Está en la página 1de 52

DERECHO EMPRESARIO 1 – SEGUNDO PARCIAL

Bolilla 5: DERECHO DE FAMILIA


Punto Nº 1: EL DERECHO DE FAMILIA
Derecho de familia:
Es el conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones familiares.

Punto Nº 2: MATRIMONIO
Interpretación y aplicación de las normas:
Los integrantes de las familias cuyo origen sea un matrimonio constituido por dos (2) personas del mismo sexo, así
como un matrimonio constituido por personas de distinto sexo, tendrán los mismos derechos y obligaciones. Ninguna
norma del ordenamiento jurídico argentino podrá ser interpretada ni aplicada en el sentido de limitar, restringir,
excluir o suprimir el ejercicio o goce de los mismos derechos y obligaciones, tanto al matrimonio constituido por
personas del mismo sexo como al formado por dos (2) personas de distinto sexo".

Efectos:
El matrimonio origina efectos personales y patrimoniales. Entre los efectos personales, se enumeran ciertos
derechos y deberes a cargo de los contrayentes, los cuales varios de ellos generan efectos jurídicos. Son derechos y
deberes jurídicos la cooperación, la asistencia y la convivencia.
El derecho-deber de asistencia es reconocido por el Código en los diferentes momentos de la vida matrimonial:
durante la plena vigencia de la unión conyugal, durante la separación de hecho de los cónyuges y con posterioridad a
su ruptura por divorcio.
Pautas para la fijación de alimentos:
Durante la vida en común y la separación de hecho, para la cuantificación de los alimentos se deben tener en
consideración, entre otras, las siguientes pautas:
a. el trabajo dentro del hogar, la dedicación a la crianza y educación de los hijos y sus edades;
b. la edad y el estado de salud de ambos cónyuges;
c. la capacitación laboral y la posibilidad de acceder a un empleo de quien solicita alimentos;
d. la colaboración de un cónyuge en las actividades mercantiles, industriales o profesionales del otro cónyuge;
e. la atribución judicial o fáctica de la vivienda familiar;
f. el carácter ganancial, propio o de un tercero del inmueble sede de esa vivienda. En caso de ser arrendada, si el
alquiler es abonado por uno de los cónyuges u otra persona;
g. si los cónyuges conviven, el tiempo de la unión matrimonial;
h. si los cónyuges están separados de hecho, el tiempo de la unión matrimonial y de la separación;
i. la situación patrimonial de ambos cónyuges durante la convivencia y durante la separación de hecho.

El derecho alimentario cesa si desaparece la causa que lo motivó, el cónyuge alimentado inicia una unión
convivencial, o incurre en alguna de las causales de indignidad.

Punto Nº 3: RÉGIMEN PATRIMONIAL DEL MATRIMONIO: De Comunidad:


Se les reconoce a los cónyuges la posibilidad para optar entre el régimen de comunidad y el régimen de separación
de bienes.

Luciano Medina Página 1


Antes de celebrar el matrimonio, los cónyuges pueden elegir uno de los dos regímenes posibles, el de comunidad, o
el de separación de bienes, en el que no existen bienes gananciales, conservando el titular la libre administración y
disposición de los bienes adquiridos por él (que son personales) y respondiendo cada uno por lo suyo.
La opción pueden realizarla los cónyuges antes de la celebración del matrimonio, y también pueden efectuarla ya
casados, modificando el régimen inicial.
Si los cónyuges no optan por uno de los dos regímenes, el matrimonio queda sometido al régimen de comunidad. Es
decir, este régimen (el de comunidad) es de carácter supletorio.

Concepto:
Al celebrarse el matrimonio se forma una masa común de bienes que pertenece a los dos cónyuges, la cual se divide
entre ellos o sus sucesores cuando se disuelve el régimen matrimonial.

Bienes que forman esa “masa común”:

Bienes Propios:
Aportados por los esposos a la comunidad, sea porque fueron adquiridos antes de aquélla (inc. a) o porque el
derecho a los mismos nació con anterioridad a aquél (incs. g. h, i, 1 y o); bienes adquiridos a título gratuito durante la
comunidad (inc. b); los obtenidos en reemplazo de un bien propio por subrogación (Mes. c, d y e); los incorporados
por accesión a cosas o bienes propios (inc. j) y los obtenidos por aplicación del principio de accesoriedad (inc. k).
Se trata de una comunidad restringida a las ganancias
Los bienes que forman la “masa común” (bienes gananciales) son:
- Los bienes muebles e inmuebles adquiridos después de celebrado el matrimonio a título oneroso (salvo que lo
hayan sido por causa o título anterior al matrimonio, por permuta con un bien propio, con el producto de su venta o
con dinero propio).
Quedan excluidos todos los bienes adquiridos antes del matrimonio y los adquiridos después a título gratuito, por
título o causa anterior al matrimonio, por permuta con un bien propio, o con el producto de su venta o con dinero
propio (bienes propios).

Bienes Gananciales:
Son aquellos incorporados al patrimonio de uno, otro o ambos esposos durante el régimen de comunidad por causa
onerosa, siempre que no corresponda calificarlos como propios, presumiéndose la cualidad de ganancial de todos los
bienes existentes a la culminación del régimen.
Es importante aclarar que, si bien se habla de “bienes gananciales de la comunidad” estos se subdividen en “bienes
gananciales del marido” y “bienes gananciales de la mujer”.
Cada cónyuge tiene, en principio, sobre sus bienes gananciales la libre administración y disposición hasta el
momento de la extinción de la comunidad.

Si no se puede probar que un bien es propio, la ley presume que es un bien ganancial.

Asentimiento conyugal:
Ninguno de los cónyuges puede, sin el asentimiento del otro, disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni
de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera de ella. El que no ha dado su asentimiento puede
demandar la nulidad del acto o la restitución de los muebles dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo
conocido, pero no más allá de seis meses de la extinción del régimen matrimonial. La vivienda familiar no puede ser

Luciano Medina Página 2


ejecutada por deudas contraídas después de la celebración del matrimonio, excepto que lo hayan sido por ambos
cónyuges conjuntamente o por uno de ellos con el asentimiento del otro.

Prueba del carácter de los bienes:


Se presume, excepto prueba en contrario, que son gananciales todos los bienes existentes al momento de la
extinción de la comunidad. Respecto de terceros, no es suficiente prueba del carácter propio la confesión de los
cónyuges. Cada uno de los cónyuges puede demostrar la propiedad exclusiva de un bien por todos los medios de
prueba.
Los bienes cuya propiedad exclusiva no se pueda demostrar, se presume que pertenecen a ambos cónyuges por
mitades.

Modificación del régimen:


Después de la celebración del matrimonio, el régimen patrimonial puede modificarse por convención de los
cónyuges. Esta convención puede ser otorgada después de un año de aplicación del régimen patrimonial,
convencional o legal, mediante escritura pública. Para que el cambio de régimen produzca efectos respecto de
terceros, debe anotarse marginalmente en el acta de matrimonio.
Los acreedores anteriores al cambio de régimen que sufran perjuicios por tal motivo pueden hacerlo declarar
inoponible a ellos en el término de un año a contar desde que lo conocieron.

Administración de los bienes:


Bienes Propios:
Cada uno de los cónyuges tiene la libre administración y disposición de sus bienes propios, excepto que requieran el
asentimiento del otro cónyuge para disponer sobre los derechos de la vivienda familiar y los muebles indispensables
de ella.

Bienes Gananciales:
La administración y disposición de los bienes gananciales corresponde al cónyuge que los ha adquirido. Sin embargo
es necesario contar con el correspondiente asentimiento del cónyuge no titular para enajenar o gravar (típicos actos
de disposición) bienes registrables, acciones nominativas no endosables y no cartulares salvo que estén debidamente
autorizadas para la oferta pública, participaciones en sociedad y establecimientos comerciales, industriales o
agropecuarios. El asentimiento es necesario no sólo para estos actos de disposición, sino para todos aquellos actos
que prometen esta disposición. La falta de asentimiento da lugar a peticionar la nulidad y su negativa, a solicitar la
correspondiente autorización judicial de manera supletoria.
Si los bienes fueron adquiridos conjuntamente, la administración y disposición de dichos bienes será conjuntamente.

Deudas de los cónyuges:


Cada uno de los cónyuges responde frente a sus acreedores con todos sus bienes propios y los gananciales por él
adquiridos. Por los gastos de conservación y reparación de los bienes gananciales responde también el cónyuge que
no contrajo la deuda, pero sólo con sus bienes gananciales.

Causas de extinción de la comunidad:


Causas. La comunidad se extingue por:
a) la muerte comprobada o presunta de uno de los cónyuges;
b) la anulación del matrimonio putativo;
c) el divorcio;

Luciano Medina Página 3


d) la separación judicial de bienes;
e) la modificación del régimen matrimonial convenido.

Punto Nº 4: RÉGIMEN DE SEPARACIÓN DE BIENES


Concepto:
Este régimen, como su propia denominación lo expresa, consiste en que cada uno de los cónyuges tiene la libre
administración y disposición de sus bienes personales y se hace responsable por las deudas que contrae; es decir, no
se forma ninguna comunidad y, por ende, se carece de toda distinción entre bienes gananciales y propios, siendo
todos bienes personales de cada uno de los cónyuges.

Administración de los bienes:


Cada cónyuge tiene la libre administración y disposición de sus bienes personales.
Cada uno de ellos responde por las deudas y obligaciones por él contraídas, excepto que esas deudas y obligaciones
obtenidas por uno de ellos sean satisfacer las necesidades ordinarias del hogar, o aplicadas para el sostenimiento y la
educación de los hijos comunes.

Excepciones: Asentimiento:
Actos que requieren asentimiento:
Ninguno de los cónyuges puede, sin el asentimiento del otro, disponer de los derechos sobre la vivienda familiar, ni
de los muebles indispensables de ésta, ni transportarlos fuera de ella. El que no ha dado su asentimiento puede
demandar la nulidad del acto o la restitución de los muebles dentro del plazo de caducidad de seis meses de haberlo
conocido, pero no más allá de seis meses de la extinción del régimen matrimonial. La vivienda familiar no puede ser
ejecutada por deudas contraídas después de la celebración del matrimonio, excepto que lo hayan sido por ambos
cónyuges conjuntamente o por uno de ellos con el asentimiento del otro.

Cese del Régimen Patrimonial:


Las formas por las que puede cesar el régimen de separación de bienes:
a) en forma convencional (por modificación del régimen legal de comunidad debidamente registrada);
b) por decisión judicial (divorcio), o
c) por muerte comprobada o presunta de los cónyuges.

Punto Nº 5: UNIONES CONVIVENCIALES


Concepto:
Es la unión basada en relaciones afectivas de carácter singular (no pueden mantenerse dos uniones convivenciales a
la vez, ni tampoco estar unido en matrimonio y en unión convivencial), pública, notoria (que no se trate de una unión
oculta o clandestina), estable y permanente (que la unión se prolongue a través del tiempo) de dos personas que
conviven y comparten un proyecto de vida común, sean del mismo o de diferente sexo.

Requisitos:
El reconocimiento de los efectos jurídicos previstos por este Título a las uniones convivenciales requiere que:
a) los dos integrantes sean mayores de edad;
b) no estén unidos por vínculos de parentesco en línea recta en todos los grados, ni colateral hasta el segundo grado;
c) no estén unidos por vínculos de parentesco por afinidad en línea recta;

Luciano Medina Página 4


d) no tengan impedimento de ligamen ni esté registrada otra convivencia de manera simultánea;
e) mantengan la convivencia durante un período no inferior a dos años.

Registración de la unión convivencial:


La existencia de la unión convivencial, su extinción y los pactos que los integrantes de la pareja hayan celebrado, se
inscriben en el registro que corresponda a la jurisdicción local, sólo a los fines probatorios. No procede una nueva
inscripción de una unión convivencial sin la previa cancelación de la preexistente. La registración de la existencia de la
unión convivencial debe ser solicitada por ambos integrantes.

Prueba de la unión convivencial:


Además de tener que cumplir con los requisitos exigidos, el interesado en hacer valer la unión convivencial deberá
acreditarla, para ello el nuevo Código acepta cualquier medio de prueba, entre ellos la registración.
La inscripción en el Registro de uniones convivenciales es prueba suficiente para su existencia.

Efectos de las uniones convivenciales:


Relaciones patrimoniales:
Las relaciones patrimoniales entre los convivientes se rigen por lo acordado en el pacto de convivencia.
Si no hubiese pacto - o existiendo nada dijera – cada conviviente administrará, y dispondrá de los bienes de su
titularidad, excepto los derechos derivados de la vivienda familiar y de los muebles indispensables que se encuentran
en ella.

Deber de asistencia:
Los convivientes se deben asistencia moral y material durante la convivencia.

Contribución a los gastos del hogar:


Los convivientes tienen obligación de contribuir a los gastos domésticos en proporción a sus recursos. El que no
cumpla con este deber podrá ser demandado judicialmente por el otro para que lo haga.
El trabajo en el hogar debe computarse como contribución a los gastos domésticos.

Responsabilidad por las deudas frente a terceros:


Cada uno de los convivientes sólo deberá responder por las obligaciones contraídas, por lo tanto, ninguno responde
por las obligaciones del otro.
Excepción: los convivientes son solidariamente responsables por las deudas que uno de ellos hubiera contraído con
terceros cuando el contenido de ella estuviera relacionado con:
1) Las necesidades ordinarias del hogar: ej: comprar muebles para el hogar, deudas de asistencia médica del grupo
familiar, pagar el alquiler del inmueble donde vive la familia, comprar comestibles, etc.
2) El sostenimiento y la educación de los hijos: ej: pagar el colegio de los hijos, profesores particulares, etc.

Cese de la convivencia:
Causas del cese de la unión convivencial. La unión convivencial cesa:
a. por la muerte de uno de los convivientes;
b. por la sentencia firme de ausencia con presunción de fallecimiento de uno de los convivientes;
c. por matrimonio o nueva unión convivencial de uno de sus miembros;
d. por el matrimonio de los convivientes;
e. por mutuo acuerdo;
f. por voluntad unilateral de alguno de los convivientes notificada fehacientemente al otro;

Luciano Medina Página 5


g. por el cese de la convivencia mantenida. La interrupción de la convivencia no implica su cese si obedece a motivos
laborales u otros similares, siempre que permanezca la voluntad de vida en común.

Punto Nº 6: PARENTESCO
Concepto:
Parentesco es el vínculo jurídico existente entre personas en razón de la naturaleza, las técnicas de reproducción
humana asistida, la adopción y la afinidad.

Clases:

Parentesco por naturaleza:


Es el que existe entre dos personas de las cuales una desciende de la otra (ej: hijos-padres) o ambas descienden de
un antepasado común (ej: hermanos)

Parentesco por técnicas de reproducción asistida –TRA-:


Se origina a partir de la voluntad procreacional de las personas que se sometan a dichos tratamientos.

Parentesco por adopción:


Depende de que la adopción sea simple o plena. En la adopción plena, el adoptado requiere el mismo parentesco
que tendría un hijo del adoptante con todos los parientes de éste, extinguiéndose los vínculos jurídicos que lo unen
con su familia de origen (a excepción de los impedimentos matrimoniales).
La adopción simple sólo crea vínculo de parentesco entre el adoptado y el adoptante. No se destruyen las relaciones
de parentesco que el adoptado tiene con su familia de origen.

Parentesco por afinidad:


Es el que existe entre la persona casada y los parientes de su cónyuge (ej: esposo-padres de la esposa).
El parentesco por afinidad no crea vínculo jurídico alguno entre los parientes de los cónyuges (ej: padres del esposo-
padres de la esposa).

Computo del parentesco:


Concepto:
El computo del parentesco se establece por líneas y grados.
Grado:
Es el vínculo entre dos personas que pertenecen a generaciones sucesivas.
Esto implica que entre ascendientes y descendientes haya tantos grados como generaciones que los separan (ej: el
hijo con relación al padre es pariente en 1º grado, el abuelo con relación al nieto es pariente en 2º grado).
Línea:
Es la serie ininterrumpida de grados.
Hay dos tipos de líneas: Recta y colateral.
Línea recta:
A la que une a los ascendientes y descendientes. La forman los abuelos, padres, hijos, nietos, etc.
- Ascendente: es la que se computa en relación a los antepasados (ej: el padre con relación al hijo es pariente en línea
recta ascendente).
- Descendente: es la que se computa en relación a los descendientes (ej: el hijo con relación al padre es pariente en
línea recta descendente).

Luciano Medina Página 6


Línea Colateral:
A la que une a los descendientes de un tronco común. La forman los hermanos, primos, sobrinos, tíos, etc.
Hermanos bilaterales y unilaterales:
Se denominan “hermanos bilaterales” los que tienen los mismos padres y “hermanos unilaterales” los que proceden
de un mismo ascendiente en primer grado, difiriendo en el otro (ej: Esteban y Gabriel son hijos de diferente madre
pero del mismo padre).

Bolilla 6: DE LAS OBLIGACIONES


Punto Nº 1: DERECHOS PERSONALES U OBLIGACIONES
Concepto:
La obligación es una relación jurídica en virtud de la cual el acreedor tiene el derecho a exigir del deudor una
prestación destinada a satisfacer un interés lícito y, ante el incumplimiento, a obtener forzadamente la satisfacción
de dicho interés.

Buena fe:
Deudor y acreedor deben obrar con cuidado, previsión y según las exigencias de la buena fe.

Luciano Medina Página 7


Requisitos de las obligaciones:
1) Vínculo.
2) Existencia de sujetos (Acreedor o sujeto activo – Deudor o sujeto pasivo), los cuales pueden ser personas humanas
o personas jurídicas, o una persona humana y una persona jurídica.
3) Objeto – Prestación: conducta debida por el deudor al acreedor, esta conducta puede consistir en dar, hacer o no
hacer.
4) Causa – Fuente.

