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SISTEMA INMUNOLOGICO

FACULTAD: INGENIERIA

PROGRAMA: SALUD OCUPACIONAL

ASIGNATURA: ANATOMIA

INTRODUCCION
Los sistemas del cuerpo humano funcionan coordinadamente para
que el organismo, en su conjunto, pueda desarrollar tareas complejas.
Este trabajo lo realizamos con el fin de adquirir los conocimientos
necesarios sobre el sistema inmunológico; sabemos que
El sistema inmunológico es el nombre que reciben todos los
mecanismos de defensa de nuestro organismo. Es el encargado de
defender nuestro cuerpo de la invasión de microorganismos o sustancias
extrañas que pueden causar alguna enfermedad. Todas las personas
tienen cierta capacidad para responder a la invasión de microbios y
sustancias extrañas que entran en el organismo. Esta capacidad es
natural y se refuerza con las vacunas y los sueros. En su estudio es
primordial conocer como se combate las enfermedades infecciosas y la
función primordial del cuidado y las prevenciones que debemos tener
para que este sistema cumpla con sus funciones.

OBJETIVO GENERAL
Conocer y estudiar el sistema inmunológico, adquirir todos los
conocimientos necesarios y aplicarlos en el desarrollo de nuestras diferentes
actividades encabezado por el bienestar de los trabajadores en el ámbito
laboral.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

 Adquirir los conocimientos del sistema inmunológico.


 Analizar el proceso de dicho sistema.
 Verificar los diferentes problemas o enfermedades que causan
enfermedades autoinmunes.
 Ayudar y brindar bienestar en la vida de los trabajadores.
 Conocer las medidas preventivas para evitar enfermedades.

El Sistema Inmunológico
Inmunidad es la habilidad del cuerpo para evitar que se desarrolle una
infección al tener anticuerpos contra el patógeno. Muchas enfermedades
infecciosas confieren inmunidad (sarampión, escarlatina); en cambio en
otras ésta es escasa (gripes y resfriados comunes). Las células del
organismo humano tienen la habilidad para defenderse y atacar
adecuadamente a un determinado microbio que penetre en el
organismo.

Ser inmune significa estar protegido. Por lo tanto, tiene sentido que el
sistema corporal que ayuda a combatir las enfermedades se llame
“sistema inmunológico”. Infección es la alteración producida en el
organismo por la presencia de ciertos parásitos. La infección es el
establecimiento de una interacción entre un huésped y un parásito que
conduce a la multiplicación de este en los tejidos del primero.

Para las bacterias, los virus y los hongos, muchos de los cuales causan
enfermedades, el organismo humano representa un medio donde
abundan los alimentos. Antes de que un microorganismo pueda
penetrar, sin embargo, debe romper la primera línea de defensa del
organismo. Esta primera línea de defensa, la más evidente es la piel,
que forma una capa impermeable en casi todo el cuerpo. El sebo
secretado por las glándulas sebáceas, que se encuentran bajo la piel,
contiene una sustancia llamada lisozima, también presente en las
lágrimas y las mucosidades nasales - que eliminan las bacterias y los
virus. Las partes del cuerpo abiertas al exterior tienen sus propias
defensas especializadas. Cualquier bacteria o virus inhalado puede
quedar atrapado en las mucosidades producidas por las células que
recubren los conductos que conducen a los pulmones. En estos tubos
unos cilios del grosor de un pelo impulsan constantemente las
mucosidades hacia la garganta, donde son expulsadas o tragadas. Si
son tragadas, los ácidos de los jugos gástricos del estómago
normalmente eliminarán cualquier microorganismo presente.

Los microorganismos también pueden penetrar en el cuerpo por las vías


urinarias y, en las mujeres, por la vagina. En los hombres y mujeres la
acción de arrastre de la orina elimina las bacterias que penetran en el
organismo desde el exterior. En las mujeres, las bacterias inofensivas de
la vagina impiden que penetren aquellas que provocan enfermedades.
Las bacterias inofensivas del intestino desempeñan un papel similar.

Las bacterias, los virus, los hongos y otros microorganismos que causan
enfermedades a veces logran eludir estas defensas y comienzan a
multiplicarse por todo el cuerpo.

El sistema inmunológico está formado por una red de células, tejidos y


órganos que trabajan en conjunto para proteger el cuerpo. Los glóbulos
blancos forman parte de este sistema de defensa. También reciben el
nombre de “leucocitos”. Existen dos tipos básicos de estas células
encargadas de combatir gérmenes:

Los fagocitos devoran a los gérmenes invasores.


Los linfocitos permiten que el cuerpo recuerde a los invasores
y los reconozca si regresan.

Los leucocitos se encuentran en muchos lugares, incluido el bazo, un


órgano ubicado en el vientre, que se encarga de filtrar la sangre y de
ayudar a combatir las infecciones. Los leucocitos también están
presentes en la médula ósea, que es una gelatina espesa y esponjosa
ubicada en el interior de los huesos.

El Proceso Inmunológico

El proceso inmunológico funciona así: un agente infeccioso entra en el


cuerpo. Quizá es un virus de la gripe que entra por la nariz. Quizá es
una bacteria que entra por la sangre cuando se pincha con un clavo. Su
sistema inmunológico está siempre alerta para detectar y atacar al
agente infeccioso antes de que cause daño. Sea cual fuere el agente, el
sistema inmunológico lo reconoce como un cuerpo ajeno. Estos cuerpos
externos se llaman antígenos. Y los antígenos deben ser eliminados.

