su estómago eran testimonio de lo en forma que estaba.
"Por Dios."
Smiley se congeló.
"¿Qué sucede?"
"Tu cuerpo es perfecto."
Él parpadeó un par de veces.
234
"No." se dio la vuelta.
Cicatrices débiles estropeaban su región lumbar. Se puso en pie y alcanzó su

temblorosa mano hacia él, antes de darle ningún pensamiento. Smiley la miró
por encima del hombro. Ella retiró sus dedos fuera, preocupada que tal vez no
quería que hiciera eso.
"Me puedes tocar en cualquier parte." Él pareció adivinar sus pensamientos.

"No me duelen."
Trazó una de las más gruesas.
"¿Cómo conseguiste esta?"
"Maté a uno de los técnicos y éste fue mi castigo. Me azotaron. Valió la pena.
Era un abusador de mujeres."
El horror lavó a través de ella.
"Oh Smiley."
Se dio la vuelta para mirarla.
"No soy perfecto. Por eso te mostré esto. He tenido que matar para sobrevivir
o para hacer que algún otro de mi especie sobreviviera." Un músculo en su
mandíbula se sacudió. "¿Quieres que me vaya?"
"No. ¿Por qué incluso preguntas eso?"
"La mirada en tus ojos. Estás revuelta."
"Por lo que se te hizo a ti. No por cualquier otra cosa."
Él extendió su brazo y la tomó de la mano, acariciando la espalda de ella con

su pulgar.
"Es importante que conozcas el verdadero yo. Generalmente tengo un buen

carácter, pero mataría para proteger a los que me importan. Mataría por ti."
235
Sus rodillas se sentían algo débiles. Pudo haberse balanceado un poco en sus
pies, porque Smiley dio un paso más y envolvió su brazo alrededor de su
cintura, ayudando a sostenerla. Ningún hombre le había dicho alguna vez esas
palabras, pero notó que realmente quería decirlas.
"Nunca te haría daño, sin embargo. No quiero que tengas miedo de mí."
"No lo tengo."
"Bien. Tu opinión sobre mí es importante. No quiero mentiras entre nosotros,

Vanni. Quiero que me aceptes por lo que soy, en vez de estar mostrándote solo
las mejores partes de mí. Trato de ser el mejor macho que puedo ser, pero
tengo defectos. Todo el mundo los tiene."
"Yo también los tengo." admitió.
"Dime algunos." Él sonrió.
"Beth me dice que soy demasiado confiada, porque no quiero ser una de esas
personas negativas que siempre buscan el engaño en otros. Mi hermana mayor
es así y ella es deprimente. Siempre busco lados luminosos."
"Creo que esa es una buena característica."
"No vi lo mentiroso qué era Carl."
"Ese macho no te merecía."
"Gracias."
Él hizo un gesto con la cabeza hacia la cama.
"Vamos a descansar." Él la soltó y la empujó suavemente más cerca de él. "Saca

todo eso fuera."
Ella vaciló, pero luego sacó la camiseta sobre su cabeza. Probablemente fue lo
más rápido que jamás se había metido bajo las sábanas en su vida. Smiley
236
podría tener algunas cicatrices, pero por otra parte tenía un cuerpo perfecto.
Eso la hizo más consciente de sus defectos. Le miró, mientras iba a las cortinas
y tiró de las gruesas cubiertas cerrándolas para bloquear una gran cantidad de
la luz. Se acercó a la cama y se subió encima.
"Ven aquí. Quiero abrazarte." Se acostó de espaldas y abrió los brazos.
Rara vez había compartido la cama con un hombre. Su primer novio y ella
habían hablado de vivir juntos, pero él había puesto cuidado en aplazarlo. Más
tarde, había descubierto que había sido un bastardo infiel y tenía miedo de que
ella lo averiguara si compartieran una casa. Carl había querido esperar hasta
después de la boda para llegar a vivir juntos.
Ella se acercó más. Smiley la atrajo hacia su lado hasta que ella apoyó la cabeza
en su pecho y su brazo se enroscó a lo largo de su espalda, sus dedos
acariciando su cadera bajo las sábanas. Su barbilla descansaba en la parte
superior de su cabeza.
"Me gusta esto."
"A mí también." admitió.
Vanni estaba en sus brazos y se sentía bien. Smiley aspiró su aroma, haciendo
una nota mental para preguntarle por sus preferencias de productos de baño.
Le gustaba más su otro champú, pero el que llevaba era muy agradable
también. Su piel era suave donde la acariciaba y movió sus piernas, atrapando
su endurecida polla entre sus muslos.
Parecía agotada. La razón detrás de esto desató su ira. La Iglesia Woods, su ex-
macho y su padre, pagarían por lo que habían hecho con ella. Tiró abajo las
sabanas un poco, después de que su respiración le aseguró que dormía, y
consiguió una buena mirada a su espalda. Apenas alcanzó a verla cuando se
había quitado la camiseta y prácticamente se zambulló en la cama.
La rabia se levantó en él. Su pálida piel estaba estropeada con moretones

multicolores. Todos los Especie tenían experiencia con recibir descargas de
237
Taser y no era agradable. Ella era demasiado frágil y el macho responsable
sentiría mucho más dolor si alguna vez ponía sus manos sobre él.
Planeaba hablar con Justice y repasar todo lo que había sabido por ella, para
que no tuviera que lidiar con el trauma de contarlo de nuevo. Smiley juró en
silencio estar allí cuando los equipos del grupo de trabajo trajeran a los que
habían hecho daño a su Vanni.
Lamentó las leves contusiones que había vislumbrado en su culo. Sus acciones
las habían puesto allí y se hizo una nota mental para tener más cuidado la
próxima vez que él la levantara en sus brazos. Evitar cualquier cosa que
pudiera hacerle daño de alguna manera era una prioridad.
Mi Vanni.
Cerró los ojos. Ninguno de los síntomas sobre los que otros hombres le habían
advertido estaban allí. Le gustaba su olor, pero no se sentía adicto. Se las había
arreglado para mantenerse tranquilo, a pesar de lo bueno que fue el sexo y eso
fue lo mejor. Se sentía protector con ella, pero destellos de la memoria de la
noche en el hotel lo perseguían. Había estado aterrorizada y dependiente de él
para ayudarla. Eso los había unido.
Todavía la quería como compañera. Abrió sus ojos y miró al techo. Eran
diferentes pero podrían hacerlo funcionar. Estaba motivado. Era evidente que
había estado a punto de establecerse con un compañero, puesto que había
accedido a casarse con Carl.
Odiaba incluso pensar en el nombre del macho. Smiley sería mucho mejor
compañero que aquel abusivo humano.
La culpa también salió a la superficie. Había tenido la oportunidad de decirle a

Vanni que podría estar embarazada, cuando ella señaló que todo el mundo era
consciente de que los Especies no podían reproducirse. Debería haberle
informado que eso no era correcto, pero había temido que sería recordarle las
acusaciones de la Iglesia Woods contra la ONE.
238
No estaría durmiendo en sus brazos después de compartir sexo si se lo hubiera
dicho. Lo último que necesitaba era a ella evitándole. Tampoco la habría
tomado en el suelo, si él la hubiera visto con moretones atrás de antemano.
Confiaba en que no hubiera sido incómodo para ella.
Olfateó hacia ella de nuevo, en busca de cualquier signo revelador de

embarazo, pero no detectó ninguno, aunque su sentido del olfato no era tan
bueno como el de un canino. Sería mejor si pudiera convencerla de ir al Centro
Médico. Podrían decirlo más rápido con pruebas de lo que un cambio en su
aroma lo haría. Reflexionó sobre cómo se tomaría la noticia, si llevaba a su hijo.
Sería su compañera a ciencia cierta, si ese fuera el caso. Pero, incluso sin un
embarazo, todavía quería reclamarla y mantenerla.
No era como las mujeres Especie. Su rubor y nerviosismo le granjearon su

cariño aún más. Era tímida y eso la hacía adorable. Su falta de experiencia
sexual sería divertida. Él sonrió, recordando la forma en que había respondido
a su boca sobre su coño. Esperaba con interés enseñarle todas las formas en
que podía darle placer. Sólo necesitaba tiempo para demostrarle que él era el
macho adecuado para ella.
Formó un plan. Conseguiría hacerla adicta a él. No querría abandonarle si se

convirtiera en dependiente de él. Compartir sexo era una gran manera de
cimentar su vínculo, pero tenía que conectar con ella a nivel emocional
también. Cocinaría para ella y le mostraría cómo de doméstico podía ser.
No estaría de más hablar con algunos de los compañeros emparejados para

pedir su consejo. Lo haría por la mañana, cuando necesitaba ir a casa para
conseguir ropa. Era un hecho que se mudaría a la vivienda humana ya que
dudaba que ella se sintiera cómoda si él la llevaba a la residencia masculina.
Levantó la mano y ahuecó su suave vientre cuidadosamente. No perturbó su

sueño mientras mantenía su mano allí, preguntándose si la vida crecía en su
interior. No podía obtener información sobre la posibilidad de un hijo hasta
que hubiera tenido la oportunidad de aliviar todos sus miedos y le quisiera
tanto como él a ella.
239
Nunca olvidaría cómo Becca había creído que Brawn sólo la quería por el bien
de sus hijos. Smiley quería a Vanni por ser quién era. Vanni debería estar
segura de que sabía lo que sentía por ella antes de que los síntomas
aparecieran, si estuviera embarazada. Él se aseguraría de ello.
Cerró los ojos de nuevo y se relajó. Había dormido mal desde que regresó de
aquel hotel, pero ahora su Vanni estaba enroscada en forma segura contra su
cuerpo.
Se sumió en el sueño.
240
Capítulo Catorce
Vanni se despertó sola, se dio la vuelta y miró el reloj que estaba en la mesilla
de noche, se sorprendió al ver que eran las seis, había dormido unas horas
pero le parecía que habían sido más. La habitación estaba a oscuras, pero una
luz tenue brillaba en la parte superior de las cortinas.
Al incorporarse oyó como se arrugaba un papel, miro a su alrededor y

encontró una nota sobre la almohada, se estiro para encender la lámpara de la
mesita para poder leerla.
Buenos días, Vanni,
He desconectado el teléfono después de recibir una llamada ayer

por la noche. Como estabas muy cansada no te has despertado.
Tus hermanos están a salvo. He ido a tu casa esta mañana para

traerte algo de ropa pero volveré enseguida.
En caso de que te despiertes antes de que yo vuelva, solo quería

decirte que estás preciosa cuando duermes y ha sido un honor
pasar contigo toda la noche.
No puedo esperar para volver a hacerlo.
Smiley
241
Vanni volvió a leer la nota, miró el reloj y vio que llevaba fuera más de catorce
horas. No anoche, pero por la mañana sí que debería hablar con sus hermanos.
En realidad no le importó mucho no hacerlo. Su hermano levantaría la voz y se
le oiría hasta en el infierno, y su hermana se quejaría de que Vanni había
trastornado su perfecta vida.
Se levantó de la cama sintiéndose como nueva y entró en el cuarto de baño, sin

poder evitar la sonrisa que tiraba de la comisura de sus labios. Smiley pensaba
que era preciosa y su nota no dejaba duda alguna de que no había sido una
aventura de una noche. Ningún hombre le había dejado jamás una nota sobre
una almohada.
Abrió el agua caliente de la ducha y se metió bajo el chorro. Cuando terminó

de ducharse y cepillarse los dientes, cogió una toalla grande, se la puso
alrededor del cuerpo y salió del cuarto de baño con la esperanza de que Smiley
hubiera vuelto. No estaba.
Colgó del armario una enorme camiseta y se la puso. Se suponía que iban a ir
de compras, pero no había nada que fuera aceptable para salir de la casa.
"¿Hola?" Esa no era la voz de Smiley.
Vanni se puso un par de pantalones cortos de algodón bastante holgados y

salió de la habitación. Wager estaba allí de pie en medio de la sala de estar
sosteniendo una bandeja, y sonrió cuando la vio asomándose por una esquina.
"Buenos días, Vanni. Te he traído el desayuno."
"Gracias." contestó apartándose el pelo mojado de la cara.
Entró en el salón siendo consciente de que llevaba puesto algo que

normalmente utilizaba solo para dormir.
"Buenos días también para ti."
"¿Quieres que te deje esto en la mesa de la cocina?"
242
"No, en la mesa de centro estará bien. Te agradezco mucho que me hayas
traído el desayuno."
"Es algo que solo hacemos con los invitados especiales." Dejó la bandeja en la
mesa y se enderezó, frunció la nariz y sonrió. "Smiley se ha quedado aquí
contigo."
"¿Cómo sabes eso?"
Su mirada fue al suelo junto al sofá, en busca de alguna evidencia de lo que

habían hecho ayer por la noche, pero lo único que estaba fuera de lugar era la
mesa de centro que Smiley había movido, dejándola a pocos metros de su
lugar original.
"¿Has hablado con él?"
"Puedo detectar su olor. Es bastante fuerte."
"Guau. ¿Tienes tan buen olfato?"
Él sonrió.
"Sí. Te puedo decir todo tipo de cosas con mi nariz." Ella le creyó. "Me alegro
de que en esta ocasión no fuera la droga de reproducción lo que os ha llevado
a tener sexo. Sé que en esta ocasión la comida y la bebida no habían sido
manipuladas. Estaré fuera si me necesitas."
Wager cruzó la habitación y cerró la puerta detrás de él.
"Mierda."
Vanni olisqueó el aire, incapaz de oler nada más aparte del olor del beicon y el
café proveniente de la bandeja. Le preocupaba un poco saber que Wager podía
decir que habían tenido relaciones sexuales.
Se sentó y estudió la comida... huevos revueltos, tostadas, beicon y croquetas

de patata. El café era negro, pero había crema y sobres de azúcar en la bandeja.
Cogió los cubiertos, la servilleta y atacó la comida.
243
Su estómago rugió de necesidad. Se había perdido la cena y tenía hambre.
Unos minutos más tarde se abrió la puerta principal y Smiley entró con una
mochila colgada del hombro y una bolsa negra llena de ropa. Él sonrió.
"Estás despierta y duchada."
"Hola."
Vanni se sentía algo cohibida, pero intentó no demostrarlo. Habían pasado la

noche juntos y tenía que superar la timidez que sentía al estar frente a él.
Smiley había dejado bien claro con esa nota que pensaba pasar mucho tiempo
con ella mientras estuviera en Homeland, y no había forma de saber por
cuánto tiempo estaría allí.
Smiley dejó caer la mochila y puso la bolsa de ropa en la silla que había junto a
la puerta. Llevaba una camisa azul de manga larga y unos pantalones negros
con las perneras metidas en un par de botas negras de motorista. Ese estilo le
sentaba muy bien. Su mirada se encontró con la suya.
"Lo siento, he tardado más tiempo del previsto. Justice quería verme. El equipo
de relaciones públicas ha traído esta bolsa de ropa para ti. Según me han dicho
incluye un conjunto entero de... complementos para salir. Supongo que eso
significa que la ropa interior y los zapatos están incluidos. "
"Eso está muy bien. Espero que las tallas no varíen demasiado."
Smiley cruzó la habitación y se sentó en la mesa junto a la bandeja.
"Tengo que confesarte algo."
El tenedor se quedó inmóvil a medio camino de su boca. La primera vez que

había oído a un hombre decir esas palabras había sido su primer novio cuando
le dijo que había dejado embarazada a otra chica.
Así fue como había terminado su relación y se había dado cuenta de lo cabrón
que había sido.
244
"El equipo especial de las Especies entró en tu apartamento y miraron tu talla
en el armario. Le dieron la información a nuestros relaciones públicas para que
pudieran comprar la ropa que necesitabas para hoy."
"¿Irrumpieron en...?"
"Sí. Lo siento, Vanni. Eso no quiere decir que nosotros no confiemos en ti. Es
que dormías tan plácidamente que me negué a despertarte. La ropa que llevas
es evidente que no es de tu talla. Sé que vives con otra mujer, así que le di a
uno de nuestros hombres la camiseta que habías llevado puesta para que
pudiera reconocer tu olor en las prendas. Él identificó tu ropa y miraron las
tallas. Uno de los humanos que trabaja con el equipo fue a una tienda 24 horas
y ha elegido algo para ti. Espero que te guste." Vanni miró la bolsa y luego a
Smiley. Él frunció el ceño. "¿Estás enfadada? Se aseguraron de cerrar bien la
puerta de tu casa cuando acabaron y no causaron ningún daño. Los del equipo
quisieron comprarte un conjunto nuevo para que te lo pongas hoy cuando te
llevemos a comprar ropa nueva. Esto nos da un motivo para demostrarles a
todos que estamos juntos. No me pareció bien que cogieran tus pertenencias
sin tu permiso."
"Estoy un poco sorprendida. Me parece mucho trabajo cuando sólo con

preguntarme la talla se solucionaba el asunto."
"Vayamos por partes. Necesitabas dormir y me hice cargo de la situación.

También hemos pedido productos personales para ti, como los que tienes en tu
casa. Los entregarán hoy."
"¿Productos personales?"
Él sonrió.
"Productos de baño. Champú, acondicionador, gel de baño y hasta el

desodorante y la pasta de dientes que te gusta."
"Está bien."
245
Le parecía un poco exagerado pero no podía quejarse puesto que había dicho
que no habían dañado nada. En realidad, había sido muy considerado de su
parte.
"Gracias."
Él sonrió.
"Elegí este conjunto de entre todos los que te hemos traído, espero que no te
importe. Enviarán el resto más adelante, si lo deseas. Pero hoy te llevaré de
compras. Pensé que te gustaría elegir la ropa a tu gusto."
"No me importa."
Tuvo que tirar todo lo que Mable había elegido para ella cuando la habían
encerrado en la casa de Gregory.
"¿Has comido?"
Le preguntó al tiempo que le indicaba que si quería podía compartir su

comida.
"Sí, ya he comido. Gracias."
"¿A qué hora te has ido?"
"Alrededor de las cuatro. Pensé que estaría de vuelta antes, pero me ha llevado
más tiempo del que pensaba ir a Seguridad para recoger tu bolsa y
empaquetar mis cosas. He traído lo suficiente para un par de días y cuando se
me acaben puedo conseguir más."
Vanni se las arregló para no quedarse boquiabierta. Lo había dicho como si

pensara quedarse todo el tiempo que estuviera en Homeland. No le parecía
mal. En realidad le parecía maravilloso y la consolaba saber que no estaría
sola.
"Por favor, Vanni comete la comida, necesitarás de todas tus fuerzas."
246
Se alegró de no tener comida en la boca cuando su mirada bajó hasta sus
pechos y entrecerró los ojos con una mirada hambrienta que llevaba implícito
el mensaje. Miró hacia arriba y le sonrió.
"¿Estás lista para ir hoy de compras y ser acosada por los humanos y sus
cámaras?"
"Supongo que sí."
"No te preocupes, nadie se acercara demasiado. Te protegeré y vamos a tener a

un par de equipos de seguridad a nuestro lado. Justice no le ha dicho a nadie
nuestro plan por lo que les llevara un tiempo a los medios de comunicación
saber a dónde vamos."
"¿Eso es bueno o malo?"
"Bueno. Los humanos utilizan las redes sociales, y cuando nos ven suben las
fotos y la prensa llega casi de inmediato. Esto lo haremos con rapidez, antes de
que lleguen las furgonetas y empiecen a grabar. Siempre es así."
"¿Tienes que aguantar eso cada vez que vas de compras?"
"No, nosotros no solemos compramos la ropa fuera. Lo hacemos todo on-line,

pero hay veces que tenemos que salir y no se puede evitar. En la Reserva no
están tan mal las cosas, porque no hay muchos hoteles o moteles para alojar a
los periodistas que nos acosan. Los humanos que viven en la localidad cercana
no son muy acogedores con los de la prensa, por lo que allí tratamos con ellos
mucho menos. Aquí en Homeland puede ser bastante agobiante."
Vanni se acabó la mayor parte de su desayuno, aunque su apetito había

desaparecido hacía tiempo. Su breve relación con el circo mediático que había
delante de su casa no era un buen recuerdo.
"Creo que en realidad a nadie le gusta a la prensa."
247
"Los humanos que viven en la Reserva son amigos nuestros, y no toleran a los
manifestantes." Sonrió. "Me gusta el Sheriff Cooper. A menudo nos pide ayuda
y detiene a quien causa problemas a las Especies."
El complejo de la ONE conocido como la Reserva se encontraba en el norte y

era un viaje un poco largo para ir a visitarlo.
"¿Vas a menudo allí?" Le preguntó.
Sintió un nudo en el pecho al pensar en que se podía marchar durante meses.

No le gustaba. Eso suponía que no podría verle cuando quisiera.
"Vivo en ambos sitios. Depende de dónde se me necesite más."
"Oh."
Bajó la mirada a la comida para ocultar la manera en que la había afectado la

noticia. Las relaciones a distancia no funcionaban jamás, al menos ninguna que
ella supiera.
"¿Vanni?"
Ella se puso de pie.
"Debería de ir a cambiarme. Espero que me sirva la ropa." Atravesó la

habitación y levantó la bolsa de ropa. "Guau. Es más pesada de lo que
esperaba."
Smiley se puso de pie y fue hacia ella, y cuando se dio la vuelta casi se chocó
contra él.
"¿Qué pasa?" Le pregunto con el ceño fruncido.
"Nada." Contestó ella levantando la cara hacia él.
"Dime la verdad. ¿Qué he dicho o hecho para que te cierres de esa manera?"
"Estoy nerviosa por salir de compras."
Él se inclinó un poco acercándose más a ella.
248
"Eres muy mala mentirosa."
"Estoy nerviosa por dejar Homeland." Dijo sosteniéndole la mirada.
"¿Qué más te ocurre?" La observó de cerca. "Me has preguntado sobre la

Reserva. ¿Te asusta? ¿Qué has escuchado sobre la Zona Salvaje? En realidad
no alimentamos a los tigres y leones que hemos rescatado con nuestros
enemigos."
"¿Qué? Nunca he oído hablar de eso."
"Estabas en la conferencia. Algunos de los manifestantes que estaban allí lo

estaban diciendo."
"No prestaba atención a lo que decían. Eso es horrible. Creo es fantástico que
halláis adoptado animales que otros habrían sacrificado. Leí una historia el
año pasado acerca de los dos osos grizzly que algún idiota había maltratado y
que fueron encontrados medio muertos de hambre, encerrados en jaulas. Entre
los humanos no podían estar, no tenían sitio donde alojarlos ya que no hay
parques zoológicos cerca y no tenían espacio para ellos, por eso la ONE se
ofreció a llevárselos."
"Gus y Pete." Sonrió. "Ahora ya están bien. Antes se temía por su vida."
"En las noticias dijeron que estaban en muy mal estado."
"Habían sido maltratados y encerrados. Estaba allí cuando llegaron. Ahora los
dos han subido de peso y se están adaptando muy bien."
"Eso es genial." Su admiración por él subió un punto más. "¿No es un poco

peligroso? Quiero decir, he leído que no están en jaulas."
"No deben estar en jaulas. Nadie puede ser feliz encerrado. Han hecho amistad
con algunos de los residentes y son muy juguetones. Las Especies cuidan bien
de ellos."
"¿Has jugado con ellos?"
249
Él sonrió.
"Sólo hay que vigilar sus garras y sus dientes cuando tienen hambre. A Pete le
encanta que le froten la barriga y a Gus le gusta nadar en el río. Le enseñé a
pescar."
Vanni se quedó con la boca abierta. Smiley se rio extendió la mano, le puso el
dedo debajo de la barbilla y se la cerró.
"Te los presentaré si quieres, te prometo que estarás a salvo. Los residentes de
la Zona Salvaje han hecho maravillas para socializarlos, y están aprendiendo a
confiar en nosotros."
Vanni se recuperó un poco.
"¿Cómo enseñas a un oso pardo a pescar y por qué lo hiciste?"
"Nacieron en cautividad así que no desarrollaron sus instintos naturales. Los

osos son inteligentes y aprenden lo que ven. Era sólo cuestión de llevarlos al
río y mostrarles cómo pescar. Aprendieron rápidamente, y los residentes de la
Zona Salvaje les dedican mucho tiempo." Él puso su mano sobre la de ella.
"Deberías ir a vestirte, la tienda a la que tenemos previsto ir a abre a las ocho y
tenemos que desplegar el sistema de Seguridad y repasar los conceptos básicos
antes de marcharnos del Homeland."
"¿Conceptos básicos?"
"Es sobre las medidas que tomemos de seguridad y horarios para que
podamos controlar la situación. Creo que el equipo de relaciones públicas
también quiere hablar con nosotros".
"De acuerdo. Iré a prepararme."
"Voy a lavar los platos."
Vanni se detuvo y le vio recoger su bandeja e ir a la cocina a lavar el plato y la

taza. Era muy dulce. Eso le recordó una vez más lo diferente que era de los
250
tipos con los que había salido, ellos habrían esperado que fuera ella la que
hiciera las tareas.
Entró en la habitación y dejó la bolsa de ropa sobre la cama, todavía pensando

en lo que había dicho en relación a los osos. Se lo imaginó de pie medio
desnudo al lado del río con las dos bestias feroces, enseñándoles a pescar.
"Al parecer, estoy saliendo con el hombre que susurraba a los osos." murmuró,
impresionada.
www
Smiley tarareaba mientras secaba los platos, volvió a limpiar las encimeras ya
limpias, luego dobló la bayeta húmeda y la dejó sobre el soporte. Le costó
resistirse a no entrar en el dormitorio, pero no quería que Vanni sintiera que
no tenía intimidad. Colocó la mesa de café y ahuecó los cojines del sofá.
Una mirada alrededor le aseguró que la habitación estaba ordenada. Cogió su

mochila del suelo y la puso en el interior del armario para mantenerla fuera de
la vista, por si eso le recordaba que planeaba mudarse aquí.
Vanni no le había replicado cuando mencionó que había traído ropa suficiente
para unos días. Una hembra de las Especies habría cogido su mochila, se la
hubiera tirado y le hubiera enseñado la puerta, ordenándole que se buscara
otro sitio, y cerrando con llave la puerta con él en el otro lado para evitar que
volviera a entrar.
Sonrió, agradecido de que Vanni fuera humana.
251
El suave sonido del clic cuando se abrió la puerta atrajo su atención y se quedó
mirando a Vanni, cuando apareció por el pasillo de baldosas. La camisa
abotonada que llevaba se ceñía a sus pechos y sus costillas. Había pensado que
le quedaría bien, pero no había imaginado que iba a llevar un par de botones
en la parte superior abiertos enseñando el inicio del escote.
Su mirada fue bajando hasta llegar a la ajustada falda negra que le llegaba
hasta la mitad del muslo, y le acentuaba las redondeadas caderas,
provocándole ganas de acariciarlas.
Vanni era baja de estatura pero los tacones hacían que sus piernas parecieran
más largas de lo que realmente eran.
"¿Me sienta mal?" Su mirada fue a su cara.
No llevaba maquillaje y se había recogido el pelo en una cola de caballo.

Smiley negó con la cabeza.
"La falda es un poco corta y la camisa me queda estrecha, he intentado

abrocharme los botones hasta arriba, pero se me abrían a la altura del
sujetador."
"Estás perfecta."
El elogio puso color en sus mejillas y eso le irritó. Era como si los machos
humanos no le hubieran dicho que era atractiva, cuando deberían haberlo
hecho. No iba a cometer el mismo error.
"Eres muy hermosa, Vanni."
Tenía las manos entrelazadas sobre el vientre y al oír eso enderezó los
hombros.
"Gracias. Es muy amable de tu parte que digas eso."
Él dio unos pasos acercándose más.
252
"No soy amable." Su mirada fue a la uve de la camisa y se pasó la lengua por
los labios. "Ninguno de mis pensamientos lo son."
Vanni le miró fijamente.
"No comprendo."
La cogió suavemente las manos.
"Estás muy sexy y nada me gustaría más que quitarte esa ropa, echarte sobre
mi hombro y llevarte de vuelta a la cama… si no fuera porque un todoterreno
nos está esperando fuera. Pero más tarde sí que lo voy a hacer. Cuenta con
ello."
Eso pareció sorprenderla.
"Si ni siquiera llevo maquillaje. Quiero decir, me veo mucho mejor con él."
"No, no lo haces. Te prefiero tal y como estás."
Su mirada bajó hasta su boca y él deseaba besarla, pero sabía muy bien que si
lo hacía terminaría llevándola al dormitorio. Por muy tentador que fuera, no
necesitaba que Justice, Fury o Jericho le patearan el culo por haber arruinado
los planes para acabar con los rumores que la iglesia Wood había iniciado.
A él no le importaba lo que los humanos pensaran de él, pero habían dañado

la reputación de Vanni
"Tenemos que irnos."
Ella asintió con la cabeza y por fin dejó de mirar su boca.
"De acuerdo."
"Va a salir todo bien. No voy a separarme de tu lado."
"Confío en ti."
Un cálido sentimiento se instaló en su vientre. Eso era un obstáculo en el

camino para lograr que ella fuera su compañera.
253
"Bien. No perdonaría al que intentase hacerte daño." Sus ojos se agrandaron. Él
se limitó a sonreír. "Eres mía y tengo que protegerte, no voy a fracasar."
Le soltó las manos y dio un paso atrás, ofreciéndole el brazo como había visto
que lo hacían los caballeros en las películas.
"Permíteme acompañarte al todoterreno, preciosa."
Vanni puso los dedos alrededor de su antebrazo y deseó que se hubiera puesto
una camisa de manga corta para poder disfrutar de su tacto. Le gustaba el
contacto de piel con piel.
Smiley bajó la mirada mientras caminaban, para ver mejor su escote. Su polla
se agitó dentro de sus pantalones con el pensamiento de poner su boca allí.
Hizo un esfuerzo para contener su deseo lo suficiente como para controlar sus
reacciones físicas. Tener ahora una furiosa erección sería muy evidente.
La guió fuera. Slash, Jericho, Wager y Flame eran los cuatro Especies que había
solicitado para el equipo de respaldo. Smiley le dirigió una mirada de
advertencia a Wager, que se quedó mirando demasiado tiempo las piernas de
Vanni. Wager frunció el ceño, pero desvió la mirada de inmediato. Smiley se
detuvo junto a ellos.
"Ya conoces a Wager, Vanni. Sé que te presentaron a Jericho ayer. Estos son
Slash y Flame. Son amigos míos y han sido asignados al servicio de protección.
Viajarán con nosotros en nuestro coche. Otro vehículo llevará al resto del
grupo de trabajo humanos."
"Hola." Vanni sonrió a los dos hombres. "Encantada de conoceros."
Observó su rostro de cerca con la esperanza de que ninguno le resultara

atractivo. Vanni no miró a ninguno de ellos más que unos pocos segundos.
Smiley se dio cuenta de que echó un segundo vistazo a Jericho. El macho le

había dicho que sus ojos la asustaban. Smiley la atrajo hacia sí, acercándola
más a su cuerpo.
254
"Me alegro de conocerte." sonrió Flame. "Tenemos que ir de compras, esa es la
cuestión de todo esto, además de demostrar a los humanos que Smiley no es
un monstruo al que odias."
Smiley gruñó. No le gustó la manera en que la sonrisa de Vanni se desvaneció

con el comentario de Flame. Flame retrocedió.
"Lo siento, solo pretendía hacer una broma."
"No se ha reído."
Smiley intentó controlar su temperamento, pero le estaba resultando difícil,

sabiendo que Vanni se había ofendido.
"Simplemente conduce, Flame… en silencio."
"Está bien."
El macho huyó y dio la vuelta a la camioneta. Jericho abrió la puerta del

copiloto.
"Por favor entra, Vanni. Y siéntate en el asiento del medio, al lado de Smiley.
Yo me sentaré al lado de la puerta."
Smiley la ayudó a subir y la vio luchar con la falda para evitar que se subiera.
Jericho puso una mano sobre su hombro cuando intentó ir detrás de ella.
"Cálmate." murmuró el macho.
Smiley no estaba seguro de qué quería decir.
"Te comportas de una manera irracional. Eres Smiley, no un gruñón, listo para
arrancarle la cabeza a cualquier hombre que mire a su mujer. Todo el mundo
sabe que es tuya."
Smiley se sacudió de su agarre y se subió a la camioneta. Jericho cerró de golpe

la puerta y él se estremeció. Su amigo tenía razón. No se estaba comportando
como normalmente lo hacía. Vanni le volvía loco. Pero Wager no tenía por qué
mirar sus piernas y Flame no debería hablar con ella en absoluto.
255
Smiley se puso el cinturón de seguridad e intentó relajarse, no quería que viera
el estrés que sentía. Ella le tocó la mano, y él la miró a los ojos.
"¿Estás bien?" Parecía preocupada.
"Sí."
Se abrió la puerta y entro Jericho. Ocupó el otro asiento al lado de ella. No le

gustó que su amigo estuviera tan cerca y luchó contra el deseo de quitarse el
cinturón y ponerla sobre su regazo. Aunque era irracional y estúpido, sentía
ese impulso. Vanni le acarició el dorso de la mano.
"No tengo miedo. Me siento segura, puedes relajarte."
Deseaba que fuera así de simple. Los celos eran una emoción nueva y no le
gustaban en lo más mínimo. Sin embargo reconoció que no tenía derecho.
Vanni no era su compañera, así que podía atraer la atención de otros machos.
Tuvo que resistirse a echar un vistazo a su vientre. Su hijo podría estar

creciendo allí, pero no era por eso por lo que la deseaba. Si eso fuera así
significaba que tendría una razón válida para luchar contra cualquier macho lo
bastante tonto como para coquetear con ella.
"Escúchala." le ordenó Jericho. "Relájate. Contamos con dos equipos para esta
misión. Es una salida sorpresa y será breve. No creemos que surja ningún
problema, pero estamos preparados por si algo sucediera. Incluso tenemos un
helicóptero preparado, por si necesitamos una evacuación aérea si surge una
emergencia."
Nadie le había mencionado esto último.
"¿Por si hay una urgencia médica?" preguntó Smiley con un nudo en el

estómago.
¿Pensaban que alguien podía disparar a Vanni?
No iba a correr ese riesgo.
256
"Voy a llamar y cancelar esto ahora."
El rojo en los ojos de Jericho brilló más de lo normal. Era una muestra su ira. Se
había dado cuenta inmediatamente de lo que estaba pensando Smiley.
"Es para el caso de que las carreteras estén congestionadas, Smiley. Nadie
espera que haya violencia. Esta salida es necesaria para demostrar a los
humanos que no hemos hecho daño a uno de los suyos. Tal vez tengamos que
usar el helicóptero si estamos atrapados en el tráfico y los medios de
comunicación tienen una oportunidad de alcanzarnos. Sabes que esos
bastardos conducirían por los laterales de la carretera para llegar hasta
nosotros."
"Oh." Se tranquilizó un poco. "Ese es un buen plan."
Jericho cruzó los brazos sobre el pecho.
"Sólo pégame un tiro."
Vanni miró boquiabierta a su amigo.
"¿Qué?"
Jericho no la miró ella, pero fulminó con la mirada a Smiley.
"Él ya sabe a lo que me refiero. Prefiero que me peguen un tiro que sufrir de
insensatez."
Smiley miró al frente, giró su mano, y entrelazó sus dedos con los de Vanni. Se
estremeció por dentro, pero agradeció que Vanni no le preguntara nada,
dejándolo pasar.
Él sabía lo que Jericho quería decir. El macho prefería que le pegaran un tiro a
enamorarse de una mujer.
No estaba siendo un buen ejemplo para su amigo. Había estado de mal humor
y explotaba por nada desde que había conocido a Vanni.
257
Todo el mundo apreciaba su buen humor y lo que necesitaba era demostrarlo
más. Respiró profundamente varias veces para ayudarse a calmarse.
Haría gala de su mejor humor cuando estuvieran de compras, e iba a

demostrarle lo divertido que podía llegar a ser. Las hembras apreciaban
mucho que un hombre pudiera hacerlas reír.
258
Capítulo Quince
Vanni no era fan de Miles Eron. El sesentón jefe del equipo de relaciones
públicas de la ONE no era del tipo simpático.
"Muéstrate feliz en todo momento." exigió, empujando sus gafas hasta el

puente de la nariz. "No estoy seguro de que me guste ese vestuario." Su
mirada escaneó a Vanni. "¿Cindy? Trae tu culo aquí."
"¿Sí?"
Una mujer con un rebelde pelo rizado (la masa apenas se sostenía en una cola
de caballo en la parte superior de su cabeza) dio un paso adelante.
"¿En qué diablos estabas pensando? Apenas entra en esa camisa. Dale la tuya."
"No estoy de acuerdo. Tiene un aspecto fantástico. Pero fue Craig el que la
compró, no yo. Me atengo a su elección. Le queda bien."
La mujer levantó la barbilla, mirando abiertamente a Miles con desprecio.
"La camisa es demasiado ajustada. Tienes las tetas enormes, pero quítate la
tuya y dásela a la chica." Miles hizo un gesto con la mano. "Ahora."
"Vanni se ve perfecta." Smiley fulminó a Miles. "No pida a su mujer

desnudarse en compañía de otros hombres."
"Como si lo fuera a hacer." murmuró Cindy. Ella levantó la voz. "No estamos
en 1950, señor. Las mujeres están cómodas y hacen alarde de su feminidad. Es
una mujer bonita con una figura estupenda. Déjala."
Su voz se elevó.
259
"Le dije que sé que usted tiene un buen ojo para la clase." Hizo una pausa.
"Pero con todo el respeto, usted está equivocado en este caso. Es por eso que
me contrató, ¿recuerda? Soy la voz de la generación más joven."
Justice se rio entre dientes.
"Basta, Miles. Vanni se ve bien. Tienen que irse."
Smiley tiró de su brazo y la condujo fuera del edificio. Vanni miró hacia atrás y
vio a Cindy diciendo adiós. Sintió simpatía por ella cuando le devolvió el
gesto.
"Guau. ¿Miles siempre es un idiota? No podría trabajar para él." Ella miró a
Smiley por una respuesta.
"Puede ser abrasivo pero es bueno en lo que hace. Te ves perfecta. Esa mujer
tenía razón. Él es un idiota."
"Y al parecer un poco duro de oído." Ella sonrió. "Eso fue un poco raro."
Smiley se echó a reír.
"Cindy lo hace a menudo cuando tenemos reuniones. Nos reímos a carcajadas

porque no tiene ni idea de lo que ha dicho o por qué nos divierte."
Un poco de celos se despertaron en Vanni.
"¿Entonces la conoces bien?"
"Cindy es una buena mujer. Acompaña a Miles a una gran cantidad de

nuestras reuniones conjuntas, cuando surgen problemas de comunicación.
Trabajan en la Reserva principalmente, pero vinieron aquí ayer por la noche
para ayudarnos a manejar la situación."
"Bien. Me pongo en situación."
No le gustó el sonido de eso. Smiley la ayudó a entrar en la camioneta.

