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GLOSARIO DE TÉRMINOS ARTÍSTICOS

Miguel Ángel:

Miguel Ángel, cuyo nombre completo era Michelangelo di Lodovico Buonarroti Simoni, nació
el 6 de marzo de 1475 en Caprese, Italia, y falleció el 18 de febrero de 1564 en Roma. Es
conocido principalmente por su habilidad como escultor, pintor y arquitecto.

En su juventud, Miguel Ángel estudió escultura en Florencia, donde trabajó bajo la


protección de los Medici, una poderosa familia italiana.
Algunas de sus obras escultóricas más famosas incluyen la escultura de mármol "La
Piedad" y el famoso "David", una enorme escultura que representa al héroe bíblico.

Posteriormente, Miguel Ángel se trasladó a Roma, donde llevó a cabo varios encargos
importantes. Uno de los proyectos más notables en los que trabajó fue la Capilla Sixtina,
ubicada en el Vaticano. Miguel Ángel pintó el techo de la capilla, creando una de las obras
maestras más reconocidas en la historia del arte. Su representación de la creación de Adán,
con los dedos de Dios y Adán casi tocándose, se ha convertido en un ícono cultural.

Además de su trabajo en la escultura y la pintura, Miguel Ángel también incursionó en la


arquitectura. Fue responsable de la finalización de la Basílica de San Pedro en el Vaticano,
una de las iglesias más importantes del mundo.

Miguel Ángel dejó un legado duradero en el mundo del arte y la arquitectura. Su estilo
artístico se caracterizaba por su dominio del cuerpo humano y su habilidad para transmitir
emociones y expresiones a través de sus obras. Su influencia se extendió a muchos artistas
posteriores y su trabajo sigue siendo admirado y estudiado en la actualidad.
Los Churriguera:

Fue una destacada familia de arquitectos y escultores españoles que tuvo una gran
influencia en el arte barroco en España durante los siglos XVII y XVIII. La familia
Churriguera está estrechamente asociada con el estilo arquitectónico conocido como
"churrigueresco", caracterizado por su ornamentación exuberante y excesiva.

La figura más destacada de la familia Churriguera fue José Benito Churriguera (1665-1725),
quien se convirtió en el líder y exponente más importante del estilo churrigueresco. José
Benito Churriguera fue un arquitecto, escultor y diseñador de retablos altamente influyente.

El estilo churrigueresco se caracteriza por el uso abundante de ornamentación tallada en


madera, estuco y piedra, que incluye elementos como columnas salomónicas, capiteles
compuestos, volutas, guirnaldas, angelotes y querubines. Estas características decorativas
se utilizaban tanto en fachadas de iglesias y edificios civiles como en retablos y altares
interiores. El estilo se distingue por su aspecto dinámico y teatral, con una profusión de
detalles y una sensación de movimiento y energía.

Los Churriguera, a través de su estilo artístico, contribuyeron a la transformación de la


arquitectura española y marcaron una transición entre el estilo barroco clásico y el rococó.
Su trabajo tuvo un impacto duradero en la arquitectura española posterior y se puede
apreciar en numerosos edificios religiosos y civiles en España, especialmente en las
regiones de Castilla y León y Castilla-La Mancha.

Es importante destacar que el estilo churrigueresco también tuvo críticos y detractores,


quienes consideraban que su exceso ornamental desviaba la atención de la función
arquitectónica y dificulta la apreciación de la forma y la estructura. Sin embargo, el estilo y la
influencia de los Churriguera en la arquitectura española son innegables y continúan siendo
objeto de estudio y admiración en la actualidad.
San Nicolás de Bari. Valencia:

San Nicolás de Bari es una iglesia ubicada en la ciudad de Valencia, España. Es


considerada una de las joyas del arte barroco valenciano y uno de los principales ejemplos
del estilo churrigueresco en la ciudad.

La construcción de la iglesia de San Nicolás de Bari comenzó en el siglo XIII, pero fue en
los siglos XVII y XVIII cuando se llevaron a cabo importantes reformas y ampliaciones que
le dieron su aspecto actual. Estas renovaciones estuvieron a cargo de destacados artistas,
entre ellos, el arquitecto y escultor valenciano Juan Bautista Pérez Castiel, quien trabajó en
la iglesia durante la primera mitad del siglo XVIII.

La fachada principal de San Nicolás de Bari destaca por su ornamentación exuberante y


dinámica, típica del estilo churrigueresco. Está decorada con columnas salomónicas,
pilastras, frontones curvos, volutas, angelotes y elementos decorativos en estuco y piedra.
En el interior, la iglesia cuenta con una rica decoración en su retablo mayor, así como en
sus capillas laterales, con esculturas y relieves de temática religiosa.

Uno de los aspectos más impresionantes de San Nicolás de Bari es su cúpula. Esta
presenta una estructura octogonal con lucernario y está profusamente decorada con
relieves y elementos escultóricos. La cúpula se encuentra rematada por una linterna que
aporta luz al interior del templo.

El interior de San Nicolás de Bari es igualmente impresionante, con una nave central amplia
y espaciosa, capillas laterales ricamente decoradas y una gran cantidad de detalles
ornamentales en estuco y dorado. Destacan también los frescos que decoran la bóveda y
los muros, los cuales fueron realizados por el pintor Antonio Palomino en el siglo XVIII.

San Nicolás de Bari es un importante destino turístico en Valencia debido a su belleza


arquitectónica y su rica ornamentación barroca. Es un lugar de culto y también un espacio
que se utiliza para la celebración de conciertos y eventos culturales.

