LOS PROTOZOOS

Características y clasificación

El reino Protoctistas incluye una gran variedad de organismos eucariotas que no presentan tejidos ni
órganos. Pertenecen a este reino los protozoos y las algas.

Características de los protozoos

Los protozoos pueden presentar formas muy variadas y son de tamaño microscópico. Son organismos
heterótrofos que se alimentan de microorganismos, como bacterias, algas y otros protozoos, o de
restos de materia orgánica. Suelen ser organismos de vida libre. Sobre todo, habitan en medios
acuáticos, tanto de agua dulce como de agua salada, aunque también se encuentran en medios
terrestres muy húmedos. Hay protozoos que viven en el interior de otros organismos a los que les
pueden producir beneficios o enfermedades. En este último caso se dice que son parásitos.
Formas de locomoción

La mayoría de los protozoos son móviles. Para desplazarse presentan diferentes estructuras como:

- Pseudópodos o falsos pies: son prolongaciones del citoplasma que se extienden y contraen.
- Cilios: son estructuras muy numerosas que rodean la superficie de la célula. Los protozoos que
tienen cilios se desplazan gracias al movimiento coordinado de los mismos.
- Flagelos: son estructuras alargadas que aparecen en número reducido, uno o dos por célula. El
desplazamiento se produce cuando los microorganismos agitan los flagelos.

Pero algunas especies son sésiles, es decir, se fijan al sustrato mediante una estructura llamada
pedúnculo. Otros protozoos, como los esporozoos, carecen de estructuras locomotoras.

Reproducción
Los protozoos se reproducen generalmente de forma asexual por bipartición. La célula inicial se divide
en dos células hijas; durante la división los componentes de la célula original se reparten entre las dos
nuevas células.

Clasificación de los protozoos

Se clasifican en cuatro grandes grupos:

• Flagelados: hay especies de vida libre que abundan en medios acuáticos y forman parte del
plancton. Otras son parásitas, como el tripanosoma, y viven en el interior de otros seres vivos.
• Ciliados: algunos son móviles, como el paramecio, y otros sésiles, como la vorticela, que utiliza
los cilios para alimentarse.
• Rizópodos: son protozoos muy sencillos que se mueven y capturan el alimento mediante
pseudópodos. Pertenecen a este grupo las amebas, que habitan de forma libre en medios
acuáticos, pero también pueden vivir en el interior del cuerpo humano sin causar perjuicios o
pueden ser parásitos y producir alguna enfermedad.
• Esporozoos: son microorganismos que carecen de estructuras locomotoras y todos sus
miembros son parásitos. Son protozoos muy simples que infectan a todo tipo de animales,
como, por ejemplo, el Plasmodium.