AGRICULTURA

de las tierras no parcelables debe considerar tam-

ULTIMAS MODIFICACIONES
bién la situación de los asentados que trabajan en
los referidos predios, para que puedan tener ac-
ceso a la propiedad cuando hayan adquirido la
capacidad económica y empresarial suficiente pa-

A LA 1EY DE ra explotarlos en condiciones normales de eficien-

cia y sin dependencia del Estado, o en caso con
trario, atender a sus necesidades de trabajo, sub-

REFORMA AGRARIA
sistencia y capacitación.
De acuerdo a este DL 2247, las tierras en poder
de la CORA que su Consejo resuelva no asignar en
unidades agrícolas familiares, por ser tierras de
secano, con serias limitaciones, o que revistan ca-
LUCIANO PILOT racterísticas análogas a unos u otros, serán ofreci-
das en venta directa a quienes tengan la calidad
de asentados en esos predios. Con tal, eso sí, que o
ellos personalmente o la sociedad agrícola de re-
forma agraria de que forman parte no tengan deu-
das vencidas a la fecha en que entre en vigen
cia el presente DL, por créditos otorgados por la
CORA o avalados por este organismo. La venta
se hará en favor del o de los asentados del pre-
dio que se enajena y que consientan en ello. Si
los interesados fueran dos o más asentados, la ven-
El autor nos présenla algunas consideraciones sobre los problemas ta se hará a la sociedad integrada exclusivamente
que plantea el traspaso de la tierra expropiada por la CORA al por éstos. El precio será fijado por la CORA, nc
sector privado y no a los propios campesinos, y sobre la deroga-
ción de las disposiciones que hacían expropiadles a los predios
pudiendo ser inferior al avalúo fiscal vigente más
de más de 80 hectáreas, a propósito de la dictación del Decreta
el valor de las mejoras, el que se pagará con un
Ley que acaba de modificar la Ley de Reforma Agraria. mínimo de un 10% al contado y el saldo a 15 años,
con dos años de gracia, en cuotas anuales e iguales,
expresadas en unidades de fomento, con un inte-
El reciente Decreto Ley 2247, que modifica la rés del 6% anual y 9% en caso de mora. En caso
Lev N" 16.640 de Reforma Agraria, de julio de 1967, que los asentados no se interesen o no cumplan
contiene dos objetivos principales: 1) Modificar la con los requisitos exigidos, la CORA venderá esos
forma de asignación o traspaso al sector privado predios en remate o licitación pública.
de las tierras expropiadas que aún se encuentran
en poder de la CORA, o de las ya asignadas que En general, y de acuerdo con la información
eventualmente podrían retornar a su dominio, y 2) disponible, las tierras en poder de la CORA, con-
derogar las disposiciones de la ley relativas a las sideradas imparcelables alcanzarían a unos dos
causales de expropiación para fines de la Reforma. millones de hectáreas distribuidas en unos 400
predios esparcidos en todo el país y en los cuales
viven unas cinco mil familias campesinas. De es
Traspaso al sector privado de las tas tierras, tal vez las más conocidas por la opi-
nión pública son las llamadas de secano-costero de
tierras expropiadas la Sexta región (antiguas provincias de O'Hiegins
Respecto al primer punto, este Decreto establece, yhectáreas, Colchagua), que cubren alrededor de unas 200.000
en sus considerandos, que en la etapa actual de la do insistentemente, cuyos asentados han venido reclaman-
Reforma Agraria han sido ya asignadas en con- te el anuncio de CORA y desde hace varios meses, an-
formidad a las normas de la Ley 16.640 las tierras rían transferidas a la Corporación de que estas tierras se-
susceptibles de constituir unidades agrícolas fa- tal, CONAF, o al sector privado. Nacional Fores-
miliares en poder de la CORA, quedando sólo un
escaso remanente en proceso de asignación y que, Un primer comentario al DL 2247 refiere a la
no obstante lo anterior, la Corporación de Refor- magnanimidad del Gobierno militar al "permitir a
ma Agraria mantiene aún en su dominio tierras los asentados el acceso a la propiedad de los pre-
expropiadas, las que por sus características y con- dios cuando hayan adquirido la capacidad econó-
diciones especiales no pueden ser asignadas en mica y empresarial suficiente para explotarlos en
unidades agrícolas familiares. Estas tierras, por condiciones normales de eficiencia y sin dependen-
tanto, requieren de la dictación de normas lega- cia del Estado". Hay que recordar que la ley 16.640
les que permitan su transferencia a quienes pue- de Reforma Agraria fue aprobada por el Congre
dan obtener su mejor aprovechamiento como fuen- so por una amplísima mayoría y que de acuerdo
te de producción y trabajo, en beneficio general con sus disposiciones los únicos que tienen dere-
del país. Para este efecto, un adecuado destino cho al acceso a la propiedad de las tierras expro-