Mantuvo su mano.
260
"Tú no causaste este problema. Coloca la culpa donde pertenece. La Iglesia
Woods ha tenido en la mira a la ONE durante bastante tiempo."
Jericho se sentó junto a ella. El gran primate le dedicó una media sonrisa que le
hizo lucir menos amenazante. Quería preguntar a Smiley si había tenido
alguna cita con Cindy, pero no quería hacerlo con otras cuatro Nuevas
Especies delante. Flame y Slash se sentaron con el conductor. Wager tomó la
tercera fila de asientos. Miró hacia atrás, pero él estaba vigilando por la
ventana trasera.
Se apoyó en Smiley.
"¿Qué está haciendo?" señaló con el pulgar a Wager.
"Asegurarse de que no nos siguen y tiene un arma preparada, por si es

necesario."
Vanni lamentó haber preguntado.
"¿Arma?"
Smiley le tomó la mano y la estrechó.
"Es el procedimiento estándar."
"Tengo un arma también."
Jericho desató la correa de su chaleco Kevlar y alcanzó el interior, sacando una

pistola. Se la mostró y luego la devolvió a la correa.
"La seguridad está activada. Estamos bien entrenados."
"A veces las escondemos en público cuando dejamos las tierras de la ONE."
Smiley apretó su mano.
"¿No estás de guardia?"
Vanni había notado que todos, en ambos todoterrenos, llevaban uniformes de

la ONE, excepto Smiley.
261
"No. Esta es nuestra excursión y es su trabajo protegernos."
Se alegró de que Smiley no llevara un arma. Les tenía miedo.
"¿Crees que es realmente necesario que deban ir armados? Quiero decir, sólo
vamos a una tienda de ropa, ¿verdad? "
"Procedimiento operativo estándar." Slash habló desde la parte de atrás.

"Tenemos que estar preparados para defender nuestras vidas en todo
momento cuando no estamos en Homeland o en la Reserva. Muchos de los
oficiales llevan armas en la Reserva, sin embargo, incluso cuando están fuera
de servicio. Los muros son muy amplios y siempre en expansión. Es posible
que un intruso pueda atravesarlos, pero Homeland es más pequeño y más
seguro."
Vanni se sintió triste porque tuvieran que llegar a esos extremos. No podía
imaginar vivir en un mundo donde la mayoría de la sociedad tuviera que
mantener las armas atadas a sus cuerpos. Smiley levantó la mano y le rozó un
beso sobre los nudillos. Le miró, un poco sorprendida. Hacía las cosas más
dulces cuando menos se lo esperaba.
"No tenemos ningún crimen dentro de nuestra sociedad. Cuando nos

encontramos con alguno, por lo general involucra a seres humanos. Es raro
que alguien supere los muros. Se trata más de una medida de precaución."
Podía leerla demasiado bien. Pero era algo agradable.
"Simplemente, odio que tengáis que vivir así."
"Es nuestra forma de vida y disfrutamos de la libertad. Este es el costo. Hay

una gran cantidad de seres humanos que no quieren hacernos daño."
Flame rió entre dientes.
"Las cazadoras de pareja."
"¿Quiénes son?" eso despertó su interés.
262
"Nadie importante." negó Smiley. "Sólo humanas que son un poco demasiado
amables."
"O quieren que nosotros lo seamos." se rió Slash entre dientes.
"Ahora tengo mucha curiosidad." admitió Vanni.
"Son mujeres que enseñan los pechos a nuestros oficiales." resopló Jericho.
"Piensan que saltaremos locos de lujuria y que nos las llevaremos a casa."
"Oh."
Vanni no tenía idea de que la ONE tuviera groupies.
"Tendemos a ignorarlas." Smiley bajó la voz. "No son el tipo de humanos que
te llevarías a casa."
"¿Por qué no?"
"Están locas." respondió Jericho. "Una tiene noventa y seis años de edad. Es
una habitual en las puertas. Es una visión sin la que podría haber vivido."
Wager se rio.
"No llevaba nada y abrió su abrigo largo delante de Darkness. Ordenó a uno
de los miembros del grupo de trabajo que la llevara a tomar una taza de café
caliente. Le parecía que estaba pasando frío."
El pecho de Smiley retumbó y a ella le gustó el sonido de su risa. Una sonrisa

iluminó su rostro y ella se la devolvió.
"¿Qué sobre ti? ¿También se te han mostrado?"
A ella no le gustaba imaginar mujeres persiguiéndole.
"Me mantengo en los muros exteriores cuando vigilo. Los seres humanos
tienden a reunirse en las puertas principales." Smiley se encogió de hombros.
"Sobre todo hago labores internas."
263
"Smiley es bueno con los humanos." ofreció Flame. "Ha tenido algunas tareas
muy importantes y es respetado por todos." Soltó el volante con una mano
mientras salían por las puertas principales y señaló a Slash. "Cuéntale."
Slash se volvió en su asiento.
"Smiley es un gran tipo. Es inteligente y muy manso."
"Basta." dijo Smiley entre dientes.
Vanni miró a los dos hombres. Smiley parecía enojado. Slash enfrentó adelante
y murmuró algo en voz baja que ella no entendió.
"No necesito ayuda." dijo Smiley.
Se mordió el labio y aguantó una carcajada. No hacía falta ser un genio para
darse cuenta de que le estaban hablando a ella.
"Nunca usaría la palabra manso."
No podía creer que eso hubiera de su boca. Lanzó una mirada a Smiley para
ver su reacción y sintió aumentar el calor en sus mejillas por la forma en que
sus ojos se abrieron más.
"No lo haría." insistió.
"¿Qué palabra usarías?" Smiley arqueó una ceja.
"Increíble."
Estaba coqueteando con él y divirtiéndose. Él sonrió.
"Eso me gusta más."
Agachó la cabeza y frotó el pulgar contra el suyo. Sostenerse de las manos

parecía una cosa muy tonta, pero se sentía bien. Había traído su ropa para
quedarse con ella. La nota le había dejado a entender que quería algo más que
solamente sexo.
264
Entrar en ese bar podría haber parecido una pesadilla justo después, pero
estaba casi agradecida de haberse sentado a su lado. Smiley había entrado en
su vida. No lo lamentaba.
Al menos no en este momento. Espero seguir pensando eso la semana que viene
o el mes que viene.
Apartó los pensamientos negativos. Ninguna relación era una garantía para un
vivieron-felices-para-siempre. Lo había aprendido de la manera más dura, dos
veces. Le había herido profundamente descubrir que el primer amor de su
vida era un bastardo mentiroso que la había engañado durante años, sin
intenciones reales de establecerse o ser el tipo de hombre que la haría feliz. Él
sólo había sido un excelente mentiroso y actor. Sin embargo, perder a Carl no
le había hecho daño. Eso le había enseñado a no conformarse con alguien sólo
porque se sentía sola.
Levantó la barbilla y observó a Smiley. Estaba mirando por la ventanilla.

Estudió su perfil. Era un hombre guapo, pero aún mejor, era un hombre
bueno. Habían pasado a través de una experiencia traumática juntos y él había
estado más preocupado por su bienestar que por el suyo propio. Mostraba un
carácter fuerte y un buen corazón.
Una quemadura lenta de ira se construyó en su interior. Carl y su padre

querían hacer daño a las Nuevas Especies. Miró a los dos hombres en el
asiento delantero y luego al que estaba a su lado. Lucían aterradores, sin duda,
con sus características alteradas y cuerpos musculosos. Eso no les convertía en
malas personas. Todos estaban allí para protegerla a ella, a una extraña. No
había conocido a mucha gente en su vida que tomaría riesgos por alguien a
quien no conocía.
Vanni se dio cuenta de lo mal que podría haberles ido si la otra mujer se
hubiera sentado al lado de Smiley esa noche en el bar. La Iglesia Woods le
habría hecho verse como un violador que drogaba a su víctima.
265
Habrían dicho esas mentiras a todo aquel que quisiera escucharles, dañando a
la ONE, quienes había sido nada más que amables con ella y que no se
merecían eso.
Se preguntó si los medios de comunicación la creerían, si les contaba lo que

había sucedido cuando devolvió el anillo de compromiso a Carl. Gregory
Woods y otros hombres, como ese horrible Bruce, no debían salir impunes de
sus malas acciones. No era justo. Podían hacerlo de nuevo y hacer daño a otro
inocente, ya que habían hecho con ella. Nadie debía pasar por estar encerrado
durante una noche y amenazado de muerte.
"¿Vanni?"
Smiley alargó la mano y le acarició el brazo. Ella le miró.
"¿Sí?"
"¿Estás bien? No te preocupes. Tu seguridad es mi prioridad. No permitiré que

te ocurra nada. Esto va a ser divertido."
"Te creo."
"Te voy a comprar ropa. No mires las etiquetas. El dinero no es una

preocupación."
"Muy bien."
Pero se lo devolvería en cuanto recuperara su cartera y las tarjetas de crédito.

Hizo una nota mental para cancelarlas más tarde. Había estado demasiado
aturdida para pensar en esas cosas hasta ese momento. Lo último que quería
era que la Iglesia Woods comprara algo a su costa.
"Ya casi estamos allí." Smiley le apretó la mano.
Miró por el parabrisas y se dio cuenta de que Flame estaba conduciendo hacia
un centro comercial. Sus cavilaciones la habían dejado inconsciente de lo lejos
que habían ido. Se tranquilizó cuando vio el nombre de la tienda en frente de
la que aparcaron.
266
Le había preocupado que la llevaran a una tienda de ropa de lujo, pero era
una de las cadenas de tiendas de ropa donde compraba normalmente. No
había un montón de coches en el aparcamiento, ya que acababan de abrir.
"¿Estás lista? Estaré contigo."
Smiley estudió sus ojos. Sabía que estudiaba cualquier muestra de emoción e
intentaba evaluar su estado de ánimo. Ella asintió, obligándose a relajarse.
Smiley abrió la puerta y mantuvo su mano mientras se deslizaba detrás de él.

Los oficiales de la ONE les rodearon, poniéndoles enmedio. Un coche pasó, la
conductora abiertamente sorprendida al ver al equipo. La mujer casi chocó con
otro coche antes de pisar el freno.
"Así se empieza." suspiró Jericho. "Ahora esperaremos a que saquen los

móviles."
Smiley le soltó la mano y tiró de ella contra su lado, envolviendo su brazo

alrededor de su cintura.
"Sólo sonríe. Tienden a querer tomarse fotos con nosotros, pero vamos a
mantenerte a salvo. No quiero que nadie se acerque demasiado a ti."
"No gruñas a nadie." Le advirtió Slash, su mirada fija en Smiley. "Sonríe. No

me importa lo que digan tus instintos. ¿Lo entiendes?"
"Lo sé." aseguró Smiley. "¿Ves?"
"Te ves estreñido, pero tratando de parecer feliz por eso." murmuró Flame.
Vanni rió. Smiley sonrió de verdad. Le llegó a los ojos y transformó su rostro.
La abrazó con fuerza mientras el equipo del grupo de trabajo humano abrían
las puertas, pero se quedaban fuera. Tomaron posiciones como si planificaran
vigilar la entrada.
Los clientes y los empleados se volvieron para mirarles boquiabiertos. Vanni

enderezó los hombros y sintió gratitud porque Smiley estuviera a su lado. El
brazo alrededor de su cintura era reconfortante.
267
Flame se acercó y tiró de un carrito y se echó a reír.
"Me encantan los carritos. Siempre quiero saltar dentro de uno y que me
empujen."
"Se podría romper. Sin jugar." dijo Jericho con severidad. "Mantén los ojos
alerta pero pareciendo feliz por todo."
Vanni notó que faltaba uno de su grupo.
"¿Dónde está Wager?"
"Se ha quedado con los todoterrenos. Nadie será capaz de manipular los
vehículos sin que él lo sepa."
La explicación de Smiley mató algo de su alegría. Trató de ocultar su angustia.
¿Son paranoicos o ha ocurrido antes?
No quería preguntar. Se suponía que estaban allí para pasar un buen rato y ser
vistos juntos en público para demostrar que Gregory Woods era un mentiroso.
Eso le devolvió la sonrisa a su rostro. Realmente les odiaba, a él, a su hijo y a
esa iglesia.
"Simplemente tíramelo todo al carrito." ofreció Flame. "Os seguiré."
"Te estás divirtiendo mucho." dijo Jericho y suspiró. "Me recuerdas a un niño
hiperactivo."
"Me recuerdas a un padre gruñón." replicó Flame.
Slash cabeceó.
"Los seres humanos están mirando. ¡Comportaos! "
Vanni se rió y miró a Smiley.
"¿Son siempre así?"
"Sí." Alivió su dominio sobre ella y bajó la voz. "Tenemos veinte minutos antes
de que esto se nos vaya de las manos. Tenemos que permanecer aquí al menos
268
diez, para asegurarnos de que tomen bastantes fotos. Relájate y compra.
Necesitarás de todo, desde la piel hacia fuera."
¿En menos de veinte minutos?
Trató de ocultar su consternación. Pero fue un recordatorio de que era un

hombre, Nuevas Especies o no. Eso la divertía. No tenía ni idea de cuánto
tiempo tardaba una mujer en comprar. Asintió.
"Comprar. Lo tengo." Ella giró la cabeza para mirar Flame. "¿Estás listo?
Mantente cerca y simplemente iré lanzando cosas en el carrito."
Flame cogió el carrito.
"Tú diriges y te seguiré."
Vanni barrió su mirada alrededor de la tienda, buscando el área donde

guardaban su talla. Smiley se quedó a su lado mientras ella caminaba
resueltamente por los pasillos. Incluso se las arregló para hacer contacto visual
directo con otros clientes. Se acercaron a curiosear, pero una mujer sacó el
móvil de su bolso y les apuntó.
Smiley la agarró del brazo y la giró en esa dirección.
"Sonríe para ella, Vanni."
Ella posó con él. La desconocida se acercó con cautela y tomó la foto.
"¿Puedo sacarme una foto con uno de vosotros?"
Slash dio un paso adelante.
"Sería un honor."
La mujer sonrió.
"Gracias. Eres muy alto."
Él se rió entre dientes y se agachó un poco a su lado.
"Di queso."
269
Vanni se divertía, viendo a la mujer tomar una selfie con la Nueva Especie. Se
aseguró de que le gustaba la imagen y luego retrocedió.
"Agradecemos su apoyo." dijo Slash con voz áspera.
"Mi hija y mi hermana van a estar muy celosas." Dijo efusivamente la mujer.
"Me alegro." contestó Slash.
Smiley se inclinó un poco y le susurró al oído.
"Compremos. No me gusta recordártelo, pero tenemos que apresurarnos un

poco."
Vanni asintió y se dirigió hacia los bastidores de ropa. Flame se quedó justo
detrás de ella con el carrito. Sólo tomó las cosas que le llamaron la atención,
buscando rápidamente juntos aproximadamente ocho conjuntos.
"Esto bastará."
"Necesitarás bragas y sostenes." le recordó Smiley.
Ella se sonrojó, mirando hacia él con pavor. Él le guiñó un ojo.
"No es que quiera que los uses, pero Miles me hizo memorizar una lista. La
gente puede hablar de lo que compras."
Ella desvió la mirada de él a los demás Nuevas Especies revoloteando a su

alrededor.
"¿Delante de ellos?"
"No son tímidos acerca de esas cosas." Se rió entre dientes. "Sólo tú lo eres. Yo
te ayudaré."
No estaba segura de si eso la hizo sentir mejor o peor, mientras estrechaba su

mano y la llevaba a la sección de ropa interior de la tienda. Vanni le soltó la
mano, encontró su talla y sólo tomó varios conjuntos que le parecieron
270
suficientes. Solía ser más selectiva sobre tela y comodidad, pero sólo quería
acabar de una vez.
Agarró algunas bragas estilo culotte, pero Smiley se rio entre dientes,
atrayendo su atención. Él levantó un tanga azul brillante.
"Me gusta esto."
Vanni simplemente se dio la vuelta y cogió otro par más de ropa interior.
"¡Hecho!" Ella se volvió y las arrojó en el carrito.
Smiley colocó el tanga en el carrito, añadiendo unos pocos mas del mismo
estilo en otros colores.
"Deberías ver tu cara."
Parecía estar pasándoselo en grande.
"Eres tan linda, mi Vanni."
A ella le gustaba la forma en que la que llamaba.
"Nunca debes ser tímida para nada conmigo."
Pero no sólo estaba él, se recordó a sí misma, lanzando una mirada alrededor.
Se había reunido una pequeña multitud de clientes que parecía no tener nada
mejor que hacer que seguirles mientras les tomaban fotos. Rápidamente apartó
la vista de ellos y se obligó a mostrar lo que esperaba fuera una sonrisa.
Smiley se acercó y le ofreció el brazo. Su otra mano rozó unos mechones

sueltos de su pelo de la mejilla mientras se inclinaba más cerca.
"Casi ha terminado. Eres muy valiente."
Ella no se sentía de esa manera.
"Puedes hacer esto, mi Vanni. Estoy aquí. Ahora sólo tenemos que conseguir
unos zapatos. Los que llevas te hacen un poco inestable."
271
Los tacones no eran el problema. Eran sus nervios y la sensación de estar en el
escenario de algún juego. Se negó a mirar a las otras personas de nuevo, pero
podía sentir sus miradas. Agradecida, permitió que Smiley la guiara a la
sección de calzado. Un par de zapatos, un par de zapatillas de tenis y un par
de tacones negros de diez centímetros más tarde y acabaron.
"¿Podemos irnos ahora?" Realmente quería irse.
"Sí." Smiley la llevó a la parte delantera de la tienda.
Levantó la vista y se detuvo en seco. La vista del aparcamiento la sorprendió.

El equipo de la ONE que se había quedado fuera los mantenía atrás, pero al
menos un centenar de personas o más estaban bloqueando la zona.
"Todavía no es malo." dijo Slash con voz áspera. "Sigue siendo manejable. Sólo
dos han llegado equipos de noticias. Exigieron una entrevista, pero se les dijo
que no."
Extendió la mano y tocó su oreja, atrayendo su atención sobre el dispositivo

que llevaba colocado.
"Estoy en contacto con el equipo de fuera y con Homeland."
¿Sólo dos?
Vanni entró en pánico, pero Smiley pareció darse cuenta de que estaba a punto
de perderla. Él la hizo girar hacia él y bajó la cabeza, mirándola
profundamente a los ojos.
"Está bien. Estoy aquí. Ralentiza la respiración un poco."
Tomó una respiración profunda y la soltó, como si quisiera mostrarle cómo

hacerlo. Ella le imitó. Le sonrió.
"Esa es mi Vanni. Son personas curiosas. Eso es todo. En su mayoría sólo nos
quieren ver, si eso te ayuda. Vas a poder hacerlo."
272
Dudaba que alguna vez pudiera, no que tuviera que hacerlo. Silenciosamente,
se prometió que no habría más salidas. No le gustaba ser el centro de tanta
atención y exceso de celo.
Smiley le apretó la mano.
"¿Confías en mí?"
"Sí." No dudó en responder porque era la verdad.
"Estaremos bien. Esto todavía no es una gran reunión. Hemos tratado con algo
mucho peor. Vamos a pagar y salir. Estaremos de vuelta en Homeland en diez
minutos."
Ella volvió a respirar lentamente y se volvió, mirando hacia el frente de la

tienda de nuevo. Había tantas caras por ahí que resultaba extraño. Los oficiales
de la ONE tenían que ayudar desbloqueando la calle que corría entre la tienda
y la zona de aparcamiento. Notó que un par de agentes de policía se les habían
unido a lo largo de los lados para evitar que la gente entrase en la tienda. Su
viaje de compras estaba, en efecto, terminado.
La cajera sonrió cuando llegaron a la parte delantera. Parecía como si hubieran

abierto una caja sólo para Vanni y las Nueva Especie.
"Hola. Justo por aquí. ¡Os atenderé! "La mujer les hizo señas.
Vanni se lo agradeció a Smiley. Él se hizo cargo, la condujo allí y dio las

gracias a la cajera. La mujer le sonrió y le ayudó que su atención pareciese
estar centrada totalmente en Smiley.
"Nunca pensé que vería alguna nueva especie aquí."
La cajera empezó a escanear la ropa. Smiley acercó a Vanni.
"Se trata de Vanni. Me está visitando en Homeland y no llevó suficiente ropa.

Quería llevarla de compras."
273
La cajera, finalmente, se fijó en Vanni. Su boca se abrió y sus ojos se
agrandaron. Ella miró a Smiley, a continuación, a Vanni.
"¡Oh, Dios mío! ¡Sois esa pareja de la televisión!"
Vanni se apoyó en Smiley, ya que él estaba detrás suyo. Él le soltó la mano y

envolvió su brazo alrededor de su cintura.
"Sí. Lo somos."
"¡Eso es genial! Sois mis primeras celebridades." La cajera prosiguió

escaneando la ropa, pero sonrió. "¿Estáis saliendo?"
"Sí." Smiley frotó el estómago de Vanni con su palma. "Me reuní con ella y
sabía que era la única para mí."
Vanni sabía que tenía que decir algo.
"Fue amor a primera vista." espetó ella.
Se arrepintió después. No debería haber utilizado la palabra amor, pero era

mejor que mencionar haber sido drogados. Smiley no apretó su agarre o se vió
afectado por la palabra cuando él estuvo de acuerdo.
"Sin duda lo fue. Ella es hermosa y dulce. No pude resistirme."
La cajera hizo otra pausa y sonrió a Vanni.
"Eso es tan romántico. Ni siquiera puedo hacer que mi novio vaya al

supermercado, pero el tuyo te lleva de compras de ropa. Eres una mujer
afortunada."
"Es increíble." agregó Vanni, convencida de ello.
"Habéis atraído a una multitud." La cajera se sacudió la cabeza hacia el frente.

"Nunca he visto a tanta gente venir aquí antes."
"Lo siento." Smiley alivió el agarre alrededor de la cintura de Vanni. "Siempre

pasa cuando salimos de Homeland. La gente es curiosa."
274
"No te disculpes." La mujer se echó a reír. "Necesitamos el negocio. Parad en
cualquier momento. Soy Donna. Sólo tenéis que preguntar por mí. Os
conseguiré hueco en la cola. Soy la gerente."
"Lo apreciamos profundamente." Smiley dejó ir a Vanni y retiró una billetera

de su bolsillo trasero. "Yo pago esto, nena."
Vanni asintió.
"Gracias."
"Haría cualquier cosa por ti." Él le guiñó un ojo.
La cajera le dijo un total que hizo estremecer a Vanni. Esperó a que pasara la
tarjeta y tecleara su número de pin. Flame y Slash llevaron sus bolsas y Smiley
le tendió la mano. Ella la aceptó agradecida. Se dirigieron hacia la salida y
Vanni tuvo que forzar sus piernas para mantenerse a su ritmo.
Las puertas se abrieron y algunas personas gritaron al verles. Ella enderezó los
hombros y miró hacia ellos. Los móviles estaban fuera y estaban tomando
tanto vídeos como fotos. Sonrió y estrechó la mano de Smiley en un apretón de
muerte. Él hizo un gesto con la mano libre impidiéndole moverse.
"¿Podemos hacer una entrevista?"
Una mujer con un micrófono y un operador de cámara intentó acercarse, pero

un oficial de policía abrió los brazos, impidiéndoles avanzar. Otro equipo de
noticias pasó alrededor de un oficial, pero el equipo de la ONE fue capaz de
mantenerles a distancia.
"Ahora no. No hay entrevistas." anunció uno de ellos.
Wager acercó el todoterreno hasta el camino despejado por la policía, que

había mantenido a la gente alejada, y Smiley abrió la puerta del pasajero.
Vanni se metió, con ganas de estar fuera del centro de atención. Smiley se
deslizó detrás de ella y cerró la puerta.
"¿Estás bien? Estás pálida."
275
"No se me dan bien las multitudes. Había tanta gente mirando fijamente y
gritando."
La sorprendió al ponerla sobre su regazo.
"Está bien. Los cristales de las ventanas están tintados. No pueden ver el
interior. Lo hiciste muy bien."
Ella se volvió hacia él y disfrutó de tener sus brazos envueltos a su alrededor.
"No quiero volver a hacerlo de nuevo."
Le masajeó los hombros.
"Lo siento. No sabía que esto te asustaría."
"No tengo miedo. Yo solo..."
Buscaba una palabra para describir el sufrir casi un ataque de pánico, pero no
se le ocurrió ninguna.
"Eres simplemente tímida." terminó por ella y después la besó en la parte

superior de la cabeza. "No habrá más salidas."
"Gracias."
Los otros miembros del grupo subieron a la camioneta. Slash abrió el maletero,
puso las bolsas y luego simplemente se subió en el asiento de atrás.
"Aquí vamos." advirtió Wager mientras cerraba el maletero desde el asiento

del conductor. "Voy a conducir despacio para no atropellar a nadie. Perdimos
los refuerzos, pero nos alcanzarán enseguida."
Vanni miró por encima del hombro de Smiley para mirar por la ventana de
atrás. El otro SUV no les seguía. Pero lo vio aún en frente de la tienda. Parecían
estar tratando de llegar a su vehículo, pero los equipos de noticias seguían al
ritmo con ellos. Dieron la vuelta y se perdieron de vista.
"Eso fue una locura." murmuró Vanni.
276
"Esta es nuestra vida fuera del Homeland."
Ella se movió para mirar a los ojos a Smiley.
"Nunca me di cuenta."
Él se encogió de hombros, manteniendo el agarre alrededor de su cintura.
"Nos hemos adaptado. Estos son los buenos. Nadie echó nada sobre nosotros
ni gritaron obscenidades."
"Algunas personas apestan." murmuró Vanni.
Él sonrió.
"Tratamos de no tomarlo como algo personal. Relájate, esto va a terminar

pronto. Te prometí ayudarte a salir de esa ropa."
Él miró hacia abajo a la parte delantera de su camisa e hizo un ruido suave.
"Esperar a que lleguemos a casa." ordenó Jericho, desde el asiento al lado de

ellos. "No estáis solos."
Vanni bajó la cabeza y la apoyó contra el pecho de Smiley. Le gustaba que la

sostuviera en su regazo. Era ilegal estar en un vehículo en marcha sin el
cinturón de seguridad, pero había dicho que nadie podía ver el interior. No
tenía ganas apartarse y sentarse en el asiento del medio.
277
Capítulo Dieciséis
"Tenemos problemas." gruñó Wager desde el asiento del conductor.
Smiley se tensó, levantando la barbilla de la parte superior de la cabeza de

Vanni.
"¿Qué pasa?"
"Las puertas delanteras y traseras están llenas. Han tenido un aumento

significativo en el tráfico en los últimos minutos." Wager reunió su mirada en
el espejo retrovisor. "¿Quieres un auricular?"
"Sí."
Flame se giró en el asiento del pasajero y le tendió uno de sus dispositivos de

comunicación. Smiley lo agarró y lo colocó en su oreja.
"Cuatro equipos de noticias en la puerta uno." anunció un Especie. "También

tenemos seis vehículos sin identificación alineándose. Podrían ser periodistas."
"Hay dos furgonetas de noticias en la puerta dos y una gran cantidad de

tráfico a pie. Yo diría que cuatro docenas de humanos. No están sosteniendo
pancartas, pero no parecen ser amistosos."
"Soy Smiley." intervino él. "¿Qué pasa con la puerta tres? ¿Podemos ir por
allí?"
"Negativo." Smiley reconoció la voz de Trey Roberts. "Hay demasiados coches

en esa calle y van a veros entrar. Las empresas están abriendo, de modo que
los empleados están llegando al trabajo."
278
"¿Qué pasa con la cuatro?"
Las puertas tres y cuatro eran secretas, así que una de ellas debería estar
despejada. Smiley sólo quería llevar a Vanni dentro sin incidentes.
"No." gruñó un macho. "Tenemos niños en el terreno. Están teniendo algún

tipo de excursión en el parque al otro lado de la calle de mi ubicación, a las
cuatro. Es demasiado peligroso."
"Son niños." respondió Trey. "¿Cómo son un peligro? Lo único que verían es
salir gente de un SUV en lo que van a asumir que es la casa de alguien."
"No arriesgamos a los niños." respondió el macho.
Smiley identificó la voz de Creed.
"¿Y si estáis siendo seguidos?"
"Todavía hay dos posibles colas sobre nosotros." respondió Slash.
Smiley se volvió para mirar por la parte trasera de la camioneta. Había un

montón de coches en la calle, pero no estaba seguro de cuales dos mantenían
la atención de Slash.
"Entendido." anunció Trey. "Vamos a ir al respaldo del plan B entonces. Id a

ese lugar y enviaremos el helicóptero a buscaros."
"Cancela eso." exigió Tim O'berto. "Estoy aquí ahora. Entrad por la puerta dos.
No es crítica. Podemos manejar el tráfico."
"No quiero correr ningún riesgo."
Smiley volvió la cabeza para mirar a Vanni. Parecía estar manejando la

situación con tolerancia, pero quiso ser tranquilizarla.
"Va a estar bien." le aseguró a ella.
279
"Exactamente." murmuró Tim. "Va a estar bien. Estoy viendo los monitores y
el tráfico a pie no parece agresivo. Simplemente conduce. Estaremos listos en
las puertas, ¿estáis de acuerdo?"
"Lo estamos." respondió uno de los oficiales. "Vamos a pasar a los dos equipos
de noticias a la zona de espera y de esa manera el SUV simplemente puede
conducir rodeándolos."
"No hagas eso." espetó Tim. "Déjalos fuera. No tienes tiempo para registrar sus
vehículos correctamente antes de que te alcancen. Ninguna furgoneta pasa la
primera sección de las puertas sin una inspección exhaustiva. Pide a los
medios de comunicación que retrocedan."
"Hemos intentado eso. Se niegan." El macho sonaba irritado. "¿Quieres que

saquemos a los conductores y movamos sus vehículos nosotros mismos?"
"Por supuesto que no." maldijo Tim. "No quiero esto en las noticias de la
noche. Diles a esos hijos de puta que alguien les dará una declaración si se
ajustan. Eso por lo general funciona."
"Lo intentaremos." se quejó el irritado macho.
"Wager, entra por la puerta dos." instruyó Tim "Estamos enviando oficiales
adicionales allí ahora. Están en camino. Te quedan dos minutos para que te
vayan a atrapar ahí."
"Entendido."
Wager miró por el espejo retrovisor de nuevo y levantó la mano,

probablemente silenciando su lado del intercomunicador.
"No me gusta esto."
"Tampoco a mí."
Smiley levantó a Vanni y la puso en el asiento de al lado. Se inclinó hacia

delante para mirar por la parte delantera. Wager sorteó un par de calles y se
acercaron a las puertas. Los humanos se arremolinaban alrededor de las aceras
280
y dos furgonetas de noticias aún bloqueaban la entrada, aparcadas de lado a
lado en frente de las puertas.
"Joder." A Smiley no le gustaba.
"Mantén la calma." exigió Jericho. "Estás aterrando a tu mujer."
Smiley miró atrás y vio las pálidas facciones de Vanni. Se abrazaba a su propia
cintura y estaba empujada hacia arriba contra el costado de Jericho. Era una
situación estresante. Él enmascaró su rostro.
"Va a estar bien."
"Confío en ti." afirmó. "No te preocupes por mí."
"Poniendo los bloqueos inviolables." gritó Wager. El doble chasquido de las

cerraduras sonó. "Veo a uno de nuestros oficiales hablando con un conductor.
Creo que van a salir del camino y dejarnos pasar."
El SUV se detuvo en la calle para permitir que una de las furgonetas de prensa
maniobrase. El camino de acceso a esta puerta era más estrecho que el de la
entrada principal. Smiley levantó la mirada hacia la parte superior del muro,
agradecido de ver una fuerte presencia de agentes uniformados. Más se les
unieron, hasta que quedaron hombro a hombro, con las armas a la vista. Los
humanos tendrían que ser estúpidos para intentar cualquier cosa.
Echó un vistazo a los humanos reunidos en las aceras. Un hombre le llamó la

atención cuando alcanzó su alrededor, llevando algo escondido en la cintura.
Smiley tocó su comunicador.
"¡Posible arma!"
Se dio la vuelta, agarró a Vanni y se retorció de lado en el asiento hasta que su

cuerpo protegió el de ella, pero ningún arma de fuego estalló.
"La cámara del teléfono." Wager dejó escapar un suspiro y continuó: "Está
tomando fotos. Amenaza evitada."
281
Smiley alivió algo de su peso fuera de Vanni.
"Lo siento. No era mi intención aplastarte."
"Estoy bien." Murmuró ella.
"Quédate ahí." Le ordenó.
Como si le diera otra opción, ya que se mantuvo sobre de ella para mantenerla
en su lugar. Él miró por encima de los asientos delanteros. La furgoneta de
prensa no había retrocedido fuera para permitir que pasaran.
"¿Cuál es la retención?"
Se quedó mirando al macho uniformado, estaba bastante seguro de que era