La primera línea de defensa del cuerpo es un grupo de células llamadas


macrófagos. Estas células circulan por la corriente sanguínea y en los
tejidos del cuerpo, vigilantes de los antígenos.

Cuando un invasor entra, un macrófago rápidamente lo detecta y lo


captura dentro de la célula. Enzimas en el interior del macrófago
destruyen al antígeno procesándolo en pedacitos pequeños llamados
péptidos antigénicos. Pero antes de que otras células puedan empezar
su trabajo, los péptidos antigénicos dentro del macrófago se unen a
moléculas llamadas antígenos de leucocitos humanos o HLA. La
molécula de HLA unida al péptido, ahora llamada complejo antigénico,
es liberada del macrófago.

Células llamadas linfocitos de la clase T, pueden entonces reconocer e


interactuar con el complejo péptido antigénico-HLA que se encuentra en
la superficie del macrófago.

Una vez que dicho complejo es reconocido, los linfocitos T envían


señales químicas llamadas citocinas. Estas citocinas atraen más
linfocitos T. También alertan a otros linfocitos, de la clase B, para que
produzcan anticuerpos.

Estos anticuerpos se liberan a la circulación sanguínea para encontrar y


unir más antígenos, de tal forma que los invasores no se puedan
multiplicar y enfermarle. En el último paso de este proceso, una célula
llamada fagocito se encarga de remover el antígeno del cuerpo.

El Sistema Inmunológico tiene 2 principales funciones:


1) reconocer sustancias (también llamadas antígenos) extrañas al
cuerpo y
2) reaccionar en contra de ellas.
Estas sustancias (o antígenos) pueden ser micro-organismos que
causan enfermedades infecciosas, órganos o tejidos trasplantados de
otro individuo, o hasta tumores en nuestro cuerpo. El adecuado
funcionamiento del Sistema Inmunológico provee protección contra
enfermedades infecciosas, es responsable de rechazar órganos
trasplantados, y puede proteger a una persona del cáncer.
Una de las funciones más importantes del Sistema Inmunológico es la
protección contra enfermedades infecciosas.
Por ejemplo, una persona en promedio tiene algunas infecciones de
"gripe" cada año provocadas por una gran variedad de virus
respiratorios. Otros virus pueden provocar infecciones más serias en el
hígado (hepatitis) o infecciones en el cerebro (encefalitis).
Las infecciones por bacterias más comunes son entre otras,
"streptococo" en la garganta, infecciones de la piel (impétigo) e
infecciones en el oído (otitis). En algunas ocasiones una infección por
una bacteria puede ser muy seria como cuando afecta la cubierta del
cerebro (meningitis) o cuando afecta los huesos (osteomelitis).
Cualquiera que sea la infección, ya sea causada por una bacteria, virus u
hongo, si es relativamente inofensiva o relativamente seria, si es en la
piel, en la garganta, en los pulmones o en el cerebro, el Sistema
Inmunológico es el responsable de defender a esta persona contra el
micro-organismo invasor.
Un Sistema Inmunológico normal brinda la habilidad de matar al micro-
organismo invasor, limitar el área afectada y por último brindar la
recuperación.
Un Sistema Inmunológico anormal no puede matar a los micro-
organismos. La infección se puede distribuir y si no es tratado puede
morir. Por lo tanto pacientes con un Sistema Inmunológico defectuoso
comúnmente son susceptibles a infecciones y esto se convierte en su
mayor problema.
En algunas personas las infecciones pueden ocurrir no muy seguido y sin
consecuencia. En otros, las infecciones pueden ser muy seguidas, y con
consecuencias, o provocadas por un micro-organismo inusual.
Localización del Sistema Inmunológico.
Como todas las partes del cuerpo tienen que estar protegidas contra
micro-organismos u otros materiales extraños, el Sistema Inmunológico
se encuentra y tiene acceso en todas las partes del cuerpo. Sin embargo
los componentes más importantes del Sistema Inmunológico están
concentrados en la sangre, timo, huesos, anginas, ganglios, médula
ósea, bazo, pulmones, hígado y los intestinos.
Cuando una infección empieza en un lugar que solamente tiene unos
cuantos componentes del Sistema Inmunológico, como la piel, se
mandan señales por el cuerpo para llamar a grandes cantidades de
células al sitio de la infección. El Sistema Inmunológico está compuesto
de distintos tipos de células y proteínas. Cada componente tiene una
tarea especial enfocada a reconocer el material extraño (antígenos) y/o
reaccionar en contra de los materiales extraños. Algunos componentes
tienen como función única y principal el reconocer el material extraño.
Otros componentes tienen la función principal de reaccionar contra el
material extraño. Y algunos otros componentes funcionan para ambos,
reconocer y reaccionar en contra de materiales extraños.
Como las funciones del Sistema Inmunológico son tan importantes para
sobrevivir, existen mecanismos de respaldo. Si un componente del
sistema faltara o no funcionara correctamente, otro componente puede
hacer por lo menos algunas de sus funciones.
LOS COMPONENTES DEL SISTEMA INMUNOLÓGICO SON:
 Linfocitos B
 Linfocitos T
 Fagocitos
 Complemento
LINFOCITOS B: Son células especializadas del Sistema Inmunológico
(también conocidas como células B) que tienen como función principal
producir anticuerpos (también llamados inmunoglobulinas o
gammaglobulinas). Los linfocitos B se desarrollan de células primitivas
(células madre) en la médula ósea. Cuando maduran, los linfocitos B se
encuentran en la médula ósea, nodos linfáticos, bazo, ciertas áreas del
intestino, y en menos extensión en el fluido sanguíneo.
Cuando las células B se estimulan con un material extraño (antígenos),
responden madurando en otros tipos de células llamadas células
plasmáticas. Las células plasmáticas producen anticuerpos. Los
anticuerpos encuentran su camino hacia el fluido sanguíneo, secreciones
respiratorias, secreciones intestinales, y hasta en las lágrimas.
Cuando las moléculas de los anticuerpos reconocen a los micro-
organismos extraños, se unen físicamente al micro-organismo e inician
una compleja cadena de reacciones involucrando a otros componentes
del Sistema Inmunológico que eventualmente destruyen al micro-
organismo.
Los nombres químicos para las proteínas de los anticuerpos son
inmunoglobulinas o gammaglobulinas. Así como los anticuerpos pueden
cambiar de molécula a molécula con respecto al micro-organismo al que
se unen, también pueden variar con respecto a sus funciones
especializadas en el cuerpo. Este tipo de variación en función
especializada es determinada por la estructura química del anticuerpo,
que a su vez determina el tipo de anticuerpo (inmunoglobulina).
Hay 5 grandes clases de anticuerpos o gammaglobulinas:
Inmunoglobulinas G (IgG)
Inmunoglobulinas A (IgA)
Inmunoglobulinas M (IgM)
Inmunoglobulinas E (IgE)
Inmunoglobulinas D (IgD)

