Estructura de la Administración Pública en México

La Administración pública, básicamente, es la gestión de los organismos públicos para atender los
asuntos o necesidades de los ciudadanos. Este organismo busca de manera constante el bienestar
común.

Como es obvio, la Administración pública se organiza para poder desempeñar su función de una manera
correcta. México no se escapa a esta regla, por lo que vamos a adentrarnos en conocer la estructura de
la Administración pública en México.

¿Conoces a la perfección cómo se organizan las instituciones en México? Si no es el caso, no te

preocupes, ya que en Euroinnova te vamos a explicar en profundidad cuál es la estructura de la
Administración pública en México. Para empezar, vamos a entender a qué nos referimos al hablar de
este concepto.

estructura de la administración pública en México

La Administración pública, básicamente, es la gestión de los organismos públicos para atender los
asuntos o necesidades de los ciudadanos. Este organismo busca de manera constante el bienestar
común.

Como es obvio, la Administración pública se organiza para poder desempeñar su función de una manera
correcta. México no se escapa a esta regla, por lo que vamos a adentrarnos en conocer la estructura de
la Administración pública en México.

Entendiendo la división de poderes en México

Lo primero que debemos saber es que la división de poderes que existe en México. En efecto, ésta se
estipuló en el artículo 49 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por lo que se
convierte en un concepto indiscutible.

Este artículo señala que el poder de la Federación se divide en Legislativo, Ejecutivo y Judicial. También
señala que no se podrán reunir dos o más de estos poderes en una sola persona o empresa, al igual que
no se depositará el Legislativo en una sola persona.

El poder Legislativo crea preceptos jurídicos. Por otro lado, el Ejecutivo se encarga de aplicar la ley en
casos concretos y el Judicial trabaja para resolver las controversias jurídicas que se puedan generar. Los
tres poderes garantizan la libertad, la justicia, la seguridad y los servicios públicos.
Todo lo que debes saber sobre Administración pública de México

¿Conoces a la perfección cómo se organizan las instituciones en México? Si no es el caso, no te

preocupes, ya que en Euroinnova te vamos a explicar en profundidad cuál es la estructura de la
Administración pública en México. Para empezar, vamos a entender a qué nos referimos al hablar de
este concepto.

estructura de la administración pública en México

La Administración pública, básicamente, es la gestión de los organismos públicos para atender los
asuntos o necesidades de los ciudadanos. Este organismo busca de manera constante el bienestar
común.

Como es obvio, la Administración pública se organiza para poder desempeñar su función de una manera
correcta. México no se escapa a esta regla, por lo que vamos a adentrarnos en conocer la estructura de
la Administración pública en México.

Entendiendo la división de poderes en México

Lo primero que debemos saber es que la división de poderes que existe en México. En efecto, ésta se
estipuló en el artículo 49 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por lo que se
convierte en un concepto indiscutible.

Este artículo señala que el poder de la Federación se divide en Legislativo, Ejecutivo y Judicial. También
señala que no se podrán reunir dos o más de estos poderes en una sola persona o empresa, al igual que
no se depositará el Legislativo en una sola persona.

El poder Legislativo crea preceptos jurídicos. Por otro lado, el Ejecutivo se encarga de aplicar la ley en
casos concretos y el Judicial trabaja para resolver las controversias jurídicas que se puedan generar. Los
tres poderes garantizan la libertad, la justicia, la seguridad y los servicios públicos.

¿Qué tipo de régimen impera en México?

Volviendo a la constitución de los Estados Unidos Mexicanos, en el Art.40; comprobamos que el

régimen que existe en México es un régimen federal. A esta forma de estado le acompaña un gobierno
republicano, representativo y popular.
Este poder central que reside en el Presidente de la República se divide en poderes locales en cada
estado. A su vez, estos poderes locales también se dividen en poderes regionales, que se encarga de los
territorios más pequeños.

¿Y quién es el presidente de los Estados Unidos Mexicanos? A día de hoy, en el momento en el que se
escribe este artículo, el Presidente de la República es Andrés Manuel López Obrador, que lleva en el
cargo desde 2018.

Y dónde queda el concepto de Administración pública? Se puede definir como el conjunto de

organización públicas que llevan a cabo las tareas administrativos y de gestión de un país. Finalmente, se
encargan de poner en contacto el poder ejecutivo con la población en general.
El Poder Ejecutivo Federal en México, se deposita en una sola

persona, que es el Presidente de la República; éste es electo de

manera directa mediante el sufragio popular, en los términos

dispuestos por la ley electoral.