En definitiva, la iglesia de San Nicolás de Bari en Valencia es un ejemplo destacado del


estilo churrigueresco y una muestra del esplendor artístico del barroco en la ciudad.
Mocárabe:

El mocárabe es un elemento arquitectónico decorativo que se encuentra en la arquitectura


islámica, especialmente en la península ibérica durante la época del arte
hispano-musulmán, conocido como arte mudéjar. Se trata de una estructura de madera
tallada y decorada que se coloca en el techo o la parte superior de un arco para crear una
apariencia de estalactitas suspendidas.

El mocárabe se caracteriza por su intrincada ornamentación y su forma de colmena o panal


de abejas. Está compuesto por piezas de madera que se ensamblan en una estructura
tridimensional y se cuelgan en un patrón escalonado. Las piezas de madera se tallan y se
decoran con motivos geométricos, inscripciones o elementos vegetales, y se colorean o
doran para resaltar su belleza.

Este elemento arquitectónico se utiliza principalmente en espacios interiores, como salas de


oración, salones y vestíbulos de palacios o mezquitas. El mocárabe crea un efecto visual
impresionante y único, ya que parece que las estalactitas de madera flotan en el techo o en
el arco, agregando belleza y sofisticación a la estructura arquitectónica.

El uso del mocárabe en la arquitectura mudéjar se debe a la prohibición islámica de


representar figuras humanas o animales en el arte religioso. En lugar de ello, los artistas
musulmanes se centraron en la creación de patrones geométricos y ornamentales
elaborados, y el mocárabe se convirtió en una de las expresiones más destacadas de esta
tradición decorativa.

Hoy en día, el mocárabe se encuentra en varios lugares históricos de la península ibérica,


especialmente en España, como la Alhambra de Granada, la Mezquita-Catedral de Córdoba
y el Alcázar de Sevilla, entre otros. Estas estructuras son ejemplos notables del arte
mudéjar y muestran la maestría y la creatividad de los artesanos islámicos en la creación de
este elemento arquitectónico tan distintivo.
Neoclasicismo:

El neoclasicismo es un movimiento artístico y cultural que surgió a finales del siglo XVIII y
principios del XIX como una reacción al exceso decorativo del estilo barroco y rococó. Se
inspiró en la estética y los principios de la antigua Grecia y Roma, buscando un retorno a la
simplicidad, la proporción y la claridad de las formas clásicas.

El neoclasicismo se extendió por Europa y tuvo un impacto significativo en la arquitectura, la


escultura, la pintura, la literatura y el diseño de la época.

En cuanto a la arquitectura neoclásica, se utilizaron elementos y formas arquitectónicas de


la antigüedad clásica, como columnas, frontones, cúpulas y arcos. Los edificios neoclásicos
se caracterizan por su simetría, equilibrio y proporciones matemáticas precisas.

Ejemplos destacados de arquitectura neoclásica incluyen el Partenón en Atenas (Grecia), la


Maison Carrée en Nimes (Francia), el Capitolio en Washington D.C. (Estados Unidos) y el
Banco de Inglaterra en Londres (Reino Unido). Estos edificios reflejan los ideales estéticos y
conceptuales del neoclasicismo y su intención de evocar el esplendor y la grandeza de la
antigua Grecia y Roma.

El neoclasicismo representó un cambio de enfoque hacia una estética más sobria y racional,
en contraposición al exceso decorativo y emocional del barroco y el rococó. Aunque
posteriormente fue reemplazado por otros movimientos artísticos, su influencia perduró y
dejó una huella duradera en la historia del arte y la cultura occidental.
Obelisco:

El obelisco es una estructura arquitectónica vertical y delgada, generalmente tallada en una


sola pieza de piedra, que se caracteriza por su forma puntiaguda y su aspecto monolítico. El
obelisco es uno de los elementos más reconocibles de la arquitectura del antiguo Egipto y
ha sido utilizado en diferentes culturas y épocas posteriores.

En la arquitectura egipcia, los obeliscos tenían una función religiosa y conmemorativa.


Originalmente, eran colocados en pares en los accesos de los templos y tenían
inscripciones jeroglíficas que glorificaban a los faraones y a los dioses egipcios. Los
obeliscos también eran considerados como representaciones de la benben, una piedra
sagrada asociada con el dios del sol Ra.

El diseño del obelisco egipcio es simbólico y está basado en la geometría y las


proporciones. Generalmente, presentan una base cuadrada o rectangular y se estrechan
hacia la parte superior hasta alcanzar una punta piramidal. Están decorados con
inscripciones y jeroglíficos que cuentan la historia o las hazañas del faraón o divinidad a la
que están dedicados.

A lo largo de la historia, el diseño y el simbolismo del obelisco han sido adoptados por otras
culturas y estilos arquitectónicos. Por ejemplo, en la antigua Roma, se erigieron obeliscos
egipcios en plazas y espacios públicos como símbolos de poder y grandeza. Durante el
Renacimiento y el neoclasicismo, los obeliscos fueron utilizados como elementos
decorativos en jardines y plazas, y se inspiraron en la estética de la arquitectura clásica.

Hoy en día, los obeliscos siguen siendo utilizados en arquitectura y diseño urbano como
elementos decorativos o conmemorativos. Se pueden encontrar obeliscos en diferentes
ciudades del mundo, como el Obelisco de Luxor en París, el Obelisco de Washington en
Washington D.C. y el Obelisco de Buenos Aires en Argentina.