Cada clase de inmunoglobulina tiene una característica química especial


que le brinda ciertas ventajas. Por ejemplo, los anticuerpos en la
fracción IgG se forman en grandes cantidades y pueden viajar del fluido
sanguíneo a los tejidos. Estas inmunoglobulinas (anticuerpos) son la
única clase que cruza la placenta y le pasa inmunidad de la madre al
recién nacido. Los anticuerpos en la fracción IgA se producen cerca de
las membranas mucosas y llegan hasta secreciones como las lágrimas,
bilis, saliva, mucosa, donde protegen contra infecciones en el tracto
respiratorio y los intestinos.
Los anticuerpos de la clase IgM son los primeros anticuerpos que se
forman en respuesta a las infecciones y por lo tanto son importantes
para proteger durante los primeros días de una infección. Los
anticuerpos en la clase IgE se encargan de reacciones alérgicas. La
función especializada de IgD todavía no se entiende por completo.

LINFOCITOS T:

Los linfocitos T (algunas veces llamadas células T) son otro tipo de


células inmunológicas. Los linfocitos T no producen anticuerpos
moleculares. Las funciones especializadas de los linfocitos T son
1) atacar directamente antígenos extraños como virus, hongos, tejidos
trasplantados y
2) para actuar como reguladores del Sistema Inmunológico.
Los linfocitos T se desarrollan de células madre en la médula ósea.
Temprano en la vida del feto, células inmaduras migran al timo, un
órgano especializado del Sistema Inmunológico en el pecho.
En el timo, los linfocitos inmaduros se desarrollan a linfocitos T maduros
("T" por el Timo). El Timo es esencial para este proceso, y los linfocitos
T no se pueden desarrollar en el feto si no tiene Timo. Linfocitos T
maduros dejan el Timo y se van a otros órganos del Sistema
Inmunológico, como el bazo, nodos linfáticos, médula ósea y la sangre.
La variedad de linfocitos T es tan grande que el cuerpo tiene linfocitos T
que pueden reaccionar contra virtualmente cualquier antígeno. Los
linfocitos T también varían con respecto a su función.
1) linfocitos T destructores ("killer" o "effector")
Los linfocitos T destructores son los linfocitos que destruyen al micro-
organismo invasor. Estos linfocitos T protegen al cuerpo de bacterias
especificas y virus que tienen la habilidad de sobrevivir y reproducirse
en las células del cuerpo. Los linfocitos T destructores también
responden a tejidos extraños en el cuerpo, como por ejemplo un hígado
trasplantado. Los linfocitos T destructores migran al sitio de la infección
o al tejido trasplantado. Cuando llegan, los linfocitos T destructores se
fijan a su blanco y lo destruyen.
2) linfocitos T de ayuda ("helper")
Los linfocitos T de ayuda, ayudan a los linfocitos B a producir
anticuerpos y ayudan a los linfocitos T destructores en el ataque a
sustancias extrañas. Los linfocitos T de ayuda hacen más efectiva la
función de los linfocitos B, provocando una mejor y más rápida
producción de anticuerpos. Los linfocitos T de ayuda también hacen más
efectiva la función de destrucción de los linfocitos T destructores.
3) linfocitos T supresores ("suppressor").
Por otra parte los linfocitos T supresores, suprimen o apagan a los
linfocitos T de ayuda. Sin esta supresión, el Sistema Inmunológico
seguiría trabajando después de la infección. Juntos los linfocitos T de
ayuda y supresores actúan como el termostato de todo el sistema de
linfocitos y los dejan prendidos el tiempo suficiente - no mucho tiempo y
no muy poco tiempo.