Book, hablando con el conductor de la furgoneta. El macho en cuestión miró a
su zona.
"Se niega a salir a menos que consiga un comunicado. Son conscientes de

quién nos está visitando."
Smiley hizo una mueca. Las agencias de noticias ya habían oído hablar de que
Vanni estaba en Homeland y en lugar de apresurarse al centro comercial,
habían venido directamente a la ONE.
"Tráfico." Silbó Slash. "Hay un montón de él. Estamos clavados aquí. Deben
tener observadores en el terreno."
Smiley se volvió y vio más furgonetas de noticias viniendo hacia ellos en la

calle de dos sentidos. Unos pocos coches estaban detrás de ellos.
"Saca al conductor y mueve esa furgoneta." ordenó.
"No te atrevas." argumentó Tim. "Sólo debes permanecer ahí. Me encargaré de

éste gilipollas yo mismo, sin causar una tormenta de mierda. Esos idiotas
estarán gritando 'brutalidad' si pones un dedo sobre ellos. Estás bien en el SUV.
Estoy de camino."
282
Smiley no podía quejarse del responsable del Equipo Técnico por estar
preocupado. No se les permitía tocar físicamente a nadie fuera de los muros de
la ONE. Una cosa era usar mangueras de agua para dispersar a las multitudes
o de vez en cuando tirar bombas de humo, cuando los manifestantes asaltaban
las puertas, pero los humanos podían verlo como abuso si arrancaban a
alguien fuera de un vehículo.
Jericho finalmente habló.
"Corramos hasta las puertas."
Smiley volvió la cabeza para mirar a su amigo.
"No."
"Más tráfico entrante." silbó Slash.
"Corramos hasta las puertas", repitió Jericho en un tono más profundo.
A Smiley no le gustaba la idea de sacar a Vanni fuera del SUV tan cerca de
todos los humanos. Su intención era clara, pero al mirar a la carretera, su
opinión cambió. Más coches y gente venían por ambos lados de la calle.
Parecía que sabían que Smiley y Vanni estaban atrapados fuera de las puertas.
"Hagámoslo."
Smiley admitió que Vanni estaría en mayor peligro si estuvieran

completamente rodeados por cientos de seres humanos, en lugar de sólo unas
pocas docenas.
"Estaré allí en pocos minutos." les recordó Tim.
"No tenemos tiempo." respondió Slash. "Se trata de salir de la mano. Deslízate
hasta el centro con ella, Smiley. Déjame entrar por la puerta. Correré contra las
interferencias y tomaré cualquier cosa frente a ambos."
"Hazlo." estuvo de acuerdo Tim.
283
Smiley se enderezó en el asiento y ayudó a Vanni a erguirse mientras se
deslizaba contra Jericho, dejando espacio a Slash para trepar por encima del
asiento.
"Va a salir bien. Quédate a mi lado. Vamos a salir del SUV y andar hasta las
puertas. Voy a cogerte por si tenemos problemas. Simplemente pon tu cara en
mi cuello y agárrate fuerte."
"Estaré bien."
"¡Mierda!" Silbó Flame. "¡Refuerzos!"
Smiley miró hacia arriba y vio que los seres humanos corrían hacia ellos.
Cuerpos y manos se estrellaron contra las ventanas y el SUV se sacudió. Todo
lo que Smiley pudo hacer fue enganchar su brazo alrededor de Vanni para
tirar de ella, reteniéndola cerca, y agarrarse del reposacabezas del asiento
delantero. El vehículo era pesado, pero veinte o treinta humanos lo rodeaban.
Estuvo tentado de sacar el arma atada a su tobillo, cuando el vaivén empeoró.
"Bombas de humo están siendo desplegadas." advirtió uno de los oficiales a lo

largo de la pared. "Preparaos."
Smiley apretó los dientes.
"Aguanta la respiración cuando abramos esa puerta y no me sueltes, Vanni."
Él vio las latas de metal volar desde arriba. Impactaron alrededor de la

camioneta, pero no alcanzaron la masa de humanos. El humo blanco se
levantó rápido y los humanos próximos a las ventanas comenzaron a ahogarse
y toser.
En menos de treinta segundos fue difícil de ver por las ventanas, con el espeso
humo cegador. El balanceo cesó, sin embargo, cuando sus atacantes huyeron.
"La puerta está a unos veinte metros por delante de nosotros. Manteneos en el
extremo izquierdo del camino." ordenó Wager. "¡Vamos!"
284
Ambos juegos de cerrojos fueron liberados y siguió a Smiley Slash cuando él
abrió la puerta, golpeando contra algo. Un hombre gritó de dolor. Él no le
importaba un comino si hubiera alcanzado a un humano. Levantó a Vanni en
sus brazos, la abrazó con fuerza contra su pecho y utilizó su memoria para
seguir adelante. No tenía una máscara, por lo que contuvo la respiración y
mantuvo los ojos cerrados con fuerza.
Una mano agarró su hombro y él pensó que era Slash, ayudándolo a dirigirse
en la dirección correcta. Él miró una vez, lamentando eso cuando sus ojos se
llenaron de lágrimas por el acre humo, pero pudo distinguir la furgoneta de
noticias pasando. Estaban casi en las puertas.
"Por aquí." gruñó un macho. "Sigue viniendo. Tenemos todo cubierto."
Los brazos de Vanni estaban envueltos alrededor de su cuello y sus piernas

abiertas, enlazándose a sus caderas. Sus uñas se clavaron en su camisa, pero no
le importaba si le arañaba. Probablemente estaba aterrorizada. Él miró de
nuevo y se dio cuenta de que el humo se despejaba, al salir de la zona afectada.
Vio la puerta y una línea de enmascarados oficiales de la ONE con armas en la
mano, esperando por ellos. Dos corrieron hacia adelante y agarraron a los
miembros de su equipo, llevándolos dentro.
Las puertas se cerraron y Smiley aspiró aire a sus hambrientos pulmones.
"Está bien." le susurró a Vanni. "No vas a ahogarte."
Ella jadeó y tosió un poco. Él la abrazó con más fuerza y siguió caminando
para poner más distancia entre ellos y el humo. Miró a su alrededor,
apreciando las docenas de Especies que se habían apresurado a la segunda
puerta para ayudar. Asintió con la cabeza a algunos de ellos. Parpadeó
rápidamente para despejar el agente irritante de sus ojos.
"¿Estás bien?"
Vanni asintió contra su cuello. Mantuvo su rostro enterrado allí. Se detuvo y se

limitó a abrazarla. Había cometido un error al llevarla lejos de Homeland.
285
Por suerte no había sido dañada, pero el trauma de lo que acababa de
experimentar podría amargarla sobre convertirse en su compañera. Le molestó
que todo hubiera ido tan mal. Trató de empujar esa ira de nuevo, sin embargo,
queriendo tranquilizarla.
"Bien, estamos seguros de saber cómo hacer una entrada."
Vanni levantó la cabeza y le miró. Sus bonitos ojos parecían atormentados,

pero sonrió.
"¿Es así como llamas a esto?"
"No consiguieron voltear el SUV y estamos a salvo en Homeland."
"¿Por qué harían eso?"
Dudó. No quería darle más malas noticias.
"No lo sé. Tal vez piensan que es divertido precipitarse sobre un SUV varado y
girarlo de costado. Sucedió una vez antes. Tomaron vídeos y los publicaron
como si fuera una broma. El equipo dentro del SUV no pensó que fuera
divertido."
Un jeep llegó arrastrando el culo por una esquina y vio a Tim O`berto en el
asiento del conductor. Avanzó cuando el macho pisó el freno y saltó, dejando
el motor en marcha.
"¿Ella está bien? ¿Está herida? "
"Está bien."
Tim pareció aliviado.
"Debería haber aceptado el helicóptero."
"No debería haber accedido a dejarla salir de Homeland." respondió Smiley.

Rodeó a Tim y caminó hacia el lado del pasajero del Jeep. "Entra, Vanni. Nos
vamos a casa."
286
Vanni se deslizó por su frente y él la ayudó a subir dentro. Rodeó el vehículo y
se metió en el asiento del conductor.
"Me llevo a Vanni a casa."
"Ese es mi Jeep." Tim frunció el ceño.
"Consigue otro y haz que las cosas nuevas de Vanni sean enviadas a su casa."
Smiley lanzó el jeep marcha atrás y retrocedió lentamente, ya que Vanni no se

había puesto el cinturón de seguridad. Se detuvo, cambió de marcha y apretó
el acelerador. Él sólo quería llegar a su casa y verla segura. No dejaría
Homeland de nuevo.
Vanni todavía estaba un poco agitada cuando Smiley la acompañó dentro de la

casa. Cerró con llave la puerta, apoyándose contra ella. Su expresión sombría
le dijo que no tomó lo que había sucedido tan a la ligera como lo había
implicado. Se quitó los zapatos de tacón alto, feliz de estar fuera de ellos.
"No más compras." Le anunció.
"Realmente no me gusta de todos modos. Compro un montón de ropa online."
Él parpadeó un par de veces y respiró hondo.
"Lo siento."
"¿Por qué?"
"No debería haber accedido a esta salida. No pensé que estarías en peligro. Te
fallé."
Él estaba más que un poco molesto. Parecía culparse a sí mismo y ella se negó
a dejarle sentirse así.
"Eso no fue culpa tuya. He llegado a la conclusión de que las personas son
imbéciles e idiotas. Me trajiste de regreso, sana y salva." Ella levantó los brazos
y miró hacia abajo. "En una sola pieza." Levantó la barbilla y le sonrió. "Estoy
bien. Daba miedo allí por unos minutos, pero nos reiremos de esto más tarde."
287
Él se apartó de la puerta y se dirigió hacia ella, deteniéndose a pocos
centímetros de distancia.
"Nunca voy a encontrar eso divertido. Podrían haber volteado el todoterreno."
"No lo hicieron."
"Podrían haberlo hecho."
A ella le gustó la forma en que la miraba. Sus hermosos ojos mostraban

preocupación e inquietud, todo ello dirigido a ella.
Se acercó y puso su mano sobre su pecho.
"Estoy bien. Estoy más preocupada por ti en este momento."
Su mirada se amplió.
"¿Por qué?"
"Estás más molesto por lo que pasó de lo que lo estoy yo."
"Cometí un error."
Su ritmo cardíaco se incrementó. Sonaba como si estuviera a punto de dejarla

plantada. Ni siquiera estaba seguro de que fuera posible, ya que todavía no
tenían exactamente una relación.
"¿Acerca de?"
"Nunca debería haber aceptado llevarte de compras. No me importa lo que el

mundo piense de mí. Sé que fue para el ONE y para demostrar que las
declaraciones de la Iglesia Woods son falsas, pero no valía la pena arriesgar tu
vida. No voy a estar de acuerdo en que ponerte en peligro de nuevo."
"Fui yo quien accedió a ir de compras."
"Eres mía para proteger. Yo podría haber anulado la decisión."
Eso la sorprendió.
288
"Eres mi responsabilidad para cuidarte."
Un horrible pensamiento la golpeó y dejó de tocarlo.
"¿Es por eso que estás conmigo? ¿Te sientes responsable? "
"No." Él frunció el ceño.
"No es culpa tuya que fuéramos drogados. Eras su objetivo, pero Gregory y
sus desquiciados seguidores nos hicieron esto a ambos."
"Estoy al tanto."
Ella se tambaleó hacia atrás un paso y casi tropezó con sus zapatos
desechados. Se enderezó antes de que Smiley pudiera extender la mano y
ayudarla, poniendo las manos arriba, agitándolas. Le dolía pensar que sólo
podría estar pasando el tiempo con ella por un cierto sentido del deber. Su
mirada se cruzó con la de él.
"¿Por lo menos te gusto o esto es todo sobre la culpabilidad?"
Sus labios se separaron y él se mostró sorprendido por su pregunta.
"En serio. Sólo dime la verdad."
Avanzó.
"Te deseo. Esto no es acerca de la culpabilidad. Tenemos un vínculo."
"Uno que se forjó porque pasamos a través de un suceso traumático juntos."
"Es más que eso. Siento cosas contigo."
Eso ayudó a aliviar su dolor.
"No te quiero aquí si es sólo porque crees que me debes algo."
"Quiero pasar tiempo contigo." Frunció el ceño. "Me sentí atraído por ti antes
de las drogas. Todavía me siento atraído por ti."
289
La opresión en su pecho fue aliviada.
"Está bien."
Smiley envolvió sus dedos alrededor de la curva de sus caderas, aferrándose a

ella.
"¿Cómo pudiste siquiera cuestionar mi atracción?"
"No lo sé."
"Lo sabes, o no habrías dicho algo así. Mírame."
Odiaba ver la forma en que la miraba en ese momento, como si hubiera herido
sus sentimientos. La hacía lamentar su impulsiva suposición.
"Mi historial con los hombres no es muy bueno."
"Eres dulce, Vanni. Me haces reír y me vuelves un poco loco."
"Sé que es un poco molesto que no sea más sociable."
"No me molesta eso."
"Acabas de decir que te vuelvo loco."
Él sonrió y la mirada de dolor en su mirada se desvaneció.
"Es porque estoy preocupado de decir o hacer algo que te lanzará lejos. No
quiero eso. Somos de orígenes diferentes y estoy preocupado porque esas
diferencias te den ganas de irte. Necesito que te quedes."
"¿Lo necesitas?"
"Muchísimo."
Él soltó su cadera con una mano y tomó su rostro, sumergiendo la cabeza

hasta que su boca se cernió a pocos centímetros de sus labios.
"Además nunca llamaría traumático a lo que hemos experimentado. Eso nos

unió. No puedo lamentarlo."
290
"Yo tampoco." admitió.
Él le acarició la mejilla.
"Deja que te lleve a la cama. Quiero demostrarte cómo me siento por ti. No soy
bueno con las palabras, pero puedo demostrártelo." Sus dedos se arrastraron
desde su mejilla hasta su cuello. "Di que sí."
Ella se sintió tentada.
"¿Entiendes que no hago normalmente esto de precipitarme en una relación

sexual?"
"Lo entiendo. Lo que compartimos es especial."
Quería creer eso.
"No sé lo que esperas o deseas de mí. ¿Es sólo sexo?" Necesitaba expresar sus
preocupaciones. "No quiero ser utilizada. Así es como me voy a sentir más
tarde, si simplemente te vas. No tengo sexo ocasional."
Smiley gimió suavemente.
"Podría asustarte si supieras lo serios que son mis sentimientos."
"¿Eso es sólo una frase?"
Sus cejas se arquearon y una mirada confusa llenó su mirada.
"Los hombres sólo dicen lo que creen que una mujer quiere oír para conseguir
que esté de acuerdo en ir a la cama con ellos. No lo dicen en serio."
"Yo no soy nada parecido a tus hombres, Vanni. No te mentiría. Nuestras

mujeres no querrían que les diga que tengo sentimientos profundos. Prefieren
hombres que mantengan una distancia emocional. No quiero eso contigo. No
compartiría cómo me siento si te estuviera diciendo solo lo que pienso que
quieres oír de mí. Preferiría mantenerlo oculto."
291
"Entonces ¿estás buscando una novia? ¿Una relación seria?"
"Sí."
"No sé cómo podría funcionar entre nosotros. Vives aquí y yo vivo

aproximadamente a dos horas de distancia."
Deseaba poder ver una manera de hacer que funcionase, pero quería ser
totalmente sincera.
"También pasas mucho tiempo en ese lugar, la Reserva. Eso es al norte. Las
relaciones a distancia nunca funcionan. No podemos siquiera salir juntos. Ya
viste lo que pasó cuando nos fuimos de compras. No es como si podremos ir a
cenar."
"Nunca tendrías que alejarte de mi lado. Podríamos vivir juntos."
¡Whoa! Ella tragó saliva.
"Eso es un tipo de movimiento rápido."
Dejó caer la mano lejos de su garganta.
"La vida es corta, Vanni."
Había aprendido esa lección. Gregory y su matón pudieron haberla matado.

Asimismo podría haber muerto a causa de la droga. Miró hacia él y quería
decir que sí, pero simplemente no era tan sencillo. Deseó que pudiera serlo.
"Dame un poco de tiempo."
"Te daré cualquier cosa que necesites."
Dio un paso atrás y le instó a que lo siguiera. Terminaron en el dormitorio.

Smiley se sentó en la cama y se inclinó para quitarse las botas. Disfrutaba
mirándole tirar hacia fuera de su camiseta. Tenía un hermoso pecho y su
cuerpo en forma siempre la dejaba sin aliento. Se puso de pie y levantó la
cabeza.
292
"¿Vas a dejar que te muestre lo que siento?"
Ella se desabrochó torpemente su camisa. Vio como se la quitó y la dejó caer al

suelo. Su mirada parecía fija en su sujetador.
"Eres tan bella."
Eso la animó a alcanzar hacia atrás y desabrochar la falda y luego empujarla

hacia abajo por sus caderas. Se cayó al suelo y se quedó allí en sujetador y
bragas.
Smiley se acercó y la rodeó para desabrochar el sujetador. Tenía eso fuera en

cuestión de segundos. Se había dado cuenta la primera vez de que tenía
mucha facilidad desenganchando su sujetador, parecía tener cierta experiencia
en desnudar a una mujer.
Él miró hacia abajo cuando desnudó sus pechos, un ruido suave y sexy
procedente de sus labios entreabiertos. No era como cualquier otro hombre
que hubiera conocido. Decidió que era mucho mejor. Nunca nadie le había
afectado de la forma en que él lo hacía.
Él acarició suavemente sus caderas antes de enganchar los pulgares en los

costados de sus bragas y la sorprendió al caer de rodillas. Las tiró hacia abajo
hasta que estuvieron alrededor de sus tobillos. Usó sus amplios hombros para
ayudarse a mantener el equilibrio mientras salía de ellas.
Smiley la miró, sus ojos oscuros ardiendo con pasión.
"Nunca deberías usar ropa."
"Tu tampoco." admitió. "Estás un poco demasiado vestido."
"Sube a la cama."
Ella se movió fuera de su alcance y se sentó en la parte superior de las sabanas.

Smiley abrió la parte delantera de sus pantalones y simplemente los empujó
hacia abajo, sin molestarse siquiera en quitárselos.
293
Se subió a la cama y Vanni se echó hacia atrás cuando él se arrastró sobre ella
hasta que su rostro rondó justo por encima del suyo.
"Déjame besarte."
Ella envolvió sus brazos alrededor de su cuello, lamiendo sus labios para
humedecerlos.
"Por favor."
Sus suaves labios rozaron los de ella. Eso cambió rápidamente, sin embargo,
cuando él profundizó el beso y se encontró con su pasión. Bajó más de su peso
sobre ella, inmovilizándola en la cama. Le gustaba lo caliente que estaba su
piel, presionada fuertemente a la suya, y la forma en que movió sus caderas,
chocando contra su muslo para hacerle saber lo que quería. Vanni abrió las
piernas para hacer sitio para él entre ellos. Él rompió el beso y levantó lo
suficiente para mirarla a los ojos.
"Voy a rodar con nosotros."
Quería protestar, pero estuvo hecho antes de que pudiera hablar. Terminó
tumbada sobre él. Intentó deslizarse hacia abajo un poco, pero su polla tiesa
chocando contra su coño la detuvo. Sus manos extendidas sobre su torso
mientras inclinaba sus piernas para levantar sus hombros más altos,
permitiéndole captar sus pechos.
Vanni cerró los ojos ante la sensación de sus manos firmes amasándola. Se
mordió el labio inferior, disfrutando de la caricia.
"Tan hermosa y suave."
Apoyando sus rodillas sobre el colchón, trató de levantar su coño lejos de su

bajo vientre, el dolor entre sus piernas un signo revelador de que estaba siendo
excitada. La estaba poniendo caliente y no quería dejarle mojado.
Soltó un pecho para agarrar su cadera y tiró de ella hacia abajo de nuevo. Ella
abrió los ojos y lo miró fijamente. Él negó con la cabeza.
294
"Quédate dónde estás."
Dobló las piernas hacia arriba, pateando sus pantalones cuando lo hizo, y la
atrapó donde estaba sentada mientras la parte superior de sus muslos
presionaban contra su culo. Su polla dura quedó atrapada entre ellos. No
había perdido el grueso y duro eje erecto. Lentamente rodó sus caderas. El
erótico movimiento frotó su clítoris contra él. Ella apoyó las manos sobre su
pecho, simplemente necesitando algo a que aferrarse.
Ella no había experimentado nada que se pareciera.
"Me gusta ver tu cara."
Eso la hizo sonrojar. Rompió el contacto visual y se quedó mirando a su

estómago. Sus abdominales bien definidos se flexionaban mientras continuaba
meneando lentamente sus caderas con ella sentada sobre él.
El dolor aumentó, casi una burla de lo que se sentiría si su polla estuviera

dentro de ella. Eso aumentó más su humedad y sabía que él debía darse
cuenta de ello.
Él soltó su cadera y deslizó su pulgar entre su coño y su bajo vientre. Trazó su

raja, jugó con la prueba de su excitación y luego presionó la yema de su dedo
pulgar contra su clítoris. Ella gimió.
"Tan hermosa." dijo con voz áspera.
"¡Smiley!"
Le quería dentro de ella.
"Todavía no. Te deseo también, demasiado. Tienes que correrte para mí

primero, para que estés preparada."
¿Preparada para qué?
295
Ya estaba mojada y lista para tener sexo. Él continuó jugando con su pecho,
con el pulgar y el índice pellizcando su pezón suavemente. Cerró los ojos, la
fuerte sacudida de placer haciéndola apretar su coño.
Su polla se sentía más dura, mientras frotaba su culo y los músculos de sus
muslos presionaban más contra ella también. Rodó sus caderas debajo de ella,
el lento balanceo conduciéndola a la locura. Ella le deseaba más de lo que
nunca había deseado a nadie.
Su atractiva, intensa mirada parecía mirar directa en su alma cuando su pulgar

rodeó su clítoris en movimientos apretados que la impulsaron a ser más
salvaje. Ella jadeó y gimió, pero luchó contra el impulso de clavar sus uñas en
su piel.
"Por favor." Le rogó.
"Joder." gimió él. "Nunca podría decirte que no."
Él hizo un gesto con la mano, deteniendo el tormento de su clítoris, bajó sus

piernas y se sentó. Casi se cayó hacia atrás ahora que él no estaba sujetándola.
Él también dejó de masajear su pecho.
"Trataré de ser suave."
Él la puso de lado. No lo había visto venir y se quedó allí un poco aturdida,

hasta que se puso de rodillas y se inclinó hacia adelante, agarrando sus
caderas. Él le dio la vuelta sobre su estómago, como si no pesara nada.
"Sobre manos y rodillas." ordenó él.
Su voz salió en una profunda raspa y envió buenos escalofríos por su espina
dorsal. Ella empujó hacia arriba e hizo lo que él quería, dolorida porque él la
follara.
Esperaba que subiera hacia arriba y la fijara bajo él, pero Smiley la sorprendió
de nuevo cuando la agarró por el interior de los muslos y la instó a separarlos.
Ella extendió sus rodillas hasta que la soltó y se sentó sobre sus talones.
296
Vanni se quedó sin aliento cuando él metió las dos manos entre sus piernas
abiertas, aplanándolas en su bajo vientre y tirando de ella hacia atrás. El
rápido movimiento la levantó de sus rodillas y su pecho golpeó la cama
cuando colapsaron sus brazos. El espesor de la corona de su polla presionó
contra su coño y la penetró. Gritó, cuando de repente se condujo dentro.
Él alivió sus manos de entre ellos, por lo que ella estaba medio en su regazo,
medio boca abajo sobre la cama, con las rodillas dobladas debajo de su
estómago. Él abrió las piernas y se inclinó hacia adelante más lejos,
descendiendo sobre ella.
La folló profundo y duro, con una mano enganchada alrededor de su cadera

para mantenerla en su lugar. Ella arañó la ropa de cama, sin importarle si sus
uñas la dañaban. Su dedo encontró su clítoris y con cada golpe de sus caderas
la fricción se volvió mayor. Hundió la cara en la colcha, gimiendo más fuerte a
medida que aumentó el ritmo.
Era tan bueno que casi dolía. Sus músculos vaginales se cerraron en previsión
del inminente clímax, junto con casi todos los demás músculos de su cuerpo.
Smiley la folló aún más rápido, el cabecero de la cama golpeando con fuerza
contra la pared.
No le importaba. Él estaba muy duro y eso era muy bueno.
"Estás matándome, Vanni." gimió Smiley.
Ella hubiera dicho lo mismo, pero el mundo explotó a su alrededor cuando

comenzó a correrse. El éxtasis la atravesó y estaba bastante segura de que
gritó. Smiley arrancó su mano de entre ellos y agarró sus caderas,
conduciéndose dentro de ella tan profundo como pudo y masturbándose así,
con la fuerza suficiente para sacudir a los dos mientras se corría también, al
tiempo que gruñía su nombre.
Su polla palpitaba dentro de ella como si tuviera latido cardiaco propio.

Redujo sus apretadas embestidas, hasta que se quedó inmóvil.
297
El firme control sobre sus caderas disminuyó y se inclinó hacia adelante,
presionando su pecho contra su espalda. Sin aplastarla con su peso, pero él sin
duda la había clavado.
"Ninguna mujer me hace sentir como tú lo haces, Vanni." dijo con voz áspera,
su respiración errática. "¿Fui demasiado duro?"
Sacudió la cabeza, careciendo de la energía para girar la cabeza y mirarle.
"Me encantó eso."
Le dio un beso en el hombro y le acarició la cara externa del muslo. Su gran

mano era suave mientras la exploraba desde la cadera hasta la rodilla luego de
vuelta otra vez.
"A mí también. Vamos a hacerlo mucho. Con frecuencia."
Dejó de jugar con su cadera, envolvió su brazo alrededor de su cintura y le

acarició la parte baja del abdomen. Gimió cuando él deslizó sus dedos sobre su
clítoris y la acarició allí. Sus músculos vaginales se crisparon y Smiley gimió.
"Voy a follarte de nuevo."
Sus palabras la sorprendieron. Todavía se sentía duro dentro de ella. Rodó sus
caderas, casi se retiró de su coño, pero luego condujo su polla de nuevo en
profundidad.
Dos dedos capturaron su clítoris entre ellos, tirando ligeramente. Ella gimió.
"¿Tan pronto?"
"Yo no soy como tus hombres."
298
Capítulo Diecisiete
Su breve siesta había sido interrumpida por una llamada telefónica. Smiley
había besado la mejilla de Vanni y le dijo que volviera a dormirse. Le había
sido notificada una reunión a la que tenía que asistir. Se había levantado de la
cama al instante en que la puerta principal se cerró y se alzó sobre sus
vacilantes pies. Todos los músculos de la cintura para abajo parecían
doloridos. Ella gimió y fue al cuarto de baño para sumergirse en la bañera de
hidromasaje.
"¿Qué esperas? Lo estás haciendo con Mister Fitness." murmuró cuando sus
piernas temblaron después, al salir.
Los músculos interiores de sus muslos quemaban un poco y la parte de su culo

más baja quería declararse en huelga con cada paso. El baño había aliviado su
incomodidad. Se inclinó por la cintura para secarse el pelo y gimió. Sus partes
femeninas estaban bien, pero podría haberse lesionado los músculos de su
culo. Terminó de frotar su cabello y utilizó el lavabo para ayudarla a
enderezarse.
La imagen en el espejo la hizo encogerse. El cabello le caía en mechones

fibrosos, mojados y sus labios aparecían hinchados por los besos de Smiley. Se
apartó de su reflejo y se envolvió la toalla alrededor de su cintura.
"Debo trabajar más." murmuró, cojeando hasta el dormitorio.
Llegó a la cama y simplemente cayó sobre ella, feliz de estar fuera de sus pies.
Se quedó mirando el teléfono en la mesilla de noche y quiso llamar a Beth. Su
amiga se reiría de su dilema. Beth lo encontraría gracioso. Pero lo único que
hizo fue preguntarse cómo iba a ocultar su incomodidad a Smiley.
299
El teléfono sonó y ella gimió, extendiéndose hacia fuera para cogerlo por si
fuera Smiley llamando para ver cómo estaba.
"¿Hola?"
"¿Fuiste drogada y violada?"
Ella hizo una mueca, identificando la severa voz de su hermano.
"Hola, Count. No. No es cierto si has oído esa historia. "
"Entonces, ¿en qué demonios nos has metido?"
Trató de pensar en qué decirle.
"Responde a la puta pregunta." Le exigió. "Mamá y papá están desaparecidos

en combate y nosotros estamos secuestrados en un hotel. De todos los tipos
con quien podías follar por ahí, ¿escogiste una Nueva Especie? ¿No podrías
haber tenido una última aventura con un stripper en tu despedida de soltera
como haría cualquier persona normal?"
Rodó tumbándose sobre su espalda, agarrando el teléfono contra la oreja y se

quedó mirando el techo.
"Mamá y papá fueron a la cabaña, pero estoy segura de que ya adivinaste eso.
Es el lugar donde siempre van."
"¿Eso es todo lo que tienes que decir? Has destrozado nuestra vida esta
semana. Quiero respuestas. ¿Qué diablos está pasando? Tienes suerte de que
no le disparé al equipo de seguridad que llegó. Hemos oído algo sobre ti
dando una conferencia de prensa y que habías sido víctima de la ONE y
entonces aparecen aquí, diciendo que estábamos en peligro. Deberías habernos
advertido que tipo de infierno estaba a punto de llover en nuestra familia."
Detestaba las lágrimas que llenaron sus ojos. Era la pequeña de la familia y
siempre había intentado muy duro pasar desapercibida. Count tenía todo el
derecho a estar enfadado.
300
"Lo siento."
"Lo siento, eso no cambia el hecho de que avergonzaste a toda esta familia y
todos estamos pagando por ello. No sé ni qué pensar. ¿Qué clase de idiota va a
un bar y recoge a un extraño? Luego, tenías que montártelo con cámaras
rodando, para que fuera forraje y que todos puedan verlo. ¡Te educamos
mejor!" Maldijo. "Deja eso fuera, Mia. Estoy hablando con ella."
"Estás siendo un gilipollas." insistió su hermana desde algún lugar cerca del
teléfono. "Déjame hablar con ella."
"No he terminado." insistió Count. "¿No podrías haber hecho videos de cocina
o algo parecido si querías ser una sensación en Internet? Joder no. Nuestra
hermana tiene que convertirse en una estrella del porno entre especies."
"¡Maldita sea!" Gritó Mia. "Dame el teléfono, aliento de vómito. ¿Te cepillas los
dientes? Pobre de tu esposa. Ve a buscar a un cepillo de dientes. ¿Tengo que
recordarte la mierda que removiste en la escuela secundaria? ¿Tus compañeros
policías saben que solías fumar hierba? No saltes a su culo."
"No está en la escuela secundaria. Es una adulta."
Vanni hizo una mueca. Sus hermanos estaban peleando por ella. Estaban
cercanos de edades y podría ponerse feo una vez que comenzaban. La pareja,
generalmente madura, se convertía en un par de niños de cinco años cuando
en ocasiones discutían. Mia debió haber ganado el partido de lucha libre por el
teléfono, ya que Count aulló de dolor y la voz de Mia se acercó el receptor.
"¿Estás bien, Vanni? Ignora a nuestro idiota hermano. Él no quiso decir nada
de eso. Sólo hemos estado realmente preocupados. Hemos escuchado un
montón de cosas contradictorias."
Vanni parpadeó para contener las lágrimas.
"Count lo decía en serio. Él está enfadado."
301
"Bueno, lo está." Mia hizo una pausa y un sonido de chasquido se oyó. Count
maldijo. "Deja de hacer eso. Trata de quitármelo de nuevo y rascaré la mierda
de ti." amenazó Mia. "No estaba bromeando sobre tu aliento. Hueles como el
culo. Ve a cepillarte los dientes."
"Hablaré con tu marido." se burló Count.
"Haz eso. También tiene miedo de mis uñas cuando estoy cabreada. Trata de
agarrar el teléfono una vez más y vas a sangrar." le advirtió Mia. "Y no respires
tu aliento a mi marido. ¿Qué demonios has comido?"
"Por favor, no peléis." exhortó Vanni.
"Espera." Mia cerró de golpe una puerta. "¡Ja! ¡Está cerrada, idiota!" Su voz
bajó. "Estoy en el baño. Él no se atreverá a patear la puerta abajo. Deberías ver
este lugar en que nos tienen alojados. Es lujoso como el infierno. La puerta
probablemente cuesta más que su querido coche oxidado, ese pedazo-de-basura
que él llama un clásico."
"Lo siento." susurró Vanni.
"Está hecho. Es que odio que no pudiéramos hablar contigo antes. ¿Por qué
estabas evitando nuestras llamadas del fin de semana? ¿Qué está pasando
realmente, Vanni?"
"No era mi intención que nada de esto sucediera."
"Está bien. ¿Estás bien? Eso es lo más importante."
"Lo estoy."
"¿Cómo lo llevas? No me puedo imaginar lo que estás pasando."
"Estoy bien."
No estaba dispuesta a compartir con ella sus lesiones sexuales, que estaban
haciendo doler su culo y sus muslos.
302
"Es sólo que ha sido una especie de pesadilla con la prensa y con la Iglesia
Woods."
"El equipo de seguridad dijo que la Iglesia Woods era una amenaza para
nosotros y es por eso que estamos aquí. Sabía que esa familia era una mierda,
una vez que me enteré de quién era el padre. Son un montón de lunáticos.
¿Qué te hizo Carl? ¿Te golpeó? No me gustaba ese gilipollas. Él era demasiado
suave y controlador."
Eso asombró a Vanni.
"Pensé que te gustaba tanto como al resto de la familia."
"Estaba siendo agradable. Me he devanado los sesos pensando por qué

querrías terminar siendo derrumbada en un bar y recoger a un tipo que no
conocías, después de Adam. Te conozco demasiado bien. Carl, te engañó o te
golpeó. ¿Qué fue?"
No podía contarle a su hermana toda la historia, para que cubriera las partes
principales, pero compartió cómo él la había engañado para ir a la convención
y la forma en que la había tratado.
"Rompí con él. No era mi intención que sucediera eso en el bar, pero no me
arrepiento." Eso era verdad. "Smiley está aquí conmigo. Es maravilloso."
El silencio en el otro extremo de la conexión telefónica se convirtió en

incómodo. Su hermana finalmente habló.
"¿Puede escuchar lo que te estoy diciendo?"
"No. Estoy sola en este momento."
"¿Estás allí retenida contra tu voluntad?"
"No." Vanni se sentó e hizo una mueca, olvidando su dolor. "Smiley es

increíble. La ONE me protege del padre de Carl y sus locos seguidores. Están
diciendo que fui drogada y forzada a, um, ya sabes."
303
"Lo sé. Oímos eso. Eso es lo que le dije a Count, después de que vimos las
noticias de hoy. Te veías feliz, pero asustada. Me gusta la forma en que ese
tipo con quien estás fue muy protector contigo."
"¿Hoy?"
"Cuando el ONE tuvo que ir de compras. Estaba en todas las noticias."
La mirada de Vanni flotó a la TV en la cómoda. Estuvo tentada de encenderlo

para ver si estaban pasando las imágenes, pero se resistió.
"Resultó algo peliagudo cuando todas esas personas se presentaron, pero estoy
bien. Realmente."
"¿Qué clase de amenaza estás esperando desde la Iglesia Woods? ¿Quieren

venganza porque dejaste a Carl? Recuerdo un grupo religioso que intentó
quemar viva a una mujer en frente de las puertas de la ONE por acostarse con
una Nueva Especie." La voz de Mia tembló. "¿Van a querer matarte?"
"Tal vez. Están locos, Mia. Estoy a salvo aquí, sin embargo."
"Gracias a Dios. No salgas de allí."
"No lo haré."
"Este tipo, Smiley, ¿te está tratando bien? Parecía bastante preocupado hoy."
"Sí. Él es muy dulce y maravilloso."
"Me alegro de oír eso. Count está loco de atar, pero no dejes que te afecte. Ya
sabes cómo es nuestro hermano. Es su manera, retorcida y controladora, de ser
un gran gilipollas cuando está preocupado. Tenía complejo cuando era niño y
ahora él tiene una insignia, por lo que piensa que lo sabe todo. No tengo que
cocinar o limpiar, así que estoy mirando esto como unas vacaciones gratis, con
un montón de guardias de seguridad. Sólo deseo que no nos hubieran dado
suites conectadas, porque dos días más de escuchar a nuestro hermano y voy a
considerar lanzar a Count por la ventana para ver si se convierte en un
murciélago y puede volar."
304
Vanni se rio entre dientes. Era una vieja broma entre hermanas.
"Gracias, Mia. Tenía miedo de que ibas a estar como loca conmigo también."
"Estoy preocupada. Haz lo que tu equipo de seguridad diga. Parecen saber su