En resumen, el obelisco es una estructura arquitectónica distintiva que ha dejado un legado


duradero en diferentes culturas y épocas. Su forma puntiaguda y su significado simbólico lo
convierten en un elemento visualmente llamativo y cargado de historia y simbolismo.
Óculo:

Un óculo es una abertura circular u ovalada que se encuentra en el techo o la pared de un


edificio. También se le conoce como "ojo de buey" debido a su forma circular que se
asemeja al ojo de un buey. El óculo puede tener una función práctica, como permitir la
entrada de luz natural o la ventilación, o puede tener un propósito estético como elemento
decorativo.

El óculo ha sido utilizado en diferentes estilos arquitectónicos a lo largo de la historia. En la


arquitectura romana, por ejemplo, los óculos se encontraban con frecuencia en las cúpulas
de los edificios, permitiendo la entrada de luz natural en el interior. Un ejemplo icónico es el
óculo presente en el Panteón de Roma, que constituye una de las principales fuentes de luz
en el espacio interior.

En la arquitectura gótica, los óculos también fueron utilizados en las fachadas de las iglesias
y catedrales. Estas aberturas circulares se encontraban generalmente en el frontispicio o en
la parte superior de los rosetones, permitiendo que la luz iluminara el interior y creara
efectos luminosos en los vitrales.

Además de su función práctica, los óculos pueden tener un impacto estético significativo en
la arquitectura. Su forma circular u ovalada crea un contraste visual interesante con las
líneas rectas y las formas arquitectónicas más comunes. Además, pueden servir como
elementos decorativos por sí mismos o estar enmarcados con molduras o decoraciones
adicionales.

Hoy en día, el óculo sigue siendo utilizado en la arquitectura contemporánea, tanto en


edificios de diseño moderno como en construcciones históricas renovadas. Se pueden
encontrar óculos en una variedad de estructuras, como museos, edificios gubernamentales,
iglesias y residencias privadas. Además de su función de permitir la entrada de luz, los
óculos también pueden ser utilizados estratégicamente para enmarcar vistas panorámicas o
crear efectos luminosos en el interior de un espacio.

En resumen, el óculo es una abertura circular u ovalada que desempeña un papel tanto
funcional como estético en la arquitectura. Desde los tiempos antiguos hasta la arquitectura
contemporánea, los óculos han sido utilizados para permitir la entrada de luz natural, crear
efectos visuales y embellecer las fachadas de los edificios.
Órdenes clásicos:

Los órdenes clásicos son estilos arquitectónicos desarrollados en la antigua Grecia y


adoptados posteriormente por los romanos. Se caracterizan por un conjunto de elementos y
proporciones que definen la apariencia y la estructura de los edificios. Los tres órdenes
clásicos más conocidos son el dórico, el jónico y el corintio.

Orden dórico: El orden dórico es el más antiguo y robusto de los órdenes clásicos. Se
caracteriza por su apariencia sólida y austera. Los elementos principales del orden dórico
incluyen:

-Columnas: Las columnas dóricas son cortas y gruesas, sin base, y se elevan directamente
desde el suelo. Tienen estrías verticales en el fuste y están rematadas por un capitel simple
y macizo llamado "equino".

-Entablamento: El entablamento dórico consta de un arquitrabe liso que se apoya


directamente sobre las columnas, un friso con triglifos (bloques rectangulares tallados con
tres estrías verticales) y metopas (paneles decorativos), y un frontón triangular en el
extremo del edificio.

-Otros detalles: El orden dórico también se caracteriza por su sencillez y falta de


ornamentación excesiva.

Orden jónico: El orden jónico es más delicado y ornamentado que el dórico. Sus elementos
principales incluyen:

-Columnas: Las columnas jónicas son más altas y delgadas que las dóricas, y tienen una
base compuesta por molduras circulares. El fuste es estriado, pero de forma más suave que
en el orden dórico, y está rematado por un capitel adornado con volutas en los extremos.

-Entablamento: El entablamento jónico tiene un arquitrabe dividido en tres bandas


horizontales y un friso decorado con una sucesión de triglifos y metopas. A diferencia del
orden dórico, el friso jónico no tiene un frontón triangular.

-Otros detalles: El orden jónico se caracteriza por su elegancia y refinamiento, con mayor
énfasis en la ornamentación y los detalles decorativos.

Orden corintio: El orden corintio es el más elaborado y ornamentado de los tres órdenes
clásicos. Sus elementos principales incluyen:

-Columnas: Las columnas corintias son delgadas y altas, con una base similar a la jónica. El
fuste está estriado de forma más suave que en el orden jónico y está rematado por un
capitel decorado con hojas de acanto y volutas.
-Entablamento: El entablamento corintio es similar al jónico, con un arquitrabe dividido en
tres bandas horizontales y un friso decorado con triglifos y metopas. Sin embargo, el friso
corintio puede ser más rico en detalles y ornamentación.
-Otros detalles: El orden corintio se caracteriza por su exuberancia y ornamentación floral,
con el capitel decorado con hojas de acanto y otros elementos vegetales.

Estos tres órdenes clásicos han sido utilizados a lo largo de la historia como elementos
arquitectónicos en diferentes estilos y épocas. Su belleza y proporciones han influido en la
arquitectura occidental y siguen siendo utilizados en la arquitectura contemporánea como
una forma de evocar la estética y el legado de la antigua Grecia y Roma.
Panteón:

El Panteón es un magnífico edificio antiguo situado en Roma, Italia, y es uno de los


ejemplos más destacados de la arquitectura romana y un hito arquitectónico a nivel mundial.
Fue construido durante el reinado del emperador romano Adriano, en el año 126 d.C.,
aunque se cree que reemplazó a un templo anterior del año 27 a.C. El Panteón ha sido
utilizado durante siglos como iglesia cristiana y actualmente es un importante destino
turístico.