Fuentes de las obligaciones:


- Gestión de negocios:
En ocasiones, una persona que no es representante legal de otra, ni está obligada por un mandato, realiza
espontáneamente una gestión útil para esta última. No hay acuerdo de voluntades y, más precisamente, no hay
encargo o autorización para la realización del negocio o de la acción, que entonces el gestor asume
espontáneamente. Es así que esta figura supone una actuación en interés y por cuenta de un tercero, sin haber
recibido mandato suyo y sin estar obligado por ley al efecto.
Ejemplo: el pago de una deuda ajena, el ingreso a la casa del vecino ausente para el cierre del dispositivo de agua
luego de haber estallado una cañería, el hecho de alimentar a un animal de otro, etc.
- Empleo útil:
Quien, sin ser gestor de negocios ni mandatario, realiza un gasto, en interés total o parcialmente ajeno, tiene
derecho a que le sea reembolsado su valor, en cuanto haya resultado de utilidad, aunque después ésta llegue a cesar.
El reembolso incluye los intereses, desde la fecha en que el gasto se efectúa.
Ejemplo: si el dueño de una finca adquiere costosa tecnología especial para riego y al aplicarla logra administrar agua
suficiente para sus propias plantaciones y las de su vecino, bien podrá él reclamar al vecino beneficiado el reembolso
proporcional de los gastos realizados. Ello será así, aunque la única intención del acreedor haya sido hacer una
inversión productiva para su propio campo.

- Enriquecimiento sin causa:


Tiene lugar cuando se produce un desplazamiento patrimonial de una persona a otra, de tal modo que esta última
incrementa su activo o disminuye su pasivo, y aquélla se empobrece, sin una causa jurídica.
La norma dispone la reparación del daño patrimonial causado en tal supuesto.
Si el enriquecimiento consiste en la incorporación a su patrimonio de un bien determinado, debe restituirlo si
subsiste en su poder al tiempo de la demanda.

- Pago indebido:
Si no hay razón para el pago efectuado, éste no produce efectos extintivos pues no existe obligación antecedente a
cumplir. A su vez, quien efectuó el desembolso tiene derecho al recupero y nace la obligación de restituir, a cargo de
quien recibió la prestación.
Ejemplo: pago la cuota de una deuda que ya terminé de pagar, pero que desconocía.

- Declaración unilateral de voluntad:


Se da cuando una persona por su exclusiva voluntad crea una obligación y se constituye en deudor de una prestación
a favor de otra persona en ese momento desconocida.
Ejemplo: promesa de recompensa a favor de quien encuentre una cosa extraviada (una mascota).

Otras Fuentes:

Luciano Medina Página 8


Factores de Atribución:
Los dos factores de atribución de responsabilidad subjetivos previstos expresamente son la culpa y el dolo, aunque
también se regulan supuestos especiales de culpa agravada.
En la culpa no media intención de dañar; en cambio en el dolo el daño se produce, en el ámbito contractual o en el
extracontractual, de manera intencional o con manifiesta indiferencia por los derechos ajenos. Las tres modalidades
de la culpa son: la imprudencia, la negligencia y la impericia en el arte o profesión.

Elementos:
Objeto: es una prestación.
Requisitos del objeto:
1) Material y jurídicamente posible: la conducta del deudor debe ser factible de cumplimiento.
2) Lícito: que no sea contrario al derecho.
3) Determinado o determinable: la prestación debe estar determinada al momento del nacimiento de la obligación, o
poder ser determinada en un momento posterior, antes del plazo fijado para el cumplimiento.
4) Susceptible de valor económico: la prestación debe ser susceptible de valor económico.

Contenido económico:
La prestación debe ser susceptible de valoración económica y debe corresponder a un interés patrimonial o
extrapatrimonial del acreedor.

Causa:
Para que exista el deber del deudor de cumplir con una prestación a favor del acreedor, debe existir un hecho,
reconocido por el Derecho, como justificativo suficiente de dicho ligamen. Es decir, el deber debe tener una causa.
No hay obligación sin causa.

Prueba:
El Código determina diversas reglas de prueba en relación con la obligación, de profundas implicancias prácticas.
Establece que la existencia de la obligación no se presume, que la interpretación en relación con su existencia y
extensión de los deberes es restrictiva y que, probada su existencia, se presume que nació de una causa legítima,
salvo prueba en contrario.

Efectos con relación al acreedor:


La obligación da derecho al acreedor a:
a) emplear los medios legales para que el deudor le procure aquello a que se ha obligado;
b) hacérselo procurar por otro a costa del deudor;
c) obtener del deudor las indemnizaciones correspondientes. Si el incumplimiento de la obligación, cualquiera sea su
fuente, deriva en litigio judicial o arbitral, la responsabilidad por el pago de las costas, incluidos los honorarios
profesionales, de todo tipo, allí devengados y correspondientes a la primera o única instancia, no debe exceder del
veinticinco por ciento del monto de la sentencia, laudo, transacción o instrumento que ponga fin al diferendo. Si las
regulaciones de honorarios practicadas conforme a las leyes arancelarias o usos locales, correspondientes a todas las
profesiones y especialidades, superan dicho porcentaje, el juez debe proceder a prorratear los montos entre 24 los
beneficiarios. Para el cómputo del porcentaje indicado, no se debe tener en cuenta el monto de los honorarios de los
profesionales que han representado, patrocinado o asistido a la parte condenada en costas.

Luciano Medina Página 9


Efectos con relación al deudor:
El cumplimiento exacto de la obligación confiere al deudor el derecho a obtener la liberación y el de rechazar las
acciones del acreedor.

Punto Nº 2: CLASES DE OBLIGACIONES


Concepto:
Las obligaciones puede ser: de dar, de hacer, de no hacer.

De dar:
Las obligaciones de dar pueden ser:
a) de dar cosa cierta;
b) de género;
c) de dar bienes que no son cosas;
d) de dar dinero

Obligación de dar cosa cierta:


La obligación de dar cosa cierta es aquella en la cual el contenido de la prestación se encuentra perfectamente
determinado en su singularidad al momento de constituirse la obligación. Tienen por objeto la entrega de una cosa
determinada al momento de contraerse la obligación.
Ejemplo: auto Volkswagen Gol 5 puertas, modelo 2015.

Efectos:
El deudor de una cosa cierta está obligado a conservarla en el mismo estado en que se encontraba cuando contrajo
la obligación, y entregarla con sus accesorios, aunque hayan sido momentáneamente separados de ella.

Obligación de dar cosas ciertas para transferir el uso o la tenencia:


Remisión. Cuando la obligación de dar una cosa determinada tenga por objeto transferir solamente el uso o la
tenencia de ella, se aplican las normas contenidas en los títulos especiales.

Tradición:
El acreedor no adquiere ningún derecho real sobre la cosa antes de la tradición, excepto disposición legal en
contrario.
Mientras no se haga la tradición, el acreedor (ej: el comprador) sólo tiene un derecho personal contra el deudor (ej:
vendedor) para exigirle que cumpla, pero no un derecho real sobre la cosa.
Para la adquisición de los derechos reales es necesario un acto en particular:
El título: es el acto jurídico del que surge la voluntad de transmisión del derecho real por su titular, y la consecuente
y correlativa adquisición por otra persona.
El modo: acto que materializa lo determinado por el título y lo hace conocible por el tercero.

De hacer:
La obligación de hacer es aquella cuyo objeto consiste en la prestación de un servicio o en la realización de un hecho,
en el tiempo, lugar y modo acordados por las partes.
Ejemplo: pintar un cuadro.

Se distinguen claramente dos modalidades de la prestación:

Luciano Medina Página 10


Prestación de un servicio:
La prestación de un servicio puede consistir:
a) en realizar cierta actividad, con la diligencia apropiada, independientemente de su éxito. Las cláusulas que
comprometen a los buenos oficios, o a aplicar los mejores esfuerzos están comprendidas en este inciso;
b) en procurar al acreedor cierto resultado concreto, con independencia de su eficacia;
c) en procurar al acreedor el resultado eficaz prometido. La cláusula llave en mano o producto en mano está
comprendida en este inciso.
Si el resultado de la actividad del deudor consiste en una cosa, para su entrega se aplican las reglas de las
obligaciones de dar cosas ciertas para constituir derechos reales.

Realización de un hecho:
El obligado a realizar un hecho debe cumplirlo en tiempo y modo acordes con la intención de las partes o con la
índole de la obligación. Si lo hace de otra manera, la prestación se tiene por incumplida, y el acreedor puede exigir la
destrucción de lo mal hecho, siempre que tal exigencia no sea abusiva.

Incorporación de terceros:
La prestación puede ser ejecutada por persona distinta del deudor, a no ser que de la convención, de la naturaleza
de la obligación o de las circunstancias resulte que éste fue elegido por sus cualidades para realizarla personalmente.
Esta elección se presume en los contratos que suponen una confianza especial.
Las prestaciones de hacer pueden ser fungibles e infungibles. En las primeras el interés del acreedor se satisface con
la realización de la actividad debida, con total independencia de quién sea el sujeto que las realiza (por ejemplo:
cavar un pozo, pintar una pared, colocar una ventana); en las segundas, tal interés sólo se satisface si es el propio
deudor quien la práctica (por ejemplo la realización de un cuadro por un pintor determinado).

Ejecución forzada:
El incumplimiento imputable de la prestación le da derecho al acreedor a:
a) exigir el cumplimiento específico (en este caso, es el deudor quien será obligado, por las "vías legales" para
ejecutar la prestación en forma personal).
b) hacerlo cumplir por terceros a costa del deudor (el acreedor no puede quedar atado a la voluntad del deudor,
cuando el incumplimiento es imputable a este último. Por tales razones, puede a su elección obtener la satisfacción
de su interés mediante el cumplimiento por un tercero, lo que deberá ser soportado económicamente por el deudor
que no cumplió). Ejemplo: el obstetra no se presenta al parto, y el acreedor elige a otro médico para que haga la
práctica.
c) reclamar los daños y perjuicios (en el marco de la ejecución forzada, la situación presupone que la prestación aún
no se ha tornado imposible y que puede ser cumplida, tanto por el deudor como por un tercero).

De no hacer:
La prestación del deudor consiste en una inactividad, en una abstención, en un no hacer o tolerar una actividad
ajena.
Su incumplimiento imputable permite reclamar la destrucción física de lo hecho, y los daños y perjuicios.
Ejemplos: no poner un negocio en determinado lugar; no trabajar en otro canal; abstenerse de levantar una pared
más allá de cierta altura; etc.
En lo compatible, se les aplica el régimen de las obligaciones de hacer.

Obligaciones de dar sumas de Dinero:


Son las que tienen por objeto – desde el nacimiento de la obligación – la entrega de una suma de dinero.
Luciano Medina Página 11
La obligación es de dar dinero si el deudor debe cierta cantidad de moneda, determinada o determinable, al
momento de constitución de la obligación. Si por el acto por el que se ha constituido la obligación, se estipuló dar
moneda que no sea de curso legal en la República, la obligación debe considerarse como de dar cantidades de cosas y
el deudor puede liberarse dando el equivalente en moneda de curso legal.

Obligaciones dinerarias: son aquellas en las que el dinero está determinado o es determinable desde el inicio de la
obligación. En estos casos se pacta en moneda de curso legal y debe devolverse la misma cantidad de dinero, porque
rige el principio nominalista. En supuestos de inflación o deterioro monetario, se recurrirá a las obligaciones de valor,
o a los intereses impuros (que contemplan la compensación del uso del dinero más el deterioro monetario) o a las
obligaciones en moneda extranjera.

Obligaciones en moneda extranjera: la moneda extranjera no tiene carácter dinerario. Por el contrario es una cosa
no dineraria y por lo tanto si la obligación se pacta en moneda extranjera, es considerada como dar cantidades de
cosas. La obligación en moneda extranjera no está prohibida, como ocurre en otros países, sino que, por el contrario,
puede ser usada y así lo prevé el Código en numerosos supuestos (contratos bancarios). La obligación que tiene por
objeto una prestación en moneda extranjera, presenta el problema del pago. Conforme con el régimen del Código, la
regla es que el deudor tiene la opción de liberarse dando el equivalente en moneda de curso legal. Esta regla tiene las
siguientes excepciones: a) que las partes hayan pactado expresamente el pago en moneda extranjera y la renuncia a
la opción; b) que esté prevista expresamente otra solución (ej.: Contratos bancarios).

Obligación del deudor:


El deudor debe entregar la cantidad correspondiente de la especie designada.

Intereses:
Concepto:
Son los aumentos paulatinos que devengan las deudas dinerarias durante un tiempo dado, sea como precio por el
uso de un dinero ajeno, o como indemnización por el retardo en el cumplimiento de una obligación dineraria. En
definitiva, los intereses son los frutos de un determinado capital.

Clases de intereses:

Intereses compensatorios:
La obligación puede llevar intereses y son válidos los que se han convenido entre el deudor y el acreedor, como
también la tasa fijada para su liquidación. Si no fue acordada por las partes, ni por las leyes, ni resulta de los usos, la
tasa de interés compensatorio puede ser fijada por los jueces.
Son los que se pagan por el uso de dinero ajeno; son el precio o alquiler por usar dinero de otro.

Intereses moratorios:
A partir de su mora el deudor debe los intereses correspondientes. La tasa se determina:
a) por lo que acuerden las partes;
b) por lo que dispongan las leyes especiales;
c) en subsidio, por tasas que se fijen según las reglamentaciones del Banco Central.
Su finalidad es resarcir los daños causados por la mora del deudor.

Intereses punitorios:
Los intereses punitorios no se agotan exclusivamente en el resarcimiento del daño derivado de la mora, sino que
además tienen un componente de sanción: castigar el incumplimiento.
Luciano Medina Página 12
Ello debe quedar reflejado en su tasa, que necesariamente ha de ser mayor a la del interés moratorio.
Pueden tener origen en la voluntad de las partes (clausula penal) o en la ley.

Obligaciones Divisibles:
Concepto:
Obligación divisible es la que tiene por objeto prestaciones susceptibles de cumplimiento parcial.
Para determinar la divisibilidad de la prestación, nuestro sistema jurídico se inclina por la divisibilidad física o
material.

Deudor y acreedor singulares:


Si sólo hay un deudor y un acreedor, la prestación debe ser cumplida por entero, aunque su objeto sea divisible.

Requisitos:
La prestación jurídicamente divisible exige la concurrencia de los siguientes requisitos:
a) ser materialmente fraccionable, de modo que cada una de sus partes tenga la misma calidad del todo;
b) no quedar afectado significativamente el valor del objeto, ni ser antieconómico su uso y goce, por efecto de la
división (por ejemplo: la división de un terreno en partes que contengan una superficie menor a la de la unidad
económica, que permita subvenir a las necesidades familiares, o a una evolución favorable de la empresa).

Principio de división:
Si la obligación divisible tiene más de un acreedor o más de un deudor, se debe fraccionar en tantos créditos o
deudas iguales, como acreedores o deudores haya, siempre que el título constitutivo no determine proporciones
distintas. Cada una de las partes equivale a una prestación diversa e independiente. Los acreedores tienen derecho a
su cuota y los deudores no responden por la insolvencia de los demás.

Deudor y acreedor singulares:


Si sólo hay un deudor y un acreedor, la prestación debe ser cumplida por entero, aunque su objeto sea divisible.
Los fenómenos de la divisibilidad e indivisibilidad tienen sentido únicamente cuando hay pluralidad de acreedores o
deudores. Cuando la obligación es de sujeto único o singular, la prestación debe cumplirse como si fuera indivisible.

Obligaciones Indivisibles:
Concepto:
Son indivisibles las obligaciones no susceptibles de cumplimiento parcial. O sea, cuando puede ser cumplida sólo por
entero.
Ejemplo: entregar un cuadro
La naturaleza de la prestación es lo que determina que la obligación no pueda cumplirse parcialmente.

Casos de indivisibilidad:
Hay indivisibilidad:
a) si la prestación no puede ser materialmente dividida;
b) si la indivisibilidad es convenida; en caso de duda sobre si se convino que la obligación sea indivisible o solidaria,
se considera solidaria;
c) si lo dispone la ley.

Prestaciones indivisibles:
Se consideran indivisibles las prestaciones correspondientes a las obligaciones:
a) de dar una cosa cierta (es un caso de indivisibilidad material, ya que el cumplimiento no puede ser fraccionado sin
Luciano Medina Página 13
alterar la esencia y el valor de la cosa. Ello es independiente de que sea divisible el derecho real de dominio);
b) de hacer, excepto si han sido convenidas por unidad de medida y el deudor tiene derecho a la liberación parcial;
c) de no hacer;
d) accesorias, si la principal es indivisible (aunque la obligación accesoria sea divisible materialmente, será indivisible
si lo es la principal, por el principio de que lo accesorio sigue la suerte de lo principal).

Efectos de la indivisibilidad:
Derecho de los acreedores al pago total:
Cada uno de los acreedores tiene derecho de exigir la totalidad del pago a cualquiera de los codeudores, o a todos
ellos, simultánea o sucesivamente.
Se deduce que la insolvencia de alguno de los deudores la soportan los codeudores y no el acreedor, que puede ir
contra los restantes en forma sucesiva hasta agotar su interés.

Derecho a pagar:
Cualquiera de los codeudores tiene derecho a pagar la totalidad de la deuda a cualquiera de los acreedores.

Obligaciones de Sujeto Plural:

Obligaciones simplemente mancomunadas:


Concepto:
La obligación simplemente mancomunada es aquella en la que el crédito o la deuda se fracciona en tantas relaciones
particulares independientes entre sí como acreedores o deudores haya. Las cuotas respectivas se consideran deudas
o créditos distintos los unos de los otros.
Son aquellas en que cada deudor está obligado a pagar sólo su parte (cuota-parte) de la obligación, y cada acreedor
puede reclamar sólo su parte (cuota-parte) del crédito, si el título constitutivo de la obligación no ha establecido
partes desiguales entre los interesados.
Ejemplo: A, B y C deben $900 a Luis; cada deudor está obligado a pagar sólo $300. Marta y José son acreedores de
Juan por $1000; cada acreedor podrá reclamar sólo $500.
Cada deudor paga sólo su parte, aún el caso de que otro deudor fuese insolvente.

