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Vivir una vida sin conflictos

Es posible vivir una vida sin conflictos, pero sólo en el caso de que
aceptemos totalmente el conflicto. Tan pronto como nos empeñemos en ver que el
océano está en calma, surge el tifón. Encuentra el profundo océano de compasión
que se halla en tu interior. Encuentra el corazón y lleva hasta él la conciencia de tu
mente. En todos los juicios que yo hago sobre ti hay un juicio sobre mí mismo. Y
ambos son igualmente ciertos o falsos. No es necesario que diga tú tienes razón y
que yo estoy equivocado. No necesito reemplazar mi verdad por la tuya o vivir mi
vida según tus premisas. Un mundo que pretende conseguir un acuerdo
encontrará conflicto y sectarismo. Un mundo que proporciona un espacio seguro a
la diversidad, encontrará la unidad esencial para convertirse en entero. Es posible
sentirse feliz con alguien. Es posible sentirse triste con alguien. Es posible
compartir la tristeza y la felicidad. Pero ni la felicidad ni la tristeza propia son
responsabilidad de ese alguien. Somos los únicos responsables de todos nuestros
pensamientos y sentimientos. Si te resulta difícil ser amable contigo mismo,
aceptar compasivamente tus errores, avanzar a través de tus miedos..., ¿cómo
ayudarás a otro?. El amor se construye sobre la base de la aceptación y la
confianza, no sobre la del juicio y la interpretación. Es imposible saber por
anticipado lo que te sucederá en la vida; es imposible planificarla. El momento es
siempre una sorpresa. Todos necesitamos energía para vivir, energía que
obtenemos de la transformación y del crecimiento de la conciencia. Cuando hay
una expansión de la conciencia, los moldes se rompen y hay que buscar otros
nuevos. La única pregunta que hay que hacerse en el viaje interior es: «¿Estoy en
paz?». Si no lo estás, quizás se deba a que te has identificado con algo externo a
ti, a haber acondicionado tu felicidad a otra cosa. El amor se entrega sin esperar a
ser retribuido, debemos ser canales dispuestos a ser llenados y a llenar a aquellos
que están vacíos.

Dr. Anderson García Chávez

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