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la piel mixta
Olvídate de la molesta (y grasosa) zona T y de las partes resecas en tu piel, ¡con estas
pócimas caseras!
3. Tomate y pepino
Esta mezcla es una de las más efectivas para tratar las pieles mixtas, pues
el tomate equilibra el pH y el pepino refresca y aporta la humedad necesaria
a tu rostro.
Ten en cuenta que esta condición, que suele afectar a miles de mujeres, es uno de los
factores relacionados con el envejecimiento prematuro.
En esta oportunidad queremos compartir varias recetas para que no dudes en incluirlas en
tu rutina cuando presentes alguna señal de este problema.
Ingredientes
• 5 cucharadas de yogur natural (100 g)
• 2 fresas maduras
Preparación
• Pon el yogur natural en un recipiente y agrega las fresas.
• Tritura con un tenedor y mezcla para que todo quede bien integrado.
• Si deseas una textura más cremosa, bate todo en la licuadora.
Modo de aplicación
• Retira el maquillaje de tu piel y aplícale la mascarilla.
• Deja que actúe 20 minutos y enjuaga con agua tibia.
• Úsala 2 o 3 veces a la semana para mejores resultados.
Ingredientes
• 2 cucharadas de copos de avena (16 g)
• 3 cucharadas de miel de abejas (75 g)
Preparación
• Vierte los copos de avena en un recipiente y mézclalos con la miel
hasta conseguir una pasta.
Modo de aplicación
• Frota la mascarilla con suaves masajes circulares y déjala actuar 15
minutos.
• Enjuaga con agua tibia y repite su uso 2 veces a la semana.
Ingredientes
• 1 cucharada de leche en polvo (15 g)
• 1 clara de huevo
• 1 cucharadita de miel (7,5 g)
Preparación
• Incorpora todos los ingredientes en un recipiente hondo y bátelos
hasta obtener un producto homogéneo.
Modo de aplicación
• Extiende la mascarilla por toda la piel y deja que actúe 20 minutos.
• Retira los residuos con agua tibia y úsala 3 veces a la semana.
Ingredientes
• 1 cucharada de levadura de cerveza en polvo (15 g)
• 5 cucharadas de leche líquida (75 ml)
Preparación
Modo de aplicación
• Extiende el producto por todo el rostro y déjalo actuar 20 minutos.
• Enjuaga con abundante agua tibia, realizando suaves masajes
circulares.
• Úsala 2 o 3 veces a la semana.
4. Mascarilla de chocolate y aceite de almendras
Ingredientes
• 1 barra de chocolate pequeña
• 1 cucharadita de aceite de almendras (5 g)
Preparación
• Derrite una barra de chocolate en el microondas y mézclala con el
aceite de almendras.
Modo de aplicación
• Comprueba que la temperatura es apta para la piel y frótala por
todas las zonas deseadas.
• Deja que actúe de 20 a 30 minutos y enjuaga.
• Úsala, por lo menos, una vez a la semana.
Si notas que tu piel luce escamosa y sin vida, elige alguna de estas mascarillas naturales
para la piel seca para revitalizarla. Aunque sus principales efectos se obtienen a largo
plazo, de forma inmediata podrás sentir una agradable sensación de suavidad.
En el caso de las pieles grasas, los ingredientes usados en las mascarillas han de reducir
la producción de oleosidad que provoca granitos, puntos negros y apariencia “brillante”.
Ingredientes
• 1 plátano
• 1 cucharada de leche (10 ml)
• 2 cucharadas de copos de avena (20 g)
Preparación
• Pisa el plátano hasta formar un puré y coloca el puré resultante en un
recipiente.
• Echa la leche a temperatura ambiente y luego los copos de avena.
• Mezcla bien para conseguir una crema homogénea.
• Lava el rostro con agua templada y jabón neutro antes de proceder
con la mascarilla.
• Aplica con movimientos circulares, con la yema de los dedos en toda
la cara (con cuidado de que no ingrese en los ojos) y masajea por
cinco minutos.
• Pasado ese tiempo, enjuaga con agua fresca y coloca una crema
hidratante. Repite una vez a la semana.
Preparación
• En un recipiente coloca el yogur (de preferencia natural) y mezcla
con la miel.
• Con el rostro limpio, aplica con movimientos circulares haciendo
hincapié en las áreas más grasas o con más cantidad de granitos.
• Deja actuar 15 minutos y luego retira con agua tibia.
• Aplica una crema hidratante y repite, al menos, dos veces a la
semana.
Ten en cuenta que esta mascarilla solo se puede aplicar de noche, porque el ácido del
limón al contacto del sol puede manchar la piel. El huevo por su parte hidrata y suaviza la
dermis.
Ingredientes
• 1 clara de huevo
• 2 cucharadas de copos de avena (20 gramos)
• El jugo de 1 limón
Preparación
• En un recipiente coloca la clara de huevo y los copos de avena.
• Exprime el zumo del limón y añádelo a la mezcla.
• Remueve bien hasta formar una pasta cremosa y homogénea.
• Aplica en el rostro, previamente lavado, y deja actuar unos 20
minutos.
• Retira con agua fría para que los poros se cierren.
Ingredientes
• 1 patata
• 2 cucharadas de leche (20 ml)
• 2 cucharadas de miga de pan (20 g)
• ½ cucharada de jugo de limón (5 ml)
Preparación
• Pela la patata, córtala en cubos y cocínala con agua. Cuando esté
cocida cuela y haz una especie de puré.
• Lava bien el rostro con agua tibia.
• Mezcla el puré de patata con la leche, el limón y las migas de pan y
obtén una crema suave.
• Cuando esté a temperatura ambiente, aplica en la cara y deja actuar,
como mínimo, 20 minutos.
