16PF-APO, Cuestionario de Personalidad para Adolescente.
FICHA TÉCNICA DE LA PRUEBA
Nombre completo: Cuestionario de Personalidad para Adolescente. Nombre corto: 16PF-APO Autor: J. M. Schuerger. Procedencia: IPAT, Institute for Personality and Ability Testing, Inc., Champaign, Illinois. Principal ámbito de aplicación: De 12 a 19 años, preferentemente. Forma de aplicación: individual y colectiva. Tiempo: Entre 45 y 60 minutos (unos 15 minutos más para la parte "Dificultades cotidianas"). Finalidad u objetivo: Apreciación de dieciséis rasgos o escalas primarias, cinco dimensiones globales de la personalidad, tres medidas de estilos de respuesta, seis preferencias ocupacionales y algunas escalas de tipo clínico (sobre problemas cotidianos). Uso: disponible en dos formatos, uno enfocado al profesional y otro adaptado específicamente a las familias de los escolares. Edad: De 12 a 19 años, preferentemente. Material: Manual, cuadernillo, hojas de respuestas y clave de acceso (PIN) para la corrección por Internet. Forma de administración: El APQ es fácil de aplicar. Se aconseja al examinador que se tome el tiempo necesario para que el evaluado se encuentre a gusto, en un buen clima físico (sala, mobiliario, ausencia de ruidos, etc.) y psíquico, así como que reciba una explicación de la finalidad del examen y del uso que va darse a los resultados. Algunos adolescentes pueden necesitar ayuda en esta fase del examen, y en estos casos el examinador tendrá que dedicarle más tiempo a la comprensión de las instrucciones preliminares y de los contenidos de los elementos, y si fuera necesario ir anotando él mismo las respuestas que el evaluado exprese verbalmente. En el caso de una aplicación colectiva, se reparten las hojas de respuestas y se cumplimentan los datos de identificación que se crean necesarios (nombre, apellidos, etc.). Luego se reparten los cuadernillos, dejándolos sobre la mesa con la portada a la vista y se dice: "En el cuadernillo hay cuatro partes o secciones, como podéis comprobar también en la hoja de respuestas (PAUSA)(2). Ahora dad la vuelta al cuadernillo porque vamos a leer las instrucciones para contestar: (SE LEEN TODAS LAS INSTRUCCIONES DE LA CONTRAPORTADA Y SE SIGUE LEYENDO LOS DOS PÁRRAFOS QUE VIENEN AQUI DEBAJO). ¿Habéis comprendido las instrucciones para responder? (PAUSA). ¿Tenéis alguna duda? (SE RESUELVEN LAS DUDAS SI LAS HUBIERE). ¡Atención! Volved a la primera página, abrid el cuadernillo y comenzad a contestaren la parte 1 de la hoja de respuestas". En una situación normal, como el instrumento no tiene un tiempo limitado, tal vez sea necesario animar a los examinandos a que trabajen sin pausas ni detenciones con una frase como la siguiente: "Recordad que no debéis emplear mucho tiempo en pensar sobre el contenido de una frase; leedla y anotad la primera respuesta que se os ocurra". Durante el examen, el aplicador debe estar atento a que las respuestas se vayan dando según las instrucciones y sean adecuadas al material utilizado; al recoger el material deberá comprobar que se han completado todos los datos pedidos y se ha contestado a todos o casi todos los elementos, pues una prueba bastante incompleta puede invalidar todo el esfuerzo de la aplicación. Es conveniente decidir a priori si las personas que vayan terminando pueden entregar el material y salir de la sala, o bien permanecer sentados hasta que todos hayan finalizado. En uno u otro caso, al terminar la aplicación se recoge todo el material y se da por terminada la sesión de examen, a no ser que los examinandos tengan que realizar alguna otra prueba. Forma de corrección: La corrección del APQ ha de realizarse con ayuda de procedimientos informáticos, puesto que el uso de la hoja de corrección manual sería demasiado lento y sujeto a errores, sobre todo en aplicaciones colectivas. Por este motivo la corrección se realiza mediante TEAcorrige, la plataforma de corrección de tests por Internet de TEA Ediciones. En la figura 2.1 se muestra un ejemplo de perfil de resultados que incluye las puntuaciones directas (PD) y percentiles (Pc) en cada escala junto con su representación gráfica. Debe tenerse en cuenta que las puntuaciones percentiles constituyen una escala ordinal (no se supone una unidad constante a lo largo de su rango, entre 1 y 99), es decir, la distancia que hay entre 10 y 30 no es la misma que la existente entre 30 y 50, ya que la diferencia en unidades percentiles tiene mayor significación en los extremos que en el centro de la distribución. Esto aparece así representado en el gráfico de resultados. Además, en él se resaltan algunos puntos críticos para la interpretación atendiendo a su significado estadístico, tal y como se comentó en el apartado 1.3. Concretamente se han establecido varios intervalos de puntuaciones delimitados por los percentiles 16 y 84, que establecen un intervalo de una