Efectos:
Los efectos de la obligación simplemente mancomunada se rigen por lo dispuesto en la Sección 6' de este Capítulo,
según que su objeto sea divisible o indivisible.

Obligaciones solidarias:
Concepto:
Hay solidaridad en las obligaciones con pluralidad de sujetos y originadas en una causa única cuando, en razón del
título constitutivo o de la ley, su cumplimiento total puede exigirse a cualquiera de los deudores, por cualquiera de
los acreedores.
La obligación es solidaria cuando la totalidad del objeto puede ser reclamado por cualquiera de los acreedores o a
cualquiera de los deudores.

Fuentes:
La solidaridad no se presume y debe surgir inequívocamente de la ley o del título constitutivo de la obligación.
La solidaridad puede tener origen en la voluntad de las partes o en la ley.

Luciano Medina Página 14


Diferencias entre la indivisibilidad y la solidaridad:
Existe un aspecto común a ambas, que es el derecho de cada uno de los acreedores a reclamar el cumplimiento
íntegro de la prestación a cualquiera de los deudores.
La diferencia es que la indivisibilidad no crea una asociación de intereses entre los coacreedores o codeudores, sino
que resulta de una imposición de los hechos o de la voluntad de las partes; cada deudor permanece extraño a los
demás y sólo responde por sus propios hechos- actos y no por los ajenos.
Es diferente en la solidaridad, en la que por el carácter asociativo de los vínculos, hay una mayor propagación de los
efectos ocurridos en uno de ellos a todos los otros.

Obligaciones principales y accesorias:


Definición:
Obligaciones principales son aquellas cuya existencia, régimen jurídico, eficacia y desarrollo funcional son autónomos
e independientes de cualquier otro vínculo obligacional.
Los derechos y obligaciones son accesorios a una obligación principal cuando dependen de ella en cualquiera de los
aspectos precedentemente indicados, o cuando resultan esenciales para satisfacer el interés del acreedor.
Una obligación principal es aquella de la cual depende la existencia de otra obligación.
Ejemplo: alquilo un departamento y Pedro me sale de garante. La obligación principal es el pago del alquiler, la
garantía es la accesoria.
La obligación es accesoria cuando su existencia y validez depende de otra obligación que le sirve de fundamento.

Efectos:
La extinción, nulidad o ineficacia del crédito principal, extinguen los derechos y obligaciones accesorios, excepto
disposición legal o convencional en contrario.
Si la obligación principal es nula o se extingue (sea por pago, novación, transacción, renuncia, prescripción, etc.)
también es una o se extingue la obligación accesoria.
Inversamente no sucede lo mismo: la nulidad o extinción de la obligación accesoria no afecta a la obligación
principal.

Punto Nº 3: EXTINCIÓN DE LAS OBLIGACIONES


Pago:
Concepto:
Pago es el cumplimiento de la prestación que constituye el objeto de la obligación.
Habrá pago cuando el deudor realiza la prestación debida a favor del acreedor, que comporta, al mismo tiempo, la
extinción de la obligación.

Reglas aplicables:
Las reglas de los actos jurídicos se aplican al pago, con sujeción a las disposiciones de este Capítulo.
Un amplio sector de la doctrina considera que el pago es un acto jurídico.

Objeto del pago:


El objeto del pago debe reunir los requisitos de identidad, integridad, puntualidad y localización.
El objeto del pago consiste en el cumplimiento de la prestación debida; es por ello que se puede afirmar que sólo
habrá verdadero pago cuando la actividad desempeñada por el deudor se adecue al programa de prestación trazado
al constituirse la obligación. Queda claro, pues, que cuando ello ocurre, el acreedor verá satisfecho su interés.
Identidad:
Luciano Medina Página 15
El acreedor no está obligado a recibir y el deudor no tiene derecho a cumplir una prestación distinta a la debida,
cualquiera sea su valor.
El deudor debe entregar al acreedor la misma cosa a cuya entrega se obligó. El acreedor no puede ser obligado a
recibir una cosa por otra, aunque sea de igual o mayor valor.
Integridad:
El acreedor no está obligado a recibir pagos parciales, excepto disposición legal o convencional en contrario.
Si la obligación es en parte líquida y en parte ilíquida, el deudor puede pagar la parte líquida.
Si el acreedor no acepta voluntariamente esta posibilidad de cumplimiento parcial propuesta por el deudor o por un
tercero legitimado para el pago, éste no puede llevarse a cabo de esa manera
Obligación con intereses:
Si la obligación es de dar una suma de dinero con intereses, el pago sólo es íntegro si incluye el capital más los
intereses.
Puede el acreedor rehusar recibir el pago intentado por el deudor, si éste no alcanza para saldar la totalidad de lo
debido, incluidos los intereses devengados y exigibles.

Tiempo del pago:


El pago debe hacerse:
a) Si la obligación es de exigibilidad inmediata, en el momento de su nacimiento (Generalmente, el plazo es un
elemento accidental de las obligaciones, por lo cual si la relación jurídica no lo dispone, la prestación debe cumplirse
en el mismo instante de su nacimiento), por ejemplo, una compra de contado;
b) si hay un plazo determinado, cierto o incierto, el día de su vencimiento (cuando se ha fijado un plazo para el
cumplimiento de la obligación, no podrán —unilateralmente— ni el acreedor exigir el pago antes de su vencimiento,
ni tampoco podrá el deudor imponer su recepción antes de que el mismo se cumpla, a no ser que exista acuerdo
entre las partes para ello);
c) si el plazo es tácito, en el tiempo en que, según la naturaleza y circunstancias de la obligación, debe cumplirse (por
ejemplo si una persona se obligó a vender a otra la cosecha de manzanas de un campo de 10 ha en el valle de Río
Negro, debe entenderse que la fruta será entregada luego de transcurrido el plazo adecuado y necesario para
efectuar la cosecha, ya que no puede realizarse en un solo día);
d) si el plazo es indeterminado, en el tiempo que fije el juez, a solicitud de cualquiera de las partes, mediante el
procedimiento más breve que prevea la ley local (también pueden las partes establecerlo con posterioridad; caso
contrario, sí será el juez quien establecerá el momento en que el deudor debe cumplir con la prestación asumida).

Pago anticipado:
El pago anterior al vencimiento del plazo no da derecho a exigir descuentos.
El acreedor no está obligado a recibir el pago que intente efectuar el deudor antes del vencimiento del plazo, aunque
sí se encuentra facultado para ello. De ocurrir ello, debe interpretarse que el deudor ha renunciado a los beneficios
del plazo que poseía desde el momento del nacimiento de la obligación.
Así, pues, de pagar el deudor antes del vencimiento originario de la prestación a su cargo, ello no le concede a éste
ningún derecho adicional, como el de intentar obtener algún descuento por haber cumplido antes de tiempo o no
abonar los intereses oportunamente pactados pero no devengados.

Lugar de pago designado:


El lugar de pago puede ser establecido por acuerdo de las partes, de manera expresa o tácita (por ejemplo cuando el
deudor se compromete a pintar la casa del acreedor; es indudable que en tal caso el lugar de pago emana de la
propia naturaleza de la obligación).

Luciano Medina Página 16


Lugar de pago no designado:
Si nada se ha indicado, el lugar de pago es el domicilio del deudor al tiempo del nacimiento de la obligación. Si el
deudor se muda, el acreedor tiene derecho a exigir el pago en el domicilio actual o en el anterior. Igual opción
corresponde al deudor, cuando el lugar de pago sea el domicilio del acreedor. Esta regla no se aplica a las
obligaciones:
a) de dar cosa cierta; en este caso, el lugar de pago es donde la cosa se encuentra habitualmente;
b) de obligaciones bilaterales de cumplimiento simultáneo; en este supuesto, lugar de pago es donde debe cumplirse
la prestación principal.

Efectos del pago por el deudor:


El pago realizado por el deudor que satisface el interés del acreedor, extingue el crédito y lo libera.

Mora:
La mora es el retraso culpable o deliberado en el cumplimiento de una obligación o deber. Así pues, no todo retraso
en el cumplimiento del deudor implica la existencia de mora en su actuación.

Mora del deudor - Principio General - Mora automática - Mora del acreedor:
La mora del deudor se produce por el solo transcurso del tiempo fijado para el cumplimiento de la obligación. El
acreedor incurre en mora si el deudor le efectúa una oferta de pago de conformidad con lo requerido en el objeto de
pago (los requisitos de identidad, integridad, puntualidad y localización) y se rehúsa injustificadamente a recibirlo.

Excepciones al principio de la mora automática:


La regla de la mora automática no rige respecto de las obligaciones:
a) sujetas a plazo tácito; si el plazo no está expresamente determinado, pero resulta tácitamente de la naturaleza y
circunstancias de la obligación, en la fecha que conforme a los usos y a la buena fe, debe cumplirse;
b) sujetas a plazo indeterminado propiamente dicho; si no hay plazo, el juez a pedido de parte, lo debe fijar
mediante el procedimiento más breve que prevea la ley local, a que el acreedor opte por acumular las acciones de
fijación de plazo y de cumplimiento, en cuyo caso el deudor queda constituido en mora en la fecha indicada por la
sentencia para el cumplimiento de la obligación.
En caso de duda respecto a si el plazo es tácito o indeterminado propiamente dicho, se considera que es tácito.

Imputación del pago:


Concepto:
Consiste en determinar a qué deuda se asignará un pago, cuando entre un mismo deudor y acreedor existan varias
obligaciones de la misma naturaleza y el pago hecho no alcance a cubrirlas a todas.

Imputación por el deudor:


Si las obligaciones para con un solo acreedor tienen por objeto prestaciones de la misma naturaleza, el deudor tiene
la facultad de declarar, al tiempo de hacer el pago, por cuál de ellas debe entenderse que lo hace. La elección debe
recaer sobre deuda líquida y de plazo vencido. Si adeuda capital e intereses, el pago no puede imputarse a la deuda
principal sin consentimiento del acreedor.

Imputación por el acreedor:


Si el deudor no imputa el pago, el acreedor se encuentra facultado a hacerlo en el momento de recibirlo, conforme a
estas reglas:
a) debe imputarlo a alguna de las deudas líquidas y exigibles (ello también resulta lógico, ya que resultaría reñido con

Luciano Medina Página 17


la buena fe, que el acreedor pretendiera imputar lo dado en pago a obligaciones que aún no han vencido o cuyo
monto no estuviera determinado);
b) una vez canceladas totalmente una o varias deudas, puede aplicar el saldo a la cancelación parcial de cualquiera
de las otras.

Imputación legal:
Si el deudor o el acreedor no hacen imputación del pago, se lo imputa:
a) en primer término, a la obligación de plazo vencido más onerosa para el deudor (por ejemplo si existe ligada a ella
una cláusula penal o una fianza, lo cual, ante el incumplimiento, podría poner en riesgo su patrimonio);
b) cuando las deudas son igualmente onerosas, el pago se imputa a prorrata (en este supuesto se deberá imputar el
pago proporcionalmente a todas las deudas existentes).

Pago a cuenta de capital e intereses:


Si el pago se hace a cuenta de capital e intereses y no se precisa su orden, se imputa en primer término a intereses, a
no ser que el acreedor dé recibo por cuenta de capital.

Pago por consignación:


Concepto:
Así como el deudor posee el deber de pagar, también tiene el derecho de hacerlo a fin de lograr la extinción de la
obligación y obtener su liberación.
El pago por consignación, pues, es el mecanismo que la ley, le concede al deudor para que pueda hacer efectivo ese
derecho, ya sea por vía judicial o extrajudicial.

Consignación judicial:
Casos en que procede:
El pago por consignación procede cuando:
a) el acreedor fue constituido en mora (por ejemplo ante la falta de cooperación por parte del acreedor en la
recepción del pago cancelatorio de la prestación);
b) existe incertidumbre sobre la persona del acreedor (cuando el deudor posea una duda razonable respecto de la
titularidad del crédito, está habilitado a consignar: ello así, toda vez que si el deudor paga mal, puede verse obligado
a pagar dos veces. Por ejemplo: en el caso de un sucesorio, en donde no conoce con certeza quiénes son los
herederos);
c) el deudor no puede realizar un pago seguro y válido por causa que no le es imputable.

Consignación extrajudicial:
Procedencia y trámite:
El deudor de una suma de dinero puede optar por el trámite de consignación extrajudicial. A tal fin, debe depositar la
suma adeudada ante un escribano de registro, a nombre y a disposición del acreedor, cumpliendo los siguientes
recaudos:
a) que la suma de dinero sea depositada ante un escribano de registro, a nombre y a disposición del acreedor;
b) notificar previamente al acreedor, en forma fehaciente, del día, la hora y el lugar en que será efectuado el
depósito (también es fundamental, aun cuando la norma no lo imponga en forma expresa, indicarle el nombre del
escribano de registro interviniente);
c) efectuar el depósito de la suma debida con más los intereses devengados hasta el día del depósito; este depósito
debe ser notificado fehacientemente al acreedor por el escribano dentro de las cuarenta y ocho horas hábiles de

Luciano Medina Página 18


realizado; si es imposible practicar la notificación, el deudor debe consignar judicialmente (por ejemplo si se
desconociera el domicilio actual del acreedor o su actual paradero).

Pago por subrogación:


El pago por subrogación transmite al tercero que paga todos los derechos y acciones del acreedor. La subrogación
puede ser legal o convencional.
El pago por subrogación es un supuesto de subrogación personal, ya que existe en él un cambio de sujeto en la
relación jurídica (cambio de acreedor), ya que el tercero, que ocupa su lugar, es quien efectúa el pago y satisface al
acreedor con la prestación debida por el deudor, adquiriendo —en razón de ello— los derechos que pertenecían al
primitivo acreedor.
A través del pago por subrogación, se produce la liberación del deudor respecto del acreedor originario, pero no se
extingue la obligación, ya que ésta continúa subsistiendo respecto del tercero que efectúa el pago.

Efectos:
El pago por subrogación transmite al tercero todos los derechos y acciones del acreedor, y los accesorios del crédito.
El tercero subrogante mantiene las acciones contra los coobligados, fiadores, y garantes personales y reales, y los
privilegios y el derecho de retención si lo hay.

Punto Nº 4: OTROS MODOS DE EXTINCIÓN


Compensación:
La compensación de las obligaciones tiene lugar cuando dos personas, por derecho propio, reúnen la calidad de
acreedor y deudor recíprocamente, cualesquiera que sean las causas de una y otra deuda. Extingue con fuerza de
pago las dos deudas, hasta el monto de la menor, desde el tiempo en que ambas obligaciones comenzaron a coexistir
en condiciones de ser compensables.
Es cuando quien tiene que cumplir es, al mismo tiempo, acreedor de quien tiene que recibir la satisfacción. Es el
balance entre dos obligaciones que se extinguen recíprocamente, si ambas son de igual valor, o sólo hasta donde
alcance la menor, cuando ellas son de un valor diferente.
Ejemplo: si "A" le debe $ 500 a "B" a raíz de un préstamo de dinero por esa cantidad que éste le efectuó
oportunamente, y si "B" le adeuda a "A" idéntica cantidad por la compra de un televisor, resulta innecesario que "A"
le entregue a "B" los $ 500 que le debe en razón del préstamo y éste, finalmente, le pague seguidamente con esos
mismos $ 500 el televisor que le ha vendido "A". Es lógico y razonable, en este caso, que ninguno entregue nada al
otro y que se consideren saldadas ambas obligaciones. De ser diferentes las cantidades adeudadas por uno y otro, el
que debe más deberá pagar al otro la diferencia entre las dos sumas que se adeudan recíprocamente.

Especies:
La compensación puede ser legal, convencional, facultativa o judicial.
Convencional:
También llamada voluntaria o contractual, se constituye por el acuerdo de voluntades de las partes, que son
acreedor y deudor recíprocamente.
Facultativa: Es la que depende de la voluntad de una sola de las partes, ya que tiene derecho a oponerla en razón de
existir una ventaja en su favor, a la cual sólo ella puede renunciar (por ejemplo: A debe entregar a B un caballo de
carrera y B un caballo común; sólo B puede plantear la compensación, por la gran diferencia de valor entre ambos
animales).
Judicial: Es la que determina el juez en su sentencia, declarando admisible —total o parcialmente— un crédito

Luciano Medina Página 19


alegado por el deudor demandado (por ejemplo: A es acreedor de B por $3000; a la vez, B es acreedor de A por
daños; B solicita al juez que se liquide su crédito y se compense. El juez decreta la compensación hasta el límite de la
menor).
Legal: Es la que tiene lugar por la fuerza de la ley.

Confusión:
Definición:
La obligación se extingue por confusión cuando las calidades de acreedor y de deudor se reúnen en una misma
persona y en un mismo patrimonio.
Cuando ello sucede se produce una imposibilidad de cumplimiento, puesto que nadie puede exigirse a sí mismo la
realización de la prestación debida.
Si cualquier obligación requiere de un sujeto pasivo y de un sujeto activo, al reducirse la relación jurídica a un solo
sujeto, desaparece por imposibilidad lógica y estructural, ya que una persona no puede cobrarse o pagarse a sí
misma.
Ejemplos: Juan debe $5000 a su tío, y al morir este, lo hereda; si tengo una deuda con una empresa y adquiero el
fondo de comercio.

Efectos:
La obligación queda extinguida, total o parcialmente, en proporción a la parte de la deuda en que se produce la
confusión.
Ejemplo: Juan debe $5000 a su tío y lo hereda junto con sus cuatro hermanos, la deuda se extingue en proporción a
su porción hereditaria.