trabajo. Nos tuvieron empaquetando y fuera de nuestros hogares en poco
tiempo y nos pusieron en estas suites en el ático de este hotel. Tenemos todo el
piso de arriba, así que estamos a salvo."
"Estaba preocupada."
"Estamos más preocupados por ti. No eres exactamente fuerte."
"No soy una debilucha." Le molestaba la implicación.
"No, no lo eres, cariño. Sólo estás un poco resguardada y siempre he sido

protectora."
"Ya no soy un niña y te he dicho que pares. Aprecio que lo intentes, por lo
menos."
"Tengo que irme. Count, esa rata hijo de puta, fue con el chisme a mi marido.
Están discutiendo en la puerta. No quiero que acaben a golpes."
"Te amo."
"Yo también te amo."
De repente, Mia gritó:
"¡Ya basta!"
La llamada se desconectó y Vanni colgó el auricular en el soporte, agradecida

de no alojarse en el hotel con su familia. Las familias de sus hermanos
conviviendo sonaba como una pesadilla. Nunca podrían estar bajo el mismo
techo durante más de unas pocas horas sin convertirlo en un pandemónium.
Vanni salió de la cama y maldijo. Necesitaba un masaje y relajantes

musculares. Se decidió por ir a la cocina a por un refresco en su lugar, ya que
305
los dos primeros no eran opciones viables. Las bolsas de su expedición de
compras estaban en el mostrador. Abrió la lata y bebió un sorbo, decidiendo
vestirse. Moverse podría ayudar a aliviar algo de su dolor, antes de que Smiley
regresara.
También recordó que tenía que hacer algunas llamadas. Gregory Woods
todavía tenía su cartera y todas sus tarjetas de crédito. Necesitaba cancelarlas,
pero no quería ir en contra de las órdenes de Justice North acerca de las
restricciones telefónicas. Le había preguntado a Smiley y él dijo que estaría
bien. La cancelación y sustitución de todo iba a ser una molestia.
www
Smiley detestaba que todo el mundo en la sala hubiera escuchado la

conversación de Vanni con sus dos hermanos. La reunión había llegado a su
fin cuando se habían recibido noticias de que una llamada telefónica había
entrado para ella. Se había parcheado a través del teléfono de Justice, su lado
silenciado. Le había desagradado su hermano inmediatamente, después de
haber desgarrado a Vanni. Cuando terminó la llamada telefónica, se puso de
pie.
"Voy a ver cómo está."
Justice frunció el ceño.
"Sonaba bien. No hemos terminado."
"No sé por qué todo el mundo tuvo que escuchar su conversación."
306
No era la primera vez que Smiley había protestado.
"Lo siento, por eso." Justice frunció el ceño. "Pero necesitábamos saber lo que
se dijo. Necesitábamos saber si su familia no está contenta con su presencia
aquí y si les molesta estar retenidos en un hotel. Tienen una historia con Carl
Woods y él podría usar esa asociación para contaminar su opinión de nosotros,
instando a tu mujer a abandonar Homeland."
Smiley sabía que tenía razón.
"Eso no sucedió. Su hermana le dijo que se quedara aquí, donde está a salvo."
"Buena cosa."
Smiley disparó a Jericho una mirada fija.
"Acabamos de detener al camarero. Pensé que te gustaría estar presente para

esto, en lugar de atar a Vanni la cama para mantenerla a salvo. Yo haría eso si
fuera mi mujer."
"Eso funciona." se rió Fury.
Justice gruñó en tono bajo.
"No me lo recuerdes." Estrechó su mirada sobre Fury. "Y te recuerdo que ataste
a Ellie a tu cama por una razón diferente."
"Creo que fui contratado justo después de eso." murmuró Miles Eron.
"Necesitabas mucha ayuda con tu imagen pública."
El humor de Fury desvaneció.
"¿Quién tendrá el placer de asustar la mierda de este humano y hacerle

hablar?"
"Lo hare yo." Se ofreció Smiley.
"No. Yo lo haré." Jericho se puso de pie.
307
"Nos drogó a Vanni y a mí."
Smiley le enfrentó, listo para defender su caso.
"Exactamente. Es personal. No podrá hablar si pierdes los estribos y le rompes

la mandíbula. Toma tus sentimientos de esto respondiendo a mi pregunta con
total honestidad. ¿Quién va a aterrorizar más a ese humano? ¿Tú o yo?"
Smiley lo odiaba, pero admitió esa lógica de Jericho.
"Bien, pero quiero la oportunidad de estar allí."
"No me esperaba nada menos." Asintió Jericho. "Verte le pondrá nervioso."
"Recuerdo cuando solía estar a cargo." Reflexionó Justice. "Ya ni siquiera tengo
una oficina y escritorio agradables."
"Lo siento." Dijo Jericho, aunque no parecía lamentarlo.
"Realmente no creo que esto sea una buena idea." Protestó Miles. "Creo que el
grupo de trabajo está haciendo una excelente labor."
Justice se puso de pie.
"Tomo nota, Miles. Agradecemos tu opinión, pero esto no está ocurriendo

fuera de los muros de Homeland. Jericho tiene un buen plan. Vamos. Están
reteniendo al humano en la sala de interrogatorios dos. Todos queremos ver
esto."
"¿Vamos a grabarlo?" Fury arqueó una ceja interrogante.
Justice asintió.
"Vamos a filtrarlo a la prensa." Miró hacia Smiley y Jericho. "Tenedlo en

cuenta. Los seres humanos son aprensivos acerca de las cosas que perciben
como demasiado violentas o aterradoras."
308
"Por eso creo que el grupo de trabajo debe manejar esto." Miles se puso de pie
también. "Va a aparecer que aterrorizas a este hombre hasta un confesión. Me
pagas para decirte lo que mi gente va a pensar. Ahí está."
"Ríndete." Murmuró Cindy. "Nadie más está de acuerdo contigo."
Miles se giró y la miró.
"¿Qué has dicho?"
Ella levantó la voz.
"No queremos que la ONE aparezca como si nos necesitaran para manejar sus
asuntos de seguridad. Eso es peor que liberar un vídeo de uno de ellos
interrogando a este camarero. Queremos que las personas teman a los Nuevas
Especies lo suficiente como para no joder con ellos en el futuro."
"El grupo de trabajo asusta a todos." La miró Miles.
"Creo que Jericho es mucho más aterrador." Ella lanzó al macho primate una
sonrisa. "Tengo total fe en ti."
"Gracias." Jericho le devolvió la sonrisa.
"Sigo pensando que es un error." Miles se enfrentó a Justice. "¿Por qué nos
pagas para manejar tu prensa si te niegas a escuchar mi consejo?"
"No es por tu personalidad ganadora." Murmuró Cindy lo suficientemente

bajo para que su jefe no pudiera oírlo.
Justice se rió entre dientes.
"Necesitábamos tu ayuda manejando la excursión de compras. Tú eres el único

que decidió quedarse. Tenemos esto."
"Sigo pensando que es un error." renegó Miles.
Cindy rodó los ojos.
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"Él piensa que se ve bien como empate. Apoyo mi caso." Se dio la vuelta en su
silla, llamando la atención de todos. "Eso sí, no golpeéis esa mierda viviente
fuera contra ese cabrón delante de la cámara antes de tenerle hablando. Eso
sería una exageración. La gente puede verlo como una confesión forzada. No
queremos a nadie gritando acerca de sus derechos violados."
"Como si a ese humano le importara una mierda cuando nos drogó." Silbó
Smiley.
"Estoy de acuerdo." Reconoció Cindy. "Mi corazón no está sangrando por este
imbécil, pero todo lo que estoy diciendo es: no infligir lesiones que se vayan a
mostrar. El camarero podría no haber sido consciente del peligro. No es
excusa, pero sólo estoy diciendo que debes tratar de mantener la cámara
presente para que podamos usarlo en la guerra mediática que la Iglesia Woods
ha comenzado."
"Querían alguien arrojado a sus autoridades humanas para ser procesado.

Creo que tenemos su kilo de carnaza." Dijo Justice mientras rodeaba su
escritorio.
"¿Se lo entregarás a los humanos?"
Smiley estaba indignado. Justice se detuvo junto a él.
"Tengo un plan."
"¿Cual? Su sistema de justicia no es lo suficientemente duro. Él merece ser

enviado a la prisión de Fuller, no a alguna celda de prisión humana con
televisión y visitantes."
Smiley apretó los puños, muy enfadado. Justice se inclinó y le sostuvo la

mirada.
"Si hay algo que hemos aprendido, es que nuestros enemigos tratan de huir del
país cuando estamos tras ellos. Las autoridades humanas y la prensa lo saben
también. Quiero poner suficiente presión sobre Gregory Woods para hacerle
intentar escapar. Estaremos esperándole."
310
"No puedo escuchar esta parte." Miles retrocedió hacia la puerta. "Me voy de
aquí. Mis asesores legales me dirían que no formara parte de esta
conversación."
Él salió de la habitación. Justice arqueó una ceja hacia Cindy.
"¿Te vas también?"
Ella se echó hacia atrás en su silla.
"Tengo esta condición que yo llamo senilidad espontánea. No puedo recordar ni

una maldita cosa cuando no quiero. Vamos. No me lo perdería por nada del
mundo."
Algo de la ira de Smiley se disipó.
"¿Tienes alguien del equipo en el lugar para agarrarlo?"
Justice sonrió pero no llegó a sus ojos.
"Nosotros le ayudaremos a desaparecer. El mundo fuera pensará que está

recibiendo un bronceado decente en alguna playa, pero no hay luz solar donde
él va a acabar. La prisión Fuller está a punto de tener un pequeño
hacinamiento, sin embargo no tenemos ningún programa de pronta liberación.
Hemos pedido nuevas jaulas ya."
"No tienes que publicar legalmente la identidad de quienquiera que encarceles

en Fuller." Sonrió Cindy. "Punto para los buenos."
Fury se rio entre dientes.
"Lo comprobé. El personal de la prisión de Fuller ensambló las literas y

recibieron ropa de cama nueva. Sólo están esperando para expedir la ropa a
los nuevos presos."
Smiley se calmó.
"¿Estás seguro de que no va a escapar?"
311
"Positivo." Juró Justice. "Tiene demasiado miedo para mear sin un equipo de
seguridad fuera de la puerta. Acaba de contratar a dos de nuestros miembros
del grupo de trabajo encubiertos. No tiene idea de lo que realmente son."
"Eso es totalmente cierto." Asintió Cindy. "He estado investigando a Gregory

Woods durante más de un año, desde que alcanzó el nivel de 'gran-momento-
social' de los medios de comunicación. Es todo boca y ninguna columna
vertebral. Ahora tiene que estar paranoico como el infierno y he supervisado el
incremento de su personal de seguridad en los últimos días. Suele mantener
tres equipos a su alrededor, pero ha duplicado ese número."
"Los miembros de nuestro equipo le tienen cableado y han clonado todos sus
dispositivos." Anunció Fury. "Es muy dependiente de la electrónica y ya ha
hecho búsquedas de los países sin extradición, para huir. También contrató un
jet privado que está esperando en estado de alerta. Uno de nuestros humanos
está usando el uniforme de piloto de esa compañía. Va a apresurarse directo a
nuestro piloto y volará a donde nuestro equipo le estará esperando para
llevarle en custodia."
"¿Qué pasa con el hijo? Le quiero también."
Smiley no penaba olvidar que Carl Woods había entregado a Vanni a su padre.
"Su padre y él pueden compartir una celda. El padre no se fugará sin el hijo."
Admitió Justice.
"Por todos los indicios que he encontrado, Carl Woods depende en gran
medida el dinero de su papá." Cindy sacó un dispositivo electrónico de su
bolso. "Gasta más de lo que gana y, para ser honesta, no es precisamente el
mejor abogado. Su padre pagó para abrir su consulta privada y le proporciona
la mayor parte de sus asuntos."
Giró la pantalla para mostrar algo a Justice.
"Esta es su deuda actual. Las puertas de su consultorio sólo están abiertas

porque Papi salva su culo todos los meses. Su casa está hipotecada por más de
312
lo que vale, su culo estaría sin hogar y sin trabajo dentro de tres meses si ese
dinero se corta. Gregory Woods es un imbécil al que le encanta mantener a
todos a su alrededor con cadenas. Es ese patético complejo de dios que tiene.
Apostaría la barra de caramelo en mi bolso a que Carl Woods se da cuenta de
que el dinero se acabaría si no se pega al culo de su padre. Me refiero a la
billetera. También sabe que si se presentan cargos criminales contra Gregory,
lo primero que pasaría es que van a congelar sus activos cuando escape de la
detención. Eso significa que el dinero se acaba, a ciencia cierta."
"¿Y si no escapa con su padre?"
Smiley no estaba dispuesto a correr el riesgo. Fury llamó su atención.
"Entonces le cogeremos un par de semanas después de que desaparezca su

padre. Todo el mundo supondrá que simplemente se reunió con él más tarde.
Y estarán en lo cierto."
"Especialmente cuando se ejecute la hipoteca sobre su casa y le desalojen de

sus bonitas suites de oficina." Agregó Cindy. "Incluso su coche es de alquiler."
"¿Y Bruce? Le quiero todavía más. Le disparó con un Taser a Vanni y la

amenazó."
Smiley no estaba dispuesto a permitir que ese macho se escapara después de

hacerle daño. Justice se echó hacia atrás.
"Hicimos una revisión de antecedentes. ¿Deseas golpear a alguien y hacerle

sangrar? Es todo tuyo."
Fury gruñó.
"Le gusta hacer daño a las mujeres. Ha sido detenido seis veces por golpearlas
y aterrorizarlas. Las hembras retiraron los cargos después de que la policía
sospechara que recibieron amenazas. Gregory Woods ha dicho a tu Vanni que
tenemos un cementerio de nuestros enemigos. Creo que deberíamos empezar
uno, realmente."
313
"Basta, Fury." Justice le lanzó una mirada divertida. "Sería un terrible
fertilizante. No me gustaría exponer nuestra vegetación a sus restos."
"Cierto. Aunque es un pedazo de mierda."
Justice asintió y sostuvo la mirada de Smiley.
"Déjale con vida después de enseñarle cómo se siente el ser golpeado. Le

capturaremos cuando los equipos traigan a Gregory. Creo que la muerte sería
demasiado amable. Déjale pasar su vida en una jaula. No querrá alejarse de su
jefe. Le ayudaremos a lograr esa meta. Vamos."
Cindy se puso de pie.
"Me gustaría poder ir, pero Miles probablemente está esperando en el coche.
Quería irse después de la reunión y puedes adivinar quién conducirá. No sería
él." Se acercó a Smiley. "Me alegro de que consiguieras a la chica." Le guiñó un
ojo. "Agárrate a ella. Parece una joya."
Smiley asintió y siguió a los hombres fuera de la oficina de Justice hasta

Seguridad. Entró en la celda de detención en primer lugar, reconociendo al
camarero del hotel. Los ojos del macho se agrandaron al ver a Smiley. Él se
tensó en su silla.
"Me recuerdas."
Smiley se mantuvo alejado del macho y cruzó los brazos sobre el pecho.
"Te recuerdo."
Jericho entró en la sala de interrogatorios y cerró la puerta.
"Voy a hacer el interrogatorio."
Smiley mostró los colmillos, pero dio un paso a un lado. Miró al hombre que
estaba esposado a la silla, pero se aseguró de quedar fuera del alcance de la
cámara instalada en la esquina. Jericho rugió en voz alta mientras caminaba
hacia adelante. Era un sonido destinado a intimidar al humano.
314
"¡Yo no hice nada!"
Los ojos del humano estaban muy abiertos por el miedo.
Jericho se agachó a unos pasos del macho, sólo mirándolo. Smiley notó que
había inclinado la cabeza lo suficiente para que la iluminación de la habitación
pudiera atrapar los tonos rojos de sus ojos. El camarero intentó deslizarse tras
la silla, pero se dio cuenta de que no se movía. Él se desató en sudar.
"No me gustan los mentirosos." Dijo Jericho con voz áspera mientras el ruido
que emanaba de su pecho se profundizó. "¿Parezco divertido? Estás
desperdiciando mi tiempo. Quiero saber lo que ocurrió en ese bar."
"Yo sólo serví las bebidas."
"Déjame reformular esto. Sé lo que pasó, pero quiero que admitas lo que
hiciste."
Jericho respiró profundamente, expandiendo el pecho y las fosas nasales. Su

expresión mostró su enojo.
"La confesión es buena para el alma, me han dicho. Así que confiesa."
Un buen minuto hizo tictac. El camarero trató de apartar los ojos, pero su vista
siguió su camino de vuelta a la intensa mirada de Jericho. Temblaba.
"Está bien. De acuerdo. Este tipo se acercó a mí antes de mi turno y me pagó

cuatrocientos dólares para deslizar algo en un par de bebidas. Dijo que iba a
ser una broma."
"¿En serio?" Jericho se puso de pie, hizo crujir los nudillos. "¿Que era tan
gracioso? Comparte como esta broma funcionó en mi amigo, porque me
vendría bien una carcajada. Quiero detalles específicos."
"Um, quizás no dijo que pretendiera ser divertido. Estaba con ese grupo de
una iglesia."
"¿Qué iglesia?"
315
"Se me olvidó su nombre. ¿Conoces esa con el tipo corpulento, el predicador
que tiene una voz quejumbrosa?"
"No."
"Siempre está hablando de la protección de la raza humana y de lo equivocado

que es que no fuisteis enviados a vivir en zoológicos." Palideció. "Yo no me
siento de ese modo. ¡No lo hago! Estoy muy bien con las Nuevas Especies y
toda la cosa de la ONE. Mi novia tiene un cartel de Justice North en la puta
pared de su dormitorio."
"¿Te molesta eso?"
La cara del hombre enrojeció.
"No."
"No me creo eso. Justice es guapo."
El hombre apretó los dientes.
"Me dice que necesito estar más en forma."
"Apuesto a que no es bueno escucharlo." Resopló Jericho.
"Piensa que él es perfecto."
"Tal vez lo es."
"Ningún hombre lo es. Y es un felino. Llamó a su gatito como él. Es un tipo de

cosa jodida."
Smiley hizo una mueca y miró hacia la cámara, esperando que Justice no se
ofendiera. Su atención regresó al macho. Le hacía feliz no ser felino o canino.
Era más difícil que los humanos tuvieran primates como mascotas, por lo que
dudaba que hubiera muchos llamados como él. Por supuesto, nadie le conocía
hasta que fueron liberadas las imágenes de Vanni y él detrás del hotel. Su
nombre no había salido hasta la excursión de compras.
316
"Ve al grano. ¿Este macho se te acercó para hacer qué?"
"Me dio esa pequeña botella de vidrio con un medicamento líquido en su

interior. Se suponía que debía esperar a que una Nueva Especie entrase en el
bar y cuando una chica entrara y se sentara junto a él, que dividiera la dosis a
la mitad y la pusiera en sus bebidas."
"¿Con qué sustancia?"
"No tengo ni idea. Dijo que sería entretenido. Esa es la palabra que usó."
"¿Cuál era su nombre?"
El humano se removió en su asiento.
"No estoy seguro. No le pregunté. Era un gran cabeza cuadrada. Conoces el

tipo."
"No lo sé. Cuéntame."
Jericho se agachó de nuevo, equilibrando su peso sobre las puntas de sus pies.
Parecía asustar al humano tener a Jericho así de cerca de nuevo.
"Un poco más de uno ochenta de altura. Corte de pelo militar de color oscuro.
No tenía cuello."
"Sigue describiéndole."
"Parecía como si estuviera tomando esteroides, ¿de acuerdo? Era todo músculo
y no muy hablador. No le presté demasiada atención a su aspecto. No quería
ligar con ese gilipollas. Sólo tomé el dinero y la droga. Hice lo que se suponía
que debía." Hizo una pausa. "Realmente necesitaba el dinero. Mi vieja siempre
se queja de cómo no la llevo a sitios bonitos y ha estado insinuando que le
compre un anillo. Los diamantes no son baratos. Es un poco culpa suya, si lo
piensas bien."
"¿Podrías identificarle en una formación?"
El humano vaciló y Jericho retumbó en lo profundo de su pecho.
317
"¡Sí!" asintió el humano. "Puedo. Estuvo en el bar un par de veces. Tomaba
bourbon con hielo."
Se abrió la puerta y uno de los miembros del grupo de trabajo entró con un
sobre grande. Lo abrió y sacó algunas fotografías de ocho por diez.
"Avísame cuando le veas."
El hombre escogió la tercera fotografía.
"Es él".
"¿Estás seguro?" Jericho se puso de pie.
"Sí. Tiene una cicatriz en la parte posterior de la muñeca izquierda. Se la vi

cuando estaba bebiendo en el bar. Era un poco difícil perdérsela. Es moreno y
muy rígido en comparación. Notas esa mierda cuando estás charlando con los
clientes mientras está tranquilo. No era hablador, así que pensé que podría ser
ex-militar. Estos tienden a ser solitarios cuando vienen y supe que estaba
trabajando como personal de seguridad para alguien del hotel."
"¿Cómo lo sabías?"
Hizo una mueca.
"Tenía uno de esos auriculares con cable que llegan hasta el cuello y llevaba un
arma. Tenía una funda de hombro sobre el lado izquierdo. El traje era caro, así
que sabía que no estaba allí para robar. Podría haber sido del servicio secreto,
porque los hemos tenido en el hotel antes, pero nunca beben estando de
servicio. Este tipo estaba allí a menudo. Siguió hablando con un tipo llamado
Gregory a través de su cosa auricular. La primera vez que sucedió, pensé que
me estaba hablando a mí y no podía leer mi tarjeta de identificación, pero
luego dijo que era su jefe."
Smiley respiró más fácilmente. Habían vinculado la droga a Gregory Woods.

Se dio la vuelta y abrió la puerta. Quería ver a Vanni. Estaría feliz de saber que
el camarero había confesado y había identificado la foto de Bruce.
318
Capítulo Dieciocho
Vanni colgó, alegrándose de que todo había terminado. Había comunicado con
ambas compañías de tarjetas de crédito y se sintió aliviada al saber que no se
había hecho ningún cargo. La sustitución de su licencia de conducir y sus
tarjetas de seguro médico, junto con algunas tarjetas de descuento de tiendas,
tendrían que esperar. Eran cosas que tendría que hacer en persona, una vez
dejara Homeland.
Llamó a su oficina, consiguiendo hablar con su jefe. Glen parecía feliz de tener
noticias de ella.
"¿Cuando vas a volver?"
"No estoy segura." odió el silencio.
"No puedo permitirme el lujo de pagar una empresa de trabajo temporal para
siempre, Vanni."
Ella tradujo eso en lo que él no le estaba diciendo. Que necesitaba poner su

vida en orden o tendría que dejarla marchar.
"Siento mucho todo esto, Glen. Estás siendo muy comprensivo. Sé con certeza
que necesito esta semana para asuntos personales. Tengo algún de tiempo de
vacaciones pendiente. La boda está cancelada, así que no habrá luna de miel."
"Supuse eso, después de ver las noticias. Es algo que ha sido la comidilla del
edificio. Carl no ha sido visto tampoco. ¿Estás bien?"
"Estoy mejor sin él. Resultó ser un cerdo."
"Los hombres rara vez reaccionan con gracia cuando son engañados."
319
Ella hizo una mueca.
"Eso no es exactamente lo que pasó. Estábamos rompiendo… bueno, es una

larga historia."
"Tienes dos semanas. Eres excelente en tu trabajo y, hasta ahora, una empleada
apreciada, pero esto es un negocio."
"Entiendo perfectamente. Gracias, Glen. Te llamaré de nuevo pronto."
Colgó justo cuando la puerta principal se abrió y Smiley entró. Se puso de pie
y forzó una sonrisa.
"¿Cómo estuvo tu reunión?"
Se acercó.
"¿Qué sucede?"
Le asombraba que él pudiera sentir sus estados de ánimo tan fácilmente.
"No es importante."
"Habla conmigo."
Se sentó en el sofá y le dio unas palmaditas al lugar junto a él. Ella se acercó y
se sentó. Olía bien y se veía aún mejor.
"Mis hermanos llamaron. Luego hice algunas llamadas sobre mis tarjetas de
crédito y otra a mi jefe. Mi hermano es un idiota, pero eso no es nada nuevo.
Mi hermana estuvo sorprendentemente fantástica. Por lo general no es tan
comprensiva. Mi jefe me dio dos semanas para volver o estoy despedida."
Hizo una pausa. "En una nota buena, nadie se metió con mis tarjetas de
crédito. Las cancelé."
Él extendió la mano y tocó un mechón de su cabello.
"No necesitas tu trabajo. Puedes quedarte aquí conmigo."
Vanni no sabía qué decir a eso. Cambió de tema.
320
"¿Cómo estuvo tu reunión? ¿Fue acerca de nosotros?"
Smiley soltó su cabello y le tomó la mano.
"Trajeron al camarero. Identificó a Bruce como el hombre que le pagó para

drogarnos."
Esa información la consoló.
"¿Está bajo arresto?"
"Por el momento. Estamos liberando material de archivo de su confesión a los

medios primero. Eso aplicará presión para hacer huir a Gregory Woods para
evitar a la policía. Esperamos que se lleve a Bruce y a su hijo con él. Ahí es
cuando van a pagar."
"¿Al ser detenidos?"
Smiley vaciló.
"No es así de simple."
"¿Van a quedar sueltos con lo que hicieron?" Eso la enfureció.
"No. Es sólo que se encargarán de esto nuestras leyes, en vez de las tuyas."
"Tus leyes son menos duras. Gregory y los hombres que trabajan para él
pagarán por drogarnos y por retenerte contra tu voluntad. Te prometo que no
se saldrán con la suya."
"Testificaré contra ellos."
Él sonrió.
"No es necesario que vayas a tus tribunales. Le dijiste a Justice lo que pasó y
eso es suficiente. Estás a salvo aquí, Vanni. Nunca tendrán la oportunidad de
hacerte daño de nuevo."
"Me estás confundiendo." admitió.
321
"Van a pagar y nunca conocerán la libertad de nuevo."
"¿Incluso Carl?"
No pareció que le gustara su pregunta, su cuerpo estaba cada vez más rígido y
su expresión más severa.
"No sientas lástima por ese macho. Te metió en una trampa y no te protegió."
Dicho de esa manera, ella asintió. Nunca olvidaría la imagen de él caminando

por esa puerta y dejándola allí con su padre y Bruce.
"Lo sé. Es un idiota."
"Podrías haber sido gravemente herida o asesinada. No voy a olvidar nunca

eso. Tu tampoco deberías hacerlo."
"No lo haré."
"Bien." Estudió sus rasgos. "No quiero que me dejes, Vanni."
Su corazón se aceleró un poco. Le echaría de menos si se iba de Homeland. Le

podía visitar los fines de semana, pero sería difícil. Una relación a larga
distancia sería difícil para cualquier pareja.
Quería estar con un hombre al que pudiera ver con regularidad. Carl había
sido un novio de fin de semana, en su mayor parte, y eso le había ayudado a
ocultar sus verdaderos defectos.
"Sé que esto es rápido, pero estoy dispuesto a casarme contigo."
No se había esperado esto.
Se deslizó del sofá de rodillas delante de ella y ajustó su cuerpo hasta que la
tuvo clavada. Él tomó sus dos manos.
"Seré un buen compañero. Me aseguraré de que seas feliz, Vanni."
"Yo..." Se quedó sin habla.
322
"Estabas dispuesta a casarte con Carl Woods." dijo el nombre como si fuera
desagradable. "Soy mucho mejor macho de lo que él podría incluso soñar con
lograr. Nunca te haría daño. Nunca permitiría que nadie más te hiciera daño
tampoco. Realmente mataría a cualquiera para protegerte. Serías todo para mí.
Dime tus inquietudes."
Se lamió los labios, tratando de pensar más allá de la sorpresa de su propuesta.
"Apenas nos conocemos el uno al otro."
"Soy Especie. No necesitamos mucho tiempo para conocer a nuestros

corazones." Se inclinó más cerca. "No tengo relaciones humanas fallidas."
Eso hizo que sonriera.
"¿Por qué dices eso?"
"No necesito salir con muchas mujeres antes de decidirme por una, porque sé
lo que quiero y necesito. Esa serías tú. Me haces feliz. Siento todas las cosas
que siempre soñé. No temo al compromiso. Le doy la bienvenida. No voy a
dar todo por hecho, como la mayoría de los humanos lo hacen con las mujeres
de sus vidas. He estado solo toda mi vida y valoraría cada momento pasado
contigo."
Las lágrimas llenaron sus ojos. Parpadeó de nuevo. Probablemente fue la más
dulce conversación, la más abierta que un hombre había tenido con ella. La
mayoría de los hombres ocultaban sus sentimientos, pero Smiley se abría a sí
mismo con amplitud. La mirada en sus ojos castaños, la seriedad que brillaba
allí, expresaba su nivel de honestidad.
"Podríamos ser felices, Vanni."
"¿Qué pasa si llegamos a conocernos y eso cambia a peor? Esta es la etapa de

luna de miel."
Una ceja se arqueó.
"¿Qué es eso?"
323
"Casi todas las relaciones son geniales en el inicio. Ambas personas están en su
mejor comportamiento, pero bajan la guardia después de un tiempo. Luego
llegan a mostrar sus defectos. Podría no gustarte dentro de un mes."
"¿Me estás engañando?" Frunció el ceño. "¿Estás simulando ser otra persona?"
"No."
Una sonrisa curvó sus labios.
"Lo sé. Eres mala en ocultar tus emociones y tienes una cara muy expresiva."
Se puso serio. "Tú me has visto en mi peor momento, Vanni."
Había sido maravilloso para ella.
"No lo creo."
"He estado malhumorado desde que llegaste a mi vida. Tengo miedo de que
otro macho vaya a llamar tu interés. Siento celos y me preocupa que tal vez
desees a alguien más. Es por eso que he estado tan enfadado cuando se
encuentran cerca. Tomé por nombre Smiley porque estaba feliz de ser liberado
y juré disfrutar cada día al máximo. Jericho me llamó gruñón y estaba en lo
cierto. Admito que he matado a humanos en el pasado y lo volvería a hacer si
tuviera que hacerlo. No me imagino que sea un buen rasgo, pero quiero que
me conozcas. Éstas son las cosas que te habría escondido, si quisiera
engañarte."
Hizo muy buenos puntos.
"Nunca pensaré mal de ti. Tienes que protegerte y proteger a las personas que
amas. Aprecio que confiaras en mí lo suficiente como para decirme la verdad
sobre lo que has soportado."
"Te asusta, ¿sabiendo que puedo resultar mortal con mis enemigos?"
Ella negó. Su dominio sobre sus manos disminuyó y soltó una para acariciar
su mejilla con el pulgar.
324
"Me podrías enfurecer y tendría que alejarme. ¿Ese es tu temor? No puedo
verme nunca enfadándome contigo, nunca me volvería contra ti. Oímos hablar
de la violencia doméstica de tu mundo." Su mano se quedó inmóvil, tocándola
sólo ligeramente. Su voz se afiló. "Eso nunca sucedería. Nunca te tocaría con
ira. Jamás."
"No creo que lo hicieras."
Su expresión se relajó.
"Bien. ¿Sabes lo que le pasaría a un Especie que abusara de su compañera?"
Ella negó.
"No sobreviviría mucho tiempo. Me gustaría acabar con él yo mismo, pero

tendría una dura competencia para alcanzarle primero. Otros machos le
perseguirían también, junto con nuestras hembras. Nosotros no consentimos
ese tipo de cosas." Dio unas respiraciones profundas. "Estoy furioso porque
Carl Woods te pusiera en peligro. Le haré sangrar si alguna vez pongo mis
manos sobre él. Sé que no es algo que quieras oír, pero soy totalmente sincero.
No voy a ocultarte esto."
Vanni sonrió.
"Podrías patear su culo totalmente."
"Lo haría." Sonrió. "Lo disfrutaría. Espero que eso no te perturbe."
"No. No me importaría darle un puñetazo yo misma."
Él se rio entre dientes.
"Tú, ¿violenta? No puedo imaginármelo."
"Todo el mundo tiene días malos. Bruce y Gregory son monstruos. Golpeé a
Bruce con una botella y le dolió. Tenía incluso planeado atacar a Gregory, pero
no estaba en la limusina."
Todo el buen humor se desvaneció de los rasgos de Smiley.
325
"Se me informó de lo que hiciste. No quiero que tengas que revivirlo, Vanni.
Fuiste muy inteligente y muy valiente. Hiciste lo que debías hacer para
sobrevivir. Me alegro de eso. Ojalá le hubieras golpeado más fuerte o que
hubiera muerto por la bala que guardaba para ti."
"Amenazaron con matar a Beth."
"Nunca necesitarás excusarte o explicarte."
Él se inclinó más cerca, hasta que sus respiraciones se mezclaron, y le acarició

la mejilla de nuevo con el pulgar.
"Quédate conmigo. Seremos felices. Podemos comprometernos a hacer que

funcione. Lo hablaremos todo. Sólo tienes que decirme si hago algo que te hace
infeliz y yo haré todo en mi poder para cambiarlo."
"Quiero decir que sí." admitió. "Sólo temo acabar con el corazón roto."
"Nunca." dijo con voz áspera. "Seré un buen compañero para ti. ¿Cuáles son
tus temores? Dime."
"He sido engañada."
"No sucederá. Eres la única mujer para mí. ¿Sabías que los compañeros se
vuelven adictos a sus mujeres?"
Sus ojos se abrieron, sorprendida.
"¿Cómo?"
"Otras mujeres olerán mal para mí. Sólo estaré duro oliéndote y viéndote a ti."
"¿En serio?"
Él asintió.
"Nuestro vínculo va a crecer cada día y sólo te desearé a ti. Ya lo hago." Hizo
una pausa. "Otra mujer se ofreció a compartir sexo conmigo desde que nos
326
conocimos. La rechacé. El pensamiento me horrorizó. Sólo te quiero a ti,
Vanni."
Smiley lamentó admitir eso de inmediato, cuando vio la expresión de Vanni.

Había ido demasiado lejos con la honestidad. La sintió tensa bajo su toque. Él
dejó de acariciar su mejilla y le tomó las manos de nuevo, negándose a dejarla
ir.
"Fue después de que regresé a Homeland, con la droga todavía en mi sistema.