desviación típica en torno a la media de la distribución, y los percentiles 3 y 97, situados respectivamente a dos desviaciones típicas con respecto a la media. Estos puntos críticos permitirán interpretar los alejamientos que se produzcan en las distintas puntuaciones con respecto a la media. El significado de los alejamientos en las dimensiones globales es mucho más importante porque los resultados provienen de una aglomeración de la información de varias escalas primarias. Es decir, un alejamiento de la zona promedio en una dimensión global es bastante significativo de esa dimensión específica. Interpretación: En un contexto de interpretación psicológica, es prudente tener presente la siguiente cuestión: ¿Qué significa ser una persona con estas respuestas y estas puntuaciones en este contexto? - Por tanto, toda interpretación debe tener en cuenta tanto las puntuaciones como el contexto, los antecedentes del examen (tales como el momento evolutivo de la vida del sujeto y los cambios que puede estar pasando), cuánto le afecta o importa al sujeto el mismo examen, y el uso que va a darse a la información que se derive de la interpretación. - Por ejemplo, el contexto del examen de un adolescente que va a ingresar en la universidad es diferente del contexto de otro que va a iniciar sus estudios secundarios, como es diferente el de un adolescente en una situación judicial del de otro que está pensando en su plan de estudios o carrera profesional, o bien, finalmente, el de un adolescente que será el destinatario del informe frente al de un joven tratado por su problemática ante un claustro escolar o un tribunal de justicia. - La estrategia recomendada para la interpretación de un perfil del APQ implica una evaluación de las distintas variables atendiendo a la siguiente secuencia: - 1. Estilos de respuesta - 2. Dimensiones globales - 3. Escalas primarias - 4. Preferencias ocupacionales - 5. Dificultades cotidianas (si se han medido) En los apartados siguientes se describen estos pasos. En general, los estilos de respuesta se evalúan primero para detectar posibles sesgos de respuesta que hayan distorsionado el perfil; luego se examinan las dimensiones globales porque permiten una visión amplia de la persona; finalmente, se atiende a las escalas primarias para obtener detalles específicos de la personalidad. A continuación pueden venir las Preferencias ocupacionales y las dificultades cotidianas.
Como se dan los resultados:
El APQ tiene tres índices de estilos de respuesta: Manipulación de la imagen (MI), Respuestas en blanco (Rb) y Respuestas centrales (Rc). En dos capítulos anteriores se ha comentado los fundamentos teóricos y resultados estadísticos de la elaboración original y de la adaptación española de estas tres escalas. Su lectura facilita una primera aproximación a su valor en la interpretación de los resultados del instrumento. En definitiva, las escalas de estilos de respuesta como finalidad la de ser unas señales de alerta ante posibles sesgos en la contestaciones del examinando. Cuando se obtenga una puntuación extrema en alguno de estos índices, el examinador debe apuntar algunas hipótesis sobre las actitudes del examinando para actuar con ese estilo de respuesta (si le es posible debe indagar en los datos existentes sobre el sujeto: historial previo, resultados de otros tests, notas de exámenes previos, comentarios después del examen actual, etc.). En alguna ocasión podría ser necesario desechar los resultados del examen actual y repetirlo. - MI, Manipulación de la imagen Esta escala contiene 8 elementos que no puntúan en ninguna de las escalas de personalidad. Esencialmente es una medida de la deseabilidad social. Una puntuación elevada sugiere respuestas socialmente deseables, y una baja apunta a un deseo por parte del sujeto de admitir rasgos o conductas socialmente no deseables. Como se ha indicado anteriormente, esta actitud puede tener, principalmente, dos componentes, uno de manipulación de la imagen en relación consigo mismo y otro en relación con los demás. En ambos casos existe la posibilidad de que la actitud sea consciente o inconsciente, o que el sujeto tenga normalmente un comportamiento de ese tipo. Una puntuación alta puede también reflejar un signo de adaptación inteligente a las demandas del entorno, o bien puede tratarse de una manera de ser peculiar de la persona (como sería el caso de un miembro de un determinado grupo social en el que sean genuinas esas conductas). En publicaciones antiguas sobre los instrumentos de Cattell se sugería la posibilidad de una corrección o modificación del perfil real del sujeto (añadir o restar 1 ó 2 unidades decatipo a algunas escalas primarias); pero esto sólo debería hacerse en las contadas ocasiones en que se crea necesario, puesto que esa corrección modificaría sustancialmente el valor discriminativo del APQ. Tal vez