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La inversión socialmente responsable (ISR) se ha convertido en una práctica de inversión

cada vez más relevante en las últimas décadas. A medida que la conciencia sobre cuestiones

ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) ha ido en aumento, los inversores se han dado

cuenta de que su poder financiero puede ser utilizado no solo para obtener ganancias, sino

también para promover un cambio positivo en el mundo.

La inversión socialmente responsable (ISR) implica que los inversores, ya sean individuos,

instituciones financieras o fondos de inversión, buscan generar un impacto positivo en la

sociedad y el medio ambiente, además de obtener un rendimiento financiero.

Desafíos y Futuro

A pesar de sus beneficios, la ISR enfrenta desafíos, como la posibilidad de un rendimiento

inferior en ciertos momentos debido a restricciones de inversión. Sin embargo, a medida que

se desarrollen estándares más sólidos y se promueva una mayor transparencia, se espera que

la ISR continúe creciendo y desempeñando un papel crucial en la inversión responsable.

Criterios ESG

Son un conjunto de estándares que evalúan la actuación de una empresa en tres dimensiones

clave. Los criterios ambientales se centran en cuestiones como la gestión de recursos

naturales y la huella de carbono. Los criterios sociales abordan temas como la igualdad de

género, los derechos laborales y la diversidad. Los criterios de gobernanza evalúan aspectos

como la transparencia, la ética y la estructura de liderazgo de una empresa.

● Impacto en las Decisiones de Inversión

Los inversores están incorporando cada vez más los criterios ESG en sus decisiones de

inversión. La razón es clara: estos criterios pueden ayudar a identificar riesgos ocultos y

oportunidades en el mercado.

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