Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Zaruma
Zaruma
MISTERIOS
Consumido por la ambición, el hombre tomó otra bolsa y corrió hasta el arbusto
donde había cosechado los ajíes, pero este había desaparecido.
El Cura difunto
Un joven de la zona rural de Zaruma había llegado a la cima del poblado, muy
tarde por la noche, en busca de medicinas para un pariente enfermo de
gravedad.
Debido al cansancio, decidió pedir posada en una casa de la calle Colón, que
aún existe.
Tras descansar, el joven que se preparaba para salir en busca de los remedios
fue detenido por la dueña de casa.
- “No se vaya en esta noche tan tenebrosa, espere un poco”, le dijo.
Pero su preocupación por la vida de su familiar fue mayor y el joven salió.
Camino a la casa de un boticario, observó que dentro de la iglesia sobre la calle
San Francisco, los faroles estaban encendidos y las puertas abiertas, por lo que
entró para pedir a Dios por sus familiares enfermos.
Ya en la iglesia se topó con un cura encapuchado, quien se ofreció celebrarle
una misa. Juntos recitaron varias oraciones, hasta que el joven se acercó al
sacerdote y observó que este tenía parte de su piel carcomida, los ojos
desorbitados y la quijada desencajada, estaba muerto.
El joven quedó helado del miedo sin poder moverse, entonces el cura le dijo -
“No huyas, yo era sacerdote y fui castigado por Dios, porque tenía aventuras
amorosas y cobraba demasiado por las misas, por eso estoy condenado a
celebrar misas en las madrugadas”. Al joven poco le importó la explicación y
huyó.
Al llegar a la casa donde había pedido asilo, completamente pálido, fue atendido
por la dueña del hogar y algunos vecinos.
- “Yo le advertí que no salga en esta noche tenebrosa”, le increpó la señora.
- “Pero tengo que volver por las medicinas”, respondió él, aún tembloroso.
La dama suspiró al notar su terquedad y le obsequió una botella de agua bendita.
El joven se subió a su caballo y fue directo hacia el boticario sin voltear a ver a
la iglesia y aferrándose al agua bendita.
Al obtener las medicinas, cabalgó a toda velocidad hasta su hogar para dárselas
a su pariente, quien logró salvarse. (F)