Memoria de trabajo UD-6

Realiza una memoria de trabajo donde se describa el proceso de reparación de una

aleta delantera mediante tas y martillo. Busca información en el libro de texto y en
internet. La memoria debe contener los siguientes apartados:

Introducción: 1
Precauciones: 1
Medidas de seguridad y salud: 2
Herramientas y equipos utilizados: 2
Desarrollo de la reparación: 3
Conclusión: 4

Introducción:
En esta práctica veremos cómo se realizaría la reparación de una aleta delantera
mediante martillo y tas, explicando cuales son las precauciones que debemos de
tomar a la hora de realizar el proceso, las medidas de seguridad, las herramientas y
equipos que utilizaremos en la reparación, el desarrollo de dicha reparación y la
conclusión que sacamos de todo este proceso.
Una vez que se han producido una serie de deformaciones en la aleta, para
proceder a la reparación de la mismas hay que conocer una serie de técnicas a
emplear, así como las herramientas necesarias para realizar ese tipo de trabajos.

Precauciones:
A la hora de reparar cualquier componente de un coche, es necesario tomar una
serie de precauciones con el fin de mejorar la productividad, eliminar
improvisaciones, seguir un proceso ordenado y evitar contratiempos.
Para ello, durante la reparación se deben limpiar y delimitar los desperfectos, y, a
continuación, elegir las herramientas adecuadas. También es conveniente observar
si hay daños indirectos (costillas) que provoquen fuerzas contrarias a las del
desabollado. Cuando estas sean leves, se deben eliminar con un mazo de goma o
madera, pero sí presentan mayor resistencia, habrá que golpearlas directamente
con el martillo de carrocero.

Medidas de seguridad y salud:

Guantes Gafas Buzo

Botas Cascos para los oídos

Mascarilla

Herramientas y equipos utilizados:

Una reparación de calidad depende, además del proceso de trabajo seguido, de las
herramientas y de los equipos utilizados. La práctica y el conocimiento de todas las
herramientas, equipos y accesorios por parte del chapista son de máxima
importancia ya que gracias a ellos se podrán realizar las reparaciones de un modo
eficiente. Dentro de las herramientas del taller, se puede diferenciar principalmente
en tres grandes grupos, como son: las herramientas manuales, las de
accionamiento motriz, y los equipos auxiliares.
Martillo: El martillo es una herramienta de percusión que se utiliza para conformar la
chapa utilizándose directamente sobre la misma con un golpeo continuado y
controlado.

Limas de repasar: Son herramientas de repaso que tienen un ligero peso y una gran
superficie de apoyo con lo que son idóneas para el proceso de acabado de la
conformación ya que por una parte se controla mejor la intensidad del golpe, con lo
que se evita el estiramiento, y por otra parte al tener una mayor superficie de
contacto con la chapa las marcas que deja son menores y por lo tanto el aspecto del
acabado final mejora.

Tas o sufridera: Los tases son herramientas manuales indicadas para soportar los
golpes efectuados por el martillo, son piezas de diferentes formas y pesos que se
adaptan a una necesidad concreta de trabajo.
Desarrollo de la reparación:
Ahora que ya está todo listo nos ponemos a sacar el golpe. Como la zona donde el golpe es
más fuerte se encuentra en la parte de arriba de la aleta y es bastante difícil sacarle con un
tas, vamos a sacar lo más profundo. A continuación colocamos el tas por dentro de la aleta
y golpeamos con el martillo de carrocero para meter las deformaciones que se han
producido hacia el exterior.

Y para las deformaciones que se producen para dentro las sacamos golpeando con el tas.
Hay que dar pequeños golpes consecutivos y alternativos con el martillo y evitando estirar el
material cuando golpeamos la chapa con el martillo y contra el tas, cuando se produce
estiramiento el sonido del golpe es más metálico de lo normal. Para resaltar las
deformaciones utilizamos la lima de carrocero.
Limamos sobre la superficie de la aleta y la zona donde lima es donde se encuentra la
chapa más levantada y donde no lima se encuentra hundida. Para arreglar esto hay que
fortalecer el material donde se ha producido esa tensión. Primero marcamos la zona con un
rotulador y a continuación iremos dando golpes con el martillo de estirar material. Ahora
seguimos quitando los pequeños bollos que puedan quedar y retornando la forma de la
aleta. Para comprobar la silueta, la podemos comprobar con una regla de perfiles que sirve
para compararla con la aleta del otro lado. Esto solo nos sirve si la contraria está bien.
Luego hay que lijar la chapa para quitar la pintura. Para ello utilizaremos el rotalín. Se
desconecta la batería para evitar cortocircuitos.
Ahora preparamos la máquina: la conectamos a la corriente trifásica, la regulamos y
colocamos un electrodo de carbono ya que transmite calor a la chapa pero no llega a
soldarse, cosa que no ocurre con el cobre.
La técnica de recogida de material consiste en aplicar calor con la pistola porta electrodo
sobre la chapa haciendo masa con la chapa y una vez que coja temperatura la chapa enfriar
bruscamente con agua, para que se contraiga el material..
Donde notemos ciertos bultos en la chapa hacemos el tratamiento térmico hasta conseguir
la forma deseada de la chapa.
Para terminar la aleta hay que eliminar los residuos y marcas que dejan el tratamiento
térmico y el óxido que se ha formado en la zona en la que no hay pintura. También le
aplicaremos una protección de galvanizado anticorrosiva.
Para quitar el óxido, utilizaremos la radial, una vez limpia la zona de óxido, vamos a aplicar
un esmalte galvanizado, para evitar la corrosión del material.
Para aplicar el producto debemos tener la precaución de no pintar los alrededores de la
zona deseada. Para ello colocaremos un mantel o papel para no manchar la zona del motor.
Conclusión:
En esta práctica he aprendido cómo desarrollar correctamente la tarea de reparar un golpe
en una aleta delantera de un coche, así como las herramientas y el proceso que hay que
seguir y sobre todo a solucionar correctamente los problemas que nos podemos encontrar.