Novación:
Concepto:
La novación es la extinción de una obligación por la creación de otra nueva, destinada a reemplazarla.
La novación es un modo de extinción de las obligaciones, que consiste en sustituir una preexistente, que se extingue,
por una nueva, que nace para sustituirla.

Voluntad de novar:
La voluntad de novar es requisito esencial de la novación. En caso de duda, se presume que la nueva obligación
contraída para cumplir la anterior no causa su extinción.
La voluntad de las partes en cuanto a su intención de novar debe ser manifestada "claramente", es decir, que no
corresponde efectuar de ella interpretaciones elásticas o amplias, sino que, por el contrario, la misma debe
efectuarse con carácter restrictivo.

Requisitos:
Se consideran elementos esenciales de la novación:
1) Existencia de una obligación anterior;
2) creación de una obligación nueva;
3) capacidad para novar;
4) voluntad de efectuar la novación.

La manifestación de la voluntad puede ser realizada en forma expresa o tácita: será expresa cuando las partes
claramente manifiestan su intención de novar; será tácita, por el contrario, cuando la existencia de la nueva
obligación primitiva sea totalmente incompatible con la existencia de la obligación primitiva.

Luciano Medina Página 20


Efectos:
La novación extingue la obligación originaria con sus accesorios. El acreedor puede impedir la extinción de las
garantías personales o reales del antiguo crédito mediante reserva; en tal caso, las garantías pasan a la nueva
obligación sólo si quien las constituyó participó en el acuerdo novatorio.
Se consideran accesorios de la obligación principal: los privilegios, los intereses debidos, las garantías reales y
personales, etcétera.

Dación en pago:
Concepto:
La obligación se extingue cuando el acreedor voluntariamente acepta en pago una prestación diversa de la
adeudada.
La dación en pago es un modo extintivo de las obligaciones que se produce cuando las partes deciden —de común
acuerdo— aceptar, en calidad de pago, una prestación distinta a la originalmente pactada.

Reglas aplicables:
La dación en pago se rige por las disposiciones aplicables al contrato con el que tenga mayor afinidad.
El deudor responde por la evicción y los vicios redhibitorios de lo entregado; estos efectos no hacen renacer la
obligación primitiva, excepto pacto expreso y sin perjuicio de terceros.
En primer lugar es de destacar que la dación en pago trae aparejados los efectos del pago, extinguiendo la obligación
preexistente y liberando al deudor.
Pero, en segundo lugar, la dación en pago produce efectos especiales propios en razón de su particular naturaleza
jurídica, los que varían según cuál sea la naturaleza de la prestación que es realizada en reemplazo de la
originariamente convenida.

Renuncia y Remisión:
Renuncia:
Es un acto por el cual una persona abdica o abandona un derecho que le pertenece, en forma voluntaria y
espontánea.
La renuncia es el acto jurídico por el cual una persona hace abandono o se desprende de un derecho, dándolo por
extinguido.

Caracteres:
Toda persona puede renunciar a los derechos conferidos por la ley cuando la renuncia no está prohibida y sólo afecta
intereses privados. No se admite la renuncia anticipada de las defensas que puedan hacerse valer en juicio.

Remisión:
Se considera remitida la deuda, excepto prueba en contrario, cuando el acreedor entrega voluntariamente al deudor
el documento original en que consta la deuda. Si el documento es un instrumento protocolizado y su testimonio o
copia se halla en poder del deudor sin anotación del pago o remisión, y tampoco consta el pago o la remisión en el
documento original, el deudor debe probar que el acreedor le entregó el testimonio de la copia como remisión de la
deuda.
La remisión de deudas es una especie dentro del género "renuncia", siendo definida como el acto jurídico unilateral
por el cual el acreedor renuncia de sus derechos de crédito, liberando en consecuencia al deudor sin ver satisfecho su
interés.
Es decir, queda claro que la remisión implica la renuncia a un derecho de crédito, la que quedará evidenciada y
configurada, cuando el acreedor entregue al deudor el título en el cual consta la deuda (ej: pagaré, cheque, etc).
Luciano Medina Página 21
Imposibilidad de cumplimiento:
Concepto:
La obligación se extingue cuando las prestación que forma el objeto de ella, viene a ser física o legalmente imposible,
sin culpa del deudor.
Es lógico que la obligación se extinga si la prestación se ha tornado imposible de cumplir sin que medie culpa del
deudor. De haber culpa del deudor, éste debería pagar dalos y perjuicios.

Imposibilidad física de la prestación (por ejemplo: muerte del pintor famoso obligado a pintar un cuadro
determinado).
Imposibilidad jurídica de la prestación (por ejemplo: la venta de una cosa que haya sido puesta fuera del comercio; o
prohibición legal de ejecutar una actividad en una zona determinada, etc.).

Efectos:
El efecto principal de la imposibilidad de cumplimiento sobrevenida, objetiva, absoluta y definitiva de la obligación es
la extinción de la obligación y la consecuente liberación del deudor, siempre que la imposibilidad sea producida por
un caso fortuito o fuerza mayor, y resulte totalmente ajena a la conducta del deudor.

Bolilla 7: DERECHOS REALES


Punto Nº 1: DERECHOS REALES
Concepto:
El derecho real es el poder jurídico, de estructura legal, que se ejerce directamente sobre su objeto, en forma
autónoma y que atribuye a su titular las facultades de persecución y preferencia, y las demás previstas en este
Código.
Los derechos reales son aquellos que crean entre la persona y la cosa “una relación directa e inmediata”,
distinguiéndolos por la única existencia de dos elementos: la persona, que es el sujeto activo, y la cosa, su objeto.
Los titulares de los derechos reales pueden ser personas humanas y personas jurídicas (las personas jurídicas no
tienen derecho de uso y habitación).

Caracteres:

1) De origen legal: los derechos reales sólo pueden ser creados por la ley. Los particulares no pueden crearlos.
2) Número cerrado.
3) Son de orden público: no pueden ser dejados de lado por las partes.
4) Crean una relación directa entre el titular y la cosa.
5) Oponible “erga omnes” (frente a todos).
6) Puede ser perpetuos o temporarios.
7) Persecución y preferencia.
8) Algunos derechos reales pueden adquirirse pos prescripción.

Objeto:
El derecho real se ejerce sobre la totalidad o una parte material de la cosa que constituye su objeto, por el todo o por
una parte indivisa. El objeto también puede consistir en un bien taxativamente señalado por la ley.
El objeto de los derechos reales también pueden ser los bienes.

Luciano Medina Página 22


Los derechos reales pueden recaer sobre cosas (materiales) o bienes (inmateriales, por ejemplo un crédito, un
pagaré, etc.).
Los derechos puede ser objeto de los derechos reales (por ejemplo un crédito).
También pueden ser objeto, bienes que están fuera del comercio (por ejemplo un inmueble que está prohibida su
enajenación).

Estructura:
La regulación de los derechos reales en cuanto a sus elementos, contenido, adquisición, constitución, modificación,
transmisión, duración y extinción es establecida sólo por la ley. Es nula la configuración de un derecho real no
previsto en la ley, o la modificación de su estructura.
Los derechos reales y su estructura son creados y regulados por la ley (orden público).

Persecución y preferencia:
El derecho real atribuye a su titular la facultad de perseguir la cosa en poder de quien se encuentra, y de hacer valer
su preferencia con respecto a otro derecho real o personal que haya obtenido oponibilidad posteriormente.

Enumeración:
Son derechos reales en este Código:
a. el dominio;
b. el condominio;
c. la propiedad horizontal;
d. los conjuntos inmobiliarios;
e. el tiempo compartido;
f. el cementerio privado;
g. la superficie;
h. el usufructo;
i. el uso;
j. la habitación;
k. la servidumbre;
l. la hipoteca;
m. la anticresis;
n. la prenda.

Clasificación de los Derechos Reales:

Derechos reales sobre cosa propia o ajena:


Carga o gravamen real. Son derechos reales sobre cosa total o parcialmente propia: el dominio, el condominio, la
propiedad horizontal, los conjuntos inmobiliarios, el tiempo compartido, el cementerio privado y la superficie si existe
propiedad superficiaria.
Los restantes derechos reales recaen sobre cosa ajena.
Con relación al dueño de la cosa, los derechos reales sobre cosa ajena constituyen cargas o gravámenes reales. Las
cosas se presumen sin gravamen, excepto prueba en contrario. Toda duda sobre la existencia de un gravamen real, su
extensión o el modo de ejercicio, se interpreta a favor del titular del bien gravado.
La diferencia va a estar en que si hablamos de cosa ajena (sean derechos de disfrute: usufructo, uso, habitación,
servidumbre activa; o de garantía: hipoteca, prenda y anticresis) la titularidad va a ser de alguien distinto al dueño de

Luciano Medina Página 23


la cosa (titular y propietario son distintos); en cambio si hablamos de cosa propia, dueño y titular son la misma
persona (ejemplo: dominio, condominio y propiedad horizontal).

Derechos reales principales y accesorios:


Los derechos reales son principales, excepto los accesorios de un crédito en función de garantía. Son accesorios la
hipoteca, la anticresis y la prenda.
Los únicos derechos reales accesorios son los de garantía. Dependen para su existencia de un derecho personal al
que acceden.

Derechos reales sobre cosas registrables y no registrables:


Los derechos reales recaen sobre cosas registrables cuando la ley requiere la inscripción de los títulos en el
respectivo registro a los efectos que correspondan. Recaen sobre cosas no registrables, cuando los documentos
portantes de derechos sobre su objeto no acceden a un registro a los fines de su inscripción.

Punto Nº 2: RELACIONES DE PODER


Las relaciones de poder del sujeto con una cosa son la posesión y la tenencia.

Posesión:
Hay posesión cuando una persona, por sí o por medio de otra, ejerce un poder de hecho sobre una cosa,
comportándose como titular de un derecho real, lo sea o no.
Habrá posesión cuando una persona tenga bajo su poder una cosa (esto se llama “corpus”) con intención de
someterla al ejercicio de un derecho de propiedad, es decir, comportándose como si fuera su dueño, aunque en
realidad no lo sea (esto se llama “animus domini”).

Tenencia:
Hay tenencia cuando una persona, por sí o por medio de otra, ejerce un poder de hecho sobre una cosa, y se
comporta como representante del poseedor.
Habrá tenencia cuando alguien tenga efectivamente una cosa (corpus) pero reconociendo en otro la propiedad de la
misma (es decir, falta el “animus domini”)

Entonces:
Si hay “corpus” y “animus domini” (es decir, ánimo de tratar a la cosa como si fuera mía) habrá posesión.
Si hay “corpus” y falta “animus domini” (es decir, tiene la cosa pero reconoce que el dueño es otra persona y no él)
habrá tenencia.

Posesión de buena fe:


Buena fe:
El sujeto de la relación de poder es de buena fe si no conoce, ni puede conocer que carece de derecho, es decir,
cuando por un error de hecho esencial y excusable está persuadido de su legitimidad.
Esto significa que el poseedor o el tenedor están convencidos de que adquirieron el derecho real o el derecho
personal de conformidad a las disposiciones del código, aunque en verdad no sea así.
Por ejemplo: en el caso de la enajenación hecha por una persona que no era propietaria de la cosa. En la medida en
que el adquirente cuenta con un título que en apariencia no tiene irregularidades, la ley admite la posibilidad de su
buena fe, en tanto su ignorancia puede ser justificada.

Luciano Medina Página 24


Presunción de Mala Fe:
Hay mal fe en todos aquellos casos en los que falta la buena fe, esto es, cuando el sujeto no está persuadido
(convencido) sin duda alguna de la legitimidad de su adquisición. Además, para ser reputado de buena fe, el poseedor
debe haber actuado con diligencia, realizando las averiguaciones necesarias.

Presunción de buena fe:


La relación de poder se presume de buena fe, a menos que exista prueba en contrario.
La mala fe se presume en los siguientes casos:
a) cuando el título es de nulidad manifiesta (ocurre que si el vicio es manifiesto, ostensible, el adquiriente debió
advertir la irregularidad. Si no la investigó, o la investigó y no la advirtió, su conducta es negligente y carece de
justificación);
b) cuando se adquiere de persona que habitualmente no hace tradición de esa clase de cosas y carece de medios
para adquirirlas (normalmente se tratará de cosas hurtadas o perdidas, pero también puede darse esta situación en
casos de desprendimiento voluntario. Aquí la tradición la realiza una persona “sospechosa”. Cuando alguien compra a
esta clase de personas cabe presumir que no actúa de buena fe, ya que pudo al menos dudar sobre el origen o la
forma en que tal cosa llegó a poder de su vendedor);
c) cuando recae sobre ganado marcado o señalado, si el diseño fue registrado por otra persona (si una persona
adquiere ganado marcado o señalado a un sujeto que no tiene registrado a su nombre ese diseño, no puede alegar
buena fe).

Posesión viciosa:
La posesión de mala fe es viciosa cuando es de cosas muebles adquiridas por hurto, estafa, o abuso de confianza; y
cuando es de inmuebles, adquiridos por violencia, clandestinidad, o abuso de confianza. Los vicios de la posesión son
relativos respecto de aquel contra quien se ejercen. En todos los casos, sea por el mismo que causa el vicio o por sus
agentes, sea contra el poseedor o sus representantes.
Se trata de situaciones en las cuales la posesión no sólo es adquirida de mala fe, sino además en forma más grave en
virtud de los métodos empleados. Puede decirse que la posesión es viciosa cuando es adquirida ilegalmente; sin o
contra la voluntad del poseedor, es decir, mediante desapoderamiento.

Punto Nº 3: DERECHO REAL DE DOMINIO


Dominio Perfecto:
El dominio perfecto es el derecho real que otorga todas las facultades de usar, gozar y disponer material y
jurídicamente de una cosa, dentro de los límites previstos por la ley. El dominio se presume perfecto hasta que se
pruebe lo contrario.

Caracteres:
Perpetuidad:
El dominio es perpetuo. No tiene límite en el tiempo y subsiste con independencia de su ejercicio. No se extingue
aunque el dueño no ejerza sus facultades, o las ejerza otro, excepto que éste adquiera el dominio por prescripción
adquisitiva.
Que el dominio sea perfecto significa que él no se extingue porque su titular no use, no goce o no ocupe la cosa, a no
ser que la deje de poseer. En cambio, otros derechos reales se extinguen por el no uso, como sucede con la
superficie, el usufructo, el uso y la habitación, y las servidumbres.

Luciano Medina Página 25


Exclusividad:
El dominio es exclusivo y no puede tener más de un titular. Quien adquiere la cosa por un título, no puede en
adelante adquirirla por otro, si no es por lo que falta al título.
Significa que dos personas no pueden tener cada una en el todo el dominio de la cosa (si las dos son propietarias en
común de la misma cosa, estaríamos ante un condominio).

Facultad de exclusión (excluyente):


El dominio es excluyente. El dueño puede excluir a extraños del uso, goce o disposición de la cosa, remover por
propia autoridad los objetos puestos en ella, y encerrar sus inmuebles con muros, cercos o fosos, sujetándose a las
normas locales.

Extensión:
El dominio de una cosa comprende los objetos que forman un todo con ella o son sus accesorios. El dominio de una
cosa inmueble se extiende al subsuelo y al espacio aéreo, en la medida en que su aprovechamiento sea posible,
excepto lo dispuesto por normas especiales.
Todas las construcciones, siembras o plantaciones existentes en un inmueble pertenecen a su dueño, excepto lo
dispuesto respecto de los derechos de propiedad horizontal y superficie.
Se presume que las construcciones, siembras o plantaciones las hizo el dueño del inmueble, si no se prueba lo
contrario.
No están comprendidas en la propiedad de la cosa aquellas que no estén realmente “adheridas” a la principal, o
dependan de ella.
Ejemplo: Los útiles de labranza y los animales de un predio destinado a esta actividad, no parece que puedan
comprenderse en la propiedad del fondo, como si todo formara una sola cosa.

Modo de adquisición:
Título y modo:
La adquisición derivada por actos entre vivos de derechos reales que se ejercen por la posesión requiere la
concurrencia del título y del modo.
El título suficiente es un acto jurídico revestido de las formas establecidas por la ley, que tiene por finalidad
transmitir o constituir el derecho real.
Consiste en la posibilidad jurídica de la adquisición, y en la causa justificativa de la sucesiva adquisición; mientras que
el modo es el acto a través del cual la adquisición tiene lugar para la materialización de la mencionada posibilidad
(tradición).
La tradición no es necesaria, cuando la cosa es tenida a nombre del propietario, y éste por un acto jurídico pasa el
dominio de ella al que la poseía a su nombre, o cuando el que la poseía a nombre del propietario, principia a poseerla
a nombre de otro. Tampoco es necesaria cuando el poseedor la transfiere a otro reservándose la tenencia y
constituyéndose en poseedor a nombre del adquirente.
La inscripción registral es modo suficiente para transmitir o constituir derechos reales sobre cosas registrables en los
casos legalmente previstos; y sobre cosas no registrables, cuando el tipo del derecho así lo requiera.
El primer uso es modo suficiente de adquisición de la servidumbre positiva.
Para que el título y el modo sean suficientes para adquirir un derecho real, sus otorgantes deben ser capaces y estar
legitimados al efecto.

Inoponibilidad:
La adquisición o transmisión de derechos reales constituidos de conformidad a las disposiciones de este Código no

Luciano Medina Página 26


son oponibles a terceros interesados y de buena fe mientras no tengan publicidad suficiente.
Se considera publicidad suficiente la inscripción registral o la posesión, según el caso.
Si el modo consiste en una inscripción constitutiva, la registración es presupuesto necesario y suficiente para la
oponibilidad del derecho real.
No pueden prevalerse de la falta de publicidad quienes participaron en los actos, ni aquellos que conocían o debían
conocer la existencia del título del derecho real.
La publicidad consiste en la exteriorización de las situaciones jurídicas reales, a los efectos de su oponibilidad a los
terceros interesados de buena fe, mediante el conocimiento que aquellos adquieran en la forma impuesta por la ley.
Los sujetos pasivos de esa relación –integrantes de la sociedad- tienen el deber de respetar los derechos reales, y es
a ese fin que se los da a publicidad.
Esté articulo prevé dos formas de publicitar los derechos reales.
Una es la tradición, la que, además de su función constitutiva del derecho real, cumple un rol publicitario cuando se
trata de cosas muebles no registrables (ejemplo: un reloj).
Cuando se trata de cosas registrables, sean muebles o inmuebles, y sea la inscripción declarativa o constitutiva, la
publicidad concreta a través de la inscripción en el Registro que corresponda.
La oponibilidad es la posibilidad de hacer valer un derecho o una relación jurídica a los terceros que no participan de
ella.

