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Abstract
El presente trabajo indaga sobre la historia de las emociones como campo particular de
estudio. Así mismo nuestra interpretación central gira en torno a los trabajos realizados por
la historiadora Katie Barclay. Sabemos que en base a la economía y las emociones
vislumbra como las capacidades de los actores del pasado alrededor de diversas
problemáticas podían leerse mediante sus sensaciones, comportamientos y
fundamentaciones, también es interesante vincular ello con los sentidos establecidos por
temáticas parecidas. En cuanto y en tanto a la legalidad, creemos que es un punto fuerte
que permitirá observar esta dicotomía entre razón - sentir y los debates correspondientes.
Donde las normativas y los recortes periodísticos representan fuentes importantes sobre las
que se puede conversar, del mismo modo que entrever los usos de las mismas por la propia
Barclay.
This paper investigates the history of emotions as a particular field of study. Our central
interpretation revolves around the work of historian Katie Barclay. We know that on the basis
of economics and emotions she envisions how the capacities of past actors around various
issues could be read through their feelings, behaviours and rationales, and it is also
interesting to link this with the meanings established by other historians when working with
this topic. As far as legality is concerned, we believe that it is a strong point that will allow us
to observe this dichotomy between reason and feeling and the corresponding debates. In
which the regulations and newspaper clippings represent important sources that can be
discussed, as well as the uses of them by Barclay herself.
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I. El campo de la Historia de las Emociones
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al relacionarlo con la corporalidad. La medicina francesa y la británica, sin embargo,
pensaron en la preponderancia de lo universal y lo emotivo (algo que tuvimos oportunidad
de citar oportunamente). Esta universalidad era supuestamente independiente de los
contextos socio-culturales, queriendo quizás demostrar que toda explicación no tenia
porque vincularse a la vida general en sí. Entonces “… Las teorías fisiológicas y naturalistas
tuvieron gran influjo en las concepciones científicas decimonónicas, y su vigencia traspasó
el cambio de siglo “… (Bjerg: 2019, 4).
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Véase: Dodam, Thomas. Teoría y método en la Historia de las emociones, en: Fuentes para la
Historia de las emociones: Una guía, editado por Katie Barclay, Sharon Crozier – De Rosa, y Peter
Stearns, Routledge, 2021, Nueva York, pp. 16-17.
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II. Economía y caricias: Teoría
Las caricias y el afecto se encuentran dentro de los tres, dadas las explicaciones
señaladas oportunamente. Siguiendo con la lógica de Steiner “… el libre intercambio de
caricias es una actividad controlada, una situación en la que el medio para la
satisfacción de las necesidades de las personas no está a su propio alcance. Lo que
resulta de ello, es que lo más humano de las capacidades, la capacidad de amar, le es
hurtado a las personas, y se les vuelve en contra, pues se usa para obtener de ellas las
conductas deseadas… “ (Steiner: 1984, 4). Con todo ello, inferimos como lo hace el
autor que quien pueda estar libre de ello, podrá vivir dentro del sistema perfectamente,
sin dependencias ni controles, viviendo en plenitud en el mundo.
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Cerramos este apartado comentado algunas cuestiones, si mencionamos al autor y
parte sintetizada de su teoría, es porque sirve de utilidad para lo que sigue de nuestra
comunicación, dado que nuestro enfoque gira en torno a Katie Barclay y sus aportes a la
Historia de las Emociones, considerando algunos trabajos de su autoría y analizando la
historiadora.