MENSAJE N? 273 OCTUBRE 1978

640

piadas —y nu por un permiso gracioso de un go-
bierno militar— son los campesinos. El hecho de
que las tierras fueran imparcelables no ameritaba
dictar nuevas disposiciones legales para entregarlas
a los campesinos en predios indivisos. Todo esto es-
taba previsto en la ley 16.640, en su Art. 67: las
tierras adquiridas por la Corporación de la Re-
forma Agraria se constituirán en unidades agríco-
las familiares y serán asignadas a campesinos en
dominio individual. Sin embargo, cuando a juicio
del Consejo de la CORA no fuera posible este tipo
de asignación por razones de orden técnico debido
a- la naturaleza de la explotación, como puede su-
ceder con los terrenos de aptitud exclusivamente
forestal, con los terrenos de pastoreo, las planta-
ciones frutales, los viñedos u otros terrenos que
.. ."quienes gobiernan el país están
dando una prueba más de su decisión
—nunca confesada abiertamente— de
impedir a los campesinos el acceso a
la propiedad de las tierras que fueron
legítimamente expropiadas para su
beneficio"...
por sus condiciones naturales no sean susceptibles
de dividirse sin deterioro del suelo o de sus po-
sibilidades de manejo económico, las tierras po-
drán asignarse en dominio exclusivo a cooperati-
vas campesinas o de reforma agraria o en copro-
piedad a campesinos o a cooperativas campesinas
o de reforma agraria. También el Consejo de la
CORA podrá asignar las tierras, en cualquiera
de las formas señaladas, cuando los campesinos
seleccionados para ser asignatarios así lo soliciten
de común acuerdo. Las condiciones de pago en la
Jey 16.640, cualquiera que sea el tipo de asig-
nación, son a 30 años plazo, con dos o tres
años de gracia, 3% de interés y 6% en caso
de mora; el reajuste por inflación sólo afecta
al 70% de cada cuota anual. El pago del pre-
cio de las asignaciones de terreno de aptitud
exclusivamente forestal que se haga en favor de
las cooperativas dt reforma agraria, con el fin de
que realicen actividades industriales o artesanales
de la madera y en el caso de los desarbolados con
el fin de que los foresten, se efectuará a partir
del momento en que la cooperativa obtenga in-
gresos provenientes de su explotación. Para la fi-
jación del monto de las correspondientes cuotas,
la CORA deberá atender, preferentemente, a la ca-
pacidad de pago de la cooperativa estimada en
función de sus ingresos globales.
Discriminación contra los campesinos
El contraste entre las disposiciones de la ley
16.640 y las del reciente DL 2247 son evidentes, y
la conclusión que cae por su propio peso es que.
MENSAJE N? 273 OCTUBRE 1978
AGRICULTURA
aparte del sarcasmo que implican las exigencias
impuestas a los campesinos interesados en com-
prar los terrenos imparcelables, quienes gobiernan
el país están dando una prueba más de su deci-
sión —nunca confesada abiertamente de impedir
a los campesinos el acceso a la propiedad de las
tierras que fueron legítimamente expropiadas para
su beneficio, y cuando éstos la han logrado, ha-
cen todo lo posible para impedirles que perma-
nezcan en ella, la trabajen y disfruten en procu-
ra del bienestar suyo, de sus familias y de la co-
munidad nacional. Si no existiese realmente el áni-
mo de discriminar contra los campesinos, como se
desprende de los términos del DL 2247, lo natu-
ral y justo sería aplicar la ley 16.640 de Reforma
Agraria y entregar esas tierras a quienes las es-
tán trabajando, haciéndolos sus propietarios me-
diante las cooperativas constituidas o por consti-
tuirse o a través de la comunidad formada por
ellos. Resulta, asimismo, incomprensible que no se
haya orientado hacia los asentamientos con tierras
que requieren urgentemente la reforestación, par-
te de los cientos de millones de pesos que en ca-
lidad de subsidios —75% del costo de la reforesta-
ción— se repartió graciosamente entre las grandes
