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El objetivo de este documento es presentar el concepto de Gestión Energética, explicar por qué
es fundamental para mejorar el desempeño energético y cómo aplicarlo.
Cualquier organización necesita de una buena gestión para ser eficientes y tener éxito en el
mediano y largo plazo. El campo de la energía no es una excepción. A pesar de eso la Gestión
de la Energía no suele ser tenida en cuenta, posiblemente porque no se conoce el
extraordinario potencial que tiene para ahorrar energía y reducir costos. Sin una buena gestión
energética habrán muchas oportunidades de ahorro simples y baratas que se pasarán por alto.
Cuando hablamos de Gestión de la Energía nos referimos a usar de manera sistemática tanto
procedimientos de gestión cómo tecnológicos para mejorar el desempeño energético de la
empresa. Para ser realmente efectiva necesita ser integrada, proactiva e incorporar tanto la
contratación de la energía (lo vimos en el Módulo 1), cómo la eficiencia energética y acciones
de uso racional (lo veremos en los módulos que siguen)
La gestión energética bien entendida no tiene que ser algo complejo ni que lleve mucho tiempo.
Por el contrario, tiene que adaptarse a la escala y posibilidades de la empresa considerando
sus recursos, capacidades financieras y planes futuros. Los esfuerzos que demande tienen que
ser proporcionales a los beneficios que aporta. Será muy distinto en el caso de una PyME que
en una multinacional, pero los principios fundamentales son los mismos.
Podemos decir sin miedo a equivocarnos que este módulo es el más importante de todos.
Implementar una buena gestión de la energía es lo que permite mejorar el desempeño
energético y mantenerlo en el tiempo.
Muchas veces el foco de las empresas que quieren ahorrar energía está en hacer diagnósticos
energéticos o encontrar medidas de inversión que reduzcan rápidamente el consumo. La
práctica ha demostrado una y otra vez que este tipo de medidas aisladas no logran sus
objetivos. La imagen que sigue resume lo que suele pasar en estos casos.
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Por el contrario, un buen proceso de gestión de la energía va a permitir conseguir muchos
mejores resultados y sostenerlos en el tiempo. Incluso sin necesidad de inversiones
considerables.
Nota. El proceso de Gestión de la Energía está tan establecido y probado que incluso
existe una norma ISO que lo estandariza: la norma ISO 50001. Mucho de lo que veremos
en este módulo y en el curso en general tiene su correspondencia con algún capítulo de
esa norma. Por eso, si completas el curso habrás avanzado una buena parte del camino
en implementar los conceptos de dicha norma en tu empresa.
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Para conocer más. En Argentina la adaptación de la norma ISO 50.001 fue hecha por
IRAM y se conoce cómo norma IRAM-ISO 50001. Se puede descargar desde la tienda
oficial del organismo (descarga arancelada).
En lo que sigue vamos a presentar los pasos clave para implementar un proceso de este tipo.
Es importante tener presente que la complejidad con que se implementa tiene que ser
proporcional al tamaño y posibilidades de la empresa.
Mejorar el desempeño energético es un trabajo que involucra a todas las áreas de la empresa.
Sin el compromiso claro y decidido de la Alta Dirección será difícil definir quién tiene la
responsabilidad de la gestión energética dentro de la empresa (volveremos sobre esto en el
paso siguiente) y asegurar que esa persona tenga la colaboración que necesita de otros
sectores.
Por otra parte, la Alta Dirección tendrá que proporcionar los recursos necesarios para
implementar las mejoras. Estos recursos no necesitan ser muchos, pero sí ser acordes a las
responsabilidades definidas. Estamos hablando cómo mínimo del tiempo necesario para
cumplir esas tareas.
Si formas parte de la Alta Dirección de la empresa, esta parte te resultará más sencilla. Pero si
no formas parte y tienes que convencerlos de la importancia de implementar un sistema de
Gestión de la Energía es importante que transmitas:
Para eso te puede resultar útil compartirles este módulo o alguno de los muchos recursos
disponibles en internet que hablan de la importancia de gestionar correctamente la energía
para reducir costos. Recordemos, sin un buen sistema de gestión es imposible lograr
resultados a largo plazo.