El diseño del Panteón se basa en una planta circular con una impresionante cúpula
hemisférica. Su forma icónica ha sido una fuente de inspiración para numerosos arquitectos
a lo largo de la historia. La cúpula es una de las más grandes y mejor conservadas de la
arquitectura antigua, y durante más de 1.800 años fue la cúpula más grande del mundo. Su
diámetro es de aproximadamente 43,3 metros y se encuentra a una altura similar desde la
base hasta la parte superior.

La cúpula del Panteón está construida en hormigón y cuenta con una serie de anillos
concéntricos de piedra y ladrillo que ayudan a distribuir el peso de manera uniforme. En la
parte superior de la cúpula hay un óculo, una abertura circular que permite la entrada de luz
natural al interior del edificio y también contribuye a aliviar la carga estructural de la cúpula.

El interior del Panteón es igualmente impresionante. La planta circular está flanqueada por
una serie de nichos y cuenta con una rotonda central bajo la cúpula. La combinación de la
forma circular y la entrada de luz a través del óculo crea un ambiente único y dramático en
el interior del edificio.

Uno de los aspectos más notables del Panteón es su diseño y construcción ingeniosa. A
pesar de su antigüedad, la cúpula ha resistido el paso del tiempo y ha permanecido en pie
en gran parte en su estado original. La solidez y durabilidad de su construcción son un
testimonio de la habilidad y el conocimiento técnico de los arquitectos romanos.

En resumen, el Panteón es un impresionante ejemplo de la arquitectura romana antigua. Su


diseño circular y su cúpula son admirados por su belleza y su capacidad técnica. Como uno
de los monumentos más importantes de Roma, el Panteón sigue siendo un testimonio
duradero de la grandeza y la habilidad arquitectónica de la antigua Roma.
Pechina:

La pechina es un elemento arquitectónico que se utiliza en la transición entre una base


cuadrada o rectangular y una cúpula o una bóveda semiesférica. Consiste en un triángulo
curvo o trapezoidal que se encuentra en las esquinas o los espacios entre los arcos o las
paredes y la base de la cúpula o la bóveda.

Las pechinas cumplen una función estructural importante al transferir el peso de la cúpula o
la bóveda a los pilares o las paredes circundantes. Permiten una transición suave y estética
entre las formas cuadradas o rectangulares de la base y la forma circular o semiesférica de
la cúpula.

Además de su función estructural, las pechinas también pueden ser elementos decorativos
en la arquitectura. Pueden estar adornadas con esculturas, relieves o frescos que
embellecen y enriquecen visualmente el espacio arquitectónico.

Las pechinas son utilizadas en diferentes estilos arquitectónicos a lo largo de la historia. Por
ejemplo, en la arquitectura bizantina, se utilizaban pechinas para la transición entre los
muros y las cúpulas en las iglesias y basílicas. En la arquitectura islámica, las pechinas
también se utilizan en las transiciones de las salas cuadradas a las cúpulas. En la
arquitectura renacentista y barroca, las pechinas fueron empleadas en la construcción de
cúpulas y bóvedas de iglesias y edificios públicos.

En resumen, las pechinas son elementos arquitectónicos que permiten la transición entre
una base cuadrada o rectangular y una cúpula o una bóveda semiesférica. Cumplen una
función estructural al transferir el peso, y también pueden tener un propósito decorativo al
embellecer el espacio arquitectónico.
Perspectiva:

La perspectiva es un concepto fundamental en el arte y el diseño que se refiere a la


representación visual de la profundidad y la tridimensionalidad en una superficie
bidimensional, como un lienzo, un papel o una pantalla. Es una técnica que permite crear la
ilusión de distancia, volumen y espacio en una imagen plana.

En la perspectiva, se utilizan reglas y principios geométricos para representar cómo los


objetos se ven desde un punto de vista específico. Esto implica tener en cuenta la relación
entre los objetos, su tamaño relativo, su posición en el espacio y cómo se ven desde
diferentes distancias.

La perspectiva se basa en la idea de que los objetos que están más lejos parecen más
pequeños y están más cerca del punto de fuga, que es el punto imaginario hacia el cual
convergen las líneas paralelas en el horizonte. Hay diferentes tipos de perspectiva, como la
perspectiva lineal, la perspectiva atmosférica y la perspectiva cónica, entre otras.

La perspectiva ha sido utilizada ampliamente en el arte occidental desde el Renacimiento,


cuando se desarrollaron técnicas más sistemáticas y precisas para representar la
profundidad y el realismo en la pintura. A través de la perspectiva, los artistas pueden crear
la ilusión de espacio y dar una sensación de profundidad a sus obras.

Además del arte, la perspectiva también se aplica en campos como la arquitectura, el


diseño gráfico, la fotografía y los videojuegos, donde se busca representar espacios
tridimensionales en superficies bidimensionales o en entornos virtuales.

En resumen, la perspectiva es la técnica utilizada en el arte y el diseño para representar la


profundidad y la tridimensionalidad en una superficie bidimensional. Permite crear la ilusión
de espacio y distancia, y se basa en principios geométricos que consideran la relación entre
los objetos, su tamaño relativo y su posición en el espacio.
Pilar:

Un pilar es un elemento arquitectónico estructural que se utiliza para soportar cargas


verticales y transmitirlas al suelo o a otras partes de un edificio. Los pilares son elementos
clave en la arquitectura, ya que proporcionan estabilidad y resistencia a las estructuras.