FAGOCITOS: Los fagocitos son células especializadas del sistema


inmunológico cuya función primaria es ingerir o matar micro-
organismos. Estas células, como otras en el sistema inmunológico, se
desarrollan de células madre en la médula ósea. Cuando maduran,
migran a todos los tejidos del cuerpo pero especialmente en la sangre,
bazo, hígado, nódulos linfáticos y pulmones.
Hay diferentes tipos de fagocitos. Leucocitos Polimorfonucleares
(neutrófilos o granulocitos) son comunmente localizados en la sangre y
pueden migrar a sitios de infección en minutos. Son estos fagocitos los
que se incrementan en la sangre durante una infección y es responsable
en gran parte de las cuentas grandes en las biometrías hemáticas.
Los fagocitos son también los que dejan el fluido sanguíneo y se
acumula en los tejidos durante las primeras horas de la infección y es
responsable de la formación de pus. Los monocitos son otro tipo de
fagocitos en la sangre. También cubren las paredes de las venas en
órganos como el hígado y el bazo. Aquí actúan para capturar micro-
organismos que pasan por la sangre. Cuando los monocitos salen del
fluido sanguíneo y entran en los tejidos, cambian de forma y tamaño
para convertirse en macrófagos.

Los fagocitos sirven distintas funciones críticas en el cuerpo contra


infecciones. Tienen la habilidad de salir del fluido sanguíneo y moverse
hacia los tejidos al sitio de la infección. Cuando llegan al sitio de la
infección, se comen al micro-organismo invasor. La ingestión de los
micro-organismos es mucho más fácil cuanto están cubiertos de
anticuerpos o complemento o ambos. Una vez que el fagocito se come al
micro-organismo, inicia una serie de reacciones químicas dentro de la
célula que resultan en la muerte del micro-organismo.

COMPLEMENTO:
El sistema del complemento tiene 18 proteínas que funcionan de manera
ordenada e integrada para ayudar en la defensa contra infecciones y
producen inflamación. Algunas de las proteínas del complemento las
produce el hígado, y otras las producen ciertos fagocitos, los
macrófagos.
Para realizar sus funciones de protección, los componentes del
complemento deben convertirse de formas inactivas a formas activas.
En algunos casos, los micro-organismos primero tienen que combinarse
con anticuerpos para poder activar el complemento. En Otros casos los
micro-organismos pueden activar el complemento sin la ayuda de los
anticuerpos.
Ya activado, el complemento puede realizar funciones de defensa contra
infecciones. Como mencionamos una de las proteínas del complemento
cubre a los micro-organismos para que puedan ser ingeridas con mayor
facilidad por los fagocitos. Otros componentes del complemento mandan
señales químicas para atraer fagocitos a los lugares de infección.
Cuando todo el sistema se encuentra en la superficie de algunos micro-
organismos, puede romper la membrana de la célula, y matarla.

TIPOS DE INMUNIDAD
Existen dos tipos de inmunidad las cuales pueden ser:

1. Inmunidad Innata
2. Inmunidad Adaptativa

1. Inmunidad innata (inespecífica)

La inmunidad innata, es un sistema de defensa con el que uno nace y


que lo protege contra los antígenos.
Este tipo de inmunidad, consiste en barreras que impiden que
sustancias extrañas peligrosas ingresen a nuestro cuerpo. Estas
barreras forman la primera línea de defensa en la respuesta inmunitaria.

Actúa casi inmediatamente, siempre de la misma forma y no genera


memoria.

Forman parte de ella:

 La piel (los ácidos grasos cubren receptores celulares e impiden


que los patógenos se adhieran a ellos)
 La edad (cada edad presenta sus propias susceptibilidades)
 Las mucosas (impiden la adherencia celular)
 La especie (diferencias raciales y genéticas)
 La fagocitosis (presenta cierto grado de especificidad)
 Las células Natural Killer "NK" (Células asesinas que destruyen las
células diana)
 Las citoquinas (proteínas que regulan la acción celular,
potenciando o inhibiendo su acción)
 Los interferones (proteínas que impiden la replicación viral)
 Sistema del Complemento (Causan un forado en la célula,
produciendo necrosis en la célula)

2. Inmunidad Adaptativa:

Es una respuesta inmune mucho más compleja que la anterior ya que


ésta si genera memoria, lo cual permite brindar una protección más
efectiva ante un posterior encuentro con el mismo patógeno. La
respuesta inmune adaptativa es específica de los anticuerpos y requiere
de la presentación de sustancias que no son propias del organismo
mediante un proceso llamado "presentación de los antígenos", que se da
por unas células especiales llamadas "células presentadoras de
antígenos".

La especificidad del antígeno permite la generación de respuestas que se


adaptan a patógenos específicos o a las células infectadas por
patógenos. La habilidad de montar estas respuestas específicas se
mantiene en el organismo gracias a las células de memoria. Si un
patógeno infecta a un organismo más de una vez, estas células de
memoria desencadenan una respuesta específica para ese patógeno que
han reconocido, con el fin de eliminarlo rápidamente.

