Tasas de Frecuencia y de Gravedad

COMPILACIÓN DE ESTADÍSTICAS DE ACCIDENTES

Pueden compilarse estadísticas para una sola empresa, región, una o todas las industrias
de un país. Pueden prepararse estadísticas especiales para determinados tipos de accidentes
(por ejemplo, accidentes con la electricidad, accidentes con escaleras), para ciertas categorías de
trabajadores (por ejemplo, jóvenes) o para otros propósitos. Las estadísticas del mismo tipo, lleva-
das durante varios años, sirven para saber si el número de accidentes aumenta o disminuye, y pa-
ra comprobar, por tanto, si la labor de prevención tiene o no resultados positivos en la empresa,
región o industria de que se trate. Las estadísticas preparadas para diversas empresas, donde se
trabaja en condiciones más o menos análogas, permiten determinar si una empresa dada se des-
taca sobre el término medio, o si debe mejorar mucho desde el punto de vista de la prevención de
los accidentes.
Por consiguiente, se echa de ver que las estadísticas de accidentes debieran ser compara-
bles no sólo de un año a otro, sino entre industrias, regiones y, en lo posible, entre países. La prin-
cipal limitación a la comparabilidad de las estadísticas de accidentes estriba en el doble objetivo
para el cual han sido concebidas: la prevención de los accidentes y su indemnización. A los efec-
tos de la prevención, las estadísticas de accidentes debieran proporcionar información completa
sobre la causa, frecuencia, industria y ocupación, así como también otros factores que influyen en
el riesgo. Por otra parte, las estadísticas para la indemnización se utilizan, sobre todo, con fines
administrativos, y deben consignar el número de accidentes y su grado de gravedad, la duración
de la incapacidad y el importe de las indemnizaciones pagadas. A tal efecto, en la definición de un
accidente se incorporan las diversas condiciones legales, a las cuales se supedita el otorgamiento
de una indemnización. Un grave obstáculo para la utilización de las estadísticas de trabajo con fi -
nes preventivos ha sido que en algunos casos no se ha comprendido la diferencia entre esas dos
finalidades. Las estadísticas que han de utilizarse con propósitos preventivos no debieran ser
ideadas con el fin primordial de satisfacer las necesidades de las autoridades encargadas de pa-
gar indemnizaciones a los trabajadores.
A fin de que las estadísticas de accidentes tengan el mayor grado posible de comparabili-
dad con fines preventivos, es preciso aplicar los principios siguientes:
1. Las estadísticas de accidentes debieran cumplirse partiendo de una definición uniforme
de los accidentes de trabajo, en general, para los efectos de la prevención, y en parti-
cular, para medir la magnitud de las tasas de riesgo. Todos los accidentes definidos de
esta suerte debieran ser notificados y tabulados uniformemente.
2. Las tasas de frecuencia y de gravedad debieran ser compiladas utilizando métodos
uniformes; debiera haber una definición uniforme de accidentes, métodos uniformes
para calcular el tiempo de exposición al riesgo y métodos uniformes para expresar las
tasas de riesgo.
3. La clasificación de industrias y ocupaciones para los efectos de las estadísticas de ac-
cidentes debiera ser uniforme en todas partes.
4. La clasificación de las causas y de los accidentes debiera ser uniforme, y debieran apli-
carse los mismos principios en todos los casos para determinar las causas de los acci-
dentes.

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 No es absolutamente indispensable que las estadísticas nacionales sean comparables
hasta en sus menores detalles, pero debieran serlo en lo esencial. Cada país puede reunir, ade-
más de los datos requeridos para las comparaciones internacionales, otros destinados a satisfacer
sus propias necesidades.
Se ha avanzado algo hacia la normalización internacional de las estadísticas sobre acci-
dentes de trabajo, y se han proyectado medidas en ese sentido, particularmente, con los auspicios
de la Oficina Internacional del Trabajo, que ha dado muestras de interés en el problema desde
1923, año en que lo examinara la primera Conferencia Internacional de Estadígrafos del Trabajo.
Las sucesivas conferencias de estadígrafos del trabajo de la O.I.T. han adoptado asimismo resolu-
ciones sobre las tasas de frecuencia y de gravedad, y sobre la clasificación de accidentes por in-
dustria y por ocupación, por causa y por otros factores.