Una mujer pensó que estaba sufriendo. Lo estaba, pero no la deseaba. Incluso
con dolor, sólo te quiero a ti. Por favor, no te enfades."
"¿Fue Cindy?"
"No. ¿Por qué piensas eso? "
"Vosotros parecíais amistosos. Es linda."
¿Está celosa?
Eso le hizo feliz. Eso significaba que se sentía posesiva por él. Era algo bueno.
"Nunca he tocado a Cindy de esa manera. Trabaja para la ONE y no ha

mostrado ningún interés en mí. Se siente atraída por un macho que vive en la
Reserva. Le mira, cuando él no la está mirando. Algunos lo hemos notado. Fue
una hembra Especie que es amiga mía."
"¿Has tenido relaciones sexuales con ella?"
Él se estremeció.
"No se trató de nada serio. No estamos involucrados en una relación. Las

Especies hembras casi nunca comparten relaciones sexuales con el mismo
macho dentro de un lapso de tiempo corto. Es complicado, pero no hay un
elemento romántico involucrado."
"Pero, ¿te has acostado con ella?"
327
Vanni parecía confundida y lo comprendió. No estaba familiarizada con su
especie y era muy inocente. Necesitaba explicárselo.
"El sexo puede ser simplemente para el placer y para sentirse ligado a otra
persona por un corto tiempo. En tu mundo creo que el término es llamado
'ligue'. Las hembras Especie conectan con los machos cuando quieren
compartir sexo pero no son pareja o están involucrados del modo en los seres
humanos tienen relaciones románticas. Tenemos amistad y, a veces, también
compartimos sexo. Tú y yo tenemos más que eso. Nunca he compartido sexo
con una mujer y quise emparejarme con ella. Sólo tú, Vanni. Eres especial para
mí. Por favor, créelo. No voy a compartir nunca relaciones sexuales con nadie
más que tú."
Ella parecía insegura.
"Entonces, ¿no dormirás con ella otra vez?"
"No. Nunca."
Le miró a los ojos, pareciendo buscar la verdad. Mantuvo el contacto visual.
"Está bien."
El alivio se propagó a través de él. Necesitaba pensar antes de hablar.
"¿Cuáles son tus otros temores?"
"No quiero tener una relación a larga distancia."
"Tampoco yo."
"¿Qué pasa cuando estés trabajando? ¿Alguna vez te has ido durante semanas?
"
"Tu irás donde vaya yo. Los compañeros permanecen juntos. Seré enviado a la
Reserva de vez en cuando, pero podría rechazarlo si deseas permanecer aquí.
No es obligatorio para mí viajar entre ambos lugares. Tenemos la opción de
decir que no. Se respeta. Las Especies quieren que las otras Especies sean
328
felices. Trabajarán en torno a nuestras necesidades. Sólo tendremos que vivir
en la ONE. Es demasiado peligroso en tu mundo. Tuvimos un hombre que
vivió en el mundo y fue secuestrado con su hembra. Tu familia y amigos
pueden visitarte." Miró a su alrededor en la sala de estar. "Podrían sentirse
cómodos aquí, ¿no?" Le sostuvo la mirada.
"Sí." asintió ella.
"Estar conmigo no significa que tienes que renunciar a las personas que amas.
Solo sería más seguro para ellos pasar tiempo contigo aquí, detrás de nuestros
muros." Vaciló. "Pero podría ser un problema para ellos."
"No son gente de prejuicios."
"Nuestros enemigos lo son. Ya has sido vinculada a mí. El daño ya está hecho.
Haremos todo lo posible para protegerles."
Odiaba la forma en que la preocupación arrugó las comisuras de sus ojos.
"Tengo que decir que las pocas parejas que tienen familiares y amigos en el
mundo exterior no tuvieron demasiada dificultad después de las primeras
semanas. La cobertura de los medios se calmó y les dejaron en paz."
"Eso está bien. Sobre todo porque toda la gente de la que estoy cerca ya está
ocultándose de la Iglesia Woods y los medios de comunicación."
"Muy cierto."
Esperó a que expresara otras objeciones. Estaba pensando. Casi podía ver las
ruedas de su mente girando. Era lindo lo fácil que resultaba de leer. Se encerró
en algo porque agarró sus manos un poco más ajustadas, mirando fijamente
hacia él, pero no dijo nada.
"¿Qué es?"
"Quería tener niños algún día. ¿Considerarías permitirme tener un bebé?

Podríamos acudir a un médico y solicitarlo. Podrían usar esperma donado por
alguien para impregnarme en un entorno quirúrgico. Sé que no sería
329
biológicamente tu hijo, ya que no puedes tenerlos, pero ¿pensarías al respecto?
¿Es posible que pudieras amar a un bebé que sea creado de esa manera? Me
gustaría adoptar un bebé, si no fuera capaz de llevar a uno de los míos. Le
amaría de todos modos. ¿Podrías tu?"
Sus palabras se precipitaron en derramarse, aturdiendo a Smiley. Ella jadeó un

suspiro, antes de que pudiera responderle.
"Sé que es mucho pedir, pero realmente quiero ser madre algún día. Es parte
de la razón por la que accedí a casarme con Carl. No estoy diciendo que
tengamos que hacerlo de inmediato, pero quiero esa opción. Yo amo a mi
sobrina y sobrinos. No les di a luz, pero quiero eso. Niños. Una familia.
Contigo."
Su intestino se tensó y la emoción le atragantó. Quería bebés con él un día y

convertirse en una familia. Era el sueño de su vida también.
"¿Es mucho pedir? Lo siento. Sé que algunos hombres se sienten extraños

acerca de esto."
Trató de tirar de las manos lejos, con una mirada de resignación en su rostro.
Él se las estrechó con fuerza, negándose a dejarla ir.
"Vanni, podemos tener hijos."
Ella parpadeó.
"¿Estás diciendo que si? ¿No te molestaría criar a un bebé o dos que sean
totalmente humanos?"
Se inclinó y rozó sus labios sobre los de ella. Él le soltó las manos y se levantó
para tomar asiento en el sofá junto a ella. Ella le observó. Se dio la vuelta
simplemente y la levantó, poniéndola en su regazo.
Se lo permitió, pero podía ver que la había sorprendido. Él la abrazó y

mantuvo el contacto visual.
330
"Tenía mis dudas al decirte esto después de lo que te dijo la Iglesia Woods.
Queremos vivir en paz con los seres humanos. No queremos conquistar el
mundo. Dirigir la ONE ya es bastante difícil. ¿Lo crees?"
"Nos temen, pero no hay razón para hacerlo. Una gran cantidad de los que nos
odian están esperando que muramos. Piensan que las Especies son una plaga
con un tiempo limitado en la Tierra. Mercile intentó criar con nosotros, pero
nunca funcionó. Todavía estamos tratando de averiguar por qué, pero desde
que fuimos liberados han nacido algunos niños."
Podía ver su confusión.
"Los escondemos de vuestro mundo. Tememos por su seguridad. El macho

que te conté que vivía en tu mundo y que fue capturado con su mujer, ambos
fueron secuestrados por una razón. Querían usarlos a ambos para que hicieran
lo que les exigieran. Parece que hay un mercado negro a la espera de bebés
Especie... como mascotas exóticas. ¿Entiendes nuestros miedos y nuestro
horror? Quieren esclavizar a nuestros hijos de la misma manera en que lo
hicieron con nosotros. Secuestraron aquel macho para tratar de encontrar la
manera de crear más."
"¡Oh Dios!"
"Secuestrarían a nuestros hijos y los venderían. Peor aún, algunos desearían

asesinarlos pura y simplemente para evitar que las Nuevas Especies se
multipliquen y tengan un futuro. Esos imbéciles, como los miembros de la
Iglesia Woods, extenderían su temor de que vamos a invadir a los humanos.
No es cierto. Sólo queremos vivir en paz."
Las lágrimas llenaron sus ojos, pero parpadeó de nuevo.
"Confío en ti con sus vidas por decirte esto, Vanni. No se puede compartir esta
noticia con nadie sin poner en peligro a los niños Especies. No hay muchos,
pero sí algunos. Es posible para mí conseguir dejarte embarazada, si los dos
331
estamos con buena salud y somos bendecidos. Mi genética es más fuerte que la
tuya. La pregunta no es si yo estaría dispuesto a ser el padre de un niño
humano. Más importante aún, ¿estarías dispuesta a ser madre de un niño
Especie? Se parecería a mí, un primate. Todos nuestros niños han nacido
machos. Es la forma en que fuimos creados en los laboratorios de Mercile."
"Nunca voy a contarlo y me encantaría tener niños que sean como tú."
El calor se extendió por su pecho, así como un sentido primordial de alivio

cuando sonrió. Ningún engaño se mostró y sabía que podía confiar en sus
palabras.
"Quiero que seas mi compañera, Vanni. Quiero pasar el resto de mi vida

contigo en mis brazos. Me casaré contigo en una ceremonia oficial humana. Sé
que querrás eso."
"Eso no me importa."
"Es importante para todos los humanos."
Ella envolvió sus brazos alrededor de su cuello y le gustó la forma en que

apoyó la cabeza en su hombro. Demostró que confiaba en él cuando se
acurrucó más cerca.
"Solo conseguí alguna clase de enfermedad preparando planes de boda. Me

quemó. ¿Te fugarías conmigo? "
"¿Qué es eso? Lo haré, pero necesito que me digas que hacer primero."
Ella se echó a reír.
"Lo harías, ¿eh? ¿Y si es algo horrible?"
"Aún así lo haré por ti, si eso te hace feliz."
332
Ella alivió su asimiento sobre sus hombros y tomó su rostro. Su beso fue
bienvenido cuando plantó sus labios en los suyos. Él trató de profundizarlo,
pero ella se apartó, aunque se quedó cerca.
"Fugarse significa escaparnos y simplemente casarnos. A veces, invitas a

algunos amigos cercanos. No quiero una gran boda. Me recuerda a la pesadilla
de Carl."
"¿Dónde te gustaría fugarte? Voy a organizarlo."
Le estaba diciendo que sí. Podría hacerlo realidad.
"Tenemos un helicóptero y mandaremos un destacamento de seguridad."
"Podríamos hacerlo aquí. No me importa dónde. Sólo se supone que sea un

lugar bonito y tan privado que podamos disfrutar haciéndolo juntos."
"La Reserva." decidió. "Conozco el lugar exacto. ¿Estarías de acuerdo con eso?"
"Necesito llevar a Beth. Es mi mejor amiga. Nunca me lo perdonaría de lo

contrario. ¿Quién es tu mejor amigo?"
"Tengo unos pocos."
"Invítales."
"¿Qué pasa con tus hermanos y tus padres?"
Ella negó.
"De ninguna manera."
"¿No quieres que tu esté familia allí?" Eso le preocupó. "¿Van a molestarse si te
casas conmigo?"
"No es eso, específicamente Pero prefiero enviarles un video después. Mi

hermano está siendo un idiota. Mi hermana ya trató de hacerse cargo de mi
boda una vez. Ella y mamá estaban gritándose la una a la otra cuando fuimos a
recoger a mi vestido. Beth se metió en eso con ellas, cuando estábamos
333
escogiendo vestidos de dama de honor. Querían vestirla de color púrpura.
Odia ese color. No tienes idea de lo estresante y espantosa que puede ser una
gran boda. Todo el mundo quiere poner su granito de arena y se pelean. Una
boda debe ser sobre la novia y el novio comprometiéndose el uno al otro. Todo
el mundo parece olvidar eso."
Él arqueó las cejas.
"Suena estresante."
"No vamos a tener eso." Vanni sonrió. "Vamos a mantener las cosas simples.
Tú, yo, Beth, tus amigos y un predicador. Eso es todo lo que necesitamos."
"¿Eso te hace feliz?"
"Sí."
"¿Vas a ser mi pareja?"
Quería estar seguro antes de permitir que demasiada emoción le golpeara.
"Sí." Sus facciones se animaron. "Es una locura, ¿no es así?"
"No. Esto es maravilloso y perfecto. Tú eres perfecta."
Él deslizó su mano entre su pelo y tomó la parte posterior de su cabeza

suavemente, tirando de ella hacia delante.
Le encantaba besar a Vanni. Sus labios eran suaves y los abrió para él. Podría
conseguir fácilmente ser adicto a su sabor y quería serlo. Se sentía un poco
culpable por no decirle que posiblemente ya estuviera llevando a su hijo.
Quería darles un poco más de tiempo juntos antes de compartir esa
información. Vanni quería bebés. Este era el mayor obstáculo tirado abajo. Los
quería con él.
El timbre de la puerta sonó. Smiley apartó su boca con pesar. Quería llevarla a
la habitación y hacerle el amor. Él gimió.
"Tengo que ir o van a entrar."
334
"Está bien." Le sonrió, sus mejillas sonrojadas y brillantes.
"Eres tan hermosa."
Nunca dejaría de decirle eso. La levantó de su regazo y se puso de pie,

necesitando ajustar su dura polla. No era cómodo cruzar la habitación con una
erección. Abrió la puerta y tiró de ella abriendo solo lo suficiente como para
mirar hacia fuera, protegiendo su mitad inferior de quien eligió este mal
momento.
Jericho suspiró cuando le vio.
"Lo siento. Tenemos que hablar."
"Ahora no".
El macho se cruzó de brazos sobre el pecho.
"Ahora."
Smiley bajó la voz.
"Acaba de aceptar ser mi compañera. Vete."
"Dijiste que esperarías un tiempo antes de firmar los documentos." se quejó el

macho.
"Solo si ellos me pidieran que los firmara. Quiero hacerlo yo. Es mía. Vamos a
fugarnos."
"¿Qué demonios es eso?"
"Casarse."
Jericho abrió la boca y luego la cerró. Él cambió su postura.
"Sabemos quien vendió la droga a la Iglesia Woods. Va a haber una reunión al

respecto en Seguridad. Pensé que te gustaría estar allí."
"¿Quién fue?"
335
"¿El nombre de Dean Polanitis te suena?"
"Nunca podría olvidar a ese hijo de puta. Él dirigió Drackwood Investigación."
"Su gente se volvió en su contra, durante el interrogatorio en Fuller."
"¿Sabemos qué cantidad de la droga vendió?"
Jericho silbó.
"Unos pocos cientos de dosis por lo menos."
"¡Mierda!"
"Tenemos que recuperarlo. Si no vamos a tener que preocuparnos cada vez

que salgamos de la ONE. Nosotros o a las hembras cerca de nosotros
podríamos ser dosificados. Nuestros enemigos también podrían venderla o
contratar a un químico para encontrar la manera de hacer más y ponerla en la
corriente principal de la población humana. Imagina que horror. Los machos
humanos sin honor podrían usarlo contra sus colegas. "
Smiley era consciente de Vanni detrás de él. Su erección ya no era un

problema. Abrió más la puerta e hizo espacio para que ella permaneciera cerca
de él, poniendo su brazo alrededor suyo.
"¿Has oído todo eso?"
Una mirada a su cara le aseguró de la respuesta. Sus facciones parecían

sombrías.
"Lo escuché. Debes ir a esta reunión. Jericho está en lo cierto. Debéis encontrar
ese medicamento y destruirlo."
"Tenemos una boda para asistir."
Ella miró hacia él.
336
"Puede esperar. Esto no puede. ¿Y si alguien más es drogado?" Aferró su
camisa. "No quiero que nadie sufra como lo hicimos nosotros. Es el peor dolor
que he sentido en mi vida."
Sabía que ella tenía razón.
"No me necesitan. Tú eres mi prioridad."
"No tienes ni idea de lo mucho que eso significa para mí, pero esto es
importante también."
"Tiene razón." anunció Jericho.
"Está bien."
Smiley le frotó la espalda.
"Volveré pronto."
"Te estaré esperando."
Bajó la cabeza y le dio un beso en la frente.
"Me daré prisa."
337
Capítulo Diecinueve
Seguridad era un hervidero de actividad cuando llegaron Smiley y Jericho. El

grupo de trabajo humano estaba ensamblado y entró por delante de ellos.
También había un vehículo familiar estacionado cerca, una furgoneta de
transporte de la prisión de Fuller. Smiley frunció el ceño.
"Trajeron a algunos de los prisioneros aquí. Darkness y yo queremos una

oportunidad con ellos." le informó Jericho.
"Necesitamos a Gregory Woods y al macho que trabaja para él, el que disparó
con un Taser a mi Vanni."
"Llegaremos a ellos." le aseguró Jericho.
Tiró de la puerta y entraron en el edificio. Fuertes voces les llevaron al centro

principal de operaciones. Solamente había sitio para estar de pie. Justice se
subió a una silla y gruñó, mandando silencio y reclamando atención. Hizo una
pausa, hasta que obtuvo la atención de todos antes de hablar.
"Hemos filtrado el video del camarero a la prensa. Alcanzó todas las emisiones
hace unos veinte minutos. Necesitamos a todos aquí porque la mierda ha
golpeado el ventilador más rápido de lo que creímos que lo haría."
Smiley apretó los puños. No le gustaba escuchar eso. Prefería las operaciones
que transcurrían sin problemas. Justice parecía furioso y frustrado, eso nunca
era una buena señal.
"¡Trey Roberts!"
Un hombre de pie en la esquina respondió.
338
"Aquí."
Justice lo inmovilizó con una mirada fija.
"Estás a cargo de los dos equipos de seguimiento de Gregory y Carl Woods.

Informa."
"Gregory se está volviendo loco. Metió la pata usando uno de los teléfonos que
tenemos clonados, en lugar de uno nuevo desechable, para llamar a nuestro
piloto. Le ordenó preparar el avión y estar en espera. También llamó a su
abogado. Va a preparar una carrera para él."
"¿Su hijo?"
Trey asintió.
"Carl Woods está haciendo las maletas ahora mismo. Está en su casa. Vamos a
cogerles en cuanto aterricen. Querías registros de él volando desde el
aeropuerto para las autoridades. Nuestro piloto volará bajo el radar para hacer
difícil el seguimiento de la avioneta. Limpiaremos una carretera remota cerca
de la Reserva para que aterrice. Los equipos todavía están allí en previsión de
darle alguna luz, si sucede después de anochecer. El piloto planea decirles a
sus pasajeros que están teniendo problemas con el motor y que necesita
realizar un aterrizaje de emergencia. Las Nuevas Especies estarán esperando
para llevarles en custodia."
"Bien." Justice se volvió, señalando a Tim. "Informa."
"Tenemos pequeños equipos en cada residencia y en la iglesia, con algunos de

tus caninos para ayudarles a ejecutar la búsqueda. Están listos para sacudir
cada lugar. Di la palabra y van dentro."
Justice asintió.
"Creo que Gregory querrá viajar con la droga, por lo que habrá que esperar
hasta que estén en custodia. No quiero invadir lugares humanos a menos que
lo necesitemos. Podría llamar demasiado la atención. Queremos aparecer
339
como si no tuviéramos nada que ver con su desaparición, si es posible." Justice
barrió su mirada alrededor de la habitación. "Estamos en alerta máxima. ¿Está
claro? La iglesia puede organizar alguna distracción para mantenernos
ocupados. No tenemos ni idea de sus números exactos, ya que televisa su
espectáculo. Mantener un estrecho contacto con vuestros equipos. ¡Moveos!"
La habitación se despejó de todos los funcionarios que no eran esenciales.

Justice saltó al suelo y se acercó a Darkness. Se detuvo frente a él.
"Tenemos cuatro presos de Fuller. Quiero todo lo que saben sobre ese
medicamento y cuánto se vendió. Quiero una verificación de los números que
nos dijeron. Odio las sorpresas. Asegúrate de que sólo había un comprador.
Tenemos que recuperar cada dosis."
Darkness asintió.
"Lo que sea necesario."
Justice se giró hacia Jericho y Smiley.
"Gracias por haber venido. Ayudad a Darkness. Sin matarles, pero quiero
respuestas. El Centro Médico está en espera si es necesario."
"Entendido." Jericho hizo crujir los nudillos. "Intimidar primero y romper

huesos si no funciona."
"Lo que sea necesario." Justice repitió las palabras de Darkness. "Estaré aquí.
Mantenemos contacto permanente con la Reserva. También están en alerta
máxima. Gregory Woods tiene una gran cantidad de seguidores. No van a
estar contentos de que su líder esté a punto de huir del país. Nos echarán la
culpa." Una sonrisa fría curvó sus labios. "Tendrán razón, por una vez."
Se dio la vuelta, moviéndose hacia los hombres y mujeres supervisando las

cámaras. Jericho señaló con la cabeza, haciéndoles gesto de moverse, y Smiley
siguió a Darkness. Entraron en la parte de atrás del edificio, donde estaban las
salas de interrogatorio. Un macho estaba asignado a cada puerta. El ambiente
era restringido. Darkness se volvió.
340
"Me quedo con la sala uno. Vosotros os asociáis para la sala dos."
"Puedo manejar un preso yo solo." Smiley sostuvo la mirada a Darkness "No

voy a perder los estribos."
El macho frunció el ceño.
"No eres conocido por ser demasiado agresivo, Smiley, pero bajo estas
circunstancias podrías serlo. Preferiría no tener que remendarles y
mantenerles en el sótano hasta que se limpien para el regreso a Fuller. La
intimidación es mucho mejor que la violencia."
"Puedo ser intimidante." Dejó que su rabia se mostrara. "No voy a perder el
control y dañar a nadie."
Darkness dejó escapar un suspiro.
"Toma la sala tres, pero te supervisaré en breve. Voy a asustar la mierda de

éste y le daré un poco de tiempo para pensar que estoy a punto de matarle."
Smiley se detuvo fuera de la sala tres y permitió que sus emociones aflorasen.
Sólo de pensar en la noche que él y Vanni habían sido drogados y todas las
cosas que podrían haber salido mal, se enfureció. Abrió la puerta y entró. El
macho humano esposado a una silla que estaba atornillada al suelo saltó, su
tez pálida por vivir en la prisión Fuller.
"Hola, humano." Cerró la puerta detrás de él e hizo crujir los nudillos,

haciendo alarde de ello. "Puedes llamarme puro infierno. Eso es lo que vas a
experimentar si no me dices exactamente lo que quiero saber." Se acercó al
prisionero, manteniendo la ira viva dentro. "Sé que tendemos a ser menos
violentos que los felinos y caninos, pero no te relajes porque soy un primate.
Eso sería un error." Se detuvo delante del macho y se inclinó un poco,
mirándole. "Tengo una compañera. Eso me convierte en el más peligroso
Especie con que hayas entrado en contacto. Ella fue drogada."
"No tuve nada que ver con eso."
341
El macho tenía un zumbido molesto en su voz.
"Drackwood creó una versión de la droga de cría para los humanos. Ella es
humana. Tú eres culpable. Vendiste esa mierda a otros humanos."
"Fue Dean. Él es quien se lo vendió. Fue su idea original debilitar las dosis
hasta que no mataran a las mujeres."
Smiley se movió rápido, agarrando la mandíbula del tipo. Aplicó suficiente

presión para dejarle un moratón.
"¿Qué hacías tu en Drackwood?"
"Soy el Doctor Kent Berter. Ejecuté ensayos de investigación."
"Entonces, ¿fuiste el que lastimó a Jeanie Shiver?"
Sus ojos se abrieron.
"No. Ese fue el Doctor Brask. Yo estaba investigando sólo con animales. Me
negué a hacer ensayos en humanos. Dean me preguntó al principio, pero le
dije que de ninguna manera. Una cosa es matar una rata, pero algo
completamente distinto ver a una persona sufrir."
"Trabajaste para Mercile."
"Drackwood. Nunca trabajé para Mercile Industrias. No teníamos nada que

ver con las Nuevas Especies hasta que algunos de ellos fueron trasladados a
nuestras instalaciones después de que aquellas cerraran. Sólo tuvimos algunos
accionistas mutuos. Le dije todo esto a los hombres que me interrogaron,
después de ser arrestado."
"¿A quién fue vendido el fármaco?"
"No lo sé. Eso estaba por encima de mi nivel de rango."
"¿Qué puedes decirme?"
342
"Sé que se sintetizaron doscientas dosis. Ya le dije a tu gente lo que sé. Dean lo
autorizó. Sucedió una semana antes de que fueran asaltados. Chris puteó sobre
el orden total y el tiempo extra que tuvo que trabajar para que sucediera. Era
nuestro químico. Está aquí. Fue traído conmigo. Vas a tener que preguntarle si
algo más de esa droga se fabricó. Él era el único cualificado para hacerlo."
Smiley no estaba dispuesto a darse por vencido.
"Sabes más."
"Vi a un tipo allí en esa época. Pensé que era el comprador. Parecía un
luchador profesional o algo así, pero llevaba traje. Todo músculo y un tipo de
miedo. Era una especie de capullo. Me encontré con él en la sala de descanso y
me miró. Tuve miedo de él. Se quejaba de nuestro café de mierda, como si
fuera mi culpa. Tuve miedo de que me fuera a golpear. No estaba en un buen
estado de ánimo."
"¿Te dijo su nombre?" Smiley soltó su rostro.
El detenido negó.
"Dean entró y creo que le llamó Bruce. Me acuerdo de eso porque tengo un
cuñado con ese mismo nombre y son polos opuestos. Tiendo a interesarme en
los rasgos de las personas con los mismos nombres. Recuerdo que pensé que
no tenía nada en común con el marido de mi hermana."
Smiley mostró sus colmillos. Probablemente era el mismo hombre que había
abusado de Vanni. Era la misma descripción.
"¿Qué más me puedes decir?"
"Me dieron el infierno después de eso, porque se quejó a Dean al segundo en

que él entró, pensando que su jefe estaba siendo robado. Tengo la impresión
de que no le gustaba el precio. Dean entró con una de las cajas de congelación
que utilizamos para el transporte de fármacos líquidos. Eso es todo lo que sé.
Como ya he dicho, me dieron el infierno después. Dean nunca fue un tipo
agradable, en primer lugar, y ese Bruce parecía aún peor y más grande. Pensé
343
que podrían entrar en una pelea a puñetazos o algo así. Dean nunca tomó la
mierda de nadie. Mírame. ¿Parezco como si fuera violento?"
Smiley pasó la mirada por la delgada masculina. No parecía muy fuerte o

agresivo.
"No."
"Eso es todo lo que sé. Lo juro. Ni siquiera entiendo por qué estoy pasando
tiempo en la cárcel. Quiero decir, claro, debería haber llamado a alguien
cuando trajeron a Nuevas Especies a nuestras instalaciones, pero tenía miedo.
Nos dijeron que matarían a nuestras familias. Seguí con mi nariz pegada al
suelo y traté de ignorarlo todo."
"Por eso estás en Fuller. Admites que podría haber hecho una llamada a la
ONE, sin embargo, no lo hiciste. Te hubiéramos protegido a ti y a tu familia.
En su lugar, elegiste no hacer nada mientras nuestra gente sufría."
La puerta se abrió y Jericho asomó la cabeza.
"Vámonos."
Smiley le siguió al pasillo, cerrando la puerta detrás de él.
"Woods y su hijo están en movimiento. Han ido al aeropuerto. Pensé que te

gustaría controlar todo desde Seguridad."
Smiley aumentó el ritmo. Quería asegurarse de que Bruce estaba con Gregory
y Carl Woods. Eso significaría que todos los machos que habían hecho daño a
Vanni serían llevados a la ONE, a él. No podía esperar para conseguir una
pequeña venganza en nombre de ella, viéndoles sufrir.
www
344
Vanni se duchó y se puso una enorme camiseta para estar cómoda. Eran poco
más de las siete. Smiley se había ido hacía mucho tiempo. Deseó atreverse a
llamar y ver cómo estaba. Se resistió. Le había dicho que fuera a esa reunión,
pero no había esperado que durara todo el día y la noche.
Terminó su sándwich y miró el reloj sobre la cocina. Suspiró y comenzó a lavar

los pocos platos que había usado.
La puerta principal se abrió y golpeó la pared. Se volvió hacia la sala de estar.

Smiley parecía estar bien cuando entró. Cerró la puerta y se dirigió a ella.
Abrió la boca para preguntarle qué había pasado, pero nunca tuvo la
oportunidad de hablar.
Él enganchó un brazo alrededor de su cintura y la atrajo contra su cuerpo. Su

otra mano se enredó en su pelo, mientras bajaba la cabeza. Cerró los ojos
cuando sus labios descendieron sobre los de ella, su lengua invadiendo su
boca en un apasionado beso que la dejó sin aliento.
Se agarró a sus antebrazos, sólo para aferrarse a algo. Su brazo alrededor de su

cintura la levantó del suelo. Creyó que iba a llevarla al dormitorio, pero no
llegaron tan lejos. La parte posterior de sus piernas golpeó los armarios y él la
puso sobre la encimera de la isla central. Su hambrienta boca jugó el infierno
en sus sentidos. Ya no le importó lo que hubiera pasado, cuando Smiley movió
sus caderas para estar entre sus muslos. Los separó de par en par para hacerle
espacio.
Un gemido rasgó de ella cuando él frotó la parte delantera de sus pantalones

contra sus bragas. Estaba duro y se sentía bien tener la rígida longitud de su
polla atrapada en contacto con su clítoris, a pesar del material entre ellos. Le
soltó el cabello y se agachó para empujar hacia arriba su camiseta, sacándola
de su camino. La sacó por la cabeza, la arrojó a un lado y luego metió los
dedos en el borde superior de su ropa interior. El fino tejido se desgarró.
345
Smiley retiró su boca y fue a por su garganta lo siguiente. La sensación de sus
colmillos y su lengua caliente sobre la sensible piel justo debajo de su oreja le
inspiró para envolver sus brazos alrededor de su cuello. Él alcanzó entre ellos
y ahuecó su coño. Ella gimió más fuerte cuando él usó su pulgar para dar
masajes a su clítoris. Vanni enganchó sus piernas detrás de sus rodillas,
sosteniéndolo cerca.
"Te extrañé." dijo con voz áspera entre besos.
"Puedo notarlo."
"Necesito tenerte. Di que sí."
"Sí."
Él hizo un sonido suave, sexy y dejó de jugar con su clítoris. Deseaba protestar,
pero la mordió con fuerza con sus colmillos. Una sacudida de sensibilización
disparó a lo largo de su cuerpo. Le encantaba cuando él hacía eso. No fue lo
suficientemente fuerte para hacer daño, pero sin duda la puso en ambiente.
Smiley movió sus caderas y abrió sus pantalones. El sonido fue casi ahogado
por su respiración pesada. Regresó en segundos y apretó la gruesa corona de
su polla contra su coño, frotando a través de su raja contra su clítoris. Ella
gimió fuerte y arañó su camiseta, deseando poder sentir su piel.
Él entró en ella en un largo empuje y Vanni gritó. Se sentía increíble tenerlo

dentro. Se quedó inmóvil, enterrado profundamente. Dejó de besarla y levantó
la cabeza. Ella abrió los ojos y miró a su hermosa mirada de suave color
marrón. Observó la preocupación reflejada allí.
"No te detengas."
"Recuéstate y usa tus brazos para amortiguar la cabeza." instó.
No quería dejarle ir, pero hizo lo que le pedía. La encimera de granito no era
precisamente cómoda, pero no le importó cuando Smiley se agachó, se
apoderó de ella detrás de las rodillas y las subió. Sus tobillos se posaron en la
346
parte superior de sus hombros y la soltó para agarrar sus caderas. La arrastró
hasta el borde de la encimera y enganchó un brazo sobre la parte superior de
sus muslos para mantenerlos presionados contra su pecho. Comenzó a follarla
lentamente, entrando y saliendo.
Vanni cerró los ojos y gimió. Usó un brazo como almohada con la cabeza y se
inclinó, con ganas de tocarle, buscando su piel desnuda a un lado de su cadera.
Su mano se deslizó a lo largo de su vientre y él presionó su pulgar contra su
clítoris, moviéndolo al ritmo de sus caderas.
"¡Oh Dios!"
"Eso es, nena. Déjame hacer que te sientas tan bien como tú me haces. Me
encanta estar dentro de ti, tocarte, mirarte."
Se obligó a abrir los ojos para mirar hacia él. Podía comprender por qué quería
mirarla durante las relaciones sexuales. Smiley parecía feroz en el calor del
momento... la boca ligeramente abierta, mostrando los colmillos.
Su mirada estaba fija en ella y sus mejillas se sonrojaron. Se mordió el labio

inferior mientras aumentaba el ritmo, follándola más rápido. La fricción de su
enorme polla causó un gran placer atravesándola con cada golpe en su cuerpo.
"Eres tan malditamente hermosa." Su voz se hizo más profunda. "Podría

correrme sólo mirándote."
Ella agarró su cadera donde podía tocar su piel, tratando de evitar arañarle
con sus uñas. La tensión en el brazo que sostenía sus muslos disminuyó un
poco y cambió su pecho, abriendo las piernas más allá para darle un mejor
acceso a su coño. Ella miró hacia abajo, un poco avergonzada por la forma en
que sus pechos se agitaban. Smiley retumbó y ella miró hacia arriba, notando
que él también estaba mirándolos fijamente.
"Hermosa." murmuró, follándola aún más rápido. "Córrete para mí, mi Vanni."
347
Ella cerró los ojos, concentrándose en lo que le estaba haciendo a su cuerpo.
Sus músculos vaginales se apretaron con avidez y luego estaba gritando su
nombre. El éxtasis le robó las palabras rápidamente, sin embargo.
Apenas era consciente de él sacando su pulgar lejos de su clítoris, pero la hizo

abrir los ojos cuando liberó sus muslos para que ya no estuvieran
inmovilizados en su pecho. Él los inclinó hacia arriba, los extendió más amplio
y se inclinó sobre ella.
Creyó que iba a besarla, pero él se aferró a uno de sus pezones en su lugar.
Gimió en voz alta y su polla latió dentro de ella. Le gustaba la manera en que
podía notar cuando él se corría. La calidez de su semen se filtró en ella
mientras sus caderas se detuvieron.
Vanni pasó un brazo alrededor de su hombro y jugó con su cabello. Su otra

mano se extendió en su espalda, explorando aquella amplia extensión. Estaba
caliente, un poco sudoroso, pero no le importaba. Su peso la inmovilizó contra
la dura superficie de la encimera, pero le gustó eso. Se sentían conectados en
ese momento.
Él soltó su pezón y lamió la punta. Se estremeció un poco debajo de él, aun un

poco sensible. Pasó su lengua por la curva desde su torso a su pecho y luego a
su cuello.
"Me encanta la manera en que sabes."
"Me encanta la manera en que te sientes."
"¿Quieres que me vaya?"
"No. Me gustas justo aquí, como estás."
"A mí también." Acarició su cuello, respirando suavemente contra su piel.

"Pero estoy siendo un mal compañero. Apuesto a que esta encimera no es
demasiado cómoda."
Había dicho compañero. Su corazón se derritió un poco.
348
"No me importa."
Ella envolvió sus piernas alrededor de sus caderas para mantenerle en su

lugar.
"Agárrate fuerte."
Ella vaciló antes de soltar su pelo y bloquear ambos brazos alrededor de su

cuello. Él meneó sus dedos cerca de su costado y ella se rió por las cosquillas,
arqueándose lejos de ellos. Deslizó su mano entre su espalda y la encimera. Su
fuerza nunca dejaba de sorprenderla cuando la levantó. Se quedó sin aliento,
cerrando sus piernas más apretadas alrededor de él.
"Podría caminar."
Le sonrió y enganchó su brazo debajo de su culo. Todavía estaba dentro de

ella.
"Podrías, pero esto va a ser más divertido."
Él dio un pequeño paso y su polla se movió dentro de ella. También frotando

su clítoris hinchado contra su bajo vientre. Vanni se quedó sin aliento.
"Sensible".
"Sólo espero que no tropezar con mis pantalones. Eso sería malo. "
Ella se recuperó y se echó a reír.
"Sólo ponme abajo."
Él negó con la cabeza, dando otro paso.
"Voy a girarme si caigo, para que aterrices encima de mí. Esta es una destreza
que quiero aprender."
"¿Caminar con los pantalones alrededor de los tobillos o tenerme quedando

sobre ti si nos caemos?" Ella se rió de nuevo.
349
"Caminando, seguro. Piensa en todas las veces que podía venir a casa del
trabajo, clavarte en la cocina y luego continuarlo por el pasillo hasta llegar a la
cama. Dime que no suena atractivo."
"Lo hace."
De repente, tenía imágenes de esperar junto a la puerta para él en ropa interior

sexy... un concepto que la atraía.
Dio otro paso, y luego otro, hasta que llegaron al pasillo. De repente, apretó su
culo contra la fría pared y comenzó a moverse dentro de ella con empujes poco
profundos. Vanni cerró los ojos y gimió, amando la sensación por su polla
creada.
"¿Ves?" Su voz se profundizó y sus labios rozaron los de ella. "¿Aún sensible?"
"Sobreviviré."
Él se rio entre dientes y la apartó de la pared cuando dio un paso atrás.
"Esperaremos hasta que lleguemos a la cama."
Ella apretó su dominio sobre él y abrió los ojos.
"Eso es malvado."
"Tengo la intención de seguir después. Sólo que realmente no quiero caerme.