Las células del sistema inmune adaptativo son una clase especial de
leucocitos, llamados linfocitos; estos linfocitos se clasifican en linfocitos
B (LB) y Linfocitos T (LT). Los linfocitos B están involucrados en la
respuesta inmune humoral (cuando la respuesta inmunitaria involucra
sustancias químicas) mientras que los linfocitos T están involucrados en
la respuesta celular (cuando la respuesta inmune indique la participación
de células).
ORGANOS LINFOIDES
Los órganos linfoides regulan la producción de linfoides y programan el
reconocimiento inmunitario de los antígenos. Los órganos linfoides
primarios, como el timo, y la medula ósea regulan la producción y
diferenciación de los linfocitos. Los órganos linfoides secundarios se
encargan de procesar la respuesta inmune ante un reto antigénico;
entre ellos, se encuentran el bazo, los ganglios linfáticos y las
amígdalas.

El Timo
Es un órgano bilobulado de color blanco que se encuentra localizado en
la cavidad torácica por detrás del esternón y arriba del corazón, bajo la
glándula tiroides. Este órgano, al a vez que capacita los linfoticos T,
produce una serie de hormonas como son la timopoyetina y la timosina
que incrementan la población de linfocitos en la médula ósea y la
formación de linfocitos pre tímicos en la medula también en la médula
ósea.

MÉDULA ÓSEA: tejido suave y esponjoso que se encuentra en el centro


de la mayoría de los huesos. Produce los glóbulos blancos, los glóbulos
rojos y las plaquetas. Es un tipo de tejido que se encuentra en el interior
de los huesos largos, vértebras, costillas, esternón, huesos del cráneo,
cintura escapular y pelvis.

La médula ósea es el lugar donde se produce la sangre


(hematopoyesis), porque contiene las células madre que originan los
tres tipos de células sanguíneas que son los leucocitos, hematíes y
plaquetas.

Se conocen dos tipos de médula ósea:


 La médula ósea roja, que ocupa el tejido esponjoso de los huesos
planos, como el esternón, las vértebras, la pelvis y las costillas; es
la que tiene la función hematopoyética
 La médula ósea amarilla, que es tejido adiposo y se localiza en los
canales medulares de los huesos largos

Los Ganglios Linfáticos

Los ganglios linfáticos son fundamentales en el sistema defensivo del


cuerpo ya que producen y albergan los linfocitos, que protegen el cuerpo
de la enfermedad. Están repartidos por todo el cuerpo y también pueden
concentrarse en grupos. Se componen de tejido linfático dividido en
compartimentos mediante tabiques de tejido conjuntivo o trabéculas. La
linfa de la mayoría de tejidos u órganos fluye a través de uno o más
ganglios, donde se limpia y filtra antes de incorporarse a la circulación
venosa.

Toman el nombre de acuerdo a su ubicación:

 cervical
 inguinal
 axilar
 supraclavicular
Los ganglios presentan una ubicación establecida que se detecta mejor
cuando éstos se encuentran inflamados.

Dentro del ganglio se pueden distinguir dos regiones:

 Región Timo dependiente que presenta muchos linfocitos T. en


esta región los patógenos serán reconocidos.
 Región Timo independiente que carece de linfocitos T y son
conocidos como Centros Germinales de linfocitos B. En esta región
se producen anticuerpos luego que el patógeno ha sido
identificado en la región timo dependiente.
EL BAZO: es un órgano de consistencia blanda y de forma plana y
ovalada, con una longitud de unos 12 cm, y de unos 200 gr de peso. De
color rojo violáceo, se encuentra situado detrás del estómago y debajo
del diafragma, por encima y por delante del riñón izquierdo.
Su función principal es la destrucción de células sanguíneas rojas viejas,
producir algunas nuevas y mantener una reserva de sangre. Es el centro
de actividad del sistema inmune, siendo el mayor de los órganos del
sistema linfático en el ser humano. Una de sus funciones más
importantes en la defensa inmunitaria es ayudar a que el cuerpo limpie
y deseche los glóbulos blancos utilizados. También alberga varios
glóbulos blancos, que esperan las órdenes para salir a combatir una
infección.

VASOS LINFÁTICOS: transportan la linfa, que es un líquido


transparente que "baña" los tejidos corporales y ayuda así a eliminar a
los invasores o gérmenes. Los vasos transportan el líquido hacia los
ganglios linfáticos, los cuales pueden clasificar los antígenos para
empezar a combatirlos: transportan la linfa, que es un líquido
transparente que "baña" los tejidos corporales y ayuda así a eliminar a
los invasores o gérmenes. Los vasos transportan el líquido hacia los
ganglios linfáticos, los cuales pueden clasificar los antígenos para
empezar a combatirlos.
Nódulos Linfáticos
Son órganos linfoides que no presentan una ubicación específica Se
forman en el lugar de infección. Estos órganos jamás se van a encontrar
en animales notobióticos (animales que jamás han tenido contacto con
un patógeno).
Los nódulos linfáticos son estructuras pequeñas, reniformes (en forma
de frijol o habichuela) que se encuentran localizados a lo largo de los
vasos linfáticos, formando grupos en el cuello, axilas, abdomen e ingle.
Cada nódulo linfático contiene compartimientos especializados en donde
las células inmunes se congregan y encuentran a los antígenos.
Las células inmunes y las partículas extrañas ingresan a los nódulos
linfáticos a través de los vasos linfáticos aferentes o los vasos
sanguíneos pequeños de los nódulos linfáticos. Todos los linfocitos salen
de los nódulos linfáticos a través de los vasos linfáticos eferentes. Una
vez que se encuentran en el torrente sanguíneo, ellos son llevados a los
tejidos por todo el cuerpo. Ellos vigilan por todas partes en búsqueda de
antígenos extraños, después gradualmente regresan dentro del sistema
linfático para empezar el ciclo completo de nueva cuenta.

