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Maltrato de animales
NCBTO-2023-3CC
de animales. En noticias del 2019 se presentaron 701 querellas en donde 439 eran
Rico. Han sido muchos los casos de maltrato en la isla como el de la yegua de
Añasco que fue arrastrada por una persona la cual se le impuso 12 años de cárcel
por este delito. También el caso del perro de Vega Baja que fue amarrado y
arrastrado con el carro y al final murió. Estos hechos fueron en la isla pero
dejaron una huella marcada de cómo está la salud mental de los seres humanos.
problema social afecta la comunidad desde todos los aspectos. En muchos casos
son personas que tienen muchos problemas, sociales y hasta mentales. Estas
personas descargan su ira contra los más inocentes. Son personas con trastornos,
usuarios, y hasta por maldad. Por ende, se necesita tomar acción y buscar ayuda
para esas personas y ponerle fin a este maltrato. El maltrato animal es penalizado
porque son seres vivos que son atropellados por quien se supone sea quien los
crueldad y presionar las autoridades pertinentes para que tomen acción. Preparar
organizaciones sin fines de lucro que lleven un mensaje contundente son evitar el
y que nadie debe ser maltratado sea por la razón que sea. Poner en práctica las
leyes y hacer que las respeten. Deben además subir las penalidades porque le
necesitan amor y cariño y no golpes. Basta ya del maltrato, los animales también
sufren.
Entre los centros de ayuda está el OICA que trabajan directamente estos
11/05/2021
A las oficinas de los Oficiales Investigadores de Crueldad de Animales llegan entre diez a 12
casos de maltrato animal diariamente, y aunque no hay estadísticas que evidencien un alza en
estos casos, sí se cree que estos acontecimientos se han disparado en el último año, precisó la
presidenta de esta entidad, Iris Quiñones.
“A nosotros nos llegan diariamente de diez a 12 casos. Antes eran de Bayamón los más que nos
llegaban. Pero ahora nos estamos dando cuenta que, desde que comenzó la pandemia, se han
estado reportado en los campos (en distintas partes de la Isla)”, dijo a EL VOCERO.
Estadísticas por el Negociado de la Policía, y enviadas a este medio, informan que en 2019 se
recibieron un total de 701 querellas por maltrato animal. De estas, 439 corresponden a perros, la
cifra más alta en los renglones reportados. La Uniformada no suministró estadísticas más
recientes.
Al igual que otras organizaciones y rescatistas, Quiñones se expresó consternada con el caso
de un perro que fue ultimado a manos de Salil Zaveri, un empresario oriundo de la India que
fue acusado ayer formalmente. El hombre le dio muerte al can mientras jugaba en el complejo de
golf Río Mar, en Río Grande, el pasado sábado.
“Lo que él hizo definitivamente era para arresto inmediato. Lo hizo con alevosía… Hubo causa
por el Artículo 7 (de la Ley 154 de animales). Y ves este caso de él, ¿si se enoja tanto con un
perro a nivel de matarlo, qué no te dice a ti que lo mismo puede hacer con un ser humano?”,
cuestionó.
El Artículo 7 de la Ley 154 al que hizo referencia Quiñones dicta lo siguiente: "Una persona
comete el delito de maltrato agravado de animales si la persona intencionalmente o a sabiendas:
tortura a un animal o mata a un animal bajo circunstancias que demuestren malicia premeditada
o un grave menosprecio por la vida”. La ley dice, además, que este tipo de maltrato agravado se
tipifica como delito grave de segundo grado, cuya pena es reclusión por un término no menor de
ocho años y un día, y máximo de quince 15 años.
“Lo que hizo fue intencional, con malicia”, recalcó la protectora de animales.
Contra el hombre pesan varios cargos, entre estos maltrato agravado de animales, y dos cargos
graves de disparar en un lugar público y apuntar con un arma.
Zaveri prestó una fianza de $6 mil, equivalente al 10% de la de $60 mil que le señaló un
magistrado y quedó en libertad el domingo en la noche. Se le quitó, además, su pasaporte y se le
colocó un grillete electrónico.
En otros casos, le ofrecen herramientas y ayudan a los dueños de los animales cuando ven que no
hay intención de maltrato. “Hay veces que tienen escasos recursos, y no tienen para comida. Pero
aman a sus animales, así que les ayudamos con eso, cuando son ese tipo de casos”, explicó.
No existe un registro que precise la cantidad de animales abandonados, merodeando las calles en
Puerto Rico sin un techo seguro. O, incluso, dejados amarrados en el interior de residencias
cuyos dueños no regresarán.