No voy a correr el riesgo de lastimarte, Vanni. Mis pantalones están
enganchados en mis botas."
Se retorció lo suficiente como para mirar hacia abajo. No podía ver sus pies
por todo el material que los recubría. Caminó con pequeños pasos, sus tobillos
trabados. Se tambaleó un poco, pero se recuperó. Ella se rio, divertida.
"Suave."
"Ese soy yo, nena."
Ella levantó la barbilla y le miró a los ojos, viendo la mirada divertida en ellos.
350
"Me encanta que tengas sentido del humor."
Entraron en el dormitorio y jadeó cuando se volvió de repente, lanzando a los

dos hasta la cama. Llegaron con un rebote. El colchón suave amortiguó su
caída y él rodó, fijándola plana bajo él.
"Eso está bien. Me gusta reír y tengo el mejor tiempo contigo, mi Vanni."
Le gustaba que la llamara así.
"Tengo el mejor tiempo contigo también, mi Smiley."
Su sonrisa se desvaneció y una expresión seria acabó con todo rastro de

humor. Vanni se puso seria también.
"¿He dicho algo malo?"
"Me llamaste tuyo."
"Lo siento."
"No lo sientas. Soy todo tuyo. Eres mía. Nos vamos a casar. Ya te considero mi
compañera. ¿Eso está bien para ti?" Extendió la mano y le acarició la mejilla.
"No me rompas el corazón. Así será, si niegas lo que hay entre nosotros."
"Nunca haría eso." Le juró.
"Tengo muchos sentimientos por ti." Jugó con su pelo, envolviendo puñados
alrededor de sus dedos. "Dime que soy importante para ti."
"Lo eres." Tomó una respiración profunda, decidiendo ser totalmente sincera.
"Me estoy enamorando de ti."
Él sonrió, toda la tensión dejando su rostro.
"Yo ya estoy enamorado de ti. Lo he estado desde que nos vinculamos en la

parte posterior de ese SUV. Me confiaste cuidar de ti y pusiste tu fe en mí.
Nunca sabrás lo que eso significó. Me volví loco cuando me desperté y me
enteré que te escapaste de los miembros del grupo de trabajo. No podía comer
351
ni dormir. Me preocupaba que fueras por ahí asustada y sola. Que alguien te
haría daño. Quiero protegerte y mantenerte a salvo. Te quiero en mis brazos,
en mi casa y conmigo todo el tiempo. No me gusta estar lejos de ti. Eres lo
único en lo que pienso."
"Tú también eres lo único en lo que pienso."
"Voy a hacerte feliz, Vanni. Confía en eso. Nunca voy a hacerte daño o dejaré
que te vayas. Es algo bueno que no sea humano, porque nunca voy a
engañarte. Sé que los seres humanos hacen eso. Los Especies no lo hacen. No
lo haré. Tú eres todo lo que siempre voy a querer. Nunca permitiré que nadie
te haga daño. Los mataría si lo intentaran. Tú eres mi primera prioridad. Tú
eres la cosa más importante en mi vida. Eso significa que incluso te colocaré
antes de que todos los demás Especie, si estabas preocupada por eso. No serás
una extraña aquí. Como mi compañera, eres Especie."
"Eso es muy dulce." Estaba un poco abrumada.
"No es dulce. Es una realidad."
"¿Estás seguro de que quieres casarte conmigo tan rápido? Podríamos esperar
hasta que..."
"No." dijo Smiley con voz áspera. "Estoy seguro. Olvídate de la lógica y lo que
te enseñaron en el mundo exterior. Tus reglas de noviazgo no se aplican aquí.
Podemos ser felices. Vamos a serlo. No hay necesidad para nosotros de salir
juntos durante meses para saber que somos el uno para el otro. Esto es sólo
entre tú y yo. ¿Ves lo bien que encajamos juntos?" Ajustó sus caderas, su pene
todavía duro dentro de ella. "No se trata solo de sexo. No quiero que pienses
que eso es todo lo que hay en nuestra relación. Somos mucho más."
"Sé eso."
"¿Lo sabes?"
La estudió de cerca, mirando profundamente a los ojos.
352
"Podemos pasar a través de cualquier cosa juntos, si nos limitamos a hablar y
ser sinceros. Me podrías pedir cualquier cosa, dímelo, y seguiré amándote.
Quiero tener fe en que vas a hacer eso conmigo."
"Eres un buen hombre, Smiley."
"Soy tuyo, Vanni. Di que eres mía. Vamos a hacer esto. Sé que puede asustarte
tomar un compañero tan rápido, pero confía en mí estando aquí para ti. Da el
salto. Te cogeré. Siempre."
Le creyó.
"Está bien."
"Vas a ser feliz. Me aseguraré de ello."
"Tengo que conseguir un trabajo."
"No vivimos en un sistema basado en el dinero. Puedes encontrar algo que

hacer si te aburres, pero puedes quedarte en casa si lo deseas. Sólo quiero
hacerte feliz, Vanni."
La idea de ser un ama de casa era atractiva.
"Y podemos intentar tener bebés. Realmente me gustaría eso."
"Me encantaría tener hijos contigo."
"Así que todo está decidido. Vamos a fugarnos. Vamos a hacer algo sencillo y
divertido."
"Con tu amiga Beth y mis amigos. Tenemos que encontrar un predicador."
"Exactamente. Libre de estrés y va a ser todo sobre nosotros."
"Siempre será todo sobre nosotros." Él la soltó y se levantó, separando sus

cuerpos. "¿Adónde vas?"
"A quitarme estas botas y los pantalones."
Él se puso de pie, pero luego se desplomó en el suelo.
353
Vanni se sentó y se echó a reír a carcajadas, viéndole lanzar las botas.
Simplemente las arrojó hacia el armario y empujó sus pantalones fuera hasta el
final, una vez que sus pies estuvieron desnudos. Se puso de rodillas y apoyó
las manos en el extremo de la cama.
"Tengo algunas llamadas que hacer. No te muevas. Permanece en esa cama."
"¿Vas a organizarlo ahora mismo?"
"Sí." Smiley salió corriendo de la habitación. "No te voy a dar tiempo para
cuestionártelo de nuevo. Vamos a sellar nuestra unión en tu mundo y en el
mío."
Vanni se rio entre dientes, la vista de su musculoso culo desnudo fue lo último
que vio antes de que desapareciera por el pasillo. Los hombres humanos
generalmente arrastraban con desgana sus pies sobre hacer compromisos
serios, pero Smiley no tenía ese problema.
Había dicho que el sexo no era lo único que tenían y ella le creyó.
Todavía lucía una erección, pero estaba haciendo llamadas en lugar de

quedarse en la cama con ella.
354
Capítulo Veinte
Smiley regresó a la habitación diez minutos más tarde y sonrió al ver a Vanni
sentada en la cama esperándole.
"Está arreglado. Podemos hacerlo mañana por la noche."
Sus ojos se abrieron y él se congeló en sus pasos, esperando que no fuera a

cambiar de opinión. Los humanos eran tan diferentes e impredecibles.
"¿Está bien?"
"Eso es rápido. Tengo que contactar con Beth. Realmente la quería allí."
"Contacta con ella a primera hora de la mañana. Podemos recogerla y

trasladarla en avión a la Reserva. Hay algo que tenemos que hacer primero,
una vez que lleguemos a la Reserva." Se sentó en el borde de la cama y
extendió la mano, tomando la suya. "Pensaba decirte esto cuando llegases a
casa, pero viendo lo feliz que parecías cuando llegué a la puerta me distraje.
No quiero amortiguar tu estado de ánimo, pero hay algo que debemos
discutir. Es grave."
"¿Más que casarse?"
"No, pero es importante."
Ella se acercó más y agarró su mano con fuerza.
"Está bien. Sólo dímelo."
"Gregory Wood trató de huir del país con su hijo y su equipo de seguridad."
355
No dijo nada. Él deseaba que expresase sus sentimientos, pero el silencio se
alargó. Le miró fijamente, pareciendo un poco aturdida. Trató de pensar en sus
preocupaciones.
"No llegó lejos. Estás a salvo, Vanni. No será capaz de hacerte daño a ti o a tu
familia. No tendrá acceso a un teléfono y eso significa que no puede ordenar a
nadie que trabaje para él hacer nada en represalia. Teníamos a un miembro del
grupo de trabajo infiltrado como su piloto en el avión privado que contrató.
Subieron y fueron trasladados directamente al lugar donde la ONE les tomó en
custodia. Están recluidos en la Reserva. Vamos a ir allí mañana al mediodía.
Me gustaría tener unas palabras con algunos de ellos. Puedes verles a través
de una pared de vidrio, si quieres. Preferiría que no tengas ningún contacto
directo con ellos." Podría matar a cualquier persona que amenazara a Vanni de
nuevo. "Pero es tu elección. Sé que a veces ayuda ser capaz de enfrentarse a tus
temores o, en este caso, a los hombres que te causaron tal angustia."
"¿Dijiste que su hijo Carl intentó huir con él?"
"¿Eso te molesta?" Le enojó que preguntase acerca de su ex-novio. "Él te puso

en mucho peligro, Vanni."
"No es eso. Estoy sorprendida de que estuviera dispuesto a abandonar su

despacho y su casa. No puedo verle renunciar a su estilo de vida por su padre.
Me decía que no eran cercanos. Supongo que era otra mentira."
"Tenía problemas financieros. Estaba a punto de perder todo lo que tenía."
"No lo sabía." Frunció el ceño. "Supongo que tiene sentido ahora, por qué
insistía tanto en ir al hotel con su padre. Dijo que era para ganar dinero para la
boda, pero tal vez era para sacarlo de sus deudas."
"De cualquier manera, ha sido arrestado por la ONE. ¿Eso te molesta?"
Ella se mordió el labio inferior.
"Solo se fue y me dejó con Bruce y su padre. Tenía que saber lo que estaban
planeando. Ni siquiera estaba sorprendido por el hecho de drogarme. Estaba
356
más enfadado de que me hubiera ido al bar en vez de regresar a mi habitación,
como me había dicho que hiciera. No es una buena persona."
Fue un alivio para Smiley.
"Es cierto. No lo es. Hay más."
Se movió en la cama y tuvo una grata sorpresa cuando se acurrucó contra él,
apoyando su cara contra su pecho. Él le soltó la mano y la atrajo hacia sí. Se
sentía bien tenerla en sus brazos y que pareciera comprender su necesidad de
tocarla tan a menudo como fuera posible. Jugó con su pelo.
"¿Qué más?"
La información le había enfurecido, cuando le habían dicho lo que la

investigación había revelado.
"¿Estuviste de acuerdo en permitir que Carl contratara una póliza de seguro de

vida por ti?"
"Claro. Lo hablamos cuando nos comprometimos. Él nos quería a ambos

protegidos en caso de que algo le pasara a uno de nosotros. Íbamos a hacerlo
después de la boda."
"Compró una póliza hace dos meses y te aseguró por un millón de dólares,
Vanni."
Ella se tensó en sus brazos y levantó la barbilla.
"Dijo que sería de unos cien mil dólares sobre cada uno de nosotros. Sólo lo
suficiente para cubrir los costos de un funeral y pagar lo que dijo que todavía
debía de su casa, para no quedarme con deudas."
"Sólo tiene una póliza sobre ti. No había una para él. Siento que podría haber
planeado hacerte daño, una vez que estuvierais casados."
Vanni palideció y sus dedos se crisparon alrededor de su brazo. Le dio un beso

en la frente.
357
"Ahora estás a salvo. Es sólo que no quiero que te sientas mal por él, Vanni. No
es un humano decente. Se merece estar encerrado."
"Beth siempre dijo que era una serpiente. Supongo que ahora ya sé por qué
que no le importaba si su padre terminaba lastimándome o matándome. Eso le
habría ahorrado la molestia de deshacerse de mí por sí mismo. ¿Por qué no lo
vi?"
"Los humanos pueden ser engañosos. Tú eres del tipo que quiere ver lo bueno
de las personas. Eso no es un defecto. Es un buen rasgo."
"Soy una idiota."
"No." Se inclinó y la miró a los ojos. "Eres dulce y no quiero que esto te cambie.
Él te engañó. Es su vergüenza, no la tuya."
"Es un imbécil, realmente."
"Exactamente. No quiero que te olvides de eso. No se merece tu simpatía o

compasión. Voy a preguntarle sobre ello mañana. Conseguiré la verdad."
Ella asintió.
"¿Vas a pegarle?"
Se debatía sobre la forma de responder. Cuando había oído acerca de esa

póliza de seguro de vida y la presunción de Tim de que Carl planeaba matar a
Vanni con fines de lucro, eso le había hecho ver rojo... el color de la sangre de
Carl, para ser exactos. Ella podría no apreciar verle pegando a un hombre que
una vez le había importado, sin embargo.
"Estaré bien." Le acarició el brazo. "Incluso yo quiero pegarle."
Él sonrió.
"Eres mi mujer. Estoy seguro de que voy a perder los estribos y le golpearé un
par de veces. Puedes mirar."
Ella negó.
358
"Paso. Eso sí, no quiero que seas arrestado por asalto y estaré bien con
cualquier cosa que quieras hacerle. Como has dicho, no voy a sentirme mal por
él."
No estaba por la violencia. Apreciaba eso. Vanni tenía una tierna y gentil alma.
Era una de las cosas que amaba de ella. Asimismo parecía aceptarlo tal como
era.
"Capturaron a Bruce también." Intentó contener la ira en su voz, pero ese era
un hombre al que quería hacer daño. "Pagará por las amenazas que te hizo y
por dispararte con un Taser."
Ella se estremeció ante la sola mención de aquel tipo.
"Me alegra que esté fuera de las calles. Creo que podría convertirse en un
asesino en serie o algo igual de malo, si no lo es ya. Dormiré mejor por la
noche sabiendo que no puede dañar a nadie."
Sus palabras trajeron un estruendo brusco desde las profundidades de su

pecho. Los ojos de Vanni se abrieron, pero no se apartó.
"Ese es mi ruido de 'estoy-cabreado-voy-a-dañarle'." explicó. "No está dirigido a

ti."
"Lo sé. Ese sonido es algo sexy."
Eso le sorprendió.
"¿Eso crees?"
"Sí. Me gusta que seas protector. Vas a patearle el culo, ¿no es así?"
"Lo haré."
Ella soltó su brazo y aplanó su palma sobre su pecho, explorándolo. Él apretó

sus abdominales y bajó la vista, observándola. Su polla se endureció aún más
cuando empujó suavemente contra él. Él se echó hacia atrás, dándole acceso.
Su barbilla se levantó y un ligero rubor tiñó sus mejillas.
359
"¿Está bien que te toque?"
"Donde quieras, cuando quieras." dijo con voz áspera. "Te animo a ello." Sonó
el teléfono y Smiley amortiguó un gemido. "Tengo que cogerlo."
Lamentó alejarse de ella para llegar al otro lado de la cama. Sólo quería hacer
el amor con su Vanni. Su frustración sonó en su voz.
"¿Qué?"
"¿Es este un mal momento?" Preguntó Jericho. "¿Estabas compartiendo sexo?"
"Estábamos a punto."
"No contestes el teléfono cuando estés desnudo, Smiley. Es un consejo.

Siempre puedes devolver las llamadas más tarde, cuando hayas terminado la
vinculación con tu compañera."
"¿Por eso llamaste? ¿Para darme un consejo obvio?"
"No. El helicóptero saldrá a las nueve de la mañana. Adelantaron el vuelo.

Gregory Wood fingió un ataque al corazón, esperando que el Centro Médico le
enviase a un hospital humano. Fue un patético intento de su parte para
escapar. Está irritando a todos en la Reserva, hasta el punto de que quieren
entregarlo a la prisión de Fuller tan pronto como sea posible. Hablé con
Torrent y está listo para disparar al macho él mismo. Dijo que el humano está
gimiendo y quejándose constantemente y que está haciendo daño a sus oídos."
"Gracias por avisarnos."
"Ve a vincularte con tu compañera."
El teléfono se desconectó. Vanni le dirigió una mirada curiosa después de que

él devolvió el teléfono a la base y la encaró.
"¿Está todo bien?"
360
Fue un recordatorio de que era humana. Jericho tenía una voz que transmitía
alto y cualquier Especie habría escuchado la conversación, sentada tan cerca
de él.
"Perfecto." Se estiró a su lado. "Puedes tocarme."
Él tenía la esperanza de que todavía quisiera hacerlo.
"Era mi amigo Jericho. Gregory está molestando a todos en la Reserva.

Volaremos allí por la mañana, antes de lo previsto."
Se acostó a su lado en contra de él y puso su mano sobre su estómago. Trató de

mantener su respiración lenta y constante, pero su corazón se aceleró. Su toque
le excitó cuando las puntas de sus dedos acariciaron sobre sus costillas
inferiores.
"¿Por qué?"
"Quieren trasladarlo a la prisión Fuller. Ahí es donde enviamos los humanos

que cometen crímenes contra las Especies. Está dirigida por humanos."
"Nunca he oído hablar de ella."
"Es un lugar secreto que los humanos no conocen. No queríamos poner a

nuestro pueblo en la posición de ser carceleros de los que les perjudicaron. No
parecía justo o correcto castigarles con seguir sufriendo su presencia después
de que fueron liberados."
Su mirada se levantó y ella sonrió.
"Eso suena muy inteligente."
"Lo intentamos."
Él contuvo el aliento cuando sus dedos tocaron más abajo, justo debajo de su
ombligo. Giró un poco la cabeza y sonrió al estado de su parte baja.
"Te dije que me gusta mucho tu toque."
361
"Ya veo."
"Me pongo duro por ti."
"Veo eso también."
Ella levantó la mano y él ahogó un gemido de protesta. Vanni se incorporó y

se bajó de la cama un poco, poniéndose más cerca de sus caderas. Se puso
sobre sus rodillas, una posición que le hizo desear estar detrás de ella. El color
inundó sus mejillas, pero sonrió.
"Así que estamos como casados, ¿verdad?"
"Sí."
"No sé cómo hacer esto, pero me gustaría que hagas algo. ¿Eso está bien? "
"Cualquier cosa."
"Ni siquiera te he dicho lo que quiero que hagas. Deberías preguntar antes de
acceder a ello o podría tomar ventaja de eso. ¿Qué pasa si te dijera que quería
que saques la basura?"
"No vas a decir eso. Tengo esperanzas de que sea algo sexual."
Su risa era el mejor sonido que nunca oyó. Su mano cayó sobre su muslo,
cuando el toque suave ella se apoderó de él, a sólo unos centímetros de su
polla. Se sacudió en respuesta, esperanzada también.
"¿Harías cualquier cosa por mí?"
"Sí. Lo que sea. "
Su humor se desvaneció a una expresión más sincera.
"Eres increíble."
362
"Estoy agradecido de que pienses así. ¿Qué te gustaría que haga, mi Vanni?"
Su mirada bajó a sus muslos y se acordó de que era tímida. "¿Quieres mi boca
en ti?"
Ella tomó aire, en un aliento sostenido, atrayendo su atención. El rubor volvió

y sonrió. Él supo por su reacción que no se opondría a ello. Se incorporó un
poco, dispuesto a hacerlo, pero ella negó con la cabeza. Se quedó paralizado.
"Desearía saber si te acostarías quieto y podrías dejarme, um..." Tragó saliva y

le lanzó una rápida mirada a su polla. "Um, ya sabes. Sobre ti. No creo que yo
sea muy buena en eso, pero practicaré, ¿no? Lo deseo. ¿Te importaría?"
"¿Deseas poner tu boca sobre mí?"
Él se estremeció un poco ante el tono de su voz ronca. Se aclaró la garganta.
"Es un sí."
Fue adorable cuando se sonrojó aún más y bajó la cabeza. Su cabello creó una
cortina, obstruyendo la visión de su polla cuando se inclinó sobre él. Se
mantuvo plano al colchón y apretó los puños para evitar tocarla. Los
filamentos suaves de pelo hicieron cosquillas en su estómago, pero las
suprimió. Tenía miedo de asustarla o hacerle cambiar de opinión si se movía.
Su aliento caliente abanicó la corona de su polla y él cerró los ojos.
"Puedes hacer cualquier cosa." se las arregló para decir. "Soy todo tuyo."
Su caliente, húmeda boca se envolvió alrededor de la cabeza de su polla y cada

músculo de su cuerpo se puso rígido. La sensación de su lengua vacilante
lamiéndole, saboreándole, hizo doler sus bolas. Aflojó las piernas ligeramente
más separadas, esperando que no lo notara. Tomó un poco más de su eje y se
movió arriba y abajo, acariciándolo de una manera que hizo desvanecerse en la
nada todo a su alrededor. Era simplemente Vanni y el placer que infligía sobre
él. Apretó los dientes para evitar hacer sonidos. Ella se detuvo, liberándolo.
"¿Estoy haciéndolo bien?"
363
El sudor perlaba su frente y abrió los ojos.
"Sí."
"¿Estás seguro? Estás muy tenso y estás respirando algo extraño."
"Estoy tratando de no asustarte."
Giró la cabeza y la levantó, sacudiendo su cabello fuera del camino. Sus

miradas se encontraron y sus ojos se abrieron.
"Tu cara está roja. Soy mala en esto, ¿verdad?"
"Eres perfecta. Lo juro. Sólo temo que voy a sobresaltarte si hago ruidos y no
quiero que pares. Es tan increíble cuando haces esto."
No parecía convencida.
"¿Recuerdas mi boca en ti? Es así de bueno."
"¿Es tan bueno que casi duele, pero de la mejor manera?"
"Sí."
Ella le sorprendió cuando de repente se trasladó y presionó con su mano

contra la cara interna de su muslo. Separó más amplias las piernas y subió
entre ella, quedando frente a él sobre sus manos y rodillas. Ella abrió sus
manos sobre él justo por encima de las rodillas y empujó suavemente. Él se
extendió más, sin tener idea de lo que estaba haciendo, pero la dejaría hacer
cualquier cosa.
"Está bien. Haz ruidos. Me encienden, ¿recuerdas? Eso sí, no agarres mi pelo
para mantenerme en posición y ahogarme obligándome a tomarte entero, ¿de
acuerdo?"
Estaba aturdido y horrorizado.
"¿Por qué iba a hacer eso?"
Ella sonrió.
364
"Aquí vamos. No es necesario avisarme antes de correrte. Simplemente hazlo."
Vanni soltó sus muslos y envolvió una mano alrededor de la base de su polla.
Se inclinó hacia adelante y pudo ver todo mientras se lamía los labios, abrió su
boca y se acercó más, hasta que él la vio tomar algunos centímetros de su polla
dentro de su boca. Él siseó de placer y empuñó la ropa de cama en sus manos.
Vanni ya no era tímida. Echó la cabeza hacia atrás y apretó sus ojos cerrados
mientras ella lo montaba con su boca. Ella chupó, lamió y le atormentó. Él
rugió, su pecho vibrando desde el sonido profundo. Vanni le hizo cosas que le
volvieron del revés.
Sus manos suaves ahuecaron sus bolas y eso fue demasiado. Ella se las frotó y
él gritó, disparando su simiente. La cama se sacudió bajo él mientras se
estremecía por la fuerza de ello, pero lo único que pudo fue controlar su culo...
para seguir manteniéndolo plano sobre la cama y evitar empujar hacia arriba.
Vanni sonrió y se sentó sobre sus pantorrillas. Smiley estaba despatarrado en

la cama, su pecho subía y bajaba rápidamente. El sudor revestía su cuerpo,
dándole un brillo sexy. Ella le había hecho eso. La hacía sentirse un poco
orgullosa. Extendió la mano y pasó los dedos por encima de su bajo vientre. Se
estremeció y emitió un sonido bajo, sexy. No la hizo batir sus manos lejos
mientras iba quejándose de estar demasiado sensible.
Había deseado hacerle una mamada. Por lo general, no era algo que hiciera o
deseara hacer, pero Smiley no era cualquiera. Él era suyo. Le gustaba el sonido
de eso. Su mirada se alzó a la luz del techo y ella se movió con pesar, subiendo
por encima de su pierna para salir de la cama.
"¿Adónde vas?"
"A apagar la luz."
"¿Por qué? Me gusta mirarte, Vanni. Por favor, permítemelo."
Ella se volvió, viendo que se había desplazado en la cama. Levantó un brazo

para amortiguar la cabeza, inclinándola un poco.
365
Se quedó allí, su gran cuerpo relajado, con las piernas todavía extendidas,
estando totalmente cómodo desnudo. Le envidiaba eso. Tenía ese cuerpo
increíble, sin embargo.
"Pensé que querrías dormir."
Una ceja se arqueó. Iba a hacer que lo dijera todo. Ella vaciló.
"¿Qué es eso?"
"Acabo de hacer 'eso' por ti, por tanto sé que ahora desearás dormir."
No podía leer su expresión. Se acercó al desconcierto, pero entonces pareció

estar un poco molesto.
"Malditos humanos."
Se sentó y se puso en pie en un movimiento fluido.
Vanni se congeló. ¿Le había enfadado? Debió haber esperado hasta que
simplemente se quedara dormido para apagar la luz. Él se adelantó, pero se
detuvo justo frente a ella. Tuvo que inclinar la cabeza hacia atrás para mirarle
a los ojos.
"¿Qué dije? No fue mi intención molestarte."
Tenía miedo de haber tocado su orgullo. A los hombres no les gusta que
aquellas cosas les estén siendo señaladas.
"No está dirigida a ti. Escuché que los machos humanos hacen eso. ¿Es cierto?
Sólo estamos empezando. No estoy cansado y desde luego no dormiría
mientras estás excitada." Su nariz se dilató mientras olfateó el aire. "Puedo oler
tu necesidad, nena."
Él la sujetó. Un brazo envuelto alrededor de su tórax y el otro alrededor de su

cintura. Simplemente la levantó, giró y la tiró sobre la cama. Ella rebotó en el
suave colchón, aturdida. Smiley la siguió, colocando su rodilla junto a ella, y la
sonrió.
366
"Mi turno. ¿Parezco cansado para ti?"
Él bajó la barbilla para mirar hacia abajo, a su polla. Ella siguió su mirada y no
pudo perderse el hecho de que estaba duro como una piedra de nuevo.
"Estás emparejada con un Especie. Tenemos un tiempo de recuperación

rápido. No me canso tan fácilmente y desde luego nunca voy a permitir que te
vayas a dormir anhelando sexo. Date la vuelta y colócate sobre tus manos y
rodillas. Voy a ocuparme de ti, mi Vanni."
Vanni miró hacia su polla de nuevo y se movió. Esperó hasta que estuvo sobre
su estómago antes de agarrarla por las caderas y tirar de ella, poniéndola de
rodillas. El colchón se hundió, mientras trepaba sobre la cama con ella,
poniendo sus piernas en la parte exterior de las suyas. Liberó sus caderas y
abrió una mano bajo su vientre para poder apoderarse de ella, mientras se
inclinaba hacia atrás para poner un poco de espacio entre ellos.
Ella gimió cuando él se agachó y jugó con su clítoris con la mano libre. Ya
estaba mojada, pero eso no parecía ser suficiente para él. Obviamente, él la
deseaba realmente preparada para el sexo. Se detuvo y ella estuvo casi
decepcionada, hasta que se dio cuenta de que él sólo lo había hecho para
ayudar a posicionarse a sí mismo. La cabeza de su polla se deslizó contra su
coño y la penetró lentamente.
"Sí."
Ese gemido jadeó vino de ella. Bajó la cabeza y cerró los ojos. Smiley
definitivamente no tenía sueño, desde la sensación de tenerle. Se inclinó hacia
adelante para presionar su pecho contra su espalda y apoyó su peso en un
brazo. La mano ahuecando su vientre se deslizó más baja y dos dedos
presionaron contra su clítoris.
Se movió un poco, extendiendo sus piernas más amplias, y comenzó a

moverse con embestidas profundas, largas. Vanni arañó la cama.
"Más rápido".
367
Se inclinó, poniendo sus labios en su oído.
"No. ¿Puedes sentir lo duro que me pones? ¿Cuánto te deseo?"
Él masajeó su clítoris mientras la montaba.
"Esto es tan bueno."
"Sacude tu cabello fuera del camino. Dame tu cuello."
Ella lo hizo, pero él no la besó en su garganta. Su lengua humedeció su

hombro y entonces la mordió. No fue lo suficientemente fuerte para romper la
piel, pero intensificó la emoción. Esos colmillos suyos estaban calientes y
enviaron escalofríos de los buenos por todo su cuerpo. Él la agarró un poco
más fuerte, la folló un poco más duro y siguió jugando con su clítoris.
"¡Oh Dios!" Gritó ella.
"Ese soy yo."
Él se impulsó dentro de ella más profundo y más rápido.
"Nosotros. Tan condenadamente bueno, ¿verdad?"
Sus brazos se derrumbaron bajo ella y hundió la cara contra la cama, tratando
de amortiguar algunos de los sonidos que hacía.
"Te podría follar durante horas. Podría vivir aquí, contigo debajo de mí." dijo
con voz áspera. "Eres tan sexy, tan caliente y tan condenadamente apretada.
Vas a correrte. Puedo sentir tus músculos apretándome."
Dejó de arañar la cama y volvió la cabeza. Su mano estaba cerca de su cara,

aplanada para soportar su peso. Ella extendió la mano frenéticamente,
necesitando tocarle. Sus dedos cubrieron los suyos. De repente se movió,
dejándose caer hacia abajo de modo que se apoyó en el codo y torció la
muñeca. Tomó su mano, agarrándola con fuerza.
Vanni gritó su nombre, mientras su mundo explotó en una nube de éxtasis

blanco. Smiley mordisqueó su hombro y gimió profundamente.
368
Redujo sus embestidas y supo que se estaba corriendo cuando se curvó a su
alrededor con más fuerza, sacudiendo tanto a ellos como a la cama por la
misma fuerza. Ella cerró los ojos cuando él dejó de moverse. Su pesada
respiración era el único sonido en la habitación. Sabía que una sonrisa curvaba
sus labios.
"Guau."
Le dio un beso suave en el lugar donde la había sostenido con sus colmillos.
"Sólo es calentamiento, mi Vanni. Todavía es temprano. Nunca olvides que

puedo seguir toda la noche. Intentaremos todo lo que quieras. ¿Tienes alguna
fantasía que quieras compartir? Puedes decírmelas todas. Eres mía y yo soy
tuyo. Quiero hacer de todo contigo."
Eso se hundió en ella. Él realmente lo decía en serio.
"Nunca he tenido sexo en una bañera antes."
Era más fácil admitir eso cuando no estaba mirándola fijamente a los ojos.
"Lo tendrás, pero por el momento vamos a dormir."
"Tengo una lista de deseos."
"¿Qué es eso?"
"Las cosas que me gustaría probar antes de morir. Hay unos pocos de sexo allí.
Ya tuvimos sexo en un coche. Ese era uno de ellos."
Smiley soltó su clítoris y pasó su mano por su vientre. Movió su cuerpo y

simplemente cayó hacia un lado, llevándola con él. Ella se echó a reír cuando
aterrizaron, todavía acurrucados juntos, con él dentro de ella. Él agarró su
pecho, exprimiéndolo.
"Cuéntame más. Tienes toda mi atención."
Le miró por encima del hombro. Estaba sonriendo, con los ojos brillando con
diversión. Se animó a hacer precisamente eso.
369
"Quiero tener sexo fuera, por la noche. No delante de nadie. Sexo en público
no es lo mío, pero siempre pensé que sería puro. Simplemente fuera, por la
noche, bajo la luna y las estrellas."
"Podemos hacer eso también. Esperaremos hasta que estemos en la Reserva,

sin embargo. Una gran cantidad de Homeland está cubierta de cámaras.
Tendría que golpear a cualquier hombre que te viera desnuda." Su expresión
cambió a una muy seria. "Espero que esta lista de deseos no incluya sexo con
otros machos. Haría cualquier cosa por ti, excepto eso."
Ella sacudió la cabeza, asombrada incluso de que hubiera tocado el tema.
"¡No!"
"Bien. Sé que los humanos hacen eso a veces, pero sería una pérdida masiva de
sangre si pones a dos machos Especies en la habitación con una mujer en
necesidad sexual. No compartimos bien, sobre todo si uno de ellos tiene
sentimientos por ella. No sólo golpearía al otro macho. Le mataría si él
considerase incluso tocarte. Eres mía." La estudió. "¿Eso te molesta?"
"No. Soy posesiva también. Nunca quise estar con alguien que pensara que
estaba bien si no teníamos una relación monógama."
"Bien."
Se retorció un poco para conseguir una mejor visión de él.
"Eso es lo que tenemos, ¿no? ¿Monogamia?"
"Sí." La atrajo hacia sí y la abrazó con fuerza. "No soy adicto a tu olor, pero no
importa. Eres todo lo que quiero."
"¿Adicto a mi olor?"
"¿Recuerdas cuando te dije que iba a volverme adicto a tu olor? Los caninos y
felinos se vuelven adictos al olor de sus mujeres y las demás huelen
desagradable para ellos... realmente mal." Hizo una pausa. "No he
experimentado eso contigo. Me encanta cómo hueles, pero no siento la
370
necesidad de inhalarte constantemente. Quiero abrazarte todo el tiempo y
estar cerca de ti. Te echo de menos cuando no estás conmigo. Eres mi
compañera, Vanni. Puedes confiar en mí."
"Gracias."
"¿Por qué?"
"Eres perfecto."
"No lo soy, pero voy a tratar de ser el mejor compañero siempre. Sólo necesitas
ser siempre sincera conmigo."
"Eso va en ambos sentidos. ¿Cuáles son tus fantasías? Quiero ver fuera las
cosas de tu lista de deseos, también."
"Dijiste que sí a ser mi compañera y estás en mis brazos. Tengo la oportunidad

de pasar el resto de mi vida contigo a mi lado. Eso es todo lo que siempre he
soñado. Me haces feliz y entero, Vanni."
Las lágrimas llenaron sus ojos.
"No hagas eso, Vanni." Le acarició la cabeza con la suya. "Quiero que seas
feliz."
"Soy feliz. Últimamente me parece que no puedo controlarlo, tal como suelo
hacer. Simplemente parezco llorar por cualquier motivo."
Él se tensó, sus músculos apretándose.
"Hay algo que necesito decirte. Tenía miedo de decírtelo antes de ahora,
porque quería que estuvieras segura acerca de mis sentimientos por ti primero.
¿Sabes cuánto te amo?"
"Creo que sí."
Enterró su rostro en la curva de su hombro, abrazándola con más fuerza y sacó

sus piernas hasta abrazarla aún más cerca. En cierto modo la asustaba.
371
"¿Qué pasa?"
Él le acarició la mejilla con la suya y puso sus labios junto a su oído.
"Por favor, prométeme que no va a cambiar las cosas entre nosotros."
Eso la asustó.
"¿Estás enfermo?"
Oh dios. ¿Está muriéndose? ¿Acaso esa horrible droga, le dañó algo en sus
órganos internos?
Vanni entró en pánico. Acababa de encontrar a Smiley. No le podía perder. Era

demasiado cruel.
"No." Tomó una respiración profunda. "Hace poco me enteré de que la droga
de cría puede hacer ineficaces las pastillas anticonceptivas. Podrías estar
embarazada, Vanni. Estaría encantado. Quiero un hijo contigo. Asimismo,
estaría muy bien si no lo estuvieras. Te quiero de cualquier manera. No
pienses lo contrario. Supe que quería pasar mi vida contigo y quería que
supieras eso antes de hablarte al respecto. Tenía miedo de que me empujaras
lejos y no nos dieras una oportunidad si te enterabas antes de este momento."
¿Era esa la razón por la que parecía estar más emocional de lo habitual?
Podría estar embarazada de Smiley. Esperaba inquietud por esto, pero no

llegó. El momento no era perfecto. Su relación apenas había comenzado, pero
la idea de formar una familia con Smiley era atractiva. Siempre había querido
ser madre. Eso le recordó que estuvo a punto de conformarse con Carl para
lograrlo. Nunca le había amado. Estaba segura de eso. Smiley era otra historia.
Le amaba.
Smiley la abrazó con fuerza y comenzó a acariciar su muslo.
"¿Estás bien? Háblame."
"Apuesto a que juntos tendríamos lindos bebés."
372
Su mano se quedó inmóvil.
"¿Eso es todo lo que tienes que decir? No suenas enfadada."
Ella volvió la cabeza y se echó hacia atrás para poder mirarle.
"No lo estoy."
"No tienes idea de cuánto te amo, Vanni."
Ella miró fijamente a los conmovedores ojos marrones y le creyó.
"Yo también te amo. Afrontaremos juntos todo lo que nos suceda. Estaría
completamente bien si estoy embarazada. ¿Lo estarás tú? La verdad."
Él sonrió.
"Quiero bebés con contigo. Lo quiero todo contigo."
"Estamos muy bien entonces." Le sonrió. "Los dos estamos un poco sudorosos.
¿Cómo suena un baño? "
"Bien. Sólo quiero sostenerte un poco más. No sólo quiero compartir sexo
contigo. Vamos a abrazarnos y luego averiguaremos si disfrutamos del sexo en
el agua. ¿Suena como un plan?"
"Sí."
373
Capítulo Veintiuno
Vanni agarró la mano de Smiley, sintiéndose un poco desorientada por el

viaje. La había hecho sentarse en su regazo para suavizar el viaje en
helicóptero, pero no creía que jamás pudiera disfrutar de volar en eso. Él la
ayudó a salir, colocándola suavemente en el suelo, luego se encorvó sobre ella
y la mantuvo en su abrazo protector hasta que pasaron las aspas.
Miró a su alrededor con curiosidad. Era muy diferente de Homeland. Estaban

en una zona abierta con un solo edificio a la vista. Los árboles y las colinas
rodeándoles. Cuando se acercaron al edificio, su atención se centró en lo que
obviamente era un hotel. Varias Nuevas Especies salieron del edificio. La
mayoría de ellos vestían ropa informal. Un montón de ellos lucían sonrisas y
unos pocos saludaron con la mano. Smiley les respondió. Estaba claro que
estaban felices de verle y él a ellos.
"Quiero que conozcas a todos, pero no quiero que te sientas abrumada."
El la maniobró hacia las puertas, hablando en voz lo suficiente alta como para
que todos alrededor de ellos le escucharan. Ellos asintieron saludando al
pasar, sin hacer comentarios.
Entraron por las dobles puertas que se abrieron sin una tarjeta llave. El
vestíbulo era grande y una hembra Nueva Especie les saludó. Era una mujer
alta, una belleza de cabello oscuro.
"Hola." Ella ofreció su mano a Vanni. "Soy Creek. Es tan agradable conocerte,
Vanni. He hecho todos los arreglos para esta noche."
374
La soltó después de un rápido apretón de manos, alcanzó en el interior del
bolsillo de su pantalón y sacó una tarjeta llave, que le entregó a Smiley.
"Hice preparar la suite nupcial del tercer piso, Smiley. La segunda de la

derecha. No puedes perderte." Le guiñó un ojo. "La comida está esperando.
Simplemente llama a recepción si necesitas cualquier cosa."
"Es un placer conocerte también." Vanni respondió.
Creek dio un paso atrás.
"Bienvenida a la familia. Eres Especie, ahora que eres la compañera de Smiley.

