Marlyn Mora 2023318

Karem Martinez 2022420

Andres Felipe Peña 2028452

David Andres Daza 2022383

Análisis Tutela T406 de 1992

Referencia: Expediente T-778

Acción de tutela instaurada por José Manuel Rodríguez Rangel contra el señor
Enrique Chartuny González, gerente de las Empresas Públicas de Cartagena

Procedencia: Tribunal Administrativo de Bolívar

Temas: Sistema de alcantarillado sin terminar

violacion al derecho a la salubridad pública y derecho al medio ambiente sano

Magistrado ponente: Ciro Angarita Baron

Solicita el accionante que se tutele el derecho a la salubridad pública que está

consagrado en el artículo 88 de la Constitución Nacional. A pesar de no ser un
derecho fundamental que son los señalados en la Constitución Título II Capítulo I,
pero justifica que puede ser protegido por la tutela cuando se instaura como
mecanismo transitorio para evitar un perjuicio irremediable. Así lo establece el
artículo 6 del decreto 2591 de 1991

El peticionario solicita la tutela y no una acción popular como lo establece el articulo

88, debido a que la violación del derecho colectivo señalado por el demandante
requería una protección inmediata, para lo cual la tutela constituye el mecanismo de
protección más idóneo.

Las Empresas Públicas de Cartagena iniciaron en 1991 la construcción del servicio

de alcantarillado para el barrio Vista Hermosa. Después de un año y a pesar de no
haber terminado la construcción lo ponen en funcionamiento, lo cual ha producido el
desbordamiento de aguas residuales, ocasionando olores nauseabundos y
contaminantes de la atmósfera de los residentes del barrio Vista Hermosa y del
barrio Campestre, que está ubicado a pocos metros de aquel.

El peticionario, residente del barrio Campestre se ha visto afectado debido a que su

manzana está ubicada en frente a las obras inconclusas. A pesar de varios
requerimientos para que la empresa termine la obra, esta no se ha concluido.

La petición se encamina en que el tribunal ordene a la empresa a continuar con la

obra hasta su terminación.
El problema observado básicamente en todo el proceso es si la acción de tutela
puede suplir o funcionar como mecanismo para la protección de los derechos
colectivos

Para analizar la protección de derechos fundamentales vulnerados según la

sentencia T406 de 1992 debemos contemplar primordialmente el concepto de
derecho fundamental, teniendo en cuenta los diversos debates planteados en la
asamblea nacional constituyente un derecho fundamental debe ser una emanación
directa de un principio constitucional, debe tener eficacia directa, es decir, debe ser
el resultado directo del texto constitucional y por último debe tener un contenido
esencial y que de manera clara se demuestre su delimitación conceptual, su
titularidad y el tipo de deberes y obligaciones que de él se derivan.

Ya teniendo en cuenta lo anterior la protección de los derechos vulnerados son el

derecho a la salubridad pública, el derecho al servicio del alcantarillado, en aquellas
circunstancias en las cuales afecte de manera evidente derechos y principios
constitucionales fundamentales, debe ser considerado como derecho susceptible de
ser protegido por la acción de tutela. La corte considera que se trata de una clara
violación a un derecho fundamental el caso tratado. A pesar de ser citados por el
juez las empresas públicas de Cartagena nunca manifestaron las causas
excepcionales que les impidieron hacer el trabajo.

Derechos económicos, sociales y culturales, los enunciados constitucionales que

recogen tales derechos no pueden ser objeto de decisiones judiciales hasta tanto el
congreso no haya expedido la legislación necesaria para aplicarlos. Ante la falta de
intervención legislativa en el caso de un derecho económico, social o cultural que se
necesite proteger para hacer respetar un principio constitucional o un derecho
fundamental, la intervención judicial es necesaria.

La decisión tomada por la sala primera de revisión de la corte constitucional, es

fallar a favor del demandante, cumpliendo con ordenar al demandado que ejecute la
terminación de las obras en el barrio vista hermosa, dándole un plazo de 3 meses
para efectuar esto y en proceso debe brindar garantías para evitar molestias a los
habitantes de la localidad, notifica a la secretaría de Bolívar para que se efectúen los
parámetros establecidos por la corte y establece que en casos similares a este se
debe acudir a los término del artículo 33 del decreto 2591 de 1991.