Los pilares se utilizan en una amplia variedad de edificios, desde viviendas y edificios
comerciales hasta monumentos históricos y estructuras de gran envergadura. Pueden estar
hechos de diferentes materiales, como piedra, ladrillo, hormigón armado, acero u otros
materiales resistentes.

En resumen, un pilar es un elemento arquitectónico que se utiliza para soportar cargas


verticales y transmitirlas al suelo. Los pilares pueden tener diferentes formas, estilos y
materiales, y son fundamentales para la estabilidad y resistencia de los edificios.
Pináculo:

En arquitectura, un pináculo es un elemento vertical puntiagudo que se coloca en la parte


superior de una torre, una aguja, un arbotante o cualquier otra estructura arquitectónica. Se
caracteriza por su forma afilada y estilizada, similar a una aguja o una punta.

Los pináculos se utilizan principalmente con fines decorativos y estéticos, y son comunes en
estilos arquitectónicos góticos y renacentistas. A menudo se colocan en las esquinas de las
torres o en la parte superior de las estructuras para enfatizar la verticalidad y proporcionar
un remate elegante.

Además de su función estética, los pináculos también pueden tener un propósito práctico en
la arquitectura. Pueden servir como contrafuertes o elementos de refuerzo para estabilizar y
equilibrar las estructuras, especialmente en el caso de torres o agujas altas que pueden
estar expuestas a fuertes vientos u otras fuerzas externas.

Los pináculos están hechos típicamente de materiales duraderos y resistentes, como


piedra, metal o concreto, y a menudo están decorados con detalles ornamentales, como
esculturas, tracerías o gárgolas. Su diseño y tamaño pueden variar dependiendo del estilo
arquitectónico y la intención estética del edificio.

En resumen, un pináculo es un elemento arquitectónico puntiagudo y estilizado que se


coloca en la parte superior de una estructura para fines decorativos y estéticos. Además de
su función decorativa, los pináculos pueden tener un papel estructural al proporcionar
estabilidad y equilibrio a las construcciones.
Planta:

En arquitectura, la planta es una representación gráfica en dos dimensiones de un espacio


arquitectónico visto desde arriba. Es un dibujo a escala que muestra la disposición y
distribución de los elementos y espacios dentro de un edificio.

La planta arquitectónica es una herramienta fundamental para entender la organización y el


diseño de un edificio. Proporciona información detallada sobre la distribución de
habitaciones, la ubicación de muros, puertas y ventanas, así como los espacios de
circulación, como pasillos y escaleras.

En una planta, los diferentes espacios se representan mediante líneas, que pueden ser
continuas o segmentadas, y se utilizan símbolos y códigos para identificar los diferentes
elementos, como habitaciones, muebles, instalaciones sanitarias y eléctricas, entre otros.
También se indican las dimensiones y se establece una escala para que el dibujo sea
proporcional al tamaño real del edificio.

Las plantas arquitectónicas pueden mostrar diferentes niveles o pisos de un edificio, lo que
permite comprender la distribución vertical de los espacios. Por lo general, se incluyen
indicaciones de las medidas y secciones transversales, así como detalles adicionales
necesarios para comprender la disposición general del edificio.

Las plantas arquitectónicas son una herramienta esencial en el proceso de diseño y


construcción de un edificio. Permiten a los arquitectos, diseñadores y constructores
visualizar y comunicar sus ideas, así como facilitar la coordinación entre diferentes
disciplinas, como la estructural, eléctrica o de plomería.

En resumen, una planta arquitectónica es un dibujo a escala que representa la disposición y


distribución de los espacios y elementos dentro de un edificio visto desde arriba. Es una
herramienta fundamental para entender y comunicar el diseño de un edificio, así como
coordinar diferentes disciplinas durante el proceso de construcción.
Quattrocento:

El Quattrocento es un término utilizado para referirse al siglo XV, específicamente al periodo


del Renacimiento italiano. El término "Quattrocento" significa "cuatrocientos" en italiano,
haciendo alusión a los años 1400.

Durante el Quattrocento, Italia experimentó un florecimiento cultural, artístico y


arquitectónico, con importantes cambios en las concepciones estéticas y filosóficas de la
época. Fue un momento de transición entre la Edad Media y la Edad Moderna,
caracterizado por el resurgimiento del interés por la cultura clásica grecorromana, el
humanismo y la exploración de nuevas técnicas y perspectivas artísticas.

En la arquitectura del Quattrocento, se buscó revivir las formas y proporciones clásicas de la


arquitectura romana y griega. Se exploraron los principios de la perspectiva, la proporción
áurea y la simetría, y se realizaron importantes avances en la representación gráfica y
técnica de los edificios.

Uno de los principales exponentes de la arquitectura del Quattrocento fue Filippo


Brunelleschi, conocido por su diseño de la cúpula de la catedral de Florencia (Santa Maria
del Fiore). Su enfoque innovador en la arquitectura y la ingeniería marcó un hito en el
desarrollo de la arquitectura renacentista.

Durante este período, también surgieron otros arquitectos destacados como Leon Battista
Alberti, quien escribió tratados sobre arquitectura y diseñó importantes edificios como la
Basílica de Santa Maria Novella en Florencia.

La arquitectura del Quattrocento se caracterizó por la elegancia, la sobriedad y la armonía


en las proporciones y la atención al detalle. Se utilizaron materiales como la piedra, el
mármol y el ladrillo, y se realizaron grandes avances en la construcción de cúpulas,
bóvedas y sistemas estructurales.