• Enjuaga con abundante agua fría.
Ingredientes
• 1 plátano
• 1 cucharada de miel (25 g)
• 1 cucharada de zumo de limón (10 ml)
Preparación
• Pisa el plátano y mezcla con la miel y el jugo de limón.
• Aplica esta mascarilla de consistencia uniforme sobre la piel limpia y
seca mediante movimientos circulares. Puedes también colocar en el
cuello.
• Cuando se haya secado (aproximadamente a los 15 minutos) retira
con agua tibia.
• Coloca una crema hidratante al finalizar.
Ingredientes
• 1 puñado de hojas de albahaca fresca
• 2 cucharadas de copos de avena (20 g)
• ½ taza de agua (125 ml)
Preparación
• Lava bien las hojas de albahaca fresca. Coloca en el vaso de la
licuadora.
• Agrega los copos de avena y el agua.
• Mezcla bien para que se forme una crema consistente (puedes añadir
más agua o más avena si es necesario).
• Aplica en el rostro, ya limpio y seco, con movimientos circulares.
• Deja actuar 20 minutos y enjuaga suavemente con agua tibia.
• Coloca una crema hidratante al terminar.
Ingredientes
• ½ taza de té de manzanilla (125 ml)
• 1 puñado de perejil
• 1 rebanada de piña
• ½ taza de yogur natural (100 g)
Preparación
• Lava bien las hojas de perejil y coloca en el vaso de la licuadora.
• Añade el té de manzanilla (lo puedes hacer de sobrecito o con las
flores) y el yogur.
• Pica la rebanada de piña y mezcla todo muy bien.
• Aplica en la piel ya lavada, deja actuar 15 minutos y retira con agua
tibia.
Padecer de piel sensible puede ser un auténtico incordio. Hay que cuidarla
más de lo normal y ser precavidos con los cosméticos y cremas que
aplicamos sobre ella. Lo primero que debemos hacer es observar nuestra
piel y ver qué elementos hacen reacción y cuales no lo hacen.
Pero, por lo general, existen diferentes aceites y frutas que ayudan a hidratar
la tez sensible a la vez que la calma y regula su ph. Estos pueden potenciar
sus beneficios si se combinan con otros y los aplicamos en el rostro a modo
de crema o mascarilla facial. Todo puede hacerse desde casa y si sigues a
rajatabla las recomendaciones de los especialistas, esto es preferible a
comprarlas en tienda debido al alto contenido en químicos.
- Uva: Esta fruta es toda una aliada de belleza. Es muy rica en vitamina A,
polifenoles y otros antioxidantes. Es muy beneficiosa para enfermedades de
la piel como la rosácea o la dermatitis atópica.
No debes olvidar que los mayores enemigos para una piel sensible son los
ácidos como los cítricos o el tomates, ya que alteran el ph de la piel del
rostro, una zona que ya es bastante delicada de por sí.
• Arcilla blanca
• Agua de mar
• Un aguacate
• Aceite de caléndula
• Aceite esencial de manzanilla
Bate todos los ingredientes sin incorporar ni arcilla ni aceite el aceite de
manzanilla. Vierte el contenido en un bol y añade una cucharada sopera de
arcilla. Añade 5 gotas de aceite de manzanilla y remueve el contenido.
Aplica la mezcla en la cara durante 15 minutos y observarás los magníficos
resultados.
Mascarilla de pepino
Especialmente beneficiosa para la rosácea
Ingredientes:
• Medio pepino
• Aceite de oliva
Pela medio pepino, tritúralo y añádele una cucharada sopera de aceite de
oliva virgen. Es una mascarilla sencilla y de lo más efectiva para bajar
rojeces e irritaciones del rostro. Hay que aplicarla y dejarla actuar durante 15
minutos y retirarla con agua tibia sin ayuda de jabón.
Ingredientes:
Ingredientes:
• Manzanilla
• Un tallo de aloe vera
Prepara una infusión con manzanilla y una vez que quede fría, añádele la
pulpa de un tallo de aloe vera. Bate los ingredientes hasta que tengas una
pasta uniforme. Extiéndela por el rostro y déjala reposar sobre la piel
durante 15 minutos. Los resultados saltarán a la vista enseguida.
Sin embargo, hay formas sencillas, más naturales e inofensivas de obtener una piel
radiante y saludable. No te pierdas estas mascarillas caseras para piel sensible, con
ingredientes naturales que no le harán daño a tu piel, a continuación:
#5 Mascarilla de miel y zanahoria
Para esta mascarilla facial natural necesitarás dos o tres zanahorias cocidas y una o dos
cucharadas de miel. Coloca las zanahorias y la miel en un recipiente y mezcla hasta formar
una pasta suave.
Esta mascarilla es ideal tanto para piel seca como para piel sensible. Para mejores
resultados es conveniente usar la mascarilla antes de dormir, ya que el huevo ayudará
a nutrir la piel. Puedes usar esta mascarilla regularmente para obtener mejores resultados.
Luego aplica la mezcla en el rostro dejando que se seque naturalmente. Una vez seca,
enjuaga con agua fría y obtendrás una piel radiante de manera natural.
El limón es un blanqueador natural y funciona muy bien para conseguir una tez clara, sin
ser demasiado duro con la piel.
#1 Mascarilla de banana, clara de huevo y requesón
Para esta mascarilla natural necesitarás media banana, una clara de huevo y media
cucharada de requesón. Pisa la banana hasta eliminar la mayor cantidad de grumos. Luego
añade la clara de huevo y el requesón hasta formar una pasta suave. Aplica la mascarilla
en la piel dejando actuar por 15 minutos. Luego enjuaga con agua.
Esta mascarilla es ideal para tipos de piel sensible y para obtener un brillo radiante en el
rostro.