compañías que concentran hoy enormes áreas de
tierras en el país. Lo mismo puede decirse de la¿
tierras ganaderas donde ha habido crédito para los
poderosos, mientras le ha estado vedado su acceso
a los campesinos del área reformada. Resulta tam-
bién incomprensible que se desconozca, se niegue
y se ponga todas las dificultades imaginables al
ejercicio de la capacidad de los campesinos para
trabajar asociados en las tierras buenas, como son
la mayoría de las que se han parcelado, y en cam
bio se les reconoce esta capacidad cuando el DL
2247 les dé opción a comprar solos o asociados
las tierras que se consideran imparcelables. Por
otra parte, en el área del secano costero funciona
una estación experimental del Instituto de Inves-
tigaciones Agropecuarias establecida ahí por el
Gobierno de Frei para investigar y buscar los me-
jores sistemas de trabajo de estas tierras. Hay
evidencias, y cualquier persona puede comprobar-
lo visitando la Estación Experimental de Idango,
que la tecnología encontrada y comprobada, den-
tro y fuera de la Estación, no es complicada ni
exige grandes inversiones para restaurar el suelo
esquilmado o degradado y al mismo tiempo mejo-
rar substancialmente su capacidad productiva, ase-
gurando altos rendimientos en una explotación
combinada de cultivos y ganadería.
Causales de expropiación para la
reforma agraria
Mucho se ha argumentado de que las caúsale*
de expropiación de la ley 16.640, recientemente de-
rogada, se habían constituido en una de las prin-
cipales causas de restricción a la inversión agrico-
641
 AGRICULTURA
la y por consiguiente a la modernización de la
agricultura en Chile. Entre las causales derogadas
están las que hacían expropiablcs los predios eje
más de 80 hectáreas de riego básico o su equi-
valente y los predios pertenecientes a sociedades
anónimas. Se ha dicho que la derogación de esas
disposiciones atraerá capitales a la agricultura y
permitirá aprovechar economías de escala al uii-
lizar tecnologías que de otra manera quedarían o
están al margen de las explotaciones inferiores
a 80 há. de riego básico o su equivalente. Frente
a estos argumentos conviene puntualizar que el
uso de las tecnologías que permiten modernizar
una empresa agrícola no están condicionadas por
el tamaño del predio, puesto que la selección de
semillas, fertilizantes y plaguicidas, por ejemplo,
en nada depende de los diferentes tamaños de pre-
dios. Asimismo, en el rubro de la maquinaria y
equipo se puede encontrar para cada predio lo que
se estime más adecuado desde el punió de vista
técnico y económico. En el campo de la ganade-
ría será la pradera artificial y la mejorada, ma-
nejada racionalmente y en pequeños potreros, el
pastoreo rotativo y la conservación de los exce-
dentes de forrajes de las épocas de abundancia
642
para pasar sin aflicción los períodos críticos de!
invierno, la "tecnología" que, junto a otras que
tampoco exigen grandes áreas, hará posible el pro
greso de esa actividad. Poco es lo que se pued.-
esperar del latifundio extensivo, dividido en tres
o cuatro encierras, con ganadería en soltura, bue-
no tal vez para épocas pretéritas cuando el país
no pasaba del millón de habitantes.
Tamaño de la tierra, modernización
y rendimiento
Quien quiera verdaderamente modernizar su
explotación agrícola no puede aducir, para no ha-
cerlo, el umbral de las 80 há. de riego básico o
su equivalente. Debajo de ese umbral hay posibi-
lidades de inversión prácticamente ilimitadas y
rentables si están bien estudiadas, y en el marco
de una política nacional y sectorial aerícola .•
tono con los recursos y las necesidades del país,
coherente y estable y que dé la más absoluta ga-
rantía de permanencia, estabilidad y seguridad a
quienes respeten y actúen en conformidad a las
reglas establecidas. Ahí están para probarlo las
MENSAJE N° 273 OCTUBRE 1978