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Información disponible en: https://www.historyofemotions.org.au/about-the-
centre/researchers/katie-barclay/
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tampoco similares. Según la historiadora “… La Irlanda de principios del siglo XIX era un
lugar de lucha social y política en múltiples ámbitos. La rebelión irlandesa de 1798 puso
en tela de juicio la relación política entre Gran Bretaña e Irlanda… la Unión de 1801
pretendía convertir en un socio igualitario del Reino Unido,… aunque… continuaron los
debates sobre si esta relación realmente beneficiaba a Irlanda o hasta qué punto se
trataba solamente de otra especie de colonialismo… “(Barclay: 2017, 3). Evidentemente
al margen de las fuentes, la cuestión política era un factor preponderante junto a lo
religioso, dadas las evidentes diferencias entre el catolicismo y el anglicanismo. ¿Es
visible con las fuentes leídas por la autora? Según sus propias palabras, su artículo “…
Se basa especialmente en las descripciones populares de los hombres de leyes escritas
por el abogado, dramaturgo y defensor de la emancipación católica Richard Lalor
Shiel… publicadas primero en la prensa periódica británica…” (Barclay: 2017, 3). De
ello se desprenden varios tópicos que la autora se encarga de destacar párrafo tras
párrafo, por un lado, las emociones y su relación con los cuerpos masculinos, por otro,
el rol de las clases social y además el género como elemento trascendental de algunos
de los sucesos de las fuentes,”… A la emoción… solo se la puede comprender dentro
de las estructuras culturales y sociales, allí las economías afectivas daban sentido a las
actuaciones emocionales… “(Barclay: 2017, 4).
Esta época de consolidación de la Revolución Industrial en sus otras etapas,
también consolido algunos movimientos que buscaban fortalecer o debilitar vínculos
entre naciones, para el caso de Inglaterra e Irlanda, eso se perfilaba desde lo religioso, y
¿Cómo lo describía la prensa y las narraciones según la autora? Pues bien, según sus
propias palabras “… el carácter se entendía como algo perfomativo, y los hombres
tenían buen carácter a través de comportamientos y conductas cotidianas… también se
preocupaban por la naturaleza engañosa de las apariencia, estudiando el
comportamiento de los demás… en busca de grietas que pudieran dar una idea del yo
interno…” (Barclay: 2017, 4).
En los diversos ejemplos que encontramos vemos que las emociones y las
corporalidades tienen tanto para los jueces, los actores sociales y la prensa en general
una razón de ser, dado que podía demostrar la capacidad intelectual de la persona
como sus sentimientos ante lo acaecido, “…. Este interesante y ambiguo relato, no
atípico a lo que publicaban los periódicos, combinando la teoría fisiognómica con
supuestos en torno a la hombría… La superioridad de Hogan sobre sus compañeros
campesinos estaba marcada por su cuerpo masculino y atlético, su rostro atractivo y su
amable humanidad…” (Barclay: 2017, 9). Aquí podemos retomar algunos conceptos
anteriores de lo que había sido el estudio de las emociones y la ciencia en el siglo XIX,
en torno a la explicación de alguna eventualidad que saliera de los patrones
establecidos, así para Darwin “… Los principales agentes que parecen provocar el
estado rudimentario en los órganos son la falta de uso… Sobre muchos puntos del
cuerpo humano se han observado rudimentos de músculos diversos…” (Darwin: 1871,
12). Quizá el interrogante aquí no sea la conexión entre las dos cuestiones, sino que
patrones siguieron persistiendo pero revestidos con otras perspectivas, por ejemplo, se
pensaba en aquella época que lo bello debía ir de la mano de lo civilizado y lo bueno,
categorizando su contraparte como un nivel de desorientación vinculado a diversas
razones, ello como dijimos anteriormente cambio, “… la antropología constituyó el otro
espacio principal para la renovación de los paradigmas explicativos sobre las
emociones. Los estudios antropológicos desarrollados en la primera mitad del siglo
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habían dado los primeros pasos en la desestabilización de la idea de las emociones
panculturales…” (Barrera/Sierra: 2020, 108).
Finalmente, a lo largo del artículo vemos que las fuentes las usa para verificar la
magnitud con la cual la prensa en su debido tiempo fomentó criterios que seguían una
corriente socio-cultural que influenciaba las mentalidades, si bien no hemos ejemplicado
en demasía, los casos de los cuales habla Katie Barclay, podemos inferir que obedecían
a analizar a la masculinidad en tanto y en cuanto al ambiente legal irlandés, por otra
parte, obedecía allí otro asunto no menor, el otro inglés, como perteneciente al mundo
de la racionalidad y contención de las emociones. Quedan por ver otras dos obras de la
autora.
