UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA

DE MÉXICO.

FACULTAD DE DERECHO.

TRABAJO DE UNIDAD.

ANÁLISIS DE LA LECTURA 10.

CHÁVEZ VELASCO EDUARDO.

NÚMERO DE CUENTA: 317301122
GRUPO. – 2252
LIC. ULISES LARA LOPEZ
DERECHO MUNICIPAL Y DE LAS
ALCALDIAS.
MARTES 3 DE OCTUBRE DEL 2022
La potestad reglamentaria de los ayuntamientos en México ha experimentado una
notable evolución a lo largo del tiempo, desempeñando un papel fundamental en la
administración local y la autonomía de los municipios. Esta potestad se refiere a la
capacidad de los ayuntamientos para emitir reglamentos y disposiciones locales que
regulan asuntos de su competencia.

En sus inicios, la autonomía municipal era limitada, y las regulaciones locales estaban
subordinadas a las decisiones de los gobiernos estatales y federales. Sin embargo, a
medida que las necesidades y dinámicas de las comunidades han cambiado, la potestad
reglamentaria se ha fortalecido, otorgando a los municipios un mayor grado de
autonomía y capacidad normativa. Esto ha sido fundamental para que los municipios
puedan adaptar las normativas a las particularidades de sus respectivas localidades y
responder de manera más efectiva a las demandas de los ciudadanos.

La fracción II del artículo 115 de la Constitución Mexicana juega un papel central en esta
evolución. Esta disposición establece las facultades y responsabilidades de los
municipios en materia de organización, funcionamiento y ejercicio de sus atribuciones.
En particular, la fracción II concede a los ayuntamientos la facultad de expedir
ordenamientos legales en asuntos de su competencia. Esto significa que los municipios
tienen la autoridad para crear reglamentos y disposiciones locales que regulen una
amplia variedad de temas, como el desarrollo urbano, la seguridad pública, la
administración financiera y otros asuntos de interés local.

Como resultado, los ayuntamientos emiten diversos ordenamientos legales para regular
la vida cotidiana en sus jurisdicciones. Estos pueden incluir reglamentos de
construcción, códigos de policía y buen gobierno, reglamentos de comercio, entre otros.
Estos instrumentos legales son fundamentales para garantizar el orden y la convivencia
en la comunidad, así como para promover el desarrollo sostenible de la región.

En conjunto, la potestad reglamentaria de los ayuntamientos, la fracción II del artículo

115 constitucional y los ordenamientos legales locales representan un importante marco
legal que permite a los municipios ejercer su autonomía y responder de manera efectiva
a las necesidades de sus habitantes.