modernas agriculturas del Japón, Corea del Sur y
Formosa en el Extremo Oriente y las de Suiza, Ho-
landa, Dinamarca, Francia, Irlanda, Reino Unido,
Alemania, para citar sólo algunos países de Eu-
ropa Occidental, donde la característica dominan-
te es el tamaño más bien pequeño o muy pequeño
de las explotaciones. Así, por ejemplo, Francia tie-
ne una estructura agraria donde el 90% de la
tierra está en explotaciones de menos de 100 há.,
entre las cuales las explotaciones de 50 a 100 has.
disponen del 15,5% de la tierra, en lanío que las
explotaciones de menos de 50 há. tienen el 74,5%
de la tierra y las de menos de 20 há. el 39,8%.
Las explotaciones de más de 100 há. cubren c!
1096 de la superficie agrícola. Además hay que
agregar que la tierra cultivable, que abarca unos
35 millones de há., está distribuida en unos 2,2 mi-
llones de explotaciones, las que a su vez están in-
tegradas por unos 60 millones de parcelas catas-
trales, (76 millones de parcelas catastrales habín
en 1961). Esta fragmentación se agrava por el he-
cho de que las parcelas están a veces distantes
unas de otras, lo que acarrea pérdidas de tiem-
po y restringe el uso de la maquinaria agrícola.
Aun cuando no es fácil establecer comparaciones
de plena validez, los entendidos estiman que una
hectárea de riego básico de Chile, es decir tierra
regada de buena clase del valle del Maipo, equi-
vale, en el promedio de las tierras agrícolas de
Francia a una hectárea y media, o sea que una
hectárea agrícola —promedio de toda Francia--
sería equivalente a 0,67 há. de riego básico de Cli!
le, lo que lleva a la conclusión de que en Francia
más del 95% de la tierra está en explotaciones de
menos de 80 há. de riego básico o su equivalente.
Con todas estas "restricciones", la agriculluia
francesa produce anualmente entre 16 y 19 millo-
nes de toneladas de trigo con rendimientos en per-
manente aumento, que últimamente han fluctua-
do entre 40 y 46 quintales métrico por hectái.
que se compara con el rendimiento en Chile de
12 - 19 quintales. Es decir que ese país produce
normalmente más trigo que toda la América latina
junta cuya producción fluctúa entre 13 y 15 millo-
nes de toneladas. Todos los cultivos tienen en
Francia altos rendimienlos unitarios y sin excep-
ción acusan tendencia al incremento. Para citar
sólo algunos se menciona el maíz con más de 45
quintales métrico por há.; Chile 32 - 34 quintales;
la papa, con 230 • 240 quintales; Chile 90 a 100 quin-
tales; la remolacha, con más de 400 quintales;
Chile 330 - 370.
Nadie puede desconocer el avanzado progre
so agrícola de países como Suiza donde el 99,4%
de la tierra agrícola está en explotaciones de me-
nos de 50 há.; Dinamarca en que el 89,8% de la
tierra está en fincas de menos de 100 há. y el 74,3%
en fincas de menos de 50 há.; y Holanda donde el
90,8% de la tierra agrícola está en explotaciones
de menos de 50 há. En este último país los ren-
dimientos unitarios, también en permanente in-
MENSAJE N° 273 OCTUBRE 1978
AGRICULTURA
cremento, fluctúan, según los años, entre 50 y 57
quintales métricos por há. de trigo; 50 y 70 quin-
tales por há. de maíz; 330 a 360 quintales métri-
cos de papa; y 450 a 470 quintales de remolacha.
Los rendimientos ganaderos son altos, como, por
ejemplo, la producción de leche por vaca que se
acerca a los 3.000 litros en Francia y fluctúa alre-
dedor de los 4.400 litros en Holanda y Dinamarca,
que se compara con 1.300 a 1.400 litros en Chile.
En casi todos estos países las explotaciones le
cheras manejan, en promedio, entre 10 y 20 vacas,
lo que no es ningún obstáculo para utilizar las
tecnologías más adecuadas, obtener altos rendí'
mientos y en definitiva hacer un buen negocio.
Lo mismo sucede en esos países con la fruticultura
y el viñedo.
Las economías de escala
De los ejemplos mencionados, que se repiten
en varias decenas de países y comarcas, se com
prueba que el tamaño físico de las explotaciones
agrícolas no es obstáculo a su modernización y
operación eficiente. Por otro lado las economías
de escala en la explotación agrícola no están di-
rectamente vinculadas y en relación dilecta al ta-
maño de las fincas. Estas economías en la explo-
tación intrapredial o trabajo de la tierra son po-
sibles pero sólo hasta determinado límite de su-
perficie en que el umbral está dado por una o más
de las siguientes variables o factores: clase de
cultivo, pericia y competencia de quienes lo rea-
lizan, tipo de suelo, condiciones climáticas y del
medio ambiente, forma de tenencia de la tierra,
relaciones laborales, densidad de la inversión, cos-
to de los insumos, precio de los productos y de-
más condiciones del mercado.
Conocido en Chile es el caso del ajo y del ta-
baco, cuyo cultivo y beneficio se da en medicria,
en superficies cuyo límite suele estar dado por la
capacidad de trabajo del medicro y su familia. So-
brepasado el umbral, comienzan las deseconomias
que pronto se convierten en la causa del fracasu
del negocio agrícola. Está claro entonces que el ta-
maño físico de las fincas tiene sólo importancia re-
lativa y únicamente hasta determinado límite pa
ra lograr economías de escala en el proceso de pro-
ducción agrícola.
Las más importantes economías de escala en
relación con la agricultura se logran al margen
de la explotación predial, en actividades o funcio-
nes extraprediales pero directamente vinculadas
al proceso productivo o a la circulación de la pro-
ducción una vez lograda. Como ejemplo de tales ac-
tividades se pueden citar los servicios de investi-
gación agrícola técnica, económica, financiera y
de mercados, con sus correspondientes mecanis-
mos de información y divulgación, los servicios de
capacitación y aprendizaje; la producción local, la
643
CIENCIA Y CULTURA