Como consecuencia del sistema presidencial existente en nuestro

país, el Presidente desempeña una dualidad de roles, dado que es

Jefe de Estado y Jefe de Gobierno.

En este sentido, como funcionario administrativo es el jefe superior de

toda la Administración Pública Federal; como funcionario político, el

Presidente es Jefe de Estado (Estados Unidos Mexicanos) y Jefe de

Gobierno (poder público de la federación).

Facultades.

El artículo 89 de la Constitución, establece cuáles son las facultades y

obligaciones que el Presidente tiene.

En su carácter de Jefe de Gobierno se pueden señalar las siguientes

facultades:

a) Ejecutar las leyes que expida el Congreso de la Unión

y reglamentarlas para su exacta observancia.

b) Nombrar y remover libremente a los secretarios de

Estado, remover a los agentes diplomáticos y

empleados superiores de Hacienda y nombrar y

remover libremente a los demás empleados federales,

cuyo nombramiento o remoción no esté determinado

de otro modo en la Constitución o en las leyes.

c) Nombrar a los ministros, agentes diplomáticos y

cónsules generales, con aprobación del Senado o de

la comisión permanente.

d) Dirigir la política exterior y celebrar tratados

internacionales, sometiéndolos a la aprobación del

Senado.

e) Habilitar toda clase de puertos, establecer aduanas

marítimas y fronterizas y fijar su ubicación.

Como Jefe de Estado, algunas de las facultades que tiene son:

a) Promulgar las leyes que expida el Congreso de la Unión.

b) Declarar la guerra en nombre de los Estados Unidos

Mexicanos, previa ley del Congreso de la Unión.

c) Convocar al Congreso a sesiones extraordinarias, cuando lo

acuerde la Comisión Permanente.

d) Conceder conforme a las leyes, indultos a los reos

sentenciados por delitos de competencia de tribunales

federales y a los sentenciados por delitos del orden común, en

la Ciudad de México.

Obligaciones.

Correlativamente las facultades que tiene el Presidente de la

República también son obligaciones, como así lo dispone el artículo

89 constitucional.

La estructura político-administrativa de la Presidencia de la

República.

La Oficina de la Presidencia de la República se integra por las siguientes unidades: 13

I. Jefatura de la Oficina de la Presidencia.

II. Secretaría Particular del presidente.

III. Coordinación de asesores del presidente.

IV. Coordinación de Comunicación Social.

V. Secretaría Técnica del Consejo de Seguridad Nacional.

Cabe señalar que los titulares de las unidades antes referidas tendrán

igual jerarquía entre sí y entre ellos no habrá preeminencia alguna;

serán nombrados y removidos libremente por el presidente y

dependerán directamente de él.

Cada unidad se auxiliará del personal que sea necesario para el

debido ejercicio de sus funciones, de conformidad con las

disposiciones aplicables.

Las unidades administrativas varían frecuentemente en número e

importancia, no realizan actos de autoridad, su labor es auxiliar en las

tareas que le competen al jefe del poder ejecutivo.

El Estado Mayor Presidencial forma parte de la Oficina de la

Presidencia, pero su estructura y funcionamiento se rige de

conformidad con lo dispuesto por la Ley Orgánica del Ejército y

Fuerza Aérea Mexicanos y el Reglamento del Estado Mayor

Presidencial.

Las formas de organización administrativa.

La administración pública se integra por las formas de organización

centralizada, descentralizada y desconcentrada, con atribuciones

distribuidas en distintos órganos, como lo establece el artículo 90

constitucional.

Las capacidades de dichas formas de organización de la

administración pública son atribuidas conforme a las competencias

establecidas en los ordenamientos jurídicos que determinan

estructuras, funciones, procedimientos, procesos y facultades para

que puedan atender el desenvolvimiento de la sociedad y el

desempeño de la administración.14

Dichas formas de organización deben ser entendidas como una

unidad ordenada, coordinada e interrelacionada como un todo en la

administración pública para actuar en los diversos campos de la vida

económica, política, social y cultural.

3.3.1 La centralización administrativa.

La centralización administrativa es la forma de organización

administrativa que posee mayor antigüedad.

