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El docuemnto en general discute la evolución del concepto de constitución y su

papel en las sociedades democráticas, particularmente en Europa y América.

La constitución se describe como una ley suprema que contiene normas


directamente aplicables tanto a los órganos estatales como a los individuos.
Este concepto, aunque novedoso en la España democrática, fue adoptado en
Estados Unidos desde los inicios del constitucionalismo y seguido en los países
latinoamericanos desde el siglo XIX. También fue adoptado en Europa después
de la Revolución Francesa, abandonado durante el siglo XIX y redescubierto
especialmente después de la Segunda Guerra Mundial.

La constitución fue concebida originalmente como una ley fundamental que


limitaba los órganos del Estado y proclamaba los derechos fundamentales de
los individuos, producto de un consenso político alcanzado por el propio
pueblo, y por tanto, directamente aplicable por los tribunales. Sin embargo, este
concepto fue modificado posteriormente con la restauración del principio
monárquico, que transformó la constitución en un código formal y abstracto del
sistema político, otorgado por el Rey y no impuesto directamente por los
tribunales.

Los documentos también discuten el principio de soberanía popular, dogma


fundamental de todo Estado democrático de derecho, que es inherente al poder
constituyente del Estado, no a los órganos constituidos del mismo, que ejercen
el poder público. Se sostiene que ningún órgano constitucional es ni puede ser
verdaderamente soberano, ni siquiera una Asamblea Constituyente nombrada
por el pueblo o el Parlamento, y todos están sujetos a la Constitución .

Los documentos analizan además el papel de los partidos políticos en las


democracias contemporáneas, donde la relación entre las fuerzas políticas y
sociales tiende a relativizar las funciones constitucionales de los órganos
estatales, transformando en muchos casos el Parlamento en una especie de
foro para los partidos políticos. Esta primacía fáctica de los partidos políticos ha
erosionado en algunos casos el principio mismo de separación de poderes y ha
llevado a la concentración de poderes en manos del gobierno o de los mismos
partidos políticos.
Finalmente, los documentos discuten el control jurisdiccional de la
constitucionalidad y el fin del absolutismo parlamentario. Excepto en el Reino
Unido, se puede decir que en Europa el mito de la soberanía parlamentaria se
ha disipado en gran medida.

Análisis:
El artículo analiza la importancia de la justicia constitucional como sustituto de
la revolución, permitiendo a los ciudadanos afirmar su supremacía
constitucional sin recurrir a la violencia. Destaca el concepto de Constitución
como norma suprema y la facultad de los jueces de declarar nulos los actos del
Estado si son contrarios a la Constitución.

También se menciona la evolución de los sistemas constitucionales en


diferentes países, incluido el establecimiento del Consejo Constitucional en
Francia y la adopción de Tribunales Constitucionales en algunos países
socialistas.

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