ADENOIDES: también se les conoce como amígdalas faríngeas, y son


dos masas de tejido linfoide, ubicadas cerca del orificio interno de las
fosas nasales, donde la nariz y la boca se unen. Forman parte de las
amígdalas y comienzan a crecer a los 9 meses de edad.
Durante la infancia son un órgano de defensa que puede sufrir
enfermedades y su tejido es similar al de los nódulos linfáticos. Por estar
ubicados cerca de la entrada de la vía respiratoria, están en la capacidad
de atrapar los gérmenes que causan las infecciones.
Se piensa que debido a esta función trabajan como parte del sistema
inmune, filtrando y ayudando a atrapar a microorganismos que
amenazan con invadir el cuerpo, produciendo anticuerpos.

AMÍGDALAS PALATINAS: Igual que los Adenoides, las Amígdalas son


masas de tejido muy parecidas a los nódulos linfáticos. Son las dos
masas que podemos ver en la parte posterior de la garganta. Su
superficie no es uniforme, pues presentan una serie de orificios llamados
criptas amigdalares. Aunque las amígdalas están constituidas para
proteger al organismo de infecciones adquiridas a través de las vías
respiratorias, son ellas las que paradójicamente se convierten
constantemente en la sede de muchas infecciones.

¿Y cómo funciona esto?


El tejido linfático del que están constituidos estos órganos, contiene
células que al ser estimuladas por la presencia de sustancias
perjudiciales para el organismo (antígenos), responden produciendo
sustancias protectoras llamadas anticuerpos. De ésta confrontación
entre antígeno y anticuerpo, surge la inflamación: amígdalas
enrojecidas, agrandadas y dolorosas.

PLACA DE PEYER

Unos de los pocos grupos de ganglios linfáticos de la parte inferior del


intestino delgado; ofrecen protección frente a microbios ingeridos con la
comida.

En su mayor parte, estos folículos linfoides están formados


principalmente por linfocitos B, que sintetizan inmunoglobulinas A (IgA).
Estas IgA a su vez van a realizar una función muy importante de
inmunidad (exclusión inmunológica),sirviendo de barrera ante agentes
patógenos que atraviesen estas paredes para que estos últimos puedan
ser procesados por las células presentadoras de antígenos (CPA) y
presentados a los linfocitos T, desencadenando una respuesta inmune.

Además de los ganglios linfáticos y el bazo, los linfocitos se encuentran


en muchos tejidos, bien diseminados o en forma de agregados.
Situados bajo la mucosa de los tractos respiratorios y gastrointestinal,
hay agregados de linfocitos y células accesorias que se asemejan a los
ganglios linfáticos en cuanto a estructura y función. Entre estos
agregados se incluyen las placas de Peyer en la lámina propia del
intestino delgado, las amígdalas en la faringe y los folículos linfoides en
la submucosa del apéndice y en toda la extensión de las vías aéreas
superiores. El tejido linfoide de estas zonas constituye el Sistema
inmunitario de las mucosas.

APÉNDICE: según estudios recientes se encontró que el apéndice


produce y protege gérmenes positivos para el intestino humano. Este
estudio dice que la función del apéndice está relacionada con la cantidad
masiva de bacteria que habita en el sistema digestivo del ser humano;
de hecho, se dice que en un cuerpo normal, hay mas bacterias que
células humanas, la mayoría de esas bacterias son buenas y ayudan a
digerir la comida. En caso de que ocurra un cólera o una enfermedad
relacionada con las amebas, la función del apéndice es ayudar a re
iniciar el sistema digestivo a punta de bacterias benéficas.
Desde hace tiempo se sabe que el apéndice contiene gran cantidad de
tejido del sistema inmune, nódulos linfoides llenos de linfocitos. El
apéndice sobresale de una protuberancia en el intestino grueso
denominada ciego. Forma una bolsa estrecha del tamaño de un dedo.
No parece participar en la digestión de los alimentos, pero quizá ayude
al intestino a combatir enfermedades. Está lleno de tejidos productores
de células inmunitarias. Cuando se extirpa el apéndice, otros tejidos
productores de células inmunitarias en el ciego y otras partes pueden
compensar la pérdida.
LAS 10 SEÑALES DE DEFICIENCIAS INMUNOLÓGICAS
PRIMARIAS:
1) Ocho o más infecciones de oído distintas en un año.
2) Dos o más infecciones serias de sinusitis en un año.
3) Dos o más meses con antibióticos y con poco efecto.
4) Dos o más neumonías en un año.
5) Un niño que no sube de peso o que no crezca adecuadamente.
6) Abscesos recurrentes profundos en la piel o en otros órganos.
7) Infecciones por hongo en la boca o en la piel después del año de
edad.
8) Que necesite antibióticos intravenosos para eliminar la infección.
9) Dos o más infecciones graves como meningitis, osteomelitis, o
sepsis.
10) Historia en la familia de deficiencias inmunológicas primarias.