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historiador del trabajo, la pobreza y la clase social podía desentrañar las condiciones
socio-económicas que propagaban la enfermedad y limitaban su tratamiento. El
historiador del Derecho señalaría como este caso estuvo implicado en la
responsabilidad penal, en cambio, un historiador de la emoción se centraría en la
expresión de las emociones de Alejandro y como ellas tenían un rol en su enfermedad,
personalidad y las relaciones personales (Barclay: 2017, 163-164). Vemos en lo citado
muchos de los debates dados en los siglos XIX y XX tanto en Europa, Estados Unidos y
porque no América Latina, recordemos por ejemplo, que algo de eso también podíamos
entrever en Michel Foucault y su famoso libro Vigilar y Castigar “… El alma del
delincuente no se invoca en el tribunal a los únicos fines de explicar su delito, ni para
introducirla como un elemento en la asignación jurídica de las responsabilidades, si se
las convoca, con tanto énfasis, con tal preocupación de comprensión y una tan grande
aplicación “científica”, es realmente para juzgarla, a ella al mismo tiempo que al delito, y
para tomarla a cargo en el castigo…” (Foucault: 1976, 20). ¿Cómo vincular ello con las
observaciones y análisis de Barclay?, por empezar, el lugar correspondiente a las
emocionalidades, esas vigilancias respectivas a los delitos y las clasificaciones usadas,
quizás el filosofo francés busco otras variables para sus análisis, pero ambos
entendieron que el siglo XIX y XX, tuvieron ciertos cambios, el sistema penal fue un
reflejo de ello.
Siguiendo estas líneas, con el argumento de Foucault y lo que nos cuenta Barclay
sobre Alexander podemos afirmar que esa necesidad de castigo no solo iba por el delito
cometido en si, sino por los comportamientos extraños que el muchacho tenía. “… El
caso de Alexander Wingate plantea cuestiones claves sobre como los historiadores de
las emociones se ocupan de estas relaciones, dados los estrechos lazos que sus
contemporáneos realizaron sobre la salud psicológica y física y su reacción emocional a
la muerte de su familia. ¿Cómo podemos separar lo ambiental de lo cultural, en todo
caso, es útil hacerlo?, Este ensayo se ocupa de la erudición de Karen Barad, como
pensadora clave dentro de la escuela del Nuevo Materialismo y sus enfoques en la
historia de las emociones…” (Barclay: 2017, 164).
En la segunda parte del texto abre el juego no solamente a la teoría de Karen Barad,
sino a distintos autores que pertenecen a lo que conocemos como Historia de las
Emociones. Mencionando a los Stearns, a Reddy o bien a Rosenwein, quienes son los
teóricos clásicos de este campo historiográfico, ¿en todo caso para que hacer un estado
de la cuestión en esa parte de su artículo?, Para meternos de lleno en su argumento
central y además para seguir con el relato de los casos analizados. En el trayecto
siguiente continúa explorando la cuestión del yo psicológico, las comunidades o
regímenes emocionales, lo biológico y lo neurológico, todos componentes estructurados
u organizados en determinados fines y objetivos. Para Katie Barclay, el Nuevo
Materialismo “…No solo socializa lo material, sino que materializa lo social…” (Barclay:
2017, 169). En el siguiente apartado, habla sobre dicha corriente. El mundo físico y la
consideración de otras especies así como las correspondientes interpretaciones forman
parte de este Nuevo Materialismo, Entonces lo humano, lo lingüístico, la materialidad y
el sujeto este materialismo tomara forma para dar ciertos cambios a las
emocionalidades. El humano y su entorno, en ese sentido, David Le Breton afirmaba
“… Para el hombre no existen otros medios de experimentar el mundo sino ser
atravesado y permanentemente cambiado por él… La percepción no es coincidencia
con las cosas, sino interpretación. Todo hombre camina en un universo sensorial
vinculado a lo que su historia personal hizo con su educación…” (Le Breton: 2007, 11-
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12). ¿Tiene relación el universo sensorial en todo caso con la emocionalidad que
Barclay trabajo y explico? Creemos que esta nueva percepción del nuevo materialismo
se conjuga perfectamente en ciertos tópicos.