Tradición:
Hay tradición cuando una parte entrega una cosa a otra que la recibe. Debe consistir en la realización de actos
materiales de, por lo menos, una de las partes, que otorguen un poder de hecho sobre la cosa, los que no se suplen,
con relación a terceros, por la mera declaración del que entrega de darla a quien la recibe, o de éste de recibirla.
La tradición significa la entrega de la cosa. Es el desplazamiento de la posesión o de la tenencia de la cosa que se va a
transmitir a la persona adquiriente, con el consentimiento concurrente de ambas partes sobre su realización.

Otras formas de tradición:


También se considera hecha la tradición de cosas muebles, por la entrega de conocimientos, cartas de porte,
facturas u otros documentos de conformidad con las reglas respectivas, sin oposición alguna, y si son remitidas por
cuenta y orden de otro, cuando el remitente las entrega a quien debe transportarlas, si el adquirente aprueba el
envío.
Se tratan aquí supuestos de tradición en los cuales la entrega no se realiza de mano a mano, y se considera “hecha”
por la entrega de conocimientos, cartas de porte, facturas u otros documentos.
El conocimiento es el documento que acredita la entrega de la mercadería a los efectos del transporte de ella por
agua. Es un título representativo de mercaderías que, cuando es entregado, transfiere la posesión y la propiedad de
ellas.
La carta de porte cumple similar función cuando se trata de transporte terrestre o aéreo.
La factura es el documento que se otorga con motivo de la venta de mercaderías. La entrega de la factura pone las
cosas a disposición del adquiriente, ya que este puede reclamar la entrega material con dicho documento en su
poder.

Punto Nº 4: CONDOMINIO
Concepto:
Condominio es el derecho real de propiedad sobre una cosa que pertenece en común a varias personas y que
corresponde a cada una por una parte indivisa. Las partes de los condóminos se presumen iguales, excepto que la ley

Luciano Medina Página 27


o el título dispongan otra proporción.
Es la comunidad que existe entre copropietarios de una misma cosa

Facultades respecto de la cosa común:


Uso y goce de la cosa:
Cada condómino, conjunta o individualmente, puede usar y gozar de la cosa común sin alterar su destino. No puede
deteriorarla en su propio interés u obstaculizar el ejercicio de iguales facultades por los restantes condóminos

Convenio de uso y goce:


Los condóminos pueden convenir el uso y goce alternado de la cosa común o que se ejercite de manera exclusiva y
excluyente sobre determinadas partes materiales.

Facultades con relación a la parte indivisa:


Cada condómino puede enajenar y gravar la cosa en la medida de su parte indivisa sin el asentimiento de los
restantes condóminos. Los acreedores pueden embargarla y ejecutarla sin esperar el resultado de la partición, que les
es inoponible. La renuncia del condómino a su parte acrece a los otros condóminos.
El condómino puede entonces enajenar o gravar su parte indivisa y para ello no requiere del consentimiento de los
demás condóminos, quienes tampoco pueden oponerse.

Administración:
Imposibilidad de uso y goce en común:
Si no es posible el uso y goce en común por razones atinentes a la propia cosa o por la oposición de alguno de los
condóminos, éstos reunidos en asamblea deben decidir sobre su administración.

Condominio con indivisión forzosa: temporaria o perdurable:


Se establece la aplicación de las reglas de la división de la herencia a efectos de la partición de la cosa común.
La partición constituye uno de los modos como puede concretarse la extinción del condominio. Consiste en la
conversión (cambio de una cosa por otra) de la parte ideal que le corresponde a cada condómino en una porción o
lote material equivalente a su interés en la cosa.
La partición del condominio es la causa de cesación del mismo; mediante la atribución a cada condómino porciones
indivisas de bienes concretos en pago o satisfacción de sus respectivas cuotas. Con anterioridad a la partición los
condóminos tienen una titularidad sobre una cuota abstracta de la partición, pudiendo disponer libremente sobre la
cuota ideal, no así sobre las singulares partículas activas que integran el contenido de la herencia.
Cabe señalar que la regla es que la partición se haga en especie. Tan así es que de ser factible ese modo de dividir la
cosa común ninguno de los condóminos podría exigir su venta. Pero si la división material no fuera posible – porque
se trata de una cosa que por sus especiales características no admite división (por ejemplo: un anillo, un reloj de
mano) o porque su división hace antieconómico el aprovechamiento de las partes – se impone su liquidación o venta
judicial.
Se encuentra coartada la facultad de pedir la división en cualquier tiempo ya sea por causa derivada de la ley, de la
convención (contrato) o de una disposición de última voluntad.

Condominio sin indivisión forzosa:


Derecho a pedir la partición:
Excepto que se haya convenido la indivisión, todo condómino puede, en cualquier tiempo, pedir la partición de la
cosa. La acción es imprescriptible (que no puede perder vigencia o validez).

Luciano Medina Página 28


Se autoriza a que, en cualquier tiempo, cualquiera de los condóminos, cualquiera sea la importancia de su cuota
parte, pueda, no obstante la opinión contraria de los demás, provocar la extinción del derecho real.

Bolilla 8: DERECHOS REALES


Punto Nº 1: PROPIEDAD HORIZONTAL
Concepto:
La propiedad horizontal es el derecho real que se ejerce sobre un inmueble propio que otorga a su titular facultades
de uso, goce y disposición material y jurídica que se ejercen sobre partes privativas y sobre partes comunes de un
edificio, de conformidad con lo que establece este Título y el respectivo reglamento de propiedad horizontal. Las
diversas partes del inmueble así como las facultades que sobre ellas se tienen son interdependientes y conforman un
todo no escindible.

Constitución:
A los fines de la división jurídica del edificio, el titular de dominio o los condóminos deben redactar, por escritura
pública, el reglamento de propiedad horizontal, que debe inscribirse en el registro inmobiliario. El reglamento de
propiedad horizontal se integra al título suficiente sobre la unidad funcional.

Contenido:
El reglamento de propiedad horizontal debe contener:
a. determinación del terreno;
b. determinación de las unidades funcionales y complementarias;
c. enumeración de los bienes propios;
d. enumeración de las cosas y partes comunes;
e. composición del patrimonio del consorcio;
f. determinación de la parte proporcional indivisa de cada unidad;
g. determinación de la proporción en el pago de las expensas comunes;
h. uso y goce de las cosas y partes comunes;
i. uso y goce de los bienes del consorcio;
j. destino de las unidades funcionales;
k. destino de las partes comunes;
l. facultades especiales de las asambleas de propietarios;
m. determinación de la forma de convocar la reunión de propietarios, su periodicidad y su forma de notificación;
n. especificación de limitaciones a la cantidad de cartas poderes que puede detentar cada titular de unidad funcional
para representar a otros en asambleas;
ñ. determinación de las mayorías necesarias para las distintas decisiones;
o. determinación de las mayorías necesarias para modificar el reglamento de propiedad horizontal;
p. forma de computar las mayorías;
q. determinación de eventuales prohibiciones para la disposición o locación de unidades complementarias hacia
terceros no propietarios;
r. designación, facultades y obligaciones especiales del administrador;
s. plazo de ejercicio de la función de administrador;
t. fijación del ejercicio financiero del consorcio;
u. facultades especiales del consejo de propietarios.

Luciano Medina Página 29


Unidad funcional:
El derecho de propiedad horizontal se determina en la unidad funcional, que consiste en pisos, departamentos,
locales u otros espacios susceptibles de aprovechamiento por su naturaleza o destino, que tengan independencia
funcional, y comunicación con la vía pública, directamente o por un pasaje común.
La propiedad de la unidad funcional comprende la parte indivisa del terreno, de las cosas y partes de uso común del
inmueble o indispensables para mantener su seguridad, y puede abarcar una o más unidades complementarias
destinadas a servirla.

Cosas y partes propias:


Son necesariamente propias con respecto a la unidad funcional las cosas y partes comprendidas en el volumen
limitado por sus estructuras divisorias, los tabiques internos no portantes, las puertas, ventanas, artefactos y los
revestimientos, incluso de los balcones.
También son propias las cosas y partes que, susceptibles de un derecho exclusivo, son previstas como tales en el
reglamento de propiedad horizontal, sin perjuicio de las restricciones que impone la convivencia ordenada.
Son cosas y partes propias con respecto a la unidad funcional aquellos espacios habitables o con otro fin,
comprendidos entre muros maestros, perimetrales, estructuras, el terreno o cualquier división entre unidades, se
trate de dos pisos, departamentos, locales, cocheras y otros espacios susceptibles de aprovechamiento por su
naturaleza o destino junto con sus anexos, tales como depósitos, bauleras, sitios guardacoches, etc.

Cosas y partes comunes:


Son comunes a todas o a algunas de las unidades funcionales las cosas y partes de uso común de ellas o
indispensables para mantener su seguridad y las que se determinan en el reglamento de propiedad horizontal. Las
cosas y partes cuyo uso no está determinado, se consideran comunes.
Sobre estas cosas y partes ningún propietario puede alegar derecho exclusivo, sin perjuicio de su afectación exclusiva
a una o varias unidades funcionales.
Cada propietario puede usar las cosas y partes comunes conforme a su destino, sin perjudicar o restringir los
derechos de los otros propietarios.
Cosas y partes necesariamente comunes:
Son cosas y partes necesariamente comunes:
a) el terreno;
b) los pasillos, vías o elementos que comunican unidades entre sí y a éstas con el exterior;
c) los techos, azoteas, terrazas y patios solares;
d) los cimientos, columnas, vigas portantes, muros maestros y demás estructuras, incluso las de balcones,
indispensables para mantener la seguridad;
e) los locales e instalaciones de los servicios centrales;
f) las cañerías que conducen fluidos o energía en toda su extensión, y los cableados, hasta su ingreso en la unidad
funcional;
g) la vivienda para alojamiento del encargado;
h) los ascensores, montacargas y escaleras mecánicas;
i) los muros exteriores y los divisorios de unidades entre sí y con cosas y partes comunes;
j) las instalaciones necesarias para el acceso y circulación de personas con discapacidad, fijas o móviles, externas a la
unidad funcional, y las vías de evacuación alternativas para casos de siniestros;
k) todos los artefactos o instalaciones existentes para servicios de beneficio común;
l) los locales destinados a sanitarios o vestuario del personal que trabaja para el consorcio.

Luciano Medina Página 30


Consorcio:
El conjunto de los propietarios de las unidades funcionales constituye la persona jurídica consorcio. Tiene su
domicilio en el inmueble. Sus órganos son la asamblea, el consejo de propietarios y el administrador.
La personalidad del consorcio se extingue por la desafectación del inmueble del régimen de propiedad horizontal,
sea por acuerdo unánime de los propietarios instrumentado en escritura pública o por resolución judicial, inscripta en
el registro inmobiliario.
El consorcio constituye un ente distinto de los propietarios, dotado con personalidad propia.

Facultades y obligaciones de los propietarios:


Facultades:
Cada propietario puede, sin necesidad de consentimiento de los demás, enajenar la unidad funcional que le
pertenece, o sobre ella constituir derechos reales o personales. La constitución, transmisión o extinción de un
derecho real, gravamen o embargo sobre la unidad funcional, comprende a las cosas y partes comunes y a la unidad
complementaria, y no puede realizarse separadamente de éstas.
La ley le otorga con relación a su unidad funcional una facultad amplia de enajenación que le permite disponer de
ella por actos entre vivos (venta, donación, permuta, pago por entrega de bienes, aporte a sociedades, etc.) o por
actos de última voluntad, a título oneroso o gratuito, en forma total o sólo por un porcentaje.
También puede simplemente abandonar la unidad sobre la que ejerce su derecho real de propiedad horizontal, pero
ello no lo libera de la obligación de abonar las expensas a su cargo.
El titular de una unidad funcional también puede constituir sobre ella cualquier tipo de derechos personales. Así
podrá darla en locación, comodato, etc., transmitiéndole a quien la recibe el derecho de usar y gozar de las cosas
comunes sin más restricciones que las que pesaban sobre el propietario.

Obligaciones:
El propietario está obligado a:
a) cumplir con las disposiciones del reglamento de propiedad horizontal, y del reglamento interno, si lo hay;
b) conservar en buen estado su unidad funcional;
c) pagar expensas comunes ordinarias y extraordinarias en la proporción de su parte indivisa;
d) contribuir a la integración del fondo de reserva, si lo hay;
e) permitir el acceso a su unidad funcional para realizar reparaciones de cosas y partes comunes y de bienes del
consorcio, como asimismo para verificar el funcionamiento de cocinas, calefones, estufas y otras cosas riesgosas o
para controlar los trabajos de su instalación;
f) notificar fehacientemente al administrador su domicilio especial si opta por constituir uno diferente del de la
unidad funcional.

Gastos y contribuciones:
Cada propietario debe atender los gastos de conservación y reparación de su propia unidad funcional.
Asimismo, debe pagar las expensas comunes ordinarias de administración y reparación o sustitución de las cosas y
partes comunes o bienes del consorcio, necesarias para mantener en buen estado las condiciones de seguridad,
comodidad y decoro del inmueble y las resultantes de las obligaciones impuestas al administrador por la ley, por el
reglamento o por la asamblea.
Igualmente son expensas comunes ordinarias las requeridas por las instalaciones necesarias para el acceso o
circulación de personas con discapacidad, fijas o móviles, y para las vías de evacuación alternativas para casos de
siniestros.
Debe también pagar las expensas comunes extraordinarias dispuestas por resolución de la asamblea.

Luciano Medina Página 31


El certificado de deuda expedido por el administrador y aprobado por el consejo de propietarios, si éste existe, es
título ejecutivo para el cobro a los propietarios de las expensas y demás contribuciones.

Defensas:
Los propietarios no pueden liberarse del pago de ninguna expensa o contribución a su cargo aun con respecto a las
devengadas antes de su adquisición, por renuncia al uso y goce de los bienes o servicios comunes, por enajenación
voluntaria o forzosa, ni por abandono de su unidad funcional.
El deudor por expensas responde con todo su patrimonio con respecto a las devengadas durante su titularidad,
aunque hayan sido devengadas antes de su adquisición. Si luego enajena su unidad adeudando períodos anteriores,
el adquiriente responde por ellos, pero sólo con la cosa mientras que el enajenante sigue obligado en la misma
extensión que antes de la transmisión. La norma también admite la posibilidad de eximir parcialmente de las
expensas, por vía reglamentaria, a los titulares de unidades que no gozan de los servicios que originan tales
erogaciones. La compensación es la única defensa de las fundadas en derechos contra el consorcio que puede invocar
el deudor.

Reglamento de propiedad horizontal:


Contenido:
El reglamento de propiedad horizontal debe contener:
a. determinación del terreno;
b. determinación de las unidades funcionales y complementarias;
c. enumeración de los bienes propios;
d. enumeración de las cosas y partes comunes;
e. composición del patrimonio del consorcio;
f. determinación de la parte proporcional indivisa de cada unidad;
g. determinación de la proporción en el pago de las expensas comunes;
h. uso y goce de las cosas y partes comunes;
i. uso y goce de los bienes del consorcio;
j. destino de las unidades funcionales;
k. destino de las partes comunes;
l. facultades especiales de las asambleas de propietarios;
m. determinación de la forma de convocar la reunión de propietarios, su periodicidad y su forma de notificación;
n. especificación de limitaciones a la cantidad de cartas poderes que puede detentar cada titular de unidad funcional
para representar a otros en asambleas;
ñ. determinación de las mayorías necesarias para las distintas decisiones;
o. determinación de las mayorías necesarias para modificar el reglamento de propiedad horizontal;
p. forma de computar las mayorías;
q. determinación de eventuales prohibiciones para la disposición o locación de unidades complementarias hacia
terceros no propietarios;
r. designación, facultades y obligaciones especiales del administrador;
s. plazo de ejercicio de la función de administrador;
t. fijación del ejercicio financiero del consorcio;
u. facultades especiales del consejo de propietarios.

Luciano Medina Página 32


Modificación del reglamento:
El reglamento sólo puede modificarse por resolución de los propietarios, mediante una mayoría de dos tercios de la
totalidad de los propietarios.

Órganos:
Asamblea:
La asamblea es la reunión de propietarios que funciona como medio de formación y expresión de su voluntad y que
está facultada para resolver las cuestiones que la norma le somete a su decisión.

Facultades de la asamblea:
La asamblea es la reunión de propietarios facultada para resolver:
a. las cuestiones que le son atribuidas especialmente por la ley o por el reglamento de propiedad horizontal;
b. las cuestiones atribuidas al administrador o al consejo de propietarios cuando le son sometidas por cualquiera de
éstos o por quien representa el cinco por ciento de las partes proporcionales indivisas con relación al conjunto;
c. las cuestiones sobre la conformidad con el nombramiento y despido del personal del consorcio;
d. las cuestiones no contempladas como atribuciones del administrador o del consejo de propietarios, si lo hubiere.

Consejo de propietarios:
Atribuciones:
La asamblea puede designar un consejo integrado por propietarios, con las siguientes atribuciones:
a) convocar a la asamblea y redactar el orden del día si por cualquier causa el administrador omite hacerlo;
b) controlar los aspectos económicos y financieros del consorcio;
c) autorizar al administrador para disponer del fondo de reserva, ante gastos imprevistos y mayores que los
ordinarios;
d) ejercer la administración del consorcio en caso de vacancia o ausencia del administrador, y convocar a la asamblea
si el cargo está vacante dentro de los treinta días de producida la vacancia.
Excepto los casos indicados en este artículo, el consejo de propietarios no sustituye al administrador, ni puede
cumplir sus obligaciones.