NUTRIENTES DIRECTAMENTE RELACIONADOS CON EL SISTEMA


INMUNOLÓGICO

La alimentación equilibrada es ideal para mantener este sistema


completamente sano, se deben consumir carnes magras, frutas,
vegetal, cereal y lácteo. En el mercado contamos con yogures a base de
lactobacillus que aumenta significativamente las defensas y que puede
incluirlos en su dieta. Y hay plantas medicinales como la equinácea, la
uña de gato, cerezas, polen que se pueden agregar en el desayuno y
que son muy buenos estimulantes del sistema inmunológico.

No olvide practicar actividad física con regularidad, ya que mejora el


estado de la médula ósea, evite el estrés y de esta manera siempre
podrá mantener sus defensas altas.

Vitamina C: aumenta la producción de interferón


(sustancia celular que impide a una amplia gama de
virus provocar infecciones), por lo que la inmunidad se
puede potenciar. Además, esta vitamina es necesaria
para formar colágeno, un componente esencial de las
membranas de las células, por lo que la vitamina C
contribuye al mantenimiento de las barreras VITAMINA
Naturales contra las infecciones.
Fuentes alimentarias: Guayaba, kiwi, mango, piña, caqui, cítricos,
melón, fresas, bayas, pimientos, tomate, verduras de la familia de la
col, frutas y hortalizas en general.

Vitamina E: diversos estudios han demostrado que aumenta la


respuesta inmunológica (se administró 200 mg/día de esta vitamina a
personas que no seguían una alimentación sana y con defensas bajas, y
su respuesta inmunológica mejoro notablemente).
GLOSARIO
Anginas: inflamación de las amígdalas y la faringe.
Anticuerpos: son unas proteínas en forma de Y producidas por el
sistema inmunológico para identificar y neutralizar las sustancias
dañinas y extrañas al cuerpo, llamadas antígenos.
Antígenos: es una sustancia que desencadena la formación de
anticuerpos y puede causar una respuesta inmunitaria.[]
Basofilos: Tipo de glóbulo blanco que segrega sustancias
anticoagulantes y participa en el control de la inflamación.
Bazo: Órgano del sistema linfático que participa en el sistema
sanguíneo. Tiene funciones Inmunitarias: filtra la sangre para
neutralizar los antígenos y agentes extraños; Hemáticas: actúa como
reservorio de sangre y en él se destruyen los glóbulos rojos viejos o en
mal estado.
Bilobulado: que se divide en dos lóbulos
Biometrías: La biometría es el estudio de métodos automáticos para el
reconocimiento único de humanos basados en uno o más rasgos
conductuales o físicos intrínsecos
Citocinas: son proteínas que regulan la función de las células que las
producen u otros tipos celulares. Son los agentes responsables de la
comunicación intercelular, inducen la activación de receptores
específicos de membrana.
Complemento: grupo de proteínas séricas involucradas en el control de
la inflamación, activación de fagocitos y ataque lítico a membranas
celulares.
Encefalitis: Las encefalitis son un conjunto de enfermedades
producidas por una inflamación del encéfalo.
Eosinofilo: Un eosinófilo es un leucocito de tipo granulocito pequeño
derivado de la médula ósea.
Fagocitos: Célula que es capaz de rodear, engullir y digerir
microorganismos y detritus celulares
Gammaglobulinas: es tipo de globulina ubicada en el plasma
sanguíneo. El principal tipo de gamma globulina es el de los anticuerpos
o inmunoglobulinas

Glándulas sebáceas: están situadas en la dermis media y formadas


por células llenas de lípidos que se desarrollan embriológicamente en el
cuarto mes de gestación, como una gemación epitelial del folículo piloso.
Globulos blancos: son un conjunto heterogéneo de células sanguíneas
que son los efectores celulares de la respuesta inmunitaria, así
intervienen en la defensa del organismo contra sustancias extrañas o
agentes infecciosos (antígenos). Se originan en la médula ósea y en el
tejido linfático.

Globulos rojos: son los elementos formes cuantitativamente más


numerosos de la sangre

Granulocitos: son un tipo de glóbulo blanco que incluye neutrófilos,


eosinófilos y basófilos. Se denominan granulocitos debido a que están
compuestos de pequeños gránulos que contienen proteínas importantes.