Se caracteriza porque los organismos carecen de personalidad

jurídica propia y patrimonio propios, están jerárquicamente

subordinados de manera inmediata al titular del órgano ejecutivo,

quien concentra la facultad de decisión en las Secretarías de Estado,

la Consejería Jurídica, el Jefe de la Oficina de la Presidencia y las

demás unidades de apoyo a la presidencia.15

Cabe señalar que la jerarquía señalada implica poder de decisión y

nombramiento, mando, revisión, vigilancia y disciplina.

3.3.2 La descentralización administrativa.

La descentralización como forma de organización administrativa

surge de la necesidad de imprimirle dinamismo a ciertas acciones

gubernamentales, mediante el ahorro de los pasos que implica el

poder jerárquico, propio de los entes centralizados.

Se refiere a aquellos organismos dotados de personalidad jurídica y

patrimonio propios, a su vez se divide en organismos constitucionales

autónomos, que son autárquicos y organismos descentralizados

técnicos.

En la actualidad la descentralización mexicana equivale a lo que la

ley denomina administración pública paraestatal.

3.4 La Administración Pública Federal Centralizada.

De conformidad con el segundo párrafo del artículo 1º de la Ley

Orgánica de la Administración Pública Federal, la administración

pública centralizada está conformada de la siguiente manera:

I. Oficina de la Presidencia de la República.

II. Secretarías de Estado.

III. Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal.

IV. Órganos Reguladores Coordinados.

3.4.1 Oficina de la Presidencia de la República.

La Oficina de la Presidencia de la República es un órgano de apoyo

directo e inmediato al titular del Poder Ejecutivo, cuyo origen se ubica

en la Constitución de 1824. La estructura y organización de las

unidades administrativas integrantes de este órgano ha sido

modificada en múltiples ocasiones, en función de la óptica muy

personal de los diversos titulares del Ejecutivo Federal.

Se encuentra regulada en el Reglamento de la Oficina de la

Presidencia de la República.

Las Secretarías de Estado.

Son órganos administrativos centralizados que no cuentan con

personalidad jurídica ni patrimonio propio, se encuentran previstas en

el artículo 90 constitucional.

Sólo pueden ser creadas por ley del Congreso de la Unión.

Cuentan con competencia para atender los asuntos que la ley les

asigne de una determinada rama de la administración pública, tales

como salud, educación, agricultura, medio ambiente, etc.

Todas las secretarías de Estado cuentan con igual rango y entre ellas

no habrá preeminencia.

3.4.3 La Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal.

Esta oficina de apoyo presidencial es considerada por la Ley

Orgánica de la Administración Pública Federal como un organismo

centralizado.

La Consejería Jurídica se rige por los ordenamientos acerca de

presupuesto, contabilidad y gasto público federal, aplicables a las

dependencias del ejecutivo.

Algunos de los asuntos que le competen son los siguientes:

I. Brinda apoyo técnico jurídico al Presidente de la

República.

II. Somete a consideración y, en su caso, a firma del

Presidente de la República, los proyectos de iniciativas

de leyes o decretos.

III. Da opinión al presidente sobre proyectos de tratados a

celebrar.

IV. Revisa los instrumentos jurídicos para someterlos a

consideración y en su caso, a firma del Presidente de

la República.

V. Representa al Presidente de la República en los casos

del artículo 105 constitucional.

Los Órganos Reguladores Coordinados en Materia

Energética.

Con motivo de la reforma a la Ley Orgánica de la Administración

Pública Federal de 2014, se adicionaron los órganos reguladores

coordinados en materia energética, los cuales forman parte de la

administración pública centralizada.

Dichos órganos cuentan con personalidad jurídica propia y autonomía

técnica de gestión; se encuentran regulados por la Ley de los

Órganos Reguladores Coordinados en Materia Energética.

El Ejecutivo Federal ejerce sus facultades de regulación técnica y

económica en materia de electricidad e hidrocarburos a través de los

órganos reguladores coordinados, a fin de promover el desarrollo

eficiente del sector energético.

Los órganos reguladores coordinados son la Comisión Nacional de

Hidrocarburos y la Comisión Reguladora de Energía.

3.5 La administración pública paraestatal.

Otra vertiente de organización de la administración pública es la

llamada técnicamente descentralizada y denominada por la

Constitución como paraestatal.

Como ya se dijo en líneas anteriores, tienen personalidad jurídica y

patrimonio propios.