Retomando lo estudiado por la historiadora, podemos coincidir en que diversos
teóricos, sobre todo, los dedicados a los afectos, relacionaron la vida como elemento
primordial de supervivencia, también visible en los criterios de la sensorialidad. A pesar
de las acusaciones realizadas al Nuevo Materialismo como de determino biológico,
algunos autores trabajaron para relativizar estas acusaciones, por ejemplo, Elizabeth
Grozs. Para Barclay, “… Sostiene (la autora) que los procesos de selección natural, y en
particular la selección sexual, producen la diferencia como una categoría oncológica
que actúa como fuerza generadora de cambio, y que puede encontrarse en todos los
organismos… y en otras partes del universo. …” (Barclay: 2017, 171). Lo que sigue allí
son exploraciones específicas de lo cultural y lo biológico como puntos centrales del
campo en crecimiento, un determinismo biológico y material que no deja fuera otras
consideraciones.
En tanto y en cuanto a otras líneas próximas, Karen Barad y su cercanía a la física
cuántica establecieron un concepto denominado realismo agencial cuyo objetivo
principal era la presencia todo el tiempo de las cosas para su observación, explicada, en
otros términos. Por otro lado, si hay límites estos son impuestos por el observador de la
cosa o del objeto, siguiendo además un principio de la física cuántica basado en la
preponderancia del observador y la naturaleza de lo que está observando. La ciencia
analiza fenómenos y el ser humano se incluye dentro de ellos, dándole otro formato a
ese tradicional determinismo. Según esta perspectiva, los fenómenos son formadores y
reconfiguradores del mundo, para producir mediciones de tipo excluyentes, aunque a
veces pueden no serlo, la relación entre el hombre y el microscopio y el átomo
conforman ciertas decisiones, siendo ello estructura a lo que son las ciencias sociales
también.
Para Barad, indudablemente la realidad representa un tipo certero de realismo,
poniendo en juego la interacción de dos o más objetos, cuyo fin era subrayar la
existencia de fenómenos en conjunto a objetos, dándole vida a una explicación de
carácter menos continuista de lo que aparentaba con el determinismo biológico anterior.
Entonces recordemos que en la teoría cuántica, la materia física es creada por el
humano mediante su percepción, por algo hablamos del universo y dentro del mismo si
quisiéramos podemos hallar rasgos sensoriales determinados, la palabra y la materia
entonces producen cosas y estas mismas son causales de fenómenos vinculados a
otros y así se generaliza. Pues “… Como argumenta Barad, esta metodología tiene
importantes implicaciones para la práctica científica y social. En primer lugar, el
científico siempre forma parte del experimento, no hay una externalidad, no hay posición
objetiva…” (Barclay: 2017, 174). Antes de culminar, nos proponemos pasar por algunos
de los problemas que según Barclay presentan la Historia de las emociones.
A modo de conclusión de este apartado, podemos identificar al igual que hace la
autora lo siguiente, los historiadores casi siempre se centran en muchos temas excepto
al de la corporalidad, sensaciones y emociones, dejándolas en un tramo diferente al de
su trabajo, sabiendo pues, que la clave interpretativa no se halla de ese modo. El
lenguaje y la estructura forman parte de un todo y este todo también se compone de
partes que deben ser explicadas, dando una lógica reversionada a la establecida hasta
el momento. Parte de los análisis históricos e historiográficos deben dedicarse ya a lo
que la gente hace, mostrando como la emoción y la corporaneidad son elementos
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fundamentales para los análisis y explicaciones. Las fuentes pueden ampliarse y unir el
significado entre el ser, el cuerpo y lo que acontece con él. Los fenómenos no pueden
ser externos a otras causas y participantes, tal como ocurrió con el relato de la autora al
inicio y los comentarios de sus fuentes.
Llegamos al último texto realizado por la autora. Quizás aquí vemos de modo más
nítido, su pensamiento histórico, historiográfico y opinión respecto de la historia de las
emociones. Además se perfila el rol de las fuentes y cómo afrontarlas, teniendo en
consideración que se trata de gente del pasado que no puede ser sometida a ningún
tipo de revisión, por su carácter de fallecida, sabiendo que no es posible esa alternativa
a diferencia de otras ciencias. Por empezar, conviene señalar según sus propias
palabras “… Si los historiadores son sujetos emocionales, algunas de nuestras
relaciones más importantes son las que mantenemos con otros estudios de la materia y
con el mundo académico en general…” (Barclay: 2021, 27). Esto de por sí, ya nos
indica una instancia de separación entre el sujeto – objeto que dentro de otras
disciplinas científicas no se da. Para Mark Neuendorf, encargado de estudiar el estudio
de los cuerpos y su trayectoria durante extensas décadas, este asunto de la
corporalidad y de las emociones es un tópico que “… abunda en el registro histórico y
reflejan las ideas y creencias que ordenaban la comprensión de la emoción y la
corporalidad… Centrarse en las prácticas que los actores del pasado han utilizado para
dar forma a sus emociones permite a los historiadores recrear los procesos por los que
cultivan los hábitos corporales…” (Neuendorf: 2021, 225-226).
