“Las mentes más profundas de todos los tiempos han sentido compasión por los animales”

(Friedrich Nietzsche)
El maltrato animal es una problemática que viene de muchos años anteriores, pero que recién en
este siglo XXI el asunto se ha tornado aún más serio y debatido, que se ha convertido en un
problema social que incrementa cada día más. Se da porque el ser humano no es consciente en
verdad de sus actos o acciones, y actúa por impulso, ya sea por su formación de niño y la
manera de crianza en torno a su educación, se hace de la vista larga ante este asunto y no toma
las medidas necesarias y como consecuencia la situación se agrave aún más, y los resultados son
animales maltratados, enfermos, desamparados por las calles ni el gobierno ni nadie hace nada
al respecto, lamentablemente nadie toma conciencia ni responsabilidad en este asunto.
El maltrato animal comprende comportamientos que causan dolor, sufrimientos, agresiones o
estrés al animal. Es muy penoso ver hoy en día a personas que golpeen a un perro hasta el punto
de dejarlo moribundo, un caballo que lo dejen atado sin darle de comer y bajo ningún techo, los
domadores que someten a golpes a leones con el único objetivo de tener dinero y entretener a un
público. En muchos de estos casos no existe verdadera justicia por estos crímenes causados a
seres vivos que son como nosotros, dejando impunes a los maltratadores:
Queremos que con esto las personas se den cuentan de sus errores, y las principales causas por
la que ocurre esta problemática, que no solo piensen en ellos, sino en la sociedad, en su entorno,
queremos personas con valores que respeten la vida animal, que los cuiden, protejan y
demuestren su cariño, como se dice ¨SOLO LES FALTA HABLAR Y RAZONAR PARA QUE
SEAN COMO EL SER HUMANO y nuestro objetivo es claro y preciso erradicar todo acto que
demuestre lo contrario.
Como lo expone Carrión, J (2018), ahora ya no solo se ve que las personas son violadas, sino
que también algunos animales indefensos son utilizados para satisfacer los bajos instintos de
estas personas zoofílicas. Están consideran que la zoofilia es algo natural ya que los animales
mostrarían su incomodidad de no estar de acuerdo con este acto, aducen que en ciertos casos el
animal puede disfrutar de esta práctica. La vida de un animal debe ser respetada en todos los
sentidos de la palabra, y no buscar satisfacerse con ellos en el tema que respecta a la
zoofilia.1
Nosotras consideramos que este acto es repugnante porque se está vulnerando los derechos de
este animal, ya que lo utilizan con un objeto sexual para satisfacerse estas personas. Al
investigar más sobre esa práctica nos dimos cuenta que en Colombia los hombres antes de
casarse tienen relaciones sexuales con burras ya que dicen que es una forma de practicar y de
que su matrimonio sea próspero. Algunos estudios confirman que realizar este acto puede tener
como consecuencia enfermedades de transmisión sexual e incluso cáncer.
En nuestro modo de pensar consideramos que estas prácticas son enfermedades mentales y
dejamos claro que no compartimos este acto que solo vulnera los derechos del animal. Al
parecer este acto también se practica en nuestro país y con más frecuencia en el norte y tienen
como objeto sexual a las burras. En Huancayo se dio el caso de que un hombre fue denunciado
por un grupo de animalistas que indicaron que aquel sujeto ejercía el maltrato animal y zoofilia,
pero a las pocas horas de ser detenido fue liberado ya que en nuestro país no existe el delito por
zoofilia.
Como lo señala Garmendia (2019), no tiene lógica actuar contra el maltrato de aquellos
animales que a mí me interesan (perros, gatos, caballos, toros…) y asesinar sin
contemplaciones a cerdos, gallinas, corderos y vacas porque su explotación me
beneficia. Los animales deben ser respetados ya que son capaces de sentir, no en
función del beneficio que nos aportan.2
Nosotras no compartimos la opinión del autor, porque sino se sacrifican a algunos
animales, ¿de qué nos alimentaríamos?, si bien es cierto existen los vegetales, pero no
todas las personas son vegetarianas, y no creemos que el maltrato se reduzca por
completo, sino que solamente se resolvería un mal menor.
Somos conscientes de que ellos (animales) también sienten, pero son una fuente de
alimento vital para la mayoría de la humanidad, y seria complicado que todas las
personas se vuelvan vegetarianas, porque ya es una “costumbre” en nosotros comer
algunos animales.
Pero esto no quiere decir que todos los animales sean maltratados, queremos que
sistema intereses básicos sean respetados, a que nos referimos con esto, a que vivan en
su hábitat de origen, a que no sean golpeados, utilizados por la industria de moda o
farmacéutica; solo así se evitaría que los animales vivan en un presente de tortura,
además se conseguiría que el problema sea más “llevadero”, que sea más soportable
coexistir en el, sin ver tantos abusos en los animales.
A pesar de la terrible brutalidad que encierran, los actos de crueldad contra los animales
ocasionados por los adolescentes no ocupan las primeras páginas de ningún periódico ni
parecen escandalizar demasiado a la población. Sin embargo, tienen un significado
último que debería interesarnos como sociedad. Aquellos niños que abusan de los
animales, según indican los expertos, son hasta cinco veces más propensos a cometer
crímenes violentos contra las personas al crecer. Martos, C (2018).
Muchos de los que encuentran placer en la violencia hacia las personas comienzan
ejerciendo esa violencia hacia los animales.3
Vemos a diario noticias donde se ve prolongado el maltrato animal como: “Un
adolescente británico mete el hámster de su hermano a un microondas”, “Un grupo de
amigos crucifican a un gato” o “Dos niños golpean hasta matar a un perro”, animales
desollados, quemados y hasta torturados.
Nosotras muchas veces oímos frases como “son cosas de niños”, cuando se trata de
algunos de estos sucesos. Puede pasar que dentro de un juego ocurra algún acto
lamentable, pero igual que los psicólogos nosotras pensamos que es una “señal de
alerta”, que muchas de las personas no escuchan y a la cual deben tomar medidas
estrictas para erradicar este acto de violencia en los adolescentes.
Nosotras creemos que el acto de maltratar a un animal es socialmente inaceptable,
intencionalmente causar dolor innecesario, sufrimiento, angustia y / o muerte de un
animal, es un acto cruel que ningún ser humano debería cometer.
De igual modo argumenta Gamio, N (2010), en Perú según la Ley de Protección
Animal N° 304074 quién cometa un acto de crueldad hacia los animales domésticos será
sancionado con pena privativa de la libertad no mayor de tres años, con 100 a 180 días
de multa, en caso de muerte la pena será de tres a cinco años de cárcel, con 150 a 360
días de multa e inhabilitación.