Administrador:
Representación legal:
El administrador es representante legal del consorcio con el carácter de mandatario. Puede serlo un propietario o un
tercero, persona humana o jurídica.

Designación y remoción:
El primer administrador será nombrado por el titular o los condóminos del inmueble al momento de redactar el
reglamento.
La primera asamblea debe realizarse dentro de los noventa días de cumplidos los dos años de otorgamiento del
reglamento o del momento en que se encuentren ocupadas el 50% de las unidades funcionales, lo que ocurra
primero.
La norma fija un tiempo límite para que tenga lugar esa primera reunión de propietarios y previene que los
administradores sucesivos deben ser nombrados y removidos por la asamblea, sin que ello importe la reforma del
reglamento.
El nuevo administrador será elegido por el voto de la mayoría absoluta.
La designación del reemplazante no implica la modificación del reglamento de propiedad horizontal.
El administrador puede ser removido sin expresión de causa.
Luciano Medina Página 33
Derechos y obligaciones:
El administrador tiene los derechos y obligaciones impuestos por la ley, el reglamento y la asamblea de propietarios.
En especial debe:
a) convocar a la asamblea y redactar el orden del día;
b) ejecutar las decisiones de la asamblea;
c) atender a la conservación de las cosas y partes comunes y a la seguridad de la estructura del edificio y dar
cumplimiento a todas las normas de seguridad y verificaciones impuestas por las reglamentaciones locales;
d) practicar la cuenta de expensas y recaudar los fondos necesarios para satisfacerlas. Para disponer total o
parcialmente del fondo de reserva, ante gastos imprevistos y mayores que los ordinarios, el administrador debe
requerir la autorización previa del consejo de propietarios;
e) rendir cuenta documentada dentro de los sesenta días de la fecha de cierre del ejercicio financiero fijado en el
reglamento de propiedad horizontal;
f) nombrar y despedir al personal del consorcio, con acuerdo de la asamblea convocada al efecto;
g) cumplir con las obligaciones derivadas de la legislación laboral, previsional y tributaria;
h) mantener asegurado el inmueble con un seguro integral de consorcios que incluya incendio, responsabilidad civil y
demás riesgos de práctica, aparte de asegurar otros riesgos que la asamblea resuelva cubrir;
i) llevar en legal forma los libros de actas, de administración, de registro de propietarios, de registros de firmas y
cualquier otro que exija la reglamentación local. También debe archivar cronológicamente las liquidaciones de
expensas, y conservar todos los antecedentes documentales de la constitución del consorcio y de las sucesivas
administraciones;
j) en caso de renuncia o remoción, dentro de los quince días hábiles debe entregar al consejo de propietarios los
activos existentes, libros y documentos del consorcio, y rendir cuentas documentadas;
k) notificar a todos los propietarios inmediatamente, y en ningún caso después de las cuarenta y ocho horas hábiles
de recibir la comunicación respectiva, la existencia de reclamos administrativos o judiciales que afecten al consorcio;
l) a pedido de parte interesada, expedir dentro del plazo de tres días hábiles el certificado de deudas y de créditos
del consorcio por todo concepto con constancia de la existencia de reclamos administrativos o judiciales e
información sobre los seguros vigentes;
m) representar al consorcio en todas las gestiones administrativas y judiciales como mandatario exclusivo con todas
las facultades propias de su carácter de representante legal.

Actas:
Es obligatorio llevar un Libro de Actas de Asamblea y un Libro de Registro de firmas de los propietarios.
Debe labrarse acta de cada asamblea en el libro respectivo, en el que los presentes deben firmar como constancia de
su asistencia. Las firmas que suscriben cada asamblea deben ser cotejadas por el administrador con las firmas
originales registradas.
Las actas deben confeccionarse por un secretario de actas elegido por los propietarios; éstas deben contener el
resumen de lo deliberado y la transcripción de las decisiones adoptadas o, en su caso, propuestas por la mayoría de
los presentes, y ser firmadas por el presidente de la asamblea y dos propietarios. Al pie de cada acta, el administrador
debe dejar constancia de las comunicaciones enviadas a los ausentes, de las oposiciones recibidas y de las eventuales
conformidades expresas.

Prehorizontalidad:
Concepto:
La prehorizontalidad hace referencia al momento previo a la constitución de la propiedad horizontal. Es decir que
abarca el período que corre desde el momento en que se ofrecen en venta unidades ya construidas o recién
Luciano Medina Página 34
proyectadas, hasta que finaliza la edificación y se redacta e inscribe el reglamento que provoca la división jurídica del
edificio y hace nacer el “estado de propiedad horizontal”.
Las normas de este capítulo rigen aspectos vinculados a la protección del adquirente en los contratos sobre unidades
funcionales celebrados durante este período.

Seguro obligatorio:
Para poder celebrar contratos sobre unidades construidas o proyectadas bajo el régimen de propiedad horizontal, el
titular del dominio del inmueble debe constituir un seguro a favor del adquirente, para el riesgo del fracaso de la
operación de acuerdo a lo convenido por cualquier razón, y cuya cobertura comprenda el reintegro de las cuotas
abonadas con más un interés retributivo o, en su caso, la liberación de todos los gravámenes que el adquirente no
asume en el contrato preliminar.
El incumplimiento de la obligación impuesta en este artículo priva al titular del dominio de todo derecho contra el
adquirente a menos que cumpla íntegramente con sus obligaciones, pero no priva al adquirente de sus derechos
contra el enajenante.
De esta manera, la ley le otorga al adquirente una protección jurídica razonable contra la insolvencia del vendedor,
haya sido provocada o no, y busca impedir las consecuencias negativas de una enajenación o gravamen con los que
se pretenda desbaratar los derechos del primero.
Si bien no queda garantizada la entrega de la unidad, la norma persigue lograr el recupero económico por parte del
frustrado adquirente.

Conjuntos inmobiliarios:
Concepto:
Son conjuntos inmobiliarios los clubes de campo, barrios cerrados o privados, parques industriales, empresariales o
náuticos, o cualquier otro emprendimiento urbanístico independientemente del destino de vivienda permanente o
temporaria, laboral, comercial o empresarial que tenga, comprendidos asimismo aquellos que contemplan usos
mixtos, con arreglo a lo dispuesto en las normas administrativas locales.

Características:
Son elementos característicos de estas urbanizaciones, los siguientes: cerramiento, partes comunes y privativas,
estado de indivisión forzosa y perpetua de las partes, lugares y bienes comunes, reglamento por el que se establecen
órganos de funcionamiento, limitaciones y restricciones a los derechos particulares y régimen disciplinario, obligación
de contribuir con los gastos y cargas comunes y entidad con personería jurídica que agrupe a los propietarios de las
unidades privativas. Las diversas partes, cosas y sectores comunes y privativos, así como las facultades que sobre
ellas se tienen, son interdependientes y conforman un todo no escindible.

Marco legal:
Todos los aspectos relativos a las zonas autorizadas, dimensiones, usos, cargas y demás elementos urbanísticos
correspondientes a los conjuntos inmobiliarios, se rigen por las normas administrativas aplicables en cada
jurisdicción.
Todos los conjuntos inmobiliarios deben someterse a la normativa del derecho real de propiedad horizontal a los
fines de conformar un derecho real de propiedad horizontal especial.
Los conjuntos inmobiliarios preexistentes que se hubiesen establecido como derechos personales o donde coexistan
derechos reales y derechos personales se deben adecuar a las previsiones normativas que regulan este derecho real.
El objeto del derecho real no es el conjunto inmobiliario, sino sus sectores o partes de uso privativo y común que se

Luciano Medina Página 35


transfieran en propiedad al adquirente.
Se trata así de un derecho real sobre cosa propia, registrable, principal y que se ejerce por la posesión.

Cosas y partes necesariamente comunes:


Son necesariamente comunes o de uso común las partes y lugares del terreno destinadas a vías de circulación,
acceso y comunicación, áreas específicas destinadas al desarrollo de actividades deportivas, recreativas y sociales,
instalaciones y servicios comunes, y todo otro bien afectado al uso comunitario, calificado como tal por el respectivo
reglamento de propiedad horizontal que regula el emprendimiento.
Las cosas y partes cuyo carácter de comunes o propias no esté determinado se consideran comunes.

Cosas y partes privativas:


La unidad funcional que constituye parte privativa puede hallarse construida o en proceso de construcción, y debe
reunir los siguientes requisitos:
a) ser independientes (la independencia debe ser “funcional”, es decir, que la unidad construida debe ser apta para
satisfacer el destino que se le haya asignado en el reglamento de propiedad y administración.
Dicho de otro modo, cada unidad debe ser autónoma y bastarse a sí misma para satisfacer el fin previsto.
b) tener comunicación con la vía pública (es necesario que tengan salida directa a la vía pública o que puedan llegar a
ella a través de un pasaje común).

Tiempo compartido:
Concepto:
Se considera que existe tiempo compartido si uno o más bienes están afectados a su uso periódico y por turnos, para
alojamiento, hospedaje, comercio, turismo, industria u otros fines y para brindar las prestaciones compatibles con su
destino.
Es un sistema por el cual varios sujetos tienen el uso y goce sobre un objeto común e indiviso (habitación o
departamento) junto con sus accesorios y servicios, en forma exclusiva y alternada por un lapso de tiempo.

Afectación:
La constitución de un tiempo compartido requiere la afectación de uno o más objetos a la finalidad de
aprovechamiento periódico y por turnos, la que, en caso de tratarse de inmuebles, debe formalizarse por escritura
pública, que debe contener los requisitos establecidos en la normativa especial.

Legitimación:
El instrumento de afectación de un tiempo compartido debe ser otorgado por el titular del dominio. En el supuesto
en que dicho titular no coincida con la persona del emprendedor, éste debe comparecer a prestar su consentimiento
a la afectación instrumentada.

Inscripción:
El instrumento de afectación debe ser inscripto en el respectivo Registro de la Propiedad y en el Registro de
Prestadores y Establecimientos afectados a Sistemas de Tiempo Compartido previsto en la ley especial, previo a todo
anuncio, ofrecimiento o promoción comercial.

Efectos de la inscripción:
Efectos del instrumento de afectación:
La inscripción del instrumento de afectación en el respectivo Registro de la Propiedad determina:
a. la prohibición al propietario y al emprendedor de modificar el destino previsto en el instrumento; sin embargo, el

Luciano Medina Página 36


emprendedor puede comercializar los periodos de disfrute no enajenados, con otras modalidades contractuales (el
titular del dominio puede realizar actos de disposición, pero los sucesores deben respetar el destino impuesto por la
afectación. Si fallece el titular, los herederos se encontrarán en su misma situación);
b. la oponibilidad de los derechos de los usuarios del tiempo compartido, que no pueden ser alterados o disminuidos
por sucesores particulares o universales, ni por terceros acreedores del propietario o del emprendedor, ni siquiera en
caso de concurso o quiebra.

Relación de consumo:
La relación entre el propietario, emprendedor, comercializador y administrador del tiempo compartido con quien
adquiere o utiliza el derecho de uso periódico se rige por las normas que regulan la relación de consumo, previstas en
este Código y en las leyes especiales.

Derecho real del adquirente de tiempo compartido:


Al derecho del adquirente de tiempo compartido se le aplican las normas sobre derechos reales.

Punto Nº 3: CEMENTERIOS PRIVADOS


Concepto:
Se consideran cementerios privados a los inmuebles de propiedad privada afectados a la inhumación de restos
humanos.

Afectación:
El titular de dominio debe otorgar una escritura de afectación del inmueble a efectos de destinarlo a la finalidad de
cementerio privado, que se inscribe en el Registro de la Propiedad Inmueble juntamente con el reglamento de
administración y uso del cementerio. A partir de su habilitación por parte de la municipalidad local el cementerio no
puede alterar su destino ni ser gravado con derechos reales de garantía.
La afectación del objeto al destino de cementerio privado tiene por fin evitar que el inmueble pueda ser embargado
y ejecutado por los acreedores.

Reglamento de administración y uso:


El reglamento de administración y uso debe contener:
a. la descripción del inmueble sobre el cual se constituye el cementerio privado, sus partes, lugares, instalaciones y
servicios comunes;
b. disposiciones de orden para facilitar a los titulares de los derechos de sepultura el ejercicio de sus facultades y que
aseguren el cumplimiento de las normas legales, reglamentarias y de policía aplicables;
c. fijación y forma de pago del canon por administración y mantenimiento, que puede pactarse por períodos anuales
o mediante un único pago a perpetuidad;
d. normativa sobre inhumaciones, exhumaciones, cremaciones y traslados;
e. pautas sobre la construcción de sepulcros;
f. disposiciones sobre el destino de los restos mortales en sepulturas abandonadas;
g. normas sobre acceso y circulación de titulares y visitantes;
h. constitución y funcionamiento de los órganos de administración.

Punto Nº 4: DERECHO DE SUPERFICIE

Luciano Medina Página 37


Concepto:
El derecho de superficie es un derecho real temporario, que se constituye sobre un inmueble ajeno, que otorga a su
titular la facultad de uso, goce y disposición material y jurídica del derecho de plantar, forestar o construir, o sobre lo
plantado, forestado o construido en el terreno, el vuelo o el subsuelo, según las modalidades de su ejercicio y plazo
de duración establecidos en el título suficiente para su constitución y dentro de lo previsto en este Título y las leyes
especiales.
El derecho de superficie es, en términos simples, el derecho real de tener una cosa propia en terreno ajeno. La
superficie, con más técnica, es el derecho real de construir, plantar o forestar sobre un inmueble ajeno y hacer propio
lo incorporado, o de adquirir una construcción, plantación o forestación ya existente separada de la propiedad de su
emplazamiento, por un plazo determinado.

Modalidades:
El superficiario puede realizar construcciones, plantaciones o forestaciones sobre la rasante, vuelo y subsuelo del
inmueble ajeno, haciendo propio lo plantado, forestado o construido.
También puede constituirse el derecho sobre plantaciones, forestaciones o construcciones ya existentes,
atribuyendo al superficiario su propiedad.
En ambas modalidades, el derecho del superficiario coexiste con la propiedad separada del titular del suelo.

Plazos:
El plazo convenido en el título de adquisición no puede exceder de setenta años cuando se trata de construcciones y
de cincuenta años para las forestaciones y plantaciones, ambos contados desde la adquisición del derecho de
superficie. El plazo convenido puede ser prorrogado siempre que no exceda de los plazos máximos.

Facultades del superficiario:


El titular del derecho de superficie está facultado para constituir derechos reales de garantía sobre el derecho de
construir, plantar o forestar o sobre la propiedad superficiaria, limitados, en ambos casos, al plazo de duración del
derecho de superficie.
El superficiario puede afectar la construcción al régimen de la propiedad horizontal, con separación del terreno
perteneciente al propietario excepto pacto en contrario; puede transmitir y gravar como inmuebles independientes
las viviendas, locales u otras unidades privativas, durante el plazo del derecho de superficie, sin necesidad de
consentimiento del propietario.

Facultades del propietario:


El propietario conserva la disposición material y jurídica que corresponde a su derecho, siempre que las ejerza sin
turbar el derecho del superficiario.
Por ejemplo, el dueño podría hipotecar, en la medida en que no afecte al superficiario.

Extinción:
El derecho de construir, plantar o forestar se extingue por renuncia expresa, vencimiento del plazo, cumplimiento de
una condición resolutoria, por consolidación y por el no uso durante diez años, para el derecho a construir, y de
cinco, para el derecho a plantar o forestar.

Efectos de la extinción:
Al momento de la extinción del derecho de superficie por el cumplimiento del plazo convencional o legal, el
propietario del suelo hace suyo lo construido, plantado o forestado, libre de los derechos reales o personales
impuestos por el superficiario.

Luciano Medina Página 38


Punto Nº 5: NOCIONES SOBRE LOS DERECHOS REALES DE:
Usufructo:
Concepto:
Usufructo es el derecho real de usar, gozar y disponer jurídicamente de un bien ajeno (cosa mueble, inmueble o
derecho), sin alterar su sustancia. Hay alteración de la sustancia, si es una cosa, cuando se modifica su materia, forma
o destino, y si se trata de un derecho, cuando se lo menoscaba.
Debe restituir al momento de culminar el usufructo la misma cosa recibida con el desgaste o deterioro normal
producido por el paso del tiempo.

Uso:
Concepto:
El uso es el derecho real que consiste en usar y gozar de una cosa ajena, su parte material o indivisa, en la extensión
y con los límites establecidos en el título, sin alterar su sustancia. Si el título no establece la extensión del uso y goce,
se entiende que se constituye un usufructo.
El derecho real de uso sólo puede constituirse a favor de persona humana.
Debe restituir al momento de culminar el derecho la misma cosa recibida con el desgaste o deterioro normal
producido por el paso del tiempo.

El uso es más restringido que el usufructo, ya que el usuario podrá percibir los frutos, pero sólo en cuanto sea
necesario para él y su familia.
La necesidad se mide según la condición socioeconómica, el estado de salud, el lugar donde vivan el usuario y su
familia. No se consideran “necesidades” las relativas a la industria o al comercio del usuario (por ejemplo, si tengo el
uso sobre una finca que produce manzanas y tengo una frutería, no puedo abastecer mi comercio con esas
manzanas).

Habitación:
Concepto:
La habitación es el derecho real que consiste en morar en un inmueble ajeno construido, o en parte material de él,
sin alterar su sustancia.
El derecho real de habitación sólo puede constituirse a favor de persona humana.