3.5.1 Los organismos públicos descentralizados.

Son creados por ley del Congreso de la Unión, a pesar de que la Ley

Orgánica de la Administración Pública señala que también pueden

ser creados por el Poder Ejecutivo Federal. Constitucionalmente por

razón de que el ente realiza una función de servicio público, o una

función administrativa, sólo es posible crearlos por ley en sentido

formal y material.

Por su parte la Ley Federal de Entidades Paraestatales (LFEP),

establece que son entidades paraestatales los organismos

descentralizados, las empresas de participación estatal mayoritaria y

los fideicomisos públicos.

Según el artículo 14 de la LFEP, los organismos descentralizados

deben tener por objeto:

I. La realización de actividades correspondientes a las áreas

prioritarias o estratégicas.

II. La prestación de un servicio público o social.

III. La obtención o aplicación de recursos para fines de

asistencia o seguridad social.

Algunas de las características con las que cuentan los organismos

descentralizados son las siguientes:

- Son creadas por ley del Congreso o decreto del Presidente de

la República.

- Están regulados específicamente por la ley o por el decreto

que los creó.

- Cuentan con personalidad jurídica distinta a la del Estado.

- Cuentan con patrimonio propio.

- Gozan de autonomía jerárquica con respecto al órgano

central; esto es, los distingue el hecho de tener un

autogobierno.

- Realizan funciones administrativas.

- Existe un control o tutela por parte del Estado, sobre su

actuación.

3.5.2 Las empresas de participación estatal.

En sentido lato, una empresa es una organización productiva que

actúa dentro de un marco jurídico para la producción o distribución de

bienes o servicios destinados a satisfacer necesidades sociales.

En razón de la calidad de los propietarios pueden clasificarse en:

privadas, sociales, mixtas y públicas; en cuyos extremos figuran las

empresas privadas y las empresas públicas, cuya comparación

permite comprobar que sus finalidades son diametralmente opuestas,

mientras que en el caso de las primeras es el obtener el mayor lucro

posible, en las segundas se encuentra atender al interés público.

Las empresas de participación estatal permiten la asociación del

Estado mexicano con los particulares; dicha asociación da paso a dos

tipos de empresas: de participación estatal mayoritaria y minoritaria.

3.5.3 Los fideicomisos públicos.

Mediante los fideicomisos una persona denominada fideicomitente

transmite a una institución fiduciaria la propiedad o titularidad de uno

o más bienes o derechos, según sea el caso para fines lícitos y

determinados, encomendando la realización de dichos fines a la

propia institución fiduciaria.

Propiamente en materia administrativa, el artículo 47 de la Ley

Orgánica de la Administración Pública Federal, establece que los

fideicomisos públicos son aquellos que el gobierno federal o alguna

de las entidades paraestatales constituye, con el propósito de auxiliar

al poder ejecutivo federal en las atribuciones del Estado, para

impulsar las áreas prioritarias, debiendo contar con una estructura

similar a las otras entidades, un comité técnico, y el fideicomitente

siempre será la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

No tienen personalidad jurídica propia; quien la tiene es la institución

fiduciaria.

En la práctica los fideicomisos públicos se utilizan para cualquier fin

que se fije la administración pública, centralizada o paraestatal, no

sólo para impulsar las áreas prioritarias del desarrollo, como lo limita

la ley.

3.6 Las empresas productivas del Estado.

Las empresas productivas del Estado son aquellas cuyo dueño es el

Estado, el cual, participa en el mercado como el resto de las

empresas privadas.

Tienen características de empresas privadas y no públicas, pues al

no pertenecer al sector paraestatal, no se regirán bajo la Ley Federal

de Entidades Paraestatales, se regirán como cualquier empresa

privada mediante el Código Mercantil y como supletorio de este, el

Código Civil Federal.

3.7 Los órganos constitucionales autónomos.

Son organismos creados por la propia Constitución que realizan una

función administrativa altamente técnica y gozan de autonomía

orgánica y funcional.

Tenemos como ejemplos al Banco de México (BM), Instituto Nacional

Electoral (INE), Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI),

Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Comisión Federal

de Competencia Económica (COFECE), Instituto Nacional de

Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos

Personales (INAI).
La Administración pública se encarga de apoyar al poder ejecutivo. En México se divide en dos: la
Administración pública centralizada y la Administración pública paraestatal o descentralizada.

