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“La manera de actuar de Esdras puso en alto el nombre de Jehová” (10 mins.

Para una gran mayoría de personas mantener su nombre o el de la familia en un lugar prominente
es muy importante. Tanto así que muchos jóvenes hoy en día dependen bastante del apellido de
sus padres, utilizan esto para obtener algunas ventajas personales, pero también a la larga se exige
que ellos mantengan en alto dicho apellido. Eso es ganarse una buena reputación, o un buen
nombre.

Todos nosotros como siervos de Jehová tenemos esta misma oportunidad. Tenemos a nuestro
padre celestial, somos testigos de Jehová, por lo tanto se espera que nosotros también hagamos el
esfuerzo por mantener una conducta excelente entre las personas. Y es que la manera como
actuamos pondrá en el lugar que corresponde a Jehová.

Si nosotros actuamos correctamente, si hacemos su voluntad, esa reputación que tenemos


ensalzará el nombre de nuestro Dios. Alguien que lo hizo muy bien fue Esdras.

¿Qué se sabe de Esdras? Sabemos que fue un sacerdote descendiente de Eleazar y Finehás. Fue un
hábil copista de gran erudición, además de maestro de la ley y experto tanto en hebreo como
arameo. Tal parece que la familia de Esdras se interesó que él tuviera una buena preparación en la
ley de Dios, un interés que sería compartido por el mismo.

Es decir, no hacía esta labor por obligación, sino porque sentía un profundo amor y respeto a la ley
de Jehová. Fue un investigador sobresaliente, no solo escribió el libro de Esdras, se piensa que
también los dos libros de crónicas, Es más hasta fue tanta la investigación, que posiblemente citó
de unas 20 fuentes de información.

¿Cuál era la clave para que Esdras dejará en tan alto puesto el nombre de Jehová? No tenía que ver
solamente de la familia de la que él provenía, ni ciertas habilidades naturales. Si nos fijamos aquí
en el libro de Esdras 7:10, notaremos como consiguió amar profundamente a Jehová y su ley, el
texto bíblico dice:

Esdras había preparado su corazón para consultar la ley de Jehová, ponerla en práctica y enseñar
sus normas y sus decisiones judiciales en Israel.
Con esta expresión que encontramos en este versículo, Esdras nos enseña con su excelente
ejemplo que fue un estudiante diligente y un buen maestro de la palabra de Dios. Siguiendo el
modelo que le habían enseñado, cuando iba a consultar la ley de Jehová, primero oraba para
preparar su corazón para ponerlo en el estado correcto, para asimilar lo que iba a leer y por
supuesto entender, para transmitir esta información a otros y aplicarlo por supuesto en su vida.

Esto de preparar el corazón, se lo podría comparar como un agricultor que antes de poner la
semilla, tiene que preparar el terreno, ponerlo en las condiciones apropiadas para que la semilla
con facilidad germine y llegue a ser lo que quiere, una planta o un árbol.

Esdras preparaba así su corazón mediante la oración, pues él trataba de tener una inclinación a la
enseñanza de Jehová. Así que si queremos dejar muy alto la reputación de un siervo de Dios como
un Testigo de Jehová, necesitamos tener la costumbre de leer la palabra de Dios, pero antes de
hacerlo preparar nuestro corazón.

Es decir, orar a Jehová para que de manera humilde nosotros podamos entender y aceptar su
voluntad, y por supuesto estar dispuestos a ponerlo en práctica. ¿Por qué es importante esto de
aplicar lo que leímos de la Biblia? Volvamos por favor a Esdras el capítulo 7 el versículo 25 dice:

Y tú, Esdras, usando la sabiduría que tu Dios te ha dado, nombra magistrados y jueces para juzgar
a todos los habitantes de la región que está al oeste del Río Eufrates, todos los que conocen las
leyes de tu Dios. Además, Ustedes deben enseñarle estas leyes a cualquiera que no la conozca.