Según Barclay, este campo historiográfico no solamente es definido por su carácter
interdisciplinar sino también por la variedad de enfoques, metodologías y lecturas, así
ocurre con la interpretación de las fuentes, había determinados criterios en cada uno de
los periodos que explicaban acciones relacionadas con el amor, la delincuencia, la ira, la
hipersensibilidad e inclusive el rol que la prensa misma le otorga a las emocionalidades,
no nos sorprendería este aspecto de la autora, porque bien sabemos de su andar
teórico en los trabajos anteriores narrados aquí. Pues “… Por lo general, los
sentimientos se escriben en forma de metáfora corporal que refleja el tipo de fusión del
cuerpo y la mente … conocedor del habitus…” (Neuendorf: 2021, 226).
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“No es posible considerar como un ser humano a ese joven de dieciséis años, que
ha cometido docena de crímenes, que ha dado muerte a tantas criaturas inocentes e
indefensas, que ha robado y ha incendiado, que se ha hecho culpable de múltiples y
horrorosos delitos. No ya la maldad del hombre criminal, a quien guía el interés o
precipita la pasión, sino el instinto brutalmente destructor de la fiera sanguinaria ha
presidido cuanto ha hecho ese delincuente precoz, autor de tan execrables crímenes….
Hay que considerarle como un producto mountroso y como tal aislarle….” (Caso 1912-
Santos Godinos, Biblioteca Digital, p. 15).
Citamos aquí a modo de ejemplo, el caso de Cayetano Santos Godinos <<el Petiso
orejudo>> un asesino de niños y pirómano, cuyas atrocidades impactaron de lleno a la
argentina de la época. Sus fechorías junto a un aspecto físico dieron lugar a un sinfín de
connotaciones peyorativas hacia su persona, emociones y opinión del público general.
Lo traemos en este trabajo para demostrar el funcionamiento del abordaje de la historia
de las emociones, la ley y su lugar aquí y principalmente por ocurrir en nuestro país.
¿Existieron emociones especiales hacia este personaje por parte de la policía, del
público en general y sobre sus comportamientos? Pues según lo que hemos leído en la
fuente, era lo más próximo que había a lo mountroso, lo inhumano, lo animal, salvaje de
allí el estupor que se marcaba en los periódicos del periodo correspondiente, inicios y
primeras décadas del siglo XX.
Por otro lado, antes de continuar con nuestra autora, hemos de ubicar otro caso
emblemático de los policiales argentinos. Y es el de Carlos Robledo Puch <<el Ángel de
la muerte>> cuyas características físicas daban una opinión contraria a las acciones.
“… Le corresponde Pena de muerte. Chacal: Mato a 12 y por la espalda… Es “niño
bien”: tiene 20 años, carita de ángel, frío, feroz, cínico, entre otros, ultimo a dos
cómplices… es de familia pudiente y no le faltaba nada de lo que se consigue con
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Obtenido de:
https://www.google.com/search?q=caso+del+petiso+orejudo+recorte+periodistico&source=lnms&tbm
=isch&sa=X&ved=2ahUKEwjn3OXczonzAhUhq5UCHaLiDEYQ_AUoAXoECAEQAw&biw=1024&bih=
489&dpr=1#imgrc=2cdKeGDt7JAewM
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dinero. Tiene sólo 20 años y mató a 12 personas fríamente, sin la menor piedad…>>
(Crónica: 09/02/1972).
Carlos Robledo Puch cometió diez homicidios, robos, hurtos, y raptos. El impacto
que generó en los medios de comunicación fue porque la tradicional imagen del
delincuente caía en contradicción con el propio personaje en sí, porque su fisonomía y
su clase social impedían pensar en las criminalidades cometidas. Como ocurrió con el
caso anterior, los términos se relacionaban a lo mounstroso y diabólico, salvaje, etc.
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Consideraciones finales
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