Estamos muy contentos de que le dijiste que sí. Se quedaron entusiasmados
contigo por teléfono."
A Vanni le gustó escuchar eso, pero también se preguntó si Smiley y la mujer

tenían algún tipo de pasado. Esa idea fue sofocada rápidamente cuando
Smiley habló. La reacción de Creek no era la de una mujer que hubiera salido
con él alguna vez.
"Creek, huele a Vanni. Podría estar embarazada. No tuvimos tiempo para ir al

Centro Médico esta mañana para que se haga una prueba." La emoción
entrelazó su voz. "Estaríamos felices por eso." Él volvió la cabeza, sonriendo a
Vanni. "Los caninos tienen el mejor sentido del olfato. Ella podría detectarlo."
Creek se acercó y olfateó. Se inclinó un poco y olfateó de nuevo. Se enderezó.
"Todo lo que huelo en ella es a ti, Smiley. Está cubierta de tu aroma." La mujer
se rio entre dientes. "Podría intentarlo más tarde, después de que se duche y
antes de que la toques. Sólo llámame e iré arriba. Eso sería una excelente
noticia."
"Lo sería."
Creek miró entre ellos.
375
"Me gusta mucho ver a una pareja de enamorados." Hizo un guiño a Vanni.
"No va a ser difícil llamar al Centro Médico de aquí y hacer que envíen a
alguien para extraer sangre si realmente quieres saberlo."
"Eso sería genial." admitió Vanni.
"Después de que vayamos a Seguridad, pero antes de la boda." añadió Smiley.
"Haré que suceda."
Creek dio la vuelta y caminó de regreso a la mesa de trabajo. Cogió el teléfono.
Smiley tiró del brazo de Vanni, guiándola hacia los ascensores. Entraron solos,
montaron hasta el tercer piso, salieron y giraron a la derecha. Una bandera
blanca con un corazón rojo había sido colgada a través de la puerta. Alguien
había utilizado un marcador negro para escribir S & V.
"¡Eso es tan bonito!" Se conmovió Vanni.
Smiley birló la tarjeta.
"Te dije que todo el mundo estaba feliz de que nos emparejásemos."
Él abrió la puerta, pero la detuvo cuando ella trató de entrar. Le miró mientras
él usó su pie para sujetar la puerta entreabierta. Se inclinó y la tomó en sus
brazos, forzando la puerta abierta para llevarla por el umbral. Pateó la puerta
cerrada.
"Este va a ser nuestro hogar durante los próximos días."
La habitación era grande y muy bien amueblada. Era uno de los hoteles más
bonitos que había visto nunca. Las puertas del balcón a través de la habitación
se habían dejado de par en par para permitir la brisa en el interior. Había una
hermosa vista de los árboles. Un río brillaba en la distancia.
"¿Dónde está la cama?"
Ella no vio una. El área se constituía como una sala de estar e incluso se jactaba
de una chimenea junto a una pared. Una esquina contenía una acogedora mesa
376
de comedor con dos sillas. Dos platos cubiertos de tapas plateadas se
asentaban en la parte superior, ocupando la mayor parte del espacio, y una
botella de vino bien frío en un cubo de hielo con dos copas estaban próximas a
ella.
Smiley volvió.
"Está por el pasillo. Esto realmente es la suite de luna de miel. Hay dos de ellas
en el hotel. La mayoría de las suites tienen dos dormitorios. Solicité esta
específicamente, ya que da a la parte trasera del hotel y tiene un balcón."
Caminó por un corto pasillo y pasó por las puertas dobles abiertas. Se detuvo
allí.
"Wow."
Vanni se quedó mirando la enorme cama, pero la bañera jacuzzi y la segunda

chimenea rápidamente la distrajeron. Era una bañera enorme, lo
suficientemente grande como para caber cuatro personas por lo menos.
"Esa es para más adelante. Te quedaste dormida la noche anterior, así que
vamos a ver si nos gusta el sexo en el agua."
"Lo siento. Puede que tú tengas mega-resistencia pero supongo que yo estaba
cansada. Te dije que podrías haberme despertado."
"Estabas condenadamente linda durmiendo en mis brazos. Vamos a comer." Se

dio la vuelta y se dirigió de nuevo a la sala de estar. "Nos perdimos el
desayuno y quiero que te relajes un poco antes de ir a Seguridad."
No estaba segura de si podría comer. Sus nervios estaban de punta.
"No estoy segura acerca de ver a Carl, a su padre y Bruce."
"No tienes que ir." La dejó en el suelo al lado de la mesa y retiró una silla.
"Nadie te culparía. Yo preferiría que no lo hicieras."
377
Se sentó, agradecida por sus modales mientras empujaba su silla y se sentaba
frente a ella.
"Necesito ir."
Levantó ambas tapas y simplemente las puso en el suelo. Había una gran
difusión de huevos revueltos, bacón, croquetas de patata y tostadas. El
tentador olor revivió su apetito. Desenvolvió los cubiertos y con cuidado
colocó la servilleta en su regazo.
"Hay una cafetería en el primer piso. Sirven buena comida. Espero que esto
esté bien. Podría pedir algo más. Siempre tienen un buffet abierto, pero pensé
que sería mejor comer en privado."
"Esto es fantástico. Gracias. Piensas en todo."
"Bien."
"Hablando de eso... ¿cualquier cosa acerca de cómo traeremos a Beth aquí

hoy?"
"Van a enviar un equipo a recogerla a la dirección que nos diste, después de

confirmar un horario con ella. El grupo de trabajo la llevará a Homeland y
volará con nosotros. ¿Cómo recibió la noticia?"
Vanni sonrió, recordando la llamada de teléfono cerca-del-amanecer que había

hecho justo después de que Smiley se fuera.
"Se sorprendió, pero lo tomó bastante bien."
"¿No está molesta porque estás emparejándote con un Especie y vivirás en la

ONE?"
Vanni no estaba segura de que Smiley apreciaría el sentido del humor de Beth,
pero se arriesgó.
"Ella dijo, y cito, 'Gracias a Dios que no es Carl'. "
Sus cejas se levantaron.
378
"Esa es la jerga de Beth para decir que está bien con esto."
"¿La jerga de Beth?"
"Es alguien a quien tienes que acostumbrarte. Somos opuestas. Es muy

sociable y tiene una especie de retorcido sentido del humor. Sonaba
entusiasmada, sin embargo, y se comprometió a saltar a través de cualquier
aro que se necesitara para llegar hasta aquí. Le dije que esperase una llamada
de Homeland. También le hice jurar el secreto. Afortunadamente, Elvis no
estaba allí. Me sorprendió no despertarla, pero no entró en detalles. Parecía
irritada con él. Creo que era una especie de alivio el venir aquí, en vez de
permanecer allí por más tiempo."
"¿No es ese macho su novio?"
"Es complicado."
Smiley arqueó una ceja. Vanni luchó por una manera de explicarlo.
"Le gusta pasar tiempo con él, pero no está enamorada. Sé que estaban
durmiendo juntos el año pasado y pensé que estaba poniéndose serio pero
entonces le llamó para cortar. Ella dijo que él quería más de lo que estaba
dispuesta a darle. Ahora salen de vez en cuando, pero no quiere herirle
dándole pie para ello. "
"¿Pie para qué?"
Vanni sonrió.
"Para pensar que va en serio sobre construir un futuro con él cuando no es así."
"Oh." Comió un poco de su comida. "Solo quiere compartir sexo con él sin
unión."
"Sí."
"Me alegro de que no seas como ella. Nunca sería capaz de renunciar a ti."
"Me alegro también."
379
Se sonrieron el uno al otro antes de terminar el desayuno. Smiley se puso en
pie.
"Voy a hacer unas cuantas llamadas para asegurarme de que todo está
dispuesto en Seguridad y que están listos para nuestra visita." Le sostuvo la
mirada. "Sabes que no tienes que ir conmigo."
Ella colocó su servilleta sobre la mesa y se levantó.
"Me arrepentiré si no lo hago. Me sentiré como una cobarde. Necesito cerrar

esto."
"Solo no quiero que te moleste."
Él miró hacia abajo a su estómago, luego hacia arriba.
"¿En caso de que esté embarazada?"
"Se me pasó por la cabeza. No negaré eso. Quiero protegerte en ambos

sentidos."
"No es como si fuera a entrar en un altercado físico con nadie."
Smiley hizo ese sonido profundo retumbando y sus manos formaron puños a
sus costados. Ella se acercó más a él.
"Eres tan caliente y sexy cuando te enfadas."
Se relajó.
"¿Lo soy?"
"Creo que es muy romántico que desees patear el culo de alguien por mí."
Él extendió la mano y cepilló el pelo de su mejilla, acariciando el lado de su

cara con el pulgar.
"Haría cualquier cosa por ti."
Su vientre se estremeció y sus pezones se apretaron.
380
"Ahora me estás encendiendo."
Giró la cabeza y miró el reloj en la pared.
"Están esperando mi llamada." Parecía indeciso. "Podríamos quedarnos aquí

en vez de ir."
"Has puesto tu corazón en patear un pequeño culo."
"Tú eres más importante."
"Lo sé, pero esto lo es también. Los dos tenemos algunas preguntas que
necesitan ser respondidas."
"Exactamente." Se agachó y la tomó de la mano. "Y quiero golpearles." Sonrió.

"Mucho."
"Haz tus llamadas. Voy a usar el baño. Saldremos en pocos minutos."
"Date prisa." La soltó.
Vanni utilizó el cuarto de baño y se lavó las manos. Se quedó mirando su

reflejo en el espejo sobre el lavabo, mientras tomaba unas pocas respiraciones
profundas. No estaba segura de cómo iba a soportar enfrentarse a Carl, a su
padre o al horrible Bruce. Una parte de ella estaba tentada en simplemente
permanecer en el hotel, pero eso tensó su columna vertebral. La otra parte de
ella sabía que tenía que estar allí con Smiley. La Iglesia Woods y su ex novio
les habían lanzado juntos. Quería la satisfacción de decirles cómo había
funcionado.
Parte de la sensación de náuseas pasó. Ella se agachó y tocó su estómago. Un

poco de emoción se elevó ante la posibilidad de estar embarazada. La idea fue
creciendo en ella. Era una posibilidad remota, pero siempre existía el mes que
viene o el siguiente. Había dejado de tomar sus pastillas desde que había sido
secuestrada. Ni siquiera lo había recordado hasta que Smiley le había contado
381
que podría estar embarazada. Un poco de culpa salió a la superficie. Debería
haberle dicho algo al respecto cuando se dio cuenta.
"Díselo después. Después de esta terrible experiencia." murmuró y salió del

cuarto de baño.
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Smiley posicionó a Vanni en una silla frente a la pared de vidrio. Los

ocupantes a punto de ser conducidos a la habitación contigua no serían
capaces de verla. La había hecho consciente de este hecho por lo que se sentía
totalmente a gusto. Se agachó, estudiando sus ojos.
"¿Estás segura de que quieres hacer esto?"
"Sí."
Era valiente. Sabía que los próximos momentos no iban a ser fáciles para ella.
Su mirada se desvió a Jericho. El macho asintió sombríamente. Él había
prometido quedarse con Vanni y atenderla si entraba en angustia emocional.
Smiley confió en el macho con su compañera. Miró a Vanni y se inclinó más
cerca, tomándola de la mano.
"Puedes salir en cualquier momento. Jericho estará aquí contigo. Sólo dile lo
que quieras o necesites y él hará que eso ocurra."
Ella le sostuvo la mirada y trató de sonreír.
"Lo sé. Estoy bien. Deja de preocuparte por mí."
382
"Podría golpearlos." La deseaba preparada. "Sé que eres compasiva sobre la
violencia."
"No tanto como crees. He crecido como persona desde que esto ha sucedido."
No estaba seguro de lo que eso significaba. Ella pareció comprender su

confusión.
"Golpeé a Bruce en la cabeza con una botella de vidrio después de agredirle

con productos de maquillaje. Se sentía bien. No soy tan frágil como pareces
creer."
Ella le divertía.
"Está bien. Simplemente díselo a Jericho si se convierte en demasiado."
Miró al macho de nuevo.
"Yo me encargo de ella." prometió Jericho.
Smiley rozó un beso en el dorso de su mano y la soltó. Se levantó y la dejó allí,

permitiendo su genio construirse tan pronto como la puerta se cerró. El primer
hombre fue conducido a la habitación cuando llegó allí. La visión de Carl
Woods en persona le aturdió. El macho era realmente insignificante. No era
muy alto y no tenía casi ningún músculo.
Torrent empujó al macho en una silla pero no había ninguna restricción puesta
en él. Smiley cerró la puerta, mirando al delgado humano rubio. Él le devolvió
la mirada, pero no mostró ningún miedo. Eso irritó a Smiley.
"Soy abogado." declaró Carl. "He hecho una lista mental de cada uno de mis
derechos civiles que la ONE ha violado." Cruzó los brazos sobre el pecho y la
barbilla se levantó en rebeldía obstinada. "No puedo esperar para conseguir
teneros en un tribunal de justicia, idiotas. Puedes despedirte de tu culo."
Torrent mostró sus colmillos en una mueca, sus guantes de cuero hicieron un
ligero ruido cuando empuñó ambas manos y luego flexionó los dedos.
383
"Lo creas o no, este es el menos molesto de todos. No está gimiendo o
fingiendo que es Especie."
Smiley supo que sus cejas se alzaron. Torrent asintió.
"Algunos de su personal de seguridad quisieron tener un concurso de

gruñidos. Literalmente. Creo que se imaginaron que uno con el gruñido más
fuerte conseguiría jugar a ser 'alfa'. Fue tan lamentable que ni siquiera fue
chistoso." Él miró a Carl. "Éste idiota simplemente hace amenazas con las leyes
humanas, no importa cuántas veces le han corregido."
"Este 'idiota' está escuchando. Supongo que tú estás a cargo." Carl se dirigió a
Smiley. "Exijo hablar con mi abogado o con un representante del gobierno de
Estados Unidos."
Torrent suspiró.
"Una vez más, no hay ninguno dentro de la ONE." Fijó su mirada en Smiley.
"Hazle parar. ¿Por favor? No me permiten golpearle a menos que él me golpee
primero."
"No estoy a cargo." Smiley se acercó más al humano. "Debes estar

familiarizado conmigo, sin embargo. Tuviste que haberme visto en la
televisión con Vanni."
Eso le dio satisfacción cuando el humano palideció. Sus ojos se abrieron

demasiado y se enderezó en la silla.
"Así es. Soy quien fue drogado con ella en ese bar del hotel."
Se abalanzó y agarró al macho, le acarreó de su asiento. Se dirigió a la pared

más cercana, cerca del cristal, y lo estrelló en su contra. Carl gruñó, pero no
trató de luchar. Era dócil para ser un varón. Eso disgustó a Smiley y le fulminó
con la mirada desde lo alto.
"Por fin." suspiró Torrent.
384
Smiley no le hizo caso y levantó a Carl a escasos centímetros del suelo. El
macho parecía aterrorizado pero colgaba inerte, ni siquiera luchó. Había
querido que el hombre luchara, pero ni siquiera se agarró a él. Sus brazos se
quedaron a los costados.
"Pégame." se burló Smiley.
"No. Eres un matón." Carl susurró las palabras.
Smiley lo dejó de pie y dio un paso atrás.
"Sería como pegarle a una mujer."
"Todavía lo haría si se me permitiera." murmuró Torrent. "Hay que esperar y

escucharle. Vas a cambiar de opinión."
Carl suavizó algunas de las arrugas de la camisa, pero se quedó contra la

pared. Él levantó la mirada hacia Smiley.
"Esta es otra violación. Brutalidad."
"¿Quieres acusarme a mí de brutalidad? ¿Qué hay de lo que tú y tu padre

hicisteis con Vanni? Lo sé todo."
"No soy responsable de las supuestas acciones de mi padre."
"La llevaste a su casa y sabías que había puesto una trampa para ella."
Carl cruzó los brazos sobre el pecho de nuevo.
"No hice tal cosa. Niego ese cargo."
"¿Ves?" Torrent se acercó a la mesa y se sentó. "Él parece menos femenino cada
vez que abre la boca."
Smiley volvió su atención a Carl.
"Olvídate de tus leyes. No se aplican aquí."
"Exijo hablar con un representante del gobierno de Estados Unidos."
385
"Como un maldito loro." gruñó Torrent. "Deja de decir eso, humano. ¡Joder!
Quiero romperle la mandíbula. He oído eso dos docenas de veces solamente
en la última hora."
Smiley extendió la mano y agarró al humano por su garganta. No aplicó la

fuerza suficiente para hacer daño, pero si para hacer un punto. Él apretó lo
suficiente como para que el macho fuese consciente de su fuerza.
"Déjame decirte un par de cosas antes de abrir la boca de nuevo. Vanni es mía
ahora y me importa un comino el tribunal de justicia. Ya has sido juzgado y
encontrado culpable. La llevaste a la casa y sé acerca de la póliza de seguro de
vida que tomaste sobre ella. Creo que planeabas contraer matrimonio y
asesinarla por dinero. No te importaba lo que se hiciera con ella, siempre y
cuando hubiera un cadáver para mostrar a la compañía de seguros y obtener
tu cheque."
Se inclinó y puso sus labios junto a la oreja del macho.
"Te mataría, pero no quiero que Vanni vea eso. Eres un pedazo de mierda y
nunca vas a ver la luz del día otra vez. Nunca la mereciste. Ella será feliz
mientras tu aprendes lo que es el infierno." Bajó la voz aún más. "Eso no quiere
decir que Vanni siempre va a estar en el otro lado del cristal. Te puedo visitar
en cualquier momento. Vamos a darte seis meses de vivir en una celda y
apuesto a que querrás golpearme entonces. Vamos a luchar en algún
momento. Debes saber eso."
Smiley se echó hacia atrás y vio el miedo en los ojos del macho. Él lo dejó ir y
puso espacio entre ellos.
"Te sugiero que empieces a hacer flexiones de brazos en tu celda y levantarte

arriba desde los barrotes por encima de tu cabeza. Ponte en forma. Vas a
necesitarlo."
Torrent se rio entre dientes.
"Te lo puedes llevar ahora."
386
Smiley miró el cristal, con la esperanza de Vanni no estuviera molesta con él.
Torrent se deslizó fuera de la mesa, agarró a Carl por el brazo y le condujo

fuera de la habitación. Smiley no tuvo que esperar mucho. El macho grande
que fue traído el siguiente no necesitaba presentación. Tenía un vendaje en el
cuello que se extendía hacia arriba hasta la coronilla de su cabeza. Él no era un
humano débil. Torrent se quedó en la puerta, con el cuerpo tenso.
"Éste lanza golpes sucios." le advirtió Torrent. "Le he golpeado. Es un luchador

decente, para ser humano."
"Que te jodan." escupió Bruce. "Tengo una conmoción cerebral o podría

golpearte como a una zorra." Se dio la vuelta y miró a Smiley. Algo brilló en
sus ojos y resopló. "Ah. Sé quién eres." Le dirigió una mirada desdeñosa de
arriba a abajo. "Me decepcionaste."
"¿Qué quieres decir con eso?" Smiley ya odiaba al macho.
"Yo hubiera jodido bien a esa puta si hubiera sido tu. ¿Sabes lo caliente que es
hacerlas gritar y sangrar mientras las estás jodiendo? Demonios, la tengo dura
como un leño sólo de pensar en drogarla otra vez y encadenarla para usarla,
pero Gregory dijo que esperase hasta hacernos con ella. Cuando salga de aquí,
y lo haré, voy a grabarme un vídeo jodiendo a esa buena puta y te enviaré una
copia para que aprendas algo."
Smiley estuvo sobre él antes de poder considerar lo que pensaría Vanni. Se

sintió bien, golpeando su puño contra la cara del humano. El macho trató de
bloquearle, pero no fue lo suficientemente rápido. El golpe lo lanzó hacia
Torrent, cuyos reflejos eran mejores. Se lanzó fuera del camino y Bruce se
estrelló contra la puerta. Se quejó desde la fuerza de su peso. Smiley avanzó.
Bruce lanzó un puñetazo hacia él. Salió desviado por muy poco. Smiley lanzó
su otro puño en el estómago del macho. Él hizo un fuerte sonido de dolor y se
dobló por el golpe. Smiley retrocedió y retumbó.
"Ven a mí."
387
Bruce se enderezó. Su cara estaba roja de ira y la sangre manaba de su nariz
reventada. Él gritó y se apartó de la puerta. Era lento para su tamaño. Smiley
esquivó fácilmente el puñetazo dirigido a su cara e incrustó el suyo en el
centro del humano, llevándolo al suelo. Se sentó a horcajadas sobre el hombre
y aporreó su rostro hasta que unos brazos fuertes envolvieron alrededor de su
cintura y lo arrastraron fuera.
"Basta." gruñó Torrent. "No le mates. Es lo que quiere. Nadie es tan estúpido a
menos que sea suicida."
La puerta se abrió de golpe y Vanni estaba allí. Jericho se detuvo detrás de ella.
Smiley paró rápidamente y se alejó, dándose cuenta de lo que había hecho.
Bruce gimió y rodó sobre su costado. Diseminando sangre por el suelo. Smiley
asintió, dejando que Torrent supiera que estaba controlado de nuevo.
"Lo siento." Smiley miró a Vanni.
Ella entró en la habitación, manteniéndose lejos de Bruce.
"No lo sientas. ¿Estás bien?"
Sus manos dolían. Él ni siquiera se las miró.
"No tenía intención de perderme."
Ella se acercó a él.
"No lo hagas." le advirtió. Había sangre en sus manos. "No quiero que te
contamines."
Sus labios se separaron pero Torrent habló primero.
"Este es un humano que probablemente está enfermo. Smiley necesita lavarse

toda esa sangre antes de que le toques. Nosotros somos inmunes a las
enfermedades, pero tú no lo eres."
Bruce se sentó y Smiley se movió, poniendo su cuerpo entre ella y el humano.

Bruce escupió sangre en el suelo y le miró mientras más de ella le corría por la
388
parte inferior del rostro hasta su cuello y su camisa. Un ojo ya estaba cerrado
debido a la inflamación del corte sobre su ceja. Él soltó un bufido.
"Jodido Monta-Coños. Eres patético." Bruce ladeó la cabeza, tratando de echar

un vistazo a Vanni. "¿Por qué no vienes aquí, zorra? Te voy a mostrar lo que
un hombre de verdad puede hacer por ti. Te va a gustar."
Smiley le habría atacado de nuevo, pero Torrent agarró su brazo.
"No. Te lo dije. Está tratando de hacer que le mates. Estaría fuera demasiado
rápido. Se merece sufrir durante años."
Probablemente Torrent tenía razón. Él asintió con la cabeza otra vez,

demasiado enfadado para hablar. El agarre de Torrent disminuyó. Smiley miró
a Vanni. Ella estaba lo suficientemente cerca como para tocarla si extendía la
mano, pero no lo hizo. Se aclaró la garganta y trató de calmarse.
"Espérame fuera de esta habitación. No es seguro."
Captó movimiento en su visión periférica y se tensó. Observó a Bruce luchar

para ponerse de pie.
"Ahora, Vanni."
"De acuerdo."
No se atrevió a apartar la mirada de Bruce. El macho podría tratar de

conseguir rodearle para llegar a Vanni antes de que se fuera. Oyó que Jericho
jadeaba. El movimiento a su derecha le sobresaltó y el shock lo mantuvo
inmóvil por un segundo. Vanni se detuvo junto a él y levantó el arma de
Jericho.
"¿Te gusta esto, imbécil?"
Ella le disparó. El dardo Taser salió disparado y se incrustó en el intestino de

Bruce. La manera en que los ojos del humano la rodaron en la cabeza mientras
su cuerpo se puso rígido por la corriente eléctrica que pulsaba a través de él
aseguró a Smiley que el ligero ruido venía de Vanni, sosteniendo el gatillo.
389
Smiley se quedó un poco boquiabierto. Él no trató de detenerla, consciente de
la sangre en sus manos. Ella sonreía en realidad, mirando a Bruce caerse
finalmente. Soltó el gatillo y volvió su cabeza, sosteniendo su mirada.
"Eso duele como un hijo de puta. Me imaginé que debía experimentarlo de

primera mano. No te atrevas a sentirte mal por pegarle. Desearía poder
haberlo hecho yo."
Ella rompió el contacto visual y miró a Torrent, ofreciendo el arma hacia él.
"¿Quieres esto? Es más pesado de lo que pensaba que sería".
Torrent sonrió y aceptó.
"Buen tiro."
"En realidad no. Buscaba sus pelotas."
El macho se echó a reír.
"¿Quieres intentarlo? Podríamos esperar a que se recupere y pedir prestado el

arma de otro oficial. No tengo una, ya que no estamos autorizados a llevarlas
durante el transporte de prisioneros de sala en sala. Podrían tratar de
quitárnosla."
Vanni se mordió el labio, parecía considerarlo.
"No, no lo hará." Smiley todavía estaba aturdido. "¿Vanni?"
Ella le miró. Vio incertidumbre allí.
"¿Estás enfadado conmigo? Sólo vi el arma de Jericho y me di cuenta de lo que

era. Bruce me disparó con una, así que quería devolverle el favor."
No quería ver esa mirada en ella otra vez.
"Nunca voy a enfadarme contigo." Bajó la voz. "Te enseñaré cómo disparar
mejor. Realmente te quiero fuera de esta sala, sin embargo. Su sangre está por
390
todas partes y Torrent está en lo cierto. Probablemente está enfermo. Está loco
también. No quiero que estés en peligro."
"Está bien."
Se dio la vuelta y caminó tranquilamente fuera de la habitación. Él la vio

alejarse y Jericho se encogió de hombros, como diciendo que no se había
esperado eso. Agarró la manija de la puerta y la cerró, ya con Vanni en el otro
lado.
"Me gusta ella." admitió Torrent.
Smiley dio la vuelta, mirándole fijamente.
"No de esa manera. Es tu compañera. Simplemente me gusta lo que hizo. Eso

es todo. ¿Quieres ayudarme a levantarle y arrastrarlo de nuevo a su celda?
Está fuera de combate."
"Todavía quiero hablar con Gregory Woods."
"Vamos a tratar con éste primero y hacer un poco de limpieza antes de traerle
aquí. Ese macho llora como una niña pequeña. Va a ver la sangre en el suelo y
probablemente gritará como una niña también. Ya ha pretendido tener un
ataque al corazón. Esto podría llevar a la cosa real. Creerá que asesinamos a
alguien."
391
Capítulo Veintidós
Vanni se bebió el jugo de naranja que le entregó Jericho. Él todavía no había

dicho ni una palabra sobre ella cogiendo su arma o usándola. Ambos habían
visto a Smiley y Torrent arrastrar al inconsciente Bruce fuera de la habitación.
Otra Nueva Especie había entrado para limpiar toda la sangre. Finalmente, se
armó de valor para hablar con el amigo de Smiley.
"Te pido disculpas. Simplemente no quiero pasar mi luna de miel sentada al

otro lado de los barrotes con Smiley. Pensé que iba a matar a Bruce y ser
arrestado."
"Hubiera estado justificado si lo hubiera hecho. El macho amenazó a su

compañera."
"Oh. No sabía eso."
"Nuestras leyes no son las mismas que las tuyas. Las nuestras siempre tienen
sentido."
No estaba muy segura de qué pensar de eso, pero él se lo explicó.
"Hacemos llegar las noticias humanas aquí. Es deprimente. No creemos en el

asesinato, pero a algunos simplemente no se les debería permitir vivir." Miró el
cristal. "Ese macho es uno de ellos. Ya oíste lo que dijo. Cualquier hombre
capaz de hacer daño a una mujer de esa manera se merece la muerte."
"Entonces, ¿por qué no me detuviste de correr allí si realmente creías eso?

Podrías haberme detenido si lo hubieras intentado."
392
"Sabía que entrando allí podrías detener a Smiley. No quise que él sufriera por
sus acciones, a pesar de lo mucho que se lo merecía ese macho."
"Él dijo que había matado antes."
"Lo hizo. Muchos de nosotros tuvimos que hacerlo en Mercile y

probablemente volveríamos a hacerlo para defendernos si nos atacan. Esta vez,
sin embargo, lo habría hecho temiendo perderte y sintiéndose inseguro."
Jericho se apoyó contra la pared. "Es un temor real, al emparejarse con un
humano, que vean la violencia y consideren que somos un peligro para ellos.
Smiley ya se preocupa de que podrás cambiar de idea y salir de aquí. Te has
convertido en una gran parte de él."
"Amo a Smiley."
Sus rasgos se suavizaron.
"Bien. Sigue diciéndole eso a menudo. Él necesita esas garantías."
"¿Sí?"
"Sí." Jericho miró a la pared de cristal, luego a ella. "Sentimos profundamente,

pero tratamos de ocultarlo. Es un defecto."
"¿Por qué?"
"Llámalo instinto o genética, pero somos más vulnerables emocionalmente en

comparación con los caninos y felinos. No olvides nunca eso, Vanni. Podrías
destruirle de dentro a fuera."
"Nunca haría eso."
"Incluso mejor. Tócale a menudo y dile lo mucho que significa para ti, si
realmente le amas. Siempre va a tomar en serio todo lo que dices. No olvides
eso si discutes con él. Piensa antes de hablar."
Ella agradeció el consejo.
393
"Gracias."
Él se encogió de hombros.
"Quiero que seáis felices. No puedo soportar ver a Smiley deprimido. No fue
fácil verle soportar sufrimiento antes y nunca quiero volver a verlo."
"¿Fuiste encerrado con él cuando os retuvieron en Mercile Industrias?"
"Me refería a cuando te escapaste de los miembros del grupo de trabajo

asignado para traerte al Centro Médico y temió que estuvieras muerta o herida
en el mundo exterior. Me rompió verlo de esa manera. Temí que saltaría sobre
nuestros muros y te buscaría por su cuenta. Podría haber conseguido que le
mataran. Tenemos un montón de enemigos. Todo lo que podía pensar era en ti
y en asegurarse de que estabas bien. Se enlazó contigo desde el principio."
Vanni parpadeó para contener las lágrimas.
"Gracias por decirme esto. Amo realmente a Smiley. Yo, um, también enlacé
con él desde el principio. Es todo para mí."
"Bien. Procura decirle eso a él. No estoy bromeando. Se va a preocupar

durante mucho tiempo de hacer o decir algo que te hará replantearte ser su
compañera."
"Está atrapado conmigo." Sonrió, animándose. "Nunca le dejaría."
Jericho se tensó, su mirada centrada en la pared de cristal.
"Aquí vamos. Recuerda esto. No tengo ni idea de cómo va a actuar Smiley con
éste."
Vanni se volvió en su asiento y observó a Torrent traer a Gregory Woods. Se

veía desaliñado y completamente diferente de su personaje de la televisión. Su
ropa estaba arrugada, necesitaba un afeitado y sus ojos estaban de color rojo.
"¿Ha estado llorando?"
Jericho resopló.
394
"Escuchaste a Torrent. Eso sería un sí."
Gregory se sentó y se abrazó su pecho.
"Realmente necesito un médico. Tengo un especialista que me cuida. No

querréis que me muera. ¿Sabes quién soy? No puedes salirte con la tuya. Soy
una celebridad y soy rico. Yo..."
"Para." exigió Torrent. "No vas a ser trasladado a un hospital humano y nadie
sabe qué estás aquí."
La puerta se abrió de nuevo y entró Smiley. Se había cambiado en uno de los

uniformes de la ONE y sus manos estaban vendadas. Cerró la puerta y
permaneció cerca de ella. Gregory gimió, mirándolo fijamente con obvio
terror.
"¿Qué te pasa, hombre? ¿Nunca pensaste que tendrías que enfrentarte al

macho que drogaste y trataste de atrapar?"
"No fue idea mía. Fue Bruce. Tenía miedo de él. Ya le ha visto. Tiene
antecedentes penales. Soy inocente."
"Cállate." le respaldó Torrent. "No somos idiotas. Había veinte dosis

desaparecidas de la droga de cría cuando fuiste tomado en custodia. Dean
confesó venderte doscientas dosis." Gruñó y lanzó Smiley una mirada de
disgusto antes de continuar. "Éste cabrón juró que las utilizó en las prostitutas
a las que pagó para tener relaciones sexuales con él. Viste de primera mano lo
que la droga le hizo a tu mujer. No sintió ninguna compasión por aquellas
hembras que drogó y siguió haciéndolo una y otra vez. Es un hijo de puta
cruel." Torrent mostró sus colmillos. "¿Vas a culpar de eso a alguien más
también? Guárdatelo, imbécil."
Smiley hizo un áspero ruido retumbante.
"Deberíamos dosificarte y dejar que sufras. Te lo mereces. Bruce trabaja para ti

y, por cierto, Dean Polanitis fue muy informativo cuando hablamos con él."
Smiley se agachó, manteniéndose de espaldas a la puerta. "Confesó cómo
395
contactaste con él y amenazaste con exponer la conexión entre Drackwood y
Mercile que encontraron tus investigadores. Lo llamó chantaje y admitió que le
pediste algo para usar contra la ONE. Compraste sus drogas y pagaste a un
camarero para agregarlas a mis bebidas y las de Vanni en el hotel."
"¡Es todo una mentira!" Gregory se aferró a su pecho. "Eso fue todo cosa de
Bruce."
"Él utilizó el dinero que le diste para cumplir tus órdenes. Estás atrapado y
pagarás por tus crímenes, Pastor Woods."
"Creo que estoy teniendo un ataque al corazón."
"Está bien." Smiley no se movió. "Ten uno. No me importaría estar viéndote

tomar tu último aliento."
"No puedes dejarme morir. Tengo seguidores, maldita sea. Van a asaltar tus
puertas y mataros a todos."
"Ellos creen que huiste del país y les abandonaste. Nadie va a saber incluso si
mueres. Sólo tendremos que enterrarte en ese cementerio que dicen que
tenemos."
Torrent parecía divertido.
"Podría ser el primer cuerpo que pongamos en él."
Smiley sonrió.
"Suena como un plan."
Grandes lágrimas rodaban por las mejillas de Gregory.
"No puedes hacerme esto a mí. Yo soy importante." Él miró entre ellos. "Soy
también rico. Te pagaré para sacarme de aquí. ¿Cuánto quieres? Nombra la
cantidad."
"No nos importa el dinero." Smiley ladeó la cabeza. "Sólo quería mirarte a los
ojos antes de que te envíen a la prisión Fuller. Vanni está segura y nunca vas a
396
tener la oportunidad de hacerle daño de nuevo. Pagarás por todo lo que has
hecho. No estoy enfadado contigo por lo que me hiciste a mí, sino porque
intentaste hacer daño a la mujer que amo. Gran error. Sólo desearía haber
disfrutado esto más pero eres demasiado... "
Parecía luchar para encontrar una palabra. Torrent le ayudó.
"Patético."
Smiley le dedicó una sonrisa.
"Sí."
El rostro de Gregory enrojeció y le escupió.
"¡Eres un bárbaro!"
"¿Qué esperabas? Nos atacaste." Smiley se irguió. "Deberías haber aprendido

más sobre tu enemigo antes de golpear contra nosotros." Todo rastro de humor
desapareció de su rostro. "Tú serás quien viva el resto de su vida en una jaula.
¿No es eso lo que querías para nosotros? Aprenderás lo que es no sentir el sol
en la cara o experimentar un simple acto de bondad de tus guardias. Ese es el
destino que deseabas para nosotros. La prisión Fuller será tu 'zoológico'. No
deberías esperar ningún visitante."
"Vosotras, criaturas no vais a saliros con la vuestra." Gregory salió disparado

de su silla. "Soy Gregory Woods. Todo el mundo estará buscándome y no se
detendrán nunca. Vais a pagar por esto. La gente abrirá los ojos y se dará
cuenta de lo que queréis realmente."
"¿Qué es eso? ¿Dominar el mundo? Sólo queremos paz. Habrías aprendido eso
si realmente hubieras hecho tu investigación. Sólo queremos que los seres
humanos como tú nos dejen en paz. Pero no podías hacer eso." Smiley movió a
un lado y abrió la puerta. "He terminado, Torrent. Puedes hacer que sea
transferido ahora."
"Gracias." Torrent sonrió. "No puedo esperar para ponerlos en la furgoneta."
397
Smiley miró el cristal y luego miró hacia el pasillo vacío. Vanni pensó que
podría estar buscándola y se levantó, pero no tenía ningún deseo real de
hablar con Gregory. Torrent tenía razón. Era patético, aun así no sintió piedad
de él. Se merecía estar encerrado y verlo en aquella habitación la había
ayudado a cerrar este episodio.
Se acercó a la puerta y la abrió.
"Vámonos." dijo en voz lo suficiente alta para que Smiley la escuchara.
Él se volvió hacia ella y la miró a los ojos.
"¿Hemos terminado aquí?"
Ella asintió con la cabeza. Smiley cerró la puerta de la sala de interrogatorios

detrás de él y se acercó a ella. Extendió su brazo y le estrechó la mano.
"¿Estás bien?"
"Lo estoy ahora."
"¿Quieres dispararle con el Taser?" Un destello de diversión iluminó sus ojos.