Servidumbre:
Definición:
La servidumbre es el derecho real que se establece entre dos inmuebles y que concede al titular del inmueble
dominante determinada utilidad sobre el inmueble sirviente ajeno. La utilidad puede ser de mero recreo.
Ejemplo: supongamos un campo que no tiene salida a una ruta importante, porque otro campo se interpone, por lo
tanto los dueños de ambos campos suscriben un acuerdo mediante el cual el propietario del fundo que está ubicado
a orillas de la ruta (fundo sirviente), se compromete a permitir el paso desde y hasta la ruta por a través de él a todos
los que pretendan acceder al fundo encerrado (fundo dominante).

Objeto:
La servidumbre puede tener por objeto la totalidad o una parte material (por ejemplo una servidumbre de paso) del
inmueble ajeno.

Luciano Medina Página 39


Servidumbre forzosa:
Nadie puede imponer la constitución de una servidumbre, excepto que la ley prevea expresamente la necesidad
jurídica de hacerlo, caso en el cual se denomina forzosa.
Son servidumbres forzosas y reales la servidumbre de tránsito a favor de un inmueble sin comunicación suficiente
con la vía pública, la de acueducto cuando resulta necesaria para la explotación económica establecida en el
inmueble dominante, o para la población, y la de recibir agua extraída o degradada artificialmente de la que no
resulta perjuicio grave para el fundo sirviente o, de existir, es canalizada subterráneamente o en cañerías.
Si el titular del fundo sirviente no conviene la indemnización con el del fundo dominante, o con la autoridad local si
está involucrada la población, se la debe fijar judicialmente.
La acción para reclamar una servidumbre forzosa es imprescriptible.
El titular del fundo sirviente tiene derecho a una indemnización.

Punto Nº 6: DERECHOS REALES DE GARANTÍA


Caracteres:

Convencionalidad:
Los derechos reales de garantía sólo pueden ser constituidos por contrato, celebrado por los legitimados y con las
formas que la ley indica para cada tipo.

Accesoriedad:
Los derechos reales de garantía son accesorios del crédito que aseguran, son intransmisibles sin el crédito y se
extinguen con el principal, excepto en los supuestos legalmente previstos.
La extinción de la garantía por cualquier causa, incluida la renuncia, no afecta la existencia del crédito.
La garantía real es inseparable del crédito al que garantiza y asegura, aunque se puede extinguir el gravamen sin la
extinción del crédito. El carácter accesorio significa que la garantía real nace, precisamente, para asegurar el
cumplimiento de la obligación y, por tanto, queda afectada por todas las vicisitudes del crédito al que sirve de
garantía (nacimiento, transmisión, extinción, etc.), no se puede transmitir sino con el crédito que asegura.

Especialidad en cuanto al objeto:


Cosas y derechos pueden constituir el objeto de los derechos reales de garantía. Ese objeto debe ser actual, y estar
individualizado adecuadamente en el contrato constitutivo.

Especialidad en cuanto al crédito:


El monto de la garantía o gravamen debe estimarse en dinero. La especialidad queda cumplida con la expresión del
monto máximo del gravamen.
El crédito puede estar individualizado en todos los elementos desde el origen o puede nacer posteriormente; más en
todos los casos, el gravamen constituye el máximo de la garantía real por todo concepto, de modo que cualquier
suma excedente es quirografaria, sea por capital, intereses, costas, multas, u otros conceptos.
El acto constitutivo debe prever el plazo al que la garantía se sujeta, que no puede exceder de diez años, contados
desde ese acto. Vencido el plazo, la garantía subsiste en seguridad de los créditos nacidos durante su vigencia.
La especialidad crediticia constituye el grado de agresión patrimonial que tiene el acreedor

Indivisibilidad:
Los derechos reales de garantía son indivisibles. La indivisibilidad consiste en que cada uno de los bienes afectados a
una deuda y cada parte de ellos, están afectados al pago de toda la deuda y de cada una de sus partes.

Luciano Medina Página 40


El acreedor cuya garantía comprenda varios bienes puede perseguirlos a todos conjuntamente, o sólo a uno o
algunos de ellos, con prescindencia de a quién pertenezca o de la existencia de otras garantías.
Puede convenirse la divisibilidad de la garantía respecto del crédito y de los bienes afectados. También puede
disponerla el juez fundadamente, a solicitud de titular del bien, siempre que no se ocasione perjuicio al acreedor, o a
petición de este último si hace a su propio interés.

Créditos garantizables:
La causa fuente de los derechos reales de garantía serán siempre obligaciones: sin sujeción a condición alguna (puras
y simples), o diferidas en el tiempo hasta el vencimiento de un término (a plazo), o subordinadas en su eficacia o
resolución a un hecho futuro e incierto (condicionales o eventuales), o que impliquen la entrega de alguna cosa (de
dar), o aquella cuyo objeto consiste en las prestación de un servicio o en la realización de un hecho (de hacer) o una
abstención del deudor o tolerar una actividad ajena (no hacer).

Cancelación del gravamen:


Las garantías inscriptas en los registros respectivos se cancelan:
a) por su titular, mediante el otorgamiento de un instrumento de igual naturaleza que el exigido para su
constitución, con el que el interesado puede instar la cancelación de las respectivas constancias registrales;
b) por el juez, ante el incumplimiento del acreedor, sea o no imputable; la resolución respectiva se inscribe en el
registro, a sus efectos.
En todos los casos puede requerirse que la cancelación se asiente por nota marginal en el ejemplar del título
constitutivo de la garantía.

Hipoteca:
Concepto:
La hipoteca es el derecho real de garantía que recae sobre uno o más inmuebles individualizados que continúan en
poder del constituyente y que otorga al acreedor, ante el incumplimiento del deudor, las facultades de persecución y
preferencia para cobrar sobre su producido el crédito garantizado.
La cosa gravada con este derecho real (siempre inmueble) queda afectada al cumplimiento de la obligación principal
a la que accede, disminuyendo así el riesgo de que el crédito quede insatisfecho.

Legitimación:
Pueden constituir hipoteca los titulares de los derechos reales de dominio, condominio, propiedad horizontal,
conjuntos inmobiliarios y superficie.

Forma del contrato constitutivo:


La hipoteca se constituye por escritura pública excepto expresa disposición legal en contrario. La aceptación del
acreedor puede ser ulterior, siempre que se otorgue con la misma formalidad y previamente a la registración.

Inoponibilidad:
La adquisición o transmisión de derechos reales constituidos de conformidad a las disposiciones de este Código no
son oponibles a terceros interesados y de buena fe mientras no tengan publicidad suficiente.
Se considera publicidad suficiente la inscripción registral o la posesión, según el caso.
Si el modo consiste en una inscripción constitutiva, la registración es presupuesto necesario y suficiente para la
oponibilidad del derecho real.
No pueden prevalerse de la falta de publicidad quienes participaron en los actos, ni aquellos que conocían o debían
conocer la existencia del título del derecho real.

Luciano Medina Página 41


La publicidad consiste en la exteriorización de las situaciones jurídicas reales, a los efectos de su oponibilidad a los
terceros interesados de buena fe, mediante el conocimiento que aquellos adquieran en la forma impuesta por la ley.
Los sujetos pasivos de esa relación –integrantes de la sociedad- tienen el deber de respetar los derechos reales, y es
a ese fin que se los da a publicidad.
Esté articulo prevé dos formas de publicitar los derechos reales.
Una es la tradición, la que, además de su función constitutiva del derecho real, cumple un rol publicitario cuando se
trata de cosas muebles no registrables (ejemplo: un reloj).
Cuando se trata de cosas registrables, sean muebles o inmuebles, y sea la inscripción declarativa o constitutiva, la
publicidad concreta a través de la inscripción en el Registro que corresponda.
La oponibilidad es la posibilidad de hacer valer un derecho o una relación jurídica a los terceros que no participan de
ella.

Duración de la inscripción:
Los efectos del registro de la hipoteca se conservan por el término de veinte años, si antes no se renueva.

Prenda:
Concepto:
La prenda es el derecho real de garantía sobre cosas muebles no registrables o créditos instrumentados. Se
constituye por el dueño o la totalidad de los copropietarios, por contrato formalizado en instrumento público o
privado y tradición al acreedor prendario o a un tercero designado por las partes. Esta prenda se rige por las
disposiciones contenidas en el presente Capítulo.
El Código contempla dos clases de prenda: la prenda común, sin registro, con desplazamiento o posesoria, y la
prenda con registro, sin desplazamiento o no posesoria.
La primera, exige para su configuración que el constituyente entregue la cosa al acreedor –o a un tercero-, quien
debe ejercer la posesión reconociendo la propiedad en cabeza del constituyente.
En la prenda con registro, el constituyente no se desprende de la cosa, no hay desplazamiento, pero las partes
pueden acordar que la cosa quede depositada en poder de un tercero, quien ejerce la tenencia en nombre del
constituyente.

Prenda con registro:


Asimismo, puede constituirse prenda con registro para asegurar el pago de una suma de dinero, o el cumplimiento
de cualquier clase de obligaciones a las que los contrayentes le atribuyen, a los efectos de la garantía prendaria, un
valor consistente en una suma de dinero, sobre bienes que deben quedar en poder del deudor o del tercero que los
haya prendado en seguridad de una deuda ajena. Esta prenda se rige por la legislación especial.
Los bienes sobre los cuales recaiga la prenda con registro quedarán en poder del deudor o del tercero que los haya
prendado en seguridad de una deuda ajena.
Los bienes afectados a la prenda garantizan al acreedor, con privilegio especial sobre ellos, el importe de la
obligación asegurada, intereses y gastos en los términos del contrato y de las disposiciones del presente.
La prenda con registro podrá constituirse a favor de cualquier persona física o jurídica, tenga o no domicilio en el
país.
Durante la vigencia de un contrato prendario, el dueño de los bienes no puede constituir, bajo pena de nulidad, otra
prenda sobre éstos, salvo que los que autorice por escrito el acreedor.
El dueño de los bienes prendados puede industrializarlos o continuar con ellos el proceso de su utilización
económica; los nuevos productos quedan sujetos a la misma prenda. En el contrato de prenda puede estipularse que
los bienes se conservarán en el estado en que se encuentren, sin industrializarlos, ni transformarlos.

Luciano Medina Página 42


El dueño de los bienes prendados no puede enajenarlos, pudiendo hacerlo solamente en el caso que el adquirente se
haga cargo de la deuda garantizada, continuando en vigor la prenda bajo las mismas condiciones en que se
constituyó, inclusive en cuanto a la responsabilidad del enajenante. La transferencia se anotará en el Registro y se
notificará al acreedor mediante telegrama colacionado.

Bolilla 9: TRANSMISIÓN DE DERECHOS POR CAUSA DE MUERTE


Punto Nº 1: TRANSMISIÓN DE DERECHOS POR CAUSA DE MUERTE
Sucesión:
Concepto:
Es toda transmisión de derechos y obligaciones. La sucesión puede ser por “actos entre vivos” o por “causa de
muerte”. Por actos entre vivos se produce la sucesión de los derechos del enajenante al adquirente en la
compraventa, donación, en la cesión, etc.
La sucesión por causa de muerte, llamada en la terminología jurídica “mortis causa” o transmisión hereditaria, es la
que se produce al fallecer una persona, cuyos derechos y obligaciones pasan a sus herederos por imperio de la ley.
El que transmite los derechos se llama “causante” y el que los recibe “sucesor o heredero”.
La muerte real o presunta de una persona causa la apertura de su sucesión y la transmisión de su herencia a las
personas llamadas a sucederle por el testamento o por la ley.

Clases:

Sucesión intestada o legítima:


Si no hay testamento, o éste no dispone de la totalidad de los bienes, el interesado debe expresar si el derecho que
pretende es exclusivo, o si concurren otros herederos.
Justificado el fallecimiento, se notifica a los herederos denunciados en el expediente, y se dispone la citación de
herederos, acreedores y de todos los que se consideren con derecho a los bienes dejados por el causante, por edicto
publicado por un día en el diario de publicaciones oficiales, para que lo acrediten dentro de los treinta días.

Sucesión testamentaria:
Quien peticiona la apertura del proceso judicial sucesorio deberá presentar el testamento que invoque o indicar el
lugar donde se encuentre. Tratándose de confección ológrafa (escrita por el testador), previo a la apertura del
proceso se comprobará la autenticidad de su confección. Luego de ello el juez rubrica (certificar, dar validez) cada una
de las páginas que integran el testamento de las disposiciones de última voluntad y ordena su protocolización
(Incorporar a un protocolo una escritura o documento).

Apertura de la sucesión:
La muerte real o presunta de una persona causa la apertura de su sucesión y la transmisión de su herencia a las
personas llamadas a sucederle por el testamento o por la ley. Si el testamento dispone sólo parcialmente de los
bienes, el resto de la herencia se defiere por la ley.
La herencia comprende todos los derechos y obligaciones del causante que no se extinguen por su fallecimiento.

Sucesores:
Concepto:
La persona a la cual se le transmiten los derechos y obligaciones se llama sucesor. En adelante puede ejercer en su

Luciano Medina Página 43


propio nombre los derechos adquiridos por herencia. Pueden tener el carácter de sucesores por ley y se llaman
legítimos y por voluntad del causante, denominándose en este caso testamentarios.

Clases de sucesores:
Heredero:
Se denomina heredero a la persona a quien se transmite la universalidad o una parte indivisa de la herencia.
Si la sucesión tiene lugar entre ascendientes, descendientes y cónyuge, el heredero queda investido de su calidad de
tal desde el día de la muerte del causante, sin ninguna formalidad o intervención de los jueces, aunque ignore la
apertura de la sucesión y su llamamiento a la herencia. Puede ejercer todas las acciones transmisibles que
correspondían al causante.
Los herederos pueden promover demandas, continuar las que ya se encontraban promovidas por el causante,
contestar aquellas que se le entablen en su carácter de heredero, continuar defensas en aquellas en que ya había
sido demandado, administrar los bienes hereditarios, tanto muebles como inmuebles, ceder los derechos sucesorios
y, en general, disponer de los bienes. Los bienes registrables no pueden transferirlos sin obtener previamente el
reconocimiento judicial de la calidad de heredero.

Legatario:
Legatario es el que recibe un bien particular del testamento o un conjunto de ellos.
Se da cuando el causante mediante testamento instituye sucesores de determinados bienes de su patrimonio.

Personas que pueden suceder:


Pueden suceder al causante:
a. las personas humanas existentes al momento de su muerte;
b. las concebidas en ese momento que nazcan con vida;
c. las nacidas después de su muerte mediante técnicas de reproducción humana asistida, con los requisitos previstos
en el artículo 561;
d. las personas jurídicas existentes al tiempo de su muerte y las fundaciones creadas por su testamento.

Situación de los herederos:


Desde la muerte del causante, los herederos tienen todos los derechos y acciones de aquél de manera indivisa, con
excepción de los que no son transmisibles por sucesión, y continúan en la posesión de lo que el causante era
poseedor.
Si están instituidos bajo condición suspensiva, están en esa situación a partir del cumplimiento de la condición, sin
perjuicio de las medidas conservatorias que corresponden.
En principio, responden por las deudas del causante con los bienes que reciben, o con su valor en caso de haber sido
enajenados.

Punto Nº 2: ACEPTACIÓN DE HERENCIA


Concepto:
La aceptación es el acto jurídico por el cual el heredero manifiesta su conformidad en recibir los bienes que
componen el patrimonio de su antecesor.

Formas de la aceptación:

Luciano Medina Página 44


Aceptación Expresa:
Será expresa cuando el heredero manifieste su voluntad mediante un acto formal de aceptación, realizado en
instrumento público o privado.

Aceptación Tácita:
Será tácita cuando a pesar de no haber una declaración expresa, realiza actos que sólo conciben en su carácter de
heredero aceptante de la herencia.
Ejemplo: inicial el juicio sucesorio, arrendar o vender bienes de la herencia, pagar impuestos o tasas que gravan los
mismo, la ocupación de inmuebles del que el causante era dueño.

Aceptación Forzada:
Es cuando se impone al heredero por haber ocultado o sustraído cosas o bienes de la herencia
El heredero que oculta o sustrae bienes de la herencia pierde el derecho de renunciar, y no tiene parte alguna en
aquello que ha sido objeto de su ocultamiento o sustracción. En el supuesto de que no pueda restituir la cosa, debe
restituir su valor, estimado al momento de la restitución.

Aceptación con Beneficio de Inventario:


La ley presume que toda aceptación de herencia, se hace con “beneficio de inventario”. Así dispone el nuevo art.
2317, al decir: “El heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión sólo hasta la concurrencia del
valor de los bienes hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de herederos, éstos responden con la masa
hereditaria indivisa”.
La principal consecuencia de la aceptación de la herencia con beneficio de inventario, es la de limitar la
responsabilidad del heredero por las deudas fallecido, única y exclusivamente a los bienes que recibe, evitando en
consecuencia la confusión de patrimonios y liberando al suyo propio de los perjuicios que podría acarrearle la
aceptación de una herencia cargada de deudas.
Los representantes de los incapaces están obligados a aceptar siempre la herencia de sus representantes con
beneficio a inventario a fin de proteger el patrimonio de los incapaces.

Actos que implican aceptación:


Implican aceptación de la herencia:
a) la iniciación del juicio sucesorio del causante o la presentación en un juicio en el cual se pretende la calidad de
heredero o derechos derivados de tal calidad;
b) la disposición a título oneroso o gratuito de un bien o el ejercicio de actos posesorios sobre él;
c) la ocupación o habitación de inmuebles de los que el causante era dueño o condómino después de transcurrido un
año del deceso;
d) el hecho de no oponer la falta de aceptación de la herencia en caso de haber sido demandado en calidad de
heredero;
e) la cesión de los derechos hereditarios, sea a título oneroso o gratuito;
f) la renuncia de la herencia en favor de alguno o algunos de sus herederos, aunque sea gratuita;
g) la renuncia de la herencia por un precio, aunque sea en favor de todos sus coherederos.