importación y la correspondiente distribución dij

insumos, como ser semillas selectas, fertilizantes,
pesticidas, maquinaria y aperos, envases, repues-
tos, combustibles y lubricantes, vacunas y medi-
camentos para el ganado, piensos concentrados,
etc.; servicios de equipos mecanizados, médico-ve-
terinario, organización empresarial, crédito, etc. En
relación con la producción misma habrá econo-
mías de escala en las etapas del acopio, transpor-
te, almacenaje, beneficio primario, elaboración in-
dustrial, fraccionamiento, envasado, y en general
en todas las fases o etapas desde que el producto
está en sazón para salir de la finca al mercado, in-
terno o externo, hasta que llega a la mesa del con-
sumidor. Ahora bien, depende de los propios agri
cultores aprovechar o no las economías de esca-
la que se pueden lograr en tales funciones y acti-
vidades extraprediales. Si se organizan para tales
efectos tendrán los beneficios correspondientes; en
caso contrario serán otros, generalmente ajenos al
proceso productivo primario, quienes asumirán
esas funciones imponiendo sus propias reglas que
no siempre serán favorables a los agricultores. En
procura de la solución de este problema, se pro-
cedió simultáneamente hace una década a ampliar
de manera muy significativa la infraestructura de
comercialización agrícola en todo el país y a pro-
mover y estimular la organización de los produc-
tores agrícolas y a capacitar a sus miembros para
asumir las funciones extraprediales relacionadas
con la producción y la comercialización agrícola
La mayor parte de esas organizaciones de produc-
tores han sido disueltas o combatidas y debilitadas
a extremos que se ha hecho difícil o imposible que
puedan hacerse cargo de las infraestructuras de
comercialización, las que por otra parte han sido
licitadas públicamente para su traspaso al sector
privado.
Revivir y reforzar las organizaciones de los pro-
ductores para cumplir las funciones extrapredia-
les de producción y comercialización, permitirá
también su participación en la planificación regio-
nal del desarrollo rural, en la definición de las
políticas, programas y proyectos para su realiza-
ción y de manera muy importante su presencia
como agentes y ejecutores del plan que contribu-
yen a formular. Los productores agrícolas no tie-
nen participación alguna cuando las decisiones las
toma el gerente de la sociedad anónima que im-
pone las condiciones sin otra mira que el lucro y
dejando de lado toda consideración a la dignidad
de las personas.
Antes que derogar parte de la ley de reforma
agraria y enmendar otras para facilitar la concen-
tración de la tierra, el gobierno debería definir y
poner en ejecución una política que haga viable
la economía de las 35.000 familias asignatarias de
las tierras reformadas y también la de los demáí-
agricultores del país. Con ello daría bienestar al
campesinado y mejor alimentación a lodo el pue-
blo chileno.

MENSAJE N« 273 OCTUBRE 1978

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