En resumen, el Quattrocento fue un periodo crucial en la historia de la arquitectura, marcado


por el resurgimiento del interés por la cultura clásica y la experimentación con nuevas
técnicas y perspectivas. La arquitectura del Quattrocento sentó las bases para el desarrollo
posterior del Renacimiento y dejó un legado duradero en la historia de la arquitectura.
Rocalla:

La Rocalla, también conocida como Rococó, es un estilo arquitectónico y decorativo que se


desarrolló en Europa durante el siglo XVIII, particularmente en Francia. Es considerado una
evolución del estilo barroco, aunque presenta características distintivas y una estética más
ornamentada y delicada.

La Rocalla se caracteriza por su ornamentación extravagante y exuberante, con una


profusión de elementos decorativos inspirados en la naturaleza, como conchas, flores,
follaje, rocas y formas asimétricas. Estos elementos se utilizaban para decorar fachadas,
interiores, mobiliario y detalles arquitectónicos, creando una sensación de movimiento y
dinamismo en los espacios.

En la arquitectura rococó, se buscaba crear ambientes íntimos y elegantes, alejándose de la


grandiosidad y monumentalidad del barroco. Se daba prioridad a la ornamentación detallada
y delicada, con énfasis en la curva y la asimetría. Las líneas rectas y las formas geométricas
del barroco eran reemplazadas por curvas suaves y fluidas.

El rococó se manifestó en palacios, residencias aristocráticas, iglesias y espacios públicos.


Uno de los ejemplos más destacados de arquitectura rococó es el Palacio de Versalles en
Francia, donde se pueden apreciar las características ornamentales y la estética elegante y
refinada del estilo.

Además de la arquitectura, el rococó tuvo una influencia significativa en la decoración de


interiores, la pintura, la escultura, el mobiliario y las artes aplicadas en general. Se
caracterizó por su sofisticación y atención al detalle, con muebles y objetos decorativos
ricamente ornamentados y diseños que reflejaban la ligereza y la gracia del estilo.

Sin embargo, hacia finales del siglo XVIII, el rococó comenzó a ser reemplazado por el
neoclasicismo, que adoptaba una estética más sobria y basada en principios clásicos.
Aunque el rococó perdió popularidad como estilo dominante, su influencia perdura y se
aprecia en numerosos edificios y obras de arte de la época.

En resumen, la Rocalla o Rococó es un estilo arquitectónico y decorativo que se desarrolló


en Europa en el siglo XVIII. Se caracteriza por su ornamentación extravagante y
exuberante, con formas inspiradas en la naturaleza y una estética delicada y asimétrica.
Fue un estilo predominante en la decoración de interiores, la arquitectura y las artes
aplicadas durante ese periodo.
Tambor:

El tambor es una estructura cilíndrica o poligonal que se encuentra en la parte superior de


ciertos edificios, generalmente sobre la base de una cúpula o una torre. El tambor se sitúa
entre la base y la cúpula o tejado principal del edificio y cumple varias funciones
importantes.

El tambor actúa como una transición entre la base y la cúpula o tejado, proporcionando una
conexión visual y estética entre las dos partes. También ayuda a aligerar la transición entre
las formas geométricas diferentes y permite una transición más suave y armoniosa.

Una de las funciones principales del tambor es proporcionar soporte estructural. Sirve como
una base estable para la cúpula o el tejado, distribuyendo el peso de manera uniforme y
transmitiéndolo hacia los pilares o muros perimetrales del edificio. El tambor suele tener
muros o arcadas que lo rodean, lo que brinda estabilidad adicional y refuerzo estructural.

Además de su función estructural, el tambor también puede tener un componente


decorativo. Muchas veces se ornamenta con detalles arquitectónicos, como columnas,
arcos, ventanas o relieves, que realzan la estética del edificio y añaden belleza al conjunto.
El tambor también puede tener aberturas, como ventanas o claraboyas, que permiten la
entrada de luz natural al interior del edificio.

El tamaño y la forma del tambor pueden variar según el diseño y la función del edificio.
Puede ser cilíndrico, poligonal (como octogonal o hexagonal) o tener una forma más
compleja, dependiendo de la arquitectura y el estilo del edificio. También puede tener
diferentes alturas y proporciones en relación con la base y la cúpula.

El tambor es un elemento común en la arquitectura de edificios religiosos, como iglesias,


catedrales y mezquitas, donde se utiliza para soportar las cúpulas características de estos
edificios. También se encuentra en otros tipos de edificaciones, como palacios, edificios
gubernamentales o incluso en ciertas estructuras civiles y monumentos.

En resumen, el tambor es una estructura cilíndrica o poligonal que se encuentra en la parte


superior de ciertos edificios, entre la base y la cúpula o el tejado principal. Tiene funciones
tanto estructurales como decorativas, proporcionando soporte y estabilidad, y también
añadiendo detalles ornamentales al diseño arquitectónico del edificio.
Tenebrismo:

El tenebrismo es un estilo artístico que se desarrolló en el siglo XVII, especialmente


asociado con la pintura barroca española y el artista Caravaggio en Italia. También conocido
como "claroscuro extremo" o "chiaroscuro tenebroso", el tenebrismo se caracteriza por el
uso dramático de contrastes entre luces intensas y sombras oscuras.

En el tenebrismo, se busca crear un efecto teatral y emocionalmente impactante mediante


el uso de una iluminación intensa y direccional que se concentra en áreas específicas de la
composición, dejando gran parte de la pintura en penumbra. Las sombras profundas y las
zonas iluminadas brillantemente generan un contraste dramático que enfatiza la sensación
de profundidad y volumen en la obra.