Acreedores preferentes (preferencia):


Los acreedores por deudas del causante y por cargas de la sucesión, y los legatarios tienen derecho al cobro de sus
créditos y legados sobre los bienes de la herencia, con preferencia sobre los acreedores de los herederos.

Luciano Medina Página 45


Responsabilidad del heredero:
El heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión sólo hasta la concurrencia del valor de los bienes
hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de herederos, éstos responden con la masa hereditaria indivisa.
Los herederos, en principio, responden por las deudas del causante con los bienes que reciben, o con su valor en
caso de haber sido enajenados.
El heredero tiene la facultad que la ley le concede de agotar la herencia para el pago de deudas y cargas de la
sucesión y, así, no quedar obligado a pagar a los acreedores del difunto más de lo que importe la herencia misma.

Renuncia de la herencia:
El heredero puede renunciar a la herencia en tanto no haya mediado acto de aceptación. No es necesaria la
expresión de causa o motivo alguno para el ejercicio de este derecho.
La renuncia debe ser siempre expresa, pues ella no se presume.
La renuncia de la herencia debe ser expresada en escritura pública; también puede ser hecha en acta judicial
incorporada al expediente judicial, siempre que el sistema informático asegure la inalterabilidad del instrumento.
Todo heredero puede aceptar la herencia que le es deferida o renunciarla, pero no puede hacerlo por una parte de la
herencia ni sujetar su opción a modalidades. La aceptación parcial implica la del todo; la aceptación bajo modalidades
se tiene por no hecha.
El derecho de aceptar la herencia caduca a los diez años de la apertura de la sucesión. El heredero que no la haya
aceptado en ese plazo es tenido por renunciante.
El heredero renunciante es considerado como si nunca hubiese sido llamado a la herencia.

Cesión de la herencia:
En términos generales hay cesión cuando una de las partes transfiere a la otra un derecho. Todo derecho puede ser
cedido, pero no pueden cederse los derechos inherentes a la persona humana, es decir, los derechos personalísimos.

Forma:
La cesión puede hacerse por escrito, pero deben otorgarse en escritura pública:
1) la cesión de los derechos hereditarios
2) la cesión de derechos litigiosos
3) la cesión de derechos derivados de un acto derivado de otro acto instrumentado en escritura pública.

Derechos y obligaciones del cesionario:


El cesionario adquiere los mismos derechos que le correspondían al cedente de la herencia. Asimismo, tiene derecho
de participar en el valor íntegro de los bienes que se gravaron después de la apertura de la sucesión y antes de la
cesión, y en el de los que en el mismo período se consumieron o enajenaron, con excepción de los frutos percibidos.
El cesionario debe reembolsar al cedente lo que éste pague por su parte en las deudas y cargas de la sucesión hasta
la concurrencia del valor de la porción de la herencia recibida. Las cargas particulares del cedente y los tributos que
gravan la transmisión hereditaria están a cargo del cesionario si están impagos al tiempo de la cesión.

Garantía por evicción:


Si la cesión es onerosa, el cedente garantiza al cesionario su calidad de heredero y la parte indivisa que le
corresponde en la herencia, excepto que sus derechos hayan sido cedidos como litigiosos o dudosos, sin dolo de su
parte. No responde por la evicción ni por los vicios de los bienes de la herencia, excepto pacto en contrario, En lo
demás, su responsabilidad se rige por las normas relativas a la cesión de derechos.

Luciano Medina Página 46


Cesión de bienes determinados:
La cesión de derechos sobre bienes determinados que forman parte de una herencia no se rige por las reglas de este
título, sino por las del contrato que corresponde, y su eficacia está sujeta a que el bien sea atribuido al cedente en la
partición.

Punto Nº 3: ESTADO DE INDIVISIÓN HEREDITARIA


Cuando un solo heredero recibe los bienes del causante, la cuestión no ofrece dificultades, pues aquel será titular de
todos los bienes desde el momento de la muerte, pero si concurren más de un heredero se crea, desde el instante de
la muerte un estado de indivisión o comunidad hereditaria, pues los bienes pertenecen a todos los herederos en
común.
Queda instaurada entre los herederos una comunidad referida a los bienes de la herencia, comunidad accidental
puesto que no se atribuye por voluntad de sus integrantes, sino por el hecho de ser varios los llamados a suceder.
Los actos de administración y disposición requieren el consentimiento de todos los coherederos, quienes pueden dar
a uno o varios de ellos o a terceros un mandato general de administración.
Son necesarias facultades expresas para todo acto que excede la explotación normal de los bienes indivisos y para la
contratación y renovación de locaciones. Si uno de los coherederos toma a su cargo la administración con
conocimiento de los otros y sin oposición de ellos, se considera que hay mandato tácito para los actos de
administración que no requieren facultades expresas en los términos del párrafo anterior.

Partición:
Concepto:
La partición es el modo natural de concluir todo proceso sucesorio, con la asignación a cada heredero de su porción,
(ahora precisa y concreta) sobre la masa hereditaria. Los herederos, sus acreedores y todos los que tengan en la
sucesión algún derecho declarado por las leyes, pueden pedir en cualquier tiempo la partición de la herencia.
La indivisión hereditaria sólo cesa con la partición. Si la partición incluye bienes registrables, es oponible a los
terceros desde su inscripción en los registros respectivos.

Modos de hacer la partición:

Partición privada:
Si todos los coparticipes están presentes y son plenamente capaces, la partición puede hacerse en la forma y por el
acto que por unanimidad juzguen convenientes.
La partición puede ser total o parcial.

Partición judicial:
La partición debe ser judicial:
a) si hay copartícipes incapaces, con capacidad restringida o ausentes;
b) si terceros, fundándose en un interés legítimo, se oponen a que la partición se haga privadamente;
c) si los copartícipes son plenamente capaces y no acuerdan en hacer la partición privadamente.

Partición en especie:
Si es posible dividir y adjudicar los bienes en especie, ninguno de los coparticipes puede exigir su venta.
En caso contrario, se debe proceder a la venta de los bienes y a la distribución del producto que se obtiene. También
puede venderse parte de los bienes si es necesario para posibilitar la formación de los lotes.

Luciano Medina Página 47


Venta:
La venta de los bienes sucesorios, a fin de que los herederos se dividan el dinero es otro de los modos de partición y
tiene lugar cuando la partición en especie sea jurídica o materialmente imposible o cuando existan cargas y se
requiera proceder a su pago. A ello hay que agregar que aunque los bienes sean divisibles, no se les debe dividir si
ello hace antieconómico su aprovechamiento.

Partición con saldo:


Consiste en adjudicar los bienes a cada heredero pero compensando en dinero las diferencias de valores.

Partición y venta:
Supone adjudicar por partición algunos de los bienes y proceder a las ventas de otros, cuyo precio se divide entre los
coherederos.
Por último en cuanto a su alcance y carácter, la partición puede ser completa o parcial y provisional o definitiva.

Efectos de la partición:
Efecto declarativo:
La partición tiene efecto declarativo y no traslativa de derechos. En razón de ella, se juzga que cada heredero sucede
solo e inmediatamente al causante en los bienes comprendidos en su hijuela (parte) y en los que se le atribuyen por
licitación, y que no tuvo derecho alguno en los que corresponden a sus coherederos.
Igual solución se entiende respecto de los bienes atribuidos por cualquier otro acto que ha tenido por efecto hacer
cesar la indivisión totalmente, o de manera parcial sólo respecto a ciertos bienes o ciertos herederos.
Los actos válidamente otorgados respecto de algún bien de la masa hereditaria conservan sus efectos a consecuencia
de la partición, sea quien sea el adjudicatario de los bienes que fueron objeto de esos actos.

Evicción y defectos ocultos:


En caso de evicción de los bienes adjudicados, o de sufrir el adjudicatario alguna turbación del derecho en el goce
pacífico de aquéllos, o de las servidumbres en razón de causa anterior a la partición, cada uno de los herederos
responde por la correspondiente indemnización en proporción a su parte, soportando el heredero vencido o
perjudicado la parte que le toque. Si alguno de los herederos resulta insolvente, su contribución debe ser cubierta por
todos los demás.
Ninguno de los herederos puede excusar su responsabilidad por haber perecido (dejar de existir) los bienes
adjudicados en la partición, aunque haya sido por caso fortuito (que sucede inesperadamente y por casualidad).

Punto Nº 4: SUCESIONES INTESTADAS


Cuando una persona fallece y no dejó ningún testamento, la ley viene a suplir su voluntad y distribuye los bienes en
la forma que presumiblemente lo hubiera hecho el causante, respondiendo al afecto que la ley presupone tendría por
sus parientes, que será mayor cuanto más cercano sea el grado de parentesco.
Esta sucesión intestada tiene lugar también cuando el testamento hubiera sido nulo o revocado.

Heredero legítimo:
Las sucesiones intestadas se defieren a los descendientes del causante, a sus ascendientes, al cónyuge supérstite, y a
los parientes colaterales dentro del cuarto grado inclusive, en el orden y según las reglas establecidas en este Código.
A falta de herederos, los bienes corresponden al Estado nacional, provincial o a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,
según el lugar en que están situados.

Luciano Medina Página 48


Origen de los bienes:
Los bienes hereditarios se distribuyen sin tomar en cuenta su procedencia o su esencia y propiedades características.
La herencia forma un conjunto, una unidad, una universalidad, sin consideración a los objetos particulares que la
componen.
Si el causante deja bienes que recibió de su madre o padre, o que adquirió a título gratuito u oneroso, salvo
excepciones de la ley, la asignación a sus herederos no se hace teniendo en cuenta ese origen.

Sucesión de los descendientes:


Los hijos del causante lo heredan por derecho propio y por partes iguales, concurren con el cónyuge supérstite si es
que existe.
Ejemplo:
1 – Hijo
2 – Hijo - Nieto
3 – Hijo (fallecido) - 2 Nietos.
Solo los hijos reciben la herencia. En el caso del fallecido, heredan los dos nietos por derecho de representación. Sólo
reciben la parte que hubiera recibido su padre. En el nº 2 como vive su padre, el nieto no recibe nada, es decir queda
excluido.
Sucesión de los demás descendientes:
Los demás descendientes heredan por derecho de representación, sin limitación de grados (como en el caso
anterior).

Efectos de la representación:
El principal efecto del derecho de representación es que los representantes de una misma persona, en conjunto,
ocupan el lugar del representado. De esto se deriva que tienen los mismos derechos y obligaciones que
correspondían al sujeto a quien representan. Pueden ejercer todas las acciones protectoras de la legítima (parte de la
herencia de una persona de la cual esta no puede disponer libremente, por asignarla la ley a determinados
herederos.), como lo hubiera hecho su representado, y tienen el derecho a recibir esta última.

Sucesión de los ascendientes:


A falta de descendientes, heredan los ascendientes más próximos en grado, quienes dividen la herencia por partes
iguales.

Sucesión del cónyuge:


Concurrencia con descendientes:
El supérstite toma en la sucesión de su cónyuge una parte igual a la de los hijos respecto de los bienes propios.
En todos los casos en que el viudo o viuda es llamado en concurrencia con descendientes, el cónyuge supérstite no
tiene parte alguna en la división de bienes gananciales que corresponden al cónyuge prefallecido.
Concurrencia con ascendientes:
Si heredan los ascendientes, al cónyuge le corresponde la mitad de la herencia.
Exclusión de colaterales:
A falta de descendientes y ascendientes, el cónyuge hereda la totalidad, con exclusión de los colaterales.

Sucesión de los colaterales:


Extensión:
A falta de descendientes, ascendientes y cónyuge, heredan los parientes colaterales hasta el cuarto grado inclusive.
Orden:
Luciano Medina Página 49
Los colaterales de grado más próximo excluyen a los de grado ulterior, excepto el derecho de representación de los
descendientes de los hermanos, hasta el cuarto grado en relación al causante. Los hermanos y descendientes de
hermanos desplazan a los demás colaterales.
Ejemplo:
Causante 1- Hermano 2- Hermano 3- Hermano (fallecido)
Hijos del fallecido (sobrino del causante).

Casos de concurrencia:
Los descendientes excluyen a los ascendientes y concurren con el cónyuge, por partes iguales en los bienes propios y
lo excluyen en la mitad de los gananciales. Los ascendientes excluyen a los colaterales y concurren con el cónyuge, en
partes iguales en ambas masas, es decir 50% en los gananciales y en los propios de cada uno. El cónyuge excluye a los
parientes colaterales.

Derecho de representación:
Es el derecho por el cual los descendientes de grado ulterior (superior) son colocados en el grado que ocupaba su
padre o madre en la familia del difunto, a fin de que ocupen el lugar de su antecesor en la sucesión de su abuelo,
correspondiéndole la porción de la herencia de su progenitor.

Porción legítima (de la legítima hereditaria):


Es una institución que implica reconocer a algunos herederos un derecho sobre una parte de la herencia, que no
puede ser privado y tampoco se puede afectar la misma con liberalidades (donaciones), que haga en vida el causante
o en su testamento.
La ley asegura a ciertos parientes este derecho, evitando que el causante disponga de ellos beneficiando a terceros,
extraños o parientes más lejanos.
Tienen una porción legítima de la que no pueden ser privados por testamento ni por actos de disposición entre vivos
a título gratuito, los descendientes, los ascendientes y el cónyuge.
La porción legítima de los descendientes es de dos tercios (2/3), la de los ascendientes de un medio (1/2) y la del
cónyuge de un medio (1/2). Dichas porciones se calculan sobre la suma del valor liquido de la herencia al tiempo de la
muerte del causante más el de los bienes donados computables para cada legitimario, a la época de la partición
según el estado del bien a la época de la donación.
Si concurren sólo descendientes o sólo ascendientes, la porción disponible se calcula según las respectivas legítimas.
Si concurre el cónyuge con descendientes, la porción disponible se calcula según la legítima mayor.

Punto Nº 5: TESTAMENTOS
Concepto:
Toda persona puede disponer en vida de sus bienes estableciendo quienes recibirán los mismos después de su
muerte, mediante un acto formal y solemne que se llama testamento.
La libertad testamentaria del causante tiene limitaciones importantes, ya que debe respetar lo establecido por la ley
en cuanto a la legítima de sus herederos forzosos.
Para testar es necesario que la persona esté en perfecto estado de razón y se requiere además tener por lo menos 18
años.

Interpretación:
Las disposiciones testamentarias deben interpretarse adecuándolas a la voluntad real del causante según el contexto
total del acto. Las palabras empleadas deben ser entendidas en el sentido corriente, excepto que surja claro que el
Luciano Medina Página 50
testador quiso darles un sentido técnico. Se aplican, en cuanto sean compatibles, las demás reglas de interpretación
de los contratos

Firma:
Cuando en los testamentos se requiera la firma, debe escribírsela tal como el autor de ella acostumbra firmar los
instrumentos públicos o privados. Los errores de ortografía o la omisión de letras no vician necesariamente la firma,
quedando su validez librada a la apreciación judicial.

Clases de testamento:

Testamento Ológrafo:
Es el que realiza el testador escribiéndolo de su puño y letra.
El testamento ológrafo debe ser íntegramente escrito con los caracteres propios del idioma en que es otorgado,
fechado y firmado por la mano misma del testador.
La falta de alguna de estas formalidades invalida el acto, excepto que contenga enunciaciones o elementos
materiales que permitan establecer la fecha de una manera cierta.
La firma debe estar después de las disposiciones, y la fecha puede ponerse antes de la firma o después de ella.
El error del testador sobre la fecha no perjudica la validez del acto, pero el testamento no es válido si aquel le puso
voluntariamente una fecha falsa para violar una disposición de orden público.
Los agregados escritos por mano extraña invalidan el testamento, sólo si han sido hechos por orden o con
consentimiento del testador.

Testamento por acto público:


Se hace ante escribano público y la presencia de dos testigos.
El testador puede dar el testamento al escribano o dárselo ya escrito, o solo darle por escrito las disposiciones que
debe contener para que se redacte en la forma ordinaria. El escribano debe indicar bajo pena de nulidad el lugar y
fecha, nombre de los testigos, si ha hecho el testamento o sólo ha recibido por escrito las disposiciones.
Concluida la redacción del testamento, se procede a su lectura y firma por los testigos y el testador. Los testigos
deben asistir desde el comienzo hasta el fin del acto sin interrupción, lo que debe hacer constar el escribano.

Inhabilidad para suceder por testamento:


Personas que no pueden suceder:
No pueden suceder por testamento:
a) los tutores y curadores a sus pupilos, si éstos mueren durante la tutela o curatela o antes de ser aprobadas las
cuentas definitivas de la administración;
b) el escribano y los testigos ante quienes se haya otorgado el testamento, por el acto en el cual han intervenido;
c) los ministros de cualquier culto y los líderes o conductores espirituales que hayan asistido al causante en su última
enfermedad.

Sanción:
Las disposiciones testamentarias a favor de personas que no pueden suceder por testamento son de ningún valor,
aun cuando se hagan a nombre de personas interpuestas. Se reputan tales, sin admitir prueba en contrario, los
ascendientes, los descendientes, y el cónyuge o conviviente de la persona impedida de suceder.

Punto Nº 6: PACTOS SOBRE HERENCIA FUTURA

Luciano Medina Página 51


Herencia futura:
La herencia futura no puede ser objeto de los contratos ni tampoco pueden serlo los derechos hereditarios
eventuales sobre objetos particulares, excepto lo dispuesto en el párrafo siguiente u otra disposición legal expresa.
Los pactos relativos a una explotación productiva o a participaciones societarias de cualquier tipo, con miras a la
conservación de la unidad de la gestión empresaria o a la prevención o solución de conflictos, pueden incluir
disposiciones referidas a futuros derechos hereditarios y establecer compensaciones en favor de otros legitimarios.
Estos pactos son válidos, sean o no parte el futuro causante y su cónyuge, si no afectan la legítima hereditaria, los
derechos del cónyuge, ni los derechos de terceros.

Luciano Medina Página 52

También podría gustarte