Examinemos con cuidado algunos detalles que indica aquí el texto bíblico que acabamos de leer.
Dice aquí: «Y tú estás usando la sabiduría que tu Dios te ha dado». ¿Quién está dirigiendo estas
palabras a Esdras? Es el rey Artajerjes. El envío directamente una carta a Esdras resaltando sus
habilidades obtenidas por servir a Dios.

Este Rey al haberse dado cuenta personalmente Cómo actuaba gracias al espíritu de Jehová,
estaba dando autoridad para nombrar jueces, para juzgar a todos los habitantes que estaban bajo
la jurisdicción de Artajerjes, Y por supuesto que les enseñe a esas personas la ley de Dios porque
veía los buenos resultados en la propia vida de Esdras.

Por sólo este versículo Bíblico, nos damos cuenta que la manera de actuar de Esdras estaba
poniendo en alto el nombre de Jehová. Imitando este ejemplo, podemos darnos cuenta como en
nuestro poder tenemos el nombre de Jehová ante otros.
Si vemos en nuestra guía de actividades podemos observar a un hermano que trabaja en un taller
mecánico y Aparentemente Un superior a él está posiblemente felicitándolo o encomiándolo por
ser un buen trabajador dirigente respetuoso del tiempo del trabajo de hacer una buena labor de
ser honrado Y cuántas cosas más eso sin duda le va a abrir oportunidades al hermano en su lugar
de trabajo para engrandecer el nombre de Dios para enseñar a otros Cómo es la manera correcta
de comportarse no sólo por palabra sino también por su conducta.

Esa es la razón por la que tenemos la pregunta aquí en la guía de actividades: ¿Me gano el respeto
de las personas que no son testigos viviendo de acuerdo con las normas de Dios? Y es que como
cualquier familiar su nombre su apellido puede ser puesto en alto o reconocido de gran valor,
como también puede ser pisoteado por las acciones de esa persona.

Esdras ayudó a otros a darse cuenta de la sabiduría de Dios en sí mismo. Nosotros también
podemos hacer exactamente, copiar ese mismo ejemplo. Sin embargo, a pesar de que se había
reconocido la sabiduría de Dios en Esdras y él siendo de la familia de sacerdotes, él podía haber
tomado el orgullo por delante para demostrar que era mejor que otros.

Sin embargo, él mantenía el lugar que le correspondía. Como en una familia, el hijo tiene un
apellido, pero no le pertenece, lo obtuvo de sus padres o de otros familiares. Nosotros también,
como siervos de Jehová, no nos hemos ganado esa reputación porque así somos, sino porque
nuestro padre Jehová nos ha enseñado.

Por esa razón aquí en Esdras 8:21-23, Observemos la conducta que Esdras mantenía a pesar de
todos los reconocimientos que había obtenido, dice el texto Bíblico:

Entonces mandé que allí, junto al río Ahavá, se hiciera un ayuno a fin de humillarnos delante de
nuestro Dios y pedirle su guía para el viaje que haríamos con nuestros hijos y todos nuestros
bienes. Me dio vergüenza pedirle al rey soldados y jinetes para que nos protegieran de los
enemigos durante el camino, porque le habíamos dicho: “La bondadosa mano de nuestro Dios está
con todos los que lo buscan,a pero su fuerza y su furia están contra todos los que lo abandonan”.
Por eso ayunamos y le pedimos ayuda a nuestro Dios sobre este asunto, y él escuchó nuestros
ruegos.

Palabras que indican humildad y confianza absoluta en Jehová. Queremos imitar este ejemplo de
Esdras. Lo que somos no lo hemos conseguido por habilidades innatas, es porque Jehová nos ha
enseñado con su palabra de manera correcta de comportarnos y por eso queremos seguir
dejándonos guiar por él.
Que Jehová nos proteja y que nos ayude a tomar buenas decisiones, y que eso motive a otros a
seguir engrandeciendo el nombre de Jehová. En nuestras manos está poner el nombre de Dios en
un lugar tan alto que le corresponde. Hagamos todo el esfuerzo porque eso siempre sea así, en
todos los aspectos de nuestra vida.

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