El uso del tenebrismo permite resaltar figuras o elementos específicos de la pintura, a


menudo con un efecto de destello o iluminación focalizada. Estas áreas de luz intensa
contrastan fuertemente con el fondo oscuro, creando una sensación de realismo y
profundidad.

Caravaggio es considerado uno de los principales exponentes del tenebrismo. Sus obras,
como "El sacrificio de Isaac" y "La vocación de San Mateo", muestran un uso magistral del
contraste entre luces y sombras para crear un impacto visual y transmitir emociones
intensas.

El tenebrismo tuvo una gran influencia en el arte de la época y marcó un cambio


significativo en el tratamiento de la luz y la sombra en la pintura. Fue un estilo que desafió
las convenciones artísticas establecidas y buscó representar la realidad de manera más
vívida y dramática.

Aunque el tenebrismo alcanzó su máximo apogeo en el siglo XVII, su legado se puede


encontrar en diversas corrientes artísticas posteriores, como el barroco y el romanticismo,
donde el juego de luces y sombras sigue siendo una técnica utilizada para crear efectos
dramáticos y transmitir emociones.

En resumen, el tenebrismo es un estilo artístico caracterizado por el uso dramático de


contrastes entre luces intensas y sombras oscuras. Se busca crear un efecto de iluminación
focalizada que destaque figuras o elementos específicos de la composición, generando un
impacto visual y transmitiendo emociones intensas. Caravaggio es uno de los principales
representantes de este estilo.
Tondo:

En arquitectura, el término "tondo" se refiere a una forma circular o semicircular utilizada en


la decoración y diseño de elementos arquitectónicos. Es un término derivado del italiano
que significa "redondo" o "disco".

El tondo se utiliza comúnmente en elementos decorativos, como relieves, frescos, mosaicos


y pinturas, donde se representa una escena o figura dentro de un círculo o semicírculo. Esta
forma circular proporciona un marco visualmente agradable y enfatiza el tema o motivo
central de la representación.

En la arquitectura clásica, los tondos se utilizaban como elementos decorativos en frisos,


frontones, rosetones y arcos. A menudo se colocaban en los espacios entre columnas o en
las enjutas de los arcos. Los tondos podían contener esculturas, relieves o pinturas, que
representaban temas mitológicos, religiosos o alegóricos.

Los tondos también son utilizados en la arquitectura renacentista y barroca como parte de la
decoración de edificios. Se pueden encontrar en fachadas, frontones, óculos y otras áreas
donde se busca agregar un elemento ornamental y focalizar la atención en una figura o
escena en particular.

El uso de tondos en la arquitectura puede variar en tamaño, desde pequeños detalles en


relieves hasta grandes frescos circulares en techos o paredes. Esta forma circular a
menudo se asocia con la idea de perfección y equilibrio estético.

En resumen, el tondo en arquitectura se refiere a una forma circular o semicircular utilizada


en elementos decorativos para enmarcar y resaltar una escena o figura en particular. Se
encuentra en diferentes estilos arquitectónicos y se utiliza para añadir elementos
ornamentales y visuales atractivos a los edificios.
Transepto:

El transepto es una sección transversal en forma de cruz que se encuentra en muchos


edificios religiosos, especialmente en iglesias cristianas. Es una parte importante de la
planta de una iglesia y tiene una disposición perpendicular a la nave principal.

El transepto se extiende desde el cuerpo central de la iglesia, conocido como nave, y


atraviesa la nave principal en un ángulo recto. Como resultado, la planta de la iglesia adopta
una forma de cruz, con el transepto formando los "brazos" de la cruz.

El transepto puede tener una variedad de longitudes y dimensiones en diferentes iglesias.


En algunos casos, puede extenderse más allá de la anchura de la nave principal, mientras
que en otros puede ser más corto. Algunos transeptos pueden ser rectos, mientras que
otros pueden tener extremos más anchos, conocidos como transeptos salientes.

El transepto tiene varias funciones en la arquitectura eclesiástica. Primero, proporciona un


espacio adicional para acomodar a los fieles durante las ceremonias religiosas,
especialmente en las iglesias más grandes. También puede servir como una ubicación para
altares laterales, capillas o tumbas de importancia histórica.

Además, el transepto ayuda a crear una forma de cruz visible desde el exterior del edificio,
lo que refuerza el simbolismo cristiano. También puede tener ventanas y elementos
decorativos que realzan la belleza arquitectónica del edificio.

El transepto es una característica común en muchos estilos arquitectónicos de iglesias,


incluyendo el románico, el gótico y el renacentista. En la arquitectura gótica, por ejemplo, el
transepto a menudo está coronado por una gran vidriera, permitiendo la entrada de luz
natural y creando un efecto visual impresionante.

En resumen, el transepto es la sección transversal en forma de cruz que se encuentra en


muchos edificios religiosos, como las iglesias. Atraviesa la nave principal en un ángulo recto
y tiene varias funciones, como proporcionar espacio adicional, albergar altares o tumbas, y
reforzar el simbolismo cristiano. Es una característica arquitectónica prominente en muchas
iglesias de diferentes estilos.
Triglifo:

El triglifo es un elemento arquitectónico utilizado en el orden dórico de la arquitectura


clásica. Se encuentra comúnmente en los frisos de los templos griegos y romanos. El
término "triglifo" proviene del griego "triglyphos", que significa "tres canales" o "tres surcos".

Un triglifo consiste en una placa rectangular con tres surcos o canales verticales tallados en
su superficie. Estos surcos están separados por resaltes, creando un patrón repetitivo de
tres canales y dos resaltes en el friso.

En el friso dórico, los triglifos se alternan con las metopas, que son espacios rectangulares
donde se pueden colocar esculturas o relieves. Los triglifos se colocan sobre las columnas y
pilares, entre los capiteles y el arquitrabe.