resulte preferible determinar un punto crítico que discrimine valores extremos de la deseabilidad social. Una frase inferencial en el informe sobre la actitud del sujeto en sus respuestas es menos segura cuando existe alguna razón en el sujeto para desviarse de unas respuestas sinceras; en esta situación no se puede aplicar una regla general. Por ejemplo, siempre es posible, aunque poco probable, que un adolescente presente una imagen falseada o distorsionada de sí mismo. Un nivel menor de distorsión puede ser debido al contexto o situación en la que se realiza el examen. Es muy corriente que el sujeto haga algún esfuerzo de adaptación de su autoinforme al contexto, y no ocurre solamente en los cuestionarios de personalidad. Así, cuando acude a una entrevista de selección de personal, el candidato se asea, se viste de modo adecuado y presenta su mejor conducta; esta misma persona se comporta de modo diferente en unas instalaciones deportivas, en el colegio, con los amigos y en su hogar. Se ha escrito mucho sobre el tema (véanse algunos análisis y citas bibliográficas al respecto en Seisdedos, 1988), y al final no hay certeza del grado en que el sujeto ha manipulado su imagen. El profesional deberá aplicar su propio criterio y basarse en patrones diferenciales de comportamiento según lo que esté en juego, así como otro tipo de información (entrevista, otros tests o comentarios de personas que conocen al sujeto). No obstante, se puede encontrar alguna ayuda en la misma puntuación MI; si es muy alta, es bastante probable la incidencia de la manipulación. Además, en el informe siempre se pueden redactar frases interpretativas del tipo de: "El sujeto se presenta a sí mismo en el cuestionario de personalidad como una persona...", o bien "Comparado con otros adolescentes, este joven se describe a sí mismo en sus respuestas al cuestionario como...". - Rb, Respuestas en blanco La escala Rb está formada por el número de elementos dejados en blanco por el sujeto. La distribución de frecuencias observada en la muestra de tipificación presenta una curva muy asimétrica, y esto ha quedado reflejado en las distribuciones de frecuencias observadas; una gran mayoría (un 90% de los varones y un 87% de las mujeres) obtuvo 0 puntos (y por eso este valor debería recibir el percentil 90 ó 87) y basta obtener 1 punto para superar el percentil 95. En la tabla 3.4 se ofrecen unas puntuaciones percentiles de acuerdo con el tipo de muestra (total o por sexo) que se desee emplear como término de comparación. Es preferible considerar un punto crítico para discriminar los resultados llamativos; si se toma como punto crítico el valor de 1 blanco (que recibe el percentil 96 en la muestra total), estadísticamente se puede afirmar (con la confianza del 95% de probabilidades) que cuando se encuentren dos o más blancos los resultados merecen una consideración especial. Una puntuación alta (destacable) sugiere que el examinando ha dejado sin contestar muchos más elementos que lo que fue normal en la muestra normativa. Una posible justificación puede ser el haber intentado evitar determinados contenidos de las cuestiones, o reacciones extremas a determinados contenidos, o dificultades de comprensión lectora o intentos de evitar dar mala impresión. El examinador debería indagar el porqué de esa ausencia de respuestas. Si es posible se debería tener una entrevista con el sujeto y discutir este hecho, en general y en determinados elementos. - Rc, Respuestas centrales Este tipo de respuesta es más frecuente que el anterior (Rb). A pesar de las instrucciones dadas al comienzo de la aplicación (tanto en los elementos propios de personalidad como en los de las Dificultades cotidianas), a favor de inclinarse por una de las alternativas extremas (Verdadero o Falso), una buena proporción de los sujetos ha empleado en alguna ocasión la alternativa central (respuesta "?"); sólo un 12% de la muestra total no empleó nunca esta alternativa en los elementos de personalidad; al menos, un 60% de los casos de tipificación ha llegado a emplear la alternativa central en un 10% de los elementos de personalidad existentes en el instrumento, y un 75% de dichos casos lo hizo en el 10% de los elementos de Dificultades. Es probable que dar la respuesta central sea un modo de eludir tomar una decisión entre las alternativas extremas. Los baremos elaborados son bastante discriminativos, y es aconsejable que el usuario defina (de acuerdo con su específica situación de examen) un punto crítico que le discrimine con bastante precisión los casos en los que haya una verdadera elusión ante los contenidos. Se han construido baremos diferenciados para la muestra total y para cada uno de los sexos. En cualquiera de los casos, debería intentar determinar las posibles causas: falta de atención a los contenidos de las frases, inconsistencia, indecisión, etc.