En definitiva, la Alta Dirección tendrá que participar con las siguientes funciones:
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- Designar al responsable de la gestión de la energía
- Definir los roles y responsabilidades de cada uno
- Asignar y aprobar los recursos
- Identificar necesidades de capacitación para sí mismo cómo el resto de la empresa
- Revisar y aprobar los planes de gestión de la energía
- Controlar periódicamente el estado de avance
- Definir qué acciones se comunicarán, a quién y de qué forma
Ejercicio. ¿Qué cargo dentro de la empresa cumple las funciones de Alta Dirección?
¿Crees que está convencida/o de la necesidad de implementar un proceso de Gestión de
la Energía? En caso contrario ¿qué es lo que lo frena? ¿Qué haría falta para que cambie
de opinión?
No hay una fórmula para definir cuál es el puesto más adecuado para Gestor Energético. Las
empresas más grandes suelen contratar a una persona exclusivamente para esta función. Pero
en la mayoría es alguien que tiene otras funciones dentro de la empresa y toma estas tareas a
su cargo. Algunos puestos posibles son: encargados de mantenimiento, jefes de planta,
responsables ambientales, personal de administración, pero también pueden ser otros.
Es importante que tenga suficiente tiempo y recursos para las tareas que se le asignen.
También es bueno que tenga conocimientos técnicos básicos, pero no es imprescindible. Un
gestor energético motivado pero con escasos conocimientos siempre puede capacitarse, pero
un gestor energético con conocimientos al que no le interesa el tema difícilmente logre
avances.
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Entre las responsabilidades que debiera cubrir el Equipo de Gestión de la Energía las
fundamentales son:
Ejercicio. Define qué puesto o persona consideras que es el más adecuado dentro de la
empresa para tomar el rol de Gestor Energético. ¿Por qué?
Básicamente un autodiagnóstico para entender dónde estamos parados y cuáles son los
principales puntos a mejorar. La tabla que sigue repasa estos puntos y brinda recomendaciones
para mejorarlos.
Consumos y Cuáles son las fuentes de energía El Módulo 1 trata sobre estos
costos de la usadas, qué cantidad se consumió de temas
energía cada una durante al menos el último
año, cuáles fueron los costos
asociados
Factores que Cuáles son los factores que afectan el El Módulo 1 trata sobre estos
afectan el consumo energético (por ejemplo, la temas
consumo de producción o la temperatura). Qué
energía indicador puede usarse para medirlos.
Qué relación hay entre ese indicador y
el consumo energético.
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Marco Cuál es el marco regulatorio aplicable a En la página web de la
regulatorio la empresa en temas de energía distribuidora eléctrica o de gas.
Mantenerse al tanto de normativa que Cuadro tarifario del servicio.
promueva aspectos relacionados cómo Publicaciones especializadas en
la eficiencia energética o el uso de energía.
energías renovables Información provista por
asociaciones empresarias
El objetivo final es seguir usándola cómo una hoja de ruta para reevaluar periódicamente
el estado de la Gestión de la Energía en la empresa y definir cuáles son los próximos
puntos a mejorar.
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Paso 4: Definir una Política Energética
La Política Energética es un documento sencillo pero fundamental en cualquier sistema de
gestión de la energía.
Tener una Política Energética definida, por escrito y visible ayuda a alinear los esfuerzos de
todos los involucrados, mantener ese esfuerzo a lo largo del tiempo y tener una referencia
contra la cuál contrastar los avances.
La Política Energética es propia de cada empresa. No sirve copiar un modelo de otra empresa
sólo para cumplir con este punto, sino que tiene que estar definida acorde a sus metas,
tamaño, características y posibilidades.
Debe ser un documento corto, de no más de dos páginas y en lo posible de una sola. En el
caso de que la empresa ya tenga una política medioambiental se puede elegir incorporar la
política energética dentro de ese documento.
Es importante que esté firmado por el máximo responsable de la empresa para demostrar que
el compromiso llega al máximo nivel.
En el campus virtual tienes disponible un ejemplo del tipo de objetivos y compromisos que
se pueden incluir en una Política Energética. Cómo decíamos, cada empresa tiene que
definir una Política acorde a su situación, posibilidades y visión. En ese sentido, el
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documento sirve cómo punto de partida pero es necesario resumirlo, completarlo o
adaptarlo a la empresa.
