La intuición es el tesoro de la psique de la mujer, es dejarnos guiar por esta mujer anciana que vive

dentro de nosotros esta intuición se esconde en nuestra psique, pero el cuento nos dice que por
medio del cumplimiento de ciertas tareas podemos volver a encajar esta intuición en la psique de
la mujer.

Nos habla de una madre buena de la psique, que nos protege, pero tambien nos obstaculiza al no
dejarnos enfrentar nuevos retos que se nos presenten. Entonces lo que debeos hacer es dejar
morir a esta madre buena para así poder vivir un periodo de aprendizaje, donde tendremos que
fijarnos un objetivo en la vida, estar dispuestos a correr riesgos haciendo uso de nuestra intuición,
que nuestra psique intuitiva se fortalezca. El dejar morir a esta madre buena que nos proporciona
protección, que nos hace sentir tan cómodos, nos producirá cierto temor por quedarnos
desprotegidos, pero solo así podremos dejar guiarnos por nuestra naturaleza instintiva.

Dejarnos guiar por esta psique instintiva nos ayudará a experimentar nuestra naturaleza propia,
esto que no queremos reconocer como propio porque es negativo.

La psique nos exige cumplir con exigencias ajenas a nosotros, colocadas por la cultura, cumplir con
lo que la sociedad nos demanda. Nos forma en una sociedad que nos exige ser de tal manera,
cumplir a lo que los demás demanda que muchas veces nos va poniendo obstáculos en nuestro
quehacer. Cuando no reaccionamos como lo espera la sociedad o lo que nos hemos ido
imponiendo en nuestra psique, es ahí cuando nos dice o sentimos que no servimos para eso, que
somos estúpidos o vacíos, he aquí el papel del depredador natural de la psique. Nos exige
demasiado que sentimos que nuestras cualidades o capacidades nunca son suficientes y entonces
siempre estamos buscando tener más y más. Lo que debemos hacer aquí es cuestionarnos que es
lo que quieren los demás o esperan de nosotros y que es o que nosotros queremos, ver que es lo
bueno para nosotros.

Un vez adentrados en este camino hacia nuestra capacidad intuitiva debemos dejarnos guiar por
nuestras percepciones y confiar en nuestros sentidos, siguiendo nuestra intuición para lograr
llegar a una confianza en nosotros mismos sin importar la situación. En el cuento la muñeca seria
la intuición, esa voz interna que nos dice que hacer y nos proporciona seguridad. Pero si no le
hacemos caso a esta intuición esta se debilita.

Llegamos a la parte del cuento donde vasalisa tiene que enfrentarse cara a cara con la bruja
salvaje, es aquí donde se da el encuentro con la madre feroz, familiarizarnos con ella y aprender
de sus valores, para enfrentarnos con el poder de los demás y con el nuestro. Tenemos que
organizar nuestro espacio psíquico e instintivo para llegar a la psique arquetípica de la mujer
salvaje. Muchas veces dejamos de lado la intuición y nos formamos en una falsa aceptación de
nuestra realidad que nos lleva a una vida rutinaria donde nos dejamos guiar por los complejos de
amabilidad, donde buscamos solo responder a los deseos de los demás, lo que debemos hacer
para no caer en esto es guiarnos por el poder de la intuición para encontrar nuestra naturaleza
salvaje.

Llegar a esto no es fácil, debemos cumplir con ciertas tareas psíquicas: quedarse con la bruja,
aclimatarnos a los poderes salvajes de la psique, conocer su poder y el de las purificaciones
interiores. En esta purificación tenemos que aprender a diferencias que tenemos que dejar morir
y que tiene que persistir en nosotros. Ser capaces de eliminar lo que ya no nos sirve, teniendo
claro que es lo que queremos, orden en nuestras ideas y sacando todo lo que no nos va a permitir
llegar a cumplir nuestros proyectos. Pero esto es algo que se debe de hacer frecuentemente no
solo cuando ya se sienta un caos en nuestra mente y ya no sepamos que hacer.