Ya tenemos los primeros conceptos de la estructura de la Administración pública en México, pero ahora
queda ver de qué se trata cada una:

La Administración pública centralizada se caracteriza por ser un conjunto de órganos que se mantienen
unidos por un vínculo de jerarquía. Aun así, cada órgano se enfoca en una actividad, agrupando
dependencias por ramas. Ejemplos de este tipo de Administración pública sería la Presidencia de la
República, la Consejería Jurídica del Ejecutivo o las Secretarias de Estado.

La Administración pública paraestatal o descentralizada está formada por los organismos

descentralizados, las empresas de participación estatal y las instituciones nacionales de crédito. Al final,
son órganos creados por el Congreso o el Presidente que cuentan con una personalidad jurídica propia y
se orientan a la producción y explotación de bienes y servicios que satisfagan las necesidades sociales.

Cabe destacar que las empresas de participación estatal son instituciones en las que el gobierno posee
más del 50 % del capital.

Los elementos más importantes que conforman la Administración Pública Federal son el Marco jurídico
y organizacional de la APF.

De acuerdo con la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos el Estado Mexicano planeará,
conducirá, coordinará, orientará la actividad económica nacional y llevará a cabo la regulación y
fomento de las actividades que demande el interés general.

La administración pública es el conjunto de organizaciones y empleados del Estado encargados de llevar

a cabo las políticas gubernamentales para garantizar el bienestar social, una característica única de cada
nación, independientemente de su sistema político .
La Administración pública se basa en una estructura burocrática , es decir , una división de tareas que se
realizan bajo las órdenes de una autoridad jerárquica, está respaldado por un marco legal y regulatorio;
ámbito de su acción tiene repercusiones en el ámbito público y privado de un país.

Sus principales características son:

 Está regulada por el Poder Ejecutivo, por lo que su desempeño está sometido a un sistema de
leyes y normas.
 Se organiza con una estructura burocrática y al mando de un control jerárquico.
 Gestiona y administra los organismos del Estado para brindar servicios que satisfagan las
necesidades de la población y de la nación.
 Tiene como función garantizar el bienestar común de las personas y hacer respetar la ley de su
país.
 Se financia a través del capital recaudado por medio de impuestos.
 Se fundamenta en los principios de honestidad, eficiencia, transparencia, responsabilidad y
rendición de cuentas.

El objetivo de la Administración Pública es que:

La Administración pública tiene como objetivo administrar y gestionar de manera hábil y transparente
los recursos del Estado, tanto los materiales como los humanos, de manera que pueda satisfacer
necesidades primordiales de la sociedad.

Los recursos del Estado están conformados por el patrimonio y los bienes recaudados entre la población
de un país y, por eso, se denominan recursos públicos.

A través de la Administración pública el Estado se encarga de recaudar, organizar y redistribuir los

recursos públicos para que la población disponga de todo lo necesario para vivir y desarrollarse de
manera digna.

La Administración pública, que es regulada por el Poder Ejecutivo, regula las actividades de los
ciudadanos, a través de normas sociales e impositivas, y de los sectores privados, a través de normas
económicas e impositivas.

La Administración pública se basa en una estructura burocrática organizada en diferentes áreas, como

, secretarías y demás organismos especializados según la tarea a realizar.

Cada área se rige por un representante que es designado por el gobierno de turno y que debe mantener
la línea de mando establecida para toda su área. El sistema burocrático permite que se implemente la
misma metodología y procedimientos en las diferentes áreas, con el objetivo de brindar el mismo
servicio a toda la sociedad.
El inconveniente que suele tener el sistema burocrático es la lentitud de respuesta ante situaciones de
emergencia o la falta de capacidad para adaptarse a situaciones excepcionales o nuevas que puedan
surgir.
Artículo 20, de la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Morelos

http://marcojuridico.morelos.gob.mx/archivos/constitucion/pdf/CONSTMOR.pdf

Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Morelos

Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos

GORDILLO, Agustín, “Marchas y contramarchas en economía y derecho administrativo” Tratado de

Derecho Administrativo: Capítulo II, 2015. Disponible en

https://www.gordillo.com/pdf_tomo11/secc4/empresas2.pdf

Instituto Nacional de Administración Pública, “22 Casos Prácticos sobre Administración Pública”
Colección: Estudios y Documentos, 2011. Disponible en

https://biblioteca.unex.es/tesis/22_Casos_Practicos_Admon_Publica.pdf

PLACENCIA ALARCÓN, Luis Alberto, “Administración general y administración pública” Derecho

Administrativo. Disponible en

https://www.tfja.gob.mx/investigaciones/historico/pdf/administraciongeneralypublica.pdf