Ejercicio. Escribe el borrador de una Política Energética para tu empresa. Puedes usar el
modelo anterior cómo base. El documento no debe tener más de una o dos páginas.
La estrategia se tiene que elaborar bajo el liderazgo del Gestor Energético pero sumando a
todas las áreas que inciden en la gestión de la energía (mantenimiento, compras, operaciones,
recursos humanos, legales, administración, o las que apliquen). En conjunto se deben repasar
los aspectos que veremos a continuación, identificar qué oportunidades de mejora hay en cada
uno de ellos y decidir cuáles vale la pena incorporar en la estrategia.
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más grandes puede ser necesario agregar otros aspectos cómo verificar qué leyes las
alcanzan específicamente o si hay incentivos del Estado que puedan ayudar a alcanzar
los objetivos (subsidios, beneficios impositivos). Las cámaras empresariales son una
buena alternativa para buscar información sobre estos temas. También lo veremos en el
Módulo 5.
4. Inversiones. Para empresas que recién están empezando en temas de eficiencia
energética suele haber una gran cantidad de oportunidades de ahorro que se puede
implementar con poca o ninguna inversión (las veremos en los módulos que siguen). No
obstante es recomendable tener un pequeño presupuesto asignado para gastos
menores.
5. Compras. Las inversiones que hagamos en equipamiento, maquinaria o incluso en el
edificio tendrá un impacto en el consumo de energía. Es altamente recomendable que
en la decisión de compra se evalúe este impacto, por ejemplo comparando el consumo
de energía entre las distintas opciones o definiendo estándares mínimos de eficiencia.
Para eso hace falta que el área de Compras (o quién tenga esa función en la empresa)
participe en la definición de la política energética y esté al tanto del plan de acción que
se defina.
6. Medición y monitoreo de energía. Identificar qué información tiene la empresa sobre su
consumo energético (habitualmente es sólo las facturas), que otra información
necesitaría para poder tomar decisiones, por ejemplo instalar medidores internos
propios, y cómo podría usar esta información para reducir el consumo (en el Módulo 3
cómo se usan estos medidores para identificar oportunidades de ahorro).
7. Detección de oportunidades de ahorro. Hay distintas acciones simples que puede tomar
una empresa para ahorrar energía. En los módulos que siguen las vamos a ver en
detalle, tras lo cuál podrás volver sobre este punto y definir cuales se aplican mejor a tu
empresa.
8. Cultura organizacional. El éxito en el largo plazo pasa por implementar una buena
cultura del ahorro energético en la empresa, donde todas las personas que forman parte
incorporen en su forma de actuar el cuidado de la energía. No es simple de hacer pero
abordándolo de manera temprana y siendo constante se alcanzan resultados. Esto
implica explicar lo qué se está haciendo y por qué, cuáles son los objetivos que se
quieren alcanzar, cómo puede contribuir cada uno desde su rol. Capacitar en temas de
energía, generar un mecanismo para que los empleados puedan dar ideas de ahorro e
incluir temas de energía en los procedimientos de cada rol (apagado de equipos al final
de la jornada) son algunas opciones para empezar.
Estos son los puntos centrales a analizar pero no los únicos. La idea es que cada empresa
evalúe su situación, detecte distintas oportunidades para mejorar estos aspectos y defina
cuáles son prioritarios. Luego deben volcarse en una estrategia energética o un plan de acción,
según lo vean más adecuado.
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Lo importante es que queden por escrito, que todos los involucrados estén en conocimiento y
que sean revisados y aprobados periódicamente por la dirección de la empresa. Haciendo esto
aumentarán significativamente las probabilidades de que los objetivos se alcancen.
Ejercicio. A continuación resumimos algunos aspectos que son importantes para generar
una Estrategia Energética o implementar un Plan de Acción. Intenta responder todos los
que puedas, aunque sea de manera preliminar.
Pregunta Respuesta
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Para conocer más. Si te interesa profundizar sobre Gestión de la Energía y la norma ISO
50.001 recomendamos consultar el Manual para la Implementación de un Sistema de
Gestión de la Energía de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía de
México y la Guía de Implementación de Sistemas de Gestión de Energía basado en ISO
50.001 de la Agencia de Sostenibilidad Energética de Chile. También puedes descargarlos
de la sección Bibliografía dentro de nuestro campus virtual.
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