TASAS DE RIESGO
Con el objeto de tener medidas comparativas de los accidentes, se dispone de ratios, ta-
sas o índices, calculados con unos criterios definidos. Las tasas que se utilizan en la mayor parte
del mundo están basadas en las recomendaciones de la X Conferencia Internacional de Estadí-
grafos del Trabajo, de la O.I.T., celebrada en Ginebra, en octubre de 1952 (Informe II), y son:
1. Baremo, para la valoración del índice de gravedad de los accidentes de trabajo, según
la pérdida de tiempo inherente a la incapacidad causada (Decreto 351/79)
Naturaleza de la lesión Jornadas-pérdidas
— para calcular la tasa de gravedad, los accidentes mortales y aquellos que originen
una incapacidad total permanente, se cuentan como una pérdida equivalente a:
6.000 días de trabajo
— para los accidentes que originen una incapacidad parcial permanente por amputa-
ciones, se tendrá en cuenta la siguiente tabla:
miembro superior
— cualquier punto entre el codo y el hombro, incluyendo éste 4.500 días
— cualquier punto entre la muñeca y el codo, incluyendo éste 3.600 días
mano y muñeca
amputación parcial o total/ pulgar/ índice/ medio/ anular/ meñique
— falange distal 300 100 75 60 50
— falange media — 200 150 120 100
— falange proximal 600 400 300 240 200
— metacarpo 900 600 500 450 450
— mano (a la altura de la muñeca) 3.000
miembro inferior
— cualquier punto entre la rodilla y la cadera, incluyendo ésta 4.500 días
— cualquier punto entre el tobillo y la rodilla, incluyendo ésta 3.000 días
pie y tobillo
amputación parcial o total dedo grande cualquiera de los otros de-
dos
— falange distal 150 35
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 — falange media — 75
— falange proximal 300 150
— metatarso 600 350
— pie (a la altura del tobillo) 2.400
daños funcionales días
— un ojo (pérdida de visión), haya o no visión en el otro 1.800
— ambos ojos (pérdida de la visión) en un solo accidente 6.000
— un oído (pérdida completa de la audición), haya
o no capacidad para oír en el otro 600
— ambos oídos (pérdida completa de la audición) en un solo accidente 3.000

TASA DE FRECUENCIA
Es la relación entre el número de accidentes registrados en un período y el total de horas/
hombre trabajadas durante el período considerado.
La expresión utilizada para su cálculo es la siguiente:
Nº total de accidentes x 106
I.F. =
Nº total de horas/hombre trabajadas

representando dicho índice el número de accidentes ocurridos por cada millón de horas trabaja-
das.
— Para el cálculo se deben tener presentes las consideraciones siguientes:
 sólo se deben considerar los accidentes ocurridos mientras exista exposición de
riesgo; se deberán excluir los accidentes in itinere;
 dado que el índice de frecuencia nos sirve de módulo para valorar el riesgo, las ho-
ras de trabajo (horas/hombre) deberán ser las reales trabajadas (total nómina - au-
sentismo + horas extra);
 para una buena valorización de los riesgos, podemos calcular índices por zonas
(planta - oficinas - total).
 se deben considerar todos los accidentes con baja y sin baja.

TASA DE GRAVEDAD
Se define este índice como la relación entre el número de jornadas perdidas por los acci-
dentes durante un período y el total de horas/hombre trabajadas durante el período considerado.
Para el cálculo se utiliza la siguiente fórmula:
Nº de jornadas perdidas x 103

I.G. =
Nº total horas/hombre trabajadas

Deben tenerse en cuenta para el cálculo las siguientes consideraciones:

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 — Para el cálculo de las jornadas perdidas, se consideran los días naturales de todos los
accidentes.
— Para el cálculo del número de horas/hombre trabajadas, es lo mismo que para el índice
de frecuencia.
— Las jornadas perdidas se determinan también, teniendo en cuenta la suma de días co-
rrespondientes a incapacidades parciales y permanentes, si las hubiere, y que se de-
terminan por el Baremo.
— Teniendo presente que al aplicar el Baremo se contabilizarán, además, las jornadas
reales perdidas por esos accidentes.

TASAS DE INCIDENCIA
Es otro índice utilizado por su facilidad de cálculo. Dicho índice representa la relación entre
el número de accidentes registrados en un período y el número promedio de personas expuestas
al riesgo considerado. Se utiliza como período de tiempo el año.
Fórmula:
Nº total de accidentes x 103
I.I. =
Nº de personas expuestas

Representando dicho índice el número de accidentes ocurridos por cada mil personas ex-
puestas, siendo utilizado cuando no se conoce el número de horas/hombre trabajadas y el número
de personas expuestas al riesgo es variable de un día a otro, pues no puede determinarse el índi -
ce de frecuencia.

TASA DE DURACIÓN MEDIA

Este índice da idea del tiempo promedio que ha durado cada accidente.
Se define como la relación entre las jornadas perdidas y el número de accidentes.
Se calcula:
Jornadas perdidas

D.M. =
Nº de accidentes

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