Hematíes: son los glóbulos rojos que las células sanguíneas que
contienen en su interior la hemoglobina.
Hematopoyesis: La hematopoyesis o hemopoyesis es el proceso de
formación, desarrollo y maduración de los elementos formes de la
sangre (eritrocitos, leucocitos y plaquetas) a partir de un precursor
celular común e indiferenciado conocido como célula madre
hematopoyética pluripotencial o stem cell.
Hepatitis: es una afección o enfermedad inflamatoria que afecta al
hígado. Su causa puede ser infecciosa (viral, bacteriana, etc.),
inmunitaria (por autoanticuerpos, hepatitis autoinmune) o tóxica (por
ejemplo por alcohol, venenos o fármacos). También es considerada,
dependiendo de su etiología, una enfermedad de transmisión sexual.
Impétigo: El impétigo, una infección cutánea contagiosa que
generalmente cursa con ampollas o úlceras en cara, cuello, manos, y
área de pañal es una de las infecciones cutáneas más frecuentes en la
población infantil.
Infecciones: es el término clínico para la colonización de un organismo
huésped por especies exteriores.
Inmunoglobulinas: Proteína plasmática sintetizada por los linfocitos B
maduros y las células plasmáticas, en respuesta a la estimulación por un
antígeno, y que actúa como anticuerpo, para la defensa específica del
organismo.
Linfa: La linfa es un líquido corporal que recorre los vasos linfáticos y
generalmente carece de pigmentos.
Linfocitos B: son los leucocitos de los cuales depende la inmunidad
mediada por anticuerpos con actividad específica de fijación de
antígenos.
Linfocitos T: o células T pertenecen al grupo de leucocitos que son
conocidos como linfocitos. Estas células tienen núcleos de forma ovoide
que ocupan la mayoría del espacio intracelular.
Linfocitos: Son los glóbulos blancos o leucocitos de menor tamaño y las
células del sistema inmunológico especializadas en regular la inmunidad
adquirida. Se localizan en los ganglios linfáticos. Los linfocitos son los
encargados de la producción de anticuerpos y de la destrucción de
células defectuosas.
Lisozima: Enzima lítica existente en las lágrimas, moco nasal y en la
mayoría de los tejidos y secreciones
Macrófagos: son unas células del sistema inmunitario, que se localizan
en los tejidos procedentes de la emigración desde la sangre a partir de
un tipo de leucocito llamado monocito.
Mastocitos: o células cebadas se originan en las células madre de la
médula ósea, actuando en la mediación de procesos inflamatorios.
Medula ósea: La médula ósea es un tipo de tejido que se encuentra en
el interior de los huesos largos, vértebras, costillas, esternón, huesos
del cráneo, cintura escapular y pelvis.
Meningitis: Es un la hinchazón e irritación (inflamación) de las
membranas que cubren el cerebro y la médula espinal.
Microglia: Células del sistema nervioso central que, a diferencia de las
células gliales, no derivan del tubo neural sino del mesodermo. Son
migratorias y realizan una función de fagocitosis.
Molécula: es una partícula neutra formada por un conjunto de átomos
ligados por enlaces covalentes (en el caso del enlace iónico no se
consideran moléculas, sino redes cristalinas)
Monocitos: Son las células defensivas de mayor tamaño. Después de
viajar por la sangre llegan al tejido conectivo, donde se convierten en
macrófagos. Su función consiste en fagocitar microorganismos y restos
celulares, rodeándolos con sus pseudópodos.
Neutrofilos: son un tipo de glóbulo blanco, de tipo de granulocito, cuya
principal función es fagocitar y destruir a bacterias y participar en el
inicio del proceso inflamatorio.
Nódulos linfáticos: son un depósito de tejido linfático, incluido en
fibras elásticas y músculo liso y que, a diferencia de los ganglios
linfáticos, no tienen una cápsula de tejido conectivo.
Osteomielitis: es una infección de la cortical y medular del hueso,
generalmente de origen bacteriano, aunque puede estar producida por
cualquier microorganismo.
Otitis: es la inflamación de la capa mucosa que recubre el oído medio
asociada a una secreción acumulada que suele producir dolor.
Patógenos: agente biológico patógeno (del griego pathos, enfermedad
y genein, engendrar) es toda aquella entidad biológica capaz de producir
enfermedad o daño en la biología de un huesped (humano, animal,
vegetal, etc.) sensiblemente.
Péptidos: son un tipo de moléculas formadas por la unión de varios
aminoácidos mediante enlaces peptídicos.
Plaquetas: Partícula (no es una célula) que participa en la coagulación
de la sangre. Las plaquetas son necesarias para taponar rápidamente
las heridas e impedir hemorragias. Se fabrican en la médula ósea
Polimorfonucleares: Que tiene un núcleo con varias lobulaciones o
segmentos, unidos por un fino filamento.
Sinovial: La membrana sinovial es la membrana tisular interna que
recubre una articulación y secreta líquido sinovial que lubrica dicha
articulación.
Tejido Adiposo: Tejido formado por células que contienen
exclusivamente grasa.
Tejidos: son aquellos materiales constituidos por un conjunto
organizado de células, con sus respectivos orgánulos iguales o de unos
pocos tipos, diferenciadas de un modo determinado.
Timo: es un órgano del sistema linfático, sistema respiratorio y
endocrino, y constituye uno de los controles centrales del cerebro en el
organismo.
Timopoyetina: Hormona polipeptídica aislable a partir de extractos de
timo. Es producida por las células epiteliales y produce la diferenciación
de las células primitivas linfoides a linfocitos T. Existen dos tipos I y II
funcionalmente equivalentes.
Timosina: es el nombre de un grupo de proteínas de unión a actina
que, además, intervienen en el desarrollo de las células del sistema
inmune
Tiroides: Se dice de una glándula endocrina situada en el cuello,
delante y a los lados de la tráquea, que produce la tiroxina y la
calcitonina

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