“Cada día hay más abandono. Las aerolíneas se han puesto difíciles para transportar a más
animales. Hay muchos requisitos para enviarlos a Estados Unidos. Y los centros de albergue
están llenos, lo cual crea otro problema”, explicó.
Desde los terremotos a principios de 2020 y la pandemia por el covid-19, más personas han
optado por irse, comentó. “No hay un registro con un número exacto, nadie se pone de acuerdo.
Pero son muchos”, dijo.
Maritza Rodríguez, directora de The Humane Society of Puerto Rico, opinó - en entrevista
separada- que el alza en los casos siempre ha estado, pero que ahora ha cobrado más notoriedad.
“En los últimos años, luego de (la aprobación) de la Ley 154, los casos se han hecho públicos.
Vemos un aparente alza, pero la realidad es que como no tenemos estadísticas anteriores, es
difícil saberlo. Creo que siempre ha existido un alza”, aseveró,
A pesar de que reconoce el avance y alcance que ha tenido la Ley 154, dijo que han habido
escollos en el sistema judicial porque “fiscales, jueces y policías” no han sabido interpretar la
ley. “Y muchos casos se caen por los famosos tecnicismos”, apuntó.
Hizo referencia, por ejemplo, a un caso de un perro que fue lanzado desde un auto en marcha.
“La jueza, en ese caso, no encontró causa”, expresó. Al can lo tienen bajo su cuidado
actualmente.
Otro obstáculo en los casos judiciales ha sido el “presentar la intención de abandono” para que se
pueda encontrar “causa”.
“Hay que demostrar que hubo ‘intención de abandono’. Pero, ¿qué más intención de abandono
que dejar al animal amarrado y sin cuidado?”, cuestionó. “Así que los casos se caen por
‘tecnicismos’”.
La organización que dirige contribuye con investigaciones y con la Policía cuando así las
autoridades lo solicitan.
Manuel Rivera Quiñones, rescatista independiente, aseguró tener “el corazón partido” con el
caso del perro muerto a manos del empresario, en Río Grande.
“Estamos consternados por lo ocurrido… ¿cómo es posible que este señor haya hecho este
horrendo crimen?”, se lamentó Rivera, quien lleva seis años como rescatista. “Estamos con el
corazón destruido, partido”.Comentó, además, que en los últimos años sí ha podido ver un
incremento en los casos de maltrato. “Ha habido un alza. Estamos cansados de tanto… que se
haga justicia”, dijo.Recordó varios casos que le han impactado, como el de “un perro en Dorado
al que le cortaron su rabo o el de tres canes que fueron colgados de un árbol”. “Esos casos fueron
terribles por esa misma área, en Dorado”, comentó.
Otros casos que han cobrado mayor notoriedad son el de la yegua Milagritos, en Añasco. Ella fue
arrastrada por una calle de ese municipio en 2010 por Georgie López Vigo, quien se le impuso
una sentencia de 12 años de cárcel por este caso.A finales de 2020, otro caso que causó gran
indignación fue el de un perrito al que le amarraron pirotecnia a sus testículos, en Vega Baja. El
can fue, además, atropellado. La Fundación Rabito Kontento lo rescató, pero el perrito murió
eventualmente debido a la gravedad de sus heridas provocadas.
Juan J. Jiménez Camacho de 43 años, fue acusado ayer por cargos de violaciones a los artículos
5A (maltrato de animales) de la Ley 154 para el Bienestar y la Protección de los Animales, y
6.06 (portación y uso de armas blancas) de la Ley de Armas, tras herir con un machete a un
perro.
Los hechos ocurrieron durante la noche del lunes, en el kilómetro 16.1 de la carretera PR-135 del
barrio Yahuecas en Adjuntas, cuando el imputado le ocasionó una herida abierta en el área de la
cabeza a un perro color negro, en circunstancias que no fueron reveladas en el informe de
novedades.
La jueza Melissa Santiago Núñez, del Tribunal de Utuado, determinó causa para arresto y le fijó
una fianza total de $80,000.00, la cual no prestó, por lo que fue ingresado en el complejo
correccional siendo ingresado en el complejo correccional Sgto. Pedro Joel Rodríguez Matos en
Ponce.
Juan J. Jiménez Camacho fue imputado por maltrato de animales y violación a la Ley de
Armas. (suministrada )
El agente Ismael Cordero consultó el caso con la fiscal Mayra Morales.
El perro, fue atendido por un estudiante de veterinaria, quien le tomó diez puntos de sutura. Su
condición es estable.