El origen del triglifo se remonta a las vigas de madera utilizadas en las primeras
construcciones arquitectónicas de la antigua Grecia. En aquellos tiempos, los triglifos eran
utilizados para ocultar los extremos de las vigas de madera y actuar como una protección
contra la intemperie.

Estilísticamente, los triglifos son una característica distintiva del orden dórico y se
consideran un elemento de decoración importante. Además de su función decorativa,
también se cree que los triglifos pueden tener un origen simbólico o estructural, aunque su
verdadero significado ha sido objeto de debate entre los estudiosos.

El uso de triglifos se mantuvo a lo largo de la historia y se puede encontrar en la


arquitectura clásica posterior, como en los templos romanos y en los edificios neoclásicos
inspirados en la antigua Grecia.

En resumen, el triglifo es un elemento arquitectónico característico del orden dórico en la


arquitectura clásica. Consiste en una placa rectangular con tres surcos verticales separados
por resaltes. Los triglifos se utilizan en los frisos dóricos y se alternan con las metopas.
Tienen un origen antiguo y cumplen una función decorativa en los edificios clásicos.
Trompa:

En arquitectura, una trompa es un elemento estructural y decorativo que se utiliza para


realizar la transición de un plano cuadrado o rectangular a una cúpula o a un techo en forma
de cono, pirámide u otra forma similar.

Las trompas son superficies triangulares curvadas o en forma de cono que se construyen en
las esquinas de un espacio cuadrado o rectangular. Su función principal es distribuir el peso
y transmitir las cargas de la cúpula o el techo hacia los pilares o muros perimetrales del
edificio.

Las trompas proporcionan una solución arquitectónica eficiente y estética al permitir la


transición suave de una base cuadrada o rectangular a una forma más compleja en la parte
superior. Permiten que una cúpula o una estructura en forma de cono se asiente sobre una
base más sólida y estable.

Además de su función estructural, las trompas también pueden tener un carácter decorativo.
A menudo se ornamentan con detalles arquitectónicos, como molduras, esculturas o
relieves, que realzan la estética del edificio y añaden belleza al conjunto. Las trompas
también pueden tener aberturas, como ventanas o nichos, que permiten la entrada de luz
natural o la colocación de elementos decorativos.

Las trompas se utilizan comúnmente en la arquitectura de edificios religiosos, como iglesias,


catedrales y mezquitas, donde se utilizan para soportar cúpulas o techos de forma especial.
Sin embargo, también se pueden encontrar en otros tipos de edificaciones, como palacios,
edificios gubernamentales o incluso en ciertas estructuras civiles y monumentos.

En resumen, una trompa es un elemento arquitectónico utilizado para realizar la transición


de un plano cuadrado o rectangular a una cúpula o techo en forma de cono, pirámide u otra
forma similar. Tienen una función estructural al distribuir el peso y transmitir las cargas, y
también pueden tener un carácter decorativo al embellecer el edificio. Son comunes en la
arquitectura religiosa y en otros tipos de edificaciones.
Voluta:

Una voluta es un elemento arquitectónico que se encuentra comúnmente en los órdenes


clásicos de la arquitectura, como el jónico y el compuesto. Se trata de una forma espiral o
enrollada que se utiliza en la ornamentación de columnas, capiteles y otros elementos
arquitectónicos.

Las volutas suelen estar ubicadas en los ángulos o esquinas de los capiteles de las
columnas. Tienen una forma curva y estilizada, similar a un rollo de papel o a una espiral
asimétrica. Las volutas pueden ser simétricas, con giros idénticos en ambos extremos, o
asimétricas, con giros diferentes en cada extremo.

Estas formas espirales son consideradas una de las características más distintivas del
orden jónico. En el capitel jónico, las volutas se sitúan en los cuatro ángulos y se extienden
hacia el exterior, creando un aspecto elegante y dinámico. En el orden compuesto, las
volutas son aún más elaboradas y se combinan con otros elementos decorativos, como
hojas de acanto.

Además de su función decorativa, las volutas también cumplen un propósito estructural al


proporcionar un mayor apoyo y estabilidad a los capiteles y elementos superiores de las
columnas. Ayudan a distribuir el peso de manera uniforme y a transmitir las cargas hacia el
fuste de la columna.

Las volutas se pueden encontrar no solo en columnas, sino también en otros elementos
arquitectónicos, como frontones, cornisas, frisos y molduras. Se utilizan para enriquecer la
estética de los edificios y añadir detalles ornamentales.

En resumen, las volutas son elementos arquitectónicos en forma de espiral o enrollada que
se utilizan en los órdenes clásicos de la arquitectura, especialmente en el jónico y el
compuesto. Se encuentran en los capiteles de las columnas y tienen una función decorativa
y estructural. Las volutas añaden elegancia y dinamismo a los elementos arquitectónicos y
son una característica distintiva de la arquitectura clásica.
BIBLIOGRAFÍA:

https://museodiocesanociudadreal.wordpress.com/glosario/

https://www.sabuco.com/historia/vocabulario.pdf

https://es.wikipedia.org/wiki/Miguel_Ángel#Valoración

https://www.biografiasyvidas.com/biografia/m/miguel_angel.htm

https://www.worldhistory.org/trans/es/1-19089/miguel-angel/

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https://mediateca.educa.madrid.org/documentos/28ow76ye1q6fq23e

https://es.slideshare.net/JoseAngelMartinez/vocabulario-historia-del-arte

https://www.glosarioarquitectonico.com

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