"Podría ser divertido."
"No creo que Torrent quiera oírle llorar otra vez." bromeó Vanni.
"Cierto." Smiley miró por encima de su cabeza. "Estamos listos para irnos,
Jericho. ¿Nos das un paseo hasta el hotel?"
"Salgamos de aquí."
La puerta de la sala de interrogatorios se abrió y Vanni se hizo a un lado un

poco para mirar más allá de Smiley. Gregory fue conducido fuera de la
habitación. Volvió la cabeza y la vio. Sus miradas se encontraron y él dejó de
caminar.
"Todo esto es por tu culpa, Travanni. Siempre te odié."
398
Smiley retumbó y se giró. Vanni le aferró más apretado y lo agarró del brazo
también, esperando que no fuera tras Gregory.
"No vale la pena." insistió.
Smiley retumbó de nuevo, pero se relajó con su retención. Gregory se volvió

aún más hacia ella y la señaló.
"Vas a pagar por esto."
Vanni soltó el brazo de Smiley y se volteó hacia Gregory, alargó su mano

mostrándole su dedo medio.
"Siempre quise hacer eso. Que te jodan, Gregory. Smiley y yo nos vamos a
casar. Es lo mejor que me ha pasado y quería que lo sepas. Tú me hiciste el
favor más grande de mi vida. Ahógate con eso la próxima vez que abras la
boca y vomites tu odio."
Torrent le empujó, lo que le obligó a seguir andando.
"Muévete, llorón. Veo que eres más valiente cuando te estás enfrentando una
pequeña hembra. ¿Por qué no me sorprende? Eres realmente patético."
Giraron al final del pasillo y caminaron fuera de la vista. Vanni miró y esperó
a que Smiley volviera la cabeza. Lo hizo y pudo ver su ira.
"Déjalo ir. Yo planeo hacerlo." se acercó a él y le puso la mano en el pecho.

"Dejémoslo en el pasado y nunca pensaremos en ellos de nuevo. Realmente no
valen la pena."
"Tienes razón."
Ella le guiñó un ojo.
"Me gusta escuchar eso."
Smiley envolvió su brazo alrededor de su cintura.
"También eres muy sexy cuando le estás sacando a alguien el dedo."
399
"¿Lo soy?"
Jericho se aclaró la garganta.
"Estoy aquí. Por lo tanto están las cámaras. Yo sugeriría no ser demasiado
amistosos entre vosotros en el pasillo."
Todos se volvieron al oír el sonido de pies calzados con botas y contemplaron

al alto macho de pelo negro que caminaba hacia ellos. Era un felino con ojos de
color verde brillante, vestido con pantalones vaqueros y una camisa de color
negro debajo de una chaqueta de motociclista de cuero.
"Hola, Jaded." Smiley parecía contento de ver al macho. "Esta es Vanni, mi

compañera."
El tipo asintió con la cabeza hacia ella, pero no ofreció su mano.
"Me iba a registrar en Seguridad antes de salir para un evento de caridad y me

dijeron que te diga que el helicóptero llega en diez minutos. Parece que
ninguno de los dos estáis usando comunicadores. También me enteré de tu
emparejamiento y quería felicitaros."
"Gracias." Smiley señaló la atención de Vanni. "Debe ser el que trae a Beth." Él
miró a los dos hombres. "Tenemos que ir a su encuentro en el helipuerto."
"Vamos." Jericho se detuvo junto a Jaded. "Bonito traje. ¿Te lo prestó Harley? "
"A decir verdad, no." Jaded rio entre dientes "Le llamé y le pregunté donde
obtiene su ropa. Un club local de motos está organizando una barbacoa de
recaudación de fondos, intentan comprar un terreno para la preservación de
un camping que utilizan cada verano. Una compañía maderera quiere
comprarlo y cortar todos los árboles."
"Pensé que sólo te involucrabas si los animales estaban en la mezcla."
Jericho frunció el ceño. Jaded se encogió de hombros.
400
"Hay una gran cantidad de fauna que vive en esos bosques. Es por una buena
causa y me enviaron una invitación. Pensé que podría ser divertido."
Smiley quitó el brazo de Vanni, pero siguió apoderándose de su mano.
"Tenemos que irnos."
Estaba realmente entusiasmada con ver a Beth. Sólo esperaba que su mejor
amiga se comportara y no actuara demasiado extravagante cuando se
encontrara con Smiley. Esa era una verdadera preocupación.
www
"Relájate." ordenó Beth. "Me gusta Smiley."
Vanni se movió nerviosamente en su asiento.
"No es eso. Sabía que te gustaría. Me voy a casar. Me tiemblan las manos."
"¿Tienes dudas o se trata simplemente del nerviosismo de la novia?"
"Nervios. Tengo muchas ganas de casarme con Smiley."
"Cierra los ojos." Beth aplicó sombra de ojos. "Es un tipo cachas, Vanni.
También noto la forma en que te mira. Puedo ver su amor y el tipo está
cachondo por ti, también. Se queda mirando tu culo totalmente embobado
cuando caminas delante de él. ¿Es tan musculoso bajo esa ropa como lo parece
con ella?"
"Sí."
401
"Perra afortunada." Beth se detuvo. "Abre."
Vanni miró hacia su amiga.
"Gracias por hacer mi maquillaje. ¿Cómo me veo?"
"Bien. Lo mantuve ligero. Te da aspecto natural con un poco de ayuda extra."
"Gracias. Smiley dijo que me prefiere sin maquillaje… pero es mi boda. Tengo
que dar lo mejor. Prometió que alguien va a sacar fotos."
"Voy a sacar alguna con mi teléfono también."
"No puedes publicarlas en cualquier lugar." le recordó Vanni. "Nadie puede

saber que nos casamos, por el momento. Dijo que podría causar problemas."
"¿No se lo has dicho a tu familia todavía?"
"No. Sé que ellos querrían estar aquí y yo solo... "
"No digas más. Tu hermana es una mojigata. Tu hermano es un imbécil y

agresivo. Tus padres... me encantan, pero tu madre es una fanática del control
y, en cierto, modo es sobrecogedor cómo tu padre simplemente hace todo lo
que dice. Mis padres son lo contrario. Mi padre es el controlador y mi madre
hace todo lo que él dice."
"Lo sé. Creo que papá simplemente no quiere discutir. Mamá se hizo bastante
mandona, teniendo que criar a tres hijos mientras él estaba de viaje. Él es más
apacible."
"Obtuviste eso de él. Tú eres la hermana tranquila y les dejas mandar a los que
te rodean. Me alegra que hayas decidido fugarte. Ese fiasco de compromiso
con Carl casi me mató. Realmente lo odiaba y luego su familia estaba
metiéndose contigo por los planes que hacías, de parte a parte. Me enfadé por
ti."
"Por eso vamos a mantenerlo simple. Esto es sólo acerca de Smiley y de mí."
402
"Estoy contenta de haber llegado a estar aquí, incluso si fue una especie de
pesadilla."
"El viaje en helicóptero es horrible."
"Me refería a la pelea que tuve con el 'gran-cabrón' de Elvis. Me gustó el paseo
y la compañía no estaba tan mal. ¿Crees que podrías presentarte a uno de esos
bombones?"
"¿Qué pasa con Elvis? Casi esperaba que quedarte con él te haría sentirte más
cercana. Por el teléfono sonaba como que iba bien."
"Estábamos empezando a pelear. Él estaba cabreado de que me fuera, sobre

todo cuando vio a un montón de tipos recogerme. Pensó que era por
venganza."
"¿Por qué?"
Beth se inclinó por la cintura y le sonrió.
"Nada jodidamente deprimente en el día en que mi mejor amiga se engancha

con Mister Caliente. Tuve que hacer un alto en el camino. ¿Recuerdas ese
centro comercial justo al lado de la autopista? Te tengo una sorpresa."
Beth se enderezó, se dio la vuelta y caminó hacia la maleta tendida en su cama.

La abrió y sacó una bolsa de una tienda de marca.
"Esto es para ti. Es ese vestido que vimos hace unas semanas cuando fuimos a
comprar zapatos. Todavía tenían el mismo. "
Vanni la miró boquiabierta.
"¿Aquel tan bonito de color blanco con encaje?"
"Sí."
"Costaba ciento cincuenta dólares, Beth. Era demasiado caro."
403
"No sé lo que compraste durante tu día de compras pero no puedes casarte con
ropa de diario. Vamos." Beth le tendió la bolsa. "No es demasiado elegante y es
muy bonito. Yo diría que es el vestido perfecto para la boda de una fuga de
verano. Es lo primero que pensé cuando me diste la noticia. Sólo desearía
haber tenido tiempo de comprarte zapatos a juego, pero cuando esos tipos de
la ONE dicen cinco minutos, lo dicen en serio. Nunca me empujaron a través
de un centro comercial tan condenadamente rápido."
Vanni lo aceptó, luchando contra las lágrimas.
"Muchas gracias. Te lo pagaré de vuelta."
"Cállate. Es un regalo. Demonios, habría pagado tres veces esa cantidad sólo
para verte feliz. Simplemente te iluminas cuando miras a Smiley, además él
realmente me gusta." Hizo una pausa. "Es totalmente opuesto a Carl." Hizo
una mueca. "Sabías que iba a decírtelo."
"Realmente le odiabas."
"A lo grande." Beth le sonrió de nuevo. "Ojalá hubiera llegado aquí antes de
que le enviaran lejos. Me hubiera gustado tener unos minutos a solas con él. Le
habría dado un rodillazo en las bolas."
"No puedes contarle a nadie eso tampoco. Todo el mundo piensa que huyeron
del país."
Beth cruzó un dedo sobre su corazón.
"Sabes que puedes confiar en mí."
"Por eso te lo conté todo."
Beth echó un vistazo a su estómago y se echó a reír.
"Si es una niña, es mejor que la nombres como yo."
"No sé si estoy embarazada o no. Nunca hicimos una prueba de sangre. Viniste
tú y Smiley lo pospuso."
404
"Será mejor que me lo digas en cuanto lo sepas." Beth tomó la bolsa. "Vamos a
vestirte. Sabes que voy a asaltar totalmente todas las malditas tiendas de bebé,
si estás esperando uno. Con lo lindos que son los bebés y si sale pareciéndose a
Smiley entonces voy a tener que renunciar a usar lápiz labial. Tu hijo estaría
cubierto de marcas de mis besos por ser toda esa monería. El niño va a salir
corriendo y gritando de la tía Beth, una vez que él o ella tengan edad suficiente
para caminar. Voy a ser esa señora besucona que les vuelve locos."
"Top Secret, Beth."
Beth sostuvo su mirada y se puso seria.
"Leí las noticias. También escuché algunas de las peroratas estúpidas de

Gregory Woods. Asesinaría a alguien por ti y enterraría el cuerpo. Nadie va a
conseguir sacar ninguna información fuera de mí. Me podrían colgar por mis
pezones y golpearme con palos."
Vanni rio.
"¿Por tus pezones?"
Beth asintió.
"¡Ouch! ¿Verdad? Esa es la peor cosa en que pude pensar, a menos que sea por
mis labios vaginales. ¿Te imaginas? ¡Oh, Dios mío!, ¡ouchie! Nunca podré
entender cómo algunas personas consiguen perforarse allí abajo. Iba a tener
sexo con un chico una vez y él tenía una perforación a través de su polla. Le
dije que de ninguna manera y salí pitando de allí."
"Me acuerdo de eso. Dijiste que tenía un aspecto terrible."
"Aterrador, es la palabra que usé. Se veía como una barra de pesas redonda
simplemente colgando del extremo de la polla. ¿Quién quiere tener eso en su
interior y no poder pensar sinceramente que alguna vez sacaría la cabeza de
nuevo? Peligro de obstrucción."
Vanni se echó a reír.
405
"Estoy menos preocupada por mi boda ahora. Smiley no tiene ningún
piercing."
"Me alegro de oír eso. Ahora sal de esa ropa y entra en este vestido. No
tenemos mucho tiempo. Tu novio se veía nervioso y no hay maldita manera de
que queremos darle tiempo para poder pensárselo mejor. Se ve muy en forma.
Sería un infierno atraparle si echa a correr. Ninguna de nosotras somos buenas
corredoras."
"Smiley no haría eso."
"Mejor aún. No me gustaría tener que robar uno de esos jeeps en mi primer día
en la Reserva para ir tras él y quedar arrestada por sus policías. No me
importaría ser desnudada y registrada, sin embargo, por esa gran mole de tipo
que vino con vosotros a recogerme."
"¿Jericho?"
"Sí. ¿Has visto el pecho y los brazos a juego? Es como una montaña de
músculos en dos patas. Apuesto a que podría barrerme de mis pies y no
quejarse de mi necesidad de perder unos kilos porque estoy haciendo daño a
su espalda."
"Da algo de miedo mirarle."
"No para mí. Ese es el tipo adecuado de peligro al que había corrido yo
misma."
Beth le guiñó un ojo.
"No le tires los tejos. Va a estar en la boda."
"Vamos. Soy la dama de honor. Es tradición emborracharse y liarse con uno de

los padrinos de boda."
"¡Beth!"
"Está bien." Suspiró. "No voy a beber."
406
"No te líes con el mejor amigo de Smiley. Va a ser como de la familia. No
quiero que le hagas daño."
"¿Yo? ¿Dañarle a él? ¿Estamos hablando del mismo tipo?"
"En realidad es un alma dulce, cuando llegas a conocerle."
"Suficiente." Beth rodó sus ojos. "Me haces sonar como un equipo destructor de
una sola mujer. No voy a tratar de ligar con nadie. Lo entiendo. No voy a tener
sexo. Gran sorpresa."
Beth abrió la boca, pero luego la cerró. Movió la bolsa, sosteniéndola en alto
otra vez.
"Mis brazos se están cansando. Desvístete. La boda, ¿recuerdas?"
"Gracias, Beth."
Vanni se quitó los zapatos y empezó a desnudarse.
"Esto es para lo que son las mejores amigas 'casi-hermanas'. Soy mucho mejor
que tu hermana de sangre."
Vanni se rio.
"No te voy a dar una conferencia por tener sexo antes de la ceremonia.
¿Quieres que finja ser Mia?" Ella fingió un tono presumido. "En primer lugar,
sujeta firmemente el pene de aquel hombre y pregúntale si tiene alguna enfermedad
sexual. Eso es así para que puedas asegurarte que vas a arrancárselo fuera si miente."
"Para." Se rio Vanni. "Eso es muy malvado, pero muy exacto. Te quiero, Beth.
Gracias por ser como eres."
"Apuesto a que es divertida en las fiestas. Ahora que ya no estás nerviosa,

pongamos este show en marcha. Yo también te quiero, pero ahora estamos
tratando de conectarte permanentemente con un tipo que te hace caminar con
407
las piernas arqueadas. La charla de chicas ha terminado. Apuesto a que está
paseándose y esperando ansiosamente para ver a su novia."
www
Smiley mantuvo los ojos cerrados y reguló su respiración. Trató de no sudar.
"La mujer te ama. No va a echarse atrás. Ya estás emparejado."
Abrió los ojos y miró a Jericho. Se habían cambiado de ropa y se sentaban en el

vestíbulo, con una mesa entre ellos. Ambos se tensaban cada vez que las
puertas del ascensor se abrían, a la espera de Vanni que descendiera.
"¿Se me olvidó algo?"
Jericho negó con la cabeza.
"Está todo controlado. Creek y yo revisamos todos los detalles. No vamos a

defraudarte. Tenemos un predicador que es amistoso con los Especies y está
dispuesto a hacer la ceremonia. Lo hemos utilizado en el pasado y es bueno
para guardar secretos. El equipo de grupo de trabajo preguntó a Beth que
tamaño de anillo tiene Vanni y conseguimos bandas de oro coincidentes para
la ceremonia. Un equipo vigila ahí fuera, en esa colina con vistas al río y que
hace que parezca tan bonito. Tenemos cuatro oficiales allí, para asegurarnos de
que nada salga mal, aunque fuera de la vista. Serán sólo las palabras y los
anillos intercambiados en un lugar bonito. Tengo una cámara en el bolsillo,
por lo que habrá fotos para que puedas enmarcarlas en tu hogar. Dijeron que
el clima será perfecto y el sol estará bajando durante la ceremonia. Incluso
tienen iluminación por si se nos hace tarde, pero eso no pasará."
408
"Todavía no hemos decidido dónde vamos a vivir a tiempo completo."
"No hay prisa. Ahora sólo estás agarrando las cosas de las que preocuparte.
Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración de nuevo."
"¿Debería haber pedido antes la prueba de sangre? Sólo estaba asustado de

que Vanni podría disgustarse, dependiendo del resultado."
"Dijiste que no estaba enfadada cuando se le dijo que podía estar embarazada."
"No lo estaba."
"Deja de preocuparte. Me estás poniendo nervioso."
"Lo siento."
"Es sólo una boda humana. Tú conseguiste que ella estuviera de acuerdo con
ser tu compañera. La parte difícil ha terminado. Relájate."
"Tienes razón. Ella está aquí y es mía."
"Exactamente."
Las puertas del ascensor hicieron ding y Smiley contuvo el aliento. Beth salió
primero. Se puso de pie tan rápido que su rodilla chocó contra el borde de la
mesa. Él hizo una mueca, pero ignoró el dolor. Se precipitó hacia adelante,
pero se detuvo cuando Vanni salió. Se tambaleó un poco en sus pies. Una
mano firme se apoderó de su codo para sostenerlo.
El cabello de Vanni estaba suelto y llevaba un vestido de encaje que no había

visto antes, el cual acentuaba sus curvas y puso su polla dura. Era una visión
de autentica belleza. Su cabeza se giró y le localizó. Su sonrisa le sacó de su
momento congelado.
"Te amo." le espetó.
"Mierda." murmuró Jericho.
El macho le dejó en libertad. Pareció fijar su atención en Beth.
409
"¿Está ella tan nerviosa como lo está él?"
"Como una virgen en la noche de graduación." afirmó Beth. "Sí. Se me olvidó.

Es probable que no sepas lo que eso significa, ¿verdad? Ella está bien, lista
para irnos."
Smiley cerró la distancia entre él y Vanni. Alargó la mano, esperando que no

se diera cuenta de la forma en que sus dedos temblaban. Le gustó la forma en
que sus mejillas se volvieron ligeramente de color rosa y cómo su lengua salió
para humedecer sus labios.
"Me quitas el aliento."
"Espero que no te importe que me pusiera un poco de maquillaje. Quería

parecer lo mejor posible."
"Tendría que echarte por encima de mi hombro y llevarte a nuestra habitación

para evitar tomarte en el suelo si parecieras mejor."
"Suave." murmuró Jericho.
"Caliente." suspiró Beth.
Smiley se encogió un poco por dentro.
"Quiero decir, estás hermosa."
Vanni agachó la cabeza con timidez, antes de levantar la mirada y dedicarle

una sonrisa deslumbrante.
"Estoy lista. ¿Y tú?"
"Desde el primer momento en que te tuve en mis brazos."
Él le ofreció su mano. Ella la tomó y él la transfirió a su antebrazo, para pasar a

su lado.
"Vámonos. Nos trajeron un SUV para que tu cabello no vuele por el viento."
"Eso es muy considerado."
410
"Estoy intentando serlo." admitió.
Vanni se apoyó en él, sosteniendo su mirada.
"Sólo sé tú mismo. Eso es por lo que te amo."
Su pecho le dolió, pero supo por qué. Ella era su compañera, lo aceptaba por
ser quién era y él nunca había pensado que conseguiría eso.
"Estamos en esto juntos. Siempre."
"Lo estamos."
Ella se apoderó de él un poco más apretado.
"Hagamos esto."
Amaba a su Vanni.
411
Epílogo
Arrancó su camisa sobre su cabeza y la arrojó sobre la hierba. Su mirada se

precipitó por el bosque.
"¿Qué piensas de la Zona Salvaje?"
"Es preciosa. ¿Vamos a conocer a alguna de las Nuevas Especies que viven
aquí?"
"No, hoy no. Les pedí que permanecieran fuera de la vista, pero están cerca.
No quiero que estés asustada."
"Me has explicado que se ven un poco más animales de lo normal, pero son
Nuevas Especies. Sé que estoy a salvo."
"¿Seguro que te sientes bien con esto?"
Smiley estudió sus ojos, un ceño fruncido estropeando su hermoso rostro.
"Sí. Estoy segura."
"Sólo quédate cerca de mí. Nunca permitiré que nada te suceda." Él bajó la
mirada hacia su vientre. "A ninguno de los dos."
"Lo sé. Deja de preocuparte. Está un poco caluroso, igual que yo ¿Vamos a ir a
nadar o no?"
412
"Está bien. Sólo recuerda eso y trata de no mostrar miedo. Pueden sentirlo.
Hablé con Leo esta mañana y me dijo que estaban pasando el rato en esta
zona. La pesca es excelente. Algunos de los residentes están en estado de alerta
por si se necesita. Estás totalmente segura."
"Tengo muchas ganas de conocerles." Vanni estaba emocionada. "Esto es

fantástico."
"Lo es." le sonrió.
Él agarró su mano y la condujo hacia la orilla del río. Vanni miró alrededor,
pero en un primer momento no logró detectarlos. La amplia extensión de río
también la distrajo. Árboles fuertes en fila al otro lado y la vista de la belleza
natural virgen nunca dejaban de sorprenderla. Por eso había elegido vivir en la
Reserva. Le encantaba su cabaña en el bosque. Incluso había puesto fuera
comederos para pájaros y decenas de ellos visitaban su porche todos los días.
Smiley se detuvo y la llevó a un alto.
"Ahí están."
Él levantó su mano libre y señaló. Ella siguió la línea de su dedo y alcanzó a

ver algo de color marrón claro en movimiento en la hierba alta. Surgió en el
borde del río y ella sonrió.
"Es muy grande."
"Ese es Gus."
"Pensé que serían de color marrón oscuro."
"Sólo cuando sus pelajes están mojados."
Un segundo, ligeramente mayor que el primero, salió de la hierba. Smiley le

soltó la mano y la abrazó por la cintura. Él distraídamente frotó su vientre
ligeramente extendido.
413
Era algo que hacía a menudo, desde que se había enterado que estaba
embarazada. No había sucedido de inmediato pero, tras seis meses de
intentos, lo habían conseguido.
Simplemente lo habían logrado cuatro semanas antes.
"Ese es Pete. Es algo perezoso. Él también es unos buenos cincuenta kilos más
grande. Le encanta dormir."
"Hibernan en invierno, ¿no?"
"Sí. Acaban de salir de ello hace poco tiempo. En realidad son mucho más
grandes al final del verano. Voy a saludarles y dejarte ver lo amistosos que
son. Quédate aquí."
"¿Estás seguro de que es seguro?" dijo aferrándose a él.
"Son mis amigos." Él le dio una mirada tranquilizadora. "Confía en mí."
"Ya sabes que lo hago."
Odiaba dejarlo ir, pero nunca la dejaba por mucho tiempo. Incluso había
acortado sus horas de trabajo para pasar más tiempo con ella. Se había
convertido en algo más que su amante y su compañero. Él era su mejor amigo.
Mientras se abrazaba a su centro le vio acercarse lentamente al par de osos

pardos. O bien le olieron o le vieron, ambos giraron sus cabezas.
"Tu papá es muy valiente." susurró.
"Escuché eso." gritó Smiley, no giró sobre su hombro para mirar hacia ella
cuando añadió: "Tu madre es increíblemente hermosa. Le diría que eres sexy
pero no va a entender ese término hasta que tenga edad suficiente para fijarse
en las hembras."
"Ten cuidado." Le sonrió Vanni.
414
"Siempre."
Estaba nerviosa cuando él caminó hasta la pareja. Uno de ellos abrió su boca y
ella se tensó, esperando que el oso fuera a morderlo. No lo hizo.
De hecho volvió la cabeza y vio con asombro como Smiley extendió la mano,
aproximándose para frotar la parte superior de su cabeza. El otro se contoneó
más cerca y chocó contra su costado. Smiley rio y frotó su cabeza también.
"Buenos muchachos." le oyó decir. "¿Cómo habéis estado?"
El orgullo y un poco de asombro se extendieron por Vanni. Su compañero era

increíble. Volvió la cabeza y le sonrió.
"¿Ves? Realmente se han adaptado a la vida en la Reserva y nos aceptan. Son

francamente amistosos."
Se alegró de que no le atacaran. Smiley abandonó a los osos y regresó a su

lado.
"Están muy bien con que tu estés cerca de ellos." Cerró miradas con ella. "Sabes
que nunca permitiría que nada te haga daño. Tu aroma está todo sobre mí. Me
aseguré de ello. A ellos les gusta."
"No como en el modo 'quiero-comerte-para-cenar', ¿verdad?"
"Así es como yo me siento." Él le guiñó un ojo. "Me gusta comerte todo el

tiempo."
No podía sonrojarse más, cuando le decía cosas como esa.
"Me gusta eso también."
Los osos sólo la miraban desde la distancia, pero no parecía importarles su

presencia. Smiley se trasladó a poner su cuerpo entre ella y ambos osos.
Siempre tenía una actitud protectora cuando pensaba que podría estar en
peligro y ella lo apreciaba. Jamás dejaría que nada malo le sucediera.
415
Ella tenía fe en él.
Los osos se alejaron y se trasladaron más cerca del río. Smiley cambió de
posición y se puso detrás de ella, envolviendo sus brazos alrededor de su
cintura sin apretar. Se relajó contra él.
"Gracias por traerme aquí y compartir esto."
Él apoyó la barbilla en la parte superior de su cabeza.
"Quiero compartir todo contigo, nena. La vida no tendría sentido sin ti."
Ella parpadeó para contener las lágrimas.
"Si me dices lo mucho que me quieres, voy a llorar. Malditas hormonas."
Él hizo ese suave sonido retumbante que encontraba tan sexy.
"Te lo demostraré después, en su lugar. Nunca derramas lágrimas cuando te

tengo desnuda."
"Estoy teniendo calor."
"Podemos a ir a nadar a un lugar por el río, lejos de ellos. Hay un pequeño

sitio que conozco donde se ha formado una piscina entre las rocas y no es
profunda. El agua no estará tan fría."
"Creo que deberíamos saltarnos eso y simplemente volver a casa." Ella volvió
la cabeza y lo miró. "Y estar desnudos en la bañera."
"Haremos el amor en el agua."
Su mano alrededor de su cintura avanzó más bajo, con el pulgar provocando

la zona justo debajo de la cintura de sus pantalones cortos.
"Y estaremos juntos."
"Podemos ver a los osos más tarde."
"Prefiero más bien estar viéndote a ti."
416
"Ahora estoy realmente teniendo calor."
Él se rió entre dientes.
"Nos vemos mañana, chicos. Mi compañera me necesita más. Todo es cuestión

de prioridades. Espero que un día podamos encontrar hembras para vosotros
y lo entenderéis. Ellas lo son todo."
Fin
417
Sobre la Autora
Soy "supervisora de hogar" a tiempo completo (suena mucho mejor que ama
de casa normal), madre y escritora. Soy adicta al café helado con caramelo, una
barra de chocolate de vez en cuando (o dos) y trato de conseguir por lo menos
cinco horas de sueño por la noche.
Me encanta escribir todo tipo de historias. Creo que la mejor parte acerca de la
escritura es el hecho de que la vida real es siempre incierta, siempre lanzando
cosas contra nosotros sobre las que no tenemos ningún control, pero cuando
escribes, puedes asegurarte de que siempre hay un final feliz. Me encanta eso
de escribir. Me encanta sentarme en mi escritorio de ordenador, ponerme los
auriculares y escuchar música a todo volumen para bloquear el mundo que me
rodea, para así poder crear mundos frente a mí.
Laurann Dohner
418
Staff
Traducción y Corrección Traducción
Corrección
Traducción y Diseño
419
Esto es un proyecto de traducción Sin Ningún Ánimo De Lucro.
Está hecho por Fans para Fans, Siendo Su Distribución Complemente Gratuita. No ha
tenido en ningún momento el objetivo de quebrantar la propiedad intelectual del autor o
reemplazar el original.
Su Único fin es incentivar y entretener con la lectura en nuestro idioma.
Así mismo os Incentivamos a Comprar Las Obras de Nuestras Autoras Favoritas, ya
sea en el idioma original o cuando estén disponibles en español, para seguir disfrutando
de estas grandes historias.

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Laurann Dohner Smiley

Serie Nuevas Especies 13

Vanni es su mujer, incluso si ella no se ha dado cuenta todavía.

Carl susurró éstas palabras enfadado, mirando a su alrededor para asegurarse

"Se supone que no tienes que hablar en absoluto. Ya sé que él es de la vieja

Él se acercó y la agarro del brazo, mirando otra vez a su alrededor.

"Jamás me ha pedido nada, pero una parte de la prensa han estado

Vanni sintió la tentación de recordarle que aún no estaban casados. Repasó

Carl suavizó el tono.

"No me gustan los miembros de su iglesia, ni lo que defienden."

La expresión normalmente atractiva de Carl se torció y ya no era tan

"Mi padre y sus seguidores simplemente tienen diferentes puntos de vista. No

Carl miró a su alrededor y luego la miró fijamente a los ojos.

"Mi padre me ha prometido darme cincuenta mil dólares si venía, tu familia no

Vanni apretó los dientes, resintiéndose a que la embargara el sentimiento de

"Son clientes. No puedo casarme sin invitarles."

Carl le apretó el brazo con fuerza y la zarandeó, al tiempo que miraba de un

"Para." le espetó. "Vete arriba si no puedes poner buena cara. No vuelvas a

"Estoy empezando hacerlo." A Vanni tampoco le gustaban las consecuencias.

"No puedes avergonzarle."

"Estás haciendo un drama. No es halagador, Vanni."

Ella se tragó una respuesta desagradable.

"No te olvides de venir al desayuno de mañana, después tenemos que posar

Vanni hizo una mueca.

"Es horrible, me recuerda un poco al vestido de dama de honor de una película

Carl hizo un gesto de exasperación.

Estuvo tentada de decir que sí.

Vanni se estremeció por dentro. Claro que no se le iba a romper el corazón si la

¿Podría ir a peor mi suerte?

Él camarero asintió con la cabeza y se dio la vuelta para traer su bebida.

Vanni mantuvo la cabeza baja hasta que alguien a su izquierda se aclaró la

Su línea de la mandíbula era firme, los pómulos pronunciados y tenía los

Vanni bajó la mirada para echar un vistazo a sus vaqueros. Estos se

No debería haber preguntado, mi suerte sí que podía empeorar.

El pánico se apodero de ella, a Carl le daría un ataque si alguien la veía

Él parpadeó antes de hablar.

"¿Estás bien? Estás muy pálida y te tiemblan las manos."

Él se inclinó un poco, acercándose más.

Él hizo el intento de ir a levantarse del taburete.

"¡No!" consiguió decir.

Le hizo sentir un poco culpable, estaba dispuesto a irse a causa de su

"Sólo estoy sorprendida, eso es todo. Estás bien dónde estás."

Él se echó hacia atrás en su taburete. El camarero la distrajo cuando trajo su té

"Cóbrate lo de los dos y quédate con el cambio."

"No tienes que hacer eso."

"Digamos que es mi forma de ofrecer una disculpa. Mi estado de ánimo no

Él levantó su copa y bebió un sorbo.

Su mente aun seguía aturdida tenía los pensamientos revueltos y no captó la

Su mano era grande y cálida, cogió la de ella con mucha suavidad, se la

"Vanni es un nombre bonito."

"Es diminutivo de Travanni, mi madre tenía debilidad por los nombres

Tomó un sorbo de té, tratando de no balbucear, hacía eso cuando estaba

Él parecía un poco confundido.

"Travanni recuerda a Transilvania, hogar de Drácula. Mortimia, bueno, Mort

Él ahora se rió entre dientes. Fue un sonido agradable.

"Ya veo. ¿Hay otros hermanos con nombres extraños?"

¡Cállate! se ordenó a sí misma, pero entonces la Nueva Especie se echó a reír y

"Es extraña, pero nosotros la queremos."

"¿Qué pensaba tu padre de dichos nombres?"

"Debe ser agradable que ahora esté en casa."

"¿Supongo que estás aquí para la cosa?"

"Ya sabes. La conferencia."

La Organización de las Nuevas Especies está promoviendo la expansión de la

Smiley asintió con la cabeza.