Además, quedará en su conciencia el daño que le hizo a un indefenso animal, y el

sufrimiento que causó a una familia, que de verdad quería a su mascota. Así mismo, el
18 de setiembre del 2018 se presentó una demanda de 5,286 ciudadanos contra la
Primera Disposición Complementaria Final de la Ley de protección y bienestar animal,
Ley Nº 30407. Dicha demanda tiene como finalidad que el Tribunal Constitucional
emita un pronunciamiento que prohíba las corridas de toros, así como las peleas de
gallos.
Nosotras creemos que la pena debe aumentar y ser más rigurosa a la hora de ser
ejecutada, los animales no me merecen sufrir ninguno tipo de maltrato ya que ellos lo
único que hacen es brindarnos cariño y amor; el pagar una reparación civil no quita el
daño echo al animal y mucho menos a la familia ya que muchas de esas personas ya los
consideran parte importante de ellos. No se debería lucrar con la vida de estos animales
porque ellos también sienten al igual que nosotros, por ello consideramos que deberían
ser cerrados todos los locales donde se ofrezcan espectáculos de peleas de gallos o de
perros.

Como sustenta Pereda (2014), una mascota es un ser vivo, no un juguete:

Como ser vivo, requiere unas atenciones y supone unas obligaciones. Antes de comprar o
adoptar un animal medite sobre las condiciones de atender adecuadamente y convivir con su
mascota.

Antes de regalar una mascota, asegúrese de que el futuro dueño la quiere y puede hacerse cargo
de ella de forma responsable. No imponga a alguien que no lo quiere ni lo regale para satisfacer
un capricho momentáneo.

El abuso hacia los animales puede indicar la existencia de un problema profundo: los niños que
abusan de los animales pueden vivir en situaciones de abuso y pueden estar graduándose en la
violencia hacia las personas.

La crueldad hacia los animales puede ser el único signo visible de una familia donde existe
abuso: mientras el abuso hacia los niños y las mujeres suele ocurrir en privado, el abuso hacia
los animales suele cometerse de forma abierta.
La violencia es violencia: una persona que abusa de los animales no tiene empatía hacia otros
seres vivos y tiene el riesgo de generar violencia hacia las personas.

BIBLIOGRAFÍA:
- Carrión, J. (2018).- Protegiendo indefensos. Colombia: Sandín y Ramos
- Gamio, N. (2010).-Protección Animal. Recuperado de
https://JusticiaAnimal.com
- Garmendia, A. (2019).-Infoanimal. España: Plaza y Valdés
- Martos, C. (2018).-Interés general en el caso de violencia animal. Bolivia:
Gonsa y Ferreira
- Pereda, M. (2014). Sociedad sin violencia. Recuperado de
https://sites.google.com/site/maltratoalosanimalescaseros/conclusiones

NOTAS:
1 Este acto lleva a vulnerar los derechos del animal ya que no tienen
consentimiento de este y solo se busca el beneficio propio. Ahora los casos de
zoofilias se están extendiéndose a varios países pero lo más lamentable es que en
muchos de estos no existe una ley que considera que este acto se merezca la
pena privativa de la libertad sino que solo se prohíbe pero no hay una condena.
2 Reducir el maltrato no nos conduce a solucionar la situación de explotación y
dominación a los que son sometidos los animales. Con frecuencia, los animales
son considerados como un simple medio de alimentación para nosotros los seres
 humanos. La justicia relacionada con los animales se mal interpreta y se
considera como una petición para que sean tratados como personas.
3 No hay política más eficaz contra todo tipo de abusos que legislar y trabajar
institucionalmente para erradicar también la normalización de la crueldad hacia
los animales. Al mismo tiempo, educar a la sociedad, empezando desde los
colegios, para que no tolere ningún tipo de violencia.
4 Ley N° 30407, de 16 de noviembre de Protección Animal.